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~JORGE ICAZA~

TEMA:

JORGE ICAZA

CURSO: LITERATURA LATINOAMERICANA II

DOCENTE: INDALECIO SANTISTEBAN FLORES

INTEGRANTES:
SURCO YUPANQUI, MISHEL
SUTTA SALAS, ODETH PILAR
ÍNDICE

BIOGRAFÍA ........................................................................................................................................ 4
OBRA LITERARIA .............................................................................................................................. 6
PUBLICACIONES ............................................................................................................................... 7
TEATRO ........................................................................................................................................... 7
NOVELA ........................................................................................................................................... 7
CUENTO ........................................................................................................................................... 7
ANÁLISIS DE LA OBRA HUASIPUNGO ......................................................................................... 8
ÉPOCA: ............................................................................................................................................ 8
ESTRUCTURA ................................................................................................................................... 8
RESUMEN .......................................................................................................................................... 9
ESPACIO ........................................................................................................................................ 13
PERSONAJES.................................................................................................................................. 14
TEMAS ........................................................................................................................................... 14
FRASES ............................................................................................................................................. 15
CRONOLOGÍA BIO-BIBLIOGRÁFICA DE JORGE ICAZA ............................................................ 15
CONCLUSIÓN.................................................................................................................................. 20
BIBLIOGRAFÍA ................................................................................................................................. 21
BIOGRAFÍA

Jorge Icaza Coronel (Quito, 10 de junio de 1906 - Ib., 26 de mayo de 1978) fue un novelista
Ecuatoriano. Después de graduarse en la Universidad Central del Ecuador, en Colombia
trabajó como escritor y director teatral. Ya había escrito seis obras teatrales, cuando en
1934 fue publicada su más célebre novela, Huasipungo, que le daría fama internacional y
que lo llevaría a ser el escritor ecuatoriano más leído de la historia republicana. Es
considerado junto con el boliviano Alcides Arguedas y los peruanos Ciro Alegría y José María
Arguedas como uno de los máximos representantes del ciclo de la narrativa indigenista del
siglo XX. Era conocido como el Ñaño.
Cuando tenía tres años, muere su padre, José Antonio Icaza Manzo. Así que fue llevado a la
Hacienda Chimborazo, en la provincia del mismo nombre que era propiedad de su tío
materno, Enrique Coronel. Así entró en contacto con la realidad social ecuatoriana que
marcó toda su obra. La cercanía con los indígenas lo hizo muy sensible a esa realidad de
sometimiento y pobreza. A los seis años, su madre, Amelia Coronel Pareja se casa en
segundas nupcias y lo abandona. La familia Salazar Gómez lo acoge, y luego su madre se
traslada de nuevo a Quito. Estudió en el colegio San Gabriel, regentado por los padres
jesuitas, pero se graduó finalmente en el Instituto Nacional Mejía, de carácter público.
Se decidió a estudiar Medicina en la Universidad Central del Ecuador, pero luego de la
muerte de su padrastro y su madre, abandonó la carrera. Después de abandonar los
estudios de medicina, hizo algunos cursos de declamación y se convirtió en actor, en 1927
inicia sus estudios de arte dramático en el Conservatorio Nacional de Quito, se inició como
autor dramático, pero sus obras no tuvieron éxito, excepto tal vez Flagelo (1936). Cuenta
23 años cuando escribe la primera pieza teatral. Tal vez el argumento más convincente a
favor de la rebelión de Icaza es que la miseria del indio es incesante; el sufrimiento del
indígena en sus relatos aún persiste. Se convierte en actor, lo que le dio la oportunidad de
recorrer el Ecuador y constatar la situación infrahumana del indio. En 1936 contrajo
matrimonio con la actriz Marina Montoya, con quien procreó dos hijas, Cristina y Fenia
(traducción al francés de Huasipungo). Alcanzó plenamente la fama con sus obras narrativas
siempre encaminadas hacia la situación social y vital del indio ecuatoriano.
Fue el representante de la novela indigenista. Tras licenciarse, fue actor teatral y
dramaturgo, y sobrevivió trabajando para el departamento de Hacienda de su país. En 1933
su obra teatral El dictador recibió duras críticas de las autoridades, por lo que comenzó a
escribir novelas y, aunque abrió una librería, nunca abandonó su cargo gubernamental. Fue
lector entusiasta de los grandes novelistas rusos, desde Gogol a Tolstoi y Dostoievski. En
1944 formó parte del grupo de fundadores de la Casa de la Cultura Ecuatoriana y luego fue
enviado a Buenos Aires como agregado cultural; allí permaneció hasta 1953. Al regresar a
su país, fue nombrado director de la Biblioteca Nacional de Quito.

La fama de Jorge Icaza se debe a su obra narrativa, que comenzó con el libro de
cuentos Barro de la Sierra (1933), en la que ya se hace patente el tema que atravesó todos
sus escritos: la situación del indio ecuatoriano. En 1935 ganó el Premio Nacional de
Literatura en su país con la novela En las calles (1935); en ella narra la situación del indio
perdido en la ciudad, lugar donde sus protestas se esfuman sin alcanzar nunca las altas
esferas del gobierno.
Icaza es una figura sobresaliente del indigenismo en la narrativa ecuatoriana: en su primera
novela, Huasipungo (1934), expone la degradada situación en que se encuentran los indios,
sometidos a esclavitud por los patronos que cuentan con el apoyo de la autoridad civil y
eclesiástica; este libro, de valiente denuncia social y crudo realismo (constantes de la
narrativa de Icaza), se ha convertido en una obra fundamental en la evolución de la
corriente indigenista del Ecuador. Con él, la novela ecuatoriana entra de lleno en la
tendencia del compromiso social de la novelística actual.
Probablemente la cúspide de su elaboración artística la consiguió Icaza en la obra Cholos,
que enfoca la transformación del cholo en burgués, ahondando en la sicología de los
personajes; éstos alcanzan en la novela independencia con respecto a la problemática social
que subyace de sus vidas, al mismo tiempo que en sus páginas se aprecia una comprensión
de la problemática andina.
Otras obras destacadas son Huairapamuscas (Los hijos del viento, 1947); Seis veces la
muerte (1953), colección de cuentos de rico contenido humano y de mayor originalidad en
los temas; El chulla Romero y Flores (1958), descarnada presentación del conflicto de este
personaje ante la disyuntiva de pertenecer al mundo de los blancos o al mundo de los indios,
viéndose en definitiva rechazado por ambos; Viejos cuentos (1960) y la
trilogía Atrapados (1972).
La publicación de su primera novela, Huasipungo (1934), Es la novela indigenista. Crítica
despiadada de los abusos del capitalismo y de la explotación de los indígenas, fue recibido
con desagrado por las clases más pudientes de la sociedad ecuatoriana y por la Iglesia, y
muchos lo criticaron afirmando que era un libro pobremente construido y escasamente
interesante, mientras que otros alabaron la fuerza y la belleza del lenguaje, y su maestría a
la hora de describir los ultrajes a los que eran sometidos los pueblos indígenas.
Jorge Icaza utiliza abundante léxico indígena, lo que obliga a leer la obra con ayuda de un
vocabulario. Entre sus novelas destacan En las calles (1935) y El chulla Romero y Flores
(1958).
Numerosas instituciones académicas han reconocido su esfuerzo, como lo demuestra el
hecho de haber sido invitado a impartir numerosos seminarios y conferencias por todo el
mundo.
Ocupó numerosos cargos diplomáticos y entre 1973 y 1977 fue embajador en la Unión
Soviética, Polonia y la República Democrática Alemana. Fue agregado cultural del Ecuador
en Buenos Aires y director de la Biblioteca Nacional. Viaja por China, Checoslovaquia, Italia,
Francia, Brasil, Cuba y la Unión Soviética.
Su vida de dramaturgo y escritor la alternó con el desempeño de diversos cargos públicos y
diplomáticos entre 1973 y 1977, dichos ejercicios le permitieron viajar dentro y fuera del
país, lo que le dio la posibilidad de adquirir nuevas experiencias que más adelante plasmaría
en varias de sus obras.
Su obra más conocida, Huasipungo, sufrió varias ediciones y reescrituras hasta su versión
definitiva en 1960. En 1935 fue galardonado con el Premio Nacional de Literatura de
Ecuador.
Fue galardonado en su país con el Premio Nacional de Literatura gracias a la novela
titulada “En las calles”.
Jorge Icaza falleció en Quito el 26 de mayo de 1978, a los 71 años, a causa de cáncer a los
huesos. La velación de sus restos se realizó el 27 de mayo de 1978 en la Casa de la Cultura,
y su inhumación en el Cementerio Mariano Rodríguez de El Batán. Su muerte conmocionó
a todo el Ecuador y causó profunda tristeza en diversos países, pues con su defunción se
perdió a una de las figuras más ilustres de la literatura hispanoamericana.

OBRA LITERARIA

Su fama se debe a su obra narrativa, que comenzó con el libro de cuentos Barro de la sierra
(1933), en la que ya se hace patente el tema que atravesó todos sus escritos: la situación
del indio ecuatoriano. En su primera novela, Huasipungo (1934), expone la degradada
situación en que se encuentran los indios, sometidos a esclavitud por los patronos que
cuentan con el apoyo de la autoridad civil y eclesiástica. Este libro, de denuncia social y
crudo realismo (constantes de la narrativa de Icaza), se ha convertido en una obra
fundamental en la evolución de la corriente indigenista del Ecuador. Con él, la novela
ecuatoriana entra de lleno en la tendencia del compromiso social de la novelística actual.
Además de la primera edición de 1934, la novela Huasipungo fue reescrita en 1953 y 1960,
con la última edición quedando como la definitiva del autor. Es la obra que le ha dado más
fama internacional. Pasó también por dos traducciones al inglés, además de traducciones a
otros idiomas. En 1935 ganó el Premio Nacional de Literatura en su país, con la novela En
las calles (1935); en ella narra la situación del indio perdido en la ciudad, lugar donde sus
protestas se esfuman sin alcanzar nunca las altas esferas del gobierno. Falleció en Quito el
26 de mayo de 1978.

PUBLICACIONES

TEATRO

 ¿Cuál es? y Como ellos quieren. Quito, Editorial Labor, 1931.


 Sin sentido. Quito, Editorial Labor, 1932.
 Flagelo. Quito, Imprenta Nacional, 1936.

NOVELA
 Huasipungo. Quito, Imprenta Nacional, 1934 (este texto, en ediciones posteriores,
sufrirá importantes modificaciones).
 En las calles. Quito, Imprenta Nacional, 1935.
 Cholos. Quito, Editorial Sindicato de Escritores y Artistas, 1937.
 Media vida deslumbrados. Quito, Editorial Quito, 1942.
 Huairapamushcas. Quito, Casa de la Cultura Ecuatoriana, 1948.
 El Chulla Romero y Flores. Quito, Casa de la Cultura Ecuatoriana, 1958.
 En la casa chola. Quito, Anales de la Universidad Central, 1959.

