LAS ENSEÑANZAS DE LA CÁRCEL DE LIBERTY

Élder Jeffrey R. Holland

Del Quórum de los Doce Apóstoles
Charla Fogonera de SEI para jóvenes adultos • 7 de septiembre de 2008
Universidad Brigham Young

Mis queridos jóvenes amigos, a la hermana Holland y historia; baste decir que se habían desatado diferentes
a mí nos encanta estar aquí en esta transmisión mun-problemas desde que el profeta José había recibido
dial vía satélite. Es siempre emocionante estar en el una revelación en julio de 1831 en la que designaba
Centro Marriot. Desearíamos que nos fuera posible a Misuri como el sitio “consagrado para el recogi-
estar en cada lugar para verles personalmente y poder miento de los santos” y para edificar “la ciudad de
estrecharles la mano, pero todavía no hemos hallado Sión” (D. y C. 57:1,2). Para octubre de 1838, parecía
la manera de hacerlo, por eso les enviamos nuestros inevitable una guerra entre las fuerzas mormonas y
saludos y amor doquiera que se encuentren en el no-mormonas, que se veían enfrentadas por esos pro-
mundo. A pesar de lo vasta que es nuestra audiencia blemas. Tras haber sido expulsados de varios conda-
mundial, esperamos que perciban el amor que senti- dos del oeste del estado, y entendiendo que se les
mos por ustedes y que se lleven algo de este mensajeinvitaba a analizar maneras de calmar la volátil situa-
para aplicarlo en sus vidas. ción que se había generado, cinco líderes de la
Iglesia, incluso el profeta José Smith, marcharon am-
El profeta en la cárcel de Liberty parados en una tregua hasta el campamento de la mi-
Una de las grandes bendiciones de nuestras asigna- licia de Misuri cercano al pequeño poblado de Far
ciones como Autoridades Generales es la oportunidadWest, condado de Caldwell.
de visitar a los miembros de la Iglesia de diferentes Al final, se ignoró la tregua, se encadenó de inmedia-
partes del mundo y aprender de la historia que nos to a los líderes de la Iglesia y se los puso bajo fuerte
han legado. Con ese espíritu, hoy deseo compartir custodia. A la mañana siguiente, se arrestó a Hyrum,
con ustedes algunos sentimientos que tuve la pasada el hermano del Profeta, y a otro líder de la Iglesia, lo
primavera en una asignación. Se me pidió que visita- que hizo un total de siete prisioneros.
ra la conferencia de la Estaca Platte City, al oeste de
La injusticia pronto se transformó en una tragedia
Misuri aquí en Estados Unidos.
cuando un llamado “tribunal militar” convocado por
La Estaca Platte City, Misuri, adyacente a la Estaca oficiales de la milicia ordenó que se llevara a los pri-
Liberty, Misuri, ahora un lugar muy famoso en la his- sioneros a la plaza principal de Far West y se les fusi-
toria de la Iglesia, está rodeada de varios sitios históri-lara de inmediato. Para su eterno mérito, el Brigadier
cos, incluso de la cárcel irónicamente llamada Liberty General Alexander Doniphan, oficial de las tropas de
(“libertad” en español). Al estudiar la historia de la Misuri, rehusó audaz y valientemente cumplir esa or-
Iglesia, saben algo de la experiencia que el profeta den tan inhumana e injustificable. Con una actitud
José Smith y sus hermanos tuvieron al permanecer osada que podría llevarle a una corte marcial, se que-
cautivos allí en el invierno de 1838–1839. Fue una jó: “Es un asesinato a sangre fría. No obedeceré sus
época terriblemente difícil de nuestra historia tanto órdenes… Y si usted ejecuta a estos hombres, le ase-
para la Iglesia como para el profeta José Smith, quien guro que con la ayuda de Dios lo haré responder ante
sufrió el peso de la persecución de esa época. Me atre- un tribunal terrenal”1.
vo a decir que hasta su martirio, cinco años y medio
Al demostrar tal valor e integridad, Doniphan no só-
después, no hubo una época más agobiante en la vida
lo salvó las vidas de esos siete hombres, sino que se
del Profeta que esa encarcelación cruel, ilegal e injus-
ganó la estima de todas las generaciones de Santos de
tificada en la cárcel de Liberty.
los Últimos Días.
El tiempo no nos permite un análisis detallado de las
Tras evitarse la ejecución, se llevó a los siete líderes de
experiencias que resultaron en ese momento de la
la Iglesia a pie desde Far West hasta Independence, y

