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Universidad Técnica Particular de Loja

DEPARTAMENTO DE GEOLOGÍA Y MINAS E


INGENIERÍA CIVIL

GEOLOGÍA DEL ECUADOR

TITULO: TAREA N° 1

ELABORADO POR: Juan Andrés Granda Duque.

REVISADO POR: Msc. María Fernanda Guarderas

FECHA: 18 / 10 / 2017

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1 TÍTULO:

Evolución en el tiempo geológico del origen del Ecuador

2 RESUMEN

El presente trabajo abarca información sobre el desarrollo de los Andes

ecuatorianos y el territorio ecuatoriano como tal a lo largo de los diversos periodos

de la historia geológica, desde su origen hasta la actualidad, teniendo en cuenta

los procesos de mayor importancia que se han suscitado y enmarcando la

importancia de estos en la evolución de nuestro país.

3 INTRODUCCIÓN

El Ecuador es un país con una importancia geológica fundamental, ya que se

encuentra ubicado en una zona de subducción entre placa oceánica y continental

así como en un centro de dispersión oceánica como es la zona de rift de

Galápagos, además de que se encuentra atravesado por la cordillera de los

Andes; siendo así, dueño de una geología muy diversa e intrigante, lo que ha

generado un gran interés para investigadores locales y de todo el mundo. Es por

ello que desde los primeros estudios geológicos que se han realizado en nuestro

país hasta la actualidad, se ha buscado conocer plenamente su origen y evolución

a lo largo del tiempo geológico. Gracias a ello es que se ha logrado registrar gran

cantidad de información geológica concerniente al Ecuador y su evolución, de la

cual se detallan los aspectos más importantes en esta investigación.

3.1 Estado de la cuestión

Los registros estratigráficos de la geología ecuatoriana provienen de acantilados

costeros, cortes de ríos naturales, cortes de caminos y exposiciones en la parte

frontal de los Andes y las colinas sub andinas. También existen datos sub

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superficiales de líneas sísmicas de reflexión geofísica y registros de pozos

perforados para la industria petrolera tanto en el Oriente como en la Costa

ecuatoriana.

La investigación estratigráfica más abundante y el trabajo de campo se han hecho

comenzando con las rocas del Cretácico debido a las diferentes campañas de

exploración de petróleo y minerales.

Grandes fuentes de información de estos registros estratigráficos han sido el Río

Pastaza y los efluentes de Baños a Mera, los cuales ofrecen un registro geológico

casi completo desde el Paleozoico. Además, rocas sedimentarias del Paleozoico

y Jurásico se encuentran alrededor de la localidad de Macuma.

Por otro lado, el Mesozoico en el Ecuador, está bien expuesto en la sección Río

Misahualli mientras que en el perfil de Río Cosanga se puede observar la

transición Cenozoico-Mesozoico así como un importante registro volcánico de la

Cordillera Real. De igual manera, en dirección hacia la costa, los perfiles a lo largo

de los ríos Guayllabamba y Mira poseen un registro bastante completo desde la

transición del Cenozoico-Mesozoico en los Andes septentrionales. Las rutas

Latacunga, Quevedo y Riobamba-Guaranda-Balzapamba-Montalvo, son

adecuadas para recolectar información de la parte central de la Cordillera

Occidental.

En el sur, los ríos Puyango y Jubones proporcionan la mejor información desde

los Andes hasta el Océano Pacífico. La segunda incisión más importante en la

Cordillera Real es el corte a lo largo del río Paute, que también da casi un registro

geológico completo.

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3.2 Objetivos.

 Investigar la evolución y desarrollo del origen del Ecuador a lo largo del tiempo

geológico.

 Determinar los eventos más significativos que ocurrieron en cada periodo de

la evolución del Ecuador.

4 MATERIAL Y MÉTODOS

Analizar e interpretar la información concerniente a la evolución del Ecuador

durante las diversas etapas del tiempo geológico, desde el origen hasta la

actualidad.

