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LOS TERRIBLES DOS AÑOS

Y los tre s, los cua tro… en fin , no sabría yo si dejarlo solo en los dos año s, jajaja… Nuestro
peque ya va a cumplir 3 años y e sto no mejora.

Si que es cierto que a lrededor de los dos años es cuando los niños em piezan a darse
cuenta de que son una persona individual separada de los padres. Sé que resulta un
poco chocante imaginar que tienen cierto complejo de siamés con nosotros, pero es así, para
que veáis lo que tardan en comprender que no son un apéndice nuestro, y por consecuencia,
lo importante que es durante los dos primeros años que seamos comprensivos con su
necesidad de contacto, compañía y apego, pues para ellos es como si les quitasen una
pierna, para que me entendáis.

En fin, bienvenidos a la primera fase preparatoria para la adolescencia, porque mas o


menos esto es lo mismo, así que luego, dentro de unos años no me vengáis con que os ha
pillado de sopetón y sin repasar. No debe de ser fácil pasar de ser un bebé a ser un niño de
2 años, más capaz, independiente, que ya sabe comer, ir al wc, ponerse colonia, peinarse,
correr, saltar, encender la tele, la vitro, el microondas (el horno también, si, también),
escalar, etc, etc… y esa autodeterminación del “YO PUEDO” acompañada del “YO
SOLITO”, tan, tan, intensa.

Al final es lo mismo, ellos se sienten “mayores”, que pueden con todo, y que pueden ellos
solos, por supuesto, van a tirar de la cuerda hasta rozar el límite, porq ue d e eso se
trata, de forzar la situación hasta ver donde decimos “basta” y entonces sabrán “ok, vale,
hasta aquí puedo seguir…”

Los niños crecen muy deprisa, de pronto ya han cumplido los dos años y entran en la
etapa conocida como los “terribles dos”, una etapa que se caracteriza por las rabietas, por
el comportamiento inquieto y por el “no”, “no” y “no”.

Los dos años es una importante época de cambio en la que los niños se sienten cada vez
más independientes, empiezan a desarrollar su sentido del yo, les gusta llevar la razón y
quieren hacer las cosas por sí mismos, aún no comprenden como se tienen que com portar
en sociedad y suelen actuar como les da la gana con todo lo que ello conlleva, si tienen
que empujar a otro niño en el parque, lo hacen. Pero también es una etapa de terrores
nocturnos y miedos en la que empiezan a dejar los pañales, el chupete y a manejar los
cubiertos. Es una edad que supone grandes cambios tanto psicológicos como motores e
intelectuales.

En esta etapa la tarea primordial de los padres será aprender a lidiar con sus hijos y
comprender el porqué de su comportamiento. La mayoría de l os pequeños de 2 años no
actúan mal a propósito, para ellos es una etapa de descubrimiento en la que quieren
avanzar pero aún no saben las normas y actúan siguiendo sus instintos. El objetivo de los
padres será marcar ciertos límites para encauzar el compo rtamiento de los niños.
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Por supuesto, la táctica del chantaje emocional con ojitos “Gato Shrek” también será una de
sus mejores armas, jajaja… (by Supersinglemami)

Esta situación, evidentemente, es sum am ente estresante para los padres y m adres del
pequeño sublevado, porque si ya no tenemos bastante con el estrés general de vida diaria,
so lo no s fa lta u n p eq ueñ ajo impo niend o su s le ye s. ¡Y d e q u e man era ! Be rridos, llan tos
inconsolables, cabreos desbordados, manotazos, arrojar cosas de la rabia que les entra… He
aqui un ejemplo: el otro día, nuestro hijo quería un plátano y no quedaban en la n evera, de

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hecho teníamos que ir a comprar esa misma tarde y, aunque se lo explicamos, se pasó todo
el camino en el co che desde ca sa al superme rcado gritando “quiero un pátanooo oooo” en
plan bucle . Por sup uesto , in ten tamos explicá rselo de mil manera s, pero cuando entran en
ese desparrame emocional, no hay quien los haga entrar en razón. Y eso que era un plátano,
imaginaros cuando quiere galletas, jajaja…

¿Y QUÉ HACEMOS?

Pues tener paciencia, lo de siempre vamos. El coche viene muy bien para estas cosas
porque no hay otra que aguantarse y seguir mirando a la carretera, ignorarle un ratito (se
enfadará mas aun), y aprender ha meditar para controlar nuestra propia ira, que no es
poco. Al final acaba n e ntendiend o q ue po r much o q ue b erre en o griten, las c osas que
quieren llegarán cuando tengan que llegar o cuando podamos realmente satisfacerlas. Por
supuesto, lle gam os al su perme rcad o y se comió su “pátano” y tan feliz. Pero menudo
caminito… jajajaja…

Básicamente, es una cuestión de tiempo y de acompañamiento, porque al igual que con


los adolescentes, cuanto más cree n que n o n os necesitan, es cuand o, e n realidad, mas
tenemos que estar ahí, enseñándoles a entender el mundo, la sociedad, las normas, y por
supuesto, sus propios límites… ¡y los n uestros! Y a sab éis qu e imponer unos límites
genera seguridad en ellos, digamos, que ordena su propio caos mental.

