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Seis hábitos de los

negociadores
apenas eficaces
Sanyú

L
os miles de millones de dólares en danza cada
año en fusiones y adquisiciones de empresas son
sólo una fracción del capital que pasa por las ma-
nos de negociadores. Los ejecutivos negocian permanen-
temente con clientes y proveedores, con grandes accio-
nistas y acreedores, con potenciales socios o aliados estra-
tégicos. En tanto existan partes con distintos intereses y
Este artículo fue originalmente publicado en la edición de abril de 2001 de percepciones, dependiendo unas de otras para obtener
ALTA GERENCIA

Harvard Business Review, bajo el título “Six Habits of Merely Effective resultados, la negociación importa. Afortunadamente, la
Negotiators”, por James K. Sebenius. © 2001, Harvard Business School mayoría de los ejecutivos conocen, por haberlo aprendi-
Publishing, distribuido por New York Times Special Features. do en textos universitarios o de la experiencia diaria, los
Todos los derechos reservados. James K. Sebenius es profesor de administra- principios básicos de la negociación, y algunos son verda-
ción de empresas en la Harvard Business School, donde lideró la creación de la deros expertos. Sin embargo, lo mucho que hay en juego
unidad de negociación. Es coautor, con David Lax, de 3-D Negotiation: y la intensa presión pueden inducirlos a costosos errores
Creating and Claiming Value for the Long Term. que, como malos hábitos, se arraigan cada vez más.

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En síntesis ■ Hay tres elementos en juego en una ■ Mirar sólo lo que podría llevarnos a ■ Los mejores negociadores se preo-
negociación: los “temas” que se po- un arreglo constituye un grave error. cupan por establecer y resolver el
nen sobre la mesa para lograr un La negociación exige considerar problema real. El secreto radica en
acuerdo explícito; las “posiciones” cuál es la mejor alternativa que se reconocer y manejar productiva-
de cada parte respecto de esos te- nos presenta fuera del acuerdo. El mente la tensión entre las acciones
mas, y los “intereses” o asuntos sub- problema debe quedar planteado en cooperativas necesarias para crear
yacentes que se verían afectados términos de “acuerdo versus mejor valor, y las competitivas necesarias
por la resolución. opción sin acuerdo”. para obtenerlo.

La mejor defensa para no cometer algunos


errores demasiado habituales es concentrarse
en el problema a resolver. Por James K. Sebenius

No dejo de sorprenderme al observar a negociadores ex- bién conviene a los intereses del otro y le resulta mejor
perimentados que dejan dinero en la mesa, se estancan, que no transar. Por lo tanto, además de proteger la elec-
deterioran relaciones y permiten que los conflictos crez- ción que usted ha hecho, su problema de negociación
can. Si bien hay infinitas formas de llegar a un mal resul- es comprender y configurar la decisión percibida de la
tado, cierto tipo de errores se repite una y otra vez. En otra parte —acuerdo versus no acuerdo—, de modo de
este artículo exploraré esos errores. Pero primero vea- hacerle elegir por su propio interés (el del otro) lo que
mos cuál es el problema real que usted debe resolver en a usted le conviene.
