Академический Документы
Профессиональный Документы
Культура Документы
yö ? i . r'r•
- Hi ¡1
i r 4! "
èX s , ä i I V
i r i*
POR
JVfoNS. de S egur
TOMO PEIMEEO
C o n lic e n c ia e c l e s i á s t i c a
B A R C E L O N A
L ibrería y T ipografìa Católica, P i n o , 5
1893
i prim er trabajo, que Unir por titulo Las Ma
ravillas de Lourdes, es un pequeño compendio
de la- admirable historia de las apariciones
de ¡a Virgen Inmaculada a lo humilde Bernardita
en 1858. Contiene rifa llo episcopal que cuatro años
después, en 18611, dio el ■venerable- Mons. Lo. tíreme,
entonces obispo de Turbes, sobre la autenticidad de
uste incomparable prodigio; y después de un rápido
bosquejo de la rida y dichosa muerte de B ernar
di ta en la casa matriz de las Hermanas de Necees
en 1878. ofrece al lector la narración de aquellos
milagros de Lourdes q w ene parecieron más con mo
radores y más auténticos, desde los principios de la,
peregrinación hasta la época tristemente célebre en
que nuestra pobre Francia fu e ' castigada por su.
apostasia política y social, y en que Pío IX . el
grande y santo Papa de la Inmaculada Concep
ción, comenzó sv, rida de prisionero en el Vaticano.
Desde entonces, Nuestra Señora de Lourdes ha
continuado obrando milagros, ó por mejor decir,
los ha multiplicado sin número, admirando, no so
ie -rente á toda Francia, sino al mundo entero. Ade-
Es propiedad.
6
------ *~0~»------
II
III
AÑ O DE 1S63
II
3
AN O DE 1869
Mi reverendo Padre:
El Espíritu Santo nos dice que es honroso, dulce y
bueno manifestar las obras de Dios. Los Anuales de
Nuestra Señora de Lourdes nos dan de ello pruebas
numerosas y muy interesantes.
Yo también, que he sido objeto de uno de estos se-
36 CIENTO CINCUENTA MILAGBOS
Este m ilagro hizo naturalm ente m ucho ruido en todos los paí
ses circunvecinos. Se escribió sobre el p articu lar al Dr. G a-
gniard, que había asistido á la enferm a, y la Reeue de Vlone
publicó en seguida la respuesta form al de este sabio Doctor,
llena de reflexiones concienzudas y bien escritas. Estas refle
xiones son por desgracia de u n a aplicación muy frecuente en
los tiem pos que corren. Dicen así:
«Señora:
.. He tardado en contestar á V. porque un pobre
médico tan ocupado como yo tiene pocos momentos
disponibles. Es cierto que la señorita L. Chartrón ha
sido curada milagrosamente en Lourdes.
-Si Y. me conociera, señora, sabría que no soy in
clinado de ninguna manera á ver y buscar milagros ni
á tentar á Dios pidiéndoselos por todas partes. No de-
DE NUESTRA SEÑORA DE LOURDES 41
be uno pedirlos á cada momento. El jlat, voluntas es
para el cristiano lo más perfecto.
«Un milagro más ó menos, decía una buena vieja,
no supone mucho, puesto que hay más de los necesarios
para tener la dicha de creer en Dios.
«Pero volvamos á nuestro milagro. La señorita
Chartrón perdió á sus padres y á otros parientes de la
tisis, y yo la he asistido largo tiempo (cosa de cinco ó
seis años) con motivo de una afección grave de la co
lumna vertebral, á consecuencia de la cual la parte
saliente de los huesos espinosos dorsales se le desvió
considerablemente por el reblandecimiento y flaqueza
de su cuerpo, que le produjo además supuración pu
rulenta. Todo lo cual fué reconocido por los doctores
Xelatón, Piorry y Rouvier; á que se añadía que el
apetito era nulo, la flaqueza completa, la fiebre conti
nua, el insomnio constante y la muerte por tanto in
minente.
«La señorita Chartrón hace el viaje sostenida, ó
mejor dicho, llevada en peso por dos personas, acom
pañada de un tío, venerable sacerdote, que acaba de
morir en Lormes en olor de santidad. La colocan como
pudieron en un coche, y luego en un vagón-cama del
ferrocarril. En Lourdes la llevan á la piscina; entra,
y sale curada, andando sin que nadie la sostenga, yen
do y viniendo, ágil, alegre y feliz, alabando á Dios,
por supuesto.
«Su salud ha sido después excelente. Todavía ayer
me estuve paseando con ella más de media hora en su
jardín con su hermano y su cuñada, y yo estaba más
cansado que ella.
42 CIENTO CINCUENTA MILAGROS
III
Mi reverendo Padre:
No sé si se acordará Y. de una conversación que
hace dos años tuve con V. sobre una curación notabi
lísima entre las curaciones extraordinarias debidas
todos los días á la poderosa bondad de Nuestra Señora
de Lourdes. Prometí á Y. enviarle la relación de este
hecho, que me parecía á propósito para edificar á los
lectores de los A únales, pero al hacerle esta promesa
había contado sin la rara modestia de la persona que
ha sido objeto de este insigne favor. Hacer pública
esta narración relatando las circunstancias que la han
acompañado, era llamar la atención y hacer pública
44 CIENTO CINCUENTA MILAGROS
ir
Mi reverendo Padre:
Encargado por la Hermana María Regis de trans
mitir á Y. la relación de su milagrosa curación, é ins
truido del motivo secreto que á ello le obliga después
de un silencio tan largo, temería faltar á mi deber
demorando un solo día la santa comisión que se me ha
confiado.
P . ClPEIANO M a E ÍA ,
Guardián del convento de Padres Capuchinos de Toulouse
A Ñ O DE 1870
II
Mi reverendo Padre:
No habiendo regresado á Angulema hasta el sábado
pasado, me ha sido difícil enviar á Y. antes la relación
que se sirvió pedirme el 18 del corriente.
He aquí el hecho en cuestión:
Clemencia Mouche, de veinticuatro años, de la pa
rroquia de Tergnier (diócesis de Soissons), en donde
yo daba una Misión el 12 de Julio de 1870, estaba
atacada de una enfermedad inexplicable á consecuencia
de un gran susto. Adelgazaba visiblemente, y los po
cos alimentos ó líquidos que tomaba la excitaban en
seguida al vómito. Hacía cerca de tres meses que se
hallaba en este triste estado, cuando en la primera
quincena de Junio se vió obligada á guardar cama cons
tantemente, y desde entonces con solo tragar algunas
68 CIENTO CINCUENTA MILAGROS
III
Señor Superior:
Permita V. á la más dichosa de las madres que ven
ga á darle parte del insigne favor que ha recibido por
intercesión de Nuestra Señora de Lourdes, lo cual ser
virá para proclamar á la vez el poder de María y alen
tar la devoción á su Concepción Inmaculada.
En Septiembre último mi pequeña Josefina, que ape
nas contaba seis meses de edad, fué atacada de repen
te de viruela, enfermedad que hacía grandes estragos
en el país. Mi ternura maternal se alarmó vivamente.
En vano prodigué los cuidados más asiduos á mi ange
lito; en vano emplearon los más hábiles médicos todos
los recursos de su arte para curar á mi niña; nada pu
do detener los progresos del mal, y al cabo de algunos
días mi pobre niña estaba en el último extremo. Los
muchos granos que tenía en la garganta le impedían
tragar el menor líquido, y la respiración era tan mo-
DE NUESTRA SEÑORA DE LOURDES 71
IV
u Señor Redactor:
« En un momento en que todos los corazones se ele
van á los pies de la Madre de Dios para pedirle la sal
vación de la patria, creo cumplir un deber haciendo co
nocer á V. un suceso capaz de alentar la piedad de los
fieles hacia la Protectora de nuestra ciudad.
“La Sra. Saint-Didier, viuda de G-auget, después
de haberse caído de una escalera el 27 de Diciembre
de 183S1, quedó paralítica á consecuencia de una vio
lenta conmoción de la medula espinal.
“Desde esta época y durante treinta y un años sin
interrupción, la Sra. de Gauget recibió sucesivamen
te pero sin fruto la asistencia asidua é inteligente de
los Dres. Ratter, Candy, Viricel, Devay, Rousset y
74 CIENTO CINCUENTA MILAGROS
6
A NO DE 1 87 1
II
III
IV
«Señor Cura:
«Por una casualidad providencial oímos hablar
hace meses de la célebre Gruta de Lourdes y de los
estupendos milagros que allí se habían obrado por in
tercesión de la Madre de Dios. Un sacerdote, víctima
de la opresión rusa y desterrado á Siberia, nos reco
mendó con instancia que recurriésemos al agua mila
grosa para nuestra hija María, enferma desde hace
dieciocho meses de un sufrimiento nervioso, compli
cado con una enfermedad de riñones que le había com
pletamente quitado el uso de las piernas.
DE NUESTRA SEÑORA DE LOURDES 95
VI
M a u ric io L a g o rs s e , de T o u r to ir a c , d ió cesis de P é r ig u e u x ,
tu v o a la e d a d de sie te a ñ o s en la o re ja iz q u ie rd a u n a b s c e so
(e sp e c ie d e t u m o r ) q u e le p riv ó e n te r a m e n t e del o íd o d e e ste l a
d o , p a r a c u y a c u r a c i ó n f u é c o n d u c i d o e n 1870 á l a s a g u a s d e
B a r é g e s . U n o d e lo s m é d i c o s d e l l u g a r , el D r. V e r g e z , d e s p u é s
d e h a b e r e x a m i n a d o a t e n t a m e n t e el c o n d u c t o a u d i t i v o , c r e y ó
q u e l a m e m b r a n a d e l t í m p a n o h a b í a s id o r o t a p o r el m a l .
E n e l m e s d e J u l i o d e 1871, l a e v a c u a c i ó n p u r u l e n t a y l a s o r
d e r a c o m p l e t a p e r s i s t í a n a ú n , y se r e s o l v i ó q u e el j o v e n M a u r i
cio h ic ie ra u n a n u ev a te m p o r a d a de a g u a s te rm a le s. A l p a s a r
p o r L o u r d e s el n i ñ o f u é c u r a d o r e p e n t i n a m e n t e e n l a G r u t a .
H e a q u í l a i n t e r e s a n t e r e l a c i ó n q u e el p a d r e d e l n i ñ o d i r i g í a
a l S u p e r i o r d e lo s m isio n e ro s.
T o u r t o i r a c , p o r E x c i d e u i l ( D o r d o g n e ) , 20 E n e r o d e 1872.
V il
U n p ia d o s o s e m in a r i s ta d e la d ió c e sis d e B lo is e s c rib ía al S u
p e rio r de los m isio n ero s d e L o u rd e s la sig u ien te re la c ió n :
« B l o i s , 21 d e N o v i e m b r e d e 1871.
VIH
T i r l e m o n t ( B é l g i c a ) , D i c i e m b r e d e 1871.
J. B ly c k a eets .»
E l 17 d e O c t u b r e d e 1871, a ñ a d e n l o s A n u a le s de L o u rd es
la S r ta . B ly c k a e rts v en ía á c u m p lir en la G ru ta su p e r e g r in a
ción de a c c ió n de g ra c ia s. N a d a d e ja b a s o s p e c h a r en su m a r c h a
la cru el en ferm ed ad q ue h a su frid o ; pero su a g ra d ecim ien to y
s u a l e g r í a p u b l i c a b a n m u y a l t o el f a v o r q u e r e c i b i ó d e la V i r g e n
In m acu lad a.
TE NUESTRA SEÑORA DE LOURDES 113
IX
E l 24 d e O c t u b r e d e 1871 l a H . A l o y s i a , R e l i g i o s a d e N u e s t r a
S e ñ o ra en N a m u r (B élg ica), e s c rib ía á los P a d r e s m isio n e ro s
de L o u rd e s p id ié n d o le s a g u a d e la G ru ta.
E l R d o . P. C h a r y , d e l a C o m p a ñ í a d e J e s ú s , h a t r a n s m i t i d o ú
los P a d r e s m is io n e r o s de L o u r d e s la c a r t a s ig u ie n te d e M r. E.
