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PALMA
FACULTAD DE PSICOLOGÍA
EPISTEMOLOGÍA
ANTOLOGÍA
PRESENTACIÓN
Estimado lector el presente texto tiene por objeto introducirte a unos de los
temas que han estado calando en el pensamiento actual sobre los problemas
referidos al conocimiento de la ciencia y las consecuencias que este tiene en el
propio avance de la ciencia, así mismo debes tener presente que un requisito
importante en el uso de esta antología es que manejes ciertos términos que le
son propios a la ciencia. En tal sentido el texto tiene algunas pautas que deberán
guiar tu lectura sin embargo reconocemos que es necesaria tu participación en
una constante interacción con el docente a fin de que puedas abordar en
1
amplitud las lecturas aquí seleccionadas. En ese mismo sentido la selección de
los textos está dirigida a permitirte una visión panorámica pero sustancial vista
del curso de Epistemología con una pequeña base del uso del término técnico
evitando complejidades.
Cabe recalcar que se ha optado por presentar lecturas con un sentido
independiente, es decir, que no dependan de otras para su comprensión, en
cuanto a su desarrollo.
Esperamos que la experiencia generada en el uso del presente texto pueda
cubrir aspectos centrales del estudio de la Epistemología. Para el cumplimiento
de tales propósitos, se ha dividido el material en tres capítulos.
El tercer capítulo refiere a las perspectivas que realizan los epistemólogos con
la finalidad de que el participante vaya construyendo una idea particular de lo
que significa estar en el campo de la ciencia.
Estimado lector dejo en tus manos el que profundices los puntos que
creas conveniente a partir de algunas concepciones presentadas, las cuales por
obvias razones no pueden cubrir las aristas presentadas por la ciencia o la
gnoseología, en tal sentido el obtener el mayor beneficio dependerá del manejo
del presente texto. Esperamos que los materiales reunidos cumplan con ubicar
al estudiante en los temas de la epistemología y lo estimulen a ampliar y
profundizar, a través de otras lecturas, sus conocimientos sobre este importante
campo.
Por último agradecer a los profesores Fernando Varas y Carlos Giles por
ayudarme a tener más clara la selección de textos así como el tratamiento
pedagógico.
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3
CAPITULO I
Todos los hombres por naturaleza desean saber. Prueba de ello es su gusto
por las sensaciones, pues aparte de su utilidad, gustan por sí mismas, y más
que todas las demás, las sensaciones visuales. Pues no sólo para hacer
algo, sino incluso cuando no tenemos intención de hacer nada, preferimos
la vista, por así decirlo, a todos los demás sentidos. Y la causa es que la
vista es, de todos los sentidos, el que nos hace adquirir más conocimientos
y nos descubre más matices.
Aristóteles.
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OBJETIVOS DE LA I UNIDAD
epistemológicas.
5
MARIO BUNGE; Buenos Aires 1919
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La ciencia no es simplemente un cuerpo de conocimientos, sino que es una
actividad de investigación, es una actividad que se da además en una sociedad,
se da en el curso de la historia, etc. Es decir, que hay un aspecto conceptual,
hay un aspecto empírico, hay un aspecto social y un aspecto histórico. Hay que
tener todo esto en cuenta cuando se quiere caracterizar el concepto de ciencia.
Y aquí han fallado precisamente los filósofos que han pretendido definir la ciencia
o el concepto de ciencia en un solo renglón. Es como decir "el elefante es
orejudo". Esto es cierto pero no basta. Pues bien, la ciencia es un objeto tan
complejo como un elefante.
comunidad
de
investigado
-res
Sociedad Dominio
Supuestos
Métodos
filosóficos
Fondo de
Fondo
conocimie
formal
-ntos
Objetivos Problemática
Fondo
específico
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supuesto que los hay. Cada vez que hay cooperación también hay conflicto. El
que los investigadores en un campo científico forman una comunidad significa
simplemente que están en comunicación entre sí, que los unos aprenden de los
otros, que los unos corrigen a los otros, que no se da, al menos en la ciencia
moderna, el sabio aislado.
A partir del siglo XVII, digamos de la época de Descartes y Galileo, todos los
científicos han estado en correspondencia entre sí, aun cuando no había todavía
sociedades científicas. Se escribían muchas veces a través de Mersenne [En el
siglo XVII se empezaron a formar las primeras asociaciones de científicos. Entre
los promotores de estas comunidades destaca nítidamente la labor del padre
Mersenne, fraile mínimo jesuita educado en la Fléche de París, quien mantenía
correspondencia con Torricelli, Descartes, Fermat, Gassendi, Pascal y otros,
sirviéndoles de nexo y de lugar de animadas discusiones]. Este notable
matemático y físico era una especie de agente de enlace de los científicos de su
tiempo.
Como cualquier otra comunidad, la científica está inmersa en alguna sociedad (S)¿Por qué
es preciso hacer referencia explícita a la sociedad? ¿Qué es una Porque hay sociedades que no
toleran la investigación científica: son sociedad teocrática?
sociedades cerradas, por ejemplo las teocráticas, en las que no se tolera la
búsqueda de la verdad, porque la verdad ya se encuentra en algún libro. Para
que florezca una comunidad científica, la sociedad en que está inmersa tiene por
lo menos que tolerar la actividad de los miembros de esa comunidad.
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de la filosofía. Pero de hecho, los científicos dan por sentada una cantidad de
tesis de tipo filosófico. Por ejemplo, hay supuestos ontológicos, tales como que
el mundo exterior existe independientemente del investigador; que el mundo
exterior es legal, es decir no hay milagros, hechos ilegales. Hay supuestos
gnoseológicos, tales como el de la posibilidad de alcanzar la verdad, al menos
parcial y aproximada. Finalmente, hay una ética del investigador: los imperativos
de la búsqueda de la verdad, de la coherencia y de la claridad; la propiedad
común de los conocimientos, la promesa tácita de no usar el saber para dañar,
etc. Quien viola estos preceptos morales no se considera un investigador
científico propiamente dicho. Naturalmente, la mayor parte de los científicos no
se ocupan de desenterrar esos supuestos, ésa es una de las tareas del filósofo,
averiguar la filosofía que hay metida en la ciencia.
El quinto componente es el Fondo Formal (F). En toda ciencia se ¿De acuerdo supone
tácitamente que valen las reglas del discurso racional, del debate a experiencia, tú racional, las
que son codificadas por alguna teoría lógica. Es decir, no se qué ciencias admite, por ejemplo,
la contradicción, no se admite los círculos viciosos, ni se tendrían un fondo admite la imprecisión,
excepto al comienzo, y se busca siempre la exactitud, formal? como meta por lo menos.
Luego viene el Fondo Específico (B). Hay una sola ciencia que no supone
ninguna otra ciencia, y ésa es la matemática. Los matemáticos no presuponen
la física ni la biología, ni la sociología, ni la economía, ni la historia, nada. Los
matemáticos, en principio, o las matemáticas, se bastan a sí mismas. No ocurre
así con la física, que presupone la matemática; ni con la química que presupone
la matemática y la física; ni con la biología, que presupone la matemática, la
física y la química, y así sucesivamente. Es decir, hay un fondo específico que
toda ciencia, con excepción de la matemática, admite y no discute. Por ejemplo,
un químico no discute las proposiciones de la física, a menos que él mismo se
convierta en físico.
Luego viene (P), la problemática, es decir el conjunto de problemas abordables por la ciencia
en cuestión. En el caso de las ciencias básicas, estos problemas son puramente cognoscitivos.
(P) es el conjunto de los problemas posibles, es un conjunto abierto, de modo que no es un
conjunto en el sentido El objetivo es matemático. Más bien, es una colección variable en el curso
del tiempo, porque resolver los problemas algunos problemas se van resolviendo, otros
problemas se decide que no han mediante la sido bien planteados o que no vale la pena
investigarlos, pues aparecen investigación problemas completamente nuevos. Cada vez que se
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conoce algo existe la posibilidad de formular nuevos problemas. De aquí el crecimiento
exponencial del fondo de conocimientos científicos.
El noveno
componente
de la
decatupla
está
constituido
por los
¿Ciencia
es igual
a
Objetivos (0) de la ciencia ¿Cuáles son los objetivos de la ciencia básica, a búsqueda de diferencia
de los objetivos de la ciencia aplicada y de la técnica? Simplemente, la verdad?
adquirir nuevos conocimientos, nuevas verdades. El científico se propone
entonces averiguar la verdad o, mejor dicho, verdades que no tienen por qué ser
completas y precisas ni, por lo tanto, definitivas.
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Finalmente está la Metódica (M), o sea la colección de métodos generales,
especialmente el método científico y el método experimental, y métodos
particulares por ejemplo el método de muestreo estadístico, los métodos
especiales utilizados para hacer microscopía electrónica o para redactar y
circular cuestionarios en sociología, etc.
En resumen,
CP = <C, S, D, G, F, B, P, A, O, M >,
donde:
C = comunidad
S = sociedad
D = dominio
G = supuestos filosóficos
F = fondo formal
¿La
B = fondo específico pedagogía es
P = problemática una disciplina
aislada?
A = fondo de conocimientos
O= objetivos
M = metódica
Ahora bien, hay ciertas condiciones que deben cumplir esta decatupla o, mejor
dicho, una disciplina para ser considerada científica, además de las que he
mencionado. Una de estas condiciones es que no debe estar aislada. Es decir,
toda ciencia forma parte de un sistema de ciencias, en el sentido de que cada
una de estas ciencias tiene alguna ciencia vecina con la que se solapa aunque
sea parcialmente. Por ejemplo, en el caso de la física y la química, el
solapamiento es la fisicoquímica. La biología y la física se combinan formando la
biofísica, y así sucesivamente. La sociología y la economía se unen en la
sociología económica y, aún más íntimamente, en la socioeconomía. La historia
y la sociología se combinan formando la historia sociológica y la sociología
histórica.
Si alguien menciona una disciplina totalmente aislada, que no forma parte del
sistema de las ciencias, esto indica que no es ciencia genuina. Una de las
características de la parapsicología y psicoanálisis, etc. es que no se solapan
con ninguna otra disciplina: están aisladas, no forman parte de la familia de las
ciencias.
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permanece constante. Es decir, van variando en el curso de la historia. Por En el conociejemplo
se van modificando desde luego las comunidades, las sociedades se miento ten un constante odo está
van modificando, el dominio o universo del discurso de cada ciencia se va cambio, éste no
ampliando habitualmente. Por ejemplo, se restringe cuando una ciencia se es estático.
subdivide en varias ramas. Otro ejemplo: se descubre nuevas cosas o se
descubre que algo que se creía que existía, de hecho no existe. En todo caso,
ninguna ciencia auténtica permanece constante. La ciencia perenne es una
ilusión.
Ahora quisiera hacer una diferencia radical entre dos grupos de ¿Cuál es la diferencia ciencias:
las ciencias formales principalmente la matemática, y las ciencias de entre lo factual hechos o
fácticas. Desde luego que lo que voy a decir pertenece a una cierta y lo forma?
filosofía de
la matemática, la mía. Hay muchas otras filosofías de la a = a matemática, pero de ellas no
podemos ocuparnos en detalle ahora; puede ser Todos los durante el periodo de la discusión.
cuerpos
ocupan lugar en
un el
Los objetos matemáticos no cambian por sí mismos: son, como decía Platón,
eternos. Esto no quiere decir que existan por sí mismos. Si uno es idealista, en
particular platónico, dirá que sí, que la matemática preexiste a los matemáticos,
así como las rocas preexisten a los geólogos.
Si adoptamos una posición realista, diremos que los objetos matemáticos son
creaciones de los matemáticos. El día que deje de haber matemáticos, o al
menos personas capaces de entender algo de matemática, dejará de haber
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objetos matemáticos. Pero eso sí, hacemos de cuenta o fingimos, que los objetos
matemáticos tienen una existencia propia y que sus características son
independientes de la manera en que se los piense.
Por ejemplo, usted y yo pensamos seguramente el mismo número 3 de ¿Por qué la matemática es
manera diferente, porque nuestros cerebros, aunque son muy parecidos, tienen una ciencia
algunas diferencias. Sin embargo estamos ambos diciendo "estoy pensando en muy particular? el
número 3". Cuando alguien demuestra el teorema de Pitágoras pasa por un Si a = a es proceso
mental diferente del proceso mental por el cual pasó el mismo verdadero, ¿qué Pitágoras o, mejor
dicho, aquel miembro de la Escuela de Pitágoras que garantiza verdad? esta demostró el teorema
justamente famoso.
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elevado a la 10 elevado a la 10; pero no tenemos la capacidad de concebir un
número tan grande como éste. Sin embargo, nadie puede impedirnos utilizar ese
concepto que no ha sido pensado y que no puede pensarse. Otros ejemplos: la
recta infinita, o conjunto de todos los números, "reales", y la familia de todos los
subconjuntos de ese conjunto.
En general, si afirmo que una proposición es verdadera de hecho, es porque hay un conjunto
de hechos que son descritos adecuadamente, ¿Una propo-
correctamente, más o menos exactamente por esa proposición. Estos hechos sición
verdadera de
es conocidos son el soporte empírico de la proposición de marras. En otras acuerdo a la palabras,
esta proposición será declarada verdadera si y sólo si corresponde a precisión de
su lenguaje?
esos hechos. Por ejemplo, si digo que está lloviendo en este momento en alguna
parte (que no sea Lima, desde luego) esta proposición va a ser verdadera si y
sólo si de hecho llueve en alguna parte del mundo.
Luego hay hechos que están fuera de la proposición, pero a los cuales se refiere
una proposición dada. En cambio, la negación de esta proposición será falsa si
no hay ningún hecho que la apoye. Una vez que logro afirmar la proposición p,
no-p queda excluida completamente. Con mayor razón queda excluida la
conjunción de ambas, es decir, p y no-p. Éste es un principio clave de todas las
lógicas propiamente dichas. Sin él no podríamos hacer ciencia de ningún tipo,
formal ni fáctica, básica o aplicada.
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Sin embargo, hay que aclarar que lo anterior vale solamente para las
proposiciones precisas, que sólo contienen predicados exactos. Si en cambio
enuncio proposiciones imprecisas, tales como: "Fulano es más o menos bueno",
o "Zutano es más o menos joven", estoy empleando conceptos imprecisos. En
estos casos también puede valer la contradictoria, tal como "Fulano de tal es más
o menos malo".
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1.4. SEUDOCIENCIA
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Ahora por analogía: consideremos la proposición "Todos los hombres
son mortales". Hasta ahora ha sido confirmada empíricamente: toda la gente
eventualmente ha muerto. Pero un empirista podría argüir que esto no prueba la
imposibilidad de que alguna vez, en alguna parte, existan seres humanos
inmortales. ¿Qué contestaría un realista científico? Veamos.