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luego a Richmond. Parley P. Pratt permaneció en pri- Todo eso sucedía durante lo que fue el invierno
sión preventiva en el vecino condado de Davies para más frío que se haya registrado en el estado de
ser juzgado, y los seis prisioneros restantes, incluso Misuri.
José y Hyrum, fueron enviados a Liberty, la ciudad
No me propongo hablar sobre las penas y dificultades
cabecera del condado de Clay, donde debían esperar
que estos hombres enfrentaron en la cárcel de Liberty,
su juicio hasta la siguiente primavera. Llegaron a
pero permítanme mostrarles algunas fotos y concluir
Liberty el 1º de diciembre de 1838, cuando comenza-
la introducción de mi mensaje. Les aseguro que tengo
ba el invierno.
algo más para decirles.
La cárcel, una de las pocas y más seguras de la región,
era considerada “a prueba de escape”. Tenía dos plan-
tas. A la superior y a la principal sólo se podía entrar
mediante una puerta pequeña y pesada. En el centro
del piso (suelo) había una abertura por la que los pri-
sioneros descendían a la planta inferior o calabozo.
Las paredes exteriores de la prisión eran de piedra ca-
liza rústica de sesenta centímetros de ancho, con pare-
des interiores que eran de troncos de roble de treinta
centímetros. Estas dos paredes tenían una separación
de unos treinta centímetros que se rellenaba con es-
combro. Esos muros eran una formidable e impene-
trable barrera de un metro veinte de ancho.
La altura desde el piso del calabozo hasta el techo era
de apenas un metro ochenta. Ya que algunos de los
prisioneros, incluso el profeta José, excedían dicha al-
tura, al ponerse de pie (pararse) debían permanecer Esta foto es de la cárcel como era en el momento
encorvados. Al recostarse, debían hacerlo casi siempre en que José y los líderes de la Iglesia estuvieron
sobre las rústicas piedras del piso que en partes teníaencarcelados.
una escasa cantidad de paja suelta y sucia.
La comida era desagradable y a veces estaba echada
a perder; uno de ellos dijo que “era tan repugnante
que no podían comerla hasta que el hambre los (a
ellos) forzaba a hacerlo”2. Se había puesto veneno
en los alimentos en varias oportunidades, lo que
hacía que enfermaran rápidamente: Durante días
tenían náuseas y vómitos y luego una especie de
delirio; y no importaba si los prisioneros vivían o
morían. En sus cartas, el profeta José define la cár-
cel como un “infierno rodeado de demonios…
donde nos vemos obligados a escuchar sólo maldi-
ciones y presenciar un cuadro de blasfemias, borra-
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cheras, hipocresías y libertinaje de toda especie” .
“…No tenemos…suficientes mantas que nos abri-
guen;”... “y cuando hacemos una fogata, casi se nos Esta otra se tomó años más tarde cuando algunos lí-
obliga a respirar el humo”4. “…Nuestra alma está deres e historiadores de la Iglesia visitaron el sitio. No
triste”5…y “mi valor se debilita debido a tan largo estoy seguro si la persona que aparece arriba está in-
encierro”6… José escribió que “[ni] la pluma, la len- tentando salir o entrar.
gua o los ángeles” podrían describir apropiadamen-
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te “la perversidad del infierno que he sufrido” .

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Ésta es una vista de la reconstrucción de la cárcel queGreg Olsen ilustra cómo José pudo haber escrito algu-
hizo la Iglesia y se encuentra en el centro de visitan- nas revelaciones recibidas durante su cautiverio.
tes. Observen el arreglo de la cuerda con el balde, el
único nexo entre el calabozo y el piso superior.

Ésta es la última foto, la cual me lleva al verdadero

mensaje que tengo para ustedes.

Una experiencia de cárcel-templo

La mayoría de nosotros se refiere al edificio Liberty
como la “cárcel” o “prisión”, y de hecho lo era. Sin
embargo, el élder Brigham H. Roberts, al registrar la
historia de la Iglesia, se refiere al lugar como a un
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templo o, para ser más exacto, una “cárcel-templo” .
El élder Neal A. Maxwell usó la misma expresión en
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algunos de sus escritos . De hecho, carecía de la pu-
reza, belleza, comodidad y limpieza de nuestros ver-
daderos templos, nuestros templos dedicados. La
Ésta es una pintura de Liz Lemon Swindle que mues- manera de hablar y la conducta de los guardias y
tra a José orando. Fíjense en la expresión de tristeza ycriminales que ahí había no eran para nada dignas
melancolía que hay en el rostro del Profeta. de un templo. La brutalidad e injusticia de esta ex-
periencia en Liberty hacen que la cárcel se vea como
la antítesis del espíritu liberador y misericordioso de

