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t Contrera, Laura
I Cuerpos sin patrones: resistencias desde las geografías
desmesuradas de la carne / Laura Contrera; Nicolas Cuello;
compilado por Nicolas Cuello; Laura Contrera. - 1a ed . -
i Ciudad Aut ónoma de Buenos Aires: Madreselva, 2016 .
.
192 p ; 20 x 13 cm .
| ISBN 978 - 987 - 3861 - 05 - 5
.
1. Sexualidad. 2 Derechos de Grupos Especiales. I. Cuello,
Nicolas II. Cuello, Nicolas, comp. III. Contrera, Laura, comp.
IV . Tí tulo.
CDD 306.76
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a - el gozo se confunde irremisiblemente con la necesidad:
la necesidad de que esas palabras que van a leerse hayan
sido, antes que nada y a pesar de todo, puestas por fin en
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el mundo, y puestas por escrito.
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. A lo largo de los ú ltimos veinte a ñ os he tenido la
mi oportunidad de poe- poli - tizar algunas de las marcas que
ha dejado en mi carne su encuentro con el G énero -sobre
todo, aquellas que la medicina suturó como una promesa
« - incumplida e incumplible - de diferencia sexual , de
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m .
identidad Sin embargo el registro poético - polí tico de
la gordura ocupó un lugar marginal en mi vida hasta el
.
:i» T encuentro con Laura primero y con Nico despu és. Fue
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así como la interpelaciones epistemol ógicas, é ticas,
eró ticas, ó pticas y pol í ticas que plantea el activismo
gordo - las mismas que, en sus diversas formulaciones,
atraviesan este libro- me permitieron ( re )conocer el
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m Cuerpos sin potrones
trazado de la historia personal de mi gordura y explorar es siempre de más. A d écadas de distancia , sobreviviendo
la configuraci ó n de su actualidad en proceso . en el exilio de otra ciudad, bajo otro nombre, en otro
Soy uno de los sobrevivientes de una familia diezmada sexo legal y otro gé nero gramatical, ah í está, intocada ,
la asociació n inmediata entre gordura y traición . Traición
- primero por la muerte y, después, sporde una una
tormenta
d écada . a la salud, al deber del peso justo y de la vida sin stress;
de violencia dom é stica que dur ó má
Y digo bien , dom éstica , porque la falta de comida y la traici ón a la seguridad, a la responsabilidad , al deber-ser
del acceso a la comida en un hogar , por y tambié n al deber - parecer; traición a la esperanza y a la
condicionalidad
, econ ó micas , fueron tal vez las justicia; traici ó n a la verdad, lo que es decir: traició n a uno
lo dem á sin
s necesidades
y m á s ocultas de esa violencia . mismo. Antes y ahora, la gordura ha aparecido y aparece
formas má s persistentes
Un verano en la playa , hace ya treinta a ñ os, recib í en mi vida como un ox ímoron , como la afirmación de una
negaci ón , como un llamado urgente a dejar de ser para
un reproche del que nunca pude olvidarme por parte de
quien controlaba el acceso a la alimentaci ó n en mi casa :
ser algo que no he sido, ni seré . A los ojos de Ixs demá s
aparezco, una y otra vez, como un malestar encarnado y,
le decís a la gente que no te doy de comer pero está s
Sí' hecha una vaca . Esas palabras me dolieron como el golpe dios mío, con cuá nta abundancia .
inesperado de un l á tigo de varias puntas. Se trataba ,
por supuesto, de la generizaci ón violenta y sexualizada
-ah í donde mis ubres desmentían mi masculinidad en la Estoy profundamente en deuda con el activismo
gordo argentino -con su capacidad increíble de abrir el
arena y en la vida. Se trataba tambié n , lo comprender í a ,
a
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Cuerpos sin patrones
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Para quienes -como tantxs otrxs y como yo - hemos manera hipervisible, los supuestos, mandatos y amenazas
« atravesado los años al amparo de bibliotecas salvadoras, que configuran la posibilidad o imposibilidad de la vida.
M este libro actualiza el estado de la deuda Escribir . Algo similar ocurrió hace algunos meses, cuando Laura,
sobre gordura, compartir esos saberes crí ticos que Nico y Lux expusieron un trabajo cotectivo en el contexto'
§¡gg¡ ponen continuamente en jaque el imperio de la norma, de un encuentro académico organizado por la carrera de
interrumpir el juicio y desmentir la impasibilidad de Comunicación de la Universidad de Buenos Aires. La primera
su la condena, es arremeter contra un mundo que busca pregunta - la pregunta que, seguidamente, articuló todas
í
«W .
eliminarnos sin dejar rastros La politización escritural
de los cuerpos gordos desafía así el estado "natural” de
las demá s y el debate que les siguió- fue la pregunta por
los cuerpos otros, los cuerpos " no expandidos” (sic), los
JHIP las cosas, allí donde las únicas marcas posibles parecieran cuerpos del hambre . La identificación de la gordura con
SfBlk ? ser el registro vigilante de las calorías consumidas entre una sobre - presencia, capaz de volver ausente el hambre
el desayuno y la última colación a la noche o la anotación encarnado, se conjugó, también en este caso, con la
del peso diario en una bitácora de nutricionista . identificación imaginaria entre cuerpos gordos y privilegios
El agradecimiento y la deuda son, en estas páginas, abultados. A pesar de que en nuestros días la delgadez
Billfcl variantes de la amistad, y también del compromiso. "saludable” funciona material y simbólicamente como
una commodity, y de que numerosos estudios vinculan
causatmente pobreza y obesidad, el análisis convencional
El periódico argentino Página Í 2 public ó hace dos años continúa equiparando acr í tica y normativamente cuerpo
atr ás una ilustración en su tapa1. Dibujada por Rep, la gordo y superávit. En la sustitución retórica de la gordura
escena se situaba en un supermercado. Tres personas por la expansión corporal opera una mueca de corrección
m
empujaban carritos cargados de mercadería. Las tres polí tica que, al borrar la gordura como ofensa, borra
lucían amplias remeras en las que se leí an frases tales también el registro de su politización, de su subjetivación,
como: quiero que me afanes , róbame que me encanta de su ocurrencia, lo que es decir: la borra, nos borra.
y soy un cliente descuidado. Las tres eran gordas. En Este libro se publica en los inicios de un nuevo gobierno,
tm de los personajes dibujados por la necesidad de inscribir también busca exponer el campo de fuerzas en el que el
activismo gordo se organiza y milita, lee y escribe, interpela
m
visiblemente los términos del repudio a la falta de
conducta moral y cívica. Esa me pareció entonces, y y resiste -allí donde hasta el progresismo de la alteridad
me sigue pareciendo, una respuesta iluminadora: en tos habla inadvertidamente la lengua del patrón y donde el
cuerpos gordos del imaginario normativo se inscriben, de estado mide su eficiencia en unidades de militancia lípidas .
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Hoy, como nunca, el encuentro en la vulnerabilidad del
cuerpo individual y colectivo se convierte en imperativo
urgente de supervivencia.
Cuerpos sin patrones
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I Uno de los sueños de mi infancia era acceder, al menos
por un día o un rato, al famoso Libro Gordo de Petete. En
sus páginas, pensaba yo, debían estar todas las respuestas
para todas las preguntas. No es el caso de este otro libro
Introducción
gordo -que reúne, antes que preguntas y respuestas,
múltiples reflexiones y continuos reenvíos. Por suerte:
nada más peligroso que el viejo lema(o advertencia) de Este libro abre su camino funcionando como una
aquel libraco devenido enciclopedia: una só lida cultura / compilación urgente, que no pretende ser una cartografía
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es la herencia más segura. exhaustiva ni totalizadora, sino que ha sido concebida
En abierta disputa con la solidez de la gordofobia como una declaración geopolíticamente situada de un
Si cultural como herencia, ninguna certeza indiscutible momento inaugural del activismo de la gordura local .
a clausura una sola de las páginas de este libro -y en el Hemos decidido, entonces, pronunciar esta emergencia
m alivio de esa apertura a la inseguridad de los tiempos pulsante desde la necesidad política de volver más visibles
late la oportunidad cierta, tangible y gorda para la aún nuestras ideas, inspiraciones y los primeros esfuerzos
IlliSS sistem á tica violencia epistemol ógica con la que se han indaga sobre pol íticas de traducci ón y trá fico posibles y
silenciado nuestras voces, con la que se han estudiado
llii nuestros cuerpos y con la que contin ú an patologizando
deseables para la formació n de un entramado complejo
de resistencia crítica a los encuadres patologizantes que
nuestras existencias. Lo que aqu í se encuentra escrito son marcan y persiguen nuestros cuerpos, desde diversas
nuestras experiencias como personas gordas, politizadas miradas. Las traducciones aqu í compiladas entonces
de manera tal que sea posible construir una voz colectiva , son pensadas como herramientas disponibles para ser
ÉÍKB una máquina inestable de saberes encarnados y sin apropiadas, reapropiadas, ya que se ñalan los trayectos
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forma donde queden representados los actuales modos
de resistencia frente a la policía de los cuerpos y las
que hasta el momento, entre el deseo y el accidente,
hemos atravesado. Porque sabemos que al reivindicar y
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tecnolog ías eugen ésicas de normativizaci ón de los cuerpos localizarnos en esta tradició n tambié n hacemos nuestras
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:1 movilizadas por los saberes cient íficos dominantes . traducciones traidoras y perversas como sudakas , latinxs,
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Si bien lo gordo está relacionado con la presencia de migrantes, fugadxs, expulsadxs, no- blancxs.
grasa o tejido adiposo en el cuerpo, quién es gordx es
- un asunto m á s complejo, como dice Charlotte Cooper en
La ausencia que hemos experimentado en términos de
disponibilidad la entendemos como un problema pol í tico,
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el texto que aquí presentamos, puesto que "no hay una que ha cristalizado como necesarias algunas voces en
medida universal o marca que constituya lo que es y lo que detrimento de otras, estableciendo y reproduciendo
no es gordo; lo gordo existe en un contexto y experiencia; la estabilidad de agendas pol í ticas que có modamente
M la gente gorda sabe lo que es, y es reconocida como gorda
por Ixs otrxs"3. Partimos desde esta noci ón relacional de
gordura porque abraza una complejidad crítica en relación
impiden la renuncia y el cuestionamiento a la hegemon í a
de ciertas voces, miradas, y cuerpos posibles en la
producción de políticas desde los cuerpos. Estamos
a la estigmatización de la gordura, porque se vuelve un aqu í , hemos estado siempre aqu í , y es así como nos
cauce de politización que no se ahoga en las demandas abrimos paso. Reconocemos ese activismo de la gordura
de la h í per - producción identitaria del presente y porque, que nos precede y que definitivamente nos interpela .
fundamentalmente, abre lugares posibles de movilidad Pero como latinoamericanxs, como sudakas, como
pol ítica que nos parecen desafiantes para el trazado de
lili , una pol ítica gorda . , .
Reconociendo que no intervenimos desde un lugar
cuerpos que habitamos la gordura en estas coordenadas
socioecon ómicas espec í ficas , diferimos en muchos de
los presupuestos de cierto activismo gordo internacional
neutro ni desde un punto cero en la historia de la que no puede ver má s all á de sus fronteras, escondiendo
¡Sili-
¡mti los privilegios de sus voces, y que ha puesto a circular
resistencia de los cuerpos es que centramos este libro en
el trabajo activista local. Tomando como interlocutores
to
una ret órica liberal de sí mismo donde la conformidad
aquellos enunciados provenientes de otros contextos y y el orgullo vienen a redimirnos a todxs Ixs gordxs del
otras é pocas del activismo de la gordura, en su compleja mundo. No . Realmente creemos, al igual que muchos
polifon ía, para inspirar miradas críticas, para pulsar activistas que aqu í ven sus voces reunidas, que el
sentidos cuestionadores, incluso de esas narrativas ya activismo de la gordura tiene el potencial para mejorar
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constituidas desde este aqu í y ahora que habitamos en
la regió n . Esta compilación se enuncia como el efecto
de un circulació n torcida y subterrá nea de traducciones
y re- traducciones culturales, que simult á neamente
las actitudes sociales no sólo en torno a la gordura, sino
tambi é n con otras á reas de la experiencia corporal , las
normas sociales de producci ón corporal geolocalizadas,
las violencias envueltas en la productividad del género
y la sexualidad , en intersección con las complejidades
3 Cooper, Charlotte: Fat activism : A Queer Autoetnography . PhD thesis, que implican la diversidad funcional, las diferencias de
.
2012. Pá g 218 clase, raza, edad , etc .
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IB Cuerpos sin patrones
HI Pero del mismo modo que observamos la liberalización y el trabajo particular de Lucrecia Masson; también en
Mil problemá tica de cierta parte del activismo de la gordura Perú, Paraguay, Colombia, Brasil y otros tugares hemos
también reconocemos en esa genealogí a heterogénea encontrados aliadxs que sin prisa ni pausa comienzan a
; m voces que disparan a modo de interrupción crí ticas que agrietar los discursos gordof óbicos regionales, como la
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¡¡a ponen en jaque la propia neoliberalización del activismo
gordo como un movimiento. En muchos casos estas
Colectiva Feminista Gordas sin Chaqueta en Colombia,
en Brasil el trabajo performático de Tamíris Spinetli en
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«Mil
interrupciones se despliegan como estrategias para la
reanudación del calor y la urgencia de la multitud, una
multitud gorda que ocupa, toma y apropia, ya no solo la
colaboración con Ricardo Nolasco que reflexiona sobre el
cuerpo trans gordo o el de Fernanda Magalhaes; asimismo,
espacios de ciberactivismo como Stop Gordofobia, Orsullo
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É¡ injuria, sino todo espacio que pretende estabilizar una Gordo, Gorda! line, y muchos má s; y recientemente
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historia de insubordinación de nuestra carne. Justamente,
son los estudios académicos sobre gordura quienes
encuentros activistas que hemos podido gestionar, como
el realizado a ñnales del año 2014 que hemos dado en
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mayoritariamente tienden a eludir a los activismos,
BB llamar Asamblea Transfronteriza de Gordxs Sudakas
silenciando esfuerzos, instrumentalizando experiencias Insumisxs . Desde comienzos del 2015, quienes suscribimos
imams y objetuatizando de manera violenta nuestros cuerpos esta Introducción, venimos coordinando en Buenos Aires
wmm como estudios de caso. 0 incluso asumen que hay un el Taller Hacer la vista sorda: un espacio autogestionado
mm único activismo válido y reseñable (el que actualmente
se ha instituido como hegemónico: el activismo
y horizontal que reúne una multiplicidad de experiencias
vivenciales y formas de articulación y reflexión polí tica en
norteamericano, que bien vale la pena decir que se torno a éstas desde la gordura.
B enuncia desde su condición de blanco, hetero- cisexual Quienes aquí nos encontramos compilando y
de clase media, no anti - capitalista, y no consciente de su
ijgi etnocentrismo, sobre todo).
diagramando interconexiones, en esta suerte de asamblea
de voces, pensamos nuestro propia práctica y este libro
ÍÜ Así es como nos ubicamos en una red fragmentaria, como una invitación a la articulación con activismos
a dispersa y migrante de activismos gordos no anglo - de la diversidad corporal y sexo - genérica, y con todas
mm parlantes que infiltran viralmente críticas desde los aquellas luchas comunes que puedan desde la afinidad
mm cuerpos que discuten con tos discursos hegemónicos de la acción, volver a este presente, una plataforma de
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regionales, sin pretensión de masividad, pero con
la energía dispuesta en la producción de alianzas,
disputa multifocal que diseñe políticas que interrumpan
la eugenesia neoliberal de las industrias de la ciencia.
M encuentros, debates, y multiplicación de estrategias Nos reconocemos como activistas de estilos corporales
poéticas y políticas. Desde Valparaiso, Chile, el trabajo
| de Missogina que ya ha tomado forma en la publicación de
desdichados: improductivos en tanto no reproducen normas
morfológicas ( jugando con Butler y Austin pero también
BáM
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su libro La cerda punk y que continúa agit ándose en cada
una de sus performances; en México, las producciones
con Dorlin) o como “ identidades descalificadas” ( según la
bella expresión de Heather Love ), porque no creemos que
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artísticas de La Bala Rodríguez y de Lucía Robles junto a Ixs
compañerxs de la Revista Histerya quienes han producido
uno de los primeros dossiers dedicado a los cuerpos
gordos, llamado Carnitas ; a lo largo del Estado Español
todxs podamos amar nuestros cuerpos por decreto y nos
resistimos de igual manera al imperativo del bienestar que
se pronuncia como un impedimento para experimentar y
lli expresar las complejidades y ambigüedades de nuestros
i desde las actividades producidas en el Octubre Trans en modos de encamar cuerpos impropios, no normativos
: Barcelona y tas alianzas mutantes que se montaron desde y disidentes. No queremos promover la producción de
m M: allí en 2013, pasando por Diana Pornoterrorista, Lucía imágenes espectacularizantes y exitosas que darían por
1 Egaña, y la Muestra Marrana, como también Aloso Cr ónica finalizada la complejidad de portar un cuerpo gordo con
.
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H la sola consigna de la autocomplacencia y la aceptación
Creemos que la desestabilización de un orden social,
económico, sexual y afectivo opresor para la gordura tiene
que ver con una polí tica mayoritaria que escapa a la simple
.
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compilación pretendemos habitar una polifonía de voces
que no se enuncien como una promesa emancipatoria pre
codificada que silencie la dificultad de sostenernos con
vida en un mundo que salvajemente programa nuestra
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SIN PATRONES CARNE INDISCIPLINADA
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W1 APUNTES PARA UNA REVUELTA GORDA CONTRA
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LA POLIC ÍA DE LA NORMALIDAD CORPORAL
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111I 1. Algunas chicas somos más grandes que otras
Habla de lo que sabes .
. Alejandra Pizarnik
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. Hay una carta de Engels (el otro padre del marxismo )
Sgl¡
* anarquistas - se refiere socarronamente a Bakunin y su
"obeso cuerpo” . El viejo recurso de la alusión personal
descalificadora en todo su esplendor y una muestra de
autoritarismo, qué duda cabe. La carta en cuestión es de
1871 y, má s allá de las distancias, reverbera en mí muy
.
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üp : ...
claramente Hace un tiempo, una pretendida activista me
llamó en las redes sociales “ gorda pelotuda ” 1 A pesar de
tanto feminismo, teor ía queer, punk, anarquismo y post -
.
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1/ ' - 1 Con una afin hicimos una vez el recuento de las injurias que nos habían 1
.
espetado a lo largo de nuestras vidas “ Gorda " era el insulto que má s
I;
había marcado mi experiencia corporal. Poco despué s, esa persona usó la
palabra para descalificarme políticamente. Pero, como dijo Butler: “ las
palabras mismas que tratan de herir pueden igualmente errar su blanco
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y producir un efecto contrario al deseado” . (Butler, Judith: Lenguaje,
p . .
poder e identidad. Ed Síntesis, Madrid, pág.148) Precisamente eso
sucedió con el insulto, que devino texto, activismo y ahora libro.
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smm estructuralismo, me quedé virtualmente sin respuesta. El
Cuerpos sin patrones
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Pero volviendo al insulto, sé muy bien que lo que dijo
esa persona es redundante: gordx no alude solamente
Má s all á de la "operaci ón bikini" propia del verano o
m al peso corporal que porte alguien sino que implica
encarnar muchas otras cosas negativas. As í, ser gordx
del arrepentimiento masivo tras la comilona por las
Fiestas, la obsesión por la delgadez y el consiguiente
rechazo de la gordura son cosa diaria en los medios y
m es también ser fex, indeseable, poco saludable, flojx, -
en la calle. En este sistema hetero capitalista se vive
mm amorfx, lentx, algo sin gracia . Sé que no soy gorda en
a ré gimen , se quiera o no. Porque quien se descuida se
todos esos sentidos y sé tambié n que algunxs de ustedes
I pierde en su propia falta de voluntad . Ya no se gestiona
m
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buscará n en Internet fotos que atestig üen esto que digo
Pero sí soy gorda . No sólo segú n discutibles está ndares
e idealizaciones normativas occidentales o en la opinión
de ciertos personajes conceptuales micro- fascistas. Pero
voy a explicarme mejor .
Soy gorda porque elijo nombrarme así y con rara
. adecuadamente, es un mal patrón de sí mismo y, a la vez,
un mal producto. Como otrora el renuente al trabajo duro
y digno, quien no sigue felizmente el paso acompasado
del cuidado de s í es vagx, perezosx y perniciosx para
el resto de la sociedad . El sujeto consumidor de estas
sociedades vive a régimen del mismo modo que vive en
íüi rabia alegre salgo del closet de las tallas y de la tiran ía un estado de deuda permanente. El alma ya no es fuente
del cuerpo- patrón , ese cuerpo inobjetable que sólo de preocupaciones: seg ú n Foucault , por lo menos desde
portarían algunxs pocxs: Ixs que se ejercitan , Ixs que el pasado siglo, las redes del poder pasan por el cuerpo
comen “ bien ” , Ixs que "se cuidan ", Ixs que se mesuran y la salud . En estas sociedades de control ( Deleuze )
y mensuran al resto. Soy gorda as í, en tiempo presente,
o seguridad ( Foucault ) hay un imperativo de la vida
porque no se nace gordx, sino que hay un devenir saludable que obliga a cuidarse, mejorarse y ejercitarse
constante, que no se corresponde ú nicamente con una para encajar ( eso significa el fitness ) . Todo en pos de
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una presencia digna de ser vista , elogiada y apreciada
2 Ibid , pá g . 68 . en té rminos del mercado.
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Cuerpos sin patrones
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horroricen a los sujetos contemporá neos, aunque “ de mediano y largo plazo, hay que decirlo. En el cruce entre
modos bastante diferentes e inclusive contradictorios (y,
fitness / cuidado de sí e industria de la dieta vemos cómo
tal vez, probablemente complementarios ) ” 3 . la salud -y la apariencia saludable- son deseo individual
La gordura - hoy definida como una epidemia de
y lucro empresarial a la vez. Y la salud es una7 mercancía
alcance mundial - es un punto nodal del cruce entre el
imperativo de salud y tas t écnicas de perfeccionamiento
m ás que podemos adquirir, como nota Murray .
