Вы находитесь на странице: 1из 2
Capiruio 1X Una reconsideraci6n de la democracia de Dewey No vernos mejor forma de terminar este libro que consiclerar a un filésofo cuya obra ilustra a la perfeccion el modo en que el praginatismo aorteamericana ha sabi- do evitar las ilusiones tanto de Ja metalisica como del escepticisma: John Dewey. La vasta produccién de este pensador esté moldeada toda rés, sin el cual no se entenderian ni siquiera aquellos de sus eseritas que pedriames considerar epistemolbgi- cos, Es el interés de Dewey por e! significada y el Futu- 10 de Ja democracia, Los aspectos de su pensamiento cansiderados aqui constituyen, & nuestro entender, una justificacién filosética de la democracky a la que vamos umar la fustificacidm gatstemoldgica dle la democras ejay que expondremos a nuestra manera, si bien utili- wand clertos términos del vocabularie fileséfico de Dewey, Ast pues, fo a es; la dlemocracia no es s6lo una forma de vida social entre otras formas Facti- bles de vida social: es ta condicién previa para la aplicar cin plena de la inteligencia a Ja solucién de los prol imas sociales Alcomienzo de Htbics and the Bioits of Philosophy, Bernard Williams hace una dtl distincion entre dos sen- 247 os en los que cabria intentar justificar las afirmactones Gicas, E] mds utdépico es el siguente: se podria intentar buscar una justificacién de las afirmaciones éticas que convenciese realtiente al escéptica o al amoral y le hiciese cambiar de actitud, Williams llega a la acertada conclusién de que este objetiva es muy pace realista, ¥ continia asi: "En cambio, si la justificaciin va dirigica a una comunidad que ya es una comunidad ética, en- vonces la politica del discurse ético, incluida la flosofia moral, es significativamente distinta. E] cbjetiva es, no controlar a los enemigos de la comunidad ni a sus solembros marginales, sino ayudar, dando razones a quienes ya estin dispuestos a escucharlas, a crear cont nvamente una comunidad unida por esa misma disposi cién"t, La concepcién de la filosofia moral que Williams sugiere aqui es, a nuestro entender, exactamente la de Dewey. Sin embargo, agquél hace caso amiso no sélo de la personalidad histérica de John Dewey, sino también de la misma posibilidad de la justificacién presentacla por éste, Cuando Williams procede a examni- nar estrategias cle justificaciin basadas en concepeiones del Norecimiento humane, la expresi6n “florecimiente humano’ se utiliza en un sentico completamente indivi- dualista. Por ejemplo, Williams escriber "De acuerdo con Arist6teles, una vida virtuesa conduciria al bienes- del hombre que ha tenida una mala educacion, incluso si @ no puede darse cuenta EI hecho de que sea incurable y no entienda bien el diagndstico no sig- nifica que no este enfermo” (Hubées, pag, 40} Una jus- Ufeacién objetiva, en el dnico sentido que Williams considera posible, es una justificacién que podria déir- sele a cada ser hmano qué no esté “enfermo”. En resu~ men, la ttnica esperanza de una base objetiva para Ja ane rhe Linas of Pitosonby, Cambri- fe Mass, Harvard University Press, 1945, pgs. 26.21 248 ética? que W fica de justificacién “inédic a de la ética demostraria que, en un sentide de “enferma” que no incurra en una peticién de principio, ¢l hombre amo- ral, inmoral 0 ambas cosas est enfermo. Del Gnico sitio de’ donde, segdn Williams, podsia venir tal ustificacton seria de “alguna rama de la psioologia’, y Williams s¢ muestra muy escéptico en relicién con esa posibilidad, aunque dice que "seria absurda teatar de determinar @ prtoriy en unas cvantas paginas si podria haber tal 1eo- ria", AL objetivo mencionado anterlormente, "ne contro- Jar a los enemigos de la comunidad! ni a sus miembros mmarginales, sino ayudar, dando razones a quienes ya estin dispuestos @ escuchatlas, a crear continuamente una comunidad unida por esa misma disposicion”, se le ha dado una interpeetacién radicalmente ineividualista, Sin embargo, cuando Williams explica por qué es muy poco probeble que llegue a haber nunca una "sama de [a psicologia’ que nes proporcione razones objetiva: para la ética, hace una observacion muy «la figura, mas sara quia de le que C: nia, pero real, del individuo que es en buena medida horrible y sin embargo no despreciable en absoluto, sino peligrosamente Hloreciente, st uno se deja gular per cualquier criterio ctolégico que se atenga a Te mirada brillame y el pelo lustraso. Para quienes quieren basar la vida ética en Ja salud psicolégica es un problema que pueda haber personas ast", Obsérve: se la referencia a‘si ino se deja guiar por cualquier criterio etolSgica que se atenga a la mirada beillante y el pele lustros n opie ‘nién de Williams, un criteric objetivo del florecimierto 2 Aunque considera también la eatrategla kantiana, a coneluaiba de que cs ivealzable ye que, st podiera arse una juslfieaciés objeiva Coosa que dud, rendria que ser eonforanea Ari Teteles. Véase cap. 3 de Willaras, 2628, 2 Thea, pg 4 4 Tiida, pas 45-46, 249,

Вам также может понравиться