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FILOSOFÍA GRIEGA

La filosofía surge en Grecia, aproximadamente en los comienzos del siglo VI a.C. La cultura griega se asentaba en el Mito,
transmitido y enseñado por los poetas. Una de las causas que posibilitaron la aparición de la filosofía fueron los propios límites o las
insuficiencias del mito, por este motivo los filósofos griegos se ocuparon en criticarlo, es el llamado paso del mito al logos, que
consiste en que se pasa de dar explicaciones míticas a los fenómenos, para buscar explicaciones racionales, lógicas.
La filosofía griega surgió a partir de las primeras reflexiones de los filósofos presocráticos. A los autores en general les preocupa
entender lo que sea la naturaleza, el saber qué es lo que la constituye y el modo en que la conocemos. El concepto de naturaleza o
physis es para los griegos muy rico y básicamente se puede entender en 3 sentidos:
 Naturaleza como origen y procedencia
 La fuerza interna que impulsa dicho aparecer
 El conjunto de todo aquello que existe y no es obra del hombre
La originalidad de los primeros filósofos griegos radica en buscar el arjé como principio originario, constituyente y rector. Según los
antiguos griegos el arjé es el principio a partir del cual aparecen, se generan y se transforman las cosas que componen el mundo. Para
Tales de Mileto el principio es el agua, para Anaxímeres el aire, para Anaximandro el principio básico no puede ser nada definido,
sino que ha de estar en todo y volverse todo, para Pitágoras los números y para Heráclito los cuatro elementos.
Los primeros filósofos y las primeras escuelas filosóficas griegas se caracterizaron por ofrecer diversos modelos explicativos de la
realidad. Su mayor preocupación es conocer y estudiar la naturaleza (physis) de las cosas. Los physicois constituyen un período
filosófico que viene marcado por su carácter cosmológico.
Se puede hablar de un auténtico giro antropocéntrico donde el hombre, su sociedad y comportamiento adquieren un lugar protagonista
dentro de la actividad pensadora. En esta segunda mitad del siglo V a.C la filosofía de la naturaleza va a dejar paso a la filosofía
práctica, moral y política.
Los sofistas establecen una discusión teórico-práctica entre naturaleza y nomos. Se desemboca en un relativismo marcadamente
escéptico (posición intelectual en la cual es imposible obtener verdades universales). Los principales sofistas fueron Protágoras y
Gorgias.
Sócrates experimentaba indiferencia por la naturaleza y el mundo físico. Su método era la dialéctica, que arrancaba desde una
aparente modestia e ingenuidad. También empleaba la ironía, la labor destructiva de conducir a su contertulio hasta la contradicción,
de llevarlo hasta el reconocimiento de la ignorancia. También usaba la mayéutica, por la que alumbraba la verdad en la ignorante y,
después de la actividad negativa-fecundadora, preñada mente de su contertulio.
Platón nació en Atenas el año 427 a.C. Fue alumno de Sócrates y maestro de Aristóteles. La doctrina central de la filosofía platónica
es la teoría de las ideas, que consiste en la afirmación de que existen entidades inmateriales, absolutas, inmutables y universales,
independientemente del mundo físico. El término ``idea´´ se trata de realidades. Hay pues, dos mundos para Platón: el de la verdadera
realidad (las Ideas) y este mundo de sombras en que vivimos, que es reflejo y participación del mundo de las Ideas. Para Platón las
ideas no dependen en su ser, en su verdad y en su permanencia, de las cosas sensibles: un triángulo (la idea de triángulo) es lo que es y
posee las propiedades que posee independientemente de que tal esencia se realice o no se realice en el mundo sensible, físico. Pero si
las ideas no dependen en su ser de los seres físicos, éstos sí que dependen de ellas: una figura es un triángulo en la medida en que ella
se realiza la idea de triángulo. De los pensadores que le precedieron, Platón acepta la división que Parménides hace de la experiencia,
el camino de los sentidos como fuente de opinión (doxa) y el camino de la razón como vía de la ciencia (episteme). Contra Heráclito
argumenta que si no existe algo permanente no se puede explicar el ser de las cosas, ya que Heráclito es tradicionalmente considerado
como el filósofo que afirmó que todo cambia y nada permanece. De los pluralistas Platón toma el que en la realidad natural hay una
mezcla de partículas infinitamente divisibles de los elementos, movidas y regidas por una inteligencia divina (nous), presente en la
doctrina de Anaxágoras, pero rechaza la teoría del caos y el azar presente en el atomismo de Demócrito. Platón parece también muy
vinculado con el pitagorismo, por ejemplo, el mundo de las Ideas participa en la estructura organizativa y modélica que Pitágoras
otorgaba a los números. Por último, de Sócrates aprende la necesidad de definir los conceptos y su intelectualismo moral. Con los
sofistas comparte la idea de la necesidad de la educación para hacer de los hombres unos buenos ciudadanos, pero la contraposición
con los sofistas se pone de manifiesto en la forma de entender la educación, es decir, no se trata de introducir conocimientos en la
mente educando, sino en enseñar a mirar hacia donde merece la pena mirar.
