ESCUELA NORMAL DE IXTLAHUACA

MAESTRÍA EN INTERVENCIÓN EDUCATIVA PARA LA EDUCACIÓN BÁSICA

ELIZABETH GONZÁLEZ NÚÑEZ
REPORTE DE LECTURA

El profesor como investigador de la educación.

¿Cómo se hace?, ¿Qué se necesita? Es importante tener muy presente que en

todos los tiempos y a través de la historia se ha manifestado que la educación
juega un papel muy importante dentro del desarrollo de una sociedad, es así
que como educador debo intentar dar respuesta al comenzar una investigación.

Al estar al frente de un grupo de estudiantes, el docente enfrenta situaciones

complejas a las que no puede responder haciendo uso sólo de lo aprendido en su
proceso de formación profesional. En algunos casos, quienes están al frente de
los estudiantes no han pasado por un proceso de formación que los habilite como
docentes. Sin embargo, desde la práctica misma, tienen que emprender
búsquedas y diseñar estrategias que les permitan enfrentar estas situaciones.

“El papel como investigador, frente a mi labor como decente resulta muy
interesante teniendo en cuenta lo que realizo a diario en el aula de clase,
primero debo reflexionar acerca de lo que estoy tratando de enseñar, segundo,
como lo estoy enseñando y tercero, si verdaderamente lo que estoy enseñando le
sirve a mis estudiantes .”

La reflexión acerca de esta práctica, sobre los resultados obtenidos y sus posibles
orientaciones, llevada a cabo desde la práctica misma, como ejercicio de
autoevaluación, es el objeto de la investigación-acción.

Reflexión que involucra no sólo aspectos instrumentales o técnicos del ejercicio

docente, sino la recuperación de marcos teóricos, presupuestos y posiciones
valorativas que enriquecen la práctica educativa y convierten al docente en
investigador de su propio ejercicio profesional. Es entonces cuando se habla del
docente-investigador, como el actor involucrado en el mejoramiento de su misma
práctica docente como investigador y transformador de la realidad educativa.
En la definición de la práctica docente se dice que al estar frente a un grupo de
alumnos debemos mostrar una perspectiva positiva que ofrezca marcos teóricos
generales de acuerdo a los contextos de su práctica. El campo de la investigación
educativa en México se ha caracterizado por la presencia de diversos enfoques
desde los cuales se pretende explicar e intervenir en la solución de los problemas
educativos.

Desde esta perspectiva crítica, la investigación-acción no se limita al uso de

técnicas, ni al seguimiento de procedimientos; la formación de los docentes-
investigadores no puede realizarse sólo en el aula, recibiendo clases. Implica una
actitud de búsqueda permanente ante problemas que se enfrentan, un interés por
la transformación de las situaciones que se viven en las escuelas en el sentido de
la emancipación, una praxis que, como práctica situada y reflexiva, implica el
examen crítico del quehacer docente desde una mirada personal, un compromiso
con la tarea desempeñada y el establecimiento de fines acordes con el contexto
educativo.
Para quienes estamos interesados y comprometidos con la docencia, se vuelve
entonces una posibilidad para que, como docentes, pensemos que desde nuestra
práctica educativa debemos tener en cuenta los mínimos detalles y cuestionarnos
cada que hacemos un avance que según a nuestro parecer estamos bien, pues no
es así siempre.

Bibliografía.

CAMPECHANO. J (2000). El profesor como investigador de su práctica docente. Práctica

educativa, No. 5 , pp.14-24.

CARR. W. (1998). Atrapados por el trabajo diario: las posibilidades de investigar de los
profesores. Calidad de la enseñanza e investigación acción. Diada editora. España . pp.115-
131.
LATORRE. A (2003). Docentes e investigación. La investigación-acción, conocer y cambiar
la práctica educativa. Grao. Barcelona. Pp. 11-13.