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El famoso Mercado de Hierro de la capital haitiana fue devastado por un incendio en la noche del lunes al
martes 13 de febrero de 2018, que destruyó los
productos de decenas de comerciantes de Puerto
Príncipe que seguían en la incertidumbre por la
falta de un sistema de seguros. Bomberos y
ciudadanos comunes seguían trabajando, al
mediodía del martes, para apagar el incendio que
consumió por completo una de las dos naves del
mercado.
Según los vecinos, el incendio empezó cerca de las
02:00 de la mañana, en una pila de basura
acumulada en un terreno baldío contiguo al edificio histórico. Construido a fines del siglo XIX, el Mercado
del Hierro había sido devastado por un incendio en 2008. También fue destruido por el terremoto en
2010 y su reconstrucción fue financiada por la empresa de telecomunicaciones Digicel y supervisada por
el Instituto que protege las construcciones históricas. Este mercado tiene un gran significado para la
cultura haitiana y en él convergen centenares de vendedores de artes, alimentos, entre otros artículos.
Sólo las pérdidas del histórico edificio representan entre 5 y 7 millones de dólares americanos. (Tomado
del “Comercio”, 13 de febrero 2018).
En este mes de enero se registraron 330 deportados en la frontera de Malpáss: 245 hombres, 84 mujeres
y 01 menor.
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NUESTRO CAMINAR COMUNITARIO
Titán, amiga nuestra, es una madre abandonada con tres hijos, a quien la comunidad acompaña desde
hace algunos años. A inicios de este mes, la pareja con quien convivía la golpeó brutalmente, delante de
sus tres pequeños, hasta dejarla inconsciente. Se salvó
gracias a una vecina samaritana que la llevó al hospital de
emergencia.
Nosotras nos enteramos del incidente cuando Clemencia
recibió la llamada del hospital, ya que Titán tenía escondido
en su sujetador los únicos números de referencia: los de las
hermanas de la CIM. Sin dudarlo, nos solidarizamos con
Titán acompañándola al hospital, rescatando a sus niños de
las manos del agresor, buscando un orfelinato para los niños
hasta que la madre se recupere física, psicológica y
moralmente. Es de lamentar, sin embargo, que en Puerto Príncipe no hemos encontrado ni un solo lugar
en que se acoja a mujeres maltratadas ni se les oriente y defienda en el proceso de denuncia al
maltratador
Por ahora, Titán sigue compartiendo la vida con nosotras en la comunidad. Como nos encontramos cerca
del mercado, ha comenzado un pequeño negocio que le ayudará a ahorrar para poder alquilar un cuartito
para ella y posteriormente recuperar a sus hijos. Admiramos el valor de Titán y de las mujeres haitianas
que viven esta misma situación ya que sufren como algo asumido por la sociedad el hecho de ser
maltratadas, sin tener voz para la denuncia. Lo pierden todo y tienen que volver a empezar de la nada
para reconstruir sus vidas.
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En el Symposium se desarrollaron diversos talleres con diferentes temas de
reflexión como: “La historia de la Vida Consagrada en Haití”; “Vida Consagrada
y Superstición”; “Vida Consagrada y Ecología”, etc. Para ello se contó con
diferentes ponentes quienes la enriquecieron a partir de su propia
experiencia.
El encuentro terminó con un gesto simbólico de entrega de un árbol a cada
Congregación participante como signo de comunión y solidaridad activa
dentro de una Iglesia más comprometida y de una sociedad más solidaria. Se
culminó con una Eucaristía que duró tres horas en la que se hizo memoria de
la historia e inicios de la CHR y se agradeció públicamente a l@s religios@s
que han acompañado su caminar.
Aprovechamos los días feriados de carnaval para visitar a las Hermanas de la Comunidad
Intercongregacional de la Providencia en el pueblo de
Plassac, departamento de Artibonite. Las hermanas Eva
Magaña, Mary Augustine Kanjirakattukunnel y Eugenia
Silva, están desde hace 3 años compartiendo la vida, la
misión y la fe con el pueblo de Plassac. Son las únicas
religiosas de la zona y nos cuentan que no tienen Párroco
que les celebre la Eucaristía, pero la misma comunidad
parroquial se organiza junto con las hermanas para hacer
las diversas celebraciones en la Capilla del pueblo llamada:
“Ntra. Señora de Alta Gracia”.
Las hermanas están acompañando al pueblo con varios
proyectos, entre ellos una panadería, la única que existe en
el pueblo; un centro de salud que imparte formación a base de medicina natural; la formación para
agentes de pastoral; la formación religiosa en la escuela primaria y la dirección en la etapa secundaria que
se ha iniciado este año gracias al esfuerzo de las mismas hermanas.
Desde la CIM agradecemos su acogida. Fue muy significativo compartir la fe, la mesa y sobre todo la
amistad. Gracias por ser testimonio de vida religiosa que camina al lado del pueblo como pequeña semilla
del Reino.
DESPEDIDA DE PIEDI
Después de 4 años y 4 meses, Piedi terminó su misión en Haití. Nosotras sentimos mucho su partida, pues
la presencia de Piedi en la CIM fue muy significativa e importante. Como un gesto de cariño le hicimos a
Piedi la despedida en la comunidad. Nos acompañaron
nuestras amigas las hermanas de la Providencia: Eva,
Mary Augustine y Eugenia.