M ü lle r. E s ta r e la c ió n e s el g r ito de u n a m a d r e lle n a de r e c o n o
c im ie n to h a c ia la V irg en I n m a c u la d a .
E s t r a s b u r g o , 3 d e D i c i e m b r e d e 1871.
XI
L a d e v o c i ó n á N u e s t r a S e ñ o r a d e L o u r d e s h a h e c h o e n el
B r a s i l r á p i d o s p r o g r e s o s , y a l l í t a m b i é n la V i r g e n I n m a c u l a d a
se h a d i g n a d o r e c o m p e n s a r l a fe d e l o s f i e l e s c o n p r e c i o s o s f a
v o r e s , c o m o lo t e s t i f i c a l a r e l a c i ó n s i g u i e n t e :
« R i o J a n e i r o ( B r a s i l ) , 23 d e N o v i e m b r e d e 1871.
' ■
A N O D E 1 8712
La Srta. María Joly.— María Dupuy.— Rene Becquet.— Rai
mundo Caral.— La Srta. Juana María Arson. — Sor María
Casimir.-— Sor Teresa José.— La Srta. María Luisa Delpón.
— La Srta. Mercedes Torres.— Margarita Bobe.— Una Re
ligiosa atacada de lepra. — La Srta. María Tisseau.— Mar
garita Gehier.— Sofía Druón.— Filomena Patyn.— Josefina
Renaux.— La Srta. Clara Chauvin. — La Sra. Constancia
Leger.— Filomena Simonnneau. — La Baronesa de Lam-
berterie.— Viuda de Ancelín.— La Srta. Aurelia Bruneau.—
Sor María de la Anunciación.— Sor San Martín.
II
E n e l m e s d e M a r z o d e e s t e m i s m o a ñ o d e 1872, l o s A rm ales
d e Lourdes r e f e r í a n l a s i g u i e n t e c o n m o v e d o r a n a r r a c i ó n :
III
IV
VI
« Reverendísimo Padre:
u Había formado en un principio el proyecto de te
ner secreta la curación milagrosa de que he sido obje
to, pero la obediencia me obliga hoy á vencer toda la
repugnancia que siento en publicarla. Para gloria de
mi querida Bienhechora me resigno; no quisiera ser
ingrata.
Yo, sor María Casimir, religiosa hace nueve años
en la Congregación de San José, de Estaing (Avey-
rón), fui enviada á Niza (Alpes Marítimos) y pasé cin
co años en este clima favorable á mi temperamento
delicado.
c Al acabarse el invierno de 1872, en los primeros
días de Marzo fui atacada de una tos seca y tenaz
que el médico calificó de bronquitis: pero el 4 de Junio
se obró un cambio tan súbdito en mi estado, que el mé
dico se asustó, concibiendo temores bien fundados de
una afección de 1a, medula espinal. Desde este momento
142 CIENTO CINCUENTA HILASEOS
«S or María Casimir.»
10
146 CIENTO CINCUENTA MILAGROS
VII
« E l a b a t e A. Y zacq,
director del convento inglés, de B rujos ( Bélgica) ( 1).
V III
IX
E l m ila g ro c o n m o v e d o r q u e re fe rim o s a q u í se o b ró e n la p is -
t i n a d e L o u r d e s , y lo r e f i r i ó e n l o s A n u a le s e l v e n e r a b l e C ura
d e G u e y r a c ( d i ó c e s i s d e B u r d e o s ) , q u e h a b í a s id o t e s t i g o d e l o s
la r g o s d o lo re s d e la p o b re in c u r a b le .
G u il l a r d ,
Cura de Queyrac (Gironda).
XI
X II
Eeverendísimo Padre:
¡Gloria á Dios y reconocimiento á María!
Apenas fué anunciada la peregrinación de Bressuire
y Niort (diócesis de Poitiers), en la religiosa comarca
conocida bajo el nombre de Yendée militar, cuando
un ímpetu irresistible se apoderó de nuestras piado
sas poblaciones y las condujo al santuario venerado
de la Virgen Inmaculada, Nuestra Señora de Lourdes.
La parroquia de San Pedro de los Echaubrognes
reavivó su antigua fe, y comisionó á más de veinte
hijos suyos para ir en su nombre y en el de la parro
quia entera á tributar sus homenajes á la Eeina del
cielo, y á rogar por ellos, sus familias, por Francia y
por la Iglesia. Los votos de todos nos acompañaban,
y podía esperarse que si no eran totalmente escu
chados, por lo menos lo serían bastantemente para
que la benevolencia de nuestra Madre Santísima se
DE NUESTRA SEÑORA DE LOURDES 16.5
manifestase favorable á nosotros en la persona de Ma
ría Tisseau, de veinticuatro años de edad. Esta joven,
la mayor de diez hermanos, pertenece á una familia
cristiana que hace generosamente á Dios el sacri
ficio de sus hijos, cinco de los cuales están ya con
sagrados á Nuestro Señor, pues han abrazado la vida
religiosa ó aspiran á ella estudiando en los Semi
narios.
La mayor habría renunciado también al mundo si
la enfermedad no la retuviera forzosamente en la casa
paterna. A ejemplo del hermano pequeño de San Ber
nardo, ella veía partir sucesivamente á un hermano y
á una hermana, y viendo que las suertes no eran igua
les contentábase con suspirar, pero sin murmurar.
Decía: «Que se haga la voluntad de Dios y no la mía;«
y esperaba siempre contra todas las apariencias hu
manas.
Atacada de una enfermedad de estómago hacía tres
años, no podía retener ningún alimento ni siquiera
las bebidas más ligeras. Todo cuanto tomaba lo devol
vía al instante; así es que á pesar de los cuidados
más asiduos de sus padres y de los médicos, á seme
janza de una tierna planta atacada por un gusano en
su raíz, se la veía languidecer y bajar insensiblemen
te á la tumba. En tal estado, ponía su confianza en
Dios sin omitir ninguna de sus prácticas religiosas, y
la Santa Eucaristía era la única cosa que podía con
servar en el estómago.
La semana que precedió á nuestra partida estaba
en la cama moribunda, y ensayaron apartarla de su
piadoso designio diciéndole que ciertamente moriría
166 CIENTO CINCUENTA MILAGROS
XIIT
Mi reverendo P ad re:
Tengo el honor de acom pañar á V. el relato de una enferm e
d ad crónica asistida por mí d urante veintisiete años, y sobre su
curación instan tán ea en la G ruta de Lourdes, llam ada de la
A parición, el 27 de Agosto de 1872.
V arias veces la dichosa m ujer, que ha sabido ap reciar los
efectos de la intervención sobrenatural en su favor, me ha supli
cado, movida de g ra titu d , que envíe á V. la historia de sus la r
gos sufrim ientos y de su curación tan m aravillosam ente súbita;
m as yo he querido esperar hasta hoy p a ra asegurarm e de los
resultados de este hecho verdaderam ente m ilagroso.
Ruego á V., mi reverendo P adre, me acuse recibo de mi rela
to y acepte la expresión de los sentim ientos respetuosos con
que tengo el honor de ser de V. hum ildísim o servidor,
P. G a l is s ó n .
P. G-a l is s o n ,
ejerciendo la medicina 43 años en dicho distrito.
DE NUESTRA SEÑORA DE LOURDES 173
XIV
XV .
«Señor Director:
«Tengo el honor de transmitir á V. la relación de
un hecho, por lo menos extraordinario, que ha tenido
lugar en el Hospicio de Tourcoing (Norte) el 17 de
Septiembre último. En este momento en que Nuestra
Señora de Lourdes se complace en derramar en el
mundo y particularmente sobre Francia los tesoros
inefables de sus gracias y de sus bendiciones, es qui
zás más oportuno que nunca recoger hasta las miga
jas de su maternal liberalidad. Con este objeto roga
mos á V. reserve un rinconcito de sus Anuales á la
narración siguiente, que será una modesta flor añadi
da al enorme y magnífico ramillete de milagros que
brilla en este momento en manos de Nuestra Señora
de Lourdes.
«Filomena Patyn es una huérfana de dieciocho
años, que entró en el Hospicio algunos meses antes
de su primera Comunión, y se hizo notar allí siempre
180 CIENTO CINCUENTA MILAGROS
XVI
XVII
XVITT
«Señor Superior:
uEntre las innumerables gracias debidas á la inter
cesión de Nuestra Señora de Lourdes, puede inscri
birse también la siguiente curación, cuya publicación
animará á varias personas afligidas y glorificará el
nombre de María.
“La Sra. Constantina Leger, residente en Besan-
zón, barrio de Chaprais, calle de la Cazotte, sufría
hacía treinta años una enfermedad que los médicos
habían declarado incurable. Esta enfermedad se ma
nifestaba cada día, y algunos días varias veces, por
Vómitos, principalmente por la mañana, en ayunas.
Atacada de este mal en 1843, á la edad de veinti
dós años, esta señora vivió sucesivamente en Suiza,
Borgoña, Panamá y California, y su mal no la aban
donó en ningún país ni se interrumpió nunca. Unica
mente después de ciertos viajes por mar tenía una
DE NUESTRA SEÑORA DE LOURDES 195
XIX ,
XX
XXI
d e s p u é s de o r a r de n u e v o , lle n a de confianza se d e c i
d ió á s u b ir so la á Id c a p illa p o r e l se n d e ro q u e a llá
co n d u c e , al O c c id e n te d e l S a n tu a rio . L le g a d a á la ig le
s ia a s is tió á u n a g ra n d e y b e lla c e re m o n ia q u e d u ró
c e r c a d e dos h o ra s.
S o r M a rta volvió á re u n irs e á ella. L a llu v ia h a b ía
v en id o ta m b ié n á to r r e n te s , em p a p a n d o la s h e rm o sa s
y g lo rio sa s b a n d e ra s de N a n te s , y m ojando ig u a lm e n te
■los p ie s, los v e stid o s y el c u e rp o de la p o b re h id r ó
p ica. P e ro u n a fu e rz a in te r io r la so ste n ía , y quiso
v o lv e r á pie á la p o blación. S o r M a r ta , a tu r d id a , la
e x h o r ta b a á la confianza.
L a b u e n a H e rm a n a in s ta ló á s u e n fe rm a en la c a sa
d e J u a n S a jo u s, ca lle de la G r u ta , y se volvió a l S a n
tu a rio p a r a a s is tir á la p ro c e sió n q u e se h ace con v e
la s e n c e n d id a s ; y lu e g o , d e te n id a p o r la llu v ia y p o r
e l fe rv o r de su p ie d a d , pasó la n o ch e e n la ig le s ia con
n u m e ro so s p e re g rin o s .
I n q u ie ta p o r su e n fe rm a , volvió a l a m a n e c e r á b u s
c a r la , y a u n q u e e ra n la s cinco la e n c o n tró le v a n ta d a
h a c ía tie m p o , y a n sio sa de i r á la ig le s ia . F u e r o n ,
e n efecto, en u n coche, o y e ro n la S a n ta M isa, com u l
g a ro n , y á p e s a r de to r r e n te s d e llu v ia b a ja ro n á la
G r u ta .
L a p o b re h id ró p ic a , fu e ra de la re ja , en fre n te de la
im a g e n de M a ría , se puso á o r a r con to d a la efusió n
d e su alm a. « A llí, dice e lla , m e s e n tí c u r a d a ; la h in
ch a z ó n no e x is tía , a u n q u e yo no se p a cómo d e s a p a
re c ió el a g u a de la h id ro p e sía ; no s e n tí m á s d o lo r , y
a n d a b a con ta n ta fa c ilid a d como si n u n c a h u b ie r a s u
frid o . V
214 CIENTO CINCUENTA MILAGEOS
XXII
X X III
C u ra c ió n s ú b i t a d e u n a f í s t u l a i n c u r a b le , e n B lo is ,
el 18 de O c tu b r e d e 1872
Mi reverendo Padre:
Cumpliendo lo que prometía Y. el 7 de Septiembre
último, le remito los detalles de mi curación debida á
Nuestra Señora de Lourdes.
