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Desglose de Trabajo
Sustentantes:
Facilitadora:
Arianny Medina
Los gerentes deben juzgar su éxito personal y profesional a la luz de los resultados de las
utilidades de la empresa. Andrew juzgó su éxito en términos de avance profesional y no su
desempeño actual. Un gerente con éxito se concentra principalmente en su trabajo del
momento.
La falsa base de una organización con líderes que se motivan a través del ego y no del
logro hace tambalear de una forma u otra lo construido. Andrew no debió anteponer su
acción y su carrera antes que los resultados. Preocuparse por como los demás perciben
podría causar preocupación en un gerente, aunque cabe destacar que somos humanos y
esperamos una muestra de conocimiento en cada actuación importante.
En nuestro entorno nos vemos rodeados de subalternos a los que queremos agradarles,
quizás para que nos vean como un jefe alegre, bondadoso o amistoso, cuando en realidad
debemos implantar la semilla del respeto ante estos. Saber compartir en el área laboral y
fuera de ella sin confundir o igualar las situaciones es vital.
A menudo, en algunas empresas puede haber jefes de departamentos los cuales utilizan al
personal para asuntos personales en la empresa desviándolos de sus labores principales, y
al momento de exigir cuentas se encuentran con la excusa de que ellos mismos fueron los
causantes de que esas cuentas no fueran entregadas.
Hagamos esfuerzo por ganar el respeto de los demás. Exigir cuentas suena un poco duro
en el mundo de los negocios, pero cada vez que algo sale mal, hay que hacer que los
empleados se responsabilicen más y a través de esto sería la manera correcta.
Poniéndolo de este modo la empresa no verá beneficios con el solo hecho de tener cariño
por el prójimo si no se efectúa con responsabilidad el trabajo exigido, no está demás
destacar que en la empresa debe reinar la armonía pero sin descuidar nuestras
responsabilidades. Los gerentes pueden guiar a los subalternos y hacerlos especialistas en
su área exigiendo y haciendo cumplir responsabilidades impuestas para desarrollar e
impulsar la empresa, así, si en algún momento fallan y se ven obligados a desertar la
empresa, se irán conformes y con la sensación de satisfacción por el deber cumplido, y
sabiendo que se llevan más conocimientos adquiridos de la empresa y de sus superiores.
Una buena manera de ganar el respeto de nuestros empleados es estar abiertos a ellos,
demostrándoles que no hay barreras entre los puestos que desempeñan, estar abiertos a
correcciones y consejos en cuanto a nuestro trabajo que de una u otra manera y por qué
no? Puede convertirse en un consejo que vaya a lo personal ya seamos gerentes o
subalternos. Evitar caer en el favoritismo.
3ra. Tentación.
Tema: “La necesidad de tomar decisiones correctas y
tener certeza”
-Como gerente una de las cosas más importantes es la toma de decisiones, sean estas
acertadas o no, solo hay que tomarlas. No podemos dejar situaciones al aire por el solo
hecho de no tener a mano la información requerida, hay que tomar riesgos y expresar a los
sub-alternos nuestras necesidades gerenciales en cuanto a la situación de la empresa, la
cual es vital. El autor del libro expresa lo siguiente:
Cabe destacar que tomar decisiones para muchas personas supone un cierto temor e
incertidumbre, si se elige incorrectamente aquí nos invade lo que es la inseguridad.
Muchas veces por la inseguridad nos quedamos sin dar una opinión y sin exponer nuestras
propuestas.
Tener certeza.
Otro temor del gerente es que temen poner sus ideas y opiniones sobre la cuerda floja
donde podrían ser cuestionadas, entonces, no se benefician de las distintas opiniones de
su personal.
Un consejo sencillo es tolerar la discordia, alentar a los subalternos inmediatos para que
ventilen sus diferencias ideológicas y puedan desempeñar su trabajo con fuerza y
motivación. Las reuniones tumultuosas suelen ser señal de progreso; en cambio las
tranquilas muchas veces indican que han quedado asuntos importantes sin tocar. Evite los
ataques personales, pero no hasta el punto de sofocar el intercambio importante de las
ideas.
5ta. Tentación.
Tema: “El deseo de ser invulnerable.”
Esta tentación enfatiza el modo en que muchos gerentes buscan la forma de eludir
cualquier circunstancia que traiga consigo algunas diferencias ideológicas que perjudique
y puedan traer discordancia que involucre su posición, ya que, el liderazgo trata de las
habilidades con que cuenta un gerente para infundir, incentivar, y motivar a los
colaboradores para desarrollar un trabajo en equipo que aporte beneficios múltiples a la
empresa y contribuya con el desarrollo de sus metas y objetivos pautados. De acuerdo al
planteamiento de esta tentación el gerente no debe intimidarse con el aporte de ideas
que surjan de los subalternos que de una manera u otra suman al desarrollo productivo de
la empresa implicando la efectividad para la ejecución de los proyectos.
Como gerente hay que tener confianza en sí mismo y en los demás. En esta última
tentación Andrew reconoció sus errores como gerente y como persona en la reunión de la
Junta Directiva. El momento en que se lleven a cabo las juntas directivas es un factor clave,
el suministro de ideas de todos los miembros para cualquier incógnita existente puede ser
esclarecido en ese momento; de este modo llegar a un acuerdo mutuo con el equipo que
compone la organización.
En ocasiones la vida se trata de aceptar nuestros errores y fracasar mil veces, para luego
tener la capacidad de dar buenos consejos y tres años después una compañía como Trinity
Systems tenga un nuevo gerente y un excelente desarrollo competitivo.
El éxito es poder decir al final que me equivoqué y que uno de mis errores me sirvió para
mejorar, que jamás me rendí y que siempre luché por lo que quería y si no lo logré fue por
falta de valor.
CONCLUSION
En general el libro habla de tentaciones catalogadas como
errores que afectan no solo nuestra vida, si no también
nuestro entorno y por ende el desarrollo productivo de una
compañía. Cabe destacar unos comentarios de autor donde
indica que los gerentes verdaderamente grandes hacen dos
cosas: reconocen sus fallas y no se dan por vencidos ante
ellas. Es molesto reconocer nuestros errores, y hay personas
que simplemente no pueden hacerlo.