Así mismo, nuestros compañeros de trabajo del Servicio
Jesuíta Migrante de Fonds Parisiens, con un almuerzo de
confraternidad, le hicieron la despedida a Piedi. ¡Gracias
Piedi por tu alegría, por tu entrega sin medida, por
espíritu misionero y por todo lo que regalaste con tu
persona a nuestros hermanos haitianos!. Te deseamos
lo mejor en tu nueva misión y seguimos dando gracias a
Dios por las huellas que dejaste en la CIM y por tu
valiosa amistad!.
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NUESTRO TRABAJO PASTORAL
PROYECTO PIM (PASTORAL INTERCONGREGACIONAL CON MIGRANTES)
Y otro aspecto, motivo de mucha satisfacción, es ver cómo el grupo de las 12 familias van haciendo
esfuerzos para llegar al objetivo de no sólo tener una vivienda digna sino de contribuir para un
crecimiento personal y social entre todos los que forman este grupo comunitario. Se organizó un Comité
de 5 miembros y todos ellos, con responsabilidad, han hecho su primera reunión en este mes para
concretar algunos puntos que favorecerán la buena marcha en la convivencia: la atención a todo lo
relacionado con la recogida y selección de la basura; la implicación de los jóvenes en las tareas de cuidado
ecológico; el crear entre las familias un fondo de solidaridad para atender emergencias como fue el caso
de una señora del Vilaj quien, al regresar de su trabajo empezando a anochecer, se cayó en unos agujeros
que hay en el camino y sufrió heridas de consideración
y fueron las familias del Vilaj quienes se organizaron
para llevarla hasta el hospital. Están pensando también
en hacer alguna salida o paseo a la playa con el fin de
conocerse mejor y crecer en la buena relación entre
las familias. Y todo ello, pensando ya ellos mismos en
cómo organizarse para salir adelante. Todo es motivo
de esperanza y ocasión para dar gracias a Dios al ver
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cómo estas familias van siendo los protagonistas de su propio desarrollo.
El proyecto de los niños KNH (Niños que necesitan ayuda) está suspendido desde el mes de noviembre
debido a que se terminó el contrato de un año y hasta la fecha el nuevo contrato no ha sido renovado.
Pero nosotras continuamos las actividades normales con los niños de Boulay, Plezi, Lilét y Gaya. Durante
estos meses vamos desarrollado diferentes actividades. Algunos niños que todavía no saben leer y escribir
han sido ayudados para conseguir este objetivo.
Además se va reforzando la lectura y escritura y los
ejercicios de coordinación motriz, la identificación de
números, las figuras geométricas, los colores,
ejercicios de cálculo mental en suma y resta, todo con
juegos didácticos muy elementales que ayudan al
silencio, concentración y favorecen el trabajo en
equipo.
con las condiciones adecuadas para trabajar. Ellos saben que el proyecto está
suspendido, pero también conocen que Maglene y Carmelita no los han
abandonado. Los niños van avanzando en conocimientos, en la capacidad de
trabajar en equipo y el comportamiento entre ellos mismos es de más respeto y
ayuda.
VISITA A DAVENS
Como de costumbre, el último sábado de febrero fuimos a visitar a Davens en el orfelinato. Y en esta
ocasión vino Soco después de más de un año de ausencia. ¡Y Davens le reconoció! Nos alegramos verle
más animado, con ganas de compartir, incluso con más apetito, pues la
comida que le llevamos la degustó con agrado.
Cuando recibió la visita de Junot, a quien Davens ya llama con cariño
“Papá”, se puso más contento y comunicativo. A él le compartió que
sabía escribir mejor y que le gusta ir a la escuela.
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VISITA A LA CARCEL
Como cada mes, no pudimos faltar a nuestra cita con Trezil y también con otro joven que se llama
Donalson, hijo de una de las mujeres de los Grupos de Economía Solidaria y que ya lleva más de tres años
y sin ninguna acusación formal. Y justamente el día en que los visitamos nos acompañaba el Evangelio
del día: Mateo 25…”estaba preso y me visitasteis”… Cuando llegamos a la Penitenciaría Nacional de
Puerto Príncipe nunca podemos saber cómo nos irá, pues aunque entramos con una autorización de
Justicia y Paz, luego estamos a merced de las circunstancias. Esta vez, después del registro de lo que
llevamos, nos pasaron a un patio, que tiene una especie de jaula grande donde es imposible darse un
abrazo con los detenidos a quienes se los visita. Así que, cuando vinieron Trezil y Donalson, nos dimos el
saludo a través de la punta de los dedos ya que las rejas no permitían más. Allí compartimos las noticias,
las palabras de ánimo, de fe, nos interesamos sobre las actividades de alfabetización y manualidades que
llevan con otros presos, etc. De repente, empezaron a entrar mucha gente, especialmente mujeres. Era el
día de visita y, la verdad, ahí no cabíamos todos, así que un guardia vino a decirnos que nuestro tiempo se
acabó. De igual modo que al entrar nos despedimos tocándonos las puntas de los dedos y Piedi
diciéndoles adiós, pues era su última visita. Ahora ya se lo dijo, “los llevará en su corazón”.
Querid@s amig@s de la CIM, reciban nuestro saludo fraterno. Nuestro Dios que nos ama con
ternura nos ayude a encontrarle cada día en medio de su pueblo.
Les abrazamos con cariño sus Hermanas de la CIM-KEM: