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Cuando planeamos realizar un viaje con nuestro automóvil particular, generalmente asociamos el costo de
la travesía únicamente con el consumo de combustible en acuerdo a la distancia, lo cual depende de la
calidad del combustible utilizado, velocidad, modo de conducción, peso de carga, condiciones climáticas,
tipos de terreno (ruta, ciudad, montañas, autopistas), estado y mantenimiento de unidad, etc..
Sin embargo existen otros conceptos que deben sumarse a dichos gastos de funcionamiento, ya que
forman parte de costo de operación total del vehículo e impactan en nuestro bolsillo. Estos son: la
amortización, el interés del capital invertido, los impuestos y seguros y las reparaciones necesarias.
Este análisis nos puede servir además, para el caso en que debamos contratar un servicio de transporte
(taxi, remis, combi) y necesitemos realizar una estimación del precio que nos pueden llegar a exigir. Aquí en
función del costo calculado estimaremos un precio que nos resulte lógico y lo compararemos con los
precios del mercado.
Pero, volviendo al principio, para poder usar nuestro auto particular, antes deberemos comprarlo, entonces
puede presentársenos la disyuntiva de tener que elegir entre dos modelos diferentes, que por ejemplo
empleen combustibles diferentes, para lo cual necesitaremos conocer sus costos de operación.
Todos estos análisis nos revelan la utilidad de aprender a calcular, aunque sea en forma aproximada, el
costo de operación de un vehículo, que será un valor dado en $/Km recorrido.
Al respecto, hemos desarrollado una serie de planillas de cálculo que permiten a cualquier persona actuar
en este sentido. Aquellos que no estén familiarizados con el software empleado para confeccionar las
planillas de cálculo, les pedimos que se animen de todas formas a utilizarlas, ya que están hechas de tal
manera que sólo tengan que cargar los datos. Asimismo, las personas que ya manejan este programa
pueden modificarlas y mejorarlas libremente ya que no están bloqueadas para su edición.
Cualquier consulta o sugerencia, escríbannos a contacto@santafeestucorazon.com.ar . Estamos a vuestra
disposición.
A continuación ampliaremos los conceptos ya enunciados que forman parte del costo de operación de
vehículos:
1‐ Amortización.
2‐ Interés del Capital Invertido.
3‐ Impuestos y Seguros.
4‐ Reparaciones y Repuestos.
5‐ Gastos de Funcionamiento.
1‐Amortización.
El ciclo de vida de un automóvil es limitado, ya que con su uso se gastan continuamente las diferentes
piezas que lo constituyen hasta llegar a ser en determinado momento inservible o casi inservible. Podemos
pensar que durante su utilización el auto va perdiendo valor hasta llegar a un valor último o valor residual,
que sería el valor que tiene por su venta como chatarra.
Esto quiere decir que cada automóvil tiene una vida útil durante la cual podemos utilizarlo, y luego
debemos desecharlo, ya sea porque se ha desgastado por su uso o bien porque tratándose de un auto muy
antiguo ya no es conveniente usarlo, debido a cuestiones medioambientales o de seguridad vial. En este
último caso se dice que el vehículo ha quedado obsoleto.
En realidad no siempre el valor residual será el valor de venta como chatarra, también puede estar
representado por el valor que paga otro usuario que le dará un uso menos exigente y que admite por lo
tanto un vehículo de menor calidad. En cualquier caso, el valor residual será siempre muy pequeño
comparado con el valor del auto nuevo.
Como el auto pierde valor a lo largo de su vida útil con cada kilómetro que recorre, es lógico entonces
introducir en el costo de operación esta pérdida, que llamamos Amortización [$/Km], y que se calcula
como el cociente entre la diferencia del Valor Actual (Ci) con el Valor Residual (Vr) del vehículo y el
producto del número de años de vida útil (n) y la cantidad de Kilómetros que, en promedio, recorrerá por
año (ka).
.
Esto implica aceptar que la amortización es uniforme a lo largo de la vida útil, lo cual no es cierto ya que
como es sabido, el precio de los automóviles cae mucho más en los primeros años.
De todas formas, la expresión propuesta es suficientemente precisa para el estudio que estamos realizando
ya que tampoco conocemos con precisión el valor de n (vida útil), el cual hemos tomado igual a 5 años (es
un valor bajo), según podemos ver en las planillas de cálculo adjuntas.
