La digestión es la fragmentación de los alimentos ingeridos en moléculas que
pueden ser enviadas a las células individuales del cuerpo animal y utilizadas por ellas éstas moléculas dela sirven como fuentes de energía, suministro de elementos químicos esenciales (calcio, nitrógeno, aminoácidos, ácidos grasos y vitaminas) EL TUBO DIGESTIVO DE LOS VERTEBRADOS Está formado por un tubo largo y tortuoso que se extiende desde la boca hasta el ano. El sistema digestivo incluye también a las glándulas salivales, páncreas, hígado y vesícula biliar, órganos accesorios que proporcionan las enzimas y otras sustancias esenciales para la digestión. El proceso de digestión implica dos componentes: la descomposición de las moléculas de alimento y su absorción. Es tubo digestivo comienza en la cavidad oral e incluye la boca, la faringe, el esófago, estómago, el intestino delgado y el intestino grueso. El epitelio del tubo digestivo contiene muchas células caliciformes secretoras de mocos y, en algunas partes del intestino glándulas que secretan enzimas digestivas. A lo largo de la mayor parte del tubo digestivo la mucosa está constituida por dos capas de músculo liso, las contracciones coordinadas de éstos músculos producen constricciones anulares que mezclan el alimento al igual que los movimientos ondulatorios, conocidos como peristálticos, que mueven el alimento a lo largo del tubo digestivo. En varios puntos la cavidad muscular circular celular se engrosa formando bandas anchas, llamadas esfínteres. Estos, relajándose o contrayéndose, actúan como válvulas que controlan el alimento de un área del tubo digestivo. LA CAVDAD ORAL. PROCESAMIENTO INICIAL Muchos vertebrados tienen dientes, que son estructuras complejas adaptadas para romper y triturar el alimento. La corona de un diente está cubierta por esmalte, la encía esta cubierta de cemento, una sustancia semejante al hueso. La mayor parte del diente se compone de dentina, otro material de tipo óseo que se forma lentamente durante la vida del diente. La cavidad de la pulpa dentro del diente contiene las células que producen dentina, así como las terminaciones nerviosas y vasos sanguíneos. Los niños tienen 20 dientes, que se pueden gradualmente y son reemplazados por un segundo conjunto de 32 dientes a medida que los maxilares aumentan de tamaño. De los 16 dientes adultos de cada maxilar 4 son incisivos, estructuras planas a modo de buril especializadas en cortar, dos son caninos, usados por los carnívoros para morder y despedazar, cuatro son premolares, cada uno de los cuales tienen dos cúspide o protuberancias, por eso son llamados bicúspides y seis son molares, cada uno de los cuales tienen cuatro o cinco cúspides. Los premolares y molares se usan para triturar. Los molares no reemplazan a los dientes temporales pero aparecen a medida que crece el maxilar. La lengua sirve en gran medida para mover y manipular el alimento. La lengua de los mamíferos tiene botones gustativos. En los seres humanos la lengua ha adquirido la función secundaria de formular sonidos y comunicación. Cuando se mastica el alimento, éste es humedecido por la saliva, que es una secreción acuosa producida por tres pares de glándulas salivales grandes, además de numerosas glándulas diminutas, las glándulas bucales que se localizan en el tapiz mucoso de la boca. La saliva, que contiene moco, lubrica el alimento para que pueda tragar con facilidad. Es ligeramente alcalina, debido a la presencia de bicarbonato de sodio. La saliva también compone una enzima la amilasa salival, comienza con la fragmentación de los almidones. La amilasa actúa por hidrólisis o sea, la ruptura de cada enlace significa la adhesión de una molécula de agua. LA FARINGE Y EL ESÓFAGO: LA DEGLUCIÓN Desde la boca, la comida es impulsada hacia el esófago, tubo muscular de aproximadamente de 25 cm. De largo en los seres humanos adultos. La deglución es el pasaje del alimento esófago y a través del esófago al estómago. En el hombre la parte superior del esófago el músculo es estriado, pero la parte inferior es músculo liso. El esófago pasa a través del diafragma, que separa la cavidad torácica y abdominal y se abre en el estómago. La cavidad abdominal está completamente tapizada por el peritoneo, una capa delgada de tejido conectivo cubierto por epitelio húmedo. El estómago, los intestinos, y otros órganos de la cavidad abdominal están suspendidos por pliegues del peritoneo conocidos como mesenterios. EL ESTÓMAGO: ALMACENAMIENTO Y LICUACIÓN El estómago es una bolsa muscular flexible que, a menos que se encuentre totalmente distendida, forma pliegues. Los estómagos varían ampliamente su capacidad. El estómago del ser humano distendido puede contener entre 2 y 4 litros de alimento. La capa mucosa es muy gruesa y contiene numerosas criptas gástricas. Las células epiteliales que secretan moco que cubren la superficie del estómago y tapizan las criptas gástricas. En las porciones finales de las criptas se abren las glándulas gástricas, cuyas paredes contienen células parietales, que producen ácido clorhídrico (HCI), y las células principales, que producen pepsinógeno, que es precursor de la enzima digestiva pepsina. Estas secreciones, con el agua en la que están disueltas, constituyen el jugo gástrico. Como consecuencia de la secreción del HCI, el pH del jugo gástrico normalmente varía entre 1.5 y 2.5, una acidez muy superior a la de cualquier otro fluido corporal. La sensación de ardor que se siente cuando uno vomita es causada por la acidez del jugo gástrico que actúa sobre las membranas sin protección. Normalmente el moco del estómago forma una barrera entre el epitelio y los jugos gástricos y evita de esta forma que el estómago se auto digiera. El HCI que mata a la mayoría de las bacterias y otras células vivas existente en el alimento ingerido, libera a los componentes rígidos, fibrosos de los tejidos de los vegetales y animales y erosiona la sustancia cementante entre células. El HCI también inicia la conversión del pepsinógeno a su forma activa, la pepsina, escindiendo una pequeña porción de la molécula. Una vez que se ha formado la pepsina, actúa sobre otras moléculas de pepsinógeno para formar pepsina. La pepsina, que desintegra las proteínas en péptidos solo se activa al pH del estómago normal. El estómago se encuentra bajo influencia del sistema nervioso y del sistema endócrino. La anticipación del alimento y la presencia del alimento en el jugo gástrico. El miedo y la ira disminuyen la movilidad del estómago. Cuando el alimento que contiene proteínas llega al estómago su presencia provoca la liberación en el torrente sanguíneo de una hormona llamada gastrina producida por las células gástricas, esta hormona incrementa su secreción de jugos gástricos sobre las células musculares de la pared estomacal para provocar contracciones. En el estómago el alimento se convierte en una masa semilíquida que se mueve gradualmente por peristaltismo a través del esfínter píloro, que separa al estómago y el intestino delgado. El estómago usualmente se vacía se vacía cada 4 horas de la ingestión de un alimento.
