Вы находитесь на странице: 1из 15

HELADOS

DE SACHA BARRERA ORO


MENDOZA, 2001

LA CATARSIS LE PERTENECE SOLO A LOS


QUE ESTAN DE ESTE LADO DEL ESPEJO...

PERSONAJES:

MUJER: 60 AÑOS

JOVEN: 20 AÑOS
A la memoria de Ayrton Brian Lionel Godoy. (1993- 1996)

UNA MUJER MAYOR ESTA SENTADA EN


UNA BANQUETA, DE FRENTE AL PÚBLICO.
TIENE PUESTO UNOS ANTEOJOS DE
LENTES OSCUROS. DESPUES DE UNOS
MOMENTOS LLEGA UN JOVEN Y SE PARA A
SU LADO.

JOVEN: ¿Está ocupado?


MUJER: No.
JOVEN: (SE SIENTA, MIRA HACIA EL PÚBLICO Y BUSCA) Qué día hoy, ¿no?
MUJER: Sí.
JOVEN: No parece que fuera fin de mes. (SONRIE)
MUJER: (LO MIRA EN SILENCIO)
JOVEN: (MIRA A LA LEJANÍA)¡Qué manera de consumir! (SILENCIO) ¿Usted vino ayer?
MUJER: Sí.
JOVEN: (VUELVE A MIRARLA) Claro... (PIENSA) Si... Me acuerdo perfectamente de
usted.
MUJER: (LO MIRA)
JOVEN: Usted siempre se sienta aquí ¿no? (LA MUJER VUELVE A MIRAR HACIA EL
PÚBLICO) Estos días he estado viniendo y... Me preguntaba si de acá se vería distinto... Por
eso me acerqué. No le molesta que yo me siente ¿no?
MUJER: No.
JOVEN: (SILENCIO) A mi ex la conocí acá, en esta misma banqueta... Yo recién llegaba un
día, y la vi. Como no había nadie... Me senté a su lado y ahí empezó todo. Creo que nos
atrajo el mismo gusto. No he vuelto a ver a nadie observar con tanto detenimiento, hasta ayer,
cuando la vi a usted y me hizo acordar a ella. (LA MUJER LO MIRA, EL JOVEN MIRA AL
PÚBLICO Y COMIENZA A RELAMERSE) Ella tenía un sentido de la ubicación
inquietante... sabía cuando había que pararse y dejar un gusto por otro...
MUJER: ¿Usted trabaja acá?
JOVEN: (DESCONCERTADO)¿Yo?, no.
MUJER: Entonces puedo preguntarle lo que quiera sin compromiso de compra.
JOVEN: Sí.
MUJER: ¿Qué me dice de los que eligen el baño?
JOVEN: ¿El baño?
MUJER: (NATURAL) Sí... El baño de chocolate.
JOVEN: Ah... no, yo en el tema del baño soy bastante tradicional, no estoy de acuerdo... Eso
de ocultar los colores me parece una deslealtad con el cliente. Además se pierde mucho el
tiempo.
MUJER: En eso estoy de acuerdo...
JOVEN: De acá que se comen la cascarita... Se chorrean enteros, después que se tienen que
ir a lavar... y así... entre que le cambian el vasito por otro, se nos pasó el turno.
MUJER: Con tantas interrupciones llega un momento en el que una no sabe, qué es lo que se
esta viendo, y el tiempo...
JOVEN: Es dinero... Y los dos se van de la misma forma.
MUJER: ¿Qué le pasa?
JOVEN: Nada.
MUJER: ¿Por qué hizo una comparación tan burda entre el tiempo y el dinero?
JOVEN: No sé... Se me ocurrió.
MUJER: (VUELVE A MIRAR AL PÚBLICO) ¿Sacó el abono mensual?
JOVEN: No. El presupuesto no me da, soy estudiante. Apenas si tengo para sacar un palco a
dos gustos, válido de lunes a viernes, menos feriados y fiestas patrias.
MUJER: ¡Qué lástima!
JOVEN: Podríamos tutearnos. ¿No te parece?
MUJER: Sí... ¿Por qué no? (LO MIRA) Además ya han pasado algunos minutos... Hemos
compartido un mismo campo visual juntos, y eso es crear un vínculo... Y cuando se alimenta
un vínculo...
JOVEN: (INTERRUMPE) ¡Pistacho!
MUJER: (VUELVE A MIRAR HACIA EL PÚBLICO) ¿Pistacho? No... Es crema del cielo.
JOVEN: No, uno es verde y el otro es celeste.
MUJER: ¡Qué lastima!
MUJER / JOVEN: (ESTAN UNOS INSTANTES EN SILENCIO MIRANDO AL
PÚBLICO)
JOVEN: ¿La vio?
MUJER: ¿Qué cosa?
JOVEN: (SUSURRA) La cassatta.
MUJER: ¿Una cassatta?
JOVEN: (PARANOICO) Shhhhh... No grite que nos van a sacar.
MUJER: (SUSURRA)¿Está seguro?
JOVEN: Sí, Aquel... El rubio que ahora está de espaldas... Ese tiene en la mano izquierda