Para la presente investigación se procedió a la recopilación de información de

diferentes fuentes bibliográficas como son libros y artículos científicos.

5 RESULTADOS

En base al análisis realizado de la información geológica existente, se han

deducido algunas particularidades sobre el desarrollo del Ecuador a lo largo del

tiempo geológico, las cuales se detallan a continuación:

5.1 Precámbrico

Del desarrollo de los Andes ecuatorianos en el precámbrico y paleozoico temprano

existe poca información, sin embargo se ha demostrado que “los Andes

ecuatorianos y colombianos se sobrepusieron y originaron a lo largo del cinturón

granulítico Santa Martha-Garzón, de edad precámbrica temprana, el cual sufrió en

la mitad del Proterozoico tardío una intensa fase termotectogenésica” (Paladines

& Soto, 2010).

Las rocas más viejas en Ecuador afloran en la Cordillera Real. Estas consisten en

rocas metamórficas (granitos gnéisicos) que se presentan como cinturones los

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cuales son relativamente estrechos en la parte central de la Cordillera Real del

Ecuador, pero se ramifican en la sección sur hacia el oeste para formar la

Cordillera de Amotape-Tahuin. Estos afloramientos precámbricos en Ecuador no

están muy bien estudiados debido a su alta complejidad.

Cabe indicar que debido a este metamorfismo granulítico, propio de tectonismo y

fuerzas de stress intensas, es que se puede decir que en el Precámbrico tardío el

cinturón Andino ya presentaba un sistema geodinámico activo.

Es así que “el Precámbrico en Ecuador podría resumirse en tres tendencias: el

escudo en sí (granulitas de Tapi), las tendencias centrales o raíces de la Cordillera

Real y finalmente la tendencia más apartada del sur, que incluye el núcleo

Amotape Tahuin” (Vera, 2013).

5.2 Paleozoico

Se ha evidenciado que las zonas estructuro-formacionales orientales de los Andes

ecuatorianos en el Paleozoico superior se presentan como zonas de subsidencia,

esto gracias a los cortes pre-mesozoicos en las mismas. Es en este periodo que

se da la acumulación diferenciada de potentes series areno-arcillosas (formación

Pumbuiza) y carbonato-arcillosas (formación Macuma), en un ambiente de

depositación marino somero de plataforma. Es por ello que las rocas

sedimentarias más antiguas conocidas en Ecuador están fechadas en el Devónico

(415 Ma a 361 Ma).

Además, en algunas secuencias turbidíticas del terreno Amotape del Perú, se ha

encontrado fauna de edad devónica. Estas secuencias se extienden hasta el

Ecuador en las unidades Tigre y Victoria de la cordillera de Tahuin, conformadas

por esquistos verdes y metagrauwacas respectivamente, por lo que se deduce

que estas pertenecen al Paleozoico.

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5.3 Mesozoico

A principios del Mesozoico, la zona de la cordillera Real “empezó a jugar un papel

como barrera paleogeográfica y paleotectónica entre la zona de la cuenca

pericratónica oriental menos móvil y el borde occidental activo, más móvil de los

Andes ecuatorianos” (Paladines & Soto, 2010).

De igual manera (Baldock, 1982), considera que la cordillera Real constituyo un

eje estructuralmente positivo con núcleos de rocas metamórficas antiguas, que se

pueden encontrar en el arco Olmos-Zamora Llangnates en Ecuador, formando la

espina dorsal de la sierra ecuatoriana.

5.3.1 Triásico

Debido a la ausencia de sedimentos Triásicos y Pérmicos en el Ecuador, se ha

llegado a considerar que en ese tiempo se experimentó un levantamiento similar

al de los Andes peruanos. Ya a finales del Triásico se ha conseguido registrar en

el oriente ecuatoriano la difusión de rocas volcánicas con intercalaciones de

sedimentos skarnificados de la formación Piuntza, en donde además se reportan

hallazgos de fósiles de bivalvos del Triásico superior.