Ahora voy a hacer una breve mención al psicoanálisis, que —junto con la
homeopatía—es la más rentable de las seudociencias. En efecto, los
psicoanalistas cobran por lo menos cien dólares por hora, mientras que los
parapsicólogos no hacen consultas (a menos que oficien como espiritistas).
Otro ejemplo: la hipótesis de que todo varón sufre el complejo de Edipo. ¿Cuáles son las
hipótesis
del Si un varón ama realmente a su padre, los psicoanalistas dicen que el superyó Psicoanálisis?
del sujeto está reprimiendo el odio. Cuando afirma que ama a su padre está Si hipótesis debe
toda probando que, en realidad, lo odia. La sola presencia de hipótesis ser confirmada
una
hipótesis del
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tipos: las que han sido verificadas, las que han sido falseadas, y las que no han
sido puestas a prueba. Yo no conozco ninguna que haya sido verificada. Una
tras otra, las que han sido puestas a prueba, han sido refutadas.
Hace ya una cuarentena de años se probó que no hay ninguna correlación entre
la personalidad y la manera en que al niño de corta edad le han entrenado los
esfínteres. Otro mito freudiano es el del orgasmo vaginal. También éste ha sido
refutado hace una cuarentena de años.
Esto no quita que no exista toda una industria: la terapia de los ¿A qué se refiere con lo recuerdos
reprimidos. Este negocio, hasta hace poco floreciente en los EE.UU., del mito se ha desinflado
en años recientes. El negocio consiste en lo siguiente. Una psicoanalítico?
persona, por lo común una mujer, acude donde una psicoanalista porque tiene
algún problema psicológico. Puede ser que él o la psicoanalista le diga:
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- No, lo que pasa es que usted ha reprimido ese recuerdo. Yo voy a
ayudarla a recuperar ese recuerdo reprimido.
Nada de esto implica que en algunos casos haya habido incesto. Pero esos
casos han sido descubiertos de una manera muy diferente. Han sido verificados
por testigos y visitadores sociales. No se ha recurrido a sugestión ni a drogas,
nadie ha injertado recuerdos. Bueno, en todo caso, si hay interés podremos
volver al psicoanálisis cuando nos ocupemos de la Psicología.
Hay ciencias básicas, hay técnica, y en el medio tenemos las ciencias ¿Cuándo un investigador
aplicadas, por ejemplo la farmacología, la toxicología, la criminología, etc. es un
Estas disciplinas buscan verdades, lo mismo que las ciencias básicas. Pero las Científico cuando
es un y verdades que buscan son de posible utilización práctica, de posible valor o un técnico?
práctico. Ejemplo, la investigación de productos naturales en química, bioquímica y
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farmacología, con la finalidad de ver si algunos de ellos podrían utilizarse en la industria
farmacéutica.
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Desde el punto de vista ético, es interesante observar que la técnica tenga la misma
endomoral que la ciencia básica Pero también está sometida a Las exigencias lo que yo llamo
exomoral, es decir a exigencias sociales. Se da por supuesto sociales preque el técnico debe
ajustarse a la verdad, buscar la calidad y no debe engañar sionan a la a su cliente. Todas
ciencia.
Hay una enorme diferencia entre la técnica artesanal, por ejemplo la técnica de
la confección de vestidos por modistas, y la técnica de la confección de vestidos
en escala industrial. Son técnicas bastante diferentes, porque en la producción
en gran escala se necesita maquinaria especializada, que se diseña sobre la
base de conocimientos de ingeniería, que a su vez se basan sobre la física y la
matemática.
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Así como hay seudociencias hay seudotécnicas. La primera de éstas parece
En tierra de
ciegos el
tuerto es el
haber sido la magia. Aunque suele afirmarse que la magia es la antecesora de rey.
la ciencia, la verdad es que la magia es la antecesora de la técnica. En efecto,
el mago se proponía, se propone, modificar, ya sea la naturaleza, ya sea la
gente. Lo que ocurre es que el mago no empleaba los métodos adecuados. Si
era astuto engañaba a la gente para hacerla creer que, en efecto, era eficaz.
Por ejemplo, el chamán o mago de una tribu africana empieza la danza de la
lluvia poco antes de empezar la estación de las lluvias. Él sabe cuándo empiezan
las lluvias, porque lleva la cuenta de los días: es el encargado del calendario.
más racionales.
Uno de los casos más trágicos es el de los maniaco-depresivos, que hasta los
años 50 eran intratables. A partir de entonces no es que se los puede curar, pero
sí se los puede tratar. Es decir, se puede corregir levemente la transmisión de
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ciertos neurotransmisores, tales como la serotonina, de modo tal que las
fluctuaciones afectivas estén más o menos acotadas. Así se evita casi siempre
que el paciente se desespere y se suicide. Un depresivo no tratado con fármacos
no sólo es incapaz de trabajar, sino que termina por suicidarse. Por siguiente, es
irresponsable, e incluso criminal, encomendar su tratamiento a psicoterapeutas,
que creen en la omnipotencia del verbo y en cambio no creen que el cerebro
tenga algo que ver en las perturbaciones mentales.
Hay dos razones por las cuales la psiquiatría biológica está poco desarrollada. Una es que
sigue dominando el mito del alma inmaterial, ¿Somos consuinventado por las religiones y reforzado
por las filosofías idealistas. El segundo midores de la seudotécnica? motivo es que la mayoría de los
psiquiatras no tienen una formación científica Esa es una adecuada. Tienen formación de
médicos. Son entrenados para aplicar razón porqué existen.del conocimientos biomédicos, no para
contribuir a ellos.
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Este procedimiento no es científico, y ello por dos razones. En primer lugar,
involucra la conocida falacia del post hoc, ergo propter hoc (después de ello, por
lo tanto a causa de ello). Segundo, siempre que se medique, bien o mal, obra el
efecto placebo, o sea, la sugestión: si tengo fe en un remedio, me sentiré mejor.
Si somos optimistas vamos a sobrellevar una enfermedad o una desgracia
mucho mejor que si somos pesimistas. Es decir, la autosugestión, y en particular
el efecto placebo, es real. En resumen, el razonamiento empirista es inválido.
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El artículo de marras fue objeto de una investigación por un equipo formado por
el director de Nature, el célebre James Randy —un mago de espectáculos que
se especializa en trucos mágicos— y un investigador del famoso instituto
norteamericano de la salud. Los tres fueron al laboratorio de Benveniste y
repitieron los experimentos de su equipo (que, casualmente, habían sido
subvencionados por la industria homeopática francesa). La verdad, admitió el
doctor Benveniste, es que los experimentos siempre dan bien cuando los hace
la doctora fulana. Naturalmente, esto reforzó la sospecha de los visitantes. Éstos
repitieron los experimentos de acuerdo con los protocolos, y no encontraron
nada. Pocos años después, el gobierno francés cerró el laboratorio fraudulento.
25
HANS REICHENBACH;
Hamburgo, 1891 – Los Ángeles, 1953.
26
Toda teoría del conocimiento debe partir del conocimiento como un El saber de la experiencia y el
hecho sociológico dado. El sistema de conocimiento como ha sido construido conocimiento, por
generaciones de pensadores, los métodos usados para adquirir son propiedad de la sociedad.
conocimientos en los primeros tiempos o en nuestros días, los fines del conocimiento tal como
son expresados por el proceder de la investigación científica, el lenguaje en el cual el
conocimiento es formulado; todo ello nos es dado de la misma forma que otros hechos
sociológicos, tales como las costumbres sociales, los hábitos religiosos, o las instituciones
políticas.
¿Qué genera esta diferencia? Usualmente se dice que es una diferencia La epistemo-
logía, y
la de las relaciones internas y externas entre aquellas expresiones humanas que
sociología, tomadas como un todo son denominadas “conocimiento”. Las relaciones
aportan al
conocimiento internas son de tal naturaleza que pertenecen al contenido del conocimiento. en
general
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externas en las que esta ciencia se encuentra también interesada. Un sociólogo,
por ejemplo, puede informar que los astrónomos construyen grandes
observatorios con telescopios para observar las estrellas y de esta suerte la
relación interna entre los telescopios y las estrellas entra dentro de la descripción
sociológica.
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divergentes acerca de nuevos hechos observados; el genio científico nunca se
ha sentido constreñido por los rígidos pasos y las vías prescritas por el
razonamiento lógico. Será, en consecuencia, un intento vano tratar de construir
una teoría del conocimiento que sea al mismo tiempo lógicamente completa y
que guarde estricta correspondencia con los procesos psicológicos del
pensamiento.
A pesar de realizarse como una construcción ficticia, nosotros debemos retener la noción de
tarea descriptiva de la epistemología. La construcción que va a ser lograda no es arbitraria;
está ligada al pensamiento real por el postulado de correspondencia. Es aún, en cierto sentido,
una modalidad de pensamiento mejor que el pensamiento real. Teniendo a la vista la
reconstrucción racional sentimos la sensación de que solamente ahora comprendemos lo que
pensamos y admitimos que ella expresa lo que nos ¿Qué carac-
proponemos, hablando en sentido estricto. Es un hecho psicológico remarcable teriza lenguaje cienal
que exista tal avance hacia la comprensión de nuestros propios pensamientos, tífico y a las el
mismo hecho que constituyó la base de la mayéutica de Sócrates y que ha exposiciones
científicas?
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en que un matemático publica una nueva demostración a un físico su
razonamiento lógico para la fundamentación de una nueva teoría, casi
corresponde a nuestro concepto de reconstrucción racional, y la bien conocida
diferencia entre el modo como el pensador descubre un teorema y el modo como
lo presenta a un auditorio puede ilustrar la diferencia en cuestión. Introduciré los
términos contexto del descubrimiento y contexto de la justificación para señalar
esta distinción. En consecuencia, tenemos que decir que la epistemología está
abocada a la construcción del contexto de la justificación. Pero aun la forma de
presentación de las teorías científicas es sólo una aproximación a lo que nosotros
significamos con el contexto de la justificación. Porque aun la forma escrita de
las exposiciones científicas no siempre satisface las exigencias de la lógica o
neutraliza los resabios de la motivación subjetiva de la cual tales teorías
surgieron. Si la presentación de cualquier teoría es sometida a un riguroso
examen epistemológico, el veredicto resulta todavía más desfavorable. Pues el
lenguaje científico, estando destinado como el lenguaje de la vida diaria a
propósitos prácticos, contiene tantas abreviaciones e inexactitudes toleradas
silenciosamente, que un lógico nunca estará plenamente satisfecho con la forma
de las publicaciones científicas. Nuestra comparación, sin embargo, puede al
menos indicar el modo en que queremos que el pensamiento sea reemplazado
por operaciones justificables; y puede también mostrar que la reconstrucción
racional del conocimiento pertenece a la tarea descriptiva de la epistemología.
Esta se encuentra ligada al hecho del conocimiento de la misma manera que la
exposición de una teoría está ligada a los procesos de pensamiento de su autor.
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pensamiento real sino la construcción de su equivalente el cual está ligado al primero por el
postulado de correspondencia y permite someter el conocimiento a crítica.
ciencia. Los problemas de la lógica más conocidos pertenecen a este dominio; la teoría del
silogismo fue construida para justificar el pensamiento deductivo reduciéndolo a ciertos
esquemas demostrativos de operaciones, y la moderna teoría del carácter tautológico de las
fórmulas lógicas debe ser interpretada como una justificación del pensamiento deductivo
concebido en
una forma más general. La cuestión de la síntesis a priori que ha jugado un rol
tan importante en la historia de la filosofía, también cae dentro de este marco; y
de la misma manera el problema del razonamiento inductivo del que ha surgido
más de una “investigación concerniente al entendimiento humano”. El análisis de
la ciencia comprende todos los problemas básicos de la epistemología
tradicional; por tanto está considerado en primer plano cuando hablamos de
epistemología.
El método científico no es, en cada paso de su proceder, dirigido por el El método científico está
principio de validez, hay otros pasos que tiene el carácter de decisiones precedido en volitivas.
Esta es la distinción que debemos enfatizar en el mismo principio de algunos pasos
por decisiones
las investigaciones epistemológicas. Que la idea de verdad o validez tiene una volitivas. influencia
directiva en el pensamiento científico es obvio y ha sido notado en todos los tiempos por los
epistemólogos. Que hay ciertos elementos del conocimiento, sin embargo, que no son
gobernados por la idea de verdad pero que están sujetos a decisiones volitivas, y aunque
influyendo poderosamente en la construcción de todo el sistema del conocimiento no afectan
su carácter de verdad, es menos conocido por los investigadores en filosofía. La presentación
de las decisiones volitivas contenidas en el sistema del conocimiento constituye por tanto, una
parte que integra la tarea crítica de la epistemología. Para dar un ejemplo de las decisiones
volitivas nosotros podemos señalar las llamadas convenciones, por ejemplo la convención
concerniente a la unidad de medida de longitud y al sistema decimal, etc. Pero no todas las
convenciones son tan obvias y es a veces un problema más bien difícil encontrar los indicios
que convenciones. El progreso de la epistemología ha sido frecuentemente complementando
por el descubrimiento del carácter convencional de ciertos elementos tomados hasta entonces,
como si tuvieran el carácter de ser decidible como verdaderos o falsos; el descubrimiento de
Helmholtz de la arbitrariedad de la definición de congruencia espacial, el descubrimiento de
Einstein de la relatividad de la simultaneidad, significan el reconocimiento de que lo que fue
considerado un enunciado debe ser reemplazado por una decisión. Encontrar todos los puntos
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en los cuales hay decisiones implícitas es una de las más importantes tareas de la
epistemología.
Las convenciones constituyen una clase especial de decisiones; ellas Las convenciones
cientirepresentan una elección entre concepciones equivalentes. Los diferentes ficas son
un sistemas de pesos y medidas son un buen ejemplo de tal equivalencia; ellos punto de
32
bifurcación. La delimitación de un concepto puede ser de carácter convencional,
por ejemplo diferentes delimitaciones pueden conducir a sistemas equivalentes.
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de la física. La moderna epistemología ha mostrado que el problema tal como es
formulado dentro del kantismo está mal planteado, desde que supone una
decisión que Kant no vio. Nosotros conocemos las controversias acerca del
“significado del significado”; su carácter apasionado se debe a la convicción de
que hay un significado absoluto del significado que debemos descubrir, mientras
que la cuestión puede ser discutida solamente con respecto al concepto de
significado correspondiente al uso de la ciencia o presupuesto en ciertas
conexiones. Pero nosotros no queremos anticipar la discusión de este problema
y nuestro ulterior tratamiento de él contendrá una más detallada explicación de
nuestra distinción entre enunciados y decisiones.
