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Tutoría y moderación de grupos en entornos virtuales
MÓDULO 1
Rol tutorial, tareas y competencias
Temas que se desarrollarán en este módulo
El trabajo del tutor. Roles y funciones. Competencias. Empatía, manejo de la controversia, la
discrepancia, el conflicto. Estilo comunicativo del tutor. Vínculos virtuales.
Organización de la tarea tutorial. Destinatarios, determinación de necesidades y objetivos.
Tareas antes, durante y al finalizar un curso. Elaboración de consignas
Este módulo desarrolla el tema del rol tutorial, las habilidades que tienen que desarrollarse para
desempeñar tareas docentes en entornos virtuales. Un tutor virtual tiene mucho en común con un
docente presencial. Asimismo, al concluir el trabajo ustedes podrán establecer claramente las
diferencias y semejanzas entre el profesor presencial y el tutor virtual.
En los entornos virtuales resulta clave el estilo comunicativo del tutor, discernir cuáles son las
actividades más apropiadas para cada momento del curso, saber cómo afrontar los posibles conflictos
que surjan a lo largo del trayecto.
Los invitamos a trabajar activamente y en forma colaborativa para analizar y establecer las tareas
específicas y cómo desarrollar las competencias necesarias.
El trabajo del tutor
Tutor: puente, comunicador, orientador que pone en
juego sus inteligencias múltiples en función del sostén
de la tarea; lo que el tutor hace, siente y piensa se
transmite al grupo con el que trabaja.
El término tutoría se ha impuesto para identificar la docencia, por su connotación de acompañamiento y
sostén. Esta tarea, que realizan todos los docentes, reviste características particulares en los ambientes
virtuales; sobre ellas, se trabajará en este módulo. En estos ámbitos, la enseñanza está mediada por
nuevos recursos tecnológicos y nuevas formas de presentar los contenidos. Por estos motivos también
varían las formas de planificar un curso virtual, las actividades propuestas y las formas de evaluación. Se
deben definir las tareas específicas de la tutoría virtual y las herramientas del campus virtual que se
utilizarán para comunicarse y trabajar con el grupo. Así se trabajarán nuevas competencias y habilidades
docentes para adecuarlas a la formación en línea.
Ser tutor en un entorno virtual
El tutor desempeña un rol esencial, muchas actividades que lleva a cabo coinciden con las de un docente
presencial en el marco de las nuevas teorías del aprendizaje; deja de ser quien transmite sus
conocimientos y pasa a ser el intermediario entre los estudiantes y los contenidos, es conductor de la
dinámica, interlocutor con cada estudiante y facilitador del aprendizaje, ofreciendo orientación y
acompañamiento, priorizando la autonomía y el protagonismo del estudiante.
Para poder desempeñar esa tarea, el tutor virtual debe capacitarse especialmente y desarrollar
competencias específicas. El hecho de no tener a los estudiantes cara a cara es todo un desafío. El tutor
se convierte en la persona encargada de lograr el éxito del curso y evitar el abandono, como también de
promover el contacto entre los participantes. Trabaja para poder conformar una comunidad de
aprendizaje en la que cada integrante pueda alcanzar los objetivos partiendo de sus saberes previos y a
su vez adaptándose activamente a la propuesta metodológica y académica del curso.
Posicionándonos en el rol
Tutor
• Primer estructurante en la construcción de los vínculos
• Primer organizador interno de un grupo de estudiantes virtuales
Los invitamos a observar la imagen siguiente:
¿Qué significa esto? Que el tutor es el que conecta al grupo de estudiantes con la tarea, solo a través de
sus actividades cotidianas, de sus habilidades para desempeñarse en el aula virtual, a través de su
sostén, los estudiantes lograrán centrarse en la tarea y cumplir con los objetivos, por eso es considerado
como primer estructurante, primer referente para cada uno de los cursantes. Si el tutor está presente,
activo y predispuesto, el grupo avanzará hacia el objetivo e irá adquiriendo autonomía en el trabajo.
Modalidades de tutoría
Existen por lo menos dos tipos de tutoría, reactiva y proactiva.