CUENTO

 Barro de la Sierra. Quito, Editorial Labor. De este libro, compuesto por seis cuentos
(cachorros, Sed, Éxodo, Desorción, Interpretación y Mala pata, en ediciones
posteriores sólo se conservarán los tres primeros, siendo Éxodo reformado en
profundidad, conservándose sólo el título del original.
 Seis relatos. Quito, Casa de la Cultura Ecuatoriana, 1952.
 Relatos. Buenos Aires, Editorial Universitaria, 1969.
 Atrapados y El juramento. Buenos Aires, Losada, 1972.
 Barranca Grande y Mama Pacha, Plaza y Janés, 1981. Barranca grande ; Mama
Pacha: dos breves obras maestras del mayor novelista ecuatoriano
 Recopilaciones, selecciones, antologías
 Obras escogidas (cuatro novelas y ocho cuentos, algunos de ellos con importantes
modificaciones sobre sus primeras ediciones). México, Aguilar, 1961.
ANÁLISIS DE LA OBRA HUASIPUNGO

"Huasipungo", (1934), obra que obtuvo el Premio de Novela Latinoamericana, convocado


por la revista América de Buenos Aires. "Huasipungo" ha sido traducida a más de veinte
idiomas. Ediciones San Santiago con 121 páginas y un Glosario.

ÉPOCA:

Realismo social: Es una representación objetiva de la realidad su nacimiento se enmarca


durante un proceso de transición económico y social; económico: por que las relaciones de
producción estaban cambiando de Sr. latifundista-esclavo a una nueva clase de burguesía y
a una nueva clase de producción de obrero, es decir que se da un periodo de transición que
va desde finales de la esclavitud a principios del precapitalismo.

ESTRUCTURA

 EXPOSICIÓN: Centrada en la sierra central de Ecuador, hace referencia al entorno


de la hacienda; nos cuenta la historia de sus ocupantes, el amo venido buscando
recuperar su protagonismo en la región creando obras para ir explotando madera,
el sufrimiento de sus indios, obligados a trabajar para favorecerlo a él en base a
nada, y no recibir sino castigos y azotes.
 DESARROLLO: Los indios sufren, luchan, mueren, son explotados, maltratados; en la
obra llama la atención el pasaje en que unos comuneros roban un toro muerto y
enterrado por el patrón, lo sacan para comer, pues se mueren de hambre al no tener
que producir en sus chacras o en las tierras del patrón para los que ellos trabajan.
Ese robo acarrea la muerte, y además de eso, el robo es tratado como un acto tan
criminal que les niegan el poder ser tratados como cristianos, sufren por una religión
que no es la de ellos, con una iglesia representada en la obra con un cura que
incumple los preceptos de pobreza, de amor al prójimo que es capaz de todo por
hacer ver que el es el cura y los demás pobres seres sin alma, sólo él y el blanco
tienen alma y son algo. El indio no.
 DESENLACE: Causa admiración y pena el final, es poderoso, y desgarrador, el primer
enfrentamiento con el patrón blanco para que no les roben sus tierras, termina en
muerte, en desolación, el grito final reclamando lo suyo, es algo que llega al alma,
no como lo hecho por los indígenas en el mes de enero.
RESUMEN

“Huasipungo” cuenta una cruenta, y quizás verídica, historia de “progreso”. La novela


