= ANTONIO PASQUALI =

(1929-)

Antonio Pasquali nació en Venezuela en el año de 1929. Estudió filosofía e inició la

docencia en la facultad de Humanidades de Venezuela en donde orientó sus
investigaciones hacia el fenómeno de la comunicación y los medios. Está considerado
como uno de los introductores en América Latina del pensamiento comunicacional que
subyace en la mayoría de los teóricos de la Escuela de Francfort. Fue exsubdirector
general de la UNESCO para el sector de la Comunicación. En 1976 presidió la comisión
encargada de definir la nueva política de radiodifusión de Venezuela y fue nombrado
presidente del Comité de Radio y Televisión del Consejo Nacional de Cultura.

Entre sus principales publicaciones están:

Comunicación y cultura de masas.

Para entender la comunicación.
El aparato Singular.

En cuanto a su pensamiento puedo decir que una de sus principales aportaciones

es que considera que el tipo y nivel de cultura que exhiben los grupos sociales está en
función de sus medios de comunicación, según una relación tanto más causal cuando
más subdesarrollada sea la cultura en cuestión.

Para entender lo anterior hay que conocer su ideología con respecto a la

comunicación y los medios, de tal forma que a continuación presentaré algunas
definiciones esenciales para comprender la tendencia de Pasquali.

Antes que nada hay que empezar por la concepción que Pasquali tiene de
comunicación, de esta forma la define como aquella que produce una interacción
biunívoca del tipo del con-saber, que sólo es posible cuando entre los dos polos de la
estructura relacional (T-R) rige una ley de bivalencia, es decir, que el transmisor puede
ser receptor y el receptor a su vez transmisor. Dentro de esta definición se incluye el fin u
objetivo mutuo de entenderse, es decir, aparece la condición básica e insuprimible para
que exista la comunicación: diálogo

Antonio Pasquali hace una notable diferencia entre comunicación e información,

considerando a esta última como aquella que sugiere la presencia de un polo receptor
constituido por un intérprete racional. De esta definición de información nace una nueva
de comunicación que debe aunársela a la ya antes citada; de esta forma la comunicación
es el intercambio de mensajes con posibilidad de retorno no mecánico entre polos
igualmente dotados del máximo coeficiente de comunicabilidad (R-T).

De la gran distinción que hace Pasquali entre información y comunicación nace su

modelo.
 COMUNICACIÓN

TRANSMISOR RECEPTOR
medios de comunicación
T-R T-R
DIÁLOGO

INFORMACIÓN

medios de comunicación
TRNASMISOR (RECEPTOR)
T-(R) ALOCUCIÓN (T)- R

Asimismo Pasquali hace una diferenciación entre medios de comunicación y

medios de comunicación audiovisual, de tal forma que define a los medios de
comunicación como los canales artificiales empleados para vehicular lenguajes. De este
modo los medios de comunicación audiovisuales son los canales artificiales de
intercomunicación que sólo pueden vehicular signos icónicos o acústicos directamente
interpretables, es decir, la comunicación audiovisual hace referencia al uso de medios
apropiados para el envío de mensajes auditivos y visuales. Los medios audiovisuales de
comunicación masiva son la radio, el cine y la televisión.

También define medios de masas y de masa los cuales se deben debido al

predominio de la unilateralidad comunicacional, es decir información, que determina una
masificación de los receptores. Esto quiere decir que el transmisor se dirige a n-
receptores, una para todas, esto es, tiende a uniformar alienar y masificar. De esta forma
sólo la relación de información admite, pues, el uso de la expresión medios de masas.

De este modo surge el término medios de información de masas, que serán los
canales artificiales de comunicación cuando vehiculan unilateralmente alocuciones o
mensajes de tipo ómnibus, que se puede entender como impersonal en sus contenidos, lo
que genera en términos de Pasquali mediocridad de contenidos que no tiene nada que
ver con la objetividad.

Debido a lo anterior dice Pasquali que la expresión medios de comunicación de

masas contiene una gran contradicción puesto que no hay relación de comunicación que
masifique. De esta forma por masa ha de entenderse la totalidad social receptora de
mensajes ómnibus, es decir, la estructura social tipificada por un predominio de la
información sobre la comunicación en sus esquemas transmisores del saber.
 De lo anterior surge la expresión cultura de masas que es entendida como el
residuo de los mensajes ómnibus, es decir, es la sedimentación de formas del saber,
patrones de conducta, ideologías y motivaciones, depositados en la conciencia del
hombre-masa, y sus vehículos son los de tipo ómnibus: prensa, radio y televisión.

