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CONDICIONES SOCIOCULTURALES, ECONÓMICA, POLÍTICA, TECNOLÓGICA E

INFLUENCIA DE LA ESCUELA DE CHICAGO EN ARQUITECTURA

“No hay mal que por bien no venga” La ciudad de Chicago, lugar que en sus inicios
fue construido con madera, de acuerdo a la tradición americana, con estructuras que
no contaban con técnicas y elementos de jerarquía para una buena edificación. Más
tarde en 1871, sufre un gran incendio, que provoca un impulso propio y la necesidad
de formar una nueva generación de arquitectos, los mismos que aportarán con la
reconstrucción de la ciudad y con “La escuela de Chicago” como una entidad
innovadora que experimentará nuevos sistemas constructivos, para satisfacer las
demandas de la sociedad (Vaquero, s/a).

DETERMINANTE SOCIOCULTURAL

A finales del año 1800, Chicago ya se constituía en una de las ciudades más grandes e
importantes de Estados Unidos, donde el urbanismo tuvo una relevancia máxima, ya
que había llegado a contar con más de un millón de habitantes, en donde todas las
personas querían vivir allí, ahora su reconstrucción, era una cuestión de orgullo
comunitario, puesto que tenía que surgir de las cenizas, sin obstáculos, con una
voluntad singular y alejado de la arquitectura tradicional, para dar posibles respuestas
a sus problemáticas sociales como: la delincuencia, la migración, el aumento
demográfico, etc. Situación que La Escuela de Chicago pretendía comprender y
explicar estas dificultades en la organización y ejecución de sus proyectos en afinidad
con la nueva estructura urbana y un contexto cultural que se ubica en la modernidad,
convirtiéndose en un lugar burgués y con predominio del capitalismo. Esta
institución, por lo tanto, se enmarcarse en dos generaciones: la primera con
ingenieros, incluso militares de gran importancia que se formaron durante la guerra
de sucesión, que tenían ideas artísticas para sus edificaciones y la de sostener un
edificio con una estructura metálica y la segunda en cambio con los proyectistas que
pretendían dar soluciones formales a la anterior generación, sosteniendo que en los
grandes rascacielos deben proyectarse las grandes y estables fuerzas de la civilización
moderna.

CONDICONANTE ECONOMICO.-

En 1812, cuando Chicago fue por primera vez reconstruida, se utilizaron materiales
referentes a la industria maderera, que con otros elementos de poco valor, sus
medidas unificadas, el corto de tiempo y la mano de obra no especializada,
abarataban precios, que permitían obtener construcciones de una forma más
rápida, económica pero no tan segura. Con el pasar de los años y tras el devastador
incendio, Chicago fue por segunda vez reconstruida y considerada muy próspera ,
debido a su crecimiento económico, lo que acarrearía como consecuencia una gran
demanda para la construcción y la adquisición de terrenos donde el comercio y la
industria, amplíen sus espacios para el funcionamiento de sus locales comerciales y
hoteles. El sobreprecio del suelo, obligó a construir grandes edificios verticales sobre
una planta reducida; superávit económico que dio paso, a que la segunda revolución
industrial sea decisiva en la remodelación urbana y en los avances de la ingeniería y
arquitectura.

CONDICONANTE TECNOLOGICO.-La escuela de Chicago, marco una gran tendencia en


la tecnología americana, en lo que se refiere a los materiales, a la construcción de
edificaciones, a diseños y a ideas innovadoras que le permitieron a Chicago
constituirse en una urbe de gran prestigio nacional e internacional, la misma que se
alejaría de lo tradicional para abrir paso a una exitosa arquitectura moderna, que
respondería a las necesidades e intereses de una ciudad nueva y con crecimiento
acelerado. En la mayoría de los edificios de Chicago se pueden evidenciar varios
elementos comunes, que constituyen la nueva tecnología de la construcción de aquel
entonces: estructuras metálicas de hierro y acero, para lograr mayor altura, en donde
se incorpora la electricidad y el teléfono; pilar de hormigón como soporte o cimiento;
ventanas extendidas horizontalmente como muro cortina; ascensor eléctrico, que
eliminó las decoraciones tradicionales, habitaciones polivalentes para cumplir y variar
funciones, el trabajo unificado de ingenieros y arquitectos y el equilibrio estético entre
líneas horizontales y verticales.

