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Configuración del abuso: la usura financiera

en Santa Rosa
Este informe fue realizado por el diputado provincial Luis Solana y es una investigación que
tiene como objetivo de comprender la dimensión del sistema financiero en Santa Rosa y
advertir sobre lo que está ocurriendo y sus consecuencias. El trabajo de campo fue
desarrollado por jóvenes del Partido Socialista durante el mes de febrero.

El Costo Financiero Total

Cuando una persona obtiene un préstamo la tasa de interés no es el único dato que se debe
tener en cuenta. A los intereses calculados con la Tasa Nominal Anual hay que adicionarles
gastos administrativos por obtener el crédito más gastos mensuales como seguros e
impuestos, de lo que resulta el COSTO FINANCIERO TOTAL, que es la verdadera carga de un
préstamo, y como veremos más adelante en algunos casos explica lo que nos hace devolver en
solo un año, más de dos veces lo que nos han prestado.
A modo de ejemplo para quien toma un crédito en el Banco de La Pampa la Tasa Nominal
Anual es del 35% pero en realidad pagara 51% anual, ese es su Costo Financiero Total.
Aclaramos que nuestro banco provincial es una de una de las entidades que tiene menores
tasas del mercado (aunque es altísimo el precio que pagamos para que nos preste dinero), y
cumple también con informar en sus sitios de internet la TNA y el CFT. Si bien son altas las
tasas del banco público, el sentido de este informe es alertar sobre el delito masificado de la
usura que llevan adelante casas de préstamo o financieras privadas, que no están alcanzadas
por las regulaciones del banco central, pero que tampoco son puesta bajo la lupa de
organismos de Defensa del Consumidor, Poder Judicial, AFIP, Rentas o controles locales.

Motivos por los que una persona es víctima de la usura financiera

Lo que no hay duda es que la usura se nutre en gran parte de familias de escasos recursos o
trabajadores de sueldos insuficientes, que hoy forman la inmensa mayoría de ellos. Poco
importa a los fines de este informe el destino que cada persona le dé al préstamo ya que no se
trata aquí de abrir juicios morales -basados muchas veces en prejuicios clasistas- sobre qué se
compra con el dinero.
Esto ocurre por varios motivos:

1) Urgencia en satisfacer necesidades: En muchos casos regularizar servicios de luz, gas,


alquiler, alimentación, vestido, salud, etc, es una necesidad que no se resuelve
racionalmente midiendo las consecuencias enmarañadas que producen los préstamos
utilizados para ello.

2) Complejidad de la operación: En la práctica una persona observa su disponibilidad


mensual de dinero que tiene para pagar una cuota. Frente a una urgencia me prestan
$10.000 a devolver en 36 cuotas de $1500, sin sospechar que el CFT es del 180% como
veremos en los ejemplos de nuestro medio, y mucho menos que terminaré
devolviendo $54.000 al finalizar el plazo. La verdad que necesitaría de varios
profesionales asesorándola para que pueda entender la letra chica de la letra chica de
esos préstamos.
3) Publicidad: Las promociones para captar consumidores de servicios financieros nos
muestran un exceso de felicidad a quien toma un crédito usurero. En general se
utilizan algunos famosos que legitiman las casas de préstamo, o familias con sus
sueños cumplidos a partir del crédito. De por sí, quien pasa por una financiera es
porque está en un situación acuciante y se somete a la usura no por estar feliz. Son
créditos de poco monto, pocos requisitos para el otorgamiento y altísimas tasas de
interés.

4) Única Oferta Crediticia: Están en el circuito informal no bancarizado, son


principalmente personas humildes, sin empleo, en general siempre con urgencias, y
necesitan créditos de bajo monto, para comprar pequeñas herramientas, pagar
servicios básicos o el almacén, compra de ropa escolar, etc. En estos casos la ausencia
del Estado convierte a las financieras en el monopolio financiero

En general son personas de bajos recursos que no están en condiciones de contratar


profesionales del Derecho para que los defienda por créditos tomados por 10 o 20 mil pesos.
Una vez que se capta el cliente y éste se atrasa en una o dos cuotas comienzan con las
gestiones de cobro, en general tercerizados, y el modus operandi es la intimidación
permanente. En general los estudios jurídicos se presentan a la Justicia y son los juicios que
más rápido avanzan ya que del otro lado la victima de usura no tiene recursos para contratar
abogados.

