Вы находитесь на странице: 1из 156

ISTA DE MUSIÓ,

Año VI - N." 59 - Noviembre - 450 ptas.

ANTONIO VIVALDI

CARECÍ MARÍA GIULINI

HELMUTH RILLING

GAD
DISC
CLASSICS

V.Llsi,'wirii m u í a l i t ' i i H i ü i i i i . i I I I I I U I L L I |>>


i l nt-ii-sim di- mat-siri» ik'l V;iK V II

' %4>§ msíl Ala hora de regalar


MARCHAS
drandes
Plnu9Kj| ideas libre
NO SH Ql'K REGALARl.F.
YATIKNHIM'TOIX)."
s i:Lkrcrnitnufc-« cu m u I.S l!ltR-ll (.-tlilVlllill'Sl- -I lil l k - l l M l ' l l i k 1 f l ) (|Hfll
L|UI-- rc^ojic :t ION Tiüi-* ^ biui LUU un l'ik'ii ivtwiii, IILTO liui.un iriifti lacil
y que sien*ri' >Ui hu
CIIIMÍ y e l i s i o Si' Í»
Rmi le «frece l.i iin.¡iir y más conevida m
clásica, i-iin los mejores autores 1' iniírprrtí
6 a'iiipikkiunes únicas qut ahora puinlís adin
USICA DE CINE
repule i|«e Ifíiúi-. jvn^Mii). jui-ii'»» «fl «Mili
muí h:i« u l t ü - l i l ' i f » ínfula-. |i;tra ¡nviiar rt'g

\pii. jlipsis Ni,™. Pialimn. Allíti. AlraiTuin


tumi, l-.li ira Madjjiiin, Kxi-jtihur. i-ti. U^
¿¡Tjiidi:\ pc1íi-ul;i> df íu* uli IIIII^ ncnipi>v tijn
fus *.Limpu<iih>rL'\ nui\ ¡ni|t^il.ihk's dt- l.i

üvapooL

»""ii lo-* curios HUÍ* 4 ( JN11 k jssOlICs L V I I l


v'l>m>LILlii Je Lt I1IIMLJ Mil .iiliii'\ L'II el iininLli 1 ik'i
1-|,ISIII> K l t l U- k . H K l U . l . S.llll
I i 111 I ; Í - — _ li-iij ll.iilk'1. Will.iu
Edita
SCHERZO EDITORIAL S A
GMarqués de Mondéiar, 11 - 2." D
28028-Madrvd.
Tcléf (91)356 76 22
Fax (91)256 1864
Presidente de honor
Gerardo Queipo de Llano
Presidente-
losé María Queipo de Uano
Director
Antonio Moral
Director Adjunto
Javier Alfaya
Redactor Jefe
Ennque Martínez Mura
Edmión y maqueta:
Arantza Quintamlla A ñ o VI - n.° 59 - Noviembre 1991 - 450 ptas.
Conse/o de Redacción
Javier Alfaya, Roberto Andrade íialde, Domingo del
Campo Caslel, Santiago MartJn Bermúdez. Antonio
Moral, José Luis Pérez de Arteaga, Arturo Reverter, OPINIÓN 4
José Luis T í Hez.
TRIBUNA LIBRE:
Secoones'
Redacción en Barcelona- Albert VNardell Redacción en - Un Don Juan ruso y romántico, Juan Eduardo Zúñiga 6
Valencia: Blas Cortés Actualidad: Javier Alfaya y Enn-
que Martinez Miura Discos: Ennque Pérez Adrián. Alio
ACTUALIDAD 8
fidelidad: Alfredo Orozco.Jozz 1 Ebbe Traberg. Música - El legado de Karajan. Las Sinfonías de Beethovenjosé Luis
contemporáneo. Manel Rodero. Educación musical- Víc-
tor Pliego. Danza |esús Castañar. Pérez de Arteaga 40
Colaboran en este rudera 1 ENTREVISTA:
Ana María APberdi Alonso, Javier Alfaya, Roberto
Andrade Malde, Joaquín Amau Amo, Ricardo Bada. - Cario Maria Giulini, el misterio de la dirección, Roberto Andrade
Alfredo Brotáns Muñoz. Ricardo de Cala. Domingo Malde 45
del Campo Castel. Luis Femando Carvajal SJázquez,
Eduardo Casanueva Pedraja, Isabel Cavallim, Blas Cor- ACTUALIDAD DISCOGRAFICA 67
tés. Pedro Elias, Antonio femandez-Cid, Maunco Fer-
nández Ordófiez, Manuel García Franco, Rafael Gon- REFERENCIAS:
zález d e Lara, Angeles d e fuan, Paz Juan, Kenneth
Loveland. Sylvie Mamy. Francesc X Mata, Blas Mata- - Los hugonotes, Femando Fraga 70
moro, Ángel F. Mayo, Santiago Martin Bermúdez, DISCOS 71
Nadir Madnles, Manuel Martín Galán, Joaquín Martín
de Sagan-ninaga. Ennque Martínez Miura, Ennque ESTUDIOS DISCOGRAFICOS:
Moya, Rafael Ortega Basagcrti. Alfredo Orozco Buezo.
Vidal Peña. Ennque Pérez Adnán. José Luis Pérez de - A vueltas con el barroco, Domingo del Campo 93
Arteaga, Arturo Reverter, Manel Rodeiro. Clemens - Un instrumento vocal, Femando Fraga 94
Romijn, Andrés Ruiz Tarazona. Jeffrey C Smith, Luis
Suñén, Stefano Toffolo. Pilar Tomás, Ebbe Tra6e>E, - Música de Polonia, Enrique Martínez Miura 96
José Luis Vidal, Albert Vilardell, Juan Eduardo Zúñiga.
- Infrecuentes italianos, 8/os Matamoro 97
Coordinan el Dosier de este número:
Pilar Tomás y Ennque Martínez Miura - Cuestión de estilo: la perfección decadente, Pedro Elias 98
Diserto de periodo. - Cuestión de estilo: la retórica, Pedro Elias 99
Arquetipo
- Cosmología mozartiana, Arturo Reverter 100
Foto de perlada:
Siegfned Lautetwasser (Sony) - Beethoven-Hamoncourt, la polémica está servida, Enrique Pérez
Administración: Adrián 103
Cnstóbal Andújar (Contab^dad), Cnstna Millet {distn-
bución). Cnstma Pueria (suscripciones) ESTUDIO BIBLIOGRÁFICO:
Pubíiodad - Esencia de la armonía, Domingo del Campo 104
Doble Espacio
General Yague. 10 - 2B02O-Madrtd LA GUIA 106
Telefc. (91)555 67 6 7 - 5 9 7 I I 83 DOSIER: A N T O N I O VIVALDI 107
Fa» (91)556 1307
Impnme MARTE, S A
- Venecia en la época de Vivaldi, Manuel Martín Galán 108
Teléf. (51) ^72 84 00 - Compositor de ópera y empresario teatral, Sylvie Mamy I 13
Macón-posición LU MIMAR. S A - Vivaldi y el concierto, Sylvie Mamy I 18
Albasanz. -18-50 • 28037-Madnd.
Teléf (91)304 30 01 - Fax (91) 304 95 48 - Panorama del arsenal de instrumentos vivaldianos, Stefano Toffolo 123
Depósito legal M-41822-1985 - Las transcripciones, Clemens Romijn 130
IS5N-O213-4802
SCHERZO es una publicación de carácter plural y rio
ENCUENTROS:
pertenece ni está adscrita a ningún organismo público - Helmuth Rilling: «La música debe hablar», Ricardo Bada 134
ni pnvado. La dirección respeta la libertad de expre-
sión de sus colaboradores- Los textos firmados son de DANZA:
exclusiva responsabilidad de toa firmantes, no siendo
por- tanto opinión oficial de la revista. - Ring um der Ring, Ángel Femando Mayo 138
MÚSICA CONTEMPORÁNEA:
PRECIOS 0E SCHERZO EN ESPAÑA 4.500 PTAS.
PRECIOS DE SCHERZO EN EL EXTRANJERO:
- Festival de Alicante, atentos a lo nuevo, Alone/ Rodeiro 143
EUROPA. Via terrestre 6 000 Pías. - Harry Halbreich, la crítica viva, Manel Rodeiro 144
Avión, s.000 Ptas.
AMERICA Via marítima. 7 000 Ptas. ALTA FIDELIDAD:
Avión: 14.000 Pías - Mercury en CD, Alfredo Orozco 146
FRANCIA- 30 FF, ITALIA" 6.000 L.
PORTUGAL' 700 ESC USA: Tí. JAZZ:
MOTA; Los envíos por certificado tendrán un iscar-
po de 1.000 Plas/ano sobre el precio de la suscrip- - Episodios, Ebbe Traberg 151
ción
EFEMÉRIDES, Luis Femando Carvajal Vázquez 154

SCHERZO 3
OPINIÓN

De fútbol y revistas
i gobierno español acaba de conceder una dedicó a proteger o la poesía, con algunos resultados
sustancioso subvención o tos clubes de estimables: la obra de Horacio, por ejemplo. Desde
fútbol españoles, aquejados de déficit entonces raro es el período histórico en que poetas,
crónicos, motivados en gran medida por músicos, pintores o escultores han podido vivir y producir
su deficiente administración económica, sin que alguien -Estado, iglesias, particulares neos-
Sincrónicamente el gobierno ha retirado las subvenciones hayan contribuido a su mantenimiento.
a las revistas culturales que se editan en el país, cuyo Pero es que hay además otro aspecto que conviene
monto era algo asi como cuatrocientos millones de poner de relieve y es que, en efecto, en países con una
pesetas, es decir una cantidad que ronda el ndículo. en adecuada infraestructura cultural no hace falta
especial en comparación con lo que se da a fondo subvencionar a las revistas literarias, musicales o
perdido a un deporte que maneja cantidades artísticas. Es evidente que cuando existe una buena red
astronómicos de dinero como es el fútbol. Pocos casos de bibliotecas y de hemerotecas, cuando conservatorios,
como éste son ton reveladores de ios opciones culturales centros de enseñanza media y universitana,
del poder político. La cultura sigue siendo la Cenicienta instituciones dedicadas a la difusión de la culturo fuera
de la democracia española. La bambolla sigue ocupando del país, etc. están dotadas con medios económicos
el lugar de uno política cultural seria, como se ha visto adecuados, el Estado no tiene por qué subvencionar
bien recientemente en una ocasión tan señalada como la directamente a ningún tipo de publicaciones. Pero,
Fena del Libro de Frankfurt, otro foro internacional para desdichadamente, esa infraestructura no existe en
la cultura desaprovechado por la chapucería, el España, o al menos padece de enormes insuficiencias
sectansmo y una propensión notable al mal gusto, que la incapacitan para absorber una buena parte de
Pero volvamos a las subvenciones. El hecho es grave y la producción de unos medios que están dedicados a
sus consecuencias van a dejar desarboladas a unas difundir información y opinión sobre la cultura. Y esa
cuantas de las pub/icaciones culturales más relevantes inexistencia o esas deficiencias no parece que estén en
del país. Y más cuando esa liquidación de la ayuda vías de resolverse.
económica se hace con efecto retroactivo, al condonar
umlateralmente la administración ios deudos que tenía Volver o quejarse de que recortes presupuestónos como
ella misma con el sector Que a nadie le extrañe que a éstos que dejan, sin un duro a un sector frágil como lo es
partir de ahora empiecen a desaparecer revistos el de los revistos culturales, decir que el ahorro que ello
culturales en España. ¿Una consecuencia natural de una reporta es el chocolate del loro, etc., no es en ei fondo
política económica que se guía únicamente por tos más que repetir una cantilena que o nadie parece
movimientos del mercado? Eso aducirán, al menos, tos afectarle. Sin embargo es nuestro único arma. Pero
dogmáticos del neo-liberalismo, tos que afirman que si mientras los poderes públicos no asuman el hecho de
algo no es rentable hay que eliminarlo sin más. A esos que, como decían nuestros abuelos mstitucionistas, sólo
habría que recordaríes que en pocas épocas de ia un país culto es un país libre, seguirá prestando oídos
h/stono la gran cultura se ha podido sostener por si sordos a cualquier demanda. Por tanto no queda más
misma. Mecenas fue un aristócrata romano que se opción que esperar un milagro. Pero en milagros no creen
más que los ilusos.

4SCHERZO
OPINIÓN

FN MI MENOR DISPARATE MUSICAL

Trampa, trampa Toma detergente


A
similada la postmodermdad
-miremos el pensamiento

N
o sé si alguna vez les he conta- programas musicales estaban sufriendo
acritico que nos rodea o el do algo de la música en las
nuevo edificio de la National Gallery en la caja tonta, pública o privada?
en Londres, según seamos español bodas. Las bodas son una oca- Pues vamos progresando, miren por
sentado o adiós España quería muy sión particularmente proclive al des- dónde. Ahora les ha dado por la hora
dentro del alma te llevo metía-, enca- pliegue de la horterada, y ia música, del desayuno tempranero, o sea, que
rrilada sin etiqueta en la vía del gusto cómo no, se encuentra en la primera para ver la música por la pantallita hay
-recordemos: el cliente siempre tiene línea de tales acontecimientos. que ser como las cabras de Juan Serra-
razón- la ruta hacia el fin del siglo Recuerdo que cierto organista me rela- no, que se acuestan tarde y se levan-
parece a casi ocho años del aconteno- taba, no mucho tiempo ha, las peculia- tan temprano. Digo yo que como se
miento más limpia y aburrida que res peticiones de los candidatos a copian unos a otros, podía ocum'rsele
nunca. Los peones camineros han matrimonio, que incluían cosas tan a algún sesudo programad o r lo de dar
quemado los modestos rastrojos de chuscas como la Novena de Beethoven, alguna cosa interesante a una hora
las cunetas y los baches se han tapado, la Marcha Nupcial de Hándel (?) y otras prudente, a ver s¡ con la actual tenden-
como las trampas, con lo que de delicias por el estilo. No obstante, la cia de cuto veo culo quiero, va y cunde
momento puede parecer firme lustro- obra que se ha convertido en el buque el ejemplo. De momento seguimos
so. La creación, muestra nos dijeron insignia del repertorio casamentero es desloándonos velozmente, cual fórmu-
del espíritu frente al mundo, su tiempo la Marcha Nupcial del Sueño de una la I, por la empinada cuesta abajo de
y su sí mismo, transita, pues, con la feli- noche de verano de Mendelssohn, que la vulgaridad, cuando no de la hortera-
cidad de lo bien hecho, con la el mencionado organista se negaba, da campante. El otro día no sé qué
conciencia tranquila de quien ha deci- con razón, a tocar. Porque es el caso comentarista anunciaba que la próxima
dido no molestar. que a algún sesudo publicista se le ocu- pieza de Pavarotti en el recital era
La consigna es, como sucede en rrió cierto slogan, que a buen seguro Vestí la lluvia (y llover ya llovía, ya), y el
estos casos, el vale todo. Siempre y muchos recordarán, que rezaba Cose debut de Hermida en la pnvada empe-
cuando el todo responda a los esque- su ropo con Persil. Y como la cosa se zó poniendo por los cuernos de la
mas de una comodidad beata. La caía de su peso, le puso la música de luna al infausto Waldo de los Ríos y su
honradez se salva, por cierto, ense- Mendelssohn y (cántenlo, por favor) la composición (?) de la 40 de Mozart El
ñando las claves, las referencias, las cosa sonaba asi: Ca-se su ro-pa con daño que este sujeto de tan triste
cartas bien marcadas -todas del Per-sil. La desmrtificación había cuajado, recuerdo hizo al pobre Mozart y
mismo palo- y así nadie dirá que se y desde entonces, no puedo evitar, sobre todo al bueno de Beethoven no
engaña a alguien. Hasta que se irriten cada vez que asisto a una boda, la car- ha sido valorado en su justa medida,
los autores de manuales -privados de cajada en cuanto oigo a los novios pero baste decir que todo lo que vino
la posibilidad de dividir su ciencia por entrar con tan higiénicos y blancos después, Luisito incluido, no deja de
capítulos- o al consumir le parezca sones. La última vez, el otro día, el ser la nefasta herencia del individuo
todo tan lo mismo que le dé igual. soniquete lo tocó un virtuoso del saxo, en cuestión, cuyo nombre debería ser
Fanfarrias, Fantasías, Batallas que con lo que también recordaba a los borrado de la historia de la música
contrahacen la melodía vieja, Frag- payasos de Había una vez un circo. Ver- por alguien con mejor gusto que Her-
mentos que apelan a tristanescas daderamente aterrador. Wagner tam- mida, en adecuada prevención de
bellezas bajo la sombra de una mujer bién está en la nómina, con su marcha posibles epidemias futuras del germen
que no la tenía. Darmstadt una pato- nupcial de iofiengrin, y los graciosos de de la horterada (que parece resistente
chada -y, además, qué nos iba a con- turno le pusieron también una letra a todo y se multiplica con sorpren-
tar a nosotros ahora el sñor Nono, que reproduciéndola hasta donde es dente velocidad) cuyas proporciones
caído el objeto de sus afanes. Las decente, dice Ya se han casao, ya la pueden adquirir fácilmente caracteres
complejidades del durante una hora han... (el buen sentido del lector com- de catástrofe cultural. Y eso sin contar
venerado Cárter, son hoy un aburri- plete el resto, por favor). Total, que las con que a la Ministra de Asuntos
do misal. Cage, a lo que parece, nues- bodas y los detergentes son nefastos Sociales le dé por considerar cualquier
tro padre putativo. Stravinski o Ravel para la música. iniciativa de éstas de interés genero/ y
más listos que geniales: eso sí que era le otorgue la consiguiente posto ganso,
trabajar para la posteridad. porque entonces si que apaga y
Pongan sus barbas a remojo quie- No son mejores, antes al contrario, vamonos.
nes contemplan otras caídas. Ahí los intentos televisivos. ¿Se acuerdan de
están, por ejemplo, esas novelas que que recientemente les comenté de las
mostraban al mundo el hispánico de fiorterodos que wenen y del destierro a
los ochenta, traducidas y liquidadas. horas de perversión nocturna que los Rafael Ortega Basagoiti
Cuántos que iban a ser Faulkner se
han quedado sólo en ellos. Y cuántos
otros recordaran tiempos aquellos en
que encedían la vela a monsieur Bou-
lez. Y luego les parece mal el home- Fe de erratas
naje nacional al maestro Rodrigo. Más
quisieran, En nuestro anterior número, octubre 9 I, dos trabajos aparecieron sin firma.
Fueron: Todo el gran Mozart, pág. 19, debido a Franciso José Villalba, El fragmento
como unidad expresiva, págs. 132-135. debido a Fracisco Ramos.
Luis Suñén Nuestras disculpas a los colaboradores y a ios lectores.

SCHERZO 5
OPINIÓN

TRIBUNA UBRE

Un Donjuán ruso y romántico


A
l escuchar el aria de Leporeilo al rencia de los castigos sobrenaturales, y
comienzo de Don Govanni no es de una nueva actitud ante la mujer. Don
aventurado pensar en el gesto Giovanni es un levanta faldas que se
picaresco con que Mozart leería aquella mueve en una sociedad concebida por
ocurrencia del libreto escrito p o r D a hombres. Tipo vital, desaprensivo y sim-
Ponte. En este aria, como es sabido, se pático pero, a la par, es un hombre que
cuentan las conquistas de Don Juan, y conlleva lo antiguo: intenta violar a Ana,
para consolar a Elvira de que ella no es quiere seducir a una campesina infeliz,
ia única olvidada, el criado va enume- persigue a cuantas se le presentan, pero
rando a cuántas sedujo su amo: en Tur- tiene miedo cuando, en el cementen o,
quía a 9 1 , en Italia a 640, En España a oye la voz del comendador y en la última
1003, etc. Sueño de todo seductor que escena, el fuego infernal se lleva a un cre-
aspira a la cantidad, mas que a la inten- yente. En el libreto de Da Ponte (que se
sidad de sus encuentros galantes. subtitula II disso/uto punto. Opera buffa)
hay un moralismo latente pese al carác-
Este d i v e r t i d o catálogo trae a la ter festivo de los enredos y sorpresas.
memoria una lista de nombres femeni-
nos que escribió el poeta ruso Alejan- El Don Juan de Pushkin es un amante
dro Pushkin en uno de sus papeles ínti- romántico que busca el goce comparti-
mos. Sin duda fue como recordatorio do, no impuesto. Exalta el valor de los
en momentos de nostalgia. Una lista sentimientos / la ternura, y tiene nostal-
muy estudiada por los concienzudos gia de Inés, amante fallecida que no era
biógrafos rusos que asi identificaron a bella, pero sus ojos eran como él nunca
las mujeres que él amó. había visto, una mirada triste y una voz
Seguramente Pushkin se reiría oyen- dulce... El poeta ruso que había tenido
do a Leporello su retahila de seducidas muchas amantes deja constancia en
porque él habla escuchado y conocido Don Juan de que deben ser recorda-
la ópera mozartiana. Fue ésta estrenada das.A su vez, ellas no se sienten avasalla-
en 1787 y unos cuarenta años más das, acaso tan sólo por las palabras de
tarde Pushkin escribió una breve pieza amor, que son las de un gran poeta. Por
teatral que tituló £/ convidado de piedra. tanto, no era lógico que le castigara el
En ella se percibe una superación de los fuego eterno; Pushkin, como librepensa-
burladores de otros dramaturgos; es ya dor, hace que Don Juan muera por la
una creación del periodo romántico. dura mano de la muerte, la del comen-
dador, p e r o su p o s t r e r mirada y
En primer lugar, Pushkin no le dio a palabras están dedicadas a Doña Ana.
su héroe nombre italiano - l o que sí era
normal en época anterior por la hege- Las dos mujeres de esta obrita de
monía musical de Italia- sino que crea Pushkin son mujeres libres, dueñas de
un Don Juan español. Con ello anuncia si; Laura es actriz y canta para sus ami-
el interés de los románticos por el exo- gos y es capaz de apreciar un grato
tismo español. momento presente: se asoma al balcón
En la primera escena, D o n ]uan y atraída por la noche veraniega, por el
Leporello llegan a las puertas de Madnd; aroma de limones y laurel, bajo la luna,
vienen del exilio y aunque no se dice y piensa que lejos, en París, hará frío y
dónde fue éste, Don Juan se lamenta de lloverá y esa comparación le hace valo-
que allí las mujeres, tímidas, blancas y rar más aquella felicidad momentánea,
con ojos azules, eran como muñecas de Actitud vital que también se da en
cera y él se aburrió mucho. «La última Doña Ana cuando accede, casi enamora-
campesina de Andalucía no la cambiaba da, a una segunda cita con Don Juan aun
yo por la mejor balleza de allí» pero no sabiendo que es quien mató a su marido.
se sabe de qué país reniega Pushkin creó un nuevo tipo de burla-
Pero son palabras coherentes con dor consciente de la importancia del
poemas amorosos que Pushkin escribió amor mientras que sus homónimos se
-dos de ellos se incluyen en la escena hacen sospechosos de seducir para
II-, situados en España donde, según la dominar a la mujer, o para contarlo
fantasía romántica, las mujeres eran después {no olvidemos la escena de
arrebatadoras y ardientes. alarde sexual del Don Juan Tenorio de
Este Don Juan ruso-español parece Zorrilla). Por eso, este Don Juan de la
muy distinto de Don Giovanni; entre obrita teatral de Pushkin tiene un talan-
ellos hay una singular diferencia: el prime- te irónico, renovador y moderno.
ro es un representante de la progresiva
libertad erótica del siglo XIX y ia indife- Juan Eduardo Zúñiga

CÍSCHERZO
Madrid Rock

La nueva supertienda
Madrid Rock de Gran Vía, 25
le ofrece la mayor selección
de música clásica existente en
el mercado. En un ambiente
exclusivo e independiente.
Para satisfacer a los más
exigentes y encontrar lo que
no existe en ninguna otra
I tienda de clásico, por que
en Madrid Rock Clásico...
LO TENEMOS TODO.
PHILIPS

Gran Vía, 25
PI.A N Í A S O T A N O
ACTUALIDAD

Músico en Residencia
ecos de tantas voces guido que la música que salla de sus
ilustres, Celibidache dedos se comunicara a la orquesta.
estuvo a la altura de Como las preguntas no seguían un curso
su fama de deslengua- demasiado ordenado y a veces se hacían
do. Empezó, ya antes mezclas explosivas, alguien la preguntó
de sentarse, por lan- por Ansermet y Celibidache lo desahució
zar una andanada de inmediato como director de orquesta
contra uno de sus dis- aunque le reconoció cierto ménto como
cípulos -Eliahu Inbal—, teórico, bien que los aciertos que como
que no t o d o el tal tuvo fueron casuales. De paso deshau-
mundo captó pero ció a la ópera como género musical, pre-
provocó las primeras diciéndole un negro futuro e hizo incluso
risas cóniplices. Luego una parodia de la Obertura de Los Maes-
llegaron Jas preguntas. tros Cantores, golpeando con los pies la
Las hubo inteligentes madera de la tarima. Luego le tocó el
y las hubo de los que tumo a Gustav Mahler, «uno de los peo-
querían que el maes- res ignorantes de todos los tiempos», al
t r o se desmelenara. que reprochó hasta su conversión al cato-
Éstos no quedaron licismo. También se mostró mordaz con
defraudados. Anne Haendel, al que negó el pan y la sal de la
Sophie M u t t e r fue música, aunque se los concedió con
calificada, por ejem- munificencia a Bruckner. Afirmó que Béla
plo, de «gallina que Bartok era un genio, respondió con una
toca el violírt», aunque simple mirada significativa a un especta-
Herbert von Karajan dor que le preguntó su opinión acerca de
Sergiu Celibidadie
no quedó tan malpa- Prokofiev. se refirió al budismo Zen y a
Sergiu Cehbidache. c o m o César, rado como en otras ocasiones. Esta vez sus expe nene las gnósticas y echó sapos y
«Llegó, vio y venció», en la madrileña no dijo aquello de «Karajan la Coca- culebras contra las grabaciones fonográfi-
Residencia de Estudiantes. Pocos actos Cola». Reconoció el talento juvenil del cas y las multinacionales que las producen
culturales despertaron tantas expectativas director austríaco y se dolió de su poste- y difunden. Alguien le recordó que ahora
c o m o este c o l o q u i o del director de rior degradación. No estuvo tampoco hacía Láser Dísc, pero no se inmutó. Argü-
orquesta rumano, que se celebró en una muy ácido con Itzahk Perlman, del que yó que eso era puro espectáculo pero
lluviosa mañana de otoño. Un público contó que, hace muchos años, al dirigirlo quedó en el aire una cuestión: ¿Por qué
mayo ritan a mente entusiasta escuchó al en el Concierto para violln en sol mayor de Láser Disc, sí, y por qué discos, no? Tam-
maestro, que sentado en un sillón coloca- Prokofiev, con la Filarmónica de Israel, bién nos dijo a los presentes que éramos
do sobre una tarima parecía un monarca pensó que tenía un inmenso futuro por unos ignorantes, al igual que lo había sido
sarcástoco y condescendiente que se digna delante. «Pero es que en esa época», él hasta que vio la luz. Habló con devo-
hablar con sus subditos. Excepcional poli- señaló Celibidache, «Perlman no tenia ni ción en !• artístico de Furtwángler, aun-
glota, Celibidache habló en un español para comprarse unos pantalones». Ahora que menos en lo humano. Puso verde a
más que pasable y no tuvo que recurrir tiene una cuenta comente con muchos Toscanini. Al final hubo una gran ovación
apenas, como él mismo había advertido. ceros y se ha acabado. Barenboim salió y el maestro salió en olor de multitudes.
al francés o al italiano. En aquella sala a bien parado. Afirmó -siempre apodfcti- Allá, en el Auditorio Nacional, quedaron
rebosar, presidida por el busto de Federi- c o - que era el mejor pianista del mundo, sus lecciones magistrales en el podio, con
co García Lorca, donde resuenan aún los pero que como director no había conse- su Filarmónica de Munich.

Mozart para todos


Ejemplar la iniciativa de la Associació zo di Tito, una representación de ñasrion todos los que han colaborado, socios
d'Amics de l'Opera de Sabadell que y Bastiana y de El Empresario, a cargo de los Amigos de la Opera y simpati-
promueve un admirable ciclo de ópera, del Aula de Canto del Conservatorio zantes». Un curioso dato complementa-
modesto pero hecho con todo cariño y del Liceu, de la profesora Carmen Bus- rio; los comerciantes realizarán a lo
sobre todo con una proyección social, tamente, conciertos de piano, conferen- largo del ciclo una muestra de escapara-
de auténtica divulgación de la cultura cias de Benet Casablancas y de Roger tes sobre temas de Mozart, el gremio
musical, infrecuente en España. Lo inau- Alien etc. Don Giovanni será representa- de hostelería participará con unos pas-
gura una representación de Don Gtovan- da en varias poblaciones: Sabadell. Reus. teles Mozart, y granjas y restaurantes,
ni, en p r o d u c c i ó n p r o p i a , con la Lérida. Gerona, Mataró y Olesa de darán cenas y cafés vieneses. Seguro
Orquesta Sinfónica de la comarca del Montserrat Un Réquiem de Mozart din- que en este año de conmemoración, la
Valles, el coro de la institución organiza- gido por Josep Ferré, con la Orquesta sensata modestia y el cariño respetuoso
dora y un reparto de jóvenes cantantes, de Cámara de San Cugat y un escogido de estos actos habrán conmovido más
todos ellos bajo la dirección de Odón conjunto vocal pondrá el broche musi- que muchos otros homenajes de relum-
Alonso. También hay que contar con cal al ciclo. El otro broche, el social, lo brón al amado Wolfgang Amadeus. allá
una versión cíe concierto de La demen- pondrá una cena multitudinaria «para en su limbo.

«SCHERZO
ACTUALIDAD

Una orquesta
en apuros
Se trata, nada menos que de una orquesta
que lleva sobre sí el peso de una de las tradiciones
más glonosas de la historia de la interpretación musical
en Europa: la Orquesta de la Gewandhaus de Leipzig.
La gran orquesta alemana -cuyo director, Kurt Masur,
como saben nuestros lectores lo será ahora también
de la Filarmónica de Nueva York- está en graves
apuros, como tantas otras formaciones de la ex-RDA.
En este caso se trata de que su presupuesto
de 30 millones de marcos ha sido considerablemente
reducido por el gobierno de la nueva Alemania unificada:
este es el lado feo de una unificación Zino Francescatti
que tuvo más de baza propagandística
que de acción política seriamente reflexionada. A los jóvenes ya no les dirá mucho el nombre de Zino
La Orquesta de la Gewandhaus ha intentado acudir a Francescatti, nacido en Marsella en 1902 / que acaba de
lo de siempre, el patrocinio pnvado -la sponsonzaóón, morir en La Ciotat, un mes después de cumplir los ochenta y
como dicen los bárbaros en este país- nueve años. Sin embargo Francescatti fue uno de los grandes
pero parece que las gestiones no han tenido del violin y en una época -desde los años veinte hasta finales
el éxito esperado y las angustias siguen. de los cincuenta, sobre todo- su nombre ocupó las carteleras
de las más importantes salas de conciertos del mundo. Amigo
Sería más que triste que una de las mejores
de Ravel, con el cual llegó a tocar alguna vez, Francescatti fue
orquestas del mundo se viera al borde del colapso. un intérprete consumado del gran arte romántico, aunque
Pero en los tiempos que corren... también se internó en los vencuetos de la música contempo-
ránea y en su repertorio figuraban obras de Szymanowski,
Leonard Bemstein, Darius Milhaud, Respighi y otros. Una gran
parte de su carrera se desarrolló en EE.UU., donde grabó
muchos de los discos que le hicieron más famoso. Durante un
tiempo formó un dúo con el gran pianista también francés
Robert Casadesus, con el cual grabó las Sonatas para violin y
piano de Beethoven. En cuanto a sus grabaciones con orques-
ta disfrutó de unos cuantos Partenaires de pnmerlsimo orden:
Bruno Walter, Eugene Ormandy, Dimítri Mitropulos y George
Szell, por ejemplo.

Giulini, anti moderno


Escasamente proclive a la música de mejor música antes del estallido de la I
nuestro siglo se muestra el siempre Guerra Mundial y en 1922 Arnold
admiradísimo Cario Mana Giulini en el Schoenberg lo arruinó todo con su
número correspondiente al mes de dodecafonismo. Por otra parte hay un
agosto de la revista británica Qassic CD. detalle curioso: cuando Giulini reta al
Giulini sostiene que la música se acabó periodista a que diga los nombres de
en 1914, año que coincide, por cierto, los músicos de nuestro tiempo que
con el de su nacimiento. Claro que la admira, éste dice exactamente seis
parte de la entrevista en que el gran nombres, de los cuales la mitad -tres-
director italiano habla de la música con- son británicos -Walton, Britten, Tip-
temporánea es, como dice los anglosa- pett- v de los restantes uno es un pola-
jones, off tbe record - o al menos eso co residente en Gran Bretaña.- Panufnik.
asegura el entrevistados que sin embar- No está mal como exhibición de chovi-
go reproduce las manifestaciones del nismo —o de jíngoísm, como dirían los
maestro. Para Giulini, Stravinski hizo su ingleses-
Cario Mana Giulini

SCHERZO 9
Nunca como ahora, una innovación de Pioneer
había obtenido una respuesta tan plana.
Larespuestamis plana se consigue con IDBITBS punios de ajuste del Super Auto BLE de Pioneer Control Digital de Tensión aplica únicamente
• idB *—~ —,
el par motor necesario del principio al final de
OdB'
-1dB
A A A \
la cinta.
TOOKz 3kHz 15 kHi 1 Otro motivo de preocupación eran la
Los altos niveles de rendimiento obtenidos vibración y la resonancia. Se ha utilizado en con-
por las grabaciones digitales, están exigiendo lo secuencia un nuevo sistema estabilizador que
máximo a las platinas de cassette. inmoviliza firmemente la cassette, con lo que se
Esta es la razón por la que Pioneer ha creado amortigua la resonancia interna, a la vez que se
el Super Auto BLE: uno de los sistemas más evita la vibración externa mediante una puerta
avanzados de calibrado de cinta, que regula auto- que aisla el compartimento de la cassette y un
máticamente el bias, el nivel y la ecualización. chasis en nido de abeja.
En primer lugar, ofrece la respuesta más Las ventajas de estas innovaciones podrá
plana, porque sólo Super Auto BLE muestrea y usted disfrutarlas en forma de una óptima
alinea en tres puntos del espectro de audio: presencia sonora.
400 Hz, 3 kHz y 15 kHz (CT-676: 12 kHz). El retorno de la cinta con un sólo toque de
En segundo lugar, Super Auto BLE ofrece tecla, CD Synchro y Dolby HX-Pro son otros
una mayor exactitud porque un microordenador extras que no sólo hacen más fáciles sus graba-
de alta potencia realiza todos los ajustes necesarios. ciones, sino que les dan mayor precisión. Nuestros
Y por último: es más rápido. El alinea- modelos CT-93 y CT-900S incorporan también
miento completo del
CT-979 requiere aproxi-
madamente 10-15
segundos.
Todo ello porque,
como podrá decirle todo
ingeniero de sonido,
la precisión en el alinea-
miento de la cinta consigue el óptimo rendimiento un Sistema Dolby S NR, que reduce los ruidos
posible de las grabaciones. no deseados hasta en 24 dB en agudos.
Con una configuración de 3 cabezales, los Pida una demostración de la nueva platina
sofisticados cabezales
amorfos P C O C C de
nuestro CT-979 ofrecen
una excelente relación S/R
y una amplia dinámica.
También se ha
dado prioridad a que el
transporte de la cinta sea CT-676
suave. Nuestro "Reference Master Mechanism" de cassette Pioneer. Y escuche por sí mismo cómo
en el CT-979 incluye un doble cabrestante de nuestra respuesta más plana supone una nueva
resonancia difusa y volantes de alta precisión. cumbre en calidad de reproducción.
El resultado es un porcentaje bajísimio de Wow
& Flutter: 0,022% (WRMS). PIONEER
Para facilitar todavía más las cosas, nuestro The Art of Entertainment
ACTUALIDAD

La programación que se nos viene(ü)


genio en este año del bicentenario. Su lar Víctor Pablo Pérez (ahora Víctor
bordamos ahora, continuando con
i el resumen iniciado el mes pasado, nombre, habitual en cualquier tempora- Pablo a secas), destaca en este tnmestre
jna especie de síntesis-avance da, ha estado más presente en ésta. de arranque el concierto de inaugura-
comentado de lo que nos ofrecen las Para este primer trimestre del curso ción -ya realizado por estas fechas-, un
así llamadas antes orquestas de provincias 91/92 se preparan nuevas celebracio- muy atractivo programa con tres obras
y que hoy atienden por orquestas auto- nes. Todas las agrupaciones aquí trata- nuevas para el conjunto: Pampeana n° 7
nómicas. La mayoría de ellas, luego de das menos la de Granada incluyen el de Ginastera: Concierto para piano n° I
años de precariedad, mantienen una Réquiem, que la Sinfónica de Sevilla, de Bartók y Sinfonía n." 7 de Prokofiev.
existencia si no boyante si al menos para darle mayor solemnidad, monta en Se ha previsto la intervención de la
decorosa y han logrado una dignidad y la Catedral. Esta misma orquesta ha soprano norteamericana Barbara Hen-
un status impensables hace unos años. previsto otros fastos mozartianos en dricks con anas de Mozart, Massenet y
Para ello ha sido preciso que, abierto el este periodo; tres conciertos monográfi- Charpentier y se da bastante juego a la
proceso autonómico, se pusiera un cos en los que pasa breve revista, entre música española contemporánea clásica,
poco de moda eso de tener una agru- otras cosas, al último sinfonismo del con inclusión de Rodrigo, García Abril.
pación sinfónica (pretensión tras la que compositor (Sinfonías 38, 39 y 41). Bien Falla, Guridí y Aragües.
puede alojarse una política de gestos o está, aunque a muchos esta prolifera-
una sana apetencia Cultural) y que los ción pueda parecer empachosa, Hay varias cosas de interés en la pro-
distintos gobiernos -roto en este aspec- gramación de la Filarmónica de Gran
to el cordón umbilical con una adminis- Canaria, que desde la próxima tempora-
tración central habitualmente rácana Aires isleños da va ser gobernada por Gabriel Chmura,
para estos asuntos- establecieran la fun- que asumirá funciones de Asesor Musical
dación de un conjunto de estas caracte- Hace tan sólo unos años las Canarias y Director Principal. Con él colaborará
rísticas como algo prioritario. La caren- eran todavía una tierra exótica para la otro polaco, ligado ya a la orquesta,
cia de suficientes instrumentistas prepa- música. Afortundamente esos tiempos Antoni Wit, que será Principal Director
rados en España -situación deficitaria ya pasaron y hoy, además de sendos fes- Invrtado. De momento cabe destacar, así,
que obedece a múltiples razones, entre tivales (o minifestivales) de ópera, que a vuela pluma, una sensible presencia de
ellas la de la inexistencia, ya tienden a unificarse y que alcanzan ya el la música inglesa con sendos conciertos
secular, de una infraestructura presididos por las batutas de dos
educativa musical-, ha determi- nativos, Bryden Thomson y
nado la necesidad de buscados Nicholas Cleobury, que incorpo-
en el extranjero, razón por la ran obras de Elgar, Vaughan-
que (a práctica totalidad de Williams, Walton, un ponente
estas formaciones aparecen cercano como Nielsen (Cuarta
integradas, en su mayor parte Sinfonía) y Brahms. y la saludable
(a veces hasta en un 70 por y refrescante inclusión, en un
ciento), por profesores de solo programa, de dos obras no
allende las fronteras. Tratare- frecuentes como la Séptimo de
mos brevemente de alguno de Sibelius (que aparece asimismo
los rasgos que configuran, sin en Tenenfe) y la más rara Con-
especiales sorpresas, las oerto para piano (se supone que
temporadas de estas orquestas con coro de hombres) de Buso-
autonómicas; no de todas, ya ni. A reseñar igualmente los muy
que a nuestra redacción no novedosos contenidos del con-
han llegado datos sobre las de cierto de Encinar, con partituras
Bilbao, Asturias, Valladolid o de Cruz de Castro, Lutoslawski,
Galicia, las tres últimas recién Rodó y Falcón. Habría que ano-
nacidas o casi a punto de tar en el capítulo de solistas la
hacerío. De las de Tenerife. presencia de la violinista Kyung
Valencia y Granada no dispo- Wha Chung y resaltar que en el
nemos más que de la progra- de las batutas, aparte las citadas,
mación hasta diciembre. En aparecen nombres poco o nada
todo caso, las personas intere- conocidos por estos andurriales,
sadas podrán comprobar con de incógnito valor Corti, Liber-
Wctor Pablo
mayor detalle los respectivos conteni- Pérez man, Adey, Walter...
dos repasando los anuncios publicados Y nos vamos a Mallorca donde hace
y por publicar en las páginas de esta un par de años se creó la Orquesta Sin-
cuarto de siglo, Gran Canaria y Tenerife fónica de Baleares Ciutat de Palma, de la
revista. cuentan con un ya acreditado festival de que es titular Luis Remartínez, hombre
grandes orquestas y. sobre todo, con que sabe cuidar el repertorio de hoy
dos agrupaciones sinfónicas de casa de (obras de encargo de Al!s y Artigues) y
espectacular crecimiento y que, en parti- que intenta que la agrupación crezca
Un protagonista: Mozart cular la de la segunda isla, han llegado a rápidamente. Quizá por eso pueda pare-
poseer una calidad media estimabilísima. cer un poco fuerte la inclusión de una
Naturalmente, y hay que consignarlo, De la programación de la Sinfónica
todas las orquestas rinden su tributo al tinerfeña, que dirige en misiones de trtu-

12 SCHERZO
ACTUALIDAD

una Novena de Beethoven, un Mesías de programa, con Dafnis y Ooe de Ravel (sui- hace poco. El núcleo de la programación
Haendel y un bello concierto final con £es f y 2), en las manos del titular, el concertística viene, por lo que se refiere
obras de Samper. Tharichen (una partitu- yugoslavo Vjekoslav Sutej. Hay, claro, con- al primer trimestre, centrado en obras de
ra para orquesta y timbales) y Rossini ciertos nada desdeñables: el equilibrado mucho repertorio, aunque quepa señalar
(Stabat Mater). constituido por Carnaval de Dvorak, Sere- la espléndida construcción de la sesión,
natn n" 2 de Brahms y El mar de debussy, dirigida en este caso porjosep Pons, con
Levante y Sur dirigido por Tabathnik; el bien construido las dos Suites pora pequeño orquesto de
Stravinski, la Serenata para
Las temporadas de estas trompa y tenor de Britten y la
orquestas, y de las que ahora Sinfonía de Cámara de Scho-
abordaremos con la misma enberg. así como la buena
urgencia, pueden poseer y idea de hacer que la Cuarta
de hecho poseen actos de de Chaikovski venga acom-
interés o de indudable atrac- pañada por el Movimiento
tivo, pero que generalmente lento de W e b e m y los Rüc-
quedan aislados, indepen- kertlieder de Mahler.
dientes entre ellos. Lo que
en sí no tiene que estar mal, El N o r t e
aunque cabe plantearse
Siempre la cuestión de si no
Hay que destacar en la
seria más provechoso tratar
programación de la Sinfónica
de establecer puentes entre
de Euskadi el buen tino a la
unos y otros y de sentar
hora de colocar en lugar
bases de conexión, nexos de
relevante a la música vasca:
carácter cíclico, constantes
obras de Guridi, Arriaga,
que quizá aportaran una
Sorozábal, Aragües, Rema-
dimensión didáctica supleto-
cha (de sitio próximo como
ria. Pero es algo que no se
Navarra), Bemaola (estreno).
suele plantear en la actividad
Escudero (concierto mono-
de las orquestas españolas.
gráfico), Larrauri, Usandizaga
Desde el habitual punto de
f guran en la temporada, que
vista no debe desconocerse
alberga, como dato significa-
lo apañado del primer t r i -
tivo, tres sinfonías de Schu-
mestre de la Sinfónica de
mann, que incluye la Tercero
Valencia, que se ha inaugura-
de Mahler y La vida breve de
do con un concierto extra-
Falla (dirigidas por el titular
ordinario del Día de la
G ó m e z Martínez), c o m o
Comunidad, con títulos de
obras grandes. En el curso,
Blanquer, Ramos (un con-
que transcurre de octubre a
cierto para chelo) y Serrano
junio y que acude a localida-
(zarzuela), que programa
des autonómicas, aparecen
mas adelante el Te Deum de
partituras nada habituales
Penderecki, con el propio
como la Duodécimo de Shos-
autor en el podio, que acoge
Juan de Udaela takovich (Víctor Pablo), £/
a la soprano Karan Armstrong (final de
príncipe de madera de Bartók (Tamayo) o
Salomé de Strauss) acompañada por Ros
que incorpora la Obertura Académica de el Concertó para viola del mismo autor
Marbá. que da la versión mozartiana de El
Brahms, el Concierto para violín de Sibelius (Salomón).
Mesías y que monta, dirigida por el titular.
y la Décima de Shostakovich, que gobier-
Manuel Galduf, la ópera de Gershwin
na el español Alcántara; el colorista con-
Porgy and Bess, con cantantes c o m o
formado por Eí aprendiz de bru¡o de Arturo Reverter
Wlllard Whrte o Faye Robinson, lo cual
Dukas, las Variaciones Rococó de Chaikovs-
no es ninguna tontería pues se trata de
k¡, el Idilio de Sigfrido de Wagner y el
una obra emblemática de una estética y
Romeo y Julieta del compositor citado en
de un autor. Rara vez se ha interpretado
segundo lugar, con el prometedor Meir
en nuestro pais. La muy extensa tempora-
Minsky en el podio. A resaltar asimismo la
da de la recién creada Sinfónica de Sevilla
inclusión del ciclo completo de Mi pama
es un inmenso cajón de sastre en el que
de Smetana, una rara avis. Dirige el desco-
se incluyen las actividades de la formación
nocido -como tantos que concurren en
en la programación del Quinto Centena-
estas senes- Petr Vronski.
rio y de la Expo y en la que aparecen, por "£1 Wcjo Piolín"
tanto, representaciones operísticas. Para Cerca de Sevilla despliega sus activida-
centrarnos en los conciertos, por decirlo des la nueva Orquesta Ciudad de Grana- ESPECIALIDAD EN INSTRUMENTOS
así. de abono, hay que empezar por seña- da, que se ha reconstituido después de DE ARCO MÉTODOS-ACCESORIOS
lar la escasa presencia de la música espa- una salida problemática y actúa ahora a CUERDAS-ESTUCHES, 81c.
ñola, pretérita o actual, reducida práctica- las órdenes del emprendedor y joven FOTOCOPIASÍOMPACT DISC CLASICO
mente a la Obertura para ta Expo de Braña Juan de Udaeta, que ha organizado en
y la Sinfonía de Castillo, que comparten tomo a la agrupación una serie de activi-
Espíritu santo, 41
dades complementarias de interés y de
las que ya se daba noticia en estas páginas 28004 MADRID Tetef.522 4756

SCHERZO 13
ACTUALIDAD

BARCELONA

Un refrito para empezar Las expectativas


Barcelona. Gran Teatro del Liceo. So/omí de Richard Strauss Con Eva Marton (Salomé], Fiorenza Cossotto
cambiantes
(Herodias], Michael Burt (Jokhanaan); Manfred Jung ¡Herodes); Kurt Strert (Namboth); Josep Ruiz. Alfred Heil-
bron, Antonr Uuch. Santiago Sanche? Gencó, Vicenr. Esleve (5 judíos), Rosa M. Ysas (Paje de Herudias). Rotes Barcelona. Palau de la Música Catalana. I - X - 9 I .
doblados por bailarines: Dañe Cardyn (Salomé): Tíly Soffing (Herodias), Jean-Mane Manon (lokhanaan); José de Teresa Berganza, mezzosoprano. Orquesta de
Udaeta (Heredes); Wolfgang Grascher (Narraboth); Darrel Toulon (Paje de Herodias); Attioi Farmer (Esclavo de Cadaqués. Director Neville Marnner Obras de
Heredes); etc Orquesta del Gran Teatro del Liceo. Dirección: Antoni Ros Marbá. Producción del G.T. de! Liceo Rawel. Falla y Beethoven.
(1988). Dirección de escena: Jochen Ulnch.

