Charla de Seguridad de 5´

CONDUCCION ECOLOGICA

Un incorrecto mantenimiento de los vehículos con motores de combustión interna puede

multiplicar por 20 la emisión de determinados contaminantes. Los vehículos generan el 50%
de la contaminación acústica en las ciudades y los aparatos de aire acondicionado de los
vehículos son uno de los principales emisores de CFC's. Según los cálculos de los
especialistas seguirán dañando la capa de ozono durante los próximos 200 años.

Los vehículos se han convertido en la fuente más importante de contaminación derivada de

la actividad humana, según informe "Contaminación de vehículos de motor", elaborado por la
Organización para el Desarrollo y la Cooperación Económica (OCDE). Los vehículos ya
desempeñan un importante papel en la modificación del clima y su impacto sigue creciendo
año tras año debido a la emisión de gases de efecto invernadero, como el dióxido de
carbono, el metano y los óxidos nitrosos. Todas estas sustancias tienen, además, un impacto
sobre la salud, que según el informe de la OCDE se concreta en el aumento de
enfermedades respiratorias y en el incremento de la mortalidad por efectos del cáncer.

A la espera de que la promesa de los vehículos ecológicos (ya sean eléctricos o a partir de
combustibles limpios) sea una realidad, son muchas las medidas que los ciudadanos podemos
llevar a la práctica para hacer un uso responsable de este. Una de las inmediatas y más
efectivas es no usar los vehículos en los trayectos cortos. Las razones son ecológicas y
económicas: el motor en frío consume mucho más y el catalizador necesita de 3 a 5 minutos
para lograr su temperatura de máxima eficacia.

Mantener una correcta presión en los neumáticos, conforme a las indicaciones del
fabricante, evita un gasto innecesario de combustible y por lo tanto de emisiones tóxicas. El
exceso de presión ocasiona un desgaste desigual del dibujo que acorta la vida del neumático.
Es recomendable una conducción relajada, evitando aceleraciones bruscas que provocan un
ineficiente empleo de combustible. La velocidad es cara: circular a 90 km./h en lugar de a
120 km./h implica un ahorro del 30% de combustible.

 Es preferible utilizar la ventilación interior del vehículo ya que a 100 km./h

con los cristales abiertos suponen un gasto de un 4% más de carburante.
Tampoco es conveniente conservar el aire acondicionado si no lo necesitamos:
sobre 100 km./h incrementa el gasto de gasolina en un 9%.

Prevención de Riesgos ORCH/091 1