CONDICIONANTE POLITICA. La escuela de Chicago en cuanto a su arquitectura, logra


la autonomía europea y la adjudicación de una arquitectura norteamericana propia,
la misma que identifica construcciones con su ambiente cultural, en el que se
desenvuelven sus proyectos. El planteamiento político especifico de las autoridades
de la época fue construir una ciudad nueva, que sea agradable para los vecinos y que
Chicago se constituya un emblema del poderío norteamericano, estas ideas en base al
pragmatismo norteamericano, latente en las mentes de los arquitectos, a la hora de
construir sus edificaciones en esta nueva urbe.

INFLUENCIAS.- La escuela de chicago constituyó un referente mundial por su


arquitectura muy bien definida y por sus grandes maestros arquitectónicos,
tecnología que cien años más tarde se sigue utilizando, los modelos creados en
Chicago pronto empezarán a ser emulados en otras ciudades de Estados Unidos.
La Feria Mundial de Chicago de 1893 dio la oportunidad de presentar la nueva ciudad
al mundo; trayendo como consecuencia un movimiento de reacción en la nueva
generación de arquitectos estadounidenses, muchos de ellos originarios del Medio
Oeste; en 1938, la llegada a la ciudad en Alemania desarrolló uno de los nuevos
planteamientos que caracterizan la denominada “Segunda Escuela de Chicago”, más
tarde y con el nombre de “Los siete de Chicago “se conoce a un grupo de siete
arquitectos de los años 1970.

(Benevolo, 1999)
(s/a). En A. Vaquero, La escuela de Chicago y la vanguardia Americana (págs. 2-4).
Barcelona: Gustavo Gili.

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William Le Baron Jenney (1832 - 1907); Padre de la Escuela de Chicago, planeó El


Home Insurance Company Building en 1884, considerado como el primer edificio
construido con estructura de hierro, compromete el aspecto estético para acomodar
las plantas de oficinas sin precedentes, pensaba en concentrar a más gente en menos
espacio, construyendo el primer edifico con 10 pisos, su técnica fue de engarces de
hierro a base de pilares, vigas y entramados recubiertos de una sustancia protectora
contra el fuego, pilares delgados, que eliminaban los muros; ventanales de cristales,
que mejorarían la ventilación e iluminación.

Henry Hobson Richardson (1838 - 1886); Autor del Marshall Fields Store , no tiene
muchos pisos, pero es evidente entre los demás. El exterior del edificio es muy
sencillo, tiene una libre interpretación de lo románico europeo, sus muros son
consistentes, de piedra no pulimentada, ventanales que funcionan para captar la luz,
los que destacan la utilización de diferentes formas y tamaños.

Burnham & Root; Dos arquitectos que sintetizan los dos componentes de la realidad
profesional americana. Burham práctico, emprendedor, con gran capacidad para las
relaciones públicas, promotor, realista y cínico; mientras que Root, más artístico,
juntos construyeron edificios como el Rookery Building, el Reliance Building o el
Monadnock Building entre otros.

L. Henry Sullivan (1856 - 1924); Uno de los principales representantes. Su aporte más
importante fue el diseño de diferentes tipos de rascacielos, con la estructura interior
de hierro bajo una atractiva fachada de mampostería. El Wainwright Building, el
Guaranty Building y el Carson Pirie Scott Department Store (Almacenes Carson) son
edificios que llevan su firma.
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REFERENTES ARQUITECTONICOS

El Chicago Building

Los rasgos del edificio característicos de este


estilo son el uso de grandes "ventanas de
Chicago", estructura metálica, los
característicos miradores, y el revestimiento
de terracota. La combinación de las ventanas
mirador del lado norte y las rectangulares
"ventanas de Chicago" del lado este con bandas
movibles representan los dos tipos típicos de
ventanas de la escuela de Chicago

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CONCLUSIONES.- Esta escuela tiene marcado a su máximo representante William Le


Baron Jenney, con su aporte técnico, a Riochardson con su trabajo cultural y a
Sullivan con su estilo personal. Se podría decir que el mayor aporte de esta institución
son los grandes rascacielos, por su tecnología equilibrada de base, cuerpo y remate,
los mismos que van acompañados de ascensores eléctricos, estructuras metálicas de
hierro o acero, grandes ventanales, entre otros, que marcan la diferencia
arquitectónica de la época y de la actualidad, iconos que constituyen el desarrollo y
progreso de las grandes urbes a nivel mundial. De esta manera la famosa Escuela de
Chicago, sin duda alguna marcó una nueva tecnología nacional y global en la
arquitectura, ya que dio lugar a descubrir y a poner en práctica múltiples innovaciones
constructivas que hasta la actualidad se siguen utilizando, como bases fundamentales
de un edificio, gracias a esas mentes brillantes de ingenieros y arquitectos que se
destacaron hace cien años atrás.
Monadnock Building, Chicago, diseñada por la firma de
Burnham & Root, 1891

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