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Este pequeño libro es una invitación al debate

Reinventar

Reinventar el Socialismo. Fundamentos de Renovación Socialista


y a la construcción de una alternativa para el

el Socialismo
pueblo del Ecuador. Es producto de un
proceso de continuidad y ruptura del
socialismo ecuatoriano y la base de un
proyecto político radicalmente renovador que
mira a los grandes desafíos del futuro. En estas Fundamentos de Renovación Socialista
páginas los lectores encontrarán el camino de
Renovación Socialista, recorrido a fines del
siglo XX e inicios de este siglo XXI.
Esta obra que ponemos en sus manos, contiene
varios documentos de trabajo de Renovación
Socialista, destinados a la reflexión y la
formación. Recoge también varios manifiestos,
entre ellos, el del Socialismo Revolucionario,
que pone las bases de la renovación, y el
Manifesto del PSE de 2003, que plantea las
propuestas para el siglo XXI. Esperamos que
su lectura contribuya a la búsqueda del gran
objetivo de consecuencia, transformación y
unidad que nos alienta.
O V A C IÓN
REN
O C I A L ISTA
Veintemilla y 12 de Octubre. S
CIÓN
Edif. El Girón, torre E, oficina 805.
RENOVA A
SOCIAL
IST Tfno. (593 2) 2036044 • s.renovacion@gmail.com

Avenida de los Shirys N36-152 • Quito, Ecuador


Teléfonos: (593 2) 256 6036
ediciones_latierra@yahoo.com
RENOVACIÓN SOCIALISTA
Propuesta del Socialismo Revolucionario
RENOVACIÓN SOCIALISTA
Coordinadora: Marcela Arellano
CIÓN
RENOVA A
IST
Coordinación Nacional: Luis Andrango Cadena
SOCIAL
Enrique Ayala Mora
Mireya Lara
Rafael Pacheco
Pablo Serrano
Pablo Solorzano
Veintemilla y 12 de Octubre. Edif. El Girón, torre E, oficina 805.
Tfno. (593 2) 2036044 • s.renovacion@gmail.com

Renovación Socialista
Propuesta del socialismo revolucionario
© Ediciones La Tierra, 2017
ISBN: 978-9942-751-07-2
Ediciones La Tierra
Avenida de los Shirys N36-152
Quito, Ecuador
Teléfono: (593 2) 256 6036
ediciones_la tierra@yahoo.com
Coordinación editorial: Marcela Arellano
Formulación de textos aprobados por la Convención Nacional:
Enrique Ayala Mora, José Chávez Chávez
Diseño y diagramación: Edwin Navarrete, Taller Gráfico
Impresión: Fausto Reinoso Ediciones
Impreso en el Ecuador
Quito, 2017
RENOVACIÓN SOCIALISTA
Propuesta del Socialismo Revolucionario

CIÓN
RENOVA A
IST
SOCIAL

2017
Ediciones La Tierra busca rescatar la obra de pen-
sadores con reconocida trayectoria en la cultura
e historia ecuatorianas, así como acompañar los procesos
sociales que buscan la transformación de nuestra injusta
realidad. Tiene como principal objetivo publicar la obra
de autores nacionales y extranjeros sobre temas de nuestra
realidad y de la realidad latinoamericana que contribuyan
a afianzar los valores nacionales y a la afirmación de nues-
tra identidad como ecuatorianos y latinoamericanos.
Nuestras proyecciones incluyen líneas de trabajo con los
actores sociales que definen, en estos mismos instantes,
los nuevos rumbos de un país en transformación y un
apoyo editorial a la difusión de sus propuestas. Nuestro
compromiso se orienta a la juventud y a la promoción de
la lectura.
Contenido

Presentación
Renovación Socialista
Propuesta del socialismo revolucionario 7
Manifiesto del Socialismo Revolucionario
Fundamentos de la Renovación Socialista 11
Nuestra opción 11
El capitalismo global 12
La “Revolución” que no hubo 14
El Socialismo traicionado 17
Nuestra posición 20
Reinventar el Socialismo
Documento de trabajo 27
El Socialismo Latinoamericano en la encrucijada 27
Los límites del “Socialismo light” 28
El correismo y su acción en el Ecuador 30
Correismo y socialismo 33
Grandes preguntas de la Renovación Socialista 36
Experiencias y perspectivas de la Renovación Socialista
Documento de trabajo 47
El acuerdo con Correa y Alianza Pais 54
El gobierno de Lenin Moreno 64
Renovación Socialista 67
Anexos
Socialismo para el Ecuador del siglo XXI
Manifiesto del Partido Socialista-Frente Amplio. Mayo, 2003 69
Ecuador: Unidad en la diversidad 69
Lucha social y democracia 70
El país que queremos 72
El socialismo y el futuro 73
Nuestra convocatoria 75
Capitalismo del siglo XXI 77
Enrique Ayala Mora
Lucha contra la corrupción 79
Germán Rodas Chaves
Cronología del Partido Socialista Ecuatoriano 84
Presentación

RENOVACIÓN SOCIALISTA
Propuesta del socialismo revolucionario

Este pequeño libro es una invitación al debate y a


la construcción de una alternativa para el pueblo del
Ecuador. Es producto de un proceso de continuidad
y ruptura del socialismo ecuatoriano y la base de un
proyecto político radicalmente renovador que mira a
los grandes desafíos del futuro. En estas páginas los
lectores encontrarán el camino de Renovación Socialista,
recorrido a fines del siglo XX e inicios de este siglo
XXI.
Frente a las nuevas realidades del país y de Améri-
ca Latina, que se patentizaron desde fines del pasado
siglo, los socialistas ecuatorianos asumimos la crisis
ideológica internacional y planteamos una amplia y
profunda renovación en el Manifiesto Socialismo para
el siglo XXI del año 2003. Allí se plantearon las bases
para nuestra acción futura.
En 2006 apoyamos la propuesta de Alianza País
y la candidatura presidencial de Rafael Correa. Pero
el correísmo traicionó la propuesta renovadora para
convertirse en un régimen represivo, depredador y co-
rrupto. Por ello, desde el año 2008, dentro de las filas
del PSE los socialistas consecuentes nos agrupamos en
la Tendencia Socialista Revolucionaria que defendió una
postura de independencia frente al correísmo.
8 Renovación Socialista

...el SR participó Pese al mayoritario apoyo logra-


activamente en el do por el socialismo revolucionario
reagrupamiento
del movimiento en las filas partidarias, un grupo de
social. incondicionales y beneficiarios del
gobierno correísta se apoderaron
de la dirección partidaria y llevaron al PSE y a las lis-
tas 17 a un grave desprestigio nacional, convirtiéndolo
en la cola de la clientela caudillista del correísmo.
En abril de 2014, en una asamblea nacional, la mi-
litancia socialista auténtica agrupada en el Socialismo
Revolucionario, emitió un manifiesto en que se fijó nues-
tra posición y se responsabilizó de la cuasi desaparición
y división del partido al grupo correísta que maneja la
dirección oficial del PSE. Ese manifiesto puso las bases
doctrinarias de la tendencia que había conservado la
trayectoria revolucionaria y la vinculación popular del
socialismo ecuatoriano.
Desde inicios de la presente década, el Socialismo
Revolucionario participó activamente en el reagrupa-
miento del movimiento social, que se expresó en el ro-
bustecimiento del FUT y su convocatoria a un amplio
acuerdo por el cambio.
En 2017 las diferencias se hicieron insalvables. Por
un lado, con una cada vez más reducida base popular,
sin ninguna vinculación social, el grupo que manipula
la estructura oficial del PSE se comprometió cada vez
más con el correísmo y con su expresión más corrupta,
que es el entorno del vicepresidente Jorge Glas. Por
otra parte, el socialismo revolucionario, que expresa a
la gran mayoría de la militancia y la trayectoria insur-
gente del socialismo, vinculada con las organizaciones
sociales y sus luchas, vio la necesidad de consolidar su
estructura nacional.
Presentación 9

En mayo de 2017, cuando se cumplieron 91 años


de la fundación del PSE, una convención nacional
resolvió canalizar la tendencia del Socialismo Revo-
lucionario hacia la formación de lo que se denominó
Renovación SocialiSta, un movimiento de cober-
tura nacional que, siguiendo la línea histórica del so-
cialismo ecuatoriano, convoca a un reagrupamiento
de la militancia y a un replanteamiento de propuestas
para el Ecuador y la América Latina del futuro.
Renovación SocialiSta reúne a quienes somos
consecuentes con los principios y con la trayectoria de
los revolucionarios del país y el continente. Es la con-
tinuidad del partido histórico fundado en 1926. Por
ello, pone distancia del grupo correísta que, con apoyo
de la estructura oficial, maneja la dirección del PSE.
También declara que no se hace cargo de las incon-
secuencias y el desprestigio de las listas 17, que han
llegado al extremo de inscribir como candidatos socia-
listas a payasos y figuras de la derecha.
Precisamente por ello, se compromete a un replan-
teamiento radical de la organización, la estructura, las
prácticas y las declaraciones programáticas y las fór-
mulas electorales comprometidas con el caudillismo
correísta.
Renovación SocialiSta mantendrá su línea de
transformación, de democracia radical, de auténtica
participación ciudadana, de lucha por los intereses
populares, de vinculación a las organizaciones sociales
y perseerar en la cosntrucción del porvenir socialista.
Seguirá enfrentando al poder imperial mundial, a los
autores y beneficiarios de una política económica que
profundiza el capitalismo del siglo XXI, al autoritarismo
correísta y su intento de perpetuarse en el poder, a la
corrupción encabezada por Correa y Glas, a quienes
10 Renovación Socialista

Renovaciónhan vendido los principios revo-


SocialiSta
lucionarios y la lucha popular de
mantendrá su línea
de transformación,casi cien años.
de democracia Este libro que ponemos en sus
radical, de auténtica
manos, contiene varios documen-
participación
ciudadana, de luchatos de trabajo de Renovación
SocialiSta, destinados a la re-
por los intereses
flexión y la formación. Recoge
populares, de
vinculación a las
también varios manifiestos, en-
organizaciones
tre ellos, el del Socialismo Revolu-
sociales .
cionario, que pone las bases de la
renovación, y el Manifesto del PSE de 2003, que
plantea las propuestas para el siglo XXI. Esperamos
que su lectura contribuya a la búsqueda del gran ob-
jetivo de consecuencia, transformación y unidad que
nos alienta.
Marcela Arellano
Coordinadora Nacional
Quito, julio, 2017
MANIFIESTO
Socialismo Revolucionario
Fundamentos de Renovación Socialista

Nuestra Opción
El socialismo es revolucionario. Así lo demuestra
la vida de nuestro país y del mundo. Por ello, los so-
cialistas ecuatorianos, mujeres y hombres, jóvenes y
mayores, mestizos, indígenas, afroecuatorianos y mon-
tubios, trabajadores, campesinos, pequeños y media-
nos productores, profesionales, maestros, pobladores,
subempleados, estudiantes y migrantes, venidos de
todos los rincones de la geografía nacional y más allá
de sus fronteras, que hemos dedicado la vida a la lu-
cha por la revolución, elevamos nuestra voz para rei-
vindicar ante nuestro pueblo su memoria de lucha, su
tradición insurgente, y su destino radical de vencer al
capitalismo, y construir el porvenir socialista aquí y en
toda América Latina.
Ante la situación mundial y del Ecuador, el avance
del poder capitalista globalizado, el retroceso del im-
pulso progresista y la democracia, el incremento del
autoritarismo caudillista y la continuidad de algunas
medidas neoliberales, el incumplimiento de las aspi-
raciones y promesas de genuino cambio, la crimina-
lización de la organización y la protesta social, la de-
predación de la naturaleza y los recursos nacionales,
12 Renovación Socialista

...elevamosla falta de participación popular, la


nuestra voz para inseguridad pública y la corrupción;
reivindicar ante
nuestro pueblo hemos optado por una alternativa
su memoria de de democracia radical y consecuen-
lucha, su tradicióncia con nuestro pueblo.
insurgente.
Frente a quienes han comprome-
tido el nombre y las luchas del Partido Socialista con
el caudillismo autoritario por acomodos personales y
arreglos de trastienda, y han llevado a nuestra orga-
nización al desprestigio y el deterioro, convirtiéndola
en una maquinaria electoralista, vagón de cola del co-
rreísmo, distanciada de las organizaciones sociales y las
bases populares; hemos resuelto rescatar la vocación
revolucionaria y patriótica del socialismo ecuatoriano.
Por ello, los militantes socialistas reunidos, el 26 de
abril de 2014, nos hemos agrupado bajo la bandera
del SocialiSmo RevolucionaRio para avanzar en la
lucha, rescatar al Partido Socialista, buscar la unidad
de las organizaciones populares y de izquierda, propo-
ner un gran proyecto radical y patriótico de cambio
del Ecuador, siguiendo nuestras mejores tradiciones,
en la irrenunciable búsqueda de un porvenir de justi-
cia y libertad.

El Capitalismo global
En el ámbito mundial, las décadas finales del siglo
XX se caracterizaron por la larga vigencia de una cri-
sis del capitalismo que trajo consigo las más amplias y
diversas consecuencias. Por una parte, se dio un avan-
ce de un modelo económico y social extremista y re-
accionario, el neoliberalismo. Por otra parte, bajo el peso
del burocratismo estalinista, se dio el derrumbe de la
URSS y los regímenes comunistas, la caída del muro
de Berlín y la crisis ideológica del socialismo.
Manifiesto del Socialismo Revolucionario 13

Aliados a la poderosa banca internacional, los go-


biernos neoliberales tomaron medidas que redujeron
los ingresos de la mayoría, limitaron la seguridad so-
cial, aumentaron el subempleo, desmantelaron el es-
pacio y los bienes públicos, depredaron los recursos
naturales, agudizaron las diferencias sociales y lleva-
ron a grandes sectores de la población a la extrema
pobreza. Al mismo tiempo, reprimieron con violencia
las protestas, limitaron las conquistas sociales y la or-
ganización de los trabajadores y el pueblo. Pero ni así
lograron superar la recesión del sistema capitalista,
que se ha mantenido por años.
En todos los continentes se dio la lucha frente al
neoliberalismo. América Latina fue el primer espacio
donde los viejos y los nuevos actores sociales lograron
notables avances, como la movilización de los indíge-
nas, las mujeres y los defensores de la naturaleza. Aquí
se gestó una reacción de masas que potenció impor-
tantes triunfos electorales de fuerzas progresistas y de
izquierda en varios países latinoamericanos.
Desde la primera década del siglo XXI, los gobier-
nos progresistas del subcontinente llevaron adelante
significativos cambios constitucionales, alianzas inter-
nacionales, obras públicas, reformas sociales y redistri-
butivas, en algunos casos notables, que les dieron gran
respaldo electoral. Pero en los últimos años se han
patentizado los límites de esos modelos reformistas, o
porque han tenido serios fracasos económicos o por-
que, en vez de radicalizar sus posturas, han buscado
acomodo con los poderes nacionales e internacionales.
Por ello se ha reactivado la protesta social y, en algunas
casos, se ha generado un enfrentamiento del régimen
con las organizaciones populares.
14 Renovación Socialista

...gobiernos de En los países latinoamericanos,


línea progresistala fuerza del capitalismo y algu-
han dado la
nos rasgos del neoliberalismo han
espalda a las
demandas demostrado ser persistentes, a tal
punto que gobiernos de línea pro-
populares. Al
parecer, se hangresista han dado la espalda a las
resignado a vivir
en medio deldemandas populares. Al parecer, se
predominio del han resignado a vivir en medio del
capitalismo global.predominio del capitalismo global.
Así las cosas, el respaldo político ha
disminuido y la sombra del retorno de la derecha ha
aparecido en el horizonte. La situación de países ricos,
en especial de Europa, sumida ahora en una crisis de
su modelo capitalista, parece ser un mal ejemplo.
Ante esto, los pueblos tienen una gran disyuntiva.
Y las fuerzas socialistas un gran compromiso. O nos
rendimos a la globalización capitalista, o renovamos
nuestro compromiso de lucha por el socialismo y la
democracia radical.

La “revolución” que no hubo


En nuestro país la resistencia al neoliberalismo fue
dura. Una y otra vez se le ofreció al pueblo un cam-
bio, pero las ofertas terminaron en frustraciones. La
reacción social fue contundente. Así cayeron Bucaram,
Mahuad y Lucio Gutiérrez. En medio de la lucha se lo-
gró ir creando la conciencia de la necesidad de otra sa-
lida para la crisis. Fue así como surgió la fórmula elec-
toral de Rafael Correa y Alianza PAIS, que, apoyados
por varias organizaciones sociales, antiguos militantes
de izquierda y el Partido Socialista, venció al magna-
te Álvaro Noboa, logró el triunfo electoral e inició su
gobierno en 2006, en medio de grandes expectativas.
Manifiesto del Socialismo Revolucionario 15

Correa no ganó por casualidad, coincidencia o sim-


patías personales. Fue beneficiario de un acumulado
histórico de años de lucha de la izquierda y las orga-
nizaciones sociales. Triunfó porque dio continuidad a
posturas de izquierda anticapitalistas y antiimperialis-
tas, y porque recibió, entre otros, el apoyo socialista.
Fue un triunfo colectivo, aunque ahora no se quiera
reconocerlo.
Desde el gobierno, Correa habló del “socialismo
del siglo XXI”, pero sus postulados fueron intencio-
nalmente confusos y nunca reconocieron el aporte de
las tradiciones de lucha del socialismo ecuatoriano y
latinoamericano. En realidad, aunque se sigue propa-
gandizando una “revolución”, el régimen tiene cada
vez menos elementos progresistas y más antiguos cola-
boradores de la derecha, el “febresborjismo” y disiden-
tes del populismo. Los cambios que se han realizado se
limitan a la esfera del Estado, sin que haya el propó-
sito de hacer una transformación social; más bien son
funcionales a un proceso agresivo de acumulación de
capital. Un proyecto socialista no puede tener como
fin el fetiche del “rediseño institucional” para asegurar
una reforma capitalista.
Los cambios ofrecidos, y comprometidos con el
Partido Socialista y las organizaciones sociales, no se
han realizado. En realidad, ni siquiera han comenza-
do. La política agraria del gobierno no ha intentado ni
una tímida reforma. Ha mantenido el status quo con un
débil productivismo. No se ha planteado una reforma
urbana que enfrente la acumulación de propiedad y
el uso privatizado de los servicios públicos. Las políti-
cas sobre la explotación de los recursos naturales son
extractivistas y promotoras del capital internacional.
La corrupción se ha generalizado sin límites, ya que el
gobierno maneja todas las instancias de control.
16 Renovación Socialista

El gobierno de Rafael Correa se ha negado a asu-


mir una verdadera transformación y acercarse al ideal
socialista. Al contrario, ha optado por ser el adminis-
trador de un Estado cuya estructura y la de la sociedad
no van a cambiar en serio. Asistimos a la moderniza-
ción del capitalismo. En esa línea, indudablemente, se
han realizado obras materiales. Pero puentes y carre-
teras sin más no son desarrollo. Son mero crecimiento
cuando no están acompañadas de un efectivo cambio
social, que el gobierno no busca. Al contrario, tiene
obsesión por construir una sociedad ausente, imper-
ceptible e indiferenciada, educada para cumplir nor-
mas y para suprimir las discrepancias.
Pero lo más grave de la acción del gobierno es que,
para mantenerse en el poder, ha institucionalizado la
criminalización de la protesta social, la consigna de
debilitar a las organizaciones populares, tratando de
ahogarlas en un mar electoral y clientelista. El régi-
men ha promovido la división y ha perseguido a los di-
rigentes sociales, indígenas, maestros, campesinos, co-
municadores, estudiantes, declarándolos “terroristas”;
ha instalado una “participación ciudadana” a espaldas
de la elección y la presencia popular; ha usado el po-
der público para eliminar la libre expresión, garantía
conquistada en este país hace más de cien años.
En estos mismos días, de espaldas a sus declaracio-
nes de defensa de la naturaleza, el gobierno se dispone
a la explotación depredadora del Yasuni, negándose
a consultarlo a la ciudadanía. Las organizaciones in-
dígenas denuncian la violación de sus territorios. El
FUT advirtió en su manifiesto que las medidas anun-
ciadas para el nuevo Código Laboral borran conquis-
tas mantenidas por décadas y reducen los derechos
de los trabajadores. El régimen impone una reforma
Manifiesto del Socialismo Revolucionario 17

universitaria de modernización refleja, neocolonial y


autoritaria, que niega décadas de lucha democrática
en la educación superior. Se anula la participación en
la reforma de la educación básica y el bachillerato y se
les da un contenido antinacional.
No hay un real impulso a la economía popular y
solidaria, prefieriendo el productivismo puro y duro.
Se ha vaciado de contenido al buen vivir o sumak kau-
say, para impulsar un desarrollismo que ya fracasó
hace sesenta años. En muchos aspectos, sobre todo en
la educación y en el “cambio de la matriz productiva”,
no se descubre la voluntad de ruptura con el gran ca-
pital y el impulso verdadero de la economía popular,
sino un plan de modernización para adecuar al país
al capitalismo que domina el mundo. Esta claro que
no vamos al socialismo. En nuestro país se ofreció una
revolución, pero no hubo. El gobierno del “socialismo
del siglo XXI” tiene como primera prioridad avanzar
al capitalismo del siglo XXI.

