¿CÓMO PUEDEN INFLUIR DE FORMA POSITIVA O NEGATIVA LOS
FACTORES SOCIALES, FAMILIARES Y ESCOLARES EN EL
DESARROLLO SOCIAL DE LOS NIÑOS DE 0 A 6 AÑOS?
Es muy importante obtener este tipo de información para nuestro aprendizaje ya
que nos sirve no solo para nuestra vida profesional, y sabemos qué hace mucho tiempo el ser humano no le proporcionaba la importancia a lo que actualmente conocemos o llamamos infancia es como así que se conocían por igual ya sea a un adulto y un niño. Hay variedad cuando hablamos de estos factores que intervienen en el desarrollo de los niños. Dentro de los más significativos encontramos la alimentación, las enfermedades, el ambiente familiar, la economía, la ubicación geográfica, entre otros. Cada uno de éstos factores encuentran una relación especial entre sí y pueden llevar consecuencias terribles en el desarrollo psicomotor y cognoscitivo de los niños. Principalmente, los niños con menores niveles de desarrollo antes de entrar a la escuela son los que tienen menor rendimiento escolar. Se puede idear el desarrollo como un juicio de restauración y reorganización intacta. Se deja la representación de desarrollo como continuación estable de etapas. No se observa como un asunto directo, sino especializado por ser anormal, de adelantos y regresiones; que no tiene ni una iniciación concluyente y mucho menos una etapa final. Conocemos como práctica reorganizadora al tipo de trabajo cognitivo que marca instantes cruciales en el desarrollo. En ellos se resume el conocimiento anterior y sirve de base para desarrollos posteriores, más cuidados. Este texto es importante ya que logra mostrar el panorama de las sorprendentes capacidades de los niños y las niñas en su desarrollo durante sus primeros seis años de vida. También, la educación inicial asentada en el nuevo pensamiento del desarrollo y en la mejora de las competencias que este texto proyecta, exige un profundo cambio en las nociones acostumbradas de aprendizaje y enseñanza. Seguidamente, se logra testificar que los niños y las niñas piensan conforme. Y es de esta forma como consiguen de manera natural, espontánea, exigente y diversificada. “No menos cierto es que a todo lo largo de su desarrollo niñas y niños logran cambios completos en su organización cognitiva”. Entre estos cambios, tanto la movilización de recursos como las experiencias concretas de nuevas recomendaciones a los que los transportan esas movilizaciones, son de diario existir. La estimulación temprana o atención temprana infantil se basa, sobre todo en la repetición, a la que los expertos denominan unidades de información o bits. Del mismo modo que aprendemos a decir mamá o papá, repitiendo lo que nos dicen una y otra vez, podemos también aprender a leer, lograr un pensamiento matemático, e incluso desarrollar aspectos sensoriales y sociales. La repetición sistemática y secuencial de estímulos o ejercicios, y de actividades con base científica, refuerzan las áreas neuronales de los bebés. Durante la estimulación, no solo se potenciará adecuadamente el desarrollo motriz, cognitivo, social y emocional del bebé, sino que también se ampliará su desarrollo individual, sus capacidades, su predisposición y su ritmo. El desarrollo sensorial desempeña un papel importante dentro del proceso de aprendizaje del niño, toda la información que captamos del mundo exterior la obtenemos a través de nuestros sentidos, gracias a la sensación y percepción podemos hacer que la información llegue a nuestro cerebro para poder asimilarla y convertirla en aprendizaje. Por medio de los sentidos no solo vamos a obtener un aprendizaje cognoscitivo, sino también emocional, afectivo y social; es decir va a intervenir de una manera global en todos los procesos del aprendizaje del ser humano. Es necesario estimular a los niños desde el estado prenatal para poder utilizar de una manera adecuada cada uno de los órganos sensoriales.