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Creciendo en la Feminidad
¡O feminea forma, quam gloriosa es!
Sta. Hildegarda1

El propósito original de Dios


Observemos en la palabra cuál fue el plan original de Dios para la humanidad y luego
notemos cómo, después de la caída, se produce la perversión de éste plan perfecto. Dios
crea al “hombre”, entendido aquí en su significación más amplia que incluye a ambos
géneros (varón y hembra), a su propia “imagen”.

Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra


semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias,
en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra. Y creó Dios al
hombre a su imagen, a imagen de Dios los creó; varón y hembra los creó. Y los
bendijo Dios y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra y sojuzgadla, y
señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que
se mueven sobre la tierra (Génesis 1:26-28).

En estos textos, la imagen de Dios se presenta principal y primordialmente en relación


con un singular concepto social o comunitario de Dios, ya que dichos versículos aluden a la
Trinidad. Ese Dios trino crea al hombre a su imagen, traspasando el aspecto social y
comunitario de su naturaleza divina pasa a formar parte de la naturaleza humana. Dios crea
al ser humano como hombre y mujer, no como un individuo solitario, sino como dos
personas que se complementan para reflejar la imagen de Dios. Cuando Dios elige crear la
humanidad a su imagen, crea la pareja, cuya identidad, vida y poder vienen del Señor, por
ello:

• Hombre y mujer reflejarían la imagen de Dios. De esta semejanza ambos derivan su


dignidad.
• Hombre y mujer comparten un mandato común. Dios comisiona a la pareja a comenzar
su dominio sobre la tierra.
• Hombre y mujer aparecen creados al mismo tiempo. Esto muestra un equilibrio de
igualdad espiritual, unidad de propósitos y responsabilidad compartida.
• Hombre y mujer se diferencian en cuanto a la función que desempeñan, pero,
masculinidad y feminidad son complementarias, no solitarias. No habría división,
competencia, ni dominio.

Del texto de Génesis 2:20b-24 podemos además concluir que:

• Dios sacó de la propia tierra todos los otros seres, pero a la mujer la sacó del
hombre. Así, la mujer: será varona porque del varón fue tomada.

1
Abadesa del siglo XII, poetisa, mística, músico, doctora y científica; predicaba en iglesias abarrotadas de
feligreses. Citada por Lang J., mujeres ministros de gracia, Ediciones Paulinas, Madrid-España, 1989.

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2

• Mujer y hombre fueron por tanto formados de la misma esencia y reflejan la misma
imagen.
• No se presenta una estructura de dominio del hombre sobre la mujer, sino más bien
se enfatiza la esencia, identidad, y misión de los géneros.
• Se afirma la búsqueda de la unidad y la naturaleza complementaria de los géneros
para el cumplimiento de los propósitos divinos. Por tanto, no debe haber
independencia, división, ni competencia entre los géneros, sino interdependencia y
complementaridad.

Génesis 1:26-28 Génesis 2:20b-23


Dios comisiona a la pareja a Enfatiza la esencia humana de la
comenzar su dominio sobre la pareja. No hay estructura de
tierra. Enfatiza la igualdad dominio del hombre sobre la mujer.

Dios
Hombre-Mujer
Orden según el Varón-Varona
plan de Dios
Ish-Ishshah
Tierra-nat uraleza

La Caída

“A la mujer dijo: …… y tu deseo será para tu marido, y el se enseñoreará de ti….Y al


hombre dijo….; pues polvo eres, y al polvo volverás ” (Génesis 3:16-19)
Algunas consecuencias de la caída:
• Dominación del hombre sobre la mujer.
• Ausencia de mutualidad en la unión física. La mujer ahora buscaría satisfacer
sexualmente al hombre.
• Maldición de la tierra, quedando la humanidad a merced de las fuerzas de la
naturaleza.
• Muerte física.
• Dios es desplazado de su soberanía y de su relación con la humanidad. El hombre se
esclaviza a las fuerzas de la naturaleza, y la mujer al hombre.Poligamia: La
dominación masculina lleva a que la posesión de mujeres se considerase como un
símbolo de prestigio, porque además aseguraban la prolongación de la
descendencia. (Gedeón (Jue 8:30-31); David (2 Samuel 3:2-5; 5:13-16;
20:3);Salomón (1 Reyes 11:3)Patriarcado: La definición de una estructura

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jerárquica para la familia en la que la autoridad suprema es ejercida por el padre


como jefe gobernante. La subordinación total es requerida.
• Concepción de la mujer:

o En las religiones paganas, las figuras míticas de las diosas representaban los
conceptos prevalecientes sobre la mujer: consorte, imagen sexual, objeto de
violencia, etc.
o A la mujer se le coarta sus derechos a expresarse y a controlar sus cuerpos.
o La mujer comienza a buscar en el hombre el protector y el soporte
económico, a cambio de servidumbre sexual, trabajo doméstico, y ciega
subordinación.
o La prostitución se constituyó en una institución que formaba parte de la vida
de los pueblos antiguos.
o El hombre era el dueño de su esposa. Si ella le era infiel, merecía la muerte
por haber violado sus derechos de propiedad.
o La mujer casada no tenía derecho sobre el hombre. El adulterio de éste no
constituía ninguna ofensa.
o Al hombre sólo se le castigaba en tanto que tuviera relaciones con una mujer
casada o comprometida. Básicamente por violar la propiedad del vecino.
o No había castigo para el hombre si cometía adulterio con una soltera o con
una prostituta.

Dios Tierra-naturaleza

Hombre

Mujer

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Efectos de la caída en la distorsión de la familia


HOMBRE MUJER
• Superior • Subordinada
• Control • Objeto
• Viril • Seductora-Manipuladora
• Propietario • Propiedad
• Centro • Paridora (Eva)
FAMILIA
• Dominación absoluta del padre
• Patrilinealidad
• Estructura de abuso
• La virginidad negociada como propiedadad

Misoginia y Misandria

Al hablar del concepto moderno de la sexualidad, uno de los puntos que tienen que ser
considerados corresponde con la concepción y valorización actual de la mujer. El pecado de
la misoginia, odio o desprecio hacia las mujeres, se manifiesta a diario a través de una gran
variedad de acciones como el incesto, rechazos, adulterios, traiciones, la pornografía, etc..
Pero, esta actitud hacia la mujer no es nueva, proviene desde tiempos patriarcales, y se ha
venido transformando sólo a partir de años recientes.

La misoginia puede ser resumida en tres actitudes principales hacia la mujer2:

1. En relación a su sexualidad: Básicamente la tendencia a considerar a la mujer como


un instrumento del diablo, como un ser enviado para debilitar a los guerreros, para
desviar al hombre de sus objetivos. En esta manera de considerar a la mujer, es a
ella la que se le culpa de las desviaciones sexuales del varón, pues se la considera
débil e insaciable, mientras que a este se le ve como la víctima.

2. En relación a su lugar en la sociedad: Dentro de este aspecto entra en juego la


visión de la mujer como un botín, que puede ser usado y luego abandonado a
voluntad del hombre. O como un objeto negociable o un símbolo de conquista o
victoria en las batallas. También se observa esta actitud en el ejercicio de la
superioridad física para el dominio y el sometimiento de la mujer. Para América
Latina, este es un estereotipo que se ha venido heredando desde los tiempos de la
conquista y la colonia, en el cual la mujer no es más que un botín para una actividad
2
Tavriz C. y Offir C., The longest war: sex differences in perspective, Harcourt Brace Jovanovich, New York,
1980.

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sexual libre y sin controles, lo que en aquellos tiempos significaba para el español
una justa compensación para su vida trajinada y violenta. En este sentido, Acevedo3,
nos recuerda de una cita de Alberto Salas4 que las mujeres del nuevo mundo:

fueron arrebatadas, raptadas o azotadas, obsequiadas como las de Cempoala y Tlaxcala, de la Florida
o del Paraguay, o lisa y llanamente aprisionadas por cualquier español después de la lucha y
naturalmente agregadas a su servicio. . . . Se asaltaban los pueblos, se apañaban las indias más
jóvenes y hermosas y cuando la mesnada ávida, violenta y ejecutiva proseguía la marcha, quedaba
bullendo en el vientre de aquellas indias la simiente de los hijos mestizos. . . . . . Este hombre que
realizaba la conquista se convirtió rápidamente en un macho poligámico, activo y fecundo. Las
indias rodearon su lecho y su vida, arraigándolo definitivamente en la tierra. . . . América fue. . . para
este apetito de la carne una facilidad más. . . .La relación más frecuente establecida entre españoles e
indias fue simplemente, la del amancebamiento. . . . La institución del matrimonio parece que se les
había convertido en un compromiso que no se decidían a renovar.

3. En relación a su inferioridad: La percepción histórica del hombre hacia la mujer


dominada por la lujuria y el deseo de posesión la hizo ver como de naturaleza
animal y por lo tanto incapaz para las tareas que requieren lógica e inteligencia.
Platón, por ejemplo, veía a la mujer gobernada por un útero ansioso y no por su
cerebro, cuya cura era quedar embarazada. Así que desde tiempos pasados se ha
tratado de justificar una cierta inferioridad de la mujer frente al hombre, bien sea
por el orden de la creación, por las diferencias en el cuerpo, el tamaño del cerebro,
las diferencias hormonales.

Todas estas actitudes sólo han servido para agravar una tendencia distorsionada surgida
en la caída que se aparta de la intención original de Dios: la división entre el hombre y la
mujer. John Dawson5 señala que las heridas infligidas unos a otros entre hombres y
mujeres, constituyen el punto de partida para otros conflictos humanos, ya que se está
jugando con la devaluación de una parte fundamental de la humanidad. Esa relación, que al
expresarse plenamente a través de la unión del esposo y la esposa, constituye la metáfora
más importante que ha usado Dios en su Palabra para instruirnos sobre la forma de
comunicarnos con él. En una emotiva confesión de los abusos del género masculino sobre
la mujer, Dawson agrega dirigiéndose al sexo femenino:

Algunas de ustedes fueron maltratadas físicamente o abusadas sexualmente por su padre, lo que
constituye la peor traición familiar. Algunas experimentaron otras formas de incesto que no les ha
permitido sentirse íntegras. Muchas saben lo que significa haber sido objeto del juego, físico o
emocional, de un adolescente; y casi todas han sido víctimas del rechazo en relaciones de noviazgo o
durante un matrimonio problemático..... Ustedes saben lo que significa el ser mirada como un pedazo de
carne; ser burladas y ridiculizadas en la presencia de hombres. Ser tratadas tiernamente pero sin que se
les tome en serio; despreciando sus dones y desatendiendo sus consejos........ Todo esto representa una
gran distorsión de esa parte del carácter de Dios que tenía que haber sido revelado.... a través de la
masculinidad de padres, hermanos, esposos y amigos. Ello ha entristecido el corazón de Dios.....por
favor, ¡perdonen!