una cassatta. (LA MUJER OBSERVA MAS ALLA DEL PÚBLICO) Fíjese bien...
MUJER: A ver... (DEJA DE BUSCAR Y SE QUEDA INMOVIL) ¡Ajá! (SE RELAME) ¿No
será el celular...?
JOVEN: ¡Nooo! Hace tiempo que se prohibieron los celulares...
MUJER: (SE RELAME)¿Está seguro?
JOVEN: Sí, por lo que dicen, los prohibieron por la seguridad del cliente. Pero a mí, algo no
me cierra... O esta cassatta está en un sector equivocado o a nosotros se nos confundió el
sector...
MUJER: ¿Qué hace una cassatta entre los helados de dos gustos?
JOVEN: No sé.
MUJER: ¿Qué hacemos?
JOVEN: ¡Disfrutemos!
MUJER: ¿Y si nos cobran un recargo? No miremos... (NERVIOSA) O mejor nos vamos...
JOVEN: Está loca, con las ganas que tengo de ver comer una cassatta.
MUJER: ¿Y si a la salida nos cobran un plus?
JOVEN: ¡Nosotros no tenemos la culpa! Que ellos se hayan confundido no es problema
nuestro.
MUJER: ¿Y si nos acusan de haber visto comer demás?
JOVEN: Yo de acá no me muevo. Con lo que me gusta ver comer la cassatta... (LA MUJER
GIRA SU CUERPO Y MIRA HACIA UN COSTADO) Y si me quieren sacar... Que vengan.
¡Si!.. Que vengan. A mí, de acá, me van a tener que sacar con los pies para adelante.
MUJER: Mire que después de lo del niño tomaron medidas extremas.
JOVEN: ¿El niño?
MUJER: Sí, el niño... ¿No me diga que no se enteró de lo del niño?
JOVEN: El niño... (NO MUY CONVENCIDO) Claro... el niño
MUJER: Sí... Después de lo Yoryi Godoy pusieron el blindex.
JOVEN: (EXTIENDE UNA MANO HACIA ADELANTE) El blindex, si... ¡Qué desgracia!
MUJER: ¡Estaba cantado...! Alguna vez iba a pasar. Las criaturas son impredecibles.
JOVEN: (SE LEVANTA DE GOLPE MIRANDO HACIA EL PÚBLICO) Se le va caer...
¡Cuidado!
MUJER: (LO SUJETA CON FUERZA) Siéntese. ¿Qué hace? ¿Quiere que se den cuenta y
nos saquen?
JOVEN: (MIRA MAS ALLA DEL PÚBLICO, ESTA ANGUSTIADO) ¡Se le va a caer...! Si
no lo cuida... Se le cae.
MUJER: Parece que el niño estaba con la madre y... (SILENCIO) No, estaba con el padre...
(CONFUNDIDA)¿O estaba solo...? Bueno, resulta que parece que el niño en un momento
determinado se abalanzó sobre el producto alimenticio y no había manera de sacarlo.
JOVEN: (SE SIENTA) Yo creo que la culpa la tienen los padres.
MUJER: No sé... acá es fácil perder la línea y transgredir los límites establecidos. Es muy
difícil estipular donde termina el contemplar y cuando se pasa a la acción.
JOVEN: (SE LEVANTA ALTERADO) ¡Cuidado...! (LA MUJER MIRA AL PÚBLICO, LOS
DOS SE VEN IMPRESIONADOS POR ALGO.)
MUJER: (GRAVE) Por eso ahora tenemos el blindex. Al fin y al cabo es una seguridad... Un
límite necesario.
JOVEN: No sé, para mí se perdió el contacto persona-persona. Yo antes hacía sociales con el
consumidor final.
MUJER: ¡Ve...! Esa es otra de las cosas que yo no extraño.
JOVEN: (GRAVE) Se le cayó.
MUJER: ¡Pero no! Tiró el envoltorio. ¿Cómo se le va a caer?
JOVEN: Los padres del niño tendrían que haber sabido que un niño es un niño y que los
niños no saben que son niños. (PERMANECE EN SILENCIO) ¿Qué le pasa?
MUJER: (MIRA HACIA EL PÚBLICO)Tenía razón... El rubio tiró la cassatta al suelo.
(MIRA AL JOVEN) No le habrá gustado...
JOVEN: (MIRANDO FIJO AL PÚBLICO)¿Una cassatta?... Vamos...
MUJER: (MIRA AL PÚBLICO Y ALSA LA VOZ.) Glotón, sí... A vos te digo... (EL JOVEN
LA MIRA. LUEGO VUELVE A MIRAR AL PÚBLICO. ELLA UBICA UN PUNTO EN EL
PÚBLICO Y SONRIE.) Si tan sólo pudieras escucharme.
JOVEN: (MIRA HACIA OTRO PUNTO EN EL PÚBLICO. MURMURA.) ¿Verónica?...
¿Qué haces ahí? (SONRIE) Cuanto tiempo...
