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ENERGÉTICO
Marco Vinicio Félix Lerma1 , Ramón Navarrete Reynoso2 , Virginia Villa Cruz3 , Beatriz
Adriana Esparza Ramirez4
1,2,3,4
Instituto Tecnológico Superior de Lagos de Moreno,
1 mvfl123@hotmail.com, 2 navarrete_ramon@hotmail.com, 3 vivicdidi@hotmail.com,
RESUMEN
Se presentan los fundamentos de la electrólisis alcalina del agua como una alternativa
viable al problema de encontrar fuentes de energía no contaminantes. Se revisan
algunos de los métodos tecnológicos para la obtención de hidrógeno y se hace una
comparación entre ellos considerando tanto sus eficiencias como sus efectos sobre el
medio ambiente. Se plantea que La electrólisis es el método más importante para la
obtención de hidrógeno a partir del agua y se proponen los experimentos a seguir para el
desarrollo de un electrolizador óptimo, es decir, aquel que minimice el costo total del
proceso y maximice el beneficio energético obtenido. Asimismo se presentan los
fundamentos termodinámicos que dirigen la búsqueda del mejor electrolizador posible.
I. INTRODUCCIÓN
Tecnología del futuro: la economía del hidrógeno
Las tecnologías del hidrógeno pueden ser un soporte y punta de lanzamiento para estos
retos mundiales de producir energía sin mermar el medio ambiente natural y contribuir
al desarrollo de nuevos sistemas energéticos [1], [8]-[10]. A este respecto la llamada
“economía del hidrógeno” considera un escenario futuro en el cual se produce
hidrógeno a través de procesos limpios de bajo costo que utilizan fuentes renovables de
energía. Diversos progresos tecnológicos recientes están contribuyendo a la reducción
de costos, avances en el conocimiento y mayor aceptación social de estas tecnologías
del hidrógeno [1], [16]-[23].
La electrólisis del agua consiste en hacer circular corriente directa (CD) a través de una
solución acuosa para romper la molécula del agua en sus componentes hidrógeno y
oxígeno [30]. La corriente eléctrica fluye entre dos electrodos separados e inmersos en un
electrolito para lograr la conductividad iónica. Los electrodos deben ser hechos de
materiales resistentes a la corrosión, tener una buena conductividad eléctrica, exhibir
buenas propiedades como catalizadores y mostrar una adecuada integridad estructural.
El electrolito debe conservar sus propiedades físico-químicas así que se debe evitar que
permita cambios durante el proceso, por ejemplo, no debe reaccionar químicamente con
los electrodos. El proceso de electrólisis requiere la implementación de un diafragma o
separador para evitar la recombinación de hidrogeno y oxigeno que fue generado en los
electrodos. La resistencia eléctrica del separador previene el corto circuito de los
electrodos. Sin embargo el separador debe poseer al mismo tiempo una alta
conductividad iónica. Los diafragmas deben mostrar una alta estabilidad física y
química. Los electrodos, el diafragma y el electrolito son los elementos que configuran
a la celda electrolítica. La reacción global de electrólisis que se lleva a cabo es
(1)
En el proceso de electrólisis los electrones son secuestrados o liberados por los iones
localizados en las superficies de los electrodos dando así lugar a un sistema multifásico
solido-liquido-gaseoso. La mitad de la reacción química total, la reacción de reducción
se lleva a cabo en el cátodo del electrolizador. Los electrones fluyen a este electrodo
desde el circuito exterior y lo polarizan negativamente. La reacción de oxidación ocurre
en el otro electrodo del electrolizador llamado ánodo. Los electrones fluyen desde el
ánodo hacia el circuito exterior polarizándolo positivamente. De esta forma, el
hidrógeno es generado en el cátodo y el oxígeno en el ánodo.