La tutoría reactiva es la más simple, ya que, como su denominación lo indica, se basa en la reacción del
tutor a las preguntas y demandas de los alumnos, cada vez que estos lo requieran. El tutor no toma la
iniciativa, sino que su tarea consiste en responder a las preguntas y demandas de los alumnos.
De forma diferente, la tutoría proactiva requiere de tutores que tomen la iniciativa y que no solo
reaccionen a las preguntas y demandas de los alumnos, sino que los incentiven en todo momento,
adelantándose, en lo posible, a sus probables problemas.
Entre las modalidades reactiva y proactiva existen infinidad de diseños de tutorías posibles. Todo
dependerá de las variables que entran en juego.
Un tutor operativo…
● Atiende sin demoras innecesarias a las consultas formuladas por los participantes.
● Responde con claridad de forma breve pero precisa, amable y personalizada (utilizando el
nombre del estudiante y demostrando que se lo identifica)
● Responde todos los mensajes, aunque sea con un acuse sencillo de recepción.
● Estimula al participante pero sin exagerar en la frecuencia o insistencia de los mensajes.
● Reconoce a sus estudiantes y sabe cuándo participa y cuándo no.
● Demuestra conocimiento del tema del curso y de toda la propuesta de aprendizaje.
● Llama la atención con delicadeza y respeto cuando alguien genera conflicto en el grupo.
● Tiene liderazgo inicial en el grupo, que va cediendo progresivamente.
¿Qué hace un tutor en un aula virtual?
El rol del tutor rescata muchas tareas del docente presencial en tanto se convierte en sostén y
potenciador del proceso de aprendizaje, no solo del aspecto académico sino también del desarrollo de
habilidades y de la adquisición de nuevos instrumentos para incentivar el aprendizaje continuo.
Pero a su vez profundiza ciertos aspectos docentes y despliega nuevas habilidades adecuadas a nuevas
funciones, porque no solo cambia el contexto (del aula presencial a al aula virtual); también se modifica
la forma de acceder y gestionar el conocimiento en los nuevos espacios.
Hablemos de las funciones del tutor…
Las funciones del tutor, mencionadas en el módulo anterior: Académicas, Sociales, Institucionales y
Experto en contenidos, pueden agruparse en diferentes aspectos. Por un lado, el psicosocial, implica la
contención de cada integrante y del grupo en general, promoviendo la integración tanto entre las
personas como de las personas con el entorno de trabajo, estimulando la interacción, animando a
consultar, familiarizando al cursante con el nuevo espacio. El tutor está presente a través de su palabra y
de sus participaciones frecuentes.
Por otro lado, en relación con el aspecto académico el docente sostiene manteniendo claro el objetivo
del curso, estimulando la lectura y el análisis del material y encauzando el desarrollo de actividades de
aplicación, de reflexión, de evaluación. Aclara dudas, promueve la pregunta como camino hacia el
aprendizaje. Guía los debates en los foros convirtiéndose en un moderador del trabajo; por eso es
fundamental que sea experto en los contenidos con los que trabajará.
Y en cuanto al aspecto organizativo, establece el encuadre de trabajo y lo da a conocer claramente para
que cada integrante conozca a priori las pautas del curso en cuestión, tiempos para el desarrollo de los
temas, fechas de evaluaciones o entrega de trabajos prácticos, fecha de cierre de foros, criterios de
evaluación. En general, abarca todo lo que hace al paso a paso para la aprobación del curso. En este
aspecto hay que tener en cuenta la preparación de un documento claro y coherente para que los
cursantes sepan qué se espera de ellos durante el desarrollo del trayecto. Dar a conocer las pautas de
trabajo en los momentos iniciales del curso, genera seguridad en los estudiantes.
Así, desarrollando responsablemente estas funciones, el tutor logrará que los cursantes se posicionen
con seguridad en el entorno virtual y aborden la tarea en pos del logro de los objetivos. En la formación
específica se trabaja para lograr el perfil de un tutor que contenga para generar autonomía, que
sostenga para promover prácticas libres y que retenga para generar pertenencia.
En la imagen siguiente pueden verse los mismos elementos pero en otra posición. Se ha recorrido un
camino por el cual el tutor ya no está como eje sino como acompañante y sosteniendo al grupo y su
relación con la tarea/objetivo/acción.