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Santos de los Últimos Días sin las secciones 121, 122 y escucha nuestras oraciones, y cuando lloramos, Él y
y 123 de Doctrina y Convenios. Si no las han leído los ángeles lo hacen con nosotros.
últimamente, les pido que lo hagan hoy o mañana y
Cuando tengamos tiempos difíciles, de soledad y re-
no para después. ¡Ésa es la tarea y verificaré que la
chazo debemos perseverar, continuar y persistir. Tal
hagan! Sólo son seis páginas, pero esas seis páginas
era el mensaje del Salvador en la parábola de la viuda
conmoverán su corazón por su belleza y poder.
y el juez injusto (véase Lucas 18:1-8; 11:5-10). Sigue
Además, les recordarán que, a menudo, “Dios trabaja
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tocando esa puerta y rogando; entretanto, debes sa-
misteriosamente para realizar Sus prodigios” . Él
ber que Dios escucha tus clamores y conoce tu angus-
transformó la adversidad en bendición al darnos esas
tia. Él es tu Padre y tú, Su hijo o hija espiritual.
sagradas reflexiones y esos sagrados escritos suma-
mente puros, nobles y cristianos, tanto en tono como Cuando acontezca lo que deba acontecer, y lo que se
en contenido a pesar de haberse originado en un lu- deba aprender se haya aprendido, sucederá con noso-
gar impuro, vil y nada cristiano. tros lo mismo que con el profeta José. En el preciso
momento en el que él se sentía más solo y alejado
1. Todos enfrentamos tiempos de prueba del oído divino fue cuando recibió la maravillosa mi-
nistración del Espíritu y las extraordinarias y glorio-
Ahora, tres enseñanzas de la cárcel de Liberty: La
sas respuestas de su Padre Celestial. La voz de Dios
primera es inherente a lo que ya he dicho, esto es
penetró el sombrío calabozo en ese deprimente mo-
que todos, incluso los justos (y quizás en especial
mento para decir:
los justos) tendrán que enfrentar épocas de prueba.
Cuando sucede, podríamos temer que Dios nos haya “Hijo mío, paz a tu alma; tu adversidad y tus afliccio-
abandonado y quedemos solos, al menos por un nes no serán más que por un breve momento;
tiempo, y preguntarnos si nuestras aflicciones ten- “y entonces, si lo sobrellevas bien, Dios te exaltará;
drán un final. Es probable que como personas, fami- triunfarás sobre todos tus enemigos” (D. y C. 121:7-8).
lias, comunidades o naciones, cada uno haya tenido
o tendrá la oportunidad de sentirse como se sintió Aunque nos sucedan cosas que parezcan injustas y
José Smith cuando preguntó por qué tenía que pasar aunque recibamos malas e inmerecidas actitudes, tal
tanto dolor y cuánto durarían las tinieblas y el que- vez de quienes consideramos enemigos y también de
branto. Nos identificamos con él cuando clama des- quienes creíamos nuestros amigos, Dios estará con no-
de la profunda y desalentadora reclusión: “Oh Dios, sotros siempre. Es por ello que este maravilloso coro
¿en dónde estás?... ¿Hasta cuándo se detendrá tu ma-nos cantó el tradicional y antiguo himno cristiano de
no…? Sí, oh Señor, ¿hasta cuándo sufrir[á] [tu pue- Sarah Adams, “Más cerca, Dios, de Ti” del que pocas
blo]… antes que… tus entrañas se llenen de veces se canta la cuarta estrofa que dice:
compasión por ellos?” (D. y C. 121:1). “Y luego, al despertar, te alabaré.
Es un ruego personal y doloroso del corazón, una so- Humilde, un altar te levantaré.
ledad espiritual que todos podríamos llegar a sentir Allí mi corazón dirá su oración:
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en algún momento de la vida. más cerca, Dios, de Ti, cerca de Ti”.