El concepto de decisión conduce a la tercera tarea que nosotros Una tarea esencial de la debemos
encomendar a la epistemología. Hay muchas situaciones en las que epistemología las decisiones
de la ciencia no pueden ser determinadas precisamente, porque es orientación. la las palabras o
métodos usados son demasiados vagos; y hay otras en las que
dos o aún más decisiones diferentes están en uso, entremezcladas e ejemplo: la
interfiriéndose dentro del mismo contexto confundiendo las investigaciones decisión por
lógicas. El concepto de significado puede servir como ejemplo; algunos ejemplos el sistema
más simples se presentan en la teoría de la medida. El trabajo concreto de la inglés de
investigación científica puede poner de lado las exigencias del análisis lógico, el medidas
hombre de ciencia no siempre tiene en cuenta las demandas del filósofo. conduce a la
Sucede, por tanto, que las decisiones presupuestadas por la ciencia positiva no imposibilida
son aclaradas. En tal caso será tarea de la epistemología sugerir una propuesta d de añadir
en relación con la decisión y nosotros hablaremos, por tanto, de la tarea de números de
orientación de la epistemología como su tercera tarea. Esta función de la medida de
epistemología puede resultar de un gran valor práctico, pero debe pensarse con acuerdo a
claridad que lo que se proporciona aquí es una propuesta y no una las reglas
determinación de carácter veritativo. Nosotros podemos señalar las ventajas de técnicas del
la decisión propuesta y podemos usarla en nuestras propias exposiciones de las sistema
materias relativas al caso, pero nunca podemos reclamar acuerdo con nuestra decimal; así
propuesta en el mismo sentido en que lo reclamamos para enunciados cuya la renuncia a
verdad hemos probado. estas reglas
será una
decisión
Hay sin embargo, una cuestión concerniente a hechos que debe ser implicada. O
un ejemplo
considerada en conexión con la propuesta de una decisión. El sistema del
complicado:
conocimiento está interconectado de tal manera que algunas decisiones están
la decisión
ligadas entre sí; una decisión incluye otras y, aunque somos libres para elegir la
expresada
primera, no somos libres respecto de aquellas que la siguen. Llamaremos al
en la
grupo de decisiones por una decisión, sus decisiones implicadas. Daremos un
aceptación
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de geometría euclidiana en física puede conducir a la concurrencia de extrañas Decir que
algo es
fuerzas, de “fuerzas universales”, que distorsionan todos los cuerpos en la Veritativo
misma magnitud y puede conducir aún a mayores inconvenientes concernientes tiene el
al carácter continuo de la causalidad. El descubrimiento de interconexiones de mismo
sentido que
esta clase es una importante tarea de la epistemología; las relaciones entre afirmar qué
diferentes decisiones son frecuentemente oscurecidas por la complejidad de la algo es
Verdadero.
materia; es solamente añadiendo el grupo de decisiones implicadas que una
propuesta respecto a una nueva decisión resulta completa.
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epistemológicas no son de carácter veritativo sino que puede ser explicada por
decisiones arbitrarias.
Esta tendencia, ante todo, con su fundador Poincaré, tiene méritos históricos
como el haber conducido a la filosofía a poner énfasis en los elementos volitivos
del sistema del conocimiento los cuales habían sido negados antes. En su
posterior desarrollo, sin embargo, ha traspasado grandemente sus límites por
haber exagerado la parte ocupada por las decisiones en el conocimiento. Las
relaciones entre las diferentes decisiones fueron soslayadas y la tarea de reducir
la arbitrariedad a un mínimo por medio de la mostración de las interconexiones
lógicas entre las decisiones arbitrarias fue olvidada. El concepto de decisiones
implicadas, por tanto, puede ser considerado como un dique contra el
convencionalismo extremo: él nos permite separar la parte arbitraria del sistema
del conocimiento de su contenido sustancial, discriminar entra la parte objetiva y
la subjetiva de la ciencia. Las relaciones entre las decisiones no dependen de
nuestra elección sino son prescritas por las reglas de la lógica o por las leyes de
la naturaleza.
Aún más, resulta que la exposición de las decisiones implicadas decide muchas
querellas acerca de la toma de decisiones. Hay decisiones básicas que gozan de
una aceptación casi universal y si nosotros tenemos éxito en mostrar que una de
las decisiones discutibles está implicada por cierta decisión básica, la aceptación
de dicha decisión estará asegurada. Decisiones básicas de este tipo, son, por
ejemplo, el principio de que las cosas de la misma clase recibirán los mismos
nombres, o el principio de que la ciencia proporciona métodos para predecir el
futuro tan exactamente como sea posible (una demanda que será aceptada aun
si la ciencia es encargada de otras tareas). No diré que estas decisiones básicas
deben ser asumidas y retenidas en todo el desarrollo de la ciencia; lo que quiero
expresar es solamente que estas decisiones son actualmente sostenidas por la
mayor parte de la gente y que muchas controversias acerca de decisiones se
originan solamente en no ver la implicación que conduce desde las decisiones
básicas a la decisión en discusión. La parte objetiva del conocimiento, sin
embargo, debe ser liberada de los elementos volitivos por el método de
reducción, transformando la tarea de orientación de la epistemología en la tarea
crítica. Nosotros podemos establecer la conexión en la forma de una implicación.
36
de elementos volitivos; ella es la forma en la cual la parte objetiva del
conocimiento encuentra expresión.
Decisión Decisión
1 2
Decisión Decisión
5 3
Decisión
4
37
CAPITULO II
38
Mientras los animales inferiores sólo están en el mundo, el hombre trata de
entenderlo; y, sobre la base de su inteligencia imperfecta pero perfectible del
mundo, el hombre intenta enseñorearse de él para hacerlo más confortable.
En este proceso, construye un mundo artificial: ese creciente cuerpo de
ideas llamado «ciencia», que puede caracterizarse como conocimiento
racional, sistemático, exacto, verificable y por consiguiente falible. Por
medio de la investigación científica el hombre ha alcanzado una
reconstrucción conceptual del mundo que es cada vez más amplia, profunda
y exacta.
Mario Bunge.
39
OBJETIVOS DE LA II UNIDAD
40
ALAN CHALMERS; Bristol 1939
41
3.1. UNA OPINIÓN DE SENTIDO COMÚN AMPLIAMENTE COMPARTIDA SOBRE LA
CIENCIA.
42
La concepción inductivista ingenua de la ciencia, que esbozaré en las
siguientes, secciones, puede ser considerada como un intento de formalizar esta
imagen popular de la ciencia. La he denominado inductivista porque se basa
en un razonamiento inductivo, como explicaré brevemente, Argumentaré que
esta concepción de la ciencia, como la concepción popular a la que se asemeja,
está completamente equivocada e incluso es peligrosamente engañosa. Espero
que para entonces resulte evidente que el adjetivo «ingenuo» es el adecuado
para describir a muchos inductivistas.
A las doce de la noche del 1 de enero de 1975, Marte aparecía en tal y tal
posición en el cielo.
43
Los enunciados del tipo citado anteriormente pertenecen al conjunto de los
denominados enunciados singulares. Los enunciados singulares, a diferencia de
un segundo grupo de enunciados que veremos en breve, se refieren a un
determinado acontecimiento o estado de cosas en un determinado lugar y en un
momento determinado. El primer enunciado se refiere a una determinada aparición
de Marte en un determinado lugar del cielo en un momento especificado, el
segundo a una determinada observación de un determinado palo, etc. Es evidente
que todos los enunciados observacionales serán enunciados singulares. Proceden
de la utilización que hace el observador de sus sentidos en un lugar y un momento
determinados.
A continuación veremos algunos ejemplos simples que podrían formar parte del
conocimiento científico.
De la astronomía:
Los planetas se mueven en elipses alrededor de su sol.
De la física:
Cuando un rayo de Iuz pasa de un medio a otro cambia de dirección de
tal manera que el seno del ángulo de incidencia dividido por el seno del
ángulo de refracción es una característica constante de los dos medios.
44
De la psicología:
Los animales en general poseen una necesidad inherente de algún tipo
de descarga agresiva.
De la química:
Los ácidos vuelven rojo el papel de tornasol.
¿Qué es un
Estos son enunciados generales que expresan afirmaciones acerca de las enunciado
Ahora se puede plantear la siguiente cuestión. Si la ciencia se basa en ¿Qué es una ley
universal? la
experiencia, entonces ¿por qué medios se pueden obtener de los enunciados
singulares, que resultan de la observación, los enunciados generales que constituyen el
conocimiento científico? ¿Cómo se pueden justificar las afirmaciones generales y no
restringidas que constituyen nuestras teorías, basándose en la limitada evidencia constituida
por un número limitado de enunciados observacionales?
45
singulares, una ley universal. Por ejemplo, podría ser lícito generalizar, a partir
de una lista finita de enunciados observacionales referentes al papel de tornasol
que se vuelve rojo al ser sumergido en ácido, esta ley universal: «los ácidos
vuelven rojo el papel de tornasol», o generalizar, a partir de una lista de
observaciones referentes a metales calentados, la ley: «los metales se dilatan al
ser calentados». Las condiciones que deben satisfacer esas generalizaciones
para que el inductivista las considere lícitas se pueden enumerar así:
El tipo de razonamiento que nos permite ir de los enunciados singulares a los universales, es
decir, de la parte al todo, se razonamiento
llama inductivo
, y el proceso,
inducción
.
Si se confirma
HIPÓTESIS empíricamente
Teoría
Leyes
GENERALIZACIÓN
Leyes
OBSERVACIONES Leyes
46
Un modo de aumentar el número de observaciones en los ejemplos
mencionados sería calentar repetidas veces una misma barra de metal u observar
de modo continuado a un australiano que se emborracha noche tras noche, y
quizás día tras día. Evidentemente, una lista de enunciados observacionales
obtenidos de ese modo formaría una base muy insatisfactoria para las
respectivas generalizaciones. Por eso es necesaria la condición 2. «Todos los
metales se dilatan al ser calentados» sólo será una generalización lícita si las
observaciones de la dilatación en las que se basa abarcan una amplia variedad
de condiciones. Habría que calentar diversos tipos de metales, barras de hierro
largas, barras de hierro cortas, barras de plata, barras de cobre, etc., a alta y baja
presión, a altas y bajas temperaturas, etc. Si en todas las ocasiones todas las
muestras de metal calentadas se dilatan, entonces y sólo entonces es lícito
generalizar a partir de la lista resultante de enunciados observacionales la ley
general. Además, resulta evidente que si se observa que una determinada
muestra de metal no se dilata al ser calentada, entonces no estará justificada la
generalización universal. La condición 3 es esencial.
El tipo de razonamiento analizado, que nos lleva de una lista finita de enunciados
singulares a la justificación de un enunciado universal, que nos lleva de la parte
al todo, se denomina razonamiento inductivo y el proceso se denomina inducción.
Podríamos resumir la postura inductivista ingenua diciendo que, según ella, la
ciencia se basa en el principio de inducción, que podemos expresar así:
47
crecimiento de la ciencia es continuo, siempre hacia adelante y en ascenso, a
medida que aumenta el fondo de datos observacionales.
Figura 1
48
El estudio del razonamiento deductivo constituye la disciplina de la lógica [A
veces se considera que la lógica incluye el estudio del razonamiento inductivo,
de manera que hay una lógica inductiva así como una lógica deductiva]. No se
intentará proporcionar una explicación y valoración detalladas de la lógica en este
libro. En lugar de esto, se ilustrarán algunas de las características importantes
para nuestro análisis de la ciencia mediante ejemplos triviales.
Ejemplo 1:
1. Todos los libros de filosofía son aburridos.
2. Este libro es un libro de filosofía.
Ejemplo 2:
49
1. Muchos libros de filosofía son aburridos.
2. Este libro es un libro de filosofía.
En este ejemplo, (3) no se sigue necesariamente de (1) y (2). Es posible que (1)
y (2) sean verdaderas y que, no obstante, (3) sea falsa. Aunque (1) y (2) sean
verdaderas, puede suceder que este libro sea, sin embargo, uno de los pocos
libros de filosofía que no son aburridos. Afirmar que (1) y (2) son verdaderas y
que (3) es falsa no supone una contradicción. El argumento no es válido.
El lector se puede sentir ya aburrido. Las experiencias de ese tipo tienen que
ver, ciertamente, con la verdad de los enunciados (1) y (3) en los ejemplos 1 y 2.
Pero una cuestión que hay que señalar aquí es que la lógica y la deducción por
sí solas no pueden establecer la verdad de unos enunciados fácticos del tipo que
figura en nuestros ejemplos. Lo único que la lógica puede ofrecer a este respecto
es que, si las premisas son verdaderas, entonces la conclusión debe ser
verdadera. Pero el hecho de que las premisas sean verdaderas o no, no es una
cuestión que se pueda resolver apelando a la lógica. Una argumentación puede
ser una deducción perfectamente lógica aunque conlleve una premisa que sea
de hecho falsa. He aquí un ejemplo.
Ejemplo 3:
50
1.4. LA PREDICCIÓN Y LA EXPLICACIÓN EN EL INDUCTIVISMO
Ejemplos menos triviales serán más complicados, pero los papeles que
desempeñan la observación, la inducción y la deducción siguen siendo en
esencia los mismos. Como ejemplo final consideraremos la explicación
inductivista de cómo puede la ciencia física explicar el arco iris.
La premisa simple (1) del ejemplo anterior es reemplazada en este caso por una
serie de leyes que rigen el comportamiento de la luz, a saber, las leyes de la
reflexión y de la refracción de la luz y afirmaciones acerca de la medida en que
el grado de refracción depende del color. Estos principios generales se derivan
de la experiencia por inducción. Se efectúan una gran cantidad de experimentos
de laboratorio, reflejando rayos de luz de espejos y superficies de agua, midiendo
qué y (3) no se establece gracias a ésta o a otra deducción. Para un inductivista, la ella cae? Pero
fuente de la verdad no es la lógica, sino la experiencia. Desde este punto de por podría ocurrir de
qué no vista, (1) se determinará por observación directa del agua congelada. Una vez otra manera
que se han establecido (1) y (2) mediante la observación y la inducción, se distinta. puede deducir
de ellas la predicción (3).
51
los ángulos de incidencia y refracción de los rayos de luz que pasan del aire al
agua, del agua al aire, etc., en una gran variedad de condiciones, repitiendo los
experimentos con luz de varios colores, etc., hasta que se dan las condiciones
necesarias para considerar lícita la generalización inductiva de las leyes de la
óptica.
