Características del terapeuta racional emotivo conductual

Es importante tener en cuenta las características deseables de un terapeuta que

practique esta terapia, dado que los terapeutas que quieren utilizar la TREC, deben
poseer la filosofía para la vida racional que el modelo de Ellis propone, o al menos
sentirse cómodos con ella. De no hacerlo así el cambio que se produciría en el
cliente, aunque estemos utilizando las técnicas racionales emotivas, sería una
cambio más superficial y no tan profundo como el elegante cambio que Ellis
propone que se consigue al seguir de forma ortodoxa su terapia. Las características
que describirían a un buen terapeuta dentro de este modelo son:

● Alto nivel de inteligencia

● Un interés vital en ayudar al cliente usando muchos métodos
● Ser competente y no buscar a toda costa la aprobación del paciente
● Utilizar los métodos de la terapia en su propia vida
● Mucha energía y determinación para atacar las ideas irracionales de los
clientes
● La convicción de que el método científico no sólo sirve para la investigación
sino para resolver los problemas humanos
● Los terapeutas deben mantener un estilo activo y directivo bastante fuerte,
aunque se debe de regular según el tipo de paciente
● Saber tomar riesgos
● Saber cómo seguir los métodos educativos y de prescripción de tareas que
se expondrán más adelante
● Debe lograr un balance o equilibrio entre empatía, calor y aceptación.

Respecto a las características negativas de un terapeuta racional emotivo son igual

de importantes. Dichos aspectos son los siguientes:

● Ir muy rápidos en la terapia

● Forzar mucho al cliente
● Saltar de un problema a otro sin acabar de tratarlo
● Tratar sólo síntomas de primer orden y no de segundo orden, por ejemplo, el
miedo al miedo
● Establecer una mala relación terapéutica, ser fríos, manifestarse de forma
hostil y no aceptar de forma incondicional al cliente
● Tener una baja tolerancia a la frustración
● No saber disputar bien. Por ejemplo, discutir inferencias y no las
evaluaciones, es decir, no se discute la tiranía de los “debo”
● No evaluar adecuadamente las habilidades sociales de los clientes cuando se
les pide que realicen determinadas tareas
● Guiarse sólo por sus hipótesis y no escuchar a los clientes
● Ser muy simplistas tratando un problema, ignorando su conexión con otros
problemas del paciente
● Querer enseñar a los clientes a estar tranquilos ante los problemas cuando,
por ejemplo, lo que se les debe enseñar es a estar moderadamente tristes
 ● Reconocer B, el nivel de creencias irracionales, pero no saber reconocer el
nivel A, de hechos activadores, ni las interacciones entre los niveles A B y C
● Dar mucho consejo al cliente y resolverle sus problemas, pero sin entrar a
debatir lo irracional de sus actitudes
● Centrarse en los aspectos cognitivos y no en los métodos emotivos y
conductuales que como veremos más adelante tienen el mismo nivel de
importancia dentro del modelo de Ellis

De manera que una buena sesión en terapia racional emotivo conductual debe
poner en práctica una serie de variables, generales o específicas de los terapeutas,
así como fomentar una extraordinaria y muy buena alianza terapéutica, saber
evaluar adecuadamente lo que se está haciendo en la terapia y sobretodo saber
poner en práctica las tácticas deseadas para el cambio. De esta manera, surgen
otros aspectos adicionales del terapeuta en la TREC:

● Interés por nosotros mismos

● Interés social
● Ser capaces de dirigirnos a nosotros mismos
● Alta tolerancia a la frustración
● Flexibilidad
● Aceptación de la incertidumbre
● Compromiso con logros creativos
● Pensamiento científico
● Aceptarnos a nosotros mismos
● Tomar riesgos cuando sea necesario
● Hedonismo a largo plazo
● No seguir utopías
● Ser responsables de nuestro propio trastorno emocional