Si la civilización es para sobrevivir, La heterogeneidad en los valores e
debemos cultivar la ciencia de las ideas es una profunda realidad con la relaciones humanas. La habilidad de que las organizaciones (y en la todas las personas, de todos los tipos, de sociedad en general, como podemos vivir juntas en el mismo mundo en paz. ver) tienen que lidiar; puede haber (y -- Franklin Delano Roosevelt usualmente hay) conflicto de raza, que es, un proceso o estado interactivo en el cual los intereses de individuos o grupos en un organización parecen divergentes o incompatibles. A menudo resultan ser intentos cubiertos o descubiertos de bloquear o frustrar los intentos de la otra parte para satisfacer a los resultados que son preferidos. En adición a la falta de comunicación, el esqueleto de la contención son la libertad, los logros, las posiciones, los premios o reconocimientos, los recursos y la interdependencia de tareas. (La formalización legal de reglas y regulaciones también pueden agravar el malentendido de las jurisdicciones). El conflicto es también una parte inevitable del crecimiento (o decline). “¡Una extraña justicia es limitada por el río!, la verdad está en este lado de los Pirineos, y el error está del otro lado”, reflejó Blaise Pascal. Una escuela de pensamiento sostiene que una efectiva administración debería conducir a un ambiente saludable donde no surjan conflictos; una gran cantidad de opiniones cree que el conflicto podría ser, de mala gana, aceptado como un aspecto de la vida pero que debe ser evitado y suprimido en lugar de entendido y curado; un tercer grupo de defensores, a menudo acampado en el sector privado, discute que no dejar los leones dentro actualmente puede ser perjudicial porque el conflicto nos engancha, nos conduce a un entendimiento profundo, a más decisiones comprensivas y a una mejor planeación de contingencia. Por supuesto, si se enfrenta bien, el conflicto puede conducirnos a un cambio positivo; si no se resuelve, este puede tomar vida y convertirse en el centro de los pensamientos y acciones, incluso puede herir personas, arruinar reputaciones, impedir relaciones, y fragmentar organizaciones causando un descenso en espiral de la salud organizacional. En resumen, un conflicto organizacional puede ser intrapersonal, interpersonal, intragrupo e intergrupo. Las estrategias de administración de las últimas tres, estructural, tipos, ha revelado diferentes niveles de preocupación por el como uno mismo y otros están integrándose (resolver problemas buscando una solución efectiva y aceptable para todos los involucrados), actuando servicial (satisfaciendo las preocupaciones de la otra parte para preservar la relación y quizá obtener algo a cambio), dominando (lograr una resolución intermedia que este dentro de los intereses de un grupo y los gastos del otro), evitando (esquivando situaciones); y comprometiéndose (buscando una solución que al menos satisfaga a cada una de las partes). La relación basada en intereses se enfoca en el protagonismo del impulso integrador para hacer el respeto mutuo y las buenas relaciones la prioridad, manteniendo a las personas y los problemas separados, escuchar muy cuidadosamente (antes de hablar) los agravios presentados, exponer cuales son verificables y específicos para el conflicto, y explorar las opiniones juntos. Para agregar, muchos diagnósticos y tratamientos del conflicto organizacional ignora el problema de la autoridad por resolver, es decir, la obligaciones de las partes de reportar u obtener consentimiento de sus supervisores que no están involucrados en la discusión o que no están familiarizados con el problema. (Esto es extender una dificultad en organizaciones jerárquicas donde los intentos de resolución, vigilancia o incluso evitación pueden necesitar aprobación de eslabones severos). Además, el objetivo más importante a resolver o manejar el conflicto organizacional a través de enfoques tecnocráticos que prestan poca atención al aprendizaje, siempre necesario para mejorar la efectividad individual, en grupo y organizacional.
UNA VISTA COMPLEJA DEL CONFLICTO ORGANIZACIONAL.
Algunos problemas son tan Los enfoques que reducen la complejidad
complejos que tienes que ser toman sentido en situaciones de bajo altamente inteligente y estar bien contexto, pero no lo hacen en el múltiple informado solo para estar indeciso fenómeno interactivo. El contexto social de sobre ellos. los conflictos ha evolucionado, esto quiere decir que las causas y los efectos no están -- Laurence Peter siempre ligados, proporcionados o son predecibles: los sistemas adaptativos complejos, tales como conflictos, son mejor entendidos a través de una variedad de requisitos, es decir, que tenga al menos tanta complejidad como el problema en discusión. Los conceptos básicos de la ciencia compleja, el estudio de la dinámica en las relaciones de los sistemas adaptativos complejos en lugar de las propiedades aisladas de sus agentes, han ingresado al lenguaje cotidiano. (La más importante de ellas es la noción de emergencia, que connota imprevisibilidad. Otros incluyen conectividad, interdependencia, no linealidad, sensibilidad a las condiciones iniciales, procesos de retroalimentación, bifurcación, espacio de fase, caos y borde del caos, agentes adaptativos, autoorganización y coevolución). Aplicándolo a organizaciones, quizá ahora es lo mejor descrito como colectividad de actividad humana, el pensamiento complejo empañó las esperanzas ingenuas de la existencia ordenada y controlable. Al mismo tiempo, esto ayuda a expandir el cambio a través de aprendizaje, adaptación y evolución, a menudo mediante competencias, y cooperación y usualmente en el interés de sobrevivir. Se hace por el reconocimiento de que se es inteligente, dinámico, organizado y seres emergentes que son capaces del descernimiento pensativo e innovar reacciones ante el conflicto. De hecho, cuando las relaciones de causa y efecto entre personas, experiencias y contextos solo pueden percibirse en retrospectiva, no avanzando a través de una estrategia deliberada, el enfoque más sabio es probar, sentir y responder en lugar de ser engañados por la promesa vacía de comando y controlar. Reinterpretada como una fluctuación de patrones, no como un desglose, ruido o error, el conflicto debería verse más como el producto de la perpetua sorpresa, generada por interacciones no lineales en curso. Leticia Andrade, Donde Ashmos Plowman y Dennis Duchon proponen qué la atención plena, la improvisación y la reconfiguración, (no con poco orden, si se agrega confianza) ayudarán a fructificarlo para el crecimiento y la renovación organizacional.