Quizás en su juventud ya hayan tenido esos momen- No estamos solos en nuestras pequeñas prisiones. De
tos. Si es así, espero que no hayan sido muchos, pero hecho, cuando sufrimos estamos más cerca de Dios
sea cual fuere la ocasión en que lleguen, no debemos de lo que hayamos estado en la vida. Esa convicción
sucumbir al temor de que Dios nos ha abandonado o puede transformar cada situación en una experiencia
no escucha nuestras oraciones. Él nos escucha. Él nossimilar a la del templo. De nuestra jornada por la vi-
ve. Él nos ama. Cuando atravesemos situaciones de- da, el Señor ha prometido: “Iré delante de vuestra
sesperadas y deseemos clamar “¿en dónde estás?”, es faz. Estaré a vuestra diestra y a vuestra siniestra, y mi
fundamental recordar que Él está allí con nosotros, Espíritu estará en vuestro corazón, y mis ángeles alre-
¡donde siempre ha estado! Debemos seguir creyendo,dedor de vosotros, para sosteneros”(D. y C. 84:88). Es
teniendo fe, orando y rogando al cielo, aunque por una declaración eterna de amor y preocupación de
algún tiempo sintamos que no se nos escucha y que, Dios por nosotros, en especial, para los momentos de
de alguna forma, Dios se ha ido. Él está con nosotros aflicción.

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2. Aun el justo sufrirá Jesús dijo: “Porque he aquí, yo, Dios, he padecido
estas cosas por todos, para que ‘tú y yo’, ‘y todos’ no
Segundo, debemos comprender que sólo porque nos
padezcan, si se arrepienten” (D. y C. 19:16). En los
sucedan cosas difíciles y, que a veces, parezcan injustas
momentos de dolor y prueba, creo que nos estreme-
o sin razón, no significa que seamos inicuos, indignos
cería pensar que podría ser peor; pero está claro que
de las bendiciones o que Dios esté decepcionado con
podría ser y sería peor; y eso no es peor sólo median-
nosotros. Claro que el pecado acarrea sufrimiento y la
te nuestra fe, arrepentimiento y obediencia al
única solución es el arrepentimiento. Sin embargo, el
Evangelio y que nos otorgó la sagrada Expiación.
sufrimiento también llega a los justos. Habrán notado
que se le recordó a José en la cárcel de Liberty que a Es más, vemos que no sólo el Salvador ha sufrido, y
pesar de haber sido “echado en… dificultades” y de en Su caso totalmente inocente, sino también la ma-
haber sufrido tribulaciones y de haber sido acusado yoría de los profetas y otros grandes hombres y muje-
falsamente, apartado de su familia, echado en un fosores que hallamos en las Escrituras. Nombren a un
o en manos de homicidas, debía recordar que lo mismo profeta del Antiguo Testamento o del Libro de
le había sucedido al Salvador del mundo y que dado que Mormón o a algún apóstol del Nuevo Testamento o
Él había salido victorioso, nosotros también lo hare- líder de cualquier dispensación, incluso la nuestra, y
mos (véase D. y C. 122:4-7). Al darnos este serio recor- nombrarán a alguien que ha sufrido aflicción.