El Socialismo traicionado
Luego de haber recobrado su unidad en la déca-
da de 1980, el Partido Socialista mantuvo una lucha
frontal contra los gobiernos neoliberales y promovió
la unidad de las fuerzas progresistas y de izquierda.
Siguiendo esta línea, en la coyuntura de 2005 renun-
ció a sus propias aspiraciones y, junto con varias orga-
nizaciones populares, resolvió apoyar la candidatura
de Rafael Correa a la presidencia de la República. Lo
hizo mediante una declaración pública y a partir de
un acuerdo programático en el que el candidato se
comprometió a llevar adelante un gobierno que revir-
tiera el neoliberalismo, rescatara la soberanía nacio-
nal y pusiera en marcha un amplio cambio social, con
18 Renovación Socialista

reformas estratégicas y medidas que promovieran la


organización popular.
Pero desde el inicio de su gobierno, Correa se negó
a tratar al Partido Socialista como un aliado. Nunca
discutió sus acciones en forma orgánica con la direc-
ción nacional del partido, sus legisladores y dirigentes
provinciales. Con estilo personalista, se negó a plan-
tear un proyecto doctrinario. Se dedicó a cooptar para
Alianza PAIS a militantes y dirigentes populares del so-
cialismo; trató de disolver la organización del Partido
Socialista en sus clientelas electorales; asignó cuotas
burocráticas por afinidades personales; y, lo que es
más grave, promovió las discrepancias internas en las
filas partidarias, valiéndose de gente que se volvió su
incondicional. De este modo, incitó a la división y al
abandono de los principios.
Los seguidores del correísmo, con apoyo de recur-
sos estatales, lograron llevar a la dirección nacional al
grupo encabezado por Rafael Quintero, que se trans-
formó en instrumento incondicional de manipulación
del gobierno en nuestras filas, a cambio de puestos
burocráticos y compromisos familiares. Cuando se le-
vantó una reacción en la militancia articulada por la
Corriente Socialista Revolucionaria, que iba a separar
al correísmo de la dirección partidaria, en el congre-
so realizado el 2013 en Guaranda, los comprometidos
con el gobierno manipularon la reunión, agredieron
con violencia a los compañeros delegados y, en forma
ilegal, nombraron una directiva nacional encabezada
por Fabián Solano, conocido incondicional del co-
rreísmo. Las acciones jurídicas emprendidas para evi-
tar ese atropello fueron bloqueadas por las autoridades
electorales puestas por el régimen y los dirigentes es-
purios lograron el reconocimiento oficial.
Manifiesto del Socialismo Revolucionario 19

Los socialistas consecuentes, a la luz de las expe-


riencias históricas, evitamos la división y designamos
una Comisión Nacional de Reestructuración del Par-
tido Socialista, esperando mantener la unidad pese a
las discrepancias, pero declaramos que no nos somete-
ríamos a los dirigentes ilegítimos, instrumentos del co-
rreísmo, y nos mantendríamos en una postura crítica,
junto a las organizaciones populares y las fuerzas de
izquierda revolucionaria, como lo establecen la decla-
ración de principios, la línea política y las tradiciones
de nuestro partido.
En la pasada elección seccional del 23 de febrero,
apoyamos a los compañeros y compañeras que parti-
ciparon en las listas 17, levantando nuestras banderas,
en muchos casos desafiando al caudillismo correísta,
pero protestamos con fuerza cuando quienes fungen
de dirigentes nacionales incluyeron en esas listas a co-
nocidos personajes oportunistas y de la derecha, que
jamás debían representar al socialismo. Frente a los
resultados, nos congratulamos por los éxitos de la mi-
litancia consecuente, pero vimos con indignación que
el triunfo, en vez de llevar a la afirmación partidaria,
se lo puso a los pies de Correa, planteando la reforma
constitucional que permitiría su perpetuación en el
poder, contradiciendo la tradición de lucha contra la
reelección que había mantenido el partido, y sin haber
consultado ni a la militancia, ni a las organizaciones
sociales, ni siquiera a los organismos directivos que ile-
gítimamente funcionan al servicio del régimen.
El desprestigio y el deterioro del Partido Socialista
a que lo han llevado los correístas que fungen como
dirigentes nacionales han llegado a una situación ex-
trema. La traición a los principios y el entreguismo
han levantado una ola de indignación en la militan-
20 Renovación Socialista

El desprestigio ycia y la opinión pública. Por ello,


el deterioro delsiguiendo la línea revolucionaria y
Partido Socialista a
que lo han llevado consecuente de los fundadores del
socialismo, de los grandes dirigen-
los correístas
que fungentes populares, ideólogos, maestros,
como dirigentes artistas e intelectuales, de las mu-
nacionales han
llegado a unajeres patriotas que que han lucha-
situación extrema. do en sus filas por más de ochenta
años, hemos resuelto levantar nues-
tras banderas y declarar que enfrentaremos vigorosa-
mente a la claudicación, al oportunismo, a la sumisión
al caudillismo y a la entrega de los principios, con una
posición radical y definida.

Nuestra posición
Ahora más que nunca se precisa integridad y con-
secuencia. Ante la realidad presente, los postulados de
nuestros fundadores en 1926 están presentes: “el so-
cialismo viene con la tea revolucionaria al campo de
las ideas, a levantar una nueva sociedad, derrocando
todas las injusticias”. Y las tesis del Manifiesto del Par-
tido Socialista del 23 de mayo de 2003, Socialismo para
el Ecuador del siglo XXI, siguen plenamente vigentes:
Los socialistas levantamos nuestra voz para decirle al
país, como lo hicieron los fundadores de nuestro Partido
en 1926, que continuamos hacia el futuro en la lucha por
la liberación, la igualdad, la justicia social; que convoca-
mos a todos los hombres y mujeres a rescatar la patria, a
desarrollar nuestras capacidades para conseguir la paz en
el mundo, el cambio radical de nuestro país y de América
Latina.
Ecuador es un país de grandes diversidades. Indígenas,
mestizos, negros y descendientes de migrantes de varios
continentes lo conforman. El laicismo y el respeto a las
Manifiesto del Socialismo Revolucionario 21

diferentes creencias religiosas son parte de la lucha por la


libertad, fundamento de la democracia. La valoración de
la diversidad de género y los aportes de las mujeres son
pilares del Ecuador. La convicción de que somos parte de
la naturaleza nos lleva a comprometernos con la lucha
por la conservación del medio ambiente, patrimonio in-
sustituible de todos.
Sólo un vigoroso cambio hacia la justicia social hará mar-
char nuestro país como una unidad en la diversidad y nos
garantizará el futuro. Por ello los socialistas luchamos por
un Ecuador unido, intercultural, regionalmente integra-
do y respetuoso de las conciencias.
Los socialistas consecuentes hemos esperado siete
años por un cambio que no viene, por una revolución
que no hubo. Sabemos que las trasformaciones pro-
fundas son difíciles y toman tiempo. No aspirábamos
a que Correa instaurase el socialismo de la noche a la
mañana. Pero sí podíamos esperar que cumpliera con
sus compromisos públicos de reforma y siguiera un
camino de profundización de su anunciada vocación
progresista. Ya hemos visto, sin embargo, que va en di-
rección contraria, cada vez más comprometido con el
gran capital y los chulqueros internacionales que antes
repudió. Para ello incrementa la deuda externa y rea-
liza nuevos pactos con los organismos internacionales
y los centros hegemónicos del capitalismo mundial. Su
proyecto de modernización no es revolución, sino una
maniobra para apuntalar el sistema con represión y
autoritarismo.
Los socialistas respetamos nuestra gran organiza-
ción, la primera de la izquierda ecuatoriana. Somos
disciplinados y repudiamos las divisiones. Venimos de
una tradición que ha preservado la unidad y la cohe-
rencia ideológica. Pero hemos constatado que los in-
condicionales del correísmo que ocupan la dirección
22 Renovación Socialista

nacional del Partido Socialista tienen la consigna de


suprimir las discrepancias y acallar la crítica interna,
sin hacer siquiera el menor intento de diálogo. Prefie-
ren acatar los dictados del régimen a seguir los princi-
pios del socialismo.
Por todo ello, nos presentamos ante el pueblo de
nuestra Patria con esta declaración:
1. Los militantes consecuentes del Partido Socialista
nos agrupamos en el SocialiSmo Revoluciona-
Rio para mantener la lucha popular y comprome-
tida que los militantes de nuestra organización po-
lítica han llevado desde 1926, junto al pueblo del
Ecuador y de América Latina, enfrentando al capi-
talismo, al imperialismo, la derecha, el caudillismo
y el oportunismo.
2. En el SocialiSmo RevolucionaRio nos mante-
nemos leales a la ideología socialista, a la declara-
ción de principios y al plan de gobierno del Partido
Socialista aprobados por sus congresos legítimos, y
seguiremos la línea de compromiso radical con la
lucha por un futuro socialista para el Ecuador, re-
chazando el reformismo y los arreglos con el poder
prevaleciente. Siguiendo nuestras mejores tradicio-
nes y una visión de futuro, renovamos nuestro com-
promiso con un proyecto nacional intercultural de
unidad en la diversidad, que recobre la Patria para
su pueblo, con justicia social y democracia radical.
3. Desde el SocialiSmo RevolucionaRio profundi-
zaremos la lucha junto a las organizaciones sociales
y la crítica a las medidas antipopulares del régimen.
Defenderemos los derechos de los trabajadores, la
seguridad social, el carácter nacional y democrá-
tico de nuestra educación, los derechos a la tierra
y al agua, respaldaremos a las organizaciones la-
Manifiesto del Socialismo Revolucionario 23

borales, indígenas, afroecuato- ...renovamos


rianas, de mujeres, pobladores, nuestro
estudiantes y de sectores discri- compromiso con un
proyecto nacional
minados. Nos seguiremos opo- intercultural
niendo a las políticas represivas de unidad en la
y depredadoras del Gobierno, diversidad.
denunciando sus violaciones a los derechos huma-
nos y ambientales. Combatiremos la corrupción
imperante. Enfrentaremos al caudillismo correísta
que engaña a las masas y destruye al país.
4. Ratificamos nuestra protesta por el entreguismo y
la renuncia a los principios de quienes han sido ins-
talados por el correísmo en la dirección nacional
espuria del Partido Socialista, y declaramos que
no representan legítimamente a nuestra organiza-
ción política y a su militancia. No reconocemos su
autoridad ni la validez de sus decisiones, tomadas
para complacer al poder y para acomodarse en la
burocracia, antes que para cumplir con el destino
revolucionario de nuestro partido.
5. Reafirmamos nuestra vocación Reafirmamos
latinoamericanista y antiimpe- nuestra vocación
rialista, frente a la vacía retórica latinoamericanista
y antiimperialista.
oficial del gobierno, que asegu-
ra los intereses estratégicos extranjeros y busca un
acomodo acrítico con la globalización sin fortale-
cer de manera eficaz la unidad, la integración y la
identidad regional.
6. Para llevar adelante la acción del SocialiSmo Re-
volucionaRio establecemos una coordinación
nacional, que reconocemos como dirección legíti-
ma; promoveremos coordinaciones provinciales y
levantaremos la organización hasta las bases en las
parroquias, los barrios, las organizaciones de base
24 Renovación Socialista

y todos los espacios en donde existan compatriotas


que quieran comprometerse con la lucha socialista.
7. Siguiendo las tesis socialistas fundamentales, busca-
remos la unidad de la izquierda, participando en
las acciones políticas con los partidos, movimientos
y organizaciones afines, con otras fuerzas progre-
sistas y con el movimiento social. El SocialiSmo
RevolucionaRio plantea la formación de un solo
frente patriótico para la acción política, con una
coordinación permanente y una expresión electo-
ral que articulen una amplia unidad social y orgá-
nica de diversas vertientes.
8. Convocamos a la lucha por una reforma profunda
de la Constitución que, manteniendo los derechos
y garantías vigentes, modifique de manera sustan-
cial la estructura de monopolio de la autoridad en
un solo poder, de modo que ningún personaje que
ejerza la presidencia de la República destruya la
división de funciones y la democracia, manipulan-
do a su favor los otros poderes y organismos del
Estado. Para ello, si es necesario, previa consulta
popular, debe convocarse una Asamblea Constitu-
yente, que organice el Estado en forma democráti-
ca y participativa.
...una reforma 9. Los militantes consecuentes del
profunda de la Partido Socialista, los directivos de
Constitución que, todo el país que están construyendo
manteniendo
los derechos y la organización de manera autóno-
garantías vigentes, ma y comprometida, los candidatos
modifique de y candidatas que enfrentaron al co-
manera sustancial rreísmo en las calles y en las urnas
la estructura de
monopolio de la con tesis y principios, son nuestros
autoridad en un compañeros y compañeras. A todos
solo poder. los invitamos a integrarse a la lucha
Manifiesto del Socialismo Revolucionario 25

y los convocaremos a las actividades que llevaremos


adelante a lo largo de los futuros meses en diversas
localidades del país. El SocialiSmo Revolucio-
naRio será un referente de la acción de la militan-
cia, ante la cual, quienes han sido reconocidos por
el Consejo Electoral correísta como directivos han
perdido toda autoridad.
Nuestra práctica como militantes consecuentes, an-
tiguos y nuevos, jóvenes y mayores, está frente al país y
frente a nuestros compañeros y compañeras. Sabemos
que los incondicionales del correísmo que fungen de
dirigentes del partido intentarán descalificar nuestra
postura, pero la militancia de todo el Ecuador, las or-
ganizaciones sociales y la opinión pública saben quién
es quién. No tememos, por ello, ni las amenazas, ni las
retaliaciones.
El socialismo es siempre revolucionario. Con esa
convicción llevaremos adelante nuestra lucha pro-
fundamente unitaria y comprometida. Lo haremos
sabiendo que en nuestras filas se juntan directivos de
las organizaciones sociales, jóvenes, líderes femeninas,
figuras históricas del partido, artistas y gente común
que lucha por la justicia social y la democracia. El So-
cialiSmo RevolucionaRio continuará la lucha patrió-
tica del pueblo ecuatoriano ¡hasta la victoria, siempre!
¡Por la izquierda unida por el trabajo,
la tierra, el agua y la vida!
Marcela Arellano, Luis Andrango,
María Paula Granda, Manuel Salgado,
Gustavo Vallejo
Coordinación Nacional
del Socialismo Revolucionario
Quito, 26 de abril de 2014
CIÓN
RENOVA TA
SOCIALIS

Reinventar el Socialismo
Documento de trabajo

El socialismo latinoamericano
en la encrucijada
El socialismo vive una hora muy difícil en el mun-
do y especialmente en América Latina. Las fuerzas po-
líticas socialistas no solo han experimentado reciente-
mente retrocesos electorales, sino que sufren una crisis
ideológica y hasta un cuestionamiento social.
Puede decirse que la crisis se hizo patente en los
años noventa del siglo pasado. La caída de los regí-
menes comunistas de Europa Oriental y el evidente
fracaso del estalinismo a nivel mundial, se dio en me-
dio del ascenso político y el triunfo ideológico del neo-
liberalismo, que proclamó el fin de la historia y la muerte
definitiva del socialismo.
El predominio neoliberal tuvo impactos profundos
y duraderos. Pero distó mucho de ser permanente. En
todo el mundo, y especialmente en América Latina,
surgieron movimientos populares que resistieron al
neoliberalismo imperante y lograron un rechazo a sus
políticas que empobrecieron a las mayorías. En algu-
nos países latinoamericanos, el impulso de esos mo-
vimientos consiguió notables triunfos electorales y así
llegaron al gobierno coaliciones identificadas con la iz-
quierda, en medio de grandes expectativas de cambio.
28 Renovación Socialista

La reacción anti neoliberal no tuvo las mismas ca-


racterísticas en todo el subcontinente latinoamerica-
no. Los gobiernos, que se asumieron “progresistas”,
han sido diversos. En algunos casos como en Brasil,
triunfó el PT, una organización política de izquierda
que había llevado adelante una larga lucha y gobernó
en alianza con sectores empresariales. En otros casos,
como Uruguay, ganó el Frente Amplio, un acuerdo
político estable del que son parte varias fuerzas de iz-
quierda y de centro. En situaciones como la venezola-
na, en cambio, llegaron al poder movimientos políti-
cos formados ad hoc frente a situaciones de quiebre que
demandaban cambios radicales.
Esos triunfos electorales se dieron a base de discur-
sos o propuestas de corte progresista, reforzados por
una coincidencia regional de jefes de estado que se
proclamaron progresistas, de izquierda, a veces, hasta
“revolucionarios”. No cabe duda de que, sobre todo
algunos gobiernos de la tendencia, han realizado avan-
ces muy destacable. Pero, en nombre de la realidad y
del pragmatismo, esos gobiernos solo plantearon refor-
mas, algunas de ellas importantes, arguyendo que no
era posible desmontar al capitalismo por las condicio-
nes internas de los países y por su predominio global.