Finalmente en cuanto a su teoría, Pasquali llega a la conclusión de que la

información de tipo audiovisual es la más irracional e irracionalizadora, ya que no se dirige
al receptor como ente y por eso diversificado, sino al receptor – masa y a sus aglutinantes
irracionales: lo instintivo, lo afectivo, lo inconsciente colectivo etc.

De esta forma vuelve a su tesis con la que inicia su libro Comunicación y cultura
de masas, la cual dice que en los países culturalmente subdesarrollados hay un
predominio real de medios audiovisuales, por lo tanto tales sociedades subdesarrolladas
son las más esclavizadas y masificadas del mundo.

De este modo, con base en todo lo anterior aplica lo ya antes citado en el caso de
Venezuela, para que surja una ley que realmente obedezca los intereses reales de la
cultura.

REFERENCIAS

Pasquali Antonio. Comunicación y cultura de masas. Monte Ávila Latinoamericana,

 Antonio Pasquali: simple y contundente visión sobre la
actual situación de la comunicación
Venezuela, 1980.
http://www.infoamerica.org/teoria/pasquali1.htm

Antonio Pasquali

Entrevista concedida al
Boletín Compacto producido por la UPSA
durante el VI Congreso ALAIC

Hombre del pensamiento y del hacer, hombre que define las relaciones
Humanas cara a cara por sobre todas las cosas. Pensador, investigador
Formado en Filosofía, representante del pensamiento latinoamericano en
Comunicación; esas y otras tantas cualidades podrían estar ayudando a definir
La figura que el profesor Antonio Pasquali representa para el área.
Durante el transcurso del VI Congreso Latinoamericano de Investigadores de la
Comunicación, que tuvo lugar en la ciudad de Santa Cruz de la Sierra, Bolivia,
El profesor no perdió la oportunidad de continuar haciendo lo que más gusta:
Dialogar; fue así como aceptó ser entrevistado por periodistas de la ciudad
Anfitriona del evento.
Durante el diálogo el Profesor Pasqualli evaluó el estado actual de la
comunicación en el contexto del proceso de globalización, así frente a la pregunta.

¿Considera que existe actualmente un espacio de comunicación que no

esté supeditado al mercado global? El profesor afirmó:
“Sí, el único verdadero es el diálogo interpersonal y todos sus adyacentes,
digamos, todo lo que pudiera reemplazar o parecerse al diálogo. Lo que
sucede es que la recepción de informaciones es de tal magnitud hoy día
que ha restado progresivamente espacio a la interpersonalidad, al
verdadero diálogo. Hablamos cada vez menos. Esto está súper estudiado.
Por ejemplo, la familia, que tiene su relación con una pantallita, pero que
entre sí ya no habla.
Incluso la misma relación, si uno conversa mucho con una persona por
internet, luego la ve, a nivel físico, y ya no hay la misma relación que
existía por la red, son dos mundos paralelos (...) el arte del diálogo se está
perdiendo.

Entrando al terreno de la evaluación del contexto de la comunicación

desde el punto de vista teórico los periodistas preguntaron ¿ qué teorías
de la comunicación están vigentes en este nuevo siglo y cuáles han
entrado en decadencia?; Pasquali expresó: “ Todas están vigentes de una
u otra manera. Hay funcionalismo, hay estructuralismo, hay socialismo,
hasta hay comunismo. Todo!, es decir, todo el mundo pelea por conquistar
un espacio. Vamos a exponer el caso latinoamericano de cierta
importancia: ahora se está creando con mucha fuerza un grupo de
economía política de la comunicación. Por supuesto, ahí hay varios
marxistas; hay gente básicamente de izquierda, pero hay un capítulo
esencial. Y por ahí los grupos se hacen, se forman, se deshacen, van y
 vienen, pero se mueven ante un sistema que intenta o intentaría asfixiar
todas las concepciones de ese problema. La consigna del sistema
mediático es “no pienses en mí, digiéreme, consúmeme, pero no pienses
en mí”.

Para dar cierre a su análisis sobre el actual estado de las teorías

comunicacionales se le preguntó al profesor: ¿Cuáles son las nuevas
teorías que se vislumbran en estos momentos en el campo de la
comunicación? Al respecto y dando una visión prospectiva el profesor
Pasquali afirmó: “no se avizora ninguna. Hoy en día hay mucho menos
investigación y de menos impacto que hace treinta años. Aquí y en todas
partes. El hecho de que todas, excluyendo a mi persona, cuando se quiere
reunir a gente que piensa comunicaciones, la edad sube vertiginosamente;
ya pasa lo mismo en Francia, en Inglaterra; pero no sólo pasa eso en el
área de comunicaciones.