3
Acevedo F., Cultura y evangelización en América Latina: El Caso Venezuela, Fuller Theological Seminar-
School of World Missions, Pasadena-California, 1995.
4
Cita tomada de Acevedo, Op. Cit., Crónica Florida del mestizaje de las Indias, Edit. Lozada, Buenos Aires,
1960.
5
Dawson J., Healing America’s wounds, Regal Books, Ventura-California, 1994

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Un problema resultante ha sido que la mujer, en la búsqueda de la identidad perdida, de


sus derechos, o más bien de su esencia ha venido a desarrollar lo que vendría a ser una
actitud de misandria, odio o desprecio hacia los hombres,

Jesús y la mujer

Nadie puede negar que las mujeres jugaron un papel muy importante en el ministerio
público de Jesús. La Palabra describe ampliamente su amistad con Marta y María las
hermanas de Lázaro, haciendo énfasis respecto a las actitudes que ellas tenían frente a la
enseñanza del Maestro (Lucas 10:38-42); las reacciones en el momento de la muerte de su
hermano (Juan 11:1-44); y la interrelación en la intimidad del grupo de seguidores, cuando
María unge a Jesús en una escena que él equipara con su embalsamamiento y preparación
para la muerte (Juan 12:1-8; Marcos 14:3-9; Mateo 26:6-13). También se dice de las varias
mujeres que le seguían para servirle y también para aportar el dinero necesario para el
trabajo ministerial (Lucas 8:1-3). De la misma forma los evangelistas resaltaron con
amplitud el hecho de que fueron las mujeres las que permanecieron fieles al pie de la cruz
(Lucas 23:27-31) y además llegaron temprano a la tumba lo que les permitió ser las
primeras personas en contacto con el Cristo resucitado (Mateo 28:1-10; Marcos 16:1-8;
Lucas 23:55-24:12; Juan 20: 1-18).

• ¿Por qué esa relación especial con las mujeres?


• ¿Cuál era el atractivo de este hombre especial?
• ¿Qué hacía a estas mujeres mantenerse fieles a su Maestro, cuando los propios
discípulos que él había escogido, le negaban, huían despavoridos o caminaban
descorazonados por las rutas de Judea?

No es difícil entender las razones. En una sociedad dominada por hombres Jesús había
reivindicado a la mujer, tanto por medio de la enseñanza como en acciones concretas, en
una actitud verdaderamente revolucionaria en comparación con el pensamiento común de la
época. Una muestra de esas enseñanzas la encontramos en el Sermón del Monte, donde
confronta a los hombres israelitas en primer lugar con el adulterio, haciéndoles ver que no
sólo es físico sino también mental (Mateo 5:27-30), por lo que les llama la atención a
cumplir tanto con el séptimo mandamiento como con el décimo, el cual habían estado
olvidando. En segundo lugar, con la práctica del divorcio que les permitía, según algunas
escuelas rabínicas, despreciar a la mujer por las razones más ridículas y denigrantes (Mt.
5:31-32). Notemos que ambos aspectos, adulterio y divorcio, eran siempre asumidos en
detrimento de la mujer israelita. Así que el sólo hecho de hacer mención de los mismos, en
forma pública y directa, seguramente llamó la atención de muchas mujeres que se sintieron
defendidas de aquella agresión masculina establecida por generaciones. Casi en cada uno
de los encuentros con mujeres que se relatan en los cuatro evangelios, Jesús violó las
costumbres y tradiciones, tan populares y fuertes en su tiempo que a veces se les daba
carácter de leyes. Su comportamiento hacia las mujeres, no tuvo comparación dentro de las
sociedades civilizadas, desde el surgimiento del patriarcado miles de años antes de su
nacimiento.

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Jesús y los conceptos acerca del


Hombre, la Mujer y la familia de su época

Situación Trasfondo Consecuencia


Una mujer con una enfermedad Esta mujer había sido considerada impura • Jesús la declara Hija, haciéndola co-partícipe de
ginecológica toca a Jesús de acuerdo a la ley (Lev 15:19-31) por un la nueva creación, y manifestándole su amor..
ocultándose en medio de una período de más de doce años. Se encuentra • La mujer es sanada a causa de su fe.
gran multitud (Marcos 5:25-34; arruinada económicamente y • Jesús quebranta el orden religioso y el concepto
Lucas 8:43-48) sicológicamente. de la impureza ceremonial.
• Lo que ella tocase se consideraría
impuro (v.19)
• No tenía ningún poder, ni financiero, ni
social, ni político. Era una desposeída.
Una mujer dominada por una La mujer: • Desafía el monopolio masculino en relación al
enfermedad de la columna • Es pasada al frente de la sinagoga, lo acceso a la gracia de Dios.
vertebral por más de 18 años es cual era inadmisible. • Al llamarla “hija de Abraham” la hace co-
sanada plenamente (Lucas • Jesús la toca y habla con ella en público, partícipe directa del pacto, en igualdad de
13:10-17) igualmente impensable para un judío. condiciones que el hombre.
• Jesús la sana en el día de reposo, en • Jesús quebranta los códigos masculinos con
contra de la costumbre. todos sus escrúpulos y prejuicios acerca de la
• La enfermedad era producto directo de mujer.
la pecaminosidad individual o familiar. • El día de reposo es restituido como servicio al
hombre.
• Declara la guerra al reino de las tinieblas, al
liberarla del espíritu de enfermedad.
Destruyendo los conceptos usados para darle
ventaja a algunos sobre otros.
Una mujer adúltera es • La ley establecía (Deut 22:22) la muerte • Son hombres los acusadores, pero ninguno está
presentada a Jesús para que él física del hombre y la mujer “casada” exento de pecado, y todos son acusados por su
decida acerca de su muerte hallados en adulterio. propia consciencia.
(Juan 8:1-11). • El adulterio era la violación más atroz • El primer pecado que han cometido es la
de los derechos masculinos sobre la injusticia al no hacer cumplir la ley tal como
mujer. estaba establecida.
• La mujer adúltera era avergonzada • Jesús no ve a ninguno (ni a la mujer ni a sus
públicamente, muchas veces acusadores) para evitar cualquier manipulación.
desnudándole sus senos. Cada uno se examina a si mismo.
• Jesús no ampara el pecado sexual, le ordena a la
mujer que no peque más.
Una mujer alaba a la madre de • El valor más importante que se le había • Jesús enseña que ser discípulo es más importante
Jesús (Lucas 11: 27-28) dado a una mujer en aquella cultura era que haber sido su madre. Para una mujer su
el de parir, amamantar y criar hijos. relación con Dios está por encima de su
• Una mujer vivía para la crianza y se maternidad.
realizaba solo en los éxitos de sus hijos • El valor de una mujer no se deriva de los
Una mujer judía encuentra o de su marido. conceptos culturales sino de su disposición de
liberación de la tradición judía • Las mujeres judías disfrutaban de un ser verdadera discípula de Jesús.
que le daba valor y respeto a las gran respeto como madres y sobre todo • Jesús ignora ésta pètición a ésta madre de los
madres judías quienes además como madres de hijos varones. hijos de Zebedeo. El no quiere esta actitud
tenían hijos varones. (Mateo • Una madre quien vé su entero valor en maternal vicaria de ésta mujer. Jesús la quiere a
20:20-28) sus hijos, querrá también ver ella como una persona.
reconocimiento público dado a ellos. A • Jesús no estimula nungún culto a la madre, ni
sus propios ojos la mujer no es nada. aún hacia su propia madre.
Ella existe a través de sus hijos. Ella es • Mateo 27:56 coloca a la madre de los hijos de
una madre y vive en sus hijos Zebedeo quienes habían huído abandonando a
Jesús (Mateo 26:56) cerca de la cruz, ya no
defendiendo la causa de sus hijos sino
cambiando los lugares de honor espiritual los
cuales ella parecía desear, por el lugar de
ejecución y muerte. Ella se expuso al peligro de
seguir a Jesús.

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Jesús y los conceptos acerca del