MUJER: (MIRA AL JOVEN) Linda chica... Seguro que va a pedir lo mismo que el pibe...
JOVEN: No... No es Verónica... Se mueve distinto... (MIRA A LA MUJER) Además...
MUJER: (MIRA AL PÚBLICO) Come despacio... ¿Quién te está apurando? (LEVANTA UN
BRAZO A MEDIA ALTURA. MUEVE LA MANO HACIA UN COSTADO COMO SI
ESTUVIERA GUIANDO A ALGUIEN.) Seguí por ahí... Despacio... (MIRA DE REOJO
HACIA DONDE EL JOVEN UBICA A LA CHICA.) De un momento a otro la vas a ver.
JOVEN: (ESTIRA EL CUELLO. AGUDIZA LA VISTA.) La marca de la varicela la tiene...
(MIRA A LA MUJER) ¡Es la Vero!...
MUJER: (MIRA AL MUCHACHO) ¡Qué esperas! Caminá y sentate con ella...
JOVEN: Está indecisa... Mira los gustos y no sabe que pedir...
MUJER: (EL MUCHACHO ESTÁ AVANZANDO) ¡La encontraste! Bien... Así, muy bien...
Acercate... ¡No tan deprisa! A todas nos gustan los pasos firmes y seguros, pero no
desesperados.
JOVEN: (LA CHICA SE ESTÁ LEVANTANDO) Ahí va... ¡Ya se decidió!
MUJER: (SIGUE LA TRAYECTORIA DE LA CHICA. LUEGO VUELVE A VER AL
MUCHACHO.) No importa. No te hagas problema... (HACE GESTOS CON LA MANO.)
No sigas de largo... ¡Quedate ahí!..(GRAVE) No la sigas... Sentate un minuto y esperala.
JOVEN: (MIRA DONDE ESTÁ EL MUCHACHO) Seguro que se va a tardar eh... (MIRA A
LA MUJER) A Verónica siempre le costó decidirse por un gusto.
MUJER: (MIRA HACIA UN COSTADO.) ¡Ahí viene! (A ELLA) Ya lo viste... (SONRIE)
Mirala... (LE VUELVE HABLAR A LA CHICA.) No lo mires a los ojos que te puede
derretir... Todavía no. (GRAVE) Hacé como sino existiera... (CONCENTRADA) Bien... (LE
HABLA AL MUCHACHO Y SONRIE.) Sabes muy bien que tu arma son tus ojos... (A
ELLA.) ¡Comé despacio! Ya sé que él te gusta... No hace falta que lo grites. (VUELVE A
SONREIR) ¡Si lo tenes escrito en la espalda!... (TIERNA) No te apresures... Esperá.
JOVEN: (ALGO MOLESTO MIRA A LA MUJER) A ella nunca le gustó hacer sociales...
(AL MUCHACHO.) Esperá sentado, que antes que ella te hable, se te va a derretir el helado
con cucurucho y todo...
MUJER: (SE PONE DE PIE JUNTO A LA BANQUETA. LUEGO LEVANTA UN BRAZO
A MEDIA ALTURA Y SUSURRA.) Ahora... (SONRIE) Girá despacio... (LEVANTA EL
OTRO BRAZO) Despacio... (A ÉL.) Encontrá sus ojos de manera casual... (A ELLA) No lo
asustes... Así... (A ÉL) No digas nada... Mirala... Ofrecele un poco de tu helado... (SUS
BRAZOS PARECEN ESTAR DIRIGIENDO UNA SINFONÍA.) (A ELLA) Él también toma
del tuyo... (LA YEMA DE SUS DEDOS APENAS SE TOCAN. PARECEN SUS BRAZOS
LOS DE UN DIRECTOR DE ORQUESTA QUE VA A DAR UN CIERRE FINAL.)
Todo sucede en un instante... Los demás helados existen. Por eso la piel de él es tan dulce y la
de ella... Es toda de él... (SILENCIO DE TENSIÓN)
JOVEN: (ESTA MIRANDO AL PÚBLICO. SU CABEZA ESTÁ APOYADA EN UNO DE
SUS HOMBROS. DESPUÉS DE UN MOMENTO MIRA A LA MUJER.) Sabe una cosa...
No es la Vero... (MIRA AL PÚBLICO) A ella no le gusta el helado...
MUJER: (PREOCUPADA MIRA A OTRO SECTOR DETERMINADO DEL
PÚBLICO.) ¿Qué le pasa?
JOVEN: (MIRA A LA MUJER) Nada... Que me va a pasar...
MUJER: No... Me refiero a él... (SEÑALA A UN SECTOR DEL PÚBLICO)
JOVEN: (MIRA AL FRENTE, AGUDIZA LA VISTA Y VUELVE A MIRARLA) No
sé... Se ve un buen hombre... Vaya a saber que problemas tiene...
MUJER: Aunque a ella tampoco la veo muy bien...
JOVEN: EXTIRA EL CUELLO Y OBSERVA CON EXTRAÑEZA.) ¿Qué
extraño?... ¿No? (SE LEVANTA Y CAMINA UNOS PASOS, SE DETIENE,
(SUSURRA) Pareciera que no pueden... Y sin embargo se los ve tan normales...
MUJER: (GRAVE) Por que será que tienen una relación tan contradictoria con sus
cuerpos...