También se reemplazará la premisa (2) del ejemplo anterior por una serie más
compleja de enunciados. Dichos enunciados incluirán afirmaciones en el sentido
de que el sol está situado en una posición determinada en el cielo con respecto
a un observador en la tierra, y que caen gotas de lluvia procedentes de una nube
situada en una región determinada con relación al observador. Nos referiremos a
estos conjuntos de enunciados, que describen los detalles de la situación que se
está investigando, como las condiciones iniciales. Las descripciones de las
situaciones experimentales serán ejemplos típicos de condiciones iníciales.
Dadas las leyes dela óptica y las condiciones iniciales, es posible entonces
efectuar deducciones que proporcionen una explicación de la formación de un
arco iris visible para el observador. Estas deducciones ya no serán tan evidentes
como en nuestros ejemplos anteriores y supondrán tanto argumentaciones
matemáticas como verbales. La argumentación será más o menos la siguiente.
Si suponemos que una gota de lluvia es más o menos esférica, entonces el
trayecto de un rayo de luz a través de una gota de agua será más o menos el
dibujado en la figura 2. Si un rayo de luz blanca incide en una gota de lluvia en a,
entonces, si la ley de la refracción es verdadera, el rayo rojo viajará a lo largo de
la línea ab y el rayo azul a lo largo de ab'. Una vez más, si las leyes que rigen la
52
reflexión son verdaderas, entonces ab debe reflejarse a lo largo de bc y ab' a lo
largo de b'c'. De nuevo la refracción en c y c' se determinará mediante la ley de
la refracción, de modo que un observador que contemple la gota de lluvia verá
los componentes rojo y azul de la luz blanca por separado (y también todos los
demás colores del espectro). Nuestro observador también podrá ver la misma
separación de colores en cualquier gota de lluvia que esté situada en una parte
del cielo tal que la línea que una la gota de lluvia con el sol forme un ángulo D
con la línea que une la gota de lluvia con el observador. Así pues, las
consideraciones geométricas proporcionan la conclusión de que el observador
podrá ver un arco coloreado, siempre que la nube de lluvia esté suficientemente
extendida.
Figura 2
En
esta ocasión
sólo he
bosquejado
la
explicación
del arco iris,
pero lo que
se ofrece
debe bastar
para
ejemplificar
53
la forma general del razonamiento implicado. Dado que las leyes de la óptica ¿Es lo mismo
una ley que una
son verdaderas (y para el inductivista ingenuo eso se puede establecer por teoría?
inducción a partir de la observación) y dado que las condiciones iníciales están
descritas de modo preciso, se sigue necesariamente la explicación del arco iris.
Se puede resumir de la siguiente manera la forma general de todas las
explicaciones y predicciones científicas:
1. Leyes y teorías.
2. Condiciones iniciales.
3. Predicciones y explicaciones
54
3.5. EL ENCANTO DEL INDUCTIVISMO INGENUO
Ya hemos visto cómo el inductivista ingenuo da cuenta del poder explicatorio y predictivo
de la ciencia.
55
Ya he mencionado que considero que la concepción inductivista ingenua de la ciencia
está muy equivocada y es peligrosamente engañosa.
Sin embargo, quizás deba aclarar que la postura que he esbozado es una forma
muy extrema de inductivismo. Muchísimos inductivistas sofisticados no querrían
verse asociados con algunas características de mi inductivismo ingenuo. No
obstante, todos los inductivistas afirmarían que, en la medida en que se pueden
justificar las teorías científicas, se justifican porque se apoyan inductivarnente en
la base más o menos segura que proporciona la experiencia.
56
ERNEST NAGEL; Praga, 1901 -
1985.
Nueva York
57
adicionales.
Desde que Aristóteles analizó la estructura de lo que él consideraba como Para mayor
el ideal de la ciencia, la idea de que las explicaciones científicas deben tener conveniencia,
siempre la forma de una deducción lógica ha gozado de amplia aceptación. podemos
Aunque puede discutirse la universalidad del modelo deductivo, aun cuando clasificar
dicho modelo sea propuesto como ideal, es indiscutible que muchas estas
explicaciones de las ciencias —también los sistemas explicativos más vastos e condiciones
impresionantes—, tienen esta forma. Además, de muchas explicaciones que en tres
aparentemente no obedecen a este modelo, cuando se hacen explícitas las categorías:
suposiciones implícitas en las mismas, se comprueba que, en realidad, las
responden a él; y tales casos no deben ser considerados como excepciones del condiciones
modelo deductivo, sino como ilustraciones del uso frecuente de razonamientos lógicas, que
entimemáticos especifican
diversos
Por ejemplo, la dilatación, de un trozo de alambre en una ocasión determinada
requisitos
puede ser explicada citando el hecho de que se acaba de calentar el alambre; y es
formales para
evidente que el explicandum no se deduce lógicamente de la premisa explicativa, como
se indica. Sin embargo, parece muy plausible que la explicación propuesta supone las premisas
tácitamente premisas adicionales, por ejemplo, que el alambre es de cobre y que el explicativas;
cobre siempre se dilata al ser calentado. Cuando se hacen explícitas estas suposiciones las
adicionales, la explicación sigue el modelo deductivo. epistémicas,
que estipulan
las relaciones
cognoscitivas
en las que
debemos
colocarnos
frente a la
premisa; y
Debemos investigar, sin embargo, si además del requisito definicional de que Entimema es un
razonamiento
en los tipos deductivos de explicación el explicandum se deduzca que se formula en
forma incompleta,
lógicamente de las premisas explicativas, las explicaciones satisfactorias de parte del cual se
deja
este tipo deben cumplir otras condiciones. Pues es evidente que no toda sobrentendido, o
explicación propuesta es aceptable simplemente porque tenga una estructura sea que está
implícito dentro
deductiva. Por ejemplo, es probable que nadie considere, satisfactoria una del contexto del
explicación del hecho de que Júpiter tenga al menos un satélite a partir del hecho discurso del
caso. “de una
de que Júpiter tenga ocho lunas, aunque el primer enunciado se desprenda mujer que tiene
lógicamente del segundo. Las discusiones relativas a este problema se leche se puede
inferir que está
remontan a la antigüedad griega, y se han sugerido muchas condiciones embarazada
las substantivas, que prescriben el tipo de contenido (empírico o de otra
especie) que deben tener las premisas. El significado de estos rótulos se aclarará
a medida que avancemos en nuestra exposición. Pero sería engorroso y
requeriría inútiles repeticiones examinar separadamente cada tipo de condición;
58
por consiguiente, no intentaremos realizar tal análisis rígidamente dividido. No
obstante esto, consideraremos en este capítulo la mayor parte de las condiciones
lógicas que es menester destacar.
59
una densidad de saturación definida. Otras, leyes que pasan inadvertidas
fácilmente porque son muy familiares se ocultan en la caracterización de diversas
cosas como agua, vaso, etc. Estas últimas leyes afirman, en efecto, que hay
distintos tipos de substancias, cada una de las cuales manifiesta ciertas
concatenaciones de características y modos de conducta fijos. Por ejemplo, el
enunciado de que algo es agua afirma implícitamente que una serie de propiedades
(un cierto estado de agregación, un cierto calor, un cierto punto de congelación y
de ebullición, ciertas afinidades para entrar en reacciones químicas con otros tipos
de substancias, etc.) están uniformemente asociadas entre sí. El descubrimiento y
la clasificación de tipos de substancias constituyen una etapa temprana pero
indispensable en el desarrollo del conocimiento sistemático; y todas las ciencias,
inclusive la física y la química, postulan, refinan y modifican distinciones con
respecto a tipos de substancias que han sido reconocidas inicialmente en la
experiencia común. En verdad, el desarrollo de vastos sistemas teóricos sólo
parece posible después de realizar una clasificación preliminar de tipos de
substancias, y la historia de la ciencia confirma repetidamente la opinión de que la
observación y el ordenamiento de diversos tipos de substancias —etapa de
investigación llamada a menudo "historia natural"— es un prerrequisito para el
descubrimiento de tipos de leyes reconocidos más comúnmente y para la
construcción de teorías de largo alcance. La física y la química. sólo surgieron
después de tales clasificaciones preliminares de substancias (cuyos comienzos se
pierden en la primitiva antigüedad); la botánica y la zoología tradicional consisten,
en gran parte, en especificaciones y subordinaciones de especies, y algunas de las
ciencias sociales aún pugnan por lograr formulaciones útiles y confiables de tipos
de seres humanos y de instituciones sociales. El reconocimiento de diferentes
especies marchan a la par con la subordinación (o inclusión) de una especie a otra.
Así, la química no sólo distingue entre las especies cobre y azufre, sino también
entre metales y no metales; incluye el cobre entre los metales y el azufre entre los
no metales. Análogamente, la biología incluye las especies tigre y león en el género
común gato, esta última en el orden más amplio de los carnívoros, los carnívoros
en la clase de los mamíferos, y así sucesivamente. Cuando se logra un sistema de
inclusión entre especies, es posible, explicar (aunque sea de una manera tosca)
por qué un objeto individual es un miembro de una especie determinada,
mostrando que ese objeto es un miembro de una especie subordinada (por
ejemplo, un animalito doméstico es un mamífero porque es un gato y los gatos son
mamíferos). Tales explicaciones, obviamente, están muy lejos del tipo de
explicaciones al cual nos han acostumbrado las ciencias teóricas modernas; sin
embargo, son los primeros pasos por el camino que conduce a las últimas.
60
joven que Pérez" y "todos los mamíferos son vertebrados", no será considerada
como una explicación aunque las premisas incluyan una ley general, simplemente
porque la segunda premisa no es necesaria para la deducción.
Es evidente que este requisito basta para excluir como caso genuino de
explicación la deducción, mencionada antes, del hecho de que Júpiter tiene al
menos un satélite a partir del hecho de que este planeta tiene ocho lunas.
una objetos
tienen propiedades definidas. Nos referiremos a tales enunciados universal?
singulares como a "enunciados de las condiciones iniciales" (o, más brevemente,
como a las "condiciones iniciales"). En general, las condiciones iniciales
constituyen las circunstancias especiales a las cuales se aplican las leyes
incluidas en las premisas explicativas. Sin embargo, no es posible formular en
términos generales las circunstancias que es menester elegir para que sirvan
como condiciones iniciales apropiadas, pues la respuesta a la
Si afirmamos:
cuestión depende del contenido específico de las leyes empleadas, así como Todos los de los
problemas especiales para cuya solución se invocan estas leyes. números son pares.
Entonces esto
significaría que
61
con ser a partir de enunciados que tienen la forma de un condicional universal. (Por
número y par.
( x) (Nx Px) ejemplo, es imposible deducir un enunciado singular de la forma "x es B" a ¿Esto una
sería partir de un condicional universal de la forma "Para todo x, si x es A, entonces
condición
inicial?
x es B".) Pero por obvio que esto sea, se trata de un punto importante que con
frecuencia se pasa por alto en las discusiones acerca de los procedimientos
científicos. Su olvido es responsable, al menos en parte, de la manera
despreocupada de usar a veces grandes generalizaciones para explicar
cuestiones de hechos especiales (particularmente, en el estudio de asuntos
humanos) y del escaso valor, que, a veces, los observadores asignan a
laboriosas investigaciones para determinar los hechos. Sin embargo, a menudo
es difícil utilizar de manera concreta leyes y teorías, simplemente porque las
condiciones iniciales específicas para su aplicación son inaccesibles, y, por lo
tanto, desconocidas. Y, a la inversa, con frecuencia se proponen explicaciones
equivocadas y se hacen predicciones falsas porque las suposiciones generales
empleadas, aunque bastante correctas en sí mismas, se aplican a situaciones
que no constituyen condiciones iniciales apropiadas para tales suposiciones. Si
bien las leyes de uno u otro tipo son indispensables en las explicaciones
científicas del curso real de los acontecimientos, lo que acontece no puede ser
explicado exclusivamente con referencias a leyes. En la búsqueda de
explicaciones científicas, como en la solución de pleitos jurídicos, los, principios
generales solos no bastan para determinar un caso particular.
Ley universal
Premisas
Condiciones iniciales
explicandum
62
Aunque la explicación de que un hecho particular requiere la inclusión en las
premisas de enunciados legales y enunciados referentes a condiciones iniciales,
las investigaciones pueden diferir según estén dirigidas a hallar y establecer un tipo
de premisas u otro. Así, podemos observar la aparición de cierto fenómeno y luego
tratar de explicarlo descubriendo algún otro fenómeno que, sobre la base de una
ley ya establecida, pueda ser considerado como la condición para la aparición del
fenómeno dado. Por ejemplo, si el neumático de un automóvil se desinfla podemos
iniciar una búsqueda de alguna pinchadura, partiendo de la suposición general de
que un neumático se desinfla como consecuencia de las pinchaduras. Por otro
lado, podemos observar la aparición de dos o más fenómenos, sospechar que
están relacionados e intentar descubrir las leyes que formulan los modos
específicos de dependencia entre los fenómenos de ese carácter. Así, podemos
observar que el pulso de una persona se acelera cuando ésta se empeña en algún
ejercicio vigoroso; y si sospechamos que la aceleración del pulso depende de algún
modo del ejercicio, podemos investigar el modo preciso de conexión entre las
actividades para obtener una fórmula general de su relación de dependencia.
Asimismo, en el intento de explicar algunos sucesos, se puede dirigir la
investigación al descubrimiento de ambos tipos de premisas explicativas. Por
ejemplo, podemos no conocer ninguna ley atinente a la aparición de cierto
crecimiento canceroso y podemos desconocer también los fenómenos específicos
de los cuales depende tal crecimiento. Y podemos, por ende, tratar de descubrir
las circunstancias particulares que dieron origen al cáncer y, al mismo tiempo, las
leyes que conectan tales circunstancias con los crecimientos cancerosos.
Toda explicación de leyes parece ser del tipo deductivo y debemos juicio observa-
cionales en su
examinar los rasgos especiales que las caracterizan. Consideraremos en favor.
primer término la explicación de leyes universales. Además, ignoraremos por el
momento no sólo las leyes estadísticas, sino también la distinción mencionada
antes entre explicaciones cuyas premisas son todas "leyes experimentales" y
explicaciones cuyas premisas incluyen el agua. Sería tedioso, sin
suposiciones "teóricas". Consideremos, pues, embargo, especificar con todo
por ejemplo el caso de por qué el hielo flota en detalle la deducción rigurosa de
63
esta ley a partir de las premisas que los físicos Siempre es posible obtener una sola
habitualmente presuponen cuando la explican. premisa, mediante la conjunción de
varias premisas. Lo que se quiere decir,
Bastarán para nuestro propósito las alusiones
es que si sólo hubiera una única premisa
hechas antes acerca de la identidad de estas conjuntiva, ella sería equivalente a una
premisas. clase de premisas lógicamente
independientes en la cual la clase
contendría más de un miembro.