Hombre, la Mujer y la familia de su época (Continuación)
Jesús hablando acerca del • Un hombre judío sólo cometía adulterio • Jesús radicaliza el concepto de la lujuria y el
adulterio en su discurso cuando abusaba de la propiedad sexual adulterio al incluir el acto mental de codiciar y
magistral a los seguidores de otro hombre. fantasear sexualmente.
(Mateo 5:27-30) • Los hombres adulteraban impunemente. • Redefine y equilibra el concepto del adulterio al
• La mujer había sido reducida a un mero incluir los pensamientos lascivos, y al afirmar la
objeto sexual. responsabilidad masculina (Marcos 10:11).
• El adulterio había sido interpretado • El varón y la hembra deben aprender a controlar
fundamentalmente como un pecado sus cuerpos, emociones, deseos, pensamientos,
femenino. imágenes, fantasías.
• Los rabies enfatizaban el séptimo
mandamiento pero obviaban el décimo.
Unos fariseos intentan tentarle • El divorcio era una de las bases del • Jesús reafirma el matrimonio monógamo.
preguntándole acerca del dominio patriarcal. • Hace un pronunciamiento definitivo a favor de la
repudio de la esposa y sus • El repudio era un prerrogativa permanencia del matrimonio.
causales (Marcos 10:1-12) masculina. • Afirma que el divorcio judío, establecido por
• Las causales de divorcio eran Moisés, era una concesión temporal a la
insignificantes. pecaminosidad humana.
• La desprotección de las divorciadas las • Cualquier matrimonio después de un divorcio es
llevaba a la prostitución. una forma de adulterio.
• El divorcio solo es factible como último recurso,
en el caso de inmoralidad sexual de uno de los
conyuges.
Una mujer invita a Jesús a su • A la mujer no se permitía aprender la • Jesús quebranta los roles tradicionales que
casa, donde su hermana se ley (la Torah) o servir de discípulas de obligaban a las mujeres a dedicarse únicamente a
sienta a escuchar las enseñanzas un rabí. los quehaceres domésticos.
de Jesús (Lucas 10:38-42) • La enseñanza de la mujer era una • Revela que este pensamiento convencional
amenaza al sistema de dominación estaba presente en Marta y que ella debía
masculina. aprender a estar con él.
• La realización de la mujer estaba en el • Mas adelante el Jesús resucitado confirma su
servicio que prestaba al varón identidad cocinando para los discípulos, tarea
(quehaceres). reservada para los sirvientes o mujeres.(Juan
• El sentarse a los pies del maestro era 21:9-14)
prerrogativa del discípulo varón.
Las mujeres llegan a la tumba • La veracidad de las palabras de la mujer • Jesús envía a las mujeres a testificar de la
después del día de reposo era tenida en poco cuando ella servía de resurrección entrando en contradicción con la
(Mateo 28:1-8) testigo. costumbre popular.
• El hecho prepara a la mujer como testigo veraz
de la nueva comunidad: en profecía,
evangelismo, diaconado, discipulado, pastorado,
apostolado y liderazgo.
A los fariseos reunidos se les • Los fariseos eran adictos a la alabanza • Jesús declara que la paternidad de Dios es
hacen interrogantes y luego se pública, títulos, prominencia y distinta a las estructuras de poder patriarcal
les refuta, recomendándosele a superioridad. La paternidad era uno de existentes y por lo tanto infinitamente superior a
los discípulos no seguir su esos títulos superiores. ellas.
ejemplo (Mateo 23:9) • La patrilinealidad era un reflejo de la • Aún cuando conocía sus línea de ascendencia
importancia que la sociedad le concedía (Mateo 1-17; Lucas 3:23-38) en la cual se veía
a la ciega superioridad paterna. que era descendiente directo de David, señaló a
• En el seguimiento de las generaciones los fariseos que él era Señor de David (Mateo
solo se hacía mención al padre como 22:41-46), para no apelar a su heredado poder
identidad para la familia. patriarcal.

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Algunos Prototipos fundamentales de la feminidad

• Defensora: Audacia, arrojo, valor, liderazgo, iniciativa

Una corriente de pensamiento establece una cierta incapacidad de la mujer para iniciar o
arriesgarse, en contraste con el hombre al cual se le ve como un guerrero combativo. Sin
embargo, una revisión de la Biblia, de la historia, y aún de lo cotidiano de la vida nos
muestra que esto no es más que un prejuicio que quizás busca limitar el rango de acción de
la mujer. Así como el hombre es a la vez vulnerable y combativo, independiente y
responsable, la mujer se mueve entre diferentes polos de su personalidad, dependiendo de
las circunstancias y los conflictos, siendo su audacia, iniciativa y liderazgo, solo uno de
ellos. Sin embargo, valdría la pena establecer una diferencia entre el prototipo de Guerrero
que vimos para el hombre6 y la forma como la mujer ejerce estas mismas cualidades.
Históricamente, las mujeres han sido reconocidas más bien como esforzadas y valerosas
Defensoras7 de sus hijos, familias, ciudades, naciones, más que atacantes, habiendo luchado
con tesón en condiciones muchas veces precarias. En esas funciones han peleado batallas
memorables.

Pero una mujer podría extralimitarse en la práctica de esta cualidad, bien sea como una
manera de compensar una baja autoestima o como una forma de rebelión a las figuras
masculinas a su alrededor. En ese momento comienza a comportarse como una amazona8,
nombre con el que se identificaba en la historia griega a las legendarias, combativas y
guerreras mujeres de una remota región de la Grecia antigua donde ejercían este oficio que
le correspondía al hombre solamente, mientras que estos se convertían en siervos. Vemos
aquí como, haciendo uso de un mecanismo de defensa, las mujeres pueden llegar a
hipertrofiar esta cualidad de la feminidad, incluso superando a los hombres en agresividad,
combatividad y deseo de dominio y poder. Rómulo Gallegos captó esta malformación del
carácter femenino en su obra maestra, Doña Bárbara9, a través de esta descripción de la
mítica mujer:

......... Inhibida la sensualidad por la pasión de la codicia y atrofiadas hasta las últimas fibras
femeniles de su ser por los hábitos del marimacho, que dirigía personalmente las peonadas, manejaba
el lazo y derribaba un toro en plena sabana como el más hábil de los vaqueros y no se quitaba de la
cintura la lanza y revólver, ni los cargaba encima solo para intimidar...... Un profundo desdén por el
hombre había reemplazado el rencor implacable... No obstante este género de vida y el haber
transpuesto ya los cuarenta, era todavía una mujer apetecible, pues si carecía en absoluto de
delicadezas femeniles, en cambio el imponente aspecto del marimacho le imprimía un sello original a
su hermosura: algo de salvaje, bello y terrible a la vez. Tal era la famosa Doña Bárbara: lujuria y
superstición, codicia y crueldad.....

A los extremos de este prototipo femenino, Barroso10 las denomina “mujeres


protesta” y Ellen Storky11, por su parte, “mujeres rabiosas”. Es decir, mujeres en guerra
6
Ver Encuentro 11.
7
Vitz P., “Support from psychology for the fatherhood of God”, www.paulvitz.com/fatherhood.html
8
Encyclopaedia Británica, Micropaedia, XV Edition, página 292, Chicago-USA, 1982.
9
Gallegos R., Doña Bárbara, Editorial Panapo, Caracas-Venezuela, 1988.
10
Barroso M., Autoestima: Ecología o Catástrofe, Editorial Galac, Caracas-Venezuela, 1987
11
Storkey E., Contributions to Christian feminism, Christian Impact Publications, Londres-RU, 1995

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10

permanente y abierta, contra la Iglesia, la sociedad, el patriarcado, los hombres, pero que en
lo profundo de su ser interior, desconocen sus necesidades reales y su verdadero potencial.
Han sustituido un verdugo por otro, pero continúan en esclavitud:

Desde la lesbiana a la guerrillera urbana o la religiosa en su convento, todas pueden a veces


conformar comportamientos de evasión, de mujeres alejadas de sí como personas, con grandes
resentimientos del pasado. La protesta es contra su impotencia y la insolvencia del pasado, con
situaciones inconclusas: padres alcohólicos, mentirosos, ausentes, castigadores, crueles, duros,
impenetrables, sicópatas, y madres resignadas, pasivas, permisivas y atontadas, incapaces de dar la
cara por su hija maltratada. La agresión de la protesta termina siendo contra ellas mismas12.

Adoptan comportamientos masculinos desagradables, displicentes, agresivos, para


hacer sentir su poder. Volviéndose peores que los hombres, se ensañan contra ellos y
fantasean destruir a los que la destruyeron. Profesionales de diferentes clases, jueces,
abogadas, médicas, científicas, no permiten el contacto y el calor humano o lo perdieron en
ese querer adaptarse al mundo incivilizado de los hombres desvalorizados13. Jeannette
Howard, refiriéndose a su propio testimonio señala lo siguiente14:

Por alguna razón, muchas mujeres adoptan una forma de seudo-masculinidad como una manera de
auto protegerse. Rechazan lo que es inherentemente femenino, y luchan para lograr su “igualdad” o
su superioridad sobre los hombres. ....Lo destructivo de esta postura pasa desapercibido porque el
mundo aplaude nuestros mecanismos de defensa. Pero el costo del aplauso es alto. Al lograr esa
“igualdad” con el hombre, sepultamos nuestras cualidades de gentileza y vulnerabilidad debajo de
una cubierta de rudeza, independencia y sospecha. No confiamos en nadie sino en nosotros mismos.
Nuestras duras capas protectoras ahogan los clamores de nuestro corazón de cariño y amor.

Pero, éstas no son más que respuestas o reacciones a situaciones que marcaron sus
vidas, el comportamiento masculinizado no tiene necesariamente un propósito superior,
sino que se ve como una venganza a los abusos del padre, hermanos u otros hombres o una
compensación a la carencia de estas cualidades en una madre apocada o sumisa.

Sin embargo, la audacia, el arrojo, la valentía no son valores indeseables para la


verdadera feminidad. La clave está en que la capacidad combativa de la mujer debe aflorar
con sentido claro de misión. En momentos de la vida donde a veces los hombres palidecen,
puede surgir una mujer arrojada y valiente para hacer cumplir los propósitos de Dios. Como
las mujeres al pie de la Cruz de Cristo y luego frente al ángel en el sepulcro, cuando los
hombres habían huido despavoridos y se encontraban escondidos y llenos de temor.

Igualmente, Débora, jueza y profetiza de Israel, representa esa clase de ideal. Una
nación que se movía entre pueblos enemigos, que se contaminaba, se mezclaba, y adoraba
otros dioses15, se encontraba básicamente en opresión y por ello clamaban al Señor
pidiendo un libertador, caudillo, guerrero lleno de sagacidad e inteligencia que pudiera
liberarlos de la situación en que se encontraban. Dos veces el Señor les responde a través de
Otoniel y de Aod16, pero, ahora durante veinte años los cananeos han oprimido a los
12
Barroso, op. cit., página
13
Barroso, op. cit., página 293.
14
Howard J., Out of Egypt
15
Jueces 3:5-6
16
Jueces 3:9,15

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11

israelitas y no ha surgido ningún guerrero. Es allí donde aparece una mujer audaz para
asumir el reto de liberar a la nación. Es una mujer indignada por la miseria de su pueblo y
la ausencia de espíritu combativo entre sus coterráneos:

Los guerreros de Israel desaparecieron; desaparecieron hasta que yo me levanté.


