UNIVERSIDAD ABIERTA PARA ADULTOS

(UAPA)

Asignatura:

Psicopatología I

Tema:

Unidad III: Evaluación de la Conducta Anormal

Facilitadora:

Alexandra Rodríguez

Participante:

Laura Michelle Fernández Méndez

Matricula:

14-3242

20/11/2017
 Introducción

La evaluación es el proceso de recabar información y elaborar conclusiones

acerca de los rasgos, habilidades, capacidades, funcionamiento emocional y
problemas psicológicos del individuo, que en general se usan para obtener un
diagnóstico. Las herramientas de evaluación son necesarias para el estudio y la
práctica de la salud mental. La evaluación debe de apoyarse en el uso de
múltiples métodos y pruebas a fin de obtener una imagen más precisa del
paciente.

En el campo de la salud mental, la evaluación es muy importante. Los

terapeutas deben reunir información por el bienestar de los individuos y organizar
los datos acerca de la condición de la persona. Entre las herramientas de
evaluación disponibles para los clínicos están las observaciones, las
conversaciones, las entrevistas, una variedad de exámenes psicológicos y
neurológicos, y los informes relacionados con los pacientes que sus parientes o
amigos proporcionan. Cuando los datos que se han reunido de todas las fuentes
se combinan y analizan, es posible que un terapeuta obtenga una buena imagen
de la conducta y el estado mental del paciente.
 Elaboración de un diario de doble entrada de la
conducta Anormal

Evaluación de la conducta Anormal

La evaluación es el proceso de recabar

información y elaborar conclusiones acerca de
los rasgos, habilidades, capacidades,
funcionamiento emocional y problemas
psicológicos del individuo, que en general se
usan para obtener un diagnóstico. Las
herramientas de evaluación son necesarias para
el estudio y la práctica de la salud mental. Sin
ellas, no sería posible recolectar los datos y los
psicólogos no podrían llevar a cabo una
Evaluación de la conducta investigación significativa, desarrollar terapias o
tomar parte en la psicoterapia. Entre las técnicas
anormal de evaluación tenemos:

La Observación: las observaciones de la

conducta proporcionan el método más básico
para evaluar la conducta anormal. las
observaciones clínicas también pueden ser
controladas o naturales. las controladas son las
que se realizan en un laboratorio, clínica u
establecimiento y las naturales son las que se
realizan en las aulas de clases, oficina, cuarto de
un hospital o en las casas.

La Entrevista: la entrevista clínica permite

al terapeuta observar al paciente y recabar datos
de su vida, situación y personalidad. es
importante analizar las conductas verbales y no
verbales, así como el contenido (lo que dice) y el
proceso de las comunicaciones (el modo en que
se comunica, con ansiedad, vacilación, o enojo).
Según su estructuración la entrevistas pueden
ser Clínicas y Examen del estado Mental.

Pruebas E Inventarios Psicológicos: las

pruebas e inventarios psicológicos son una
variedad de instrumentos estandarizados que se
 han utilizado para evaluar la personalidad, la
conducta inadaptada, el desarrollo de habilidades
sociales, capacidades intelectuales, intereses
vocacionales y deterioro cognitivo. Entre las
pruebas e inventarios psicológicos están las
Pruebas Proyectivas De Personalidad (Técnica
De Rorschach, Test De Apercepción Temática,
Pruebas De Frases Incompletas, Pruebas De
Dibujo De La Figura Humana), Inventarios De
Autoinforme (Inventario Multifásico De La
Personalidad De Minnesota, Inventario De La
Depresion De Beck), Pruebas De Inteligencia
(Escala Wechsler De Inteligenciapara Adultos,
Escala De Inteligencia De Standford-Binet,
Escala Wechsler De Inteligencia Para Niños,
Escala Wechsler De Inteligencia Para Preescolar
Y Primaria, Bateria De Evaluación Para Niños De
Kaufman), Pruebas De Deterioro Cognitivo (Test
Gestaltico Visomotor De Bender, Batería De
Pruebas Neufisiológicas Halstead-Reitan, Batería
Neuropsicológica Luria-Nebraska).

Pruebas Neurológicas: son procedimientos

médicos neurológicos computarizados, los cuales
incluyen rayos X, Tomografía Axial
Computarizada, Tomografía por Emisión de
Positrones, Electro-Encefalo-Gramas, Imagen de
Resonancia Magnética, han añadido medios muy
importantes y sofisticados para detectar el daño
cerebral.

El objetivo de tener un sistema de

clasificación para la conducta anormal es brindar
distintas categorías, indicadores y nomenclaturas
para diferentes patrones de conducta, procesos
de pensamiento y perturbaciones emocionales.
La clasificación se basa en lo síntomas del
paciente, como en la medicina.

La primera edición del DSM se basó de

manera amplia en el modelo biológico de
enfermedad mental y suponía que las personas
Clasificación de la que se clasificaban en una categoría
psicodiagnóstica mostrarían síntomas similares
conducta anormal que se originaban en una causa común, que
debía tratarse de cierta manera, que respondería
 de forma similar y tendría pronósticos parecidos.
Los críticos cuestionaban la confiabilidad y la
validez de las versiones previas del DSM.

El DSM-IV-TR actual contiene criterios

diagnósticos detallados; se usaron
descubrimientos y juicios expertos para ayudar a
construir la última versión. Como resultado, su
confiabilidad parece ser más alta que la de
manuales anteriores. Además, los datos se
recaban en cinco ejes de modo que se examina
sistemáticamente más información acerca de los
pacientes. El DSM está en revisión para una
próxima edición, el DSM-V.