Los límites del “socialismo light”


Estas fórmulas políticas se autodenominaron a ve-
ces socialismo del siglo XXI, pero en los medios de pren-
sa, vista la práctica, se les puso el rótulo de “socialismo
light”. No cabe duda de que sus gobiernos, sobre todo
en ciertos momentos, tuvieron rasgos progresistas y re-
virtieron algunas medidas de ajuste neoliberal. En al-
gunos casos, incluso, superaron la pobreza extrema de
ciertos sectores. Pero se toparon con el límite de su pro-
Reinventar el socialismo 29

pio proyecto, que no pretendía, o En varios de


no podía, superar el capitalismo. esos regímenes
Los proyectos reformistas tienen se presentó una
realidad muy grave.
un techo y no pueden superar las A la ineficiencia y
limitaciones del sistema. burocratismo se
sumó la presencia de
En varios de esos regímenes se la corrupción.
presentó una realidad muy grave.
A la ineficiencia y burocratismo se sumó la presencia
de la corrupción. En efecto, la situación venezolana en
este aspecto es escandalosa, ya que a la quiebra nacio-
nal se junta una estructura de poder antidemocrática
y corrupta en que están juntos el chavismo sucesorio
con las fuerzas armadas. En Argentina, los malos ma-
nejos económicos de Cristina Fernández son evidentes,
aunque por ello no podemos ni apoyar ni justificar el
triunfo de la derecha, mucho menos las políticas reac-
cionarias y regresivas del gobierno de Macri.
El resultado de los gobiernos del PT dirigidos por
Lula y Dilma Russell fue empañado por graves denun-
cias de corrupción que llevaron a Lula a ser enjuiciado
y a Dilma fuera del poder por un golpe parlamentario.
En este caso, quedó claro que los que destituyeron a la
presidenta, a quien no se le probó acto de corrupción,
eran en su mayoría políticos redomadamente corrup-
tos y continúan gobernando el país. Sin embargo, no
se puede negar que dentro del PT y su gobierno hubo
corrupción. Y esto debe preocuparnos.
El predominio de los gobiernos latinoamericanos
dirigidos por fuerzas progresistas, de izquierda o por
caudillismos que se adjudican esas posturas, ha sido
corto. Han sufrido derrotas en algunos países y en
otros se mantienen a base de la represión y el frau-
de. Pero lo más lamentable es que, por declaración de
sus propios dirigentes, todo lo que pueden ofrecer es
30 Renovación Socialista

un tímido reformismo cada vez más atrapado por el


capitalismo global. No deja de ser preocupante, por
ejemplo, que el gobierno de Evo Morales en Bolivia
sea considerado como “modelo” por el Fondo Mone-
tario Internacional.
La situación de nuestra América Latina nos lla-
ma a la reflexión y a la acción. Debemos volver a las
raíces insurgentes del socialismo, al compromiso con
nuestras propias realidades, a la lucha radical contra
la corrupción, a la tradición de lectura profunda de los
clásicos y de imaginación creativa para “reinventar” el
socialismo de nuestros tiempos.

El correísmo
y su acción en el Ecuador
El socialismo es una corriente fundamental en la
historia de nuestra patria. En 1926 se fundó el Partido
Socialista Ecuatoriano con profundo sentido original
y carácter nacional que se los mantuvo a lo largo del
siglo XX. No asumió posturas dogmáticas y desarrolló
una amplia crítica de las desviaciones que se daban en
las tendencias de izquierda en el país y el mundo. En
los años noventa, fue la primera organización de iz-
quierda que asumió críticamente la crisis internacional
del socialismo que se expresó a fines de los ochenta. Y
también la primera que se planteó una radical renova-
ción en los noventa. Producto de este proceso, en 2003,
presentó el manifiesto: Socialismo para el Ecuador del siglo
XIX, que ahora más que nunca mantiene actualidad.
Desde los años noventa, el PSE se mantuvo junto
a las organizaciones de trabajadores, indígenas, maes-
tros y estudiantes, con una postura permanente de
buscar la unidad para vencer al neoliberalismo. Por
Reinventar el socialismo 31

ello, en 2006 apoyó la candidatura de Rafael Correa,


un profesor universitario de antecedentes ideológicos
demócrata cristianos, que había sido ministro de Fi-
nanzas del gobierno de Alfredo Palacio y fue lanzado
por diversos grupos de exmilitantes de izquierda y sec-
tores que rechazaban la política tradicional, agrupa-
dos en lo que se llamó Alianza País.
El apoyo del Partido Socialista y organizaciones
populares afines como la FENOCIN, le permitió a Co-
rrea crecer como candidato. Con un discurso contra la
“partidocracia” y el neoliberalismo, logró el apoyo de
sectores medios inconformes con la situación nacional
y de militantes de izquierda que habían abandonado
sus partidos. Pachacutik y el MPD y otras fuerzas que
creyeron que no tenía posibilidades de triunfo, no lo
apoyaron.
La propuesta contestataria le dio enorme respaldo
popular, pero Rafael Correa no triunfó por casuali-
dad o por su habilidad de comunicador. En su éxito
electoral hubo una causa estructural de fondo. En la
coyuntura oportuna, fue beneficiario de un acumu-
lado histórico de años de lucha de la izquierda y las
organizaciones sociales contra los regímenes neolibe-
rales. Aunque no lo reconozca, para su triunfo fue vital
haber dado continuidad a posturas anticapitalistas y
antiimperialistas y haber recibido el apoyo socialista.
Su slogan de campaña fue la “revolución ciudada-
na”, una confusa propuesta que incluía desmantelar
el poder de los partidos con la disolución del Congre-
so y la convocatoria a una Asamblea Constituyente,
además de una gran cantidad de “revoluciones” en el
campo social, que se concretaron luego en el rótulo
socialismo del siglo XXI, compartido con otros gobiernos
de Latinoamérica.
32 Renovación Socialista

El programa de campaña no se cumplió. Aparte


de algunos cambios modernizantes y un enorme cre-
cimiento burocrático, ninguna gran transformación
se ha emprendido. No hay reforma agraria ni urba-
na. Se promueve un débil productivismo. Las políti-
cas sobre la explotación de los recursos naturales son
extractivistas y promotoras del capital internacional.
Las reformas educativas van en contra de la niñez y
la juventud. Correa institucionalizó la criminalización
de la protesta social y la consigna de debilitar a las
organizaciones populares, las ha dividido, persiguien-
do a sus dirigentes. Se ha limitado la libre expresión y
se ha perseguido a quienes la defienden. La corrup-
ción, como nunca antes ha prevalecido en el gobierno
correísta, a través de un sistema electoral tramposo y
fraudulento, una justicia manipulada y los escandalo-
sos malos manejos de fondos públicos, que en cantida-
des astronómicas han pasado a manos de corruptos.
Al dejar la presidencia, Correa deja un país en que
se han dado cambios, pero en lo de fondo no ha mejo-
rado. Luego de haber manejado una inverosímil canti-
dad de recursos, entre otras cosas por el auge petrole-
ro, la vida del pueblo es más cara, el desempleo no se
ha reducido y el subempleo se mantiene. La distancia
entre ricos y pobres se ha profundizado. Hay menos
seguridad y más nuevos ricos con plata mal habida. No
hubo ninguna revolución. El gobierno del “socialismo
del siglo XXI” impulsa el capitalismo del siglo XXI.
Una de las preocupaciones del correísmo ha sido
perpetuarse. Por ello impuso una Constitución que
consagró el monopolio político y el autoritarismo.
Con declaraciones que contienen derechos y garan-
tías, introdujo una estructura vertical del estado, sin
participación popular ni división de poderes, que trata
Reinventar el socialismo 33

de perpetuar el predominio del Correa


caudillo. Las reformas realiza- institucionalizó la
das profundizaron su carácter criminalización de la
protesta social y la
y eliminaron derechos sociales consigna de debilitar
y laborales básicos. Por ello, a las organizaciones
una de las tareas democráticas populares, las
prioritarias del país es llegar a la ha dividido,
persiguiendo a sus
reunión de una Asamblea Cons- dirigentes.
tituyente que realice una refor-
ma radical de nuestra norma básica, manteniendo sus
avances en derechos y garantías.

Correísmo y socialismo
Desde la campaña electoral de 2006, el carácter
personalista de Correa y el correismo se hicieron pre-
sentes. Pusieron de lado a su principal aliado el Parti-
do Socialista y causaron su derrota legislativa. Desde
el principio del gobierno se patentizó la tendencia de
Correa a dejar de lado la participación orgánica de la
militancia de izquierda y de las organizaciones socia-
les para consolidar una clientela caudillista en Alianza
País. Nunca aceptó el debate ideológico y la discusión
para llevar adelante su administración. Nunca fue
a una reunión con la dirección del Partido Socialis-
ta. Mas bien profundizó el personalismo y la actitud
clientelar, rodeándose de esbirros e incondicionales.
La militancia socialista de todas las provincias y
sectores del partido trató de apoyar la prometida “re-
volución” y esperó años porque se la comenzara. Pero
los cambios no se realizaron y el PSE no podía hacerse
cargo de lo que el gobierno correísta había llegado a
ser. La mayoría de los socialistas trataron de mante-
ner un “apoyo crítico” al gobierno, pero Correa solo
acepta incondicionales. Por ello, pactó con un reduci-
34 Renovación Socialista

do grupo al que apoyó para que se apoderara de la di-


rección nacional y propició su permanencia tramposa
al frente del partido. A ese grupo le entregó puestos
burocráticos y prebendas para mantener su apoyo in-
condicional.
En el Congreso de Portoviejo (2010) el grupo en-
treguista se impuso gracias a la cooptación y a la irrup-
ción de destacamentos de élite policial en el recinto
de la reunión. En el Congreso de Guaranda, 2013,
una banda de criminales apoyada por la policía, im-
pidió con garrotes y gases lacrimógenos la entrada de
delegados y dirigentes populares. De ese modo, con
el apoyo de los órganos electorales dominados por el
coreísmo, se apoderaron de la dirección del Partido
Socialista.
Los socialistas consecuentes hicimos todos los es-
fuerzos por evitar la división y mantener la unidad
del partido. Tuvimos numerosos gestos unitarios, re-
cogimos firmas para la reinscripción y respaldamos a
los candidatos de la lista 17 en elecciones. Pero cues-
tionamos a los dirigentes ilegítimos, instrumentos del
correísmo, y nos mantuvimos en una postura crítica,
junto a las organizaciones populares y las fuerzas de
izquierda revolucionaria, como lo establecen la decla-
ración de principios, la línea política y las tradiciones
de nuestro partido. Del lado de la dirección correis-
ta que se había apoderado del partido solo hubo ac-
titudes sectarias y prepotentes. Expulsaron a quienes
discrepaban y jamás intentaron la vía del diálogo y la
discusión doctrinaria.
Ante ello, los socialistas consecuentes, reunidos el
26 de abril de 2014 nos agrupamos bajo la bandera
del SocialiSmo RevolucionaRio para “avanzar en
la lucha, rescatar al Partido Socialista, buscar la uni-
Reinventar el socialismo 35

dad de las organizaciones popu- Del lado de la


lares y de izquierda, proponer un dirección correista
gran proyecto radical y patriótico que se había
apoderado del
de cambio del Ecuador, siguiendo partido solo hubo
nuestras mejores tradiciones, en actitudes sectarias
la irrenunciable búsqueda de un y prepotentes.
porvenir de justicia y libertad.”
Declaramos entonces que “desde el inicio de su go-
bierno, Correa se negó a tratar al Partido Socialista
como un aliado. Nunca discutió sus acciones en for-
ma orgánica con la dirección nacional del partido, sus
legisladores y dirigentes provinciales. Con estilo per-
sonalista, se negó a plantear un proyecto doctrinario.
Se dedicó a cooptar para Alianza PAIS a militantes y
dirigentes populares del socialismo; trató de disolver
la organización del Partido Socialista en sus clientelas
electorales; asignó cuotas burocráticas por afinidades
personales; y, lo que es más grave, promovió las dis-
crepancias internas en las filas partidarias, valiéndose
de gente que se volvió su incondicional. De este modo,
incitó a la división y al abandono de los principios.”
En un manifiesto presentado a la militancia y al
país expresamos: “Frente a quienes han comprometi-
do el nombre y las luchas del Partido Socialista con
el caudillismo autoritario por acomodos personales y
arreglos de trastienda, y han llevado a nuestra orga-
nización al desprestigio y el deterioro, convirtiéndola
en una maquinaria electoralista, vagón de cola del co-
rreísmo, distanciada de las organizaciones sociales y las
bases populares; hemos resuelto rescatar la vocación
revolucionaria y patriótica del socialismo ecuatoriano.”
Al cabo de tres años de esa declaración y cuando
termina el gobierno personal de Correa, el 10 de junio
de 2017, los socialistas consecuentes nos hemos reu-
36 Renovación Socialista

nido una vez más para ratificar nuestro compromiso


con la revolución y con el pueblo ecuatoriano. Por ello
hemos resuelto dar continuidad a nuestra postura y
promover la Renovación SocialiSta, que será un re-
ferente fundamental del socialismo revolucionario en
las luchas sociales y políticas de nuestra patria.

Grandes preguntas
de la “Renovación Socialista”
En la realidad actual del Ecuador, de Latinoamérica
y del mundo, se impone una renovación socialista que
mantenga las tradiciones revolucionarias, que vuelva a
las fuentes de los clásicos y al mismo tiempo reactive la
práctica de la crítica, utilice la imaginación y replantee
los grandes temas socioeconómicos y políticos.
Pero esa renovación no podrá emprenderse si no se
plantean preguntas básicas, cuyas respuestas nos lle-
varán al debate y a un real avance del pensamiento
y la acción. Por ello, luego de las consideraciones que
anteceden, este documento propone varias preguntas
que deberían estar en la base de la renovación. Es-
tas no son todas las preguntas posibles, apenas unas
cuantas. Tampoco su formulación es definitiva. Deben
considerarse instrumentos de trabajo para la necesaria
tarea de reinventar el socialismo.
¿Seguimos creyendo en la revolución?
El término “revolución” se ha gastado, se ha des-
prestigiado en no pocos ambientes. Por eso muchos
piensan que debe ser suprimido, al menos evitado, en
las propuestas socialistas. No puede dejar de consta-
tarse este hecho. Pero la revolución es un componente
fundamental del socialismo. Para eso existe. En la his-
Reinventar el socialismo 37

toria, cada pueblo ha encontrado su propio camino


para su propia revolución. Nunca se han dado “cal-
cos o copias” en procesos revolucionarios exitosos. Por
ello, la pregunta debe ser: ¿En qué consiste ahora una
revolución?
La respuesta será que es un cambio radical de la so-
ciedad y del estado, donde la mayoría popular gobier-
na y participa de la riqueza generada por el trabajo de
todos. Esa pregunta debe formularse especialmente a
los jóvenes, que hablan de cambio, de renovación y,
además, se comprometen con procesos radicales cuan-
do creen en ellos. Tal vez sus ideas no coincidan con
las de los mayores, pero las respuestas que se obtengan
deben ser tomadas en serio.
La revolución es uno de los grandes sueños de la
humanidad, que aspira superar el capitalismo para
instaurar la justicia, la igualdad, la vida democrática
y segura. Y la lucha socialista nos acerca a ese sueño.
Por eso debemos profundizar en la naturaleza revolu-
cionaria del socialismo, dejando de lado los dogmas y
las taras del pasado.
¿Quién es el protagonista
de la revolución?
Siempre se ha afirmado que el pueblo es el protago-
nista de toda revolución verdadera. Parece, por tanto,
que la pregunta no es relevante. Pero el hecho es que el
contenido de la palabra “pueblo” ha ido cambiando,
se ha expandido. Antes estaba claro que el pueblo era
la gran mayoría de la población que debía se condu-
cida por los trabajadores organizados, el proletariado.
Pero en el mundo en que vivimos, el propio concepto
de “proletario” ha sufrido transformaciones, ya que el
trabajo ha adquirido modos y facetas distintas.
38 Renovación Socialista

La revolución es En el nuevo escenario social


uno de los grandes en que vivimos, el panorama ha
sueños de la
humanidad, que cambiado por la acción de las mu-
jeres y sus demandas, la presencia
aspira superar el
capitalismo parade los indígenas y afros, de los
instaurar la justicia,
luchadores por el ambiente, el re-
la igualdad, la vida
democrática yplanteamiento de las identidades
regionales, las reivindicaciones de
segura.
las diversidades sexuales. Por ello,
quizá las preguntas deberían ser: ¿A quien considera-
mos “pueblo” en un proceso revolucionario? ¿Cómo
se expresa ahora esa pueblo?
¿Cuál es el rol
de las organizaciones sociales?
También en este caso la respuesta pareciera fácil.
Pero, en realidad, es muy compleja, pero pertinente.
Si se ha dado una diversificación de las sociedades,
también es claro que se debe pensar que sus organi-
zaciones se diversifican. No hay proyecto revoluciona-
rio viable si no se asienta en una base social amplia y
diversa. Y esa base social debe estar organizada para
enfrentar las nuevas realidades. Por ello la pregunta
debería ser: ¿Cómo promovemos la organización de
las fuerzas antiguas y nuevas de la sociedad?
Eso nos llevará a nuevas formas de agrupamiento
social, de protesta y acción. Los nuevos movimientos
sociales deben ser impulsados. Pero la experiencia de
la lucha contra el neoliberalismo nos ha enseñado que
los trabajadores organizados son centrales en todo
proceso de resistencia y de cambio. En Europa, en
África y, desde luego, en América Latina los sindicatos
se movilizaron contra el capitalismo global. También
en nuestro país, del rol cumplido por el FUT frente al
correísmo, podemos extraer muchas lecciones.
Reinventar el socialismo 39

¿Es posible el socialismo


en un mundo de diversidades?
Esta pregunta se la hacen No hay proyecto
muy frecuentemente personas revolucionario viable
que creen que el socialismo es si no se asienta
una ideología del siglo XIX que en una base social
amplia y diversa. Y
trató de uniformar al mundo esa base social debe
con una visión marxista y prole- estar organizada
taria. Por ello ya no tendría vi- para enfrentar las
gencia. Pero, en realidad, la his- nuevas realidades.
toria remota y reciente nos enseña que el socialismo se
ha desenvuelto en medio de diversidades. Y ha hallado
respuestas para situaciones muy distintas. Aún más, el
propio socialismo ha tenido muy diversas manifesta-
ciones. Observemos las experiencias de las revolucio-
nes nacionales del mundo, de las luchas por conquistas
laborales, la acción de los gobiernos socialdemócratas
europeos, los procesos de liberación de Europa Orien-
tal, incluida Yugoslavia, el cómo se ha asumido el so-
cialismo en Asia, en los países islámicos o africanos,
la presencia de los cristianos por el socialismo y otras
formas que han reivindicado la lucha socialista, sobre
todo en América Latina.
En nuestro mundo se han profundizado las diver-
sidades existentes y se han manifestado otras nuevas.
No habrá futuro socialista si no se las toma en cuenta,
pero sobre todo si no se asume al socialismo como un
compromiso con la gente, con las personas y su futuro
como seres humanos viviendo en sociedad. Por ello,
la pregunta debería ser: ¿Cómo el socialismo puede
asimilar esa realidad y volverse viable en las nuevas
realidades?
40 Renovación Socialista

¿Qué papel cumple la democracia


en la propuesta socialista?
Una vez más se está repitiendo en los medios y en
las redes sociales, que el socialismo no es democráti-
co, que la democracia y la libertad solo se dan en el
capitalismo. Para ello se pone el ejemplo de Venezue-
la o del gobierno de Correa, si es que fueran socialis-
tas. Pero, en realidad, el socialismo ha sido uno de los
avances democráticos mas importantes de la historia
del mundo. Y los socialistas han luchado y muerto por
la democracia. Uno de los innumerables ejemplos es el
de Salvador Allende, uno de los grandes socialistas de
Latinoamérica, que murió defendiendo la democracia.
Pero debemos reconocer que los socialistas hemos
privilegiado los aspectos sociales de la democracia en
nombre de la justicia social. Muchas veces se ha des-
preciado los genuinos avances de la democracia libe-
ral, identificándolos con la “democracia burguesa” y
se ha pensado que revolución es estatizar todo y atro-
pellar a la sociedad civil. Pero eso no es verdad. Las
raíces libertarias del socialismo deben llevarnos a un
compromiso con la democracia radical.
Debemos rescatar las tradiciones socialistas de de-
fensa y afirmación de la sociedad, de sus formas de
expresión y derechos. El estatismo que absorbe la
sociedad no es socialismo. Es fascismo. Por ello, de-
bemos revalorizar nuestra doctrina que promueve el
robustecimiento del espacio publico, de la propiedad
común de los bienes de produc-
Las raíces libertarias
del socialismo ción, pero avanzar también en la
deben llevarnos a un discusión sobre el contenido de
compromiso con la la democracia radical. Por ello,
democracia radical. la pregunta debería ser: ¿Como
Reinventar el socialismo 41

se construye sociedades democráticas, con revolución,


justicia social y respeto a las diversidades?
¿Es posible el socialismo en
un mundo globalizado por el capitalismo?
La pregunta no es tan inocente ni sencilla como pa-
rece. Tampoco es nueva. Ya el estalinismo se impuso
en la URSS de los años treinta con el “socialismo en
un solo país”. Pero si en el siglo XX fue necesaria una
coyuntura internacional favorable para que triunfaran
los movimientos socialistas, en el siglo XXI, cuando se
ha profundizado la globalización, parece todavía más
difícil que eso sucediera, cuando cayeron la URSS y el
“socialismo real”. No se debe desconocer que en Lati-
noamérica, aún con los gobiernos progresistas, no ha
sido posible romper el predominio capitalista; ni siquie-
ra superar del todo el neoliberalismo. En cuanto al go-
bierno de Correa, que nunca fue socialista, lo que está
claro es que ha promovido el capitalismo del siglo XXI.
Pero el socialismo es siempre, no solo antineolibe-
ral, sino también anticapitalista. Uno de sus objetivos
centrales es derrotar al capitalismo, que impone una
sociedad asentada en grandes diferencias y en la ex-
plotación, que pone la democracia al servicio del gran
capital, que destruye la solidaridad entre las personas,
que alienta el machismo y promueve prácticas consu-
mistas, depredadoras y enemigas de la naturaleza.
El socialismo lucha por transformar la sociedad y el
estado. En nuestros días es evidente que los estados, o
estados-nación, están en crisis en todo el mundo, cues-
tionados desde las diversidades étnicas y regionales,
desde nuevas realidades internacionales y percepcio-
nes de los derechos. Por ello, la pregunta pertinente en
nuestra realidad es: ¿Cómo articulamos los proyectos
42 Renovación Socialista

nacionales específicos y la solidaridad internacional


para construir un movimiento socialista sostenible en
un mundo en que el capitalismo ha probado ser muy
vigoroso y persistente?
¿Seguimos con el marxismo
o lo abandonamos?
La pregunta nos lleva a una falsa disyuntiva. Por-
que no se trata de mantener a rajatabla las interpre-
taciones dogmáticas del pasado sobre el socialismo
y el marxismo o simplemente establecer que ya está
superado. Debemos recordar que el socialismo se ha
alimentado de varias vertientes históricas y que en-
tre ellas, el marxismo ha sido fundamental. La pro-
pia doctrina y tradición marxista, en si mismo, han
sido diversas y se han convertido en dogma cuando
han perdido su dimensión dialéctica. Si se han dado
desviaciones tenebrosas como el estalinismo, también
han surgido movimientos vigorosos que permitieron
la renovación. La obra de los grandes teóricos latinoa-
mericanos lo atestigua.
El socialismo ecuatoriano recoge la trayectoria co-
munitaria de los pueblos andinos, el mensaje cristiano
de justicia, las luchas por la independencia y el boliva-
rianismo, el triunfo del laicismo y el mensaje alfaris-
ta, la tradición marxista y libertaria de la lucha de los
pueblos del mundo, especialmente de Latinoamérica.
Por ello, no se trata de renegar de nuestra identidad
ideológica, sino de enriquecerla para la acción futura.
Por ello, la pregunta que debemos plantearlos de-
bería ser: ¿Cómo debemos asimilar la dialéctica y la
teoría social a la luz de un socialismo enriquecido por
sus fuentes doctrinarias, entre ellas el marxismo, para
articular una propuesta revolucionaria original y crea-
Reinventar el socialismo 43

tiva para nuestra realidad? El socialismo recoge la


trayectoria comunitaria
¿Hasta donde va la lucha de los pueblos andinos,
contra la corrupción? el mensaje cristiano de
justicia, las luchas por
Pese al lugar común, de- la independencia y el
beríamos decir que hasta las bolivarianismo, el triunfo
del laicismo y el mensaje
últimas consecuencias. Pero alfarista, la tradición
eso no es suficiente, porque marxista y libertaria de
la historia reciente nos de- la lucha de los pueblos
muestra que el ansia de lucro del mundo...
y riqueza que se profundizó con el advenimiento del
capitalismo, no es exclusiva de la derecha. Puede pe-
netrar en las filas revolucionarias y corromperlas. Por
ello, debemos concebir al socialismo y a la revolución
como una nueva forma de vida austera, que respete a
las personas y a la naturaleza, la “Pacha Mama”, que
no desperdicie los recursos y no deprede el ambiente,
que no destruya nuestro planeta y perpetúe el predo-
minio del capitalismo.
Por ello, la pregunta debería formularse así:
¿Cómo concebimos una vida, que respete nuestras
tradiciones andinas y nos permita “vivir bien”, es
decir, llevar una existencia digna, exenta de miseria,
ejerciendo derechos fundamentales, sin opulencia ni
angustias por la acumulación o la competencia? En
otras palabras, ¿cómo vivir un verdadero sumak kausay,
sencillo y solidario?
¿Seguimos siendo insurgentes?
El socialismo es siempre insurgente. Es una ruptura
del orden injusto en el que prevalecen la cooperación
y la hermandad entre las personas. Es una opción de
libertad y de justicia, un referente en el camino hacia
una nueva sociedad en medio de una nueva comuni-
44 Renovación Socialista

dad mundial. Es ante todo una visión humanista de las


personas y de las sociedades. Es un compromiso con
el futuro, no una vuelta al pasado. Es una afirmación
de la democracia representativa y participativa frente
a las dictaduras, los caudillismos y las clientelas mani-
puladoras.
La respuesta a la pregunta sería, desde luego, que
somos insurgentes. Pero la cuestión es ¿cómo serlo?
en nuestro presente. Por ello debemos seguir pregun-
tando, cuestionando, pensando y actuando. Porque
las preguntas y la crítica son el eje de la construcción
del socialismo, que siempre es creación heroica de los
pueblos.
¿No es una traición
hablar de “renovación socialista”?
Quien no esté de acuerdo en que se requiere una re-
novación radical del socialismo, tal como lo conocemos,
esta profundamente equivocado. La renovación del so-
cialismo no solo que es posible, sino que es una nece-
sidad de nuestra fuerza política y de la sociedad toda.
Pero pudiera hacerse la pregunta: ¿No será que al
hablar de “renovación” estamos tratando de cambiar
lo que el socialismo ha sido tradicionalmente? La res-
puesta sería que, en efecto, estamos proponiendo un
cambio en las propuestas y la organización que he-
mos tenido en el pasado; pero lo hacemos siguiendo
la tradición crítica del socialismo y replanteando su
proyecto para el futuro, sin renunciar a sus principios
fundamentales.
Por otra parte, podría también preguntarse: ¿Será
que el socialismo estaba equivocado que requiere una
renovación? Frente a esto, la respuesta ya se ha dado
muchas veces, pero quizá conviene repetirlo: Los pro-
Reinventar el socialismo 45

gramas socialistas y sus propues- ...debemos concebir


tas no están escritas para siempre. al socialismo y a la
A base de los grandes principios revolución como una
nueva forma de vida
se formulan para cada situación austera, que respete
social y coyuntura. Cuando la so- a las personas y a la
ciedad cambia, el socialismo debe naturaleza.
renovar sus programas y su organización. Renovar no
es renunciar a los principios. Es cumplirlos en medio
de nuevas realidades. Eso es precisamente lo que nos
proponemos hacer.
Asumiendo la trayectoria del socialismo en nuestro
país, queremos mantener su vocación revolucionaria
y su vinculación a las organizaciones de la sociedad,
poniendo distancia con los correístas que se apodera-
ron de la estructura del PSE y de la lista 17, que ya
no pueden ser considerados socialistas, sino furgón de
cola del caudillismo corrupto. Por ello, no solo que nos
proponemos llevar adelante una renovación socialista,
sino organizarnos bajo esa consigna para darle al país
una verdadera opción de izquierda progresista.
La tarea propuesta es enorme y conlleva gran-
des esfuerzos. Por ello, la pregunta pertinente en este
punto es: ¿Cómo vamos a construir el espacio y la
organización de Renovación SocialiSta, asumien-
do las raíces insurgentes y libertarias de las luchas del
pueblo, mirando al futuro, con la democracia radical
como referente?
La gran misión que tenemos por delante no es solo
reagruparnos luego de la farsa correísta, sino reinven-
tar el socialismo a partir de los principios, con gran
sentido crítico, con valentía, con audacia, con imagi-
nación para reconocer nuevas realidades y marchar
a un futuro que no conocemos ni podemos predecir,
pero si estamos en condiciones de preparar. Marcha-
46 Renovación Socialista

mos al porvenir con la confianza de que venceremos.


¡Hasta la victoria, siempre!
Convención Nacional
de Renovación SocialiSta
Quito, mayo, 2017
CIÓN
RENOVA TA
SOCIALIS

Experiencias y perspectivas
de la Renovación Socialista
Documento de trabajo

Una larga y rica trayectoria


Cuando estamos avocados a definir qué tipo de
organización política debemos construir o fortalecer
los socialistas, es indispensable que empecemos defi-
niendo que tipo de Sociedad y de Estado queremos
construir. Para ello, se requiere identificar algunas pro-
puestas que se han venido formulando al interior en
diferentes épocas de la vida del Partido Socialista des-
de su unificación en 1983. Debemos también partir de
una idea general de lo que podríamos recordar como
definiciones del socialismo.
Desde luego que esas definiciones son muchas,
pero en términos generales se puede establecer que el
socialismo constituye un sistema que se asienta sobre
la consideración básica de que el trabajo humaniza a
las personas y la libertad es su mayor valor, que impul-
sa su presencia colectiva y está en la base de la organi-
zación social y económica; lucha ante todo por la vida
y el respeto de la naturaleza; plantea el gobierno del
pueblo organizado, la abolición de la propiedad priva-
da de los medios de producción, el desmantelamiento
del capitalismo y la redistribución social de los bienes,
el énfasis en el desarrollo de educación y la cultura
desde una práctica intercultural, la vigencia de la de-
48 Renovación Socialista

mocracia radical, el respeto a los derechos humanos,


a la libertad de conciencia y expresión, a las diversi-
dades y a la sociedad organizada. Su objetivo funda-
mental consiste en suprimir la explotación del hombre
por el hombre, el machismo y el racismo; en la elimi-
nación de las clases sociales, reconociendo que deben
prevalecer el trabajo y los trabajadores como ejes de la
vida social. Propugna la creación de una comunidad
internacional que desmantele el poder imperial, im-
plante la equidad en las relaciones entre los Estados y
respete la autodeterminación de los pueblos.
El socialismo ecuatoriano es revolucionario. Con-
sidera, por tanto, que su implantación en nuestro país
será fruto de una profunda transformación impulsada
por el pueblo organizado. De allí que el Partido Socia-
lista ha enfatizado siempre en su vinculación con las
organizaciones sociales. Plantea una nueva sociedad
justa y democrática, con justicia social, equidad de
género, interculturalidad, respeto a la naturaleza, con
una economía sustentable y productiva, descentraliza-
ción interna e integración externa.
El pensamiento socialista, desde sus orígenes, pa-
sando por los clásicos como Marx y Engels, por los
grandes aportes latinoamericanos, hasta nuestros días,
ha planteado el combate a la opresión, poniendo ante
todo la dignidad de los seres humanos y la justicia
social. Pero ha reconocido al mismo tiempo que no
existen recetas o dogmas para el socialismo, que debe
ser desarrollado por cada pueblo para su realidad, en
cada momento histórico.
Siguiendo una tradición que viene desde el surgi-
mento del socialismo en la década de los años vein-
te el siglo pasado, la tradición socialista ecuatoriana
ha privilegiado la crítica y el debate como método de
Experiencias y perspectivas de la Renovación Socialista 49

pensamiento y acción. Por ello, El socialismo


la reunificación de las diversas ecuatoriano es
líneas y tendencias socialistas y revolucionario.
Considera, por tanto,
de movimientos sociales que se que su implantación
dio en 1983, se asentó sobre una en nuestro país será
discusión amplia y abierta sobre fruto de una profunda
la naturaleza de la sociedad na- transformación
impulsada por el
cional y sobre el tipo de orga- pueblo organizado.
nización política que queremos
desarrollar.
Como aporte a nuestros debates internos, en el
año 1995 se presentó al congreso extraordinario que
se realizó en el mes de marzo, un documento elabo-
rado por el compañero Víctor Granda denominado
Los temas de la renovación, que recoge varios postulados
y concepciones que han sido debatidos en el partido,
que hacen relación a planteamientos del socialismo en
América Latina y en el Ecuador, cuyo documento, en-
tre otros planteamientos, destaca:

Aplicar creadoramente el socialismo científico a nues-


tra realidad y no convertir el marxismo en un dogma;
el cuestionamiento al estatismo, al partido único, a los
privilegios del burocratismo y a la supresión de la de-
mocracia política a cambio de alcanzar importantes
conquistas sociales negadas por las mayorías en la socie-
dad capitalista; y, el rescate de la soberanía nacional y la
necesidad de la integración y unidad latinoamericana
frente a la dominación extranjera y a la acción del im-
perialismo”. Se reconoce que estos postulados quedaron
en “letra muerta o no se los desarrolló o sustentó sufi-
cientemente.
El documento señala además que los socialistas
“debemos luchar por la construcción de una nueva
sociedad y un nuevo Estado que supere todas las injus-
50 Renovación Socialista

ticias que hoy se han profundizado y que le permitan


a todos los hombres y mujeres del país la satisfacción
de todas sus necesidades materiales y espirituales. Las
acciones de un gobierno hoy tendrían que adecuarse
a las necesidades coyunturales, internacionales y na-
cionales pero sentado las bases para la transformación
profunda y radical”. Por tanto la sociedad y el Estado
a construir tienen que ser esencialmente democráticos,
plurales y soberanos” Define a la democracia radical
como “la igualdad de oportunidades para acceder a
la riqueza, al conocimiento, a los bienes culturales y
espirituales de la humanidad”.
Respecto al partido, se plantea que el “PSE es una
organización política, democrática, revolucionaria,
popular y nacional cuyos principios, ideales y luchas
se fundamentan en el socialismo marxista, con su con-
cepción crítica, humanista y antidogmática para ejer-
cer su acción política de acuerdo a la realidad ecua-
toriana y latinoamericana”. El referido documento
pone énfasis en que debemos profesar un marxismo
creativo, imaginativo, con raíces nacionales y latinoa-
mericanas. El debate sobre los temas señalados sigue
vigente y hoy más que nunca nos corresponde definir
la sociedad y Estado que queremos construir y para
ello estructurar la organización política que impulse el
proceso, teniendo en cuenta que las metodologías y las
tácticas pueden cambiar conforme va cambiando la
sociedad y las estructuras del Estado, pero el objetivo
estratégico de instaurar una so-
...la igualdad de
oportunidades para ciedad y un Estado socialista no
acceder a la riqueza, debe cambiar.
al conocimiento, a Desde los años ochenta, el
los bienes culturales
y espirituales de la socialismo ha sido la organiza-
humanidad. ción política del país con más
Experiencias y perspectivas de la Renovación Socialista 51

desarrollo teórico y debate inter- Desde los años


no. El PSE fue pionero en asumir ochenta, el
socialismo ha sido la
la crisis del socialismo y la caída organización política
de la URSS y su bloque interna- del país con más
cional con propuestas de reno- desarrollo teórico y
vación que, por una parte man- debate interno.
tuvieron su tradición de lucha, pero por otra parte,
impulsaron nuevas y radicales transformaciones de su
propuesta, de acuerdo con las nuevas reaildades del
país y del mundo.
Fruto de más de una década de reflexión y bús-
queda, en mayo de 2003, el Partido Socialista emitió
el manifiesto Socialismo para el Ecuador del siglo XXI, que
destacaba que los socialistas “levantamos nuestra voz
para decirle al país, como lo hicieron los fundadores
de nuestro partido en 1926, que continuamos hacia
el futuro en la lucha por la liberación, la igualdad, la
justicia social; que convocamos a todos los hombres
y mujeres a rescatar la patria, a desarrollar nuestras
capacidades para conseguir la paz en el mundo, el
cambio radical de nuestro país y de América Latina.”
Y añadía:
El Partido Socialista-Frente Amplio no aspira a repre-
sentar solo a una región, grupo étnico o religioso, sino
a todo el país. Quiere reunir a todos los ecuatorianos
y ecuatorianas en la lucha por un cambio radical que
consolide una nueva sociedad y un nuevo Estado, libres
de la explotación de las clases monopolistas y especu-
ladoras de dentro y del extranjero. Busca establecer la
soberanía del pueblo sobre la riqueza nacional, el ro-
bustecimiento de la propiedad colectiva de áreas estra-
tégicas, garantiza y promueve la propiedad individual y
cooperativa, en un país de trabajadores, de productores,
de ciudadanos y ciudadanas que tienen diversas formas
52 Renovación Socialista

de producción, de organización y de trabajo, pero un


solo objetivo nacional de unidad y justicia.
A continuación ratificaba su compromiso históri-
co: “El partido lucha contra el capitalismo dominante,
por el establecimiento de un nuevo régimen político
que exprese a la mayoría del pueblo, es decir a las cla-
ses sociales que ahora son oprimidas. Para ello impulsa
una verdadera democracia, que implica la organiza-
ción, movilización y participación de los ciudadanos y
ciudadanas, y la eliminación de las causas de la explo-
tación social, los monopolios y la inmoralidad instala-
dos en nuestra sociedad.”
El Estatuto del PSE-FA, aprobado en el Congreso
Nacional realizado en Cuenca el 30 de Mayo de 2008
luego de un intenso debate, definió que “el Partido
Socialista-Frente Amplio (PS-FA) es una organización
laica, humanista, pluralista, democrática y solidaria
con profundas raíces nacionales y latinoamericanistas,
contraria a los dogmas, al sectarismo y la intolerancia.
Es un instrumento democrático y revolucionario del
pueblo para la construcción de una patria de todos”.
Agrega que el objetivo fundamental del Partido es “la
organización del pueblo ecuatoriano y todos los sec-
tores patrióticos y democráticos comprometidos con
la transformación estructural del sistema capitalista
imperante y el modelo neoliberal. Se propone la cons-
trucción de una nueva sociedad humanista y demo-
crática en donde impere la justicia social, la equidad
de género, la soberanía, la interculturalidad, el respeto
al medio ambiente, la economía sustentable y produc-
tiva, la descentralización y la integración subregional
y regional del continente”.
De todo lo anteriormente señalado, hemos conclui-
do que la Sociedad y el Estado que debemos construir
Experiencias y perspectivas de la Renovación Socialista 53

deben ser “esencialmente demo- Es un instrumento


cráticos, plurales y soberanos”, democrático y
hemos especificado el alcance de revolucionario
del pueblo para la
estos conceptos, pero hasta allí construcción de una
hemos llegado. Revisando nues- patria de todos.
tro accionar político, tal parece
que estamos delegando los postulados del partido a
otras fuerzas políticas y no estamos asumiendo el lide-
razgo y la conducción del proceso en la construcción
del socialismo o quizá esto se debe a que no tenemos
claridad en el tipo de Sociedad y de Estado que quere-
mos construir. Al respecto debemos estar conscientes
que una Sociedad y un Estado socialistas no se cons-
truyen de la noche a la mañana, el socialismo es un
proyecto de vida y de redención social, debemos asu-
mir la responsabilidad de trabajar y luchar en ese ca-
mino todos los días de manera consiente, consecuente,
militante y unitaria.
Desde mediados de la década de los 80, el PSE
priorizó la participación política en los procesos elec-
torales, en alianzas o acuerdos puntales y coyunturales
con otras fuerzas políticas, algunas de las cuales han
coincidido con algunos de nuestros postulados; pero
a la hora de las definiciones y del diseño y ejecución
de las políticas públicas, no hemos tenido un papel
preponderante, en algunos casos hemos sido meros
invitados de piedra, como ocurrió con Correa, su Mo-
vimiento Alianza País, su gobierno y en las últimas
elecciones con el Acuerdo Nacional por el Cambio.
54 Renovación Socialista