una negociación. La diplomática italiana Daniele Vere dijo hace muchos
años que la negociación es “el arte de dejar hacer a los
Resolver el problema real demás lo que uno quiere”. Este enfoque tal vez suene
En cualquier negociación, a cada parte se le presenta la como una receta para la manipulación. Pero, en reali-
alternativa de aceptar un acuerdo o tomar la mejor de dad, el hecho de comprender los intereses de la contra-
sus opciones de no acuerdo. Como negociador, usted parte y dar forma a la decisión del otro para que coinci-
avanza todo lo posible, mientras intenta que su contra- da, por sus propios motivos, con la suya, es la clave para
parte diga “sí”, cosa que sucederá sólo si el acuerdo tam- crear y reclamar en forma conjunta un valor sostenible. ➙
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Los académicos se sientan a la mesa de negociación
arias generaciones de investigadores han profundizado nuestra las medidas cooperativas necesarias para crear valor, y las competi-
V comprensión del proceso de negociación. En los años ’50 y ’60,
los elementos de la negociación dura (ganar-perder) fueron aislados
tivas involucradas en reclamarlo. Ya en los ’90, con trabajos como
Negotiating Rationally (de Max Bazerman y Margaret Neale), el es-
y refinados: cómo establecer objetivos agresivos, empezar alto, con- tudio conductista de la negociación —describir la forma en que real-
ceder lentamente, y emplear amenazas, engaños y compromisos con mente negocian las personas— empezó a fusionarse con el enfoque
posiciones sin desencadenar una impasse o una escalada. A princi- teorético del juego, que indicaba cómo deberían negociar los indivi-
pios de los ’80, con la revolución del “win-win” (ganar-ganar) popu- duos completamente racionales. Esta nueva síntesis —desarrollar la
larizada por el libro Getting to Yes (de Roger Fisher, William Ury y mejor postura posible sin asumir una conducta estrictamente racio-
Bruce Patton), el foco pasó de la batalla por el reparto del pastel, a la nal— está impulsando enriquecedoras perspectivas en negociacio-
expansión de la torta a través del descubrimiento y la reconciliación nes de todo tipo y tamaño. Los cursos de negociación que exploran
de intereses subyacentes. estas ideas han sido siempre opciones populares en las escuelas de
Un análisis más profundo que “ganar-ganar versus ganar-perder” sur- negocios, pero empiezan a ser requeridos como parte de los princi-
gió a partir de Art and Science of Negotiation, de Howard Raiffa. El pales programas de MBA en universidades como Harvard. En vez de
pastel debía ser, obviamente, expandido y también dividido. constituir una aptitud especial para cerrar acuerdos importantes o
The Manager as Negotiator (de David Lax y James Sebenius) expuso resolver disputas, la negociación se ha convertido en una forma de
una nueva orientación para el manejo productivo de la tensión entre vida para los ejecutivos eficaces.

No obstante, hasta los negociadores zenga, veterano de numerosos más eficaz que intentar empujarlo
expertos cometen seis errores co- acuerdos que construyeron Waste para que abandone su posición y se
munes que les impiden resolver el Management, AutoNation y Block- acerque a la propia.
problema real. buster, resumió su amplia experien- Un papa del siglo XVIII dijo, respec-
cia en un consejo básico que se escu- to de las notables capacidades diplo-
ERROR 1 cha muchas veces pero se olvida mu- máticas del cardenal de Polignac:
Desatender el problema del otro chas más: “Siempre he tratado de po- “Este joven parece tener desde el co-
Usted no puede negociar eficaz- nerme en los zapatos del otro, por- mienzo la misma opinión que yo, y al
mente si no comprende sus propios que es vital entender en profundi- final de la conversación descubro
intereses y las opciones que se le dad lo que la otra parte quiere real- que yo tengo la suya”. De modo que
presentan si no acuerda. Hasta aquí mente conseguir con el acuerdo”. el primer error es concentrarse ex-
está claro, pero hay mucho más en A veces, los negociadores aguerri- clusivamente en el problema propio.
ello. Dado que el otro le dirá que sí dos perciben las preocupaciones Resuelva el de la otra parte, como
por los motivos de él y no por los su- del otro pero no les prestan aten- medio para solucionar el suyo.