JOVEN: Y pensar que ellos que pueden... No lo hacen... Y nosotros acá...
MUJER: (APENADA) Seguramente ella también este esperándolos...
JOVEN: (ANGUSTIADO) Hay algo de huérfanos en sus rostros...
MUJER: Sus ojos son grandes y tristes...
JOVEN: El tiempo pasa... (ANSIOSO) Los helados se derriten... Y... (APENADO)
ellos allí... Inmóviles... (ENOJADO) Pero será posible que siempre tengan alguna
excusa para no...
MUJER: (INTERRUMPE) Menos mal que nosotros tenemos el humor para reírnos
de lo que nos da miedo... Lástima que ellos no se animen a liberar endorfinas...
JOVEN: (CIERRA LOS OJOS, DE IMPROVISO LOS ABRE)
¿Endorfinas?
MUJER: Creo que me voy, estoy satisfecha. (SE LEVANTA DE LA BANQUETA)
Por hoy he visto suficiente.
JOVEN: (SE DA VUELTA DE REPENTE) Al final no nos tuteamos...
MUJER: (MIRA AL PÚBLICO) ¡Qué lastima!
JOVEN: (CAMINA HACIA LA BANQUETA)¿Me da una moneda?
MUJER: No.
JOVEN: (SE SIENTA) Discúlpeme a veces me quedo tildado en el pasado, yo antes
pedía limosnas en diferentes establecimientos alimentarios.
MUJER: (CORRECTIVA)... Alimenticios... (LO SEÑALA CON EL INDICE)
alimentarios son los productos que crujen en el interior de las bolsas que se forman
debajo de los ojos y usted... (LO MIRA)¡Usted tiene dos!
JOVEN: (EXTRAÑADO) ¿Qué le pasa?
MUJER: (VUELVE A SENTARSE) No sé, tal vez sea la edad.
JOVEN: A mí me puede contar... ¿Qué le pasa?
MUJER: Una se va poniendo madura y parece que es inevitable. Se va poniendo
cada vez más pelotuda.
JOVEN: (LA SEÑALA CON EL ÍNDICE)Lo que usted tiene es hambre visual.
MUJER: Noo... ¡No! Para nada... ¡Qué primario! ¿Ese sentimiento a mi edad? A esta
altura de mi vida sería una excentricidad. (MIRA AL PÚBLICO) ¡El hambre fue!
JOVEN: El hambre es un reflejo condicionado por la automatización a sistemática de
una paradoja gástrica. (LA MUJER VUELVE A MIRARLO)... Así decía mi ex...
(ENAMORADO) ¿Cómo no iba a estar perdidamente enamorado de ella?
MUJER: (MIRA AL PÚBLICO) Entonces... ¿Por qué la dejó?
JOVEN: No la dejé.
MUJER: Ya veo, la ingrata lo abandonó y le dejó toda esta carga nutritiva encima.
JOVEN: Fue de mutuo acuerdo. Últimamente no veíamos lo mismo, y está bien que el amor
es ciego. Pero las feromonas se desgastan y lo visual empieza a resentirse y...
MUJER: Usted decía granizado de cerezas y ella seguro que estaba en banana a la crema...
JOVEN: Sin embargo aún cuando estábamos en pareja nunca vimos igual un mismo
Tiramisú. Eso sí, no me acuerdo haber vivido nunca más intensamente los mordiscos, las
miradas de los demás... Todo se vive el doble de fuerte.
MUJER: En un primer momento la sensación inmediata es tibia y placentera. Después, cada
lengüetazo es increíble, (SONRIE) aunque duele un poquito, si se le muerde. Como si se
estuviese prediciendo un final... Cada día que pasa parece que vamos a explotar de felicidad...
Pero pasa el tiempo y entonces te cruje el cuerpo y finalmente hay una manera de saber si
seguiremos junto a la persona amada... Sólo si después de ver menearse varias cremas heladas
de un lado para el otro, ella sigue allí... A tu lado, quiere decir que está todo bien.
JOVEN: (IMPRESIONADO) Tal cual... ¿Cómo hizo para saber lo que yo sentía?
MUJER: Yo también alguna vez fui deseada... Cuando joven... (MIRA A UN COSTADO)
Parece que van a cerrar.
JOVEN: No, son medidas de seguridad. Practican esto todo el tiempo, hacen como que van a
cerrar pero no cierran... Ya va a ver que después de las doce cierran las puertas principales y
atienden por una ventanilla.
MUJER: ¿Nos irán a sacar?
