MOSHÉ RABBÉNU, RAAYA MEHEMENA, EL VERDADERO LÍDER

MOSHÉ RABBÉNU, HARAÄYA MEHEMENÁ, EL VERDADERO LÍDER

Moshé/Moisés tenía más de las características de otorgamiento y amor por otros, que ninguna
otra persona. Un líder de Israel no necesita capacidad de liderazgo ni sabiduría ni astucia ni cosas
así. En su lugar, no debe tener malicia.

En la medida en que un líder de Israel es inocente, la Luz Superior puede trabajar en otros a través
de él. Ser inocente significa no querer nada excepto adherirse más y más a las características de
otorgamiento y amor. Así, a través de él, el poder de otorgamiento y amor actúa en la gente,
educándola y avanzándola a la conexión y al amor.

La característica de Moshé, el Raäyá Mehemná, es la de un cabalista divino que alcanza la

divinidad para que la Luz brille a través de él. Moshé no hacía concesiones ni para sí ni para el
pueblo. Cuando el ego crecía, sabía cómo equilibrarlo.

Moshé explicó lo que la naturaleza o la divinidad (que es lo mismo) requerían del pueblo. Explicó
la ley de desarrollo a la gente. Moshé tenía el ego más grande, pero sabía cómo superarlo y tenía
éxito en equilibrarlo.

El pueblo de Israel es gente testaruda y fue muy obstinada con Moshé. Pero él no tenía opción.
Moshé incluyó los deseos egoístas del pueblo para poder transmitirles el poder de corrección.

Moshé condujo un proceso educativo de desarrollo y toma de conciencia de que el egoísmo es

dañino y que necesitamos conectarnos. Ser un líder significa establecer un sistema de educación y
explicación que lleve a la conexión entre la gente por encima de todas las disparidades y
diferencias. Moshé explicó al pueblo que todos los problemas son a causa de que el ego los
esclaviza. Les enseñó cómo escapar de este.