yos, el acuerdo requiere compren- ción. “Es su problema; que lo mane-
der y abordar los problemas de la jen ellos”, piensan. Esta actitud pue- ERROR 2
contraparte como un medio para de socavar su capacidad de influir Dejar que el precio aplaste
resolver los propios. de manera beneficiosa en la visión otros intereses
Como mínimo, usted debe entender que el otro tiene de su propio pro- Los negociadores que sólo prestan
el problema desde la perspectiva del blema. La fortaleza de Mike Volpi atención al precio convierten acuer-
otro. Los psicólogos sociales docu- —actual director de estrategia de dos potencialmente cooperativos en
mentaron la dificultad que tiene la Cisco Systems— como negociador controversiales. Estos “Midas al re-
mayoría de la gente para hacerlo. residía, según un colega, en que vés”, como me gusta llamarlos, usan
Los negociadores exitosos coinciden “pasó de ser la persona que maneja- tácticas de fuerte regateo que suelen
en que la superación de esta tenden- ba el acuerdo desde su lado de la dejar en la nada convenios que po-
cia egocéntrica resulta esencial. mesa, a ser el individuo que lo com- drían haber generado ganancias con-
Luego de que una serie de acuerdos prendía desde el otro lado”. juntas. El precio es un factor impor-
transformara su compañía en un im- Si usted quiere modificar las ideas de tante en la mayoría de los acuerdos,
portante jugador con una capitaliza- alguien, primero debe averiguar qué pero no el único que cuenta. Como
ción de mercado de US$ 10.600 mi- piensa esa persona, para después tra- observó Felix Rohatyn, ex socio ge-
llones, Steve Holtzman, de Millen- tar de construir lo que mi colega rente del banco de inversión Lazard
nium Pharmaceuticals, explicó: “De- William Ury llama un “puente de Frères, “la mayoría de los acuerdos
dicamos mucho tiempo a analizar oro”, y recorrer juntos la distancia son un 50 por ciento de emoción y
cómo haría el pobre sujeto sentado entre el lugar en donde está su con- un 50 por ciento de economía”.
al otro lado de la mesa para venderle traparte ahora y el sitio en el que us- Consideremos una negociación sim-
este acuerdo a su jefe”. Y Wayne Hui- ted desea terminar. Esto es mucho plificada, profundamente estudiada

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en los laboratorios académicos, que
involucra dinero real. Una parte re- "Los psicólogos sociales documentaron la dificultad que
cibe, supongamos, US$ 100 para di-
vidir con otra parte del modo que tiene la mayoría de la gente para entender el problema
quiera; el segundo puede estar de
acuerdo o discrepar. Si acepta, los desde la perspectiva del otro."
US$ 100 son repartidos según la pro-
puesta del primero; si no, ninguno
de los dos recibe nada. Una lógica En estos resultados de laboratorio enfrentarán los imprevistos. El he-
puramente basada en el precio suge- hay un importante mensaje para el cho de negociar un contrato social
riría dividirlo 99 a 1. Si bien se trata mundo real: a la gente le importan positivo refuerza los contratos eco-
de una distribución extrema, todavía muchas otras cosas además del nivel nómicos, en especial en nuevos em-
representa una posición en la cual la absoluto del resultado económico. prendimientos y alianzas estratégi-
otra parte recibe algo en lugar de na- Los intereses en juego incluyen re- cas, donde la buena voluntad y las
da. Los negociadores que sólo se sultados relativos, equidad percibida, fuertes expectativas compartidas son
centran en el precio pronostican que imagen de sí mismo, reputación, et- extremadamente importantes. Co-
el otro aceptará la propuesta. Es co- cétera. Por reconocer que la econo- rrer para verificar los documentos
mía no lo es todo, los negociadores del convenio cuando se producen
de éxito enfocan cuatro importantes conflictos —que siempre apare-
factores, aparte del precio. cen—, puede ser la señal de un con-
La relación. Los negociadores me- trato social mal negociado.
nos experimentados a menudo El proceso. Con frecuencia los nego-
subestiman la importancia de ciadores olvidan que el proceso para
desarrollar relaciones de tra- cerrar un acuerdo puede ser tan im-
bajo con las otras partes; con portante como su contenido. Cuenta
sus tácticas exageradamente la historia que el joven Tip O’Neill,
duras, o por simple descui- más tarde presidente de la Cámara
do, ponen en riesgo esos de Representantes de los Estados
vínculos. Esto es especial- Unidos, al enterarse de que una an-
mente válido para los acuer- ciana electora no votaría por él, le
dos entre países. Por ejemplo, preguntó: “¿No nos conoce a mí y a
en gran parte de América lati- mi familia de toda la vida?”. “Sí.”
na, el sur de Europa y el su- “¿No le he cortado el césped en vera-
deste de Asia pueden ser las no y despejado la nieve en invierno?”
relaciones —más que las tran- “Sí.” “¿No está de acuerdo con todas
sacciones— el interés predomi- mis políticas y posiciones?” “Sí.” “En-
nante en la negociación de con- tonces, ¿por qué no piensa votar-
venios a largo plazo. A los norteame- me?” “Porque no me lo ha pedido.”
ricanos, europeos del norte y austra- O’Neill aprendió que el proceso im-
lianos, orientados hacia los resulta- porta. Más aun: suelen alcanzarse re-
mo encontrar un dólar en la calle y dos, les cuesta entender la intensi- sultados sostenibles cuando todas las
metérselo en el bolsillo. ¿Quién no dad de este interés, e insisten prema- partes perciben que el proceso es
se lo quedaría? turamente en que los negociadores personal, respetuoso, sincero y justo.
Sin embargo, la mayoría de los juga- “vayan a los números”. Los intereses de todos los jugado-
dores rechaza propuestas que no in- El contrato social. De igual manera, res. Los negociadores con menor
volucren, como mínimo, un 35 a 40 los negociadores tienden a enfocar experiencia se dejan, a veces, hipno-
por ciento de la recompensa, inclu- el contrato económico (división de tizar por la economía total de un
so cuando hay mucho más dinero acciones, participación en los costos, acuerdo, y olvidan considerar los in-
en juego y la cantidad que pierden administración del poder, etcétera) a tereses de jugadores que están en
es significativa. Este rechazo “irra- expensas del contrato social o “espí- posición de destruir el trato. Cuan-
cional” les resulta incomprensible a ritu de un acuerdo”. Al ir mucho más do los gigantes farmacéuticos Glaxo
los “Midas al revés”, pero los estu- allá de una buena relación de traba- y SmithKline Beecham anunciaron
dios demuestran que, cuando la dis- jo, el contrato social determina las públicamente su fusión en 1998, los
tribución es demasiado desigual, la expectativas de la gente acerca de la inversores estaban encantados. Rá-
gente desdeña el botín por conside- naturaleza, el alcance y la duración pidamente, la capitalización de
rarlo injusto. de la empresa, y la forma en que se mercado combinada de la compa-

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y, por ende, de crear valor.
"Una lógica puramente basada en el precio sugeriría Veamos lo sucedido en una disputa
por un proyecto de embalse en los
dividirlo 99 a 1. Si bien se trata de una distribución Estados Unidos. Los ambientalistas y
los granjeros se oponían a los planes
extrema, todavía la otra parte recibe algo." de una compañía eléctrica. Las posi-
ciones eran irreconciliables, pero ha-
bía, sin embargo, intereses compati-
ñía se incrementó en la impactante juntas “la pila de oro” que podrían bles. A los granjeros les preocupaba
cifra de US$ 20.000 millones. Sin crear); intentan entender las princi- que disminuyese el caudal de agua; a
embargo, a pesar de haber acorda- pales preocupaciones de cada uno los ambientalistas, el hábitat de las
do previamente cómo cubrir las —incluyendo el precio—, e idean grandes grullas, río abajo, y la com-
principales posiciones ejecutivas en trade-offs (intercambios de un valor pañía eléctrica necesitaba capacidad
la compañía resultante, surgieron por otro) para toda la serie de cues- y una imagen más ecologista. Tras un
discrepancias internas respecto del tiones que rozan con esos intereses. costoso estancamiento legal, los tres
control directivo que retrasaron por El precio se convierte en un compo- grupos idearon un acuerdo impulsa-
dos años el convenio y evaporaron nente de un paquete más importan- do por los intereses, que todos ellos
los US$ 20.000 millones. Este episo- te y a más largo plazo, en lugar de
dio confirma que muchas veces no constituir el foco primario.