El dispositivo de la corporalidad se vuelve locuaz a través
del imperativo de la salud, la apariencia o el bienestar . Y
del cuerpo o cuidado de sí (ejercicio, dieta, tratamientos
esté ticos, cosm é ticos y quir ú rgicos, entre otras formas
lo que se produce no será n ya los cuerpos dóciles de la era
de modelación corporal ). Pero la gordura no es como
industrial sino cuerpos siempre disponibles, regimentados,
cualquier otra enfermedad: se la asocia al consumo
en un estado permanente de alerta , ansiedad y avidez.
excesivo de alimentos tanto como al deficiente ( una Si bien no hay un cuerpo “ normal ” como modelo ideal
cuestión de clases y de pobreza ) pero tambié n al modo homogéneo (la exigencia de la normalidad es una demanda
de vida nocivo de seres sin voluntad que eligen , por imposible), bajo este régimen sí hay variables que nos
defecto, el sedentarismo y la mala calidad alimentaria .
Asimismo, la presencia o ausencia de grasa habilita el
acercan o alejan del objetivo de encajar en los patrones
corporales: la gordura es, indudablemente, una variable
a ajustar (individual) y una variable de ajuste (social) .
pase al equipo de los cuerpos patológicos / indeseables o 8
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Cuerpos sin patrones
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* Cuerpos sin pati ’ones
Porque si algo han dejado en claro el activismo gordo es
De todos modos, má s allá de la viabilidad de la crí tica,
que el peso o la talla de una persona poco dicen sobre
m las acusaciones de complicidad con el hiperconsumo
su estado de salud, sus hábitos alimentarios o su modo
capitalista proveniente de ambientes radicales que
de vida. En palabras de la activista Marilyn Wann, “ la
ven en cada cuerpo gordo la encarnación del Imperio
única cosa que alguien puede diagnosticar con algo de del mal, parecen poco fundadas y muy prejuiciosas.
certeza al mirar a una persona gorda es su propio nivel de
Asimismo, estas acusaciones refuerzan el ideal moral
estereotipos y prejuicio en contra de la gente gorda”
Y, como dice Cooper, cuarenta años de activismo gordo
”. de lo saludable imperante precisamente en el punto
en el que se autodefinen contrario a éste. Es decir,
ÍS SS Ms han demostrado que hay otras formas de promover la
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salud para las personas con alto peso corporal que poco y
asumen las categorí as normativas del dispositivo, en
vez de contribuir a su desmantelamiento o a su puesta
nada tienen que ver con regí menes hipocalóricos, cirugías
m en cuestión, reproduciendo las exigencias asc é ticas
m extremas12 o pr ácticas vergonzantes / culpabilizantes.
del cuidado de sí (culpando a la persona gorda por su
mM Ahora bien, que todos seamos actual o potencialmente falta de voluntad para resistir la oferta constante de
impropios no significa que la diversidad corporal en sí
alimentos hipercalóricos o por su pereza a la hora de
misma sea una posición polí tica ni que toda polí tica
ejercitarse, por ejemplo) . Habrí a que poner el acento
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m 4. Saliendo colectivamente del closet del
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problema pol í tico para un nosotrxs que se pretende amplio
i asa m peso y de las tallas y diverso. Si todxs somos constantemente interpeladxs
Í Ik No sólo la sente sorda deber í a llamar la atención sobre en té rminos de gé nero, capacidad o raza pero tambié n
mamm
mm . la intolerancia y la fobia a la sordura. [...] Todxs estamos
implicadxs si aceptamos y toleramos la discriminación
morfológicos, ¿acaso hace falta que seamos actual o
potencialmente gordxs para interesarnos en esta discusi ón?
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y el discurso contemporáneo que posiciona a Ixs sordxs ¿Acaso necesitamos ser todxs trans, intersex, lesbianas
como seres sin voluntad, enfermxs e inferiores . o migrantes para implicarnos en polí ticas activas que se
m Deborah Lupton opongan al odio y a la discriminación?
Mi salida de closet como gorda cisexual por sí sola no
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.
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Aunque en el mundo angloparlante existe un activismo
me libera de las ataduras del dispositivo de corporalidad :
los discursos dominantes no se conmueven por un simple
mmm consistente y una vasta producció n teó rica en torno a
acto de concientizaci ón sino que deben ser resistidos de
manera activa . Y aqu í es donde cobra fuerza la idea de
mi las corporalidades gordas (en términos de liberación, una resistencia colectiva al régimen político, económico
I
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aceptaci ó n, reconocimiento y orgullo ), todav ía es bastante
problem á tico plantear en á mbitos activistas locales
e institucional de producci ón de los cuerpos gordos como
ía preocupamos está más allá de
fallidos. Y lo que deber
nuestra experiencia corporal de manera polí tica. Como si
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salir del closet de la gordura fuera algo de lo que no se
quiere saber. Quizá este anuncio perturba el statu quo ,
la
ser
cantinela
como
de
somos
la
,
auto - aceptaci
celebrando la
ó n o incluso del orgullo de
inmensa diversidad en la
® donde Ixs que observan, juzgan , critican y dictaminan -
desde un afuera flaco- siempre saben algo m á s que unx.
que encarnamos Ixs seres vivxs. Me interesa que podamos
trabajar pol íticamente tanto el insulto descalificador que
«
MBM
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Por eso creo que la percepción social de la gordura y su
calificación negativa no pueden quedar reducidas a un
problema personal e íntimo. Ser gordx y que eso nos
averg ü ence de diferentes maneras no es una tara personal
me pregunto: ¿qu é rebeliones somá ticas podemos intentar
si a ú n no podemos plantear en todo su alcance la salida
del closet de los cuerpos gordos?
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?. §
a ser superada en soledad o con la ú nica compa ñía de un
par de libros de feministas de la segunda ola . Porque, nos
guste o no, gordx no es un adjetivo calificativo m ás. Éstas
cinco letras resumen , en nuestras sociedades, toda una
serie de suposiciones sobre la persona así calificada (sobre
su estado de salud , su voluntad, su frustración , su auto-
percepción , sus apetencias, sus elecciones, etc. ) . Pienso
3H s?§H que el "acé ptate ” o “ quié rete" que nos espetan en la
p# cara nuestros propixs afines son imperativos insuficientes.
Condena a la esfera individual algo que tiene que ser un
HL 32
fS II BBBB|1HH jBjjMBS
33
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1 f¡¡¡
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M Cuerpos sin patrones
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3 1
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Cuerpos sin patrones
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--
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M
*
¿ PODEMOS LXS GORDXS HABLAR ?
ACTIVISMO, IMAGINACIóN Y RESISTENCIA DESDE LAS
GEOGRAFÍAS DESMESURADAS DE LA CARNE
Nicol á s Cuello
m
m
a
iliif
m:
m Hacié ndonos lugar a la fuerza . Cuerpos gordos
B
KB
desobedeciendo la eugenesia neoliberal
—
mucho tiempo de mi vida por portar esta supuesta
HI excé ntrica cantidad de carne y grasa en el mundo.
ill Cuando reviso y trato de pensar pol í ticamente mi
mIS®
m
m .
propia experiencia de vida , no tengo recuerdos en
donde no exista la pregunta o el cuestionamiento sobre
mm mi cuerpo gordo. Es algo que siempre estuvo, y sigue
estando . Supe que era gordo, cuando alguien me lo dijo,
a 1 cuando me lo indicaron de manera peyorativa “ ¡Andate
de acá , gordo maricó n!", en palabras de un compa ñ ero
¿i:
i de la escuela primaria mientras jugá bamos en el recreo.
As í me enteré có mo iba a nombrar y tratar la sociedad
B 1
/ de ah í en adelante a mi cuerpo gordo, entendié ndolo
MmSm como un cuerpo que no puede , que le falta , pero que I
Mi sobra , que le cuesta , que duda , que calla , que no entra ,
JtJ
iii
que tropieza , que molesta , que no avanza , que no coge,
37
mm 5 SB»
H
Illlp
i
Cuerpos sin patrones
II que es especial , cuya ropa es gris, negra o marró n , que de nuestros cuerpos, a lo que debemos sumar la violencia
iiii no tiene amigxs, pero que siempre es simpá tico, que f ísica , verbal, y psicológica dispuestas como herramientas
Hi es comprensivo incluso cuando no quiere serlo, y que de orden p ú blico para la correcci ón de la desobediencia
siempre come por angustia, entre otras cosas . que suponen nuestras gorduras.
i» .
Lo que en un principio se volvi ó una manera tentativa
de entender y cuestionar cuá les eran las representaciones
Al mismo tiempo que la gordura es constituida como una
amenaza social en espacios de articulación internacional
lili: como la Organización Mundial de la Salud que habilitan
r8111
¡WBm
y los afectos disponibles para las personas gordas, con el
paso del tiempo y sobretodo, gracias a la posibilidad de
abrir interlocuciones con otros contextos de resistencia
la discusi ó n y el promulgamiento de polí ticas p ú blicas
que tienen como agenda su exterminio, se despliegan , en
politico cultural, tanto del exterior como de experiencias consonancia e intr í nseca relació n especulativa, industrias
W- locales vinculadas a los feminismos y al activismo LGBT, privadas multimillonarias de la dieta que producen a
WM:, como movimientos contraculturales como el punk y la escala global consumos para la pé rdida de peso y para la
m úsica alternativa es que pude comenzar a identificar modelizaci ón de cuerpos delgados que incluyen productos
m
m y reconocer que ese tipo de violencias no eran solo una de venta libre de alto costo, clínicas de internación,
vivencia personal , sino má s bien que se trataba de un programas anuales de alimentación y entrenamiento f ísico
escenario de mayor complejidad en el que era posible y especializado en la reducci ó n del índice de masa corporal,
mam
H necesario pronunciarse. como tambié n una extensa oferta de cirugías disponibles
La gordofobia no es meramente una¡ experiencia para la intervenci ón y adecuación de los órganos que
SIS traumá tica y dolorosa de cada una de la biograf ías posibiliten la pé rdida de peso.
existenciales que la vivencia , sino una compleja matriz Todo esto sucede gracias a la naturalización del
de opresió n que involucra una multiplicidad de aparatos supuesto generalizador de que nuestros cuerpos, por el
de control biopolí ticos que tienen por objetivo la solo hecho de ser gordos, es decir , por ser m á s grandes
eliminación material de las corporalidades gordas, ya que que otros, son de manera inexorable cuerpos enfermos que
son entendidas como una enfermedad de escala global comprometen y ponen en riesgo la salud . Pero se vuelve
que pone en riesgo o empeora la calidad de vida de la importante entender que aqu í la salud poco tiene que
población, deformando el propio límite del cuerpo a causa ver con el mejoramiento o con la garant ía de adecuadas
de un consumo excesivo de alimentos. Estos mecanismos condiciones de vida, o con el acceso a tecnologías
de control y producci ón normada de los cuerpos logran médicas o psicológicas específicas que faciliten bienestar
hacerse efectivos mediante el despliegue permanente de en situaciones de complejidad orgá nica o psíquica, sino
violencia psicológica y emocional, vueltas carne por una que la salud como preocupación fundamental de estos
trama de tecnolog ías semi ótico- politicas que invaden , programas de escala mundial, esta entendida como una
torturan , y hostigan de manera incesante nuestras garant ía productiva y reproductiva que aceita el ritmo
subjetividades, afectando nuestros modos de vida. La ininterrumpido del plusvalor capitalista.
gordofobia act úa materialmente en el ordenamiento de
los sistemas socio-culturates de cada regió n y punto del Este es el escenario en el que intervenimos los activistas
mundo a través de situaciones que involucran exclusión de la gordura :
social, estigmatización sexual, desvalorización afectiva,
injusticia econ ómica y laboral , cuadros de estrés y ansiedad - Desarrollando estrategias situadas de intervención crítica
social, fuertes depresiones a causa del aislamiento, el para se ñalar las mecá nicas de opresi ón gordof ó bicas y
despojo y la verg üenza que produce la criminalizaci ón , para desmantelar, en la medida de nuestras posibilidades,
la estigmatización y patologización en la opinión p ú blica el avance terrorífico del odio eugenésico de las industrias
38
m
m
-
Cuerpos sin patrones
1 m
: mm
que alimentan la puesta en marcha de opresiones
gordof óbicas, y frente a ello producir situaciones que
habiliten formas de experimentar nuestros cuerpos con
placer y alegr ía inconforme.
- Tejiendo redes de contra comunicación y circulación abierta
de nuestras existencias con esta geograf ía específica de la
carne. Geograf ías complejas, y paradójicas, sometidas a
un régimen de dura invisibilidad por extrema visibilidad ,
porque esa es nuestra realidad, somos los cuerpos que
todxs ven pero que pocxs nombran en las diná micas del
de saberes teóricos y prácticos (locales e internacionales deseo, y en los manifiestos pol í ticos de ese nuevo mundo
.
a que estaría por venir. Y si aparecemos, es decir, si nos
vinculados a la historia del activismo gordo) que puedan
mm brindarnos herramientas para la gestión de una mirada otorgan el supuesto privilegio de incluirnos, lo hacen de
mm
Hi '
Va . V - internacional, las claves de lectura y herramientas
pol í ticas que puedan aportar los feminismos, la teorí a
decolonial y las pol í ticas sexuales radicales.
- Agitando de manera permanente preguntas e imágenes
al médico. La gordofobia está presente constantemente,
en todos y cada uno de los espacios que habitamos. Por
eso es que tambié n el activismo de la gordura significa
la oportunidad de impulsar una crí tica social que no se
i III 4® p
1 m
iilSMSw 3 mE
1, Irá
Cuerpos sin pati'ones
que
wmmmam quede sesgada a disputar sentidos con las patologías Se ha vuelto com ú n que cuando Ixs activistas
circular en
alrededor del fenómeno de la "obesidad ” , si no también estamos pensando nuestra gordura hacemos í
preguntar críticamente por ese orden de cuerpos posibles, espacios locales de diversas lí neas de acci ó n pol tica la
y justamente, empujar y friccionar el límite en pregunta por la gordofobia como matriz de opresi ó n
todas ía de tecnolog í as que
sus direcciones. Desnaturalizar que nuestras existencias que suma complejidad a la bater
como gordxs está n privadas de placer, afectos, belleza, y administran la violencia de un sistema que cultural de
vivimos ,
§¡¡¡
como en el
91 apropiarnos de esos lugares de los que se nos priva, para
ocuparlos como espacios propios de enunciación pol
desde donde poder inventarnos otra vez, sin patrones,
ítica,
producción normada de
nos encontramos con una
se vuelven síntoma de
cuerpos
que
cantidad de
visibilizar
reacciones
nuestras
que
propias
sin normatividades asfixiantes, y con alianzas suficientes experiencias como corporalidades gordas objetivá ndolas
»i
para seguir cuestionando un mundo que contin úa como una problemá tica colectiva de orden políticoasombro - pú blico
siendo , reacciones extra ñ as de
patriarcal, heterosexual, blanco, y corporalmente supone, por el momento
m
= fibroso, y "saludable” .
esbelto,
y algunos silencios de quienes creíamos aliadxs, pero sobre
todo lo que prima es la pulsión por el empoderamiento
forzoso, por la retórica de la aceptación y el orgullo
, una
modalidad particular y muy ansiosa de imponer soluciones
programáticas y unilaterales que imposibilitan la apertura
Contra la aceptación . Políticas de la vergüenza cr
de la ítica al ordenamiento de los privilegios
corpo
y resistencias gordas para una crí tica radical sexo genéricos , ni permiten preguntar por las din á micas
de poder en tas que est á organizada la mercadotecnia
desde los cuerpos
; del deseo de los movimientos sociales. Es extensa la
cantidad de activistas pol í ticos que consideran menor la
discusión sobre la gordura , y sobre todo, consideran menor
Pero estas metodologías de acción política que está n la pregunta por la experiencia sensible de la verg ü enza
,
presentes en nuestro activismos, creo personalmente el placer, y la belleza en aquellos "otros” cuerpos que
'"“
HI
ijijjls
importante que no queden reducidas a la mera producci
de polí ticas identitarias reconfortadas por las retó
del orgullo, o atrapadas en la demanda de aceptació /
, es
ón
ricas
deberíamos sanar rá pido, con el conjuro del "me quiero,
me acepto, soy fuerte” o “ puedo cambiar, y dejar de
sentirme así, si lo deseo y tomo la decisión ” .
«v
pw
I .
•
asimilación de los cuerpos gordos. Claro que es importante
hacer valer nuestras experiencias de vida, en el sentido
volverlas posibles, no solo reales, sino en todas las direcciones
que pueda significar la posibilidad, sobre todo para
n
de
No es casual, entonces, que la vergüenza ocupe el lugar
que ocupa dentro de algunos de nuestros activismos Las
personas gordas experimentamos desde el primer momento
en que nuestro cuerpo excede lo visible permitido, desde
.
PH 11
li
—
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BM¡¡MéIS
*
inteligentemente ha invisibilizado la artificialidad de su
naturaleza por medio de la ficcionalización de algo llamado
“ el cuerpo normal” o "el peso indicado”. Gordxs, así nos
nombra la sociedad desde ese momento en el que es visible
la traición a las trincheras de la carne, avergonzados por
su supuesta imposibilidad, su permanente falta, y su
abundante exceso, cuerpos silenciosos y silenciados,
sucios y transpirados, molestos y asexuados, torpes, grises,
tímidos, domados, tristes y aburridos, entre tantos otros
adjetivos afilados que constituyen la gráfica de la burla
y la impugnación. Pero los interlocutores del odio no son
solo aquellos policías de los cuerpos, sino también, todas
las escenografías en las que se despliegan y por las que se
sostienen los mecanismos de control de la carne. Gordx,
Cuerpos sin patrones
i
cuando parece no haber nadie. tampoco podemos dejar de lado las escrituras post
¬
®¡
«a¡
El imperativo de la aceptación, y el llamado urgente
que pulsa el orgullo como única y primera política que
quirúrgicas de nuestros cuerpos sometidos a operaciones,
las grietas en la sociabilidad que provocan nuestras
infancias en dieta, entre muchas otras experiencias en
m
logre visibilizar que estamos aquí y que hemos decidido
r las cuales nos faltan las palabras, y nos sobra tiempo
¡MU
BüMM
¡as 1-
ÍBMÍ:é I Cuerpos sin patrones
I
1
2 Una de las modalidades a través de las cuales acciona la
gordofobia es ( a proliferación ininterrumpida de imágenes
que cristalizan representaciones estigmatizantes de los
.
cuerpos gordos Esta circulación paroxística de imágenes
cuerpos, como dijimos antes, est án administrado por
numerosos enclaves y complejas tramas de poder. Pero
uno de ellos, y el que nos importa aquí evidenciar, son
las grandes marcas y empresas de reducción de peso
que forman la industria de la dieta que promocionan sus
se restringe a exhibir una experiencia condicionada, . f órmulas excepcionales con campañas incisivas que tienen
tendenciosa, y manipuladora de lo que significa o de lo como eje fundamental la exhibición visual de sus beneficios
.
que es posible experimentar siendo gordo Por lo general mediante publicidades, entrevistas, notas e imágenes que
las representaciones de nuestras corporalidades aparecen utilizan testimonios, documentación, y registros médicos
j
fragmentadas, focalizadas en aquellas geografías de la para enseñar su efectividad en la pérdida de peso y para
piel que exceden las formas instituidas como “ normales”, .
transformar el cuerpo gordo La estructura que toma lugar
,
http:/ /charlottecooper net /publishing /digital /headless- fatties-01 -07
^
:
MKH
gad¡
46
II
isSSSi Ciierpos sin patrones
SU
¡SÉ
: se desprende una normativa violenta y extorsiva de cómo
y cuáles son los cuerpos vivibles, y cuáles son lugares de
encierro y reclusión, castigados por la ausencia de deseo.
Lo que tienen en común estas dos imágenes que suponen
.
permanente Con esto no me refiero a que es necesario
fundar una visualidad gorda1 o un arte polí tico gordo,
es decir, territorializarlo como un tema precodificado
disponible para ser representado por cualquiera. Sino
una distancia enorme es que ambos cuerpos son signos enunciados crí ticos que interrumpan la velocidad con la
de explotación económica y de espectularización de sus que los sistemas de identificación y desidentificación de
formas. La efectividad que produce el encantamiento y esta fase actual del capitalismo que es cultural imponen
la fantasía erotizante de la asimilación y la normalidad su violencia y modelan subjetividades a escala planetaria
' invisibiliza completamente la complejidad que supone la por medio de normas imaginarias y ficciones regulatorias
El
wm
vida: se da por entendido que adelgazar implica que se
acaba el dolor del/ en / sobre el cuerpo, que se destierra
para siempre cualquier atisbo incipiente de angustia,
tristeza y rechazo, y pareciera que se constituye como un
del cuerpo sano y deseable 3.