JOVEN: No creo, no les conviene. Hace tiempo, el dinero ingresaba por las ventas directas
sin derivaciones. El volumen líquido seguía el curso normal de un típico cauce de
comercialización.
MUJER: Claro... Un canal de venta... Eran transacciones al contado.
JOVEN: Pero con el paso del tiempo “pagar por ver” ha triplicado las ganancias... y si... Esto
abre infinitas posibilidades de interpretación.
¿Para qué limitarse y optar por un sólo gusto?, pudiendo virtualizarse un campo infinito de
posibilidades nutritivas que yacen ¡ahí!, al alcance de la mano.
MUJER: Esto no tiene límite, ¿verdad?
JOVEN: (EN SILENCIO MIRA AL PÚBLICO)
MUJER: En el fondo a lo que yo le tengo miedo es al pensamiento divergente.
JOVEN: Usted tranquila, no se deje intimidar. Si nos vienen con algún tipo de
cuestionamiento, nosotros no nos tenemos que olvidar que de alguna manera, mirando...
Estamos consumiendo... ¿No?
MUJER: (ANGUSTIADA)Van a venir y se van a dar cuenta.
JOVEN: Mire yo les voy a dejar muy en claro que nosotros no tuvimos nada que ver con el
tema de la cassatta. Después de todo si no ejercen un control eficaz de sus instalaciones.
Nosotros desde el sector que nos toca... No podemos hacer nada. ¡No es culpa nuestra!
MUJER: (NERVIOSA) Me van a preguntar y yo no voy a saber que decir.
JOVEN: Usted no pierda la calma. Si aún conserva el ticket del día, no tiene de qué
preocuparse. ¿Trajo el abono, no?
MUJER: Sí
JOVEN: Si tiene todo en regla nadie puede tocarla. (SE LEVANTA SÚBITAMENTE) Yo
estoy algo retrasado así que nos estamos viendo.
MUJER: No se vaya.
JOVEN: Hoy vienen unos ex amigos a verme y quedamos en ir a ver una película.
MUJER: Por favor...
JOVEN: No puedo, igual más tarde ya quedé en ir a ver una casa.
MUJER: Mi hija está por venir. No me gusta quedarme sola. Apenas llegue, usted se va...
¿Sí?... Por favor...
JOVEN: Déjeme ver... (PIENSA, MIRA AL PÚBLICO)
MUJER: (SILENCIO) Qué bien se complementan el limón y la frutilla, ¿no?
JOVEN: Frutilla... ¿Qué limón?
MUJER: (MIRANDO AL PÚBLICO) Qué hermosos vasitos de cerámica... Él la abraza
(SONRIE) Ella se siente otra vez lo más importante del mundo.
¿Qué bien se ven no? (EL JOVEN TRATA DE VER)
JOVEN: ¿Dónde? ¿Cuáles son?
MUJER: (SEÑALA CON DIRECCIÓN AL PÚBLICO) Ahí... Él le acaricia el cabello y ella
sueña. (SONRIE)
JOVEN: (LA MIRA) ¿Dónde esta mirando? (SE SUBE A LA BANQUETA E INTENTA
AGUDIZAR LA VISTA) ¿Cómo hace para ver la sección de los de agua, están lejos...
¡Qué vista! ¿Para qué quiere que me quede? Yo no tengo su alcance visual. Conmigo se va
aburrir. Además...
MUJER: Siéntese.
JOVEN: ¿Qué le pasa?
MUJER: Está llamando la atención, escucho risas. (GRAVE) Se ríen de nosotros.
JOVEN: Noo... son las promotoras.
MUJER: ¿Qué hacen?
JOVEN: ¿Cómo que hacen? ¿Puede ver mucho más allá y me pregunta que está pasando al
lado nuestro?
MUJER: (EXTRAÑADA)¿Qué hacen?
JOVEN: Nada.
MUJER: ¿Usted cree que ellos pueden vernos?
JOVEN: ¿Quiénes?
MUJER: (MIRA AL JOVEN Y LUEGO GIRA EL ROSTRO HACIA EL PÚBLICO) Ellos.
JOVEN: ¿Los consumidores finales?
MUJER: Sí.
JOVEN: No, no creo... Fíjese que una vez vi un documental donde explicaban justamente lo
que usted pregunta. Parece que en los hoteles alojamientos y en las heladerías, ponen espejos
en las paredes y de esa forma cuando la gente mira hacia donde nosotros estamos, no nos ven,
sólo pueden verse ellos mismos...
Increíble... ¿No? Si supieran que en este preciso momento estamos viendo cada uno de sus
movimientos quizás se inhibirían... (LE CAMBIA LA VOZ) Tal vez comerían de otra forma.