alcanza con una economía general
favorable; también hay que obser- ERROR 3
var los intereses de todos los jugado- Dejar que las posiciones
res internos potencialmente influ- desplacen los intereses
yentes. Lo que es “racional” para el Hay tres elementos en juego
conjunto puede no serlo para las en una negociación: los “te-
partes. mas” que se ponen sobre la
Si usted enfoca una negociación po- mesa para llegar a un acuer-
tencialmente cooperativa como un do explícito; las “posiciones”
mero acuerdo de precios, es proba- o perspectivas que cada par-
ble que la convierta en tal. Imagine a te tiene respecto de los te-
un negociador que espera un proce- mas, y los “intereses” o
so implacable, regido por el precio, y asuntos subyacentes que se
adopta, en consecuencia, una posi- verían afectados por la resolu-
ción dura y preventiva; la respuesta ción. Supongamos que usted
de la otra parte será, seguramente, si- está considerando una oferta
milar, confirmando las sospechas del laboral. Los intereses que subya-
primero: “Yo sabía que ésta iba a ser cen incluyen su necesidad de
una dura negociación de precios”. contar con un buen ingreso, pero
A menudo, el negociador puede in- también pueden tener relación con
fluir sobre la decisión de que el pre- el estatus, la seguridad, las nuevas
cio domine o se mantenga en su de- oportunidades y las necesidades que consideraron más valioso que conti-
bida perspectiva. Consideremos las logrará satisfacer por otros medios nuar la batalla en los tribunales. El
negociaciones entre dos compañías aparte del salario. No obstante, has- convenio incluía un embalse más pe-
que tratan de establecer una empre- ta los expertos en acuerdos pueden queño construido sobre un curso rá-
sa conjunta. Entre otras cuestiones, ver la negociación como una danza pido, garantías de mantener el flujo
deben determinar el valor de la con- de posiciones: si convergen, hay hídrico, protección del hábitat río
tribución de cada parte, para la dis- convenio; si no, se llega a un calle- abajo y un fondo fiduciario para me-
tribución de acciones. El negociador jón sin salida. En cambio, los nego- jorar los hábitats de las grandes gru-
tiene dos caminos. Un enfoque cen- ciadores orientados hacia los intere- llas en otros lugares.
trado en el precio conduce a aislar ses consideran que el proceso es una Aunque reconciliar los más profun-
rápidamente el tema de la valuación reconciliación de los intereses sub- dos intereses resulte claramente ven-
y a emitir una resolución. Con el yacentes: usted tiene una serie de in- tajoso, la gente tiene incorporada la
otro enfoque, las partes se pueden tereses, yo tengo otra, y si resolve- tendencia de centrarse en su propia
ocupar previamente de elaborar una mos el problema en forma conjunta posición, presume que los intereses
visión compartida más específica de estaremos en mejores condiciones son incompatibles e ingresa en un
la empresa conjunta (visualizando de satisfacer los intereses de ambos juego de suma cero, en el cual la ga- ➙
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nancia de uno es la pérdida del otro.
Investigaciones realizadas mostraron "Surgieron discrepancias internas respecto del control
que, a un gran porcentaje de partici-
pantes, les resulta muy difícil deter- directivo, que retrasaron por dos años el convenio y
minar por completo cuáles son los
temas compatibles entre las partes. evaporaron los US$ 20.000 millones."
En términos del mundo real, esto
significa que hay una enorme cuota
de valor que inadvertidamente no se mente la tensión entre las acciones rápidamente, y se enfrenta a un posi-
crea, ya que ambas partes se alejan cooperativas necesarias para crear ble comprador a quien le agrada la
del dinero que está sobre la mesa. valor y las competitivas necesarias empresa pero es mucho más escépti-
Por ejemplo, los negociadores del para obtenerlo. La torta debe ex- co respecto del flujo de caja futuro.
tipo “Midas al revés” casi automáti- pandirse y también dividirse. Un negociador inteligente usaría es-
camente se centran en el precio y en tas diferencias para zanjar la brecha
posiciones de regateo para reclamar ERROR 4 de valor. Propondría un acuerdo por
valor. Los grandes negociadores Buscar excesivamente el cual el comprador pagara un mon-
comprenden que esta danza ritual un terreno común to fijo ahora y una cantidad contin-
Las convenciones indican que nego- gente más adelante, sobre la base del
ciamos para superar las diferencias desempeño futuro de la compañía.