A finales del Triásico empezó el hundimiento de la cuenca oriental, el cual se

intensifico en el Liásico, abarcando la parte sur de la zona Subandina. Por otro

lado, a lo largo de la falla Precordillera la cual era límite entre la cuenca

pericratónica Oriental y la cordillera Real, la acumulación de depósitos de

naturaleza calcárea sufrió cambios hacia el este a rocas volcánicas, andesitas,

basaltos e intrusiones de diques diabásicos.

Es así que la depresión de la zona Subandina nos recuerda a una estructura tipo

rift, debido a las condiciones y parámetros de desarrollo que presenta esta. Por

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otra parte algunos investigadores plantean que la cordillera Real tiene su origen

en un proceso de acreción de bloques contra el antiguo continente sudamericano.

5.3.2 Jurásico

Los sedimentos del Jurásico inferior se acumularon en grandes depresiones

pericratónicas tanto al norte como al sur de la cuenca Oriente ecuatoriana.

Además, se evidencia el desarrollo tectónico diferente de la zona Subandina en el

hecho de que el potente corte de sedimentos acumulados en ella fuera

intensamente deformado antes del Jurásico tardío, en la fase nevadídica temprana

del plegamiento.

Más adelante, en el Jurásico medio y tardío se inicia el proceso de subducción en

el borde occidental de los Andes. Por otra parte, en la cuenca pericratónica, se

acumuló la parte inferior de la formación Chapiza, y de manera simultánea se inicia

la extrusión de las rocas volcánicas de la formación Misahualli, las cuales son

parte del potente arco magmático continental que va desde el norte de Perú hasta

el norte de Colombia.

En el Jurásico tardío continúa la intrusión de los enormes batolitos graníticos

llegando a intruir incluso parte del flanco oriental de la cordillera Real. Se trata de

los batolitos de Zamora, Abitagua y La Bonita, siendo el de Zamora el más grande.

Este conjunto de rocas volcánicas e intrusivas constituyen el arco volcánico

continental de edad jurásica.

5.3.3 Cretácico

En el cretácico inferior aparece por primera vez y claramente la zonificación

tectónica longitudinal y transversal. Además, en el borde occidental activo de los

Andes ecuatorianos, se produce la acreción de los terrenos Chaucha-Arenillas al

continente. Teniendo así que el proceso de acreción Peltetec-Palenque suscitado

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durante este periodo es considerado el principal evento tectono-metamórfico que

afecto a las rocas del Jurásico-cretácico de la cordillera Real.

También durante este periodo, en el occidente de la cordillera Real, se inicia la

formación de corteza oceánica conformada por potentes basaltos toleíticos que

constituyen la formación Piñón. A su vez, en la cuenca Oriente, continúa la

extrusión de rocas volcánicas de composición básica junto a la depositación de

sedimentos, propio del miembro superior de la formación Capaza, la cual sufre un

proceso compresivo donde sus rocas son plegadas, levantadas e intruidas.

Cabe señalar que, una vez intruidos los macizos graníticos del Jurásico tardío –

Cretácico temprano, la zona Subandina y el arco central de la cordillera Real

adquirieron gran estabilidad por lo que no se produjeron más procesos de

formación de pliegues.

En este periodo también apareció de modo claro la zonificación tectónica

transversal de los Andes ecuatorianos, de igual modo, durante este tiempo se

desarrolló un sistema de arco de islas, el cual constituye el arco volcánico Celica.

Por otro lado los sedimentos calcáreos de la formación Cazaderos se depositaron

durante el Aptiano-Albiano temprano, mientras que durante el Albiano se

depositaron los sedimentos areno-arcillosos del grupo Alamor. El final del

desarrollo del sistema de arco de islas y la depresión inclinada relacionada a este

llego a fines del Campaniano, durante el ciclo orogénico peruano.

El sistema montañoso del sur de los Andes ecuatorianos entro a la etapa orogenia

de desarrollo desde que las rocas cretácicas deformadas fueran levantadas y

sometidas a la denudación ocurrida luego del plegamiento relacionado al ciclo

orogénico peruano.