• Mi enfermedad era una fístula interna y externa, cu
yos primeros síntomas sentí por Septiembre de 1870.
Era, en primer lugar, un tumor, al que después se
fueron añadiendo otros. Sufrí la primera operación
el 27 de Abril de 1871, y dos meses más tarde otra,
y á pesar de los cuidados más especiales y asiduos del
médico, estas operaciones no dieron otro resultado
que causarme dolores atroces y dejarme llagas muy
dolorosas.
En el mes de Agosto tuve que resignarme á tomar
una muleta á ñn de poder andar un poco, lo cual lo
graba con grandes dificultades; estaba casi siempre
en la cama, y no podía seguir ningún ejercicio de la
DE: NUESTRA SEÑORA DE LOURDES 221
C o m u n id ad . A v e c e s e x p e rim e n ta b a d o lo re s t a n a g u
dos, q ue m e h a c ía n d a r g rito s ; c o n tin u a m e n te su fría
m ucho; v o m ita b a in m e d ia ta m e n te el a lim e n to q u e to
m a b a , y con fre c u e n c ia a rro ja b a m a te r ia m e z c la d a co n
s a n g re .
En Agosto de 1872 me vi obligada á tomar dos mu
letas: ya no podía, no diré andar, pero ni aun arras
trarme si no era con mucho trabajo, costándome cada
paso crueles dolores. Al fin tuve que quedarme entera
mente en la cama, y seguí de mal en peor hasta el
martes 15 de Octubre. En la tarde de ese día tuve
una crisis violentísima que no duró menos de cinco ho
ras, y cuando pasó me quedé extenuada, sin fuerza
alguna. Así pasé todo el día del miércoles. El jueves
por la mañana tuve otra crisis terrible, y aunque duré
menos tiempo que la primera, quedé tan débil que
tenía que hacer grandes esfuerzos para decir una sola
palabra, y aun así no me entendían. Durante dos días
no pude tomar más que una cucharada de agua d la
vez, y esto con mucho trabajo. El viernes por la tarde
era un soplo de vida lo que me quedaba; creyeron ha
bía llegado el fin de mis sufrimientos, y á mí misma
me parecía que iba á morir. Hice el sacrificio de mi
vida, ó mejor dicho, lo renové, creo que con bastan
te resignación. En lo demás, yo no quería otra cosa
que el cumplimiento de la santa voluntad de Dios.
N u e s tr a C o m unidad a c a b a b a de h a c e r el r e tir o
m e n su a l. E l b u e n P a d r e C ap u ch in o q u e la h a b ía p r e
dicad o e s ta b a to d a v ía a llí, y v ien d o el t r i s t e e sta d o
en q u e m e h a lla b a , dijo á n u e stra ; b u e n a y r e v e r e n d a
M a d re q ue h ic ie ra u n a n o v e n a á N u e s tr a S e ñ o ra d e
222 CIENTO CINCUENTA MILAGROS
L o u rd e s , y le p id ie ra so la m e n te el e n te ro cu m p li
m ie n to en m í de los d e sig n io s de D io s. E l b u e n P a
d re se unió á la s o ra c io n e s de la C o m u n id ad p a r a la
n o v e n a , q u e co m en zaro n el m ism o d ía 18 de O c tu b re
p o r la n o ch e, h a c ié n d o m e to m a r u n a c u c h a ra d ita de
a g u a de L o u rd e s . Como m e d ia h o ra d e sp u é s s e n tí un
tr a s to r n o e x tra ñ o en todo m i cu erp o y u n poco de
m e jo ría , la c u a l d e sa p a re c ió p ro n to p a ra d e ja r p aso
fra n c o á d o lo res c ru e lísim o s, e sp e c ia lm e n te en el co
ra z ó n . Yo m e te m ía u n a n u e v a c ris is ; m as á la h o ra ú
h o ra y m e d ia , d e sp u é s de to m a r el a g u a m ila g ro sa ,
los d o lo res c e sa ro n re p e n tin a m e n te y e x p e rim e n té un
b ie n e s ta r g e n e r a l m u y g r a n d e ; m e s e n tí c u ra d a y
com o si n a c ie ra e n a q u e l in s ta n te . M e v o lv ía en m i
c a m a á m i v o lu n ta d , m ie n tra s que u n a h o ra a n te s no
p o d ía n m o v e rm e , y te n ía u n a h a m b re v o ra z ; p e ro no
d ije n a d a , p u e s q u e ría g u a r d a r la a le g ría de la s o r
p r e s a de m i c u ració n p a r a n u e s tr a b u e n a y r e v e re n d a
M a d re .
El sábado por la mañana me encontró ésta del todo
sana, pero muy débil y como molida, no obstante ha
ber dormido toda la noche. Le pedí de comer, y me dió
enseguida, con lo cual los accidentes dichos desapare
cieron. A medio día comí carne con excelente apetito,
y trabajé con la aguja una parte de la tarde; pero por
prudencia no me permitieron bajar á la capilla.
Al día siguiente, con gran sorpresa de la Comuni
dad y de las personas que desde hacía dos años me
veían tan mala y enferma, bajé sola, sin apoyo nin
guno. y seguí sin fatiga todo el díalos Oficios del do
mingo y los ejercicios de la Comunidad. Mis llagas
DE NUESTRA SEÑORA DE LOURDES 22A
e s ta b a n e n te ra m e n te c e r r a d a s y c ic a triz a d a s ; la c a rn e
h a b ía v u e lto á to m a r s u tin te ro sa d o en v ez d e l m o ra
do q ue te n ía a n te s , y dos d ía s d e sp u é s h a b ía re c o
b ra d o to ta lm e n te la s fu e rz a s . C o n tin u a m o s, sin e m
b a rg o , la n o v en a: todos los d ía s to m a b a u n a c u c h a ra -
d ita d e a g u a de N u e s tr a S e ñ o ra de L o u rd e s , y m o jab a
con e lla los riñ o n e s y los lu g a re s donde h a b ía e sta d o
la fís tu la . L u e g o que y a tu v e fu e rz a s m e e n tr e g u é á
tr a b a jo s de h o r tic u ltu r a m u y p e n o so s, sin q u e p o r e sto
m e s in tie r a in co m o d ad a. H e ay u n a d o to d a la C u a re s
m a d el A d v ie n to , que n o so tro s em p ezam o s e n n u e s tr a
s a n ta O rd e n el 12 de N o v ie m b re , se g ú n lo o rd e n a n
n u e s tr a s s a n ta s R e g la s .
D e sd e e n to n c e s (h a c e u n año que e sto y c u ra d a )
gozo de sa lu d p e rfe c ta q u e no se h a d e sm e n tid o un
solo in s ta n te ; los tr a b a jo s m á s g r a n d e s no m e m o
le s ta n .
E n re c o n o c im ie n to de e s ta c u ra c ió n m a ra v illo s a y
como exvoto,, n u e s tr a S u p e rio ra h a hecho e je c u ta r en
el s a n tu a rio de n u e s tr a c a p illa p in tu r a s m u ra le s que
r e p r e s e n ta n la ú ltim a a p a ric ió n de N u e s tr a S e ñ o ra á
B e r n a r d ita . H a c e pocos m e se s que se acab ó e s te t r a
b a jo , y y a c o n tam o s v a rio s fa v o re s y g ra c ia s se ñ a la
d a s q u e la V irg e n h a concedido á la confiada o ració n
d e v a r ia s p e rs o n a s . V e rd a d e ra m e n te , m i re v e re n d o
P a d r e , la S a n tís im a V irg e n q u ie re s e r in v o c a d a con el
h erm o so títu lo de In m a c u la d a C oncepción con que se
re v e ló en L o u rd e s.
S or Ma ría de la A nunciación ,
Religiosa franciscana, Sierva de María.
224 CIENTO CINCUENTA MILAGROS
V.° B.°
S o r M a r ía d e J e s ú s ,
Superiora General délas Religiosas Franciscanas .
Sierras de María.
XXIV
«4 de Noviembre de 1872.»
228 CIENTO CINCUENTA MILAGROS
C. V. Marcellín, A’. M .
j IllSlllllliSi lililí m¡ i
umiiiiniiiiiiiiiiiimmiHiiiiiimiiiiiiiiimiimiiiiiiimmaimiiiiiiiiiiuiiiiiiiiiiiimiiimiiniiiiiiiiiimiiitiiuiiiiiiu imimiiiiiiiimiiinimuiimiiiimmiiiuiiiiiiiiur Ir.
ANO DE 1873
II
R o sin a O l l i v i i .e (1 ).
(1) Véase en los com probantes, n.° 11, el certificado del mé
dico y el testim onio del señor Cura.
DE NUESTRA SEÑORA DE LOURDES 243
II r
L a S r ta . V. W . . . , jo v e n de v e in tid ó s añ o s, h u é r f a
n a , v iv e en la c a lle de C o u r tr a i en c a s a de s u tío el
s e ñ o r R . . . , c o m e rc ia n te .
H a c ía dos a ñ o s e s ta b a a ta c a d a de u n a g r a v e e n f e r
m e d a d , y d e sp u é s de d ie c isé is m eses p a r a lític a , v ié n
d o se a d e m á s d e sd e e n to n c e s p riv a d a d el uso de la
v is ta y m u c h a s v e c e s de la p a la b ra . T odos los d ía s,
p o r d e c irlo a sí, e s ta b a su je to ,á e sp a n to so s a ta q u e s
n e rv io so s q u e la m e d ic in a e r a im p o te n te p a r a c o n ju
r a r . E s to s h ech o s son de n o to rie d a d p ú b lic a en la c a
lle d e C o u rtra i.
. H a c e n u e v e d ía s que la s e ñ o r ita V . W ... com enzó
co n su fa m ilia y su s a m ig a s u n a n o v e n a á N u e s tr a
244 CIENTO CINCUENTA MILAGEOS
IV
P. B etm on,
Vicario de la Catedral (Rodez).
F irm a d o : M a r ía , J. Gf.
J osé E n r iq u e ,
Obispo de Frejus y de Tolón.
E l 24 d e J u n i o ú l t i m o l a S r t a . C l e m e n c i a G a u t i e r , q u e g o z a d e
u n a sa lu d p e rfe c ta , c u m p lía su v oto v in ien d o á N u e s tra S e ñ o r a
d e L o u rd e s co n la p e re g rin a c ió n de T o ló n y F re ju s.
256 CIENTO CINCUENTA MILAGROS
VI
E n tr e t o d o s los d e m á s r e c o m e n d a m o s á la m á s s e ria a te n c ió n
d e l l e c t o r el g r a n m i l a g r o c u y a r e l a c i ó n d a m o s a q u í . E l q u e
t e n g a la d e s g r a c ia d e n o p o s e e r to d a v ía lo q u e es m e n e s te r p a r a
h a c e r u n a c t o d e fe t a l c o m o D i o s l o p i d e , e n c o n t r a r á e n é l u n a
lu z b rilla n te y h a r á u n a c to de a d o r a c ió n p id ie n d o p e r d o n a
N u estro S e ñ o r Je su cristo de no h ab erse p o strad o a n te s á sus
p i e s . S i t i e n e l a d i c h a d e s e r y a c a t ó l i c o , c a t ó l i c o fie l y p r á c t i c o
c o m o es p re c iso se rlo , b e n d e c i r á c o n n o s o tr o s á la M a d r e d e
D i o s q u e c o n c e d e á s u s h i j o s f i e l e s e l c o n s u e l o d e t a n v i v a luz.
c o m o c o r o n a c i ó n y d i l a t a c i ó n d e l a fe.
E s t e g r a n m i l a g r o t u v o l u g a r e n el m i s m o L o u r d e s , e n l a s a n
ta p isc in a , en p re se n c ia de u n a m u c h e d u m b re in m e n s a c o m
p u e s ta de la s p e re g rin a c io n e s de N io rt, de A m ie n s, de A ix, de
N a r b o n a , de C a rc a s o n a , de B rio n d e y de M o n ta u b á n , y fué o b
je to d e u n a in fo rm a c ió n se v e ra q u e c o n firm ó la a u to r id a d ep is
c o p a l del v e n e ra b le y d o c to o b isp o de P o itie rs , M o n s. P ie, ele
vado d espués á la p ú r p u ra card en alicia.