datorio de lo que el Salvador atravesó, la revelación ¿Qué quiero decir? Que si tienen un mal día, estarán en
recibida en Liberty dice: “El Hijo del Hombre ha des- muy buena compañía, de la mejor que hayan tenido.
cendido debajo de todo ello. ¿Eres tú mayor que él?”
(D. y C. 122:8). Ahora bien, no me malinterpreten; no debemos bus-
car el dolor, ni buscar ser mártires. Las dificultades
No, José Smith no era mayor que el Salvador, ni noso- nos encontrarán aunque no las busquemos. Entonces,
tros tampoco lo somos. Cuando prometemos seguir alya que es obvio que, en un sentido espiritual, nos es-
Salvador, caminar sobre Sus pasos y ser Sus discípulos, pera un breve período en la cárcel de Liberty, recuer-
también prometemos ir por ese sendero divino para den estas dos verdades que se le enseñaron al profeta
que nos guie, ya que de una forma u otra, el camino José en aquella “cárcel-templo”. Primero, Dios no te
de la salvación siempre nos conduce a Getsemaní. Asíha olvidado y, segundo, el Salvador pasó por lo que
que si el Salvador enfrentó tales desalientos, persecu-estás pasando; deja que Él te brinde la liberación y el
ción, iniquidad, desánimo y sufrimiento, nosotros no consuelo.
podemos esperar no tener que enfrentar parte de ello
si deseamos ser Sus verdaderos discípulos y Sus fielesEl profeta Isaías escribió, el Señor te tiene grabado en
seguidores. Ciertamente esto recalca el hecho de que las palmas de las manos, esculpido de manera perma-
los rectos, y en el caso del Salvador, la personificaciónnente en Sus cicatrices con clavos romanos como cin-
de la rectitud, pueden sufrir a pesar de ser dignos de- cel. Al haber pagado el precio por ti con sufrimiento,
lante del Señor. el Padre y el Hijo jamás te olvidarán ni abandonarán
en tus aflicciones (véase Isaías 49:14-16; 1 Nefi 21:14-
De hecho, debería ser una fuente de gran consuelo 16). Ellos han planeado, preparado y garantizado tu
doctrinal que Jesús, durante la Expiación, haya expe- victoria si la deseas; así que sé creyente y “sobrelléva-
rimentado todos los pesares y dolores, todas las desi- lo bien” (D. y C. 121:8). Al final, “será para tu bien”
lusiones e injusticias que toda la familia humana ha (D. y C. 122:7) y, “sin ser compelido”, un “dominio
sufrido, sufre y sufrirá desde Adán y Eva hasta el fin eterno” fluirá hacia ti para siempre jamás” (D. y C.
del mundo para que nosotros no debamos sufrirlos de121:46).
manera tan grave o intensa. No importa cuán pesada
sea nuestra carga, lo sería aún más si el Salvador no
3. Permanezcamos tranquilos, pacientes,
la hubiera sufrido antes y hubiera llevado la carga
caritativos y perdonadores
con nosotros y por nosotros.
En tercer y último lugar, quisiera que todos recorde-
A comienzos del ministerio del profeta José, el mos que en medio de estos difíciles sentimientos
Salvador le enseñó esta doctrina. Tras hablar de pa- justificados de enojo o de reacción o de deseo de
decimientos tan dolorosos y difíciles de aguantar, venganza y el querer pagar ojo por ojo y diente por

