¡PARE OREJA!

¿CÓMO DETECTAR UNA DIFICULTAD AUDITIVA EN NUESTROS ALUMNOS?

Características de un niño con problemas auditivos

 No habla a los dos años.

 Se comunican a través de gestos.
 No comprende lo que le dicen.
 Su habla es defectuosa.
 Observan todo el tiempo la boca de su interlocutor cuando le hablan.
 Son indisciplinados o retraídos.
 Su vocabulario es limitado.
 Suelen escuchar radio o televisión a volumen alto.
 Con frecuencia son desatentos.

¿Qué podemos hacer al respecto?

TAMIZAJE AUDITIVO

 Buscan un lugar silencioso o lejos del ruido externo.

 El menor no debe estar enfermo.
 Sentarse a 10 cm detrás del menor.
 Frotar con un papel el oído contrario al evaluar.
 Decir cinco palabras en tres intensidades diferentes.
 El menor debe repetir las palabras.
 Si el menor se equivoca no se puede repetir la palabra.
 Si se equivoca en aproximadamente tres o dos palabras es necesario
remitir a valoración especializada.
Solo la presencia de uno solo de estos comportamiento no indica por si
solo que la persona posea una deficiencia auditiva, sin embargo,
constituye un indicador que juntos con otros comportamientos o datos
de su historia personal puedan conducir a la sospecha de este caso, se
debe mirar la posibilidad de realizar pruebas audiológicas
especializadas para el diagnóstico o remitir al otorrinolaringólogo,
audiólogo o fonoaudiólogo.

La audición es un proceso complejo que necesita de estructuras bien

desarrolladas para su adecuado funcionamiento.

A medida que el niño va creciendo utiliza sus oídos para absorber todo
tipo de información sobre el mundo que lo rodea, esto estimulará el
desarrollo de su cerebro y lo llevará a aprender y adquirir los sonidos
del habla (fonemas), incluyendo más adelante su desarrollo escolar.

¿POR QUÉ ES IMPORTANTE LA AUDICIÓN EN LA ADQUISICIÓN DEL

CÓDIGO LECTO-ESCRITO?

Cuando el niño ingresa al ambiente escolar, empieza a conocer y a

experimentar contexto nuevos, en donde lo que se busca es la
adquisición de nuevos conocimiento y desarrollo de la personalidad e
inteligencia.
 ¿CON QUÉ OÍMOS?

En el OÍDO EXTERNO encontramos al pabellón auditivo que se encarga de

recibir las ondas sonoras y llevarlas al conducto auditivo externo, el cual tiene
como función la producción de cerumen para protección, humectación y
también la de conducir la ondas hacia el oído medio.

El OIDO MEDIO está compuesto del tímpano, estructura delgada que ayuda a
amplificar el sonido, transmitiéndolo por la cadena de huesecillos, el martillo,
yunque y estribo quienes se moverán debido a la vibración del tímpano y
estimularan la ventana oval del oído interno.

El OÍDO INTERNO está conformado por la cóclea o caracol, la cual recibe las
vibraciones de los huesecillos que el líquido dentro de ella vibre y estimule
células adecuadas para cada tono (aguo o grave), enviando finalmente la
información por el nervio auditivo que la conducirá hasta la corteza cerebral,
quien es la encargada de detectar e identificar lo que oímos.