El acuerdo con Correa


y Alianza País
El Ecuador de fines del siglo XX e inicios del si-
glo XXI estuvo dominado por un renovado esfuerzo
de la burguesía ecuatoriana por implantar el neolibe-
ralismo en toda su magnitud; pero como lo señalan
algunos analistas políticos y económicos, nuestro país
no alcanzó los niveles de desarrollo de otros países la-
tinoamericanos por la férrea lucha de los trabajadores
y movimientos sociales contra las políticas que preten-
dían entregar al mercado el control de la sociedad y
al Estado, las privatizaciones, el ajuste estructural, la
flexibilización laboral, el sometimiento de las institu-
ciones del Estado a las empresas multinacionales y al
imperialismo norteamericano y la corrupción.
Los sectores dominantes del Ecuador expresaron
sus intereses en cuatro corrientes políticas que domi-
naron el escenario: Social Cristianismo (PSC), Demo-
cracia Cristiana (DP), la llamada Socialdemocracia
(ID) y Populismo (CFP/PRE). Esas fuerzas se turna-
ron en el poder o lo compartieron, pero todas ellas
mantuvieron la agenda neoliberal y la sumisión a las
políticas de capital monopólico, expresadas en la in-
fluencia del FMI y el Banco Mundial. La confronta-
ción permanente de los trabajadores, los movimientos
sociales, el socialismo y otras fuerzas de izquierda anti
neoliberales contra los gobiernos de turno se expre-
só en 18 huelgas nacionales lideradas por el FUT y
la caída de los gobiernos de Abdalá Bucarám, Jamil
Mahuad y Lucio Gutiérrez. En todo este proceso de
lucha la participación del socialismo, especialmente
sus componentes revolucionarios, fue destacada.
En este contexto de caos económico, institucional
y corrupción creciente, apareció una fuerza política
Experiencias y perspectivas de la Renovación Socialista 55

nueva, liderada por el economista Rafael Correa, de-


nominada Alianza País, que propugnaba una Revolución
Ciudadana e incorporó en su programa las exigencias
históricas de las fuerzas populares de izquierda en lo
económico, social, político, cultural; sustentó sus pro-
puestas en el denominado socialismo del siglo XXI, enar-
boló las consignas, canciones, emblemas del socialis-
mo y de la izquierda.
Este movimiento político contó con el apoyo de
las más importantes y representativas organizaciones
de trabajadores del país, ecologistas, intelectuales de
izquierda, indígenas, campesinos, sectores medios,
profesionales y de los más importantes movimientos
sociales, todos cautivados por las propuestas de Ra-
fael Correa en las cinco revoluciones, a saber: Revo-
lución Constitucional, que dio origen al nacimiento
de la Constitución en actual vigencia; Revolución
Económica, que se fijó como objetivo combatir al
neoliberalismo; Revolución Social, que contemplaba
la inversión en áreas importantes de la salud, la educa-
ción, el establecimiento o mejoramiento de subsidios
a las más pobres; La Revolución Ética, que apuntaba
a una lucha frontal contra la corrupción; Revolución
en Política Internacional, que consistía en priorizar las
relaciones con América Latina y asumir una posición
anti Estados Unidos.
El Partido Socialista apoyó la candidatura de Ra-
fael Correa a la Presidencia de la Republica en el año
2006 sobre la base de un acuerdo programático que
muchos militantes jamás lo conocimos, pero el comi-
té ejecutivo de la época, informó que contenía los si-
guientes puntos:
• Combate frontal a la corrupción.
• Patria digna y soberana.
56 Renovación Socialista

• Democracia radical, social, participativa y plural.


• Reforma política y constitucional profunda.
• Defensa de los recursos naturales del país y lucha
por recobrar para el Ecuador el control de su petró-
leo y otras fuentes energéticas.
• Política económica orientada al desarrollo social-
mente igualitaria y ambientalmente equilibrada de
manera sustentable y democrática
• Política social orientada al desarrollo humano de los
ecuatorianos y ecuatorianas.
• Respeto y promoción de la diversidad étnica y cul-
tural del país y de los derechos de los pueblos indí-
genas y afro ecuatorianos.
• Política internacional soberana e integracionista.
• Garantía de seguridad ciudadana en un ambiente
democrático.
Con base en estas propuestas ampliamente res-
paldadas por la mayoría del pueblo ecuatoriano, se
produjo el contundente triunfo de la candidatura a la
Presidencia de la República de Rafael Correa. A estas
denominadas revoluciones, posteriormente se agre-
garon: La Revolución Ambiental; La Revolución de
la Ciencia y la Tecnología; La Revolución Urbana, la
Revolución Cultural y, para impulsarlas, Correa con-
formó el Movimiento Alianza País integrado por vie-
jos y nuevos políticos comprendidos desde la derecha
hasta la izquierda.
La aplicación de este programa de gobierno permi-
tiría la eliminación de grandes diferencias económicas
y sociales, el fortalecimiento y expansión del Estado,
la expansión de los sectores sociales, la inversión en la
obra pública, el aparecimiento de una fuerte burgue-
sía empresarial con viejos y nuevos actores.
Experiencias y perspectivas de la Renovación Socialista 57

En el año 2008 la dirección del El Partido


partido, presentó un documento al Socialista apoyó
congreso del PS-FA en el que se se- la candidatura
de Rafael Correa
ñalaba varios aspectos positivos del a la Presidencia
gobierno de Correa, entre los que de la Republica
se destacan que había mantenido en el año 2006
una línea progresista en su discurso, sobre la base
de un Acuerdo
había enfrentado a la clase política Programático.
y a los círculos de poder oligárquico
tradicional, había planteado la defensa de los recursos
naturales del país, había buscado el robustecimiento
del Estado y asumido la planificación como su res-
ponsabilidad fundamental, promoviendo los valores
nacionales, manteniendo una política internacional
de corte latinoamericano, reivindicando nuestra sobe-
ranía. Impulsó la obra pública y dio muestras de com-
bate a la corrupción.
Al mismo tiempo, cuestionaba que no se habían
realizado transformaciones socioeconómicas como la
Reforma Agraria, criticaba la falta de apoyo guber-
namental para que se profundice y acelere la investi-
gación sobre la muerte de la compañera Guadalupe
Larriva y concluía señalando que siendo el balance
de la acción del gobierno positiva, el PS-FA declaraba
su respaldo en forma activa y crítica, insistiendo que
debe impulsarse los aspectos progresistas y renovado-
res del gobierno.
A esa fecha se reconoció que no existía una rela-
ción orgánica entre el Partido Socialista y el gobierno
y mucho menos con Alianza País. Se señalaba que el
gobierno había mantenido una práctica de entrega de
cargos burocráticos a miembros del partido a título
personal, sin contar con la opinión del partido.
58 Renovación Socialista

Al interior del partido se generaron dos corrientes


políticas que se confrontaron entre sí; la denominada
“Socialista Unitaria”, encabezada por el ex comunista
Rafael Quintero y el ex social cristiano Fabián Solano,
que apoyaba de manera incondicional al gobierno de
Correa, a cambio de cargos burocráticos, justificando
su posición con los siguientes argumentos: Que “se ha
popularizado el socialismo gracias al gobierno de Co-
rrea”; que el gobierno se caracterizaba por ser “pro-
gresista”, que era “un gobierno en disputa en el con-
texto de un Estado y sociedad capitalista”; que estaba
vigente un “Acuerdo Programático”; que “los sectores
productivos-burgueses son susceptibles de alianzas en
contra del capital financiero”; que habíamos decidido
“apoyar la reelección del gobierno de Correa apostan-
do a una reforma dentro del sistema”.
Por otro lado, estaba la “Corriente Socialista Revo-
lucionaria”, que exigía al gobierno intensificar el com-
bate al neoliberalismo, adoptar medidas para alterar
la estructura del poder real, evitando que el régimen
se concentrara únicamente a administrar la crisis que
heredó, atención a los intereses de los trabajadores, de
los campesinos, de los indígenas, del pueblo afro ecua-
toriano, de las mujeres, de los pequeños comerciantes
y emprendedores, de los profesionales, del magisterio;
que ejecutara acciones encaminadas a modificar el
orden establecido que favorece a las clases dominan-
tes; vigencia de una democracia radical, la vez que
rechazaba la criminalización de la protesta social; la
violación de los derechos humanos, la corrupción y la
impunidad de funcionarios del gobierno, el autorita-
rismo, las reformas a la Constitución y a la ley que
afectan los derechos de los sectores populares, el sa-
queo de los recursos económicos del IESS; la división
Experiencias y perspectivas de la Renovación Socialista 59

del sindicalismo y los movimientos sociales, la elitiza-


ción autoritaria de la educación superior.
Estas dos corrientes disputaron la dirección del
partido en el Congreso del PS-FA realizado en Porto-
viejo el mes de Septiembre de 2010, en el que triunfó
la candidatura de Rafael Quintero, apoyado por de-
legados al congreso que eran funcionarios públicos y
que nunca fueron afiliados y menos militantes del par-
tido. La candidatura del compañero Gustavo Vallejo,
quien contaba con el respaldo de militantes activos,
consecuentes y leales a los principios del socialismo,
fue derrotada en un proceso viciado por la nulidad y
la corrupción. Quintero y su grupo falsificaron las ac-
tas del congreso y de manera ilegal sustituyeron a las
directivas provinciales de Esmeraldas, Pichincha, Tun-
gurahua, Guayas, Orellana, Azuay y Morona y des-
tituyeron del Comité Ejecutivo al compañero Javier
Sánchez y a la compañera Ruth Gallegos. Los compa-
ñeros Gustavo Vallejo y Narcisa Gordillo impugnaron
la directiva encabezada por Rafael Quintero, impug-
nación que, como era de esperarse, fue desechada. Al
contrario, la directiva de Quintero fue inscrita por el
Consejo Nacional Electoral, presidido por Omar Sim-
mons, quien posteriormente fue Secretario de la Presi-
dencia de la República.
A partir de la toma de la dirección política del par-
tido por parte de Quintero y sus adláteres la confron-
tación entre las dos corrientes internas, la pro Correa
y la revolucionaria, se profundizó. En las elecciones
del 2013 para presidente de la república y asambleís-
tas, el sector dirigido por los correístas apoyó las can-
didaturas de Alianza País en contra de las candida-
turas del partido, como en el caso de la candidatura
al Parlamento Andino o las de varias provincias. La
60 Renovación Socialista

...sus esfuerzos por Corriente Socialista Revolucio-


el diálogo y la unidad naria, siguiendo la línea históri-
fueron rechazados
por los correistas ca y consecuente, participó con
apoderados de la Unidad Plurinacional de las
la dirección del Izquierdas.
Partido.
En el congreso realizado en
la ciudad de Guaranda los días 3, 4 y 5 de Mayo de
2013, pese a que quienes dirigían el Partido manipu-
laron la gran mayoría de las delegaciones, las bases
apoyaron mayoritariamente al Socialismo Revolucio-
nario. Frente a ello, grupos lumpen apoyados por la
Policía impidieron el acceso a los delegados al salón
del congreso, agrediendo en forma violenta a varios
delegados, entre ellos al compañero Enrique Ayala
Mora y al presidente de la CEOSL, compañero Pa-
blo Serrano. La confrontación trajo como consecuen-
cia la realización de dos congresos, uno dirigido por
la corriente socialista revolucionaria en el salón de la
Universidad de Bolívar a donde fue convocado y otro
por la fracción dirigida por Rafael Quintero y Fabián
Solano realizado en la Junta Electoral, bajo control
policial, en el que se designó una directiva espuria en-
cabezada por Fabián Solano. Esta Directiva fue im-
pugnada por militantes del Partido, pero al igual que
en el congreso anterior fue desechada de manera in-
fundada por el Consejo Electoral.
Luego de estos hechos el Socialismo Revoluciona-
rio continuó asumiendo su responsabilidad de defen-
der los intereses de los trabajadores, los indígenas, los
campesinos, los estudiantes, los maestros, mujeres, jó-
venes, en general los más amplios sectores populares.
Todos sus esfuerzos por el diálogo y la unidad fueron
rechazados por los correistas apoderados de la direc-
ción del partido. Fabían Solano, Rafael Quintero, Pa-
Experiencias y perspectivas de la Renovación Socialista 61

tricio Zambrano, Pedro de la Cruz y el resto de co-


rreístas pusieron el partido al servicio de Correa y sus
intereses personales, obtuvieron cargos y canongías,
sin respeto ninguno de los principios y de la militancia.
La militancia socialista revolucionaria, reunida
en Quito en abril de 2014, una vez que todo esfuer-
zo por dialogar a base de principios con los correístas
que manejan el partido y las listas 17 fue rechazado,
emitieron un manifiesto en que ponían distancias con
quienes habían vendido las tesis y la lucha socialista.
Dice ese manifiesto:

Ante la situación mundial y del Ecuador, el avance del


poder capitalista globalizado, el retroceso del impulso
progresista y la democracia, el incremento del autoritaris-
mo caudillista y la continuidad de algunas medidas neoli-
berales, el incumplimiento de las aspiraciones y promesas
de genuino cambio, la criminalización de la organización
y la protesta social, la depredación de la naturaleza y los
recursos nacionales, la falta de participación popular, la
inseguridad pública y la corrupción; hemos optado por
una alternativa de democracia radical y consecuencia
con nuestro pueblo. Frente a quienes han comprometido
el nombre y las luchas del Partido Socialista con el caudi-
llismo autoritario por acomodos personales y arreglos de
trastienda, y han llevado a nuestra organización al des-
prestigio y el deterioro, convirtiéndola en una maquinaria
electoralista, vagón de cola del correísmo, distanciada de
las organizaciones sociales y las bases populares; hemos
resuelto rescatar la vocación revolucionaria y patriótica
del socialismo ecuatoriano.
Frente a esto “los militantes socialistas reunidos el 26 de
abril de 2004 nos hemos agrupado bajo la bandera del
SocialiSmo RevolucionaRio para avanzar en la lucha,
rescatar al Partido Socialista, buscar la unidad de las or-
ganizaciones populares y de izquierda, proponer un gran
62 Renovación Socialista

proyecto radical y patriótico de cambio del Ecuador, si-


guiendo nuestras mejores tradiciones, en la irrenunciable
búsqueda de un porvenir de justicia y libertad.
La posición política y la acción del Socialismo Re-
volucionario se evidencia en las movilizaciones realiza-
das conjuntamente con los movimientos sociales con-
tra las medidas adoptadas por el gobierno que afectan
los intereses de los trabajadores, los indígenas, los
campesinos, los ecologistas, los maestros, los estudian-
tes, los jubilados, los profesionales, en general de los
sectores populares; en la propuesta de convocatoria a
una Asamblea Constituyente que cada día va cobran-
do más fuerza; en el combate a la corrupción, en cuyo
objetivo incluso se constituyó, por iniciativa del FUT,
la Comisión Cívica Anticorrupción, que ha cumplido
una extraordinaria labor, pese al hostigamiento de que
han sido víctimas sus integrantes, entre ellos nuestro
apreciado compañero Germán Rodas, perseguido por
el régimen correista empeñado en encubrir los actos
de corrupción.
El Socialismo Revolucionario tuvo un papel deci-
sivo en la constitución del “Acuerdo Nacional por el
Cambio”, en la elaboración de las bases programáti-
cas y en su organización en todo el país. La iniciativa
que tenía excelentes posibilidades de éxito, si no hu-
biesen prevalecido los intereses particulares de parti-
dos que tienen número legalizado y si el candidato a
la Presidencia de la República hubiera desachado las
presiones e imposiciones de la dirección política de la
Izquierda Democrática, organización política que por
su actitud generó la sospecha de tener un acuerdo con
el régimen correista.
Con la activa participación en el proceso electoral
de destacados militantes del Socialismo Revoluciona-
Experiencias y perspectivas de la Renovación Socialista 63

rio, a pesar del marginamiento, ...en el combate a


se pudo avanzar en las tesis de la corrupción, en
rechazo al autoritarismo; la de- cuyo objetivo incluso
se constituyó, por
nuncia permanente por la viola- iniciativa del FUT,
ción del régimen a los Derechos la Comisión Cívica
Humanos; la defensa de la auto- Anticorrupción, que
nomía universitaria, entre otras ha cumplido una
extraordinaria labor.
acciones que son de pleno cono-
cimiento de la militancia y de la sociedad.
La alianza del Socialismo Revolucionario con otras
fuerzas de izquierda, de centro izquierda y de centro
para las elecciones pasadas, tuvo graves dificultades en
la designación de los candidatos para la Asamblea Na-
cional, en tanto no se logró constituir listas unitarias
a nivel nacional y provincial; no se aceptó por parte
del candidato a la Presidencia, articular una campaña
electoral que incorporara a los movimientos sociales
que formaban parte del Acuerdo y que insertara en
el pueblo las bases programáticas, y confrontara al
régimen correista, especialmente sobre los actos de
corrupción, se impuso la candidatura a la Vicepresi-
dencia de una persona totalmente desconocida vincu-
lada a Centro Democrático, partido político aliado al
gobierno y a la Izquierda Democrática, sin consulta
al ANC.
En las elecciones, el gobierno y Alianza País utili-
zaron a fondo los recursos del Estado, la manipulación
del electorado, las redes clientelares y los medios de
comunicación manejados desde el poder, para promo-
ver sus candidaturas. Además de todo esto, manipula-
ron el sistema electoral en forma fraudulenta y logra-
ron el primer puesto en la primera vuelta y mayoría en
la Asamblea Nacional.
64 Renovación Socialista

La derrota electoral que sufrimos con el ANC en


la primera vuelta, nos llevó a debatir el apoyo o no al
candidato de la derecha, con el propósito de derrotar
al correismo, sin que se llegara a una postura defini-
da. Algunos sectores de la militancia lo hicieron, otros
no. En todo caso, por escaso margen, en un discutido
proceso, truinfaron Lenin Moreno y Jorge Glas, de
Alianza País.
No bien se inauguró el nuevo régimen, se llevó
adelante una convención nacional en la que la mi-
litancia socialista revolucionaria resolvió constituir
definitivamente el movimiento nacional Renovación
SocialiSta.