La inauguración de la octava tem-


Manfred Jung, sin voz ni ganas de porada de Iber-Cámera tenía el gran
tenerla: en ei de Jokhanaan, aliciente del retomo a nuestra ciudad
Michael Burt, al que hubo que de Teresa Berganza, después de ios
amplificarle el sonido de un frustrados intentos anteriores; el
modo un tanto exagerado en las público asistente, que llenaba la sala,
escenas en que se supone que recibió calurosamente a la cantante
está en el pozo, pues sus medios demostrando un gran interés por
vocales son más bien cortos; en oírla; después de su corto paso por el
el de He radias, Fiorenza Cossot- escenario, donde sólo cantó las Siete
to, no muy cómoda en el rol en canciones populares de Falla en la ver-
el que tampoco pudo lucir su sión de Ernesto Halffter, la despedida
personalidad, puesto que no le expresaba un cierto desencanto. No
dejaban moverse de un rincón hemos de resaftar, a estas alturas de
del escenario. Finalmente, en el su carrera, las cualidades de Teresa
de Narraboth, Kurt Streit, un Berganza; una exquisita musicalidad,
tenor demasiado ligero para el un fraseo cuidado y esa calidad inter-
roí, aunque la voz no es fea. Los pretativa inherente, pero en este reci-
restantes papeles estuvieron tal su instrumento aparecía cansando,
bien cubiertos por el equipo de con un timbre que penetraba poco
la coso, especialmente los cinco en la sala, y que a veces era tapado
judíos, encabezados por Josep por ía orquesta, agravado con una
Ruiz y Alfredo Hellbron. tendencia a los sonidos fijos que res-
taban belleza a la intervención.
Los bailarines que doblaban a
los cantantes se limitaron en la La Orquesta de Cadaqués, que
mayoría de los casos a revolcar- patrocina el Festival de dicha pobla-
se por el suelo y a retorcerse ción costera, evidenció que se trataba
excepto en algún momento en de una formación joven, que no tie-
que organizaron una imitación nen la continuidad y, la cohesión de
de las tres Gracias en el fondo las orquestas estables (no olvidemos
Evo Manon FOJO: DOMQNKOSAONY de la escena. Sólo se distinguió que se trata de una agrupación de
la bailarina Darie Cardyn en ei músicos que se reúnen espaciada-
No parece muy brillante hacer una papel de Salomé, bailando la danza de mente) pero que en cambio tiene
inauguración de temporada en el Gran los siete velos con gran empuje y lucien- óptimas cualidades, con un bello soni-
Teatro del Liceo con un refrito: la pro- do una figura más que apetitosa ante un do en la cuerda, y con una madera
ducción de Salomé ya vista en 1988 rea- Herodes magníficamente representado con más calidad individual que con-
parecía igualita que estuvo entonces, por el veterano bailarín José de Udaeta. junta, siendo la parte más débil, como
sólo que en vez de Montserrat Caballé La orquesta tapó bastante a los can- es bastante habitual por nuestras lati-
ahora teníamos a Eva Marton encastilla- tantes, porque excepto la Marton no tudes, el metal. Una orquesta de
da en su torre inmóvil durante toda la había nadie con voz o con papel sufi- estas características en manos de un
representación, salvo en la escena final. ciente para imponerse. Eva Marton, que director tan experimentado y de
y con los demás personajes relegados a no se parece mucho más a Salomé que tanta calidad como Neville Marriner
un rmconcillo de la escena, mientras la Caballé, convenció por su intensidad permitió presagiar lo que puede ser
ocupaban el escenario los bailarines que vocal y su entrega, y en la escena final un futuro prometedor; tuvo carácter
reproducían con gestos y caras las cosas actuó con sobriedad y convencimiento. la versión de Le Tombeau de Coupenn
que cantaban los intérpretes. Así la Fue a ella a quien se dirigieron casi de Maurice Ravel, fue un poco estáti-
ópera de Richard Strauss ha vuelto a todas las ovaciones de la noche; las co el acompañamiento de la música
aparecer ante el público por segunda otras fueron dirigidas a Antom Ros de Falla, para conseguir en la Séptimo
vez como si se tratara de una ópera- Marbá por su labor frente a la orquesta. Sinfonía de Beethoven momentos de
ballet, y suponemos que el público En cuanto al director de escena, Jochen gran belleza por la suavidad de los
joven que acude al teatro acabará cre- Ulrich, recibió una buena dosis de gri- violines, indicios de lo que con el
yéndose que la obra es realmente así. tos, silbidos y protestas, que acogió con tiempo, puede ser una versión intere-
una ancha sonrisa de satisfacción. sante.
El equipo de bailarines era casi todo
el mismo de la otra vez; no así los can-
tantes; en el papel de Herodes un tenor F.XM Albert Vilardelt
en estado poco menos que lamentable,

74SCHERZO
v'/
o
Instituto de Crédito Oficial

AGENCIA FINANCIERA DEL GOBIERNO


ACTUALIDAD

Amicus Gulda,
sed magis amicus Mozart
Barcelona. Palau de la Música 9-X-9I. Fnedncli Gulda. piano. Ihe Paradise Band. Cail Gilmora y Phitl Edward. tocó como tfe trámite. Por supuesto un
voces. Bach, Mozart Beethoven, Gulda.
trámite de Gulda puede alcanzar altas
cotas de belleza, pienso por ejemplo en la
El antiacademicismo convertido en his- Libro del Clave bien temperado de J.S. Bach, grave sencillez y serena grandeza del tiem-
trión ismo Todo el mundo, o casi todo el porque Gulda escogió interpretarla sobre po lento de la Sonata KV 333: o ser suge-
mundo, se divirtió mucho en la segunda el ya mencionado artilugio, con sononda- rente y plantear interrogantes como el
parte del concierto de Gulda: el maestro al des que, siempre electrónicamente poten- rápido tempo con que se atacó la Sonata
piano, desde donde comenzó con una ciadas, variaban desde la aproximadamente en do menor. Pero en general faltó cuidado,
interpretación de la Marcha fúnebre de la clavecínística a la aproximadamente orga- hubo palpables problemas técnicos, pasa-
Sonata Op. 2b de Beethoven. fue transfor- nística. Pero Mozart fue interpretado al jes pasados por encima. Daba la impresión
mándose en director o, más bien, anima- hermoso y convencional piano de cola. de una especie de prisa y ansiedad como
dor, de una troupe dejozz. Esta empezó a Gulda escogió un Mozart luminoso y otro por acabar aquello, cumplir, y engolfarse en
intervenir, por medio del percusionista, oscuro, según sus propias palabras, que la indudablemente original y personalísima
por un procedimiento tan banal como resultaron ser, respectivamente, la Soneto segunda parte.
redoblar realmente en la caja la imitación en si bemol mayor KV 333 y la en do menor
de redoble de tambor que en toda mar- KV 457. Honestamente pienso que las
cha fúnebre pianística que se precie se José Luis Vidal
suele confiar a los trémolos de la mano
izquierda; enlazó con las intervenciones
vocales e instrumentales extraídas de la
obra de Gulda llamada Paradise tsland,
obra en la que. al lado de verdadera músi-
Festival de Andorra
ca -aunque no sé si de verdadero pzz- no Después de un inicio brillante el pasa- que ganó hace años un premio Viñas y
faltaban percutentes ritmos, efectos de do año, este Festival, que tiene por que entonces era un promesa, permane-
luces (¡de verdad!) y otros elementos que marco el vecino país, volvió a dar mues- ce como entonces, con posibilidades en
usualmente asociamos a la música de dis- tras de gran imaginación y en la pnmera parte sin realizar limitada expresivamente
coteca. Gulda alternó intervenciones so lis- semana nos dio un programa muy vana- y con una técnica que debe mejorar para
ticas al piano o al teclado de un artilugio do que incluía a Jaume Aragall y Manon poder conseguir un canto más ligado y
electrónico, que no supe identificar, con la Vemette Moore, el primer día, el ballet también evitar las durezas que en ocasio-
dirección o animación de sus músicos, pro- de Cámara de Viena y el Cor La Capella, nes aparecen en su registro agudo.
gresivamente rockera, más que jazzistica y el segundo día, para cerrar el domingo
no sabn'amos decir si acabó bailando o era El colofón de esta primera semana fue
con Renata Scotto. Para la sesión inicial el recital de la veterana Renata Scotto con
simplemente su manera de participar. El
público fue repetidamente llamado a la un amplio programa
participación y aparentemente con éxito, que incluía cuatro
sólo que -al fin y al cabo éramos el sufrido canciones de Bell i ni,
público sinfónico del Palau no siempre tres de La regata
estuvimos lo suficientemente atentos a veneziana de Rossini
corear los yeah del vocalista-gesticulador al y seis canciones de
micrófono y más de una vez no hubiéra- Verdi; tras el des-
mos aplaudido cuando tocaba, de no ser canso pudimos
gracias al maestro Gulda, que también se escuchar dos can-
cuidó de nosotros. Todo lo anterior hubie- ciones de Respighi,
ra podido estar bien, ser sanamente revul- seis de Ermanno
sivo, divertimos y permitimos apreciar bas- Wolf-Ferran y dos
tantes momentos de buena música -en de Giacomo Puccini
especial brillantes intervenciones de Gulda con el conocido
al piano, soberanamente destacadas por Sote e amore que
encima de los demás decibelios- si no cerraba oficialmente
hubiéramos salido -algunos- tan decepcio- el recital. La sopra-
nados de la pnmera parte la que Gulda no mostró su expe-
calificó expresamente como sena y como riencia y su gran
memorial del bicentenario de la rnuerte de TOTQPQG sentido teatral al
jaume Aiagall y Marión Vemetre Moore servicio de una voz
Mozart. Después de sus palabras esperá-
bamos de él algo a lo que nos tiene acos-
tumbrados, un Bach y un Mozart ongmaies, se preparó un programa de arias y dúos, que, tras dilatada carrera presenta una
profundos, sin ningún tipo de concesiones en las que el tenor catalán fue a más. cierta acntud en el registro agudo y una
a modas: sorprendentes quizá, pero clara- consiguiendo que su bellísima voz alcan- cierta dificultad en conseguir la redondez
mente escuchados como hijos de una pro- zara sus mejores momentos en la segun- de timbre; sin embargo, su gran sentido
funda convicción y una profunda entrega. da parte con £ lucevan le stelle de Tosco y artístico, su técnica y su experiencia le per-
Así recordábamos las interpretaciones de un aria tan poco habitual en un recital de mitieron soslayar bastante las dificultades y
Gulda. Y esta vez apenas si supimos apre- estas características como es Ch'ella mi conseguir un tnunfo fruto del cual fueron
ciar nada de eso. Es difícil opinar sobre la creda libero e lontano de La Fanaulla del los cuatro bises que ofreció.
versión de una Preludio y fuga del Primer West de Giacomo Puccini, logrando un
merecido éxrto. Manon Vemette Moore, Albert Vilardell

J6SCHERZO
TEMPORADA TEATRO LÍRICO NACIONAL P
91/92
OPERA 92 LA ZARZUELA
U n c l o r : EMILIO SAO I

FUERA DE ABONO CONCfERTO


Primer reparto: 18, 21,23, Del 7 al 11 de agosto DE CLAUSURA
27 y 30 de abril. Segundo TEATRO DE LA MAESTRANZA
DE LA TEMPORADA
reparto 19. 25 y 29 de abril (SEVILLA1TLN I A ZARZUELA
Lugar y fecha, a determinar
en la Eipo 92
Días 21, 23. 25,27 EL BARBERO
y 30 de enero EL GATO MONTES
DE SEVILLA Manuel Penella
LA DUEÑA Gioacchino Rossini Nueva producción
Roberto Gerhard
E si re no mundial
Nueva producción
del TLN LA ZARZUKLA
Oel TLN LA ZARZUELA
Directo* musical
Ballet
Coproducción cor el Gran Teatro del Director musca/ Mlgiwl Roa
Altwno Zedda Diieaor tto escera-
Liceo de Barcelona EmlBo Sagl
Directo Oe escena
Director musical Cario* Fernandez de Castro EsoinogtaliA / iwstoano. Del 15 al 19de|ulio
Anión! Roí Marta Escenografía Julio Gilán
D'iector Ge escena Joaquín Roy Placido OomnooVmóoKj VillarroeUJuan Pons LES GRANDS BALLETS
Josft Cario i Plan
Escenog/a'i J y vestuano
Vestuario
Ivonna Blake
CANADIENS
Pedro Moreno
Hclia'd Van AlíarvSliaron CooperAnifiony
Gino OUJIICO y Placido Dorrungty .iritos | Coproducción OQ la SootuJaü EslaiaL para el
.enieianD y Lss G r a n a ; Bailéis Canad-ena
Luciana SefrayWilham Uaitíuzrt1 I EL SOMBRERO
Meftaels Moor&Feiífly Palmer David Rendall
Fnrique Baquenr&Rob>n LeggaierAnne Masón
Carlos Chaus&orVPaara Burchul^dze
El segunflo reparto estará (armado por Jóvenes
(lucra de ¿ihono) DE TRES PICOS
H di Fallí
Cantantes Españoles S-'OLindJ caro *. dÉlan

RECITAL
Del 15 al 19 de febrero Julio, djas a determinar
Dias 15. 17. 19,21 DE INAUGURACIÓN BALLET ÚRICO
ATYS y 23 de mayo DE LA TEMPORADA NACIONAL
Jean-Baptiste Lully Día 4 de enero Director Nacho Duato
no en España L'HEURE SVNAPHAI
Coproducción del Teatro Comjnaíe
de Florencia La Opera de Monlpellier ESPAGNOLE ANNA • • H i U l ' Y j r l p v l l l - Nacha D u l a

y I Opera Comique de París Maurice Ravel TOMOWA-SINTOW, 11 resio nd prog-arna e-H


H.IIHI^XJS De ta Compañi J

Onjuesta
Les Aria Florissanis BELISA soprano
Director rm/stcjl M. A. Coria-A. Gallego
Wílüam CFvislia Peter Sommer, piano
Directo* óe escena Estreno mundial (¡iras de T.L.N.
Jean-Marte Villégier Nueva producción del
Escenografía
Cario Tommasi
TLN LA ZARZUELA Día 1 de febrero Lu Zarzuela
Director mus-cal
Vestuario Arturo Tama/o VICTORIA
PalricH CaucheiiEr D'iectar de escena, escenog'ahd y vestuario
Coreografía Simón SuArei DE LOS ANGELES, PARÍS
Franclne LancwkOt Cutre Powel'Oalmau González1 Del 23 da junio al 1 de julio de 1992
auíens y Jenniler Smrth-Ane Monoyos y
Gabriel BacQuier'Maniíel Berrnudez/
Teresa Veidera Anionio Blancas
soprano IHEÁTRE DE l'OOEON DE PAFUS
(THEÁTHf D'EUHOPE)
a neníatelas Rivenq y Jean Fjantois Gardcl NICOLAI GEDDA, LA DEL MANOJO
tenor DE ROSAS
Días 13, 17,21.25 Días 4, 8, 12r 16 y 20 de junio Pablo Sorozábal
ProOuff'ín OBI TI N LA ZARZUELA (IISNH
y 29 de marzo LA FAVORITA Geoffrey Parsons, piano
CARMEN Gaetano Donizetti Sífli
Georges Bizet Producción realizada en 1982 para el Día 26 de abril
Versión original Gran Teatro del Liceo de Barcelona
Producción de la Opera Dfector nmstCjl FREDERICA
de Manteca rio, 1990
Gian Paoto Sanzogno
Director de escena V O N STADE, Zarzuela en t i Tcatru
Director musical
Antoni Ros MarbJ
e TomaBí
mezzosoprano La Vaguada de Madrid
Director de escena, escenografía y v Ferruccio Villagrosu
Pter Luigi P i i i i
Srii'ley Venei AJiredo Kr
Martin Katz, piano
Teresa Beiganza/Luis Lima/
Mana Bayo/Juslmo Día*
GALA DE LA OPERA ri 0*1 TI.N LA /ARZLTI A
en colaboración con el Consorcio para
Día 14 de junio la Organización de Madrid Ca&iai
Días 30 de junio, 3, 6, 9 MIRELLA FRENI, Europea de la CuWura 199Í
FUERA DE ABONO y 11 de julio LA CHULAPONA
Días 24, 26, 28. 30 de abril soprano U GRAN VÍA
y 2 de mayo
ILTROVATORE Pao I a Molinari, piano
EL DÚO DE LA AFRICANA
Giuseppe VerdJ CHORIZOS Y POLACOS
SALA OLIMPIA
Nueva producción, en coproducción
TIMÓN DE ATENAS con el IVAECM {VaJeooaj y si
FESTIVAL DE OPERA DE OVIEDO ORQUESTA SINFÓNICA
Jacobo Duran Loriga - Director musical
Dias 6 y 9 de lebrero DE MADRID
LuísCarandell Miguel Ángel VvUri TI \ |,A / A R / l ' l I A CORO DEL TEATRO
Director de escena
Estreno mundial
Horacio Rodriguei Aragón SANCIA DI CASTIGLIA ÚRICO NACIONAL.
CoprMjciOa por TLN LA ZARZUELA, Gaetano Donizetti
Cenlro para la Difusión de la Música
Todas IB* reprvMrttaclonM
Vensiún óe concieno
Con lempo ranea V Centro Nacional de Eíireno en España a laa 20 h.
D.iwttr
Nuevas Tendencias Escénicas Pepe flubio Jota Cana» Títulos, techas e interpretes pueden
Duecto' musical Knsfian JohannssíJuiiD sufrir modificación.
José Luis Tema I DoloraZajck-Juan PonsSlelanoPalaEchi
Gustav Mahler
Integral de las Sinfonías
II Ciclo
Grandes Ciclos Sinfónicos de la
FUNDACIÓN
E MADRID

24 de enero 22.30 h. 19 de marzo 19.30 h. 16 de mayo 22.30 h.

SOVIET PHILHARMONIC ORCHESTRA FRANKFURT RADIO SYMPHONY ORCHESTRA ROY AL LIVERPOOL PHILHARMONIC ORCHESTRA
v Director: Elithu lnbal ANDCHOIR
Director titular Guennadi Rolhdejtvensky
Solistas: Hanna Schwarz. meziosoprano (7. Mohín: Sinfonía ním.i a Dt mslmitk moa CORO DE LA CATEDRAL DE LIVERPOOL
Horst Laubenthjl, tenor Director titular: Libor Pesek
C. Mahltr Dai lied ¡m da Eré (La canáén dt la ama) n 20 de mano 22.30 h. Sol lilas: Suzanne Murphy, Alison Peanre,
Alison Bario»1, sopranos;
wm 29 de enero 22.30h. FRANKFURT RADIO SYMPHONY ORCHESTRA Christine Caimrsr Linda Strachan, mezzos;
Director: Eiihu lnbal James Wagnei, tenot;
ORQUESTA FILARMÓNICA CHECA G. Ma&ltr: Sinfonía une. 9 en Re Mayor Siephen Roberts, barítono;
Director Mular: Jiri Btbhlavek SurTotd Dean, bajo.
Solista: Roben Holl, bajo • • 27 de marzo 22.30 h. C.MMr: íis/raú tf.S en fA¡ bmJ «ayer "DÍ la Mi!"
G. Mabter: KinJertotentreder
Sinfonía PUR t en Re mayor 'Titán* ORQUESTA SINFÓNICA DE LA RADIO DE COLONIA 26 de mayo 22,30 h.
Director: Gary Bertini
M 30deen«c 19.30 h. G. Mahlrr: Smfonü fjrtt. 7 en Si neur PITTSBURGH SYMPHONY ORCHESTRA
Diteaor ti rular: Lorin Maawl
ORQUESTA FILARMÓNICA CHECA M 26 de mano 22.30 h. G Mahltr: Sinfonía MM.6 n La mnor 'Trágica"
CORO FILARMÓNICO DE PRAGA
Director Vjcliv Neuminn ORQUESTA SINFÓNICA DE LA RADIO DE 13de]uniol9.30h.
Solistas Sobcrta Alexander, soprano COLONIA
jmice Taylot, meziosopraiio Director: Guy Bemní ORQUESTA NACIONAL DE ESPAÑA
G. Mjiltr: Sinfonía *im,2en De mwr "Rairmam' Solista: MitsukoShirai, soprano CORO NACIONAL DE ESPAÑA
G. Mahlir: 5II/WÚ ™ . ¡0 ei fa mttmds iaytr iAdtfjt) CORO DE NUESTRA SEÑORA DEL RECUERDO
Snfaaa nó*. 4 "Sil majer Director titular: Aldo Cecéalo
Solista: Dons Sofreí, mezznsoprano
G. Mahltr. Sinfenú «m.3 a ffí mtyer

VENTA DE ABONOS. LOCALIDADES EXCLUSIVAMENTE DE VENTA FORMA DE PAGO DE LOS ABONOS:


• Mediantt reserva telefónica, a partir del LIBRE: I. EN DOS PLAZOS DE^O 1 * mediante entrega en efectivo o
30 d í octubre de 1991, llamando il teléfono 559 13 15 de 9 • Tribunas, exctpco pan el concierro núm.8 cheque en el momento de retirar las localidades, y el resta en orro
a 15 horade lunes a viernes, excepto festivos. • Bancos de coro, excepto pan los conciertos num.3.8, ylO. cheque can fecha 1 de febrero de 1992. La ven» apluada sólo «
• En las taquillas del Auditorio Nacional • Localidades resumes de las zonas A, B, C que NO HAYAN podrá realizar en el sistema de venta por teléfono.
tic Músici. entre los días 14 y 30 de noviembre de 1991 SIDO VENDIDAS POR ABONO 2 EN UN SOLO PLAZO en efectivo o por cheque bincino
C./Príncipe de Vprgara, 146. Horarios habituales. conformado en el momento de retirar los abonos de vepta en las
PRECIO DE LAS LOCALIDADES taquillas del Auditorio Nacional de Música.
Zona Abono ciclo Localidad Los cheques deben ser nominales a La
H a n Sólo JC podían •dquirir un mánmo dr CUATRO ABONOS POR A 45.000 6.000 FUNDACIÓN CAJA DE MADRID
PERSONA tn rujlquien de las dos modilidadn de vinra Ep (ida u u dr B 4.000
32.000
i ]i wnli el 50% drl tfofn dispoaibk- Noli imm.ftt.HV Todos los prognimi a n susceptibles dí nudiímción,
C 20.000 2.500
Eo (HSO de cincelJÍiÓD de ilguua dr Jos contieno} programadas «
Tribunal 2.000 dnolvtri el impone dt IB lociJidid j • los •bocudos 1/10 parir d*J
VENTA DE LOCALIDADES Bancos de enro __ 1.000 importr del ibooo «tqgimio, luciéodaw ffftiíva n a devalución I í díu
En el ciso de que el aforo lora! no fuese vendido pot el sistema de después de Ja ACTUKIÚI. cucelidi U iLúpmsLÚn dí jn coocterto itií la
abono, saldrán a U venia lis localidadn sobrantes pan cada uno únici cansa Admisible pin lidrvaJjcion del jmportede Ui lofj]id*dfi
de los conciertos del cicloh a partir del 10 de diciembre de
1991 en lis taquillas del Auditorio Nacional de Música, dentro
de su bora/io habitual de despacho.
Con la colaboración de:
LOCALIDADES POR ABONO
Zk>na Á" Patio de butacas y Primer Anfiteatro.
Zcuaü: Lateral Pnmet Anfiteatro, Lateral
Segundo Anfiteatro y Segundo Anfiteatro (Filas 1 1 6 | MINISTERIO DE CULTURA
2¿üikL' Segundo Anfiteatro {Fila 7 a 15> y Galerías-
ACTUALIDAD

BILBAO
Opera en Panavisión
Bilbao. Teatro Amaga. I-X-9I. Medeo. Opera en dos actos de Mikis Trieodoratos sobre el texto de Eitripides. te de Glauca, cuya composición recuerda
Katenra Ikonomou, Zajos Terzakts, Kostts Paslals... Coro de la Sociedad Coral de Bilbao. Orquesta Sinfónica de
Bilbao. Director: Lutos Karytinos.
al relieve del tímpano de un frontón clási-
co. En la escena final, de efecto también
muy conseguido, la infeliz Medea se eleva

E
l Teatro Arriaga de Bilbao nos ha continuo, que por momentos puede lle- en un gigantesco dragón con los cuerpos
propuesto una ópera de tres horas gar a adoptar la fisonomía de un auténti- de los hijos degollados, el cual es acciona-
largas de duración que Theodorakis co arioso -fragmento de Creonte en el do por una tramoya a modo de gloria
ha elaborado a partir del molde literario primer acto ¡Invoco a los dioses inferna- barroca.
de la Medeo de Eurípides. Presentada /es.'-, o también en el ¡Hijos, dulces hijos
con una oportuna, o más bien imprescin- míos!, que entona Medea al alborear el El director Lukas Karytinos, responsa-
dible subtitulación de un texto - n o hay acto segundo, cuyas principales ¡deas ble artístico de la Opera Nacional de
que insistir demasiado en ello- de actuali- melódicas, acompañadas por el dulce Grecia, logró admirables resultados de la
dad, universalidad temática y fuerza tea- balanceo de las cuerdas, retoman más Orquesta Sinfónica de Bilbao, dirigiendo
tral únicas, el original se resiente un tanto tarde bajo otros ropajes y entonces, la obra con buenos oficios, mimando las
de la doble traducción a que ha sido seguramente, ya no nos interesan tanto. partes de cuerda y maderas y equilibran-
sometido (del griego clásico al moderno Asi todo, la innegable inspiración melódi- do como pudo al extemporáneo bloque
y de éste al castellano), y en semejante ca de algunos fragmentos es capaz de de metales. Dotó a esta Medeo de irra-
viaje a Itaca se han debilitado algunas de lograr por un solo influjo el indulto para diaciones mediterráneas y cálidas, eviden-
sus virtudes originales. La imperiosa nece- una música que resulta débil considerada ciando también su personal amor a la
sidad de adaptar el tiempo de la palabra bajo otros aspectos. La partitura se bene- obra y colaborando, con una dirección
leída al de la palabra cantada ha forzado ficia también de los esfuerzos del Theo- extremadamente respetuosa con los can-
a Theodorakis a resumir y a actualizar el dorakis recopilador de canciones folklóri- tantes, al tnunfo de la soprano protago-
texto inicial, y en este proceso se ha cas griegas, a la par que evidencia, y esto nista. No pudo ocultar, pese a los referi-
diluido fatídicamente, es de suponer que sí que es advertible en todo momento, el dos recursos, reiteraciones y alargamien-
sobre todo en la versión española, algo incuestionable amor de su creador por la tos innecesanos inherentes a la propia
de su primitivo vuelo poético. tierra, la luz, la literatura y la cultura global composición.
de su patna.
El original de Eurípides compromete a Katerina Ikonomou fue la auténtica
la música con un listón demasiado alto. En un estreno nunca es la interpreta-
alma mater del estreno de Theodorakis.
Sería vano buscar en ella un tipo de ción el factor principal, aunque haya que
Aguantó el tipo, vocal y escénicamente,
emoción estética afín a la que. por poner apresurarse a reconocer que éste de la
sin síntomas apreciables de fatiga, duran-
un ejemplo, contiene Lo Máscara Negra, capital vizcaína contó con elementos
te las tres horas largas de función y logró
la ópera de Penderecki recientemente notables. En primer lugar la dirección
sus mejores acentos en los momentos
estrenada en España. Aquí el lenguaje escénica del propio Luis Iturri, director
de canto recogido y efusivo, a despecho
está como voluntariamente petrificado, del Teatro Arriaga, que ha intentado que
de algunas incidentales durezas o ruptu-
retomando ideas y modos neorrománti- los cantantes se preocupen también por
ras del legato en los instantes de mayor
cos -Puccini, cuya influencia es percepti- actuar correctamente, lo que ha conse-
bravura. Si estos problemas pudieran ser
ble durante el primer acto; diversos guido en muchos momentos. Delante del
importantes en las Electros o los Fidelios
autores rusos, desde Shostakovich hasta templo que preside la escena ha situado
que habitualmente interpreta la referida
Kachaturian. el Cari Orff de los soprano, aquí empañan poco o
grandes frisos helénicos, etc.-, nada el fruto conseguido, que
sin tener demasiado en cuenta bien puede considerarse como
la posterior evolución del géne- una creación feliz. Eí t e n o r
ro melodramático y haciendo Zajos Terzakis, que dio vida a
prevalecer un tipo de lenguaje un Jasón de vocahdad indómita,
por momentos de clara raigam- apechugó valientemente con su
bre cinematográfica. Instantes c o m e t i d o , aunque la voz es
como el de los eficaces coros poco homogénea y de tintes
que ponen fin al I acto o las escasos. Aquí se salva, pero no
múltiples escenas en las que es del todo garantizable su for-
interviene la soldadesca parecen tuna en el trasplante a otros
otorgar pleno sentido a esta r e p e r t o r i o s . Cabe destacar
afirmación. también, en su calidad de cola-
b o r a d o r de lujo, al f o m o s o
El canto y el traba|o destina- barítono Kostas Paskalis, hoy
do al foso raramente se integran prácticamente retirado, quien
en un acoplamiento que poda- prestó su otrora inconfundible
mos calificar como idóneo. Las vozarrón en el breve cometido
ideas nacen frecuentemente en de Egeo, y aún encontró alguna
la orquesta y son retomadas de Medea de Mikis Theodorohs en el Teaüo Amaga de Bilbao que otra sonoridad retumbante
fOTa Julián
inmediato por el canto y ello y digna de cita, Suficientes, sin mayores
sucede un t a n t o ingenuamente, sin una estructura transparente de dos cuer- fulgores, los demás, y meritorio el breve
auténtica fusión entre ambos, además de concurso del bajo-barítono Juan Tomás
pos, el segundo de los cuales sirve a
existir, por otra parte, una escasa diferen- Hernani, el único integrante no griego
menudo de marco a diferentes frisos
ciación en la escritura vocal correspon- del reparto.
humanos. Ello da lugar a efectos visuales
diente a los distintos personajes que de notable plasticidad, como el monu-
intervienen en el drama. La aportación
mental conjunto en el que las diversas
vocal se inserta en un recitativo melódico
figuras escenifican mímicamente la muer- Joaquín Martín de Sagamínaga
SCHERZO 19
ACTUALIDAD

MADRID

El tiempo redescubierto
Madrid. Audrtono Nacional S, 9, I I y 12 de octubre Bruckner Sinfonía n" 3. Milhaud:
Surte francesa. Debussy; £T mar, Franck; SinftinJo en re menor Orquesta Filarmónica de
Munich. Director Sergiu Celibidache.

Cada vez que escuchamos -al menos algo menos equiva-


esa sensación tiene el firmante- un con- lente a la ¡dea que se
cierto dirigido por Celibidache. se hace tiene del tiempo cro-
meridiana la afirmación de que «las notas nológico), traza -sin
deben poseer su justo valor» (a la hora perder el norte de los
de realizar una interpretación adecuada). datos y referencias
Es decir, su justo valor para que se oiga estilísticos- una mo-
lo que deba oírse y para que, en definiti- numental curva o
va -de ahí el meollo de la cuestión-, res- arco que abarca la
plandezca la estructura interna de la composición toda del
composición a la que se trata de servir. primer compás al últi-
Eso es lo que de verdad importa y la mo, de tal forma que Sergiu Celibidache
máxima expuesta ha de acallar toda posi- su estructura íntima,
ble opinión en contrario basada en la su esencia, su razón de ser y de adquirir todo. Y la tensión - y correspondiente
mayor o menor velocidad que se impri- un desarrollo orgánico, quedan mostra- relajación- viene establecida por el juego
ma a la ejecución. das a plena luz, evidenciadas, matizadas dialéctico que plantea la armonía vertical.
En estos dos conciertos dobles el únicamente p o r los claroscuros que El director consigue que este proceso,
director rumano y su (está con ella desde ofrezcan su acentuación y su tímbrica y indudablemente complejo, se entienda y
1980) Filarmónica de Munich todo ello por las transiciones que devengan de su se disfrute.
ha quedado, una vez más explicado. ¡Y posible variedad dinámica y de su propia Con base en tales presupuestos Celibi-
de qué modo! Y hemos vuelto a reco- sintaxis. Esta extensa línea horizontal, dache, apoyado en una soberbia, pero
brar, a redescubnr esa noción básica que modelada, según los casos, por los vecto- falible, Filarmónica muniquesa, construyó,
es la del tiempo musical, naturalmente res contrapuntisticos, recorre los funda- por ejemplo, una imponente Tercera Sin-
subjetivo aunque pueda derivar de un mentos del edificio sinfónico y repara en fonía de Bruckner (versión de 1688-89),
tratamiento objetivo de los parámetros acompañamientos, en apoyaturas, en fra- plena de trascendencia espiritual, bañada
que configuran y animan el pentagrama. ses aparentemente de segundo orden, de una singular luz (¿mística?), en la que
Celibidache elude cualquier considera- . porque en ellos, de acuerdo con estos las progresiones estuvieron magistral-
ción conceptual de la materia sonora: él planteamientos propios de la fenomeno- mente diseñadas y ordenadas y en la que
se limita a transcribirla, la realizo. Y, fiel a logía del sonido, puede residir, en un proliferaron detalles instrumentales nor-
la creencia de que el final de una partitu- momento determinado, el factor que ha malmente desdeñados (entrada de violas
ra está contenido en su principio (¿cabe de prestar la definitiva coherencia al en la coda del primer movimiento) y se
recuperaron acentos líricos hoy olvidados
en las versiones al uso (ese revelador trío
frente a lo satánico del resto del Scher-
Mehta: éxito asegurado zo). Cosas que se pueden realizar a base
de poseer un implacable sentido del
M»drid. Auditorio Nacional. 5-X-9I. Orquesta del Maggio Musicale florentino Director Zubin Mshta. Boc- ritmo (algo opuesto a la rigidez) y un
chenni/&eno: faOruaade Modnct Beethoven S'nfonic nB 8.; Berlio£ Sinfonía fantástica. control casi sobrehumano de la dinámica,
Zubm Mehta en otros tiempos dirigió brillantez y dinamismo tan propios de amén de un peculiar dominio del rubato.
varias veces la ONE con éxito notable Mehta. Quizá lo peor fue la Octavia Sin- Bajo esta tónica quedó explicada, y nunca
de crítica y público. De ahí, quizá, la fre- fonía de Beethoven donde las perversa- mejor dicho, la otras veces plúmbea Sin-
cuencia con la que el director indio ha mente bellas aparatosidades de la Fan- fonía de Franck que fue un prodigio de
visitado nuestro país, unas veces al fren- tástica no estaban ahí para descubrir clandad. La complejidad motívica que la
te de la Orquesta Filarmónica de su país ciertas flaquezas orquestales. Muy bien anima fue expuesta casi crudamente para
de adopción (Israel), otras con la Filar- La RitiraUa de Madnd y menos bien la dejar al descubierto su férrea estructura
mónica de Los Angeles y otras con esta Sinfonía Fantástica en la que Mehta pre- cíclica, perfectamente comprensible
orquesta italiana. Una orquesta, por firió la grandilocuencia del apasiona- hecha de esta suerte. De £1 mar se
cierto, que sonó muy bien, empastada y miento, la espectacularidad a la comuni- podría escribir durante horas a fin de
cohesionada, a pesar de que -muy lati- cación romántica. Al final se rozó el evocar su infinito alquitaramiento timbn-
nos- los músicos no perdían la ocasión delirio: hubo hasta oles -¡este públi- co y su diamantina y al tiempo vaporosa
de hablar entre si cuando no les tocaba. co...!- y Mehta correspondió con tres belleza obtenidos en esta recreación.
El programa era atractivo y hecho a la bises que provocaron de nuevo el entu- Todo en su sitio en la obra de Milhaud,
medida de un público que no desea siasmo: la Tnana de Albéniz, un Inter- una de las especialidades de siempre de
grandes sobresaltos y que va a los con- mezzo de Manon Lescout de Puccmi, y la un maestro que. pese a dirigir sentado
ciertos mitad porque le gusta la música Obertura de La Forza del Destino de (son 79 años con problemas motrices),
y mitad porque el Auditorio en estas Verdi - t a l vez lo más intensamente ha dado una nueva lección de vigor, de
ocasiones se ha convertido en un lugar interpretado de todo. lucidez y de ngor; y de ligereza y agilidad
privilegiado para hacer vida social. Las en sus realizaciones musicales.
tres obras fueron interpretadas con esa JA. Arturo Reverter
20 SCHERZO
PARA ASPIRANTES DE TODAS
LAS NACIONALIDADES

!' C0HV0C1I0IIA

Pr*Mfi*Ká¿a da nUdhid • historial prakuand cúmplalo


da! 30 do f t c ñ n t r t d» I W 1 D kb 1400 V w » r

Coíifrato b b v o l da do* ofto* d» duración con apdúno


pfÓfTOQO
Acttrtdod combinada da p^kJkfl ***bí»co y amáñenla

Pobbilkfad da tcandoi pora ULRVÚIULB» |H«I4M¡LIHUUI,


como po*o cune»
45 dio* <
2 cfiai d * ducaiao wngnaJ.
QMiíhiuctón d * küinacíonaa 'íducido* dW b p

paro T0Q2
ÍpiJ: 3.976.000 pfeH
3-7Í4.000 p*B-
TuMiln: 3.49S 000 pm. ladai Mat

KiD de lo oir<vidod

d * te ocrividod « l ú pítmito pora PHPKjwn>

GUESTA SINFÓNICA DE GAi


Director musical: SARAS C •
ACTUALIDAD

Renace el Festival de Otoño Sinfonismo


Lamentablemente, Uno coso
español
raro de Vicente Martín y Soler (4-
X ) volvió a presentarse en Midrid. I2-X-9I. Tejtro Monumental. Oispi: Sinfonía
primero en re menor (1879). Rodrigo: Conü&io ¡n modo
Madrid (desde el siglo XVIII) des- Ojiante Solista: Pednj Corostola (Violonchelo). Marto:
provista de la escena. Se notó Campa de Estrello! Tunna: Sinfonía Sevilfono Orquesta
mucho esta ausencia, sobre todo Sinfónica de Madnd Directon Luis liquienía
porque en el Liceo de Barcelona
pudo disfrutarse un montaje muy El Festival de O t o ñ o nos deparó el
plástico meses atrás. Savall sacó pasado 12 de octubre un concierto com-
el partido posible de una versión puesto íntegramente por música españo-
de concierto, extrayendo una la, que aun sin proponérselo cumplía
interpretación más sinfónica que numerosos objetivos. Por un lado, ofrecía
la barcelonesa, con una respuesta el reestreno de la Sinfonía primera en re
más redonda de Le Concert des menor (1879) de Ruperto Chap! que no
Nations y una atención mayor a era oída desde su estreno en la Sociedad
los detalles. En conjunto, plausi-
de Conciertos, en el mismo año de su
ble trabajo vocal.
composición. Por otro lado, se sumaba al
Nueva visita de Anner Bylsma a homenaje a Joaquín Rodrigo en su
Madrid (I I-X), que afortunada- noventa aniversano, con la interpretación
mente se está conviniendo en un del Concierto m modo Galante, que tuvo
habitual. Como es caracteristico de en el violonchelista Pedro Corostola a un
este artista, se preocupó menos de digno convidado. Por si esto fuera poco
la perfección técnica, siendo inclu- servía de presentación en Madrid de
so en ocasiones su sonido algo Campo de Ésrre//os de Tomás Marco, des-
áspero y aun de dudosa afinación, pués de su estreno en Santiago de Com-
que del calor interpretativo. Dotó postela con motivo de la inauguración
de cuerpo los triviales Ejercidos de del Auditorio de Galicia. Y si uno quisiera
Duport y estuvo excelente en la seguir buscando alicientes repararía tam-
Soneto en do mayor de Bocchenni. bién en la espléndida perspectiva que se
Muy superficial el clavecinista Vaug- ofrecía de la irregular tradición sinfónica
han Schlepp en los Essercici de
española, con la guinda de una de las
Scariatti.
mejores muestras del género, como es la
Una de las grandes novedades Sinfonía Sevillono de Joaquín Tunna.
del Festival venia dada por la Entrando directamente en un juicio de
posibilidad de escuchar el orato- las obras, el programa presentó dos caras
rio La Giuditta de Almeida (16-X), bien diferenciadas. La primera parte abu-
una obra verdaderamente atracti- rrió por la retórica Sinfonía de Chapí, que
va, que contó con una escasísima si bien deja intuir esa frescura, sobre todo
asistencia de público. Sin embar-
rítmica, que caracterizarla su mejor música
go, Rene Jacobs obtuvo una inter-
posterior, resultó convencional, a la vez
Jortíi SovoW dirigid Una cosa rara pretación plena de vigor del Con-
certó Kóln, pese a las imperfec- que un buen ejemplo de un músico, aún
ciones de la primera parte. Solistas inmaduro, que no ha tenido tiempo de
Apartándose de la programación dedi- mirarse demasiado dentro de sí mismo.
cada a las grandes orquestas, que suelen vocales muy justos, pero suficientes.
Bastante menos perdonable es el Con-
insistir una y otra vez en el mismo reper- Programa por completo infrecuente el cierto in modo Galante, alarmantemente
tono, el Festival de Otoño de la Comuni- del Seminario Musicale (19-X), con can- caótico en lo que a la forma se refiere y
dad de Madrid ha propuesto este año una tatas y piezas instrumentales de Bonono- desproporcionado en la duración, lo que
oferta imaginativa y con novedades impor- n¡, Caldara. Haendel y Vivaldi. Con su
tantes. Resurge así de las cenizas de la edi- casi justifica los tijeretazos que le impri-
hermoso t i m b r e y amplia capacidad
ción precedente esta manifestación, que. mía Gaspar Cassadó cuando solía inter-
expresiva, el contratenor Gérard Lesne
por otro lado no acaba de encontrar su pretarlo. Al margen de esto, el Concierto
nos llevó de lo pastoril a lo trágico. Un
norte. La atención al barroco -y clasicismo concierto delicioso. posee interés en el color instrumental,
en el caso de Martín Soler- y la música de pero la confusión de ideas hace que éste
Una llamada de atención a los organi- resulte algo meramente anecdótico.
hoy, en cierto modo lo mas vivo que ahora
zadores: los programas de mano no La segunda parte del concierto consti-
se hace en nuestro arte, puede ser un
cumplen los mínimos exigióles. La ausen-
camino abierto de cara al futuro. tuyó la otra cara de la moneda gracias a
cia de los textos en Coso rara y Guditta
Campo de Estrellas de Tomás Marco, una
La inauguración (Leganés, 27-iX) nos es muy grave, en especial cuando es más
que previsible que muy pocas personas obra redonda que tiene sus mayores vir-
trajo la renovación haendeliana del King's
del público conozcan estas obras que se tudes en la gran contundencia formal y
Consort, un grupo que pese a su juven-
tud es /a muy relevante en la interpreta- presentan como novedades. Pero ade- en la brillantez de la aplicación de las
ción de este autor. Frescura, intimidad, más estas bajitas volanderas carecen de la relaciones de tensión.
renuncia a la pompa externa y desde información imprescindible como ayuda La Sinfonía Sevillana de Joaquín Turina
luego brillantez en la bellísima Oda a a la audición y están plagadas de errores, sirvió de colofón final a la espléndida
Santa Cecilio, con intervenciones corales llamando, por ejemplo, alto a la viola actuación de la Orquesta Sinfónica de
extraordinarias y destacada actuación de Madrid con Luis Izquierdo al frente.
la soprano Gillian Fisher.
E.MM MR.
22 SCHERZO
ACTUALIDAD