Según Aristóteles lo que se consigue al admitir la existencia de otro mundo es que tengamos que explicar dos mundos y problemas
que resolver. Afirmó que lo único que existe es el mundo físico que habitamos, donde cada cosa existe de manera individual y tiende a
alcanzar la perfección que le es propia. Estuvo de acuerdo con Platón en que hay un elemento común a todos los objetos de la misma
clase (Idea) y aceptó que es real. Defendió que conocer una cosa implica conocer su esencia. Pensaba que el verdadero conocimiento
era lo universal. Dijo que para llegar a conocer los universales hay que partir de la experiencia. Recogió las ideas de que el mejor bien
no es el individual sino el social, por lo que el fin de la política y del Estado garantizaría el bien de todos los hombres. No reconoció la
existencia de un ideal de Bien. Sería la experiencia la que debía guiar a los políticos.
FILOSOFÍA MEDIEVAL
La Edad Media comprende desde la caída del Imperio Romano de Occidente (año 476) hasta el comienzo del Renacimiento (siglo
XV). El comienzo del movimiento filosófico medieval suele vincularse al “Renacimiento Carolingio”, época en la que Carlomagno
envía cartas a los obispos de su reino con encargo de que se construyan escuelas para la formación de clérigos, el final del movimiento
filosófico podría señalarse con la muerte de Guillermo de Ockham (1350)
En el pensamiento medieval destaca el debate entre Fe y Razón, se tratará de analizar la figura de Dios y el sentido de la existencia.
Los diferentes pensadores que tratarán estos temas tienen por un lado la razón, que pretende hallar esa explicación básica dotada de
respuestas lógicas, y por otro, la fe, que designa aquellas formas de conocimiento que no pueden ser garantizadas por procedimientos
racionales y por ello las intuiciones son subjetivamente convincentes ya que es imposible la demostración.
El tema de Dios, su existencia y esencia es el que abre el diálogo y discusiones entre fe y razón., se trata de un giro geocéntrico.
Podríamos decir que uno de los primeros filósofos de esta época es San Agustín de Hipona (s.V), que considera que la razón y la fe
pueden colaborar y así llegar a la verdad. Destaca la doctrina agustiniana de la iluminación, en la que considera que la razón ayuda al
hombre a alcanzar la fe (la fe orientará e iluminará a la razón y la razón contribuirá al esclarecimiento de los contenidos de la fe)
La misma idea tiene San Anselmo (s.XI), su famosa frase es “creo para entender”, con lo que la razón estaba subordinada a la fe. La fe
tenía algo más de peso que la razón. No obstante, Aquino considera que desde la razón se pueden llegar a verdades como la existencia
de Dios. En el siglo XIII aparece una escuela inspirada en los comentarios que había realizado el filósofo Averroes sobre Aristóteles.
Su trabajo más destacado fue “La Teoría de la Doble Verdad”, considerando a la fe y a la razón como fuentes de conocimientos
distintas y autónomas, por lo que hablaban de una doble verdad, una filosófica o de la razón y otra teleológica o de la fe.
Otro filósofo destacado en esta época es Tomás de Aquino (s.XIII), el máximo representante de la escolástica. La escolástica se refiere
a la enseñanza que en la Edad Media se practicaba en las escuelas, en estas, hay pensadores de las más variadas tendencias
(platónicos, neoplatónicos, aristotélicos…) En cuanto a la intencionalidad teórica y temática comportan los mismos intereses: les
preocupa la conciliación entre fe y razón. Este filósofo considera que para llegar a la salvación humana se necesita la fe además de la
razón. La razón no es suficiente para llegar a conocer a Dios, por eso es imprescindible el papel de la fe en este mundo.
