CIUDADANO

JUEZ PRIMERO DE PRIMERA INSTANCIA DE MEDIACIÓN, SUSTANCIACIÓN Y

DEL CIRCUITO DE PROTECCIÓN DEL NIÑO, NIÑA Y DEL ADOLESCENTE DE LA
CIRCUNSCRIPCIÓN JUDICIAL DEL ESTADO ANZOATEGUI.

SU DESPACHO.-

Nosotros, GUSTAVO JOSE PARABABIRE MARTINEZ y ROSA DEL VALLE

MONTERO DURAN, venezolanos, mayores de edad, civilmente hábiles y
jurídicamente capaces, casados, de este domicilio y titulares de las Cédulas
de Identidad Nos. V-13.368.140 y V-13.913.830,
respectivamente, debidamente asistidos en este acto por los abogado en
ejercicio JOSE EDUARDO SANCHEZ Y YARITZA REYES venezolanos,
mayores de edad, titular de las Cédulas de identidad N° 8.224.389 Y N°
8.252.842 , respectivamente, e inscritos en el Inpreabogado, bajo los N°
50.375 Y N°106.331 respectivamente con domicilio procesal en la Avenida
5 de Julio, Piso 1, Oficina 6, frente al palacio de Justicia, Barcelona Estado
Anzoátegui; ante Usted con el debido respeto ocurrimos para exponer y
solicitar:

CAPITULO I

DE LOS HECHOS

Contrajimos Matrimonio Civil por ante el Registro Civil del Municipio

Bolivar del Estado Anzoátegui, en fecha Nueve (9) de junio del año dos mil
seis (2006), según consta y se desprende de copia certificada de Acta de
Matrimonio que acompaño en original marcada con letra “A”. De esta unión
conyugal procreamos un (01) hijo que lleva por nombre GUSTAVO JESUS
ALEXANDER, venezolano, menor de edad, de cinco años de edad y cinco
meses, tal y como se evidencia en copia certificada de Partidas de Nacimiento
que anexamos a la presente marcada con letra “B”. Ahora bien, después de
contraído nuestro matrimonio fijamos nuestro domicilio conyugal en la
siguiente dirección Boyacá II, Calle 3, Vereda 36, Sector II, Casa Nº 2, de la
ciudad de Barcelona, Municipio Simón Bolívar del Estado Anzoátegui, en
donde habitamos de manera ininterrumpida, hasta que nuestra vida conyugal
fue interrumpida el día treinta (30) de septiembre de dos mil seis (2006), es
decir, que nuestra vida marital de casados en la unión de un mismo techo
solamente duró seis (6) meses y quince (15) dias aproximadamente, y hasta la
actualidad no hemos hecho vida en común bajo ninguna circunstancia,
viviendo cada uno de nosotros en domicilios diferentes y alejados
lógicamente sin existir reconciliación alguna entre nosotros. Expresamente
manifestamos al Tribunal que durante nuestra unión conyugal no adquirimos
bienes de fortuna que liquidar y si hubiese habido bienes durante nuestra
unión conyugal, igualmente manifestamos a este despacho liquidarlos por
ante el tribunal que corresponda y por el procedimiento de liquidación de
comunidad conyugal.

CAPITULO II

DE LA PATRIA POTESTAD

De conformidad a lo establecido en el artículo 347 y siguientes de la

Ley Orgánica para la Protección del Niño y del Adolescente (en lo sucesivo
LOPNA), la Patria Potestad reposará en cabeza de ambos progenitores,
quienes declaran saber y conocer las responsabilidades y cargas que la misma
les significa a cada uno de los padres en beneficio de su hijo menor y se
obliga a cumplir fielmente con la misma CAPÍTULO III

REGIMEN DE CONVIVENCIA FAMILIAR DEL RÉGIMEN

DE VISITAS PARA CON EL NIÑO GUSTAVO JESUS ALEXANDER

 Según lo que dispone la Ley Orgánica Para la Protección del Niño y del
Adolescente en su artículo 351 en su parágrafo 1º y Siguientes en sintonía
con esta norma rectora, manifestamos que la Responsabilidad de Crianza de
nuestro Hijo nombre GUSTAVO JESUS ALEXANDER , la ha venido ejerciendo y
la seguirá practicando su madre, la Ciudadana ROSA DEL VALLE MONTERO
DURAN anteriormente identificada.