Un activismo gordo que entienda la fantasí a y el deseo
no como un mero dato, sino como el espacio desde el cual
producir una resistencia crítica4, en la que el placer y la
i
resultado directo la garantía de una vida digna en la que belleza, se vuelven espacios desde los cuales disputar
no tendrían lugar ninguna de las opresiones que se suman con la guerra constante a la que se someten material y
a la realidad del cuerpo, como la precarización laboral cognitivamente nuestros vidas en una sociedad desbordada
o el desempleo, la homolesbotransfobia, las demandas de signos apologéticos de corporalidades normadas, de
normativas de la mercadotecnia del deseo y el racismo. pieles blancas, y de futuros construidos por las potencias
Es así como estas imágenes logran productivizar el anhelo .
del consumo Ensayar sin garantía, entregados a la deriva
y la pulsión analgésica de la “ felicidad” y el éxito social esperanzada de abrir camino para otra experiencia
como dispositivos de complicidad para el exterminio de lo emocional de nuestras potencias, posibilidades, y deseos,
distinto y la producción de cuerpos no - gordos. reconociendo las particularidades en las que estamos
Es por esto que me parece necesario pensar seriamente inscriptos, elaborando mapas y archivos del sentir en
en las intrincadas maneras en las que actúan las imágenes cada geografía de la carne gorda que portamos como un
y estos órdenes mayoritarios de administración y programa polí tico que supone y se sostiene por el afecto
ip® circulación de visualidades que fundan la norma corporal de la multitud de nuestras alianzas, esas arquitecturas en
Mm
WSSm
y que sin tregua alimentan políticas eugenésicas. ¿Cuáles
son las imágenes mentales, comunitarias, afectivas que
podemos producir para resistir y contrarrestar los efectos
las que confiamos nuestros derrumbes .
Necesitamos imágenes y formas sensibles de narrarnos
te
que desmantelen el estado actual de las políticas de la
de que nuestros cuerpos sean leídos como una epidemia mirada, para poder quebrar con el asombro y la incapacidad
de escala global a ser desterrada? Lo que hoy pienso, e de creer que somos cuerpos posibles de ser deseados por
insisto como una polí tica que concentre sus esfuerzos en fuera de los espacios mínimos de circulación a los que se
la experimentación de una imaginación radical, tiene que nos reduce, para destruir la percepción desexualizante
Mal ver con empoderarse desde la potencialidad crí tica que
supone la producción de imágenes, experiencias sensibles,
Wm
performáticas en el espacios público, y la puesta en marcha of Body Weight and Society , 1:1, 13- 31.
de lenguajes y tr á ficos de signos que nos ayuden a forzar 3 Snider, Stefanie ( 2013) “ Introduction to the Special issue:
Visual
Representations of Fat and Fatness” , Fat Studies : An Interdisciplinary
el límite de lo posible, y que al mismo tiempo se vuelvan Journal of Body Weight and Society , 2:2, 114-117.
estrategias de reescritura de nuestras propias vidas, donde
WBL
4 Duncombe, Stephen (2007) “ Dream: Re - Imagining Progressive
poder experimentar una pausa al hostigamiento subjetivo in an Age of Fantasy", New York: The New Press, 2007.
Politics
<) 8
49
mmm
í á
ÉÉÉÉBI
HaH que insiste en querer privarnos de poder elegir tener todo
Cuerpos sin patrones
m
furiosamente una vida bella en la que correr el límite de lo corporal gordof ó bica para las feminidades? Sería oportuno
imaginable, para ensayar urgentemente estrategias para observar que la gordura ademá s de actuar de diversos
que nuestras vidas sean un poco más libres. modos a causa de un ordenamiento fuertemente patriarcal
- de nuestras culturas, puede pensarse como formas de
interrupción y descalce de las construcciones de género no
normativas. ¿Qué sucede con la gordura en nuestros cuerpos
MW Grasa sudaka
lesbianos, maricas, trans e intersex? Personalmente, en
relación a mi propio deseo, frecuentemente me pregunto
m mmw Activismos gordos desde el culo del mundo ¿Qué hacemos los putos que somos maricones con
nuestra gordura , con nuestros cuerpos lampi ños, fofos,
! 1 y feminizados que nos dejan por fuera de las nuevas
apelan a
Es importante poder pensar en la criticidad que propone normas de construcción del mercado gay que compulsiva y
el activismo gordo, como dijimos antes, alejá ndonos de la puesta en marcha de una masculinidad
la ontologización absoluta de una trinchera identitaria heterosexualizante? Es necesario decir , sobre todo por las
s que supondr ía un sujeto pol ítico único dentro de este lógicas con la que avanzan los procesos de normalización
y
activismo ( mayormente identificado con las personas asimilación de las identitades sexuales gay , por ejemplo ,
gordas, blancas, cisgé nero de contextos urbanos que la gordura comienza a valuarse, en tanto pueda
en pa íses
KM del primer mundo, en especial Estados Unidos), sino construir un cuerpo correcto, fibroso, una suerte de
poniendo en relación y complejizando sus alcances
en gordura estética en donde siempre prima el principio de
vínculo con otros activismos, y con las críticas situadas la buena forma y la buena distribuci ón de la carne que
que son posibles desde m ú ltiples espacios de
enunciación refuerce la masculinidad , que no escinda la identificació n
que también trabajan desde la resistencia a los procesos con la categoría “ hombre ” , produciendo distancias con
de normalización corporal en diferentes
contextos aquellos cuerpos en donde la gordura por las formas, y
.
geopol íticos Los marcos de opresión a los que nos las maneras de distribución que hace la grasa en algunos
.
a enfrentamos act úan de manera diferenciada y en distintas
escalas en relación a la ubicación y la procedencia de
cuerpos, se lee como un factor feminizante. Queda claro
cómo los procesos de íagocitación e instrumentalización
HI
pa
.
cada cuerpo gordo Problematizar la gordofobia puede que hace permanentemente el capitalismo neoliberal
con la diferencia, reproduce en la propia topograf ía de
.iH
permitirnos radicalizar y potenciar algunas crí
ticas que
la gordura lecturas heteropatriarcalizantes en las que
fa
por lo general suelen estar ausentes.
¿ De qué manera interrumpen los cuerpos gordos algunos cuerpos somos subsumidos a las periferias de
los códigos de existencia corporal exigidos por el la mercadotecnia del deseo por nuestra condición de
"femeninos", mientras que otros, a pesar de situarse por
warn
BS
SSB
comportamiento normado de cada expresión de género
en pos de la reproducción de la masculinidad y la
feminidad heterosexual cisgenero hegemónica? ¿Cómo
fuera de la lógica heterosexual, contin ú an reproduciendo
y gozando beneficios por no poner en riesgo la asignación
88 act úa diferencialmente la posibilidad de un cuerpo de la masculinidad hegemónica.
warn 5 Wykes, Jackie; Pause, Cat; Murray, Samantha ( 2014) “ Queering fat
embodimient” , Farnham, Surrey , Ashgate Publishing.
I y 50
5i
mm Cuerpos sin patrones
Mi intención al pensar c ómo la gordura altera los y producción del saber y la pr áctica polí tica de la
m roles predeterminados de tos géneros, no busca solo resistencia gorda 7 . ¿ Có mo son los cuerpos gordos del
Hi dar cuenta, como ya lo ha hecho la teor í a queer y sur ? Es una pregunta que nos puede permitir cuestionar
m
m
algunos feminismos, de la construcción y producción
cultural del género. No se trata de reparar en estos
la administración de un sistema sociopolí tico en donde
el alimento es un privilegio, donde existen contextos
como aparatos o ficciones somáticas1’ , que ponen en de violenta precarización de la existencia que obligan
- circulación y refuerzan las dinámicas de poder que a familias numerosas a la gestión comunitaria de la
; • este sistema capitalista heterocentrado necesita para comida, cuyos consumos se ven reducidos y limitados
is su funcionamiento, sino entender que esos cuerpos por la clase social a la que pertenecen, que modelan
¡¡Sflll donde se producen esas alteraciones a tos órdenes de y organizan la construcción de sus cuerpos gordos de
;
. la ley cultural son má s vulnerables a los castigos tanto forma muy distinta a quienes cuentan con estabilidad
..
-
materiales como cognitivos por la policí a de tos cuerpos, económica, trabajo y la posibilidad de acceder a otros
- y quedan expuestos a una pronunciada serie de injusticias niveles de consumo alimentario.
y exclusiones que vuelven la vida insoportable. De este modo, la gordofobia puede ser complejizada
Finalmente me gustarí a compartir una última cuando es atrevasada por la violenta diferencia
dimensión cr í tica que se vuelve fundamental sumar a que supone la desigualdad económica, donde la
los procesos de desmantelamiento y resistencia a la criminalización de la pobreza también se sostiene por
gordofobia, que es la consideración de c ómo se construye una crí tica estigmatizante a los modos de vida, a las
nuestra gordura y c ómo es que llegamos a ser gordos ac á costumbres culturales, y a las formas y a tos tipos de
en el sur, con los colores de nuestras pieles y con estas consumo de tas clases sociales má s explotadas. Una crí tica
genealogí as raciales que nos diferencian de la mirada desde nuestros cuerpos gordos, creo personalmente,
blanca occidental desde la que opera la policí a de los tiene que apuntar a señalar y advertir sobre los modos
.
cuerpos Desde sus inicios, el activismo gordo estuvo criminales a los que son reducidos los cuerpos que
vinculado a contextos de paí ses mal llamados centrales, sostienen a tracción de sangre las ló gicas productivas
o del primer mundo, en donde el desarrollo industrial y tas de este sistema capitalista, en donde las dinámicas de
configuraciones de los mercados permití an y continúan explotación y extracción de plusvator se ven reflejadas
permitiendo otros consumos que claramente difieren de en los accesos alimentarios y en la producción de
la realidad de los países latinoamericanos, por ejemplo, determinadas geografí as de la carne. Por eso mismo,
en donde el acceso, la distribución y la producción fugar del llamado de la aceptación es prioridad ¿ Es .
del alimento atraviesa otras redes de poder aun má s suficiente que la crí tica que podamos producir desde
crueles y sangrientas que los contextos urbanos de las nuestras resistencias como personas gordas se reduzca a
metr ópolis capitalistas internacionales. El esfuerzo por la inclusión y a la disminución de la discriminación que
6 Preciado, Beatriz (2009) Biopoliticas del señero en AA. W 7 Cooper, Charlotte (2012) A Queer and Trans Fat Activist Timeline :
®l¡® Queering Fat .
8iopoií tica. Ají de Pollo . Buenos Aires Traducción de Joaquín Ibarburu.
.
52 53
, .i
i -
r ¡ílttk
y -y , iiismmy
r Cuerpos sin patrones
|
i* Í,
v: material y cognitiva a nuestros cuerpos y para poder
vencer la extinción de la capacidad singularizante de
lo distinto que guarda la posibilidad de un mundo má s
libre, en el que todos tengamos lugar.
EL CUERPO COMO ESPACIO DE DISIDENCIA
Saiistl i
ais ¿ Es posible pensar el cuerpo como espacio de disidencia ? Un
cuerpo plagado de ó rganos, no siempre sanos, no siempre
.
vigorosos, no siempre jóvenes . . Nos encontramos ante la
necesidad de una revuelta orgá nica, en su sentido literal :
revolver órganos. Es actualmente una apuesta urgente
la de plantearnos una rebelión de los cuerpos. Rebelión
que, necesariamente, rechaza la frontera entre el cuerpo
normal y el deforme, el cuerpo saludable y enfermo, el
'WHH&
¡te
isjP
cuerpo vá lido e inválido. Rebelión que debe ser planteada
a partir del encuentro, la afinidad y la alianza entre estos
cuerpos inapropiados e impropios. De ahí que los sistemas
que nos organizan a partir de género, raza, sexualidad,
normalidad corporal, salud mental o f ísica , se vuelven
edificios que es necesario derribar , y esta acci ó n de derribo
nos deberá encontrar juntas, sabié ndonos atravesadas y
en constante y compleja intersección.
rxma
y
, - >v-
¿ Podemos entonces entender el propio cuerpo como
espacio de activación política? Partir de nuestras trayectorias
corporales, narrar en primera persona, tanto singular como
plural, la historia de nuestra realidad corporal es un desaf ío
al que diferentes activismos empiezan a llamamos. ¿Podemos
m
*:
:
ü
- '
pensar en una historia colectiva de nuestros cuerpos? ¿Cuáles
son (os dispositivos que producen corporalidades
inapropiadas? ¿Podemos plantearnos mecanismos para crear
nuevos modos de producir cuerpos, de producir deseos, de
producir bellezas? ¿Y qué herramientas nos damos para hacer
de nuestras vidas un espacio má s habitable y feliz?
lili 54 55
I llSlill
9
1i
9 No pienso en metas, ni en aceptaci
a nombrarme ahora
como estrategia de
Cuerpos sin patrones
Nuestras carnes, las que sobran, las que faltan, las que
duelen, las que est án viejas, las que están enfermas, las
que no son funcionales, las que mueren incluso..
De ahí la interdependencia como paradigma que
.
empezar a transitar. Nadie, sea cual sea la corporalidad
iHWMil adjetivo para que la paradoja dé sirva este último
lugar
Nombrarse para volvernos visibles. Ocupar ela la sonrisa . que encarne, es realmente autosuficiente. Por esto pienso
fiSl
,1
Élij
m volvernos visibles. Visibles, desobedientes, espacio para
disidentes de
en luchas cómplices y afines. Busco potencias vinculadas
y vinculantes. Creo que es necesario y vital encontrarse.
la norma que nos impone una Ser á el encuentro, el lugar de la potencia, el lugar desde
¡
i
i
a1 sociedad que estandariza y
controla cuerpos y deseos, que define lo .
donde partir, el lugar de la posibilidad
:
¿Y por qué la necesidad de bello y lo sano.
m volvernos visibles? Porque Es necesario atentar contra la matriz que nos organiza
Wm la vista es un aparato de producció
n corporal, dice Valeria corporalmente. Desnudar el artefacto que nos construye
flores, y hay modos de mirar que fabrican en tanto cuerpos, en tanto territorios donde se inscriben
cuerpos, continúa.
Y yo agrego, hay modos de mirar
que fabrican deseos y lecturas. Es necesario desafiar esas lecturas y crear,
modos de mirar que fabrican bellezas
. imaginar, fantasear, inventar nuevos relatos. Hay un
I La apuesta será
construir nuevos cuerpos, nuevos deseos, gran aparato ficcional que hace que nuestros cuerpos
BS¡
. nuevas
Ante la pregunta: ¿por qué ser gorda bellezas . se lean como “ generizados” o racializados o viejos, o
1 diversa funcional, o enferma (y la lista , o vieja, o discapacitados, o gordos, o enfermos.
podría ser muy
larga) me hace estar fuera del est
ándar de belleza o de Pero sí que, si bien no podemos perder de vista el
normalidad corporal? ¿Qué me hace
disidente de la norma? carácter de artificio, hay una realidad que nos atraviesa,-
Propongo cambiar esta pregunta por que hace de mi vivencia algo bien distinto a la vivencia
desafío político: ¿bajo qué mecanismootra, y he aquí el .
de otras Necesitamos narrar en primera persona, tanto
s se construye el
BR -
Ü - ! 8
pi
¡
Cuerpos sin patrones
IffiK ® '
Creo en b úsquedas, en pasiones y en fricciones agonistas
de mis propias carnes que, dadas ai encuentro con
Hi : H otras, tienen et enorme potencial de hacer de nuestras
; existencias un lugar más habitable y feliz, dando lugar a
indómitas formas de habitar nuestros cuerpos.
¡
¿A QU É EDAD FUE TU PRIMERA DIETA ?
I
i ,
Lux Moreno
IpKMiStS
¡
“ ¿A qué edad fue tu primera Dieta?” Esta frase que
li
mm
? de ceremonias. Me pregunto, ¿cómo funciona hoy en día la
cuesti ón ritual que circula en las dietas? ¿Somos introducidxs
al mundo de los estereotipos de belleza y salud ? ¿Tenemos
opciones, de no iniciarnos en esas lógicas de exclusión de los
:
: cuerpxs distintos? Quizá s se daba a mi condici ón de Gordx,
pero puedo afirmar , que la iniciación al mundo de las dietas
es uno de los primeros pasos sintom á ticos que afirman la
discriminación sobre los cuerpxs.
En la actualidad , se exacerba la forma en la que nos
vemos inmersos en una cultura que privilegia ciertos tipos
; de corporalidades por sobre otras. Sobre todo podemos
detectar que existe una realidad generalizada , acerca del
hecho de hacer dieta, mantenerse en forma y de afirmar la
salud / belleza como una especie de dupla inseparable. Se
' instalan así sobre los cuerpxs normas culturales, políticas
y econ ó micas que pretenden normalizar sobre ciertas
estandarizaciones. No es de extra ñ ar que proliferen
estereotipos como el de la imagen de la chica rubia de
largu ísimas piernas y talle xs que aparece como la figura
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i
Cuerpos sin patrones
MSU&tsim de su cuerpo / virilidad manifiesta, ta versión masculina del que opera sobre los cuerpxs. Asimismo, esta es una forma
P I estereotipo. Encarnando en cada uno de ellos el binarismo
heteronormativo del género, la superficialidad del deseo
y una sexualizació n constantes que se repite de manera
de manifestar la existencia de otras formas de las lógicas
que construyen el cuerpo que mezclan no solo la identidad
personal , la imagen corporal proyectada, sino tambié n
reforzada a través de los medios de comunicación, redes una construcci ó n sobre la identidad del mismo. Pensar
nnin~ sociales, publicidades, entre otros.
No es extra ña entonces la proliferación de los centros
y analizar estas “ normas” que se manifiestan en una
M, .
estandarización de los cuerpxs, significa pensar en cómo y
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de esté tica que combinan dietas, tecnologías de control
del peso y una manifestaci ón constante de la salud como
directivas. Se les presenta a los consumidores atentos, la
cu á les son las consecuencias de la expansió n de una serie
de medidas para abordar la obesidad y el sobrepeso como
un problema político -económico.
posibilidad de acercarse a esos cuerpxs ideales que ven
en la pantalla de tv, por medio de tratamientos de todo
tipo. Lo que se ve reforzado por la industria de la moda que
provee talles imposibles que indican cuáles son los patrones
Gordxs, un problema de Estado
,
“ reales” en centímetros a los que debemos aspirar.
Sin embargo, estos mecanismos no parecen reducirse
simplemente a la esté tica visible, en tanto solo hay
un refuerzo de la normas en los cuerpxs como bellos, En primer lugar, la expansió n de las pol íticas contra la
saludables y modificables, sino que las l ógicas de obesidad , se lanzan en distinto grado a nivel global. Se
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normalización aparecen en el orden de lo cotidiano. La
estandarización corporal ha adquirido una forma de
establecen - programas, políticas y diferentes formas de
normalizar a los cuerpxs, con una difusión generalizada . La
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cuerpos bellxs, no parece deducirse claramente. Es decir,
no todo lo que es bello es necesariamente "sano” . con sobrepeso tienen posibilidades menores de conseguir
seguro médico ( en el caso de EEUU ) , vestimenta , transitar
¡®Él Para poder abordar esta perspectiva ampliamente,
me parece importante encarar esta situación a partir de los espacios p ú blicos, consumir algunos medicamentos, etc.
Km - '
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-í - Cuerpos sin patrones
La declaración de la obesidad como una enfermedad
desde la Organización Mundial de la Salud, se manifiesta con así como un catalizador de nuevos mercados de consumo
una expansión potenciada con respecto a la preocupación dentro del capitalismo avanzado. Es decir, al “ obeso” , al
ser considerado un enfermo, se lo señala y se refuerzan
(ligtl sobre aquellos individuos que son considerados gordxs.
Esta calificación , principalmente, va a ser cuantificada a los prejuicios en tomo a su figura , generando actitudes
partir de la medición del índice de Masa Corporal ( IMC ). sociales y polí ticas de odio sobre estos tipos de cuerpo. Los
mam® Este í ndice se obtiene dividiendo el peso de la persona prejuicios y estereotipos se alimentan como contracara
(expresado en kilogramos ) por la altura al cuadrado de la expansión de los mercados en tomo a los alimentos
(expresada en metros ). La proliferación de políticas saludables, los centros estéticos, etc. Se pone en escena
anti - obesidad se expande rá pidamente. Hay fenó menos la cuestió n de la salud y se manifiesta la existencia del
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! como el caso de los Estados Unidos donde desde 1998 se
declara desde las polí ticas de salud del Estado la llamada
gordx como un desv ío de estos nuevos est á ndares de salud
pública que refuerzan la normalización, por medio de
ciertos est á ndares corporales que son impuestos a partir
"Guerra a la Obesidad ” , que repercutió en el acceso de
SI las personas con sobrepeso u obesidad a los servicios, de la relaci ón entre cultura y mercado.
- V.
el pavor a las personas con sobrepeso- , gordofobia que se
vio intensificada en función de pensar la obesidad como
una patolog ía de tipo sanitaria , cultural y social.