El intestino grueso: absorción ulterior y eliminación
La absorción de agua, sodio y otros minerales, que ocurre en el intestino
delgado, continúa en el intestino grueso.
El intestino grueso aloja una considerable población de bacterias
simbióticas (incluyendo la E. Coli), que degradan sustancias alimenticias que escaparon a la digestión y absorción en el intestino delgado. Al vivir de estas estancias alimenticias, que son fundamentalmente aquellos materiales para cuya digestión el hombre carece de las enzimas necesarias, las bacterias sintetiza aminoácidos y vitaminas, un aparte de los cuales son absorbidos en el torrente sanguíneo. Estas bacterias son nuestra fuente pr El apéndice, un saco ciego del intestino grueso, si bien no desempeña un papel conocido en la digestión humana, es uno de los sitios de interacción de células implicadas en la respuesta inmune.
El grueso de la materia fecal está formado por agua, bacterias
(principalmente células muertas) y fibras de celulosa. Junto con otras sustancias indigeribles. Está lubricada por moco secretado por algunas de las células epiteliales que tapiza el intestino grueso, conservada brevemente en el recto, y luego eliminada a través del ano como heces.
. El apéndice, un saco ciego del intestino grueso, si bien no desempeña un
papel conocido en la digestión humana, es uno de los sitios de interacción de células implicadas en la respuesta inmune.
El grueso de la materia fecal está formado por agua, bacterias
(principalmente células muertas) y fibras de celulosa. Junto con otras sustancias indigeribles. Está lubricada por moco secretado por algunas de las células epiteliales que tapiza el intestino grueso, conservada brevemente en el recto, y luego eliminada a través del ano como heces.
PRINCIPALES GLÁNDULAS ACCESORIAS
Páncreas: es la fuente de diversas sustancias esenciales para el proceso
digestivo. Es un órgano excretor especializado que se desarrolla, tanto en el embrión como en el curso de la historia evolutiva, desde la porción superior del intestino delgado. La masa de tejido del páncreas se asemeja al tejido de las glándulas salivales y, al igual que éstas, secreta una amilasa que desempeña un papel fundamental en la degradación del almidón.
Es también una glándula endócrina (productora de hormonas). Ramilletes
de células pancreáticas, secretan insulina, glucagón y somatostatina, que son liberadas en el torrente sanguíneo y participan en la regulación de la glucosa en sangre.
Hígado: desempeña papeles vitales en la digestión. Es el órgano interno más
grande del cuerpo. Almacena y libera carbohidratos, desempeñando un papel central en la regulación de la glucosa sanguínea. Procesa aminoácidos, los convierte en carbohidratos, los canaliza a otros tejidos del cuerpo, y con ellos sintetizan proteínas esenciales, tales como enzimas y factores de coagulacipon. Fabrica las proteínas del plasma que tornan a la sangre hipertónica en relación con los fluidos intersticiales (entre los tejidos) y evita, así, el movimiento osmótico de agua desde el torrente sanguíneo a los tejidos. Es la fuente principal de las lipoproteínas del plasma, incluyendo LDL y HDL, que transportan colesterol, grasas y otras sustancias insolubles en agua en el torrente sanguíneo, y es de importancia central en la regulación del colesterol sanguíneo. Almacena vitaminas solubles en grasas, como las A, B y E. produce bilis (que se almacena luego en la vesícula biliar). Degrada la hemoglobina de los glóbulos rojos muertos o dañados a bilirrubina, un pigmento amarillo. El hígado inactiva diversas hormonas, desempeñando así un papel importante en la regulación hormonal. También degrada una variedad de sustancias extrañas, algunas de las cuales-por ejemplo el alcohol- pueden formar productos metabólicos que dañan a las células hepáticas e interfieren en sus funcionesuand