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ANATOMÍA, FISIOLOGÍA Y
EMBRIOLOGÍA
DEL OÍDO
M. CIGES y F. FERNÁNDEZ CERVILLA
1. ANATOMÍA La vascularización del oído externo es muy
abundante, a expensas de diversas ramas de la ca-
El oído, desde el punto de vista morfológico, se divide rótida externa. Sus linfáticos drenan a ganglios de la
en tres partes (Fig. I -1): oído externo, medio e interno, celda parotídea y de la porción alta de la cadena
albergados en su práctica totalidad en el hueso ganglionar laterocervical. Su inervación es rica y está
temporal, formado por tres piezas óseas: peñasco, encomendada al plexo cervical y a los nervios
escama y hueso timpanal. En la zona donde se unen trigémino y facial. Este último inerva la porción de la
tales piezas queda una compleja hendidura, ocupada concha y la pared posterior del conducto (área de
por las distintas estructuras del oído. Básicamente, es Ramsay-Hunt) a través de su exiguo componente
el peñasco el que más contribuye, prolongándose por sensitivo.
detrás y afuera en una recia formación que es la
«apófisis mas-
2 MANUAL DE OTORRINOLARINGOLOGÍA
Oído externo
Oído interno
no posee dos porciones: pars tensa y pars flaccida. a la primera vuelta de espira del caracol (véase más
La primera es mucho más grande y vibra por hallarse adelante); más allá de éste se encuentra una
a tensión. La segunda, llamada membrana de segunda ventana, llamada, por su forma, «venta -
Schrapnell, carece de tensión, no participa en la na redonda», que está ocluida por una membrana o
transmisión y su forma es triangular por encima de la tímpano secundario (Fig. \-2a). Esta membrana
apófisis externa (Fig. \-2b). El tímpano está unido al comunica, como la oval, el oído medio con el in-
CAE por el llamado ligamento de Gerlach, que por terno. En la parte alta de esta pared, hacen cierta
arriba deja el reborde óseo para dirigirse a la apófisis prominencia en la caja, el conducto semicircular
externa del martillo (repliegues timpanomaleolares). externo (ver más adelante) y la segunda porción del
El tímpano está deprimido en su centro (ombligo), acueducto de Falopio por donde discurre I nervio
donde acaba el mango del martillo, y es de color gris facial. Estas relaciones de vecindad explican las
nacarado y brillante. Al iluminarlo en la exploración complicaciones laberínticas (laberintitis y las
(otosco-pia), se produce un cono o reflejo luminoso parálisis del nervio facial en las otitis.
desde el ombligo hacia abajo y delante. Los huesecillos martillo y estribo poseen sen-
En la pared interna de la caja del tímpano se dos músculos: músculo del martillo y del estribo o
encuentra la ventana oval y debajo de ella hay un estapedio. Estos músculos se contraen de forma
abombamiento, el «promontorio», correspondiente refleja ante sonidos intensos, particularmente el
segundo, con lo cual protegen al oído interno de
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tales sonidos, pues dicha contracción pone rígida Al oído interno (Fig. 1-1) se le llama también la-
la cadena osicular. con lo que empeora la trans- berinto, dada su complejidad anatómica. Hay un
misión. El músculo del martillo está inervado por laberinto anterior, o caracol, y un laberinto posterior,
el trigémino, y el del estribo, por el facial. o laberinto propiamente dicho (Fig. 1-3). A su vez un
Por detrás de la caja del tímpano se encuentra laberinto óseo o continente y un laberinto
la mastoides. que en circunstancias normales es membranoso en su interior, o contenido, y que no es
una estructura celular, con múltiples cavidades una reproducción de aquél pues difiere en su
pequeñas (celdas) unidas entre sí. De ellas hay constitución anatómica. El caracol tiene función
una constante más grande, situada arriba y delan- auditiva y el laberinto participa en el equilibrio y
te, llamada "antro mastoideo" abierto a la caja conciencia espacial.
del tímpano. La mastoides es una estructura críti- El caracol está situado por delante y debajo, y
ca en la patología del oído y de su cirugía, como tiene la forma de este molusco. Se abre a una ca-
se verá en su momento. vidad central o vestíbulo (Fig. 1-3), que a su vez
La vascularización del oído se lleva a cabo a recibe tres conductos, los conductos semicirculares.
expensas de la carótida externa, y la inervación Vestíbulo y conductos semicirculares forman
sensitiva corre a cargo fundamentalmente del
nervio de Jacobson. rama del glosofaríngeo que
recorre de abajo arriba la pared interna de la caja.
La caja está tapizada por una delgada mucosa
o mucoperiostio, y por delante y arriba comunica
VIII
Figura 1-3. Laberinto óseo. V: Vestíbulo. CO: Caracol óseo. CM: Caracol membranoso o cóclea. RV: Rampa
vestibular. RT: Rampa timpánica. 1: Ventana oval. 2: Ventana redonda, con el tímpano secundario.
Obsérvese juego de ventanas, indicado por flechas, sobre el estribo y el tímpano secundario. Con las tres
flechas curvadas que parten de la ventana oval representamos tres hipotéticos sonidos: agudo, medio y grave
(explicación en el texto apartado 2.1). 3: Fosita oval. 4: Fosita hemisférica. 5: Ampollas. 6: Conducto
semicircular horizontal. 7: Conducto semicircular anterior. 8: Conducto semicircular vertical posterior. 9:
el laberinto posterior. Los conductos tienen una El caracol membranoso (Fig. 1-4), o cóclea,
extremidad dilatada o ampolla y otra simple, y están enrolla dentro del caracol óseo, tiene forma pris-
vagamente orientados en los tres planos del espacio, mático-triangular y se describe en la Figura 1
perpendiculares entre sí, por lo que existen dos Interrumpe la lámina de los contornos dando gar
conductos verticales (anterior y posterior), y un a las rampas vestibular y timpánica, que abren,
tercero horizontal. Los dos primeros poseen una respectivamente, en el vestíbulo y en ventana
extremidad no ampollar común (crus comune). El redonda, que la relaciona con la caja del tímpano
vestíbulo tiene dos depresiones o fositas: oval y (Figs. 1-3 y 1-4); su cavidad se cono como escala
hemisférica (Fig. 1-3). El caracol (Fig. 1-4) posee un media. El caracol membranoso con-tiene el
núcleo o modiolo alrededor del cual se sitúa un tubo órgano de Corti, que es el receptor de audición y
o «lámina de los contornos» que forma el caracol al que, por tanto, llegan las terminaciones del
propiamente dicho. Esta lámina está parcialmente nervio auditivo, que establecen sinapsis con las
interrumpida por una cornisa ósea, que es la lámina células sensoriales o células ciliadas (Fig. 1-5a).
espiral ósea (Fig. 1-4). Hasta aquí, el laberinto óseo, Éstas se dividen en dos grupos: internas (CCI),
a continuación, se expone el membranoso. en una sola hilera y en número de unos 6000, y
externas (CCE) en tres hileras y, por tanto,
Figura l-5a. Receptor de la audición (cóclea). A. 1: Membrana de Reisner. 2: Membrana tectoria. 3: Ganglio
de corti. 4: Lámina espiral ósea. 5: Células ciliadas internas. 6: Pilares de Corti. 7: Células ciliadas externas.
8: Células de sostén. 9: Membrana basilar, en la que reposa el órgano de Corti, y ligamento espiral. 10:
Ligamento espiral. 11: Estria vascularis. B. Corte histológico de la cóclea del cobaya.
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PUNTOS CLAVE
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