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Sin embargo, en un proceso electrolítico real Vtn >V H. La razón de esto es el consumo
adicional de energía, tanto eléctrica como térmica, causado por las irreversibilidades
termodinámicas que están principalmente relacionadas con el vapor de agua contenido
en los flujos de hidrógeno y oxígeno, las temperaturas y presiones de operación que son
más bajas con respecto a las teóricas, y por el hecho de que el proceso en realidad no es
adiabático y por ello hay perdidas térmicas por convección y radiación [42].
Figura 1
Evolución del consumo de energía de un proceso de electrólisis ideal (a) como función de la
temperatura a presión standard (1 atm); (b) como función de la presión a temperatura standard
(298.15 K). Las gráficas fueron tomadas de la referencia [44].
La energía eléctrica demandada por la reacción de electrolisis G decrece conforme la
temperatura se incrementa; por otro lado la demanda térmica T S se incrementa. En el
estado líquido el consumo total de energía H decrece ligeramente (entre 298 y 373 K)
conforme la temperatura se incrementa, mientras que en el estado gaseoso sólo crece un
poco. Nótese que por encima de los 373K el calor latente para la vaporización del agua
(40.8kJ/mol) debe ser tomado en cuenta para satisfacer la demanda energética del
proceso. El consumo de energía eléctrica es significativamente más bajo a altas
temperaturas. Esta es la razón por la cual la electrolisis al vapor tiene un gran potencial.
En principio, mientras la temperatura se incrementa de 25 a 1000 o C, G disminuye de
237.2 a 177.5 kJ/mol, lo cual es una reducción del 25.1%. Sin embargo, se requeriría de
una fuente de calor a alta temperatura para satisfacer la exigencia térmica del proceso.
T S se incrementa de 48.6 a112.9 kJ/mol, es decir, un aumento del 132.3% en el mismo
rango de temperaturas. La figura 1(b) muestra la influencia de la presión sobre el
consumo de energía con el electrolizador operando a temperatura standard (298.15 o K).
A esta temperatura y con la presión en el rango (1-100atm), la reacción se lleva a cabo
en la fase liquida. La demanda de energía eléctrica G crece en forma logarítmica
conforme la presión aumenta; más precisamente, aumenta en un 7.3% cuando la presión
varia de 1 a 100 atm. Contrariamente a la demanda eléctrica, el consumo térmico de la
reacción T S disminuye con la presión en un 35.5 % en el mismo rango de presiones.
El consumo neto de energía de la reacción de electrólisis H permanece prácticamente
constante mientras la presión va creciendo. Decrece apenas en un 0.03% en dicho rango
de presiones. A este respecto, el incremento de la demanda eléctrica dentro del rango de
presiones considerado (alrededor de 17.2 kJ/mol) resulta compensado por el
decremento de la energía térmica requerida.
Cuando se suministra corriente directa (CD) a una celda electrolítica para generar
hidrógeno el voltaje de la celda Vcel se incrementa con respecto a Vrev . Esto resulta así
debido a las irreversibilidades de la celda, como los sobrevoltajes y corrientes parásitas
que generan pérdidas de energía y limitan la eficiencia de la celda. El voltaje de la celda
Vcel puede ser expresado como la suma del voltaje reversible y los voltajes adicionales
que aparecen en la celda:
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Figura 2
Curva característica I – V de una celda electrolítica alcalina para temperaturas de 25o C y 65o C a
una presión de 20 bar. La gráfica fue tomada de la referencia [44].
Las curvas I – V muestran que cuando el voltaje de la celda es menor que Vrev la
corriente en la celda se anula y la reacción de electrólisis no se lleva a cabo. Cuando el
voltaje de la celda está entre Vrev y Vtn se debe hacer entrar calor a la celda para que la
electrolisis pueda ocurrir. Este contenido energético es igual al producto entre la
diferencia Vtn – Vcel y la corriente de la celda Icel. Cuando el voltaje de la celda es mayor
que Vtn el poder suministrado a la celda es siempre mayor que el mínimo requerido por
el proceso (Vtn x Icel) y entonces la electrólisis puede ocurrir.
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IV. Perspectivas de desarrollo: ¿Cómo abatir los costos de generación de
hidrógeno?
IX. REFERENCIAS
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