Una primera aproximación a tal deducción es la siguiente: la fuerza de empuje de
un líquido sobre un cuerpo sumergido en él se ejerce en una dirección
perpendicular a la superficie del líquido y es igual, pero de sentido opuesto, al peso
del líquido desplazado por el cuerpo. [Por lo tanto, la fuerza de empuje del agua
sobre el hielo sumergido en ella tiene una dirección perpendicular a la superficie
del agua y es igual al peso del agua desplazada por el hielo.]
Un cuerpo está en equilibrio si y sólo si la suma vectorial de las fuerzas que actúan
sobre él es cero. [Por lo tanto, el hielo sumergido en agua estará en equilibrio si y
sólo si la suma vectorial de las fuerzas que actúan sobre el hielo es cero.]
La suma vectorial de las fuerzas que actúan sobre un cuerpo sumergido en un
líquido, en una dirección paralela a la, superficie del líquido, es cero.
Toda fuerza es la suma vectorial de dos fuerzas (llamadas las "componentes") de
la fuerza dada cuyas direcciones son perpendiculares entre sí. [Por lo tanto, el
hielo sumergido en agua estará en equilibrio si y sólo si la suma vectorial de las
fuerzas que actúan sobre el hielo en una dirección perpendicular a la superficie
del agua es cero. Por lo tanto, también si las únicas fuerzas que actúan sobre el
hielo sumergido en agua son la fuerza de empuje del agua y la fuerza del peso del
hielo, el hielo sumergido en agua estará en equilibrio si y sólo si la fuerza de
empuje del agua es igual, pero de sentido opuesto, al peso total del hielo.]
La densidad del agua es mayor que la densidad del hielo. [Por lo tanto, el peso
de un volumen determinado de agua es mayor que el peso de un volumen igual
de hielo.]
Por lo tanto, si las únicas fuerzas que actúan sobre el hielo sumergido en agua
son la fuerza de empuje del agua y su propio peso, el hielo sumergido en agua
estará en equilibrio si y sólo si una parte del hielo no está sumergida, y la fuerza
de empuje del agua es igual y de sentido opuesto al peso del agua desplazada por
la parte de hielo sumergido. En resumen, el hielo sumergido en agua (y sometido
solamente a la acción de fuerzas "normales") estará en equilibrio si y sólo si flota.
Hay tres cosas evidentes en esta explicación: Todas las premisas son Ten presente enunciados
universales; hay más de una premisa, y cada una de ellas esencial que las para la
definiciones
deducción del explicandum; y las premisas, tomadas aislada o son una parte conjuntamente, no
se deducen lógicamente del explicandum. El primer punto esencial en la ciencia. sólo requiere breve
comentario, pues es lógicamente inevitable, ya que el Es necesario el explicandum mismo es
64
una ley universal. Por consiguiente, la introducción poder distinguir de condiciones
el explicandum
iniciales en las premisas sería gratuita en la explicación de del explicans. leyes universales.
Pero hay también otra consideración que habla en favor de este requisito,
aunque la misma no agrega peso a la argumentación, de manera independiente.
A menudo, reservamos la palabra "explicación", al analizar leyes, a uno de dos
casos posibles. En el primero de éstos, se muestra que el "fenómeno" formulado
por la ley es el resultado de varios factores independientes que entran en algún
conjunto especial de relaciones. En el segundo caso, se muestra que la
asociación invariable entre las características afirmadas por la ley es el producto
65
de dos o más asociaciones que se establecen entre las características
mencionadas en la ley y otras que son eslabones intermedios de una cadena o
red. La intención que guía el establecimiento de esta diferencia quizás se aclare
con los siguientes ejemplos esquemáticos.
x Bx)Cx) la explicación de la ley "cuando los gases que contienen vapor de agua se
( x) (Nx Px)
expanden lo suficiente sin cambiar su contenido de calor, el vapor se ¿Esto sería condensa",
cuando se la deduce de las dos leyes "cuando los gases se una ley? expanden sin un cambio en
su contenido de calor, su temperatura disminuye" y "cuando disminuye la temperatura de un
gas que contiene vapor de agua, disminuye también la densidad de saturación del vapor".
Es evidente que las explicaciones que caen en uno u otro de estos esquemas
alternativos emplean al menos dos premisas. Pero, adoptemos o no el requisito
de que estén presentes al menos dos premisas en una explicación satisfactoria,
66
podemos estar bastante seguros de que no encontraremos en las ciencias
muchas explicaciones que lo violen.
67
derivarían dos consecuencias indeseables: sería imposible obtener para las
premisas otros elementos de juicio que los suministrados por el explicandum; y
la explicación no haría avanzar la organización de la disciplina en cuestión para
convertirla en un sistema, pues, excepto en casos aislados, tanto los hechos
conocidos como los que aún no se han descubierto permanecerían
desvinculados.
¿Qué condiciones debe Hay, sin embargo, un requisito adicional para que las
explicaciones de satisfacer un enunciado leyes sean consideradas satisfactorias, requisito
íntimamente vinculado con el para que este anterior y que ha sido propuesto a menudo. Según
este requisito, al menos una sea aceptado
como una ley?
de las premisas debe ser "más general" que la ley explicada. Así, la ley de Arquímedes (que
aparece en las premisas del ejemplo del hielo) es más general que la ley de que el hielo flota
en, el agua, porque la primera hace una afirmación acerca de todos los líquidos, y no
solamente acerca del agua, y acerca de todos los cuerpos sumergidos en líquidos, y no
solamente acerca del hielo. Análogamente, se sostiene que la ley de la palanca es más
general que las leyes relativas a los movimientos de los vertebrados. De manera más general,
aunque quizás también Más vaga, se dice con frecuencia que las leyes de la física tienen
mayor generalidad que las leyes de la biología.
68
y observar algunas de las dificultades que surgen. Cuando se dice que un
enunciado S1 es más general que otro enunciado S2, presumiblemente no se
supone que S1 deba implicar lógicamente a S2; pues no sería posible efectuar
tal implicación entre la ley de Arquímedes y la ley de que el hielo flote en el agua,
a pesar de que se dice, que la primera es más general que la segunda. Además,
es plausible concebir el significado de la expresión "más general" de tal manera
que pueda decirse de S1que es más general que
S2 no sólo porque el primero implique lógicamente al segundo. Por ejemplo, el
enunciado "todos los planetas se mueven en órbitas elípticas" implica
lógicamente "todos los planetas se mueven en órbitas que son secciones
cónicas", pero el primero, presumiblemente, no es más general que el segundo.
Por consiguiente, para que S1 sea más general que S2, no parece necesario ni
suficiente que S1 implique lógicamente a S2.
(ley de Arquímedes) es más
general, sobre la
Si nos limitamos a una clase especial de Podrían plantearse dificultades de
naturaleza similar, utilizando otras
enunciados que pueden ser comparables en lo equivalencias válidas en la lógica
que respecta a su "generalidad" relativa, una formal. Por ejemplo, 'todos los A son B'
manera obvia de definir esta relación es la es más general que 'todos los AE son
B', pues 'todos los AE son A' es una
siguiente. Consideremos solamente las leyes que
verdad lógica mientras que 'todos los A
pueden ser, formuladas como condicionales son AE' no lo es. Sin embargo, 'todos
universales de, la forma más simple. Sea S1 un los AE son B' es lógicamente
enunciado de la forma "para todo x, si x es A, equivalente a 'todos los A son Bo noE'.
entonces x es B" (o, utilizando una expresión más Pero 'todos los A son B' no es más
general que 'todos los A son Bo no-E',
habitual, de la forma "todo A es B"), y S2 un
no obstante ser más general que un
enunciado de la forma "todo C es D". Se dirá, enunciado lógicamente equivalente a
entonces, que S1es más general que S2si, y sólo este último. No es posible eliminar estas
si, "todo C es A" es lógicamente verdadero, pero dificultades modificando el requisito de
su inverso "todo A es C" no lo es. Además, se dirá la exposición inicial acerca de las
condiciones necesarias y suficientes
que S1 es tan general como S2 si y sólo si, "todo
para la mayor generalidad (según las
A es C" y "todo C es A" son ambos lógicamente cuales 'todos los C son A' debe ser una
verdaderos. Si ninguno de los enunciados que verdad lógica, pero no así su converso)
tienen una de las dos últimas formas es y admitiendo la condición más débil de
lógicamente verdadero, entonces se dirá que S1 y que 'todos los C son A' sea sólo
contingentemente (o fácticamente)
S2 no son comparables con respecto a su
verdadero, pero no su converso.
generalidad. Por ejemplo, la ley de que todos los
objetos sumergidos en líquidos reciben un
impulso hacia arriba de una fuerza igual al peso
del líquido desplazado por el objeto
base de esta definición, que la ley de que el hielo sumergido en el agua flota.
Pues el enunciado "el hielo en el agua es un objeto sumergido en un líquido" es
69
verdadero en virtud del significado asignado a sus términos, mientras que su
converso, obviamente, no lo es.
Los requisitos para las explicaciones considerados hasta ahora han sido ¿Toda
explicación considera casi exclusivamente condiciones lógicas.
Pero es obvio que también es
una relación necesario admitir otros requisitos. Por ejemplo, si
se supiera que una condición
lógica? inicial de una explicación propuesta para un suceso particular fuera falsa,
Aristóteles
70
Al examinar este problema, Aristóteles sostuvo que las premisas de una
explicación deductiva deben ser, entre otras cosas, verdaderas, que se debe
saber que son verdaderas y que deben ser "mejor conocidas" que el explicandum.
Examinaremos estas condiciones por turno y discutiremos otras relacionadas con
ellas.
2. Pero este requisito no nos sirve de mucho para juzgar el valor de una
explicación propuesta, si no estamos en condiciones de discernir si las
premisas son o no falsas. El requisito aristotélico según el cual debe saberse
que las premisas son verdaderas suministra un criterio aparentemente
efectivo para eliminar muchas explicaciones insatisfactorias.
Pero este requisito es demasiado fuerte. Si se lo adoptara, pocas o ninguna
de las explicaciones dadas por la ciencia moderna podrían ser consideradas
satisfactorias. Pues, de hecho, no sabemos si las premisas irrestrictamente
universales supuestas en las explicaciones de las ciencias empíricas son
71
realmente verdaderas; y si adoptáramos este requisito, deberían ser juzgadas
insatisfactorias la mayoría de las explicaciones comúnmente aceptadas en la
ciencia actual.
Se trata, en efecto, de una reducción al absurdo de ese requisito. En la ¿Cómo
una
premisa es recientemente acuñado para tal propósito, para distinguir las verdadera?
72
esta vaguedad, las personas competentes en algún campo de investigación
a menudo están bastante de acuerdo en cuanto a la adecuación de los
elementos de juicio que apoyan una suposición definida. En la práctica, en
todo caso, el uso de la condición más débil da origen a un consenso
bastante grande en lo concerniente al valor de una explicación propuesta.
Sin embargo, podría plantearse contra esta condición la objeción de que,
puesto que los elementos de juicio favorables a una presunta ley universal
no permanecen constantes en el tiempo, una explicación que incluya a
dicha ley en sus premisas y que sea satisfactoria en un momento dado
puede dejar de serlo cuando se descubran elementos de juicio
desfavorables para la ley. Pero esta objeción no debe inquietarnos, a
menos que se haga la dudosa suposición de que, al juzgar que una
explicación es satisfactoria, se está predicando de la explicación una
propiedad intemporal. Es razonable, pues, adoptar la condición
mencionada como requisito epistémico para
las explicaciones adecuadas. simplem
ente
3. El requisito aristotélico de que las premisas de una explicación científica hacia
sean "mejor conocidas" que el explicandum, está íntimamente relacionado explícita
con la concepción aristotélica acerca de lo que constituye el objeto propio esta
del conocimiento científico; Aristóteles aplicaba dicho requisito concepci
exclusivamente a la explicación de leyes científicas. Según esta ón de la
concepción, el genuino conocimiento científico sólo es posible acerca de naturalez
lo que no puede ser de otro modo que como es. Por consiguiente, no a de la
puede haber ningún conocimiento científico de sucesos particulares, y las ciencia.
leyes universales concernientes a algún ámbito de la naturaleza, cuando
no se las reconoce de manera inmediata corno inherentemente La
"necesarias", deben ser explicadas mostrando que son las consecuencias mencion
de los "primeros principios" de ese ámbito, cuya necesidad puede ser ada
captada directamente. Estos primeros principios, pues, son las premisas concepci
últimas de las explicaciones científicas; y ellos son "mejor conocidos" que ón no es
cualquiera de los explicanda porque su necesidad es intrínseca y válida
transparente al intelecto. La rama del conocimiento que, indudablemente, para
sirvió de modelo para esta concepción de la ciencia fue la geometría nada que
deductiva. Pues según la idea que se tenía de la geometría hasta hace pueda
poco, cada uno de sus teoremas enuncia lo que debe suceder ser
universalmente; y aunque esa necesidad y esa universalidad no sean identifica
inmediatamente evidentes, ambas quedan establecidas cuando se do como
deduce, un teorema de los axiomas o primeros principios, más generales, parte del
cuya universalidad es "evidente". Al sostener que las premisas de una contenid
explicación deben ser "mejor conocidas" que el explicandum, Aristóteles o de la
moderna
73
ciencia empírica. Por consiguiente, el requisito aristotélico de que las
premisas explicativas sean mejor conocidas que el explicandum carece
totalmente de importancia como condición para lo que hoy sería
considerado como una adecuada explicación científica.
Un
paradig
es un
¿Qué teorema?, ¿qué es un axioma? ma es lo
que los
miembr
os de
una
comuni
dad
científic
¿Existen criterios para determinar qué algo es válido o inválido? a
compart
CAPITULO III en y,
recíproc
amente,
una
comuni
dad
científic
a
consist
e en
hombre
s que
compart
en un
paradig
ma.
Bajo
esta
perspec
tiva, una
comuni
dad
CONJETURAS EPISTEMOLÓGICAS científic
a está
formada
por
practica
74
ntes de una especialidad científica. Han pasado por una iniciación T. S.
profesional y una educación similar en un grado que no tiene KUHN
comparación con la de la mayor parte de otros campos. En este proceso,
han absorbido la misma literatura técnica y desentrañado muchas de sus
mismas lecciones. Dentro de tales grupos, la comunicación es
relativamente completa y los juicios profesionales, relativamente
unánimes.
75
OBJETIVOS DE LA III UNIDAD
epistemológicas.
76
POPPER, KARL RAIMUND; Viena 1902 -
Londres1994.