Efusivo homenaje Reposición notable


Madrid. Auditorio Nacional. 11 -X-91. Obras de Joaquín Rodrigo Zarabanda lejana y vlkmdcc. g Mídrld. Teatro Lineo Nacional La Zarzuela. (27-9
ornáronos. Tres villancicos Concierto de Afori)uez. £ i Jo busca del rnds alió. Solistas Teresa Berganza. mezzosoprano; al 27-10-1991). Lo del manojo de rasos (Pablo
Goran Sollscher, gurtana Orquesta Nacional de Esparta. Director Enrique Garría Asensio. Sorozábal/F- Hamos de Castro y A C . Carreflo).
Interprítes: Milagros Martín, Victoria Manso, Con-
cido del compositor. Aquí Rodrigo es cha Leza. Raúl Sender. Carlos Ah/arcz, Mano Rodri-
go. Ennque R. del Portal. Tomás Alvarei. Joaquín
diferente, emplea efectos desusados, Molma. Dirección Escénica: Emilio Sagi. Coro del
más afín a la música cinematográfica. Teatro Lírico Nacional. Orquesta Sinfónica de
Para orquesta de cuerdas se eligió Madrid. Director Miguel Roa.
interpretar dos páginas en las que. a
pesar de acusar algunas influencias, la En diciembre de 1990 (SCHERZO
personalidad de Joaquín Rodrigo está N° 50) dábamos razón de la puesta en
ya. Zarabanda lejana y villancico (1926- escena de esta producción de La del
1930), son dos piezas contrastadas, Manojo de Rosos. Creemos que esta
grave y tierna la primera y de carácter reposición es acertada si consideramos
rústico y más popular la segunda. que la obra ha sufrido cambios notables
Orquesta y director ofrecieron una para mejor; la escena se movió con más
versión pulcra y medida. detalles, con más vida y más chispa. La
dirección musical fije más acertada y la
Con los Cuatro madrigales amatónos Orquesta Sinfónica respondió, haciéndo-
y los Tres villancicos, Rodngo nos sor- nos sentir que la zarzuela podría encon-
prende musicalmente con momentos trar de nuevo su identidad, al ofrecérse-
líricos de la poesía española, Estas nos con categoría: Un loable preludio
obras de una misma linea estética e del segundo acto, como ejemplo.
incluso de similar orquestación, fueron
cantadas por la siempre esperada Tere- Con respecto a la edición del pasado
sa Berganza. cuya intervención fue de año del reparto se vio poco alterado.
especial elegancia y garbo. Estos ciclos Tanto Concha de Leza (Doña Mariana),
de canciones escritas en su día para voz como Joaquín Molina (D. Pedro Botero),
y piano, creemos que pierden en su estuvieron a la altura requerida y Victoria
Joaquín flodngo Manso (Clarita). ágil pero un tanto afec-
transcripción orquestal. Nuestra gran
mezzosoprano se había encontrado más tada encontró el antídoto en su excelen-
Presenciamos el primero de los numero- cómoda cantando la versión original. te compañero Enrique del Portal
sos conciertos que tendrán lugar durante (Capó). En esta ocasión Raúl Sender
éste y el siguiente año. en distintas ciudades Del Concierto de Aranjuez qué podemos estuvo más exagerado, morcilleó lo que
de diferentes países, como homenaje a Joa- ya decir. El sueco Goran Sollscher en la quiso, tendría que haberse morigerado.
quín Rodrigo, compositor nonagenario, con guitarra, lució una excelente técnica y se
una fructífera obra basada en la espontanei- tomó algunas libertades; junto a los profe- Especialmente aplaudido fue el barí-
dad, sencillez, despojada de adornos y por sores de la ONE y Enrique García Asensio tono Carlos Alvarez (Joaquín), de voz
supuesto con una voz propia que ha hecho en una buena participación, lograron un muy atractiva y sólida. Sus números los
que a lo largo de su vida se le haya recono- nuevo éxito para esta partitura huida de la hizo con entrega y el público corres-
cido de manera internacional. rareza y del pintoresquismo y en la que se pondió, pero debe tener precaución
encuentra una melancolía y una forma iné- con la zona aguda.
El acto lo formaron obras de la primera y
segunda madurez del compositor, así como dita de hacer música española. Milagros Martín (Ascensión), verdade-
otra de más reciente creación escnta para ramente tiene una voz muy bonita, cantó
El cariño por la obra y por el maestro
el bicentenario de los Estados Unidos y con expresividad y recitó con simpatía,
compositor se manifestó en el entusiasmo
dedicada a los astronautas de la NASA En pero en más de ocasión se vio tapada
de la despedida.
busca del mós allá, un poema sinfónico para por la orquesta por su voz corta que
orquesta, lejano al más peculiar estilo cono- bien nos gustaría se hiciera más grande
Al. G.F. para saborear una buena voz zarzuelera.
El éxito fue merecido para todos y
disfrutamos de verdad, no sólo porque
Vitalidad del impresionismo el espectáculo lo vale, sino también
porque en nuestro género lírico parece
que vamos vislumbrando la luz.
Madnd. Museo del Centro Cultural Reina Sofía. 7-X-9I. Obras de josep CercÓE y Eduardo Rincón. CarmevRosa
Capote; piano. MG.F.
En cierta ocasión me decía un gran Capote. Además de esta apuesta por la
músico navarro que la muerte prematura contención, el reinamiento y el halago tante efecto en las octavas agudas del ins-
de Debussy - o la incapacidad física de auditivo, en algunas de estas obras como trumento, o algún retazo virtuosístico. de
Ravel- unida a los desastres que acarrera- el Preludio Segundo -de una colección de inmediato abortado (en ciertos preludios),
ron a Francia las dos guerras mundiales tres sobre textos de Miguel Ángel-, planea pero no se encuentran tan lejos de las del
tendieron a ahogar un tanto la vitalidad del también la influencia del Liszt de los Arlos propio Rincón por su consonancia e inme-
impresionismo. Pero, a pesar de innegables de Peregrinación, el de los grandes hallazgos diata recepción. La pianista Carmen Capo-
azares y fluctuaciones, que tal estética ha de color pianístico, abuelo del impresionis- te afrontó estas piezas con conocimiento y
seguido viva en nuestro país lo demuestran mo y referencia irresistible, según el propio amor. Al tratarse en su mayoría de estre-
los nombres de Turina, Dcnostia, Báguena Rincón. Las dos obras de Cercos -Preludio, nos y carecer, por tanto, de inmediatos
Soler, el gran Federico Mompou, Alfredo Recitativo y Fuga y Preludis Ambulants-, referentes, su ejecución se nos antoja, pese
Aracil y Eduardo Rincón autor de compo- ambas anteriores a su etapa serial, pueden a todo, matizada y convincente.
siciones como las que protagonizaron la pecar de cierta dilatación formal (caso de
segunda parte del concierto de Carmen la primera), o contener algún desconcer-
Joaquín Martín de Sagarmínaga

SCHERZO 23
ACTUALIDAD

Un piano multicolor
Mídrld. Audrtono Nacional. 15-10-1991. Recital de Maurizio Polini. piano. Oiopin: 24 Preludia Debussy: Estudios. ción del público: tocado con más liber-
libro segundo Stravinskj: Petnxtilta.
tad y fuego que los Preludios y -pese al
lógico cansancio- con no menor auto-
Brillantísima inauguración del XIV diáfanos en su compleja arquitectura ridad, resultó arrebatador y elevó aún
Ciclo de Cámara y Polifonía con un sonora, riquísimos de colorido y diná- más el entusiasmo de la enardecida
recital de Pollini que se recordará largo mica y, por encima de todo, gozosos y sala,
tiempo, sobre todo la surte de Petruck- comunicativos, lo cual es casi un mila-
ko que lo cerraba, en la que el extraor- gro en una obra bastante hermética, Roberto Andrade
dinario pianista italiano rindió al máxi- mucho menos atractiva que, por
mo. Su deslumbrante técnica, su musi- ejemplo, los Preludios del mismo autor.
calidad intachable y su sobresaliente Por mor de la brevedad, destaquemos
capacidad de análisis y síntesis de una sólo el portentoso número 9, llevado a
tempo vertiginoso
sin merma de la cla-
Símbolos
ridad que es sello
del artista; las crista-
y realidades
linas sonoridades del
registro agudo (nú- Madrid. Auditorio Nacional. 2O-X-9I. Mahler.
Segundo Sinfonía María Oran, soprano, Efisabetta
mero 10) y la po- Andreani, contralto Coro y Orquesta Nacionales
tencia, segundad y de España. Director Aldo Ceccato.
precisión matemáti-
ca deí nú-mero I 2. Con la Segundo de Mahler en
programa, escogida muy intencional-
En la primera mente, se presentó Aldo Ceccato
parte, Pollini ofreció como primer titular extranjero de la
una muy hermosa ONE. Es por demás evidente que la
versión de ios 24 orquesta ha de resucitar, luego de la
Preludios de Chapin. prolongada etapa Friihbeck. tarea en
Atento sobremane- la que con desorientación notoria se
ra a la unidad de la han gastado los últimos años. El
obra, el pianista se concierto resultó ambivalente: por
expresa sin sombra un lado, una interpretación plausible,
de afectación, blan- dados los medios, y por otro una
dura o sentimenta- instantánea del presente nivel técni-
lismo; pero es ele- co de nuestros músicos, En este
gante, lúcido, inten- sentido, la familia más comprometi-
so, siempre comuni- da sigue siendo la de los vientos
cativo y, aunque de (tanto metales como maderas), que
actitud clásica, nunca incurrió en desafinaciones flagrantes,
resulta frío. Sobre la sobre todo en el primer tiempo.
perfección técnica Aquí es de justicia destacar la exce-
apenas hay que lente labor de la flautista Juana Gui-
insistir. Recordemos llem. Cierta mejoría en la cuerda
Mounzio Pollini fOTO: D.G las vertiginosas octa- grave, muy entregada igualmente en
vas de los números el inmenso primer movimiento.
18 ó 22; su sonoridad, que puede ser Ceccato puso orden al compiejo y
partitura nos procuraron una versión rica, delicada y fluida (Preludio 19), o
inigualable, en la que centelleaban los extremado mundo mahleriano,
solemne y grave, como en los corales dejándose llevar un tanto por la ten-
mil colores orquestales del discípulo de de los 9 y 20; la noble elocuencia de su
Rimsky-Korsakov y brotaba torrencial la dencia a la perorata. Notable su cui-
cantabile en los 6 y 15 y, en toda oca- dado de las dinámicas. En cuanto al
inventiva rítmica del autor de Le Sacre. sión, lo perfecto de su mecanismo.
Tras su anterior recital en Madrid (Tea- Coro Nacional, se nota ya la direc-
Pollini contiene -acaso en exceso- el ción de Blancafort, pues en esta
tro Real, octubre de 1988; ver SCHER- romanticismo de Chopin. subrayando
ZO, 29) ya había resultado patente que Segundo eludió su antigua tendencia
ya su raíz clásica, ya sus geniales antici- al grito, consiguiendo una gradación
si Pollini es, en todo repertorio, un paciones, como la indeterminación
artista de primer orden, en la música dinámica convincente desde su ini-
tonal del número 2. Pero el Scherzo cial entrada en pianlsimo. Poco o
del siglo XX no tiene igual hoy día. Si número 2, ofrecido como segundo bis,
entonces nos admiró con Schoenberg y nada mahleriano el estilo de ambas
probó que Pollini también puede dejar- solistas.
Stockhausen, ahora nos deslumhró no se arrastrar por los impulsos de un
sólo con Stravinski. sino también con temperamento intenso, necesariamen-
Debussy. Sus seis últimos Estudios te conmovido por la apoteósica reac-
resultaron técnicamente inmaculados. E.M.M.

24 SCHERZO
TEMPORADA OPERA 1991-92
AMB LA COL.LABORACIO TÉCNICA DE L'AREA DE MÚSICA DE L1VAECM

NOVEMBRE 91
Dics 21 i 23
Producció: Carde Valencia.
"UN RAPTO WELSH NATIONAL OPERA Director: FRANCISCO PERALES
EN EL SERRALLO" Direcuió escénica:
"Sinfonictla de Varsovia"
Direcció musical:
W.A. Mozart GILES HAVERGILL DAVID ROBERTSON

DECEMBRE 91
Dies 13.14.15.17.18,19.20,21 i 22
Direcció escénica;
LA DEL MANOJO EMILIO SAGI
Prodúcelo:
DE ROSAS" Teatro Lírico Nacional Direcció musical:
Pablo Sorazábal "La Zarzuela" MANUEL GALDUF

GENER 92
Dies 22,24 i 26 Prodúcelo: Festival Direcció escénica:
de Gyndenbuurne. ptopietat del EMILIO SAGI
"LA CENERENTOLA' T. Lírico Nacional "La Zarzuela'
Cor de Valencia. Direcció musical:
Gioacchino Rossiní Director: FCO. PERALES BERTRAND DE BILLY

FEBRER 92
Dies 20 i 22 Coproduccití del Pala» Direcció escénica:
de la Música i de l'Area JOSÉ CARLOS PLAZA
"LORFEO" de Música de 1'IVAECM
Cor de Valencia. Direcció musical:
Claudio Monteverdi Director: FCO. PERALES NICHOLAS CLEOBURY

MARQ 92
Dies 4,6 i 8 Cor de Valencia.
Director: FCO. PERALES
"UNA COSA RARA"
Producció: Direcció escénica:
Vicente Martín y Soler GRAN TEATRE DEL LICEÜ JOSEP MONTANYÉS

MAIG 92
Dies 23.26 i 29 Copr«ducció del T. Ulrico Cor de Valencia.
Nacional "La Zarzuela". Director; FRANCISCO PERALES
Festival de Opera de Oviedo í
Orquestra de Valencia
'IL TROVATORE" Área de Música de 1'IVAECM
Direcció escénica: Direcció musical:
Giuseppe Verdi H. RODRÍGUEZ DE ARAGÓN MANUEL GALDUF

MÚJÍCA
9 2
ACTUALIDAD

VALENCIA

La temporada de otoño en el Palau


La temporada programada para el aniversario, resulta atractiva. Del cambio habrá que dar cuenta a partir del próxi-
Palau, entre octubre y diciembre, y que de dirección, o de matiz, que pueda mo enero.
ha comenzado con el concierto que se imprimirle M.A. Conejero, que ya fue
reseña en estas mismas páginas, es prác- director del Palau en su primera etapa, 6/os Cortés
ticamente la misma que la que fue pre-
sentada, antes del verano, por Manuel
Muñoz, el anterior director del Palau
que ha sido sustituido por Manuel
Ángel Conejero, después del cambio de
Una batuta con futuro
gobierno municipal. Lo más destacable Cuando entre la frecuente rutina de demanda en la expresión acaso excesi-
ha sido la suspensión de los conciertos tantos directores más o menos conso- va para una orquesta mediana y, lógica-
previstos de la Orquesta Sinfónica de grados escuchamos a un músico joven mente, poco identificada con la batuta.
Tenerife, dirigida por su titular y con con ¡deas propias y maneras promete- En resumen destacaría dos característi-
Krystian Zimerman, Salvo algún añadido doras merece la pena prestarle aten- cas en Osear Creus: su conocimiento
(un recital de Caballé) o modificación se ción. Osear Creus, nacido en Gandía de las partituras y su voluntad interpre-
respeta el interesante ciclo preparado en 1962, ha realizado estudios, entre tativa, con una permanente sensibilidad
por la anterior dirección del Palau. La otros, con Ros Marbá. En este caso la por el fraseo y un intencionado ruboto
subvención del Palau es de 250 millo- sensibilidad del maestro se percibe en no siempre seguido por la orquesta.
nes, procedentes del Ayuntamiento, y el alumno. Osear Creus escogió para Osear Creus es el organizador de estos
de 170 (250 en 1992) por parte de demostrarlo un programa comprometi- conciertos de Gandía que en su segun-
Música 92. organismo que depende de do. El mejor elogio que se le puede da edición se nos muestra como uno
la Generalidad Valenciana. Como el hacer es reconocer que, al acabar el de los más interesantes que se progra-
Ayuntamiento y la Generalidad los concierto, el director había estado por man en la Comunidad Valenciana. El
ostentan partidos políticos distintos, el encima de la orquesta (RTV de joven director valenciano ha dirigido,
lector de fuera de Valencia puede ima- Moscú), aunque
ginar las previsibles fricciones y batallas. ésta no sobrepa-
Como en otras ocasiones, cuestiones saba, en conjunto,
paramusicales han tenido un protagonis- un sonido correc-
mo capaz de dejar casi en un segundo to y tenía en con-
plano la música hasta que, por ejemplo, tra la desafortuna-
Giulini empuñe la batuta en el Réquiem da intervención
de Vendí el día 20 de octubre. En esta de algunos instru-
ocasión el campo de batalla ha estado mentistas de los
en la ortografía y en el bilingüismo. No metales y una
es aquí lugar para un debate que debe. acústica, la del
encima, sortear algunos puntos con patio del palacio
carácter de tabú. Dicho esto remito al de los Borgia,
lector a las páginas de la revista en las reverberante y
que se anuncia la programación. Se des- con tendencia a
tacará fácilmente la presencia de Giulini apelmazar las tex-
con la Philharmonia Orchestra, la de turas. La Obertu-
Lorin Maazei, la presentación en Valen- ra de Don Qovan-
cia de Trevor Pmnock al frente de su m tuvo un exce-
The English Concert, los conciertos de lente plantea-
Martha Argerich y de la Academia of miento y bajó de
Saint Martin, el recital de Katia Ricciare- nivel en el trans-
lli, nueva también en esta plaza. Pero curso del Molto Osear Creus
hay que destacar especialmente la serie
de ciclos camerísticos (de guitarra, sona- entre otras, la Orquesta Bartók de
tas para piano de Mozart, las suites para Allegro. Ello se repitió en todos los
movimientos rápidos de las obras inter- Budapest, la Orquesta del Conservato-
chelo de Bach, los conciertos para violín rio de Valencia y la Orquesta de la Uni-
y piano de Mozart, las sonatas para vio- pretadas, en los que la orquesta se des-
viaba por su cuenta de las indicaciones versidad de Mame en Estados Unidos.
lín y clave de Bach y Handel. entre Después del presente concierto creo
otros. Los ciclos monográficos y, en de la batuta. Con dos excepciones: el
último movimiento de la Júpiter y el que, dada la actividad concertística de
general, la música de cámara programa- Valencia y los proyectos orquestales
da para la sala B del Palau han sido pre- Vivace del primer movimiento de la
Séptimo de Beethoven. En el Molto (entre ellos la creación de una Orques-
cisamente uno de los aspectos que ta Sinfónica Juvenil) hay que contar con
mejor ha potenciado el antenor direc- Allegro mozartiano, como en el Alle-
gretto de la Séptimo, el director, Osear la presencia de jóvenes directores
tor, Manuel Muñoz. La temporada, como Osear Creus. Si la complicada y,
junto a los conciertos de la Orquesta de Creus, pudo demostramos su cuidado
sentido de la planificación, su claridad a veces, gratuita política musical lo per-
Valencia y los conciertos de la Sociedad mite.
Filarmónica, que este año cumple su 30 expositiva y, alejado por completo del
simple marcar el compás, su perma-
nente preocupación expresiva. Una ac
2CÍSCHERZO
ACTUALIDAD

Concierto Opera en Valencia


Día dela Comunidad
Valencia. Palau ele la Música. B-I0-9I. Amando Blan-
quer Tres Homenajes Ramón Ramos Concierto para
violonchelo y orquesta; José Serrano, anas y dúos de La
canción deJ O/VKÍO. LO? de Aragón y Lo Doloroso, R.
Lamote de Gngnon: Fantasía sobre moüvos de Serró™
Mana Mircheva. violonchelo: Gloria Fabuel. soprano;
Manuel Cid, tenor; Francisco Valls. barítono. Orquesta
de Valencia. Director Manuel GakJuf.

Con éste concierto se inauguraba la


temporada de otoño del Palau. Concebi-
do como Concierto extraordinario Día
de la Comunidad Valenciana, el progra-
ma no era ni grandioso, ni ampliamente
representativo ni acertado, desde mi
punto de vista, en su composición. O
bien podía haberse hecho un recorrido
por algunas obras significativas de los clá-
sicos valencianos, o bien un programa de
compositores contemporáneos. Creo,
por otro lado, que el estreno absoluto
del Concierto para violonchelo de Ramón
Ramos hubiera estado más naturalmente Uno cosa tara <Je Martín y Soler en el montaje del liceo f OTO: ñAftCELÓ
emplazado en el programa previsto hace
meses y no dedicado al Día de la Comu- El mes pasado se presentó el progra- tructura y oficio, y, por supuesto, de un
nidad, junto a obras de Manuel de Falla, ma del Área de Música del IVAECM (Ins- Instituto de artes escénicas. Falta simple-
Ravel y Albert Rousset. El homenaje a tituto valenciano de artes escénicas, cine- mente la coordinación y la voluntad de
Serrano, por el cincuenta aniversario de matografía y música) para el curso 1991- hacerlo. Por otro lado, los responsables
su muerte, debía haber tenido lugar en el 92. El acto público estuvo presidido por del Área de Música del IVAECM han
teatro Principal y de forma monográfica. el nuevo conseller de Cultura Andreu demostrado la capacidad de producir,
Con el Palau casi vacio de público - l a López. Los dos problemas básicos plante- coproducir o contratar óperas con un
asistencia del público es aquí imprevisi- ados en el área de música fueron la dis- estimable o excelente nivel y han iniciado
ble- las voces reverberaban insoporta- persión de competencias, en distintos una colección de libretos y comentarios
blemente inmersas, además, en un organismos, y la posibilidad de crear un musicales muy cuidada. Para este curso
magma orquestal. A pesar de ello los taller de ópera en Valencia y, con ello, se han programado El rapto en el Serrallo,
tres cantantes tuvieron una actuación una temporada estable. El Conseller pro- La Cenerentola, L'Orfeo de Monteverdi,
notable. Además de la puramente agra- metió esa deseada unificación o coordi- Una cosa rara de Martín y Soler, y £1 Tro-
dable y repetida Fantasía de Lamotte de nación musical, incluyendo una subven- vador, ademas de La del manojo de Rosas.
Grignon, el programa incluía dos estre- ción coherente, y esquivó de momento la versión en concierto de El holandés
nos. Los tres homenajes de Amando el aparentemente difícil problema de la errante, oratorios y música sacra de Vival-
Blanquer son tres breves piezas dedica- ópera. Un problema magnificado desde la di, Rossini y Handel, Porgy and Bess. y
das a Esplá, Joaquín Rodrigo y Manuel beligerancia, ya revenida, contra la ópera, otras. Es importante, pero debe ser pró-
Palau. Destacando la tercera, todas ellas, la falta de interés y el argumento falaz de logo de una futura temporada de ópera,
acaso demasiado literales, vuelven a con- su elevado precio. Si alguna vez nos dete- y de un taller. Por otra parte se va a ini-
firmar la facilidad de la escritura orquestal nemos a repasar con detalle lo que se ciar una colección de grabaciones disco-
de Blanquer y su naturalidad. El Concierto podría ahorrar para un montaje digno, el grtficas, de la que iremos dando cuenta,
de Ramón Ramos (nacido en 1954) se dinero que se dispone para la música, la una nueva edición del prestigioso Ensems
mueve dentro del serialismo y destaca comparación con lo que se invierte en y Encuentros de Composición musical y
por su primer movimiento, Passacaglia, otras áreas distintas a la ópera y, si se la creación de un Laboratorio de Música
centro de gravedad de la obra, algo dila- quiere, en qué se invierten muchas veces electroacústica y un estudio de sonido,
tado, en la que los breves segundo y ter- esas partidas de libre disposición o lo que un archivo sonoro de música valenciana y
cer movimiento actúan como cadencias Valle Inclán llamaba el «fondo de repti- el proyecto de creación de una orquesta
contrastadas. El uso de los principales les», si se repasa todo ello, repito, llegare- de cámara. Por este lado la labor del
motivos del primer movimiento me mos a la conclusión de que si no se hace Anea de Música es impecable. Y por eso
parece magnifico, demostrando Ramos una suficiente temporada de ópera en hay que destacar el problema de la
un gran dominino de la orquestación, Valencia es sencillamente porque no se ópera, que no depende sólo de este
alcanzando pasajes de intensa expresivi- quiere. No sólo se dispone de un teatro, organismo, y que necesita abordarse con
dad. Asimismo destaca por precisa y el Principal, sino también del Coro de decisión. Me temo que haya que empu-
sugestiva la parte del solista, muy bien Valencia, quizá hoy el mas solicitado en jarlo, ¡todavía!, con argumentos teóricos
interpretada p o r María Mircheva. La España, de una Orquesta Sinfónica, de para combatir viejos prejuicios contra la
orquesta, dirigida por Manuel Galduf, una potencial fuente para la escena que ópera, una incomprensión y una especie
estuvo aquí brillante y clara. son los artesanos falleros, y no es un chis- de alergia aún arraigados.
te, pues no se trataría de hacer ninols
sino de aprovechar una amplia infraes-

ac ac
SCHERZO 27
r ACTUALIDAD

OVIEDO

Un festival irregular
Un Ernán i decoroso rematar en sobreagudo -espléndido- 0 mente brillantes y con soltura escénica;
de' verdi anni miei. Capaz de acentos fie- de esta soltura como del conjunto de la

A
l Emoni no lo salva una puesta en ros (aunque forzando un tanto centro y escena, fue organizador Horacio Rodrí-
escena, si el canto no va bien; y si graves, con riesgo para una voz original- guez Aragón, siempre atento al detalle
^a bien, ¿importa mucho la puesta mente clara de barítono), así como de intencionado. Alguna hipérbole en la neu-
en escena? Una recreación historicista- elegancia y delicadeza (quizá con menos rótica agitación de Violetta podría quizá
romántica siempre es recomendable, abandono del deseable) en lugares pro- serle imputada aunque tal vez contribu-
aunque, clara está, quepan matices. La picios como Vieni meco o la introducción yera el propio entusiasmo de la intérpre-
producción galesa tuvo decoro, sin al concertante del acto tercero (0 te. Amalia Barro fue una competente
estridencias; no estorbó a Verdi (gracias sommo Cario), Se le aplaudió; dado el Flora, y José A. Campo, Carlos Bergasa
a Dios), y tampoco pareció especial- contexto, menos de lo merecido. Pero Femando Balboa y Beñoga García hicie-
mente memorable. Ondrej Lenard llevó el teatro estaba frío: la voz de barítono ron muy bien sus partes; algo menos
con pulso a una Orquesta de Bmo de fue amada por Verdi, pero, con todo, Jonathan Barreto. Bertrand De Billy dirigió
irregular sonido, así como a un coro ¿dónde están los tenores de antaño? con sentido a una Orquesta de la Opera
que no brilló por volumen ni de Bmo que no parece en su
por especiales calidades voca- mejor momento de brillo y
les, aunque tuvo ajuste. Lenard empaste.
apoyó a algún cantante nervio-
so (y no sin causa, ante un Ya se sabe que aquí lo funda-
público más bien gélido), mental es Violetta Valéty, y la
norteamericana Kathleen Case-
Una vez más los tenores ver- llo obtuvo un gran éxito: la
dianos, ubi sunt Sin tenor en el aplaudieron a rabiar. Para ello,
Emoni el oyente se enfría de el público atendió más bien
entrada y cuesta mucho levan- -supongo- a la comunicatividad
tar la representación. Lando Bar- escénica que a las virtudes de
tohni bordeó la calamidad; su una voz y canto no muy desta-
poderío vocal -grande- no tuvo cables. Dominó, eso sí, agilida-
que ver con el fraseo del Vendí des y agudos, siendo Violetta
primera época, donde mordien- de primer acto por su ligereza;
te y sianao han de unirse a la pero ligereza -estimo- servida
elegancia. Incapaz de ligar por un timbre más bien de tiple
correctamente (y no digamos ya cupletista (con extensión,
de atenuar, colorear, esfumar, desde luego), no exenta de
etc.), se desgañifó Bartolini sir acentos gatunos, y no siempre
fruto, influyendo negativamente- impecable de afinación. El ras-
en dúos, tercetos y demás: el tro de pronunciación inglesa
vozarrón desapacible lo estrope- -omnipresente- y el ensancha-
aba todo. La soprano norteame- miento forzado de centros y
ncana Ealyn Voss fue una Elvira graves para servir a los aspectos
irregular; con calidad en frases dramáticos del papel son otros
centrales y estimables intentos motivos de reparo. Su eficacia
de medias voces, su valentía en estuvo en dotar de un ansia
tantos pasajes escabrosos trope- febril al personaje que logró
zó con una zona aguda estriden- prender en el público; ansia un
te y de sonoridad fija, Su buena poco espasmódica, con todo,
contribución al hermoso tercerto que hacía pensar al que suscri-
final no se vio bien acompañada be en el baile de San Vito, a
El Silva de Vladimir Kanmi veces, más que en secuelas psi-
tuvo buenas intenciones (inclu- cológicas de la tisis,
yendo sabrosas libertades.
como en la fermata de su aria i en una representación de Tosca FOJO.FAYER j O sé A. Sempere fue un
de salida), pero los resultados no estu- Alfredo que no careció de
vieron a la altura. Voz extensa, pero des- Éxito para Violeta mordiente en el acento y una buena
lucida por un timbre oscuro y grumoso, intención general de canto; brillante en
que tiñó de exotismo las palabras italia- el registro agudo (desgraciadamente, no
La sobria y elegante escenografía de
nas. Pareció afectado, además, por una en el remate de la cabaletta del acto
Julio Galán, y sus preciosos figurines hicie-
baja forma tal vez circunstancial. El ver- segundo), y menos en frases algo nasales
ron visualmente impecable la representa-
dadero cantante fue siempre Paolo
ción de La Traviata. Más que grata sorpre- y pretensiones de media voz que no
Gavanelli, un Don Cario con empaque y pasaron del deseo, john Rawnsley, bien
sa la del Coro de la Asociación Astunana
auténtico fraseo verdiano. Una buena conocido en Oviedo, fue un elegante
(dirigido por Femando M. Viejo). ¿Acaba-
emisión sobre el fiato le permitió canto Germont que dijo con corrección y
rá la pesadilla de la ausencia de un coro
ligado y hasta legítimos alardes como nobleza su D/ Provenza (entre otras
estable en la ópera ovetense? En esta
Jravioto estuvieron espléndidos; vocal- cosas), y mostró una segunda línea, aun-

28 SCHERZO
ACTUALIDAD

que su voz no sea precisamente rica; Nicola Martinucci, enfermo al pare-


como actor exhibió el cuidado por el cer, mostró una voz poco homogénea;
matiz de siempre. En definitiva, éxito de precioso registro agudo desconectado
una Violetta (¿de verdad fue para tanto?) de lo demás; su Cavaradossi fue. al
dentro de un estimable conjunto. menos esta vez, envarado y poco atrac-
tivo, sobre todo en lo Unco-afectuoso.
Una Tosca conflictiva El Scarpia de Tom Fox, discreto como
actor, no me pareció demasiado refina-
Una lúgubre y desangelada esceno- do ni sutil, a lo que no se prestaba una
grafía (desatenta a evocar Roma, lo que voz dura y muy frecuentemente forza-
si hace la música de Puccmi) fue marco da. No conviene olvidar que el coro de
de una Tosco fuertemente impregnada ¡a Asociación Asturiana, en su breve
por lo que pareció profundo desacuer- intervención, volvió a estar ajustado y
do entre Eva Marton y el podio, ocupa- sonó francamente bien.
do por Elena Herrera. La directora
cubana habla dejado gran recuerdo por Frialdad para Cenerentola
su ñohéme del año pasado en Oviedo;
su lucha con una Orquesta de Bmo que Elrenacimientorossiniano no ha pren-
dio. en esta tercera intervención, mues- dido aún en el público ovetense, vista su
tras definitivas de serias averías, iba frialdad (en primera función, al menos)
alcanzando con todo resultados estima- ante un digno espectáculo como el de
bles, hasta la irrupción de Floria Tosca esta Cenerento/o. La conocida produc-
en escena. A partir de aquí ios proble- ción de la Zarzuela, con dirección de
mas de interpretación del tempo resul- escena -imaginativa y vivaz- de Emilio
taron muy graves, sumiéndonos en la Sagi, contó con un coro malagueño
desazón. La Marton, impertérrita (buena competente y ajustado, y una Orquesta
es ella), seguía su camino, y orquesta y del Principado que, en la primera inter-
tenor se afanaban en la búsqueda de la vención operística de su nueva (y lentísi-
coincidencia. Doy fe de un resultado, no ma) etapa, ofreció un sonido promete-
de sus causas; en todo caso, dicen dor bajo la dirección de Theo Alcántara,
rumores que la guerra entre la directora quien concertó bien todo, aunque
modesto y la gran diva se prolongó entre hubiera ciertas tosquedades en los ata-
bastidores, más por beligerancia de la ques y predominio algo monótono de
Marton que por otra cosa. sonoridades de medio fuerte para arri-
ba. María José Sánchez y Lola Casariego
Diva Eva Marton, sí, aunque a la moder- compusieron un pareja de hermanas
na: a la prensa ovetense declaró que, para excelentes en lo escénico y con digni-
ella, «la letra tiene tanta importancia o más dad vocal; por desgracia, Juan Pedro
que la música», y que «sobre el escenario García Marqués no se adecuó mucho a El mejor fondo de catálogo
las ideas musicales tienen un cometido
secundario». Siendo así para ella, tendrá
las exigencias de pureza y nobleza de del mundo.
canto de su Alidoro. John Aler fue un
tranquila la conciencia acerca de su Don Ramiro muy de tenor inglés en
desempeño musical en el canto, ya que se estos casos, es decir, vocalmente emas-
ve ante todo como actriz (aunque, lo que culado, aunque con soltura en las agili-
son las cosas, una Floria como la suya, dades. La no especialmente potente voz
imperiosa y altiva, pero totalmente carente de Carlos Chausson no impide que su
de sensualidad, ¿es plenamente pucciniana? Don Magnífico sea muy elogiable, por
Claro que como Puccini soto era el músico, buen estilo rossiniano y ductilidad de
a lo me)or no importa). Para quienes canto; también tuvo calidad Roberto
seguimos creyendo que la expresión dra- Frontali (salvando cierta tendencia a la
mática es inseparable del buen canto (y en vocalización aspirada, que pareció algo
Puccini todavía lo es. pese al verismo de más que paródica), aunque tanto él
Tosca, más ostensible que en otras obras como Chausson se vieran a veces
del autor), la actuación de la Marton fue sumergidos por el forte orquestal.
monótona y sin relieve, precisamente por- Resultó más bien increíble la relativa
que su instrumento vocal (poderoso e frialdad del público con Gloria Scalchi,
importante, qué duda cabe) muestra por una cantante de cuerpo entero por téc-
todas partes huellas straussiano-nibelúngi- nica de emisión y correctísima coloratu-
cas) que repercuten sobre la flexibilidad, y ra: superiores, en todo caso, sus regis-
se ve afectado por un vibrato que es ya tros grave (espléndido) y central por
descarada oscilación muchas veces. Y así. la respecto al agudo, cierta contención
dureza, la incapacidad para la sugerencia interpretativa no debió privarla de un
sensual (Non la sospin, b riostra cosetta?) o éxito mucho mayor. Como debió serio
el dolorido recogimiento (Vissi darte, de el de la función en su conjunto, no
perfecta vulgaridad) dependieron de difi- excelsa pero sí francamente meritoria,
cultades de contó, y por ello (y no al mar-
gen de ello) lesionaron la entidad musical-
dramática del personaje.
Vidal Peña
SCHERZO 29
ACTUALIDAD

La orquesta Un festival
de Málaga en franca mejoría
La Orquesta Ciudad de Málaga inau-
guró su temporada 91-92 con un Justo cuando temíamos lo peor, nos pretarán la obra Epitaph de Charles Mm-
espléndido concierto que llenó hasta llega la programación del próximo Festi- gus, sin duda una noche apasionante. Los
rebosar el Teatro Cervantes. val Internacional de Jazz de Madrid para domingos 3 y 10 el teatro Monumental
El conjunto malagueño, cuya titulari- tranquilizamos. Gracia; al fuerte apoyo abnrá sus puertas, pnmero para el cuar-
dad ostenta desde hace años el ruma- de la Fundación Caja de Madrid, que con teto del ya casi legendario saxo barítono
una aportación de 25 millones de pesetas Gerry Mulligan. y luego para la formación
no-español Octav Calleya. se ha reno-
cubre el déficit del acto, el promotor Julio de Wayne Shorter y Herbie Hancock,
vado totalmente y si bien con un aftlsi-
Martí ha podido organizar un ciclo de otras dos históricas figuras del jazz
mo porcentaje de extranjeros, puede ya moderno. El resto del menú constituye
conciertos bastante más seno y coheren-
inscribir su nombre entre las primeras te que en años antenores, con un afto una mezcla que a simple vista puede
orquestas de nuestro país. nivel artístico y una interesante variedad parecer algo dudosa. La presencia del
El nuevo gerente de la Orquesta Ciu- en su oferta que a buen seguro recibirá grupo vocal Take 6, del conjunto de
dad de Málaga es José María Redondo, fusión Spyro Gyra (días
un culto músico andaluz, lleno de 4 y 5), de los grupos de
inquietudes (fundó el Festival de Música salsa Poncho Sánchez
de Cámara de Cambrils e impulsó la Latin Jazz Band y Irake-
vida musical extremeña), al que muchos re (días 7 y 8) asustará
aficionados madrileños recuerdan como a más de uno. pero tal
como últimamente se
violonchelista del Cuarteto Hispánico
organizan los festivales
Numen.
en la mayoría de las
Redondo cuenta, entre otras colabo- grandes ciudades, son
raciones con la del pianista, astrofísico y por lo visto componen-
matemático José María Alvarez, figura tes inevitables. De
clave en la Asociación Sevillana de Músi- todas las maneras se
ca de Cámara. Y también con la ilusión trata de grupos que se
y el apoyo incondicional de un gran o mueven a un nivel más
amante de la música, el alcalde de Mála- que aceptable que no
ga, Pedro Aparicio. difiere sustancialmente

Se explica así que José María Redon-


I del de la parte restante
de un programa que
do haya podido organizar los llamados ofrece mejores posibili-
«Martes musicales» en el Palacio de dades para la vanguar-
Jejf Watts, Brandfonl Manola y Robert Leslie Hurst III
Miramar, sesiones de cámara con parti-
cipación de instrumentistas de la
una respuesta masiva del público y será dia que lo que suele ser la norma aquí.
orquesta / que bajo su dirección, son
capaz de crear nuevos aficionados que Por ejemplo, tendremos la ocasión de
toda una garantía de calidad. volver a ver y escuchar al magnifico Art
buena falta hace.
Y se explica también que, en la pro- En un reciente comentario nos quejá- Ensemble of Chicago (día 13), esta vez
gramación de la Orquesta Ciudad de bamos de las escasas posibilidades que el con los miembros del coro de Soweto
Málaga para la presente temporada, jazz vocal tiene en España. La organiza- Ambutho como invitados especiales, dis-
figuren maestros como Maxim Shosta- ción del festival parece habernos hecho frutaremos de los soberbios tríos del
kovich, o solistas como Elena Bashkiro- caso. Entre los platos fuertes del extenso saxofonista Branfond Marsalis (día 9) y del
va, Alexis Weissenberg, Boris Belkín, Hu programa figuran precisamente los recita- guitarrista John McLaughlin (día 11), Tete
Kun, Stefan Milenkovic, Leonid Gorotov les de dos de las más importantes can- Montoliu volverá a formar su siempre
y Renata Scotto, por citar a los extran- tantes dentro de! panorama actual; las impresionante duó con el vibrafonísta
jeras (entre los españoles hay nombres americanas Abbey Lincoln y Betty Cárter Bobby Hutcherson (dia 15) y otro pianis-
tan prestigiosos como Antonio Baciero, que vendrán acompañadas por sus res- ta de relieve, Marcus Roberts, estará tam-
pectivos tilos. La pnmera abnó el festival bién presente (día 14). El jazz español
Rafael Orozco, Pedro Corostola, Pedro
el 25 de octubre en el colegio San |uan tendrá su palabra que decir, naturalmen-
León y Rafael Ramos y entre los direc-
Evangelista, única ocasión para retomar al te, El contrabajista Miguel Ángel Chastang
tores, Odón Alonso, Miguel Ángel acompañara a músicos de Nueva York,
Gómez Martínez, Edmon Colomer, local más idóneo de que dispone el jazz
en la capital, Los restantes conciertos entre ellos el importante saxo alto Gary
etc.). Bartz (día 14), y el saxofonista Perico
-trece en total- tendrán lugar en diferen-
Del concierto de presentación, dos tes salas más céntricas a partir del domin- Sambcat clausura el festival (día 15) con
go 3 de noviembre hasta el viernes 15, la el trompetista Mike Mossman y el pianis-
notas. Una. el buen hacer de Calleya en
mayoría en el teatro Alcalá donde Betty ta David Kikoski dentro de su quinteto.
una vibrante e intensa Cuarta Sinfonía de
Chaikovski. La otra, un Bashkirov magis- Cárter actuará el martes 12. su primera
actuación en Madrid desde los principes En total, un buen número de grandes
tral, a quien no le importa sacrificar la intérpretes que en esta ocasión estarán
de la década anterior.
pulcritud académica por la musicalidad y mejor distribuidos, evitándose asi la acu-
una vibración emocional que rara vez El miércoles 6 el festival se traslada al mulación de figuras en los escenarios y
hallamos en el arriesgadísimo Segundo Auditorio Nacional donde una treintena los conciertos maratoníanos.
Concierto de Brahms. de destacados músicos, bajo la dirección
del musicólogo Gunther Schuller, inter- £T.
Andrés Ruiz Tarazona
30 SCHEPZO
I orquestra de cambra
teatre lliure
temporada 91 -92
direcció josep pons
octubre música espanyola actual
obres d'alfredo aracil, tomas marco, José luís turina, i david del puerto

concert extraordinari
diumenge dia 27 (10 nit) i dilluns dia 28 (9 nit)

desembre de mozart a mozart

d¡jousdies12 i 19 (9 nit)
diumenge dies 15 i 22 (10 nit)

febrer europa de l'est i nacionalisme


obres de gyórgy ligeti, béla bartók, leos janacek, hans eisler i karol szymanowsky

dijousdies6 ¡ 13 {9 nit)
diumenge dies 9 i 16 (10 nit)

mar? concert homenatge a Joaquín rodrigo


obres de claude debussy. igor stravinsky i ioaquín rodrigo

concert extraordinari
12demarc(9nit)

música i cinema
la p'tite lilie (alberto calvalcanti / darius milhaud)
entr'acte (rene clair / eric satie)

del 25 al 29 de marg

abril /maig/juny orient/occident


obres d'oliver massiaen, jacinto scelsi, david padrós, isang yun, toro takemitsu,
hiroaki zakoji

dijous dies 23 i 30 d'abril (9 nit)


diumenge dies 26 d'abril i 3 de maig (10 nit)

música étnica japonesa


intérprets kuniyoshi sugawara, shoko sugawara, hiteaki kuribayashi

concert extraordinari
dilluns 4 de maig (9 nit)

nuix, hindemith, amargos, várese

dijous dies 28 de maig i 4 de juny


diumenge dies 31 de maig i 7 de juny (10 nit)

informació i reserves per telefon: 218 92 51


ACTUALIDAD

BUENOS AIRES

José Carreras, su arte y su emoción


Cuando en 1973 José Carre- los sectores laterales seguir en
ras debutó en el Teatro Colón su totalidad la emisión en direc-
personificando a Alfredo en Lo to que ofreció Canal 13 que,
troviata se pudo aquilatar que junto con la transmisión por
surgía un nuevo tenor lírico de Radio Mitre reunió una audien-
voz caudalosa y cautivante cia que batió con todos los
color y con un gran poder de ravng de esa noche. Carreras
comunicación. En 1986 volvió volvió a cautivar al público con
al Colón, contratado por la Ins- ese carisma que distingue a los
titución Wagner y dicho teatro, elegidos. Esta vez estuvo acom-
para presentarse en dos con- pañado por la Orquesta Estable
ciertos con la Orquesta Estable del Teatro Colón que ofreció
del teatro, dirigida por Mano un prolijo y satisfactorio rendi-
Perusso. (osé Carreras estaba miento en manos del director
ya en la plenitud de su arte y Enrique Ricci. En un programa
de su voz. En sus recientes pre- más variado que el del Colón, el
sentaciones, tanto el Teatro público rubricó con aplausos y
Colón como el Luna Park emocionada ovación la finaliza-
José Cofreras
resultaron chicos para albergar ción de cada tema en especial
a miles de asistentes atraídos por la gran cuando concluyó la gran aria de Werther
popularidad alcanzada por el artista en radicado en Barcelona, mostró su maes- de Massenet, Lamento de Federico de
los últimos años; claro que la gigantesca tría, colocándose a la altura de las cir- L'Arlesiana de Cilea y las tres últimas
organización promocional realizada por cunstancias con auténtico profesionalis- obras pertenecientes a De Curtís, Soro-
Conciertos Daniel y Tito Lecture contri- mo y excelente criterio artístico. zábal y Lara. La visita de (osé Carreras
buyó a ello. Teatro Colón: en un recital Luna Parte el concierto realizado por quedará señalada como otro aconteci-
camerístico José Carreras reveló una Carreras en este monumental estadio, miento musical más en los anales de la
faceta más profunda de su arte: la de también cumplió con los objetivos busca- vida artística de Buenos Aires.
conquistar al oyente mediante lo íntimo, dos: congregar a más de siete mil espec-
logrando magistrales pianissuru, en una tadores. Dos pantallas gigantes de televi-
línea vocal que no decayó nunca. El sión permitieron al público ubicado en Isabel Cavallini
programa comprendió compositores
que abarcaron tres siglos de la música
vocal y tendencias estéticas lógicamente
opuestas. Las primeras pertenecían al
Barroco italiano: Cal II sote del Gange de
Nabucco en el Colón
A. Scarlatti; Per la gloria d'adovan de Nabucco de Verdi fue la ópera elegida como Fenema, mezzo de timbre grato y
Bononcini y Pietá Signare de Stradella, para inaugurar la Temporada Lírica del solventes agudos y Pedro Caligiuri en
donde Carreras pudo explayarse en una Teatro Colón. La soprano norteamerica- Ismael. Eficientes en roles menores Gian-
amplia gama expresiva, sorteando con na Linda Roark-Stnjmmer debió reem- nantonio VeHato (Gran Sacerdote). Ana
depurada técnica los adornos caracterís- plazar en el último momento a Ghena María Marcó (Anna) y Gabriel Renaud
ticos de su escritura. Exquisitas por su Dimitrova quien, intempestivamente, (Abdallo), La dirección musical de Antón
refinamiento, se escuchó el grupo de canceló su viaje tres días antes del ensa- Guadagno fue equilibrada y segura,
cuatro canciones de Tosti. L'esuie, yo general. Roark-Strummer en su debut adaptando muy bien la orquesta a los
encantadora pieza de la juventud de en el Colón como Abigaíl, mostró gran medios vocales de los cantantes, pero
Verdi. permitió al artista una mayor presencia escénica. Su voz potente en la Obertura fahó imaginación y nervio
expansión sonora. En la segunda parte impresionó en los forte, pero es desigual verdiano. De todas maneras, el resulta-
Elegie y Ouvre íes yeux de Massenet; en cuanto a color y a línea de canto. No do general fue positivo. El Coro Estable
Canción del árbol del olvido y La rosa y El obstante salió airosa de la prueba, espe- del teatro, preparado por Antonio
sauce de nuestros compatriotas Gmas- cialmente en su gran escena del acto Russo, si bien hubo inseguridad en el
tera y Guastavmo fueron realzadas por segundo. El barítono ruso Evgeni Neste- comienzo, desarrolló una labor volunta-
el sutil manejo y la impecable articula- renko, a quien admiramos como Boris y riosa y eficiente. El vestuario de Anfbal
ción en la media voz, Dos atrayentes Dosifeo años atrás, ratificó su oficio de Lápiz fue suntuoso, de buen gusto y
canciones del compositor mexicano actor y cantante, destacándose en las acorde con la escenografía de Roberto
Tato Nacho fueron seguidas por tres tres invocociones de Zacearías. Su voz y Oswald responsable también de la régie
canciones de Puccmi: So/e e amone, Terra su arte siguen vigentes a los 53 años. El y de la iluminación, que fue perfecta.
e more y Mentí a l'awiso, verdaderas barítono Eduard Tumagián en el rol pro- Este artista argentino de talento, diestro
joyitas musicales vertidas todas con gran tagonista, no llegó a transmitir en pro- en el manejo de solistas y masas, revali-
maestría. Carreras brindó su música con fundidad la tragedia que refleja Nabucco. dó una vez más sus reconocidos méri-
sencillez y mucho amor y a la delirante alrededor de quien gira todo el drama, tos. En lineas generales ha sido este un
ovación del público al final, respondió pero acreditó ser un cantante de escuela Nabucco representado con dignidad,
generosamente con 5 bises. que maneja con apropiado sentido las cohesión y espíritu verdiano.
frases musicales. Se destacaron entre los
restantes personajes Lucila Ramos Mané
I.C
El pianista argentino Enrique Rica,
32 SCHERZO
' 3eethpven
estoma Sinfonías.