¡Yo, Débora, me levanté como una madre en Israel! (Jueces 5:7, NVI)

Tomando en cuenta la dominación patriarcal existente en Israel, es sorprendente que


Dios haya escogido a esta “madre” para guiar sus ejércitos. Pero, Débora era una mujer
especial. No vaciló al asumir el liderazgo de la nación, no eludió los riesgos de las batallas,
tenía fe, coraje, y confianza en el poder de Dios y sus promesas, entregó su vida al Señor y
se puso a su servicio17. A diferencia de las amazonas, Débora convoca a Barac para pelear
juntos, éste acepta, sólo si, ¡ella le acompañaba! Así, una valerosa mujer, y un hombre lleno
de inseguridad, temores, y dudas llamado Barac batallan contra un ejército formidable
compuesto de novecientos carros de hierro y lo derrotan. Paradójicamente, el jefe del
ejército cananeo llamado Sísara es asesinado por otra mujer, la más bendita de las mujeres
que habitan en carpas18, Jael. Una mujer que rompe todas las normas y costumbres de un
guerrero. Es mujer, es extranjera, usa las armas más extrañas, una estaca y un martillo, pero
por el contrario posee la decisión y el valor para llevar a cabo la misión.

No se trata de luchar por luchar. De demostrar hombría como respuesta a las


vicisitudes de la vida, ni como represalia por los abusos sufridos. No, es ejercer estas
cualidades innatas de la mujer en una cantidad de situaciones cotidianas que se deben
enfrentar. Una de ellas, quizás la más importante, es la defensa de los límites personales tan
cruelmente y vilmente maltratados en muchos ámbitos de la vida de la mujer.

Es allí donde encontramos el otro extremo. La mujer resignada, abusada, apaleada,


restringida, pero que a su vez ha perdido completamente sus fuerzas. Se ha rendido, cesado
su protesta, y no puede ni si quiera reconocer en su propio ser los recursos que Dios le ha
dado para enfrentar las situaciones de la vida. Esta clase de mujeres proviene de cualquier
clase social, raza, profesión, religión. Pueden sentarse en las bancas de las iglesias domingo
tras domingo. Es nuestra vecina de enfrente, la maestra, abogada, cocinera o profesional. Es
una de las secretarias en la oficina o quizás la esposa del pastor19. El dominio impuesto
sobre ellas es físico, emocional, espiritual e intelectual:

.. tiene que descerebrarse, no entender, no pensar, no desarrollarse, no educarse, no ser persona... La


mujer se convierte en “cosa”.... Padece, voluntariamente, daños cerebrales porque no ve, no sabe, no
oye, no siente. Y se resigna a aguantar, padecer, sufrir....20

Un ejemplo bíblico de esta clase de maltrato y posesión de la mujer lo encontramos en


el capítulo 1 del libro de Ester. El rey Asuero ha convocado a príncipes, cortesanos,
gobernadores y los más poderosos, a una extravagante fiesta de ciento ochenta días de
duración para celebrar o darle “gloria” a su reino, seguida por otra de siete días para el resto

17
Life recovery Bible, Tyndale, Wheaton-Illinois, página 295.
18
Jueces 5:24
19
Alsdurf J., Alsdurf P., Battered into submission, Intervarsity Press, Downers Grove-Illinois, 1989
20
Barroso, op. Cit., página 289.

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12

del pueblo. Había vino a raudales, y los invitados lo tomaban, de acuerdo con la ostentación
de la fiesta, en vasos de oro. Simultáneamente, otra fiesta se celebraba con las mujeres en la
casa real, lo cual parece ser indicativo de que los excesos que se cometían en el pabellón
eran ofensivos contra las mujeres21, puesto que las celebraciones en el imperio persa
normalmente incluían a hombres y mujeres. Es así como llegado el séptimo día:

estando el corazón del rey alegre del vino, mandó .... que trajesen a la reina Vasti a la
presencia del rey con la corona regia, para mostrar a los pueblos y a los príncipes su
belleza; porque era hermosa. (Ester 1:10,11)

Hasta ese punto, Asuero había hecho grandes alardes de su poderío, capacidad de
convocatoria, y riqueza económica. Ahora, inspirado por el alcohol se decide a presentar la
figura excitante de su mujer ante aquellos hombres. No se sabe exactamente la manera en la
que el rey quería que Vasti se presentase vestida, aunque algunos escritos sugieren que
debía hacerlo completamente desnuda, portando solamente la “corona regia”, un turbante
azul y blanco que contenía joyas y piedras preciosas22. La intención no es otra sino el
impresionar a los invitados con la belleza de aquella mujer, una propiedad más que Asuero,
aparentemente, “controlaba” a su antojo.

La respuesta negativa de Vasti ante la orden del rey, hace reflexionar acerca de los
abusos que se estaban cometiendo en aquella fiesta que llevaba ciento ochenta y siete días,
puesto que la desobediencia femenina era algo impensable en una sociedad dominada por
hombres. Igualmente interesante es la forma como el rey y sus consejeros tratan de restarle
fuerza a la posición de Vasti, al enviar un decreto:

diciendo que todo hombre afirmase su autoridad en su casa; (v. 22)

Decreto que guarda similitud con el Corán, que en su Sura 4, titulada “la mujer” dice:

El hombre tiene autoridad sobre la mujer porque Alá ha hecho a uno superior al otro......... En cuanto a
aquellas de quienes temen desobediencia, repréndanlas, mándenlas a camas separadas y azótenlas.

Según esta antigua filosofía, la mujer es propiedad del hombre, ella no puede pensar
por sí misma, no puede desafiar su autoridad, ni tiene derecho a expresar su opinión, se
trata de un mero objeto sexual que una vez usado al antojo del macho, es dejado a un lado
cuando ya no cumple sus propósitos. Vasti es desechada porque intenta hacer valer su
dignidad. Pero vale la pena recalcar el valor de esta mujer a sobreponerse a los abusos e
injusticias que se estaban cometiendo, ella tuvo que armarse de valor, y pagar con su propia
vida.

21
Pagán, 1992.
22
Pagán, 1992

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13

• Dama: Romance, nobleza, relación, confiabilidad, sensibilidad


Estos valores corresponden a la descripción usual de aquellas damas de clase y finura
de tiempos pasados. Según el diccionario, una dama es una mujer de calidad23, galanteada o
pretendida por un caballero. En las historias épicas, casi cada caballero, al mismo tiempo
que luchaba por su Rey, también lo hacía por su “dama”. Lo curioso es que la abstracta
dama no sólo pone en un segundo lugar al Rey sino que además termina por desplazar al
mismo Dios, convirtiéndose en un objeto idolátrico:
Como dijo el caminante en su famoso diálogo con Don Quijote: “..... una cosa entre muchas me parece
mal de los caballeros andantes y es que, cuando se ven en la obligación de acometer una grande y
peligrosa aventura, nunca en aquel instante de acometerla se acuerdan de encomendarse a Dios como
cada cristiano está obligado a hacer en peligros semejantes; antes se encomiendan a sus damas, con tanta
gana y devoción como si ellas fueran su Dios...”.... Al desdichado de Don Quijote no se le habría pasado
jamás por la cabeza proponer a Dulcinea irse a la cama. Allí se habría roto todo el encanto: habría sido el
fin de la dama. Para la cama estaban las esposas, y si eso no bastaba, estaban los cientos de prostitutas
que esperaban fuera de las murallas de la corte. La dama podría ser una mujer casada, ojalá de rango
nobiliario superior, pues eso facilitaba su imposibilidad. En suma, mientras más imposible, más dama
era la dama. Como se ve, se trata del amor divino trasladado a una persona...24

En la personalidad de la dama se centran muchas de las cualidades relacionales de una


mujer, las cuales involucran honestidad, modestia, seguridad, pasión, de allí que
históricamente se le asoció con la vida relacional de las cortes de los nobles y reyes. Esta
visión popular trascendió los tiempos y las épocas, llegándose a la creencia de que en la
personalidad de la dama se conjuga la excelencia de la feminidad. Por ello, desde tiempos
antiguos se ha creído que para que una mujer pueda desarrollarse como dama se hace
necesario su exposición a las ventajas derivadas de la vida social, de clases de ballet e
idiomas, de literatura, de vestuario y aún de cómo combinar los colores, de normas de
urbanidad y de cortesía. En otras palabras, todo lo que pudiera externamente ser atractivo a
un caballero que la cortejara. Todo esto alimenta la idea de un romanticismo extremo en el
que la mujer se prepara para ser atractiva a un hombre por sus dotes como dama,
centrándose en ello como el objetivo fundamental de su vida.

Esta antiquísima visión de la dama, muestra los dos extremos negativos en que se
puede mover. Por un lado, la ilusa y fantasiosa romántica, con la cabeza llena de historietas,
siempre esperando al caballero que viene en su búsqueda, y la mujer que no encuentra otra
forma de relacionarse más que a través de la ofrenda de su cuerpo, ambas direcciones
llevan al mismo destino plagado de relaciones destructivas. Para el primer tipo, los tiempos
han cambiado, los caballeros andantes como Don Quijote ya no existen, y el romanticismo
platónico de aquellos días se ha distorsionado. Sin embargo, según Mary Ellen Ashcroft25,
en nuestra sociedad muchas mujeres están todavía a la espera de su caballero blanco:

La historia más común que las mujeres leen es el “romance” que termina cuando la mujer
(usualmente joven y atractiva) se casa......... Un anhelo profundo, dado por Dios, de intimidad con
otra persona puede ser distorsionado. La pornografía es una manera de distorsionar, donde el deseo
de satisfacción física se vuelve el centro. El amor romántico es otra distorsión, donde una persona
23
Pequeño Larousse Ilustrado, 1975
24
Mires F., El malestar en la Barbarie, Editorial Nueva Sociedad, Caracas-Venezuela, 1998.
25
Ashcroft M.E., Temptations women face, IVP, Downers Grove-Illinois, 1991.

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14

espera que otra se convierta en la respuesta a su vida. La imagen romántica de la damisela a la que el
caballero blanco limpia el camino de sus pies es tan irreal como la imagen pornográfica de la
inocente mujer enloquecida por un macho.