H e a q u í a h o r a la c a r t a q u e lu e g o q u e s u c e d ió el m ila g ro es
c r i b i ó a i d i r e c t o r d e l a S em ain e liturg ique de Poitiers e l A r c i
p re ste de N io rt, q u e h a b ía o rg a n iz a d o y d irig id id o la p e re g rin a
c ió n , y q u e h a b í a sid o te s tig o o c u l a r d e l a c u r a c i ó n d e su feli
g re sa C a ro lin a E sserteau .
« S e ñ o r D ire c to r:
- H a y g r a n d e im p a c ie n c ia p o r te n e r , y yo la te n g o
d e o fre c e r, u n a re la c ió n a u to riz a d a d el g ra n d e fa v o r
q u e se dignó D ios c o n c e d e r á la p e re g rin a c ió n d e los
D E NUESTRA SEÑORA D E LOU RD ES 257
n io rte s e s e n L o u rd e s q u e tu v e el h o n o r y la d ic h a de
p re s id ir.
« L a c u ra c ió n q u e hem os o b te n id o se h a o b rad o con
ta le s c irc u n s ta n c ia s , q u e nos r e c u e r d a los h ech o s e v a n
g élico s.
« N u e stro S e ñ o r dijo a l ciego d e n a c im ie n to : «A n d a
«y lá v a te e n la p isc in a de S iloé.» E l ciego obedeció y
pu d o d e c ir e n s e g u id a : « F u i, m e la v é y v eo .»
«D e ig u a l modo N u e s tro S e ñ o r h a dicho á n u e s tr a en
fe rm a h ab lan d o á su corazón: « H a z te lle v a r á la p isc in a
«de L o u rd e s .» L a e n fe rm a obedeció y p udo d e c ir en se
g u id a : «Me h a n lle v a d o , m e h a to cad o el a g u a y a n d o .»
«Carolina Esserteau, de cerca treinta años de edad
(nació el 24 de Octubre de 1841), hacía once años que
tenía una mielitis crónica que había producido en su
cuerpo los más terribles efectos.
« L a co lu m na v e r te b r a l e s ta b a d el todo d e s v ia d a ; la
e n fe rm a no po d ía e s ta r s e n ta d a ; la inflam ación d e la
m ed u la e sp in a l h a b ía d e b ilita d o ta n to su v is ta , q u e no
p o d ía s o r p o r ta r la luz d el d ía , y m ás q u e todo h a b ía
a ta c a d o su s p ie rn a s , c u y a s u b s ta n c ia n e rv io s a h a b ía
a lte ra d o p o r c o n sig u ie n te la s v e n a s y los m u slo s, r e
d u cién d o lo s á u n a d e b ilid a d ta l y á ta n e x c e siv a d e
m acració n , que a llí no q u e d a b a m ás que u n a p iel lí
v id a y en c ie rto m odo c o lg a n te so b re h u eso s d e s c a r
n a d o s. E n lo d e m á s, la s p ie rn a s e s ta b a n in e r te s h a s ta
el p u n to d e q u e cu an d o lle v a b a n á la e n fe rm a se m o
v ía n e n to d o s se n tid o s si o tr a p e rso n a no la s so ste n ía .
L a in se n sib ilid a d de e lla s e r a ta n c o m p le ta , q u e no r e
c ib ía n in g u n a se n sa c ió n n i de la e le c tric id a d ni de la
h id r o te r a p ia e m p le a d a e n .s u m a y o r p o te n c ia .
17
258 CIENTO CINCUENTA MILAGROS
VII.
18
274 CIENTO CINCUENTA MILAGROS
vm .
P a r í s , 29 d e O c t u b r e d e 1873.
IX.
E n t r e lo s i n n u m e r a b l e s p r o d i g i o s q u e b r o t a n c o n el a g u a d e l a
fu en te m ila g ro sa de la G ru ta de L ou rd es, he aq u í u n o cu y a a u
t e n t i c i d a d e s e s p l é n d i d a y el c a r á c t e r s o b r e n a t u r a l e v i d e n t e . L o
q u e tie n e d e p a r tic u la r es q u e la S a n tís im a V irg e n lo h a o b ra d o
en u n sa c e rd o te , c o s a n a tu r a lm e n te b a s ta n te r a r a , sie n d o ios
sa cerd o te s en g en eral poco p ro p en so s á p ed ir g r a c ia s de esta
n a t u r a l e z a , p o r q u e , m á s q u e lo s s im p le s fieles, s a b e n q u e s u f r i r
e s m e j o r q u e s a n a r , y q u e b a j o el p u n t o d e v i s t a d e l a s a n t i f i c a
c i ó n , q u e t o d o lo d o m i n a , l a s e n f e r m e d a d e s c o r p o r a l e s s o n g r a
c ia s de elecció n m á s p re c io s a s m il veces q u e la m e jo r sa lu d .
F u é e n el d í a d e s u g l o r i o s a A s u n c i ó n c u a n d o l a S a n t í s i m a
V irg en q uiso c u r a r al R d o . de M usy, m ie n tra s e sta b a oyendo
l a S a n t a M i s a e n el S a n t u a r i o d e L o u r d e s .
H e a q u í la rela c ió n de esta m e m o ra b le c u ra c ió n , ta l co m o la
r e f i e r e n l o s A n n a les de Lourdes d e l m e s d e M a r z o d e 1874.
20
306 CIENTO CINCUENTA M ILAGEOS
XI
XT1
X III
B. de Marcq.
XIV
P arís, 10 de O ctubre.
Señor redactor :
A consecuencia de un rápido desarrollo complicado
de fiebre tifoidea, mi joven sobrina Irma Dubois fué
atacada de una parálisis general que se extendía has
ta el órgano de la voz. Hace pocos días tomó parte en
la peregrinación de la Lozère á Nuestra Señora de
330 CIENTO CINCUENTA M ILAGROS
E. P. D u b o is G u c h a n ,
antiguo consejero en la corte de apelación de Lyon.
«Mende, 6 de O ctubre.
CARTA DE MI HERMANO.
XV
J u l ia J adot,
H ija p rieileg ia d a de M aría (1):
(1) "Véase en los com probantes, n.° 15, el certificado del mé
dico y el testim onio del señor Cura.
DE NUESTRA SEÑORA D E LOURDES 337
XVI
xvn.
Señor Cura:
Me hace V. el honor de pedir en nombre del ilus-
trísitno señor Obispo mi opinión bajo el punto de vista
medical y científico acerca de la curación extraordi
naria acontecida en la persona de María Poirier el 8
de este mes. Con el objeto de motivar bien esta apre
ciación, se hace necesario que yo entre en algunas ex
plicaciones sobre las circunstancias que han precedido
y acompañado este acontecimiento.
En Abril de 1866 María Poirier, que á la sazón con
taba quince años, de temperamento linfático y cons
titución muy delicada, fué atacada de una angina ton-
silaria seguida de una fiebre tifoidea. En el transcurso
de la larga duración de ésta, la enferma tomó la cos
tumbre de encorvarse, enroscándose sobre sí misma,
352 CIENTO CINCUENTA MILAGROS
C o c h et .
XVIII
«M is m u y q u e rid a s H e rm a n a s :
«A l e m p e z a r e s te año v en g o á p a rtic ip a ro s el fa v o r
in s ig n e con q u e se h a d ig n a d o h o n r a r N u e s tr a S e ñ o ra
d e L o u rd e s á n u e s tr a C om unidad en la p e rs o n a d e
n u e s tr a q u e rid a so r Sofía.
« P re sc in d o d e sc rib iro s to d o s los su frim ie n to s p o r
lo s q u e h a p a sa d o n u e s tr a m u y a m a d a H e rm a n a e n el
esp acio de tr e s m e se s; a q u e lla s de e n tr e v o s o tra s q ue
p u d ie ra n ig n o ra rlo s to d a v ía , p o d rá n in fo rm a rse p o r la
n a rra c ió n que v a á se g u ir. Sin e m b a rg o , q u e rid a s H i
j a s , p e rm itid m e os h a g a o b s e rv a r u n a co sa que m e
p a re c e p ro v id e n c ia l, y es m u y p ro p ia p a r a e x c ita r
n u e s tro a g ra d e c im ie n to á M a ría . Y a s a b é is que d e s
p u é s de la se g u n d a n o v e n a h e c h a á N u e s tr a S e ñ o ra
d e L o u rd e s p o r la in te n c ió n de n u e s tr a q u e rid a e n
fe rm a la s c risis h a b ía n cesad o , y q u e, g ra c ia s á e s te
p r im e r fa v o r, p u d im o s p a s a r sin n in g u n a zo z o b ra lo s
o ch o d ía s de e je rc ic io s; p ero n in g u n a de v o s o tra s h a
358 CIENTO CINCUENTA MILAGROS
E n t r e ta n to la p o b re e n fe rm a p e d ía á g r a n d e s g r i
to s la lle v a ra n á L o u rd e s . P o r fin, a n te su s r e i t e r a
d a s in s ta n c ia s , á p e s a r de la s d ific u lta d e s p r e v is ta s en
el c u rso d e l v ia je , se accedió á su s d e se o s, y e l 11 de
O c tu b re so r S ofía, a c o m p a ñ a d a de su a n tig u a S u p e
r io r a , p a r tía en el tr e n de la s once p a r a el S a n tu a rio
v e n e ra d o .
E l v ia je fué de lo m ás p e n o so ; la s c ris is , c a si c o n ti
n u a s. E n C e tte se d e tu v ie ro n p a r a d e s c a n s a r e n c a sa
d e un p rim o de la e n fe rm a , el D r. D u m a s, q u ie n h a
b ié n d o la reconocido o b se rv ó fenóm enos de la ú ltim a
g ra v e d a d , y d e c la ró q u e si su p a r ie n te s o b re v iv ía á
su s a ta q u e s q u e d a ría p a ra lític a .
C u an do lle g a ro n d e la n te de la G r u ta de la A p a ric ió n ,
los acceso s h a b ía n to m ad o p ro p o rc io n e s ta n a la rm a n
te s , q u e la p o b re H e rm a n a p a re c ía to c a r á su fin. A l
v e r la , un g r ito de co m pasión se escapó de la boca de
to d o s lo s p e re g rin o s . C uando se d irig ie ro n h a c ia la
p is c in a , el P a d r e D ir e c to r no pudo m enos de d e c ir,
á p e s a r de su confianza en M a ría , que la e n fe rm a e s ta b a
d em asiad o m al p a r a s e r b a ñ a d a en a g u a fría . « L a h e
co n d u cid o a q u í, c o n te stó la S u p e rio ra en u n ím p e tu
d e fe, p a r a que la S a n tís im a V irg e n la c u re , y s i no
e s e sa su v o lu n ta d , q u e se la lle v e . » P e ro M a ría no
q u e ría lle v á rs e la , a n te s q u e ría con un n u ev o p ro d ig io
m o s tr a r su p o d e r y su b o n d a d ; q u e ría c u r a r la . P e ro
callém o nos y dejem os h a b la r á la m ism a S u p e rio ra ,
te s tig o de e s te m ila g ro . A l d ía s ig u ie n te e s c rib ía á la
S u p e rio ra G e n e ra l de su C om unidad :
362 CIENTO CINCUENTA MILAGROS
« ¡V iv a M a ría In m a c u la d a !
«M i m uy d ig n a M a d r e :
(1) Véanse en los com probantes, n.° 16, los certificados de los-
,médicos.
364 CIENTO CINCUENTA MILAGROS
x rx
d e a lg u n o s m e se s. Como la e n fe rm e d a d in s p ira s e s e
rio s te m o re s , la H e rm a n a le confirió d e sd e lu e g o el
B a u tism o y le puso el n o m b re de J u a n B a u tis ta .