En el siglo siguiente destaca Guillermo de Ockham, para éste fe y razón se trata de fuentes distintas con contenidos también distintos.
Cada una se tiene que ocupar de sus asuntos y no extralimitarse una en la otra. Ockham va a abandonar los temas propios de la Edad
Media para ocuparse de otros temas (no religiosos) En suma, apuntan en él los caracteres que van a formar la Edad Moderna en lo
filosófico, político y religioso.
FILOSOFÍA MODERNA
El primer período de la filosofía moderna coincide con el Renacimiento. El Renacimiento se origina en Italia en el siglo XV y se
extiende por toda Europa durante el siglo XVI. Históricamente, su inicio coincide con la caída del Imperio romano de Oriente en
1423, cuando su capital, Constantinopla, fue conquistada por los turcos. Este período se caracteriza por el estudio de la Antigüedad
clásica griega y romana.
La Edad Moderna está caracterizada por profundos cambios en el terreno político (aparición de los Estados Modernos), económico
(declive de la tradicional economía feudal e intenso comercio potenciado por los nuevos descubrimientos), religioso (Reformas
religiosas y Contrarreforma), artístico (recuperación de las formas y motivos artísticos) e importantes invenciones técnicas (imprenta,
brújula, telescopio, etc).
En lo que respecta al plano de las ideas, el Renacimiento es la combinación de dos procesos, uno de retorno al pasado y de
recuperación del ideal cultural clásico (humanismo) y otro de ruptura radical con nociones procedentes de la Antigüedad (nacimiento
de la teoría política moderna y de la revolución científica).
El humanismo se caracteriza por otorgar un papel primordial al mundo clásico, estudiando los autores clásicos como Platón o
Aristóteles no a través de la síntesis cristiana sino directamente en sus propios textos. Además presenta una tendencia a la
subjetividad y el antropocentrismo. El ser humano, a pesar de perder la posición central en la cosmovisión de la época, se convierte en
el centro de interés y de estudio. Autores destacados del humanismo son: Marsilio Ficino, Pico della Mirandola, Erasmo de Rotterdam
o Montaine.
En el terreno del pensamiento político destaca el italiano Nicolás Maquiavelo (1469-1527), considerado como el fundador de las
concepciones políticas modernas. Este controvertido autor propugna la separación de la política de la esfera ética, tal como se
establece en la obra fundamental de Maquiavelo, El Príncipe. El político no debe ser utópico, sino partir de la propia realidad y para
mantenerse en el poder, un líder político no puede ignorar la maldad intrínseca humana, pues de lo contrario estará condenado
inexorablemente al fracaso. Debe gobernar con mano dura y tener presente que el fin justifica los medios si quiere alcanzar el éxito.
En esta época inicial de la filosofía moderna se produce la revolución científica, caracterizada por la gran profusión de inventos y
descubrimientos científicos. Se incorpora el método científico basado en la observación, la formulación de hipótesis y la
experimentación. La ciencia deja de ser un conocimiento puramente teórico para tener aplicaciones prácticas. Entre los científicos-
filósofos de este periodo destacamos a Copérnico (con su cosmovisión heliocéntrica), Galileo (con innumerables inventos y
descubrimientos, entre los que destaca la ley de inercia para apoyar las teorías copernicanas) o Kepler (ley de movimientos celestes).
Durante los siglos XVII y XVIII se van a desarrollar las dos principales corrientes de pensamiento de la Filosofía moderna:
Racionalismo y Empirismo. Durante esta etapa Dios deja de ser el centro de la preocupación filosófica, como lo era en la Edad Media.
El hombre, en cambio, pasa a ocupar un puesto importante como sujeto del conocimiento. El problema fundamental que debaten tanto
el Racionalismo como el Empirismo es, por tanto, el conocimiento humano, determinar de qué herramientas fiables disponemos para
alcanzar la verdad y qué instrumentos podemos utilizar para demostrarla.
Los filósofos de este período van a rechazar el argumento de autoridad como garantía de verdad de una doctrina y van a dar mucha
importancia al sujeto individual en la búsqueda de la verdad. En esta tarea es donde aparecen las diferencias esenciales entre
racionalismo (Descartes, Leibniz, Espinoza…) y el empirismo (Locke, Hume…). Mientras que el empirismo sostendrá que todos
nuestros conocimientos proceden de los sentidos, de la experiencia sensible, el racionalismo establece que todos nuestros
conocimientos válidos y verdaderos acerca de la realidad no proceden de los sentidos, sino de la razón, del entendimiento mismo.