El gobierno de Lenin Moreno


En el acto de posesión realizado el día 24 de mayo
del presente año 2017, el nuevo presidente Lenin Mo-
reno destacó que abriría un proceso de diálogo con to-
dos los sectores, que combatirá la corrupción, manten-
drá la dolarización y realizará reformas económicas y
fiscales. Efectivamente, desde los primeros días, cam-
bió el estilo de gobierno, eliminando las agresiones y
manteniendo diálogos con algunos sectores del país.
Eso y sus declaraciones de combate a la corrupción
le han enfrentado a Rafael Correa y al correísmo. La
ruptura se ha ido ahondando, sobre todo porque cada
vez más han aparecido nuevas pruebas claras y direc-
tas de la implicación del vicepresidente Jorge Glas en
casos de corrupción. Se ha dado, pues, un conflicto
entre Correa y sus partidarios más cercanos con el
presidente Moreno y los sectores de Alianza País y
otras fuerzas políticas que le apoyan.
No cabe duda de que el cambio de estilo es im-
portante, pero no es suficiente. El país necesita mucho
Experiencias y perspectivas de la Renovación Socialista 65

más que gestos. En primer lugar, ...cada vez más han


el cumplimiento de las promesas aparecido nuevas
electorales sobre el respeto a la pruebas claras
y directas de la
democracia y la lucha contra la implicación del
corupción, que implica acciones vicepresidente Jorge
concretas que vayan más allá de Glas en casos de
las palabras. En segundo lugar, corrupción.
cambios fundamentales en la política económica que
reactiven la producción y no ponga el peso de la crisis
sobre los hombros de la mayoría popular. En tercer
lugar, el respeto a los derechos ciudadanos y a los dere-
chos de los trabajadores, los indígenas, los campesinos,
los maestros y otros sectores sociales.
El presidente Moreno ha escuchado propuestas y ha
tomado ciertas medidas, pero no ha extendido el diálo-
go a todos los sectores del país. No ha convocado a los
trabajadores y otros sectores populares, ni ha atendido
sus demandas. Tampoco ha dialogado con sectores po-
líticos de izquierda. Se ha enfrentado a Correa, pero
no ha cuestionado las bases del correísmo. Tampoco
ha presentado todavía un plan de reforma económica
alternativo a la modernización autoritaria del capitalis-
mo que llevó adelante el régimen correísta. Si no hay
un giro radical en el manejo económico y social, se se-
guirá con el modelo que dijo ser del socialismo del siglo
XXI pero, como ya muchas veces se ha dejado en claro,
en realidad implantó el capitalismo del siglo XXI.
Por otra parte, aunque la ruptura de Moreno con
Correa es evidente, en su gobierno están presentes
muchos miembros de Alianza País que fueron actores
fundamentales del régimen correísta, de sus atropellos
e irregularidades. Por ello, para cumplir sus ofertas de
campaña y para que su gobierno tenga credibilidad, el
presidente debe deshacerse de los numerosos vínculos
66 Renovación Socialista

Ante este panorama, las que le atan al correísmo. Este


organizaciones sociales,hecho refuerza la idea de que
las tendencias patrióticas
comprometidas con hay que ir más allá de las pa-
labras y del estilo de gobier-
el interés nacional, los
partidos y movimientos no, para cambiar también el
políticos progresistas
carácter de un régimen y las
y de izquierda, deben
optar por una política de personas que lo han puesto
independencia frente al en marcha. El presidente ha
régimen.nombrado ministros, embaja-
dores o asesores a quienes son
responsables de la represión, del endeudamiento dolo-
so e irresponsable, de las políticas económicas depreda-
doras, de las reformas constitucionales tramposas, de
las acciones divisionstas de las organizaciones sociales,
de la eliminación de derechos ciudadanos y sociales.
Y esto pone dudas sobre la posibilidad de que pueda
cumplir las ofertas de campaña sobre reforma econó-
mica y lucha contra la corrupción.
Ante este panorama, las organizaciones sociales,
las tendencias patrióticas comprometidas con el inte-
rés nacional, los partidos y movimientos políticos pro-
gresistas y de izquierda, deben optar por una política
de independencia frente al régimen, que les permita
continuar la lucha por el cambio de las estructuras
económicas, sociales y jurídicas de la sociedad y el Es-
tado. Deben mantenerse vigilantes sobre la acción del
correísmo dentro del gobierno.
Esa es precisamente la postura que adoptó Re-
novación SocialiSta en su convención nacional de
mayo de 2017: Espectativa sobre los anuncios de aper-
tura y diálogo del presidente Moreno, optimismo por
la reacción popular de esperanza porque el autorita-
rismo sea revertido y porque se cumpla el compromiso
de lucha contra la corrupción.
Experiencias y perspectivas de la Renovación Socialista 67

Renovación Socialista
La Convención Nacional de la Renovación Socia-
liSta ratificó que el capitalismo ha fracasado en Amé-
rica Latina y en el mundo, que la alternativa socialista
está en plena vigencia, Por ello, desechando las desvia-
ciones y falsificaciones optó por una propuesta radical-
mente renovada que, sustentada en los principios y ob-
jetivos revolucionarios, proponga al país un programa
que enfrente y transforme la realidad nacional a corto,
mediano y largo plazo, consolidando un camino hacia
el futuro de libertad, democracia y justicia que nuestro
pueblo busca. Por ello, debe afianzar una posición anti-
capitalista y constituir una organización democrática y
amplia que incluya las fuerzas populares, de izquierda
y progresistas que garanticen las transformaciones ne-
cesarias, que cambie la correlación de fuerzas entre las
clases dominantes y dominadas, abriendo el paso a una
sociedad justa y liberada.
La convención analizó la posible reintegración de
la militancia del Socialismo Revolucionario al PSE ofi-
cial para recuperar la rica historia del socialismo en el
Ecuador y derrotar a los usurpadores de la estructura
jurídica del partido que han traicionado los postulados
socialistas y han hipotecado el partido al servicio del co-
rreísmo. Pero coincidió en que mientras los incondicio-
nales correístas, ahora al servicio de Jorge Glas, sigan
manejando la estructura del partido y las listas 17, no
será posible ni unidad ni auténtica consecuencia con los
principios. Por ello, resolvimos continuar la lucha del
SR en la Renovación SocialiSta, una fuerza política
alternativa que recoge la trayectoria de lucha iniciada
en 1926, que representa a la militancia coherente del
socialismo, pero rechaza hacerse cargo del desprestigio
y el peso de impopularidad que han conseguido los in-
68 Renovación Socialista

...optó por una condicionales del correísmo y


propuesta que, su manejo de las listas 17.
sustentada en los
principios y objetivos Renovación SocialiSta
revolucionarios,se propone dialogar en forma
proponga al país unabierta con otros movimientos
programa que enfrente
y transforme la realidad
políticos y sociales vinculados
nacional, consolidando a la izquierda y al progresismo,
un camino hacia elcon la clara propuesta agrupar
futuro de libertad,
una gran fuera política que ven-
democracia y justiciaza al caudillismo correísta que
para nuestro pueblo.
intentó arrebatar al pueblo sus
tesis y sus banderas, que derrote a la derecha y lo que
ella respresenta, para avanzar en la construcción de la
sociedad socialista, democrática y que parta de las rea-
lidades que vive América Latina y el mundo. Pese a sus
debilidades electorales, a las divisiones, a la presencia
de oportunistas, a posturas coyunturalistas, la experien-
cia del Acuerdo Nacional por el Cambio, ANC, fue un
avance muy significativo, sobre todo porque articuló a
los movimientos sociales con fuerzas políticas en un es-
pacio unitario que no debe perderse.
El socialismo es siempre revolucionario. Por eso es
permanente desafío de renovación de las estructuras
caducas, las de la sociedad y el estado, así como de las
suyas propias. Con gran sentido crítico avanzaremos en
el gran esfuerzo creativo de consolidar una gran fuer-
za que sea un instrumento de nuestro pueblo para su
liberación.
Convención Nacional de “Renovación Socialista”
Quito, mayo de 2017.
Anexos

Socialismo para el Ecuador


del siglo XXI
Manifiesto del
Partido Socialista-Frente Amplio
Mayo, 2003

Ecuador: unidad en la diversidad


Ecuador, nuestra patria, como toda América latina,
ha entrado en el siglo XXI en medio de una gran cri-
sis, que no solo ha sumido en la más angustiosa miseria
a nuestro pueblo, sino que ha desatado una sensación
colectiva de inestabilidad, de pesimismo, de ansiedad.
Al crónico desempleo, sostenida alza del costo de la
vida, migración forzosa, violencia e inseguridad se han
sumado una ausencia de vinculación al Ecuador y un
vacío profundo de identidad.
En medio de esta realidad, los socialistas levanta-
mos nuestra voz para decirle al país, como lo hicieron
los fundadores de nuestro partido en 1926, que conti-
nuamos hacia el futuro en la lucha por la liberación, la
igualdad, la justicia social; que convocamos a todos los
hombres y mujeres a rescatar la patria, a desarrollar
nuestras capacidades para conseguir la paz en el mun-
do, el cambio radical de nuestro país y de América
Latina.
Ecuador es un país de grandes diversidades. Indí-
genas, mestizos, negros y descendientes de migrantes
de varios continentes lo conforman. Las identidades
regionales y locales, que ahora se expresan en las de-
70 Renovación Socialista

mandas por descentralización y autonomía, están en


la médula de la nación. El laicismo y el respeto a las
diferentes creencias religiosas son parte de la lucha
por la libertad, fundamento de la democracia. La va-
loración de la diversidad de género y los aportes de
las mujeres son pilares del Ecuador. La convicción de
que somos parte de la naturaleza nos lleva a compro-
meternos con la lucha por la conservación del medio
ambiente, patrimonio insustituible de todos.
Las diversidades constituyentes del pueblo del
Ecuador son su riqueza. Pero no pueden considerar-
se en forma aislada ni en una realidad de inequidad
social. Solo un vigoroso cambio hacia la justicia so-
cial hará marchar nuestro país como una unidad en
la diversidad y nos garantizará el futuro. Por ello los
socialistas luchamos por un Ecuador unido, intercul-
tural, regionalmente integrado y respetuoso de las
conciencias.
Lucha social y democracia
Los socialistas ecuatorianos sabemos que el subde-
sarrollo y pobreza del país son producto de una larga
historia de dependencia, explotación y despojo. Por
ello valoramos las raíces de nuestra identidad: la or-
ganización comunitaria indígena y su resistencia a la
conquista y el coloniaje; la lucha de los patriotas por
la Independencia; las luchas de los esclavos negros por
su libertad, la acción de los revolucionarios alfaristas;
la organización popular y los enfrentamientos sociales
del siglo XX, el compromiso de generaciones de mili-
tantes de izquierda y de cristianos comprometidos con
la liberación de nuestro pueblo.
El Partido Socialista, que fue fundado en 1926, tie-
ne profundas raíces nacionales y completa indepen-
Socialismo para el Ecuador del siglo XXI 71

dencia internacional. Ha luchado por un cambio para


nuestra propia realidad que, como dijo un gran pen-
sador, no sea “calco ni copia, sino creación heroica.”
Como sus fundadores lo dijeron:

el socialismo viene con la tea revolucionaria al campo de


las ideas, a levantar la nueva sociedad, derrocando todas
las injusticias y sentando normas de vida más perfecta
dentro de una moral social más pura.
El socialismo ha participado en muchos combates
por la libertad, la igualdad, la justicia y la democracia
en nuestro país. Los organismos de control, la seguri-
dad social, la estabilidad de los trabajadores, el Códi-
go Laboral, la igualdad de la mujer, la extensión del
sufragio son, entre otras, conquistas logradas por la
lucha socialista. La promoción de la educación nacio-
nal, desde los niveles iniciales hasta las universidades,
la defensa del laicismo, el desarrollo de la cultura han
sido consignas fundamentales suyas. Muchos hombres
y mujeres socialistas, y de izquierda, han sido pilares
de la cultura nacional.
Podemos decir con toda verdad que no hay orga-
nización política que haya hecho más contribuciones
para la construcción de la patria que el socialismo.
La lucha no solo ha logrado conquistas económicas
y sociales, sino que ha contribuido poderosamente al
desarrollo de la democracia en Ecuador. Buena parte
de los derechos que ahora garantiza nuestro sistema
constitucional son fruto de la participación socialista.
Nuestro partido ha mantenido siempre presente
una consigna unitaria de todas las fuerzas populares y
de izquierda. A lo largo de su historia ha superado des-
entendimientos y divisiones. En 1995, confluyeron en
sus filas las dos corrientes constitutivas de la izquierda
72 Renovación Socialista

ecuatoriana cuando se fusionaron el PSE y el FADI


(PCE).
El país que queremos
El Partido Socialista-Frente Amplio no aspira a re-
presentar solo a una región, grupo étnico o religioso,
sino a todo el país. Quiere reunir a todos los ecuatoria-
nos y ecuatorianas en la lucha por un cambio radical
que consolide una nueva sociedad y un nuevo Estado,
libres de la explotación de las clases monopolistas y es-
peculadoras de dentro y del extranjero. Busca estable-
cer la soberanía del pueblo sobre la riqueza nacional,
el robustecimiento de la propiedad colectiva de áreas
estratégicas, garantiza y promueve la propiedad indi-
vidual y cooperativa, en un país de trabajadores, de
productores, de ciudadanos y ciudadanas que tienen
diversas formas de producción, de organización y de
trabajo, pero un solo objetivo nacional de unidad y
justicia.
El partido lucha contra el capitalismo dominante,
por el establecimiento de un nuevo régimen político
que exprese a la mayoría del pueblo, es decir a las cla-
ses sociales que ahora son oprimidas. Para ello impulsa
una verdadera democracia, que implica la organiza-
ción, movilización y participación de los ciudadanos y
ciudadanas, y la eliminación de las causas de la explo-
tación social, los monopolios y la inmoralidad instala-
dos en nuestra sociedad.
El Partido Socialista-Frente Amplio condena el
robo de nuestras riquezas nacionales, la corrupción en
el Estado y la sociedad. Declara, por ello, que pondrá
de moda la honradez, propugnará la reorganización
del Congreso estéril y dominado por los partidos polí-
ticos que ya han gobernado el país; de todo el sistema
Socialismo para el Ecuador del siglo XXI 73

judicial que mantiene la impunidad, de las dependen-


cias del Ejecutivo y los órganos de control que han
perpetuado el asalto a los bienes públicos.
En un mundo global, dominado por el capitalis-
mo, las desigualdades se profundizan y las injusticias
aumentan. El partido, por ello, combate la acción in-
ternacional unipolar del imperialismo y propugna una
comunidad internacional vigorosa y un nuevo orden
económico internacional, en que los pueblos pobres
del mundo sean liberados de las ataduras del comercio
injusto y la deuda externa. Promueve la integración
andina y latinoamericana, al mismo tiempo denuncia
y enfrenta el peligro mortal del predominio continen-
tal de Estados Unidos con la aplicación de las anuncia-
das condiciones del ALCA.
Las luchas socialistas han sido impulsadas por jó-
venes comprometidos con el cambio del Ecuador. Las
acciones futuras serán también alentadas y dirigidas
por jóvenes, de cuya voluntad de cambio, inclusive del
cambio de nuestro partido, el país espera mucho. El
partido ha recibido en su seno a las organizaciones
más representativas del pueblo ecuatoriano. Los cam-
pesinos, indígenas, trabajadores y empleados urbanos,
empresarios de todas las ramas, pobladores, maestros,
estudiantes, pequeños comerciantes, artistas, intelec-
tuales, deportistas, amas de casa, artesanos, están con-
vocados una vez más a participar de este gran esfuerzo
de cambio e identidad nacional.

El socialismo y el futuro
A lo largo de su historia el socialismo ecuatoriano
ha demostrado que no es un agrupamiento político
ocasional, dependiente de una coyuntura o del éxito
de un caudillo. Es una fuerza de la humanidad, alen-
74 Renovación Socialista

tada por valores como humanismo, solidaridad, igual-


dad y la justicia social entre las personas. Por ello, es
una corriente que no se extingue en las crisis, sino que
las asimila y supera mediante la reflexión y el ejercicio
de la renovación permanente.
Lealtad a los grandes principios y a las gentes que
representa. Apertura a la crítica y al diálogo. Capaci-
dad de replanteamiento de sus propuestas conforme
a las realidades en que se desenvuelve. Voluntad de
combatir la inequidad en la distribución de la riqueza,
la opresión y la miseria mediante la organización del
pueblo y el desarrollo de la democracia social y parti-
cipativa. Decisión para combatir los régimenes econó-
mico y político excluyentes y represivos del capitalis-
mo. Estos son los grandes ejes de la acción socialista.
Lejos de extinguirse, al inicio del siglo XXI, el so-
cialismo vuelve a ser un referente de la lucha por el
cambio social en el mundo y América Latina. Luis
Inacio Lula da Silva, líder del Partido de los Trabaja-
dores ha triunfado en Brasil, el Frente Amplio de Uru-
guay es la primera fuerza del país, con el dirigente del
Partido Socialista Tabaré Vásquez, el líder indígena
Evo Morales en Bolivia. En otros países el socialismo
participa en agrupamientos democráticos importan-
tes. Es una fuerza en marcha.
En Ecuador el socialismo tiene su perfil propio y no
puede ser sustituido por fuerzas que representan talo
cual sector. Una vez más tiene por delante el desafío
de ofrecer a los ecuatorianos y ecuatorianas una alter-
nativa renovada pero leal a los principios; coherente
con los postulados de cambio social y económico, pero
asentada en años de experiencia de lucha; defensora
de la unidad del país, pero expresión de sus diversi-
dades étnicas, regionales y de convicciones; profunda-
Socialismo para el Ecuador del siglo XXI 75

mente enraizado en la realidad ecuatoriana, pero so-


lidario con las luchas de los pueblos latinoamericanos
y del mundo.
Los socialistas ecuatorianos nos comprometemos a
defender los recursos nacionales, promover una eco-
nomía asentada sobre los trabajadores y productores
y no controlada por intermediarios y especuladores, a
buscar una salida democrática a la dolarización, a de-
fender la soberanía nacional enfrentado a los organis-
mos financieros internacionales y recobrando el con-
trol de nuestro territorio ecuatoriano, ahora ocupado
por fuerzas norteamericanas.