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nuestros templos y de las ordenanzas que allí se les, creyentes y no maldecimos a Dios por nuestros
efectúan. Entonces, ¿en qué sentido podemos lla- problemas, Él puede convertir las prisiones injustas,
mar “templo” a la cárcel de Liberty o, al menos, inhumanas y debilitadoras de nuestra vida en templos
“una especie de templo”, con respecto al progreso o al menos en situaciones que nos brinden consuelo,
de José Smith como persona y profeta? Y ¿qué nos revelación, compañía divina y paz.
dice ese supuesto título sobre el amor de Dios y Sus
Permítanme ir un poco más lejos: recién dije que
enseñanzas, y del lugar y momento en el que se ma-
“pueden” sobrevenirnos tiempos difíciles. El presi-
nifestaron dichas enseñanzas?
dente Joseph Fielding Smith, sobrino nieto del profe-
Al pensar en ello, ¿creemos que podemos tener expe- ta José y también nieto de Hyrum, dijo algo aún más
riencias espirituales, sagradas y reveladoras en cada profundo al dedicar el Centro de Visitantes de la
una de las muchas y diversas etapas de la vida si lo Cárcel de Liberty en 1963. Al referirse a la historia
deseamos, si perseveramos y continuamos orando y que repasamos hoy, y al contemplar el sitio donde
si mantenemos firme nuestra fe a pesar de las dificul- su abuelo y su tío abuelo estuvieron recluidos tan in-
tades? Amamos y atesoramos nuestros templos dedi- justamente, dijo que quizás tales cosas “tenían” que
cados, y las ordenanzas esenciales y de exaltación pasar. Y agregó: “Al leer la historia de aquellos días,
que allí se efectúan; agradecemos al cielo y a las auto-
los anteriores y los posteriores, he llegado a la con-
ridades presidentes que siguen construyendo templosclusión de que las tribulaciones, la persecución y la
para que muchos más de nosotros tengamos acceso aoposición casi universal a la Iglesia en aquel mo-
ellos. En verdad son los edificios más santos y sagra- mento eran necesarias. De alguna manera se convir-
dos del reino de Dios, a los que todos debemos asistir tieron en maestros para nuestro pueblo y lo
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tan digna y frecuentemente como sea posible. ayudaron a fortalecerse” .
El mensaje de esta noche es que cuando tengan una
experiencia que sea sagrada, reveladora y profunda- Las enseñanzas de la cárcel de Liberty
mente instructiva con el Señor en cualquier circunstan- Sin intención de determinar qué tipo de estas expe-
cia, entonces han logrado éxito. Permítanme recalcarlo: riencias son “obligatorias” y cuáles son “opcionales”
pueden tener experiencias sagradas, reveladoras y pro- en nuestra vida, aunque sean para nuestro bien, qui-
fundamente instructivas con el Señor durante los mo- siera sugerir algunas de las “enseñanzas” aprendidas
mentos más difíciles de su vida, en el peor lugar, en laen Liberty que fueron “maestros” para José y que
más dolorosa injusticia y al afrontar la peor dificultad pueden serlo para nosotros, experiencias que contri-
y oposición que hayan tenido. buyen mucho a nuestro aprendizaje en la vida terre-
nal y a nuestra exaltación en la eternidad.
Hablemos de esas afirmaciones por un instante. En un
sentido espiritual, todos, de una u otra manera, ma- Al seleccionar estas enseñanzas he notado otro tipo
yor o menor, dramática o casual, pasaremos un brevede bendición que surgió de esa adversidad. Para
momento en la cárcel de Liberty. Enfrentaremos cosastransmitirles lo que deseo, utilizaré las palabras reve-
que no deseamos y tal vez sin ser culpables de ello. ladoras que pronunció José Smith durante ese desga-
Quizá podríamos hacer frente a circunstancias difícilesrrador momento, y que ahora forman parte de las
por motivos correctos y apropiados como el tratar de sagradas Escrituras en Doctrina y Convenios. Supongo
cumplir con los mandamientos de Dios. Podríamos que no debemos tener “pasajes favoritos”; yo tengo
sufrir persecución, dolor, la separación de nuestros se-tantos de ellos que no podría limitarme sólo a uno o
res queridos, sentir hambre, frío y desesperanza. Así dos, y si hiciera una lista de mis Escrituras preferidas
es; antes de morir, se nos podría dar una pizca de lo tendría que incluir las que se escribieron desde la pe-
que los profetas han enfrentado a menudo. Las ense- numbra de la cárcel de Liberty.
ñanzas del invierno de 1838-1839 nos enseñan que Lo que aprendemos de inmediato es que Dios no sólo
cada aflicción puede transformarse en una experiencia estaba enseñándole a José Smith en esa circunstancia,
redentora si somos fieles a nuestro Padre Celestial du-sino que Él nos estaba enseñando a todos nosotros,
rante esa tribulación. Esas lecciones difíciles nos ense-aún a las generaciones venideras. ¡Qué obsequio divi-
ñan que la situación extrema del hombre es una no son esos pasajes inspirados! ¡Qué alto precio se pa-
oportunidad para Dios y que, si somos humildes, fie- gó por ello! Cuán vacías serían nuestras vidas como