comienza en Quito, Ecuador. Don Alfonso Pereira, caballero de la alta sociedad, se
encuentra preocupado por sus problemas. Además de cuantiosas deudas, su mayor
problema es ahora que su hija, Doña Lolita, de diecisiete años, ha quedado embarazada.
Caminando por las calles de Quito, Don Alfonso se encuentra con su mayor acreedor, el Tío
Julio, quien lo invita a tratar asuntos importantes en su despacho, un gabinete con puerta
de cristales escarchados y amplios divanes para “degollar cómodamente a las víctimas de
los múltiples tratos y contratos de la habilidad latifundista”. Incómodo, Don Alfonso trae a
colación su deuda, pero el Tío Julio lo interrumpe proponiéndole un negocio que los hará
“millonarios a todos”. El pariente le informa a Don Alfonso que Mr. Chapy, el Gerente de la
explotación maderera en Ecuador, y él mismo han explorado Cuchitambo, la hacienda de
Don Alfonso, y han descubierto que contiene excelentes maderas. Esas maderas podrían
utilizarse para abastecer de durmientes los ferrocarriles de Ecuador y también para
exportar. El Tío Julio continúa informando a su sobrino de los pormenores del negocio. Mr.
Chapy pondrá la costosa maquinaria necesaria para la tala. Don Alfonso tendrá que hacer
mejoras a su hacienda, específicamente varios kilómetros de carretero para automóvil
entre su hacienda y el pueblo, comprar bosques lindantes y limpiar de huasipungos las
orillas del río. El Tío Julio va a ayudar económicamente a Don Alfonso para que lleve a cabo
las obras requeridas.
Don Alfonso se sorprende al oír que su tío espera que él mismo vaya a su hacienda y dirija
la obra. Se siente especialmente receloso con la orden de limpiar de huasipungos las orillas
del río. Los huasipungos (huasi, casa; pungo, puerta) eran parcelas de tierra que otorgaba
el dueño de la hacienda a la familia india en parte de pago por su trabajo diario.
Despectivamente, Don Alfonso informa a su tío que “los indios se aferran con amor ciego y
morboso a ese pedazo de tierra que se les presta (…) en medio de su ignorancia, lo creen
de su propiedad (…)”. Para el Tío Julio todo eso es sentimentalismo, los indios sólo son
importantes para la empresa por el trabajo que pueden aportarle. Cuando Don Alfonso
argumenta que su hacienda no tiene suficientes indios, su tío le recuerda que los indios
(peones) se encuentran incluídos en los bosques que tienen pensado adquirir.
Al salir del despacho del Tío Julio, Don Alfonso recuerda el problema de su hija Lolita, a sus
ojos, la niña inexperta en el amor, engañada por un cholo (un mestizo de indio y blanco).
Piensa en la vergüenza, en el qué dirán, y toma la decisión de salir de Quito hacia la
hacienda, acompañado por su esposa e hija. Ni los parientes, ni los amigos, ni la sociedad
capitalina pueden dudar de los motivos puramente económicos que obligan a los
personajes a dejar la ciudad.
Luego del lento viaje en tren, llegan a una pequeña estación perdida en la cordillera donde
los esperan indios y caballos. El viaje continúa a caballo para la familia, a pie para los indios,
bajo la llovizna. Cuando los caballos se niegan a avanzar por los senderos resbaladizos y
enlodados, agravados por las últimas tempestades, los miembros de la familia Perira pasan
de las bestias a ser cargados por las espaldas humildes de los indios. El grupo llega al pueblo
de Tomachi al atardecer. El pueblo es descripto como un “nido de lodo, de basura, de
tristeza, de actitud acurrucada y defensiva” debido al invierno, la miseria y la indolencia de
la gente.
En la hacienda los espera Policarpio, el mayordomo. Después de dejar todo arreglado en la
casa de los patrones, los indios que sirvieron de guía y animales de carga a la caravana van,
a través de tortuosos caminos, en busca de su huasipungo.
El indio Andrés Chiliquinga no toma la ruta que le llevaría a la casa de sus padres. Su padre
murio de cólico hace unos años y su madre vive con tres hijos menores y un ocasional
compadre que aparece y desaparece por temporadas. El indio Chiliquinga vive desde hace
aproximadamente dos años “amañado” (conviviendo maritalmente antes de la unión
“civilizada”) con Cunshi. El burló la vigilancia del mayordomo y desobedeció las reglas del
sacerdote del pueblo, quienes pretendían que él se casara con una india joven del pueblo.
Pero el indio Chiquilinga los desafió, construyó su huasipungo en el filo de la quebrada
mayor, se fue a vivir con la india Cunshi y tuvieron un hijo. Nadie los molestó, pero la llegada
del amo a la hacienda inquieta al indio.
Don Alfonso adquiere la costumbre de ir al pueblo durante el largo invierno, en los días en
los que no llovizna. Una vez en el pueblo, se toma una copa de aguardiente puro con jugo
de limón y oye la charla de Jacinto Quintana, teniente político, capataz y cantinero, y su
esposa Juana. Los paseos del dueño de Cuchitambo terminan generalmente en el curato. El
cura y el terrateniente hablan de patria, progreso, democracia, moral y política. Don Alfonso
brinda al sacerdote una amistad y una confianza ilimitadas, el párroco al mismo tiempo que
brinda gratitud y entendimiento cristianos, forma una alianza con el amo del valle y todos
sus poderes materiales y espirituales. Durante una de esas charlas planean el negocio de
Guamaní y los indios que habitan esas tierras que serán parte de la transacción.
La hija de Don Alfonso da a luz un varón cuyos problemas empiezan cuando la madre no
puede amamantarlo más. Sin embargo esto no es un problema para los señores de
Cuchitambo quienes simplemente ordenan a varias indias jóvenes y robustas, que se
encuentran amamantando, presentarse en la casa. Se ordena a la india elegida para
amamantar el recién nacido a dejar su propio hijo con Policarpio, el mayordomo. Luego de
pocas semanas el hijo de la india muere, desatendido y desnutrido, y ella abandona la casa
durante la noche. Una nueva nodriza es seleccionada entre las indias con hijos pequeños.
Las indias, sabiendo que la que sea seleccionada para amamantar al “señorito” será bien
alimentada en la hacienda, se pelean por ser elegidas para salir de la miseria y del trabajo
diario de largas horas.
El trabajo de desmonte comienza en Guamaní, dirigido por el “Tuerto” Rodríguez. Policarpio
selecciona indios jóvenes que deberán recorrer horas a pie para llegar a la Rinconada y
quedarse ahí hasta finalizar el trabajo. El indio Chiliquinga es uno de los elegidos para el
trabajo. Desesperado decide hacer el largo camino de vuelta todas las noches para dormir
unas pocas horas con su india. El “Tuerto” Rodríguez descubre la verdad tras “amonestar”
al indio con puñetazos y patadas debido a su tardía llegada una mañana. Sigue volviendo el
indio a su huasipungo todas las noches pero una noche lo encuentra vacío. Cunshi ha sido
elegida por la Señora Blanquita como nodriza para el “niñito”. El indio Chiliquinga vuelve al
trabajo lleno de amargura y rabia. Uno los achazos certeros y fuertes producto de su enojo
resbala y se clava en parte en la carne y en los hueso del pie del indio, que sin atención
médica, queda cojo de por vida. El defecto lo desvaloriza enormemente en el trabajo, pero
los señores, por caridad, consienten en darle trabajo cuidando día y noche la sementera
grande.
A mediados de verano vuelven las patronas a la ciudad. Para ellas sus problemas están
solucionados, el honor de Doña Lolita restaurado y Doña Blanquita convertida en madre. El
Tío Julio y los negocios de los gringos obligan a Don Alfonso a volver a la hacienda.
