A lo largo del siglo XIX, la democracia liberal se fue consolidando en Europa
Occidental, basada en la separación de poderes, derechos fundamentales garantizados por el Estado y sufragio que se fue ampliando hacia la universalidad.
1.1.- Gran Bretaña, la monarquía liberal
Este período coincide con el reinado de Victoria I. Su sistema político se basaba en un bipartidismo entre los conservadores (tories) y los liberales (whigs), éstos últimos sustituidos a principios del siglo XX por los laboristas. El sistema británico carece de Constitución. Se estableció a través de una serie de reformas electorales que ampliaron el sufragio a la población. Se estableció la enseñanza obligatoria y la jornada laboral de 8 horas.
1.2.- Francia, del II Imperio a la III República
Luis Napoleón Bonaparte, presidente de la II República, dio un golpe de Estado y se proclamó Emperador Napoleón III (1851) con el apoyo de las clases conservadoras. En esta época Francia creció económicamente y puso los cimientos de su imperio colonial, con una política exterior agresiva. Esto le llevó a una guerra con Prusia, en la que Francia fue derrotada. Napoleón III cayó y se proclamó la III República. La nueva Alemania unificada arrebató a Francia dos provincias, Alsacia y Lorena. Francia no perdonó esta pérdida y alimentó un nacionalismo exacerbado en nombre de “la revancha”, es decir, la futura guerra contra Alemania para recuperar esos territorios. Esta III República profundizó la democracia: sufragio universal, elección libre de alcaldes y legalización de los sindicatos.
1.3.- La Alemania de Bismarck
En 1870 Alemania concluyó su unificación. Era una gran potencia con un fuerte componente autoritario. Su sistema político era parcialmente democrático: la Cámara Baja (Reichstag) se elegía por sufragio universal, pero la Cámara de los Estados (Bundestag) se elegía por sufragio censitario, lo que daba gran poder a las clases más adineradas. Además el Káiser podía designar a su Gobierno independientemente del parlamento. No obstante, el canciller Bismarck adoptó diversas reformas sociales para favorecer a las clases trabajadoras.
2.- La Inglaterra Victoriana
Hacer los ejercicios.
3.- Francia: el modelo de república democrática
Hacer los ejercicios.
4.- ¿Cómo se convirtió Alemania en una gran potencia?
Hacer los ejercicios.
5.- Austria-Hungría, un imperio autoritario
5.1.- Austria-Hungría, liberalismo y autoritarismo
El Imperio Austríaco era un mosaico de pueblos con lenguas y culturas muy diferentes. El aflorar del nacionalismo entre estos pueblos generó una gran inestabilidad. Para solucionarla, se otorgó a Hungría un gobierno parcialmente propio. De esta forma, pasó a llamarse Imperio de Austria-Hungría. El sistema político daba amplios poderes al Emperador, y aunque existía un parlamento en cada uno de los dos reinos, el sufragio era censitario. Obviamente, los reformistas políticos presionaban para que el Imperio se democratizara
5.2.- Los problemas de un Imperio plurinacional
A estos dos problemas (las tensiones nacionalistas y las exigencias de democratización) se unía el conflicto derivado de la descomposición del Imperio Turco. Lentamente, el Imperio Turco iba retirándose de los Balcanes. Ese territorio era ambicionado por los pueblos sometidos por los turcos (griegos, rumanos, búlgaros, serbios…) pero también por Austria-Hungría y por Rusia. En particular, Serbia aspiraba a convertirse en un Estado que englobara a los “eslavos del sur”. Serbia se independizó de Turquía en 1867; pero en 1878 (fin de la guerra ruso-turca) se le impidió ocupar Montenegro y Bosnia-Herzegovina (la cual fue anexionada por Austria en 1908), lo que alimentó en los serbios un nacionalismo resentido y victimista, que les llevó a participar en las dos Guerras Balcánicas (1912- 1913) y a protagonizar el estallido de la 1GM.
6.- La Rusia Zarista
6.1.- Un territorio inmenso
Rusia era un inmenso imperio extendido sobre Europa Oriental y Asia. Sin embargo, su economía era rural, muy anticuada, y estaba compuesta de muchos pueblos muy diferentes entre sí.
6.2.- La autocracia zarista
El zar de Rusia era un monarca absoluto o autocrático. Controlaba el poder gracias al ejército, la burocracia o administración del Estado, la policía y la Iglesia ortodoxa.
6.3.- Una sociedad tradicional
La nobleza rusa poseía grandes territorios, donde trabajaban los campesinos siervos, en pleno feudalismo, con métodos agrarios muy anticuados.
6.4.- Las reformas de Alejandro II
El zar Alejandro II decidió reformar el país. En 1861 abolió la servidumbre (o feudalismo), pero los campesinos eran demasiado pobres para poder comprar tierras, e incluso muchos ahora fueron expulsados de las tierras que habían estado trabajando (mugics). Alejandro II impulsó la industrialización y la construcción de un ferrocarril, pero ante la falta de capital, estas iniciativas fueron obra de extranjeros. Alejandro II fue asesinado en 1881. Su muerte llevó a sus sucesores a creer que el camino de las reformas era erróneo, y que había que mantener el absolutismo. En consecuencia, la oposición al zarismo se radicalizó.
7.- Las potencias extraeuropeas: Estados Unidos y Japón
7.1.- La expansión de Estados Unidos de América
Tras su independencia, USA inició un rápido crecimiento económico y su expansión territorial hacia el oeste. Al mismo tiempo recibieron importantes oleadas de emigrantes de Europa y Asia en busca de trabajo. La expansión hacia el Oeste trajo consigo el exterminio de los indios y su reubicación en “reservas”. Las grandes diferencias entre los Estados del Norte, industrializados, y los del Sur, agrarios y defensores de la esclavitud, llevó a una guerra civil, la Guerra de Secesión (1861-1865), para impedir la división de la nación en dos. Finalmente, la guerra fue ganada por los Estados del Norte. El desarrollo económico se basó en la explotación de los recursos naturales, la existencia de un importante mercado interno y de vías de comunicación (ferrocarril transcontinental). A principios del siglo XX USA era una gran potencia económica tanto en agricultura e industria como en comercio y servicios financieros. Su estructura política se basó en un bipartidismo (republicanos conservadores y demócratas liberales). Se impuso el sufragio universal masculino. USA desarrolló un colonialismo extendiéndose hacia el Pacífico (Hawai, Samoa) y el Caribe, derrotando a España y apoderándose de Puerto Rico y Filipinas, y estableciendo una especie de protectorado sobre Cuba (1898).
7.2.- La modernización de Japón
Hacia 1850 Japón era una monarquía feudal cerrada al mundo, gobernada por el shogun con la ayuda de los nobles feudales y sus samuráis. Pero tras esta fecha, europeos y sobre todo norteamericanos obligaron a Japón a abrir sus fronteras para comerciar. El emperador Mutsuhito, consciente de que la debilidad militar y diplomática de Japón acabaría por someterlo a las potencias occidentales, derribó el shogunato y asumió el poder (“Revolución Meiji”= “culto a la regla”, 1868). Se estableció una democracia muy limitada y se modernizó el país rápidamente. El emperador obligó a los señores feudales a montar empresas y construir fábricas. Se desarrolló la industria gracias a una mano de obra disciplinada y barata. Japón se convirtió en una potencia colonial, ocupando Manchuria, Corea (tras una guerra con Rusia, 1905) y la isla de Formosa (Taiwán).
8.- ¿Por qué se enfrentaron el Sur y el Norte de Estados Unidos?