BEETHOVEN POK-

HARNONCOURT
JNikoljii* ll. i moni ni i rt II.ICL-
t-n lk.-rlint.-n 1929. Kn 19\}
TIL í E C presenta el gran estreno de la funda el Concvntus MIIMCUS
temporada. di- Viera. urqtitstLi dt* insim-
mt;iit">orifí!ii:ilu». t<in lu (JUI1
Nikolaus Harnoncourt realiza la más
n'Eilui'ionu d amtvpiti itc
vibrante interpretación de las Sinfonías KL'tatiún musk;il.
completas de Beethoven, consiguiendo
que suenen tan audaces y revoluciona- ongin.nki intinkljii
rias como debieron hacerlo por primera fclurt's y siin ri'ii>-
huy «lint» l;i m.¡>
vez. : y pnituntla cinin-
Las 9 Sinfonías de Beethoven
por Harnoncourt en sólo 5 CD. música ¿Í* nut'sioj .si^l".
Ahora, por el precio de 4 CD. IhirniHiiourl es artiMa

1063 y hy graludo pan i-Mt-

Ya a la venta en
ACTUALIDAD

ESTADOS UNIDOS

El Bolshoi en el Met
L
a compañía del Bolshoi de Rusia espíritu de Miada es más poderoso. tiene poder, pero la caracterización indi-
trajo consigo tres producciones en Jaromir mata a Voislava, Morena inunda vidual está flojamente desarrollada,
su primera visrta a la Metropolitan la ciudad, y los espíritus del par de incluso para Juana.
Opera desde 1976. A una nueva pro- amantes aparecen unidos en un abrazo. La escenografía de Pokrovsky fue
ducción de Eugene Oneguin le siguieron La producción fue tan confusa como anticuada. Grandes tapizados se utiliza-
dos rarezas: la compleja, gran ópera- la trama. El escenario recreó un teatro ron para indicar escenas tales como la
ballet Miada de Rimsky-Korsakov; y La ruso del siglo XIX, con muñecas que del bosque, pues las escaleras y los nive-
doncella de Orleans de Chaikovski. Rims- simbolizaban a los personajes y, según el les no eran apropiados. Angeles recor-
ky escribió 15 óperas, de las cuales programa, a «los temas centrales de tados flotaban en el aire y el coro feme-
Occidente sólo conoce la última, Ei percepción y transformación», regadas nino lució alas angelicales cuando inter-
gallo de oro. Miada se halla al extremo por doquiera Los solistas, el coro, los pretó las voces escuchadas por Juana.
opuesto, con sólo dos producciones en bailarines de ballet atiborraban también Los miembros del coro masculino vestí-
Rusia (1913, 1923) desde que se estre- al escenario. Poco estaba claro. La ilumi- an smokings y capas rojas. Juana, en un
nase en Leningrado en 1892, y ninguna nación era opaca, pobre. La Met prohi- cepo colocado sobre una plataforma,
de éstas con éxito. La presente produc- be sobretítulos, que de todos modos fue precariamente erguida con platafor-
ción estuvo a cargo de Bons Pokrovsky, apenas si habrán ayudado. El vestuario ma y cepo en dirección al cielo. Un
quien la presentó primero en Rusia en estuvo apropiado. grupo de músicos instrumentales en el
1988, y quien ha trabajado con el Bols- escenario parecía una mini-versión de la
hoi por más de 50 años. Svetlana Slavnaya bailó bien a Miada, banda de los años 40 de Benny Good-
y también a Cleopatra. La coreografía man. Habla muchísima oportunidad
Miada se gestó en 1872, cuando SA. de Andrer Petrov, director del Ballet para la grandiosidad —un gran ballet,
Gedeonov, director del Teatro Imperial, Kremlin, careció de interés, aunque los muchedumbres, procesiones- y la Don-
pidió a Cui, Mussorgsky, Rimsky-Korsa- bailarines eran exuberantes y los saltari- cella pudo haber sido representada a
kov, y Borodin -cuatro de los Poderosos nes Espíntus Malos hacían reir. En gene- escala meyerbeeriana. En lugar de eso,
Cinco- que preparasen música para un ral, al canto le faftó sutileza. Irina Udalo- parecía un oratono.
libreto co-escrito por él y el dramaturgo va (Voislava) tenía una voz fría y gruesa,
V.A, Krylov. Todo lo que ha quedado del y el tenor Nicolai Vasileyev sonaba
tenso como Jaromir; Nina Gaponova Makvala Kashrashvili cantó a Juana con
proyecto es la escena final, compuesta sensibilidad natural, y Adíen Forets fue
por Borodin. En [889 en una fiesta con- (Morena) y el bajo Boris Morozov
demostraron más firmeza y color. La evocadora, pero sus notas agudas sona-
memorativa del segundo aniversario de ron estridentes. El tenor Oleg Kulko
la muerte de Borodin, (Caries Vil) tenía resonantes
Rimsky fue convencido para notas agudas, pero por lo
que la escribiese de nuevo. demás resultó flojo. Vasile-
Usando los libretos origina- yev no estuvo mejor como
les con unas pocas adicio- Raymond, quien ama a
nes, Rimsky reescnbió la Juana desde el principio, de
obra. Se diferencia de sus lo que estuvo en Miada. Los
trabajos más tempranos por bajos Vyacheslov Pochapsky
el uso de instrumentos tan y Mikhail Krutikov estuvie-
poco convencionales como ron aceptables como Thi-
el contrafagot el clarinete baut, padre de Juana, y el
bajo, el clarinete piccolo, y indignante Dunois. El baríto-
las flautas de Pan, y por la no Vladimir Redkín lució un
necesidad de una orquesta tanto romántico como Lio-
más grande. nel. el soldado burgundio de
quien Juana se enamora.
La trama es complicada. Ekaterina Kudryavchenko,
Dispuesta a obtener el una mezzo aguda, le sacó
amor de Jaromir, la prince- Miado por el Bofek» en el Met gran provecho a su pequeño rol como
sa Voislava ha envenenado ya antes del dirección orquestal de Aleksander Laza- Agnes Sorel. El bajo Gleb Nikolksky fue
comienzo de la obra a Miada, la novia re v necesitaba equilibrio. un arzobispo de voz profunda. Aleksan-
del principe. Vende además su alma a La doncella de Orieans, la historia de der Lazarev dirigió ambas óperas, Miada
Morena, diosa del mal, en tanto que el Juana de Arco basada en D/e Jungfrau con vigor y color pero sin equilibrio, y
fantasma de Miada recluta la ayuda de von Orieans de Fnednch Schiller, fue la Doncella con algo de aspereza y algo de
Lada, diosa del bien, y consigue mos- quinta de las nueve óperas de Chai- romanticismo. Valery Levental fue el
trarle en sueños a Jaromir el anillo con kovski, posterior a Eugene Oneguln y escenógrafo de ambas obras. Hubo
el cual se la envenenó. Morena, frustra- anterior a Ma2eppa Se la recibió bien aplausos corteses al finalizar Miada, miles
da momentáneamente, convoca a en su premiére (1881). no obstante de aplausos al final de Doncella
Cherborg, el dios negro. Cherborg a su sonar menos rusa que sus otras óperas.
vez conjura al fantasma de Cleopatra La música, a ratos fluida, a ratos estática,
para que seduzca a Jaromir, pero el atrae pero no inspira. En general la obra J.C.S.
34 SCHEPZO
ACTUALIDAD

Operas de tema español en América


T
res compañías de ópera america- ópera, Leporello llevaba una gorra de llo sin comicidad y con aspiraciones a la
nas escenificaron óperas con temas chófer, y hacia la pantomina de conducir posición de su señor. Gabriel Sadé brin-
españoles, y dos de estas produc- al Don en un coche. Durante la perse- dó a un resuelto Don Ottavio con una
ciones fueron modificadas drásticamen- cución, los hombres empuñaban rifles y voz potente e inusual, Gabor Andrasy a
te. A II Trovatore de la Opera de Omaha Donna Elvira cargaba con revólver y un imponente Commendatore, John
lo caractenzó su brutalidad, al Don GJO- maleta, y vestía ropa de detective. Mien- Kuether a un Massetto de voz menuda.
vannt de la Opera de Seattle su cinismo, tras tanto, las mujeres yacían inmóviles Shen Greenawald fue una vengativa
y a í a favorita de la Opera de Portland sobre el suelo. ¡Acaso trataban de evitar Donna Anna que se vistió de rosa para
su tradicionalismo. disparos extraviados? Al final, Don Gio- la escena de la fiesta y cantó una con-
Keith Warner situó Trovorore en vanni aplastó la cabeza de la estatua en movedora Non mi dir mientras colocaba
medio de una brutal guerra civil. El mon- el mismo lugar anterior. Con las manos flores sobre la tumba de su padre.
taje escénico consistió en una pared de en la cabeza, la estatua salió corriendo MariAnne Haggander fue una Donna
ladrillo con siete puertas, entre las cuales Elvira con problemas en las notas gra-
se hallaba una escalera conducente a ves, y Anna Steiger una Zerlina nada
una extensa plataforma. Las puertas mócente. Gerard Schwarz condujo
ocultaban altares con velas votivas, luga- sobriamente, y el montaje mínimo por
res de escondite y mazmorras. Al Paul Steinberg sentó bien a la visión de
comienzo, Leonora yacía muerta en el Alden de América en los años 1950 y
suelo y Manrico colgaba de una soga al de un drama giocoso sin lo giocoso.
fondo del escenario, en tanto que sobre
favonio raramente se representa en los
la plataforma se veía a un niño que
EEUU. Portland la dotó de buen elenco,
representaba o bien al infante incinera-
tomó prestado de la Opera de San Fran-
do, o a los dos hermanos, o quizás a los
cisco los atractivos decorados de Ming
tres. Ferrando personificaba a la maldad,
Cho Lee, y vistió a los cantantes con los
y su cruel risa hacía ecos por todo el
espléndidos vestuarios y maravillosos pei-
escenario. El momento más brutal ocu-
nados de Jane Greenwood. El director
rrió cuando Ferrando le arrancó los ojos
artístico Robert Bailey la representó ade-
a Azucena. Tres cantantes rusos, uno
más en su manera tradicional. La atractiva
americano, y uno inglés componían al
mezzo húngara Ildiko Komlossi tiene
desigual elenco. Paolo Kudriavchenko
alcance vocal, matiz, proyección y agrada-
(Manrico) posee una voz grande, heroi-
ble timbre, e hizo una creíble Leonora,
ca y excitante, pero tan poco sutil como
favorita del rey Alfonso en la Castilla del
su actuación, Elena Mirtova representó a
siglo XIV. y amada del primero monje y
una bonita y joven Leonora con una voz
uego soldado Femando. Femando fue
bollante y hermosa, no muy gruesa pero
cantado por el bien parecido tenor sicilia-
sí bien enfocada. Yevgenia Gorohavska-
no Marcello Giordani. quien a sus 28
ya (Azucena) brindó una agradable
años tiene un repicante timbre agudo,
interpretación vocal y dramática. El
buenas notas graves y medias, y una atra-
joven Jeffrey Kneebone demostró tener
yente presencia escénica. Pero esta vez
el alcance vocal para Di Luna y para una
padeció de una contracción en el registro
prometedora carrera. Mark Glanville
medio agudo, de la cual no pudo liberar-
(Ferrando) tenía problemas con la ento-
se. Esperemos que esta sea una indisposi-
nación. Hal France dirigió con lirismo,
ción temporal, pues por lo demás su
con grandes climax, y con algunos tempi
futuro luce muy prometedor. El joven
inconsistentes.
bajo húngaro Tamas Bator cantó con voz
profunda a su Baldassare, el padre supe-
Christopher Alden dio un colorido rior que obliga a Femando a abandonar
sombrío a su Don Giovanni. El Don el monasteno porque ama a Leonora El
La favorita. M. Gordoni e I. Kbmtosi. en la ópera
deambuló por el escenario vestido de Alfonso de Jeffrey Kneebone actuó con
de Portíani
negro, con gafas de sol, y cigarrillo en dignidad y humanismo, y cantó con
boca. Se sentó en una silla de espaldas del escenario. El Don tuvo sus momen- buena modulación. Beth Donnelly-Feller
al público, enfrentando a 25 miembros tos para deleitarse antes de que fuese (Inéz) nos obsequió con una contenta y
del elenco, entre los cuales se contaban propulsado fuera del escenario por una aniñada compañera de Leonora y Jerold
los otro siete personajes principales, gigantesca cortina roja que lo persiguió Stena (Don Gasparo) con un apropiada-
también sentados en sillas bajo una cruz en escena y de la cual se colgó aterrori- mente desagradable ministro alfonsino. La
de neón en este sótano de iglesia. Todo zado. Es de presumir que el infierno dirección orquestal de Bruno Aprea se
esto durante la obertura. Don Giovanni estaba al mismo nivel en que los perso- avivó después de un acto primero lento,
asesinó al Commendatore destrozándo- najes habían vivido. Dale Duesing cantó que duró 90 minutos.
le la cabeza contra el centro de la pared con fluidez y resultó un Don sin encan-
trasera, sobre la cual permaneció una tos, apropiado para la perspectiva de
mancha de sangre a lo largo de la Alden, Héctor Guedes hizo un Lepore-
Jeffrey C Smith
SCHERZO 35
ACTUALIDAD

LONDRFS LISBOA

Un Anillo a la deriva Música Antigua


Entre los días I y 9 de octubre, se han
celebrado en Lisboa las XII Jomadas de
Música Antigua. Este año las Jornadas,
organizadas por la Fundado Calouste
Gulbenkian, han girado en t o r n o a
Mozart en el bicentenario de su muerte.
El primer día de las Jomadas tuvimos
ocasión de asistir a dos excelentes con-
ciertos. El primero tuvo lugar en el Gran
Auditorio de la Fundagao y en él pudimos
escuchar a la Orquesta del Siglo XVIII
que, bajo la dirección de Frans Srüggen,
nos ofreció el Concierto en sol mayor pora
flauta y orquesta K. 313 (solista: Konrad
Hünteler); el Concierto para trompa K.
441 (sólita; Ab Koster) y el Condeno para
ciármete K. 622 (solista: Ene Hoeprich).
Todos los solistas dieron muestras de una
excelente técnica, asi como de una musi-
calidad fuera de lo normal. Más tarde, y
en el maravilloso Palacio de Queluz, escu-
H Demesch.J. Moms y K Begtey en EJ Anillo londinense fOTaZOEDOMINIC
chamos a la sección de vientos de la
Desde 1982 la Royal Opera no había Maxwell) tiene que aparecer ya sea como Orquesta con un programa un tanto inha-
montado un ciclo completo de El Añilo. un tonto de pueblo o como un boxeador bitual: Seis Nocturnos para voces solistas y
Se había proyectado un nuevo ciclo que sonado? ¿Por qué Alberich se parece a un cornos di basseto; el Adagio para clarinetes
empezaría en 1988, dirigido por Lyubi- empresario industrial fracasado del siglo y cornos di bassetto y la Serenata en si
mov, pero la insatisfacción general pro- XIX? ¿Por qué su oficina central clandesti- bemol mayor K. 361 (Gran Partaa). La
vocada por su Oro del Rhin llevó a un na semeja una barata barraca en un par- interpretación volvió a ser estupenda y
rápido cambio de planes, y para el resto que de atracciones de segunda clase? ¿Por esto, unida a la íntima sonoridad de estas
del nuevo Anillo se llamó a Gótz Frie- qué no hay puente sobre el arco ins para obras, provocó un ambiente casi mágico.
dnch para que montara una escenifica- el Walhalla, y por qué una visión distante En la segunda Jornada el Coro de
ción revisada de su producción berlinesa de éste recuerda a un conjunto de rasca- Cámara de Holanda ofreció un concier-
de 1984-85. Lo Walkiría se montó en cielos apresuradamente elevado cuando to dedicado a los contemporáneos de
1989, Siegfned en 1990 y El crepúsculo de los urbanistas estaban distraídos? ¡Por qué Mozart. La interpretación fue intachable,
tos dioses en febrero de ese mismo año. el oro no es arrebatado por Alberich sino si bien la música ofrecía diferentes cali-
El tune' del tiempo de Friedrich en el que es sencillamente llevado por el aire dades. Ya por la noche pudimos escu-
cual se desarrollan las cuatro obras ya es por su propsa voluntad? ¿Por qué no es char un concierto de gran belleza con
famoso y su afirmación de que eso posible mostrar a Fafner y Fasolt como las Vísperas Soiemnes (K 339) y La Misa
resalta el hecho de que las influencias dos torpones gigantes sin provocar risitas de la Coronación (K 31 ?¡. Los intérpretes
motivadoras del relato son al tiempo en todo el teatro? fueron la Orquesta del Siglo XVIII y el
pasado y presente, ha sido muy discuti- Por supuesto, hay buenos momentos, Coro de Cámara de Holanda, bajo la
da y es bien conocido su argumento de uno de los cuales es la caracterización dirección de Frans Brüggen. Hubo cam-
que el principio ya muestra cómo será el del artero Loge como un esbozo del bios en las voces solistas femeninas pero
final. En Londres el problema radica en propio Wagner. soberbiamente inter- el concierto fue de gran calidad.
que vemos el final de Friednch y los dos pretado por Keith Riege!, otro la realiza- La tercera jomada estuvo dedicada a
episodios precedentes antes de que ción de la ominosa advertencia de Erda la música portuguesa de la época de
v e a m o s el p r i n c i p i o , y uno da p o r mediante una especie de lento avance a Mozart. Era música de salón y, así, tuvi-
supuesto que cuando llegue por fin El través del esc en ano, eficazmente llevado mos la oportunidad de escuchar páginas
oro def Rhin. descubriremos las respues- a cabo por Anne G|evang. muy desconocidas de autores como
tas a preguntas que han ido surgiendo, y La noche del estreno se benefició del José Palomino, Marcos Antonio Portugal,
que las claves perdidas aflorarán. cuidadoso ritmo (ya perceptible en las Antonio Gallassi... Los intérpretes fueron
De las cuatro producciones, la menos tres anteriores producciones) que Ber- los Segréis de Lisboa bajo la dirección
convincente es la de El oro del Rhin. Si nard Haitink impuso a la interpretación de Manuel Moráis. El concierto tuvo
no supiéramos lo que es Friedrich, un orquestal, aunque ésta tuvo sus tachas. lugar en un salón del Palacio de Ajuda.
sincero director de escena que con fre- Deborah Fíiedel fue una atractiva Freia, En las siguientes jomadas los lisboetas
cuencia muestra una inspirada imagina- Grillan Webster una radiante Woglinde, pudieron escuchar la participación espa-
ción, uno sospecharía que en lo que Gwynne Howell como Fasolt y Franz- ñola de Jordi Savall con Una cosa rara y
vemos se notan los efectos de un tem- Josef Sel)g como Fafner hicieron lo que con otro programa dedicado a Mozart y
poral agotamiento mental. Algunas cosas pudieron para vencer las dificultades de la Amaga.
son, probablemente, intencionalmente producción. Pero ni James Morris como Este pequeño festival concluía con
divertidas. Otras llegan a lo cómico sin ni Wotan ni Helga Demesch como Fricka dos conciertos del Cuarteto de cuerda
siquiera intentarlo. Y hay demasiadas estuvieron en su mejor momento vocal. Kuljken con cuartetos de Mozart
cosas que le confunden a uno.
¿Por qué Donner (el excelente Donald Kenneíh Loveland Pifar Tomos
3 6 SCHERZO
Operas
Comedias MusicaCes
10 años de experiencia en giras de óperas y comedias musicales especialmente
con las prestigiosas compañías

IL TEATRO ÚRICO ARTURO TOSCANINI DI MILANO


y LA NUEVA OPERA NACIONAL DE BULGARIA
de las que somos agente exclusivo, nos han hecho ser apreciados por más de
1.000.000 de espectadores, en más de 100 ciudades en Francia, Bélgica (Bruselas)
y Suiza (Ginebra). El 17 de abril celebraremos 1000 representaciones.
Unas 90 personas contribuyen al éxito de cada espectáculo : técnicos,
decoradores, diseñadores de vestuario, coros, músicos, cantantes, directores
de orquesta..., todos trabajan para ofrecerles una velada inolvidable.

El Teatro Victoria Eugenia de San Sebastián, el Teatro Gayarre de Pamplona,


el teatro Olimpia de Huesca, el Teatro Municipal de Gerona, elTeatro Principa]
de Lérida, se han unido a nosotros para esta temporada 91/92
¿PorqueVdsno?
Les proponemos para su temporada :
LA FLAUTA MÁGICA de MOZART
DON GIOVANNI de MOZART
LOHENGRIN de WAGNER
91 •92 RIGOLEÜO de VERDI
DUKE ELLINGTON'S SOPHISTICATED LADIES

EL BARBERO DE SEVILLA de ROSSINI


LA BOHEME de PUCCINI
LATHAVIATA de VERDI
92 • 9 3 NABUCCO de VERDI
LA VIDA PARISINA de OFFENBACH
ELVIS1 La Leyenda de BIvis Presley)

Les ofrecemos subtítulos para todas aquellas obras que no estén en el


mismo idioma que el del público.
Le facilitamos todo : material publicitario, material técnico, ect.
Dosier de prensa de las giras anteriores a su disposición.
Su contacto en Madrid :
Marie - Ange Quintana
MÚSICA2001
YVES JOSSE
Urb. Las Eras - Eras de Arriba s/n COBEÑA 28863 MADRID
Tel: 91/620 93 72 Fax 91/620 93 74
ACTUALIDAD

ViENA

La fábrica de óperas
Posiblemente no haya nada mejor sacrificada espera compensó a los allí Heinrich Hollreiser. Su E/efctra, tendió
que un estimulante Ote/to verdiano para, congregados. Hubo, claro está, algunos más bien al intimismo y a los remansos
en una ciudad que es fábrica diana de destellos que nos recordaron que nos líricos, a la economía de alardes y de
hacer óperas, iniciar el disfrute de una encontramos frente a un divo pero, en gestos, y únicamente en momentos
oferta semejante con pie firme. Contó general, la voz sonó arañada y un tanto puntuales como la escena final parece
este Ote/to con una escenografía tradi- áfona y su Canio tuvo poco contraste. perder algo el control y desbordarse un
cional, firmada por Peter Wood, y pre- El ana Vestí la giubba, por ejemplo, fue poco.
sidida por un omnipresente relieve del expuesta sin la debida planificación, ata- Hildegard Behrens, en el papel prota-
León veneciano de San Marcos, Eficaz y cada ya en forte desde el mismo gonista, mostró una preocupante dismi-
bien concebida contenia, sin embargo, comienzo, cantada a machetazos des- nución de sus facultades vocales. Su
algún detalle absurdo. El director Bens- pués, junto a Carreras actuó el barítono canto desgarrado, tendente al gnto, sólo
lav Klobucar comenzó un tanto incierta- Piero Cappuccilli en el papel de Tomo. pudo brillar a ráfagas. Como actriz, en
mente, con tiempos muy arras- cambio, se mostró muy expre-
trados, una orquesta que sona- siva, emanando esa energía ani-
ba a medio gas y unos coras mal, ese sex-appeoí que carate-
que parecían movidos por riza a la Behrens. Gracias a una
poleas en la escena ¡nidal. Pero emisión mucho más libre y a
pronto se centró, mostrando una técnica vocal más desarro-
una mayor participación emoti- llada que la de su colega, toda-
va y una loable unidad de con- vía es capaz Christa Ludwig, a
cepto, aunque sin dejar de sus casi 64 años, de embocar
incurrir en alguna exageración algunos sonidos espléndidos.
de volumen en los momentos Tiene la inteligencia de adaptar
de conjunto. un papel como el de Clitem-
nestra, en principio algo dramá-
Del reparto destacó a nota- tico para sus medios, hasta
ble distancia el gran barítono encajarlo, tomándolo más líri-
Renato Bruson. dando vida a co, en los moldes de su propia
un Yago absolutamente modé- vocalidad. Pero que lo más
lico. Sinuoso, jamas vociferante, SCHAFFLER sorprende de la artista, es el
creador de inquietudes múlti- Eíefctroen ¡o proJuícOi-i ne Harry Kiipter FOTO. hecho de que, al contrario de
pies en el corazón de su señor, lo que hacen tantos colegas suyos de
esta vez el cantante italiano no padeció Aunque su voz, traspasada ya la sesen- edad avanzada, no se limita solamente a
a causa de sus habituales limitaciones de tena, haya perdido algo de brillo y a acentuar, a bosquejar o sugerir las líneas
volumen gracias a la ideal capacidad de veces suene un tanto sofocada, la nque- vocales de los personajes que interpre-
la Staatsoper. Por su parte, la prestación za del timbre continúa sin encontrar ta, sino que aún los canta de cabo a
del tenor Giuseppe Giacomint en el ral actualmente parangón en su cuerda. rabo, con destellos de opulencia tímbri-
principal puede resumirse en dos pala- Aunque en algún momento se dedicara ca y sin un solo sonido de anciana.
bras: una voz. Por, lo demás, el intérpre- a ahorrar voz amparándose en la comi- Admirable.
te es poco refinado y el fraseo escolásti- cidad de su papel, cantó un Prólogo de
co, a bastantes leguas del de Plácido verdadera antología. Correcta, por su
Domingo. El propio vocalista entuba Los demás intérpretes oscilaron entre
parte, la Nedda de joanna Borowska y lo aceptable y lo discretísimo, destacan-
mucho los sonidos, y sólo en algunos desarbolada y sosa la dirección de Fabio
momentos de slanao -los mejores de do entre ellos, por su composición de la
LUISI, que no colaboró demasiado a la figura de Egisto. el bravo Heinz Zednik.
su caracterización-, deja entrever su brillantez del espectáculo. La velada se
verdadero color, El punto negro de la completó con una Cavalteno Rusticana, Finalmente, La Flauta Mógica presen-
función vino de la mano de Rosalind cantada previamente, en la que intervi- taba la escenografía clásica de Otto
Plowngt, Desdémona de última hora lla- nieron la mezzo Agnes Baltsa, de atracti- Schenk, quien concibe la óper^i como
mada para sustituir a Mirella Freni. Emi- vo timbre asopranado, con alguna un hermoso cuento fantástico, sin
sión entubada, agudos desgarrados y oquedad, y aflautados agudos, y el tenor entrar en disquisiciones mas profundas.
tirantes, timbre genérico, son las cre- Luis Lima, en aceptable forma y muy La obra contó con una dirección del efi-
denciales, no demasiado estimulantes, entregado aunque su voz, a veces, tien- caz y algo rutinario Peter Schneider y las
de la soprano británica. Notablemente da a destimbrarse. La escenografía de prestaciones vocales de Robert Lloyd,
inferiora Dámela Dessi, quien actuó en ambas óperas, abundante en buenos uno de los grandes camelos actuales de
La Zarzuela, este Oteito fue el perfecto detalles de dirección escénica, la firmaba su cuerda en el papel de Sarastro, Eliza-
negativo del que escuchamos hace el desaparecido Jean-Pierre Ponnelle. beth Cárter, una digna Reina de la
pocos meses en el coliseo madrileño. Noche aunque imprecisa en las agilida-
La Elektra straussiana, por su parte, des, y la participación de algunos mozar-
tianos de moda como son Antón Scha-
Tras el Otelío asistimos al s/iow de los presentada el polémico montaje de ringer (un gracioso Papageno) y Kurt
Payasos cantados por José Carreras. Harry Kupfer caracterizado por un
omnipresente recuerdo de Orestes, Streit (un Tamino sensible y de voz
Digo show porque para escuchar a corta).
Carreras, ídolo absoluto del público vie- bastante sangre gratuita y una corte de
nes, algunos llegaron a hacer una cola Clitemnestra con numerosos pegamoi-
de tres noches. Y me pregunto si tan des. Dirigía la orquesta el veterano Joaquín Martín de Sagarmínaga
38 SCHERZO
ACTUALIDAD

Frühbeck
La dimisión de Abbado
en Mena Como ya se rumo- ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ _^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ _ desacuerdos. En unas
reaba hace algún B ^ B ^ B ^ B ^ B I B^B^B^B^BJ recientes declaracio-
En el envidiable curriculum directoriat
tiempo, el prestigioso B^B^B^BJBJ ^ ^ | | H nes de Claudio Abba-
de Rafael Frühbeck de Burgos, se mscn-
director de orquesta, B^B^B^B^BJ ^ ^ ^ ^ ^ k ^ ^ f l do a ta revista de tea-
bre como acontecimiento de relieve su
titularidad con la Wiener Symphoniker, Claudio Abbado re- B^B^BBjAVJ ^ M ^ ^ ^ ^ ^ ^ H tro Büfine (Escena)
nuncio a continuar en ^^^^^lAV^ j^^^^^H dijo: «cada vez que
orquesta de abolengo en dudad que lo
la Opera de Viena ^^^^HKI&W f^^^^^B entro a la Staastoper
tiene como centro de actividad musical
argumentando reco- ^^^^^flft *~^^^^^^^^| (Opera de Viena),
constante. Una lista de antecesores muy
mendaciones médicas B ^ B ^ B ^ B f t - ^^^^^^H reviso inmediatamente
calificados subraya más la significación ^^^^^^H a ver si mi nombre
que le sugerían redu- ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ K f ^
de la etapa, que se ha iniciado con un
cir drásticamente su ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ | ^ "' ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ H continúa puesto en la
programa repetido en cuatro conciertos
que tuvieron por marco la gran sala de
tren de actividades. B i ^ ^ ^ ^ ^ K ' / ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ J puerta de mi oficina».
conciertos del Musikverein.
No obstante, el f/L^^^^M ' ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ | Claudio Abbado,
corresponsal de r l ^ ^ ^ ^ H ^^^^^BH sin duda para no
Fui testigo de la sesión considerada SCHERZO en esta f J ^ ^ ^ B ^B^BJ 1 armar un escándalo y
como de presentación oficial, colmado ciudad tenia conocí- \ ^ B ^ B ^ B / ^B^BJ \ restarle importancia a
el aforo y unánime la respuesta en un miento, a través de AS^B^V ^BM los hechos, que se
aplauso con rango de ovación continua- fuentes ligadas a la _ ^ ^ B ^ B * _ ^ ^ í - trata de motivos de
da, tanto en la parte rendida a Mozart, Opera de Viena, que " ^ ^ B / . ^^Sk k a K ( - salud ya que «no
como la que ofreció una rutilante ver- se estaba llevando a B ^ K ^ M V ^ f l P ^ ^ V B Ü H k estoy buscando nuevo
sión de La consagración de ta primavera. cabo una campaña ^^KSBT _^B^B^K trabajo en ninguna
para forzar a Abbado B ^ M M ^ ^ ^ ^ — fap^^^B^B^Kí parte». Pero la direc-
Frühbeck, que no podía olvidar las
celebraciones del bicentenario que col- a abandonar tan B^B^B^B^BJ B^B^B^B^BJ ción de la Opera de
importante puesto. aaudl0 Abbado Viena, por presiones
man de músicas alimentadas p o r el
Por tal motivo intenta- del Ministerio de
genio de Mozart el mundo sin fronteras mos confirmar oficialmente algunas de Educación y Cultura quienes califican el
de! arte, supo elegir una obra que. servi- estas versiones, pero por ahora la Opera hecho «como una pérdida temblé para el
da en su totalidad, hacia setenta años no quiere hacer ningún comentario. Sin prestigio de la Staastopef». están buscan-
que no se brindaba en Viena: la Post- embargo, se pudo conocer que las rela- do que Abbado reconsidere su posición
hom Serenade, cuyos siete movimientos ciones de Abbado y la actual dirección de o que su separación no sea completa.
se vieron precedidos y clausurados, muy Waechter y Holendar no eran tan buenas
de acuerdo con viejas tradiciones, por y eran motivo de constantes fricciones y
sendas marchas. Con una orquesta sin LM.
violonchelos, muy felices los solistas - e l
que dio vida al instrumento original, decidido ataque de los instrumentistas, ción del fagot y la perfección de toque
Heinnch Bruckner, situado en lo arto, en los poéticos remansos que sirven el del timbalero. En resumen, una presen-
la tribuna del órgano-, con una cuerda mejor contraste a la explosión torren- tación por completo positiva casi en vís-
fluida, sólida y leve al tiempo, virtuosista, cial de Le sacre stravinskiana, desataran peras de la importante gira de la W i e -
expresiva y atenta al matiz, gustamos el premio entusiasta de los aficionados. ner Symphoniker, con su nuevo direc-
una hora musical llena de encanto.
Y si en Mozart pudo gustarse la flexi- tor, por tierras norteamericanas.
La precisión, la firmeza y seguridad bilidad expresiva del oboe, en Stravmski
peculiares en una batuta que impulsa el cabe rendir cita especial a la introduc- Antonio Fernández-Od

Agencia de Viajes especializada en:


ANDANTINO
FESTIVALES, OPERAS Y CONCIERTOS 7 MUSICAL TOURS

Programas para: Bayreuth, Berlín, Budapest, Chicago, Florencia, Granada, Linz,


Londres, Milán, Munich, New York, Paris, Pésaro, Salzburgo, San Francisco, Vene-
cia, Verona, Viena.

Para recibir información pueden solicitarla a:

C/ Vuelta del Ruiseñor, 5 Tel.: (96) 361 65 75 Madrid: Tel.: (91) 401 70 72
4601O VALENCIA Fax: (961 362 95 38

FIN DE AÑO EN VIENA - CONCIERTO DE FIN DE ASO. Director: Carlos Kleiber.

SCHERZO 39
ACTUALIDAD

LASER-DISC
El legado de Karajan
Las sinfonías de Beethoven, sexta y última

N
o sé si el otoño de 199 i es la fe- nuevo con la Filarmónica de Berlín, y de televisión, Telemondial. constituida en
cha más apta para Inaugurar, por nuevo para DG (editado en CD, Colec- 1982, entre 1982 y 1986, como siempre
fin, una sección, dentro de esta ción KarajanAinfonías: 429 0892, álbum con la Filarmónica de Berlín, serie edita-
revista nuestra, que pase revista a las de 6 CDs, con seis Oberturas), y, final- da ahora, otoño de 1991, por Sony
producciones que, en progresión cre- mente, entre 1982 y 1984, nuevamente (publicada en LD: SLV 46363/67, álbum
ciente, van apareciendo en el medio del con la Filarmónica de Berlín, y también de 5 LDs). Como en el caso del audio,
Loser-disc o Wdeo-disc la realidad es que para DG (editado en CD: 415 0662. también hay que prescindir en este
los primeros compactos con imagen vie- álbum de 6 CDs. con cuatro Oberturas). inventario de vanas grabaciones de tele-
ron la luz en 1988 y nos hallamos, No contabilizo en este recuento, lógica- visión que Karajan efectuó, entre 1967 y
actualmente, en el cuarto año de vida [980, para la empresa germana anterior-
mente, las grabaciones de Sinfonías suel-
de un sistema que, al igual que ocurriera mente mencionada, la Unitel, que inclu-
tas que Karajan realizara para diversas
con el hoy umversalmente implantado yen una famosa versión de la Quinta Sin-
compañías discográficas, desde la misma
CD -nacido seis años antes, 1982, que fonía -dirigida, en lo cinematográfico,
DG hasta RCA o Decca, con orquestas por Henri-Georges Clouzot, año 1967-
su hermano el LD, mayor en tamaño,
como la Filarmónica de Viena o la Sta- o una primera realización fílmica de la
menor en edad-, ha conocido un éxito
inmediato en el Japón y en atskapelle de Berlín. Novena, debida al propio Kara-
Norteamérica (en ambos países jan -año 1969-. que no han
pueden ya encontrarse casi mil pasado todavía (supongo que
referencias de registros en la llegarán al medio más tarde o
materia), es aceptado decoro- más temprano) al Loser-dísc.
samente en la Europa Central
(en especial Alemania), incre- Todavía una aclaración: más
menta su índice de ventas pau- de un discófilo, a raíz de lo
latinamente en el Reino Unido expuesto, entenderá que la
y entra con senas dificultades colección de LDs que ahora
en el mercado latino (Francia, presenta Sony, motivo de este
Italia y España). comentario, se corresponde,
desde la perspectiva del sonido,
De otra parte, puesto que con la grabación cuarta del
del sistema como tal se habla apartado audio, esto es, el
en el recuadro adjunto, será registro para DG de 1982-84,
bueno dar una explicación de lo que, de hecho, dejaría el
nuestro título: no se trata, al recuento previo en sólo cinco
comentar este ciclo en 5 LD (o producciones reales, Pues bien,
VD, como ustedes prefieran), no es así, y el firmante de este
que Sony edita dentro de la texto se reconoce como pri-
serie global Herbert von Kara- mer sorprendido, ya que, efec-
jan: His íegacy for Home Video, tivamente, daba por sentado
consagrado a las Sinfonías de que los 6 CDs de Deutsche
Beethoven, de hablar de la Grammophon eran el soporte
Sexto y de la última, o sea, de la sonoro de una producción fil-
Novena, sino de la entrego sexta mada, tal como la contraporta-
y última que Karajan efectuara da del álbum parecía aseverar
de uno de sus temas preferidos «Deutsche Grammophon
(algunos me dirán que su tema) recording for a Telemondial
en la música, la serie completa video production». La primera
de las nueve composiciones en pista nos la da la presencia de
el plano sinfónico dejada por un cuarteto solista diferente en
Ludwig van Beethoven. Vamos la Noveno Sinfonía: Janet Perry,
a matizarlo de inmediato. Herbea van
foro, sow Agnes Baltsa, Vmson Colé y
José van Dam en el oudio, Lella
Karajan
Karajan, como saben buena Cuberli, Helga Müller-Molinan. Vinson
parte de los melómanos (y creo que Por otra parte, Karajan grabó ex pro- Colé (única coincidencia) y Franz
todos los discófilos), grabó, poro el disco, feso, para el vídeo (o la televisión, en Grundheber en el vídeo. Cuando se exa-
o sea, en audio, cuatro veces el ciclo estricto), o sea, con imagen y sonido, el minan las diferentes duraciones, pieza a
beethoven i ano, a lo largo de su dilatada ciclo beethoveniano íntegro en dos oca- pieza y movimiento a movimiento, o se
carrera: entre 1951 y 1955. con la siones: para la Unitel alemana, con sede perciben diferencias en materia de repe-
Orquesta Philharmoma de Londres, en Munich, entre 1967 y 1977, como es ticiones (la del Allegro con brío de la
para EMI (editado en C D : CMS 7 natural con la Filarmónica de Berlín, serie Primera Sinfonía, por e|emplo, con expo-
633 102, álbum de 5 CDs), entre 1961 y editada en í_oser-d/sc por Deutsche sición repetida en audio y omitida en
1962, con la Filarmónica de Berlín, para Grammophon entre 1990 / 1991 (publi- w'deo), se hace incuestionable que, aun
DG (editado en CD: 429 0362, álbum cada en LD:072 1301/11/21 y 3 I . 4 L D coincidiendo parcialmente en fechas
de 5 CDs), entre 1975 y 1977, de sueltos), y para su propia compañía de

40 SCHERZO
ACTUALIDAD

que Karajan ha dado de tan complejos


pentagramas. Hay, además, movimien-
tos aislados que merecen mención por-
menorizada, como el Larghetto de la
Segundo Sinfonía, el Allegretto de la
Octava, y, sobre todo rotunda especiali-
dad de la casa, el Adagio de la Cuarta
Sinfonía, página, que, en conjunto, recibe
en esta grabación la mejor
interpretación que Karajan haya conse-
guido de la pieza en las últimas dos
décadas de su carrera.
La bondad de la toma de sonido
-debida a Günther Hermanns, un habi-
tual de la escudería Karajan, con la
excepción de las Sinfonías Quinta y
Sexta, donde es Wolfgang Gülich el
ingeniero sonoro -permite, incluso,
acceder a detalles de interpretación
microscópicos, como el fa agudo de los
fagotes, en el desarrollo del Finale de la
Séptimo Sinfonía (c, 192-200). que Kara-
jan hace tocar, por cierto, una octava
más grave, de manera perfectamente
audible, o, ya en el capítulo de lo anec-
dótico, el adelanto levísimo de un trom-
peta en la segunda interpelación del
tutti, apenas iniciado el último tiempo
de la Novena (c. 16). Dentro de esta
misma partitura, es (desagradable)
novedad, en el Scherzo, la mutación del
diseño del timbal a solo, negra (punti-
llo)/corchea/negra, en un mero
negra/negra (o sea, faVfa', sin más), tal
cual hiciera en su grabación para Abba-
do el timbalero de la Filarmónica de
Viena (c. 195 a 204, y lo mismo en la
repetición, c. 725 a 734); lo que ya
(1982-84 para los CDs, 1982-86 para da con el gusto de cada cual, o que se entra en el marco de lo pintoresco es
los LDs), estamos ante interpretaciones afirme fmaximalismo igualmente excesi- que en esta segunda presentación de la
diversas de las mismas composiciones, vo) que no existe mejor Beethoven que secuencia, cuando la figura rítmica se
con lo que la serie beethoveniana de éste, porque ni en los gustos hay unani- repite cuatro compases después (c.
Sony resulta ser, en definitiva, sexta y midad ni anda el abanico interpretativo 738), en diminuendo, el percusionista
última, como nuestro titulo expresara, carente de beethovenianos de fábula, nos obsequie con un preciso trio de fas
en la carrera artística de Karajan. desde Furtwangler, Klemperer o Szell -que no dúo-, de perfecta medición y
De ahí dimana un, comprensible, pri- hasta Masur, Wand o (¡Ay, espanto de ritmo, como si quisiera decirnos: «Para
mer valor de estos 5 LDs: es el último los punstas!) Hamoncourt que veáis que si sé hacerlo, ahí queda».
acercamiento, que nos sea accesible, de Por ello, y en una panorámica de
un gran maestro a una música que inter- conjunto, estamos ante un notabilísimo Las carpetas de estos LDs no suminis-
pretó, más que ninguna otra, a lo largo Beethoven en lo auditivo, en lo sónico, tran, de otra parte, información detallada
de su vida. Cuando se publicaron los con traducciones que. escuchadas inclu- acerca de las fechas de registro, que sólo
CDs de 1980-84, comenté en estas mis- so sin el soporte de la imagen, como se enuncian en un amplio «1982-1986»,
mas páginas que empezaba a ser patoló- meros CDs. comprenden trabajos de al que ya se ha hecho referencia. Pero
gico, a estas alturas, zambullirse en polé- palpable hondura: así, la impresionante, aquí es la imagen, nuevamente, quien
mica alguna sobre la valía o no de Kara- híper-densa Heroico, la siempre trepi- viene a facilitamos alguna pista de mayor
jan como intérprete, en general, y de dante Quinta (una obra que Karajan ha precisión, aunque a través de una labor
Beethoven en particular. Creo que lo dominado como pocos maestros, y que casi detectivesca. Veamos (nunca mejor
último que puede predicarse de traduc- en todas sus traducciones ha tenido el dicho): Thomas Brandis, concertino de la
tor y obras (aunque todavía haya quien carisma de lo señero), una nada desde- Filarmónica de Berlín junto a León Spie-
lo pregone alegremente) es que Karajan ñable Pastoral (de extraordmano pnmer rer, tras la jubilación de Michel Schwalbé,
ignorara lo que eran las Sinfonías de movimiento y glorioso Scherzo, aunque aparece en las filmaciones de las Sinfonías
Beethoven; aunque sólo fuera por el el engarce de la Tormenta y el Finale Quinta y Sexto; pero, habida cuenta de
número de horas, semanas y años que el siga, todavía hoy. resultando objetable que Brandis abandonó la orquesta en la
desaparecido director dedicara a estas en cuestiones de tempo), Séptimo de primavera de 1983, la grabación de las
partituras, habría que concederle una apisonante final (iQué exhibición, a los dos obras mencionadas sólo ha podido
autoridad artística en la materia. Otra casi ochenta años, de tensión rítmica!) y realizarse a lo largo de 1982 o en los pn-
cosa es que tal propuesta (propuestas, espléndida, impresionante Novena in meros meses de 1983, lo que convierte
en este caso, como ya sabemos) coinci- tato, con una de las mejores lecturas a estos trabajos en los más antiguos de la