« C u a tro d ía s d e sp u é s, el e s ta d o d el niño fué d e se s
p e ra d o . L a fa m ilia 'se tra s la d ó á u n a c a sa c e rc a n a á la
d e la s R e lig io s a s , y S o r A ta n a s ia fu é lla m a d a á to d a
p ris a .
« L a b u e n a H e rm a n a lle g ó á la c a r r e r a y e n c o n tró
á su niño J u a n B a u tis ta en la a g o n ía ; la fa m ilia no
c e s a b a de llo ra r. T odo rem ed io e ra i n ú t i l ; el niño e s
ta b a p e rd id o . P e ro p e n sa n d o q u e ta l v ez con u n a f u e r
te fricció n le v e n d ría , á lo m enos p o r u n poco de tie m
p o , el c a lo r y la v id a q u e se ib a n , so r A ta n a s ia c o rrió
á b u s c a r u n a p o m ad a p a r a fric c io n e s, y al v o lv e r e n
c o n tró á su s u p e rio ra la M a d re G o n zag a, á q u ie n r e
firió en dos p a la b ra s el e sta d o d el n iñ o . « P u e s b ie n ,
«dijo la S u p e rio ra , llá g a le V . b e b e r u n poco de a g u a
«de L o u rd e s .»
«A cudió so r A ta n a s ia p o r el fra sc o de d ic h a a g u a , y
con él al lad o del e n ferm o , á q u ie n echó e n la b o c a
a lg u n a s g o ta s . A p e n a s la s tr a g ó cu an d o su s ojito s se
a b r ie r o n ; se le dió se g u n d a d o sis, y los ojos r e c o b ra
ro n la v i d a ; el niño a g ita b a las m a n e c ita s. U n g r ito
d e a d m ira c ió n se escapó e n to n c e s de to d a s la s b o cas.
C u b rie ro n de beso s a l q u e rid o in fa n te re s u c ita d o , sin
a tr e v e r s e no o b s ta n te á d a r á su ánim o u n a c o m p le ta
e x p a n sió n de a le g ría .
« D e sp u é s de un c u a rto de h o r a m andó so r A ta n a
sia q u e e n tr a s e la n o d riz a , y a p e n a s tom ó é s ta al n iñ o
e n su seno y le aplicó el p ech o , cu an d o a g a rrá n d o lo
e l niño con g r a n d e a p e tito alejó todo te m o r d e lo s
DE NUESTRA SEÑORA DE LOURDES 369
c ir c u n s ta n te s ; y á los llo ro s su c e d ió u n a h ila rid a d g e
n e ra l. « H a sido u n m ila g ro , exclam ó la H e rm a n a , y
«es u n m ila g ro d e N u e s tr a S e ñ o ra de L o u rd e s ,» y con
v id ó á la fa m ilia re c o n o c id a á q u e fuese al d ía s ig u ie n
te á s a b e r lo q u e e r a el a g u a de L o u rd e s .
«A l d ía s ig u ie n te , e n efecto, e s ta n u m e ro sa fa m ilia
v ino á o ír la ex p licació n p ro m e tid a . Y ese m ism o d ía
la m a d re d el niño J u a n B a u tis ta , h a s ta e n to n c e s p r o
te s ta n te , envió á la e sc u e la de la s H e rm a n a s á su s dos
h ija s y ocho e sc la v a s jó v e n e s , a s e g u ra n d o re s p e c to d e
J u a n B a u tis ta que su ed u cació n c o r r e r ía á c a rg o de
Jos P a d r e s .»
24
370 CIENTO CINCUENTA MILAGEOS
II
« V u e s tra G r a n d e z a , con su b o n d ad p a te r n a l, se
d ig n a r á p e r m itir á la ú ltim a de su s h ija s q u e v e n g a á
p a r tic ip a r le e l fa v o r in sig n e q u e se dignó c o n c e d e rle
N u e s tr a S e ñ o ra de L o u rd e s e l 16 de F e b r e r o .
«Hubiera yo querido, monseñor, escribirle en el
mismo momento, pero mis superiores me aconsejaron
que aguardase. Mas hoy que ya no puede caber duda
sobre mi perfecta curación, tengo necesidad y me es
grato proclamar la gracia de María Inmaculada.
«Vuestra Grandeza recordará sin duda haber visi
tado, animado y consolado por tres veces á una Reli
giosa del Retiro cristiano de Boulogne que hace dos
ó tres años yacía en el lecho del dolor. Para agrade
ceros vuestras caritativas y preciosas visitas, ella su-
DE NUESTRA SEÑORA DE LOURDES 371
III
Mi reverendo Padre:
Para cumplir con el deber de agradecimiento á que
estamos obligados con nuestra Madre Inmaculada,
y para mayor gloria de Dios, vengo á suplicar á Y.
se digne publicar en sus Anuales la siguiente rela
ción del señalado favor con que hemos sido favore
cidos :
A mediados de Diciembre del año pasado José
Schmidt, novicio de la Compañía de Jesús, fué aco
metido, á consecuencia de una violenta inflamación
en la garganta, de una especie de parálisis que afec
taba principalmente las piernas, la cabeza y los órga
nos de la voz. Le era ya imposible dar un solo paso
374 CIENTO CINCUENTA MILAGROS
G u il l e r m o E b e r s c h s w e il e r , J.
DE NUESTRA SEÑORA DE LOURDES . 379 »
IV
Mi reverendo Padre:
Para gloria de la Virgen Inmaculada de Lourdes
voy á transmitir á V. algunos detalles de mi enfer
medad y de la milagrosa curación que la Santísima
Virgen acaba de obrar en favor de su indigna sierva.
Hacía diez años que sufría yo de una enfermedad
de estómago que ya se había hecho crónica; sufría de
vómitos, y mi estómago rechazaba toda especie de ali
mento sin que ninguno le conviniese, pues cuanto más
ligero era el alimento que tomaba, menos lo conser
vaba. Los médicos más célebres habían ensayado to
dos sus recursos para curarme, y me abandonaron sin
haber conseguido más que aumentar mi mal.
Entregada á mí misma, desesperaba de curarme
nunca, y hasta había hecho el sacrificio completo de
mi vida, á no ser, decía yo algunas veces, que el buen
Dios me ayude y haga un milagro. Esta era mi única
esperanza, pero me encontraba indigna de tal favor;
mas la bondad misericordiosa de María Inmaculada
380 CIENTO CINCUENTA MILAGROS
h a te n id o p ie d a d de m í y se h a in c lin a d o h a c ia m i po
b re z a , y m i v id a s e r á d em asiad o c o r ta p a r a b e n d e c ir
la y d a r la d ig n a m e n te la s g ra c ia s .
S ie m p re he creíd o q u e N u e s tr a S e ñ o ra de L o u rd e s
p o d ía c u ra rm e , m as cu an d o m e h a b la b a n de E lla yo
re sp o n d ía : « L a S a n tís im a V irg e n , si q u ie re , m e c u ra
r á a q u í ta n b ie n como e n L o u rd e s .» P a r a re a n im a r m i
fe m e e n c o m e n d a b a a l S a g ra d o C o razó n , p ro m e tié n
dole fid elid ad to d a m i v id a si se d ig n a b a o írm e. ¡E l
S a g ra d o C orazón no n ie g a n a d a ! C asi r e p e n tin a
m e n te m e vino el deseo de ir á L o u rd e s , donde en co n
t r a r í a m i c u ra c ió n . C ad a d ía se a u m e n ta b a m i c o n
fia n z a e n M a ría In m a c u la d a ; p e n s a b a en E lla sin c e s a r;
p o r la noche m e d e s p e r ta b a e s te p e n sa m ie n to y m e
lle n a b a de sa tisfa c c ió n , p o rq u e te n ía la co n v icció n de
q u e ib a á c u r a r . Y o q u e ría ir á L o u rd e s sin ta rd a n z a ;
m e s e n tía como a p re m ia d a á p a r tir . F ijé el d ía d e la
A n u n ciació n p a r a m i v is ita á M a ría In m a c u la d a . Mi
fa m ilia m e d e ja b a en lib e r ta d ; m i h e rm a n o m e aco m
p a ñ a b a ; yo ib a con g u s to , p u e s e n tr e v e ía el té rm in o
d e m is m ales; e s ta b a ra d io sa de confianza.
L le g a m o s á L o u rd e s el dom ingo 22 de M arzo á las
s ie te de la n o ch e, y á p e s a r de m i d e b ilid a d y d e la s
fa tig a s d e l v ia je q u ise ir en se g u id a á la G r u ta . Me
p a re c ía e n to n c e s q u e el m ila g ro e x is tía y a ; ¡ ta n e x
tr a o r d in a r ia e r a la confianza q u e e x p e rim e n ta b a e n
to n c e s! Yo m ism a no m e reco n o cía, y d e c ía : « E s ta
co nfianza es u n a g ra c ia : la n a tu r a le z a no p u e d e p r o
d u c ir co sa se m e ja n te .» C uando lle g u é d e la n te de la
V irg e n no p ude r e z a r ; e s ta b a e n a je n a d a y no h a c ía
m á s que m i r a r l a : q u ise m e te rm e en la p isc in a c o n tra
DE NUESTRA SEÑORA DE LOURDES 381
P aulin a S e y d el (1 ).
Mi reverendo P adre:
Hoy hace un mes que nuestra hija fué curada sú
bita y completamente por Nuestra Señora de Lourdes.
Si yo hubiera seguido el impulso de mi corazón ha
bría escrito á V. el mismo día para dar gracias á Dios
y á su Santísima Madre, pero he pensado que sería
mejor esperar con el fin de que fuera á todos evidente
que la curación persiste.
Nuestra hija Camila tiene dieciséis años y medio.
El 22 de Junio hacía ocho meses que estaba grave
mente enferma. Los médicos denominaban la enfer
medad reblandecimiento de la mucosa del estómago.
Esta enfermedad se manifestaba:
l.° Por una repulsión violenta 'para toda especie
de alimento, y particularmente para los que le hubie
ran sido más provechosos, como carne, caldo, jalea de
384 CIENTO CINCUENTA MILAGBOS
c a r n e , h u e v o s y la c tic in io s. S o la m e n te to m a b a , y e s to
h a c ie n d o u n g ra n d e e sfu e rz o de v ir tu d , un poco de
c h o c o la te 6 café, a lg u n a s le g u m b re s , p a n m ojado en
s a lsa , f r u ta s ó c o n fitu ra s, todo ello e n p ro p o rc io n e s
in fin ite sim a le s. D u r a n te dos m eses ( F e b re ro y M arzo)
se e stu v o a lim e n ta n d o con a lb o n d ig u illa s de c a rn e
m a c h a c a d a que tr a g a b a sin m a s tic a r, m as a l cabo de
e s te tiem p o u n a re p u g n a n c ia in v e n c ib le la obligó á r e
n u n c ia r á ellas.
2 .° P o r dolores incesantes y crueles en el estó
mago. Como p a re c ía que e sto s d o lo res se r e d o b la ra n
in m e d ia ta m e n te d e sp u é s de la s co m id as, e sto e r a m o
tiv o de te m e rla s ó de to m a r los a lim e n to s e n la m e n o r
p o sib le c a n tid a d .
B ie n sa b e Y . c u á n ta in flu e n c ia tie n e n la s e n fe rm e
d a d e s de e stó m a g o so b re la p a r te m o ra l. C am ila e s ta
b a p o r lo g e n e ra l t r i s t e y ta c itu r n a . E l m en o r ru id o la
fa tig a b a , a u n el de la co n v e rsa c ió n . L a s m á s d e la s
v e c e s co m ía e lla so la, y s a lv a s dos ó tr e s ex c e p c io n es
h u ía la so cied ad de la s p e rso n a s que m á s a m ab a.