que nos separan. Por lo tanto, se nos Este pago contingente puede pare-
recomienda encontrar acuerdos del cer bastante valioso para la vendedo-
tipo ganador-ganador, buscando ra optimista, quien espera obtener
un terreno común. Sin embar- su valuación más alta, pero no resul-
go, muchas de las fuentes de ta muy caro para el comprador, que
valor que se suelen omitir en es más pesimista.
las negociaciones surgen de Del mismo modo, una parte con
las diferencias entre las par- menor aversión al riesgo puede
tes. “asegurar” a la otra, más renuente a
Recordemos la batalla por correrlo, etcétera. Las diferencias
el embalse. La solución no en la estructura de costos o de in-
se originó en los intereses co- gresos, en el estatus impositivo o en
munes, sino en las prioridades los arreglos regulatorios entre dos
diferentes. Cuando Egipto e partes, pueden ser convertidas en
Israel negociaban sobre el Si- ganancias para ambas. Llevar a cabo
naí, sus posiciones acerca del un disciplinado “inventario de dife-
lugar donde trazar la frontera rencias” es una tarea tanto o más im-
eran incompatibles. Pero los ne- portante que la de identificar terre-
gociadores descubrieron una dife- nos comunes. Las diferencias llevan
rencia vital en los intereses y priori- a acordar, pero hay que dedicarse
dades subyacentes: a los israelíes les activamente a buscarlas.
de las posiciones no es más que el importaba más la seguridad y los
juego superficial; la verdadera ac- egipcios estaban más interesados en ERROR 5
ción tiene lugar cuando hurgan has- la soberanía. La solución fue una zo- Descuidar las BATNAs
ta dilucidar el conjunto completo na desmilitarizada bajo bandera BATNA, el acrónimo (en inglés) de
de intereses que hay en juego. Para egipcia. Las diferencias de intereses “mejor alternativa a un acuerdo ne-
reconciliar los intereses de modo de o prioridades pueden abrir la posibi- gociado”, acuñado años atrás por
crear valor, se necesita paciencia y lidad de desatar elementos y darle a Roger Fisher, William Ury y Bruce
disposición de investigar a la otra cada parte aquello que más valora, al Patton en su libro Getting to Yes, re-
parte; hay que formular muchas menor costo posible para el otro. fleja el curso de acción que tomaría
preguntas y escuchar. Sería una ton- Incluso cuando un tema parece pu- una parte si el acuerdo propuesto
tería renunciar al precio o a la posi- ramente económico, las diferencias no fuera posible. La mejor alternati-
ción de regateo; ambos son extre- en las previsiones pueden alimentar va al acuerdo puede ser: abandonar
madamente importantes. Y, por su- ganancias conjuntas. Supongamos un convenio; prolongar un estanca-
puesto, la creación de valor conjun- que una empresaria es verdadera- miento; acercarse a otro potencial
to tiene un límite. El truco radica en mente optimista acerca de las posibi- comprador, hacer algo dentro de la
reconocer y manejar productiva- lidades de su compañía, que crece empresa en lugar de procurarlo ex-

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ternamente, ir a los tribunales en
vez de resolver la cuestión, confor- "A los granjeros les preocupaba el caudal de agua; a los
mar una alianza diferente o ir a la
huelga. Las BATNAs determinan un ambientalistas, el hábitat de las grullas, y la compañía
umbral. El hecho de que ambas par-
tes consigan algo mejor que sus eléctrica necesitaba una imagen ecologista."
BATNAs es condición necesaria pa-
ra un arreglo. Por lo tanto, definen
una zona de acuerdo posible y de- vender una división de pobre desem- breto. La gente tiende, inconsciente-
terminan su ubicación. peño, por algo más de US$ 7 millo- mente, a interpretar la información
Una BATNA fuerte es una herra- nes, a uno de sus dos compradores correspondiente a su lado de la mesa
mienta de negociación importante. potenciales. Al enterarse de que am- de una manera fuertemente sesgada.