Jacinto Quintana y su esposa Juana esperan a Don Alfonso en Tomachi. Atienden al
hacendado, le sirven comida y bebida. El párroco es invitado a reunirse con Don Alfonso y
Jacinto. Con el alcohol consumido va aumentando la sinceridad, el coraje y la fantasía del
diálgo de los tres hombres. El tema de conversación es la construcción de veinte kilómetros
de carretera con “mingas”(trabajo colectivo). Enumeran patrón, religioso y autoridad los
posibles “mingueros” (quien trabaja en la minga en forma gratuita). La conversación
despierta la codicia de Don Alfonso que exige a Policarpio las laderas aradas y sembradas
en una semana. El mayordomo objeta que es primero necesario limpiar el cauce del río pues
puede crecer e inundar los huasipungos en las orillas, pero Don Alfonso, despectivamente,
indica que los indios pueden “levantar las chozas en los cerros” el año próximo.
Se organiza una fiesta para comenzar la obra del carretero. La muchedumbre entusiasmada
se lanza cuesta abajo, y al llegar a donde están los indios, cada cual toma su puesto con fe
y coraje en la obra que todos esperan traerá pan y progreso a la comarca. A las tres semanas
el cansancio y las maldiciones se extienden como un virus contagioso. Las obras continúan,
aún bajo lluvias arreciantes que dejan la tierra ciega, silenciosa y fría. Para evitar el
debilitamiento del esfuerzo colectivo, Don Alfonso apela al aguardiente, la chicha y el
guarapo. Los mestizos empiezan a abandonar la tarea, el hacendado decide acelerar la tarea
sacrificando indios para desecar el pantano. Superada la etapa peligrosa que cuesta la vida
varios indios, la junta patriótica exhorta al vecindario de los pueblos de la comarca para
unirse en una segunda minga que termine la obra. La prensa de todo el país colma de fama
al terrateniente, al cura párroco, al teniente político y hasta los mestizos que participaron
en la minga. Pero ninguna referencia se hace a los indios que sacrificaron sus vidas para
terminar el carretero.
El cura párroco insiste en celebrar la obra con una misa y fiesta dedicada a la Santísima
Virgen. Los indios han de contribuir a los gastos de la misma. Cuando uno de los indios,
Tancredo Gualacoto, ruega al cura que baje el costo de la misa, el párroco se enerva
invocando la furia de Dios sobre los indios. Al mismo tiempo, “con esa precisión con la cual
a veces sorprende la casualidad”, empieza a tronar y a llover. Las fuertes lluvias provocan
la crecida del río. El paso del río destruye los huasipungos, matando indios, niños y animales,
y destruyendo los pequeños sembradíos.
Siguiendo la costumbre de muchos años, los indios hambrientos luego de que la crecida
destruyera sus posesiones, se vuelven a Don Alfonso, esperando que él reparta los restos
de la cosecha. Cuando la espera se vuelve insufrible y el hambre inaguantable, gran parte
de los indios y las indias jóvenes de las propiedades de Don Alfonso se dirigen hacia el patio
de la hacienda a suplicar socorros invocando la tradición. El hacendado se niega. El hambre
continúa. La tensión crece.
Un día Policarpio informa a Don Alfonso que uno de los toros ha muerto. Lo encontraron
tendido, muerto desde hace varios días. El hacendado ordena que se entierre. Sabe que los
indios intentarán robar pedazos de su carne para comer. De acuerdo con las órdenes dadas
por Don Alfonso, el mayordomo lleva indios, entre quienes está Andrés Chiliquinga, que
entierran el buey, no sin antes intentar robar pedazos de su carne casi en estado de
putrefacción. Policarpio les ordena devolver la carne. Los indios vuelven luego, por la noche,
a desenterrar el buey.
El indio Chiliquinga vuelve a su choza con el producto de su robo, su regalo para su mujer y
su hijo. Cunshi cocina la carne maloliente al fuego. La familia y el perro saborean con deleite
la carne asada. Devoran sin percibir el mal olor y la suave babosidad de la carne corrompida.
Luego de comer se tienden a dormir. Los despiertan fuertes dolores en el estómago,
vómitos y diarrea. Los retortijones y la fiebre continúan al llegar la mañana, y durante el día
y la noche siguientes. Cunshi muere a la mañana del día siguiente.
En medio del dolor y las lágrimas Andrés Chiliguinga ruega en vano al mayordomo que pida
ayuda a Don Alfonso para pagar el sepelio de su mujer. Ruega en vano al cura párroco que
le rebaje el precio que tendrá que pagar para que Cunshi ocupe un lugar en el cementerio.
Finalmente, cuando se le presenta la ocasión de llevar una vaca del hacendado que se
encuentra extraviada, toma provecho de ella. Vende el animal en un pueblo vecino
obteniendo dinero suficiente para pagar la sepultura. El castigo no se hace esperar cuando
el culpable es identificado. Suenan los latigazos en la espalda del indio sobre el silencio
taimado de la muchedumbre. El hijo intenta defender al padre, pero el teniente político y
policías doman a golpes al pequeño huérfano.
Mientras Andrés Chiliquinga sufre su castigo, Don Alfonso y Mr. Chapy planean sus negocios
siguientes. El “gringo” insiste a Don Alfonso que debe desplazar a los indios que
establecieron sus huasipungos en la loma luego de la crecida del río. Planean poner allí el
aserradero grande. En los días siguientes, siguiendo las órdenes de los señores gringos, el
Tuerto Rodríguez y los policías de Jacinto Quintana capitanean un grupo de gente de la
aldea para desalojar a los indios de sus huasipungos. Ruegan los indios que los dejen salvar
sus cosas de las chozas, lloran en vano las indias y los niños para que no los arranquen de
ese pedazo de tierra que creen suyo.
Las noticias del desalojo llegan al indio Chiliquinga. Se encuentra acorralado. No puede
dudar de la verdad del atropello que invade el cerro. Pero a él tendrán que arrastrarle con
yunta de bueyes para arrancarle de la choza donde vivió con su mujer, donde nació su hijo,
donde vió morir a Cunshi. Organiza a los indios para resistir. Los ultrajes de los blancos
exaltan más y más el coraje y odio de los indios. El primer encuentro de lso enfurecidos
huasipungueros fue con el grupo de hombres capitaneados por el Tuerto Rodríguez, al que
se ha sumado Jacinto Quintana. Las balas detienen en principio a algunos indios, pero no a
Chiliquinga quien se lanza sobre el mestizo. Cinco cadáveres, entre los cuales se cuentan el
de Quintana y el Tuerto Rodríguez, quedan tendidos en los senderos del cerro.
A la mañana siguiente el grupo de indios ataca el caserío de la hacienda, dan libertad a los
indios e indias del servicio, pero Don Alfonso ha huido a Quito, desde donde con presteza
las autoridades del Gobierno envían doscientos hombres de infantería a sofocar la rebelión.
Tienen la orden de matar sin piedad a todos los indios. Deben defender las desinteresadas
y civilizadoras empresas extranjeras. Los soldados cazan y matan a los rebeldes. Los
pequeños y las mujeres que se habían refugiado bajo el follaje a orillas de una charca caen
también bajo ráfagas de ametralladora.
Sólo algunos indios han logrado replegarse con valor hacia el huasipungo de Andrés
Chiliquinga al caer el sol. El jefe de los soldados decide atacar para evitar que los indios
huyan por la noche. La choza que cobija a los indios no tarda en arder bajo las balas.
Asfixiados por el humo, los indios abren la puerta del huasipungo. Los ojos de Andrés
Chiliquinga ven por breves momentos de nuevo la vida, antes de que todo enmudezca para
él, para los otros indios. Sobre el silencio la bandera patria del batallón flamea antes de dar
paso a los “señores gringos”.