Para llegar a esto, hay que poder atravesar obstáculos...
La novedad, el desconocimiento de la modalidad, el cambio de escenario producen necesariamente una
desestructuración en todos los participantes, docentes, tutores y también de la organización como
totalidad.
Algunos ejemplos de dificultades
● Transferencia al entorno de los obstáculos para establecer vínculos con la tarea y con los pares:
“esta plataforma no es amigable”.
● Posicionamiento defensivo del estudiante frente a un entorno desconocido: “esto es muy
despersonalizado”
● Expresiones que muestran temor a no ser visto, a no ser escuchado, a no ser reconocido, frases
tales como: “¿están ahí?”, “¿me escuchan?” “Hace una hora que le escribí a un compañero y no
me respondió”, “no los encuentro”, “estoy solo”.
● Exigencia y demanda hacia el tutor: “ el tutor no me respondió” “ el tutor me responde de mala
manera”
● Temor a la palabra escrita: “ no entiendo la consigna” “ no logro explicarme”
● Dificultad para comprender el discurso del otro: “esto no es lo que hay que hacer” “los
compañeros no leyeron lo que mandé”
● Ruidos en la comunicación, ya sea por problemas entre las personas o por falta de
conocimiento/entrenamiento en el uso de las herramientas de la plataforma.
● Vivencia de vacío, de carencia: “ extraño el cara a cara”, no hay quien me atienda”
● Quejas sobre compañeros: “ escriben demasiado” “ son sabelotodo”
Para sortear estos obstáculos, el tutor debe formarse y desarrollar competencias específicas. También
es muy importante su experiencia personal como alumno virtual.
Esta formación debe desarrollar y fortalecer conocimientos, habilidades y actitudes
Nuevos conocimientos:
‐ Educación virtual, componentes, metodologías, roles
‐ Diversidad y características del sujeto que aprende
‐ Teorías del aprendizaje en línea motivación y comunicación
‐ Dominio de entornos tecnológicos del e‐learning y colaborativos, como redes sociales, y video
conferencias
‐ Seguimiento, supervisión y evaluación de aprendizajes en línea
Nuevas habilidades:
‐ Guiar el aprendizaje mediante la comunicación escrita
‐ Responder y generar temas de intercambio
‐ Manejar herramientas y recursos del aula virtual
‐ Elaborar consignas, guías, instructivos y cronogramas
‐ Planificar actividades individuales y de trabajo en grupo, adecuándose a la diversidad
‐ Generar propuestas para favorecer el conocimiento mutuo y la conformación de una comunidad
virtual de aprendizaje
Actitudes:
‐ Cordialidad, accesibilidad, capacidad de aliento
‐ Actitud de interés hacia lo que dice o escribe el alumno
‐ Empatía, o capacidad para ponerse en el lugar del otro
‐ Capacidad motivadora para estimular la participación de los alumnos
‐ Compromiso y dedicación a la tarea. Disposición para el trabajo
El estilo comunicativo, clave de una tutoría eficaz
La comunicación es el vehículo a través del cual se pueden establecer, mantener y fomentar las
relaciones entre personas. Solo a través de ella nos vinculamos. Aprendemos con el otro /a y del otro
/a. Por ese motivo, comunicación y aprendizaje están íntimamente relacionados.
La comunicación es fundamental para que se desarrolle un buen proceso de aprendizaje.
Como tutores, cuando comenzamos a interactuar con un grupo, también se desarrolla un proceso de
aprendizaje, que excede el contenido académico, es un aprendizaje en sentido amplio que remite a
El tutor y las
conocer cómo es el grupo y cómo establecer código en común. estrategias para
lograr interacción
Inicialmente es habitual observar en los grupos el tipo de comunicación radial, es la que se da cuando entre los
todos se dirigen a un solo integrante, en este caso el tutor, modalidad que al repetirse, se integrantes
instala, del
grupo
empobreciendo las posibilidades de interacción grupal. Es allí cuando el tutor debe implementar
estrategias para, gradualmente, lograr una comunicación lateral ‐todos con todos‐, esta modalidad
permite la interacción de cada integrante del grupo tanto con el tutor como con sus pares, por lo tanto,
es mucho más eficaz, permite el intercambio de todos los miembros y no hay un predominio de unos
sobre otros.