De igual manera las partes de común acuerdo, deciden establecer el

siguiente régimen de visitas: La Ciudadana, supra identificada, y como
manifestamos anteriormente ejercerá la Responsabilidad de Crianza del
menor GUSTAVO JESUS ALEXANDER , y su padre, el ciudadano GUSTAVO
JOSE PARABABIRE MARTINEZ , supra identificado, tendrá un régimen de
visitas amplio y abierto, en un horario que no interfiera con sus actividades
escolares, descanso u otras actividades extra académicas orientadas al
desarrollo psicosocial y académico del niño. Dichas visita no podrán exceder
de las Diez de la Noche (10:00 p.m.) y en ningún momento podrá hacer uso
de dicho régimen cuando dichas visitas no vayan orientadas a la distracción y
compartimiento familiar que estreche la relación paterno filial de
normalmente debe existir entre padre e hijo.

CAPITULO IV

DE LA OBLIGACIÓN DE MANUTENCIÓN

Las partes de común acuerdo y según lo que dispone el artículo 365 de

la Ley Orgánica Para La Protección del Niño y del Adolescente acuerdan
estipular que el padre, GUSTAVO JOSE PARABABIRE MARTINEZ debe aportar
una pensión para la Obligación de Manutención mensual del menor
GUSTAVO JESUS ALEXANDER, que alcanza la cantidad de BOLÍVARES
QUINIENTOS (Bs. 500,00). Estos montos podrán ser revisados siempre y
cuando los índices inflacionarios del Banco Central de Venezuela indiquen un
aumento que haga necesario su revisión. Amén de la pensión de alimento a la
que se compromete cancelar el ciudadano GUSTAVO JOSE PARABABIRE
MARTINEZ, antes identificado, a favor de su menor hijo GUSTAVO JESUS
ALEXANDER, este (El padre), asume y acepta sufragar de forma conjunta y
por partes iguales con la madre todo cuanto tenga que ver con los siguientes
gastos: Se compromete a el cincuenta por ciento (50%) de los gastos
relacionados con la compra de vestido escolar, así como también lo que
guarda relación con los materiales y útiles escolares y demás relacionados,
matricula escolar y gastos derivados de servicios escolares propios de la
educación de la menor GUSTAVO JESUS ALEXANDER, se compromete a
sufragar en partes iguales vestido en época decembrina, así como también
otros objetos en la misma fecha. Todos los gastos relacionados a la salud
integral del menor antes citado, como lo son gastos médicos ambulatorios,
odontológicos, de revisión periódica regular, así como también todos los
gastos relacionados a medicina y demás insumos y servicios médicos que
pudieran sobrevenir a partir del momento de la firma y materialización del
presente divorcio.

CAPITULO V

DEL DERECHO

Por todas los razones expuestas y en base a los hechos anteriormente

descritos y con fundamento en el artículo 185-A del Código Civil Venezolano,
es por lo que solicitamos muy respetuosamente a este Tribunal de Protección
del Niño y del Adolescente de esta Circunscripción declare, como en efecto lo
solicitamos, disuelto el vinculo conyugal que nos une y en consecuencia
quede extinto cualquier lazo existente entre nosotros, declarando de esta
manera definitivamente la disolución absoluta del vinculo o unión conyugal a
través de sentencia que decrete esta disolución que se solicita por medio del
presente escrito de divorcio.

CAPITULO VI
 PETITORIO

Finalmente y por todo lo antes expuesto, por cuanto hemos

permanecido separados de hecho por más de cinco (5) años, tal como lo
consagra la norma del artículo 185-A del Código Civil Venezolano, Ciudadana
Juez, solicitamos que la presente demanda sea admitida y sustanciada
conforme a derecho y declarada con lugar en la definitiva, con todos los
pronunciamiento de Ley, todo de conformidad con el Artículo 185-A del
Código Civil vigente. Solicitamos al Tribunal, que se suprima la Audiencia
Única preliminar, solicitud que hacemos con base y fundamento en las
previsiones normativas de los artículos 26 y 257 Constitucional. Por último,
pedimos que, previa notificación de la Ciudadana Fiscal del Ministerio Público
especializada en materia de Niños, Niñas y Adolescentes, tal y como lo
estipula el artículo 170, 463 de la Ley Orgánica de Niños, Niñas y
Adolescentes, en concordancia con el artículo 132 del Código de
Procedimiento Civil. Sea declarada expresa y judicialmente la disolución de
nuestro vínculo matrimonial.

Es justicia que solicitamos y esperamos en Barcelona, Municipio

Autónomo Simón Bolívar del Estado Anzoátegui, a la fecha de su
presentación.