ESPACIO
El espacio geográfico de la novela Huasipungo, se sitúa en su mayor parte en la hacienda
Cuchitambo (propiedad de Alfonso Pereira), que está situado a las afueras de la capital de
Quito, Ecuador.
Pero esta no sólo se realizó en dicho lugar ya que también al principio de la obra y conforme
van pasando los sucesos se habla también de la capital de Quito y las afueras de la hacienda
Cuchitambo.
Afueras de la hacienda Cuchitambo
Las afueras de la hacienda estaba rodeada de huasipungos (tierras que les eran entregadas
a los indios por sus patrones por su trabajo realizado), los cuales eran chozas pequeñas
donde se encontraban las mujeres cuidando de los guaguas (niños).

PERSONAJES

PERSONAJES PRINCIPALES:

Alfonso Pereira: Era el terrateniente y propietario de Cuchitambo y de los huasipungos, sus


mejillas eran de ordinario rubicundas y lustrosas, gruesa figura de cejas pobladas, de
profundas arrugas, labios secos y pálidos; y la salvación de su honor estaba antes de todo.
Andrés Chiliquinga: Es del único indio que vamos a presenciar la evolución de su conciencia,
es el indio explotado que se revela ante el poder ideológico-religioso, y el amor de por
Cunshi lo hace ir contra las reglas del trabajo obligatorio e infrahumano.
El Cura: Hombre adúltero, es el que por medio de los sermones se encarga de infundir
miedo a los indios, aprovechándose de ellos para obtener ganancias económicas.

PERSONAJES SECUNDARIOS:

Cunshi: es la mujer de chiliquinga es sumisa y es abusada físicamente y sexual, por el


terrateniente (Pereira) y hasta por su propio marido.
El teniente Político Jacinto Quintana: Cholo (Mestizo de sangre europea e indígena) de
apergaminada robustez, se mudaba cada mes de ropa interior y los pies le olían a cuero, es
la autoridad, y es manipulado por Pereira.
El Mayordomo Policarpo: cholo con cabellera cerdosa, altanero con malos olores a agua
ardiente y cuero podrido, este estaba inspirado por el ejemplo y la enseñanza del patrón.

TEMAS

TEMA PRINCIPAL: Huasipungo (1934), de Jorge Icaza, tiene como tema la narración con
una crudeza pocas veces igualada la situación inhumana de los huasipungueros (indígenas
con una propiedad de dimensiones irrisorias y cuyo disfrute se ve mediatizado por la
obligación de prestaciones personales en las haciendas o las empresas o las haciendas de
los blancos): Desfilan todos y cada uno de los estamentos sociales responsables (y
beneficiarios) de esa situación que reduce a los autóctonos a una condición
verdaderamente inhumana, sin otra alternativa que ceder ante la opresión a rebelarse con
el peligro de verse derrotados por el ejército y desaparecer.
SUBTEMAS: La situación desesperada del indio en el campo. - La explotación y la vejación
por parte de los poderosos. - La vida de los huasipungueros. - Los trabajos largos y
agotadores jornadas de los esclavos. - El valor y protesta indígena - El asesinato de
indígenas.
FRASES

 Uno no es lo que es por lo que escribe, sino por lo que ha leido.