C uando vin im o s á n u e s tr a p e q u e ñ a c a s a de cam po
d e S c e a u x , c e rc a de P a r ís , á m ed iad o s de M ayo, c re i
m os u n m om ento q u e e s ta b a m e jo r, á lo m enos m o ra l
m e n te ; p e ro no ta rd a m o s en re c o n o c e r que su e sta d o ,
p o r él c o n tra rio , se a g ra v a b a . C ad a vez com ía m en o s;
ib a e n flaq u ecien d o , y su s fu e rz a s d ism in u ía n de d ía en
d ía . Con g r a n p e n a , a p o y a d a en m i b ra z o , d a b a el
p a se íto p re s c rito p a r a d e sp u é s de la d u c h a h id ro te rá -
p ic a . P a s a b a g r a n p a r te d el d ía a c o s ta d a en su cam a
ó te n d id a en el sofá.
N u e s tr a in q u ie tu d c re c ía , á p e s a r de que el m édico
DE NUESTRA SEÑORA DE LOURDES 385
ji I
VI
aSeñor Superior:
«Considero como un deber enviar á V. la narración
de una curación instantánea que reúne todos los ca
racteres de prodigiosa.
«La Sra. Mallet de Arnal, de veintisiete años de
edad, vivía en París con sus padres, su marido, su
hija de cuatro años y otra niña que criaba con sumo
trabajo, al cual se añadió una enfermedad de pecho
que le sobrevino. La criatura fué destetada y murió
algún tiempo después, y la enfermedad de la madre
hizo los más rápidos progresos. Desde el mes de Ene
ro último arrojaba sangre. Un médico le dijo que no
estaba tísica, pero que lo estaría después, y la lleva
ron al campo.
-Su padre, á quien conozco desde su juventud, me
DE NTJESTEA SEÑOEA D E LO U ED ES 391
VII
Mi reverendo Padre:
HabiendoV. manifestado últimamente á dos de nues
tras Religiosas que han estado de paso en Lourdes el
deseo de tener algunos pormenores sobre la curación
de la H. María Bernardina, de nuestra Comunidad,
para mayor gloria de María Inmaculada me apresuro
á satisfacer sus deseos dirigiéndole una copia de la
relación consignada en nuestra Semana Litúrgica,
del 19 de Julio de 1874.
-El Hospicio de Niort ha vuelto á obtener este año
un señalado favor, favor bien merecido si es permitido
DE NUESTRA SEÑORA D E LOURDES 395
hablar así, pues desde la inauguración de las pere
grinaciones de Lourdes este estableciniento, bajo la
dirección de Mr. Cotillón, su piadoso capellán, no ha
cesado de dirigir hacia la Gruta fervientes y numero
sas caravanas de Hijas de María.
nEl Rdo. P. Briant, celoso organizador y pudiéra
mos decir apóstol de las peregrinaciones niortesas, nos
ha escrito la carta que va á leerse á propósito del su
ceso de que se tra ta : .
« B e ia nt , p. «?-■”
VIII
IX
m e n te la sa lu d en la G r u ta de L o u rd e s el m a r te s 18
d e A g o sto . N ació el 19 de M arzo de 1856, y p e r te
n ece á u n a fa m ilia c ris tia n a . Su p a d re , g e n d a rm e ( g u a r
d ia civ il) en M o n p a z ie r d u r a n te m uchos a ñ o s, es tip o
d e b o n d a d y d e le a lta d , po r lo cu al le lla m a n «el bu en
p a d re L a b o n n e .» E s te p u n d o n o ro so m ilita r se quedó
v iu d o d e sd e m u y jo v e n , y se c o n sa g ró e n te r a m e n te á
su s d e b e re s p ro fe sio n a le s y á la edu cació n de su s hijo s.
L a m a y o r de la s h ija s fué u n a se g u n d a m a d re de su s
h e rm a n o s y so b re to d o de M a ría , q u e e r a la m á s jo v e n .
E s t a te n ía un c a r á c te r vivo y a r d ie n te , p e ro e s ta b a
d o ta d a de e x c e le n te co razó n , y fué de p a r te de s u h e r
m a n a m a y o r ob jeto de u n a so lic itu d m a te r n a l.
A la edad de dieciséis años entró como pensionista
en la Comunidad de las Hermanas de Santa Marta,
de nuestra ciudad, y estaba allí hacía cerca de dos
años cuando el 19 de Marzo último, día en que cum
plía dieciocho años, se sintió fatigada. Se atribuyó al
principio esta indisposición á un exceso de trabajo, y
se creyó que bastaría el descanso para curarla. Entre
tanto la debilidad iba en aumento, y la enferma
tuvo que dejar el colegio el Domingo de Ramos, 29 de
Marzo, para retirarse á casa de su hermana. Algunos
días después una familia de Monpazier, muy adicta á
Mr. Labonne y á sus hijos, presentó á María al doctor
Mayrae, médico de Villereal, quien declaró que la en
fermedad era grave y que tenía su asiento en la me
dula espinal. Según las órdenes del médico, la fueron
aplicadas sanguijuelas y fricciones con bálsamo Oppo-
deldoch. El Doctor la visitó segunda vez, y prescribió
nueva medicación, sin que la enferma tuviese alivio.
412 CIENTO CINCUENTA M ILAGROS
m a ra v illo so suceso q u e a c a b a b a de te n e r lu g a r , y le
dio su b e n d ic ió n . E l P . S e m p é , s u p e rio r de lo s M isio
n e ro s, dió p e rm iso a l se ñ o r C u ra de M o n p a z ie r p a ra
q u e h ic ie ra e n tr a r e n la G -ruta á la q u e ta n m a n ifie s
ta m e n te se h a b ía v is to fa v o re c id a de la p ro te c c ió n de
la S a n tís im a V irg e n , y á to d a s la s jó v e n e s que la h a
b ía n aco m p añ ad o .
G ra n d e fué la d ific u lta d p a ra lle g a r de la C asa de
los P a d r e s á la G r u ta , p u e s se h a b ía p ro p a la d o y a el
ru m o r de la c u ra c ió n , y c a si to d o s los p e re g rin o s se
h a lla b a n re u n id o s e n la s in m ed iacio n es. L le g a d o s á la
G r u ta , n u e s tr a s H ija s de M a ría c a n ta ro n con to d o su
c o razó n el cán tico de acción d e g r a c ia s . L a m u ltitu d
p e d ía á g ra n d e s g r ito s q u e se m o s tra s e la jo v e n del
m ila g ro . H a b ía a llí u n sillón, y la hicim os s u b ir en él,
p e ro los que e s ta b a n re tir a d o s á la o rilla d e l G a v e no
p o d ían v e rla y re c la m a b a n e s te fa v o r. D u r a n te e s te
tiem p o la p u e r ta d e la r e ja q u e c ie r r a la G r u ta se
a b rió , y a p a re c ió u n h o m b re lle v a n d o en su s b ra z o s á
u n a n iñ a de diez a ñ o s, c u y a s p ie rn a s a c a b a b a n d e s e r
b a ñ a d a s e n la p isc in a , y e n el m om ento en que la bajó
e n la G r u ta , la n iñ a , p a r a lític a d e sd e h a c ía c u a tro
a ñ o s, se puso á a n d a r . Ig n o ra m o s la n a tu r a le z a del
m al q u e p riv a b a á e s ta n iñ a d e l uso de su s p ie rn a s ;
sab em o s que e ra in g le s a y q u e h a b ía v e n id o con su
p a d re y su s h e rm a n o s d e l in te r io r d e l C a n a d á . H a b la
b a in g lé s , y en d e r r e d o r n u e s tro n a d ie c o m p re n d ía su
id io m a. E l p a d re , q u e no podía h a c e rs e e n te n d e r, p r e
s e n ta b a á la m u ch ed u m b re la s m u le ta s de su h ija . E l
e n tu sia sm o llegó e n to n c e s á su colm o. P o r to d a s p a r
te s se a c la m a b a á N u e s tr a S e ñ o ra de L o u rd e s .
D E NU ESTRA SEÑORA D E LO U RD ES 419
L a g e n te , d e se o sa de v e r á n u e s tr a e n fe rm a y de
o ir h a b la r de su e n fe rm e d a d y de su cu ra c ió n , a n d a b a
sie m p re e n b u sc a de e lla .
H a y d e la n te de la G r u ta , a l lado de la ro c a donde se
a p a re c ió la S a n tís im a V irg e n , u n p u lp ito d e sd e el cu al
se a c o s tu m b ra d a r la d e sp e d id a á los p e re g rin o s .
A c o rd a ro n h a c e r s u b ir á él á la jo v e n p ro te g id a de
M a ría con el a b a te R e y , c u ra de M o n p a z ie r, y o tro
s a c e rd o te . E l a b a te R e y refirió la e n fe rm e d ad de la
S r ta . L a b o n n e y el suceso de su c u ra c ió n , y cuand o
dijo q u e se lla m a b a M aría Labonne, uno d e los a s is
te n te s e x c la m ó : « ¡ Y es la b u e n a M a ría q u ie n la h a
c u r a d o ! >• L a s a clam acio n es c o n tin u a ro n . L a s e ñ o rita
L a b o n n e bajó d e l p u lp ito . L a s g e n te s se p re c ip ita b a n
á su a lre d e d o r, la a b ra z a b a n , la h a c ía n firm a r e s ta m
p a s y to c a r ro s a rio s . J a m á s se h a v isto u n a m a n ife s
ta c ió n m ás co n m o v ed o ra. E l P . R e y se vió o b lig ad o á
d e c ir v a r ia s v eces á la m u ltitu d , c a d a vez m á s com
p a c ta y a p iñ a d a : « ¡N o v a y a n V ds. á m a ta rn o s á e s ta
q u e rid a jo v e n , a h o ra q u e la S a n tís im a V irg e n nos la
h a c u r a d o !»
C o n d u jero n á M a ría á la ro to n d a , h a c ié n d o la se
g u ir e l se n d e ro q u e s e r p e n te a la m o n ta ñ a : a llí en su
c o m p a ñ ía cen am o s, y la que p o r la m a ñ a n a no po d ía
s e r v ir s e á sí m ism a nos s irv ió p o r la noche sin n in
g u n a fa tig a . L u e g o fué a l pueblo con el se ñ o r C u ra
de M o n p a z ie r y con u n a de su s c o m p a ñ e ra s á com
p r a r o b jeto s de p ie d a d , y n o so tro s la e n c o n tra m o s s i
g u ie n d o en m edio de los p e re g rin o s de M o n p a z ie r la
p ro c e sió n con h a c h a s e n c e n d id a s. L a d e sp e d id a á la
G r u ta y la s e x clam acio n es en h o n o r de M a ría nos ha-
420 CIENTO CINCUENTA M ILAGROS '
b ía n conm ovido p ro fu n d a m e n te , y to d o s c a n tá b a m o s
con e n tu sia sm o . N u e s tr a d ic h a e r a in m e n sa , y la em o
ción s o b re n a tu ra l de n u e s tr a s a lm a s im p o sib le d e d e s
c rib ir. N o su sp e n d ía m o s n u e s tro s c a n to s sino p a r a
d e r r a m a r lá g rim a s de a le g ría . L a p ro cesió n se hizo
d e sd e la G r u ta h a s ta la e sta c ió n , y la S r ta . L a b o n n e
la sig u ió sin e x p e rim e n ta r la m e n o r la tig a , rec ib ie n d o
en el tr a y e c to los te stim o n io s m á s v iv o s d e sim p a
tía . P a r tim o s de L o u rd e s á la s n u e v e y m e d ia , y lle
g am o s á L ib o s el m ié rc o le s p o r la m a ñ a n a á eso d e
la s cinco. A llí to d o s q u e ría n o ír c o n ta r el suceso d e la
v ís p e ra , y nos e ra p re c iso r e p e tir to d o s su s d e ta lle s .
L a em oción se a p o d e ró d e to d o s los c o razo n es cu an d o
v ie ro n p r e c ip ita r s e á n u e s tr a jo v e n en los b ra z o s de
su p a d re y de su h e rm a n a . E n v e rd a d , to d o s llo r á b a
m os, p ero n u e s tr a s lá g rim a s e ra n m u y d u lces.
L a S r ta . L a b o n n e p asó el m ié rc o le s con su p a d re
e n F u m e l, y lleg ó á M o n p a z ie r el ju e v e s á co sa d e la s
d iez. T o d a la población e s ta b a en pie p a r a v e r a n d a r
y -c o rre r á la que la a n te v ís p e r a no p o d ía d a r u n p a so .