¿Podrán desarrollarse las características de la dama en la jovencita que truncó su


educación después de un embarazo precoz; la mujer que sobrevivió a duras penas un hogar
disfuncional, sin estímulo, sin amor; la mujer abandonada por su marido que vive en doble
jornada para alimentar y criar a sus hijos? La fantasía de ser y vivir como una de esas
damas pulcras, perfectas, educadas, y disponibles para el caballero andante se convierte
más en una forma de escape de una realidad que trae consigo rabia, llanto, desamor, trabajo
duro, y recuerdos que hieren profundamente. Una visión tan estereotipada de lo que es ser
dama es para muchas mujeres una meta inalcanzable que produce una gran frustración. Sin
embargo, como lo expresa T.D. Jakes26, sería mejor pensar en la dama más en términos de
balance, excelencia, de virtudes o de valores, y no de apariencias externas. En otras
palabras, una mujer puede convertirse en dama desarrollando toda su nobleza, gentileza,
sensibilidad y confiabilidad a través de su relación con Dios, no importa cual haya sido su
pasado. No para lograr como resultado el ser cortejada y conquistada por un hombre, sino
por la importancia de las cualidades interiores que le dan una belleza espiritual propia,
extraordinariamente femenina, sea que haya decidido optar por el celibato o no.

La historia de Rut pareciera representar un fuerte contraste al ideal feminista de una


mujer independiente y autónoma, pero es al mismo tiempo un crucigrama para aquellas que
pretenden encajonar a la mujer en el estereotipo de la dama cortesana romanticona.
Observando esta personalidad bíblica encontramos una serie de características que son
esenciales en la personalidad de una dama, tales como modestia, humildad, pudor,
obediencia, confiabilidad, lealtad, cortesía, aparte de su aparente belleza física o atractivo27,
su linaje noble, hasta su capacidad innata para finalmente llegar a convertirse en esposa y
madre. Características que contrastan con la agresividad, la seducción, el orgullo, la
rebeldía, aspectos de la personalidad que hacen difícil el establecimiento de relaciones
fuertes. Es importante notar que el nombre de Rut proviene de una raíz hebrea que significa
“amiga”o “amistad”28, aspecto este que va a demostrar con creces en su relación con su
suegra Noemí (cuyo nombre significa “dulzura”). Lo importante de todo esto es que la
personalidad de Rut es completamente natural, libre de poses y actuaciones. Tampoco ella
está a la caza de algún caballero andante. Sin embargo, en el proceso de ser mujer,
cumpliendo con sus roles como viuda y extranjera, se encuentra con Boaz, un hombre de
valor, un caballero, un gentleman. Se trata de uno de los tipos29 de Jesucristo más
interesantes que encontramos en el Antiguo Testamento. Boaz es el “caballero redentor” de
Rut la moabita que había enviudado, a quien le hace justicia casándose con ella30. Su
nombre significa “en Él está la fortaleza” lo cual va en concordancia con su calidad, valor y
fortaleza de carácter.

26
Jakes, T.D., The lady, Her Lover and her Lord, Putnam, New York, 1998.
27
Quizás esta sea una major palabra, en vista de que “belleza” es un término que ha sido desvirtuado,
llegando a significar lo que las agencias de publicidad quieren hacernos entender.
28
Bronner, op. cit., pág. 70; Pickett F., The prophetic romance, Creation House, Orlando-Fla.-USA, 1996.
29
Personalidades bíblicas que apuntan en cierta forma a las cualidades de la persona de Jesucristo.
30
Rut 2:1

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15

Aunque el libro de Rut cierra con una historia romántica, hasta cierto punto al estilo de
esas novelas con un final feliz, la lección importante es que el desarrollo de la feminidad de
esta mujer no está condicionado por el estereotipo de la dama que busca al varón para su
realización personal. Rut demuestra su independencia al tomar sus propias decisiones, su
valor al dejar la comodidad de su nación; su lealtad al acompañar a su suegra empobrecida
a causa de la hambruna y la viudez; su fortaleza para trabajar recogiendo las sobras de la
cosecha de acuerdo a lo que por ley le correspondía; su amor, mejor que siete hijos31; y su
humildad32, cualidades que le hicieron merecedoras del calificativo de “mujer ejemplar”33,
todas dignas de imitación, no solo por parte de la mujer sino también por el hombre, ya que
se refieren a aspectos de la persona que trascienden los géneros. Es de hacer notar que antes
de ser redimida de su condición de viudez ya se habían desarrollado sus valores, el
matrimonio con Boaz es solo un paso más en la vida de esta mujer ejemplar.

En el camino de la realización de la feminidad, una mujer puede ser dominada por la


antítesis de la personalidad de esa dama noble, humilde, leal, sensible, representada por la
prostitución, o la tendencia a prostituirse. Es decir, la clase de mujer que negocia con su
cuerpo y sus dotes femeninas para que el hombre supla su deseo de placer, o para ella
beneficiarse emocional, económica, social o políticamente. “Fácil”, “codiciable”,
“obtenible”, “comprable”, han sido propuestos como atributos femeninos que muchas
mujeres desarrollan de manera artificial en sus vidas, bien sea como medio de control de su
entorno, o bien porque esta viene a ser la única manera conocida de establecer vínculos y
relaciones. Es la dama frustrada que decide recurrir a las artimañas de la seducción, del
sexo, de la lujuria para lograr sus objetivos de atraer al caballero. El hombre por su parte,
debate su atracción hacia la feminidad entre los polos de la nobleza de la dama y lo
codiciable y aparentemente fácil de la prostituta. La literatura y el arte han explotado esta
oscilación a lo largo de los tiempos. A manera de contraste, las telenovelas populares
latinoamericanas están llenas de personajes de mujeres acaudaladas, con apariencia de
damas, pero en cuyo interior late el corazón seductor de la prostituta, y de jovencitas de
mala vida a la espera de que algún día un caballero entre al prostíbulo y las convierta en
damas34. El Diablo veterano de C. S. Lewis le describe a su sobrino la dualidad de esta
manera:

Si miras cuidadosamente en cualquier corazón masculino, verás que está obsesionado por dos
mujeres imaginarias, una Venus terrestre y una infernal ....... El primer tipo posee ...... una mezcla de
caridad, obediencia en el matrimonio... respeto, reverencia y naturalidad....... el segundo tipo es
deseado brutalmente,..... en la segunda clase, lo que quiere es sentir perversidad; ese “sabor” es lo
que está anhelando. En la cara, su visible ceño de animalidad, la destreza, o la crueldad, lo que le
gusta; y en el cuerpo, algo bastante distinto de lo que ordinariamente denomina belleza, algo que en
su cordura denominaría fealdad, pero que a través de nuestro arte podríamos lograr que pulsara en el
mismísimo nervio de su obsesión. .... El uso real de la Venus infernal es, sin duda, como prostituta o
amante35.

31
Rut 4:15
32
Rut 2:13
33
Rut 3:11
34
Mires, op.cit., pag. 130.
35
Lewis C. S., Cartas del Diablo a su sobrino, RIALP, Madrid, 1995.

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16

Esta desvalorización de la feminidad ha sido aprovechada convenientemente por los


medios de comunicación de masas quienes han reforzado la imagen distorsionada de la
mujer objeto, la cual:

Se expone, se vende, se compra. Aparece en las portadas de revistas, concursos de belleza, comerciales
de pantalones, marcas de cigarrillo. Vestidas, trajeadas, pintadas, desnudas, sonrientes,.... ha sido
reproducida en forma de modelos, estrellas, en mitos, en imágenes. La imagen no sirve para el contacto
sino para el disfrute.....Su sexualidad pertenece a la fantasía de todos los hombres frustrados que tienden
a ver en el objeto el ideal de sus aspiraciones...Esta forma de sacrificar a las mujeres en aras del
consumismo, no es sino una nueva versión del culto a la fertilidad. Allá se jugaba con la “creatividad” de
la mujer, aquí con la sexualidad distorsionada...... son desechables, como las relaciones que mantienen,
después de su uso. Quedará un recuerdo para su cuerpo y su imagen, no para su persona.36

El problema de la mujer objeto es que basa su vida en un elemento pasajero, poco


trascendente, que puede dejar de ser atractivo para el usuario una vez que su decaimiento se
hace evidente. Esto no es más que una desvalorización del significado de la mujer en el
contexto de la Creación. Para muchos la mujer sigue siendo un objeto desechable, carne,
botín, imagen, mito, todo menos semejanza del Dios vivo. Las indias de la conquista, las
jovencitas de los barrios de las urbes latinoamericanas, muchas mujeres de clase media, y
todas aquellas que han comercializado su cuerpo y apariencia para que el hombre pueda ser
satisfecho en sus apetencias, son rechazadas una vez que cumplieron su función, y
constantemente engañadas y despreciadas si acaso intentasen expresar su derecho a la
dignidad y respeto. Inspirándose en este hecho fue como Ernesto Cardenal escribió su
poema Oración por Marilyn Monroe, del cual se reproducen algunos fragmentos:

Señor
recibe a esta muchacha conocida en toda la tierra con el nombre de Marilyn Monroe
aunque ese no era su verdadero nombre
(pero Tú conoces su verdadero nombre, el de la huerfanita violada a los 9 años
y la empleadita de tienda que a los 16 se había querido matar)
y que ahora se presenta ante Ti sin ningún maquillaje
sin su Agente de Prensa
sin fotógrafos y sin firmar autógrafos
sola como un astronauta frente a la noche espacial....
...........
Señor
en este mundo contaminado de pecados y radioactividad
Tú no culparás tan sólo a una empleadita de tienda.
Que como toda empleadita de tienda soñó ser estrella de cine.
Y su sueño fue realidad (pero como la realidad del technicolor).
Ella no hizo sino actuar según el script que le dimos
..........
Ella tenía hambre de amor y le ofrecimos tranquilizantes.
Para la tristeza de no ser santos
se le recomendó el Psicoanálisis
..........
La hallaron muerta en su cama con la mano en el teléfono.
Y los detectives no supieron a quien iba a llamar.
.........
Señor
quienquiera que halla sido el que ella iba a llamar

36
Barroso, op. Cit, página

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17

y no llamó..............
¡Contesta Tú el teléfono!