 No hay que morir por el otro, sino vivir para disfrutar juntos.
 Uno está enamorado cuando se da cuenta de que otra persona es única.
 El verdadero buscador crece y aprende, y descubre que siempre es el principal
responsable de lo que sucede.
 Hay que tener cuidado al elegir a los enemigos porque uno termina pareciéndose
a ellos.
 Los que no pueden recordar el pasado están condenados a repetirlo.
 No somos responsables de las emociones, pero sí de lo que hacemos con las
emociones.
 La poesía nace del dolor. La alegría es un fin en sí misma.
 Los amigos son esa parte de la raza humana con la que uno puede ser humano.
 El tiempo es la sustancia de la que estoy hecho.

CRONOLOGÍA BIO-BIBLIOGRÁFICA DE JORGE ICAZA

1906 Jorge Icaza Coronel nace en Quito, Ecuador, el 10 de junio. Hijo de don José
Antonio Icaza Manso y doña Carmen Amelia Coronel Pareja.

1909 Fallece su padre.

1910 Reside en la hacienda serrana de un tío materno.

1911 Su madre contrae matrimonio con don L. A. Peñaherra, de tendencia liberal


alfarista.

1919 Del Colegio San Gabriel de los Jesuitas pasa al Instituto Nacional Mejía
(laico), de Quito.

1924 Inicia sus estudios de Medicina en la Universidad de Quito.

1925 Fallece su padrastro.


1926 Fallece su madre.

1927 Inicia sus estudios de arte dramático en el Conservatorio Nacional de Quito.

1928 La Compañía Dramática Nacional, donde Icaza se desempeñó con papeles


de “galán joven,” estrena su primera comedia, El intruso.

1929 La comedia sin nombre y Por el viejo (obras dramáticas).

1931 ¿Cuál es?, estrenada por la Compañía de Variedades, y Como ellos


quieren (obras dramáticas).

1932 Trabaja de oficinista en la Pagaduría General de la Provincia del Pichincha,


Quito. Sin sentido (obra dramática).

1933 Publica la colección de cuentos Barro de la sierra. La misma


incluye “Cachorros,” “Sed,” “Éxodo,” Desorientación,” “Interpretación” y
“Mala pata.” Los tres últimos nunca se reeditarán. La versión de “Éxodo”
que publica en 1961, solamente conserva el título de la original publicada
en Barro de la sierra.

1934 Huasipungo. La novela obtiene el Premio de Novela Latinoamericana,


convocado por la Revista América de Buenos Aires. Contribuye a formar la
Sociedad de Escritores Ecuatorianos, junto con M. A. Carrión, J. de la
Cuadra, A. Cuesta y cuesta, J. Fernández, E. Gallegos Lara, E. Gil Gilbert,
Pablo Palacio, A. F. Rojas, H. Salvador y otros. Nace su hija Cristina.

1935 En las calles . Recibe el Premio Nacional de Novela convocado por el Grupo
América. Aparece la 2da edición de Huasipungo con un vocabulario
agregado por Icaza.

1936 Flagelo. Obra dramática en un acto con un estudio de F. Ferrándiz Alborz


(Feafa). La obra se publica pero no se estrena. Se casa con la actriz Marina
Moncayo. Funda el Sindicato de Escritores y Artistas del Ecuador, del cual
es Secretario General. Huasipungo. Esta edición incluye no sólo un
vocabulario agregado por Icaza, sino también dos juicios críticos del escritor
peruano Enrique S. Portugal, “Huasipungo” una novela
sensacional” y “¿Qué significan las obras de Jorge Icaza?”

1937 Abre una librería en Quito. Publica Cholos. Dirige la Revista del Sindicato de
Escritores y Artistas del Ecuador. Nace su hija Fenia. Traducción al francés
de Huasipungo.

1939 Huasipungo. Obra adaptada para los niños por Jorge Icaza y Juan O’Trebor.
Con ilustraciones en color.

1940 Viaja a México donde participa del Congreso Indigenista de Pátzcuaro. Dicta
conferencias en Costa Rica. Se presenta Flagelo, en Buenos Aires, dentro
del Noveno Ciclo de Teatro Polémico.

1942 Media vida deslumbrados, novela. Viaja a EE.UU. a participar del I


Seminario de Asuntos Latinoamericanos.

1944 Miembro titular y fundador de la Casa de la Cultura Ecuatoriana de Quito.

1947 Vida y obra. Bibliografía. Antología. Se presenta su ballet El amaño.

1948 Huairapamushcas. Viaja a Venezuela a la asunción presidencial de Rómulo


Gallegos. Visita Cuba.

1949 Agregado Cultural en Buenos Aires. En 1953 publica una nueva edición
- de Huasipungoy Seis veces la muerte, edición argentina de Seis relatos.
1953 (Incluye “Barranca grande,” “Mama Pacha,” “El nuevo San Jorge,”
“Contrabando,” “Rumbo al sur” y “Cholo Ashco”). Icaza regresa al Ecuador.