La vida útil (n) y la cantidad de kilómetros recorridos por año (ka) sólo pueden ser fijadas en función de
experiencias anteriores que pongan en evidencia las reales condiciones de utilización del vehículo. He aquí
la importancia de ser ordenado y prolijo en la tarea diaria o mensual de ir anotando esos datos.
2‐Interés del capital invertido.
Si una persona o empresa no dispone del capital necesario para comprar el vehículo, debe recurrir a un
crédito, y aún poseyendo el dinero, al invertir en un bien estará perdiendo la oportunidad de obtener
intereses colocando ese dinero en un banco.
De una u otra forma, el hecho de efectuar una inversión (Ci) en el automóvil implicará el devengamiento de
intereses que deberán ser cargados al costo de operación del vehículo.
Si se tuvo que recurrir a una institución financiera la tasa de interés a contemplar en el cálculo, es la que
cobra dicha institución por los préstamos otorgados, que se denomina tasa activa.
Si la adquisición se hace con capital propio, corresponde tomar la tasa pasiva, que es la que otorgan los
bancos por depósitos en plazo fijo o cualquier otra inversión que produzca una renta (bonos, letras del
tesoro, etc.).
Cuando se realiza este análisis en un país con elevada inflación (mayor al 30% anual), en ambos casos habrá
que restar a la tasa nominal (activa o pasiva, la que corresponda) la tasa de inflación. Esto es así porque al
adquirir el vehículo la persona o empresa quedará protegida de la inflación debido a que el mismo
aumentará de valor con el paso del tiempo, y la consecuente desvalorización del dinero. Por el contrario,
quien presta dinero en épocas de inflación necesita tener una tasa nominal que sea al menos la tasa de
inflación, pues de lo contrario cuando le devuelvan el préstamo se encontrará con una cantidad de dinero
con un poder adquisitivo mucho menor al que tenía cuando lo prestó.
La tasa de interés no debe aplicarse al valor total del vehículo puesto que año a año se va amortizando.
Esto se hace aplicando un coeficiente k que tiene en cuenta la vida útil del auto y permite calcular un
promedio por la desvalorización contemplando una amortización que actúa anualmente durante “n” años.
Algunos toman directamente k=0,5, pero para n=5 años puede tomarse también k=0,6.
Así, tendremos:
. .
Donde:
I, Interés Anual [$/año].
Ci, Valor inicial del automóvil [$].
i, tasa de interés [%/100].
k, coeficiente.
. .
Luego, haciendo:
Obtenemos el valor del interés por Kilómetro recorrido [$/Km].
3‐Impuestos, seguros y cochera.
Existen opiniones variadas acerca de cómo considerar o no, la incidencia de los impuestos sobre el costo de
operación de los vehículos. En nuestro caso, tendremos en cuenta solamente el costo originado en el pago
de la patente, ya que para la determinación de los otros impuestos, debe hacerse un análisis
pormenorizado de la situación patrimonial de cada empresa/persona particular, cuestión que excede el
alcance de este trabajo.
No obstante, debemos mencionar que cuando una empresa posee un automóvil, éste forma parte de su
activo contable, y por lo tanto todo impuesto que grave los activos de las empresas, o su capital, incide en
el costo de posesión de ese vehículo. Análogamente, cuando una persona adquiere un auto, éste pasa a
formar parte de la base imponible del impuesto a los bienes personales, y según determinados criterios,
corresponderá que tribute un monto de dinero por este concepto, incidiendo en el costo de operación del
vehículo.
En este punto, no hay un criterio único acerca del cálculo, cada empresa adopta sus metodologías de
acuerdo a su propia experiencia.
Como ya mencionamos, nosotros tendremos en cuenta solamente un impuesto: la patente.
El hecho de poseer un vehículo implica una serie de riesgos que deben ser cubiertos por el correspondiente
seguro, el que además es de contratación obligatoria.
Existe una teoría que indica que la incidencia de impuestos y seguros deben calcularse sobre el valor medio
del automóvil, puesto que el impuesto y el seguro se calculan sobre el valor residual del mismo, ya que no
tendría sentido asegurar un auto con mucha amortización por el mismo valor que tenía cuando era nuevo.
Nosotros haremos un cálculo mucho mas simplificado.
La metodología a seguir para la determinación de la incidencia de la patente, el seguro y la cochera es la
siguiente:
Se debe determinar el gasto anual por estos conceptos y luego dividir ese monto por la cantidad de
kilómetros que recorre el automóvil por año. Como ya mencionamos, la cantidad de kilómetros que le
hacemos a nuestro auto, es un dato que debemos conocer o estimar nosotros mismos, en base a nuestra
modalidad de uso actual y futura.
