CÓMO AFECTA EL CONSUMO DE SUSTANCIAS EN LA

COMUNIDAD DONDE VIVE Y SU LUGAR DE TRABAJO

ESPECIFICANDO QUE INICIATIVAS HA EMPRENDIDO PARA
AFRONTAR DICHA PROBLEMÁTICA

Desde tiempos inmemorables el consumo de sustancias ha

estado presente en cada cultura, la historia data que el propósito de la
misma había sido el de curar enfermedades, el cambio o la nutrición
física, encontrar la paz, excitación, entre otras sensaciones de placer
que pueden hacer que el ser humano quisiera experimentar.

En la época de los imperios coloniales las drogas eran usadas

como monedas de cambio, sin tomar importancia acerca de los efectos
contraproducentes y los daños que podían ocasionar en el ser humano,
solamente el hecho de que cierta sustancia podía cambiar tu
percepción, era considerado algo muy valioso, y en casos extremos
hasta “mágico”.

Por otro lado, tenemos a las comunidades las cuales nos permiten
desarrollarnos como seres humanos, crecer en sociedad, aprender a
trazar metas, replantear e inspirar vidas, entre otros. De tal manera que
se ha vuelto vital para todos aprender a convivir. Una comunidad
armónica representa seguridad, y más que todo, ayuda y servicio para
con los demás, todo esto con el fin de mejorar la calidad de vida.
 Se conoce que el 50% de las personas que consumen drogas o
sustancias psicotrópicas son jóvenes, así que podríamos enfocar este
ensayo en esta mayoría, y cómo pueden afectar de manera directa y
negativa a las comunidades; sin embargo es necesario recalcar que es
lo que producen estas mencionadas sustancias en el cuerpo.

Al consumir estas sustancias, por la vía que sea, es conocido que

pueden y en efecto llegan al cerebro, y cambian su funcionamiento
habitual, alterando su actividad química y su estructura, y causa
cambios que perdurarán en el tiempo, resultando en daños
permanentes.

Cuando un joven cae en un problema de drogas, puede tener

muchas variables que justifiquen el hecho para que este proceda al
consumo. Entre ellos se pueden destacar: falta de orientación familiar,
baja autoestima, falta de personalidad, entre otros.

Cuando en las comunidades existe un problema de drogas con

alguno de sus integrantes, es de preocuparse, ya que no solamente
afecta al individuo en cuestión sino que también es concerniente para
con los demás. Pero ¿de qué manera puede afectar?, y es aquí donde
radica el problema, ya que puede afectar de distintas maneras y cada
una de ellas en forma negativa. En primer lugar tenemos la seguridad
como elemento principal a ser afectado, y es que al tener una persona
drogadicta dentro de la comunidad ésta no se encuentra en estado
“normal” en sus actitudes, pudiendo perturbar a los demás, generando
anarquía y malestar entre sus habitantes.

De igual manera sucede en el lugar de trabajo, ya que al trabajar

en equipo se necesita concentración y al no estar completamente
enfocado, surgen problemas, malos entendidos, un ambiente laboral
incómodo, las labores se ven entorpecidas y en general genera caos y
fastidio.

Las principales iniciativas para poder combatir los problemas de

consumo de drogas en nuestros ambientes, deben ser primordialmente
acercarse a la persona en problemas y hacerle saber acerca de su
condición, y que la misma es notable, y que está afectando a los demás,
por lo general estas personas necesitan mucha ayuda, y más que
condenarlas se le debe prestar una mano amiga.

Para enfrentar este tipo de problemas se requiere de

determinación tolerancia y comprensión, de manera que el
acercamiento o la llamada de atención hacia la persona pueda generar
algún impacto en la misma, estas sustancias pueden hacer que los
individuos actúen de manera agresiva, violenta y poco “normal”, ya que
como se explicó anteriormente, el cerebro de la persona no está en su
habitual funcionamiento, y por ende no podemos esperar que reaccione
como si lo estuviera.
 Las drogas siempre han sido un tema que ha abocado las
sociedades desde hace mucho tiempo, sin embargo con un buen plan
y principalmente teniendo la iniciativa de detener este mal, se puede
lograr un cambio, y con esto una disminución en el consumo.

A veces es difícil poder llevar este tema que puede llegar a ser
delicado, sin embargo no podemos permitir que se ignore, ya que al
hacer esto no se está resolviendo el asunto, y por el contrario el
problema sigue creciendo de una manera silenciosa pero gigantesca;
de esta manera se debe instar a que en caso de que se sepa de algún
caso de consumo de drogas, no se haga la vista a un lado, sino que se
puedan unir para ayudar a la persona en cuestión.

Por último, la planificación puede ser crucial en la iniciativa de las

organizaciones comunitarias que pueden proporcionar servicios a la
juventud. Tal vez reuniones con los líderes de estas organizaciones de
servicios puede preparar el escenario para capturar ideas y recursos
que ayuden a implementar y sostener los programas que ayuden a los
individuos que se ven afectados por esta situación.