No todas las mujeres maltratadas, utilizadas, vejadas, llegan al extremo de Marylin


Monroe, al buscar con el suicidio poner fin a una vida de penurias. Algunas simplemente
aceptan su papel. ¿Cuántas mujeres viven una vida vacía y prostituida, con la sola intención
de sentirse apreciadas por el hombre? La capacidad de amar a un hombre es parte innata de
la naturaleza femenina, es parte de la creación de Dios. Sin embargo, después de la caída
hay una parte de la maldición que opera en contra de la mujer, pues su “deseo será para su
marido”37, lo que la impulsa a buscar en el hombre su realización como mujer, hasta el
punto de arriesgar su integridad y prostituirse. Como lo expresa Walter Trobish

Cada mujer tiene un don especial en su capacidad para entregarse completamente a un hombre. Este
don es como el capital de un banco. Sin embargo, muchas chicas lo gastan poco a poco con monedas
pequeñas. Cada día sacan un poco del capital, en aventuras por aquí y por allá, y lo lanzan al vacío.
Técnicamente hablando, quizás la muchacha sea virgen, pero ya ha perdido la capacidad para amar
debido a todas esas experiencias....38

Ante tal tendencia femenina hacia la dependencia de la relación con el varón, no nos
debe extrañar que el tema de la prostitución sea tan frecuente en la Biblia. El sistema
patriarcal que minimizaba a la mujer en su condición humana era campo fértil para el
abuso, la discriminación y el maltrato de la mujer, de allí que la prostitución se convertía
para muchas mujeres en la única salida para la subsistencia. En los evangelios hay
numerosos encuentros de Jesús con mujeres de reputación dudosa y en todos los casos la
feminidad de éstas, tan vejada por el oficio escogido es redimida por Cristo.

¿Por qué esa sensibilidad especial de Jesús hacia aquellas pobres mujeres,
despreciadas, condenadas y maltratadas? ¿Por qué Jesús parecía entenderlas tan bien, y a la
vez proveía respuestas a sus necesidades más íntimas? Un detalle en la genealogía de Jesús
parece darnos una clave de su sensibilidad. En Mateo 1:3 se ve que Jesús era descendiente
directo de Judá, por la vía de Fares, quien había sido concebido a partir de la lujuria de su
padre, en un acto no solo de depravación sino también de idolatría. La historia que se
desarrolla en Génesis 38, demuestra la injusticia cometida contra Tamar, al Judá suspender
la aplicación del “levirato” con ella. Este mecanismo permitía asegurarle descendencia a
aquellos hombres que morían sin haber procreado, por medio del casamiento de la viuda
con el hermano. En el caso de Tamar, ya había tenido como esposos a los difuntos Er y
Onán, ambos hijos de Judá, sin haber engendrado con ellos, y se le había prometido el
tercer hermano llamado Sela. Pero, injustamente, Judá detiene la aplicación de la antigua
ley matrimonial.

La pobre mujer se encuentra ahora sumida en la incertidumbre de no ser ni esposa ni


tampoco una viuda independiente. Como no tenía hijos carecía de respeto y seguridad en la
sociedad. Para una mujer los hijos eran la única manera de asegurar su posición y valor
personal. Las leyes patriarcales vigentes creaban mayor urgencia para esta mujer en
procrear que en casarse y por ello la reacción de Tamar es vengarse engañando a Judá.

37
Génesis 3:16
38
Trobish W., I loved you, IVP, Londres-Inglaterra, 1971.

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18

Vestida cómo una prostituta del templo, le seduce y queda encinta de los gemelos Fares y
Zara, el primero antecesor directo de David y de Jesús (Rut 4:18-22). Notamos aquí cómo
una injusticia cometida contra la mujer, da lugar a la inmoralidad mediante la fornicación, y
a la idolatría porque la mujer que Judá buscaba era una ramera de las que practicaban
rituales sexuales en el templo, algo que quizás hacía cada vez que subía a aquél poblado a
trasquilar sus ovejas.

El elemento del engaño parece esencial en la narrativa y en especial de lo que la mujer


prostituida pretende proveer: un momento de placer artificial, sin compromisos, de
pasividad masculina fuera del vínculo sagrado del matrimonio, una forma de escape, en
otras palabras, un engaño39. Pareciera que esta habilidad para seducir y mentir puede ser
explotada por ciertas distorsiones de la feminidad como un recurso para compensar una
supuesta debilidad de la mujer frente a un género masculino más fuerte y dominante. Por
ello encontramos este elemento repetidas veces en la narrativa bíblica, por ejemplo: las
hijas de Lot engañando a su padre (Génesis 19: 31-38); Sara mintiendo a Abimelec
(Génesis 20:1-18); Rebeca induciendo a Jacob (Génesis 27:8-16); Raquel a su padre
(Génesis 31:34); las parteras de Egipto al Faraón (Éxodo 1:15-21); Mical a Saúl (1 Samuel
19:11-17); Jael a Sísara (Jueces 4:17-24); Dalila a Sansón (Jueces 14:15-17). Por ello el
diálogo de Jesús con la mujer samaritana nos muestra lo que está en el corazón del Padre
respecto a la tendencia engañosa que puede dominar a la mujer en un momento dado (Juan
4:16-18):

Jesús le dijo: -Ve, llama a tu marido y ven acá.


Respondió la mujer y dijo: -No tengo marido.
Jesús le dijo: -Bien has dicho: No tengo marido porque cinco maridos has tenido, y el
que ahora tienes no es tu marido; esto has dicho con verdad.

Básicamente esta mujer había estado buscando satisfacer su vida, sus anhelos, sus
deseos en la búsqueda infructuosa de un hombre, de un marido. Seis hombres habían
pasado por su vida y sin embargo no había encontrado su felicidad. Seguramente había
recurrido a la astucia, la seducción, el engaño, pero el resultado es descrito por Jesús
gráficamente con la expresión: volverás a tener sed. Sea que la razón para entregarse
fácilmente, de venderse, de engañar provenga de la violación de sus derechos de mujer, del
abuso, de la idolatría, de la ambición, el resultado será siempre sequedad, vacío, hambre y
sed. La alternativa es tomar del agua que Jesús nos da, pues es el único recurso para no
tener sed jamás. La nueva etapa de la historia iniciada por Jesucristo advenimiento busca
sanar todas estas profundas heridas cometidas contra la mujer. Es el año agradable del
Señor, el jubileo para todas aquellas mujeres explotadas, abusadas, deseadas sexualmente,
violadas en sus derechos, marginadas e ignoradas, y lo sigue siendo aún en el día de hoy,
para las que todavía en el siglo XX están en una condición similar.

39
Elizabeth Badinter dice estas duras palabras acerca del hombre que busca satisfacerse sexualmente en la
prostitución: “durante los breves minutos que dura la sesión, el cliente habrá sido el cuerpo más infantilizado,
el más pasivo de todos. No hay mujer más maternal que la prostituta.... El cliente no pasa de ser un
muchachito que se pone erecto y cuya erección, lejos de ser un atributo de virilidad, es el indicio mismo de su
condición de asistido”, XY la identidad masculina, Norma, Bogotá-Colombia, 1993.

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19

• Doncella: Pureza, frescura, lozanía, autonomía, fraternidad


Una doncella es aquella mujer que no ha conocido varón. Si aplicáramos la lógica judía,
esta sería una de las formas más improductivas de la feminidad debido a la ausencia de las
únicas formas de realización de la mujer aceptadas dentro de esa cultura, la maternidad y la
satisfacción de los deseos de un hombre. Sin embargo, la posibilidad de que una mujer
tenga que vivir sin esposo y sin hijos, no sólo es una etapa que cada una debe transitar, sino
una opción o vocación de vida, y en muchos casos una situación a la que se le podría llegar
de manera accidental o traumática. Para Pablo se trata de una oportunidad para la vida
consagrada, el encuentro con el Señor, la pureza, la amistad y el servicio:

Hay asimismo diferencia entre la casada y la doncella. La doncella tiene cuidado de


las cosas del Señor, para ser santa así en cuerpo como en espíritu; pero la casada tiene
cuidado de las cosas del mundo, de cómo agradar a su marido.40

Dorcas41 es un modelo bíblico de una doncella benevolente, compasiva, devota,


sinónimo de caridad, pues se esmeraba en hacer buenas obras y en ayudar a los pobres42.
Quizás era la personificación de aquel modelo femenino que Pablo le expresó a Timoteo:

En cuanto a las mujeres, quiero que ellas se vistan decorosamente, con modestia y
recato, sin peinados ostentosos, ni oro, ni perlas ni vestidos costosos. Que se adornen
más bien con buenas obras, como corresponde a mujeres que profesan servir a Dios.43

Estos pocos versículos van trazando un modelo de la feminidad que combina el


apartarse de la tradicional figura de la esposa y ama de casa, con un énfasis en la pureza,
virginidad y sencillez, con la entrega total a las buenas obras, la compasión, la dedicación al
trabajo.

Basados en este principio de la valoración de la pureza y el servicio es que surge en


algún momento de la historia del cristianismo el concepto de la monja. Es decir, aquella
mujer apartada para el servicio del Señor bajo estrictos votos, donde el más severo e
importante era el de la castidad. Para el pensamiento misógino de la Iglesia en sus primeros
siglos, la mujer resultaba ser, en el decir de esos santos sacerdotes, un instrumento del
diablo. Para ellos, la mujer ideal debería ser una virgen dedicada a Dios, pero, para poder
cumplir con el mandato de multiplicar la humanidad, algunas tendrían que sacrificarse y
casarse perdiendo su condición de pureza en un acto sexual que consideraban en el fondo,
netamente animal. Sin embargo, para Storkey44, la monja tenía la ventaja de poder vivir
dentro de una sociedad o comunidad netamente femenina, libres de la influencia cotidiana
de los patriarcas, solo esporádicas intervenciones de la curia, experimentando así una gran
autonomía personal y comunal.

40
1 Corintios 7:34
41
Hechos 9:36-43
42
Hechos 9:36
43
1 Timoteo 2:9-10
44
Storkey, op. cit.