SCHERZO 41
ACTUALIDAD

serie que se comenta. Todavía otra signi-


ficativa y reveladora presencia, la de la
clarinetista Sabme Meyer, cuya nomina-
ción para la plaza de solista de la orques-
ta degeneró -en gran medida a causa de
los usos desvergonzadamente misóginos
efe la institución, hoy ya casi extintos- en
el mayor conflicto acaecido entre Karajan
y los profesores de la Filarmónica: Sabme
Meyer sólo permaneció en la orquesta
durante una temporada, la 83/84, y en el
mes de septiembre de ese último año
comunicó su decisión de no continuar en
la formación a causa de las presiones que
sufría en su trabajo; la partida de Meyer y
la designación por los músicos de un
nuevo clarinete solista motivaron una
violenta reacción de Karajan, que en la
primavera del 85 anunció su voluntad de
limitarse a cumplir los términos escuetos
de su contrato en Berlín -o sea, los con-
ciertos de abono- y canceló todos los
compromisos discográficos, filmicos y
hasta de giras de concierto (Festival de
Salzburgo incluido) con la orquesta. Las
aguas no volvieron a su cauce hasta el
Heibetl van Karajan can la Filarmónico de Beriín FOTO- SONV mes de septiembre, cuando, tras una

¿Qué hacer con un


reproductor de Láser-Disc?
Quizá esa sea la obligada primera cuya información apenas rebasa los 20 lanzamiento del sistema-, puede obte-
pregunta: ¿para qué sirve, qué es, de minutos de música (frente a los 75 a 80 ner prestaciones plurales de imagen y
qué nos vale una máquina («Otra mas, minutos del CD Disc), y que se leen sonido a través, siempre, de discos tef-
otra cosa nueva...») reproductora de igualmente por una sola cara; los CD dos por medio del láser.
Vídeo-discos o Laser-dtscs. Bien, sin Video Singles, esto es, prototipos de Eso sí, advertencia tan de sentido
entrar -¡Líbreme Dios de osadía tall- Laser-disc que, por una sola cara, con común como la anterior, y más si cabe:
en el terreno de mi sabio amigo Alfre- 12 cms. de diámetro, combinan infor- no se le ocurra, si compra un lector de
do Orozco. un lego en la materia, mación audio-visual (entre 6 y 10 minu- LDs, escuchar el sonido, la información
como es el que esto redacta, que sólo tos) e información exclusivamente sóni- de audio, a través del altavoz de su tele-
tiene a su favor la convivencia desde ca (alrededor de los 20 minutos); los visor (en el que. lógicamente, verá las
hace tres años con el mecánico artificio CD Video de duración media (Extended imágenes), ni siquiera a través de ios
(que diría el clásico), puede atreverse a Piay), que, por los dos coros, contienen Boffes de un televisor estereofónico, si
dar respuesta a dos o tres preguntas de información que combina imagen y es propietario de uno; conecte directa-
ese jaez. La primera, la más obvia, es sonido (en tomo a los 20/25 minutos mente la salida de audio del aparato de
que un sistema de reproducción de por cara), de 20 cms. de diámetro; y, Laser-disc a su amplificador de toda la
LDs ofrece, primariamente, lo que su por último, los LDs o Laser-disc norma- vida, y oiga a través de los altavoces de
nombre indica, esto es, lectura de infor- les, o CD Video Long Play D/scs, de larga su equipo la información sonora, tal
mación -que no grabación, tal como duración, que por uno o dos coras, con como hace con los discos compactos, o
sucede en los lectores de compoct-d/sc duración que iguala la de los CDs (75 a incluso con esos arcanos (pero maravi-
al uso- contenida en un LD (Laser-disc) 80 minutos), presentan un contenido llosos) discos negros, también llamados,
y/o en un CD. Lo cual nos lleva a una audio-visual, con diámetro de 30 cms. en pretéritas calendas. LPs, genuino
primera peculiaridad del sistema: un vinilo anterior al láser de nuestros días,
aparato de Vídeo-disco puede hacer ¿Hay que tirar el resto del equipo que seguro que alguno (o muchos, por
igualmente las funciones de un repro- para instalar un reproductor de LDs? ventura), guarda escondidos en su casa.
ductor de audio de discos compactos. Naturalmente que no, para nada. Lo Pues haga eso, oiga los Vídeo-discos
De hecho, un lector de LDs puede que sí parece de sentido común es pre- con sus altavoces de siempre, porque,
operar con anco tipos diferentes de dis- venir al potencial adquirente de un prepárese si no se lo han contado ya,
cos de tecnología óptica: los CDs nor- reproductor de Discos compactos acer- los LDs, esos que ya llegan, suenan
males, de 12 cms. de diámetro, cuyo ca de las posibilidades múltiples de lec- mejor (en voz baja se lo digo) que los
contenido, exclusivamente de audio, se tura de una máquina de Video-discs, ya mismísimos CDs. De nada..,
'ee por una sola cara; los mini-CDs, de que, por una cantidad superior -tampo-
80 cms. de diámetro, o CDs Singles, co excesiva, en un mercado que tiende
a la baja, pasada la primera oleada de J.LP.A.
42 SCHERZO
ACTUALIDAD

de qué manera, como hemos podido


comprobar en los años siguientes!); Wild,
a lo más, fue el competente director de
fotografía de Niebeling en aquel trabajo
pionero, que, todavía hoy, provoca admi-
ración, y que, por desgracia, no ha tenido
apenas seguidores, ni tan siquiera imita-
dores. Descartada, pues, esa tan deseable
hipótesis de la directa codificación cine-
matográfica aplicada al mundo del con-
cierto, lo que tenemos es estrictamente
eso: conciertos, o para-conciertos, estu-
pendamente recogidos en las imágenes,
sin un atisbo de fallo en encuadre o plani-
ficación, con seis o siete tomas -Karajan
en doble tiro de cámara (izquierda y
derecha del podium), cuerdas (violines,
violonchelos y contrabajos, violas casi
ausentes), viento en dos filas (con doble
encuadre, derecha e izquierda) y timba-
les- repetidas hasta el aburrimiento.
¿Puede pedirse más? Entiendo que sí,
sobre todo cuando se asegura -así se
indica en la catalogación hecha por Sony
del Legado de Karajan- que estamos ante
producciones de estudio; ocurre que
tampoco esto es del todo cierto, ya que
ciertos planos de la sala de la Philharmo-
nie berlinesa nos revelan a una audiencia
que sigue el acto musical, como en las
Sinfonías Segunda, Tercera, Quinta (con
muy evidentes planos del público), Sépü-
ma o Novena. Acaso no cabe pedirlo
todo, esto es, que a una soberbia realiza-
ción técnica en lo sonoro se asocie una
no menos creativa e inventiva (en suma,
atrayente, envolvente) realización en lo
visual, pero el eco del trabajo de Niebe-
ling. a casi un cuarto de siglo de distancia,
resuena con inexcusable fuerza.

Herbeit von Kora¡an FOTO- LAUTlfiWASSÍR


Con todo, no sería justo negar al tán-
dem Wild-Karajan instantes de pujanza
larga reunión, Karajan y la Filarmónica se iluminación, bella incluso en determinada audio-visual evidente. Y, aqui s(, uno
presentaron juntos, nuevamente, en las planificación, pero, en conjunto, pondera- parece elevarse por encima del resto: se
EJerliner Festwochen, para interpretar la das las casi cuatro horas de música, pobre produce en la excelente lectura de la
Miso en s menor de Bach. Por ello, hay de imaginación, plana en su concepto y Cuarta Sinfonía, y viene dado por la pre-
que deducir de la presencia de Sabine reiterativa en la plasmación del continente sencia de la citada Sabine Meyer. Cuan-
Meyer en las Sinfonías Tercera y Cuarto visual. Obviamente, Emst W i l d no es do, en la segunda sección del Adagio, el
que estas composiciones fueron graba- Hugo Niebehng, el hombre que en 1967, clarinete, cantobile (c. 26 a 33), alza su
das durante la temporada 83/84, la única con esa pasmosa filmación, absolutamen- canto por encima del pizzicato de los
en que la clarinetista estuvo frente a los te cinematográfica, de la Sinfonía «Pasto- violines, la cámara de Wild enfoca, plano
atriles de la agrupación. En fin, la compa- ral», en los estudios de la CCC, encandi- medio, a Sabine Meyer, y enseguida,
recencia misma de Lella Cuberli en el lara a Karajan con el medio televisivo {jY fusión de plano y contra-plano, Karajan
Op. 125 puede damos indicio de que entra en el fotograma, como imogen-
esta Sinfonía «Coral» se ha debido grabar rsflejo de la primera: el cruce de ges-
entre 1985 y 1986, ya que Karajan no BEETHOVEN: Los nueve Srn|i>nroi Orquesta Filar- tos/miradas entre solista y d i r e c t o r
empezó a contar con la soprano america- mónica de Bertln. Director Herbert von Karajan-
Solistas en la Sinfonía rí 9 Lella Cuberli (Mprino),
(minutos I3'42" a I4'O5" del loser-disc),
na hasta el primero de los dos años cita- Helga Müiler-Molinari (mezzosoprano). Vmson transformada aquélla en articulación de
dos. Colé (tenor), Franz Grundheber (barítono). Coro éste, convierten a esta secuencia en un
en la Sinfonía n° 9. Wiener Singverein (director:
Helmut Froichauer). Realización: H e r b e n von
extraordinario documento visual, que va
Y este paso al tema de las imágenes, a Karajan, E r n n W<ld. Produción: Uli Markle. más allá del sobresaliente logro musical
lo visual, conduce a una de las reflexiones Supervisor de la grabación: Micnel Glotz. Ingenie- que estamos escuchando. Es un instante,
menos positivas acerca de este ciclo. ro de sonido: Gunther Hermanns, Wolfgang
sí, pero, por desgracia, no hay muchos
Gülich (Sinfonías Quinta y Sexto) Grabación: Berii-
Karajan, junto a un viejo colaborador ner Philharmonie. 1932-1936. Duraciones: 5600" asi en un trabajo artístico que habría
suyo, Emst Wild, se responsabiliza de la (Smfon'os Pnmeru y Octavo}, 86'38" {Sjnfonicjs Segun- merecido mejor apoyo de la imagen.
realización fllmica de estas interpretacio- da y Terte<a), 68'1B" (Sinfonías Cuarto y Quinta/
75'08" (Sinfonías Sexla y Séptima): 69"33" (Sinfonía
nes. Realización perfecta, eso sí, cuidado- Novena). SONY. SLV «363/67. User-dlsc
sa y detallista en los encuadres, justa en la
José Luis Pérez de Arteaga
SCHERZO 43
SONY

MUStC IS
1
OUR VISION CIAIIIC4L

ES SENTÍ AL
CLASSICS
SBK/SBT 47bSS
SBK/SBT 47659

SBK/SBT 47660

IIII

SBK/SBT 47665
SBK/SBT 41(,M
SBK/SBT476bS
SBK/SBT 47670

SBK/SBT 47654 SBK/SBT 47655 SBK/SBT 47656 SBK/SBT 47b57


ENTREVISTA

Cario María
Giulini,
el misterio
déla
fOTO: D.G
dirección
C
ario María Giulini vuelve a ser noticia viva en España con motivo de tres
conciertos en Madrid. Barcelona y Valencia en los que va a dirigir una obra
que le es particularmente afin: el Réquiem de Verdi. En su anterior visita
a España, durante el pasado mes de marzo, tuvo lugar la gratísima conversación
que seguidamente se transcribe, que no hubiera stdo posible sin la amistosa
colaboración de Roberto Portillo, jefe del departamento clásico de Sony España,
y de Alfonso Aijón, director de Ibermúsica.
Lo primero que sorprende de Giulini no son tanto sus modales exquisrtos cuanto
el que uno se siente acogido con afecto y en plano de igualdad, sin la menor
sensación de hallarse ante un divo que, en bien de su imagen, soporta estoicamente
el acoso de los entrevistad o res y sus tediosas preguntas. Al poco tiempo, se tiene la
sensación de hablar con un amigo a quien aún no se conoce del todo -Giulini tiene
una personalidad riquísima, honda- pero al que ya le ligan lazos de familiaridad.
Durante la conversación, la actitud anti-divo de Giulmi se ratifica de modo
inmediato: los términos «director de orquesta» existen en su vocabulario, pero
elude sistemáticamente aplicárselos a si mismo; él es tan sólo un músico que hace
música junto a otras personas. Giulmi rechaza las sentencias, las afirmaciones
categóricas y es reacio a hablar de música. No obstante, poco a poco, como sin
darle importancia, con palabras sencillas y actitud modesta, logra arrojar luz nueva
sobre temas aparentemente conocidos.
El tempo de Giulini es, bien lo saben los discófilos, pausado, y la conversación
resulta muchísimo más breve de lo deseable. Pero las visitas del maestro a España
son frecuentes últimamente y 3caso en la próxima podamos reanudar
la conversación.

SCHERZO 45
ENTREVISTA

S
CHERZO.-Aioestro Qulini, nos satisface darle lo chando el registro tuve esa misma impresión, la de ver a un
bienvenida en Madrid por segundo vez en esta tem- bellísimo ser humano... muerto; t o d o estaba en su sitio,
porada, después de aquel precioso concierto con las correcto, cuidado, pero sin vida. Entonces le dije a Legge:
Sinfonías 6 y 7 de Heethoven. «Necesito un día de descanso y otra sesión». Y me lo conce-
CARLO MARÍA GIULINI.-Yo vuelvo siempre dió. Tras el día libre, en que cada uno se dedicó a sus asuntos,
con gran placer a España porque desde hace volvimos al trabajo y dije al Coro y a la Orquesta: «Olvidemos
muchos años e s t o / ligado a esta tierra, a este los micrófonos y hagamos música». Aquel día aprendí para
pueblo, y me agrada su cordialidad, su calor siempre que la primera cosa, más importante que la perfec-
humano. Además, he de felicitarles por el ambiente musical ción, es la vida.
que han sabido crear y desarrollar en estos últimos años; y en
Poco después, Walter Legge me invitó a Londres para una
particular por las excelentes salas de concierto que ustedes
toma de contacto con la Philharmonta y con ella grabé Los
tienen. En Italia existen numerosos teatros de ópera, pero nin-
cuatro estacones de Vivaldi: mi primer disco con esta Orques-
guna sala de concierto.
ta. Como usted sabe, la orquesta había sido fundada por
¿Saben? Durante los años 30. yo tuve la fortuna de tocar Legge y le pertenecía; era tan suya como la chaqueta que
como viola en la Orquesta del Augusteo, cu/os conciertos se usted lleva puesta. Colaboré con ella durante muchos años y
desarrollaban en una sala maravillosa de Roma, una de las más establecí con Legge, y también con su esposa, Elisabeth Sch-
bellas que hayan existido. Con la única excepción de Toscani- warzkopf. una gran relación de amistad. Un buen día -hacia
m, ausente por razones políticas, no hubo director, solista o 1964- viajé a Londres para grabar un disco y. cosa extraña
compositor célebre con quien yo no haya tocado. ¿Se imagi- que nunca me ha vuelto a suceder, llegué el mismo día de la
nan cuando un día nos dijeron que la sala iba a ser destruida? grabación, y no con uno o más de anticipación. En el aero-
Pero no por un incendio o una catástrofe: alguien convenció a puerto me esperaban el chófer de la EM1 y el pnmer clarinete
Mussolini de que bajo los cimientos del edificio estaba el de la orquesta, personaje extraordinario y músico maravillo-
sepulcro de Augusto, Y así demolieron esta sala, la única en so.,.
toda Italia... Porque ya saben; nuestro siglo XIX estuvo domi-
5,-¿jack Brymer?
nado por el melodrama, y por eso tenemos maravillosos tea-
C.M.G.-Exacto. Y Brymer me dice: «¿Conoce la noticia? La
tros de ópera, aun en las más pequeñas capitales de provincia;
Philharmonia no existe ya». Y ante mi estupor, añade: «Esta
pero música sinfónica, no hubo nada. La única que tuvo la
mañana hemos leído en el periódico una pequeña nota en la
buena idea de construir una sala sinfónica fue la Condesa Mat-
que Walter Legge anunciaba su decisión de disolver la orques-
tei, presidenta de la Academia de Santa Cecilia... Y aun hoy
ta, Reunidos los músicos, y tras unos momentos de pánico,
día, 50 años después, sigue sin haber ninguna sala sinfónica en
hemos decidido continuar por nuestra cuenta. ¿Está usted dis-
toda Italia.
puesto, maestro Giulmi. a seguir con nosotros y desarrollar el
S.-Hay, en efecto, teatros bellísimos en toda Italia, comenzan- programa previsto de conciertos y grabaciones?». Por supues-
do por la Scala... t o que accedí: la decisión de Legge era respetable y, sin duda,
C.M.G.-Sí, pera no hablo de Milán, de Ñapóles o de Vene- obedecería a problemas internos; pero yo no podía dejar en
cia: toda ciudad de provincia, qué sé yo, Reggio Emilia, tiene la estacada a amigos con quienes había hecho música durante
un precioso teatro de ópera. Excluida la de Martucci, la músi- tantos años... Ya se puede imaginar cuál era el ambiente por la
ca sinfónica no existió en Italia durante ei siglo XIX. Y un poco tarde en el estudio de grabación: en la sala, los músicos y yo;
de culpa en todo esto tuvo Giuseppe Verdi (sonríe): toda su en el estudio. Legge. El menor imprevisto podía hacer saltar
producción es operística, si excluimos el Cuarteto y las Cuatro todo por los aires.
piezas sacras... Y volviendo a España, es admirable cómo en Terminada la sesión, Legge me invitó a cenar en su casa:
los últimos 30 ó 40 años ustedes han creado, desarrollado estaban él. su mujer y su secretaria. Legge me preguntó si
toda esta vida musical, con un público numeroso, entusiasta, conocía la novedad. «Sí - l e dije- y me disgusta muchísimo
apasionado por la música... romper una relación de tantos años; pero es una decisión tuya
S - -Pero quedo tonto por hacer en ía educación musical,,, y tú sabrás por qué la has tomado», «Naturalmente -siguió
C.M.G.-No se queje: hasta hace muy poco, en Italia la músi- Legge- cancelaras todos tus compromisos con la orquesta».
ca no formaba parte de la cultura, ni de la historia del arte que «No, Walter. No soy quién para criticarte, pero no puedo
se estudiaba en los institutos. Si un abogado, un ingeniero o dejar en apuros a todos estos músicos, con quienes he traba-
un arquitecto hubiese ignorado quién era Miguel Ángel o jado tantos años...». Legge se levantó, se dio la vuelta, se mar-
Dante habría sido un escándalo; pero que alguien pensase que chó, y sólo volví a verlo, muchos años después, en un aero-
Mozart era un ciclista o Beethoven un futbolista, no tenía puerto: iba en silla de ruedas, después de haber sufrido un
importancia (Visos,)... Le repito que me hace feliz volver aquí. ataque. Y la orquesta pasó a llamarse New Philharmonia. Pero
al pnncipio las cosas no rodaron bien. El primer flauta pasó a
S.-En eí concierto de mañano va a ofrecemos usted músico
ser el administrador general de la orquesta y. por dos veces.
que ¿e es muy querida, lo de Brohms, al frente de una Orquesta
hablé con ellos para advertirles del peligro que corrían. «Es
a la que conoce desde hace muchos años, la Philharmonia.
preciso -le dije- que busquéis a quien se ocupe de las labores
¿Recuerda sus primeros encuentros con esto Orquesta y con su
administrativas, que no os corresponden». Pero la orquesta
fundador, el productor británico Walter Legge?
no mejoró y durante dos años dejé de dirigirla y trabajé con la
C.M.G.-Verá. El pnmer disco en absoluto que yo hice -¡ha Sinfónica de Londres y la Real Filarmónica. Al poco de cortar
pasado ya tanto tiempo!- fue en Roma, con la Orquesta y el mi relación con ellos vino a verme el archivero de la orquesta,
Coro de Santa Cecilia, que lo dirigía un estupendo maestro, un hombre extraordinario, inteligente y entrañable, que me
Bonaventura Soturna. Era el año 1954,,, Por entonces, yo no dijo: «Entiendo que usted se vaya ahora. Pero si un día la
sabía ni quién era Walter Legge ni en qué consistía la graba- orquesta vuelve a ser la que era. iré a buscarle para pedirle
ción de un disco; y él me dio carta blanca para hacer todos los que regrese con nosotros». Y así sucedió, y ai cabo de dos
ensayos y preparaciones que yo desease. Y así trabajamos con años reanudé la relación con ellos, Desde entonces la orques-
intensidad, con mucho cuidado; y finalmente, llegados al térmi- ta ha tenido altos y bajos, pero ahora está bien, muy bien...
no de la grabación. Legge me dijo si quería escuchar el resulta- ¡Toquemos madera! ("sonríe mientras se roza lo frente)- Pero.
do final. Aquello era... ¿Sabe usted que en Aménca. cuando créame: el problema no es tocar, o tocar bien; el problema es
uno muere, lo maquillan, lo ponen elegante y guapo? Escu-

•ÍCÍSCHERZO
CARLO MARÍA GÍULINÍ

Otoño de 1986 en que ofreció la Incompleta de


Scfiubert y la Primera de firanms, en versión inolvi-
dable, en donde la Orquesta de La Scala se superó
a sí mismo. Allí si hubo eso participación: ¿cómo la
consiguió?
C.M.G.-Sólo puedo responderle con algo que
siento profundamente. Nunca pienso que soy un
director de orquesta, sino tan sólo un músico que
hace música junto a otros músicos. Yo estoy en
deuda con mis maestros, los de composición y los
del instrumento. Tocar la viola me permitió hacer
durante años mucha música de cámara en un
cuarteto de cuerda, en el que he sido uno de esos
cuatro jóvenes que día tras día. durante meses,
viven y tocan juntos y comparten experiencias
maravillosas. Luego toqué en la Orquesta del
Augusteo, por la que pasaron todos esos grandes
compositores, directores y solistas. Puedo decirle
por eso que jamás he abandonado la orquesta,
que siempre me siento dentro de ella. Y así me es
fácil conseguir que los profesores comprendan el
privilegio y la responsabilidad que supone servir a
los grandes autores. ¿Sabe? Yo soy una persona
cualquiera, pero en mi trabajo tengo relación con
genios que se han expresado del modo más mis-
terioso que pueda existir, porque la escritura musi-
cal es...

S .-...Imperfecta limitada.
CM.G.-Así es. La música es, además, el único
arte que sobre el papel está muerto: vive cuando
suena la primera nota, y muere con la última. Por
eso, en el concierto, el músico ha de entregarse
sin reservas; pero, ¿qué queda después de termi-
nado? Nada, salvo el compromiso de la sigusente
actuación. Por eso me gusta decir que el concier-
to más difícil es siempre el próximo. El músico
tiene el privilegio de vérselas con un genio que ha
enriquecido a la humanidad: quite una de las
obras de ese compositor y, stn duda, la humani-
dad sería más pobre. A mí me gusta la palabra
servir -que no está muy de moda- a la que añado
con amor: servir con amor. Porque la ejecución
musical es un acto de amor, de posesión incluso:
en el momento en que uno hace música ésta le
pertenece, y en ese instante hay sólo un modo de
interpretarla: ese precisamente. Pero una vez que
ha sonado la última nota el genio sigue estando
en lo alto y nosotros volvemos a no ser nadie;
eso sí, obligados a que mañana mejoren las cosas.
Para nosotros no existe la palabra bien: sólo exis-
te mejor.

S.-¿Cómo prepara usted un conceno? ¿A qué


imágenes, a qué cipo de explicaciones recurre usted
hülü iVN'f para transmitir a la orquesta sus ideas sobre lo que
van a interpretar? Es claro que aun en obras abs-
hacer música. Todos los profesores de una orquesta, sin tractas, carentes de programa, como la Primera Sinfonía de
excepción, han de ser conscientes de este privilegio, que es. al firahms, dentro de ellas hay todo un cúmulo de vivencias de su
tiempo, una gran responsabilidad, la de hacer música. Se preo- autor que tino ha de revivir, esa ascensión del do menor del pri-
sa la voluntad de todos, y cada uno ha de satisfacer esos tres mer tiempo al do mayor del final supone un largo itinerario
requerimientos que tantas veces he repetido. En primer lugar, espiritual a recorrer. Y aunque usted asume esa modesta posi-
la inteligencia para comprender lo que está escnto en la parti- ción de músico entre otros músicos: como máximo, un primus
tura; luego es preciso poder ejecutar lo que se ha comprendi- mter pares, es usted quien debe indicarles así; así no. ¿Cómo lo
do; es decir, se requiere la técnica. Si llegamos hasta aqui, logra? ¿Cómo transmite el director a la orquesta la idea que
habremos alcanzado quizá una ejecución perfecta, pero fría. lleva dentro?
Faíta la participación, el alma: ¿comprende?
CM.G.-La respuesta es doble. Una es de carácter realista:
S.-Pera, ¿cómo se liego a conseguir eso? ¿Cómo lo logra uso siempre mis propios matenales de orquesta, en los que.
usted? Muchos recordamos aún su concierto del Festival de por ejemplo, van señaladas todas las arcadas que complemen-

SCHERZO 47
ENTREVISTA

ÍOTO- 5CHAFFÍ£R

tan las ligaduras indicadas por el compositor. Estas arcadas sir- apócrifas, que se cuentan al respecto. Para dar la entrada hacia
ven, además, para señalar los signos de puntuación (coma; signos místenosos en arto, bajaba la batuta y un poco después
punto y coma; punto) que el autor no indica en la partitura. atacaba la orquesta. Y si se les preguntaba a los músicos si
Con ello se ayuda a resolver el problema de la perspectiva sabían cuándo habían de entrar en medio de toda aquella
sonora; esa perspectiva que inventaron los pintores. Si el com- ceremonia decían: «No lo miramos».
positor indica forte, normalmente lo escnbe para todos los Por supuesto, hay escuelas en donde se enseña a batir el
atriles: ahí ha de intervenir el director para establecer gradua- compás; pero una vez que se explica cómo se marca a dos,
ciones. Aunque, en realidad, el propio músico, si la sonoridad a tres o a cuatro, está dicho todo. Y eso lleva cinco minutos.
armónica de su línea cobra, en cierto momento, relevancia Le contaré una experiencia propia. En la Academia Chigiana
temática, tiene de por sí la tendencia a dar mayor importancia de Siena pidieron a Guamien que diese un curso de direc-
a su línea, e|ecutando mezzopiano allí donde en la partitura se ción; yo tocaba en la Orquesta. Guamien era un extraordi-
lee piano. Esto se produce casi instintivamente y favorece la nario director pero de carácter difícil, perezoso y poco
perspectiva sonora. amigo de viajes, por lo que, fuera de Italia, nunca tuvo la
Pero, por otra parte, hay un hecho para el que carecemos fama merecida.
de explicación: ¿cómo es posible que el director logre comu- S.-Ni el renombre de Víctor de Sabata
nicarse con la orquesta, incluso sin hablar? Le diré lo siguiente. CM.G.-Un joven dirigía a la Orquesta en un Nocturno de
Yo he debido estudiar mucho tiempo y con intensidad. No he Martucci; mientras tanto Guamien, sentado en la sala, sonreía
tenido facilidad de manos para el instrumento ni tampoco sin decir una palabra. Al poco tiempo, el joven se desanimó y
para la composición: escribir una fuga o un cuarteto me costa- volviéndose dijo: «¡Por qué se ríe, maestro? He venido aquí
ba mucho trabajo. También dedico mucho esfuerzo para para aprender de usted». Guamien se levantó sin contestarle.
aprender una partitura. Lo único que no me ha costado nada subió a escena y entonces dijo: «Tiene usted razón, reconoz-
es el gesto; nunca lo estudié; me viene como algo natural, y co que no entiendo de estas cosas; sólo sé hacer esto». Y
no sé explicar cómo lo hago. entonces cogió un lápiz de su bolsillo, subió al podio e indicó:
S.-Por tonto, no podría enseñar la técnico gestual «Da capo». Y sin pronunciar una sola palabra, sin apenas un
C.M.G.-jDe ningún modo! Sólo existen dos tipos de gesto: gesto, transformó a la orquesta como si en ella tocaran ánge-
los que obtienen lo que desean y los que no. No hay gestos les. Al final estábamos todos como locos.
hermosos o feos: el erróneo es el que no sirve para alcanzar S.-Todo esío resulta un tanto descorazona dar. Resulta que
lo deseado; el justo, el que sí sirve. Mire: en Italia tuvimos dos para hacer revivir viejos signos de una partitura se precisa un pri-
grandes directores: uno, Victor de Sabata; otro, Antonio mero entre iguales cuyo oficio no se puede ensenar... En fin.
Guarnien. Los conoce, ¿verdad? De Sabata tenía un gesto casi sigamos. De otra parte, la ejecución musical está conectada a la
danzante mientras Guarnien apenas se movía. Y por supuesto, personalidad del director quien, por muy objetivo que quiera ser.
recuerda el caso de Furtwángler -cuyos gestos, como tales. siempre hará que la músico resulte vinculado a sus características
eran todos erróneos- y las divertidas historias, más o menos personales.

48 5CHERZO
Toscanini Colección

NUEVOS LANZAMIENTOS
Beethoven "
Debussy IÍMEB-IBÉSIA
SYMPHOWYNo.l TROICA- Shosukovich
SYMPHONYNo 7-LENFNC.RAD- FESTÍROMANE/ROMANFE5HVALS
MozartíVMiwoNYNc «
ARTURO TOSCANINI ARTURO TOSCAN1N1
ARTURO TOSCANIN1
ÍHE PHILADEUHIA 0RCHE5TRA

BKETHOVh\ SHOS] \K()Y[(1I DI.Ki SS"i

\K>/\HI

NI.HC Sjniplniiiv (Irilioli.i

v
Mcndelssohn
\MllMJMMEkNIGHrSDREAM SYMPHÜNIbS Schubcrt
UH SIJMMÍRNACHTSTRAUM 4 HlLl«*ll*Lil:NhAHE- SYMPHONT N J 9
• U V OLHEKZO GUEr>M¿lllAtllNE MU T>'E ^ i l - - T / IHE i:»O*í / LA tH>.-« * •

ARTURO TOSCANINI ARTURO TOSCANINI ARTURO T O S C A N I N I


THE PHILADELPHIA ORCHE5TKA THE PHILADELPHIA ORCHESTUA

MI.M)t.i..SM)ll\ S t l l l HI.K1
Siníonfu n"4 "Itiiliumi"
Siiituniii II" 3 "Ktfioiiitu" Tlit l'li¡l.nli:lpl!i;i Oitluslru
M K ' S>iii;i]i(iii\ <JICÍIL'SUJI
TtiC Pliilailelpliiu nivlitf-.il ;i

Schubert Tchalkovsky
Tchaikovsky
SYMPHONIE5
Strauss MANFRHl SYMPHONY
ROMEO t i lULIET
ARTURO TOSCAN1NI ARTURO TOSCANINI ARTURO TOSCANINI
THE PHH-ADELPHIAORCHESTRA

It II \ I M ) \ \ S M K II MKKWSKI (¡n(it)2VS
Siiitiiiii;i n" N S i i i l n t i i u il" (> I'.iliilii.il"
SI RAÍ SS RiPTIH-ll J JllllL'tJ
NBl" S_Mllplli>ii> Oivlicsir.i N H l " S;inpliiiii> OKIK^II'U
ENTREVISTA

cual no puede ir el profesor (por


eso los que llegan de verdad son
tan pocos). De hecho existen
escuelas de violín. de piano, de
trompeta: pero ¡dónde están las
escuelas de dirección de orquesta?
S.-Gerto A ios directores no se /es
puede agrupar ni por escuelas, ni por
generaciones: cada uno tiene su per-
sonalidad. Después de ¡o anterior,
¡cabe preguntarle qué aprendió usted
en et Augusteo de Erich Kíeéer. de
Klemperer, de Richard Strauss? Al
menos, ¿cuáles son sus recuerdos de
ellos? ¿Cuál es el mejor?

C.M.G.-¡Claro que aprendí


mucho de ellos! Pero si me pregun-
tan cuál es el recuerdo más hermo-
so que tengo de mi carrera, siem-
pre digo lo mismo. Realmente, el
día más bello de mi vida fue aquel
en que gané el Concurso Nacional
para el puesto de última viola en la
Orquesta del Augusteo. Es cunoso:
mi maestro me desaconsejaba ocu-
par la plaza, pero yo le dije: «Aun-
que siempre íe he obedecido,
entro en la Orquesta». Y entré.
Vea que todavía hablo de este
hecho con un amor infinito y que
pienso siempre que nunca llegué a
abandonar aquel atnl en el conjun-
to orquestal. En suma: en un con-
cierto, yo voy a hacer música con
otros profesores a los que pido un
sonido, un fraseo, una expresión
que, no sé muy bien cómo, se
acaba produciendo.
rfJIÜDG
S.-Estamos en un terreno miste-
C.M.G.-Exacto. Ni siquiera el compositor tiene en mente noso: no obstante, algunas indicaciones quizá sean útiles.
una ejecución concreta. Menos mal, porque si sólo fuese posi- C.M.G.-EI año pasado grabé en Viena, con la Filarmónica la
ble una, todo habría terminado con ella. Quien haya estrena- Tercera de Brahms: en el tercer movimiento está escrito
do obras - / o he dirigido bastantes primeras ejecuciones- «mezza voce» y en el último, «sotto voce». Tras las explica-
sabe que el compositor, al escuchar por vez primera su músi- ciones necesanas, no acababa de salir, en el Poco allegretto, lo
ca, si está bien compuesta, encuentra cosas que no sospecha- que yo sentía. Y entonces recurrí a decirles que sotto voce se
ba haber escrito. Usted sabe cuánto han corregido sus partitu- puede decir «te amo», o «te odio», las cosas más bellas y las
ras Bruckner y Mahler, y éste era un gran director de orques- más horribles; pero «mezza voce», no: a media voz acuna la
ta, además de compositor, Pero tras la audición, rectificaba y madre a su hijo, como cantando entre sueños... Lo compren-
cambiaba. El único que no podía corregir nada era el pobre dieron enseguida (También debieron entenderlo bien los músicos
Mozart que debía escribir una obra tras otra, sin pausa (Risas). de la Phitharmoma en Madnd: ese movimiento fue una de las
Por tanto, volvemos al principio: su pregunta no tiene res- cumbres del concierto). Estas pequeñas indicaciones ayudan
puesta. mucho. Volviendo a la Tercera, en el pnmer tiempo Brahms
Además, hay un hecho que escapa inadvertido a la mayo- indica «sotto voce. ma semphce»: en tal caso, es un canto
ría de los asistentes a un concierto: el director de orquesta entre sonnsas, mientras que la media voz teñe siempre algo
es el único músico que crea un sonido sin contacto físico de nostálgico.
con el instrumento. Nosotros, al hablar, tenemos relación S.-Las cosos se complican porque las indicaciones de Srahms
directa con lo que queremos expresar -sea feo o bello, son ambiguas: sin metrónomo, Andante non troppo y Allegro non
justo o erróneo- y el sonido se produce en cuanto se da el troppo casi vienen a ser lo mismo.
contacto físico. E igual sucede con el violín, la trompeta o los CM.G.-Siempre en el Allegro que abre la Tercera, Brahms
timbales. Por el contrario, a un gesto en el aire del director anota «Allegro con bno» y luego «passionato», sin darse
de orquesta, el sonido procede de diferentes lugares y se cuenta que hay un contraste, casi una oposición: el brío indica
genera de modos muy variados. ¿Por qué una misma un tempo movido, mientras que la pasión exige reflexión.
orquesta suena de diferente manera con cada director?
(La llegada de otros envevistadores, pertenecientes a un diario
Tampoco hay respuesta para esta cuestión. No se puede
nacional, nos fuerza a interrumpir una conversación que bien
enseñar a un ¡oven director cómo ha de hacer para lograr
hubiera podido prolongarse largo rato. Hasta pronto, maestro).
una cierta calidad de sonido, mientras que a un pianista o
violinista sí... al menos hasta un cierto punto, más allá del
Roberto Andrade
50 SCHERZO
CLASSI

Classics 1991
PLACIDO & ITZHAK

N
\

The New York Studio


Orchestra
Arranged and conducted b
JONATHAN TUNICK
Content
Te acerca la mejor música?

Digital DDD

Opera Highiights
Querschnitt
Extra its

Opera 1991

New Releases
Neuheitung
Nouveautés
British Composers
L'Esprit Franjáis
Baroque Special

Références

Reflexe

Vision
DIGITAL
Mid-Price

CDO7«3BBS2>rT7«3Sae« CDO 7 83B8T 2 •CT7 8M87 4 GWTNH1KITTMSU4 CM7INW3T7IMM4

cae;iMMftr7MH«4 CDD 7 MOBI * • rr T M M I * CMTNNII<IIIUNÍ4 CDD 7 m u 2 • r r T «oaea 4

CDD 7 «MOS I i I T T BM02 4 COO 7 « M I 2 • BT 7 S3OO3 4 CDD 7 03B04 2 • IT T S3904 4 CDD 7 i n o e 2 • r r 7 asaos 4
Te acerca la mejor música.
EMI
CLASSICS
Te acerca la me|or música.
Moan
LE NOZZE DI FIGARO
RkxaidoMuti

CDC 7 1 4 1 » I I L 7 B4323 4 CDC 7 S4331 1 I L 7 84111 4

O M I A HIOHtlOHTS • OUIRSCHNITT • IXTKAITS

CDC 7 543ÜT 2 •(. 7 S4327 4

CDC I B4S2B 1 I L 7 8*328 4


Opera 19 91
Te acerca la mejor música.

CDS T S429S 2 |3CD|

•WACiNhR- -RKHMlti (TftWll -

SIEGFRIED T R HENMBCKI
l í l O I C.RVNiiHLBlR.
Q H

^ ' - HilTINK-

mu CDS 7 5 4 2 9 0 jt L4CD) CDS t 54299 2 OCD]

CÍE ZAIIBESFLDTE
• O U E l NOKKINOTON

f ^<
¿i

••n
CD» 7 M U 7 2 (2CD|

JO^f W D*H
Mí'. HAMPSON

SOS T 0423S 2 (3C

1
New Releases Neuheiten Nouveautes

Te acerca la mejor música.

CDC 7 54333 2 CDC í 542S1 Z

MOZART

DANIEL
iBARENBOIMl

CDC 54192 2

CDS 7 54277 2 |2CD)

».\ i >i: i i> r e \ n n :


CDS 7 S427O 2 |2CD) COC TB43D0 2

gh ti
AIR-RAID PRECAUT1ON1
BLACKOUT
•in—IQ.N ftUCUTT, 11H
UCHT1 TO IKIIINID

I' . E
ITT» t.HAS VlLI i ^ .
t u . IK HUMMt
IW, AUCU
ÍENNSIEDT

AIL i l l r * hf^Mi^ --II b> I

CDM T «401S 3
New Releases Neuheiten Nouveautés

Wolfgang
Sawallisch

CDG T M2T2 2 CDC T B42ST 2 CDC T B4302 2


New Releases Neuheiten Nouveautés

Te acerca la mejor música.