La experiencia latinoamericana no quedará exenta. En
La iniciaci ó n o el rito de la dieta
m el caso específico de Argentina, se han incrementado las En particular quisiera contar algunas experiencias
personales a modo de abonar nuestra pregunta "¿A qué
iniciativas estatales respecto a programas, propagandas
‘
vT y tratamientos en torno a la reducció n de peso. Sin
embargo, hay que destacar que el plan Argentina
edad fue tu primera Dieta ?” . Puedo responderme: Quizás
mi primera dieta fue a los 11 a ñ os. Luego de sufrir durante
Saludable, llevado adelante desde el Estado Nacional , no varios a ños la exclusi ón social de mis pares, las burlas y
MU.É
.
habla explícitamente del descenso de peso pero hace un
hincapié positivo respecto de recursos para llevar una vida
el prejuicio, decid í con mi escasa edad ponerle un punto
final a la cuestión . Lo que yo no sabía es que este era la
piedra que edificar ía una percepción normalizadora sobre
saludable. Desde la promoció n de la salud esto se lleva
: ! a cabo con las campañas televisivas de Red de Salud que
está n orientadas a la salubridad en un marco general. No
mi corporalidad, que posteriormente se transformar ía en
una obsesión por liberarme de esos est á ndares a partir de
Pfl
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obstante, no podemos obviar la sanción de la Ley 26.396
en 2008, que declara de interés nacional la prevención
y control de trastornos alimentarios. Entre sus artículos
la más fé rrea de las disciplinas corporales.
As í fue como terminé en una cl í nica que se
especializaba específicamente en obesidad infantil.
En este lugar nos enseñaban algunas cosas sobre los
¡ -V'í/ LM. i se asegura la posibilidad de apelar a tratamientos como
el bypass gástrico, como así tambié n la inclusi ón de los alimentos, a partir de una analogía con el sem á foro,
trastornos alimenticios dentro del control nacional de habiendo así alimentos verdes ( libres ) , amarillos (con
precauci ó n ) y rojos ( prohibidos ) . El mé todo de control
vigilancia epidemiológica, la regulación de propagandas
del peso sobre los ni ños se basaba en hacernos llevar un
de alimentos de bajas calorías, etc.
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¡¡j|| La obesidad y el sobrepeso aparecen como un diario donde se detallaba que habíamos comido y cu á l
püi fenómeno de medicalización de la diversidad humana,
era la emoción que experimentá bamos. Obviamente,
V esto iba acompa ñ ado de varias terapias grupales donde
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m Cuerpos sin patrones
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mm se culpabilizaba a cualquiera que hubiese ingerido un
alimento correspondiente a los prohibidos. En alg ú n
las ló gicas que ponderan a la obesidad como una
enfermedad. Los gordxs o los potenciales gordxs, ya que
la obesidad aparece como la amenaza fantasma , es decir,
RBHI á pice de lucidez en ese momento, llegué a pensar, y con
tal solo 11 a ños, que todo eso parecía parte de un culto
constantemente nos educan respecto a la corporalidad
como si la gordura fuera una nueva manera de enfocar
similar a una extra ñ a religión . Un culto al cuerpo al que el problema del dualismo. La idea de cuerpo perfecto
i a ñ os despu és terminar ía adhiriendo en pos nuevamente nos agobia, acercarse a ese ideal implica alejarnos de
L I de la aceptació n social . los cuerpos reales y de sus infinitas formas de darse: es
m Me parece importante señ alar este ejemplo, como decir, como son nuestros cuerpos m ás allá del fanatismo
una forma de darse del control como institucionalizado por encarnar este ideal de belleza y salud .
Smsm. en cierto centro de salud , con ciertos horarios y Tenemos que preguntarnos entonces si realmente
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actividades específicas. Si bien parecería que dicho
espacio funcionaba como un lugar para educar a los ni ñ xs
en el buen comer, se trataba de un centro que normaba
a esos pequeños cuerpxs gordxs. La humillaci ón gratuita
estas maneras de normar los cuerpos, privilegian una
noción “ real ” de la salud o solo una forma de salud que
jerarquiza algunos está ndares que premian el descenso
de peso. Está ndares que podemos rastrear como formas
como forma de coerció n dentro de los límites de lo que manifiestas de la lógica del mercado de consumo, que
es aceptado corporalmente y lo que no.
m En la actualidad, no nos hallamos muy lejos de estas
experiencias, encontramos en la vida diaria una increíble
aboga por generar necesidades asociadas a los mecanismos
de normalizació n corporal .
Desde la tierna infancia se nos presentan estas
cantidad de publicidades que expresan los ideales de opciones de dietas, estos cuerpos está ndar que vemos
belleza de manera mórbida. Sí, afirmo que la morbidez no en delgadísimas modelos, una cierta idea de belleza
es algo que se predica ú nicamente de la gordura , sino que
m estamos atravesados por lógicas corporales que implican
y claramente la tendencia es no ser gordx. Ser gordx
aparece como un pecado capital, por eso al iniciarnos en
í una serie de rituales m órbidos a favor del descenso de é l circuito de las dietas encontramos no solo cuestiones
peso. La delgadez extrema aparece como un valor, como acerca de la salud de los cuerpos , sino juicios de carácter
mercancía en el trá fico de los afectos. Porque lejos de ser moral. Ser un ni ñ x gordx implica ser iniciado en el orden
una esfera salvaguardada del capitalismo, los afectos, la
1 amorosidad , el amor propio se enfrentan una y otra vez a
de las prohibiciones del comer, a partir de un semá foro
que no resulta ser explícito sino que se ordena en la
a una suerte de tabla de comparación que está edificada en multiplicidad de formas de coerció n invisibles pero
ks esta suerte de sueño é pico llamado el cuerpo perfecto. ( efectivas , desde las burlas de los pares, la presiones
Nos educamos, crecemos y nos desarrollamos en a intra familiares, así como la serie de im á genes, normas y
rt i ¡ plenitud de un tráfico de afectos que parece constituirse dem ás que se ven de forma cotidiana.
I desde la primera infancia , en la apariencia del cuerpo. En
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.
.
m Cuerpos sin patrones
Predicar con el cuerpo Me veo a mi en ese Otrx gordx, me veo en ese dolor, en
esa rigidez y me veo principalmente en la leve sonrisa
luego de esas dos cucharadas rá pidas. Un peque ñ o atracó n
m
m No hace mucho tiempo, viajo en el colectivo volviendo y toda una vida, todo un cuerpx se juega en él, porque
de un d ía de terapia donde la cuestión corporal me ha nos muestra que hay un placer secreto que es el de ser
m dejado agotada. Estoy sentada en diagonal a unx chicx
gordx, en un acto reflejo me quedo mirando para sonreír
nosotrxs mismxs con nuestro cuerpo. Que nos señ ala que
tenemos la esperanza y la posibilidad de habitar nuestros
con complicidad. Hay días donde el empoderar los cuerpxs cuerpxs con nuestras reglas sin est á ndares importados.
i gordxs, significa darle al otro una sonrisa de aliento que De nuevo vuelve la regularidad de las cucharadas
le diga de alguna manera que estamos ah í y que no somos de gelatina , en la cara de este Otrx gordx se nota la
1 3 &
invisibles por tener algú n kilo demás o no cuadrar en los contradicción, el dolor, la tristeza y la afirmación muda
cá lculos del IMC. "esto vale algo” . Es decir, la necesidad de entrar en esos
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! Siguiendo con el relato, veo a Ix chicx gordx sacar de un
morral, evitando todo contacto visual, un pote de gelatina
patrones estereotipados de belleza , de afirmar la dieta
como un culto en pos de la salud, de la est ética, etc. Salir
y empezar a comerlo muy lentamente. En su rostro se ve la de la invisibilidad y salir del se ñalamiento: se acaba la
tristeza velada , los rastros claros de tratar de encuadrarse gelatina y el acto ritual. Comer no es para vivir solamente,
1 en la norma. La gelatina es una "colació n ” de alguna sino que comer es también habitar de cierta manera el
dieta , si bien esto es una suposición toda indicaba que mundo. Eso nos dicen, y el correlato de cómo comemos
» era así. El dolor de no encajar en esas normas corporales es nuestro cuerpx, nos afirman. El silencio y la mirada
Si estandarizadas, se notaba claramente en su lenguaje perdida del Otrx gordx que soy yo de una u otra manera,
corporal. Veo su incomodidad al comer en p ú blico, la es de lo que quiero hablar.
a
S mirada perdida sin hacer contacto con ning ú n otrx ser, Las dietas y nuestra pregunta inicial, nos dejan ver
m los brazos sumamente pegados al cuerpo, una posici ón tan una serie de entramados culturales, polí ticos y sociales
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r ígida que se me mostraba a ese Otrx queriendo ocultarse.
Un doble juego de fuerzas se conjugan en el cuerpx
gordx: por un lado la invisibilizaci ó n en el tráfico de los
afectos. El cuerpx gordx se expresa con un valor negativo,
es descartado en tanto no cotiza en el mercado de los
cuerpxs estandarizados. Se nos dice, educa, señala que
los gordxs son feos, no seducen, no desean, no importan .
respecto al control sanitario de los cuerpxs. El gordx no
puede elegir, se lo transforma en un enfermo, se lo trata
mediante mecanismos para que se autorregule, se lo
invisibiliza, se lo expone, se lo se ñala . Los mecanismos de
regulación de estos cuerpos por fuera de la norma , que nos
introducen a una exposición de las corporalidades como
mercancías que deben tratarse a partir de tratamientos
í 1 Por el otro lado, se nos resalta como parias dentro de la
sociedad: el gordxs es un enfermo, está mal, se tiene que
cubrir y ocultar - como este personaje del colectivo, pero
estéticos, proliferando el consumo de alimentos bajos en
calor ías, viandas a medida, ejercicio controlado, etc.
Volviendo al principio, ¿cómo podemos enfrentar a
de forma equivalente se lo va a seguir viendo y se ñ alando. estas lógicas que se multiplican en todos los espacios que
llliil Volviendo al relato, en esa ingesta cuchara por cuchara de habitamos? ¿ Por qué alimentarse de tal o cual manera nos
i gelatina pareciera que ese Otrx gordx pide a gritos ayuda condiciona dentro de ciertos juicios sobre los cuerpxs?
I para escapar de esa opresión en forma de dieta. De repente, ¿ Por qué incluso las personas dentro de la norma viven con
I0mi la transgresión aparece de manera imperceptible: come un estado de alerta constante respecto de estar o no en la
una o dos cucharadas a una velocidad que rompe con la normatividad corporal?
monoton ía de esa ingesta. Se atraca, sin atracarse, como Habitar el cuerpx es una forma de pensarnos en relación
desafiando a esos est á ndares en los que quiere encajar. con el mundo, con los otrxs, pero elegir la religión de los
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papiiii Cuerpos sin patrones
cuerpxs normados implica sacrificar a unos en nombre
de esa salud , esa . belleza , ese deseo que es funcional a
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.
ciertas lógicas de mercado y consumo Decidir obviar las
multiplicidades corporales, afirmando ciertos estereotipos
implica silenciar una y otra vez a la heterogeneidad de
nuestros cuerpxs. Pero sobre todo es dejar que se nos
imponga desde afuera una forma de pensarnos y habitarnos
I1S1I -
con en nuestros cuerpxs.
No somos lo que comemos, sino que debemos invertir la
relación y comer para poder ser. Y desafiar las lógicas que
LESBIANAS GORDAS, BELLAS Y FUERTES
Canela Gravila
si
m nos traspasan a fin de poder habitar nuestrxs cuerpxs con
nuevas perspectivas que incluyan a la diversidad corporal.
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1
ese cuerpo deseoso de liberarse. Acuerdo en que una
de las granadas más eficientes en la guerra contra el
patriarcado es la apropiación de la capacidad reproductiva
de los ú teros, que frente a la negativa de la "maternidad
obligatoria ” empodera a los cuerpos que así lo deseamos.
Pero en la lucha contra la heterosexualidad obligatoria
y el capitalismo, la apropiaci ón de nuestro cuerpo y la
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- regulación de nuestro deseo exige un cuestionamiento a
cómo se modelan nuestras corporalidades mas allá de la
genitalidad. Al capitalismo y al patriarcado les resulta
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funcional que las biomujeres seamos dóciles, abnegadas,
prolijas, quietas, ocupemos poco espacio e incluso cuando
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ara
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I
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estamos en p ú blico pretende adoctrinarnos sugiriendo
cuá les son las posturas correctas : piernas cruzadas , brazos
unidos y siempre la boca cerrada. Y cuando digo boca
cerrada , no solo a las opiniones, tambi én a la comida.
Estas disciplinas sobre nuestros cuerpos estimulan el
normativo, basado en la medicina y la eugenesia, por el
cual no visibilizan otros modelos de belleza? Creo que hay
preguntas que duelen y salen ¿ hasta cuá ndo vamos a negar
la jerarqu ía de privilegios que se establece entre gordxs
acto reiterativo que consolida un h á bito ejemplificado y flacxs dentro de la sociedad , e incluso hasta cuá ndo
una suerte de tecnificaci ó n en masa de nuestros gestos, ^ haremos “ la vista gorda ” sobre la urgencia polí tica de
cuestionar este disciplinamiento?
sutilezas y tama ños corporales.
Si de algo sabemos las lesbianas es del mutismo có mo
La gordura es un discurso negado, es invisible en
-
la consigna “ lo personal es político” a pesar de que
voluntad pol í tica que el sistema heteropatriarcal impone
la visibilidad nos ponga en la pasarela de un mundo
sobre nosotrxs para lanzarnos a ese "silencio can íbal ”
normalizador en que las imá genes sobre la gordura
desde el cual sufrir o luchar. Con la gordura sucede
algo similar, no aparece en las películas de acción , no
castigan a los cuerpos desobedientes en kilos y con
curvas desubicadamente provocativas . La gordura , para está en las representaciones emblemá ticas del pasado,
esta cultura del hambre conscientemente administrado,
no estamos en los manuales escolares de ning ú n ciclo
educativo m ás que para la burla o como ejemplo de mala
es un s ímbolo de abandono, de falta de conducta, de alimentación y perjuicio a la salud . Tampoco estamos
poca acción , de enfermedad , de fracaso, de trauma , de
cero sexo y de falta de deseo. Es la antítesis del éxito, en tas publicidades de los productos de belleza , no hay
perfumes que vuelvan atractivxs a Ixs gordxs y claro que
en tanto beneficio privado a quienes responden a un tampoco a las lesbianas gordas. Nuestras sonrisas no le
modelo de cuerpo ejemplar: delgado, fuerte, vigoroso importan al mercado, seguramente supongan que Ixs
y á gil . Claro que sobre todo blanco y heterosexual. Los
gordxs no sonre í mos, nuestro pelo tampoco merece una
medios aniquilan , pero la calle no es distinta , el mercado atenció n publicitaria en particular , recuerden y no lo
de trabajo tampoco ofrece posibilidades, el solo echo olviden: “ Ixs gordxs est á n abandonadxs ” .
de intentar ofrecer nuestra vulnerada fuerza laboral en
Esta pol í tica masificada de maltrato a la gordura , de
comercios o atención al público resulta irrisorio para Ixs construcción de corporalidades como espacios abandonados
contratantes o un caso exótico de inclusió n. que fomentan la tristeza y el autodesprecio son inyectados
.
Y el feminismo parece ser insuficiente La sola menció n desde una cultura que violenta la existencia de aquello no
a la hermosa consigna “ abajo la belleza hegem ónica ” me deseado a los fines heterocapitalistas.
.
sabe a poco Acaso, ¿ no hemos sido capaces de trascender Poner en la mesa de la gula normativa Ixs m ú ltiples
el ú tero como espacio de lucha feminista para poder cuerpos que somos es potenciar nuestro corrimiento de
pensar en que esos silencios representacionales a tos los reg í menes y políticas eugen ésicas, del mismo modo
que somos expulsados Ixs cuerpos no blancos, delgados y que lo hacemos cuando cuestionamos la heterosexualidad
tonificados, imprimen sentidos en nuestras subjetividades obligatoria o la maternidad involuntaria . La grasa
que nos pueden alejar del camino a la autonom ía , acallar corporal no limita nuestra acció n ni nos quita la rabia , la
la rabia, quitar nuestra fuerza transformadora? Sé que multiplicidad de imá genes que creamos en nuestro andar
la consigna no desconoce la gordofobia , pero en lo deben ser ú tiles para hacer de nuestro cuerpo un real
concreto tampoco apuesta a construir nuevos modelos de espacio de batalla , donde la carne sea esa bandera polí tica
belleza . Acaso ¿es demasiado banal ocuparse del envase e indisciplinada frente a un discurso médico eugenésico
del ú tero, sobre todo si la violencia que soporta no es que nos pretende flacxs como camino al éxito.
tan evidente? ¿Qué estrategia posible, qué plan de lucha Cerrar la boca , como tantxs alienadxs proponen, aun sin
trazaremos contra los discursos gordof óbicxs y su intento tener la autoridad sentimental para sugerirlo, es potenciar
70
71
m .
Cuerpos sin pah' ones
.
esta cultura hostil Mas allá de las vejaciones y violencias
incorrecto y corrupto en este sistema representacional
intentemos que sea nuestra piel, nuestras cicatrices una que solo me lee como mujer, por robarle unas pocas
cantera de disidencia a la normativa discriminatoria / alhajas oxidadas a la feminidad.
moralízadora / correctora de las curvas exc éntricas. Y no solo me nombro lesbiana, me vivo gorda y femme,
i Y no cito estas dos últimas exuberantes cualidades -qué
son má s que visibles a los ojos- para que se proclamen
I Ixs lectores gordxs e intenten hacer el ejercicio de ver
en cuántas identidades sociales quepan, sino porque mi
Gorda, lesbiana y femme cuerpo, este territorio de luchas, decide y construye una
¿ Qué le molesta má s a tu mirada ? | corporalidad por fuera del disciplinamiento médico y
mediá tico que castiga la gordura y más aun, burla la osadía
de sentirse hermosa y orgullosa por ello. Pero además,
Lo habr án sospechado. Sí, soy actualmente un cuerpo j porque habernos corporalidades y esté ticas que incomodan
lesbiano gordo. Y hay en esto una complejidad entre lo i al lesbianismo poniéndole un poco de plataformas,
.
evidente y lo que pretende silenciarse El lesbianismo encajes, un delineador a media asta y medias rotas a
las no mujeres. Pero sepan, mis muy queridas lesbianas,
me insiste en la palabra, mientras que la gordura queda
en evidencia a cualquier distancia visual o en la mínima i que esto no nos hace víctimas del patriarcado, ni niega
caricia. Sin embargo, posicionarme lesbiana exige un las posibilidades de fugar alegremente del régimen de la
nombramiento, decirlo es visibilizar y dar carnadura i heterosexualidad obligatoria.
a una posibilidad de habitar el espacio negado en la No me considero femenina, por eso digo me vivo, transito,
representación de la sociedad heterosexual. El decirlo me vuelvo legible como tal para c ódigos socioculturales
me añrma, me vuelve existencia, palabra y cuerpo, voz heterosexistas que suponen que usar pollera y andar
y acción. Me presento, me nombro, me digo, me escribo despeinada te hace disponible al poder sexista masculino.
para que dejen de encasillarme y ubicarme en una De la misma manera que a los ojos de las lesbianas me
identificación que me borronea y no me nombra. Como vuelvo femme, por sabotear y reciclar la feminidad con mi
dirí a Macky Corbalán "lesbiana, lesbiana, lesbiana, magia tilinga y tortillera. Puedo ser femme, pero puedo ser
lesbiana decirlo tantas veces como se lo calló. Decir chonga también, solo que ahora ni me interesa.
lesbiana es iluminar una porción de realidad, velada por Entonces me reordeno, gorda, lesbiana feminista femme.
las gruesas sombras de la dominación hetero, correr el Pareciera que quiero encasillarme, pero no es ese el objetivo,
cerrado horizonte de su normativa genocida’ . Como ” sino trazar una cartografía de posibles hábitats que parecen
perra que soy, agregaría que “ si no grit ás, no vale”, i solaparse y contradecirse entre sí. Las feminidades dentro
así que a viva voz: LESBIANA. Esta identificaci ón que
! del feminismo ortodoxo y en el lesbianismo siguen ocupando
tan trabajosa ha sido, tan desgastante y bené fica, tan j el lugar de vejación al que la cultura patriarcal expulsa a las
llena de amores y odios, este Yo lesbiana es el punto i biomujeres a fin de que se vuelvan una mercancí a accesible
personal y polí tico de mi existencia que juega con la l .
a los varones Este discurso esquizoide versa entre el pánico
palabra lesbiana, a veces con la palabra femme y muy i a la dominación masculina y la negación de la capacidad
poco con la palabra chonga, y otros artilugios, buscando ; de recrear otros modelos de belleza por parte de Ixs
la emergencia y la existencia de lo acallado, de lo ! sujetos que en algún momento transformar án las relaciones
i patriarcales. Yo me pregunto, queridxs, ¿saben lo que es
. .
1 Atacky Corbat án El silencio caní bal Disponible en potenciatortmera criarse en un cultura que te asfixia diciendo “ a las mujeres
. .
blogspot com https: / / docs google.com / file/ d / OBwh!fQse - í gordas nadie las mira” o "seguí así de abandonada y te van
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sin hacer nada porque las “ danzas coreográficas” son solo
para chicxs flacxs y á giles? ¿ Podr ían sentirse, al menos por
un ratito, debajo de la piel de una niña monstruo que quiere
La feminidad gorda puede ser una experiencia liberadora
a través de una contraofensiva de imá genes que dinamitan
poco a poco estereotipos y hacen posible creer -y crear¬
en otras performatividades, sin perder lo GORDA. Hurtar
un poquito de femme glam?
