El Capital: Capitulo IV

Transformación del dinero en capital

Karl Marx
Mauricio González Velázquez

Primeramente, entramos a este capítulo diferenciando la circulación mercantil y el

comercio, una gran diferencia es que el inicio de la circulación mercantil inicia con
una mercancía, como en otras ocasiones que ya lo discutimos como M-D-M, el
productor que tiene una mercancía, la vende y recibe dinero con el cual compra otra
mercancía. En cambio, el comercio, que por ahora lo llamaremos así inicia desde el
dinero con otra fórmula que veremos después.

Este dinero que entra en el mercado mediante determinados procesos termina

transformándose en capital, el dinero solo se diferencia del capital por su manera
distinta de circulación.

La nueva fórmula del dinero es D-M-D esto se traduce en comprar para vender, el
dinero que lleve este flujo se convierte en capital.

En este proceso entran tres personas en el proceso, hay un comprador y un

vendedor, pero además de eso la última persona participante en este proceso
cumple una doble función la de comprar para posteriormente vender.

La tercera persona del proceso lanza a la circulación en el mercado dinero al

comprar la mercancía, pero después lo retirara del mercado vendiendo esta misma
mercancía, esto quiere decir que adelanta el dinero para después obtenerlo de
nuevo.

Esta es una diferencia del dinero con el capital, el capital se genera revendiendo las
mercancías para así generar completamente el ciclo D-M-D que el autor nombra
como reflujo, esto es algo lógico ya que el capitalista está revendiendo la mercancía
dándole de nuevo fluidez en el mercado.
Como el inicio de este flujo es el dinero y termina en el su motivación y objetivos
son determinados por el valor de cambio.

El dinero solo puede distinguirse de otra suma de dinero por su magnitud por lo
tanto el proceso D-M-D no tiene nada que ver con diferencias cualitativas sino a sus
diferencias cuantitativa, entonces los objetivos son sustraer de la circulación del
mercado más dinero del que se arrojó.

Aquí es donde el autor por primera vez la formula del capital, que en realidad es D-
M-D´ esto es casi lo mismo que lo que ya había explicado, se compra una mercancía
y se vende de nuevo pero esta fórmula nos dice que D´ es una cantidad de dinero
aumentada, por lo tanto al vender la mercancía se obtiene una cantidad aumentada
al costo por la cual se compró la mercancía a esto Marx lo denomina “plus valor”.

En el proceso el valor inicial de la mercancía se mantiene en circulación y no solo

eso, sino que obtiene un plusvalor que al final se transforma en capital.

El responsable de este ciclo es el capitalista, que su único objetivo es el movimiento

interminable de la obtención de ganancias, seguir este proceso y acumular más y
más dinero.

Esto no se trata en sí mismo de la mercancía, es más una trasmutación del valor

que al cambiar de mercancía a dinero modifica su magnitud mediante el plusvalor
ya antes mencionado.

Ahora bien, la premisa es detectar por qué este ciclo le aumenta valor a las
mercancías, primeramente no podemos pensar que los vendedores venden sus
productos a más alto precio que su valor ni porque los compradores adquieran las
mercancías por debajo de su valor.

Al igual debemos entender que cambios de mercancías equivalentes no genera

plusvalor.

Por ende, el valor agregado tiene que suceder fuera de la circulación y como es fácil
de deducir por lo anterior que ya hemos visto se genera a través del trabajo, esto
es lógico incluso solo mirando la definición de valor “Cantidad de trabajo
socialmente necesaria para la producción de una mercancía”

Entonces se agrega trabajo a la mercancía ya antes adquirida, el autor da el ejemplo

de que primeramente se obtiene cuero y el trabajo agregado se obtiene al
transformar el cuero en botines, la mercancía primera se transforma y se vende
como la mercancía obtenida después de haber pasado por este proceso.

Pero el plusvalor no se obtiene mágicamente aquí entra otra parte de las

mercancías obtenidas, primeramente, esta otra parte es la fuerza de trabajo, que
como ya se ha explicado en ocasiones anteriores es proporcionada por el obrero a
cambio de un salario para que este pueda sobrevivir y además seguir produciendo
obreros mediante la procreación.