H i s i k t r l
llmtverschfí
lis f k i p e M e
- ITIO

CDC T S41S1 2 CDC 7 B4232 9

!
Fraiicois Le limx • JefTCnhcii

f
3t
BEfijBlfct;tiiit'

CDG 7 B422T 2

CDC 7 M2B0 2

BACH
GRAUN
TELEMANN
v " ALTNIKOL

t v •
tiílRKIUl'NK'Uíll
HK
W
i.»— «-' \r,
RbcB^bc hBoni
DaUtlMliiHn
HEHHANNMAX
n
t • - • ' ^
C M 7 B4244 2 (2CO) CDC 7S4S12 3 CDC 7 S423B 2

10
EMI
New Releases Neuheiten, Nouveautés CLASSICS
Te acerca la mejor música.

Ü'IRBARA
UÍNDRICKS

COC 7 54381 2

DEBU6SY
Wtiviin

STRAV1NSKY
VIOUN CONCERTÓ
BERG
V1OLIN CONCERTÓ
oraeorchcster
Stuügan
Cianluigt Ge!mett¡

HANDEL
MES5IAH
Frimmcr. Georg,

Schrccki'nberger
Kheíníschcs
Das K lurte Komm
Herminn Max

COS 7 64087 3 (4C


CLASSICS
SCHUBERT
UMn
ELISABETH SCHWiRZKOPF
EDWIM HSCHER

CDM 7 6 4 0 2 6 2

VICTORIA
DE LOS* NOELES
EMI
CLASSICS

CDC T 0420» • CDC 7 »4*1» 1

13
VISI
D*r Ring da* Nibalungen
UfcLDX 19 tlTB 1 (11LD)
VS; «VX 99 I I T I I HVCI

Das Rhelngold
LP: LOO 99 1279 1
VC: MVB » 1IT* 1

Dle Walküre
10: IDI99 U7« 1

ve-, M V B » iara]

Siegtriad
LD; L H M 1183 t
VC: MVB H I 3 U 3
OBttardim moning
LO: LDP99 ilflT 1
VC: MVS9S 1187 1

UHID«HIM4< VC: HVDO* 1144 J LA: LDB » 12« 1 VC: MVD » 11U 1 LD: LDB9I 11(1 1 VC¡ MVH 99 1101 1

LD: LDJI 90 1091 1 VC: HVC t * 1V*1 LCl ID* M 1141 1 «KMKMIIMl LD: LDBB9 1334 1 VC: MVD 99 1214 3

The Finir Seasom

Nigel Kennedy

LDlLD*H l i l i 1 ¥C: HVC N I B 3 1 LD:LOI99 1O14 1 VC: M f N 1 l l 4 l LD:LD1 » 111* 1 VC: MVC 99 1114 1

LDlLOI 99 11IS 1 VC: MVD 99 I l l a 1 LD: LM99 11U 1 VC: MVC >• 1111 i

14
P A U L M c C A R T N E Y ' S

LIVERPOOL
ORÁDRIO 8 Y
P A U L M C C A R T N E Y C A R L D A V I S

L L L Y B Ü R G E S S
J E R R Y H A D L E Y W I L L A R D W H I T E
R O Y A L ^ ^ ^ ^ ^ C T ^ ^ ^ ^ ^ ^ ^ W H A R M O N I C O R C H E P W H P ^ C H O IR
C H O R 1 S T E R S O F L I V E R P O O L C A T H E D R A L

C A R I D A V I S
BMI

A. Torrelggung64. 28043 Madrid


DISCOS

ACTUALIDAD DISCOGRÁFICA

Con nombre propio


Sergiu Celibidache acaba de grabar ciones extraídas de la película Vladimir a nuestras páginas de crítica discográíca
otro Láser Disc, en esta ocasión para Horowitz, el último romántico, con obras por la última ópera grabada de esta
Teldec. El disco contiene una sola de Bach-Busoni, Mozart, Chopin, Schu- serie: Uno vida por eí zar, de Glinka, que
obra, la Sinfonía clásica de Prokofiev, bert, Schumann, Liszt, Rachmaninov, SMB comentará próximamente en un
interpretada por su orquesta, la Filar- Scriabin y Moszkowski, es decir, el uni- estudio discográfico.
mónica de Munich. Lo más interesante verso estético del gran pianista. Sylvain Cambreting ha grabado el
del disco está, sin embargo, en los Lorin Maazel ha grabado con la Ludo Silla mozartiano para el sello Ricer-
ensayos del maestro rumano antes de Orquesta Sinfónica de Pittsburgh para car al frente de la Orquesta del Teatro
la interpretación final de la obra: más Sony un disco llamado Tannbduser sin Real La Moneda de Bruselas. El reparto
de tres cuartos de hora de aprendizaje palabras, en el estilo del que hizo para vocal incluye a Anthony Rolfe Johnson,
absoluto en el campo de la dirección Telare titulado E/ onilb sin palabras al Lella Cuberii, Ann Murray, Britt-Marie
de orquesta. En consecuencia, un disco frente de la Filarmónica de Beriín. Asi- Aruhn y Christme Barbaux.
extraordinario y un espléndido home- mismo, y esta vez para Telare, ha gra-
naje a Prokofiev en el centenario de su bado el pnmer acto de La Walkiña con
nacimiento. Susan Dunn, Klaus Konig y Peter
Pablo Cano. El clavecinista español, a Meven, con la Sinfónica de Pittsburgh.
quien deseamos desde aquí una pronta Habrá que escuchar la singular aporta-
recuperación, ha grabado para Tecnosa- ción wagneriana de este imprevisible
ga varias Sonatas para clave de Bocche- director, capaz de las mayores geniali-
rini inéditas hasta la fecha. El disco será dades y también de las más atroces
comentado próximamente por ROB asepsias.
desde nuestras páginas de crítica disco- Andreas Haefliger, una joven pro-
gráfica. mesa del teclado, acaba de grabar su
Charles Míinch. El gran director alsa- primer compacto nada menos que en
ciano es objeto de diversos homenajes Sony Classical. El repertorio: Mozart,
discográficos para conmemorar el cen- las Sonatas K. 332, 333 y 457, más la
tenario de su nacimiento. Erato ha saca- Fantasía, K. 475. ¡Tiene coraje el
do varios compactos en los que Münch chico!
dirige obras de Roussel, Lalo, Saint- Barbirolli, Klemperer, Furtwangler y
Saéns, Honegger / Dutilleux. Disques Talich son los protagonistas de una
Montaigne, por su parte, ha publicado nueva colección llamada Famosos
varios de los más importantes concier- Directores, del sello Koch Legacy. Los
tos hechos por este director en los cuatro tienen un interés superlativo: de
Campos Elíseos al frente de la Orquesta Václav Talich, al frente de la Filarmónica
Nacional de Francia {serán comentados Checa, se edita su legendario Mó Vlost
el próximo mes de diciembre por AR (Smetana); de Klemperer interpretacio-
desde estas páginas). Finalmente, RCA- nes de su juventud (1928-1931) al fren-
BMG publicará una Edición Chor/es te de la Orquesta de la Opera de Berlín
Münch parecida a las que esta multina- {obras de Kurt Weill, R. Strauss y
cional está dedicando a Reinen Rubins- Brahms); de Barbirolli también concier-
tein, Heifetz o Toscanini. La Edición tos de su juventud {1928-1933} y, final-
Münch recogerá todas las grabaciones mente, de Furtwangler las primeras gra-
hechas por el director francés al frente baciones al frente de la Orquesta Filar- Sviatoslav Richter. Otro disco com-
de la Orquesta Sinfónica de Boston mónica de Berlín (1926-1937)- Como pacto procedente de un reciente con-
durante el periodo en que fue titular de se ve, documentos únicos, que espera- cierto público ha sido comercializado
esta agrupación (1948 a 1962). mos posean una calidad de sonido por Stradivarius. la empresa italiana que
Vladimir Horowttz. Deutsche Gram- aceptable para poder disfrutarlos como distribuye en España Diverdi. El disco
mophon está sacando poco a poco se merecen. incluye el Concierto K 453 en el que
todas las grabaciones que hizo el legen- Cecilia Gasdia y Chris Merritt for- Sviatoslav Richter está acompañado por
dario pianista en la última etapa de su man la pareja protagonista del reciente Eugene Ormandy, más la Sonata K. 457.
vida. Los últimos registros han sido un registro de la rossiniana Armida, primera Cario Mari a Giulini ha grabado las
Láser Disc de un concierto público en grabación mundial dirigida por Claudio dos últimas Sinfonías de Mozart, 40 y
Viena {que ya anunciamos desde esta Scimone a I Solisti Veneti para el sello 4 /, en concierto público con la Orques-
sección); un compacto titulado Horo- Koch Internacional. El resto del reparto ta Filarmónica de Berlín para Sony Clas-
witz, el poeta, en el que interpreta las lo forman William Metteuzzi, Ferruccio sical. Esperamos que pronto se comer-
Escenos de niños de Schumann y la Furlanetto y Charles Workman. cialice el ciclo sinfónico beethoveniano
Soneto D. 960 de Schubert en versiones Emil Tchakarov, responsable musical que el maestro italiano ha hecho para la
nunca publicadas hasta ahora, y final- de la magnífica colección de óperas empresa japonesa al frente de la
mente otro compacto con interpreta- rusas en Sony Oassical, volverá otra vez Orquesta de La Scaía.
SCHERZO 67
DISCOS

ACTUALIDAD DISCOGRAFiCA

Grandes pianistas rusos


Harmonia Mundi acaba de publicar un álbum de seis
compactos que, además de su indudable atractivo
musical y artístico, añade el del sugestivo precio (seis
compactos por el precio de dos). El álbum contiene
excelentes grabaciones de seis de los pnncipales pia-
nistas rusos de todos los tiempos y, a pesar de lo dis-
cutible de la selección, es de vital importancia para
todos los amantes del piano y de la música en general.
Los virtuosos son: Tatiana Nikolaeva que interpreta
Invenciones y Sinfonías de j.S. Bach; Marta Yudina
(Schubert, Stravinsky); Vladimir Sofronitzki (Schubert,
Listz); Heinrich Neuhaus (Sonatas de Beethoven);
Samuel Feinberg (Chaikovski. Chopin, Listz) y. final-
mente, Dmitri Bashkirov que interpreta a Brahms. Evi-
dentemente no están todos los que son (faltan Rich-
ter, Güels, Berman y un enjundioso etcétera) pero si
todos los que están, aunque en alguno de ellos (por
ejemplo Bashkirov tocando Brahms) no se haya acer-
tado con el repertorio idóneo. A pesar de todos los
pesares, creemos que merece la pena y la incuestiona-
ble valia de estos registros (Rafael Ortega los comen-
tará próximamente).

Un trío legendario
ques Thibaud y Pau 1928 y 1929, y suenan sorprendente-
Casáis, un pionero y mente bien transferidos a compacto,
EMI a la vez un modelo sobre todo teniendo en cuenta que las
en su género. Única- grabaciones fueron hechas en el paleolíti-
mente el placer por co de la música en discos (desde luego

KFHED COKTOT-JHCQDESTHIBHHD-PBBLQ CHSRLS hacer música juntos


fue lo que unió a
estos tres artistas en
no son recomendables para los fanáticos
de la alta fidelidad o para los obsesiona-
dos por las tres DDD). Sin embargo,
1906, decidiendo para los que buscan en la música algo
desde entonces vol- más, encontrarán en estas grabaciones,
ver a encontrarse un producto de muchos años de amistad y
mes al año para colaboración fecunda, joyas de valor
interpretar en con- incalculable de la música de cámara,
junto y hacer giras de tanto en modalidad de Trios para piano,
conciertos. Nada más violln y violonchelo, como en Sonatas y
nacer la grabación Variaciones para violín y piano o para
eléctrica registraron chelo y piano, además del célebre Doble
su primer trio, y fue concierto de Brahms con Thibaud y
Schubert, con su Casáis como solistas y la Orquesta Pau
amable Trío en si Casáis de Barcelona dirigida por Alfred
bemol mayor, D. 898 el primer composi- Cortot. Versiones, pues, de conocimien-
EMI CLassics acaba de reeditar en un tor que llevaron a un estudio de graba- to obligado cuyo sonido ha mejorado
álbum de tres compactos las interpreta- ción. Los registros que recoge este sensiblemente comparado con el vetusto
ciones más representativas del legendario áJbum pertenecen a los anos 1926, 1927, de las reconstrucciones en LPs.
trio compuesto por Alfred Cortot, Jac-

6&SCHERZO
DISCOS

Colín Davis/Dresde: 8OJ


Binomio perfecto
El director británico y la orquesta alema- vo el ciclo anterior. Independientemente
na harán una gira europea con un progra- de la orquesta de Dresde, Sir Colin Davis
ma Mozart en este mes de noviembre y estará presente en la Edición Mozart de
entre las ciudades que visitarán se encuen- Philips con las tres óperas Da Ponte, £1
tran Madrid y Barcelona. Recordemos, rapto en d serrallo. La flauta mágica y La
antes de hacer la crónica del, seguramente, demenza di Tito, más una nueva grabación
memorable concierto de Madrid, que Sir del Idomeneo con Suzanne Mentzer, Barba-
Colin Davis teñe un importante número ra Hendricks, Julia Varady. Francisco Araiza
de grabaciones con esta orquesta, entre las y Thomas Alien, con el Coro y orquesta
que hay que destacar sus imponentes Sin- Sinfónica de la Radiodifusión Bávara. Tam-
fonías de Mozart y el reciente Cazador fur- bién saldrán en breve al mercado en
tivo de Weber (durante su grabación, en soporte Láser Disc Philips, en colaboración
enero de 1990, Sir Colis Davis recibió de con Unitel, la filmación de Tannhduser diri-
la orquesta el título de Ehrenárigent de la gida por el maestro británico en el Festival
Staatskapelle (ver comentario en este de Bayreuth de 1977, más la ópera de
mismo número). Próximamente grabará Benjamín Bntten The tum ofthe Screw y el
con esta misma agrupación y siempre en oratorio de Debussy El martmo de Son
Philips Classics, un nuevo ciclo de las 9 Sin- Sebastián, i r Colín üavis raro PHIUPS
fonías de Beethoven, más Sinfonías de
Mozart (de las 30 a la 33), Hansei y Gretel
de Humperdinck y, seguramente, un nuevo
ciclo Berlioz que comenzará con Romeo y EL BARATILLO
Julieta (grabación prevista para junio de
1993) y el Réquiem. Op. 5 (febrero de
1994). Sin duda este prometedor nuevo
Puro vicio
ciclo dedicado a toda la obra del composi-
tor francés, conseguirá todavía más pre- Y Naxos debuta en nuestro rincón
mios que los 22 internacionales que obtu- con una grabación sin rival en la discogra-
BORODJN fia, pues se trata de la única que ofrece
Vni|ihimit5 Nu% J. J jmd J en un solo compacto las tres sinfonías de
I .SU S>iniihírfri UnfwMra Alexander Porfirievich Borodin, médico,
n ipiirimhuater profesor de química, músico e hijo ilegíti-
mo de un principe georgiano. Y lo hace
Los primeros de la mano de uno de los habituales de la
casa, el norteamericano Stephen Gunzen-
Láser Disc hauser, artífice en el mismo sello de una
soberbia integral de las sinfonías de Dvo-
rak o de espléndidos programas dedica-
Sony y EMI CLassics han sido las pri- dos a Saint-Saéns o Copland. Con la
meras en enviamos sus Láser Disc para Orquesta de la CSR de Bratislava se
comentarios desde nuestras páginas de basta y se sobra para entregarnos un
crítica discogrttfica. Los primeros volúme- Borodin en el justo punto de estilo que
nes de EMI son: un recital de Kiri Te requiere un autor tan a menudo mal
Kanawa cantando Mozart, la Noveno de Hacia muchos meses que uno andaba escuchado, quizá por mal leído.
Schubert por la Filarmónica de Viena y deseando traer aquí algún disco de la casa
Riccardo Muti, música orquestal de Wag- Naxos, hermana barata de la especialista El disco de Gunzenhauser compite
ner por la Filarmónica de Londres y Klaus en raros y olvidados Marco Polo y posee- hoy, sobre todo, con dos versiones de
Tennstedt. Cuartetos de Beethoven por el dora de un catálogo que demuestra cómo estas sinfonías: la de Valery Gergiev con
Cuarteto Alban Berg y, finalmente, el economía y ngor no han de ir reñidas en la Filarmónica de Rotterdam (Philips) y la
disco titulado Una Stravaganza del Medid esto de los discos. Si no vino antes a esta ya conocida de Andrew Davis con la Sin-
por los Taverner Consort y Andrew sección alguna de sus ediciones fue porque fónica de Toronto (CBS). Si tenemos en
Parro! Tanto la multinacional británica su precio normal, aun entrando en lo que cuenta que la pnmera de ellas aparece a
como el Grupo PolyGram, Sony Classical, los ingleses llaman super ganga, era ya precio fuerte y sin la Tercera Sinfonía, y
Teldec y otras, comenzarán próximamen- natural y no forzadamente barato. Com- que la otra se presenta en dos discos,
te a lanzar sus vtdeo-discos en nuestro prar un Naxos rebajado parecía puro vicio. por más que a precio económico y con
mercado discográfico. (Nuestros lectores el añadido de otras piezas orquestales
Pero, oh maravilla, también a Naxos le
podrán encontrar en la pag. 40 de la dirigidas por Ormandy a sus filadelfos, la
llega su san Martin, y ya hay sitios donde
revista un comentario de ]osé Luis Pérez elección a favor de Gunzenhauser es bien
su precio se ha reducido en treinta o
de Arteaga sobre los Láser Disc enviados sencilla. Larga vida a Naxos.
cuarenta duritos, lo suficiente para entrar
por la firma Sony), Naturalmente, les en este paraíso del comprador inteligente
mantendremos puntualmente informados con todos los honores. Cosas de la ofer-
de todas las novedades que en este Nadir Madntes
ta y la demanda y de la consideración
nuevo soporte se vayan produciendo, que a veces - p o c a s - la economía de BORODIN: Sinfonías I. 2y 3 Orquesta Sinfónica de h
además de ofrecerles los acostumbrados mercado, esa con la que sueñan algunos CSR de 8ratislava. Director: Stephen Gunzennaiser.
estudios y coméntanos críticos de todos que van a enterarse de lo que vale un NAXOS 8.550238. DDD. Grabación: febrero de
los discos que vayamos recibiendo. peine, tiene con aquellos que la padecen.
1989. Productor GUnter Appenheimer. Dunción:
76'D2". 695 pacos en tu librerías Crisol de Madrid.

5CHERZO 69
DISCOS

REFERENCIAS
Los Hugonotes
o elesplendor de la Grand-Opéra
l judio berlinés Jakob Liebmann mitología canora. Caruso, quizás el

E
que 1830-1870, donde se da oportuno
Meer (para la posteridad Giacomo detalle de la obra meyerberiana. De Raoul por antonomasia, combina a la
Meyerbeer) no tuvo suerte al nacer momento ahí se queda la literatura perfección las dos facetas del canto que
el 5 de septiembre de 1791. Tres meses sobre el músico. pide el personaje: línea y fraseo líricos y
más tarde en ese año finisecular moría Introducción que viene a cuento para heroicidad, morbidez y generosidad.
Mozart y el genio salzburgués acaparará motivar el ongen de estas líneas, en las Kari Jóm, un tenor más bien wagneria-
por ello todos los 91, habidos y por que, modesta y mínimamente, se inten- no, lo pasa mal en el dúo con Valentine,
haber, de celebraciones centenanales. El ta hacer un homenaje a Meyerbeer una Emmy Destinn en forma no tanto
pez grande se come al chico: una vez más considerando la discografía de su obra en estilo, lo cual demuestra que enton-
el refranero hispano da en el clavo con capital: Les Huguenots. ces no todo el monte era orégano.
su filosofía socarrona y despiadada. Pero, Escaláis, al contrario, posee todas las
La ópera de 'as siete estrellas, como se
tfmidamente, en teatro, el alemán con- pautas necesarias para su espléndida
vertido en francés y artífice de la ópera la denominó un tiempo por demandar Escena del duelo. Nivette y Delmas son,
espectáculo (en el cine sería Cecil B. de siete voces espectaculares, tiene una respectivamente, dos modélicos Marcel
Mille), ha tenido, aunque escasa, una feble andadura discográflca. Cuando y Saint-Bris. La Homer hace un Urbain
corta consideración. Escenas que han había voces posibles para esta partitura de opulencia italiana y la Siems exhibe
adelantado el acontecimiento para no imposible, el disco no existía aún o esta- trinos (uno de treinta segundos) y una
interferir con el ano Mozart, como Mon- ba en pañales; ahora que el disco es un coloratura brillantísima.
tepellier que ha inaugurado su Teatro bien tan común y variado como el deso-
Beriioz con Los Hugonotes (¿qué diría el dorante, no hay voces (o son las menos) Existe asimismo una selección de Los
autor de la Fantástica de esto?) u otras capaces de apechugar con dificultades Hugonotes grabada en 1953 con un
que lo han pospuesto como Londres como las que presenta, Porque el espec- equipo totalmente francés de poco, por
para el final del año, se encuadran con la táculo en esta ópera comienza en el no decir escaso, interés. Por orden cro-
tibia celebración parisina (L'Afhcaine en despilfarro vocal y continúa en la magni- nológico la primera edición (más/me-
el Chatelet). Sin duda, los mejores feste- ficencia escénica. Y ambas están tan uni- nos) completa es una de la RAÍ de
jos vienen de su ciudad de origen, que das que la obra pierde al ser escuchada 1956, con un nombre centrando intere-
repone Los Hugonotes de 1987 (sin en disco, porque está pensada para ser ses: Giacomo Lauri-Volpi. Con sesenta y
Lorengar, ya retirada) en la Deutsche vista, para conseguir eí asombro. En cuatro años a punto de cumplir, el gran
Oper, al lado de un recital en el Chate- general, las versiones tanto piratas como tenor puede con la tesitura endiablada
au Bellevue (con dos cantantes antíme- oficiales, adolecen de alguna carencia, no del papel, aunque el timbre suene a
yerberianos: Behrens y Estes), ademas existe aún (¿será posible algún día?) una veces a vetusto. Ellas (Pastori, de Cava-
de una cuidada exposición. Todo ello lectura cercana al
fir\alizará con una repnse de L'afncana y ideal. Unas cojean
un simposio internacional en ¡¡¡Bayreuth!!! por lo inevitable, lo
(¿qué diría el autor del Tnstárif). Fuera de vocal; la más cercana
Alemania habría que señalar como dos a la aprobación está
rememoraciones importantes la de en italiano y los cor- Giacomo Meyerbeer
Montpellier otra vez con II Croaato m tes en la partitura son GUUGONOTTi
Egitto, que Radio 2 hizo llegar al oyente numerosos y si en Lauri Volpi. Taddei, Pastori
español (donde brilló Rockwell Blake, en teatro pueden ser Zacearía, De Cavalieri
un cuidado reparto) y la veraniega vela- disculpables por la TULLIO SERAFÍN
da de Martina Franca en un Homenaje a duración (con Wag-
Meyerbeer que reunió a un equipo de ner, sin embargo, se
cantantes jóvenes, pero fieles ai espíritu tomarían como crí-
del compositor, bajo la férrea supervi- menes de lesa majes-
sión del genial Rodolfo Celletti. tad, lo que demuestra
que hay racismo en
música), en una audi-
ción discográfica
El disco, trátese de motivos de bicen- resurta lamentable,
tenano o no, ha sido tan poco generoso
con este compositor hasta el punto de
que para el catálogo oficial sólo se han La relación de esta
grabado tres óperas: los Hugonotes. £/ discografía podía ini-
profeta y Dinorah (ésta, para colmo, en ciarse con la conside-
una marca periférica). ración de un disco
Entre la también parca bibliográfica publicado en 1972, donde se reúnen a lieri, Gardino) cumplen con fervor, no
sobre este músico que está al alcance viejas glorias del canto, en registros rea- con medios. Entre ellos, destacan Tozzi,
del interesado actual destaca el libro del lizados entre 1900 y 1910. Una época Taddei y Zacearía. De cualquier manera,
matrimonio Becker Una vida en cartas, donde Meyerbeer estaba en cartelera. nos remitimos aquí a la crítica aparecida
así como la biografía de bolsillo de Dau- En este preciso disco aparecen Caruso, en SCHERZO en número precedente.
riac. Flammarion ha publicado este año la Homer, Nivette, Margarethe Siems, De una representación de la Scala de
í-o musique en France a l'epoque mmanti- León Escaláis y otros nombres de la Milán se ocupó una grabación Itve, Se

70SCHERZO
DISCOS

tinta de la ya mítica velada Tarrés y, otra vez. Justino


de 1962. inauguración de MUSfFRANCE Díaz y globalmente Nicolai
temporada, con el mejor G RAPHANEL Gedda, musical de línea,
reparto unido para este MEYERBEER f POLLET
o BORST
n iEECH
con agudos de considera-
menester meyerbenano. G CACHE MAIU.E ción.
Sutheriand realiza todas las M GHIUSELEV Este año, como homena-
B. MART1NOVIC
acrobacias circenses (¿Qué
es, sino circo, su A ce seut
Les CHdURS
je patriótico al que ha sido
DE L'OPtRA su último gran tenor, se ha
motl) con un centro redon- Huguenots DE MONTPELLIÉR editado en Francia una ver-
do, un agudo imponente, ORCHESTRE sión modestita de Los
una coloratura ejemplar. PHIL HARMONIO JE
Hugonotes.
DE MONTPELLIER
Corelli tiene la voz, la tesitu-
Este tenor es Alain
ra de Raoul (no da en re CYRH. Vanzo, un cantante elegan-
agudo del dúo. porque, sin DIEDER1CH te, depurado, de fraseo
duda, el miedo, no la caren-
intachable. Vanzo encuen-
cia, se lo impidió), la genero-
tra en otros roles del reper-
sidad del papel. Olvidando
torio galo mayor ocasión
cierta ampulosidad, perdo-
de lucimiento que en Raoul
nando cierto sentido hete-
(¿por qué no lo eligió
rodoxo del legato, Corelli es
Bonynge para su integral;
el último gran Raoul a la ita-
los resultados globales
liana. Otra baza sobresalien-
ganarían?), aunque el exqui-
te de este registro pirata es
sito cantante sabe decir,
la Valentina de la Simionato. UVTRtCOROMa 3303-40037 sabe cantar. Es lo único res-
que encuentra en ella su auténtica tesrtu-
catable de una versión paupérrima.
ra de soprano Falcon. Temperamento y conoce, aunque su rol pida mejor una
voz se alian en la Simionato para damos voz más cavernosa. Con Vrenios es Montpellier, que parece demostrar
una de sus mejores interpretaciones en mejor no ensañarse. un amor insólito por Meyerbeer, ofreció
disco, dado que la mezzo italiana siem- De pasada, vamos a referimos a dos en sesión concertistica en octubre de
pre estaba mejor cuando se la oía en ediciones, que obtuvieron una pequeña 1988 una edición, voluntariamente de
vivo y no en un frío registro de estudio. difusión. Una del año anterior a la ante- rescate del canto francés, de Los Hugo-
Ella y Corelli, en el dúo, están inmensos. riormente comentada y que fue cantada notes. Los resultados son serios, pero
Cossotto destaca la presencia del paje, en el Camegie Hall neoyorkino. Dirigida insuficientes. Sólo destaca el Raoul de
ya que la cantante nunca gustó de pasar con entusiasmo por Regmald Giovanni- Richard Leech. en la línea de Thill (sal-
inadvertida. Ghiaurov prometía más que netti reunía a una Marguerite importan- vando distancias), de voz bella, fluida,
lo que luego nos da. La voz, noble y cor- te, Beverly Sills, que mereció justamente canto depurado, pero, como muchos
pulenta de entonces, ahí está implacable, una ovación histórica luego de su 0 colegas actuales, siempre dando la sen-
pero Marcel tiene una clara psicología faeau pays; una Valentine de medios tan sación de que está un poco verde. La
(simple, grotesca, montaraz) que Ghiau- generosos como incontrolados, Angeles Pollet es musical y tiene arrestos, pero
rov está reacio a manifestar. Tozzi. como Gulín, que se come a todos con su su voz no es la que pide Valentina, aun-
Saint-Bns supera a Ganzarolli como volumen torrencial; un Raoul de feo que la seriedad de su disposición puede
Nevers. Tanto Serafín, en la antenor edi- timbre, agudos irregulares, pero con despertar aquiescencias. Cachemaille
ción RAL como el Gavazzeni de esta ver- indudable presencia, Tony Poncet, y un canta muy bien, y destaca el bon vivant
sión scalígera dan a la partitura realce, Marcel de buen canto y sinceras inten- que es Nevers, pero, en la parte mascu-
vigor y colorido muy mediterráneos. ciones, Justino Díaz. La segunda versión lina. Martmovic no es un convencido
anunciada es de 1971, dada en la Opera Saint-Bris y Ghiuselev deja su mejor
de Viena, con un equipo modesto, parte en la versión Bonynge. de diecio-
En 1970 apareció la primera edición donde destacan parcialmente Enriqueta cho años atrás: menos rígido, más con-
llamémosla oficial, la más completa, en vincente. La Raphanel no puede con
lo que respecta a partitura, hasta la todos los vericuetos de Marguerite,
fecha. Dirigida con más atención de siendo como es una sopranino y la
estudioso que capacitación directorial DISCOGRARA Borst. una soubrene metida a paje no
por Richard Bonynge nacía esta lectura (Orden de personajes Marguerrte, Valentine. canta, obviamente, el regalo del rondó
con un defecto de salida garrafal: la Urbain. R¿oul. Marcel. Saint-Bns. Nevera. Orquesta.
Director. Fecha). meyerberiano a la Al bon i. Diederich, a
elección de un tenor como Anastasios - Pasión, de Cavalien, Gardino. Lauri-Volpi. falta de soporte teatral, consigue de la
Vrenios para el papel de Raoul. La críti- Zacearía. Tozzi. Taddei. RAÍ de Milán. Sefífm orquesta una lectura nítida y contrasta-
ca de este disco, recientemente incor- (1956). da, de profesor de composición.
porado al soporte compacto, ha sido - Sutherland. Simionalo. Cossotto. Corelli.
Ghraurcr/. TOTB, Ganzarolli- Scala de Milin Gava7-
realizada con su habitual competencia zen. (1962).
por Blas Matamoro y a ella nos remiti- Está aún por llegar una versión próxi-
- SIS. Guiln. N.N. Poncet Díaz. N.N; Jamer-
mos. Sólo añadir algunas ráfagas. La Sut- son. Camegie Hall Giovammetti (1969). ma a la perfección de Los Hugonotes.
herland hace mas cosas, pero sin supe- - Sutheriand. Arroyo, Tourangeau. Vrenios, Ello será posible cuando existan voces
Gh i use lev. Bacquier, Cossa. Nueva Filarmonía. que sumen a la par poderío y formación
rar su lectura global de ocho años atrás. Bonynge (1970)
Arrayo pone voz. bella y cálida voz, - 5hane. Tsrr*i, Scmotti, Gedda, Díaz, Petkov.
vocal, es decir, combinación de dotes
pero no temperatura a Valentina. La Finís. ORF. Mírzendorfer (1971). naturales y disciplina académica. La reac-
Tourangeau, Urbain en mezzo, canta el - Lebrun. Clarke. D Jones. Vanio. Roy. Bastía tivación del canto rossimano puede ser
Massard. Nueva Orquesta Filarmónica. Gallois el camino de recuperación del meyerbe-
rondó de la Alboni. con una voz fea y (1976).
de segunda, pero buena disposición. - Raphanel, Pollel Botst Lecth. Ghiuseiev, Mar-
riano. Hay esperanzas de futuro.
Bacquier es el gran actor vocal que se tinovich, Cachemaitle Filarmónica de Montpelher
Diedench(l9fla).
Fernando Fraga
SCHERZO 71
DISCOS

BACH: Musikalisches Opfer, 8VW ¡079.


Suíte para orquesta número 2, en si menor,
SWV 1067 Orquesta de Cámara de Stutt-
gart. Director: Karl Münchinger. Grabado
Distinto en otro sentido
en Ludwigsburg, julio 1976, y Victoria Hall, filólogos seguramente pondrán mil y una
1961. Productores: J. Mallinson y E. Smith. pegas (y con razón, sobre todo en cuanto a
Ingenieros: J. Lock y A. Reeve. DECCA 430 la letra) a estas versiones protagonizadas
266-2 ADD. 73'27". por Adorf Busch y su conjunto. Sin embar-
go, estas lecturas van mas allí Recordemos
que 8usch conceptuaba a Bach como espí-
Esta remake de dos grabaciones ritu, como último refugio y recurso para el
distantes quince años -1961/ espíritu alemán, como verdad alemana fren-
1976- se beneficia con creces te al error alemán (suponemos innecesario
de la prodigiosa maleabilidad del genio del recordar los días que le esperaban al Reich
viejo Bach. cuya obra, dentro de los márge- del milenio, así como la posición de Busch
nes del respeto, se presta a las más diversas como exiliado voluntario). Un testimonio,
lecturas. La Ofrenda Musical es, precisamen- pues, emocionante y sincero, que
te, una pieza abstracta o mejor, un cuerpo musicalmente va mas allá que la más pura
desnudo que, como la Venus de Botticelli, de las filologías, aunque se puedan encon-
aguarda la túnica que se la venga a ofrecer, trar fallos instrumentales que seguramente
para hacerla elegante. Elegantes son, sin irritaran a más de uno (la trompeta en el
duda, suntuosas incluso, las versiones de Segundo concierto es el más notorio). ¿Reco-
Münchinger. en un estilo que, aun demodé, mendable?, claro que si: es el más bello de
no ha dejado a lo largo de décadas de ser Ya vemos la cara de infinito los Bach, el mas cálido y humano a pesar
apetecible. La presencia de Rampal en la desprecio de los lectores del error de planteamiento {también hay
Surte es uno, entre otros indicadores, de la amantes de los instrumentos que hacer notar que no es para todos los
calidad cortesana, majestuosa - y al fin y al de época al leer los intérpretes de los Bran- gustos). Como en todos los discos de la
cabo Bach fue. en su pluriempleo. un com- demburgo y de las Surtes paro orquesta que serie Références, el álbum viene con el
positor de corte-, de estas permanentes ahora comentamos. Efectivamente, aquí no correspondiente articulo en francés de
versiones, oportunamente permanecidas. hay clave (Rudolf Serkin toca el piano); André Tubeuf, mas otro en inglés firmado
tampoco hay trompas naturales, flautas de por Lionel Salten
pico o violines barrocos. Para colmo, las
grabaciones son de 1935 y 1936. aunque
' ' • •• ' '• • •IOLJ9.1 notablemente reprocesadas y muy claras, lo EPA
.••ni
cual compensa con creces el soplido de
fondo. La verdad es que no pretendemos BACH: Conde/tos de Brondemburgo,
BACH: Conciertos de Brondemburgo. Con- ser fetichistas con los grandes nombres del &WV. (046-105/. Suítes pora orquesto,
junto Barroco de Zurich. Director: Cari pasado interpretando música barroca (en BVW 1066-1069. Adolf Buich Chamber
Schuricht. PRELUDIO PHC 1120/21, álbum este mismo número pueden encontrar otra Playeri. Solistas: Adolf Busch, Francis
de 2 discos A D D . Duraciones: 45 y 56 reseña que pone en solfa a los Brondembur- Bradley, Marcel Moyse, Louis Moyse,
minutos. Grabaciones: Zurich, mayo de go de Cari Schuncht; o también reconoce- Rudolf Serkin, etc. Director: Adolf Busch.
1966. Producción: Preludio Productions. mos sin ningún problema que Furtwangler EMI Références 764047 2, álbum de 3 dis-
Ingeniero: Alain Trachsler. Precio económi- no hizo demasiada justicia a Bach en su ver- cos ADD. Duraciones: 60, 67 y 68 minu-
co. Distribuido por Auvtdis. sión del número cinco de la sene -con una tos. Grabaciones: Londres, Abbey Road
cadencia al final del primer movimiento que Studlos, octubre 1935 y octubre 1936.
más parecía la Sonata claro de luna de Beet- Productor e ingeniero: desconocidos. Pre-
El tiempo ha dejado sentir su hoven que otra cosa-). Pero los sesudos
huella por estas versiones que, cio medio.
sin poner en tela de juicio sus
indudables virtudes, hoy nos suenan un tanto
añejas a pesar de la importancia de la nota-
ble dirección de Schuricht y de la interven- BARBER: Knoxville: Summer of 1915. Summer of 1915. Se trata de una escena
ción de solistas cuya competencia artística es Dover Beodi. Op. 3. Hermit Songs. Androma- para soprano y pequeria orquesta sobre un
de todos conocida (Heinz Holliger. Maunce che's ForeweK. Op. 39. Eleanor Steaber fragmento de Muerte en la familia la conoci-
André, Chnstianne Jacottet etc.). (soprano) y Dumbarton Oaks Orehestra da novela de James Agee. Una pieza subyu-
(Knoxwífe. J . Dietrich Fischer-Dieskau (barí- gante -que reúne la calidad evocadora de la
El fraseo de las cuerdas es demasiado tono) y Cuarteto Juilliard (Dover Beach). música de un Henry Cowell trufada de ecos
mozartiano. alejado del lenguaje barroco a Leontyne Price (soprano) y Samuel Barber stravm ski anos y de la poesía de Robert
que nos tienen acostumbrados los numero- (piano) (Herm/t Songs) Martina Arroyo Lowell o Robert Frostque desde la primera
sos conjuntos de instrumentos de época; los (soprano) y Orquesta Filarmónica de escucha crea una suerte de extraña fascina-
tempi son levemente moderados, demasiado Nueva York. Director: Thomas Schippers ción. En una música, sí, ligada a una época y
para la vivacidad rítmica que indefectible- (Andromoche'sJ. SONY CLASSICAL Serie a una cultura mas profundamente americana
mente caracterizaba a Schuncht (no se sabe Masterworks Portrait. AAD. Grabaciones: que otras obras del autor, como, en los
hasta qué punto intervino Bons Mersson, 1950 (Mono), 1967, 1954 (Mono) y 1963, extremos, el muy straussiano Concierto pora
asistente de Cari Schurtcht en estas grabacio- respectivamente. Duración: 51 '22". Serte vro/ín o la muy barriestreiladamente circuns-
nes dada la delicada salud de éste -el gran media. tancial Segunda Sinfonía. Eleanor Steaber fue
maestro alemán fallecería siete meses des- quien encargó la composición a Barber y su
pués de haber hecho estos registros, concre- voz hermosísima -recordemos sus Noches
tamente el 7 de enero de I967-). Los ins- He aquí un disco revelador, de de Estío con Mrtropoulos- luce aquí rutilante
trumentos, a pesar del nombre del conjunto, esos que descubren cómo acompañada magníficamente por una
son modernos y. como ya se ha dicho, pose- detrás de una imagen tópica- orquesta de ocasión de emblemático nom-
en detalles de virtuosismo y musicalidad mente convencional puede haber un talento bre.
envidiables. En definitiva, solamente para no ya simplemente honesto sino, en ocasio-
nostálgicos o para estudiosos de Schuricht nes, decididamente inteligente. A quien Por si fijera poco, Dietrich Fischer-Oteskau
que. todo hay que decirlo, no brilla aquí conozca de Barber solamente su Adagio -que ya en los sesenta se aventuraba en
como en Beethoven, Brahms, Bruckner, para cuerdos -ese capricho toscaniniano que repertorios lejanos- negocia magistralmente
Mozart, Schumann o Mendelssohn. Sonido probablemente haría ganar a su autor junto al Cuarteto Juilliard las sombras de
aceptable, estéreo de origen, y discretos mucho dinero, pero que cubriria el resto de Dover Beoch, puesta en música del poema
comentarios anónimos en los idiomas acos- su obra como una losa- esta grabación cier- homónimo de Matthew Amold cuya traduc-
tumbrados. tamente histórica va a descubrirle a un com- ción española por Juan Benet publicada hace
positor de evidente interés, de la mano, años por la inolvidable La ilustración poética
sobre todo, de su obra maestra: Knoxville: española e iberoomencona. recordara todavía

72 SCHER2O
DISCOS

algún degustador El cantante alemán y los DDD 1989 en Chicago por G. Zielinsky. (Decca) parecen más Justos analíticamente,
músicos americanos saben, como el propio Director artístico: S. Paul. 68'37. o sea más modernos.
poeta primero y el músico después, atempe-
rar todo lirismo con las dosis justas pero Para muchos compositores y P.£
necesarias de oscuridad. musicólogos, el Concierto no
El disco reúne también las austeras unas seria del mejor Bartók: dema-
veces, ligeras otras, Hermít Songs. sobre tex- siado espectacular, demasiado fácil, destina-
tos irlandeses de los siglos VIII al XIII traduci- do al gran público. Dos directores, sin BIRTWISTLf: End/ess Porode. MAXWELL
dos al ingles por Auden, Kalman, Mumford embargo, discrepan de esta opinión: El pn- DAVIES: Concierto pora trompeto. W A T -
Jones / O'Faolain, cantadas aquí con pleno mero, Ancerl (Filarmónica Checa. Suprap- KINS: Concierto para trompeta. Hakan Har-
convencimiento por Leontyne Price y el hon) impregna la perfecta arquitectura con denberger. trompeta. BBC Philharmoníc
autor al piano. Para terminar, la Despedida las sombras de Bruckner, Debussy o Mahlen Orchestra. Director: Elgar Howarth, Gra-
de An&úrnaca. con palabras tomadas de Los los temas (cuadrados y brillantes en otras bado en Manchester, UK, 1/1990. Produc-
troyanas de Eurípides, obra de un Barber interpretaciones superficiales como la de tora: M. de Francisco. Ingenieros: J. Wesse-
más dramático, más ampuloso también, Karajan) aparecen corroídos por malos link, T. Faulkner y H. Barnes. PHILJPS 432
dominador de los recursos expresivos de la recuerdos y se funden en la deshilacliada 075-2 DDD 7B'3I".
orquesta como apoyo de su pretexto litera- fuga del Finale (que algunos comentaristas
rio. Martina Arroyo y Thomas Schippers. que han encontrado pobre). El segundo director,
estrenaron la pieza, son aquí también sus Reiner (Chicago, RCA) exalta el lado feroz Tres producciones de los últi-
intérpretes. de la obra (o lo inventa): alegría crispada al mos ochenta, protagonista la
borde de la angustia de Borfca Azul, los epi- trompeta, saturan este compac-
Una joya, en suma, a la que acercarse sin sodios grotescos como tantas mascaras, al to, que roza ios ochenta minutos, acaso bajo
prejuicios. O con todos los del mundo, que virtuosismo insensato de la orquesta al ser- la sospecha de que el clásico muy reciente
ya caerán como tantas soberbias. vicio del análisis alucinado. Levine (especta- no se vende bien. Tratase, no obstante, de
cular y excelente toma de sonido) se sitúa piezas de notable interés, fabncadas por la
LS. en la linea de Reiner sin renunciar por esto generación pos-Britten y sucesores. La Pora-
a la belleza sonora, firmando asi una posible do sin fin, primera en la cronología, sugerida
versión de referencia. En la Músico para al autor, como él mismo nos dice, con oca-
cuerdas. Levine se aleja de Reiner (no muy sión del Carnaval de Lucca, es, en su desen-
BARTOK: Concierto para orquesto. Músico bien editado, en cuanto al sonido, en CD), voltura, estructural e imaginativa, la más
para cuerdas, percusión y ce/esto. Orquesta privilegiando el lado romántico o lírico: aquí moderna; la trompeta resplandece en ella
Sinfónica de Chicago. James Levine. CD Solti (Decca) y tal vez más aún Dutoit -el vibráfono es su esplendor- a la luz, que
DEUTSCHE GRAMMOPHON « 9 747-2. no a la sombra, de Messiaen, con gala de
timbres que sabe a fauve. El Concierto de
Davies es más convencional en su discurso,
algo propenso a los menas efectos especiales
Para reconciliarse con Bizet y no ajeno a una sensibilidad pos-mahleriana.
El Concierto de Watkins, más cerca del
ciones caja-piccolo-coro en el Tambourin segundo que del primero, opta por un
Aunque Alphonse Daudet modo de ser rapsódico, de infraestructura
(1840-1897) gozó en vida de de la Pastorale, n° 7, y en la Farandola, n°
21), la música se pliega al argumento con tradicional. Hardenberger, dedicatario del
una considerable fama literaria, primero y el último, borda los tres concier-
hoy en día le recordamos pnncipalmente una variedad climática de rara perfección,
en ta que no sabemos qué apreciar más, si tos -la Parada es menos sinfónica, pera no
por sus Carlos desde mi molino (1866), menos concertante, más bien más. en el
recopilación de una treintena de relatos los temperamentales comentarios de la
apasionada acción o la embriagadora luz de estricto sentido barroco- con toda soltura y
cortos ambientados en su Provenza natal. elocuencia, que la toma de sonido luce a
De uno de estos cuentos extrajo en 1872 la Camarga que invade todos los nncones
de la partitura. Para mayor aliciente, en la plena luz.
un drama, la artesiano, cuyo mayor timbre
de gloria es haber contado con la música sección central del n° 19 encontramos ade-
incidental de Georges Bizet Sin embargo, más los dos únicos minutos (l'25"-3'32")
las crónicas del estreno en el Teatro Vau- que, lamentablemente, jamás dedicaría Bizet
deville de París el I de octubre de aquel a la música de cámara.
año refieren la impaciencia provocada por A diferencia de fos extractos sin coro de
los números musicales en unos espectado- Gardiner (Erato) y de la versión completa
res principalmente interesados por los BRAHMS: Obertura trágico, op. 81; Sinfonía
de Plasson (EMI). basados en la edición de n° I. op. 68: Obertura para un (estivo/ ocodé-
acontecimientos escénicos. Apenas un mes Dominique Riffaud. Robert Haydon Clark y
mis tarde, el 10 de noviembre, Bizet pre- mico. Real Orquesta de! Concertgebouw de
sus consorte londinenses recuperan el Amsterdam. Director: Bernard Haití nk. CD
sentaba en los Conciertos Populares del manuscrito original de Bizet Por otra parte,
Circo de Invierno la suite orquestal que ADD. PHILIPS (Silver Line Classics) 432
la grabación de éstos restituye en su integri- 275-2. No figuran ni productor ni ingenie-
hoy conocemos como Suite n" /. con la dad las primitrvas violencia y ternura conte-
cual se resarció de aquel primer fracaso de ro. Grabación: Amsterdam. 5/1970 (op 81).
nidas en el drama. Asimismo, todo el opre- 6/1972 (op. 80) y 12/1972 (op. 68). Dura-
público, que no de crítica. Cuatro años sivo ambiente campesino que lo rodea es
después de la muerte del compositor en ción: 67-S4" (I3'35".441OO" y IO'I9").
recreado con una subyugante capacidad de
1875. su íntimo amigo Emest Guiraud per- evocación, a la que contribuyen en buena
geñó la Suite n° 2 con la música anterior- medida la frescura y ductilidad del coro. Por
mente no aprovechada por Bizet a la que Tan cierto es que Hartink ofrece
si fijera poco, a todas estas virtudes, igual- uno de los Brahms más auténti-
para el Minuetto añadió un préstamo del mente aplicables al Juego de niños, se une
tercer acto de la ópera La bella muchacha cos (junto a los de Walter. Szell,
una toma de sonido impecable por su Boult, Furtwangler, el Karajan de los años 50
dePerth. amplitud, profundidad y detallismo. y Bemstein), como que en Brahms y con el
Concertgebouw encontramos al Haitink más
Frente a la pesadez y pérdida del sentdo regular en sus aciertos, lejos de los altibajos
dramático que caracterizan a estos dos A.&.M. que lastran su Mahler y su Bnjckner, En la
refritos, los veintisiete números inicialmente tercera y última entrega en CD de esta estu-
escritos para un conjunto de veintiséis ins- BIZET: Lo artesiana: obertura y música penda integral ya veinteafiera. presenta una
trumentistas (saxofón, piano y armonio incidental (a): Juego de niños. Consort of Primero prodigiosa por el raro sentido del
induidos) y coro mixto se erigen como una Voicei (a), Consort of London. Director equilibrio con que se hallan compensadas las
obra maestra en su genero, en nada des- Robert Haydon Clark. I CD DDD. Pro- tensiones tanto sucesivas como simultáneas,
merecedora del Peer Gynt de Grieg o del ductor: John H. West. Ingeniero: David iluminadas siempre desde una diáfana y lúci-
Sueño dé uno noche de verano de Mendels- Flower. COLLINS 11412. Grabación: SL da perspectiva sobre la linealidad del discur-
sohn. Con una instrumentación de asom- John's, Smith Square, Londres, enero de so, la dialéctica polifónica de los planos y el
brosa singularidad (impagables las combina- 1990, Duración: 52'27" (41'40", IO'47")- sutil juego tlmbrico característicamente