Cuando la comunicación es clara, permite expresar las ideas y que el otro las entienda. Es decir, es
completa, directa, explícita y congruente cuando los integrantes de la relación pueden entenderse, pedir
y dar explicación... Se verifica si el otro entendió lo que se quiso decir y se evitan así malos entendidos y
sobreentendidos o mensajes ambiguos que llevan a la confusión.
A su vez, a estos elementos básicos que hacen a una comunicación eficaz, debemos sumar la
cordialidad, el buen humor, la paciencia y redundar la información a través de diversos canales.
El tutor debe
transmitir
entusiasmo
yconfianza
Recordemos que a través de la palabra escrita también se transmite nuestro sentir y los cursantes
captan si el tutor se entusiasma o no con la tarea que desarrolla.
Un factor para la retención: una comunicación eficaz
El tutor debe evitar
Una comunicación eficaz implica claridad y precisión tanto en el contenido del mensaje como en el estilo
comunicativo.
El tutor tratará de evitar el mal entendido y el sobre entendido, los mensajes ambiguos, las
generalizaciones, las contradicciones, las frases incompletas, el silencio y la ausencia.
A su vez se convertirá en un facilitador de la comunicación de otros, estimulando la expresión, la
pregunta, el comentario, todo aquello que resulte de utilidad al cumplimiento de los objetivos del curso.
Conflictos en el grupo... otro aspecto que el tutor deberá tener en cuenta
Muy relacionados con la comunicación y sus falencias están los conflictos que pueden observarse en los
grupos.
Intrínsecamente heterogéneos los grupos siempre presentan algún tipo de conflicto que el tutor tratará
de visualizar y ayudar a que otros visualicen. La base está en que se tiene que sentir, pensar y hacer con
gente distinta a uno y por lo tanto se tiene que confrontar, que significa decir lo que pienso aun cuando
es diferente y sostener el motivo, justificarlo, especialmente cuando se tiene una tarea que realizar en
conjunto.
Confrontar no es pelear, es poner a disposición del grupo argumentos e ideas propios de cada
integrante para que en conjunto se pueda ir construyendo una modalidad, una estrategia de trabajo.
Cuando hablamos de conflictos en el grupo, no necesariamente implica a todos los integrantes, pueden
ser solo algunos. Sin embargo las consecuencias los afectarán a todos. Por ese motivo es fundamental
que el tutor esté atento al discurso de los integrantes para observar si aparecen frases ofensivas o
descalificadoras de un integrante hacia otro. En general en los conflictos se pone en juego una lucha de
poderes ya sea por hegemonizar el discurso o bien por sostener la autonomía, también pueden surgir
problemas por comunicación deficiente, por diferencia en cuanto al compromiso con la tarea, la
cantidad y calidad de las intervenciones.
El tutor mediador
En estos casos, el tutor intervendrá como mediador promoviendo la aclaración de esas situaciones,
enviando correos personalizados a los involucrados, tal vez sugiriendo un encuentro sincrónico en la sala
de chat.
El objetivo es atravesar y solucionar el conflicto para lograr la permanencia de todos los integrantes en
un clima que favorezca el trabajo colaborativo.
A modo de ejercicio de reflexión… A partir de los conceptos anteriores y de la propia experiencia
docente, lo invitamos a pensar en sus fortalezas para convertirse en un tutor virtual. Compartiremos
este tema en una actividad colaborativa.
Etapas en el trabajo del tutor
El tutor trabaja con intensidad antes, durante y al finalizar el curso. Su tarea implica ingresar en las aulas
a su cargo por lo menos tres veces por día.
Aquí algunos consejos para obtener mejores resultados:
Al iniciar el curso:
● Resulta positivo realizar alguna actividad que permita captar la heterogeneidad del grupo y
comenzar con la integración para que puedan capitalizarse las diferencias en función de un
trabajo colaborativo y gratificante para todos. Por ejemplo que cada integrante del grupo se
presente en el foro de bienvenida y también acceda a un Googlemap en el que puede localizar
su lugar de residencia e incorporar un link que muestre ese lugar.
