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Rectorado
Dirección de Investigaciones y Postgrado
Coordinación - Centro Local Lara
Para controlar la inflación, el Estado toma medidas, que pueden agravar más la
situación, aplica control de precios, control de cambios, cayendo la producción de los
productos controlados, lo que genera escasez, acaparamiento, corrupción, inestabilidad
e indefinición política y económica, que conlleva a graves problemas sociales y
políticos, como en los que está inmersa la sociedad venezolana en la actualidad. Aunque
además de las causas anteriores, hay que agregar la hiperinflación inducida por Dólar
Today, el bloqueo económico y las sanciones genocidas imperiales.
Por otra parte, la caída de los precios del petróleo, hace que caiga el ingreso y
disminuya la inversión pública y privada, decrece el producto interno bruto (PIB), el
parque industrial no puede ser actualizado y cae en obsolescencia, lo que causa la caída
de la productividad y del salario real.
Estudios reseñados por Herrera (2002) sobre la realidad de los diferentes niveles
de la educación para el año 2000, destacan que en Venezuela la tasa neta escolaridad en
la educación media era de un 35%, la inversión en los niveles prescolar, básica y media
apenas alcanzaba el 45% del total del presupuesto educativo, un 40% de los recursos
eran destinados a subsidios de institutos privados; el índice de repitencia estaba entre el
40 y el 60 por ciento en séptimo grado; de cada 100 niños que comenzaban en primer
grado egresaban menos del 35% en noveno grado, “considerando que dentro de las
múltiples causas de este problema se encuentra el hecho de que los niños abandonan la
escuela porque deben incorporarse tempranamente al trabajo, como estrategia familiar
para sobrevivir” (Herrera, 2002, p. 13).
Las universidades privadas reciben subsidios del Estado, pero son selectivas en
la admisión de sus estudiantes, sin embargo no se les puede suspender los subsidios
porque hay instituciones importantes que retribuyen dicho aporte con programas
sociales. No obstante se realiza la evaluación de las instituciones privadas para saber
cuáles justifican los aportes recibidos.
Por medio del análisis de la ética como expresión social, es decir por medio del
análisis de la conducta y del estereotipo poblacional, se puede explicar la
correspondencia que existe entre los elementos macroeconómicos, políticos y culturales
y el comportamiento individual, social e institucional. Se muestra así que en la sociedad
la economía, la política y la educación tienen entre sí una relación de dependencia y
condicionamiento que los constituye como factores determinantes de la ética, “que
además de imagen, es un elemento determinante de pertenencia grupal y a su vez, que
propende a reproducir el estereotipo y la conducta que socialmente se reconoce como
connacional.” (Gutiérrez, 2017, p. 2) y por esto la ética y la educación constituyen un
mecanismo auto génico de reproducción dirigido a lograr la perpetuidad de la sociedad.
¿Las universidades nacionales tienen conciencia del peligro que para el desarrollo
nacional y la consolidación de la nación venezolana representa el viejo esquema
epistémico?
¿Es suficiente responder a las limitadas aspiraciones del venezolano y de su
mercado laboral para definir la pertinencia social de las universidades?
¿Acaso no existe clara evidencia de la dicotomía entre la sociedad que se necesita y
las instituciones de educación superior que plantean la sociedad que quieren?
¿Las universidades repiten y hacen, lo que "saben y siempre han hecho"?
¿Las universidades, se consideran dueñas de la "verdad"?
Para que Venezuela pueda competir efectiva y eficientemente en el campo del
desarrollo socioeconómico y propenda a convertirse en un país de primer orden,
¿Acaso su líderes en lo educativo, político y económico, no requiere realmente
reducir su dogmatismo, el fundamentalismo doctrinario, la presunción de sabiduría,
así como, cambiar su actitud arrogante y presuntuosa en relación con la gestión del
conocimiento? (Gutiérrez, 2007, p. 25).