Además el racionalismo utiliza el sistema deductivo para la construcción de leyes, esto es, a partir de ciertos principios y conceptos se
derivan los restantes. El empirismo, en cambio, se apoya en el proceso inverso, en la inducción. Otra gran diferencia entre ambas es
que para los racionalistas existen ideas innatas, mientras que para los empiristas no existen ideas sin experiencia previa. Kant se
convertirá en el pensador que propone una síntesis entre estas dos formas de entender el conocimiento humano.
La última etapa de la filosofía moderna la constituye el pensamiento ilustrado. Durante la Ilustración los filósofos realizarán una
crítica a la organización política y social, defenderán la libertad de pensamiento en todos los aspectos y demostrarán una confianza en
la razón para alcanzar el progreso. El filósofo Inmanuel Kant describió el sentido de la época que le tocó vivir afirmando que era “la
salida del hombre de la infancia y la llegada a la madurez”. Para Kant, el espíritu ilustrado se podía sintetizar en dos palabras: sapere
aude (“atrévete a saber”). Otros pensadores ilustrados relevantes son: Hume, Rousseau, Montesquieu o Voltaire.
FILOSOFÍA DEL SIGLO XIX
El siglo XIX está marcado por los profundos cambios que la Revolución Industrial acarreó en toda Europa. Durante este período se
produce una transformación profunda de los sistemas productivos y de la estructura de la sociedad (éxodo rural, aparición del
proletariado…). En el terreno cultural se produce la consolidación y desarrollo de las ciencias positivas. La nueva ciencia se desarrolla
casi en exclusividad. La industrialización de la imprenta permite producir libros y periódicos de forma masiva. Aparecen las primeras
críticas al capitalismo industrial y las revoluciones liberales lideradas por la burguesía que busca la alianza con los movimientos de
trabajadores para conseguir el poder.
En el aspecto filosófico, el siglo había comenzado marcado por el idealismo absoluto de Hegel cuyo punto de partida es la
consideración de la realidad como espíritu, desarrollado desde sus inicios dando lugar a todos los acontecimientos políticos,
culturales, artísticos, filosóficos y religiosos de la historia. Para Hegel la realidad se describe mediante la dialéctica (la realidad logra
realizarse a sí misma y alcanzar una instancia superior). Se funda en la idea de que la realidad es un proceso, un devenir sujeto a la
tensión de contrarios.
Se desarrolla el positivismo de Auguste Comte, que rechazaba toda forma de metafísica y no admitía más realidad que los hechos
verificable empíricamente. Propone la unificación de las ciencias al considerar que todas están conectadas y forman parte de un
mismo sistema. Comte confía en que la sociología será la ciencia cumbre que tenía que proporcionar las leyes fundamentales sobre las
que se edificaría una sociedad nueva.
En el terreno del pensamiento moral destaca la figura de John Stuart Mill. Su principal aportación fue su ética utilitarista que mantiene
que las acciones no tienen un sentido en sí mismas sino por la finalidad a la que tienden. El utilitarismo valora las acciones en función
de sus efectos y consecuencias. La acción buena es la que procura el máximo bien que es la felicidad humana.
Uno de los grandes representantes de la izquierda hegeliana es Ludwig Feuerbach, que defiende una filosofía materialista. Feuerbach
introduce el concepto de alienación religiosa (no es Dios el que crea al hombre, sino que es el hombre el que crea a Dios). Marx lo
incluirá en su filosofía posteriormente.
Se abran paso una serie de pensadores vitalistas (teoría filosófica que defiende la existencia de un impulso vital sin el cual no puede
explicarse la vida), que consideran que la vida y el mundo no se dejan reducir a la razón y que exigen una filosofía que explique la
complejidad de la existencia humana. Afines a estas ideas son pensadores como Schopenhauer, kierkegaard, Nietzsche y Ortega y
Gasset.
Surgen los filósofos de la sospecha, que llevarán a cabo de una crítica en profundidad de la civilización occidental: Narx, Nietzsche y
Freud tratarán de desenmascarar los valores ilustrados de la cultura occidental.
Marx propondrá una profunda crítica a la interpretación tradicional de la historia considerando que ésta se mueve por
condicionamientos de tipo material y económico, la lucha entre clases es para Marx el motor de la historia. Criticará radicalmente el
modelo de producción capitalista, considerándolo como causa de la alienación humana y proponiendo una auténtica revolución
política y económica.