S e d irig ió á la ig le sia , y el s e ñ o r C u ra la re c ib ió y
llev ó al a l t a r de la S a n tísim a V irg e n , en dond e se
c a n tó el Magníficat.
A la s s ie te de la m a ñ a n a s ig u ie n te tu v o lu g a r la
M isa de acció n de g ra c ia s . ¡Q ué e n c a n ta d o ra y q u é
d e lic io sa fie sta ! n a d a f a lta b a e n e lla : aflu en cia de
g e n te , c a n to s p iad o so s, co m u n io n es n u m e ro sa s, todo
h a b ía . E l a l t a r de la S a n tís im a V irg e n e s ta b a m a g n í
fic a m e n te a d o r n a d o ; u n sillón y u n re c lin a to rio con
flo res b la n c a s h a b ía n sido p r e p a ra d o s p a r a n u e s tr a
jo v e n a fo rtu n a d a .
DE NDESTBA SEÑOEA DE LODEDES 421
U n p e r e g r in o .
pjimimimiiimiiiiimiiiiii iiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiim iiiliiiiiiiitiniiiiitiiiiiim iiiillliiillliiliiiniiiiiiitiiiiliuii iHininiimmiiii'nitiimmiiimimmnniimi i'PMnimnn —
= |
-ti líiiiuiiiiiiiiiiiuiiKíiitiimuiuiiuiiuuiiiiiliiliiiiiiiiliiuuiiiiiliiimiimiiimiiimimiimuuumiimiimuiumiiiimiiiiiüimmmmmiiimiuimiimimiimuimuiuir:
DOCUMENTOS COMPROBANTES
N .° 1
«M onseñor:
«... Tengo verdadero gusto en poder d a r á V uestra Grandeza
las explicaciones que desea.
«La relación que V uestra G randeza ha leído en los Arm ales
de Notre Dam e de Lourdes tocan te al m ilagro obrado en favor
del joven Edme Rem y, de Pioérm el, fué red actad a por el abate
H illion, entonces profesor en el colegio de San E stanislao, de
Pioérm el, hoy obispo de Cabo H aitiano, teniendo á la vista la
narración que le hizo la Sra. Anger, abuela del joven.
«Los dignos y virtuosos padres del joven del m ilagro no se
dieron prisa á publicar este beneficio. Se contentaron por el
m om ento con dar gracias á Dios y á su In m acu lad a M adre en
424 DOCUMENTOS COMPROBANTES
N.° 1 bis
«Invitado por la S uperio ra de la Congregación de señoras Ur
sulinas de Pons á decir lo que sabe sobre la enferm edad y cu ra
ción de la Sra. D.a Justin a, en R eligión sor P ..., el que subscribe
hace la siguiente declaración, lim itándose á enunciar los hechos
cuya interpretación no le corresponde.
«Hace dos ó tres meses la H erm ana P ... me enseñó un tum or
situado en el costado izquierdo. Este tu m o r tenia el volum en de
un huevo de palom a, estaba duro, sin adherencia y la ocasiona
ba vivos dolores. La enferm a a trib u ía su origen á un golpe que
había recibido. Dicho tum or me pareció de natu raleza cirrosa,
v empleé para curarlo los medios ordinarios, que no dieron re
sultado alguno.
DOCUMENTOS COMPEOBANTES 425
«Hace algunos días, quince poco más ó menos, me anunció la
H erm ana P ... que estaba curada, que no sufría ya y que el tu
m or había desaparecido. Me certifiqué en efecto de la verdad
de esta aserción, y no hallé traza alguna del tum or.
«La H erm ana me refirió entonces que había sido c u rad a con
el agua de Lourdes, casi instantáneam ente, después de dos ó
tre s aplicaciones de dicha agua y d urante el curso de una novena.
t P o n s , 7 M a y o d e 1872.
«D r . A r d o u i n .»
N.° 2
N.° 3
» B r u j a s , 29 d e J u l i o d e 1871.
N.° 4
P if f o n , doctor médico.
N.° 5
N .° 6
N.° 7
«Al hacer mis prim eras visitas ó la joven Sim onneau hace más
de cinco años, había anunciado que la enferm a no tenía proba
bilidades de curación sino después de largos sufrim ientos y de
accidentes gravísim os, y ta l vez á costa de una enferm edad per
m anente, la anquilosisde la articulación peróneo-tibio-tarsiana.
Efectivam ente, la joven Sim onneau ha estado constantem ente
clavada en su lecho desde esta época. Ha tenido abscesos nu
merosos y sucesivos, y fístulas en diferentes p artes: secuestros
m últiples y volum inosos han acabado por salir penosam ente.
Los dos huesos de la pierna derecha han estado enfermos en su
m itad inferior, pero principalm ente el peroneo, cuyas deform i
dades se pueden ap reciar todavía fácilm ente. Este hueso, que en
lo norm al es recto y liso, está desigual, grueso y tortuoso en su
dirección desde su m itad h asta el tobillo.
«Recuerdo que cuando yo asistía á la enferm a, todo el miem
bro estaba incapaz de m ovimiento voluntario ó com unicado; lo
que se explica muy bien por la enorm e hinchazón que existía,
por el dolor, por la tensión y el cambio de los m úsculos y de sus
tendones, y por el estado inflam atorio de todos los tejidos. Du
ran te varios años la joven Sim onneau no ha podido hacer el
m enor uso de su pierna d erech a; y recuerdo tam bién perfecta
m ente que el 11 de M arzo de 1872, habiendo sido llam ado á asis
tirla p ara una afección aguda de otro género, no pude hacerla
sen tar sobre el sillón p ara au scu ltarla, por estar envarado y do
loroso el m iembro inferior derecho h asta el punto de no pres
tarse á ninguna flexión. En aquel entonces no di im portancia
a ctu a l á una enferm edad antigua y crónica cuyo procedim iento
racional se había hecho y se hacía siem pre regularm ente, y cu
yo resultado previsto é inevitable, según mi opinión, era la an -
quilosis si las supuraciones llegaban á extinguirse y los huesos
gangrenados á purgarse.
«Después de esta época no volví á ver á la enferm a, que con
fieso no podía fijar especialm ente mi atención, dado que la
ciencia no tiene arm as p a ra com batir estas graves lesiones des
graciadam ente dem asiado frecuentes, ni era posible prever una
curación que parecería sorprendente.
«Habiendo tenido hoy ocasión de ver á mi an tig u a enferma,
que me dijeron se había curado, he exam inado con toda la aten
ción posible su estado. A p rim era vista me sorprendió su ap a
riencia de salud, contrastando singularm ente con la fisonomía
lánguida que yo le había conocido. Me sorprendió verla venir á
DOCUMENTOS COMPBOBANTES 431
tni encuentro con aire alegre y esbelto, co ntrario á la diátesis
escrofulosa que padecía y á la anquilosis del pie. He explorado
la articulación, enferm a en otro tiem po, y las llagas antiguas
que yo había reconocido, y he podido convencerm e que no
existe ninguna traza de anquilosis de la articulación peróneo-
tibio-tarsiana. Las llagas que se habían producido en diferentes
épocas encim a del maléolo externo, están entera y reciente
m ente cicatrizadas : el color rosa y la apariencia de la super
ficie del tejido cicatricial dan prueba de ello, como las c ica tri
ces son y serán siem pre testigos indelebles y característicos
de la lesión diatèsica que he reconocido. No hay dolor alguno
á la presión ni en el movim iento. L a piel está adh erid a al pe
roneo, y se siguen todos los contornos rugosos de este hueso,
cuyas desigualdades consiguientes á la elim inación de los se
cuestros y al trabajo de reparació n se aprecian perfectam ente.
«Existe un volumen considerable en el cuello del pie y en la
m itad inferior de la pierna, debido á las concreciones huesosas
que han reem plazado al hueso norm al, y á la elevación consi
guiente de los tendones y m em branas, pero sin hinchazón ede
m atosa ni inflam atoria. En fin, me es.im posible negar que la
pierna de la joven Sim onneau está cu rad a, y cu ra d a más com
pletam ente de lo que podía esperarse después de una enferme
dad tan terrible.
«Al mismo tiem po, el estado general es'm uy bueno. T anto la
enferm a como sus padres me han asegurado que las supura
ciones habían cesado hacía unas tres sem anas, lo cual con
cuerda con el aspecto de las cicatrices, y que desde entonces la
libertad del m iem bro se había m anifestado. Según me han di
cho, la época de esta curación tuvo lugar en un viaje que la
enferm a hizo á Lourdes.
«La cicatrización muy ráp id a y definitiva de los tejidos blan
dos y huesosos es ya un resultado que me parece adm irable y
que la ciencia explicaría difícilm ente. Pero la anquilosis verda
dera ó falsa, com pleta ó incom pleta, que se cure tan fácil y tan
prontam ente me parece inexplicable, y yo afirm o que la a n q u i
losis verdadera es absolutam ente incurable por los recursos de
la naturaleza y del arte. ¿H a existido esta anquilosis en el caso
presente? l o no puedo certificarlo, no habiendo tenido ocasión
de com probarla antes de la reciente curación. P ero estoy mo
ralm ente convencido que la anquilosis debía existir, verdadera
ó Jalao,. En efecto, si se adm ite que la anquilosis verdadera no
432 DOCUMENTOS COMPROBANTES
«H. M o r ea u , doctor.
*
DOCUMENTOS COMPEOBANTES 433
N.° 7 Us
i
Señora B aronesa:
«Acabo de leer con el m ás vivo interés la m em oria que ha te
nido Y. la bondad de enviarm e, la cual contiene con una exac
titud perfecta todos los padecim ientos que ha sufrido V. y todas
las fases de la larg a y dolorosa enferm edad que ha soportado
con ta n ta paciencia como valor.
«He tenido el honor de ver á V. con frecuencia en su lecho de
dolor, y su noble resignación á la voluntad de Dios me h a im
presionado siem pre, con ta n ta m ás razón cuanto que V. estaba
convencida como yo hacia m ucho tiem po de la im potencia de
la m edicina.
«¿Por qué no había de decirlo el médico de buena fe? Si, es
v e rd a d : V. tenía una de esas enferm edades graves que term inan
casi siem pre de una m anera lastim o sa; era V. presa de sufri
m ientos atroces; había V. llegado á esa edad de la vida en que
las enferm edades tom an un grado m ás de grav ed ad ; los rem e
dios m ás diversos que había aconsejado la experiencia de tres
m édicos afectos á su persona y am igos de su fam ilia fueron re
conocidos im potentes; hacía m uchos meses que nos vimos re
ducidos á no d ar á V. m ás que consuelos y testim onios de sim
patía, cuando me hizo V. saber que su señora hija había partido
p ara Lourdes con intención de pedir á la S antísim a Virgen la
curación que la m edicina no podía procurarle. Si no recuerdo
mal me habló V. de oraciones que se hacían al mismo tiem po,
según su intención, en Brive, Tulle, Lourdes y otros p u ntos; yo
me alegraba de esta últim a esperanza que quedaba á la fam ilia
de V., pero no me atrevía á p artic ip a r de su confianza.
«O chodías después M r. de L am berterie me escribía: Venga
«V. á felicitarnos: la señora se ha cu ra d o : demos por ello g ra -
«cias á N uestro S eñora de Lourdes.»
«Luego que llegó la c a rta partí, y tuve el gusto de reconocer
que la tim panitis había desaparecido, que el volumen enorm e
del hígado no existía, que los órganos abdom inales, tan seria
m ente com prom etidos algunos días antes, habían recobrado su
estado norm al.
rs
434 DOCUMENTOS COMPROBANTES
11
«S eñora:
«No me corresponde re la ta r las diversas fases de la larg a y
grave enferm edad que h a tenido Y., por no haber seguido su
curso com pleto y no haber sido llam ado al honor de asistir áV .
sino en los últim os tiem pos de su enferm edad, es decir, h acia
fines de Julio de 1872. P ero lo que yo puedo decir es que enton
ces el estado de V. me pareció de los m ás graves, de los más
peligrosos, de los que no dejan la m enor esperanza de curación.