77
El hombre de ciencia, ya sea teórico o experimental, propone enunciados —o
sistemas de enunciados— y los contrasta paso a paso. En particular, en el campo
de las ciencias empíricas construye hipótesis —o sistemas de teorías— y las
contrasta con la experiencia por medio de observaciones y experimentos.
Pero, ¿cuáles son estos «métodos de las ciencias empíricas»? Y, ¿a qué cosa
llamamos «ciencia empírica»?
De acuerdo con una tesis que tiene gran aceptación —y a la que nos
opondremos en este libro—, las ciencias empíricas pueden caracterizarse por el
hecho de que emplean los llamados «métodos inductivos»: según esta tesis, la
lógica de la investigación científica sería idéntica a la lógica inductiva, es decir, al
análisis lógico de tales métodos inductivos.
Inferencia inductiva:
Si x es un metal y es sometido al calor entonces se dilata.
Si y es un metal y es sometido al calor entonces se dilata.
Si z es un metal y es sometido al calor entonces se dilata.
Ahora bien, desde un punto de vista lógico dista mucho de ser obvio que
estemos justificados al inferir enunciados universales partiendo de enunciados
78
singulares, por elevado que sea su número; pues cualquier conclusión que
saquemos de este modo corre siempre el riesgo de resultar un día falsa: así,
cualquiera que sea el número de ejemplares de cisnes blancos que hayamos
observado, no está justificada la conclusión de que todos los cisnes sean
blancos.
acerca de si hay leyes naturales cuya verdad nos conste viene a ser otro modo
de preguntar si las inferencias inductivas están justificadas lógicamente.
Mas si queremos encontrar un modo de justificar las inferencias inductivas, hemos de intentar,
en primer término, establecer un principio de inducción. Semejante principio sería un enunciado
con cuya ayuda pudiéramos ENUNCIADO presentar dichas inferencias de una forma lógicamente
aceptable. A los ojos de ANALÍTICO“2 es un los mantenedores de la lógica inductiva, la
importancia de un principio de número par”. inducción para el método científico es máxima:
«...este principio —dice La verdad se determina Reichenbach— determina la verdad de las teorías
científicas; eliminarlo de la solo por la ciencia significaría nada menos que privar a ésta de la
posibilidad de decidir razón.
sobre la verdad o falsedad de sus teorías; es evidente que sin él la ciencia perdería el derecho
de distinguir sus teorías de las creaciones fantásticas y ENUNCIADO
arbitrarias de la imaginación del poeta». SINTÉTICO“El perro es un animal vertebrado”.
79
Pero tal principio de inducción no puede ser una verdad puramente La verdad se determina por
lógica, como una tautología o un enunciado analítico. En realidad, si existiera la experiencia. un
principio de inducción puramente lógico no habría problema de la inducción; pues, en tal caso,
sería menester considerar todas las inferencias inductivas como transformaciones puramente
lógicas, o tautológicas, exactamente lo mismo que ocurre con las inferencias de la lógica
deductiva. Por tanto, el
principio de inducción tiene que ser un enunciado sintético: esto es, uno cuya
negación no sea contradictoria, sino lógicamente posible. Surge, pues, la
cuestión acerca de por qué habría que aceptar semejante principio, y de cómo
podemos justificar racionalmente su aceptación.
80
Por mi parte, considero que las diversas dificultades que acabo de ¿Es lo mismo
esbozar de la lógica inductiva son insuperables. Y me temo que lo mismo ocurre
con la doctrina, tan corriente hoy, de que las inferencias inductivas, aun no
verdad qué
siendo «estrictamente válidas», pueden alcanzar cierto grado de La verdad es validez?
«seguridad» o de «probabilidad». Esta doctrina sostiene que las inferencias un predicado para
calificar a
que decide sobre la verdad. Para ser más exactos, deberíamos decir que sirve para validez se
decidir sobre la probabilidad: pues no le es dado a la ciencia llegar a la verdad emplea calificar a
los para ni a la falsedad..., más los enunciados científicos pueden alcanzar únicamente
argumentos.
grados continuos de probabilidad, cuyos límites superior e inferior, inalcanzables, son la
verdad y la falsedad» [REICHENBACH, Erkenntnis 1, 1930].
Por el momento, puedo hacer caso omiso del hecho de que los creyentes en la
lógica inductiva alimentan una idea de la probabilidad que rechazaré luego por
sumamente inoportuna para sus propios fines. Puedo hacer tal cosa, porque con
recurrir a la probabilidad ni siquiera se rozan las dificultades mencionadas: pues
si ha de asignarse cierto grado de probabilidad a los enunciados que se basan
en inferencias inductivas, tal proceder tendrá que justificarse invocando un nuevo
principio de inducción, modificado convenientemente; el cual habrá de justificarse
a su vez, etc. Aún más: no se gana nada si el mismo principio de inducción no se
toma como «verdadero», sino como meramente «probable». En resumen: la
lógica de la inferencia probable o «lógica de la probabilidad», como todas las
demás formas de la lógica inductiva, conduce, bien a una regresión infinita, bien
a la doctrina del apriorismo.
Para poder desarrollar esta tesis (que podría llamarse «deductivismo», por
contraposición al «inductivismo» [LIEBIG, 1865 fue probablemente el primero que
81
rechazó el método inductivo desde el punto de vista de la ciencia natural: su
ataque se dirigía contra Bacon] es necesario que ponga en claro primero la
distinción entre la psicología del conocimiento, que trata de hechos empíricos, y
la lógica del conocimiento, que se ocupa exclusivamente de relaciones lógicas.
Pues la creencia en una lógica inductiva se debe, en gran parte, a una confusión
de los problemas psicológicos con los epistemológicos; y quizá sea conveniente
advertir, de paso, que esta confusión origina dificultades no sólo en la lógica del
conocimiento, sino en su psicología también.
He dicho más arriba que el trabajo del científico consiste en proponer teorías y
en contrastarlas.
82
exclusivamente en la investigación de los métodos empleados en las
contrastaciones sistemáticas a que debe someterse toda idea nueva antes de
que se la pueda sostener seriamente.
Algunos objetarán, tal vez, que sería más pertinente considerar como ¿Qué es
una
reconstrucción
83
5.3. CONTRASTACIÓN DEDUCTIVA DE TEORÍAS
enunciados pertinentes, con objeto de hallar las relaciones lógicas (tales como
equivalencia, deductibilidad, compatibilidad o incompatibilidad, etc.) que existan
entre ellas.
84
Comparación lógica de las
conclusiones.
contrastación de la
conclusión por medio de la
aplicación empírica.
positiva, esto es, si las conclusiones singulares resultan ser aceptables, o oculta de la
Luna hay un
verificadas, la teoría a que nos referimos ha pasado con éxito las duende.
¿Se puede
contrastaciones (por esta vez): no hemos encontrado razones para desecharla. verificar? Pero
si la decisión es negativa, o sea, si las conclusiones han sido falsadas[Empleamos el verbo
falsar y sus derivados (falsable, falsación, falsador, etc.) como versión de to falsify y los suyos
(falsifiable, falsification, falsifier, etc.): pues tanto falsificar como falsear tienen en castellano
un sentido perfectamente vivo, que provocaría incesantes malentendidos si se empleasen
aquí para traducir to falsify],esta falsación revela que la teoría de la que se han deducido
lógicamente es también falsa.
85
pueden siempre derrocarla. Durante el tiempo en que una teoría resiste
contrastaciones exigentes y minuciosas, y en que no la deja anticuada otra teoría
en la evolución del progreso científico, podemos decir que ha «demostrado su
temple» o que está «corroborada» por la experiencia.
En el procedimiento que acabamos de esbozar no aparece nada que ¿Si algo ser verificado
sería
puede
verdadero?
pueda asemejarse a la lógica inductiva. En ningún momento he asumido que
podamos pasar por un razonamiento de la verdad de enunciados singulares a la
verdad de teorías. No he supuesto un solo instante que, en virtud de unas
conclusiones «verificadas», pueda establecerse que unas teorías sean
«verdaderas», ni siquiera meramente «probables».
Entre las muchas objeciones que pueden hacerse contra las tesis que he
propuesto ahora mismo, la más importante es, quizá, la siguiente: al rechazar el
método de la inducción —podría decirse— privo a la ciencia empírica de lo que
parece ser su característica más importante; esto quiere decir que hago
desaparecer las barreras que separan la ciencia de la especulación metafísica.
Mi respuesta a esta objeción es que mi principal razón para rechazar la lógica
inductiva es precisamente que no proporciona un rasgo discriminador apropiado
del carácter empírico, no metafísico, de un sistema teórico; o, en otras palabras,
que no proporciona un «criterio de demarcación» apropiado.
Hume conoció este problema e intentó resolverlo; con Kant se convirtió en el Kant
86
De estos dos problemas —que son fuente de casi todos los demás de la teoría
del conocimiento— el de la demarcación es, según entiendo, el más fundamental.
En realidad, la razón principal por la que los epistemólogos con inclinaciones
empiristas tienden a prender su fe en el «método de la inducción», parece ser
que la constituye su creencia de que éste es el único método que puede
proporcionar un criterio de demarcación apropiado: esto se aplica,
especialmente, a los empiristas que siguen las banderas del «positivismo».
CIENCIA
Física,
Matemática
CONCEPTO
Fuerza,
Cantidad
EXPERIENCIA
(Sensaciones de
datos sensibles,
impresiones,
percepciones,
recuerdos)
87
Bertrand Russell Wittgenstein
CIENCIA
ENUNCIADOS
EXPERIENCIA
88
Desde el momento en que rechazo la lógica inductiva he de rechazar también
todos estos intentos de resolver el problema de la demarcación: con lo cual este
problema aumenta de importancia en el presente estudio. El hallazgo de un
criterio de demarcación aceptable tiene que ser una tarea crucial de cualquier
epistemología que no acepte la lógica inductiva.
Lo que es el
Esto «se hace patente» con gran claridad en el caso de Wittgenstein, caso
Hechos
Composición
del mundo
89
“La nieve
según el cual toda proposición con sentido tiene que ser lógicamente blanca”.
reducible[WITTGENSTEIN, Tractatus Logico Philosophicus (T.L.P.), Proposición
5]a proposiciones elementales (o «atómicas»), que caracteriza como
descripciones o «imágenes de la realidad» [WITTGENSTEIN, T.L.P.,
Proposiciones 4.01, 4.03 y 2.221] (caracterización, por cierto, que ha de cubrir
todas las proposiciones con sentido). Podemos darnos cuenta de que el criterio
de sentido de Wittgenstein coincide con el criterio de demarcación de los
inductivistas, sin más que remplazar las palabras «científica» o «legítima» por
«con sentido». Y es precisamente al llegar al problema de la inducción donde
se derrumba este intento de resolver el problema de la demarcación: los ENUNCIADO
METAFÍSICO
positivistas, en sus ansias de aniquilar la metafísica, aniquilan juntamente con “El ser
ella la ciencia natural. Pues tampoco las leyes científicas pueden reducirse es
lógicamente a enunciados elementales de experiencia. Si se aplicase con inmóvil”.
Esto hace ver que el criterio inductivista de demarcación no consigue trazar una
línea divisoria entre los sistemas científicos y los metafísicos, y por qué ha de
asignar a unos y otros el mismo estatuto: pues el veredicto del dogma positivista
del sentido es que ambos son sistemas de pseudoaserciones sin sentido. Así
pues, en lugar de descastar radicalmente la metafísica de las ciencias empíricas,
el positivismo lleva a una invasión del campo científico por aquélla.
90
en vez de semejante cosa, en formular una caracterización apropiada de la
ciencia empírica, o en definir los conceptos de «ciencia empírica» y de
«metafísica» de tal manera que, ante un sistema dado de enunciados, seamos
capaces de decir si es asunto o no de la ciencia empírica el estudiarlo más de
cerca.
Las metas de la ciencia a las que me refiero son otras. No trato de justificarlas,
sin embargo, presentándolas como el blanco verdadero o esencial de la ciencia,
lo cual serviría únicamente para perturbar la cuestión y significaría una recaída
en el dogmatismo positivista. No alcanzo a ver más que una sola vía para
argumentar racionalmente en apoyo de mis propuestas: la de analizar sus
consecuencias lógicas —señalar su fertilidad, o sea, su poder de elucidar los
problemas de la teoría del conocimiento.
Así pues, admito abiertamente que para llegar a mis propuestas me he guiado,
en última instancia, por juicios de valor y por predilecciones. Mas espero que
sean aceptables para todos los que no sólo aprecian el rigor lógico, sino la
libertad de dogmatismos; para quienes buscan la aplicabilidad práctica, pero se
sienten atraídos aún en mayor medida por la aventura de la ciencia y por los
descubrimientos que una y otra vez nos enfrentan con cuestiones nuevas e
inesperadas, que nos desafían a ensayar respuestas nuevas e insospechadas.
91
El hecho de que ciertos juicios de valor hayan influido en mis propuestas no quiere
decir que esté cometiendo el error de que he acusado a los positivistas —el de intentar
el asesinato de la metafísica por medio de nombres infamantes—. Ni siquiera llego a
afirmar que la metafísica carezca de valor para la ciencia empírica. Pues no puede
negarse que, así como ha habido ideas metafísicas que han puesto una barrera al
avance de la ciencia, han existido otras —tal el atomismo especulativo— que
la han ayudado. Y si miramos el asunto desde un ángulo psicológico, me siento
inclinado a pensar que la investigación científica es imposible sin fe en algunas
ideas de una índole puramente especulativa (y, a veces, sumamente
es la
brumosas): fe ¿Qué desprovista enteramente de garantías desde el punto de metafísica?, ¿la
ciencia necesita
vista de la ciencia, y que —en esta misma medida— es «metafísica». de ella?
92
T
1
T
2
T
3
Con objeto de precisar un poco más esta afirmación, podemos distinguir tres
requisitos que nuestro sistema teórico empírico tendrá que satisfacer. Primero,
ha de ser sintético, de suerte que pueda representar un mundo no contradictorio,
posible; en segundo lugar, debe satisfacer el criterio de demarcación, es decir,
no será metafísico, sino representará un mundo de experiencia posible; en tercer
término, es menester que sea un sistema que se distinga —de alguna manera—
de otros sistemas semejantes por ser el que represente nuestro mundo de
experiencia.
Corresponde al
universo posible,
Todos los sin embargo no es
cisnes son negros. empírico.
Corresponde a
nuestro universo
empírico, por lo
tanto permite la
contrastación.
Algunos cisnes no son
negros.
93
Según esta opinión, la «experiencia» resulta ser un método distintivo mediante
el cual un sistema teórico puede distinguirse de otros; con lo cual la ciencia
empírica se caracteriza —al parecer— no sólo por su forma lógica, sino por su
método de distinción. (Desde luego, ésta es también la opinión de los
inductivistas, que intentan caracterizar la ciencia empírica por su empleo del
método inductivo.)