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diente, el Señor nos aclara desde la “cárcel-templo” venganza y autocompasión, porque esos sentimien-
de Liberty “que los derechos del sacerdocio están in- tos son la antítesis del Espíritu. Sin embargo, el
separablemente unidos a los poderes del cielo, y que Espíritu mora en corazones que tienen benevolencia,
éstos no pueden ser gobernados ni manejados sino longanimidad y bondad y que pueden perdonar; esos
conforme a los principios de la rectitud” (D. y C. son los principios de un verdadero discípulo. ¡Qué
121:36). Por lo que, aunque enfrentemos circunstan- gran testimonio de que los principios del Evangelio
cias angustiantes y sintamos algo que nos impulse a se deban aplicar en todo momento y lugar, y que si
reaccionar contra Dios, contra hombre, amigo o ene- somos fieles, la victoria de llevar una vida cristiana
migo, debemos recordar que “ningún poder o in- jamás desaparecerá, sin importar la situación! Amo
fluencia se puede ni se debe mantener… [salvo] por muchísimo la majestuosidad de estas distinguidas y
persuasión, por longanimidad, benignidad, manse- celestiales enseñanzas que irónicamente se dieron en
dumbre y por amor sincero;… sin hipocresía y sin un lugar y momento tan viles.
malicia” (D. y C. 121:41-42; cursiva agregada).
Para mí siempre ha sido un maravilloso testimonio Haced todas las cosas con buen ánimo
de la grandeza del profeta José y de todos nuestros Para concluir la lección de la cárcel de Liberty, cito el
profetas, y en especial del Salvador del mundo y de último versículo de la tercera sección a la que nos he-
Su magnificencia, que en medio de gran tribulación mos referido hoy. En esta declaración y Escritura sa-
y dificultades podían permanecer en calma y ser pa- grada surgida de la experiencia de la cárcel de Liberty,
cientes, benévolos y dispuestos a perdonar; y que in- el Señor nos dice por medio de Su profeta José Smith:
cluso pudieran hablar y vivir de esa manera. Podían “Por tanto, muy queridos hermanos, [cuando este-
hacerlo y lo hicieron. Recordaron sus convenios y tu- mos incluso en los momentos de mayor tribulación]
vieron autodisciplina; sabían que debemos vivir el hagamos con buen ánimo cuanta cosa esté a nuestro
Evangelio en todo momento y no sólo cuando es alcance; y entonces podremos permanecer tranquilos,
conveniente y las cosas van bien. Ellos sabían que la con la más completa seguridad, para ver la salvación
verdadera prueba de nuestra fe, como discípulos de de Dios y que se revele su brazo” (D. y C. 123:17;
Cristo, viene cuando las cosas no van tan bien. Es ahí cursiva agreagada).
que llegamos a conocer nuestra verdadera esencia y ¡Qué conclusión tan optimista y fiel para pronunciar-
la firmeza de nuestro compromiso hacia el Evangelio. se desde una “cárcel- templo”! Cuando José escribió
El mejor ejemplo es cuando en las horas más doloro- esas líneas ignoraba cuándo se le liberaría o si saldría
sas de la Crucifixión el Salvador dijo: “Padre, perdó- en libertad alguna vez. Todo parecía indicar que sus
nalos, porque no saben lo que hacen” (Lucas 23:34). enemigos aún planeaban quitarle la vida. Peor aún,
Es algo difícil de pedir cuando nos hacen daño; es di- su esposa e hijos estaban solos, aterrorizados, a me-
fícil hacerlo cuando se nos ha ofendido; o estamos nudo sufrían hambre y se preguntaban cómo podrían
cansados, tensionados o padeciendo de manera ino- valerse por sí mismos sin su esposo y padre. Además,
cente. Ahí es cuando la actitud cristiana prevalece. los santos estaban sin hogar y sin profeta; estaban sa-
Recuerden que “los poderes del cielo… no pueden liendo de Misuri y se dirigían a Illinois, pero con el
ser gobernados ni manejados [salvo] conforme a los temor de enfrentar más tragedias. Cabe repetir que
principios de la rectitud”; ¡y claro que necesitamos eran los más sombríos y lúgubres momentos.
esos poderes! Al igual que se le enseñó a José en esa En esas frías y solitarias horas, José dice: “hagamos
“cárcel-templo”, aún en medio de la angustia y el do- con buen ánimo todo cuanto podamos y entonces
lor debemos dejar que “[nuestras] entrañas se llenen confiemos en que el Señor tenga misericordia y reve-
de caridad para con todos los hombres…; entonces le Su brazo, a nuestro favor”.
[nuestra] confianza se fortalecerá en la presencia de
Dios; y… el Espíritu Santo será [nuestro] compañero ¡Qué actitud majestuosa para conservar en buenos y
constante” (D. y C. 121:45-46). malos momentos, y en gozo y tribulaciones!