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Ya en el Cretácico superior ocurre nuevamente un cambio en el desarrollo de los

Andes ecuatorianos sin que esto altere la zonificación tectónica previamente

desarrollada. En las zonas occidentales se formó un potente arco de islas sobre

el basamento oceánico basáltico. La profunda flexión de la base del sistema de

arco de islas queda demostrada gracias a la gran potencia del arco volcánico

Macuchi y la formación Cayo. El sistema ensimático de arcos de islas se extendió

hacia el norte, a la parte colombiana de la zona de la cordillera Occidental,

mientras que al sur de la Zona Transversal Puna – Méndez no se difundió ya que

esa región se desarrollaba bajo el régimen de orógeno inicial.

El sistema de arcos de islas de la cordillera Occidental experimento el primer

levantamiento significativo durante el Maestrichtiano. Durante esta época es que

el arco volcánico Macuchi se acercó a la cordillera Real. Esto se comprueba

gracias a la composición de los clastos en los conglomerados de la formación

marina flysch Yunguilla, que se depositó entre el sistema de arco de islas Macuchi

y la cordillera Real. Finalmente, la actividad volcánica en el sistema de arco de

islas termino con la formación de arrecifes sobre volcanes apagados, después de

la acreción en el Eoceno medio; mientras que las zonas lejos del sistema de arcos

de islas Macuchi experimentaron plegamientos y su desarrollo termino en

diferentes lapsos de tiempo.

En el Campaniano superior, se da el levantamiento de la cordillera Real y el

régimen de desarrollo de la cuenca Oriental sufre cambios significativos, teniendo

que su límite occidental se desplaza al este como resultado del levantamiento de

la zona Subandina. Además, experimento un descenso de sus aguas, en donde

se acumularon los sedimentos continentales areno-arcillosos de la formación Tena

en reemplazo de los sedimentos marino-someros de la formación Napo.

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Por otro lado, en el norte, la cuenca Oriental se vio limitada por la gran elevación

de Vaupes, la cual emergió a partir de la depresión periférica de la cordillera

Oriental de Colombia.

A finales del Cretácico, se produce un proceso de inversión tectónica en la región

ocupada por el arco Central y la cuenca Oriental. Durante este tiempo a lo largo

de fallas normales se produce un cambio en la dirección de movimiento como

consecuencia de la fase orogénica peruana, la cual afecto principalmente a los

Andes centrales.

5.4 Cenozoico

5.4.1 Paleógeno

Durante el Eoceno inferior, después de que el sistema de arco de islas Macuchi

termina su desarrollo, se dio la acumulación de conglomerados, areniscas y

arcillas abigarradas de la formación Tiyoyacu en la cuenca Oriental. Además, la

posterior acreción del arco Macuchi contra el borde occidental produjo un nuevo

proceso de inversión tectónica. El régimen dextral se mantiene en este periodo y

en la actualidad.

En el Paleoceno, se complementó el desarrollo orogénico de la región tectónica

austral con el aparecimiento de un potente volcanismo de carácter continental y

composición andesítica (formación Sacapalca), así como el desarrollo de la zona

transversal Puna-Méndez.

La cordillera Real comenzó a levantase más activamente a fines del Eoceno y

durante el Oligoceno, en donde la velocidad relativa y absoluta de su

levantamiento creció de manera progresiva. De igual manera, durante el

Oligoceno, se empezaron a manifestar con mayor intensidad las zonas

adyacentes de los Andes ecuatorianos, que poco a poco fueron adquiriendo la

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orografía y morfología actual. Así también, en las cuencas profundas de Borbón y

Manabí, se produce la acumulación de formaciones marinas de aguas someras.

A partir del Eoceno tardío hasta el Mioceno inferior, aparece la fase sinorogénica

del magmatismo continental, la cual conlleva a la formación de una meseta

volcánica, cuya composición forma el grupo Saraguro, el cual a su vez “se

presenta como la terminación nórdica del cinturón volcánico Araucano-Calipuy de

los Andes centrales” (Paladines & Soto, 2010).