Ik Gente, no quiero romper sus sueñ os libertarios y
mucho menos conmoverlxs, pero es momento de que se
enteren de que la feminidad es un sistema de privilegios
la feminidad, quebrarla, romperla es tomar revancha de
nuestra verg üenza y hast ío, de los encierros y verg üenzas,
del temor a no ser aceptadx. Es recrearse, mostrando la
con tas teorías críticas sin dejarse opacar por las prejuicios
heterocapitalistas, y en todo caso, que estos sean un punto
i de anclaje para futuras constelaciones políticas, cuerpos y
s deseos. Sigamos generando nuevas representaciones que den
cuenta de nuestra felicidad, de nuestra capacidad amatoria
y destructiva, de lo sexy / perra de esta grasa sin perder
nuestro poder cuestionador y burlón a las imposiciones Ya . ALEJANDRA PIZARNIK Y LA DELGADEZ COMO
subimos a la casa de la normatividad, ahora apuntemos con
COMBATE CONSTANTE
un rifle a la cultura destructiva que enferma y mata .
BE : -
;; - Laura Contrera
i.
¡¡ jj surge su preocupación por el peso y cierto sentimiento de
ihadecuación al ideal femenino imperante en su entorno,
tanto por su figura como por sus elecciones sexuales. Tal
circunstancia ha sido retratada en numerosos artículos y
libros, puesto que la autora goza de un inmenso prestigio
i e interés extra-literario en el mundo hispanoparlante.
Pero estas líneas que escribo no componen otro ensayo
devocional sobre Alejandra Pizarnik ni sobre su personaje
lírico, “ fraccionado en niñas, sonámbulas, náufragas ” 1.
Má s allá de mi fervor adolescente por Pizarnik y su mito
personal, y má s acá también de la sobreabundante literatura
<
VIH 1 Aí ra, César: Alejandra Pizarnik , Beatriz Viterbo Editora, Buenos Aires,
2001. Pág. 18.
i 76 77
1
SÜ
Cuerpos sin patrones
sobre su corpus vital y poé tico, me interesa detenerme en las corporalidades femeninas no dotadas de la belleza
una experiencia del cuerpo gordo en particular y en có mo grá cil esperada y celebrable se repite en todo el tramo
I esa experiencia ha sido leída y tematizada por dos de sus
biógrafos m á s prominentes . Asimismo, propondré una
dedicado a la infancia de la poeta . Pina se solaza en la
m an écdota escolar donde la gordura de Alejandra Pizarnik
m lectura en clave de activismo y teor ía sobre gordura de es personaje principal . Hasta alude a la verg ü enza
m ciertos pasajes de su diario ya hollados por la cr ítica. Creo maternal por la hija gorda - también levemente
que, como han dicho otrxs autorxs, además de una historia tartamuda y asm á tica - que no resiste la comparació n con
y ;i de la gordura que se inscriba en el tema más general de la la hermana mayor rubia , bonita y delgada. Llegada a la
m historia pol í tica de los cuerpos, necesitamos m ás historias
sobre y desde la gordura 2 , contadas en primera persona
adolescencia , Pi ñ a refiere la batalla contra la gordura ,
ejemplificada por la ingesta de anfetaminas ( de marca
del singular o del plural , para poner en evidencia ciertos . Parobes , al parecer ) y el amor a los sá ndwiches de
l mi procedimientos naturalizados que operan y producen los mortadela que la poeta escond ía en sus bolsillos' . Sin
m cuerpos gordos como objetos de estigmatizació n, injuria embargo , Pi ñ a asegura más de una vez que '
mm o transformación e inaugurar, de ser posible, nuevas Pizarnik no
um
era gorda sino “ gordita ” : "apenas rellena y con piernas
genealogías que nos alojen . fuertes” 5, aclara .
i Pi ñ a describe una Alejandra Pizarnik acomplejada por
su gordura para acto seguido redimirla asegurando que la
poeta no era realmente gorda . El uso de eufemismos por
mm parte de Piñ a más que tender a la exactitud descriptiva
2 . Antes pensaba que sólo las mujeres tení an esa de la biograf ía se inscribe en una operación retórica que
pesadilla . Ahora pienso que todo el mundo sue ña es usual en nuestra cultura. Estos eufemismos amables y
mMi que lo desnudan, pero los dedos que señalan nos
acusan de diferentes delitos .Ja gente estira la
diplom á ticos encubren el cuerpo gordo al que aluden
tanta conmiseración. La operación retórica tiene un efecto
con
m mano para demostrar que sabe mejor que nosotrxs de invisibilizaci ó n del cuerpo voluminoso, sea cual sea
mismxs cuál es la verdad sobre nosotrxs . Nos el
m despojan de nuestra ropa , nuestras palabras ,
tama ñ o, talla o peso de ese cuerpo o nuestras opiniones
acerca de los está ndares corporales de Occidente ( porque lo
nuestra piel , nuestra carne , hasta que no somos cierto es que Pizarnik experimentaba su cuerpo de acuerdo
más que una pila de huesos de carnicería , y luego a
esos está ndares imperantes ) . Esta operación misericordiosa
11 señalan y dicen que eso es lo que somos . de la biógrafa testimonia su empatia con la biografiada6,
Minnie Bruce Pratt
. .
1991 . Pá g 29 y ss Hay una reedici ón corregida de esta
biograf ía:
Alejandra Pizarnik . Una biograf ía . Editorial Corregidor,
Wm
B La biógrafa Cristina Pina alude desde las primeras .
1999 En este trabajo nos manejaremos con la primera edici
Buenos Aires,
1m pá ginas de su obra a la gordura de la ni ña Pizarnik: 4 Ibíd., pá g. 35.
ón.
I “ gordita", dice 5. Esa manera elusiva de referenciar a 5 Ibíd ., pá g. 42 .
l
6 Como Harding plantea claramente: Las mujeres delgadas
2 Al respecto, ver Levy - Navarro, Elena: “ Fattening Queer History. les dicen a sus amigxs gordxs “ vos no sos “ gordx ” porque no
Where ellas est á n
a confundidas con la definición de ta palabra segú n el dicciona
isai
does Fat History go from here?" en Rothblum , Esther ySolovay, Sondra (ed ):
. ojos no funcionan , o fueron criadas en planetas donde
rio, o sus
m
The Fat Studies Reader . New York University Press, New York, 2009.
la historia de la gordura ver Vigarello, Georges: Historia de
Sobre ! ;
la talla 24 es la
talla promedio para las mujeres. Ellas no lo dicen porque es
la .
i
mm la obesidad . Ellas lo dicen porque gordx no significa gordx en esta cultura verdad
. Puede
—
Metamorfosis de la gordura . Ediciones Nueva Visión, Buenos Aires,
2011. significar ademá s cualquiera o todas las siguientes
ms 3 Pina, Cristina: Alejandra Pizarnik . Editorial Planeta , Buenos : fex, no saludable,
Aires, *
l olorosx, haraganx, ignorante, indisciplinadx, antipá ticx, agobiante
,
a 78 79
i u mm m m m
1 sm m wm m m
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.
desorden alimentario, desorden que, a su vez, revela ocultamiento bajo vestimentas estrafalarias o informes” .
17
desorden psíquicoH. Y generador de má s sufrimientos, Esta suerte de “ final feliz” del martirio del obesx que narra
claro está. Esta estereotipación y representación simplista pifia produce consternación, sobre todo si se piensa que la
m operan constantemente incluso en quienes pretenden poeta se suicidó muy joven (por razones que, como las de
no discriminar sino disculpar o tener conmiseración de toda muerte auto -infligida, desconocemos absolutamente
las personas que luchan con el trato (y tratamiento) que a pesar de que creamos lo contrario). Pero volvamos a la
reciben a diario sus cuerpos. Esta idea tiene el soporte .
interpretación de la biógrafa Pifia sostiene que Pizarnik,
de un dispositivo discursivo y representacional que, por al fin flaca, deseaba mostrarse compulsivamente para
lo menos desde los albores del siglo pasado, ha mostrado ganar el tiempo perdido en su batalla contra la gordura .
y reproducido a las personas gordas - especialmente a las Nuevamente, no puede sorprendernos tal afirmación,
i
r
mujeres asexuales- como extremadamente infelices y / o puesto que se enmarca en eso que Ixs activistas y teóricxs
depresivas o, por el contrario, felices o satisfechas sólo de la gordura han descripto como "el escenario del antes y
en su arduo proceso de transformación para volverse el despué s", ese donde el yo encamado en un cuerpo gordo
delgadas mediante un riguroso régimen. Reitero que no nunca est á presente: es algo en proceso de transformación
voy a desconocer las profundas huellas psíquicas y físicas o algo que ya ha sido dejado atr ás, puesto que el yo no
que produce la estigmatización de la gordura,' pero puede representarse como gordo
18
.
m quiero resaltar que estas heridas que afectan la doxa El escritor argentino César Aira dict ó a mediados de
warn corporal “ el conjunto de creencias vivido y registrado los ’90 en Buenos Aires un muy interesante curso sobre
la poé tica de Alejandra Pizarnik al que tuve el gusto de
i corporalmente que constituye la realidad social” 15-
provienen de la estigmatización hegemónica, no de asistir, luego editado en formato libro y que he citado má s
los desórdenes alimentarios y psicológicos que puedan arriba En este curso, Aira emprende una cruzada contra
.
padecer aisladamente Ixs individuxs16. el uso de metá foras sentimentales para hablar de Pizarnik,
Pifia también interpreta "el gesto de fotografiarse prefiriendo referirse al proceso de creación de su poesía,
desnuda casi al final de su vida, y también por esta época, .
en aras de no reificarla Menos conocida por estas regiones
a veces abrir la puerta de su departamento de Montevideo resulta en cambio la biografí a sobre la poeta que editó en el
en ropa interior", para "sobresalto de los visitantes” como Estado español. En este libro, el autor también se aleja de
"una especie de revancha de quien siempre luchó contra todo sentimentalismo para presentamos a su biografiada .
su cuerpo y, por fin, al lograr que estuviera tan delgado Sin embargo, Aira describe a la adolescente Pizarnik con
como siempre soñó, sintió la compulsión de mostrarse,
I los rasgos típicos que aparecen en toda biografía de la
compensando, en la exhibición del cuerpo deseado, años de poeta: gorda, fea, enferma, acomplejada. En palabras
de Aira: "por ahora era una joven con conflictos a la que
¡Hfl » Women” en Evans Braziel. Jana - LeBesco, Kathleen (ed.): Bodies Out
“ obesidad” (palabra que comienza a utilizarse como diagnó stico médico
g recién en el siglo XVIII) o algún tipo de trastorno alimentario (bulimia, of Bounds: Fatness and Transgression. University of California Press,
anorexia, por ejemplo) . Berkeley, 2001, pág. 136).
8a 83
BUS ?
BK
t - había que esperar mientras se prolongaba su adolescencia:
acomplejada por su fealdad, su escasa estatura, su
tartamudez, su gordura , su acné, su inadaptación, su
asma . En vista de todo eso, el padre no puso reparos no
Cuerpos sin patrones
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Cuerpos sin patrones
.
3 De todo lo que he dicho de mí qué cosa queda.
esto, lo que hace a la gente sentirse así ” 27. Tanto Beth
u
Paul Éluard Ditto en los Estados Unidos de hoy - una nación obsesionada
con la delgadez y con la guerra a la obesidad- como
Más allá de las intervenciones de sus biógrafxs sobre Pizarnik en la Buenos Aires del pasado siglo tuvieron que
el corpus de la poeta, encontramos en los Diarios de lidiar con una constante representación de lo gordo como
algo poco deseable y censurable per se, además de la
Alejandra Pizarnik un auto -relato de la delgadez como
combate constante24. Aunque este relato se produce reprobación por sus elecciones sexuales como mujeres
de manera fragmentada -puesto que trabajamos con un proyecto de vida disidente de la norma. De
un diario expurgado que la propia autora pensó
con todos modos, la diferencia abismal entre ambas radica
como en que Ditto encontr ó la posibilidad de agencia de su
un "diario de escritora" publicable-, creo que podemos
extraer de ahí aspectos de una historia en primera
cuerpo gordo y queer en un contexto donde el trabajo
persona de la experiencia de la gordura en el círculo de activistas de la gordura -pero también de feministas,
familiar -y también en el intelectual- de la Buenos Aires lesbianas radicales, trans, intersex, queer, riot grrls y
de mediados del siglo XX. Este relato fragmentario de la diversidad funcional-, había abierto el camino para
debe
leerse sin ilusiones de completud o cierre pero también i
.
su corpulencia empoderada 28 Pero lo interesante de leer
sin esperanzas de hallar la explicación o la clave para la frase de Pizarnik junto a la de Ditto tal vez resida
en apreciar esos contextos tan disí miles y comprender
.
la vida, obra y muerte de la poeta Con esta premisa,
abordaré brevemente algunos párrafos significativos de el desaliento de la poeta en su lucha contra la gordura
los Diarios pizarnikianos, dejando planteada la tarea como un producido del dispositivo de corporalidad que le
para ha impedido la agencia má s que de su fracaso personal:
ser cumplida en otra oportunidad.
En una de las entradas del diario25 se lee: No hay todo cuerpo gordo es construido discursivamente como
- "
excusa posible. Una mujer tiene que ser hermosa. Y yo un proyecto fallido29.
soy fea. Esto me duele más de lo que yo creo Pero volvamos a los diarios de Pizarnik. El 6 de
febrero, 1959)26. Y un día después escribe: ”Engordé
(16 de septiembre de 1959 dice: “ Si sólo fuese menos oral Un .
“
muchísimo. No hay remedio. Es un círculo vicioso. Para poco menos de complejos orales, imposible estar una hora
mu comer necesito estar contenta. No puedo estar contenta
no sin un cigarrillo, una uña o alimentos, en mi boca Cada .
.
si estoy gorda" A esta frase de Pizarnik siempre . .
día fumo má s- Y ciegamente” Y el 23 de octubre de ese
me mismo año: "Así como me alimento sin querer hacerlo
gusta complementarla con unas palabras de
- Beth Ditto, sino que lo hago por compulsión o por temor del vací o,
-
la cantante de Gossip -y además una lesbiana gorda
y así hablo, sabiendo no obstante, que debería callar".
:
femme empoderada: "No podés odiar a alguien porque
hace dieta y no podés culpar a una persona por Unos días después, el 27 de octubre, escribe: “ Cada vez
: una mierda. Tenés que culpar a la má quina que
sentirse ) . .
má s obesa O al menos así lo siento Fui a ver al Dr R . .
alimenta i
.
'Usted es anormal’, dijo '¿Cómo?', dije ‘ .
Quiero decir que
24 La expresión del combate constante con el peso la tom
.
sufre de las glándulas’, dijo Ahora tomo unas cápsulas
é de Vigarello,
Georges, op.cit. , pág. 251.
- 27 http: / / wvAV.nme. com, mayo 2007.
25 Pizarnik, Alejandra: Diarios ( edición a cargo de
Ana Becciu). Editorial 28 At respecto ver Nault, Curran: “ ‘Punk will never diet’: Beth Ditto
Lumen, Barcelona, 2003. Todas tas citas que siguen provienen
de esa edición. and the (Queer ) revaluation of fat” en Revista Neoomericanist , Vot . 4
26 En la entrada del 3 de enero de 1960 insiste
sobre el tema de la
hermosura: “ Está dicho, una mujer tiene que ser hermosa no. 2 (Primavera / Verano 2009). Hay traducción al castellano por Morgan
excepciones válidas: aunque escriba como . Y no hay disponible en http:/ / www.gordazine.com. ar / traducciones.
Tolstoi, Joyce y Homero 29 Murray, Samantha: “ (Un / Be) Coming Out? Rethinking Fat Politics” .
juntos” . El tema se reitera en los años siguientes
.
Social Semiotics Special Issue: Thinking Fat Vol.15, N' 2, pág. 155.
86
S3
Cuerpos sin patrones
que me afectan los nervios.
” Y más adelante, ese mismo
un foco de preocupación para la joven poeta. Porque
día escribe: "La pauvre petite , má s
es urgente. Pero ¡Dios mío tiene que adelgazar. Esto allá de que en la ecuaci ón promovida por la industria de
! Cada
mirarme al espejo”. En las primeras vez me asquea más la salud y de la dieta, aceptada por el sentido com ún, la
se advierte la influencia del entradas transcriptas la comida es un factor central en los desórdenes
lenguaje psicoanalítico para relación con
describir su estado: la oralidad, el vacío alimentarios que serían, a su vez, efecto de una profunda
Es sabido que Alejandra
Pizarnik
y la compulsión
se psicoanalizó
. perturbación emocional o psíquica, no todo cuerpo gordo
muy joven: primero con León
Ostrov y luego con Enrique
desde es la prueba viviente de desórdenes o patologí33as o de
Pichón Riviere, padre de su amigo
Marcelo Pero en . una voluntad viciada que gusta de infligirse dolor . Quizá
última entrada hace aparició serí a más sencillo aceptar la diversidad corporal en la que
n el diagnóstico médico la
consagra la anormalidad y la solució
n en forma de pastillas
que podemos encarnarnos los seres humanos. O problematizar
(puesto que el adelgazamiento
es la única propuesta), la relación entre alimentación, gordura, salud y régimen
cosa esperable según la
mirada de vida, como hacen los activismos sobre gordura.
predominante hasta nuestros dí 30médica patologizante El 3 de enero de 1960 escribe: “Me estoy destruyendo
espacio privilegiado
.
as Así, el cuerpo es
un con cigarrillos y comida. Mi cuerpo no soporta má s . Ataque
donde operan los saberes/poderes
médico-estatales. Los cuerpos
gordos se de ayer. Asfixia. Es el precio que pago por haber vendido mi
cuerpos delgados, que son los que
se
confrontan con
ajustan vida al demonio de los ensueños” . Y el 9 de diciembre de
1960: “ Mi desorden es general. Fraenbel me anunció que
ajustarse) a las normas (o tienden a
nota Charlotte Cooper, restrictiva s
"definir al
de lo saludable Como . estoy enferma por mi desorden alimenticio. Troubles de
anormal, tal vez como un temporariocuerpo gordo como la nutrici ón. Me dijo que soy como los salvajes de Á frica:
ocho días sin comer y despué s se comen un hipopó tamo".
lo sitúa en oposición a estado enfermizo,
nociones rígidas de una
normalidad
estable y delgada” 31. Vemos cómo Pizarnik ya cuenta con un diagnóstico -
El 25 de diciembre de colonialista- de desorden alimenticio y un tratamiento,
. ...
"Finalme nte arroj
«wiicnte é el libro que me quemaba
arroje —
1959 escribe Pizarnik
• < .ai mi\:
;
¿
los que, de todos modos, no apaciguan su padecimiento.
poema lleno de alaridos y
.
el régimen perpetuo Tal vez se podrí a concluir que anotaciones, desciende notablemente el registro de la
el diagnóstico y la medicatización sobreviniente son experiencia de la alimentación. Aunque en 1966, tras
r - - .:
ocasión para el agravamiento del malestar de los cuerpos ta muerte de su padre, escribe: “ Mi terror de andar y
.
' ", • ’ l
descalificados en razón de su tamaño y forma. moverme y comer y respirar ” (27 de abril) El relato de
Volviendo a los Diarios , podemos verificar que ese cuerpo, la narración que se derrumba con el paso
tiempo después continúa la preocupación de la poeta de los años, dan cuenta de ese diario como una especial
por el cuerpo y la alimentación. Así, el 17 de junio de escena interlocutoria de producción de verdad Y el .
gi 1962 escribe: “ Incomodidad con mi cuerpo Lo terrible . problema es saber a qué precio pueden Ixs sujetos decir
de ser bella en ciertas partes y horrible en otras. [.. ] . esa verdad, como ha dicho Foucault .
“
:
Si hablo tanto de mi cuerpo y si tanto medito en él es .
.
.
-
m garganta como si dudara . Hace meses que sobrellevo
estas náuseas, esta imposibilidad de asimilación La .
La preocupación por la gordura es central en la
juventud de Pizarnik, si nos atenemos a las entradas
comida me provoca espantosas imágenes. Pus, sangre, .
de su diario mutilado A medida que pasan los años,
M tierra maloliente, escombros, cuerpos desnudos sucios y salvo lo apuntado má s arriba, empiezan a escasear las
heridos. Me duele la garganta cuando mastico y no me
H
m duele cuando fumo. Cuando mastico me duele todo,
referencias a su propio cuerpo y a la alimentación, lo que
se corresponderí a con la estabilización del descenso de
hasta tas piernas, hasta el corazón. La sobremesa es un peso de la poeta documentada por sus biógrafxs. Pero,
m penoso intento de no asfixiarme y de no vomitar. Pero ¿podemos hacer afirmaciones rotundas a partir de un
s vomitar no me libera, me obliga a creer que eso que texto expurgado? Se nos dirá que podemos confirmar lo
vomito fue ingerido de la misma manera: que estuve ofrecido en los Diarios con los profusos testimonios de
.
comiendo vómitos ” Al momento de la escritura de los
i
familiares y amistades, cartas, memorias y biografías.
Diarios se estaba tejos del boom gastronómico y gourmet
actual, pero no así de la idea generalizada sobre los 35 Precisar desde cuándo se produce la relación unívoca y privilegiada
entre alimentación y gordura nos llevarí a mucho tiempo y espacio .