Este era el lenguaje que yo usaba con los m iembros de su fa
m ilia que me preguntab an acerca de su situación, y debo re
conocer que su restablecim iento ha sido p a ra mi de los más
inesperados, y p ara el cual se puede invocar una intervención
sobrenatural.
«Al dirigir á V., señora, este resum en de mi apreciación por
haber sido felizm ente cu rad a, formo los votos m ás sinceros por
su duración, y ruego á V. acepte el hom enaje de mi profundo
respeto y afecto.
« P om arel.
•B rive, 12 de J u lio de 1873.»
111
«Señora B aronesa:
;He leído con mucho cuidado é interés la relación que ha
querido Y. som eter á mi juicio. No puedo menos de ap ro b arla
en todas sus partes; m as como en él se exponen hechos que no
DOCUMENTOS COMPROBANTES 435
necesitan mi testim onio, que p ara nada les sirve, considero más
sencillo, recordando y consultando mis notas, re d a c ta r un pe
queño resum en que dirijo á V. con mi certificación firm ada.
H abiendo sido observados estos hechos que recuerdo por mis
colegas lo mismo que por mí, podrían som eterse tam bién á su
a p reciació n ; y me sería muy grato que mis honorables colegas
se sirvieran m odificar ó corregir mis observaciones como les
pareciera, pues de antem ano me someto á su juicio y á las mo
dificaciones que crean conveniente hacer.
«Reciba V., señora Baronesa, nuevam ente mis felicitaciones
p or los favores que se ha dignado concederle la R eina de Lour
des; confio que su poderosa A uxiliadora, cuya intervención me
hago un honor y un deber en reconocer, se servirá com pletar
su obra y darle duración; esta será una recom pensa m erecida
p or su fe bien probada, sus oraciones y las aprem iantes instan
cias de esos ángeles de la fam ilia de V. que han sabido ab rir
las m anos de la divina M adre de nuestro Salvador.
«Ruego á V. acepte, señora Baronesa, el hom enaje respetuoso
de su hum ilde y afectísim o servidor,
«D r . R r u n .
N.° 8
IN F O R M E D E L M É D IC O
F irm a d o : E u o e n io T i i i b a u i .t , d. m.
N.° 9
T E S T IM O N IO S D E L O S N O T A B L E S D E C H A B E IS , Y D E L O S
P A D E E S D E L A S E T A . A U E E L IA B EU N E AU
E l alcalde de Chabris,
F a u t e r f.a u .
B runeau. — M. de B runeau.
B runeau, notario.
D O S C E R T IF IC A D O S D E L DH. DE LA M ARDELLE, M É D IC O
DE C H A B R IS
(A q u í hay un sello de la A lc a ld ía ).
Df. la M a r d e l l e , d. m.
E l alcalde, C h a m p io n .
(L u g a r del sello de la A lc a ld ía J .
«
DOCUMENTOS COMPROBANTES 443
N.° 10
Yo, A lejandro Francisco Aubry, doctor en m edicina, certifico:
que he asistido á una R eligiosa franciscana, conocida en su
C om unidad de Blois con el nom bre de so r M aría de la Anun
ciación; que las m edicinas adm in istrad as por mi desde Abril
de 1871 á Agosto siguiente á fin de obtener las supuraciones su
cesivas de una fístula, no pudieron conseguir la curación de
ella, la cual me pareció entonces era im pedida por el tem pera
mento edemutoso de la enferma.
Desde la época en que dejé de visitarla (Agosto de 1871) y en
diferentes veces que he estado en la Com unidad p a ra o tras per
sonas, tuve ocasión de ver ú la H. A nunciación andando en el
patio de la casa con m ucha dificultad y dolores gran d es; y
supe después, ha cosa de un año poco m ás ó menos, que esta
R eligiosa había curado, es decir, que la llaga fistulosa perianal
estaba cicatrizada, y que había recobrado con la libertad per
fecta de sus movimientos la desaparición de sus dolores.
BlolS, 29 O ctu bre de 1873.
Dr. A ubry.
N.° 11
N.° 12
C E R T IF IC A D O D E LO S M É D IC O S
«Señorita:
«Si soy uno de los últim os en felicitar á V. por su m ilagrosa
curación, no tengo necesidad de decirle que he sido uno de los
prim eros afortunados en saberla.
«La triste situación en que dejé á V. el año pasado y que no
podía m ejorarse por los medios puram ente hum anos, me venía
m uchas veces á la m em oria; así es que mi alegría ha sido
grande cuando el telegram a de V. me dió la g rande noticia de
su resurrección, pues V. es verdaderam ente una resucitada y
adem ás una elegida, porque Dios no hace sem ejantes m ilagros
para los corazones indiferentes.
«Ruego á V:, pues, no olvide en sus oraciones al que ha he
cho esfuerzos afectuosos aunque ineficaces p ara a rra n c a r á V.
de la m arch a invasora de su enferm edad. Mi m ujer é hija, con
ten tas como todos los que han conocido á V. aquí, me encar
gan presente á V. sus recuerdos.
«Crea V., señorita, en mis sentim ientos afectuosos.
«F irm ado: D r . A. G r i m a u d .»
N.° 13
C E R T IF IC A D O
A v r a n c h e s , 6 d e M a rz o d e 1876.
F irm ado: P. C o c h g t , d. m .
CERTIFICADO
N.° 14
«Señor D octor:
«Perm ítam e V. solicite de su bondad u n a exposición concien
zuda y exacta de la natu raleza y de la gravedad de la enferme
dad de nuestra querida herm ana D orotea, superiora local del
convento de M ostuejouls, á la cual asistió V. con ta n ta inteli
gencia.
«Al mismo tiem po ruego á V., señor D octor, me diga si cree
que un viaje bastante largo y un baño de agua n atu ral y fría de
un cuarto de hora han podido b astar p a ra c u ra r espontánea y
radicalm ente su enferm edad.
«Mucho agradeceré á V. se sirva honrarm e con una contesta
ción inm ediata, que le ruego me dirija á la Besse.
S or A rthem ón,
«Superiora general de las Hermanas de San José.v
C O N TE STA C IÓ N Q U E D IO Á E ST A C A R T A E L P R IM E R O D E E S T O S T R E S
D O C T O R E S , M R . B O N N EV IA L E
«Señora Superiora :
«Acabo de recibir la carta de V., y conform ándom e con sus
deseos me apresuro á contestarle.
DOCUMENTOS COMPROBANTES 449
«He asistido á sor D orotea, superiora del convento de Mos-
tuejouls, y confieso que todos mis cuidados han sido inútiles.
«Esta H erm ana tenía una enferm edad muy grave, una hem i
plejía, ó para em plear palabras que com prenda V. mejor, una
parálisis del muslo y de la pierna derecha.
«Después de un detenido examen había yo observado que la
locom oción era difícil y que la sensibilidad estaba casi extin
guida. Los nervios sensitivos y los nervios m otores estaban
igualm ente dañados. A dem ás, la tem p eratu ra del m iem bro en
fermo se hallaba m ás baja que la del m iem bro sano. La m esu-
ración no acusaba ningún principio de atrofia m u scu lar; única
m ente los músculos del m iem bro inferior derecho estaban m ás
flojos que los del m iem bro izquierdo.
«Una vez reconocidos todos los síntom as, a trib u í la enferm e
dad á una lesión de la m edula espinal, sea que la m ism a subs
tancia de la m edula estuviera a lterad a, sea que hubiera allí una
com presión ocasionada sobre esta substancia por una causa
m órbida.
«No me era posible disim ular la gravedad de la enferm edad,
y participé mis tem ores á o tra H erm ana del mismo convento.
La últim a vez que vi á sor D orotea, el 12 de Agosto últim o, la
enferm edad había hecho muy rápidos progresos y la parálisis
era com pleta. Carecía de m ovimiento y de sensibilidad, y tenia
una debilidad grande en toda la econom ía.
«Aconsejé las duchas y los baños de B alaruc por ser ésta la es
tación balnearia más com pleta. Pensaba yo que en este estable
cim iento se podría añ ad ir á la h id roterapia la electricidad, la es-
trignina, etc., etc. La H. D orotea me contestó diciendo que me
daba las gracias por el interés que yo tom aba por ella, y que se
guiría mis consejos. P ero en vez de dirigirse á B alaruc le pare
ció m ejor to m ar el cam ino de Lourdes, en lo que hizo bien,
puesto que el resultado de su viaje ha sido tan dichoso. Si real
m ente esta buena H erm ana ha sido espontánea y radicalm ente
curado, preciso es confesar que la S antísim a Virgen es m ás há
bil que los médicos. Las lesiones de que he hablado á V. no han
sido destruidas por ningún procedim iento m edical, y afirm o
que si han desaparecido por el efecto de un baño de un cuarto
de hora esta curación es milagrosa.
«F irm ado; B onnevialle , d . m :
«Millau, 12 de Septiembre de 1873.»
:9
450 DOCUMENTOS COMPROBANTES
CO NT E ST AC IÓ N D E L SE G UN DO M ÉD IC O , E L D R . LU BAC
N.° 15
CERTIFICADO DEL MÉDICO
V a il l a n t , c u r a .
E l a lc a ld e : D a n t ó n .
454 DOCUMENTOS COMPROBANTES
N.° 16
Certifico que al pasar sor M aría Sofía por Cette cuando iba
á N uestra Señora de Lourdes, he tenido ocasión de reconocer
que estaba atacad a del delirio de los lad rad o res en su m ás alto
grado, y que á su vuelta estab a com pletam ente c u ra d a ; ha sido,
pues, con verdadera sorpresa que he visto el entero restableci
miento de las funciones norm ales de su estómago.
C ette, 29 d e D iciem b re d e 1873.
D r . C é sa r D u m a s .
N.° 17
G r o s , d. m. P.,
médico del hospital.
J. G r o s , d. m. P .
’ DOCUMENTOS COMPROBANTES 455
N.° 18
N.° 19
L a g o u tte .
' ■
■
ÍNDICE
PÁSS.
P r e f a c i o ...................................................................................................................... f>
P r ó l o g o ........................................................................................................................ 9
A ñ o de 1 8 6 3
A .ñ o d e 1 8 6 9
A ño de 1 8 7 0
A -ño d e 1871
S o r R ó g a c ia n a .— M a ría F a n g e t.—S o r P .—L a S rta . M a ría S k r z y n s k a .—
L e ó n C o llo n g u e s .— M a u r ic ia L a g o r s s e .— L a S r a . G o u s s e .— L a s e ñ o r ita
B ly c k a e rts .— D o s jó v e n e s de lo s E s ta d o s U n id o s d e A m é ric a .— L a
S r ta . M a ll e r .—U n a s e ñ o r a p o r tu g u e s a e n e l B r a s il.
.
ÍN D IC E 461
A ñ o de 1 8 T 3
A ñ o de i 8 7 3
A ño de 1 8 7 4
F IN D EL ÍN D IC E D EL P R IM E R TOM O.
DE ERRATAS EN EL TOMO PRIMERO
36 6 á m i g rito á m í el g rito
39 17 to rn o to n o
45 15 h a n e s ta d o s in tie n d o e s tu v i e r o n s in tie n d «
74 28 G auset G auget
85 21 la f u e r z a d e fe la f u e r z a d e su te
89 19 e s ta d o c o s ta d o
141 21 s ú b d ito s ú b ito
16 4 4 E c h a n b ro g u e s E c h a u b ro g n e s
179 1 C u ra C u ra c ió n
243 18 s u je to s u je ta
257 20 s o rp o rta r s o p o rta r
303 12 p e re g r in a c ió p e re g r in a c ió n
328 15 c ó m o lo c ó m o la
330 19 Tedeum Te Devm
332 2 ir L o u rd e s ir á L o u rd e s
391 16 lo m a d r e la m a d re
434 3 s ú b d ita s ú b ita
441 15 E n un hecho E s un h ech o
20 a l m is m o d ía e l m is m o d ía