Sólo la influencia divina puede ayudarnos si somos Bendición y testimonio

fieles a nuestros principios cristianos. Es imposible
que el Espíritu entre en un corazón lleno de odio, ira, Mis queridos jóvenes amigos, como parte de mi tes-
timonio esta noche, quisiera darles una bendición.

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Me parece que al llevar nuestro testimonio apostóli- devocional lo hagan con el entendimiento y el
co al mundo, tenemos dos oportunidades y, tal vez, conocimiento firmes en su corazón de que Dios,
de hecho, obligaciones. Una es la de testificar y dar el cielo y las Autoridades Generales que presiden
testimonio como he intentado e intento hacerlo. La esta Iglesia las aman y las honran.
otra es bendecir. Los antiguos Apóstoles lo hicieron
Los saludo, jóvenes adultos de esta Iglesia que son
cuando el Salvador los invitó a hacerlo como Él lo
parte de esta gran congregación del SEI, y les digo
había hecho, salvo que sería en todo el mundo.
que el futuro está en sus manos. Los de mi genera-
Así que para cada uno de ustedes que ha asistido estación tendrán que, en un futuro muy cercano, pasar-
noche, aquí en este vasto auditorio o en cualquier les la batuta a ustedes. Dios les bendiga al enfrentar
otro lugar en el mundo, yo bendigo a cada uno de esos tiempos con el valor, la honestidad y la integri-
ustedes en sus circunstancias individuales, como si dad de las que hemos hablado aquí esta noche.
mis propias manos estuvieran sobre su cabeza. La de-
Para concluir, testifico que el Padre y el Hijo viven.
claro sobre ustedes tan sinceramente como declaro
Testifico que ellos están cerca, tal vez más cerca por
mi testimonio. Les bendigo en el nombre del Señor
medio del Espíritu Santo cuando tenemos tiempos de
que Dios les ama, que escucha sus oraciones, que es-
dificultades. Testifico, (al igual que lo hará el último
tá a su lado y que nunca los abandonará.
número musical “Mi bondad no se apartará de voso-
Bendigo a los hermanos, para que ustedes, para que tros” y que cita al profeta Isaías) que la bondad del
nosotros, seamos dignos del sacerdocio que porta- cielo nunca se apartará de ustedes, pase lo que pase
mos. Que seamos fieles al discipulado para el cual (véase Isaías 54:7-10; 3 Nefi 22:7-10). Testifico que los
hemos sido llamados, en ese gran orden, el Santo días difíciles terminarán, que la fe siempre triunfa y
Sacerdocio, según el Orden del Hijo de Dios. Les ben- que las promesas celestiales siempre se cumplen.
digo para que seamos realmente como el Maestro, Testifico que Dios es nuestro Padre, que Jesús es el
para que pensemos más como Él piensa, para que ha-Cristo, que éste es el verdadero y viviente Evangelio,
blemos más como Él habla y para que hagamos más fundado en ésta, la verdadera y viviente Iglesia.
como Él hizo. Les bendigo hermanos en su lucha por Testifico que el presidente Thomas S. Monson es un
ser fieles, para que tengan todas las bendiciones del profeta de Dios y que es nuestro profeta para este
Sacerdocio, muchas de las cuales hemos citado esta tiempo y para estos días, le amo y le sostengo como
noche de estas secciones del libro de Doctrina y sé que ustedes también lo hacen. Y en las palabras de
Convenios. la cárcel de Liberty, en la experiencia de la cárcel-
templo, mis querido joven amigo y amiga, “Persevera
Bendigo a las hermanas que son parte de esta au-
en tu camino… no temas… porque Dios estará conti-
diencia y a las que estén al alcance de mi voz, y asi-
go para siempre jamás” (D. y C. 122:9) En el nombre
mismo les hago saber cuánto las apreciamos y lo
de Jesucristo. Amén.
mucho que Dios las aprecia y lo mucho que la ban-
dera de la fe ha sido ondeada por las hermanas de
esta Iglesia desde el principio. Parece que, en cada Notas:
generación, desde el principio de los tiempos hasta 1. En History of the Church, 3, págs. 190-91.
el presente y aún más allá, con frecuencia han sido 2. Alexander Mc Rae, en A Comprehensive History
las mujeres de nuestras vidas —nuestras abuelas, of the Church, 1, pág.521.
nuestras madres, nuestra esposa, nuestras hijas,
nuestras hermanas y nuestras nietas— las que han 3. History of the Church, 3, pág. 290.
llevado esa antorcha de la fe y esa bandera de la be- 4. Carta a Isaac Galland, 22 de marzo de 1839, en
lleza terrenal y llevado adelante los principios del Personal Writings of Joseph Smith, rev. ed. comp.
Evangelio dondequiera que fuera, contra cualquier Dean C. Jessee, 2002, pág. 456.
penuria, en su propia o pequeña cárcel de Liberty en
5. Carta a la Iglesia en el Condado Caldwell, 16 de
tiempos de dificultad. Hermanas, las amamos, hon-
diciembre de 1838; “Communications”, Times
ramos y bendecimos. Rogamos que cada deseo justo
and Seasons, abril de 1840, pág. 85.
de su corazón, en esta noche y para siempre, les sea
concedido sobre su cabeza; y que al salir de este

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 Charla Fogonera de SEI para jóvenes adultos • 7 de septiembre de 2008 • Élder Jeffrey R. Holland

6. Carta a Emma Smith, 21 de marzo de 1839, en
Personal Wrintings, pág. 449
7. Carta a Emma Smith, 4 de abril de 1839, en
Personal Writings, págs. 463 y 464; cursivas y
mayúsculas actualizadas.
8. Véase Comprehensive History, 1:521 cap. de
encabezamiento; véase también pág. 526.
9. Véase, para ejemplo, “A Choice Seer”, Ensign,
agosto de 1986, pág. 12.
10. “Text of Address by Pres. Smith at Liberty Jail
Rites”. Church News, 21 de septiembre de 1963,
pág. 14; cursiva agregada.
11. “Con maravillas obra Dios” Himnos, Nº 191.
12. Himnos, Nº 50; cursiva agregada.

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