Ana Ruth Arias Venera

Giovanni Orlando Unda Parga

BIOLOGIA DE PLANTAS
EDGAR LEONARDO LINARES C.

LA VIDA Y EL BOSQUE

Como característica principal observamos que estas plantas generan una tendencia a
agruparse; independientemente de la especie y la forma vemos que crean una relación
simbiótica entre ellas, además con los microclimas y el ambiente generado a raíz de esa
agrupación, es propicio y se hace posible una gran variedad, al igual que mayor cantidad.
Encontramos así mismo y en unos mismos espacios grandes angiospermas acompañadas de
una extensa variedad de briofitos y helechos.

Esta gran diversidad se ve propiciada y afectada por la manera en que el bosque en

formación retiene humedad y permite la entrada y conservación de energía lumínica gracias
a la forma del bosque más superior; que tiende a ser circular en forma de algo similar a un
domo; otro aspecto y no menos importante es la gran cantidad de material orgánico en
descomposición, en donde encontramos partes de al menos un milímetro de espesor de
dicha materia, ambiente propicio para aumentar las probabilidades de una mayor
vegetación gracias a la disponibilidad de recursos. En su gran mayoría la materia orgánica
presente en el suelo se debe a la senescencia prematura de especies, que debido a la
competencia por recursos no obtienen el nivel adaptativo necesario para pervivir en ciclo
ecológico y mueren para dar paso a otros individuos más capaces y mejor previstos para en
lugar específico, con todo esto se mantiene un ciclo ecológico más eficiente para generar
diversidad y cantidad.

En algunas plantas de menor tamaño se observa una característica común respecto a la

uniformidad del suelo donde tienden a desarrollarse, al contrario especies de mayor tamaño
con formaciones radicales más profundas y mejor adheridas al suelo, que tienden a ubicarse
en zonas más inestables que tienden a pendiente.