Por tanto, puede describirse la teoría del conocimiento, cuya tarea es el análisis
del método o del proceder peculiar de la ciencia empírica, como una teoría del
método empírico —una teoría de lo que normalmente se llama experiencia.
Ahora bien; en mi opinión, no existe nada que pueda llamarse inducción Las teorías no
son
[No me refiero aquí, desde luego, a la llamada «inducción matemática»; lo que verificables,
niego es que exista nada que pueda llamarse inducción en lo que se tan sólo lo
son los
denominan «ciencias inductivas»: que existan «procedimientos inductivos» o enunciados
«inferencias inductivas»]. Por tanto, será lógicamente inadmisible la inferencia que conforman la de
teorías a partir de enunciados singulares que estén «verificados por la teoría.
experiencia» (cualquiera que sea lo que esto quiera decir). Así pues, las teorías
no son nunca verificables empíricamente. Si queremos evitar el error positivista
de que nuestro criterio de demarcación elimine los sistemas teóricos de la ciencia
94
natural, debemos elegir un criterio que nos permita admitir en el dominio de la
ciencia empírica incluso enunciados que no puedan verificarse.
MODUS
95
Este ataque no me alteraría. Mi propuesta está basada en una asimetría TOLLENS entre la
verificabilidad y la falsabilidad: asimetría que se deriva de la forma A ~B B lógica de los
enunciados universales. Pues éstos no son jamás deductibles de enunciados singulares, pero
sí pueden estar en contradicción con estos Si ~A llueve últimos. En consecuencia, por medio
de inferencias puramente deductivas entonces (valiéndose del modus tollens de la lógica
clásica) es posible argüir de la todos mojan. Nada se verdad de enunciados singulares la falsedad
de enunciados universales. Una esta mojado. argumentación de esta índole, que lleva a la
falsedad de enunciados Por lo tanto, no llovió.
universales, es el único tipo de inferencia estrictamente deductiva que se
mueve, como si dijéramos, en «dirección inductiva»: esto es, de enunciados singulares a
universales.
Más grave puede parecer una tercera objeción. Podría decirse que, incluso
admitiendo la asimetría, sigue siendo imposible —por varias razones— falsar de
un modo concluyente un sistema teórico: pues siempre es posible encontrar una
vía de escape de la falsación, por ejemplo, mediante la introducción ad hoc de
una hipótesis auxiliar o por cambio ad hoc de una definición; se puede, incluso,
sin caer en incoherencia lógica, adoptar la posición de negarse a admitir
cualquier experiencia falsadora. Se reconoce que los científicos no suelen
proceder de este modo, pero el procedimiento aludido siempre es lógicamente
posible; y puede pretenderse que este hecho convierte en dudoso —por lo
menos— el valor lógico del criterio de demarcación que he propuesto.
Si la
Me veo obligado a admitir que esta crítica es justa; pero no necesito, por falsabilidad ello, retirar
mi propuesta de adoptar la falsabilidad como criterio de resultara como el más demarcación. Pues
voy a proponer que se caracterice el método empírico de apropiado tal forma que excluya
precisamente aquellas vías de eludir la falsación que mi criterio demarcación de imaginario crítico
señala insistentemente, con toda razón, como lógicamente entonces qué ocurriría con posibles. De
acuerdo con mi propuesta, lo que caracteriza al método empírico aquello que es su manera de
exponer a falsación el sistema que ha de contrastarse: no es falsable.
justamente de todos los modos imaginables. Su meta no es salvarles la vida a
los sistemas insostenibles, sino, por el contrario, elegir el que comparativamente
sea más apto, sometiendo a todos a la más áspera lucha por la supervivencia.
96
la inadmisibilidad de los razonamientos inductivos, de la que se dio cuenta Hume.
Esta contradicción surge únicamente si se supone que todos los enunciados
científicos empíricos han de ser «decidibles de modo concluyente», esto es, que,
en principio, tanto su verificación como su falsación han de ser posibles. Si
renunciamos a esta exigencia y admitimos como enunciados empíricos también
los que sean decidibles en un solo sentido —decidibles unilateralmente, o, más
en particular, falsables— y puedan ser contrastados mediante ensayos
sistemáticos de falsación, desaparece la contradicción: el método de falsación no
presupone la inferencia inductiva, sino únicamente las transformaciones
tautológicas de la lógica deductiva, cuya validez no se pone en tela de juicio.
Pero incluso en este caso se ha conseguido algo. Pues en la práctica de ¿Un enunciado empírico
tiene la investigación científica la demarcación presenta, a veces, una urgencia el mismo inmediata
en lo que se refiere a los sistemas teóricos, mientras que rara vez se contenido qué el de un suscitan
dudas acerca de la condición empírica de los enunciados singulares. anunciado Es cierto que se
tienen errores de observación, y que dan origen a enunciados básico?
singulares falsos, pero un científico casi nunca se encuentra en el trance de
describir un enunciado singular como no empírico o metafísico.
Por tanto, los problemas de la base empírica —esto es, los concernientes al carácter
empírico de enunciados singulares y a su contrastación— desempeñan un papel en la lógica
de la ciencia algo diferente del representado por la mayoría de los demás problemas de que
habremos de ocuparnos. Pues gran parte de éstos se encuentran en relación estrecha con la
práctica de la investigación, mientras que el problema de la base empírica pertenece casi
exclusivamente a la teoría del conocimiento. Me ocuparé de ellos, sin embargo, ya que dan
lugar a muchos puntos obscuros: lo cual ocurre, especialmente, con las relaciones entre
experiencias perceptivas y enunciados básicos. [Llamo «enunciado básico» o «proposición
97
básica» a un enunciado que puede servir de premisa en una falsación empírica: brevemente
dicho, a la enunciación de un hecho singular.]
98
5.8. OBJETIVIDAD CIENTÍFICA Y CONVICCIÓN SUBJETIVA regularidad
es —y así
sucede con
Las palabras «objetivo» y «subjetivo» son términos filosóficos cargados de una los
experiment
pesada herencia de usos contradictorios y de discusiones interminables y nunca
os
concluyentes.
repetibles—
pueden ser
contrastada
El empleo que hago de los términos «objetivo» y «subjetivo» no es muy distinto s nuestras
del kantiano. Kant utiliza la palabra «objetivo» para indicar que el conocimiento observacio
científico ha de ser justificable, independientemente de los caprichos de nadie: nes por
una justificación es «objetiva» si en principio puede ser contrastada y cualquiera
comprendida por cualquier persona. «Si algo es válido — escribe— para quien (en
quiera que esté en uso de razón, entonces su fundamento es objetivo y principio).
suficiente». Ni siquiera
OBJETIVO
El
conocimiento
Ahora bien; yo mantengo que las teorías científicas no son nunca enteramente
es
independiente
de mí, del
justificables o verificables, pero que son, no obstante, contrastables. Diré, por mismo modo
tanto, que la objetividad de los enunciados científicos descansa en el hecho de su valor de
verdad.
que pueden contrastarse intersubjetivamente [Desde que escribí estas palabras
he generalizado esta formulación: pues la contrastación intersubjetiva es
meramente un aspecto muy importante de la idea más general de la crítica
intersubjetiva, o, dicho de otro modo, de la idea de la regulación racional mutua
por medio del debate crítico].
99
tomamos muy en serio nuestras observaciones, ni las aceptamos como
científicas, hasta que las hemos repetido y contrastado. Sólo merced a tales
repeticiones podemos convencernos de que no nos encontramos con una mera
«coincidencia» aislada, sino con acontecimientos que, debido a su regularidad y
reproductibilidad, son, en principio, contrastables intersubjetivamente [Kant se
dio cuenta de que de la objetividad que se ha requerido para los enunciados
científicos se sigue que deben ser contrastables intersubjetivamente en cualquier
momento, y que han de tener, por tanto, la forma de leyes universales o teorías.
Yo no postulo semejante principio; pero estoy de acuerdo en que los enunciados
científicos, deben ser contrastables intersubjetivamente y han de tener siempre
el carácter de hipótesis universales.].
100
ello la más leve razón a la ciencia para aceptar mis enunciados? ¿Puede
justificarse ningún enunciado por el hecho de que K. R. P. esté absolutamente
convencido de su verdad? La única respuesta posible es que no, y cualquiera
otra sería incompatible con la idea de la objetividad científica. Incluso el hecho básicos han
—para mí tan firmemente establecido— de que estoy experimentando un de ser
sentimiento de convicción, no puede aparecer en el campo de la ciencia objetiva contrastable
más que en forma de hipótesis psicológica; la cual, naturalmente, pide un s
contraste o comprobación intersubjetivo: a partir de la conjetura de que yo tengo intersubjetiva
este sentimiento de convicción, el psicólogo puede deducir, valiéndose de mente a su
teorías psicológicas y de otra índole, ciertas predicciones acerca de mi conducta vez, no
—que pueden confirmarse o refutarse mediante contrastaciones puede haber
experimentales—. Pero, desde el punto de vista epistemológico, carece enunciados
enteramente de importancia que mi sentimiento de convicción haya sido fuerte últimos en la
o débil, que haya procedido de una impresión poderosa o incluso irresistible de ciencia: no
certeza indudable (o «evidencia»), o simplemente de una insegura sospecha: pueden
nada de todo esto desempeña el menor papel en la cuestión de cómo pueden existir en la
justificarse los enunciados científicos. ciencia
enunciados
últimos que
Las consideraciones del tipo que acabo de hacer no nos proporcionan, desde no puedan
ser
luego, una respuesta para el problema de la base empírica; pero, al menos, nos
contrastados
ayudan a caer en la cuenta de su dificultad principal. Al exigir que haya
, y, en
objetividad, tanto en los enunciados básicos como en cualesquiera otros
consecuenci
enunciados científicos, nos privamos de todos los medios lógicos por cuyo
a, ninguno
medio pudiéramos haber esperado reducir la verdad de los enunciados
que no
científicos a nuestras experiencias. Aún más: nos vedamos todo conceder un
pueda —en
rango privilegiado a los enunciados que formulan experiencias, como son los
principio—
que describen nuestras percepciones (y a los que, a veces, se llama «cláusulas
ser refutado
protocolarias»): pueden aparecer en la ciencia únicamente como enunciados
al falsar
psicológicos, lo cual quiere decir como hipótesis de un tipo cuyo nivel de
algunas de
contrastación intersubjetiva no es, ciertamente, muy elevado (teniendo en
las
cuenta el estado actual de la psicología).
conclusiones
que sea
posible
Cualquiera que sea la respuesta que demos finalmente a la cuestión de la base deducir de él.
empírica, una cosa tiene que quedar clara: si persistimos en pedir que los
enunciados científicos sean objetivos, entonces aquéllos que pertenecen a la Las hipótesis
psicológicas no
base empírica de la ciencia tienen que ser también objetivos, es decir, son posibles de
ser
contrastables intersubjetivamente. Pero la contrastabilidad intersubjetiva implica comprobadas
siempre que, a partir de los enunciados que se han de someter a contraste, intersubjetivame
nte. Comprobar
puedan deducirse otros también contrastables. Por tanto, si los enunciados una hipótesis
101
intersubjetivamente sería admitir la verdad de la hipótesis de un no choca con
modo objetivo.
mi petición
de que todo
enunciado
científico sea
contrastable.
Pues no pido
que sea
preciso
haber
contrastado
realmente
todo
enunciado
científico
antes de
aceptarlo:
sólo requiero
que cada uno
La base empírica debe ser objetiva si estos han de ser contrastadas, así las que se deriven de estos
de ellas también serán contrastadas.
enunciados
De este modo llegamos a la siguiente tesis. Los sistemas teóricos se contrastan sea
deduciendo de ellos enunciados de un nivel de universalidad más bajo; éstos, susceptible
puesto que han de ser contrastables intersubjetivamente, tienen que poderse de
contrastar de manera análoga —y así ad infinitum. contrastació
n; dicho de
otro modo:
me niego a
Podría pensarse que esta tesis lleva a una regresión infinita, y que, por tanto, admitir la
es insostenible. En el apartado 1, al criticar la inducción, opuse la objeción de tesis de que
que llevaría a un regreso infinito; y puede muy bien parecerle ahora al lector que en la ciencia
la misma objeción exactamente puede invocarse contra el procedimiento de existan
contrastación deductiva que defiendo a mi vez. Sin embargo, no ocurre así. El enunciados
método deductivo de contrastar no puede estatuir ni justificar los enunciados cuya verdad
que se contrastan, ni se pretende que lo haga; de modo que no hay peligro de hayamos de
una regresión infinita. Pero ha de admitirse que la situación sobre la que acabo aceptar
de llamar la atención —la contrastabilidad ad infinitum, y la ausencia de resignadame
enunciados últimos que no necesitasen ser contrastados— crea, ciertamente, nte, por la
un problema. Pues es evidente que, de hecho, las contrastaciones no pueden simple razón
prolongarse ad infinitum: más tarde o más temprano hemos de detenernos. Sin de no
discutir ahora el problema en detalle, quiero únicamente señalar que la parecer
circunstancia de que las contrastaciones no puedan continuar indefinidamente posible —por
102
razones lógicas— someterlos a contraste.
103
éxito se manifiestan incompatibles con el paradigma antiguo: es la fase
revolucionaria y de ciencia revolucionaria. Si el paradigma alternativo es
capaz de solucionar las anomalías que se presentan, va siendo aceptado y
se entra en una nueva fase de ciencia normal bajo un nuevo paradigma. La
adopción de un nuevo paradigma supone una revolución científica o una
ruptura con el paradigma antiguo y aparecen relaciones de
inconmensurabilidad entre el paradigma antiguo y el nuevo.
Para comprender cómo puede suceder esto, debemos reconocer lo muy Un paradigma
obtiene el
limitado que puede ser un paradigma en alcance y precisión en el momento de reconocimiensu
primera aparición. Los paradigmas obtienen su status como tales, debido a to de su
status por los que tienen más éxito que sus competidores para resolver unos cuantos éxitos
problemas que el grupo de profesionales ha llegado a reconocer como agudos. obtenidos frente a
sus Sin embargo, el tener más éxito no quiere decir que tenga un éxito completo en
104
competidores, laresolución de un problema determinado o que dé resultados suficientemente
no obstante
esto no la satisfactorios con un número considerable de problemas. El éxito de
un hace paradigma —ya sea el análisis del movimiento de Aristóteles, los cálculos permanente.
hechos por Tolomeo de la posición planetaria, la aplicación hecha por Lavoisier de la
balanza o la matematización del campo electromagnético por Maxwell— La ciencia es al
principio, en gran parte, una promesa de éxito discernible en ejemplos normal pone
a prueba a sus
Pocas personas que no sean realmente practicantes de una ciencia madura llegan a
comprender cuánto trabajo de limpieza de esta especie deja un paradigma para hacer, o cuán
atrayente puede resultar la ejecución de dicho trabajo. Y es preciso comprender esos puntos.