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20

El otro extremo del péndulo lo constituye la personalidad de la bruja. En el concepto


medieval estaba representada por la mujer que era tomada por el demonio para su
servicio45, de allí que fueron perseguidas por la inquisición, y quemadas en la hoguera de
forma despiadada. Sin embargo, en incontables casos no se trataba de una posesión
demoníaca, sino simplemente que la mujer rompía el molde del rígido orden patriarcal
existente tratando de ganar cierta autonomía sobre su cuerpo y mente; o que había cometido
algún pecado en contra de su esposo o familia lo cual se consideraba como una alianza con
el demonio; o bien poseía alguna clase de manifestación espiritual incomprensible para la
jerarquía religiosa; o se había refugiado en alguna comunidad femenina auto-sustentable, lo
que les permitía conocer el valor curativo de las plantas o del cuerpo humano, y por ende
un contacto profundo con la naturaleza. Al igual que en el caso de las monjas, estas
comunidades les permitían ejercer una interrelación netamente femenina, alejadas del
dominio patriarcal masculino. Aún hoy en tiempos del surgimiento del neo-paganismo, en
plena post-modernidad, encontramos ciertas sectas y grupos que asocian mujeres alrededor
de una figura femenina carismática, y libres de toda intervención masculina en la vida
comunitaria.

Ambas personalidades, la monja y la bruja, responden a cualidades femeninas básicas


que se basan en la gran sensibilidad de la mujer al mundo natural, al ámbito espiritual, y al
área emocional. Ella puede cuidar del jardín, los animales domésticos, tener experiencias
espirituales, discernir las necesidades de una persona estableciendo contacto a un nivel más
profundo y vivir en comunas donde el contacto y la conversación son diarios. En relación a
estos aspectos se puede decir que:

..la mujer valora en particular esa clase de relaciones que se pueden describir como “íntimas”.... pues es
en ellas donde encuentra sus mayores satisfacciones... Dado que Dios hizo a la mujer así, y lo ve como
algo “bueno”, podemos creer firmemente que Él también honrará esta necesidad... de relacionarse íntima
e inter-personalmente.... haciendo de esta capacidad de la mujer para relacionarse intensamente en el
mundo natural la base para las relaciones profundas en el mundo espiritual... esto explica la gran cantidad
de mujeres a través de la historia que han encontrado que su relación con Dios Padre, Hijo y Espíritu
Santo tiene un componente extraordinariamente satisfactorio desde el punto de vista emocional....46

Pero, si no hay balance, esta misma sensibilidad femenina tanto relacional como
espiritual y emocional puede conducir a una mujer hacia un estado de hiper-espiritualidad
insano e irritante47. La beata que se aparta de la realidad buscando satisfacerse en las
prácticas religiosas o espiritualistas distorsiona una de las cualidades más importantes de la
feminidad, la capacidad innata para el encuentro espiritual íntimo con el Señor.

En el encuentro de Jesús con Marta y María encontramos el conflicto entre dos


personalidades femeninas diferentes, dos doncellas que quieren servir y relacionarse con el
Maestro, pero que lo hacen desde posturas diferentes, una de acción y otra de

45
Nótese que en el pensamiento patriarcal medieval el hombre podía negociar con el demonio haciendo
pactos voluntarios. Mientras tanto el diablo simplemente “tomaba” a las mujeres en posesión, sin que estas
tuvieran necesidad de opinar o consentir. En otras palabras, esta interpretación de la fenomenología espiritual
estaba en total concordancia con las normas sociales de la pre-modernidad.
46
Vitz, op. cit.
47
Recuérdese la joven que perseguía a Pablo y a Silas en Filipos que resultó estar poseída por un demonio
(Hechos 16:16-18).

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contemplación48. Sin embargo, es en la historia de la resurrección de Lázaro donde se ve


más marcadamente el contraste entre la personalidad activa de Marta, capaz de dirigir,
elocuente, ocupada, rápida, y la de María quieta, callada, tímida49. Ambas son mujeres de
fe, pero cada una se aproxima de forma diferente a Jesús. Marta va en busca de Jesús y le
reclama a Jesús su retraso en venir. María prefiere quedarse en casa. Marta con cierta
desfachatez, le habla a Jesús, pero logra sacarle una expresión de esperanza para ella y su
hermana, y él hace que la mujer haga una expresión de fe extraordinaria:

.. yo creo que tú eres el Cristo, el Hijo de Dios, el que había de venir al mundo.50

En este sentido, Elisabeth Moltmann-Wendel se expresa así de la personalidad de


Marta:
No se trata de una mujer que guarde silencio en la comunidad. No deja la teología en las manos de los
teólogos. Lleva adelante un debate vigoroso. No llora, no se lanza a los pies de Jesús, no se rinde. Lucha
con Dios como Job. Culpa a Jesús de la situación. No se rinde, pelea como Jacob lo hizo con el ángel.
Sabe que la teológicamente la resurrección está reservada para el día final, pero espera en fe que Jesús
pueda ayudarle ahora.
Valiente, testaruda, apasionada... mucha gente la ve poco femenina... no parece incorporar las virtudes
femeninas cristianas tradicionales: obediencia, tranquilidad, sumisión. Estas son las características de
María. Ella se queda en casa, se queda velando a su hermano, tiene que ser solicitada por su hermana. En
llanto deja salir una tímida protesta ante Jesús....

Es como si María sintiera con más intensidad la perdida y el dolor de la situación, pero
Marta es la que demuestra la fe más fuerte en esta ocasión. Veamos algunas diferencias en
esta tabla:

Cualidad Marta María


Iniciativa: Buscar soluciones a los problemas + -
Independencia: Tomar sus propias decisiones + -
Emoción: Expresar llanto, dolor, alegría, ira, etc. -/+ +/+
Sumisión: Someterse a otros, a las costumbres -/+ +/-
Actividad: Estar ocupada en labores variadas +/+ -
Hogareña: Lugar de mayor confort y comodidad - +
Susceptibilidad: Afectable por las crisis -/+ +/-
Liderazgo: Dirigir a otros, dar órdenes + -
Espiritualidad: Acercarse a Dios, oración, piedad -/+ +
Quietud: Pasividad, poco aventurera - +
Sensibilidad: Siente las necesidades de otros + +
Expresión: habilidad para comunicar ideas +/+ -/+
Cortesía: gentil, cuidadosa de las relaciones -/+ +/+

Lo importante de esta visión de las personalidades de estas doncellas es el no encajonar


a la mujer que sirve al Señor en un estereotipo de contemplación permanente como única

48
Lucas 10:38-42.
49
Juan 11:17-44
50
Juan 11:27

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forma de relacionarse con él. Incluso en la sierva que ha decidido no casarse para trabajar
en la obra, habrá momentos de su existencia en las que su personalidad y actitudes habrán
de parecer poco femeninas en el sentido tradicional de la palabra. Será necesario el
establecimiento de un balance entre las dos posturas aquí reflejadas de activismo y
quietismo.

Uno de los peligros de la doncella o de la mujer sola es la sensación de esterilidad,


improductividad, o dejadez que la podría llegar a dominar en algunas etapas de su vida y
aún marcar el resto de la existencia. Esto podría surgir como un malestar interno, una
frustración, un trauma, o bien provocado externamente por las circunstancias de la vida o
las exigencias sociales. La hija de Jefté en el relato de Jueces es el caso patético de una
doncella sacrificada innecesariamente por el orgullo de un hombre. Se trata de una de las
historias más tristes de la Biblia51. La víctima es la hija de Jefté un hombre que se vuelve
orgulloso y arrogante desde su juventud a causa del rechazo de sus medio hermanos por ser
el hijo de una prostituta, pero que se las arregla para convertirse en comandante del ejército
de su nación. Antes de la batalla hace el juramento de sacrificar como ofrenda a quien
quiera que aparezca por la puerta de su casa para saludarle después de su victoria. De
acuerdo a la costumbre de que las mujeres daban la bienvenida a los guerreros con danzas y
tamborines, es su propia hija la que sale al encuentro convirtiéndose así en la depositaria de
la promesa de Jefté, pero éste en vez de reconocer su error y retractarse, deposita todo el
peso de la culpa sobre su joven hija diciéndole:

-¡Ay, hija mía, me has destrozado por completo! ¡Eres la causa de mi desgracia!...52

Sin embargo, esta hija anónima acepta su destino. Haz conmigo conforme a tu juramento,
acaba expresando y solo pide para sí dos meses para retirarse a llorar con sus amigas su
condición. Una mujer cuyo destino es coartado por la estupidez de las promesas de su
padre, una doncella que queda esterilizada e improductiva en un momento de gran frescura
y oportunidad para una mujer. Una hija que sufre las consecuencias del pecado de su padre.
También se trata de esa clase de mujer que por razones culturales es incapaz de alzar un
clamor de protesta. ¿Cuántas doncellas modernas han tenido que sacrificarse para que los
planes de otros puedan realizarse, no importa lo irrelevantes que estos pudiesen ser?

También la doncella puede ser víctima de la voracidad y lujuria masculina, que roba,
abusa y desvaloriza a la mujer valiéndose de la posición de dominio. Esa es la situación de
Tamar la hija del rey David, violada por su hermano Amnon53, y de Dina la hija de Jacob a
manos de Siquén54. Se trata de la pérdida de la frescura, lozanía y pureza a una temprana
edad, lo que seguramente termina en la frustración de la feminidad de estas mujeres,
especialmente en la clase de sociedad en la que vivían. En el caso de Tamar, Amnon es
movido por la lujuria y la violencia, mientras que en el de Dina, Siquén pasa de la pura
lujuria al enamoramiento, deseando resarcir mediante un matrimonio la ofensa. Existen, sin
embargo, algunos aspectos en común en ambas historias, en los dos casos observamos una

51
Jueces 11-12:7
52
Jueces 11:35
53
2 Samuel 13:1-22
54
Génesis 34

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indiferencia de los padres de las víctimas, son los hermanos de ellas los que buscan la
venganza lo cual desencadena derramamiento de sangre. En ambos casos no hay un trato
directo de los padres con las víctimas que les produzca alguna clase de consuelo. Estas
doncellas frustradas son dejadas solas para que resuelvan sus penas. Tal como muchas
jóvenes modernas son abusadas sexual, física y emocionalmente, perdiendo su pureza e
inocencia, pero al mismo tiempo quedando completamente solas en su vergüenza y dolor.