Habría que distinguir entre cantidades, calidades y otras cuestiones,
34 Sólo unos años después de estas anotaciones de ta poeta, Michel todas esas cifras que han ido mutando en su significación por to menos
Foucault reflexionará en un par de conferencias sobre el cuerpo como desde que la cultura occidental comenzó a preocuparse por calcular
topia despiadada: “ él est á aquí, irreparablemente, nunca en otra parte. el valor de las gorduras (ver al respecto Vigarello, Georges, op.cit.,
Mi cuerpo es lo contrario de una utopía, lo que nunca está bajo otro cielo, Aguirre, Patricia: Ricos flacos y sordos pobres . La alimentación en crisis.
es el lugar absoluto, el pequeño fragmento de espacio con el cual, en -
Capital Intelectual, Buenos Aires, 2010 y LeBesco, Kathleen Naccarato,
sentido estricto, yo me corporizo” (Foucault, Michel: El cuerpo utópico.
.
.
Peter (ed ): Edible Ideologies. Representing Food and Meaning . State
Los heterotopias Ediciones Hueva Visión, Buenos Aires, 2010, pág.7). University of New York Press, Albany, 2008).
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33 90
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i Cuerpos sin patrones
Maan
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Cuerpos sin patrones
Nicolá s Cuello
Lucrecia Masson2
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darle vueltas pensé que sí, que es verdad
y luego de
Por tanto, me situaré sobre todo en la cuestión de la . Pero el hecho
de hacer estallar ciertos está ndares hace
gordura y en la necesidad de un activismo gordo castellano
parlante, pasando por un cuestionamiento del deseo, para
- estrategias de supervivencia en el espacio
que necesitemos
social, incluso
desde ah í reflexionar sobre esas "verdades" que se han dentro del feminismo.
dicho sobre nuestros cuerpos, sobre las etiquetas que nos Y digo que no se trata solo de la gordura,
pararnos a reflexionar sobre esas sino de
han puesto, y pensar el cuerpo como una construcción, un fronteras que definen
artefacto, una ficción pol ítica . lo normal corporal. Hay una especie de plus
que se debe
El activismo gordo nos abre una puerta para empezar a pagar, un peaje que los cuerpos no está
ndar pagan como
pensar la corporalidad disidente, disruptiva , defectuosa . tributo a este régimen que ha colonizado
Creo que desde el transfeminismo y otros activismos No es mi apuesta la de entrar en un nuestros cuerpos.
reclamo identitario
afines, estamos empezando a hablar desde nuestras en torno a la gordura. El punto está en
propias carnes. Nuestras carnes: las que sobran, las que cuerpo gordo una construcción médico- reconocer en el
política más. La
m faltan, las que est á n viejas, las que está n enfermas, las
que no son funcionales.
Es necesario empezar a cuestionarnos có mo se crea
apuesta es partir de aquí para poder
cuestionar
ficciones naturalizadas que ponen etiquetas y
a nuestros cuerpos.
Pero, al mismo tiempo, quiero identifica
nos las
diagnósticos
el cuerpo normal y evidenciar su carácter de artefacto. rme como
gorda . Toda mi trayectoria corporal
- Nuestros cuerpos gordos, enfermos, viejos o discapacitados
son construcciones sociales . Nuestros cuerpos, así
i está atravesada por
esta palabra, casi siempre en tono injurioso
. Enunciarme
definidos, son el resultado de relaciones sociales donde desde ah í es hoy una necesidad pol í tica .
Apropiarnos del
unos cuerpos se privilegian sobre otros. Existe una insulto para salir del lugar de la herida, como
bien dice mi
escenograf ía de lo social, con cuerpos actuantes que amiga Laura Contrera .
Se trata tambi é n de seguir rompiendo
logran diferentes repartos . armarios y
dar respuestas colectivas a cosas que nos
i
pasan por lo individual. Igual que desde han dicho que
el feminismo se
politiza la sexualidad, la economía o la
es importante trabajar colectivamenteviolencia , también
en torno a otras
Disponible en: http:/ / henni5phericinstitute.0rg / web- cuadernos/ en / I dimensiones. Se me ocurre pensar en el clásico quié
¡# radio - free- pocha / songs
ti misma . Parece que hubiera un logro rete a
personal a celebrar
V 101
WM
«Sai
i
#£
Sil .
centrado en tas corporalidades gordas Pero somos muchas í cuerpo Bala habla, hermosa y generosamente.
través de su
y nos estamos encontrando. Y desde los sures se comienza También están ert Colombia Dianita Pulido y
a rumiar la rebelión de las gordas . Angelita, accionando siempre en torno al
Alias
tema. Dianita
Este despertar gordo viene con una impronta muy i escibió estas palabras, tan contundentes como poé
sudaka. He utilizado antes la idea del cuerpo colonizado ticas:
como metá fora, ahora el colonialismo se presenta en un
sentido má s literal. Y como tas fronteras no nos detienen,
..
( . ) Mi cuerpo es un extenso campo de
batalla. Su mera
! existencia es, en sí misma, retadora e incómoda.
BH muchas cosas están pasando .
Entre ellas la página Gordalzine 5, de consulta obligada
cuerpo excesivo, anormal , indeseado,
feo .
Mi
resiste, ..
lucha, revoluciona (...) me amo gorda, me amo
para quien quiera abrirse a nuevas formas de pensar el j rebosante...me amo rebelde, me amo por no encajar y
ü .
cuerpo En este fanzine electrónico, disponible también no desear hacerlo. Por todo, amo mis
8S
en papel, encontramos reflexiones fundamentales de excesos. ( . ) ..
.
Laura, su autora También nos acerca traducciones de Entre todas, estamos inventando nuevas
textos del fat activism, que como dije antes nos llevan de encontrarnos y accionar. Intercambiamos maneras
.
la delantera en estas cuestiones Ademá s, el Gordalzine material,
experiencias, nos cuidamos y nos reunimos,
nos invita a hacer un interesante y creativo recorrido ordenador
mediante. Practicamos nuevas formas de activismo
5 Fanzine electrónico Gordalzine http: / /gordazine. tumbtr.com ¿Transfeminismo transasambleario?
.
También disponible en papel, en el estado español, en las distris afines
Conos como llamas y Peligrosidad Social. 6 hUp:/ / missogina.perrogordo.c( / maniflesto -
gordx /
102
103
a
i»
m
mm Cuerpos sin patrones
¡ Sf También en el Estado español, concretamente en que lo rigen. Se trata más bien, siguiendo a Foucault8,
Barcelona, contamos con lo que fue la experiencia de Masa
m1 .
Crónica Este colectivo, del cual formé parte, surgió de
la necesidad de poner sobre la mesa cuestiones como la
de preguntarnos por qué decimos con tanta pasión que
deseamos esto o aquello.
Nos toca entonces comenzar la difícil y urgente tarea
fifi gordura, la representación de los cuerpos y la necesidad de de replanteamos el deseo. Ser á entonces necesario
una (de)construcción del deseo. Los debates, performances dejar de lado el yo deseo, para entrar en un crear
y talleres que en diferentes ocasiones propusimos fueron deseo, en construirlo colectivamente, reconociéndonos
recibidos con gran entusiasmo. Esto nos habla claramente y teniendo siempre bien claro que no deseamos
de la necesidad de abordar temas como la gordura, líbre ni autónomamente. Está en nuestras manos el
entendiéndola como un asunto importante del feminismo7. generar nuevas representaciones, construir nuevos
En Canarias surgió el grupo de Facebook La vista imaginarios, dar lugar a otros cuerpos. Necesitamos un
Sorda-Stop Gordofobia, creado por iniciativa personal cuestionamiento transfeminista del deseo que atraviese,
de Carlos, cuyo nombre en la red es (¡atenti!) Carlos transgreda, transforme.
.
Sinolessustatubarrigaclavasela La vista gorda se presenta Y la mirada. La ficción polí tica del cuerpo se
como "un grupo cr í tico contra los cánones de belleza '
construye, entre otras cosas, a trav és de la mirada.
establecidos, contra los cuerpos ideales, contra la tiranía ¿Dónde termina mi cuerpo y empieza el tuyo? Y estamos
de la est é tica, contra la dictadura de la belleza y contra otra vez en la frontera.
todo aquello que atente contra la diversidad corporal ” . Dice Juan Manuel Burgos: "Llevo marcas de miradas
.
Es el FatPower La red comienza a hacerse gorda. por todo el cuerpo, cicatrices que no cierran y sé
actualizan en cada parpadeo -y sin embargo, que sean
vistas es, al final del día, lo único que espero”.
Y estoy confiada, porque siento que esto está
... Cuerpos proletarios, m á s deseantes que .
empezando a suceder El camino es largo pero est á
empezado. Tenemos mucho que mirarnos y mirar c ómo
deseables... miramos. Y para eso tenemos el gran laboratorio que es
el transfeminismo, donde nuestros cuerpos son material
' a intervenir, descodificar, descolonizar .
Así lo afirma el Manifiesto Gordx. Desde esta convicción, .
, 105
i Cuerpos sin patrones
la capacidad de. Hablo del cuerpo y sus afecciones , de Necesitamos establecer alianzas entre estos cuerpos
su capacidad de componerse con otros cuerpos . aberrantes, generizados, racializados, medicalizados,
“ Nadie sabe qué es lo que puede un cuerpo” , dice diagnosticados capaces o no.
Spinoza. De esta manera , en lugar de preguntarse qué es Y estoy confiada , vuelvo a decir .
un cuerpo, se pregunta qué es lo que puede un cuerpo, y la Creo que está comenzando a suceder un feminismo que
respuesta a esta pregunta es siempre una incógnita . Este nos atraviesa, cual lanza ba ñada en potencia creadora, y, así,
autor nos propone la increí ble idea de pensar el cuerpo nos transforma, nos da herramientas para la vida, hace del
fuera de la esencia para entrar en el campo de la potencia. feminismo algo que vivir.
I A partir de ah í, podemos desmontar la idea de cuerpo Tal vez ya era el momento y estamos entrando en una
gordo, cuerpo discapacitado, cuerpo enfermo. Un cuerpo no revuelta orgá nica, en un revolver órganos. Un afectarnos y
es en función de una esencia o de un deber ser en función afectar, regenerá ndonos sin destruirnos.
de una norma, sino que puede en relació n a su potencia . Las alianzas han sido llamadas. Algo est á empezando
También, y no olvidemos esto, un cuerpo nunca puede de una a suceder.
forma totalmente libre: "el cuerpo es relacionar, decía en
MP el primer epígrafe. Las estrategias de resistencia siempre se
construirá n en interdependencia . Mi cuerpo es y no es m ío9.
Un cuerpo puede siempre en diá logo, siempre en esas
relaciones con otros cuerpos y otras entidades, que se
I constituyen en su capacidad de afectaci ón. Nadie ni nada '
n H
es absolutamente autosuficiente. Entonces será nuestra
tarea la de aprender nuevas maneras de habitar el cuerpo,
: nuevas maneras de afectar y ser afectados, siempre
¡¡¡¡¡¡¡¡I entendiéndonos como cuerpos interdependientes, como
i ii cuerpos que han sido arrojados para ser cuidados. Y aquí
está la propuesta pol ítica .
•SIS É La interdependencia no es entonces un estado de cosas,
sino una vía para crear nuevas formas de relación . Nuevas
formas de habitar y habitarnos.
i
i
-
i
!
Suena el cuerno . El llamado a las alianzas í
1
: !
i
En el espacio que cae fuera de los est á ndares de normalidad
corporal nos encontramos con otros cuerpos. Cuerpos
aberrantes. Aberrante, segú n el diccionario significa: lo
que se aparta o desv ía de lo considerado normal .
H!
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Cuerpos sin patrones
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LECTURA CR íTICA DE LA
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LEY DE TRASTORNOS ALIMENTARIOS
Laura Contrera y Nicol á s Cuello
Hi-III ,
IÜI
i
trastorno alimenticio / alimentario generalizado y cuyo
supuesto ascenso en la población ha sido considerado
un alarmante problema social a erradicar. En muchos de
|
|
ill estos casos, que hemos podido señalar y que presentamos
aqu í en un anexo, los proyectos se ven acompa ñ ados por
:
V: i
"
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Cuerpos sin patrones
delimitar aquellos presupuestos latentes que presumen Luego de una lectura detenida de los documentos,
inocencia, pero que enmascaran en muchos casos la quisiéramos aquí poder compartir algunos parámetros y
sostenibilidad del negocio privatizado que explota nuestros consideraciones críticas sobre los preceptos y los modos
cuerpos, extrayendo del escarnio subjetivo de los cuerpos de articulación que encontramos latentes en el diseño,
.
gordos extensos beneficios comerciales
Una diferencia que nos resulta interesante señalar en
escritura y pr áctica de estas polí ticas públicas .
el abordaje crí tico de estos documentos, con especial
énfasis en el que ha sido aprobado en nuestro país, es
há bitos alimentarios saludables. Esta denominaci ón de en tomo al riesgo que implica realizar dietas "sin control
“ grupos de riesgo ” resulta altamente problemá tica y ha < m édico", olvidando reflexionar sobre la funcionalidad del
sido largamente discutida en diversos activismos por sus sistema de tutelaje y legitimación de la medicina en el
presupuestos discriminatorios. Los manuales de buenas establecimiento del diagn óstico y su tratamiento. El aval
prácticas de comunicación han tomado estas crí ticas . El ' médico no es garantía de resultado exitoso en t é rminos
propio INADI en su publicación “ Derecho a la Salud sin ; del mismo sistema (esto es, bajar de peso y mantenerlo
discriminació n" sugiere emplear el término "prácticas bajo ) y menos que menos asegura el respeto ni el trato
de riesgo" y no “ grupo de riesgo” , pues dicha expresión ( digno de quienes por decisión o presión social se someten
instala la idea de pertenencia a un grupo determinado a las prácticas de régimen y adelgazamiento propuestas
con una cualidad que de por sí lo hace vulnerable. En por la corporación medica . El maltrato y las formas
el caso que nos ocupa, Ixs gordxs, como sinónimo de
quienes nos alimentamos inadecuadamente o de manera
| de reproductibilidad de la violencia caracterizan los
modos en los que funciona la medicina como tecnología
<
no saludable, somos ese grupo estigmatizado y culpable. de normativizaci ó n corporal. Sin embargo, poco se
Teniendo en cuenta que en este paradigma la gordura , ha estudiado y menos se ha difundido la movilizaci ón ,
es un comportamiento causado por la "inadecuada ” ; de afectos de verg ü enza y culpa que se generan en
ingesta de alimentos, se establece una pauta potencial , ‘ la consulta médica y en los mensajes masivos sobre
en la que la sociedad entera queda en estado de alarma . el cuidado del cuerpo y los regímenes considerados
Así, la experiencia de nuestros cuerpos gordos resulta saludables. Seg ú n Foucault, no hay tal cosa como ciencia
criminalizada socialmente. pura , puesto que la medicina forma parte de un sistema
Tambié n podemos discutir la idea políticamente econ ó mico y de poder7 . Ahora bien, no podemos negar
correcta de "prácticas de riesgo", puesto que está ligada que, por lo menos desde el siglo XVIII en adelante, la .
a la ingesta inadecuada de comida . Pues la alimentación, medicina es un elemento clave para la constitución y et
incluso la "buena ” alimentación ( aunque habr ía que : propio entendimiento de los sujetos acerca de sí mismos.
explorar el alcance de estos discursos normativos ), no Por lo tanto, nos preocupa que se publiciten diagnósticos
agota el enfoque del problema de la gordura en nuestras estigmatizantes y posibilidades de identificación
sociedades6 . En una rá pida enumeración: la desigualdad ¡ patologizantes pero no se distribuyen p ú blicamente
* imaginarios que no sean culpabilizantes sobre los cuerpos
6 Según Aguirre, en la década del ‘50 la preocupación en el diseño de una • gordos. ¿ Có mo se resuelve esa tensión?
buena nutrición estaba puesto en la ingesta de vitaminas, en los ‘70 de proteínas,
en tos ‘90 de fibras y el tercer milenio se estrena con el debate acerca de
i los ácidos grasos en nutrición y con los alimentos transgénicos en la esfera
productiva . El cuestionamiento acerca de qué es comer bien tiene que ver con
las definiciones sociales acerca de qué es vivir bien y esto no depende de la
ciencia sino de la escala de valores de una sociedad, la que se ha formado en
una relación dinámica con su historia . (Aguirre, Patricia: El corácter social de la
•
I alimentación. Disponible en http: / /derechoalaalimentacion.orgAvp-content /
uploads / 2012 /08 /Aguirre- Car%C3 A1cter-scdal - de-la-alimentaa%C3XB3n.doc ).
7 Foucault: “ La crisis de la medicina o la crisis de la antimedidna ” en La
^ vida de los hombres infames . Editorial Altamira , La Plata , 1996 , pág. 84 .
116 117
< .
Cuerpos sin patrones
W- Victimización y patologización positiva Discriminación y patologización
de las infancias
que hay una brecha muy grande entre la discriminación dimensión la podemos observar cuando cruzamos la letra de
padecida y las posibilidades concretas de acceso a la la ley con los saberes comunes y las imá genes gordof ó bicas
justicia. Por un lado, por el desconocimiento pú blico de lo disponibles sobre nuestros cuerpos. Para nosotrxs, en
que, en potencia y con las salvedades patologizantes que esta dimensión que estamos pensando aqu í sobre cómo
ya resaltamos, podría ser una herramienta de autodefensa son construidas las tecnologías de discriminación y sus
y de intervención ante la violencia gordof óbica. Por supuestas estrategias de resistencia y denuncia por parte
otro lado, porque para acceder a esta defensa hay que de la ley, no pueden obliterar la inteligente concatenación
ser consumidor. Creemos que este art ículo por sí solo, entre los afectos políticos que son establecidos de manera
sin ser entretejido con estrategias más amplias sobre la arbitraria y obligatoria como consecuencia de la gordura
normalización de los cuerpos y el problema pol í tico del (depresión , imposibilidad de ser amadxs, soledad cró nica ,
acceso a determinados bienes y servicios, nada dice sobre autoestima estallada ) y su productividad en el momento de
la injusticia económica o la internalización del silencio establecer soluciones y respuestas posibles que combatan
como norma social. la opresi ón que opera sobre nuestros cuerpos.
Dentro del paradigma patologizante no hay estrategias Nos interesa preguntarnos de qué manera son construidas
para poner límites en las experiencias discriminatorias que las posibilidades de resistencia frente a la presión social
atraviesan las personas gordas que tengan que ver con el que recibimos las personas gordas, en un proyecto en
empoderamiento o la reflexión política sobre el cuerpo, el que las formas de amalgamar el dolor, de torcer la
sino que son instrumentos paternalizantes y filocristianos opresión , implican negociar nuestra carne y aceptar la
de proteccionismo estatal sólo para esos cuerpos que está n derrota eugen ésica de abandonar nuestra existencia
en proceso de cura y rectificación normativa. La discusión como personas gordas. Cómo es posible establecer como
acerca de cómo las din á micas y las lógica de producción pará metro de reformulación y cuidado para las infancias y
de plusvalor del capitalismo cultural contemporá neo los adolescentes (como estaría propuesto en el Art. 10 de
diagraman deseos industrializados de corporalidades la Ley ), im ágenes que contin ú an criminalizando nuestra
coloniales, cisgéneros, occidentalizadas, cap&citistas, gordura, mediante la extorsiva proyección del miedo a la
'
etc. no se ve nunca puesta en crisis. Nuevamente, es soledad, que en té rminos sexopolíticos , no esotra cosa que
ingenua la intervención que se supone efectiva de esta la crisis de la reproductibilidad social. En este sentido, las
ley, puesto que no hay estrategias para desmantelar las imágenes y los paisajes psico- emocionales que tendrían que
redes de exterminio y violencia psico-emocional a las que ser llevados adelante en el diseñ o de modos estratégicos
estamos expuestas las personas gordas con una cultura comunes de resistencia a la violencia simbólica , tendr ían
que simboliza nuestros cuerpos como una plaga a ser que implicar la construcción de mundos posibles donde
exterminada , y una herida permanente que solo se sana la diversidad corporal sea una garant ía , y una necesidad
cuando se logra adelgazar . imperiosa, para el ejercisio placentero de nuestras vidas.
Muchos de los miedos sociales presentes en la redacción Insistimos: no se trata solamente de intervenir en la
de los proyectos y de la ley finalmente sancionada , reproductibilidad de imá genes que multiplican cuerpos
como venimos sosteniendo anteriormente, involucran un normados, sino justamente, de establecer imaginarios que
entramado complejo de opresión material que se vincula pongan en crisis o discutan de manera transparente las
y retroalimenta con estructuras simbólicas sobre nuestros intrincadas mercadotecnias del deseo que operan desde
cuerpos donde la gordura , entendida como enfermedad, la fobia hacia lo diverso, estructurando y multiplicando
se codifica, en suma, como una amenaza interruptiva formas de agenciar el placer, la libertad , y el goce de
de reproductibilidad social que funciona como norma en formas normalizantes. Vemos entonces, que all í, en
un presente compulsivamente heterosexualizado. Esta la forma en la que está n entretejidas las diná micas del
120 121
I
;
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SMI
Cuerpos sin pafl ones
i
deseo, de la reproductibilidad social, las representaciones que el negocio privado de las grandes especulaciones
i sociales de nuestras gorduras y los afectos disponibles gordof óbicas y las industrias normativas de los cuerpos ,
sobre nuestras existencias existen complejas formas cedan espacio para la intervención del Estado y polí ticas
de
administración, gestión y producción capitalista que públicas que beneficien verdaderamente a la población y
podrían ponerse en riesgo con el ejercicio de formas al acceso regulado y de calidad en t érminos de alimento,
de
percepción de nuestros cuerpo gordos que pongan fin cosa que no significa que haya menos gente gorda como
al
.
odio Allí radica también nuestro potencial peligro. horizonte de normalidad deseable.
