MARIA TRIBIÑO PARTICIPANTE DEL PNFA ENSEÑANZA DEL INGLÉS
PARA PRIMARIA
NARRACIÓN DE EXPERIENCIAS:
El presente texto tiene como finalidad narrar mi experiencia personal, en cuanto al
aprendizaje de la enseñanza del inglés en primaria, les cuento que soy docente especialista en educación básica, se me presento la oportunidad a través del MPPE de continuar mis estudios, me ofrecieron PNFA “ENSEÑANZA DEL INGLÉS PARA PRIMARIA”, al principio lo pensé, pero en seguida la idea me emociono bastante ya que siempre anhele aprender inglés, no les voy a negar que junto a esa emoción también sentí miedo, ¡un idioma nuevo por aprender, sabía que no es fácil !, empecé a principios de noviembre del año 2016 a recibir mis primeras clases, las cuales se nos orientó que el PNFA era un convenio entre el MPPE y British Council y que debíamos aprovechar al máximo esta oportunidad. Así comenzamos esta experiencia extraordinaria, asistiendo todos los sábados, al principio me pareció súper fácil porque comenzamos viendo palabras sencillas números, letras y otros; a medida que pasaban las semanas la clase se iba tornando para mi difícil, confieso que durante el bachillerato nunca me llamo la a tención el inglés, y lo que es peor las clases que recibí en la universidad de inglés fueron poco interesantes, debido a varios factores. A estas razones se une la incesante ansiedad que comencé a sentir por aprender inglés y lo difícil que me empezó a parecer a pesar de la gran dedicación que sábado a sábado las facilitadoras se animaban a impartir, un día al llegar a clase una de mis facilitadoras me dijo “Hello María” How are you? en ese momento sentí que me moría, no di ninguna repuesta, sin embargo, la profesora con un gesto amable volvió a decir ¿cómo estas María? en ese momento respondí “fine”, a pesar de que sentí pena por mi ignorancia en el idioma, me permitió darme cuenta que debía poner más atención y que si en realidad quería aprender inglés tenía que dedicarle mucho más tiempo del que creí. Es emocionante contarles que todas las clases tenían algo divertido y me es grato confesar que los sábado más que a aprender inglés iba a compartir y a divertirme con las dinámicas que las facilitadoras agregaban cada semana para hacer más agradable y fácil el aprendizaje. A todo esto, se unió un maravilloso grupo de colegas a los que tuve la oportunidad de conocer y quienes han sido de gran ayuda y apoyo en las distintas clases vistas, a medida que compartíamos, jugábamos, cantábamos y hacíamos manualidades las clases se iban tornando más atractivas e interesantes, la ansiedad de las facilitadoras porque aprendiéramos eran motivo de dedicación y constancia observadas por mí en las mismas. Por otra parte, los temas presentados siempre estaban acompañados de material didáctico, actividades dinámicas y evaluación del aprendizaje adquirido, en el momento esto hacia que nuestra entrega al inglés creciera, ya no era una preocupación por el vocabulario escrito o pronunciación, sino una combinación de todo y esto permitía la trasformación del aprendizaje a través de las habilidades y destrezas creadas por cada uno de nosotros para la comprensión del mismo. Al mismo tiempo, que recibíamos las clases debíamos aplicarla semanalmente en nuestra institución con los estudiantes, de esta manera dedicábamos otras horas al inglés en la escuela. La idea de explorar y aprender el inglés se hacía cada vez más interesante ya que ahora tenía que enseñar a mis estudiantes. Sabía que estudiar el inglés a través del fenómeno didáctico seria de interés para ellos, porque esto haría entender con más facilidad la praxis pedagógica del vocabulario. Mi primer acercamiento al aula con ingles fue a través de la música con la canción del “ABC” al principio los niños cuando comencé a explicarle sobre la metodología a implementar para la enseñanza mostraron mucho interés, coloque la música me senté y comencé a cantar y llevar el ritmo de la canción mientras observaba con disimulo como cada estudiante se fue acercando al radio para escuchar con más atención la pronunciación del “ABC”; esto me dejo ver que los estudiantes si tenían curiosidad y motivación por aprender el idioma, así comencé a aplicar semanalmente la metodología y enseñanza aprendida los sábados en inglés. A través de estas experiencias pude apreciar lo importante que es emplear estrategias de motivación y didáctica para la comprensión del lenguaje; a su vez entendí lo fundamental que es incentivar el desarrollo de la creatividad entre los alumnos durante el proceso enseñanza-aprendizaje. Lo anterior expresado, fue clave para comprobar que podía enseñar a mis estudiantes inglés, y que a pesar de lo poco que sabía del área logré conquistar la confianza necesaria para innovar y desarrollar mis capacidades en el aula a través de la creación de material didáctico. Es importante acotar que mientras los estudiantes aprendían también desarrollaban sus habilidades creativas mediante la producción del recurso de apoyo para cada clase vista, de igual manera reforzaban valores de disciplina, respeto, convivencia y motivación. Como resultado, puedo afirmar que esta metodología de enseñar el inglés marco mi forma de educar ya que me permitió ser más activa, flexible y responsable. Ciertamente mi experiencia profesional me entregó instrumentos que han modelado gran parte de lo que soy hoy como docente, ya que aprendí otra manera más efectiva y positiva de enseñar el lenguaje inglés. Las evidencias anteriores, han generado cambios, no solo en los estudiantes al cual se le aplico esta muestra, sino que también en lo personal ya que las practicas me enseñaron las distintas formas de desarrollar un tema en ingles a través del juego, las actividades didácticas, lúdicas y sobre todo de la reflexión, es importante que toda clase recibida permita la reflexión del estudiante; logre mejorar la confianza en mí misma ya que era estresante y sentía algo de miedo cada vez que iniciaba una clase y el estudiante preguntaba alguna palabra en ingles que yo desconocía, pero aprendí que sencillamente si no la sabia era una tarea para ambos tanto del docente como del estudiante; hay una características que debemos tener presente en todo momento para la enseñanza y es amor y pasión por lo que se hace, grandes dosis de paciencia e imaginación, también aprendí técnicas que permitieron controlar mi mayor problema encontrado en el diagnóstico que fue la indisciplina. Los estudiantes atendidos les encantaba crear recursos didácticos, la metodología aplicada del PNFA permitió mejorar la disciplina y motivar a continuar su interés por aprender una nueva lengua, se permitieron conocer y desarrollar habilidades creativas que muchos desconocían, era gracioso y estimulante ver como los niños cada mañana repetían cantidades de palabras para saludar y despedirse algunas en su momento hasta mal pronunciadas pero que con la práctica se fueron corrigiendo. Para finalizar, el PNFA en primaria influyo de manera positiva en mi profesión me ha permitido comprobar que cada niño tiene su propia manera de aprender y su ritmo, y es una manera de atraer al representante a la escuela ellos se emocionan al ver a sus hijos pronunciando otro idioma, mi motivación por seguir mejorando y perfeccionando el inglés ha crecido. Como propuesta: el inglés debería iniciarse en las primeras etapas de la infancia, ya que por experiencia se observa que es más fácil a esas edades aprenderlo, los profesores deberían ser evaluados constantemente para mejorar la práctica, la metodología de la enseñanza debe estar adaptada al tema dado, los docentes deben formarse constantemente para perfeccionar su vocabulario y producción y por su puesto quien imparta en las instituciones de educación básica ingles tiene que ser educador para que pueda colocarse al nivel de los niños. No basta con saber inglés hay que saber impartirlo.