SCHERZO 73
DISCOS

brahmsiano. Tras los desmedidos recarga- en el arranque de tas movimientos extre- Lauchlan. SONY S2K 46592 DDD- Dos
mientos con que artes y después se ha abu- mos del de Chaikovski. Paradójicamente, la compactos. Duración: 76.48 y 72.16. Pre-
sado de esta música resulta de lo más salu- Canzonetta de este último pasa sin ni por cio normal.
dable tomar o restablecer el contacto con asomo despertar la consabida emoción de
alguien que sabe devolver a sus justas pro- serena nostalgia, precisamente por la delibe-
porciones los contrastes dinámicos y apoyar La grabación integral de un
rada búsqueda del efecto melancólico que ballet puede tener un interés
naturalmente en la flexibilidad del fraseo una claramente se percibe. Y lo más justo que
vanedad expresiva respetuosa con el soste- mediatizado, como es el de ser-
en general se nos ocurre decir de los Alle- vir para ensavos y (unciones sin orquesta O
nimiento nada forzado de los tempí. Versio- gros es que se caracterizan por su virtuosis-
nes al mismo tiempo tan sobhas y tan llenas ha de cumplir una función documental, res-
mo simplemente seco. taurando la totalidad de una partitura que
de matices como ésta con las que. sin per-
der ni un ápice de la grandiosidad inherente Frijhbeck acompa/la con discreta correc- suele darse mutilada por razones de como-
a la partitura, recuperarán para Brahms a los didad o tradición.
ción, esto es, sin molestar la labor del solista,
oyentes que. como Woody Alien, se sienten pero sin elevar el nivel interpretativo del Los ballets de Chaikovski puede escapar a
agobiados por el melodramatismo que suele registro. En solitario, consigue extraer de la estos nesgos, ya que poseen suficiente enti-
imprimírsele. Claro que directores tan firmes Sinfónica de Londres, de sonido esta vez dad sinfónica y -sobre t o d o - dramática
como Hartink ante la tentación del efectismo más bien mate, una Obertura para un festival como para ser seguidos conforme se escu-
no nacen todos los días, ni tampoco abun- académico bastante aceptable, sobre todo cha un poema para orquesta o un mimo-
dan orquestas de tan refinado virtuosismo en cuanto a la dosificación de las intensida- drama. A veces, abusando del disco, algunos
como la det Concertgebouw. des se refiere. En cambio, la surte de La bella directores se solazan en su propia habilidad
durmiente adolece de una brusquedad para los timbres y planos, dejando de lado
Las dos oberturas que flanquean la Sinfo- expresiva ciertamente decepcionante. Por el carácter bailable de la música. Tilson Tho-
nía constituyen un complemento ideal por el sólo citar un ejemplo concreto, su desapro- mas obedece a la mejor tradición de los
rigor analítico con que se describen sus dos vechamiento del número titulado Panorama directores ingleses de ballet de modo que
arcos, cerrado sobre si mismo el de la Trági- merecerla sin duda figurar en cualquier anto- su lectura nunca pierde la noción de estar
ca, abierto en formidable progresión el de la logía de la inetegancia musical. bailando, aunque sea imaginariamente, asi
Académico. como su robustez orquestal no se luce a
Técnicamente el registro es ejemplar por A&M expensas de la narración dramática. Tene-
la homogénea nitidez de sus perfiles sonoros mos, en cualquier caso, la posibilidad de
y la amplitud y profundidad de una toma asistir a la narración de una historia, un
sumamente realista. El paso a digital conser- cuento de hadas buenas y bnjjos malos que
va un ligero soplo, que no llega a molestar. forcejean por el destino de un príncipe
CHAIKOVSKI: Obertura solemne 1812. ingenuo que quiere enamorarse, no sabien-
Romeo y Julieta. Marcha es/ovo. Lo tempestad
AB.M Orquesta Sinfónica de Chicago. Director do si perderse en la noche del mundo o
permanecer junto a su mama, en la tibieza
Claudio Abbado. SONY classical SK 47179. del palacio, juguetería que se asemeja a una
DDD. Duración: 67 minutos. Grabaciones: prisión.
Chicago, Orchertra Hall. 1984. 1986, 1988
BRAHMS: Obertura pora un festival acadé- y 1990. Productor: james Mallinson. Inge- Tilson contrasta los actos blancos con los
mico, op. 80; Concierto pora violln y orquesta, niero: N.N. actos multicolores, el espacio abierto y el
en re mayor, op. 77 (a). Igor Oistrakh (vio- cerrado, marca las danzas y desarrolla los
lln) (a) f Orquesta Sinfónica de Londres. Este registro forma parte de la pasos en dúo de los solistas, asi como define
Director Rafael Frühbeck de Burgos. I CD grabación completa de la músi- los puentes que sirven para pasar de un
DDD. COLLINS 10162. Productor: John ca orquestal de Chaikovski por número a otro. Podemos calibrar, entonces,
Boy den. Ingeniero: Mike Hatch. Grabación: Claudio Abbado y la Sinfónica de Chicago el talento teatral de Chaikovski, que tanto
Henry Wood Hall, Trinity Chuch Square, para Sony, algunos de cuyos discos ya aparece en sus sinfonías y ballets y, por para-
Londres, 1989. Duracón: 52'4I". hemos comentado desde estas paginas (ver doja, luce tan poco en su teatro cantado.
CHAIKOVSKI: Concierto para violln y números 0 y 7 de SCHERZO). Estas tres Y. además, podemos ver cómo bailan los
orquesta, en re mayor, op. 35 (a); Lo bella dur- populares composiciones, más La tempestad, cisnes sobre las aguas del lago encantador y
miente (suite), op. 66. Igor Oistrakh (violln) forman un buen disco caracterizado por maligno, los trajes de los invitados y las
(a) y Orquesta Sinfónica de Londres. unas interpretaciones vibrantes, enérgicas, piruetas de los bailarines.
Director Rafael Frühbeck de Burgos. I CD soberbiamente planificadas y con una res-
D D D . COLUNS 10462. Productor: John puesta orquestal cuyas adjetivaciones lauda-
Boyden. Ingeniero: Mike Hatch. Grabación: tonas no tendrían fin. Romeo y Julieta, sobre
Henry Wood Hall, Trinity Church Square, todo, es realmente un prodigio, quizá un
Londres, abril de 1989. Duración: 57"33". punto mas elaborada pero menos espontá-
nea que la que el propia Abbado grabó con CHAIKOVSKI: Sinfonía n' 6 en sí menor,
la Sinfónica de Boston para Deutsche Gram- Op. 1A, Patética- Orquesta Sinfónica Nacio-
No serla justo andar siempre mophon. La distancia / la claridad de textu-
midiendo a Igor Oistrakh por el nal de Washington. Director Mstislav Ros-
ras favorecen a páginas como la insufrible tropovich. SONY Clástica) SK 45836,
rasero de su genial padre. Sin 1812, y la Marcha es/ovo y La tempestad son
embargo, al comentar estas grabaciones no DDD. Duración: 71*31". Grabación realiza-
modelos de nitidez, fraseo ¡diomático y virili- da en concierto público en la Gran Sala del
es tampoco fácil olvidar que Igor ya habla dad, a los que podemos añadir ese fulgor
registrado ambos conciertos bajo la sabia Conservatorio de Moscú los días 1 3 / 1 4
especial que Abbado consigue en ciertas de febrero de 1990. Producción; Stephan
dirección de David treinta arios antes. Y con ocasiones. En definitiva, un disco excelente,
mejores resultados. Schellmann. Ingeniero: Andreas Neubron-
muy bien grabado e interpretado. Si en vez ner.
Lo que a sus sesenta años conserva de de ¡a 1512 hubiesen incluido, por ejemplo, la
entonces el Oistrakh superviviente es funda- Serenata para cuerdas, el registro hubiese
mentalmente el delicioso timbre, don mara- sido perfecto. Este disco, titulado Rostnjpowdi
villoso heredado junto con el apellido. Falta retum Eo Russío. conmemora la
ya por el contrario la naturalidad de un fra- vuerta del músico a su país en
seo que convencía inmediatamente por la £PA 1990 después de varios años de prohibición
sensibilidad exquisita en la aplicación del (ver la Actualidad Discográfica del pasado
vibrato. Ahora todo suena demasiado auto- mes de octubre). La Patético es traducida con
consciente, previsible. Con todo, el coleccio- el calor y efusividad propios del gran violon-
nista aún podra encontrar algunos momen- CHAIKOVSKI: El lago de los cisnes. chelista y director una buena versión que, de
tos de auténtica satisfacción en el hermoso Orquesta Sinfónica de Londres. Director todas formas, es más apta para los amantes
color exhibido en el Adagio del Concierto de Michael Tilson Thomas. Violln solista: Ale- de acontecimientos históricos (este, sin duda.
Brahms -aunque sólo sea como compensa- xander Barantschik. Grabado en el Wat- lo es) que para los que quieran una interpre-
ción por la debilidad de que adolece la linea ford Town Hall en mayo de 1990. Produc- tación modélica de esta partitura, que ha
melódica en la cadenza del Allegro inicial- y tor: David Mottley. Ingeniero: Sid Mac encontrado en Mravinsky (DG), Klemperer

74 SCHERZO
PATROCINA

ORQUESTA
FILARMÓNICA
DE GRAN CANARIA
fSUnelco
Bravo Murillo, 21 y 23.
Te!.: (928) 32 17 47. Fax: 31 47 47.
3SOO3 Las Palmas de Gran Canana.
DISCOS

(EMI) o Bemstein (DG). traductores idóneos POLSKIE NAGRANIA PNCD 014. Dura- dos elementos infrecuentes. Uno es ei nota-
e intérpretes señeros en distintas aproxima- ción: 43*15". Vbises, Lidia Grychtolowna, ble Karotyi, de discografia escasa y dispersa,
ciones. El disco se completa con varias propi- piano. Grabada en la Filarmónica Nacional que es un chopiniano de raza, brillante en lo
nas de Strauss, Grieg. Paganini, Prokoflev. de Varsovia en 1984. POLSKIE NAGRA- técnico y con arrestos interpretativos de un
Gershwin y Sousa, interpretadas en ese NIA PNCD 015. Duración: S8'24". Sonatas inteligentísimo romanticismo. Es, de algún
orden, que van caldeando el ambiente hasta 2 y 3. Fantasía en fa menor, barcarola en fo modo, el Chopin occidental a que nos tienen
llegar al delino en Barras y estrellas, palmeadas sostenido mayor. Marta Sosinsk». piano. acostumbrados los maestros alemanes, italia-
por el público moscovita con auténtica delec- Grabado en I9B4. POLSKIE NAGRANIA nos y franceses. Un Chopin que arranca de
tación, como si (a marcha en cuestión les PNCD 016. Duración: 73'IO". Estudios. Cortot y Solomon, por fijar fechas y nom-
fuese a liberar del próximo invierno. En fin, preludios, fantasías, scherzo, vals en do soste- bres, y se va tomando objetivo en Rubins-
una rareza que divertirá a unos e irritara a nido, potoneso fantasía. Julien von Karolyl, tein y Airau.
Otros (los más. depende de cómo se inter- piano. Grabaciones en vivo de 1953. 1954
prete)... Asi se escribe la Historia. y 1960. ARKADIA H U N T A D D . Dos Pero hay el Chopin polaco, quizá más tra-
compactos CDGI 909. duraciones: 77*54" dicional y parecido a lo que debió ser el pia-
y 76'33". Precio económico. nismo del maestro, y que nos propone la
£PA integral ahora reeditada de Polskie Nagrania.
Un Chopin de perfiles más duros y contras-
La oferta chopiniana es ton-en- tados, de un toixher más pesado, más canta-
tosa en estos tiempos. A la ble y patético cuando hace falta, un Chopin
CHOPIN: Polonesas tempranas. Regina panorámica de DGG con Arge- que nada disimula ni degrada. Y asi los valses
Smendzlanka, plano. Grabado en Radio rich, Zimerman, Pollini, Barenboim y da, se son para bailar, las raras polonesas, para
Varsovia en 1979 y 1984. POLSKIE agregan los grandes nombres clásicos (Arrau. sacudirse en panda, los preludios para cantar
N A G R A N I A PNCD 012. Duración: Rubinstein, Horowttz) y las novedades del en la soledad. Dos Chopins igualmente váli-
57'55". Preludios. Jerzy Godiisiewski, caso. dos y tan distintos que parecen de otras tie-
piano. Grabado en octubre de 1979, Estas grabaciones nos ilustran acerca de rras y de otros tiempos.

Mutí: La estrella
CIURLIONIS: En eí bosque, poema sinfó-
Nuova Era publicó previamen- nico; El Mor, poema sinfónico; Cuarteto de
te una versión de esta ópera Cuerdas. Gran Orquesta Sinfónica de la
cherubiniana de ia RAf de RTV de la URSS. Director: Vladimir Fedo-
Roma del año 1961 (en la edición figura seev. Cuarteto de Vilnius: Audrona Vainiu-
erróneamente el año 196S). Esta lectura, naite, víoKn; Petras Kunka, víolln; Donatas
vocalmente nada desdeñable, nos presenta Katkus, viola; Augustinas Vasiliauskas, vio-
lodoísko cantada en italiano, con recitativos lonchelo. LE CHÁNT DU MONDE-HAR-
orquestados y con una serie de añadidos MONIA M U N D I - I CD/LCD 288004,
que más que una traducción puede tomar- DDD; duración: 71'. Grabado en Moscú en
se como una adaptación. Muti, que el Conservatorio Chaikovski y en los Estu-
demuestra vocación cherubiniana, quizás dios Gosceleradio, diciembre 1969 -
por nacimiento, (los Réquiem, Sinfonías) enero/abril 1990. Ingeniero de sonido:
presentó la obra en la Scala y de esa lista Thomas Gallia.
de representaciones se origina esta graba-
ción. Muti devuelve ia ópera a su estado
natural: en francés y con diálogos hablados, El lituano Ciurlionis (Varena,
descubriendo en la partitura lo que tiene 1875-Pustelnik. cerca de Varso-
de ópera napolitana (el papel de Varbel). via, 1911) es prácticamente
de ascendencia gluddana (arias de la pareja sión RAÍ está inconmensurable). William desconocido en los olimpos musicales. Su
protagonista), de talante de Opera-comique Shimell (a quien Muti eligió para su Don formación es germánica aunque no faltan
{largas partes de los dos primeros finales), y Giowjnni y como protagonista) es un autori- toques ajenos a esta tradición. El poema sin-
todo ello con un ropaje instrumental de tario Dourlinski, más dominante en la octa- fónico £/ Mar coincide en el título y hasta en
colorido beethoveniano (por algo el de va central que en la superior. Lombardo es la época de composición con la célebre
Bonn admiraba al de Florencia). Muti hace un tenor de linea mozartiana que tiene obra de Debussy pero aquí terminan todos
un milagro de sonoridad, de precisión rítmi- apuros en algunos momentos guerreros del los paralelismos pues tiene unos plantea-
ca, de aliento, situando por una vez a Che- cometido. Thomas Moser. voz curiosa que mientos neorrománticos. aunque matizados
rubini en su contexto, a caballo entre el pasó en pocos años de cantar Ottavio al por algunos aspectos a lo Szymanowski. no
clasicismo y el romanticismo. La música de Florestán beethoveniano. tiene el timbre distintos a los habituales en otros muchos
Cherubini, a veces árida, siempre de un oscuro y abaritonado que parece deman- países durante aquellos años y los que
melodismo voluntariamente sobrio, necesi- dar el papel, a costa de un agudo contraído. siguieron. Quiere ello decir que el tradicio-
ta de talentos fuera de lo común como El resto hace honor a los repartos nalismo o si se quiere el conservad unsmo de
Muti para traducir sus indudables bellezas homogéneos que a menudo suele reunir el Ourlionis es relativo y depende de cuál sea
(Callas hizo to mismo redescubriendo teatro milanés. Pero la estrella, como siem- el término comparativo.
Medea). Bellezas en Lodo'iska hay muchas: pre, es Muti, quizas, actualmente, el mejor
Los conjuntos, por ejemplo, son de una director de ópera italiana y adlateres. Tanto en este poema como en el titulado
esentura polifónica que, de una vez para £n e' Bosque hay un paisajlsmo atmosférico
siempre, puede quitarle al autor su sambe- muy grato que apela más al sentimiento que
nito de músico de oficio. F.F. a la descripción. Este visualismo. nada extra-
ño en un artista que fue pintor tanto o más
que músico, del que se conservan en el
El reparto, muy bien preparado por Muti, CHERUBINI: Loddfska. Mariella Devia, Museo de Kaunas unos 400 cuadros y dibu-
es no obstante mejorabie. Destaca la sop. (LodoYska); Bernard Lombardo, ten. nos, estimula a Fedoseev que logra unas
Devia, que por fin va adquiriendo reconoci- (Floreski); Alessandro Corbelli, bar. (Var- magníficas versiones, plásticas y tlmbrica-
miento por parte del disco oficial, pero su bel), Willlam Shimell. bar. (Dourlinski); mente refinadas, que mantienen viva la
raí. que maneja preferentemente el centro Thomas Moser, ten. (Titzikan); Mario atención. Menos interesante parece el Cuar-
de la gama, no le permite exhibir lo mejor Lupen, baj. (Altamoras). Orquesta y teto del que se perdió el último movimiento
de ella, la octava aguda y la coloratura. Coro del Teatro alia Scala, Milán. Direc- y que es objeto de una traducción solo dis-
Corbelli, experimentado en papeles bufos, tor: Riccardo Muti. SONY RSCD 24S0. creta.
tiene aquí oportunidades de lucimiento que Ingeniero: Sid McLauchlan. Grabación:
aprovecha (Bruscantini. a su vez. en la ver- Milán 1991.
D.CC
76SCHERZO
DISCOS

COLERIDGE-TAYLOR: Escenas del Grabado en Londres en febrero y junio de


Canto de Hiawatha. Helen Field (soprano), 1990. Productor: Paul Myers. Ingeniero:
Arthur Davies (tenor), Bryn Terfel (baríto- John Pellowe. DECCA 430S42-2 D H .
no). Orquesta y Coro de la Welsh Natio- Duración: 60*33'. Precio normal.
nal Opera. Director: Kenneth Alwyn. Gra-
bado en el Brangwyn Hall, Swansea, en Lo más interesante de este
enero de 1990. Productor: Chris Hazell. compacto es cierto repertorio
Ingeniero: Simón Eadon. ARGO (Decca) de pianismo norteamericano
430 356-2 CD DDD Duración: 11973". contemporáneo, poco frecuentado en los
recitales, unido a las manidas obras de
El amplio poema de Longfeilow Gershwin. El Copland transcrito por Bems-
The Song of Hiawatha ya había tein. por ejemplo, es un logro de reformula-
inspirado nada menos que a ción sonora, que deviene una pieza virtuosís-
Antonio Dvorak unos pocos años antes de tica, en la más señalada tradición liszteana.
que Samuel Colendge Taylor estrenara esta Además, presenta en sociedad al joven
obra en 1900. Dvorák declaraba que su Sin- Jablonski, pianista dotado y de sólida forma-
fonía del Nuevo Mundo se había inspirado en ción técnica, cuya maduración interpretativa
parte en aquella epopeya india. Sea cierto o y riesgo en el lenguaje aguardamos para más
no, la cantata o tal vez oratorio de Colendge adelante. Ashkenazy. pianista, obviamente, lo
Taylor se basa realmente en aquella obra Salsa acompaña con cuidado y esmero contrapun-
poética porque utiliza partes de su texto {La tlstico en el Concierto de Gef^hwin.
boda de Hiawatha, La muerte de Minrtehaha Bernstem habla de la doble
y La partida de Hiawatha). El compositor personalidad de Copland:
Samuel Colendge Taylor. que por su nom- Aaron, el brillante orador y
bre podría haberle puesto música a The Moisés, el severo pensador, Al lado de las
Rime of the Ancient Mañner más que a la obras populares como E' salón, Música
ingenua epopeya de Longféllow, vivió sólo para el teatro, Bemstein propone en este
entre 1875 y 1912. Era bastante mas joven concierto grabado en vivo, las Connotacio- GERSHWIN: Porgy and Bess (selección).
que Elgar y Delíus y Holst sólo le llevaba nes, intensas, y dramáticas. Los filarmóni- Un americano en París, Obertura cubano.
unos cuantos meses. Era hijo de inglesa y cos de Nueva York y su director conocen Robería Alexander (soprano). Gregg Baker
nativo de Siena Leona, un mulato bastante a la perfección este repertorio que tocan (barítono). New York Choral Artis. New
guapo y muy dotado musicalmente. Esta con insolente libertad en el delirio rítmico York Philnarmonte. Director Zubin Mehta.
obra que comentamos nos hace sospechar y el éxtasis sonoro, pero tal vez lo que dis- TELDEC 2292-46318-2. DDD. Grabación:
que de haber durado mas tiempo se habría tingue a Bemstein de sus pares (en este Manhattan Center, Nueva York, septiem-
podido comparar a los tres compositores repertorio y tai vez en muchos otros más) bre de 1990. Productor: Wolfgang Mohr.
cuyos nombres hemos evocado. La obra reside en su amor sin vergüenza ni culpa- Ingeniero de sonido: Max Wilcox. Dura-
puede parecer ingenua, pena demuestra una bilidad por vulgaridad: cuando otros direc- ción: 60'47".
generosidad y un idealismo que suele echar tores intentan dignificar al Salón México, el
de menos en las creaciones de los británicos baile y Buriesque para el Teatro, Bemstein Quien con sus siglas firma esta
de aquella época. Si Longféllow defendió a exige a sus intérpretes los limites del soni- nota debe confesar, antes de
los indios con su poema, en un momento en do bello; y ahí, detrás de la alegría superfi- nada, su escaso apego hacia la
que no se podía sospechar el genocidio sis- cial, están las tardes solitarias, y sin miste- música de George Gershwin, para concluir,
temático y total a que serian sometidos los rio, el fórmente miserable. de inmediato, que en nada cambia su opi-
pueblos indígenas de América del Norte a nión acerca de ella tras escuchar este disco,
manos de la civilización, Colendge Taylor eso sí, honestísimo. Nada quiere decir,
compone la obra en un momento en que la P.E. desde luego, opinión tan personal, y más
masacre ya se ha producido, aunque aún no cuando el producto en cuestión parece des-
se ha denunciado en voz afta su magnitud. COPLAND: Eí solón México. Concierto tinado a públicos que deseen ampliar por el
Longféllow imitó al Kafevoto. Colendge Tay- para dorinete. Música pora el teatro. Conno- lado ligero su fonoteca básica. En cualquier
lor siguió la tradición al componer esta taciones para orquesta. Filarmónica de caso, una selección de Porgy ond Bess, el
magna obra a la temprana edad de veinticin- Nueva Yok. Leonard Bemstein. CD archiconocido Un omericono en Porís y la
co años. Por cierto, por entonces tuvo un DEUTSCHE GRAMMOPHON 431 672- pimpante Obertura cubono pueden servir
hijo y le puso de nombre, precisamente, 2. D D D 1989 por HP Schweigmann. para poco más que quedarse a media ración
Hiawatha. Director artístico: AAmes. 74'. tanto para el conocedor como para el
recién llegado. Lo mismo parece ocurrirle a
ese excelente director que es Zubin Mehta
De lo que llevamos dicho se deduce el EMI. con Dvorak y Bruch). Dupré (Bartiralli, y a sus solistas. Todo suena bien, idiomático,
interés de la obra: no se trata de una pieza EMI. Con Seo Pictures) e Isseriis (Hickox, con hasta virtuoso por momentos, pero en esta
imprescindible en una discoteca, sólo es una She/omo de Bloch, Virgin) son tan refinados música que busca otra cosa, o se juega la
amplia pieza sin fon ico-cora I de innegable como el primero, tan entusiastas como el carta de la comunicación a ultranza en un
belleza, rebosante de solidaridad hacia un segundo: es la opción más rica para interpre- lugar de encuentro bien concreto o la del
pueblo desparecido. tar nomino/mente, como lo quería el compo- análisis sintáctico y a ver qué pasa. Y aquí la
sitor, los episodios melancólicos (tpo l 1 ^ o única por la que se apuesta es la de un
S.M.B. de vital buen humor (en el medio del Fina- medio camino decoroso pero suficiente.
le), es la opción que escogen hoy. mante- Rattle y Maazel en Po/gy ond Sess, Bemstein,
niendo su fogosidad, Maisky y Sinopoli. El Tilson-Thomas y el propio Mehta en su
complemento de programa, o la nostalgia antenor grabación con la Filarmónica de Los
ELGARJ Concierto paro violonchelo. CHAI- (para Dupré), o la toma de sonido superlati- Angeles, en Un omencano en París, intentan
KOVSKI: variaciones Rococó. Miicha Maisky. va (para Maisky) influirán en la elección. llevamos at huerto y casi lo consiguen,
Ph¡ I harmonía Orchestra. Giuseppe Sinopo-
li. CD 431 685-2. DDD 1990 por K. Hie- P.E
mann. Director artístico: W . Strangel. LS.
«79".

Ma había conseguido una ver- GERSHWIN: Concierto para piano. Tres


sión todo de matices edulcora- ñlues. COPLAND: El solón México (arreglo GLAZUNOV: Los Estaciones op. 67. Val-
dos, sutil retención (LSO. Previn. para piano de Leonard Bemstein), Ulue ses de canoera núms. I y 2, opp. 47 y 51.
CBS. con el Concierto de Warton); Casáis, al para piano número 3. BARBER: Bolada. Stenka Razm op. 13. Orchestre de la Suisse
contrario, trataba el Concierto como una Peter Jablonski (piano) y Orquesta Filarmó- Remande. Director: Ernest Ansermet,
obra romántica, desmelenada (BBC, BouK. nica Real. Director: Vladimir Ashkenazy. Grabaciones: 1954 (Stenka Razin) y 1967

SCHERZO 77
DISCOS

(resto). Dirección artística: Ann Bradbee. de ese periodo. Los intérpretes las traducen Kellar, te.. David Ward, bajo, George Mal-
DECCA Enterprise 430 348-2 ADD. con discreción y eficacia; bien es verdad que col m, clave, Ralph Downes. órgano, Alan
las exigencias técnicas no son exageradas. stringer, trompeta. Coros y Orquesta sin-
La abundante discografla de Todo a media voz, doméstico, sin pretensio- fónicos de Londres. Direcotr; Adrián
Ansermet llega con cuentagotas nes, poco pueden decir estas músicas a aque- Boult. Grabado en 1961. Productores: Paul
al formato CD. Sin embargo, sus llos que están volcados exclusivamente hacia Rollo y Alex Smith. DECCA 433003-2
Stravinsia, Falla, Prokofiev. Ravel, Debussy y creaciones estelares. DM3. Tres compactos. Duración 198.06
tantos otros nos sirvieron de alimento musi- Precio económico.
cal durante algunos años que ya quedan lejos D.CC
y que eran muy posteriores al fallecimiento Boult es un viejo y devoto
del compositor. Este disco es una buena director haendeliano, inscrito en
muestra de la musicalidad del maestro suizo, la tradición inglesa de la música
con unas partituras llenas de gracia y sabidu- GOUNOD: Foust. Franco Corelli, ten. festival, o sea el barroco pasado por Men-
ría, aunque no se trate de obras maestras (Faust); Nicolai Ghiaurov, baj. (Méphistop- delssohn. Su Mesíos pertenece a la tradición
imprescindibles del repertorio. Los cuatro hélés); Joan Sutherland, sop. (Marguerite); robusto de Beecham y Ormandy: contrastes
movimientos de Las Estaciones dominan el Roben Musard, bar. (Valentín); Margreta de volumen, oposición de tempi entre el
disco y ofrecen una música cuya engañosa Elkins, m c i . (Siebel). Ambrosian Coro. recitativo y el ana, monumentalismo coral.
ligereza disfraza una complejidad de compo- Orquesta Sinfónica de Londres. Director: Ortodoxos de un supuesto y puro barroco
sición dentro de la tradición decimonónica. Richard Bonynge. DECCA 421 240-2, arqueológico, abstenerse.
sin que por ello se trate de música románti- ADD. Duraciones: 7 3 1 I " , 69'53", 47-03".
ca. Algo por completo distinto es Stenko El director destaca en el control del fra-
Productor Ray Minshull. Ingenieros: Lock, seo, sobre todo en los momentos polifóni-
Razin, dedicada al héroe (o bandido, o terro- Parry, Wilkinson. Grabación: Londres,
rista, quién sabe) que encabezó la revuelta cos, donde se puede seguir cada itinerario
1966. Precio económico. sonoro con perfecta nitidez. Los cantantes
cosaca de 1671. Se trata en este caso de un
auténtico poema sinfónico con su compo- obedecen a este planteamiento y la mano
nente inevitable de música descriptiva. Cuando esta versión se conoció lectora de Boult no cesa en su labor un solo
Ansetmet traduce sonoramente a Glazunov hace veinticinco anos aportaba instante. Los mejores tramos se dan cuando
con un amor y una habilidad que tal vez una mejora documental: el cua- el concertador se queda a solas con el coro
habrían molestado a su antiguo amigo, Igor dro en la casa de Margherita (escena pnmera yla la orquesta.
Stravinski, que detestaba a su compatriota del acto IV), lo cual ampliaba el papel de Sie- Sutherland está a sus anchas: lirismo está-
Glazunov, favorito del maestro Rimski. bel y daba a la protagonista otra oportunidad tico, gran dominio del arto melódico hande-
de lucimiento (¡I ne reñent pos!), un aria triste liano, coloratura deslumbrante, timbre lleno.
y conveniente (que puede equivaler al Bumbry es una mezzo-falcón de ópera, no
SLAta D'amour l'aróentefiammeen Beriioz). Las edi- una contralto de oratorio. Correcto el tenor
ciones posteriores de EMI y Philips fueron un y modesto, el bajo, con una agilidad opina-
paso más adelante al incluir el ballet de Wal- ble.
purgis en apéndice y colocando en su lugar la El rendimiento de las masas es óptimo y
GOETZ: Músico de Cámara con piano. escena alternativa, con un brindis para el en cualquier caso se advierte que los británi-
Trio en sol menor, Op. /; Cuarteto en mi tenor como página central. Aclarado esto, cos han hecho de Haendel su músico nacio-
moyor, Op. 6; Qfjinteto en do menor, Op. 16, vayamos al grano. Esta versión, globalmente, nal. No vuetven a él. sino que lo siguen a lo
Tres Piezas Fáciles, Op. 2 y Sonata en sol sólo ofrece interés para cualquier fon de tos largo de la historia.
menor, Op. 17 GSbel Trio Berlín: Horst tres protagonistas, ya que. salvo Ghiaurov y al
que hay que añadir Massard, los resultados
Gabel, piano; Hans Maile. violln; Rene
son muy flojos. Sutherland, que iniciaba así su B.M.
Foreit. chelo. Lois Landsverk, viola (Op.
6); Akira Akahoshi, contrabajo (Op. 16) y andadura por repertorio francés en el que
Kauro Konno. p'ano (Op. 17). CPO 999 •estacarla con merecidos honores en Lakmé
086-2, 2 CD DDD; grabación: MDG. Hol- y Esdarmonde, está aquí tan fuera de lugar
que roza a menudo el despiste. Escuchar su HAYDN: Lo Creación. Norma Burrows,
ger Schlegel, enero/febrero 1990, Osna- sop. (Gabriel), Rudiger W o h l e r s , te.
brüclc Duración; 2h T 24". escena del jardín es de un tedio que puede
llevar a la soñolencia, apoyada por una batuta (Uriel), James Morris, bajo (Rafael). Sylvia
complaciente en un tempo insufrible. Papel Greenberg, sop. (Eva), Siegmund Nims-
escaso, nulo de coloratura, que es el caballo gern, bajo (Adin). Coros y Orquesta Sinfó-
Hermann Goetz (Koenigsberg nicos de Chicago, dirigidos por Margaret
(840 - Hottingen, cerca de de batalla de esta soprano, nadie puede
explicarse la oportunidad de esta elección. Hillis y Georg Solti. Productor: Paul Myers.
Zurith, 1876), tras una estimu- Ingeniero: James Lock. Grabado en Chica-
lante recepción critica que vio en él un De cualquier manera (destacando lo ilimita-
do de la voz) esta Manjrhenta es sosa, cursi y go en noviembre de 1981. DECCA
legitimo heredero artístico de Schumann. 430473-2 DM 2. Dos compactos. Dura-
cayó en un profundo olvido. Su temprana plúmbea.
ción: 104.10. Precio económico.
muerte trunco una carrera que por diversas
circunstancias se habla mantenido en un Corelli también le daba entonces a lo
ámbito muy estrecho y mezquino y que sólo francés (Werther. Romeo) y en Faust suena Pocas cosas interesaron menos
pareció abrirse a más amplios horizontes falto de línea, de estilo y de convicción. a los ilustrados que la cuestión
con el éxito de la ópera Der Widerspenstigen Canto ampuloso, legato cansino, an-astrado, del origen. Haydn, en la fronte-
Zühmung; una segunda, Francesco de Rimtni, sobresaliendo esa voz milagrosa aquí des- ra que divide y une, a la vez. la ideología
quedó incompleta. Antes, estudios en el perdiciada. Ghiaurov queda como un elegan- racionalista y la sensibilidad prerromántica,
Conservatorio Stem de Berlín, con profeso- te y agudo Mefistoféles (más sutil aflos des- opta por una Creación sin Dios y donde los
res como Von Bübw. estancia en el ambien- pués con Prétre y menos empleado que en seres, a contar de los hombres, aparecen ya
te filisteo y poco acogedor para las activida- algunas ediciones Uve) y Massard pone un dotados de lenguaje. La suya es una epope-
des musicales de Winterthur, traslado a poco de orden en el babélico conjunto, en ya de cámara, pantelsta, que celebra al uni-
Zurich por motivos de salud. el que es preciso además destacar el bien verso como una constante recreación,
cantado Siebel de la Elkins. Soninge dirige donde todo existe y empieza, de modo
La música de cámara de Goetz. típica Haus- como un profesor rutinario y estudioso de la
musik para diletantes de clase media, tiene ambivalente.
partitura: ideas pero sin valor práctico.
indudables toques biedermeier con ecos fácil- Las actitudes ante esta magna obra pue-
mente reconocibles de Chopin, Schumann y den variar, según se exalta su posible costa-
Mendelssohn. El oficio es sólido, la inspiración F.F. do místico o se la imagine como un poema
melódica y armónica al nivel normal de la naturalista, si se prefieren las sonoridades
década de los 60 y la organización en la línea apagadas del XVIII inicial o el sensualismo
de la tradición clasicista. Las composiciones timoneo de los finales. Solti prefiere a un
que comprende este álbum por su estructura HAENDEü El Mesías. Arias de Jephto, Haydn hlmnico, jocundo, apasionado y
tonal, disposición de movimientos, etc. siguen y Macabeo y Sansón Joan Sutherland, hedonista. No sólo es un placer contar
esas pautas como por otra parte tantas obras sop., Grace Bumbry, mezzo, Kenneth Mac cómo el mundo empieza: es un placer

7SSCHERZO
DISCOS

meterse en d mundo, sentirse parte de él y 9459 Duración total: 74:04 Distribuido en UGETI: Cuorteto n* I (Metamorfosi* noc-
gozar de una Creación que los hombres España por Diverdi. turnas). LUTOSLAWSKI: Cuarteto de arar-
recibimos como una epifanía, como una fies- dos. SCHNITTKE: Kanon m memoriam I.
ta de los dones. Los datos que se reseñan mas Strovinsky. Cuarteto Hagen. CD. DEUTS-
De nuevo, puristas y arqueólogos: prohibi- arriba sitúan por si mismos el CHE GRAMMOPHON 431 686-2. DDD
da la entrada. Esta es una relectura de un interés de las grabaciones que 1990 por G.V. Schultiendorff. Director
músico dieciochesco pero hecha por un contiene este CD. Los propios autores diri- artístico: S, Paul. 54'.
húngaro contemporáneo. Es la recreación gen sus obras, la mayor parte de ellas aco-
del propio Haydn. gidas entusiásticamente en aquel entonces. El Primer Cuarteto de Ligeti no
Los solistas atacan unas partes para las El tiempo no ha pasado en vano y ese figura en el libro publicado por
cuales aparecen perfectamente dotados, entusiasmo se ha matizado considerable- el IRCAM (Cuartetos del siglo
tanto en vocalidad como en recursos musi- mente. No estaba ahí el futura, ni mucho veinte).
cales y expresivos. Se advierte la mano de menos, pese al real o supuesto mecanicis- El Cuarteto Hagen y la DG han escogido
Sotti en cada una de sus frases, incluyendo mo de Pacific 23/ o al uso de jazz, rumbas para su aventura contemporánea la vía tran-
entre el reparto al coro, que parece una y otras inspiraciones en Lo creación del quila: maestros del siglo veinte en sus obras
perdona difusa y omnipresente en el paisaje. mundo. El interés del CD está en que se menos modernos. Los Hagen, brillante e inte-
La orquesta, empleada a fondo, entusiasma- trata de un documento y no necesita más ligentemente, encuentran en el Primer Cuor-
da y obediente. Como para creer que el comentarios. Salvo advertir que el sonido (eto de ügeti los embriones de sus composi-
mundo comienza a cada instante, por efíme- es muy defectuoso, en ocasiones realmente ciones futuras: fusión de parámetros musica-
ro que éste sea. infernal. les, niebla armónica, intermedios cómicos
teatralmente puestos en escena... En la obra
BM de Lutoslawski, el control de los micro-inter-
S.M.B. valos es admirable, asi como el respeto de
todos los matices (dinámica y arco) del
Kanon de Schnrttke (por muy académica que
HEROLD: (arreglo John Lanchbeiy): La resulte la obra). Excelente disco de divulga-
KNAIFEÜ B Fantosma de Cantervilte. Sta- ción de la música contemporánea, junto con
filie mal gardée. LECOCQ (arr. Gordon níslav Suleimanov, bajo; Tatiana Monogaro- la vía más arriesgada de los Arbitü (de Scelsi
Jacob): Mamm'zelle Angot Orquestas del va, soprano; Alexander Leven tal, solo de a Femeyhough. CDs Salabert y Montaigne).
Covenc Garden y Filarmónica Nacional. órgano; Orquesta del Teatro Forum de
Directores: John Lanchbery y Richard Moscú. Dirección: Mikhail Yurovski. Gra-
Bonynge. Grabados en Londres en marro bado en Moscú en los Estudios Mosfilm en P.E.
y diciembre de 1983. Ingenieros: James septiembre de 1990. Ingeniero de sonido:
Lock y Stanley Goodall. Productor James Thomas Gallia. LE CHANT DU MONDE -
Mallinson. DECCA 430849-2 DM2. Dos HARMONÍA MUNDI. I CD. LDC 288009,
compactos. Duración: 134.27 Precio eco- DDD; duración: 5O'I8". MASSENET: Don Quicholte. Nlcolai
nómico. Ghiaurov. baj. (Don Quichotte); Gabriel
Los vaivenes en los últimos Bacquier, bar. (Sancho); Regine Crespin,
Con partes de un ballet de anos de las relaciones interna- sop. (Dulcinée). Coro de la Radio Suisse
Dauberval (1789), Hérold hizo cionales han traído músicas Romande. Orquesta de la Suisse Román de.
La filie del caso, pirateando hasta ahora prácticamente inaccesibles. En Director Kaiimierr Kord. Escenos Alsacia-
páginas de Rossini y Donizetti, todo lo cual especial existe una cierta curiosidad por los nas. Filarmónica Nacional. D i r e c t o r :
fue rehogado por Lanchbery para el coreó- compositores que surgieron en el mundo Richard Bonynge. DECCA 430636-2,
grafo Ashton en un revivo/ de 1960. El resul- soviético hacia la década de los sesenta y ADD. Duraciones: 66" 16" y 66'42". Pro-
tado es un vivaz pastiche, lleno de contrastes que luego han seguido muy diversos cami- ductores: Raebum y Beswick. Woolcock y
apicarados e ingenuos a la vez, y de un pan nos. No hay que hacerse muchas ilusiones, Mallinson (Escenas). Ingenieros: Lock,
poder descriptivo. pues si por sus colegas occidentales no ha Moorfoot, Frost. Wllkimson (Escenas),
existido un entusiasmo indescriptible, no hay Grabación: Ginebra 1978. Londres 1975
Lo mismo puede decirse del ballet de (Escenas). Precio económico.
Lecocq, o mejor dicho, de Jacob a partir de que esperar que con ellos se vaya más allá
una famosísima opereta del Segundo Impe- de un cierto tributo derivado de euforias
rio que evoca ios albores dei Primero. Total, que hay que temer pasajeras, mezcladas con
el simple oportunismo comercial. En esta visión española, desde la
un batiburrillo divertido y chispeante, de perspectiva francesa siempre tan
ésos que mueven más los pies que las orejas Alexander Knaifel (Taskent, 1943) es un curiosa y pintoresca, Massenet
bel aficionado. compositor inquieto del que ya se conocía nos cuenta algunos episodios del errar quijo-
Lanchbery toca su música con cuidado y Monodia, llevada al disco por Elena Vassilie- tesco, no de pnmera mano (Cervantes) sino
propiedad. Bonynge es un especialista en la va. 0 Fantasma de Canterville, ópera en tres a través de la obra teatral de Le Lorrain. La
época y lo demuestra. Las orquestas, de actos, siete cuadros y un pnilogo para bajo música massenettiana, con su elegancia meló-
extrema eficacia. profundo, soprano ligera y orquesta de dica, sentido del ritmo y delicada orquesta-
cámara (1965-6) sobre un libreto inspirado ción, combina escenas brillantes, de masas
en el cuento fantástico de Osear Wilde, fue que bailan y se divierten, con momentos de
creado en Leningrado en febrero de 1974 y intimidad (dúos de Quijote y Dulcinea,
en Londres en 1980. Knaifel ha extraído una comentarios jocosos y socarrones de San-
versión de concierto, Escenas románticos, cho, muerte del protagonista) en una partitu-
que es la que contiene la presente graba- ra hecha con oficio, por momentos mucha
HONEGGER: Pacific 231. Rugby. Pastorale ción. Tanto las voces como los instrumentos, inspiración, aunque caiga en momentos
d'été. Lo tempete (Prélutk). Orquesta dirigi- en especial los de percusión, están tratados muertos y sin mucho interés. Esta edición
da por Arthur Honegger. MILHAUD: Con- con mano maestra y con originalidad, a comercial compite con una de Changalovic y
certino de prinremps {Yvonne Astruc, yiolln). pesar de que no se ocultan ciertas deudas otra de la RAÍ con Christoff y Berganza (ésta
Concieno poro piano n" / (Marguerite Long, muy concretas. Es difícil hacerse una idea a prepara, si no cancela, otra nueva interpreta-
piano). La création du monde. Les Songes, través de estos números del impacto be la ción ofiaal), aunque es la primera que apare-
suite. Conjuntos y orquestas dirigidos por ópera completa en la que parece quererse ce en CD. El trio protagonista no está en su
Dar¡us Milhaud. Las obras de Honegger asumir un vanguardismo que no corte los momento mejor, sobre todo la Crespin, que
están grabadas en 1929 y 1930. Las de Mil- puentes con un público más tradicional. La es capaz aún de frasear y cantar con la cono-
haud, en 1932, 1934 y 1935. Producción: excelente actuación de Suleimanov y la cida vehemencia (Ne pensons qu'au plaisir) y
las obras de Honegger provienen de la dirección ágil e incisiva de Yurovski son dos el necesario patetismo (Je souffre rotre tnstes-
colección de Robert Ka/, registros transfe- buenas bazas que contribuyen al atractivo de se. Ghiaurov alcanza el máximo en la escena
ridos por Denis Hall; las de Milhaud de la la grabación. de la muerte en un rol escrito para un animal
colección de Alan Sanderi. transferidos de teatro como era Chaliaptn. El timbre algo
por Colín Attwell. Producción coordinada velado entonces emparta un poco un canto
por Charles Haynes. PEARL GEMM CD
D.CC
SCHERZO 79
DISCOS

siempre elegante y musical. Casi podría un coro en todo momento observante de cuatro orquestas K 286 Notítimo, £in Musikú-
decirse que la estrella del registro es Bac- las perfectas proporciones, tanto internas í/scher Sposs K 522. Wiener Mozart Ensem-
quier, por la oportunidad del matiz, la gracia como con respecto al conjunto instrumental. ble. Director Wllli Boskovsky. Grabado en
derrochada, pasando por alto, desde luego, Si no dueño de una sutileza tan impresio- la Sofiensaal de Viena, 1968/1969/1978.
sus características vocales. Korz dirige con nante como la de Abbado, Sawallisch se Productores: C. Raeburn y J. Mordier.
entusiasmo una obra que parece conocer y muestra como heredero de una tradición Ingenieros: J. Lock, J. Dunkerley, J. Law, G.
disfrutar (sobre todo en las escenas de estilística cuya luminosa depuración lo sitúa Parry. DECCA Serenata 430 259-2 6S'3S".
plaza). El largo equipo de secundarios (algu- por encima de la un poco aburrida pesantez
nos con importancia) esta bien escogido. que acaba por sentirse en seguidores más Esta reedición Decca reasume y
Completa la entrega una cuidada versión de ortodoxos de la misma línea interpretativa. resume algunas joyas del inago-
las Escenas alsaaanas, pintoresca página léase Masur. table elenco de serenatas
orquestal del autor de Manon, mozartianas, en las versiones, hoy clásicas,
A.B.M. vienesas al ciento por ciento, de Boskovsky,
F.F. que se hace cargo, amén de la dirección del
Wiener Mozart Ensemble, del solo de violin
en el Adagio cantabile de la Bromo musical,
MEYERBEER: Los hugonotes. Jean Stither- siempre bajo el signo de una impecable aris-
land, sop. (Margarita de Valois), Martina tocracia del estilo. Mozart y Viena. malenten-
MENDELSSOHN: Los cinco Sinfonías. Arroyo, sop. (Valentina), Anastasios Vre- dido y malentendedora, respectivamente, en
Helen Donath (sop.), Rotraud Hansmann nioi, ten. (Raúl), Gabriel Bacquier, bar. su tiempo, sellan en esta antología recupera-
(sop.), Waldemar Kmentt (tenor). Coro y (Saint-Bris), Huguette Tourangeau, mezzo da una reconciliación no menos histórica
Orquesta New Ph i I harmonía. Director: (Urbano), Nicola Ghiuselev, bajo (Marce- que aquella original desavenencia. Y el soni-
Wolfgang Sawallisch. 3 CD ADD. PHIUPS lo). Coros Ambrosianos de Opera y do es fiel al compromiso.
432 598-2. Sin referencia ni de productor Orquesta Nueva Filarmonía. Director:
ni de ingeniero. Grabación: Londres, junio Richard Bonynge. Grabado en Londres en
de 1967. Duración: 3 h I41. 1969. Productor: David Harvey. Ingeniero: JAA.
James Lodc DECCA 430549-2 DM4. Cua-
tro compacto*. Duración: 217.12. Precio
Entre otras muchas versiones económico.
parciales, en el número 39 de MOZAftT: Conciertos para piano números
SCHERZO (noviembre de 22, en mi bemoí mayor, KV 482, y 27, en si
1989, pags. 59-60) Pedro Ellas, a propósito Un armatoste típico de la gran
ópera francesa, que pocas veces bemol mayor, KV 595. Rudolf Buehbinder,
de la entonces reciente integral de sinfonías piano. Academy of St Marti n-in-the-Fiel ds.
mendelssohnianas a cargo de Chnstoph von pisa los escenarios, dada su
extrema exigencia vocal y su complejidad Director: Neville Marriner. Grabado en
Dohnányi, citaba las de Kurt Masur y Claudio Londres, St John's. Smith Square, 13/14-6-
Abbado. De su análisis, con el que estamos escénica, y sólo en esta versión se puede
considerar completamente leída, gracias a la 1990. Productor: G. Berg. Ingeniero: M.
completamente de acuerdo, se desprendía Clements. EMI Classics CDC 754275 2
una preferencia por el elegante refinamiento preocupación musicológica de Bonynge.
DDD 63'07".
lírico del maestro italiano. El paso a digital de Hay de todo en esta botica meyerberiana:
las viejas versiones de Sawallisch que ahora bel canto, tumultos, piedad católica y hugo-
aparece quizá rio baste para remover la cima nota, trivialidades incontables, eficacia histrió- Dos conciertos capitales de
del escalafón, pero si enriquece la reflexión nica y un ramillete de bellas melodías. Por Mozart, distantes algo más de
sobre el complejo equilibrio entre clasicismo encima de todo, un género conocido y cum- cinco artos -finales de 1785,
y romanticismo que se da en el Mendels- plido a tope. principios de 1791- constituyen la substan-
sohn maduro. En este sentido, resulta de lo cia de este compacto, admirablemente bien
más instructiva la lectura llena de contrastes El reparto es desigual y de méritos hete-
rogéneos, cuando los hay. Sutherland y hecho por dos autoridades, Buchbinder y
y matices interpretativos -a lo Beethoven los Marriner. de afianzado prestigio. Ocurre, sin
movimientos extremos, a lo Ha/dn los cen- Arroyo vuelan a gran aftura vocal y están un
tanto ausentes en sus cometidos dramáticos. embargo, que, a propósito de Mozart, el
trales- que el maestro muniqués ofrece de decir se superpone al hacer -queremos decir
la Primera Sinfonía, compuesta a los quince La australiana brilla en los momentos de
coloratura (aria de salida) y nos ofrece su que el drama, o la escena, si se prefiere, gra-
años y etiquetada en el autógrafo como n° vita sobre el menester concertante- y la
13 tras las otras doce sinfonías anteriores dicción infaliblemente embrollada, salvo en
un final de tercer acto insólitamente vibrante perfecta hechura, con ser mucho, puede
para orquesta de cuerda. A partir de ah( se quedarse corta. En vivo y en directo, desde
entiende mucho mejor la lúcida combina- y claro. La americana la supera en musicali-
dad y sensibilidad lírica. luego, esa buena hechura es insuficiente.
ción que se da en el resto entre la apasiona- Ahora bien: un registro impone sus condi-
da ligereza -más debida a la agilidad del fra- Errada la elección de Vrenios, tenor ligero ciones y, como tal. el que comentamos nos
seo que a la rapidez objetiva de los tempi- que no puede medirse con el costado heroico parece impecable. Probablemente, sus auto-
de la superficie y la densa musicalidad típica- de Raúl y abusa de la voz mixta y el falsete de res, con la St Martin incluida, son conscien-
mente germana que subyace en el fondo de modo impertinente. En la época pudo echarse tes, o intúyenlo, del dilema y lo resuelven del
las sinfonías más populares. mano de Gedda o Corelli, por ejemplo, sin lado más razonable. Pero el melómano que
tocar los fantasmas de Caruso, Thill o Sullivan. espera el sortilegio de la ilusión imposible,
Las prestaciones de la orquesta, pese al Ghiuselev y Bacquier ofrecen el lado teatral de espera en vano.
perceptible velo que nubla su sonoridad, son la versión, simpaticen el uno y malísimo el
magníficas. Tan sólo en la coda Allegro otro, dando relieve psicológico a sus partes,
maestoso assai del último movimiento de la Tourangeau cumple con honor en una parte
endiablada que hacía las delicias de nuestros
JAA
Escocesa se produce una muy sensible baja-
da de tensión, tanto más decepcionante por tatarabuelos en los años de la Alboni.
cuanto culmina una de las más brillantes eje- Bonynge toca con limpieza y con rica
cuciones que conocemos de los tres movi- sonondad Por el contrario, falta a su trabajo MOZART. Sonatas para vioHn y piano, K
mientos precedentes. Como compensación homogeneizar a los solistas y contrastar un 296 en do mayor, K 302 en mi bemol mayor,
por este borrón, el excelente escribano que drama larguísimo y hecho, justamente, de K 306 en re moyor y K 377 en fa mayor.
es Sawallisch consigue una Lobgesang sober- contrastes. Opta por la lentitud y la langui- Frank Peter Zimmermann, violin. Alexan-
bia, de auténtica referencia, suficiente por si dez. A guisa de propina, se agazapan en el der Lonquich, piano. Grabación:
sola para rescatarla del penoso estado de reparto futuras primeras como Kin Te Kana- 26/29.5.1987 y S.I988. Hlstoríscher Reits-
relativo olvido en que tan injustamente, y wa y Arleen Auger. tadl, Neumarkt. Productor G. Berg. Inge-
pese a la existencia de cinco versiones dis- niero: H. Paulsen. EMI CDC 7 49712 2
ponibles en CD, sigue sumida a cuenta de lo B.M. DDD 70'40".
inhabitual de su disposición y de sus dotacio-
nes. Mención especial merecen en la reseña
de este éxito los tres solistas -inmejorable La incomparable K 377 -con su
Helen Donath, auténtica primo ínter pares- y MOZART: fine Weine NtKhtmusifc K 525, seductora variación segunda,
Serenata Nottuma K 239. Serenade rf 8 para inmediata, o su Tempo de

80 SCHERZO
Exclusive Series

hanssler
C L A S S I C The Exclusive Series:

terete

Helmuth Rilling Der Messiiis

At the Oregon
Bach-Festival I
Orchestral OrchcstralSiiitL-slH&lV The Mcssiah
Smtes III & IV IDID1 DI M t ••i'-.i'S • t | i L,ü..j-H (The Mozartian Versión)
|D[D|D| -•! l ' l ' l . i ~ í > 2 - \ l i Vh,¡~S •

Johatmes Brahtiis
A Cernían Réquiem
|D|D|D| : M I '(„ 4f,h • : - ( | i 'is.•/!>(,.