Nuestra convocatoria
Sabemos que todas estas grandes tareas solo pue-
den ser cumplidas por una fuerza política vigorosa y
amplia, que reúna a todas las fuerzas vivas de nues-
tra sociedad. Por ello haremos los esfuerzos para que
nuestro partido se abra a todas las expresiones de la
organización popular y todas las corrientes políticas
progresistas. Convocamos, por ello, a las organizacio-
nes laborales, sociales, poblacionales, empresariales y
gremiales de todas las regiones, a todos los ciudadanos
y ciudadanas que quieren el cambio social profundo
del país, a participar activamente en la nueva reconsti-
tución del socialismo.
Ofrecemos al país la larga experiencia de organi-
zación y lucha de nuestro partido, su estructura y acu-
mulado teórico. Ofrecemos también la participación
de la actual militancia, sin actitudes de imposición
o hegemonía. Esperamos que se sumen a las ensan-
chadas filas del socialismo las organizaciones sociales,
ciudadanas y patrióticas, los agrupamientos políticos
regionales y locales que busquen una forma orgánica
76 Renovación Socialista

de participación y lucha. Todos juntos, con sentido de


igualdad y equidad, formularemos nuestro proyecto
estratégico, nuestros planes de acción, nuestras nor-
mas de funcionamiento. Esperamos también con espí-
ritu unitario que podamos elegir un equipo de direc-
ción representativo.
Para enfrentar el futuro con un proyecto patriótico
y progresista, esperamos que se organicen las fuerzas
de la ciudadanía. Llamamos al Movimiento Pachaku-
tik, al MPD y a las demás fuerzas de izquierda, así
como a las organizaciones populares, a constituir un
espacio político unitario que permita el avance de la
transformación del país.
Invitamos a todos los ecuatorianos y ecuatorianas
a mirar hacia adelante y avanzar con el Partido Socia-
lista-Frente Amplio y su misión revolucionaria de em-
pujar el nacimiento de un nuevo Ecuador y un nuevo
mundo. Vamos a rescatar nuestra Patria. El socialismo
es una fuerza vital. Todos estamos invitados a partici-
par de ella.
Quito, en el septuagésimo séptimo aniversario
del Partido Socialista,
23 de mayo de 2003
Comité Ejecutivo Nacional
del Partido Socialista-Frente Amplio
Capitalismo
del siglo XXI
Enrique Ayala Mora

El gobierno actual ha dividido al país. Sus incondi-


cionales dicen que es el mejor que hemos tenido. Pon-
deran la bondad de las carreteras, de los bonos, de la
estabilidad económica. Piensan que el presidente de-
bería quedarse hasta concluir la “revolución”. Otros
sostienen que el correismo es una dictadura, que per-
sigue a las organizaciones sociales y a la prensa, que
promueve la corrupción y se parece cada vez más a la
“partidocracia”.
Para aclarar las cosas, se piensa que habría que ha-
cer una lista de lo positivo y lo negativo del gobierno.
Pero eso es imposible. ¿Cómo se pone en lista los pro-
yectos hidroeléctricos y la reparación de una escuela
rural? ¿Cómo se incluyen el “Caso Yasuní” y los in-
sultos del “compañero presidente”? ¿Cómo se com-
para el magnífico edificio del colegio María Angélica
Idrobo, con la sentencia de ocho años a una profesora
acusada de llevar a los alumnos a una manifestación?
¿Qué hecho es más importante? ¿El uno justifica al
otro? ¿La obra se mide por las construcciones, o por la
vigencia de derechos y principios?
Intentar un “balance” de lo bueno y lo malo del
gobierno no funciona. No permite conocer su natura-
leza, su objetivo central. Por ello, debemos averiguar:
78 Renovación Socialista

¿Estamos caminando por una “revolución” al “socia-


lismo del siglo XXI”?
Para responder, recordemos que Correa no triunfó
por casualidad o coincidencia. Fue beneficiario de un
acumulado de años de lucha de la izquierda y las orga-
nizaciones sociales contra el neoliberalismo. Aunque
no lo reconozca, para su triunfo fue vital haber dado
continuidad a posturas de izquierda anti capitalistas y
anti imperialistas, y el apoyo socialista. Fue un triunfo
colectivo.
Desde 2008, Correa tuvo dos alternativas: o pro-
fundizar las transformaciones y acercarse al ideal
socialista, o consolidarse como administrador de un
estado cuya estructura y la de la sociedad no van a
cambiar. En el tercer período las definiciones son cla-
ras. No hay cambios estructurales. Se ha optado por
modernizar al capitalismo. Y para ello, uno de los re-
cursos es criminalizar la protesta social, debilitar las
organizaciones sindicales y populares, tratando de
ahogarlas en un mar clientelista.
El gobierno tiene un proyecto de modernización
para apuntalar el sistema. No para cambiarlo. Pero lo
grave es que las hace criminalizando la protesta so-
cial y combatiendo a las organizaciones. Así no vamos
al socialismo. Por lo que hace, vemos que el régimen
trata de remendar el sistema, no de cambiarlo. El go-
bierno del “socialismo del siglo XIX”, está dedicado a
fortalecer el capitalismo del siglo XXI.
Por ello este primero de mayo, la “Marcha Nacio-
nal Unitaria del Pueblo” rechaza el autoritarismo, la
corrupción, los insultos, el saqueo del IESS y el intento
correista de confiscar el día del trabajo con su clientela
caudillista.
Lucha contra
LA CORRUPCIÓN
Germán Rodas Chaves1

El Ecuador vivió en la última década una era próspera


en los precios de la venta del petróleo, lo cual le posibilitó
al régimen acumular enormes ingresos como nunca antes
había ocurrido en la historia de la república. Tales entra-
das monetarias fueron las que permitieron el desarrollo
de una importante obra de infraestructura que, a su vez,
propició los sobreprecios para llenar el bolsillo de unos
cuantos adictos al dinero.
En efecto, el triunfo del “correismo”, en medio de esló-
ganes y ofertas, trajo aparejado una estructura –cada vez
más perfeccionada durante este mismo periodo político–
que impidió tomar cuentas o fiscalizar al poder. Este obs-
táculo, adicionalmente, se acrecentó, debido al hiperpre-
sidencialismo establecido como tal no solo a causa de la
aberración constitucional que consiente tal circunstancia,
sino como efecto, además, de un comportamiento cuasi
dictatorial asumido por el ex Presidente Correa quien so-
juzgó a las otras funciones del Estado e impuso su criterio
–y el de su circulo– para gobernar al país.
Para que la fiesta deviniera en farra completa y de esta
forma se pudieran cumplir toda clase de tropelías e ilícitos,
los chicos de la “revolución ciudadana” –que prontamen-
te dejaron de llamarse socialistas y se difuminaron en me-

1. Miembro de la Comisión Nacional Anticorrupción desde la integra-


ción de la misma en mayo del 2015.
80 Renovación Socialista

dio de enajenamientos ideológicas para dar rienda suelta a


lo que debe conocerse como el capitalismo del siglo XXl–
construyeron un andamiaje carente de todo control y de
cualquier elemental fiscalización.
En efecto, y a manera de ejemplo, el mamotreto insti-
tucional denominado Consejo de Participación Ciudada-
na –respecto del cual pretendieron decirnos que se trata
del único espacio que expresa auténticamente el poder
de los ciudadanos, cuando todos sabemos que todo poder
emerge del pueblo y que no se instituye artificiosamente
tras los escritorios y con la inmoderación de los esbirros–
recibió como uno de sus encargos burocráticos –adicio-
nalmente a la tarea de reproducir al Estado y a sus inte-
reses– las labores de fiscalización, sin que esta actividad
fuera cumplida en lo más mínimo –hasta para cubrir las
formas– por parte de esta malhadada institución.
Ni que decir sobre la ausencia de control sobre las
entidades públicas, asunto que ocurrió debido a que el
Contralor General del Estado, Carlos Pólit, fue ubicado
en dicha función por los miembros del consejo de partici-
pación ciudadana precisamente para que oculte los ilícitos
y –ahora lo sabemos– para que su silencio cómplice, res-
pecto de los despojos al Ecuador, le permitiera chantajear
a los que han tomado el atajo de la corrupción como for-
ma de vida.
Lo propio, el mutismo cómplice del que vengo hablan-
do respecto de los organismos de control, fue evidente con
la Fiscalía General del Estado que en el periodo del “co-
rreato” no se inmutó frente a las denuncias de podredum-
bre ética y moral; análogamente también aconteció con el
comportamiento de la denominada comisión de fiscaliza-
ción de la Asamblea Nacional, asaltada por los corifeos de
la autoridad, para propiciar el mutis encubridor y la nin-
guna fiscalización y, por el contrario, dispuesta a archivar
toda denuncia o pedido de fiscalización.
Lucha contra la corrupción 81

Ante la realidad descrita, diversos sectores de la


sociedad civil –las Centrales Sindicales CEOSL, CE-
DOC-CUT, CTE, UGTE, la Unión Nacional de Educa-
dores, la FEUE, la CONNAIE, entre otras agrupaciones
sociales aglutinados en el Colectivo Nacional Unitario de
Organizaciones Sociales– en mayo del 2015 instituyeron
la Comisión Nacional Anticorrupción, solicitando para su
funcionamiento el concurso –obviamente sin remunera-
ción alguna– de ciudadanos de limpia trayectoria.
Fueron entonces designados como miembros de la
CNA María Arboleda, Byron Celi, Simón Espinosa, Isa-
bel Robalino, Germán Rodas, Ramiro Román, Jorge Ro-
dríguez, David Rosero,1 Julio César Trujillo y Fernando
Vega.
Posteriormente, conforme fue el mandato de quienes
designaron esta Comisión, y de acuerdo al reglamento in-
terno de la misma, fueron incorporados a la CNA –por
decisión unánime del Plenario de la CNA– en calidad de
Miembros Principales, Alberto Molina, Marcelo Merlo
y Francisco Muñoz. De otro lado la Comisionada Isabel
Robalino, designó como su suplente a Ximena Moreno,
mientras Fernando Vega hizo lo propio en la persona de
Darwin Saraquive. Jorge Rodríguez nombró como su al-
terna a Verónica Acosta.
La CNAC inició su trabajo de manera sostenida y
constante y a finales del año 2015 efectuó su primera de-
nuncia mediante el llamado caso Manduriacu, es decir
en relación a las irregularidades perpetradas en la cons-
trucción de la hidroeléctrica del mismo nombre ubicada
en la provincia de Pichincha y que fuera construida por
Odebrecht –fue la obra con la cual regresó al país dicha
empresa brasileña luego de los actos histriónicos de su

2. Por razones de participación político-electoral este miembro de la


CNA se excusó de pertenecer a la misma, luego de unas semanas de
trabajo en dicha Comisión.
82 Renovación Socialista

expulsión– en cuya labor la empresa brasileña, gracias


a los contratos complementarios, sobrepreció la obra en
un 82% en el marco de una serie de otras irregularidades
contractuales que dejaron, desde entonces, al descubierto
el entramado de Odebrecht y de Kaminosca, que también
han sido evidenciados por la CNA.
Algunas de las denuncias, en vez de ser investigadas
por la fiscalía, fueron rápidamente archivadas por esta
dependencia, mientras los miembros de la CNA fuimos
perseguidos con juicos y pedidos de indemnizaciones que
bordearon, para el conjunto de la CNA, una cifra de al-
rededor de cincuenta millones de dólares. Una historia de
los pájaros contra las escopetas y la constatación, al mismo
tiempo, de un sistema de justicia y de control que por estar
sujeta a los intereses del “correismo” fue utilizada para
acosar a la CNA.
La corrupción que estamos empeñados en combatir –más
allá de otros propósitos para reinstitucionalizar el país luego
del correismo– se configuró en el Ecuador a partir de un es-
quema que se ha repetido, también, en otros países: se obtie-
ne el préstamo de un gobierno y el país prestamista condi-
ciona la obra pública obligando a que el país subordinado
al préstamo contrate a una empresa del estado oferente del
crédito; todo ello en medio de concursos amañados a los
cuales se presentan determinadas empresas que para ser
beneficiadas con la obra pública cohechan a las principales
autoridades estatales.
Este proceso perverso ocurrió en el Ecuador. En más
de una oportunidad Odebrecht, cuando se trató de pres-
tamos provenientes del Brasil, logró la adjudicación de
la obra, pues se presentó como la empresa de aparentes
mejores ofertas económicas; posteriormente, mediante los
sobreprecios y contratos complementarios, incrementó los
costos de la ejecución de la obra. Del sobreprecio, segura-
mente, obtuvo los montos necesarios para resarcirse de las
coimas y para optimar las ganancias.
Lucha contra la corrupción 83

Adicionalmente a todo ello, a manera de la cereza so-


bre el pastel, es imprescindible recordar las declaraciones
del Presidente Correa quien señaló “que las coimas no
causan perjuicio económico al Estado”.
En este contexto aparecieron las presunciones de todo
tipo de tropelías vinculadas con el Vicepresidente de la
República, debido a lo cual la CNA demandó del Presi-
dente Constitucional del Ecuador, Lenin Moreno, que
retirara las funciones a Jorge Glass, mientras se aclaraban
las cosas en el país en materia de corrupción en las esferas
del gobierno y respecto de la última década de gobiernos
de Alianza País.
Ante la realidad, brevemente descrita, es imposterga-
ble actuar con energía y valentía en la línea de la denuncia
y, al propio tiempo, es imprescindible convocar al Ecua-
dor que para que la elección de autoridades nacionales
y locales tenga un nuevo matiz: escoger a quienes estén
dispuestos a frenar el asalto al país.
Todo lo anterior deberá sumarse al diseño y puesta
en marcha de un nuevo modelo institucional que permita
estructurar adecuadamente las instancias de control que
hoy responden a los intereses del poder; desde luego se
deberá reorganizar el poder jurisdiccional que se ha cons-
tituido en un instrumento de persecución política y de de-
fensa del modelo que favorece la corruptela.
El rol de la CNA en el contexto de los señalamientos
hechos, es la misma actuación que deberán tener el resto
de los ecuatorianos a propósito de impedir que la Patria
siga siendo sometida al silencio que ha permitido que la
ética y la moral fuesen suplantados por el latrocinio insti-
tucionalizado. Su tarea es imprescindible. Lo es, además,
en el afán de incidir en la recuperación de valores para
forjar una cultura que privilegie el bien común y la decen-
cia pública.
CRONOLOGÍA
Partido Socialista Ecuatoriano

1920 Las ideas socialistas comienzan a difundirse en el


Ecuador.
1922 Varios socialistas lideran la huelga general que culmi-
na en la masacre de Guayaquil, el 15 de noviembre
de 1922.
1924 Fundación del grupo “La Antorcha” y de otras orga-
nizaciones de tendencia socialista en varias ciudades.
1926 Mayo 23-26: Asamblea Nacional de fundación del
Partido Socialista Ecuatoriano en Quito.
Se organiza la dirección nacional y se comienza a or-
ganizar los consejos provinciales del partido.
1929-1931 Se agudizan las diferencias y pugnas internas en-
tre sectores del partido, finalmente uno de estos cons-
tituye el Partido Comunista Ecuatoriano.
En las elecciones de octubre de 1931, un sector del
socialismo apoyó la candidatura de Modesto Larrea
y, otro sector, la del Idelfonso Mendoza.
1932 Participación socialista limitada en el gabinete de Al-
berto Guerrero Martínez, Encargado del Poder.
1933 Reconstitución del Partido Socialista Ecuatoriano.
Se amplía trabajo de organización obrera y popular.
Candidatura presidencial del socialista Carlos Zam-
brano Orejuela, con resultados muy notables.
Comienza a publicarse el periódico socialista La Tie-
rra.
1934-1935 Oposición socialista al primer velasquismo.
1936 Inicial apoyo socialista al régimen de Federico Páez;
posterior persecución por parte de dicho gobierno.
1937-1938 Participación socialista en el gobierno del general
Alberto Enríquez Gallo, que realiza varias reformas
de carácter social.
Cronología del Partido Socialista Ecuatoriano 85

1938 El Socialismo obtiene una significativa representa-


ción parlamentaria en la Asamblea Constituyente,
que luego es disuelta por el presidente Mosquera
Narváez.
1940 Se inicia la oposición al gobierno de Arroyo del Río
y el partido promueve la unidad nacional ante la in-
vasión peruana de 1941.
1942-1944 El Partido Socialista se integra a Alianza Demo-
crática Ecuatoriana (ADE), que lidera la oposición al
gobierno de Arroyo del Río.
1944 El 28 de mayo un movimiento de masas liderado por
ADE lleva al poder a Velasco Ibarra. El Partido So-
cialista es un protagonista de los hechos.
Militantes socialistas participan activamente en la
fundación de la CTE, la Casa de la Cultura Ecuati-
riana y la FEUE.
Reaparece el diario socialista La Tierra.
1944-1945 Significativa representación parlamentaria del
socialismo.
Manuel Agustín Aguirre, dirigente socialista llega a
ser vicepresidente y luego presidente de la Constitu-
yente.
1946-1947 Oposición socialista a la dictadura de Velasco
Ibarra, persecución por parte del régimen, que or-
dena la destrucción de los talleres del periódico La
Tierra. Varios dirigentes tienen que exiliarse.
1948 El Partido Socialista, en alianza con el sector oficial
del Partido Liberal, postulan la candidatura presiden-
cial del general Alberto Enríquez Gallo en binomio
con el socialista Carlos Cueva Tamariz. Triunfa en las
elecciones Galo Plaza.
1948-1952 Inicial oposición al gobierno de Plaza y posterior
colaboración del Partido Socialista.
1952 Apoyo socialista a la candidatura presidencial de Mo-
desto Larrea Jijón.
1955-1956 Oposición al régimen velasquista. La bancada
parlamentaria socialista tiene un papel muy destaca-
do en las interpelaciones a los ministros del régimen.
86 Renovación Socialista

1956 El Partido Socialista se integra al “Frente Democrá-


tico Nacional”, alianza político-electoral integrada
además por el Partido Liberal y varias organizaciones
de izquierda. El frente postula la candidatura presi-
dencial del liberal Raul Clemente Huerta.
1958 Discrepancias internas dentro del PSE por su política
de alianzas con el liberalismo.
1960 Desacuerdos en la política de alianzas agudiza divi-
siones internas. Un sector del partido apoya al bino-
mio Parra-Carrión, que es respaldado también por el
Partido Comunista y por Concentración de Fuerzas
Populares; otro sector apoya la candidatura de Galo
Plaza.
Oposición al Cuarto Velasquismo.
1961 Algunos socialistas integran el “Gabinete de Concen-
tración Nacional” del gobierno de Carlos Julio Arose-
mena.
1963 Oposición socialista a la dictadura militar. Sin embar-
go, algunos militantes participan en este gobierno.
Constitución del Partido Socialista Revolucionario
del Ecuador (PSRE) que mantiene discrepancias con
el socialismo oficial.
El socialismo oficial queda bajo la dirección de Gon-
zalo Oleas Zambrano.
1966 Surge el “Socialismo Unificado” de un intento de
unidad.
El “socialismo unificado” gana varios curules en la
Asamblea Constituyente.
El socialista Julio Estupiñán Tello es electo vicepresi-
dente de la Constituyente.
1968 Apoyo del socialismo oficial a la candidatura presi-
dencial liberal de Andrés F. Córdova.
1968-1970 Todos los sectores socialistas se oponen a la dicta-
dura de Velasco.
1972-1976 Varios dirigentes del PSRE son perseguidos y en-
carcelados por la dictadura militar.
1975 El Partido Socialista se integra a la “Junta Cívica Na-
cional.”
Cronología del Partido Socialista Ecuatoriano 87