Tasas de préstamos que encontramos en entidades bancarias, privadas y no bancarias de


Santa Rosa

TIPO
FINANCIERA ENTIDAD MONTO CFT CUOTA TOTAL FINANCIADO
BANCA PUBLICA BLP $ 10.000 51,63% $ 1.069,00 $ 12.828,00
BANCA PUBLICA BNA $ 10.000 52,51% $ 1.060,91 $ 12.730,92
BANCA PUBLICA HIPOTECARIO $ 10.000 54,31% $ 1.096,00 $ 13.152,00
PRIVADA BANCO PRIVADO I $ 10.000 78,38% $ 1.227,00 $ 14.724,00
PRIVADA BANCO PRIVADO II $ 10.000 62,60% $ 1.071,02 $ 12.852,24
PRIVADA BANCO PRIVADO III $ 10.000 59,79% $ 1.125,00 $ 13.500,00
NO BANCARIAS FINANCIERA I $ 10.000 154,00% $ 1.675,00 $ 20.100,00
NO BANCARIAS FINANCIERA II $ 10.000 172,00% $ 1.789,00 $ 21.468,00
NO BANCARIAS FINANCIERA III $ 10.000 145,00% $ 1.620,36 $ 19.444,32
NO BANCARIAS ELECTRODOMESTICOS I $ 10.000 87,00% $ 1.328,00 $ 15.936,00
NO BANCARIAS ELECTRODOMESTICOS II $ 10.000 113,00% $ 1.558,30 $ 18.699,60
NO BANCARIAS ELECTRODOMESTICOS III $ 10.000 127,00% $ 1.465,00 $ 17.580,00
NO BANCARIAS CASA DE CONSTRUCCION $ 10.000 180,01% $ 1.844,00 $ 22.128,00

*No ponemos los nombres de las entidades financieras porque solo se tomó un muestreo de
las mismas. Solo se incorporaron los nombres de aquellas que cumplen con informar en sus
sitios web la totalidad de la información.
COSTO FINANCIERO TOTAL PROMEDIO

CFT
148.5%

CFT
CFT 66.92%
52,81%

BANCA PUBLICA PRIVADA


NO BANCARIAS

Tenemos derechos que nos defienden de la usura

Es necesario resaltar la liviana actuación de la Justicia (salvo honrosas excepciones) y del


Estado a través de la oficina de defensa del consumidor. No quieren ver que todos los días las
financieras privadas otorgan créditos usurarios a cientos de pampeanos, cometiendo un delito
en cada operación. Éstos son garantizados con recibos de sueldo de los trabajadores, recibos
de haberes de jubilados y/o pagares sin ninguna información.
A pesar de que existen herramientas para combatir la usura, como el nuevo Código Civil y
Comercial (CCyC), a través de su artículo 1821, que introdujo para el caso puntual de los títulos
valores el pagaré entre otros, la posibilidad de introducir nuevas defensas, y en el artículo 1384
que las disposiciones relativas a los contratos de consumo son aplicables a los contratos
bancarios. También en el artículo 1389 sancionando con nulidad a los contratos de crédito que
no contienen información relativa al tipo y partes del contrato, el importe total del
financiamiento, el costo financiero total y las condiciones de desembolso y reembolso. En
muchos casos no les dan nada, la financiera se queda con toda la información. Además el
artículo 1094 del CCyC señala que las normas que regulan las relaciones de consumo deben ser
interpretadas conforme al principio de protección del consumidor, y en caso de duda debe
estarse a la más favorable a este. Para completar el Código Penal Nacional en su artículo 175
bis. reza : “El que, aprovechando la necesidad, la ligereza o la inexperiencia de una persona le
hiciere dar o prometer, en cualquier forma, para sí o para otro, intereses u otras ventajas
pecuniarias evidentemente desproporcionadas con su prestación, u otorgar recaudos o
garantías de carácter extorsivo, será reprimido con prisión de uno a tres años y con multa de
pesos tres mil a pesos treinta mil.
La misma pena será aplicable al que a sabiendas adquiriere, transfiriere o hiciere valer un
crédito usurario.
La pena de prisión será de tres a seis años, y la multa de pesos quince mil a pesos ciento
cincuenta mil, si el autor fuere prestamista o comisionista usurario profesional o habitual”.

Defensa del Consumidor

La ley 24240 en el Capítulo “DE LAS OPERACIONES DE VENTA DE CREDITO” en su artículo


36 expresa:
“Requisitos. En las operaciones financieras para consumo y en las de crédito para el consumo
deberá consignarse de modo claro al consumidor o usuario, bajo pena de nulidad:

a) La descripción del bien o servicio objeto de la compra o contratación


b) El precio al contado
c) El importe a desembolsar inicialmente —de existir— y el monto financiado;
d) TEA: La tasa de interés efectiva anual.
e) CFT: El total de los intereses a pagar
f) El sistema de cancelación de los intereses;
g) La cantidad, periodicidad y monto de los pagos a realizar;
h) Los gastos extras, seguros o adicionales.