Intentad poneros en su luga r y pensad en lo desconcertante que puede ser para vuestro
hijo no conseguir é so que ha decid ido que quiere ya , o lo importante de demo strarse a si
mismo d e que e s ca p a z d e ponerse el za p a to (aunque se a el del pie con tra rio ), o de cidir
lavarse la s mano s tan a concien cia que se las lava hasta el codo y parece que ha visto un
capítulo de Anatom ía de Grey (100% verídico), ja jaja… ¡al menos nos puede salir cirujano ,
oye!

¿Cóm o pueden actuar los padres?

• Ante todo hay que te ner pacien cia y ser conscie ntes de q ue con 2 año s aún sig uen siendo
bebés, no se puede pretender que su comp ortamien to se ejemp lar ni como e l de un adu lto .

• Es importa nte e stablece r uno s límite s y q ue el niñ o co mpren da que de ah í n o se puede


pasar. Se te ndrán que rep etir tod as la s ve ce s que sea ne ce sario pero siempre guardando la
calma . An te s de ir al pa rque o a cualqu ier o tro lado , le e xplica mos una s po ca s norma s
sen cillas qu e h a de cu mplir.

• Si duerme ma l por la s no che s y tien e pes adillas h abría que elim inar la s sie stas y evitar la s
co sas e stimu lan te s ante s de dorm ir, las película s o la televisión se podrían sustitu ir por leerle
un cuen to en la ca ma . Los b año s antes de d orm ir ta mbién le s ayu dan a rela jarse y se pu ede
poner en la hab itación una pequ eña lu z te nue para qu e le ayude co n los mied os no cturno s.

• Si el mome nto de la co mida ta mbién e s un a odisea y se niega a co mer lo que le ponemo s en


el plato , habrá que evitar da rle de co mer en tre hora s, quitar la s distraccio nes durante la
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com ida (la tele visión). No e s bu ena idea co mpara rle con otros niño s o herman os pu es se
enrabie tará má s aún y es importa nte a labarle cada vez que co ma bien p ara e stimu lar su
autoe stima .

• Si llo ra po rque algo le ha salido mal o no h a con seguido lo que que rí a , habrá que ha cerle
enten der qu e no s pon emo s e n su luga r y mo strarle o tra s a lte rna tivas: “este jugue te lo tiene tu
herman o y debe mos dejarle jug ar, pero tú p uede s coger e ste o tro ”. E n ca so de qu e le quite e l
jugue te a otro niño , se lo de volvem os in mediata men te y le explica mo s que eso no debe
hacerse , siem pre dándo le o tra altern ativa .

• Si peg a a otro n iño o in clu so a ti, h abrá que hacerle ve r lo m al q ue no s ha ce sen tir eso y qu e
puede ha cer dañ o. De cep ciona r a lo s padre s no e s su obje tivo y seg ura men te int en tará no
repetirlo .

• En caso de rabie ta o pa tale ta en la que e s impo sib le ca lma rle o que en tre e n razón , le
llevamo s a ca sa pa ra que en tien da que de e sa fo rma no se consigue nad a.

• Gritarle o pega rle solo sirve p ara in cen tivarle a que má s tarde é l ta mbi én lo ha ga . No ha y que
olvidar que lo s padres son el principal re fe ren te de lo s niño s

. • E s importa nte fome nta r su indepen den cia y n o sobrep ro tegerle. Ha y que d ejar que haga él
solo tod o lo que e sté a su a lcance y se a a corde a su edad . Ha cer co sa s por sí m ismo le ha rá
sen tirse m ayo r y e vitará fu tura s rea firma cione s de ind epende ncia en fo rma de rabie ta s.

• An te todo ha y qu e tener mu cha pa cien cia y sa ber que e s u na e tap a m ás del de sarro llo que
tam bién se pasa rá . Puede se r un proce so ago tad or para lo s papá s pe ro no hay qu e alarmarse
ni pen sar q ue e ste compo rtamien to será e l de finitivo , e s u na e tapa de lo má s com ún en niños
de la misma e dad .

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Y por supu esto, da r e jem plo c ontrola nd o nue stros propios cabre os , a ta qu es de ira ,
n e rvio s, e stré s, e tc… p o rq ue a no so tro s ta mb ién n o s pa sa qu e qu ere mo s h a ce r e sto o
a qu ello ¡y p ara a ye r! ¿Te h a s pa ra d o a pe nsa r en com o rea cciona s cu an do te su ce de lo
mism o? Seguramen te no tan b ien como exige s a tu h ijo , ¿ve rda d? Pue s, é se es el prim er
p a so y m a s im portan te d e tod o s lo s q ue o s h e d icho , apre nde r a gestiona r nues tra s
em ociones prim ero pa ra poder tra nsm itir ese a utocontrol a nuestros hijos … Y os lo
dice una que le cue sta mu uuuu cho, pe ro mu cho, muuuu cho , aguan tar el tipo cuando me
monta una rabieta justo ante s de salir por la puerta de camino al trabajo. Es lo q ue hay, al
final es un aprendizaje mutuo, dia a dia, prueba a prueba…

Ah, y amor, muuucho amor, ya lo sabes, a pesar de todo, ¡dile que le quieres!

P e ro e sto n o a ca b a e n lo s d o s a ñ o s, q u e va a a a… te n e m o s la ve rsio n e xte nd ida d e lo s


“Infernales 3 años” pincha aqui… ¡imprescindible!

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