A sí mismo, durante el Oligoceno inferior y Mioceno, se reanudaron los

hundimientos y las transgresiones marinas en la zona de la depresión costera, en

donde los conglomerados basales de las formaciones Tosagua y Viche se

sobrepusieron a las calizas de la formación San Eduardo; mientras que en las

cuencas Borbón y Manabí se llegó acumular hasta 3000 m de estos sedimentos.

Dentro de la zona transversal Puna-Méndez se desarrolló la cuenca Progreso con

un régimen similar.

5.4.2 Neógeno

Cabe indicar que a inicios del Neógeno “se produce una reorientación en los

movimientos de las placas oceánicas y sudamericana, producto del rompimiento

de la placa Farallón y la conformación de las placas Nazca y Cocos” (Paladines &

Soto, 2010).

Durante el Mioceno se inicia el desarrollo de las cuencas: Chota, en el flanco

occidental de la cordillera Real; Biblián-Azogue-Cuenca y Nabón en la zona

transversal Puna-Méndez; Loja, Malacatos, Vilcabamba, Gonzanamá y Zumba, en

los límites de la región tectónica austral; las cuales son rellenadas por sedimentos

de tipo molásico-lagunares con lignitos y evaporitas.

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Según otros criterios, durante este periodo se desarrollan cuencas

intramontañosas las cuales siguen sistemas de fallas transtensionales de apertura

hasta fallas compresionales de clausura en el Mioceno tardío-Plioceno.

También en esta época, se produjo la intrusión de macizos graníticos de

composición calco-alcalina en la cordillera Occidental. Estos macizos

correspondían a dos generaciones: una con datación de 31±1; 19±3 Ma y la otra

con datación de 12±0.6; 9.8±0.3 Ma.

Más adelante, en el Plioceno, se produce la extrusión de un potente volcanismo

de composición andesítica a lo largo de la cordillera Occidental y en parte de la

cordillera Real, el cual tiene relación con la formación de mesetas lávicas de la

formación Pisayambo, esto en el norte, mientras que en el sur continuaba el

desarrollo de las cuencas sedimentarias.

De igual manera, se produce una regresión marina en la zona de depresión

Costanera, y en la cuenca Progreso se forma el graben de Jambelí, el cual es

rellenado por potentes secuencias de sedimentos de composición arcillosa.

Los Andes ecuatorianos experimentaron un levantamiento acelerado de un

amplitud total de 3-4 km, donde las tres cordilleras se levantan de forma

diferenciada siendo la cordillera Real la que lo hace más activamente y continua

como eje axial de los Andes. Este levantamiento estuvo acompañado por un

volcanismo intenso, el cual formo mesetas de lavas y tobas y luego condujo a la

formación de estratovolcanes. El volcanismo tuvo una composición andesítica,

apareció fundamentalmente en las cordilleras Real y Occidental sin extenderse

hacia el sur. Hay que indicar que durante este tiempo, a lo largo de la cordillera

Real, se originó el graben de Quito, mismo que se rellenó de material volcánico y

de depósitos fluvio-lacustres, aluviales y glaciares.

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Además, a causa de los movimientos activos de los bloques en la faja limítrofe,

entre la cordillera Real y la zona Subandina, se produjeron fallas de empuje lo que

reactivo los movimientos transcurrentes destrales y dio paso a la última inversión

tectónica, en donde “los complejos metamórficos del Paleozoico de la cordillera

Real se sobrecorrieron sobre las rocas sedimentarias de la zona Subandina”

(Paladines & Soto, 2010). Estos movimientos ocasionaron el dislocamiento,

plegamiento y metamorfismo de las series mesozoicas y terciarias, llegándose a

observar un cambio lateral de areniscas a cuarcitas y de lutitas bituminosas a

esquistos bituminosos (formación Hollín y Napo respectivamente).