Las operaciones de limpieza son las que ocupan a la mayoría de los científicos durante todas
sus carreras. Constituyen lo que llamo aquí ciencia normal. Examinada de cerca, tanto
históricamente como en el laboratorio contemporáneo, esa empresa La ciencia parece ser un
intento de obligar a la naturaleza a que encaje dentro de los normal está no límites
preestablecidos y relativamente inflexibles que proporciona el encaminada a paradigma. Ninguna
parte del objetivo de la ciencia normal está encaminado a provocar nuevos tipos provocar nuevos
tipos de fenómenos; en realidad, a los fenómenos que no de
encajarían dentro de los límites mencionados frecuentemente ni siquiera se los fenómenos, debido
a que ve. Tampoco tienden normalmente los científicos a descubrir nuevas teorías y a se restringe
al menudo se muestran intolerantes con las formuladas por otros [Bernard Barber, paradigma
105
se aplica con éxito, la profesión resolverá problemas que es raro articulan teorías que el las que sus
miembros hubieran podido imaginarse y que nunca hubieran paradigma les emprendido sin él.
En lugar de ello, la investigación científica normal va dirigida ha es parte del ofrecido, a la
articulación de aquellos fenómenos y teorías que ya proporciona el compromiso. paradigma.
Para mostrar de manera más clara lo que entendemos por investigación normal
o basada en un paradigma, trataré ahora de clasificar e ilustrar los problemas en
los que consiste principalmente la ciencia normal. Por conveniencia, pospongo
la actividad teórica y comienzo con la reunión de datos o hechos, o sea, con los
experimentos y las observaciones que se describen en los periódicos técnicos
por medio de los que los científicos informan a sus colegas profesionales de los
resultados del progreso de sus investigaciones. ¿Sobre qué aspectos de la
naturaleza informan normalmente los científicos? ¿Qué determina su elección?
Y, puesto que la mayoría de las observaciones científicas toman tiempo, equipo
y dinero, ¿qué es lo que incita a los científicos a llevar esa elección hasta su
conclusión?
Creo que hay sólo tres focos normales para la investigación científica fáctica y
no son siempre ni permanentemente, distintos. Primeramente, encontramos la
clase de hechos que el paradigma ha mostrado que son particularmente
reveladores de la naturaleza de las cosas. Al emplearlos para resolver
problemas, el paradigma ha hecho que valga la pena determinarlos con mayor
precisión y en una mayor variedad de situaciones. En un momento u otro, esas
determinaciones fácticas importantes han incluido: en astronomía, la posición y
magnitud de las estrellas, los periodos de eclipses binarios de los planetas; en
física, las gravedades y compresibilidades específicas de los materiales, las
longitudes de onda y las intensidades espectrales, las conductividades eléctricas
y los potenciales de contacto; y en química, la composición y la combinación de
pesos, los puntos de ebullición y la acidez de las soluciones, las fórmulas
estructurales y actividades ópticas.
HECHO COSA
• Cosas, propiedades o relaciones tal como • Se refiere al objeto intencional de la
son en la realidad, independientemente de conciencia, por lo que la cosa pensada,
la interpretación humana. querida o imaginada puede ser tanto real
como simplemente mental.
106
Los esfuerzos por aumentar la exactitud y el alcance con que se El científico normal
se conocen hechos como ésos, ocupan una fracción importante de la literatura de esfuerza
en la ciencia de observación y experimentación. Repetidas veces se han diseñado aumentar
la exactitud y el aparatos especiales y complejos para esos fines, y el invento, la construcción y
alcance de los el despliegue de esos aparatos han exigido un talento de primera categoría, hechos
como parte de su
radiotelescopios son tan sólo los ejemplos más recientes de hasta dónde están profesional, al
mismo tiempo
dispuestos a ir los investigadores, cuando un paradigma les asegura que los lo hace hechos que
buscan son importantes. Desde Tycho Brahe hasta E. O. mediante literatura la Lawrence, algunos
científicos han adquirido grandes reputaciones, no por la respectiva. novedad de sus
descubrimientos, sino por la precisión, la seguridad y el alcance de los métodos que
desarrollaron para la redeterminación de algún tipo de hecho previamente conocido.
107
como ellos— ilustran el esfuerzo y el ingenio inmensos que han sido necesarios
para hacer que la naturaleza y la teoría lleguen a un acuerdo cada vez más
estrecho. Este intento de demostrar el acuerdo es un segundo tipo de trabajo
experimental normal y depende de un paradigma de manera todavía más
evidente que el anterior. La existencia del paradigma establece el problema que
debe resolverse; con frecuencia, la teoría del paradigma se encuentra implicada
directamente en el diseño del aparato capaz de resolver el problema. Por
ejemplo, sin los Principia, las mediciones realizadas con la máquina de Atwood
no hubieran podido significar nada en absoluto.
Una tercera clase de experimentos y observaciones agota, creo yo, las tareas
de reunión de hechos de la ciencia normal. Consiste en el trabajo empírico
emprendido para articular la teoría del paradigma, resolviendo algunas de sus
ambigüedades residuales y permitiendo resolver problemas hacia los que
anteriormente sólo se había llamado la atención. Esta clase resulta la más
importante de todas y su descripción exige una subdivisión. En las ciencias de
carácter más matemático, algunos de los experimentos cuya finalidad es la
articulación, van encaminados hacia la determinación de constantes físicas. Por
ejemplo: el trabajo de Newton indicó que la fuerza entre dos unidades de masa
a la unidad de distancia sería la misma para todos los tipos de materia en todas
las posiciones, en el Universo. Pero sus propios problemas podían resolverse
sin calcular siquiera el tamaño de esa atracción, la constante gravitacional
universal; y nadie diseñó un aparato capaz de determinarla durante todo el siglo
que siguió a la aparición de los Principia. La famosa determinación de
Cavendish, en 1790, tampoco fue la última. A causa de su posición central en la
teoría física, los valores perfeccionados de la constante gravitacional han sido
desde entonces objeto de esfuerzos repetidos por parte de experimentadores
extraordinarios. Otros ejemplos del mismo tipo de trabajo continuo incluirían la
determinación de la unidad astronómica, el número de Avogadro, el coeficiente
de Joule, la carga electrónica, etc. Pocos de esos esfuerzos complejos hubieran
sido concebidos y ninguno se habría llevado a cabo sin una teoría de paradigma
que definiera el problema y garantizara la existencia de una solución estable.
108
La determina-
ción del
hecho
significativo.
ACTIVIDADES QUE
REALIZA EL
CIENTÍFICO DE LA
CIENCIA NORMAL
El
acoplamien- La
to de los articulación
hecho con la de la teoría.
teoría.
109
general y cercana que, desde Galileo, tales leyes han sido con frecuencia
adivinadas correctamente, con ayuda de un paradigma, muchos años antes de
que pudiera diseñarse un aparato para su determinación experimental.
experimentos para escoger entre los métodos alternativos, a efecto de aplicar tiene una el
paradigma al nuevo campo de interés. Por ejemplo, las aplicaciones del forma esférica o existen
paradigma de la teoría calórica, fueron el calentamiento y el enfriamiento por otras.
medio de mezclas y del cambio de estado. Pero el calor podía ser soltado o
absorbido de muchas otras maneras —por ejemplo, por medio de combinaciones
químicas, por fricción y por compresión o absorción de un gas— y la teoría podía
aplicarse a cada uno de esos otros fenómenos de varias formas. Si por ejemplo,
el vacío tuviera una capacidad térmica, el calentamiento por compresión podría
explicarse como el resultado de la mezcla de gas con vacío.O podría deberse a
un cambio en el calor específico de los gases con una presión variable. Además,
había varias otras explicaciones posibles. Se emprendieron muchos
experimentos para elaborar esas diversas posibilidades y para hacer una
distinción entre ellas; todos esos experimentos procedían de la teoría calórica
como paradigma y todos se aprovecharon de ella en el diseño de experimentos
y en la interpretación de los resultados. Una vez establecido el fenómeno del
calentamiento por compresión, todos los experimentos ulteriores en ese campo
fueron, en esa forma, dependientes del paradigma. Dado el fenómeno, ¿de qué
otra forma hubiera podido seleccionarse un experimento para elucidarlo?
Veamos ahora los problemas teóricos de la ciencia normal, que caen Una parte del trabajo teórico
muy aproximadamente dentro de las mismas clases que los experimentales o normal
de observación. Una parte del trabajo teórico normal, aunque sólo una parte consiste en el
uso de
la pequeña, consiste simplemente en el uso de la teoría existente para predecir teoría
información fáctica de valor intrínseco. El establecimiento de efemérides existente para predecir
astronómicas, el cálculo de las características de las lentes y la producción de información.
curvas de propagación de radio son ejemplos de problemas de ese tipo. Sin Su fin es
mostrar una embargo, los científicos los consideran generalmente como trabajos de poca nueva
forma monta que deben dejarse a los ingenieros y a los técnicos. Muchos de ellos en aplicación del
paradigma.
110
ningún momento aparecen en periódicos científicos importantes. Pero esos
mismos periódicos contienen numerosas discusiones teóricas de problemas que,
a los no científicos, deben parecerles casi idénticos. Son las manipulaciones de
teoría emprendidas no debido a que las predicciones que resultan sean
intrínsecamente valiosas, sino porque pueden confrontarse directamente con
experimentos. Su fin es mostrar una nueva aplicación del paradigma o aumentar
la precisión de una aplicación que ya se haya hecho.
La necesidad de este tipo de trabajo nace de las enormes dificultades que frecuentemente
se encuentran para desarrollar puntos de contacto entre una teoría y la naturaleza. Estas
dificultades pueden ilustrarse brevemente por medio de un examen de la historia de la
dinámica después de Newton. A principios del siglo XVIII, aquellos científicos que hallaron un
paradigma en Principia dieron por sentada la generalidad de sus conclusiones y tenían todas
las razones para hacerlo así. Ningún otro trabajo conocido en la historia de la ciencia ha
permitido simultáneamente un aumento tan grande tanto en el alcance como en la precisión
de la investigación. En cuanto al cielo, Newton había derivado las Leyes de Kepler sobre el
movimiento planetario y había explicado, asimismo, algunos de los aspectos observados en
los que la Luna El desarrollo no se conformaba a ellas. En cuanto a la Tierra, había derivado los
resultados del científico trabajo se de ciertas observaciones dispersas sobre los péndulos, los planos
inclinados y desarrolla las mareas. Con la ayuda de suposiciones complementarias, pero ad hoc,
estableciendo
paradigmas había sido capaz también de derivar la Ley de Boyle y una fórmula
importante los cuáles se para la velocidad del sonido en el aire. Dado el estado de las ciencias
en esa aceptan como precisos en época, el éxito de estas demostraciones fue extraordinariamente
tanto sean impresionante. Sin embargo, dada la generalidad presuntiva de las Leyes de precisos
para el desarrollo Newton, el número de esas aplicaciones no era grande y Newton casi no del
problema. desarrolló otras. Además, en comparación con lo que cualquier graduado de física
puede lograr hoy en día con esas mismas leyes, las pocas aplicaciones de Newton no fueron
ni siquiera desarrolladas con precisión.
111
que tenían solidez. Sin embargo, como aproximaciones restringían el acuerdo
que podía esperarse entre las predicciones de Newton y los experimentos reales.
Las mismas dificultades aparecieron, de manera todavía más clara, en la
aplicación de la teoría de Newton al firmamento. Las simples observaciones
telescópicas cuantitativas indican que los planetas no obedecen completamente
a las Leyes de Kepler, y la teoría de Newton indica que no deberían hacerlo.
Para derivar esas leyes, Newton se había visto obligado a desdeñar toda la
atracción gravitacional, excepto la que existe entre los planetas individuales y el
Sol. Puesto que los planetas se atraen también unos a otros, sólo podía
esperarse un acuerdo aproximado entre la teoría aplicada y la observación
telescópica.
112
Pero no todo es así. Incluso en las ciencias matemáticas hay también problemas
teóricos de articulación de paradigmas y durante los periodos en Todo paradique el
desarrollo científico fue predominantemente cualitativo, dominaron estos gma presenta solo
un problemas. Algunos de los problemas, tanto en las ciencias más cuantitativas desarrollo
como en las más cualitativas, tienden simplemente a la aclaración por medio de cualitativo existe
o
la la reformulación. Por ejemplo, los Principia no siempre resultaron un trabajo posibilidad de
Estas tres clases de problemas —la determinación del hecho paradigma, no obstante las significativo,
el acoplamiento de los hechos con la teoría y la articulación de la de éxito mayor han teoría— agotan,
creo yo, la literatura de la ciencia normal, tanto empírica como mantenido teórica. Por supuesto,
no agotan completamente toda la literatura de la ciencia. vigencia. Hay también problemas
extraordinarios y su resolución puede ser la que hace que la empresa científica como un todo
113
resulte tan particularmente valiosa. Pero los problemas extraordinarios no pueden tenerse a
petición; surgen sólo en ocasiones especiales, ocasionados por el progreso de la investigación
normal. Por consiguiente, es inevitable que una mayoría abrumadora de los problemas de que
se ocupan incluso los mejores científicos, caigan habitualmente dentro de una de las tres
categorías que hemos mencionado. El trabajo bajo el paradigma no puede llevarse a cabo en
ninguna otra forma y la deserción del paradigma significa dejar de practicar la ciencia que se
define. Pronto descubriremos que esas deserciones tienen lugar.
TEMAS ANTOLOGADOS
BUNGE, Mario.
1998 Vigencia de la Filosofía, Lima, Fondo Editorial U.I.G.V. Pp.
25 - 45
114
CHALMERS, Alan.
1982 ¿Qué es esa cosa llamada ciencia? Madrid, Siglo XXI. Pp.
11 – 57
KUHN, Thomas:
2004 La estructura de las revoluciones científicas. México, F. C.
E. Pp. 51 – 67; 68 – 79.
NAGEL, Ernest.
1981 La estructura de la ciencia, Barcelona, Paidós. Pp. 27 – 55.
POPPER, Karl.
1980 La lógica de la Investigación científica, Madrid, Tecnos. Pp.
27 – 54.
REICHENBACH, Hans.
1961 Experience and Prediction. The University of Chicago
Press. Pp. 3 – 16. Traducción de Luis Piscoya
115