El PSRE y los sectores más radicales del socialismo


promueven y apoyan la formación y desarrollo del
Frente Unitario de los Trabajadores (FUT), que con-
voca a las primeras huelgas nacionales.
1976-1978 Los diversos sectores del socialimo se oponen al
Consejo Supremo de Gobierno y denuncian la masa-
cre de AZTRA.
1978 Se logra la reunificación de los sectores socialistas. Se
reinscribe el PSE en el registro de partidos. El Par-
tido Socialista Revolucionario Ecuatoriano (PSRE)
integra con el Partido Comunista y otros grupos de
izquierda el Frente Amplio de Izquierda (FADI), del
que se retira dos años después.
1980 Se borra del registro electoral al PSE. Se inician ges-
tiones para lograr su reinscripción legal.
1981-1985 El socialismo, en especial sus militantes que diri-
gen el movimiento obrero, participan activamente en
la resistencia a las medidas de ajuste recomendadas
por el FMI.
1982 El PSRE apoya las sucesivas huelgas nacionales que
el FUT resuelve frente a la implantación de las medi-
das de corte neoliberal.
1983 Se realizan varias reuniones socialistas tendientes a
buscar la unidad y robustecer el partido. Alberto Ca-
beza de Vaca es elegido secretario general.
Circula una nueva época de edición del periódico La
Tierra.
Reinscripción legal del PSE.
Constitución del “Frente Socialista” integrado por
Partido Socialista Ecuatoriano, al Partido Socialista
Revolucionario Ecuatoriano y al Partido Ecuatoriano
del Pueblo. El Frente confluye en el PSE.
1984 Candidatura presidencial del socialista Manuel Sal-
gado Tamayo.
Se elige un diputado socialista, Edelberto Bonilla
Oleas.
Continúa la reconstitución del partido.
88 Renovación Socialista

Oposición al gobierno del Frente de Reconstrucción


Nacional. El PSE forma parte del Bloque Parlamen-
tario Progresista.
El PSE participa en las conversaciones para estable-
cer una coordinación socialista en Latinomérica. Par-
ticipa en un seminario internacional en Lima.
1986 El PSE se pronuncia por el NO en la consulta popu-
lar convocada por el Presidente de la República.
Elección de seis legisladores socialistas. El PSE regis-
tra mayor crecimiento relativo desde las elecciones de
1984.
Ratificación de permanencia en el Bloque Parlamen-
tario Progresista.
El socialista Enrique Ayala Mora es electo vicepresi-
dente del Congreso Nacional.
Los socialistas apoyan la constitución de la Confe-
deración de Nacionalidades Indígenas del Ecuador
(CONAIE).
Los socialistas promueven y participan en el históri-
co congreso de la FENOC en Picalquí y mantienen
luego una relación de años con la organización, que
pasó a llamarse FENOCIN.
Delegados del PSE concurren a la Primera Confe-
rencia Política del Socialismo Latinoamericano, en
Montevideo.
Se crea la “Coordinación Socialista Latinoamerica-
na” (CSL), de la cual el PSE es fundador. Varios diri-
gentes socialistas ecuatorianos llegan a ejercer en los
años siguientes la presidencia y la secretaría ejecutiva
de la CSL.
1987 El Partido Socialista participa en diálogos para lograr
la unidad de partidos de izquierda.
Cuadragésimo Primer Congreso Nacional del par-
tido, en Ibarra; Víctor Granda es elegido secretario
general.
El militante del PSE Fernando Guerrero es elegido
vicepresidente del Congreso Nacional.
Cronología del Partido Socialista Ecuatoriano 89

Los socialistas promueven la formulación del proyec-


to de Ley de Nacionalidades Indígenas.
El 3 de septiembre el socialismo conforma con Ac-
ción Popular Revolucionaria Ecuatoriana (APRE) y
el Movimiento Liberación Nacional una alianza que
postula el binomio electoral Frank Vargas Pazzos-En-
rique Ayala Mora.
1988 El binomio Frank Vargas Pazzos-Enrique Ayala Mora
alcanza el cuarto lugar en las elecciones presidencia-
les del 31 de enero.
Elección de un diputado nacional y tres diputados
provinciales del PSE.
El PSE no apoya a ninguno de los binomios finalistas
en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales.
El socialismo declara independencia frente al gobier-
no de Borja.
1989 Cuadragésimo segundo Congreso Nacional (celebra-
do en Quito). Reelección de Víctor Granda como se-
cretario general.
El PSE declara oposición al gobierno de Borja.
1990 Elección de medio período. Electos 6 diputados pro-
vinciales y 1 en alianza con el FADI. El diputado na-
cional permanece. El bloque socialista con 8 diputa-
dos.
Se elige presidente del Congreso Nacional al diputa-
do socialista Edelberto Bonilla.
El bloque socialista, en coordinación con la dirgencia
del FUT, se opone a la mal llamada reforma laboral
de Borja.
1991 El diputado socialista Manuel Salgado es electo vice-
presidente del Congreso.
El partido se propone enfrentar la crisis internacional
del socialismo con una amplia labor autocrítica y de
propuesta.
1992 Congreso socialista en Guayaquil. Se elige secretario
general del PSE a Diego Delgado Jara.
León Roldos, candidato a presidente por el PSE.
Diego Delgado electo diputado nacional.
90 Renovación Socialista

1994 Congreso en Quito. Elección de Victor Granda como


presidente del partido. (Una reforma estatutario esta-
bleció que el máximo dirigente nacional ya no sería el
secretario general sino el presidente).
Se plantea la renovación de la izquierda y el socialis-
mo frente a la situación internacional.
1995 El Partido Socialista lleva adelante una campaña de
defensa del laicismo frente a la ley que estableció la
enseñanza de religión en la educación pública.
Fusión del Partido Socialista Ecuatoriano (PSE) con
el Frente Amplio de Izquieda (FADI)
El Congreso de Fusión, lo denomina Partido Socialis-
ta- Frente Amplio (PS-FA) y elige a Manuel Salgado y
Rafael Quintero, presidente y vicepresidente.
1997-1998 Participación en Asamblea Constituyente (3 di-
putados).
Ecuador y Quito son sede de la VI Conferencia Polí-
tica del Socialismo Latinoamericano, organizada por
la CSL.
1988 Congreso en Quito. Elección de Víctor Granda y
Amilcar Mantilla, presidente y vicepresidente del
Partido.
El PS-FA apoya la candidatura a la presidencia de la
república de Freddy Elhers.
Se elige un diputado socialista, León Roldós.
1989 El Partido y sus militantes en el dirigencia obrera y
campesina declara su oposición al ALCA y organizan
movilizaciones.
2000 Congreso en Quito: Amilcar Mantilla es electo presi-
dente del Partido.
El PS-FA, especialmente sus afiliados que dirigen el
movimiento obrero se enfrentan al gobierno de Jamil
Mahuad y participan en su caída.
Luego, el PSE se empeña en la acusación y en el
avance del juicio contra Mahuad, pero sucesivos go-
biernos lo bloquean.
2002 Apoyo candidatura de Leon Roldos-Dolores Padilla.
Elección de tres diputados socialistas.
Cronología del Partido Socialista Ecuatoriano 91

2002-2005 El PS-FA mantiene independencia política frente


al gobierno de Lucio Gutiérrez.
El partido denuncia el manejo corrupto de varias em-
presas como Odebrecht y Andrade Gutiérrez en la
contratación pública en el país.
2003 El partido emite el manifiesto: “Socialismo para el
Ecuador del siglo XXI”.
El partido denuncia la guerra sucia del gobierno de
Uribe en Colombia y se opone a la utlización de las
FF AA en el confilcto.
2004-2005 El bloque socialista se opone a la destitución de
la Corte Suprema de Justicia. Apoya la destitución de
Lucio Gutiérrez.
2004 El PSE pide sanción a los delitos de lesa humanidad
del gobierno de Febres Cordero, en carta al juez Bal-
tazar Garzón.
Congreso del Partido. Se elige presidenta a Guadalu-
pe Larriva.
2006 El partido apoya a la candidatura de Rafael Correa
para la presidencia, previo un acuerdo programático.
2007 Gana la elección presidencial el binomio Rafael Co-
rrea-Lenin Moreno.
La presidenta del Partido Guadalupe Larriva es nom-
brada Ministra de Defensa. El 24 de enero muere en
un accidente aviatorio nunca del todo aclarado.
Tres militantes socialistas son electos asambleístas
constituyentes.
2008 Congreso en Cuenca. Se elige presidenta del partido
a Silvia Salgado.
El partido no logra que el gobierno cumpla con el
compromiso programático de Correa, que no cuenta
con el PSE para su gobierno.
2010 El partido mantiene “apoyo crítico” al gobierno de
Rafael Correa. Pero se patentiza una descrepancia
interna entre un sector incondicional del correísmo y
la “Tendencia socialista revolucionaria” que demanda
que el gobierno cumpla su compromiso programático.
92 Renovación Socialista

En el Congreso de Portoviejo se impone la línea co-


rreísta. Rafael Quintero es elegido presidente. Se
mantiene la disputa sobre la relación con el gobierno.
2012 Congreso en Guaranda. El sector correísta dirigido
por Rafael Quintero, apoyado por piquetes de poli-
cía, impide la entrada de los delegados. Agreden a
Enrique Ayala y Pablo Serrano.
Los correístas abandonan el congreso del partido y en
otro lugar nombran presidente del partido a Fabián
Solano, quien es reconocido luego, en forma arbitra-
ria, por el Consejo Electoral.
Ante la situación crítica, en el congreso se nombra
una Comisión de Restructuración del Partido.
2013 Reelección de Rafael Correa en binomio con Jorge
Glas.
El partido no tiene participación significativa en el
gobierno, pero Quintero y luego Solano son nombra-
dos embajadores.
La Corriente Socialista Revolucionaria se organiza a
nivel nacional. Se nombra una coordinación encabe-
zada por Luis Andrango.
El Socialismo Revolucionario apoya el planteamiento
de las centrales sindicales que manifiestan que el régi-
men correísta anunció el “socialismo del siglo XXI”,
pero acomoda al país para el “capitalismo del siglo
XXI”.
2014 El Socialismo Revolucionario promueve la reconsti-
tución del movimiento social y apoya la reacción del
FUT contra la arremetida del correismo.
En las elecciones seccionales el Partido Socialista ob-
tiene un significativo número de alcaldes y concejales.
Pero la dirección encabezada por Solano no conso-
lida el partido y se somete totalmente al correismo,
aunque el partido no tiene ninguna presencia impor-
tante en el gobierno.
Se emite el “Manifiesto del Socialismo Revolucio-
nario”.
Cronología del Partido Socialista Ecuatoriano 93

2015-2017 El Socialismo Revolucionario y su militancia par-


ticipan activamente en las movilizaciones por los de-
rechos de los ciudadanos y de las trabajadores, contra
el el régimen correísta y promueve una activa campa-
ña anticorrupción.
2016 El sector gobiernista del PSE realiza Congreso en
Quito. Se nombra a Patricio Zambrano presidente
del Partido.
Para la elección presidencial, el sector correista que
controla la dirección del partido, apoya al binomio
Moreno-Glas.
El Socialismo Revolucionario se integra al “Acuerdo
por el cambio” que candidatiza a Paco Moncayo para
la presidencia de la república.
2017 Representantes de la militancia del socialismo revo-
lucionario de todo el país conforman “Renovación
Socialista”, que emite un manifiesto y designa coordi-
nadora nacional a Marcela Arellano.
Renovación Socialista se organiza a nivel nacional.

Quito, mayo, 2017


Ediciones La Tierra
ColeCCiones y últimos títulos publiCados
ColeCCión Pensamiento soCialista
Ediciones La Tierra ha publicado la Colección Pensamiento Socialista.
En sus páginas está, ciertamente, el pensamiento de Manuel Agustín
Aguirre, Ricardo Paredes, Luis Monsalve Pozo, Laura Almeida, Fernan-
do Chávez Reyes, Julio Estupiñán Tello, Patricio Ycaza, José Moncada
Sánchez, Leonardo Muñoz, Leopoldo Benites Vinueza, Plutarco Naranjo
Vargas, Benjamín Carrión, Telmo Hidalgo, Humberto García Ortiz, José
María Egas Ribas, Alfredo Albuja Galindo y Gonzalo Rubio Orbe, textos
todos estos que se han enriquecido con estudios introductorios de acadé-
micos e intelectuales comprometidos, también, con los procesos de cam-
bio en el Ecuador, todo lo cual ha permitido que pongamos en circulación
una visión estructurada para comprender la realidad nacional.
La Colección del Pensamiento Socialista se convierte, además, en un
aporte fundamental a la historia de las ideas en el Ecuador; los autores
convocados –así como los académicos que trabajaron los estudios intro-
ductorios– han contribuido, también, al conocimiento de la realidad na-
cional desde una perspectiva crítica-analítica y reflexiva.
Invitamos a los lectores a descubrir, con la lectura de estos textos, el Ecua-
dor que debe ser estructuralmente modificado; la certeza de que aquello
es posible nos lo demuestran los autores y pensadores que forman parte
de esta Colección.

1. Manuel Agustín Aguirre, Dos sistemas, dos mundos


Estudio y selección: Víctor Granda Aguilar
2. Ricardo Antonio Paredes, Oro y sangre en Portovelo: el imperialismo
en el Ecuador. Estudio: José Moncada Sánchez
3. Luis Monsalve Pozo, El indio, cuestiones de su vida y su pasión,
Tomo uno. Estudio: Carlos Marx Carrasco
4. Luis Monsalve Pozo, El indio, cuestiones de su vida y su pasión,
Tomo dos
5. Laura Almeida, Antología
Estudio y selección: Silvia Vega Ugalde
6. Fernando Chávez Reyes, El hombre ecuatoriano y su cultura
Estudio: Marcelo Villamarín Carrascal
7. Julio Estupiñán Tello, Antología
Estudio y selección: Rafael Quintero López
8. Patricio Ycaza, Historia del movimiento obrero ecuatoriano
Estudio: Milton Luna Tamayo
9. José Moncada Sánchez, Historia Económica, planificación y socialis-
mo. Estudio: Manuel Salgado Tamayo
10. Leonardo Muñoz, Testimonio de lucha
Estudio: Francisco Ávila Paredes
11. Leopoldo Benites Vinueza, Antología
Estudio: Carlos Calderón Chico
12. Plutarco Naranjo Vargas, Antología de su pensamiento
Selección y estudio introductorio: Germán Rodas Chaves
13. Benjamín Carrión, Cartas al Ecuador
Estudio introductorio: Stalin Alvear
14. Telmo Hidalgo, Reforma Agraria, ideología y política
Estudio: José Elías Cárdenas
15. Humberto García Ortiz, La forma nacional. Ensayo de una sociología
de la nación ecuatoriana, Tomo uno
Estudio: Enrique Ayala Mora
16. Humberto García Ortiz, La forma nacional. Ensayo de una sociología
de la nación ecuatoriana, Tomo dos
17. José María Egas Ribas, Escritos desde la política
Estudio: Santiago Ortiz Crespo.
18. Alfredo Albuja Galindo, El periodismo en la dialéctica política ecuato-
riana. Tomo uno. Estudio: Enrique Ayala Mora
19. Alfredo Albuja Galindo, El periodismo en la dialéctica política ecuato-
riana. Tomo dos
20. Gonzalo Rubio Orbe, Los indios ecuatorianos
Estudio: Galo Ramón Valarezo
ColeCCión José monCada
1. Desarrollo y subdesarrollo del capitalismo ecuatoriano.
Selección y estudio introductorio: Manuel Salgado Tamayo.
2. Integración y Globalización. Ecuador, la segunda mitad del siglo XX.
Selección: Manuel Salgado Tamayo. Estudio introductorio: Luis F.
Bilbao.
3. Ecuador, estructura productiva, descentralización y neoliberalismo.
Selección: Manuel Salgado Tamayo. Estudio introductorio: Lucas
Pacheco.
4. Reflexiones Universitarias.
Selección y estudio introductorio: Manuel Salgado Tamayo.
5. Problemas y perspectivas internacionales. Periodismo militante.
Selección: Manuel Salgado Tamayo.
Estudio introductorio: Cecilia Paredes de Moncada
ColeCCión manuel agustín aguirre
Editor y coordinador de la colección: Víctor Granda Aguilar
1. Historia del Pensamiento Económico
Libro primero: Sociedades precapitalistas. Sociedades capitalistas
Editor: Víctor Granda Aguilar
2. Historia del Pensamiento Económico
Libro segundo: Los clásicos y pseudoclásicos
3. Historia del Pensamiento Económico
Libro tercero: Crítica social y marxismo o socialismo científico
4. La realidad de Ecuador y américa Latina en el siglo XX
Estudio introductorio: Enrique Ayala Mora
5. La transformación económica y social del Ecuador y América Latina
Estudio introductorio: Natalia Sierra
6. Reforma universitaria en América Latina y Ecuador
Estudio introductorio: Manuel Salgado Tamayo
7. Movimientos estudiantiles en América Latina y Ecuador
Estudio introductorio: Germán Rodas Chaves
8. Socialismo Científico
Presentación : René Báez Tobar
ultimos títulos PubliCados
• Camilo Torres Restrepo y el amor eficaz
Javier Giraldo Moreno, François Houtart, Gustavo Pérez Ramírez.
Prólogo: monseñor Pedro Casaldáliga.
• Ecuador: desafíos para el presente y el futuro
Coordinadores: Fernando Balseca Franco y César Montúfar Mancheno.
Coedición con la Universidad Andina Simón Bolívar, Sede Ecuador.
• 50 años de reforma agraria. Cuestiones pendientes y miradas alternativas
Editores: Francisco Rhon Dávila y Carlos Pástor Pazmiño.
Coedición con la Universidad Andina Simón Bolívar, Sede Ecuador.
• Salud colectiva y ecología política. La basura en Ecuador
María Fernanda Solíz Torres.
Coedición con la Universidad Andina Simón Bolívar, Sede Ecuador.
• Nuevos tiempos, nuevos desafíos
Memorias del Primer Congreso Ecuatoriano de Derechos Humanos.
Coordinación editorial: Elsie Monge, Silvia Bonilla B., Napoleón Saltos.
Coedición con la Comisión Ecuménica de Derechos Humanos, CEDHU.
• Lo que la mina se llevó. Estudio de impactos psicosociales y sociosistémicos
María Fernanda Solíz Torres.
Coedición con Clínica Ambiental.
• Los Grupos Económicos en el Ecuador
Carlos Pástor Pazmiño.
• ¿Está agotado el periodo petrolero en Ecuador? Alternativas hacia una
sociedad más sustentable y equitativa. Un estudio multicriterio.
Coordinador: Carlos Larrea.
Coedición con Universidad Andina Simón Bolívar, Sede Ecuador,
Pachamama Alliance y TerraMater.
• El Macho Sabio. Racismo y sexismo en el discurso sabatino del presidente ecua-
toriano Rafael Correa
María Paula Granda.
Este pequeño libro es una invitación al debate
Reinventar

Reinventar el Socialismo. Fundamentos de Renovación Socialista


y a la construcción de una alternativa para el

el Socialismo
pueblo del Ecuador. Es producto de un
proceso de continuidad y ruptura del
socialismo ecuatoriano y la base de un
proyecto político radicalmente renovador que
mira a los grandes desafíos del futuro. En estas Fundamentos de Renovación Socialista
páginas los lectores encontrarán el camino de
Renovación Socialista, recorrido a fines del
siglo XX e inicios de este siglo XXI.
Esta obra que ponemos en sus manos, contiene
varios documentos de trabajo de Renovación
Socialista, destinados a la reflexión y la
formación. Recoge también varios manifiestos,
entre ellos, el del Socialismo Revolucionario,
que pone las bases de la renovación, y el
Manifesto del PSE de 2003, que plantea las
propuestas para el siglo XXI. Esperamos que
su lectura contribuya a la búsqueda del gran
objetivo de consecuencia, transformación y
unidad que nos alienta.
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Veintemilla y 12 de Octubre. S
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