● Este es un momento crucial para estudiantes y tutores. Al principio, las consultas pueden estar
más relacionadas con el uso del aula virtual, pero luego varían y se multiplican. Es útil un foro
general de consultas, para evitar responder lo mismo de manera individual. A modo de ejemplo;
en el caso de este curso, si ustedes tienen problemas de acceso saben que podrán solucionarlos
escribiendo a registro@educ.gov.ar Y en caso de que se generen dudas sobre el uso de alguna
sección del aula, podrán comunicarse con el tutor en el foro de consultas generales.
• Mantener una comunicación fluida con los participantes desde el comienzo del curso permitirá
conocer rápidamente las dudas sobre esta modalidad con el fin de fomentar actitudes positivas.
● Es importante ingresar en aula días previos al comienzo para organizar y revisar los espacios de
trabajo.
● Comunicar claramente el encuadre de trabajo incluyendo los aspectos que van a evaluarse y
cómo.
Durante el curso:
● Elabore una planilla de seguimiento del participante y registre situaciones. Marque luego si
han sido resueltas.
● Comuníquese con sus estudiantes cuando no se han contactado aún, o lo hacen muy
espaciadamente.
● Dé a conocer pautas iniciales para la interacción en foros, por ejemplo: pertinencia y extensión
de las intervenciones, apertura de nuevas ramas de discusión cuando amerite, etc.
● Revise diariamente el correo interno de la plataforma y asegúrese de recibir alertas cuando
alguien le escribe. Es fundamental responder a las consultas en no más de 12 horas.
● Controle las estadísticas para analizar el ritmo de avance.
● Haga devoluciones y oriente las actividades y debates hacia el cumplimiento de los objetivos del
curso, promoviendo la interactividad. Realice la síntesis de los debates y cierre los temas.
● Publique según cronograma y habilite contenidos, foros, sitios de interés y todo recurso que se
utilice durante el desarrollo del curso.
● Evalúe individualmente a cada participante y al grupo con el fin de asegurar el logro de los
objetivos.
● Utilice ejemplos que sean relevantes para sus alumnos y que estén relacionados con su entorno.
Una forma de lograr esto es pedir a los alumnos que ellos aporten los ejemplos
correspondientes a su experiencia.
● Sea conciso. Utilice afirmaciones cortas y comprensivas. Pregunte las cosas directamente. El
estilo comunicativo del tutor es un punto clave para el buen desarrollo del curso.
● Revise el funcionamiento de la plataforma y, en caso necesario, reporte al equipo técnico
posibles fallas
Al finalizar el curso:
● Realice el cierre del curso mediante síntesis grupales, autoevaluaciones, comentarios y foros de
despedida.
● Comunique en un tiempo razonable a sus estudiantes los resultados obtenidos.
● Señale aquellos aspectos que deben mejorar y a la vez muestre cómo hacerlo. Valore en todo
momento el esfuerzo demostrado.
El trato cordial, activo y responsable es imprescindible para lograr éxito de la enseñanza y el
aprendizaje en el entorno virtual
Aquino B. (2010). La red vincular: Clave del aprendizaje en entornos virtuales. En Krieger, A. (comp.).
Repensar los vínculos. Buenos Aires: Ricardo Vergara Ediciones.
Gergen, K. J. (1996). Realidades y relaciones. Aproximaciones a la construcción social. Barcelona:
Editorial Paidós.
Jasiner, G. (2008). Coordinando grupos. Una lógica para los pequeños grupos. Buenos Aires: Lugar
Editorial.
Najmanovich, D. (2005). El juego de los vínculos. Buenos Aires: Biblos.
Webgrafía
Martínez, J. (2004). El papel del tutor en el aprendizaje virtual. UOC. Recuperado
de http://www.uoc.edu/dt/20383/index.html
CEVUG (Centro de Enseñanzas Virtuales de la Universidad de Granada). Guía de tutores. Resumen.
Recuperado de http://cevug.ugr.es/guias/guia_tutores.pdf