Mucha gente asocia poder de rega- bos eran feroces rivales en otros mer- Un experimento lo puso en eviden-
teo con capacidad para infligir o so- cados, el vendedor especuló con la cia. Investigadores de Harvard entre-
portar daño, pero la disposición a idea de que podrían estar dispuestos garon, a un numeroso grupo de eje-
renunciar a una BATNA aparente- a pagar un precio inflado con tal de cutivos, cierta información sobre
mente buena es a menudo más im- impedir que el otro se quedara con una compañía que negociaba para
la división. Por lo tanto, se ocupó de adquirir otra. Se les asignó aleatoria-
que cada uno supiera de la existen- mente la función de comprador o
cia del otro candidato y, con gran ha- vendedor, y la información propor-
bilidad, se ganó el interés de ambas cionada a ambas partes fue idéntica.
compañías. La división se ven- Luego, se le pidió a cada uno una ta-
dió por US$ 45 millones. sación objetiva y real de la compañía
Muchas veces, para mejorar a ser comprada, olvidándose del va-
un posible acuerdo, los nego- lor que le atribuirían durante la ne-
ciadores se concentran en gociación. La valuación de los “ven-
las tácticas y descuidan su dedores” duplicó la de los “compra-
propia BATNA y la de la dores”. Esta brecha, sin ningún fun-
otra parte. Así le ocurrió a damento en los hechos; había sido
una compañía canadiense, creada exclusivamente por la asigna-
cuando aceptó la condición ción de roles al azar.
que le impuso el candidato a Supongamos que alguien cree tener
comprar una de sus divisio- un 70 por ciento de probabilidades
nes: nueve meses de negocia- de ganar un juicio por US$ 1 millón,
ciones con exclusividad. Esto mientras que la defensa piensa que
les impidió contar con alguna el demandante sólo cuenta con el 50
alternativa al precio ofrecido por ciento de posibilidades de éxito.
por el interesado. Esto significa que, en las reuniones
El verdadero problema en la negocia- de conciliación, la BATNA esperada
ción es “acuerdo versus BATNA”, y no por el demandante para una batalla
portante. Cuanto mejor luzca su uno u otro por separado. Su acuerdo legal (US$ 700.000 menos honora-
BATNA, tanto para usted como para potencial y su BATNA deben trabajar rios legales) supera la estimación del
su contraparte, más creíble será su en conjunto, como si fueran los dos fi- demandado acerca de su riesgo (pa-
amenaza de marcharse y mejor con- los de una tijera. gar US$ 500.000 más honorarios).
tribuirá a impulsar el acuerdo. Ro- Sin una aversión significativa al ries-
ger Fisher lo puso en estos térmi- ERROR 6 go, las estimaciones divergentes obs-
nos: ¿qué preferiría tener en el bol- No ser capaz de corregir una truyen cualquier posibilidad de arre-
sillo trasero mientras negocia un au- visión sesgada glo extrajudicial. Comprometerse
mento con su jefe: una pistola o una Así como un piloto puede equivocar- demasiado con su propio punto de
fantástica oferta de trabajo de la se al tratar de determinar, de noche vista —creer en su propio libreto—
competencia? o durante una tormenta, dónde está es un error muy común.
Además de evaluar su propia BAT- el horizonte, la psicología de la per- Percepciones militantes. Así como
NA, usted debe examinar cuidadosa- cepción lleva sistemáticamente a los nos equivocamos sistemáticamente
mente la de la otra parte para estar a negociadores a cometer grandes al procesar información crucial para
cubierto de sorpresas. Por ejemplo, errores. nuestro lado de la mesa, nos resulta
una compañía británica esperaba Propensión a creer en su propio li- todavía más difícil evaluar a la otra ➙
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ran: riesgos derivados de “gaffes” cul-
"Las diferencias de intereses o prioridades permiten turales, adoptar un estilo irritante, se-
ñales inadvertidas de falta de respeto
desatar elementos y darle a cada parte lo que más valora, o confianza, mala comunicación, mal
manejo de los tiempos, revelar dema-
al menor costo posible para el otro." siado o demasiado poco, una agenda
pobremente diseñada, errores de
concatenación, negociar con la per-
parte, especialmente en situación de playing (juego de roles) preparato- sona equivocada de la otra parte, per-
adversarios. Extensas investigaciones rio que puede generar valiosas pers- sonalizar temas, etcétera. Y aunque
han comprobado un mecanismo in- pectivas. también logre evitar todos estos erro-
consciente que mejora la posición Hace unos años, cuando ayudaba a res, todavía puede encontrar dificul-
propia, retratándola como “más inte- un cliente a prepararse para una ne- tades por encarar la negociación con
ligente, honesta y ética”, y difama si- gociación difícil, le sugerí que prepa- una perspectiva demasiado estrecha,
multáneamente a la oposición. Esto rara un “informe” detallado para ca- tomando demasiados elementos del
lleva a percepciones exageradas so- da una de las partes, e hiciera que los “problema” como fijos.