MUJER: ¿Cómo es?
JOVEN: (FIJA LA MIRADA EN EL PÚBLICO)¿Cómo es quién?
MUJER: ¿Cómo sabe que le hablo de alguien?
JOVEN: (NERVIOSO) No sé...
MUJER: Vamos... Le cambió la respiración, (SONRIE) seguro que es una mujer.
JOVEN: Sí.
MUJER: ¿Cómo es ella?
JOVEN: No sé... Es hermosa... No sé como explicarla... (SU MIRADA SE PIERDE EN EL
PÚBLICO) Cuando trato de definirla siento que no hay palabras... Que ninguna de las
metáforas imaginables puede con ella... Como si se hubieran borrado todos los adjetivos
posibles... Y yo aquí de este lado, mudo... (SILENCIO) Con los helados es mucho más fácil,
uno los observa y puede a simple vista sacar una radiografía de ellos. Pero con las personas es
distinto. Estamos toda una vida viéndonos y resulta que una mañana nos descubrimos entre
las sábanas y al terminar el desayuno, una vez ya despiertos, no podemos asegurar con quién
hemos compartido todos estos años.
MUJER: Yo creo que a veces me ven...
JOVEN: No sé, yo tengo la sensación que me escuchan... ¡Sino! ¿Cómo se explica que... Por
ejemplo... (FIJA LA VISTA EN UN PUNTO) ¿Ve esa chica...? La que esta sentada ¡ahí!
(SEÑALA CON EL INDICE) La que está con los quinotos al whisky... (SILENCIO)
Cuando la miro y me concentro en ella, comienzo a enamorarme y sin darme cuenta me
embarco en un tren de excitación tal, que no puedo parar y... Mientras más la miro más me
excito... Y ella,... Pobre... Comienza a ponerse colorada. A todo esto no hemos cruzado ni una
sola palabra, pero es como si ya hubiésemos tenido algún tipo de relación... Como si
estuviésemos desnudos preguntándonos mutuamente... ¿Todavía no te conozco y ya me
engañas?
MUJER: Ah... Pero eso tiene una explicación muy sencilla. Es un tema puramente histórico.
JOVEN: ¿Histérico?
MUJER: Sí. Hace años las heladerías no eran como las ve ahora... No. Antes eran sólo una
pantalla para disimular otra actividad. En los años 30 el sexo era un tabú, no como ahora... Y
las jóvenes desconocían totalmente todo lo referente a las artes amatorias. Entonces parece
ser que a una mujer de nombre Farinella se le ocurrió la idea de formar grupos de estudio, en
donde se les enseñaba a las niñas a succionar el pene mediante la utilización de los helados de
un peso. Desde ya que tuvo un éxito total, aunque en los círculos más selectos estuvo muy
mal visto por años ir a tomar helado... Mucho menos, pensar en ir a ver tomar.
JOVEN: Claro... ahora entiendo por qué se ponen tan nerviosas las mujeres cuando uno las
ve tomar helado... Y por qué me gusta tanto a mí observarlas.
MUJER: La memoria genética es la historia sellada a fuego y contra eso es muy difícil
luchar... (SILENCIO) Quizás por eso talvez a mí nunca me gustó el helado...
JOVEN: ¿Cómo dice?
MUJER: Digo que a mí cada vez me cuesta más venir.
JOVEN: Y... Hay días en el que uno se levanta desganado y...
MUJER: (INTERRUMPE) Me refiero a seguir con esto de ver tomar helado.
JOVEN: ¿Y... Qué podemos hacer... Sino resistir?
MUJER: (MOLESTA) Es joven... ¿Cómo puede ser...? Los viejos resistimos... Pero
ustedes...
JOVEN: (EN SILENCIO MIRA AL PÚBLICO)
MUJER: Yo ayer soñé que era una consumidora final.
JOVEN: (CONTINUA MIRANDO AL PÚBLICO, SU MIRADA ESTA EN ALGÚN
LUGAR)
MUJER: Todos los días me cuesta más entender que no van a venir...
JOVEN: ¿Quiénes no van a venir?
MUJER: (NATURALMENTE) Mis padres...
JOVEN: ¿Cómo dice?
MUJER: Digo, ¿será por eso que yo no veo?
JOVEN: (SE LEVANTA PARA IRSE) ¿Cómo que no ve?... (LA MUJER ESTA EN
SILENCIO)
MUJER: Yo no veo. (EL JOVEN SE ACERCA A LA MUJER Y LE SACA LOS LENTES,