Cuando el proveedor omitiera incluir alguno de estos datos en el documento que


corresponda, el consumidor tendrá derecho a demandar la nulidad del contrato o de una o
más cláusulas. Cuando el juez declare la nulidad parcial simultáneamente integrará el
contrato, si ello fuera necesario.
En las operaciones financieras para consumo y en las de crédito para consumo deberá
consignarse la tasa de interés efectiva anual. Su omisión determinará que la obligación del
tomador de abonar intereses sea ajustada a la tasa pasiva anual promedio del mercado
difundida por el Banco Central de la República Argentina vigente a la fecha de celebración del
contrato.
La eficacia del contrato en el que se prevea que un tercero otorgue un crédito de financiación
quedará condicionada a la efectiva obtención del mismo. En caso de no otorgamiento del
crédito, la operación se resolverá sin costo alguno para el consumidor, debiendo en su caso
restituírsele las sumas que con carácter de entrega de contado, anticipo y gastos éste hubiere
efectuado.
El Banco Central de la República Argentina adoptará las medidas conducentes para que las
entidades sometidas a su jurisdicción cumplan, en las operaciones a que refiere el presente
artículo, con lo indicado en la presente ley.
Será competente para entender en el conocimiento de los litigios relativos a contratos
regulados por el presente artículo, en los casos en que las acciones sean iniciadas por el
consumidor o usuario, a elección de éste, el juez del lugar del consumo o uso, el del lugar de
celebración del contrato, el del domicilio del consumidor o usuario, el del domicilio del
demandado, o el de la citada en garantía. En los casos en que las acciones sean iniciadas por el
proveedor o prestador, será competente el tribunal correspondiente al domicilio real del
consumidor, siendo nulo cualquier pacto en contrario”.
Las agencias que nos protegen deberían actuar de oficio para evitar aprovechamientos,
usuras y abusos de posiciones dominantes sobre las familias pampeanas.

Problema Social y Propuesta:

Se generan situaciones sociales y económicas muy graves. La banca pública debería tener
créditos flexibles a quienes se encuentran en el circuito informal. La inequidad es contundente,
los sectores más necesitados pagan más por el mismo producto (créditos) que los que más
tienen. Todo ello termina acaparando los ahorros de familias con hijos, jubilados, que caen en
estas modalidades con la ilusión de usar el dinero para llevar adelante sus proyectos, pero
terminan endeudándose más aún por el alto costo de los intereses. Una vez que se ingresa a
estos sistemas, suele ser difícil salir entre una maraña de deudas y préstamo.
Hemos recibido quejas de personas de bajos ingresos se ven compelidos a tomar créditos
radicalmente más caros que el que pagan los sectores medios y altos bancarizados, a lo que se
debe agregar el padecimiento de condiciones más abusivas de contratación.
El impacto del endeudamiento es tal que muchas veces una deuda se cancela con otra deuda,
y esta última con otra más, situación que genera un fenómeno de encadenamiento social
endeudatorio muy complejo y del que las familias no salen fácilmente
Los prejuicios muchas veces generan un doble castigo, ya que no se discuten las razones y
condiciones en que una persona necesitada de crédito se vio compelida a pactar tasas
usurarias sin ningún margen de libertad y autonomía personal.
Un dato distintivo es la falta de regulación y control de las entidades comerciales y sus
prácticas que abren sus puertas deseosas de atrapar a sectores de bajos recursos que tienen
necesidades extremas.
Vemos que hay financieras distintas a la firma comercial pero que funcionan dentro de su
salón de ventas.
La distorsión que generan las entidades financieras no bancarias aprovechándose de la
tradicional expulsión de los sectores populares del circuito bancario formal, y de que la única
opción para el acceso al crédito de estos sectores son estas entidades financieras no bancarias,
el CFT como las tasas de interés que fijan son mucho más altas que las que aplica la banca
pública y la banca privada sin contar los abusos de la “letra chica” de los contratos.
En convenio con el Gobierno Provincial el Banco de La Pampa podría intervenir con alguna
modalidad crediticia de bajos montos, mínimos requisitos y tasa subsidiada al sector no formal
de la economía. También podría explorarse un programa social para préstamos de emergencia
desde el Ministerio de Bienestar Social.
El poder judicial solucionaría en parte el problema si estableciera un interés legal, debería fijar
el límite de la usura estableciendo un piso a las tasas de financieras privadas que operan en la
provincia, por ejemplo en porcentajes de la banca pública para las entidades no bancarias. O
algún mecanismo de la Procuración que agilice oficinas especializadas o defensorías temáticas
sobre los derechos de los consumidores.
Se dice que hay usura cuando se da un “aprovechamiento de la situación de urgencia de otro o
falta de conocimiento del tema y se cobran intereses desmedidos”. Como no hay una tasa de
interés que determine cuándo hay exactamente usura a nivel legal, cuando se llega a los
tribunales es el juez el que interpreta si la hubo o no según los datos presentados.
A veces, se trata de un papelito en la pared: “Dinero Ya”, “Créditos en el Acto”, “Efectivo a sola
Firma”, “Sólo con recibo de sueldo”, “Llévate un préstamo con tu DNI”. Un número de
teléfono, una página web, no mucho más aparece como información. Parece una salida simple
pero los créditos fáciles son la puerta a un laberinto de cuotas y deudas que no terminan
nunca y que acaba por ahogar, en muchos casos, a la persona que lo contrae quien, a menudo,
se encuentra en situación económica ya de por sí vulnerable y por ello, obligada a entrar a un
préstamo con cláusulas tramposas para paliar una situación urgente.
Créditos financieros, tarjetas, electrodomésticos comprados en cuotas infinitas, varias son las
modalidades en las que caen muchas personas, en especial en estos tiempos en los que las
cuentas aprietan.

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