Pedagogía lenta, serena y sostenible

En toda Colombia no es posible encontrar colegios con una metodología lenta, serena y sostenible,
probablemente porque esta lleva de trasfondo ideas críticas contra la sociedad actual de consumo y
constante afán, las cuales no están tan difundidas en el país, sin embargo, propondré un colegio ideal
con esta pedagogía partiendo de sus tres características principales:

1. Lenta:

En esta pedagogía es de vital importancia el tiempo, especialmente la desaceleración del mismo, pues
como se hace evidente, en la actualidad las exigencias de la sociedad buscan una productividad basta
en un tiempo reducido, y especialmente en los colegios se plantean muchos objetivos que finalmente
no se profundizan y terminan por ser memorizados un par de semanas por los estudiantes, y después
olvidados casi por completo. En este sentido un colegio con esta metodología debería tener un
aprendizaje lento pero exigente, que busque realmente proporcionar aprendizaje en los estudiantes y
que vaya a su paso, retroalimentando y apoyando todo el proceso de forma gradual. Del mismo modo,
el colegio debe brindar espacios para el ocio y el descanso en los estudiantes, ya que horarios de 50
minutos por clase suelen ser muy agotadores y llevan al aburrimiento y falta de concentración.

Con ello no solo es vital la flexibilidad en el tiempo de los estudiantes, sino también en los docentes,
los cuales deben abrir espacios para socializar con sus estudiantes y a su vez dedicar tiempo a las
discusiones pedagógicas, e interacción con otros docentes con el fin de compartir conocimientos y
experiencias para la mejora en el aula.

2. Serena:

En la actualidad los niños se educan orientados a convertirse en adultos y actuar como tales de forma
muy temprana, lo cual genera estrés, aburrimiento y disminución de sus actividades infantiles, así
como una creciente competitividad y egoísmo entre compañeros. Por esto, un colegio con esta
pedagogía serena, debería disminuir las evaluaciones con calificaciones numéricas que no miden
conocimientos sino memoria, y por el contrario, permitir al estudiante un acercamiento a la
experimentación, al conocimiento autónomo, al desarrollo de una dimensión emocional con sus
compañeros y del mismo modo, dar paso a una planificación colectiva de actividades, en donde los
docentes y directivos no impongan sus ideas sino que de forma conjunta se lleguen a acuerdos y la
voz del estudiante sea escuchada.

3. Sostenible:
Dado el constante ciclo de consumo-desecho que se está presentando en la actualidad, se propone que
en los colegios se comience a educar de forma alejada de la tecnología y más cercana a la naturaleza,
en donde se creen espacios para la enseñanza de, por ejemplo, siembra y cosecha de frutos y vegetales
que no solo brindan el aprendizaje de una buena alimentación, sino también el de la importancia de
ayudar al planeta por medio de la reducción del consumo de productos dañinos y el posterior desecho
de sus residuos. En este sentido, sería vital que en el colegio se hicieran desayunos u onces diarias en
donde e comparta comida sana y se evite el uso de vasos y cubiertos de plástico. Esta propuesta sería
muy útil en colegios rurales, ya que dado su entorno se facilitaría la enseñanza de este amor por la
tierra. Y muy importante en colegios urbanos, en donde se ve muy poco este tipo de enseñanzas y por
el contrario, donde se evidencia un consumo excesivo de alimentos poco saludables y que generan
gran contaminación.