1956 Viaja a Bolivia.

1957 Viaja al Perú, a participar del III Festival del Libro Hispanoamericano.

1958 El chulla Romero y Flores. La ciudad de Guayaquil lo condecora con la


Medalla de Oro al Mérito Literario.
1959 “En la casa chola,” en Anales de la Universidad Central de Quito. Asume el
cargo de Director de la Biblioteca Nacional.

1960 Viejos cuentos. Viaja por China, URSS, Checoslovaquia y Francia.

1961 Obras escogidas. Prólogo de F. Ferrandiz Alborz. La colección consta de


cuatro novelas, a saber, Huasipungo, En las calles, Huairapamushcas, El
chulla Romero y Flores; y ocho cuentos: “Cachorros,” “Sed,” “Éxodo.” Los
cuentos presentan modificaciones con respecto a los publicados en 1933,
en Barro de la sierra. Obras escogidas también incluye los cinco primeros
cuentos de Seis relatos. Viaja a Cuba, para mostrar su solidaridad con la
Revolución. Cuatro obras de Jorge Icaza. Ecuadorian Novelist and
Playwright Jorge Icaza Reading from his Prose. Audio. 2 cintas. Duración
aproximada: 39 minutos. Grabado el 2 y 3 de mayo en la Casa de la Cultura
Ecuatoriana, para el Archive of Hispanic Literature on Tape de los Estados
Unidos de Norteamérica. Las cintas contienen: “Mama Pacha,” de Viejos
cuentos (selección), Huasipungo (selecciones), El chulla Romero y
Flores (selecciones de los capítulos 2, 7, 1, 7 y la conclusión). Traducción al
italiano de Huasipungo. Edición de Giuseppe Bellini.

1963 Director de la Biblioteca Nacional de Ecuador. 3ra edición


de Huasipungo. Obra adaptada para los niños, de Icaza y O’Trebor.

1964 Memoria para Jorge Icaza “Homenaje a la Casa de la Cultura Ecuatoriana en


el XX aniversario de su fundación.” Traducción al inglés de Huasipungo./The
villagers, a novel. Traducción autorizada según la versión de 1953. Con
introducción de Bernard M. Dulsey y prólogo de J. Cary Davis.

1967 Traducción al francés de Huasipungo realizada por Georges Pillement. Con


frontispicio original de Enrique Marin. Viaja a México a participar del II
Congreso Latinoamericano de Escritores.

1969 Relatos. La obra consta de los ocho cuentos de Obras escogidas y además
“En la casa chola” y “Cholo ashco.” Huasipungo. Versión teatral de la novela
de Jorge Icaza por Marco Ordóñez Andrade. Es Profesor del Centro Andino
de la Universidad de Nuevo México, con sede en Quito.
1970 Embajador en Moscú, Polonia y la República Democrática de Alemania. En
- 1970 el gobierno dictatorial de Velasco Ibarra prohíbe la representación
1973 de Huasipungo (versión dramática de Ordóñez Andrade) en la zona rural.
Versión teatral de El chulla Romero y Flores, 1971. En 1973 dicta
conferencias en varias universidades norteamericanas.

1972 Atrapados. La misma consta de tres volúmenes subtitulados: “El


juramento,” “En la ficción” y “En la realidad.”

1975 Teatro 3. Tres versiones libres. Incluye la adaptación teatral de la


novela Huasipungo, de Jorge Icaza.

1977 Comienza a escribir las novelas Los Jáuregui y La Milagrosa. Dejará ambas
sin concluir.

1978 Huasipungo para niños. Original de Jorge Icaza. Adaptación para los niños
de Juan O’Trebor y Jorge Icaza. Ilustraciones de Ramiro Jácome. Fallece en
Quito, el 26 de mayo. Huasipungo. Roman. Traducción al alemán.

1981 Ricardo Descalzi publica El huasipungo de Andrés Chiliquinga. Drama


basado en la novela Huasipungo de Jorge Icaza.

1991 Ensayos sobre las obras de Jorge Icaza. Con una entrevista a este escritor de
Enrique Ojeda. Con material nuevo. Publicado originalmente en 1961
como Cuatro obras de Jorge Icaza.

1993 Gloria y Jorge: cartas de amor y conflicto, de Claudia de


Icaza. Cabuyas (relatos).
CONCLUSIÓN

Jorge Icaza, figura central del indigenismo en América Latina, su obra


Huasipungo es universalmente reconocida y más difundida, traducida a varios
idiomas y reeditada en múltiples ocasiones, en la que se detalla el drama del
indio andino.
Jorge Icaza en sus obras nos muestra la realidad cruda de su país, cuando al
ser publicada Huasipungo la gente no tomaba importancia a su obra, criticaban
duramente, pero luego fue reconocido su trabajo por hacer ver la verdadera
forma de vida de los indios en esos tiempos de su país y que a Jorge Icaza le
indignaba totalmente, por esos motivos es que mediantes sus obras él se hace
escuchar a gritos desesperados, él se hace sentir.
BIBLIOGRAFÍA

1. JORGE ICAZA, Obra Huasipungo


2. JORGE ICAZA, Cuentos Completos
https://books.google.com.pe/books?id=6Qx75FdC7JsC&pg=PA26&lpg=PA26&dq=seis+vec
es+la+muerte+jorge+icaza&source=bl&ots=zO-
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AhUBxpAKHWWrDdoQ6AEITzAL#v=onepage&q=seis%20veces%20la%20muerte%20jorge
%20icaza&f=false
3. https://www.ensayistas.org/herbst/crono/icaza.htm

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