• Madre: Maternidad, creatividad,

La mujer que está por dar a luz siente dolores porque ha llegado su momento, pero en
cuanto nace la criatura se olvida de su angustia por la alegría de haber traído al
mundo un nuevo ser... (Juan 16:21, NVI)

La maternidad es a la vez un extraordinario privilegio y una gran responsabilidad, con


recompensas que sobrepasan su sufrimiento. Es una oportunidad para influenciar la vida de
un ser humano desde su nacimiento, no sólo dando vida, sino alimentándolo física,
emocional y espiritualmente. A través de la historia de la humanidad las características
maternales de una mujer han sido representadas por diferentes figuras como la mamá,
abuela, madrastra o suegra; o bien, cualquier mujer que asuma ese rol en algún momento tal
como una enfermera o una nana; y también en símbolos como imágenes o ídolos. Otros
símbolos maternales son atribuidos a la creatividad y fertilidad en general, como cuando se
usa el término la madre naturaleza.

La figura materna cobra una importancia trascendental en las naciones latino


americanas. Especialmente la de la madre sufrida55 para quien su vientre creativo viene a
ser el órgano más desarrollado de su cuerpo, llegando a ver la maternidad como una
dicotomía entre disfrute y sacrificio. Madres que son al mismo tiempo cariñosas y
amargadas, afectuosas y tristes, llenas de hijos y a la vez solitarias. Son mujeres que no
llegan a la maternidad sanamente sino a partir de una vida llena de carencias. Parir es una
de las pocas formas de valorizarse que encuentra una mujer ante una sociedad que glorifica
a la figura materna. Para Barroso56 en el caso de una nación como Venezuela:

... (se distinguen) dos tipos de mujeres: la santa, la buena, la sufrida a la que hay que adorar y
respetar y se le coloca en un altar. Esa es la madre57. Y la hembra: la que está en la calle, la que es de
todos, la que debe estar siempre disponible. A la madre se le distancia, se la aleja, se la convierte en
deber. A la otra se la seduce, se la desea... la mujer ideal, de la obligación y la real, la del placer. Una
para protegerla, otra para agredirla.... Los hijos aprenden el doble juego, teniendo que cuidar, admirar,
adorar a sus madres y practicando el amor libre con las hijas de otros....

Especialmente, ese concepto ideal de la “madre santa, buena, sufrida, adorable”, de


vitrina, se ha divulgado tanto a través del culto popular a unas vírgenes que
paradójicamente, a la vez son madres. Los conceptos religiosos hacen que esta maternidad
se vea muy irreal, inalcanzable, lejana, lo que añade una tremenda frustración. Sin
embargo, la relación de Jesús con su madre, María, nos muestra algunos aspectos

55
Barroso, op. cit., pág. 289.
56
Barroso M., Autoestima del venezolano, editorial Galac, Caracas, 1992.
57
Énfasis nuestro.

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importantes del ejercicio de esa maternidad. En primer lugar, María era una adolescente
soltera cuando él nació. Lo que debe haber pesado en términos sociales, en términos de
rechazo para ella, de crítica a José, y la designación de bastardo para Jesús. Por otro lado,
aunque es difícil de precisar, María debe haber enviudado en algún momento previo al
inicio del ministerio público de Jesús, ya que José no vuelve a aparecer en los evangelios a
partir del capítulo 2 de Lucas. Debido a esto, seguramente Jesús debe haber asumido las
riendas de la carpintería de su padre junto con sus hermanos. Nos podemos atrever a
señalar que María no se diferencia mucho de nuestras madres latino americanas que
comienzan a parir temprano en la vida y que luego marchan con una carga familiar solas
cuando el hombre se les va.

El ambiente familiar de la familia de Jesús conlleva a una difícil confrontación entre la


madre y el hijo primogénito. A la edad de doce años y en el templo de Jerusalén58, ante un
auditorio lleno de gente admirada de su inteligencia, se produce uno de los pocos diálogos
de Jesús con su madre. El espíritu maternal toma la iniciativa para expresar la molestia
porque el adolescente había desaparecido sin permiso. Él, por su parte, comenzando
incipientemente a "descubrir" su camino, alega estar en los negocios de su Padre59, una
senda completamente distinta a la que su madre había pensado para Jesús. Los conflictos
entre lo que la madre desea, y lo que el hijo percibe como correcto o adecuado se observan
con más fuerza en las bodas de Caná, donde María conocía mejor las cualidades de Jesús,
pero no entendía que su hora no llegaba aún60. Posteriormente, cuando inicia su ministerio
público María llegó a pensar que estaba loco, buscándole para llevárselo a su casa61, en
contra de lo que Jesús entendía como la voluntad del Padre.

Más adelante Jesús rehúsa dar crédito a su madre en la única forma que la cultura
patriarcal de aquella Palestina lo permitía. Bienaventurado el vientre que te trajo y los
pechos que mamaste62 grita una mujer entre la multitud. Esta mujer persistía en creer que
su valor, como el de María, se fundamentaba en tener un hijo varón y satisfacer todas sus
ambiciones a través de él. El valor más importante que se le había dado a una mujer en
aquella cultura era el de parir, amamantar y criar hijos. La mujer no es nada, ella sólo existe
a través de sus hijos. La madre entendía que su entero valor era su prole, gozándose con el
reconocimiento público dado a ellos, su prestigio, su prosperidad. Hasta puede volverse
manipuladora para forzar el camino de sus hijos como la madre de los hijos de Zebedeo63,
una mujer quien en toda la naturalidad y feminidad de la época, se propone vivir su vida
proyectada en los éxitos de sus hijos varones. Sin embargo, para Jesús la realización de una
madre está más bien en escuchar y obedecer a Dios. Finalmente, encontramos a María a los
pies de la Cruz, una madre observando la muerte sacrificial de su hijo, allí sufría, pero se
preparaba para una misión mayor como mujer y como madre.

Esta evolución de María como madre, desde que el momento que el ángel le anuncia
que daría a luz un niño, hasta que se confronta con la muerte de su hijo, ahora convertido en
58
Lucas 2:41-52
59
Lucas 2:49
60
Juan 2:4
61
Marcos 3:31-35
62
Lucas 11:27-28
63
Mateo 20:20-28

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salvador de la humanidad, es importante a considerar cuando la mujer en su espíritu


maternal tiene que ceder a su espíritu natural de control y sobreprotección para permitir el
desarrollo de sus hijos y las personas que influencia. María estuvo aprendió a ceder en su
intento de dominio, aun cuando eso significaba que una espada traspasaría su misma
alma64. Sin embargo, el espíritu maternal no siempre está dispuesto a ceder para que sus
hijos y los que están a su alrededor adquieran su propia personalidad. Es notorio a través de
la historia que la maternidad puede moverse entre dos polos principales, uno positivo y el
otro negativo, donde la figura materna puede ser o amorosa o temible65. Desde el lado
positivo, la madre es toda entrega, sabiduría, simpatía, espiritualidad, ayuda, apoyo,
crecimiento, fertilidad. En el lado negativo ella podría estar asociada a los secretos, el
engaño, la oscuridad, la seducción, y la muerte. Normalmente, es considerado como un
instinto natural el que una madre haga todo lo que esté a su alcance para lograr que sus
hijos tengan éxito, muchas veces traspasando límites. Ese es el caso de Rebeca, una madre
que pretende controlar el destino de Esaú y Jacob, sus dos hijos mellizos. Ella fuerza los
límites para el beneficio de Jacob, miente, y acelera un proceso natural, debido a su
impaciencia por ver los resultados de lo que el Señor le había revelado acerca de sus hijos,
revelado en la frase que: el mayor serviría al menor66. Es indudable que este es uno de los
mayores conflictos de la maternidad, el cómo soltar aquello que ha sido parido,
amamantado, querido, sostenido y enseñado sea en el ámbito físico, emocional o espiritual.

Dentro del aspecto terrible o temible de la maternidad, Jezabel es reconocida en la


Biblia y en la historia como una personificación clásica de la maldad hecha esposa y madre.
Esta mujer fue directamente responsable de la instauración de un período de más de tres
décadas de inmoralidad e idolatría en la nación de Israel al permitir el culto a Baal y sus
consortes y al erigirse como profetiza líder67. Jezabel fue la hija de un rey, la esposa de otro
rey, madre y abuela de reyes. Como esposa ejerció una seducción particular sobre Acab,
dominándolo con un poder macabro. Su fanatismo religioso la llevó a contender con Elías y
Eliseo hasta llegar a una muerte cruel en las fauces de unos perros. La influencia de Jezabel
sobre su esposo se ve claramente descrito en el incidente del huerto de Nabot descrito en 1
Reyes 21, donde esta malvada mujer manipula la política de la nación para lograr la muerte
de este hombre y apropiarse de sus terrenos. Allí, la Biblia se expresa acerca de la pareja
real así:

Nunca hubo nadie como Acab que, animado por Jezabel su esposa, se prestara para
hacer lo que ofende al Señor. Su conducta fue repugnante, pues siguió a los
ídolos..... (1 Reyes 21:25, NVI)

Aun cuando a raíz de ese incidente Elías profetiza la forma cruel como Acab, Jezabel y su
familia terminarían siendo afectados por su orgullo, maldad, idolatría y desobediencia, la
mujer continúa como reina-madre ejerciendo su poder fundamentado en la idolatría a través
de Ocozías su hijo mayor, de Jorán su segundo hijo, de Ocozías su nieto, y aún después de
muerta mediante Atalía su hija, la madre del segundo Ocozías, que llegó a gobernar durante

64
65
Entre los famosos arquetipos de Jung, aparece el de la madre terrible. Ver www.jung.com.
66
Génesis 25:19-26.
67
Apocalipsis 2:20

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seis años el país. Durante todo ese período no hubo paz ni en Israel ni en Judá a causa de
las maquinaciones de Jezabel, como bien lo describió Jehú:

¿Cómo puede haber paz mientras haya tantas idolatrías y hechicerías de tu madre
Jezabel? (II Reyes 9:22, NVI)

Seguramente la historia ha conocido de otras madres que a través del ejercicio de la


astucia, la seducción, el engaño, la manipulación han logrado ejercer dominio sobre
familias, comunidades, sociedades enteras, naciones y hasta continentes, usando una forma
de control que atrapa, aprisiona, devora y castra a las figuras masculinas principalmente del
esposo y los hijo varones. Igualmente propaga su espíritu en las mujeres a su alrededor
como en el caso de las hijas y yernas.

Madre Dama

cr
ea
tiv
id
ad ce
an
r om
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ici pu
re
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Defensora Doncella

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