Nietzsche denunciará que toda la historia de la filosofía está basada en una gran mentira originada por el resentimiento contra la vida
y llevará a cabo una demoledora crítica a la moral y a la cultura occidental.
Freud descubrirá las motivaciones inconscientes que subyacen bajo nuestra aparente racionalidad. Mediante su psicoanálisis desvelará
las clases del comportamiento humano y propondrá una nueva manera de entender nuestra conducta.
FILOSOFÍA DEL SIGLO XX
El siglo XX está repleto de grandes e importantes acontecimientos históricos que van a influir en la filosofía. Dos guerras mundiales,
el triunfo de la Revolución soviética, el crac de 1929, la aparición de los totalitarismos, la guerra fría, la conquista del espacio son
algunos de los acontecimientos que marcarán el desarrollo de la filosofía de este siglo.
La filosofía de principios del siglo XX está marcada por la crítica al positivismo y una crisis de fundamentación de las ciencias:
corrientes como el historicismo y el psicologismo desarrollan una actitud relativista y escéptica que pone en duda que el saber
científico sea un saber absoluto.
Aparecen autores que reaccionan ante la crisis con el sentido de la experiencia:
 La fenomenología es un movimiento filosófico creado por Husserl que entiende la filosofía como método para llegar al
conocimiento de los fenómenos tal como los experimenta la conciencia. Se propone hacer de la filosofía una ciencia estricta que
sea capaz de hallar el sentido de la existencia humana. Propone abstenerse se realizar cualquier juicio y ponerlo todo en duda.
Una vez alcanzada esta actitud radical inicial, tiene lugar todo un proceso que Husserl denomina reducción trascendental (llevar
a cabo sucesivas eliminaciones de elementos accesorios para centrarnos únicamente en la cosa misma en toda su pureza,
reducida a su unidad esencial). El último momento del proceso es la construcción del sujeto trascendental, llegar a un sujeto
puro, necesario.
 El existencialismo se trata de un intento de recuperar la dignidad humana, replanteándose al hombre como un ser que crea su
propia existencia. Representa una vuelta a la afirmación del hombre individual y concreto como ser en el mundo. Para estos
filósofos lo único real existente es el individuo, el hombre concreto de carne y hueso, que está trágicamente solo ante sí mismo y
tiene que elegir entre infinidad de posibilidades, lo cual la produce angustia. La existencia precede a la esencia y el hombre es
una existencia que se define como mero proyecto responsable de sus actos y de su propia existencia al hacer uso de su libertad,
que lejos de ser un privilegio supone una condena. Los filósofos existencialistas más destacados son Heidegger y Sartre.
La filosofía analítica entiende la filosofía como análisis del lenguaje. Tiene en Wittgenstein su figura central ya que es el verdadero
impulsor de este movimiento y el que genera las diversas corrientes filosóficas que lo constituyen (atomismo lógico, neopositivista o
positivistas lógicos). Para los pensadores analíticos, el objeto de la filosofía se reduce a la aclaración lógica del pensamiento y a
establecer los límites del lenguaje que de algún modo representan el mayor inconveniente para alcanzar la verdad.
La Escuela de Frankfurt de inspiración marxista nace como investigación empírica de los hechos sociales desde una perspectiva
crítica. La realidad ha de ser interpretada desde una teoría crítica que cuestiona los totalitarismos, la sociedad industrializada y la
cultura de masas. Los filósofos de esta escuela pretenden transformar la sociedad, superar la deshumanización y proponer los
instrumentos de cambio para salir de esta situación. Los principales representantes de la Escuela de Frankfurt son Horkheimer,
Adorno y Habermas.
En la filosofía española del siglo XX hay que destacar a Unamuno y a Ortega y Gasset. Unamuno podría ser ubicado en el
existencialismo, rechazó los sistemas filosóficos para acercarse “al hombre de carne y hueso”. Su pensamiento gira en torno a dos ejes
fundamentales: la preocupación por España y su inquietud religiosa. Ortega y Gasset es uno de los pensadores españoles más
importantes e influyentes del siglo XX. Su raciovitalismo (fusión de racionalismo y vitalismo) y su perspectivismo (la realidad tiene
una existencia condicionada a la perspectiva individual) son sus principales aportaciones filosóficas.

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