Lejos estamos de los vientres burgueses de la
modernidad y de la democratización de tas gorduras
de finales del siglo XIX y principios del siglo XX. A
nivel mundial, hoy se entiende que la obesidad es
Gordura e injusticias socioeconómicas inversamente proporcional al nivel de ingresos 10. De
todos modos, debemos repensar la diada “ ricxs flacxs y
”
" gordxs pobres” , puesto que la verificación objetiva de
"
También resulta preocupante que esta forma de esa aseveración no alcanza a dar cuenta de los matices
pensar a la gordura como un problema y trastorno del dispositivo de corporalidad actual, cuestión que, de
no
tenga un encuadre que apunte a poner en jaque
la todos modos, excede el propósito de este artículo.
redistribución de la riqueza, el acceso al alimento, las
condiciones laborales de los cuerpos que engordan, el
por qué engordan quienes engordan y c ómo lo hacen
,
con las particularidades regionales que suelen olvidar
se Concluyendo
a la hora de condenar ciertos alimentos y los
modos
de comensalidad. Es decir, cautelosamente se olvida
el derecho a la alimentación que tienen todxs Ixs
habitantes en un paí s que produce suficientes alimentos De este ejercicio de lectura crí tica de la ley que hemos
para que nadie pase hambre pero donde tas tasas de intentado nos quedan interrogantes y reflexiones que
desnutrició n son aún altas y causan muertes 9. deben ser ahondadas y discutidas de manera má s
De la misma manera, la preocupación de la ley est á en amplia . La medicalizaci ón del control del peso corporal
la construcción de nuevos espacios burocratizantes de la ha llegado al absurdo cientí fico de considerar que el
salud, pero no est á acompa ñada de una crí tica real por sobrepeso y la obesidad son los grandes culpables de
la que se explique o se justifique el acceso a la salud todos los problemas de salud de la población. Pues
pública. La pregunta serí a entonces hasta cuándo, y no debemos olvidar que la respuesta legislativa
ha
cómo y dónde es posible establecer límites y pautas para sido una estrategia a nivel mundiat para responder al
peligro social que representa la gordura en un mundo
9 Como dice Aguirre: Resulta asombroso que en un paí s de
clima que , desde hace má s de un siglo, ha emprendido una
templado, los productos frutihortícolas tengan precios compara
bles l
verdadera cruzada contra la gordura no por razones
a la carne bovina que necesita un proceso industria
l mas caro y
complejo, sin embargo, ésta es una relación hist órica dependiente
de
las características de la comercialización frutihortícola,
en mercados
10 . .
Vigarello, Georges, op cit, pá g 259.
concentradores con altos precios de intermediación, lo que hace que
finalmente estos productos lleguen al consumidor a un precio simitar
a
X 11 Ver, por ejemplo, Aguirre, Patricia: Ricos flacos y gordos pobres
La alimentaci ón en crisis. Capital intelectual, Buenos Aires
, 2010 o
.
la carne , lo que condiciona que los pobres no los prefieran ( de Sebastián, Luis: Un planeta de gordos y hambrientos
Patricia: Los alimentos rendidores y el cuerpo de los pobres ).
". Aguirre .
alimentaria al desnudo. Editorial Ariel, Barcelona, 2009.
La industria
122 123
Cuerpos sin patrones
r- sanitarias sino por razones polí ticas y económicas12 . por definiciones patologizantes del peso corporal, ya se
Má s que garantizar el acceso a la salud y tratamientos han levantado voces esgrimiendo el derecho a ser gordx 3
m para todas las personas que lo requieran, leyes como la
'
o, má s bien, el derecho de las personas a ser de cualquier
; argentina estigmatizan a un vasto sector de la población. tamaño. Creemos que este es el piso mínimo desde el
cual debemos exigir ser reconocidxs y tratadxs como
Este tipo de legislación nos deja con má s preguntas que
má .
respuestas ¿Por qué hay un imperativo de cambiar el sujetos de derechos y ya no como víctimas o enfermxs.
cuerpo gordo? ¿Por qué se garantiza el acceso a la salud
sólo si tiene que ver con transformar ese cuerpo gordo?
¿Por qué no se garantiza el acceso a la salud de todas las
personas, sin importar su talla ?
Que quede dicho claramente: Ixs activistas discutimos
que la gordura sea en sí misma una enfermedad y
discutimos que sea por sí sola un factor de riesgo
para otras afecciones consideradas graves. Asimismo,
denunciamos la fuerte carga moral y discriminatoria del
í
discurso médico que se materializa en leyes como la que
hoy comentamos. Denunciamos también los intereses
comerciales de quienes lucran con la venta de productos
y tratamientos adelgazantes, tengan o no aval médico .
Nosotrxs queremos hablar de diversidad corporal y
discutimos esa ficción de cuerpo normal / saludable que
es delgado, atlé tico y fibroso y que presenta únicamente
.
dos extremos desviados: gordura y anorexia Como desde
hace décadas movimientos de la diversidad funcional,
feministas, lesbianas, trans e intersexuales, ponemos
en cuestión el modelo paternalista de la medicina y su
jurisdicción absoluta sobre los cuerpos y las vidas de Ixs
pacientes / padecientes .
Porque no se puede hablar de gordura sin referirnos
al cuerpo y al sujeto allí encarnado. Desanudar estas
ligazones desde el discurso médico experto que informa
el discurso legal supone obliterar la experiencia propia
del cuerpo (del tamaño que sea), que es algo personal,
distintivo y único, como lo es la identidad de género Y.
leyes como la que hoy consideramos son una respuesta
higienista contra el peligro social y, como tal, invaden
la intimidad y la libertad de las personas en aras de la
salud pública. Más allá del presupuesto discriminatorio
invisibilizado que supone este discurso legal gobernado 13 Ver el trabajo de Yofi Tirosh o el de Anna Kirkland, entre otros. Como
dice Yofi Tirosh, el derecho a ser gordx supone et derecho a permanecer
libre de la intervención gubernamental o social respecto del propio peso,
12 Ver Vigarello, Georges, op .cit. pag. 261. sea de manera directa o indirecta.
124 125
Cuerpos sin patrones
MEOLIBERALISMO MAGRO 1
i
que se deshace de lo que est á de má s .
No es novedoso que las derechas recurran a terminología
injuriante para poner en caja las aspiraciones populares
y señalar el buen orden jerárquico que debe imperar en
, la sociedad. Grasa no es cualquier término en nuestro
.
contexto histórico -polí tico Pero, por otro lado, el sesgo
1 Texto publicado en Pagina í 2, sección Opinión, el dí a domingo
17 de
j enero de 2016 .
i 2 El 13 / 01 / 16, el ministro de Hacienda y Finanzas de Argentina,
Alfonso
; .
Prat Gay, brindó una larga conferencia de prensa Entre otras frases
polémicas, adem ás de algunas definiciones en materia macroeconómica,
'
el funcionario se refirió a los miles de despidos en diferentes organismos
estatales de una manera poco feliz: “ Encontramos un Estado vacío de
.
contenido y lleno de militantes", dijo V agregó: “ No vamos a dejar la
grasa militante, vamos a contratar gente idónea .
”
127
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LA VIDA EN EL FAT UNDERGROUND
Sara Golda Bracha Fishman2
Traducción libre: Maia Crantosqui
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Cuerpos sin patrones
Precursorxs Otro precursor importante del Fat Underground
fue el
movimiento del Orgullo Gordo, que comenzó en 1969 con
la creación de la NAAFA (National Asociation
Radical significa "raíz” . Los movimientos radicales to Advance
Fat Acceptance, Asociación Nacional para Promov
de liberación raramente tratan de cambiar las leyes er la
Aceptación de lxs Gordxs). En esos días se le daba
discriminatorias. En su lugar demandan un cambio que el nombre
más ambiguo de Asociación Nacional para Ayudar a Gordxs
esté al nivel de los valores sociales fundamentales, que Estadounidenses. Entonces, como ahora, el objetivo
son vistos como la raí z de las leyes humanas. Estos valores la NAAFA era la total igualdad social y aceptaci
de
no afectan sólo la legislación, afectan también la manera ón de las
personas gordas dentro de la sociedad existente .
en que las personas se ven y se tratan unas a otras en Dentro de la literatura sobre el Orgullo
las interacciones del día a día. Estos valores influyen la estaba disponible a comienzos de los '70, se
Gordx que
imagen que los individuos tienen de sí mismos, alentando encontraba
el libro Poder Gordo (Howltone Books, 1970
actitudes de auto- odio y comportamientos derrotistas en ) de
Llewellyn Louderback. Esta obra innovad
miembros de aquellos grupos a los que la sociedad considera ora document ó
i el aumento de la discriminación a lxs gordxs de la
"inferiores". Este modo de entender la situación fue el del crecimiento de la industria de la dieta.
mano
motor detrás del movimiento de Terapia Radical (Radical argumentaba Louderback, se apoyaban en mayor Ambos ,
.
Therapy), gran precursor del Fat Underground Terapia sobre prejuicios que sobre evidencia médica o medida
resultados
Radical se desarrolló en los primeros años de la década • comprobados.
del ' 70, con un espíritu confrontativo que increpaba
a los profesionales de la salud mental convencional La .
psicoterapia convencional, pone el énfasis en cambiar
a los individuos "inadaptados”; Ixs terapistas radicales
criticaron este abordaje por "culpar a la víctima” . Pedían Prehistoria
"cambien a la sociedad, no a nosotrxs". Lxs practicantes
de la Terapia Radical (o psiquiatrí a radical, como algunxs
la llamaron) se enorgullecían de no tener ninguna i En 1972 un grupo de mujeres de Los Ángeles
acreditación profesional. vLos grupos de apoyo en donde con el Centro de Psiquiatría Radical de contactó
se
articulaban eran también un campo para la formación del Berkeley,
California, para pedirles que las formen como
activismo social. terapistas
radicales. Poco después, formaron el colectiv
Uno de sus conceptos principales era que la opresión o Terapia
Radical y comenzaron grupos de apoyo para
no se cuestiona cuando se "mistifica". O sea, cuando Los Ángeles. Entre ellas estábamos dos
mujeres en
su verdadera naturaleza queda oculta. Los opresores fundadoras del Fat
no dicen: “ Vamos a torturarte hasta que te sometas a ;
Underground, Judy Freespirit y yo .
La teoría sobre la gordura que ense
nosotros” . Dicen (y muchas veces se lo creen): "Este ñaban
i los psiquiatras radicales de Berkeley seguí a entonces
tratamiento puede parecer doloroso e injusto, pero es la corriente
i convencional estadounidense con un toque de
por tu propio bien” . Un ejemplo puede ser la pr áctica i retórica
agregada: Sos gordx porque comés
de “ proteger ” a las mujeres del acoso sexual negándoles demasiado y comés
el acceso a la educación o el empleo en ámbitos
l
A
Cuerpos sin patrones
--
Lí?! i
Cuerpos sin patrones
aprender la Danza del Vientre. Redefinimos la flacidez
en con un s ándwich de jamón. En realidad, Cass había estado
términos que podrían haber salido de la bíblica
Cantar de a dieta al momento de su muerte, y estábamos seguras de
( os Cantares. En palabras de Lynn
: " tu panza es como el
mármol, tus brazos son como el océano”. Reemplazamos que su fallecimiento era consecuencia de complicaciones
a las guerreras amazónicas del feminismo con nuestra producto de su dieta.
s En la celebración por el Día de la Igualdad de la Mujer
propias imágenes de enormes y blandas Madres Tierra
. había un escenario y un micrófono abierto. Cuando llegó
nuestro turno, las integrantes del Fat Underground , las del
Grupo de Apoyo para Mujeres Gordas y algunxs de nuestrxs
amigxs fuimos hacia allá. Llevábamos velas y us ábamos
Una base de apoyo mas amplia brazaletes negros, marchando en un cortejo fúnebre
simbólico. Lynn habló, empezó por describir lo inspiradora
que Cass Elliot había sido para nosotrxs, como gorda que
Para entonces, Terapia Radical se habí a convertido se negaba a esconder su belleza. Finalizó acusando al
en establishment médico de matar a Cass y de (por promover
una fuerza importante dentro de la comunidad femini
sta la pérdida de peso, a pesar de sus riesgos conocidos),
radical local. El RFTC (Radical Feminist Therapy
Collective, Colectivo de Terapia Radical Feminista) cometer genocidio contra las mujeres gordas.
operaba desde el Centro de Liberación de la Mujer. Durante las semanas siguientes, fuimos las heroínas
Judy locales. El periódico feminista de Los Ángeles, Sister ,
y yo éramos activas en el RTFC y la Liberación Gorda
se
benefició por asociación.
En torno a nosotras había crecido un grupo reducido
te dedicó una página completa de su siguiente edición,
a la Liberación Gordx, con una foto de nuestro acto en
de mujeres gordas que, aunque no se la celebración por el Día de la Igualdad de la Mujer en
sentían lo la portada. Públicamente, al menos, las feministas
suficientemente audaces como para unirse al Fat
Underground , reconocían que la Liberación Gordx radicales locales comenzaron a reconocer a la opresión de
tenía las mujeres gordas como un problema que tendrían que
algo importante que decirles y querían manten
erse en tomarse seriamente.
contacto. Para ellas, el RFTC, dio origen a un grupo
de El número de integrantes del Fat Underground aumentó
Apoyo para Mujeres Gordas (Fat Women ' s Solving-
Group). brevemente al incorporarse nuevas personas; entonces,
Los objetivos de este grupo eran ayudar a sus miemb
ros a igual de rápido, nuevos y viejos integrantes abandonaron
dejar las dietas y construir su autoestima . Ideologías, personalidades, prioridades y cambios de
.
En Agosto de 1974, la comunidad feminista de Los
Ángeles realizó una celebración para el Día de La Igualdad parecer de último momento, todos, jugaron su rol en la
de la Mujer, llenando un parque local de pancartas y stands salida. Una de las fundadoras, que se fue, lo explicó: Va a
. “
tomar demasiado tiempo cambiar las ideas que la sociedad
Miles de mujeres se reunieron allí, disfrutando del sol, de
las multitudes y de la atmósfera de hermandad. Entre tiene de la gordura y yo quisiera poner mis esfuerzos en
los
montones de stands había uno del Fat Underground
. .
algo que tenga éxito mientras siga viva Ella se unió
"
Varias semanas antes, había muerto la cantante de rock a otros grupos feministas y continuó promoviendo la
M Cass Elliot, de The Mamas á the Papas . Sólo tenía 33 .
Liberación Gordx dentro de ellos En el otoño de 1974, el
Fat Underground, otra vez, tenía sólo cuatro integrantes:
años. Cass se había convertido en una estrella -un icono
incluso- para nuestra generación, a pesar de ser muy Lynn, Gudrum Fonfa, Reanne Fagan y yo.
gorda. Previsiblemente, la prensa ensució su memo Continuamos dando talleres y leyendo bibliografía
ria. La .
médica Creamos coaliciones con otros grupos feministas
noticia, ampliamente extendida, era que se había ahogado
para planificar actividades por toda la ciudad y asegurarnos
«8
139
i Cuerpos sin patrones
m
- -
- :
de que los intereses de las mujeres gordas fueran tenidos Una mala en esos años: en 1976 docenas de mujeres
en cuenta en ellas. El Colectivo de Terapia Feminista gordas y nuestrxs amigxs le hicimos un piquete a una
á&S
m * ;
Radical formó un segundo grupo de Terapia Radical de
.
importante cadena de televisión, porque, en nuestra
mujeres gordas opinión, tergiversó al Fat Underground en un reportaje
Alrededor de 1975, comenzamos con un nuevo tipo .
sobre pérdida de peso Sin embargo este histórico “ debut ”
: de actividad: asediar instituciones locales dedicadas a la pasó prácticamente desapercibido. A pesar de la gran
pérdida de peso. En una movida ya conocida, asistiríamos difusión previa al piquete, tanto por parte de los medios
a "charlas introductorias gratuitas”, pretendiendo principales como de los alternativos, sólo una periodista
.
querer comprar una dieta que nos cure Pero cuando el .
cubrió él evento Y estaba allí porque era amiga nuestra .
conferencista diese lugar a las preguntas, refutaríamos la
teoría médica del programa y sus porcentajes de éxito. '
-
(Nro. 3, julio 2011)
II
completamente para uso no- comercial promoviendo el empoderamiento
de la diversidad de tallas, siempre y cuando se incluya este comenta
.
rio
M2 143
Cuerpos sin pati'ones
BS
-
Ó
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í . Cuerpos sin patrones
The Fat Underground ya no existe, pero su influencia como La gordura es un asunto del feminismo, o el trabajo
-i ¡ esfundamental. de Chernin Bordo? ¿Por qué no es tan citado en la academia?
; Las redes de lesbianas feministas en los EE UU . . ¿Por qué es casi invisible para la cultura en general?
.
ayudaron a difundir sus ideas Al principio dentro de los Parte del problema es que el activismo gordo pocas
j .
EE.UU , a través de publicaciones y grupos, y después en
todo Occidente a través de la cultura de las feministas de
veces es documentado y suele ser desarrollado por
personas que no tienen el privilegio de difundir ideas con
la Segunda Ola . facilidad o acceder a la academia.
Por ejemplo: en Gran Bretaña, el London Fat Women s
Group (Grupo de Mujeres Gordas de Londres), organizó una
’
conferencia en 1989 que redactó el The Fat Dykes Statement
i (Declaración de las Tortas Gordas), y llevó a cabo muchos
proyectos en la misma línea que The Fat Underground . La fatosphere5 y más allá
m Esta influencia no se limitó a la Segunda Ola La .
Tercera Ola, Ixs queer, muchxs de Ixs cuales se iniciaron
en los feminismos anteriores, avanzaron con estas ideas La falta de documentación está cambiando con
a lo largo de la década de 1990, incorporando las nuevas la aparición de la Fatosphere, una red de blogs
tecnologías. activistas, que poco a poco va creando un archivo
Fat Girl (Chica Gorda), un zine "para tortas gordas y digital en la que los estudiosos del futuro podrán
las mujeres que las desean” aportó una sensibilidad punk éncontrar material para trabajar.La Segunda Ola dél
al desarrollo de la comunidad y la contra-cultura gordxs, y feminismo lésbico no representa actualmente un área
utiliza nuevas redes de difusión para hacerlo, en formatos atractiva de investigación, quizás debido a su histórico
online e impreso. enfrentamiento con los derechos trans y algunas áreas
'i
En la última década, organizaciones de la cultura DIY de experiencia sexual.
(do it yourself, hacelo vxs mismx) queer y feministas, como Por el rechazo de algunos sectores de la doctrina
Ladyfest y Queeruption también apoyaron el activismo feminista anterior, Ixs investigadorxs -y cualquier otra
gordx a través de talleres y performances.
Atlyson Mitchell es una artista y académica canadiense
persona interesada en el desarrollo de una política
feminista de la gordura- ponen todo en la misma bolsa
-
que da clases sobre la Tercera Ola y co fundó el grupo y no ven la oportunidad de comprometerse con una
activista gordx Pretty Porky and Pissed off, tiene una historia y una cultura muy importantes.
estrecha relación con el feminismolésbico de la Segunda Ola Afortunadamente, están surgiendo nuevos grupos de
a través de su proyecto en curso Deep Lez, y recientemente activistas y académicxs gordxs a través de la comunidad
rindió homenaje a la Fat Underground volviendo a poner interdisciplinaria de los Fat Studiesi .
en escena la protesta que realizaron contra la forma en Sydney ha acogido los Fat Studies: en la Universidad
que los medios de comunicación gordofóbicos informaron
sobre la muerte de la cantante Mama Cass Elliott en 1974, 5 N. de T.: Expresión coloquial que proviene del término blogósfera
cuyo fallecimiento, según Ixs activistas, fue el resultado y remite a la comunidad de btogs que publican sobre aceptación y
M de la negligencia médica gordof óbica.
no discriminación de las personas gordas anglopartantes. Decidimos
reproducir la expresión original, ya que no es un fenómeno que suceda
Teniendo en cuenta que el activismo feminista gordx en la realidad latinoamericana del activismo gordo . .
nos ofrece muchas claves para sobrevivir y luchar contra 6 N. de T.: Fat Studies podría traducirse como Estudios sobre gordura
la gordofobia, ¿cómo es que esta otra, la historia rica y o Estudios gordos, elegimos mantener el original en inglés ya que en el
diversa del activismo gordo, no es tan conocida o discutida desarrollo del campo académico latinoamericano no se ha delimitado ni
sistematizado tal perspectiva de análisis.
152 153
V . í
Cuerpos sin patrones
Los n ú meros anteriores de Fat zine est á n disponibles en Por lo general elimino este tipo de cosas porque pienso
Etsy Shop de Max Airborne: la .
que son estú pidas Pero este venía acompañado de la
lo
http: / / www . thescavenger.net /feminism -a - pop
- culture / dirección de mail de quien dejó el comentario, entonces
fat -is -a -feminist-issue-but -whose-feminism- 90645 - 428. googlie. Esta persona es lo que se conoce como troll , y me
html sorprendieron otros dos comentarios que dejó en otros sitios:
soy un verdadero
"Tengo que acordar con el hecho de que gente " y por otro
imbécil, y me encanta hacer enojar a la
lado, “ Soy un mentiroso , me doy cuenta de que me ayuda a
ó n " ¡Tan cierto !
salirme con la mía, y llamar la atenci
Como sea, suficiente con eso .