El gasto originado por la cochera será igual al monto del alquiler mensual, multiplicado por 12 meses, en
caso de que alquilemos. De poseer cochera propia será cero.
Así entonces:
Donde:
Pa, Monto Patente anual [$/año]
Sa, Gasto anual en Seguro [$/año]
Ca, Gasto anual en Cochera [$/año]
S, Costo de Impuestos, Seguro y Cochera [$/Km]
Ka, Cantidad de Kilómetros anuales que recorre el auto [Km/año]
4‐Reparaciones y Repuestos.
Para que el vehículo funcione normalmente es necesario realizarle periódicamente tareas de
mantenimiento y reparaciones, las que tienen un costo de mano obra y de repuestos que hay que reponer
en reemplazo de las partes que se gastan o rompen.
Además, la reparación implica sacar de servicio el vehículo, lo que implica tener que disponer de otra
alternativa de transporte por algún tiempo.
No existe un método para calcular el valor de las reparaciones que serán necesarias, por lo que las
empresas suelen llevar un registro ordenado del costo de las reparaciones de todos sus equipos, de manera
de tener una base estadística que permita luego relacionar esos gastos con el costo inicial del equipo (Ci).
Se acostumbra a calcular el valor de esas reparaciones así registradas como un porcentaje de la
amortización anual, donde los equipos accionados con muchos mecanismos y motores de combustión
interna suelen alcanzar valores de 70%.
Con este procedimiento se logra independizar los cálculos de la variación del valor de la moneda, ya que
amortización y reparaciones se registran a valores monetarios en la misma época.
Debemos hacer notar, que sólo una investigación estadística sobre vehículos realizando similares
prestaciones puede darnos el porcentaje a aplicar por reparaciones y repuestos, siendo los datos aquí
especificados sólo orientativos para dar una idea del orden de magnitud de este costo. En efecto, un auto
que es empleado por su dueño para ir a trabajar, no tendrá los mismos gastos [$/Km] que otro que se
emplea para el transporte público de pasajeros (taxi, remis).
Por lo tanto, será necesario que cada persona se ocupe de llevar ordenadamente el registro de los gastos
en que va incurriendo por estos conceptos.
Nosotros tomaremos para nuestro cálculo un 70% de las amortizaciones.
.
0,70 .
.
Donde:
Ci, Costo Inicial del vehículo [$]
Vr, Valor Residual del Vehículo [$]
n, vida útil del vehículo [años]
ka, cantidad de Kilómetros anuales que recorre el vehículo [Km/año]
RyR, Costo de Reparaciones y Repuestos [$/Km]
5‐Gastos de Funcionamiento.
Cuando el auto está funcionando origina gastos por combustibles y lubricantes, y eventualmente, debido al
personal de conducción si se emplea en el servicio de transporte de pasajeros.
El consumo de combustibles puede estimarse en base a la potencia del motor, dependiendo además si
opera con nafta o gas oil.
Los motores a explosión, nafteros, consumen alrededor de 0,27 lt/CV.hora, mientras que de combustión
interna, gasoleros, suelen emplear 0,18 lt/CV.hora.
En cualquier caso debe tenerse en cuenta que el rendimiento de estos motores depende de la potencia
efectiva en servicio (variable con la carga), de las condiciones de servicio (ambiente polvoriento, estado del
tiempo, altura sobre el nivel del mar, pendientes a vencer, etc.) y del estado de conservación del motor.
Por esto, lo mejor es llevar un registro ordenado de las cargas de combustible y los Kilómetros recorridos
entre carga y carga, de manera de establecer un promedio aceptable y específico para las condiciones de
trabajo del motor en cuestión. Se adjunta a este párrafo una planilla de cálculo que puede servir a los fines
que estamos mencionando (ver archivo Costo Operación Vehículos.xls)
En definitiva, todo se resume a obtener un valor que informe la cantidad de Kilómetros que recorre el
vehículo por cada litro de combustible [Km/Lt], para luego relacionar este valor con el precio del
combustible [$/Lt].
$/
$/
/
En cuanto a la evaluación de los gastos por lubricantes, si no se dispone de información estadística precisa,
puede tomarse para motores diesel un 50% de los gastos por combustible (C) y para motores nafteros un
25%.