SUS OJOS SON BLANCOS, MIRA PARA TODOS LADOS Y DE INMEDIATO VUELVE
A COLOCÁRSELOS) Yo sé que tengo los días contados.
JOVEN: (SUSURRA) ¿Cómo hizo para llegar hasta aquí?
MUJER: De memoria... Anteayer sabía exactamente cuantos pasos había de aquí a la puerta.
JOVEN: Entonces a mí no me necesita.
MUJER: Pero ayer trate de irme y ya no pude, no sé en que momento han cambiado tanto las
cosas. Antes que usted llegara lo intenté pero fue inútil.
JOVEN: Yo no puedo ser el lazarillo de nadie, apenas puedo ver los helados de dos gustos.
MUJER: Cuando se acercó y comenzó a hablarme pensé que me habían descubierto y que
tenía que irme. Por un lado me alegré. Mientras hablábamos pensaba... (SUSURRA) ¡Decile
que sos ciega...! Animate y decíle que nada de lo que te muestra podés ver... Así te denuncia y
te vas. (VUELVE HABLAR NORMALMENTE) Pero después me dió miedo... Con sólo
pensarme afuera se me hiela la sangre... Entonces comencé a fingir... Y funcionó... Hasta
ahora.
JOVEN: ¿Y su hija? Ella va a venir a buscarla.
MUJER: (ENOJADA) No insista con mi hija.
JOVEN: Usted me dijo que...
MUJER: (MIRA HACIA EL PÚBLICO) Lo de mi hija es mentira.
JOVEN: ¡Pero entonces me mintió todo el tiempo...! Y yo como un tarado escuchándola...
Hasta llegué a hacerme a la idea de cómo sería ella... Es inútil, me sigo pegando con la misma
pared todo el tiempo y parece que no entiendo. (LA MUJER SE DA VUELTA Y MIRA A UN
COSTADO) No hay manera de zafar. Todo sigue siendo un fraude, ¿Nada de lo que digamos
puede llegar a ser verdad...? (LA MUJER ESTA INMOVIL)
MUJER: (DESPUÉS DE MIRAR AL PÚBLICO MIRA AL JOVEN)
JOVEN: (EL JOVEN MIRA PARA TODOS LADOS, VUELVE A VER AL PÚBLICO Y LE
SUSURRA) Lo de la cassatta... También es mentira.
MUJER: (SE LLEVA LAS MANOS AL ROSTRO) Estoy harta de esto. Todos los días
religiosamente usted me trae aquí, me sienta... hacemos como que no nos conocemos, luego
nos decimos básicamente las mismas cosas... Nos mentimos... Sufrimos un poco...
Algunas veces reímos... Y finalmente llegamos a este punto donde la situación es insostenible
y de golpe desbaratamos todo...
JOVEN: Y el Capitalismo...
MUJER: (ALZA LA VOZ) ¡Esto no es Capitalismo...! Esto es un masaje neuronal que no
termina más... Es una eterna ostentación de impotencia social... ¿Y?... ¿Para qué? ¿Para irnos
a dormir cansados y así poder justificar el sueño...? Nooo... (ANGUSTIADA) ¿Para qué lo
hacemos... Para qué... Para qué nos vean y se apiaden de nosotros... Para qué con suerte
alguien nos esclavice...?
JOVEN: No me parece que haya sido tan patético. Después de todo, hoy no estuvimos tan
mal... Sacando lo de la cassatta y lo de su hija... Todo lo demás podría ser verdad.
MUJER: (SONRIE)
JOVEN: ¿Qué le pasa?
MUJER: Estaba a punto de gritar y decirlo todo.
JOVEN: No sé si este sea un buen momento para...
MUJER: Hoy tengo un sabor tan amargo en la boca... No sé por qué siento que hoy no es un
día más...
JOVEN: Yo estoy pensando en hacer un revival... Podríamos volver atrás y empezar desde
ahí.. ¿No?
MUJER: Yo estoy muy cansada... Hoy me siento mas vieja de lo que soy... Y cuando me
siento así... me dan unas ganas de decirlo todo de una vez y terminar con esta farsa,... Total...
(GRAVE) Lo único que me da pena es usted...
JOVEN: ¿Y por qué no lo hace? Al fin y al cabo estamos solos... Hace tiempo que ya nadie
invita a nadie a ver tomar helado.
MUJER: (LO PIENSA UN INSTANTE Y LUEGO DECIDE SUBIR A LA BANQUETA, EL
JOVEN LA AYUDA. ELLA SE SACA LOS LENTES Y SE LOS DA.)

