término para rocas formadas en la Luna. Las misiones Apolo de Estados
Unidos de América y el programa Lunik de la Unión Soviética recolectaron in situ diversas rocas lunares y muestras de estas. Durante las seis expediciones Apolo que alunizaron se recogieron 2415 muestras de peso total de 382 kg. La mayoría recogidas por las misiones Apolo 15, Apolo 16 y Apolo 17, entre las tres, un total de 283 kg de muestras. Las muestras de roca lunar se recogieron mediante el uso de diferentes herramientas, incluyendo martillos, rastrillos, palas, etc. La mayoría fueron fotografiadas antes de ser recogidas para registrar las condiciones naturales en que se encontraban en la Luna. Se depositaron en bolsas de muestras y éstas en "contenedores de muestras en ambientes especiales" para su regreso a la Tierra, de forma que quedaran protegidas de la contaminación. En general, las rocas recogidas en la Luna son mucho más viejas que las que se pueden encontrar en la Tierra, según las técnicas de datación radiométrica. La muestra más reciente es más antigua que las más antiguas rocas localizadas en la Tierra. Las muestras datan de entre hace 3200 millones de años, caso de las muestras de basalto de los mares lunares hasta hace 4600 millones de años, caso de las muestras de zonas altas. Son por lo tanto muestras de un período muy temprano en la formación del Sistema Solar. Las rocas poseen características muy similares a las rocas de la Tierra, especialmente en cuanto a la cantidad de isótopos de oxígeno. Pero las rocas de la Luna tienden a ser relativamente bajas en hierro, y no contienen elementos químicos volátiles tales como potasio y sodio. Además, carecen absolutamente de agua.
Entre los minerales encontrados en la Luna está Misión Muestra
la armalcolita, bautizada en honor a los Lunar Recolectada tres astronautas de la misión histórica del Apolo Apolo 11 22 kg 11: Armstrong, Aldrin y Collins. Apolo 12 34 kg El principal almacén de rocas lunares es Apolo 14 43 kg el Laboratorio de Recepción Lunar del centro espacial Lyndon B. Johnson, en Houston. Por Apolo 15 77 kg motivos de seguridad, existe también una colección Apolo 16 95 kg menor en la base de la Fuerza Aérea Brooks en San Antonio. La mayoría de las rocas se guardan bajo Apolo 17 111 kg frío extremo, en nitrógeno líquido, para así Luna 16 101 g mantenerlas libres de la humedad o de otros agentes Luna 20 55 g externos. Sólo se pueden manejar indirectamente utilizando herramientas especiales. Luna 24 170 g Suelo lunar es la fina fracción de regolito encontrada en la superficie de la Luna. Sus propiedades pueden diferir significativamente de la superficie terrestre. Las propiedades físicas de la superficie lunar son básicamente el resultado de la desintegración mecánica de rocas basálticas y anortosita, causada por continuos impactos de meteoros y el bombardeo interestelar de partículas atómicas cargadas durante millones de años. El proceso es, en gran medida, de meteorización mecánica en la cual las partículas se vuelven cada vez más finas con el paso del tiempo. Esta situación contrasta radicalmente con la formación de la superficie terrestre, la que es mediada por la presencia de oxígeno molecular, humedad, viento atmosférico, y una profunda influencia del proceso biológico desarrollado sobre la misma. Algunas personas han argumentado que el término "suelo" no es correcto en el caso de la superficie lunar, dado que en la tierra lo que se comprende por "suelo" posee materia orgánica, elemento no presente en la Luna. De todas formas, el estándar de uso científico tiende a ignorar esta distinción. El término suelo lunar es frecuentemente usado indistintamente junto con el de "regolito lunar", sin embargo, éste generalmente refiere solo a la delgada capa de regolito, la que se compone de gránulos menores a un centímetro de diámetro. El término polvo lunar generalmente refiere a una consistencia de materiales aún más finos en comparación al presente en el suelo lunar. Aunque no hay una definición clara sobre el tamaño de las fracciones constituyentes del "polvo", se refiere en algunas fuentes diámetros menores a 50 micrómetros, y en ocasiones, a 10 micrómetros. Mineralogía y composición tipos de partículas, entre los que se encuentran fragmentos de roca, fragmentos monominerales y distintos tipos de vidrios, incluyendo partículas aglutinadas y gotas creadas por volcanes e impactos. Los aglutinados se forman por impactos de micrometeoritos en la superficie lunar, lo que funde y fusiona a pequeña escala materiales adyacentes con minúsculos fragmentos de hierro metálico. Este hierro se encuentra incrustado en la cáscara vidriosa de cada partícula de polvo. Con el paso del tiempo, los materiales del suelo se mezclan tanto en vertical como en horizontal (a través de un proceso denominado "jardinería") por los procesos ocurridos tras los impactos. Sin embargo, la contribución de material a gran distancia es relativamente menor en cantidad, por lo que la composición del suelo en un lugar reflejará mayoritariamente la composición de la base rocosa de ese lugar. Existen dos enormes diferencias entre la química del regolito lunar y la del suelo formado de materiales terrestres. Primeramente, la Luna cuenta con un ambiente extremadamente árido. Por ello, algunos materiales que cuentan con el agua como parte de su estructura, como son la arcilla, la mica y los anfíbol no existen en la Luna. La segunda diferencia es que el regolito lunar y su corteza se reducen por el proceso químico de reducción-oxidación, al contrario que la corteza terrestre, que principalmente sufre oxidación. En el caso específico del regolito lunar, esto ocurre, al menos en parte, por el bombardeo constante de Hidrógeno (H) proveniente del viento solar que sufre la superficie lunar. Una consecuencia de esto es que el hierro presente en la Luna se encuentra en el estado metálico 0 y en el de oxidación +2, mientras que en la Tierra se encuentra principalmente en los estados de oxidación +2 y +3.
Propiedades del suelo lunar
La importancia de obtener conocimientos sobre las propiedades del suelo lunar es significativa. El potencial para construir estructuras,2 sistemas de transporte por tierra y sistemas de gestión de residuos, por poner algunos ejemplos, dependerá de los datos obtenidos de la experimentación con muestras de suelo lunar. La capacidad de soporte de peso del terreno es un parámetro vital en el diseño de dichas estructuras en la Tierra. Debido a la infinidad de impactos de meteoritos (con velocidades alrededor de 20 km/s), la superficie lunar está cubierta con una fina capa de polvo. Este polvo está cargado eléctricamente, y se pega a la superficie de lo que toca. El suelo se vuelve muy denso debajo de la capa superior de regolito. Otros factores que pueden afectar las propiedades del suelo lunar incluyen análisis térmicos diferenciales de temperatura, la presencia de vacío, y la ausencia de un campo magnético significativo en la Luna (lo que permite a las partículas cargadas del viento solar chocar continuamente con la superficie de la Luna). Una fuerza gravitatoria menor y la ausencia de presión atmosférica son factores adicionales que afectarán al diseño de las estructuras en la superficie de la Luna