Me interes ó la esencia
que
de lo que ambos mensajes decían , que podría decir
es algo como esto: si sos gordx no ten é s derecho a hablar
sobre eso, sos una persona fallada y nunca deberías
ser
154
P
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-u- M
SUSP
: m. .
= :
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Cuerpos sin patrones
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ir üi
¡ "Si me miro al espejo y pienso que soy obesx , estoy menos
preocupadx que si pienso que estoy gordx ” , le dijo Milton
a la BBC . Habiendo visto fotos de ella diría que si Milton
Cuerpos sin patrones
m M
Mi
ir a consultar a un especialista en desó rdenes dismórficos
corporales, por lo que presumo que ella simplemente se
figura como se sentiría si fuera una persona con un í ndice
de masa corporal por encima de 30.
a m í misma gorda, sin importar cuá nta gente insista en
que tanto la palabra como mi cuerpo demandan en alguna
medida vergüenza y disculpa. Pero llevará un largo tiempo
antes de que la palabra gordx sea usado en un sentido
Milton cree que la gordura ser ía má s preocupante neutral, por ahora sabemos exactamente lo que la mayor ía
m para ella - aunque sea una palabra generalmente definida de la gente quiere decir con ella: sos desagradable, sin
W como el insulto favorito de Ixs comentadores online
que nunca se han visto en persona , de Ixs escritores
ning ú n valor, no del todo humanx.
Si la Secretaria de Salud realmente cree que este es
de gags para los shows de premiaciones de tercera un modo apropiado para que Ixs médicxs les hablen a sus
categor ía y de gr áciles chicas adolescentes que se pacientes, le recomendaría que eche otro vistazo al espejo
.
sienten culpables por comerse un chocolate Obesidad, y pondere si odiosx o tontx es el adjetivo más preocupante
por otra parte, es el té rmino médico para una condición
que se correlaciona con diabetes tipo 2, enfermedades
para sus oídos.
coronarias, depresión , dolor de articulaciones y un
grave riesgo de ver un d ía a tu cuerpo como ilustración
en un art ículo sobre todo eso enumerado m ás arriba .
¿Có mo puede ser la gordura percibida como un agente
de preocupació n má s poderoso que ese?
La gordura es todav ía una constante del lenguaje de la
verg ü enza -del bravucó n en el recreo, del ex vengativo,
.
del padre que desaprueba - Obesx es una palabra que
la comunidad m édica y los medios han entrelazando
exitosamente con el temor a la discapacidad y a la
mortalidad , pero "gordx ” está entrecruzado con algo
a ú n peor -el miedo de que, mientras permanezcas en
esta tierra , todavía no reclamadx por la espantosa
enfermedad ligada a la obesidad que sin duda te espera,
no serás amadx . Y todo es tu culpa , gorditx.
Milton piensa que esa es la palabra que los. doctores
deber ían usar con sus pacientes. El espectro de la
enfermedad y la muerte no ha sido suficiente para
convertir a las personas gordas en delgadas, así que
es tiempo de sacar las armas grandes . Es hora de que i
Ixs m édicxs empiecen a usar una palabra que significa
mucho má s que “ usted necesita estar consciente de que
hay serios riesgos ” - una palabra que significa , entre
otras cosas, perezosx, fex, glotonx , toscx, descuidadx .
mi
s Cuerpos sin patrones
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Quiero explicar que significa cuando digo
“ la
Cuerpos sin patrones
m
B
- Cuerpos sin pati -ones
saludable o activa . Ser gorda no me hace menos atractiva. debemos ser la ausencia de ellos: blancos, heterosexuales,
En la tele veo a una mujer delgada bailando con un ricos, delgados y hombres. No es realista intentar pasar
hombre fabulosamente guapo, y sobre esta imagen oigo: por alto estas diferencias exteriores ( y por lo tanto sin
“ Nunca antes fui feliz hasta que probé la dieta [ rellene el sentido, ¿verdad ?) , porque a nosotros nos está n lavando
hueco], pero ahora capto la atención de los hombres, y el cerebro del mismo modo que a cualquiera . Y hablando
eso... ¡( sienta tan bien!! No tengo que preocuparme más de este modo no estamos tratando el tema principal . Y
por lo que la gente diga a mis espaldas, porque sé que
; no quiero que me digan: "Sí, eres gorda pero eres bella
estoy estupenda. Debes darte a ti misma la vida que te por dentro” . Esa es tan solo otra manera de decirme que
mereces. Llama a [rellena el hueco], el programa de dieta, soy fea, y de que no hay manera de que sea bella por
¡¡¡y empieza a quitarte kilos ahora mismo!!!” . El programa
fuera. Gorda no es igual a fea , no me vengas con esa . Mi
de la tele me presenta un primer plano de una chica gorda cuerpo soy yo. Quiero que veas mi cuerpo, que conozcas
a llorosa diciendo “ Lo he intentado todo, pero nada funciona. ,
mi cuerpo. La verdadera revolución no proviene cuando
He perdido 9 kilos pero he vuelto a ganar 11. Estoy tan 1 hemos aprendido a ignorar nuestra gordura y a pretender
avergonzada ". La primera vez que vi el anuncio empecé
que no somos diferentes, sino cuando aprendemos a usarla
a llorar y memoricé el n ú mero en la pantalla . Conozco
en nuestra ventaja , cuando aprendemos a deconstruir
ese sentimiento de vergüenza. Conozco ese sentimiento todos los mitos que propagan el odio a la gordura .
de punto muerto, de sentirme un desastre por no perder
Mis amigas delgadas está n siendo constantemente
toda esa “ grasa in ú til". Pero sé que la infelicidad no es el validadas por el feminismo mainstream, mientras yo estoy
resultado de mi gordura. Es el resultado de una sociedad
que me dice que soy mala .
.i siendo ignorada . La idea m á s extendida conforme a la
' : imagen del cuerpo es algo que se puede resumir en estas
¿ Dónde está la revolución? Mi cuerpo es jodidamente
líneas: las mujeres se miran al espejo y piensan “ estoy
bello, y cada vez que lo miro en el espejo me doy cuenta gorda ” , pero realmente no lo son . En verdad, son delgadas.
de ello, y estoy contribuyendo a la revolución. En verdad son delgadas. Pero, creedme, en verdad yo
Siento que en este momento estáis esperando de mí estoy gorda, y de acuerdo con el feminismo mainstream ,
que pruebe que la gordura puede ser bella metiéndome ni siquiera existo. Conozco a mujeres que a menudo se
en descripciones como "muslos de ondulación suave y miran al espejo y piensan que son más gordas de lo que
nalgas llenas” . No lo voy a hacer. No es de mi incumbencia
en realidad son. Y, sí, eso es un problema . Pero al an á lisis
convencerte de que la gordura puede ser atractiva. Me no se puede parar ah í . Hay mujeres que está n gordas,
niego a ser una autodenominada y rellena reina del pomo.
y tenemos que tratar el tema. Má s que tranquilizar a
Eso es trabajo tuyo. la gente diciendo “ No, t ú no estás gorda , simplemente
No es lo bastante bueno que me digas que t ú “ no juzgas tienes curvas ” , quizá s deberíamos desmitificar la
por las apariencias” -y que por lo tanto la gordura no te gordura y tratar con las polí ticas de la gordura como
molesta . Ignorar nuestros cuerpos y "juzgar sólo por lo que , .
un todo Y no quiero decir "quizá s” , quiero decir que
.
tenemos dentro” no es la respuesta Eso parece que encaja
con la misma l ínea de razonamiento que esa brillante
es una necesidad . Una vez que nos demos cuenta de
que la gordura no es "inherentemente mala ” ( y ni
escuela de pensamiento que se llama "humanismo": “ Sólo tan siquiera puedo creerme que esté escribiendo eso
somos personas, así que vamos a ignorar trivialidades como - “ inherentemente mala ” - suena tan rid ículo) , entonces
raza, clase, género, preferencia sexual, tipo de cuerpo y quizá s podamos trabajar en el problema como un todo,
un largo etcétera ” . ¡Y una mierda! Cuanto m ás ignoremos en vez de tratar con una diminuta parte del mismo cada
estos aspectos de nosotros mismos, m ás vergonzosos se vez. Todas las formas de opresió n trabajan juntas así
! convierten y más se refuerzan las expectativas de que que deben ser combatidas juntas.
168 169
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Cuerpos sin patrones
Creo que muchas de las autoras del feminismo gorda. La terapia no va a ayudar, porque no hay nada que
mainstream que dicen tratar el tema lo hacen de un .
curar ¿Cuá ndo pararemos de buscar razones para odiar
I - modo equivocado. Por ejemplo, Susie Orbach con su libro a la gente gorda y empezaremos a comprender que la
Fat Is A Feminist Issue nos dice: no hagas dieta, no trates gordura es algo totalmente natural que no se puede y no
se debe quitar de encima?
i de perder peso, no alimentes a la industria de las dietas.
Pero luego sigue y dice: Pero, si comes bien y haces
ejercicio, ¡¡¡perderás peso!! i Y pienso, vaya, estupendo,
es maravilloso que le haya funcionado, pero se ha perdido
‘
A pesar de lo que he dicho antes sobre mis amigos
diciendo cosas que realmente me hirieron, me doy cuenta
de que son bastante excepcionales. No quiero que parezca
ío - . en el razonamiento. Intenta ayudar a las mujeres, pero que son gente poco cuidadosa o ignorante. Yo estoy
constantemente hablando sobre estos temas, y siento
'
•
entiendo la revolución . No
y negro y yo diciéndote lo
que no es revolucionario. La
avaricia y la codicia capitalista . Perpet úan la opresi ón que es revolucionario y lo ón pero no dentro y por sí
institucionalizada . La gente gorda no son los que est á n escena punk es una revoluci
II
al
oprimiendo a esos pobres y delgaduchos chicos emos . . El feminismo es una revolución, es solidaridad
grrrl
misma ón. Esta es una fat
Este ensayo se supon ía que iba sobre la opresión tiempo que crítica y confrontaci pertenece . Fuckin’ yeah .
a la gordura , que es de lo que siento que he estado revolution . Es m ía pero no me
5
• »¡
que sé que no podría tener en otro lado. Soy capaz
de hacer fanzines, tocar m úsica , hacer actuaciones y
charlas que son intensamente personales para m í. Me
siento muy fuerte no guardando ning ú n secreto. Puedo
volver al viejo cliché de que lo personal es pol í tico, y no
importa cu á n trillado esté, es verdad . He pasado tanto
tiempo sin hablar de ser gorda , sin hablar sobre cómo
afecta mi autoestima , sin hablar sobre cómo la sociedad
me oprime. Ahora estoy hablando. Estoy hablando todo \
el tiempo, y la gente me escucha. Tengo apoyo.
Y al mismo tiempo sé que tengo que ser cautelosa
sobre el apoyo que recibo. Porque pienso que alguna
Caleb Luna
Traducción libre: Nicolás Cuello
m
-
m Enamorarse es peligroso para los chicos morenos porque,
bajo la supremac ía blanca , no somos personas posibles
de ser amadas. Enamorarse es peligroso para los chicos
Hi i morenos porque las personas no nos ven como individuos
posibles de ser amados.
La colonización nos adoctrina dentro de la idealizaci ó n
romá ntica de la delgadez, de la blancura , y de la
masculinidad -en nosotros y en los otros. ¿Cómo puedo
hacer, como gordo, moreno, femenino para descolonizar
mi deseo, y así poder desearme a mí mismo? ¿Cómo puedo
amarme a mí mismo en un mundo que me dice que eso es
imposible? ¿Cómo puedo descolonizar mi deseo para poder
dejar de mirar compulsivamente a ese chico delgadito que
m se reh úsa a verme a mí como la diosa que soy?
Bajo una construcción colonial de la belleza y el deseo,
ser gordo y moreno y queer y femenino significa ser feo.
Significa no sentirse amado, no ser amado, y nadie que
diga lo contrario. Ser gordo y moreno y colonizado significa
valorar, desear, y priorizar el amor romá ntico - un amor
que no te quiere, que nunca te tendrá, y no saber cómo
librarte a ti mismo de ese aparato de captura.
Feo es como me muevo en el mundo, como soy
visto por extra ñ xs, compa ñerxs de trabajo, potenciales
amantes, empleadxs, familia , miembros de la comunidad ,
175
mt
M
Cuerpos sin patrones
doctorxs, profesorxs, trabajadorxs industriales, etc, y esta y blancos se convierte en una sutil profundización de
percepción afecta en cómo soy tratado diariamente. Me
han negado oportunidades laborales por mi cuerpo. No la supremacía blanca y de los privilegios de clase. Los
entro en las cabinas de los restaurantes, en los asientos hombres, especialmente, se ven envueltos en estas
i' de las aviones, o en los escritorios de la escuela -que construcciones, como ha sido evidenciado por numerosos
funcionan como recordatorios constantes de que este memes y algunas imágenes no tan iró nicas, que recuperan
mundo no está construido para acomodarse a m í- .
declaraciones como “ Nada de gordos, nada de femeninos ”
y "Nada de negros y nada de asiá ticos" publicadas en
En el tiempo en el que he desarrollado sentimientos
aplicaciones para encuentros casuales entre tipos queer.
romá nticos por algunas personas en los últimos años, rara La gordura, en las comunidades queer masculinas, parece
vez han sido recíprocos, a pesar de que constantemente, ser sólo deseable en cuerpos peludos y de osos, mientras
esas personas por las que sent ía cosas, han sido amigos que la barba se convierte en la prueba que confirma la
masculinidad desestimando la feminizació n de lo gordo.
muy cercanos, que me aprecian, y quizás incluso, me
aman de otras maneras. Pero no escapa a mi observación Pero, yo puedo localizar mi cuerpo sin pelo en mis propias
que frecuentemente eligen salir con personas flacas y / o
blancas en lugar de salir conmigo, o con personas como raíces ind ígenas, entonces cuando los calificadores de
yo. Entré en mi primera relación romá ntica, poco antes cuá n -oso- uno-es comienzan a evaluar (Barba- panza-pelo
de mis 27 a ños, y no se escapa de mi vista que, para esta en cuerpo) y mi morenitud se ve desplazada por una sola
categor ía, lo que en realidad se está diciendo es “ está
bien ser un hombre gordo, si eres blanco” . Esta es una
edad , muchos de mis pares ya habian tenido numerosas
relaciones. Tampoco pierdo de vista que muchxs de comunidad cuyo racismo y misoginia encubierta me deja
nosotrxs no, e incluso, muchxs quizás nunca .
No quiero decir que ninguna persona gorda o de color desinteresado de participar, pero al mismo tiempo, es el
ú nico lugar donde un cuerpo, incluso remotamente, como
K sea amada o deseada. Por el contrario, veo muchos
ejemplos inspiradores de esto en mi propia comunidad. Sin
el m ío puede ser apreciado o incluso deseado .
h¡ embargo, los sistemas culturales mayoritarios que forman '
Hubo un breve per íodo de tiempo en el que otros
hombres -predominantemente otros hombres gordos
'
a los interconectados sistemas de la supremacía blanca, que no somos bellxs? ¿Qu é significa "la capacidad de ser
gordof ó bica , cisexista y más. Bajo estos sistemas, mi amado” bajo una construcción colonialista del amor y la
cuerpo no puede ser neutral, o er ó tico, o deseado sin ser belleza fundada en la supremacía blanca y el colonialismo?
fetichizado más allá del contexto o del reconocimiento. Bajo estos sistemas, ¿ reclamar por la belleza es radical o
Incluso, mi cuerpo resulta invisible en las miradas asimilacionista? ¿Significa algo diferente para mi cuerpo
alternativas creadas por aquellxs que desean desmantelar gordo, moreno, queer, femenino que para otros? ¿Quién
esos sistemas, que quizá s est én m ás invotucradxs en ellos decide? ¿ Y quiénes son Ixs fexs que estamos dejando atrá s?
de lo que les / nos / me gustar ía admitir o reconocer.
El amor romá ntico, como lo entendemos, es una
construcción colonial. Es un esfuerzo consumista ,
-
posesivo, para - toda - la vida, monogá mico que funciona
para sostener el capitalismo y la supremacía blanca
heteropatriarcal a través de la familia nuclear. Nos dicen
mm que este amor romá ntico es esencial, d á ndole forma
como una profecía satisfactoria. ¿ íbamos a sostenernos a
m nosotrxs mismxs en el amor propio, el amor plat ónico y
el de una comunidad, qué podr íamos cambiar? Podríamos
-- :
ver la belleza de nuestra interdependencia , en lugar de
individuos compitiendo por est á ndares y posiciones de
1 vida a expensas de otros, cada vez más altas. La formación
de familias, en lugar de comunidades, crea jerarqu ías en
donde cierta gente vale m ás y merece nuestra atención ,
protección , y devoción. Con la re -estructuración del amor
HI rom á ntico como comparable a la comunidad / plató nico /
m¿. amor propio, empezamos a dar prioridad al cuidado y
- al sustento de grandes grupos de personas igualmente
i importantes a nuestras parejas rom á nticas.
En su pieza "Moviéndose a través de lo feo: una polí tica
S
'
-
mm
mas allá de la deseabilidad ” , Mia Mingus nos empuja a
trascender el binario de la belleza , y movernos a través
wm
mm de lo que ella denomina , magn íficamente, un abrazo a lo
feo y a la diversidad del cuerpo -de cada cuerpo. Mingus
m entiende la belleza como una construcción inherentemente
excluyente que borra a las personas de color, a las personas
:
: trans y a aquellos disidentes del género y personas con
diversidad funcional específicamente. Con esto en
mente, todavía estoy trabajando en lo que significa ser
feo y ser bello, y en entender mejor mi relación con la
belleza . Si "no ser bello” significa no ser o no sentirse
sam “ merecedor de amor ” y si el “ merecer amor ” constituye
mm una dimensión de lo humano, ¿qué significa para aquellxs
mm 178 179
i
Cuerpos sin patrones
5 181
|¡gill I
Cuerpos sin patrones
Charlotte Cooper: Psicoterapeuta, trabajadora
bailarina e investigadora para-académica Gorda. cultural,
. Lucrecia Masson: Activista feminista . Sudaka y gorda
de la gordura desde hace décadas. Activista en descolonización . Pasó su infancia entre vacas y cardos
de fanzines, blogs, m úsica ( toca con su
Bailarina, hacedora rusos, un día dijo que quería ser bailarina y sus padres, que
banda queercore
Homosexual Death Drive) y libros como “ Fat and sabían sobre el mundo, le dijeron que el cuerpo no le daba.
The Politics of Size ” , 1998 y “ Fat Activism: Proud: Má s tarde cruzó el charco y ya en las europas se enteró que
A Radical Social hasta las personas pod ían ser ilegales. Actualmente, ya en
Movement ” , 2016. Para más información, ver:
charlottecooper. net / http: / / Barcelona y con los papeles en regla , dialoga y acciona en
torno a corporalidades disidentes y afectos, apostando por
¡! generar alianzas desviadas y por asumir la tarea colectiva
de darnos existencias m ás posibles y felices.
mMim m m
en La Plata , después mudarse a Rivera (el pueblo de sus
padres ) , después volver a La Plata , convertida ella misma
en estudiante del interior y después, otra vez a Rivera,
donde actualmente reside.
HI
s el sello editorial Sentimientos de Urgencia, entre muchas
otras iniciativas afectivo- polí tico-académicas.
\
mm
en 1999. “ Anthem ” fue seguido por su á lbum "Effigy” ,
grabado en 2002 y publicado en 2003. Su web oficial:
http: / / www.nomylamm. com /
mm.
Si
mm&t
.
Cuerpos sin patrones
i >
INDICE
Pró logo
Por Mauro Cabral 9
i
Introducci ó n
Por Laura Contrera y Nicol á s Cuello 15
diagram ático
.
1 Multitudes gordas sudakas en contacto
¡s
iji 1.1 .
Cuerpos sin patrones, carne indisciplinada .
Apuntes para una revuelta gorda contra la polic ía de la
normalidad corporal
Por Laura Contrera 23
/
f .
1.2 ¿Podemos Ixs gordxs hablar?: activismo, imaginación
y resistencia desde las geograf ías desmesuradas de la carne
Por Nicolás Cuello 37
f; .
1.3 El cuerpo como espacio de disidencia
1m
' ' Por Lucrecia Masson
.
1.4 ¿ A qu é edad fue tu primera Dieta ?
Por Lux Moreno
55
59
2; 1.5 Lesbianas gordas, bellas y fuertes
1 Por Canela Gravita 69
i .87
^ I: ; .
,
Ciie / 'possiii patrones
1.6 Alejandra Pizarnik y la delgadez como combate 2.7. Gorda, sí . Avergonzada , no 159
constante Por Kate Harding
Por Laura Contrera 77
2.8. Es una gran revolución gorda
..... 163
:
; :
7; .
2 Traducciones, tráficos , reapropiaciones
mm
ü-
2.1. La vida en el fat underground
ii Por Sara Golda Bracha Fishman 131
» .
2.5 ¿Quién habla por la gente gorda ?
Por Charlotte Cooper 155
a 2.6 . Necesito que seas feliz asi puedo sentirme
tranquilx con tu opresió n
Por Charlotte Cooper 157
189
V
1