(ALZA LA VOZ)... Gratis... (SILENCIO)

(ENERGICA) Verdes y cobardes bocas de peces secos... (BAJA LA VOZ) Como cualquier
realidad no buscada...

Por lo tanto prometo desangrarme leyendo entre baldosas terriblemente pesadas y cómodas...

(ALZA LA VOZ) ¡Al diablo con la melancólica paradoja del inocente!

(CON NATURALIDAD) Parada, entro fácilmente por el pasillo absurdo y lineal de la


sensibilidad. Difícilmente me anime a cubrir lo oceánico de tu corazón. (TRISTE) Siento...
Que si me quitan la paz que busco y se mueren todas mis celestes y geoplurales odas al buen
gusto, me beberán cual delicioso sorbo de agua fantástica.

(SILENCIO)

¡Pero digo nunca!

Hay un paisaje que espera ser recorrido por ti.


Por aquellos que muestran lo que no es de ellos y que con sus miradas unen lo romántico con
lo ajeno.
(SILENCIO)

¡Pero digo nunca!

Será desde adentro el cantar y me dejarán tranquila y semántica, cuando canten libélulas,
motores y cataratas de rostros colocados de la misma manera que las manchas crueles que
suele dejar el ánimo. (SONRIE)

(SILENCIO)

Si los inocentes pueden llamarse crueles...

Por lo tanto prometo no pensarlo, si fueron azulinos viajeros o dichosos boquetes que dan a
otra instancia... ¡No me importa!

(SILENCIO)

¡Pero digo nunca!

Después de todo... ¿Quién quiere saberlo y quién no?, es aparte...


El odio sigue racionalizándolo todo a su paso y sólo el bien y el mal se entienden.

(SILENCIO)

¡Viva la independencia visual!

(VUELVE A SENTARSE, CONTINUA MIRANDO HACIA EL PÚBLICO)

JOVEN: (TOMA UNA DE SUS MANOS, LA MUJER SE ACURRUCA EN EL) Tiene


frío... (LE BESA LA MANO, SE MIRAN)
MUJER: Está helado... (SE HACE UN SILENCIO INCOMODO)
JOVEN: (LA MIRA, LUEGO GIRA SU ROSTRO Y MIRA HACIA UN COSTADO) Ah...
lo de mi ex también era mentira... creo que no existe el común acuerdo...Yo...
MUJER: (LE TOCA EL ROSTRO COMO LEYENDOLO, SE RELAME) Talvez no esté
todo perdido... (TOMA LA MANO DEL JOVEN Y COMIENZA A RECORRERLA CON
LOS LABIOS LENTAMENTE)... Siempre y cuando podamos reconocer nuestros sabores...
(EL JOVEN NO ENTIENDE LO QUE SUCEDE) Mmm... Hay posibilidades nutritivas que
aún no hemos probado...
JOVEN: (MIRA HACIA UN COSTADO) Ahora sí creo que van a cerrar. (NO HAY
REACCION POR PARTE DE ELLA, EL JOVEN TOMA LA MANO DE LA MUJER Y
COMIENZA A BESARSELA, DE REPENTE LE CAMBIA EL ROSTRO, SE DA CUENTA
DE ALGO) Los dos estamos helados...
MUJER: (RECORRE CON SU ROSTRO LA MANO DEL JOVEN) El frío no siempre
paraliza... Muchas veces hace que despertemos...

(EL ROSTRO DE AMBOS SE ILUMINA DE INMENSA TERNURA)

JOVEN: Los pueblos que reelaboran sus propios sabores y son capaces de vivir helados...
MUJER: ... Algunas veces llegan a entender después de mucho sufrimiento que el hambre y
el frío... Es vida.

COMIENZAN A FROTAR SUS CUERPOS, MOVIÉNDOSE EN EL LUGAR. DE


ESTA MANERA, PONEN EN FUNCIONAMIENTO SUS MÚSCULOS.
EN ESCENA QUEDAN LA MUJER Y EL JOVEN ACARICIÁNDOSE. LA LUZ SE
VA LENTAMENTE.

FIN.

Вам также может понравиться