bre la posición de la otra parte, y so- mejores integrantes de su equipo ne- Los mejores negociadores adoptan
breestima el verdadero conflicto. Pa- gociasen en favor del otro, en una in- una perspectiva más amplia para es-
ra quien observa desde afuera, quie- versión de roles. El informe corres-
nes están en situación de desintegrar pondiente a su lado de la mesa fue
sociedades o matrimonios suelen ex- extenso, elocuente y persuasivo; el
poner visiones exageradas del otro. que describía la situación del otro
Las percepciones militantes pueden lado sólo tenía dos páginas y
convertirse fácilmente en profecías consistía fundamentalmente
autocumplidas. Experimentos que en razones para ceder rápida-
testearon los efectos de las expecta- mente a los argumentos supe-
tivas de los docentes respecto de sus riores de mi cliente. Los eje-
alumnos, los diagnósticos de psi- cutivos no sólo estaban cen-
quiatras de pacientes con trastornos trados en su propio problema
mentales y las expectativas del líder (error 1), sino que sus per-
de un pelotón militar confirmaron cepciones de ambas partes
que, con frecuencia, las percepcio- también eran notablemen-
nes militantes moldean la conducta. te sesgadas (error 6).
En la mesa de negociaciones, afe-
rrarse firmemente a la idea de que De una negociación apenas
la otra parte es obstinada o extrema eficaz a una negociación
puede desencadenar esa conducta, superior
reduciendo notablemente las posi- Usted ha navegado por las aguas
bilidades de un acuerdo constructi- poco profundas de un acuerdo ape-
vo. nas eficaz, hasta arribar al problema
A medida que se intensifican las dis- real. Se ha focalizado en la serie com-
crepancias y el conflicto, los buenos pleta de intereses de todas las partes, tablecer y resolver el problema real.
negociadores deben esperar percep- en lugar de centrarse en el precio y Con un agudo sentido del valor po-
ciones sesgadas, tanto de su propio en las posiciones. Ha mirado más tencial por crearse, saben cambiar
lado como del otro. Los menos ave- allá del terreno común para desente- sobre la marcha. Visualizan la arqui-
zados tienden a conmoverse e indig- rrar diferencias capaces de crear va- tectura más prometedora y actúan
narse, y no son conscientes de que su lor. Ha evaluado y moldeado las BAT- en consecuencia. Estos negociado-
propia perspectiva está teñida por el NAs. Ha dado pasos para neutralizar res virtuosos no sólo juegan el juego
papel que cumplen. ¿Cómo contra- la propensión a distorsionar y las que está sobre la mesa; son maestros
rrestar estas poderosas tendencias? percepciones militantes. En suma, en la tarea de montarlo y de modifi-
El simple hecho de saber que exis- ha entendido claramente su propio carlo para maximizar las posibilida-
ten, ayuda. También es útil buscar la problema y ha tratado de compren- des de obtener mejores resultados. ●
opinión de terceros no involucrados. der al otro, y de influir para que deci-
Y proponer a los suyos que preparen da por su propio interés lo que usted © Trend Management/
la defensa más fuerte posible de la desea. Harvard Business Review
otra parte, como base para un role- Hay muchos errores que aún lo espe-

102 Volumen 3 / Nº 6 / septiembre-octubre 2001

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