Las objeciones generales a la clasificación se

basan principalmente en los problemas que
implica el etiquetamiento y la pérdida de
información acerca de una persona cuando se
etiqueta o categoriza.

Han surgido numerosas preguntas éticas

acerca de la clasificación y evaluación de
personas por medio de pruebas. Éstas incluyen
preguntas sobre confidencialidad, privacidad y
prejuicios culturales. Los psicólogos,
preocupados por esos temas, han buscado
perfeccionar los procedimientos de clasificación
y evaluación, y definir las condiciones apropiadas
para realizar pruebas y diagnósticos.

El Manual diagnostico DSM-V-TR, es la

actualización y mejora del DSM-IV-TR. Éste
brinda categorías diagnósticas y enlista criterios
Manual diagnostico
para juzgar si los síntomas y las conductas de
DSM-5, USO una persona entran en la categoría. Permite a los
clínicos examinar y evaluar el estado mental del
individuo de acuerdo con cinco factores o
dimensiones (llamadas ejes en el manual). Los
ejes I, II y III se refieren a la condición mental y
médica presente del individuo. Los ejes IV y V
brindan información adicional acerca de la
situación de vida y el funcionamiento de una
persona. Juntos, los cinco ejes pretenden brindar
información exhaustiva y útil.
 Han propuesto diferentes esquemas de
clasificación que pueden complementar al DSM-
IV-TR. Por ejemplo, Berenbaum y sus colegas
(2003) han construido una taxonomía de
perturbaciones emocionales. La taxonomía divide
a éstas (que trascienden el espectro de los
trastornos psiquiátricos) en perturbaciones
emocionales valentes, perturbaciones
emocionales de intensidad/regulación y
desconexiones emocionales. Finalmente, un
grupo de organizaciones psicoanalíticas
(McWilliams, 2006) ha propuesto el Manual
diagnóstico psicodinámico. Su objetivo es
complementar al DSM-IV-TR y tomar en
consideración el funcionamiento dimensional en
lugar del categórico y los procesos de desarrollo.
Los clínicos usan principalmente cuatro
métodos de evaluación: observaciones,
entrevistas, pruebas e inventarios psicológicos y
Tipos de métodos de
pruebas neurológicas.
Investigación
Durante una entrevista en general se hacen
observaciones de signos externos y conductas
expresivas que pueden tener significancia
diagnóstica.

Las pruebas y los inventarios psicológicos

brindan un medio más formal de obtener
información. En la evaluación de la personalidad,
pueden utilizarse las técnicas proyectivas, en las
que el estímulo es ambiguo, o los inventarios de
auto-informe, cuyos estímulos son mucho más
estructurados.

También se puede investigar con aparatos

computarizados que nos arrojan informaciones
neurológicas sobres los posibles daños
cerebrales.
Ética en la Evaluación

Los esquemas de clasificación pueden ser

Etiquetamiento una gran ayuda al categorizar los trastornos,
comunicar información acerca de ellos y conducir
la investigación sobre ellos. Sin embargo se les
ha criticado debido a consecuencias negativas.

Etiquetar a una persona como poseedora

de un trastorno mental puede resultar en
sobregeneralizaciones, estigmas y
estereotipos.
Una etiqueta puede hacer que se trate a
una persona de manera diferente.
Una etiqueta puede conducir a aquellos
que han sido etiquetados a creer que en
verdad poseen dichas características o a
que representen la etiqueta.
Una etiqueta quizá no brinde la
información precisa y funcional que se
necesita.
 conclusión

Encontrar causas a la conducta anormal es complejo. Aunque un modelo de

vías múltiples ayuda a conceptualizar las complejidades, la realidad es que
nuestra investigación actualmente es insuficiente para relacionar con precisión las
diferentes dimensiones de análisis para la mayoría de los trastornos.

Al proponer un modelo de vías múltiples no sugerimos que los trastornos

puedan ser causados por algunos eventos o por eventos al azar. En vez de ello,
ciertas combinaciones de factores (biológicos, psicológicos, sociales y
socioculturales) aumentan la probabilidad de ocurrencia de los trastornos. Estos
factores con frecuencia ocurren en diferentes dimensiones. Explican los aspectos
comunes y únicos en los trastornos. Es decir, pueden ayudar a predecir la
ocurrencia y la no ocurrencia de los trastornos, y brindan un entendimiento
profundo de los medios para controlar los trastornos.

Aunque en un nivel general conocemos la importancia de las interacciones

complejas de los factores que conducen a trastornos mentales, nuestro saber
acerca de las dinámicas y la relación precisa de estas dimensiones con alguna
otra está lejos de completarse. La investigación que vincule las variables micro
(biológica) y macro (cultural), por ejemplo, es particularmente difícil de encontrar.
sin embargo, creemos que las teorías de psicopatología más influyentes serán
aquellas que adopten un enfoque de vías múltiples en el que los factores de
distintos enfoques sean conectados de manera coherente.
 Bibliografía

Sue, D., Wing, D. y Sue, S. (2010). Psicopatología: Comprendiendo la

Conducta Anormal. Novena Edición. Mexico: Cengage Learning Editores.

Sarason, I. y Sarason, B. (2006). Psicopatología Anormal: El Problema

de la Conducta Inadaptada. Undésima Ediación. Mexico: Pearson
Educación.