5.4.3 Cuaternario

Se sabe que, a finales del Plioceno e inicios del Cuaternario, la cordillera asísmica

de Carnegie alcanzo la zona de subducción activa, cuya colisión genero el cese

de la actividad volcánica al sur, mientras que al norte se formaron grandes

estratovolcanes andesíticos, especialmente en las estructuras regionales

reactivadas. Es en este periodo de tiempo que “el volcanismo migró de occidente

a oriente cambiando su composición de andesítica a andesito-basáltica y a

basáltica-alcalina” (Paladines & Soto, 2010), debido al proceso de subducción y a

la inclinación de ángulo de subducción de la placa oceánica.

Un centro importante de este volcanismo estuvo localizado en la zona transversal

Puna-Méndez, donde tienen relación las potentes erupciones de lavas cuyos

constituyentes dieron origen a las formaciones Tarqui y Sacapalca.

Los movimientos de bloques diferenciados de las rocas de la corteza oceánica

condujeron a la formación del complejo sistema de horst y grabens que

constituyen la tectónica de la zona costanera, la cual permaneció completamente

amagmática durante el Terciario y todo el Cuaternario.

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Debido al levantamiento intenso de los Andes ecuatorianos en este periodo, se

dio la acumulación de arcillas y areniscas tobáceas con bloques de granitos y

gneises en la cuenca Oriental, llegando a alcanzar algunos metros de diámetro y

aumentan de tamaño en la parte superior de las formaciones Mesa y Mera.

Finalmente, en la Sierra, culmina la secuencia de arco volcánico Neogénico,

teniendo agrupados los materiales de los estratovolcanes en los volcánicos

Cotopaxi, mismos que corresponde a estratovolcanes constituidos por flujos de

lava y facies volcano-detríticas asociadas.

6 CONCLUSIONES

 La información registrada acerca del desarrollo del Ecuador a lo largo del

tiempo geológico es muy basta, aunque queda mucho por investigar

especialmente en la parte Precámbrica del país, que es de donde se tiene

menor información debido a la complejidad de la misma.

 El territorio Ecuatoriano a lo largo de su historia ha sufrido tres inversiones

tectónicas que han modificado considerablemente la geología del país y que

han sido factores fundamentales en el desarrollo de los Andes ecuatorianos.

 La depresión de la zona Subandina se encuentra relacionada a una

estructura tipo rift, debido a las condiciones y parámetros de desarrollo que

esta presenta.

 La zonificación tectónica longitudinal y transversal del país apareció por

primera vez de forma clara en el Cretácico inferior.

 Las cuencas Chota, Biblián-Azogue-Cuenca, Nabón, Loja, Malacatos,

Vilcabamba, Gonzanamá y Zumba iniciaron su desarrollo durante el

Mioceno, el cual se extendió hasta el Plioceno.

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 Los Andes ecuatorianos experimentaron un levantamiento acelerado

durante el Plioceno, el cual vino acompañado de volcanismo intenso, mismo

que formo mesetas de lavas y tobas, y que condujo a la formación de

estratovolcanes.

 Dentro del levantamiento acelerado que experimentaron los Andes

ecuatorianos, la cordillera Real, la cordillera occidental y la zona Subandina

se levantaron de forma desigual, siendo la primera la que lo hizo más

activamente y que hoy por hoy continúa siendo el eje axial de los Andes en

nuestro país.

 La colisión de la cordillera asísmica Carnegie a finales del Plioceno e inicios

del Cuaternario, fue la responsable del cese de la actividad volcánica en el

sur del país, a partir de los 2°30’S, y a su vez la que genero al norte grandes

estratovolcanes andesíticos.

 Tanto en la cordillera Occidental como en la Oriental queda mucho por

investigar, especialmente en esta última, donde a pesar de la información

registrada, no se ha logrado explorar y analizar completamente la misma.

7 BIBLIOGRAFÍA

Baldock, J. W. (1982). Geología del Ecuador. Quito.

Paladines, A., & Soto, J. (2010). Geología y yacimentos minerales del Ecuador.

Loja: UTPL.

Vera, R. (2013). Geology of Ecuador. An introduction to the unique geology of

Ecuador. Quito: Gráficas Iberia.

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