De esta manera el profesor dejó abierto el diálogo para una posterior

oportunidad; oportunidad siempre segura cuando el diálogo es su razón de
ser.

PENSAMIENTO Y EXPRESIÓN CIENTÍFICA DE

PASQUALI
El ser humano desarrolla la capacidad de comunicar en grado máximo, como
instrumento de interacción, de descubrimiento de la presencia del ‘otro’, de
‘con-saber’, de saber con alguien. La comunicación así entendida es
bivalente, de modo que quien transmite puede recibir y quien recibe debe
poder transmitir. Hay en ello un carácter dialógico, que se da entre individuos
con autonomía ética.

La comunicación supone un intercambio dialéctico de mensajes, en la que los

polos dialogantes pueden hacer reversible la dirección del flujo y poseen una
simetría basada en la posesión del máximo ‘coeficiente de comunicabilidad’,
que es el que distingue la comunicación humana de otras formas de
comunicación con bajos coeficientes.

Pasquali diferencia la comunicación de la información, siendo esta última un

proceso de transmisión asimétrica, donde los mensajes emitidos carecen de
retornos no mecánicos, esto es, con bajo coeficiente de comunicabilidad. El
diálogo se sustituye aquí por la alocución, por el camino unidireccional y sin
retorno del mensaje.

En coherencia con todo ello, propone sustituir el concepto de ‘teoría de la

comunicación’ por el ‘teoría de la información’, con una clara distinción entre
las vertientes cibernética y antropológica del denominador teórico o
conceptual. Para Pasquali, la teoría matemática de la información cobra
sentido cuando se reconoce entidad cognitiva al receptor.

Pasquali afirma que en realidad no es correcta la denominación de medios de

comunicación de masas, porque no hay en el proceso que describen
bivalencia, simetría, diálogo. Se trata de medios de información, con un
coeficiente de comunicabilidad bajo. Los medios no sólo cosifican al receptor,
sino que producen sobre él un efecto paralizante, ya que le restringen su
posibilidad real de la comunicación, su capacidad de intervención.

Entre los medios y la sociedad se da una relación de mutua ‘inmanencia

dialéctica’, resultando que el nivel cultural de una sociedad dada está
relacionado con el papel que juegan los medios, de modo que cuando el nivel
cultural es más bajo el efecto de aquellos sobre la sociedad resulta mayor. E
insiste en que no se puede suplantar el fenómeno antropológico de la
comunicación por el espacio de los medios, ya que se trata de una ‘aberrante
reducción’.

En muchos aspectos, especialmente en su concepción de las ‘industrias

culturales’, su crítica a la prevalencia mercantil en los procesos mediáticos, la
crítica a las doctrinas funcionalistas norteamericanas, etc., el pensamiento de
Pasquali está relacionado con la Escuela de Francfort, pero, no obstante, al
trazar sus argumentos desde la realidad latinoamericana, incorpora las
nociones de dependencia, aboga por el desarrollo de políticas nacionales,
cree en el uso de los medios como instrumentos de modernización y
proyección pedagógica, al tiempo que analiza, con criterios teóricos
innovadores, el fenómeno de la acción comunicativa desde vertientes
antropológicas, económicas, culturales y políticas.

Ya en sus primeros textos, en los años 60, Pasquali hace aproximaciones a

un análisis crítico del emisor, por entender que sus intereses, sus
vinculaciones económicas, su ubicación en las estructuras de poder
condicionan el mensaje transmitido. Sin duda, una pauta y precedente para
muchos de los análisis económicos del sistema de medios en América Latina
de la siguiente década. Orienta sus investigaciones hacia el estudio de los
medios audiovisuales y relaciona su propiedad y los intereses de los emisores
con la producción de contenidos, de modo que esa relación mercantil aparece
como una fuerza paralizante de la innovación social y de la creatividad
cultural. Para evitar esos efectos perversos, propone el desarrollo de políticas
activas que eviten que el contenido de los medios afecte los procesos de
modernización y progreso social y que, en todo caso, se antepongan los
intereses sociales a los de los "mercaderes en el templo". Televisión y cine
deben adquirir un cierto carácter pedagógico, especialmente en las naciones
sometidas a dependencias económicas y con retardos en el desarrollo
cultural.

Adscrito al grupo de académicos en torno a los cuales se discurre el llamado

'pensamiento latinoamericano de la comunicación', su recorrido teórico es de
los que mayor personalidad propia tiene y conecta, en gran parte de su obra,
con las corrientes internacionales del pensamiento crítico comunicacional de
la segunda mitad del siglo XX.

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