Guiseppe Ven!i n..i.


Messa per Rossini
ID 1 0 | D| 2 M ' - ' l . ' - ! • ' • : \ H vft,'J4'í*

Juh.inn Clirisri.ni Biith


Amatiis des Gaulcs
Commenthtg the series. |D)D|D| 2 M( ih.WÍ •!Cll4K.yM

— f i r s t I'IJS?.'" 1 4 i . n i : - -. •• •• • .. .
rriií m i r i r ' s i r c i i r d i r i x ..r,1 .t-
César r'ranck
•d as the uetc íRiiiini¡l ISHK'Í. " Les Beatitudes"
i
í-,,eí!-enli.i!h" • Johann Sehastian Bach
l
\ork 11 M i.--. • ¡H-I The Motéis
JUSI nutri't-l'tii" I ' ni
* - ' - » • » ' • • '

Missa sokninis

|nsi pli I l.mln


Dit SÍLIHTI
lel/ien Wnnc
-|(ili.iini Mil h.H'l
Rci|iiictn I! Din

niviitm
/I KhWu

r,ihn 12211 Ti Sturr)!.irt


DISCOS

menuetto, inspirador de Schubert aun no mendable cuantas menos de sus maravillas movimientos sueltos para trío de viento de
nacido- bastarla para hacer sumamente ape- contenga nuestra discoteca que consta el autógrafo origina]. Las cuatro
tecible este compacto, que recorre un sec- primeras piezas resultantes son ciertamente
tor de la obra para violín y piano -menos A.BM de una coherencia irreprochable: un Allegro
recorrida que otras- de Mozart, entre 1778 inicial y un Allegro-rondo final flanqueando
y 1761. Recordemos que Hozar! había inau- una sección central de tres movimientos
gurado su catálogo, a los siete años, con el repartidos entre tiempos lentos y Minuetos;
ejercicio de este mismo género, que ahora, a MOZART: Gnco drVertimentos en si bemol una Polonesa constituye en cambio el frag-
sus ventrtantos, practica con admirable equi- mayar, IC 439b: Doce dúos en do mayor, K. mento más rápido de la última.
librio, un equilibrio que, en el pasado -litera- 487. Alfred Prim (clarinete y corno di bas- No parece tampoco fácil objetar nada a
tura para clave y violln-se daba como natu- jetto), Peter Schmidl (clarinete y corno di las combinaciones instrumentales elegidas.
ral / que en el futuro, con la invasión de los basietto) y Dieter Zaman (fagot). 2 CD También aquí la indefinición de las fuentes
gran-cola, rozará lo imposible. Edad de oro, ADD. DEUTSCHE GRAMMOPHON impide ir más allá de las meras conjeturas.
pues, de la pareja concertista, que Zimmer- Gallería. Productor Wemer Mayer. Inge- En los trios la ligereza de los dos clarinetes
mann nutre con un violín carnoso, oportuna- niero: Günther Hermanns. Grabaciones; encuentra adecuado contrapeso en el fagot
mente introvertido cuando la ocasión lo Estudio Rosenhügel de Viena, diciembre de Por su parte, el dúo de comi di basetto per-
requiere, y que Lonquich aparea con el buen 1978; Sala Brahms del Musikverein de mite relegar a un segundo plano el aspecto
acuerdo que se espera de una luna de miel. Viena. mano de 1979. Duraciones: S8'58" virtuosista de estas miniaturas originariamen-
El registro es plenamente competente. y 52*30-. te concebidas para dos trompas, y centra la
atención en los tan brillantes como econó-
micos destellos de inspiración melódica y
JAA Doce años han dormido estas combinatoria que las colman.
grabaciones analógicas el sueño
de los justos en los archivos Alfred Prinz y sus competentes colegas de
DG. Por fin, la fuerza de arrastre del año la Filarmónica de Viena dotan a sus interpre-
MOZART: Los conciertos para instrumen- Mazan, ha decidido a sus directivos a la taciones de toda la liviandad y frescura que
tos de viento. Orpheus Chamber Orehestra. publicación de su paso a digital en CD. La demandan los pasajes más desenfadados,
3 C D D D D . DEUTSCHE GRAMMOP- compañía que esté libre de tal timidez o mientras que en los Adagios y Larghettos
H O N 431 665-2. Productor Worf Erich- estudiada estrategia, que tire la primera pie- hacen gala de una sobriedad expresiva y una
lon. Ingenieros: Andreas Neubronner y dra. paridad y uniformidad de emisión absoluta-
Stephan Schellmann. Grabaciones: Nueva La composición interna de los D/verümen- mente asombrosas. Técnicamente, el regis-
York, entre mano de 1982 y diciembre de tos < 439b es fruto de la juiciosa distribu- tro es también modélico, con el único lunar
1989. Duraciones: 66*18". 74'04". 72" 11". ción en grupos de cinco de los veinticinco de la clara audibilidad del mecanismo instru-

Ninguna de las grabaciones que


componen esta integral consti-
tuye una novedad absoluta.
Aproximadamente el cincuenta por ciento Furtwángler dirige Mozart
de su contenido constituía asdemás el blo-
que con una media de calidad más alta de sencillamente, producto de su elocuencia
toda la recopilación que en veinticinco dis- singular, de la vehemencia, convicción e
cos lanzó DG durante la pasada primavera intensidad de que hacía gala el maestro en
bajo el título de Mazan 3D catlection. Allí se todos sus conciertos. La grabación es
recogían en efecto el Concierto para clarinete. mejor que la del álbum citado, aunque las
el Andante para flauta y orquesta, K. 315. el dos fueron hechas por la Radio del Reich
Concierto para fagot en si bemol mayar, K (aquí se dice solamente Berimer Rundfunk,
191, los Cuatro conciertos para trompa y el que evidentemente no es otra distinta). En
Concierto para flauta y arpa en do mayor. K cuanto a la Serenóla nocturno y a las dos
299. Sobre estas obras remitimos, pues, a lo oberturas, Fígaro y Ropto, también se pone
dicho en el n° 53 de SCHERZO (pág. 72). de manifiesto sus extraordinarias agilidad y
variedad, recreando un Mozart absoluta-
Como novedad respecto a aquella macro- mente alejado del tópico germánico, muy
edición, en el primer disco de este álbum claro y vríal. con tomas de sonido acepta-
encontramos la preciosa Sinfonía concenante bles (buenas, si tenemos en cuenta que
para oboe, dannete. trampa, fagot y orquesta son grabaciones de 1933 y 1936). En defi-
en mi bemol mayor, K Ahn. C 14.01 (297b), nitiva, una versión de absoluta referencia
de cuya autenticidad mozartiana a nuestro en cuanto a la Sin/bn/o 39. y tres curiosida-
oído no le cabe la menor duda. La grabación des mozartianas que asombraran a más de
es de un equilibrio perfecto y la interpreta- Cuatro grabaciones reúne uno, fundamentalmente a los que hacen
ción cuenta con cuatro solistas de viento este registro hechas entre caso de las etiquetas. El disco viene con
(Stephen Taylor, David Singer, William Pur- 1933 y 1943 con Furtwángler excelentes comentarios de Rita Fischer-
ws y Steven Dibner) de primera talla, que en a la cabeza de la Orquesta Filarmónica de Wildhagen y, por si no fuese bastante, es
la encantadora conversación entablada en el Berifn. La Sinfonía 39 es una versión distinta de precio moderado. En fin. documento de
Andantino con variazioni final alcanzan cotas a la contenida en el álbum, también Deuts- valor inestimable que no es conveniente
de sutiliza verdaderamente sublimes. Por si che Grammophon. de las grabaciones del dejar pasar de largo.
fuera poco, la orquesta, en cuya costumbre director alemán durante la Segunda Gue-
de actuar sin director se ha encontrado no rra Mundial (ver el artículo Testimonios de
pocas veces motivo justificado de reproche, uno tragedlo en el n° 43 de SCHERZO). si E.PA
funciona en esta ocasión como un mecanis- bien es contemporánea de ella, pues
mo recién engrasado. ambas están grabadas en las mismas MOZART: Sinfonía n° 39 en mi bemol
fechas. La que añora comentamos posee la moyor, K. 543. Pequeña serenoto nocturna
Ya en el tercer disco. Susan Palma dice su misma nerviosa intensidad, la misma cohe- en sol mayor, K 525. Oberturas de Los
parte del Concertó paro ¡huta y orquesta en so/ rencia admirable, el mismo fraseo románti- bodas de Ffgoro y E' rapto en el serrallo.
mayor, K 313 con una sencillez de estilo abso- co, la misma línea continua, flexible y fluida; Orquesta Filarmónica de Berlín. Director
lutamente fiel tanto a la letra como al espíritu pero para Furtwángler no habla una inter- Wilhelm FurtwSngler. DEUTSCHE
de la composición. Apenas un punto menos pretación igual a otra, y aquí nos encontra- GRAMMOPHON. Dokumentc, 431873-2,
seductor, pero aun así logrando una versión mos con unas evidentes sombras trágicas mono ADD. Duración: SI minutos. Gra-
mucho mas que digna, se nos antoja el sonido (más acentuadas si cabe que en la versión baciones: 1942-1943 (K 543), 1936-1937
del oboísta RandaTl Worfgang en su corres- anterior) que no sabemos si pretenden (K. 525) y 1933 (Oberturas). Producción e
pondiente Concertó en do mayor, K. 314. reflejar la situación del momento o son, ingeniero: N.N. Precio económico.
En resumen, un álbum tanto mis reco-
82 SCHERZO
DISCOS

mental que no supo evitar en su momento atención es la encume vitalidad y frescura de sas interpretaciones, en suma recomendables
una torna tan próxima ambas interpretaciones (recontemos la edad sobre todo para los que acostumbran a con-
de este jwen maestro cuando grabó este fundir las realizaciones orquestales impeca-
A&At disco: ¡89 años!). La Haffner, sobre todo, es bles (¡se acuerdan de Karl Bohmí) con la ver-
un prodigio de clandad, ímpetu, construcción dadera esencia de la música. Sonido acepta-
y estilo, una versión de auténtica referencia a ble, estéreo de origen y breves comentarios
la que ni las viejas (en el tiempo) interpreta- en los tres idiomas de siempre,
MOZART: Aliso en do menor, K 421. Bar- ciones de Bruno Walter o Cari Schuricht
bara Bonney (iop.), Hans Pecer Blochwta
(un.), Roben Holl (bajo). Coro de la Radio
hacen sombra. Las mismas constantes están
patentes en la Sinfonía 39: formidable vitali-
£PA
de Berlín. Orquesta Filarmónica de Berlín. dad, fidelidad a la letra / al espíritu, elegancia
Director Claudio Abaddo. SONY Classical coherencia estructural y lucidez, aunque quizá
SK 46671 DDD. Duración: 52H4". Graba- la respuesta orquestal no sea tan efectiva y
espontánea como en la Haffner. Dos glorio- PROKOFIEV: Sinfonía n° 5, Op. 100. Sinfo-
ción: Berlín, Philharmonie, 5 y 6 de diciem- nía n° I, Op. 25 "Clásica". Orquesta Filarmo-
bre de 1990. Productor: Thomas Frost.
Ingeniero: Sid McLauchlan.

Primer disco de Claudio Abbado


y la Filarmónica de Berlín en
Sony, suponemos que como pre-
Tres milagros
ludio al nuevo sello creado por la empresa el genio de este maestro es en los Valses
nipona que presidirá en exclusiva todas las gra- de los Strauss, en estas partituras en princi-
baciones del tándem Abbado-Filarmónica de pio tan poco aptas para su apabullante téc-
Berlín. Los resultados, evidentemente, no son nica y férreo control. La clandad de textu-
matos, aunque sí harto discutibles y lejos de la ras es absoluta; la respuesta orquestal
expresividad que pide la obra. El maestro ita- CHICAGO SYMPHONY -nUTZkElNER asombrosa, como siempre; el fraseo, delica-
liano se hallaba el día de la grabación de esta do y elegante; ninguna cnspación ni especial
página mozartiana con su proverbial capacidad incisividad, lejos de los ultrarrefinados
analítica subida de tono, es decir, que ID que manierismos del último Karajan. de la incisi-
hubiese sido una situación anímica perfecta va brillantez de George Szell y. también por
para grabar la Sinjonieaa de Janacek o Lo con- supuesto, de ese lenguaje único y sensual
sagración de la primavera de Stravinsld, aquí se del inimitable Carlos Kleiber. Reiner no es
convierte en un obstáculo insalvable para lle- idiomático, pero sus hallazgos tímbricos y
var a buen puerto esta cima de la música reli- su dominio de la orquesta bastan y sobran
giosa de su autor. Aquí no se pone de mani- para crear unos valses de antología, muy
fiesto la metafísica tristeza de esta página su personales y analíticos, pero de indudable
cualidad de Réquiem para un vivo. Es exacta- entidad y encanto, la otra vía alternativa de
mente igual que la versión de Karajan, cuyo fin los vieneses que, naturalmente, recomenda-
último era el de encontrar el timbre justo para mos encarecidamente a todos nuestros lec-
una edición digital de impresionante nitidez, No nos extenderemos mu- tores. El sonido de los tres discos es excep-
cosa que realmente tiene poco que ver con cho con estos tres últimos cional (con un director así era realmente
Mozart Solistas, cona y orquesta responden al (por ahora) ejemplares dedica- fácil ser ingeniero de sonido). Por favor, no
milímetro, y la grabación, que según reza la dos a la Edición Fritz Reiner, pues los epíte- dejen de escucharlos.
contraportada del disco ha sido hecha con la tos laudatorios acabarían por colmar la
tecnología 20-brt para alta definición de soni- paciencia de nuestros lectores. Hagamos
do, tiene la acostumbrada calidad de los regis- hincapié de nuevo en la asombrosa claridad EPA
tros actuales, aunque quiza sea algo distante. de texturas orquestales en obras como la
En fin, ía primera en la /rente, asi podríamos Doméstica (escúchese cualquier pasaje de la PROKOFIEV: Alexander Nevsky, Op. 78.
titular este primer registro de Abbado y la misma -ejemplo espectacular a partir del El teniente Kijé. Op 60. GUNKA Russlon y
Filarmónica de Berlín, Es de esperar que sólo n" 143, donde se indica sehr lebhafi und lus- ÜJdm/l/o, obertura. Rosalind Elias (mezzo).
haya sido un mal día de una de las indiscutibles
Og (muy movido y alegre) hasta el final, en Coro y Orquesta Sinfónica de Chicago.
batutas de la actualidad, que cuando quiere es el que orquesta y director hacen un des- Director: f r í a Reiner. RCA GD 60176,
capaz de recrear belleza a manos llenas. Para pliegue de virtuosismo sin precendentes en ADD. Duración: 68 minutos. Grabacio-
los que quieran presenciar en este K. 427 un la historia fonográfica de esta partitura; nes: 1957 y 1959, Producción: Richard
cambio radical de valores, les sugerimos escu- superando incluso trabajos tan indiscutibles Mohr. Ingeniero: Lewis Layton. Precio
chen la versión, serena y emotiva, de Eugen como el de Szell con la Orquesta de Cle- medio. Distribución: BMG.
Jochum (Orfeo, dentro de la colección dedica- veland-): atención también a la precisión y
da a ía Sinfónica de la empañada Radio Bivara, flexibilidad de Alexander Nevsky, una ver- J. STRAUSS II: Vida de artista, Op. 316.
*wSCHERZ0n o 44) sión excepcional empañada solamente por Sangra vienesa, Op. 354. Vals del tesoro, Op.
el absurdo de cantarse en inglés en lugar 4IB. Rosas del sur, op. 388. En el bello
del ruso original (el oyente se extrañará al Danubio azul, Op. 314. Vals del Emperador,
oír la bella canción de la contralto en el Op. 437. Periódicos de la mañana. Op. 279.
E.PA sexto movimiento, que comienza con un &ap truenos y relámpagos. Op. 234. JOSEF
inadecuado "I shall go across the snow-clad STRAUSS: Mi vida es amor y alegría, Op
field", asi como el resto de las intervencio- 263. Golondrinas de aldea, OP. 164.
nes corales, en perfecto inglés -menos las Orquesta Sinfónica de Chicago. Director
MOZART: Sinfonía n" 35 en re mayor, K. breves frases en latín de Tos teutones-). Fritz Reiner. RCA GD 60177. A D D .
385, "Haffner" Sinfonía n" 39 en mi bemol Este inconveniente, no obstante, no impide Duración: 73 minutos. Grabaciones: 1957
mayor, K. 543. Orquesta Sinfónica de la apreciar el absoluto dominio y control y 1960. Producción: Richard Mohr. Inge-
NDR de Hamburgo, Director Pierre Mon- orquestal de Reiner, que consigue de sus niero: Lewis Layton. Precio medio. Distri-
teux. PRELUDIO PHC 1129, ADD. Dura- músicos el no va mis en cuanto a precisión bucción: BMG.
ción: 46 minutos. Grabación: Hamburgo, y suntuosidad sonora. Hasta aquí, todo
febrero 1964. Producción e ingeniero: N.N. R. STRAUSS: Sinfonía doméstico. Op. 53.
dentro de lo non-nal; es decir, obras que Muerte y transfiguración, Op. 24. Orquesta
Precio económico. Distribuido por Auvidis. podían haber estado hechas expresamente Sinfónica de Chicago. Orquesta Sinfónica
para el talante directonal del Fritz Reiner y RCA Víctor (Op. 24). Director: Fritz
Otro reprocesado de un clásico. que. como era previsible, cumple con ellas Reiner. RCA GD 60388, ADD. Duración:
En este caso se trata de dos Sin- con su acostumbrada meticulosidad y ela- 66 minutos. Grabaciones: 1950 y 1956.
fonfos mozartianas dirigidas por boración. Productor: Richard Mohr. Ingeniero;
Pierre Monteux cinco meses antes de su Sin embargo, donde realmente asombra Lewis Layton. Precio medio. Distribu-
fallecimiento, acaecido el I de julio de 1964. ción: BMG.
Lo primero que, paradójicamente, llama la
SCHERZO 83
DISCOS

nía. Director: Rudolf Barshal. COILINS dera hoy definieron y definen como fcrtxfi? Cortis. bar. (Taddeo). Coro y Orquesta
Classies, DDD, I CD, 10642; duración: Naturalmente. Pasémosle a ellos la factura de la Scala de Milán. Director: Cario
57*56". Grabación de 1989 en el Henry del psiquiatra, la isla de tos muertos, sobre el María Giulini. EMI Classics CHS 764041 2,
Wood Hall de Londres. Ingeniero de soni- que fuera famoso cuadro del otrora admira- ADD. Duraciones: 59'35" y 56'24". Pro-
do: Sean Lewis. do Amold Bocklin -y compuesto por su ductor: Walter Legge. Ingeniero: Robort
autor en 1909, treinta años antes que las Beckett. Grabación: Milán 1954. Precio
Danzas- es el complemento lógico para económico.
El sintonismo de Prokofiev, al este disco excelso que, y no es broma,
igual que el de otros muchos oliendo mucho a muerte, está lleno de vida.
autores de sinfonías de reper- La que da ese tiempo que no hay quien Esta versión tiene su origen en
torio, está lejos de articularse en un lenguaje entienda unas representaciones scalíge-
autónomo al margen de incentivos prove- ras del año 1953 y es muy tes-
nientes del mundo de la escena. Dos de sus timonial del Rossini que en la época se
sinfonías están elaboradas con materiales LS. hacía Porque, y a pesar de sus sobresalien-
procedentes de otras tantas producciones tes resultados (aunque parciales), acusa el
dramáticas y en la mayoría de las restantes paso del tiempo, que ha traído y cristalizado
el influjo, si bien no tan directo, es indiscuti- un mejor y más depurado sentido de la
ble. RAVEL Concierto para piano en sol mayor. interpretación de las óperas del Gsne pesa-
Condeno para piano (mano izquierdo) en re res. Por lo pronto, algo que hoy día es prác-
En la Quinto, una obra de pretensiones mayor. Le Tombeau de Coupenn (versión
heroicas, se yuxtaponen grandes bloques ticamente inadmisible, en esta edición se
para piano solo). Cécile Ousset, piano. cortan tres momentos importantes: aria de
muy atractivos por su diseño melódico y el City of Birmingham Symphony Orchestra.
color orquestal pero sin que se aprecie Mustafa G/d d'/nsofito ordore; cavatina de Un-
Director: Simón Rattle. Grabación: Uni- doro, Oh come il cor di giubilo (quizás por no
siempre la lógica propia del desarrollo sinfó- versidad de Warwick. 26 y 27 de abril de
nico. La lectura de Barshai se pretende des- comprometer aún más al tenor) y el aria de
1990 (Conciertos) y Abbey Road, 7 de sorttetto de Haly Le femmine d'ltalia. Esto en
mitificadcira y es simplemente plana y poco abril de 1990 (Tombeau). Productor:
imaginativa. Ni siquiera juega ia baza de la la actualidad, tanto en disco como en repre-
David Groves. Ingeniero: Mike Sheady. sentación, no se perpetra. En cuanto a la
rutilante orquestación por la que otros EMI CDC 7 54158 2 DDD Duración total:
directores han optado para obtener fáciles interpretación, no obstante la categoría de
M'SI". especío/islos entonces de los intérpretes ele-
éxitos. No funciona mejor la manoseada Sin-
fonía Clásica; pobre de contrastes discune gidos, también se percibe el cambio de esti-
con una fría corrección a la que se le esca- lo. Simionato acusa la impronta de su reper-
Para encontrar versiones de los torio habitual de mezzo verdiana y donizet-
pan la ironía y el carácter scherzante, ingre- conciertos pianísticos de Ravet
dientes básicos de la composición. tiana; su canto es siempre generoso, la voz
que se encuentren a esta altura riquísima y la intérprete intencionada; pero
o que la superen es preciso remontarse la línea es, a veces, forzada, las fiorituras, no
bastante en el tiempo. Sólo los grandes del
D.CC pasado pueden aportar algo que no esté
siempre, adecuadas. Queda la fascinación y
la profesionalidad de una excelente cantan-
aquí; Cortot con Münch, Perlemuter con te. Valletti, ya agobiado por papeles donde
Horenstein, Ciccolini con Martinon, Samson necesitaba emplear más la gama central de
Francois con Cluytens. Pero la musicalidad, su cuerda (Alfredo, Ottavio, Pinkerton),
RACHMANINOV: Lo isto efe tos muertos. el sentido de la frase, la maestría en los
Op. 29. domas Sinfónicas. Op. 45 Orquesta tempi, la delicadeza y sensibilidad de unos muestra una octava aguda aquí tan necesa-
del Concertgebouw de Amsterdam. Direc- ria, bastante limrtada, con respecto a la que
dedos, la motivación de los sutiles crescen- han desarrollado los rossinianos de hoy;
t o r Vladlmir Ashkenazy. DECCA Ovation di, la resolución de los pequeños discursos
•430 733-2. DDD. Grabación: Concercge- queda en pié su linea canora y su fraseo
que componen el todo, los sorprendentes inmaculado, ambos soberbios. Mario Petri
bouw, Amsterdam. enero de 1983. Pro- tutti y los matizadísimos pianissimi... todo
ductor: Andrew Cornall. Ingenieros de es un bajo especialista en papeles bufos que
eso hace mucho tiempo que no se puede ha dejado en disco de todo, dada su espe-
sonido: Colin Moorfoot y John Dunkerley. oír en un disco nuevo. Y aqu( lo tenemos
Duración: 54' 16". Serie media. cial irregularidad. Aquí, por suerte, está en
de la mano de una pianista veterana que un momento excelente y probablemente
primero fue niña prodigio. Y con el acompa- sea el que más entra en la psicología y
ñamiento de una orquesta de segundo canto de su personaje. Cortis, un barítono
Con demasiada frecuencia, las orden de gran pundonor y eficacia, dirigida
series medias o económicas de medios mediocres (a lo Mariano Stabite,
por un maestro lleno de nervio y de senti- sin gozar de la capacidad interpretativa de
—por eufemística denomina- do. La introducción del Concierto poro la
ción- no sirven sino para que las firmas dis- éste) sustituyó, lamentablemente, en disco
mano izquierda o el acompañamiento del el Bruscantini de la representación teatral, lo
cográficas cambien de collar al perro o vis- hermosísimo Adagio del Concierto en sol nos
tan de seda a la mona. Y si en ocasiones no cual ha sido una mala suerte. La Elvira de
muestran, por sólo tomar dos ejemplos, Sciutti, irremplazable. A pesar de su corta
merecía la pena ni siquiera tan escaso ante qué tipo de acompañamiento sensa-
esfuerzo, otras hay en las que lo que se nos participación, por la gracia y la intención de
cional nos encontramos. No merece menos su canto, hace que se convierta en el mayor
devuelve bajo otro aspecto es material de una pianista de la talla de Cécile Ousset.
primera. Eso ocurre con este disco, tal vez atractivo de la versión. Giulini planifica con
que consigue un Ravel sutil, de apariencia nitidez, es fluido en los recitativos, consigue
-con la Cuarta de Síbelius- el mejor de ligera en el Concierto en sol (pero de un lins-
cuantos nos ha dado Vladimir Ashkenazy el equilibrio global entre Éstos y el canto de
mo profundo), algo que se desmiente en la las páginas solistas y de conjunto, demos-
desde que decidió cambiar el piano por la tensa interpretación del terrible Concierto
batuta de madera las dos cosas al fin y al trando una vez más la categoría de su batu-
para la mano izquierdo. Entre ambas obras ta. Pero, se piensa hoy su versión seria de
cabo. Las Danzas Sinfónicas son la obra concertantes se sitúa la surte de Le Tombe-
mayor del Rachmaninov orquestal, es decir, calibre diferente.
au de Couperin. donde Cécile Ousset tiene
de ese compositor que, mal que nos pese, de nuevo oportunidad de demostrar su vir-
no se apea ni a tiros del repertorio y va a tuosismo, sus manos privilegiadas, dirigidas
cruzar el rubicón del siglo gozando de una por una mente lúcida que sabe muy bien
salud postuma que no le pronosticaban ni
los más optimistas. Aun mejor que Svetla-
cómo dar esa gracia clasicísta y qué sentido FS.
tiene darla precisamente así.
nov, Kondrashin o Prevín -que ya es decir-,
el estupendo e irregular músico ruso-islan-
dés da aquí la de cal -ayudado por una
excelsa Orquesta del Concertgebow- y S.M.R. SAINT-SAENS: Condeno para violonchelo.
saca todo lo que de expresivamente demo- en la menor, opus 33. Allegro appossionato
dé lleva dentro esta música cargada de lite- opus 43. FAURE: Bégie opus 24 D'INDY:
ratura a veces un poco barata, de una emo- Lied opus 19. HONEGGER: Concierto pora
ción que cada uno puede legitimar con ROSSINI: L'itoliono in Aígeri. Mario Petri, violonchelo. Julián Lloyd Webber, violonche-
arreglo a su propia coartada sentimental. baj. (Mustaft); Grazlella Sciutti. sop. (Elvi- lo. English Chamber Orchestra. Director:
¡Que algo de eso es lo que Eco ayer y Kun- ra); Cesare Valletti, ten. (Lindoro); Giu- Yan F*aul Tortelier. Grabado en Watford
lietta Simionato. mez. (Isabella), Marcello Town Hall. UK. 2/1990. Productora: A.

84 SCHERZO
DISCOS

Barry. Ingeniero: R. de Schot PHIUPS 432 GRAMMOPHON 431 688-2- D D D ductíoni CDKAR 227. Tres compactos.
084-2 DDD53'I4". 1989/90 por M. Bergek. Director artístico: Duración: 70.03, 72.50 y 71.03. Precio eco-
LDehn. 7T2I. nómico. Distribuido por Diverdi.
En un repertorio sin desperdi-
cio, Uoyd Webber, discípulo de La critica no considera la Sinfo- Los artistas aquí comprometi-
Foumier y maestro de su oficio, nía n° 12 como una obra maes- dos son especialistas en sus res-
pone a prueba la nobleza de su instrumento tra, sin embargo no deja de pectivos papeles y constituyen
para regalamos con cinco piezas de pleno tener cierto sabor (la Sinfonía) sobre todo parte del plantel con que se podía alternar
interés, en un estilo ajeno a los achaques del escuchándola con el programa, acentuado en la década del sesenta cuando se trataba
arte que se llama Irteralmente y con razón con acidez por Jarvi: por ejemplo el movi- del straussiano Caballera. Tal vez no hayan
snob. Enmarcan el recital dos lujosas compo- miento Razliv, que describe los pasos clan- coincidido en el disco como en esta ocasión,
siciones de Saint-Saéns, eficaces entre lo pin- destinos de Lenin, se acerca de manera des- aunque el tándem Schwarzkopf-Karajan
toresco y el melodrama: pero lo substancian concertante a la música de Mancmi para su tiene dos Caballeros más; uno de estudio y
la sublime Efegfo de Fauré, modélica, el Lied Pantera Roso. El sello de JSrvi se manifiesta un film.
de D'lndy, ciertamente bello, y el Concierto en los tutti traducidos de manera granítica.
de ese moderno-dulce, agitado a veces, Jarvi propone un estudio en gris cuando Hai- La Maríscala de dofia Isabel va perfecta-
pera nunca convulso, que se llama Honeg- tnk (con el Concertgebouw. Decca) prefería mente con la concepción, vienesa, de una
ger. La pieza de D'lndy, mucho más historia- exaltar los colores violentos. Es realmente comedida y elegante melancolía, coqueta y
do que oído, es primera grabación y merece una pena. pues, que falle la toma de sonido: morosa, que imagina Karajan. El registro en
escucha atenta. El violonchelista -dedicata- puede ser justo favorecer los graves, en esta VFVO le da algunos momentos de leve desga-
trio de todo un elenco de composiciones obra, pero se pierde completamente (en los rro que se pierden en el estudio. Rotherber-
contemporáneas, entre otras el Concierto acordes) lo agudo del espectro (y esto en ger hace una Sophie cristalina y carnosa a la
como un drveit/mento de Joaquín Rodrigo, al varios lectores y bailes). El resto del progra- vez, en tanto Jurinac está impulsiva y vehe-
cual, por cierto, se le omite el nombre en la ma (cubre la mitad de la duración), que no mente, como exige su parte. Edelrnann es
reseña adjunta al compacto- luce un sonido presenta los mismos problemas de graba- cómico y cavernoso y el conjunto, de una
terso y muelle a la vez, que se beneficia de ción, es interpretado con humor es una de homogeneidad ejemplar. Para los fanáticos
una espléndida toma de sonido, que convali- las pocas ocasiones de escuchar la suite del de cualquier elemento aquí comprometido,
da la alta calidad del producto, ballet La edad de oro. director, protagonista o autor, este registro
tiene atractivos de sobra, aun teniendo en
cuenta las imperfecciones de toma que se
P.E producen cuando se capta desde un escena-
JAA. rio.
Como bonus se acopla una curiosidad
que aumenta el valor documental de esta
S H O S T A K O V I C H : Obertura Festiva, Op. STRAUSS: Conciertos para trompa. Andan- entrega: Della Casa en la Maríscala, un papel
96. Sinfonía n° 5 en re menor, Sinfonía n° 10 te para trompa y piano. Introducción a en el cual no se prodigó excesivamente, y al
en mi menor, Música Incidental para Eí Tóbo- "Capriccio". Alphorn. Introducción, tema y que pone en la línea vienesa de la tradición
no; Sinfonía n° IS en la mayor, Op. 141. variaciones pora trompa y piano. Barry Tuck- lírica, que también incluye a Schwarzkopf. A
Orquesta Sinfónica de Londres. Director: well (trompa), Marie Mac Laughlín (sopra- comparar, entonces,
Maxim Shosukovlch. COLLINS Classic, no), Vladimir Ashkenazy al piano y dirigien-
do la Filarmónica Real. Grabación: Londres,
D D D ; 3 CD; OH 11 11082-9, duración:
58'33"; 11062, duración: 59'25"; 12062. febrero de 1990. Productor: Paul Myers. B.M
duración: 80'54". Grabados en Londres en Ingeniera: Simón Eadon. DECCA 430370-2
los Estudios de Abbey Road en 1990. DH. Duración: 56.55 Precio normal.
STRAUSS: Elektra. Jean Madeira. mezzo
La ciclomanía que no cesa nos Tema para freudianos: Strauss (Clitemnestra). Inge Borkh, sop. (Elektra),
trae ahora las primeras entregas escribe para trompa, el instru- Marianne Schech, sop. (Crisotemis), Fritz
de una integral de la obra mento que toca su padre y que Uhl, ten. (Egisto), Díetrich Fischer-Dieskau,
orquestal de Shostakovich encargada a su evoca los genitales de la mujer, las trompas bar. (Orestes). Coro de la Opera del Esta-
hijo Maxim, un director que indudablemente de Falopio, La música reúne, idealmente, a do y Capilla Estatal de Dresde. Director:
se ha beneficiado de su apellido; primero en los dos, ella en la boca de él y convertida en Karl Bohm. Grabado en Dresde en octu-
Su país, donde desde muy temprana edad se el sensual, rotundo y colorido timbre del ins- bre de 1960. Productor: Wolfgang Lohse.
le brindó la oportunidad de ponerse al frente trumento de caza. Ingeniero: Heinrich Keilholz. DEUTSCHE
de las mejores agrupaciones sinfónicas y Robustos conciertos y amables piezas GRAMMOPHON 431737-2 GX2. Dos
luego en Occidente que le ha considerado el sueltas dedica el músico al solista, en tanto compactos. Duración: 50.31 y 49.41. Pre-
Intimo administrador de la herencia pater- oímos la trompa, continuamente, en los cla- cio económico.
na, bien es verdad que en ruda competencia ros del bosque romántico que es la orquesta
con otros pretendidos albaceas y legatarios. straussiana. En orden de méritos, esta graba- Pasa a compacto, al fin, la Elek-
ción nos propone un trompista sobresalien- tra de Bohm, director de refe-
Sus lecturas, tímidas y un tanto sumanas y te, Tuckwell, acompañado por un Ashkenazy
elementales, parecen querer exorcizar tas rencia en el campo straussiano.
más comedido que imaginativo, y por una Su lectura tiene más de ciencia que de arte.
partituras de cualquier aureola épica. De soprano correcta en su breve y melodiosa
este modo pierden gran parte de su eficacia Advertimos al minucioso maestro de capilla,
intervención. conocedor de los recovecos de esta com-
y fuerza comunicativa, quedando al descu-
bierto el andamiaje académico. Lo más inte- pleja e infernal cantata histérica, trabajador
resante de la propuesta es que, seguramente obediente junto al maestro de Panterkir-
con fines de respetabilidad, se intenta un chen. No le habría venido mal despeinarse
cierto entronque con la escuela rusa, la de un poco, enloquecer y contrastar, pero allí
los Chaikovski. Taneiev o Glazunov, aspecto está, como si fijera Mendelssohn (según el
este poco tratado por los numerosos parti- STRAUSS: Eí cobo/tero de la rosa. Eliía- consejo irónico del compositor) Richard
darios de la generación espontánea. beth Schwarzkopf, sop. (Maríscala), O t w Strauss.
Edelmann, bajo (Barón Ochs), Sena Jurinac, Borkh resuelve su imposible personaje
D.CC lop. (Octavian), Annelise Rotherberger, con unos medios menos espectaculares que
sop. (Sophie). solistas, coro y orquesta de otras colegas (Nilsson, Rysanek) pero con
Viena y Salzburgo. Director: Herbert von un dominio del texto de pnmerfsima calidad.
Karajan. Grabado en vivo el I de agosto de Sabe alternar los delirios con los momentos
SHOSTAKOVICH: Sinfonía n° 12 "Año 1964. Final del acto primero grabado en de seducción, desaliento y ternura, y su voz
1917". Hamlet (Suite) Op. 32a. La edad de vivo el 26 de julio de 1960 con Lisa Del la desgarrada trepa con propiedad por las
oro (Suite) op 22o. Orquesta Sinfónica de Casa y Sena Jurinac. Regrabación digital. abruptas líneas melódicas de esta freudiana
Gothenburg. Neeme Jarvi. CD DEUTSCHE Productor: Nicos Velisíiotis. HUNT Pro- Elektra.

SCHER2O 85
DISCOS

Del resto de) reparto sobresale evidente-


mente Fischer-Dieskau, cómodo en las tesi-
turas central y baja donde su voz se oye Ghilini vuelve a Verdi
realmente baritonal. Dice con señorío e
intención, canta como si se tratara de melo- En su última grabación del
días silbables del romanticismo, pronuncia Réquiem de Verdi para Deuts- \KK1)1
con una previsible y certera nitidez. Uhl,
estupendo cantante-actor, saca adelante una
parte de pequeñas proporciones que no lo
che Grammophon, Giulini se
reafirmó como una de las máximas autori- (MITRO PEZZI SACR1
dades en esta partitura que llevaba al disco \IV\Ü)1
pone a prueba. por segunda vez (Roberto Andrade comen-
La contraparte de la ópera, la madre asesi-
na y febril, está a cargo de Madeira, quien no
tó muy elogiosamente esta versión en el n°
43 de SCHERZO). Con estas Quottro Pezs
IKEDOI
posee la hondura vocal requerida, pero Socrí ha sucedido otro tanto: el maestro ita-
mane¡a bien sus limitaciones y acompaña a liano las habla grabado en la decada de los
Borkh en su exploración de la compleja y sesenta en una versión de antología para ¡.UlUi\UIII.\
turbia historia familiar. Schech está modesta EMI producida por Walter Legge con el
en su atolondrada y sana hermanita, que Coro y Orquesta Ph ¡I harmonia (acopladas GILUNI
quiere casarse y tener niños sin advertir los en un álbum de dos compactos con la pri-
peligros de la herencia. En bocadillos se oyen mera grabación del Réquiem). Ahora, como
algunas voces calificadas, como Gerhard es habitual en la última etapa directoral de
Unger, Judrth Hellwig e liona Steingruber, Giulini. las ha vuelto a registrar en una inter-
pretación tomada en concierto público en
Con el compacto, el registro ha ganado la Philharmome de Berlín, y los resultados
profundidad de planos y calidez de timbres, son ios ya obtenidos en su primera versión, todo el que quiera escuchar a Vertli en total
aunque alguna ocasional reverberación en añadiéndose ahora mayor concentración, plenitud {sugerimos también, dados los
los agudos lo exima de la perfección. amplitud, espiritualidad y fervor, con esa resultados obtenidos por Claudio Abbado
especial devoción y profundidad que carac- en la Alisa K 427 de Mozart -ver comenta-
terizan todas las interpretaciones de música no en este mismo número-, que el titular
religiosa protagonizadas por Giulini. El Coro de la Filarmónica de Berlín escuche este
Emst Senff es un prodigio, lo mismo que la disco como remedio para esos ataques de
deslumbrante orquesta berlinesa, que sirve asepsia que le aquejan últimamente con
STRAUSS II: Cenicienta El caballero Pas- con convicción admirable las tres últimas demasiada frecuencia.
man. El bello Danubio. Orquesta Filarmonía piezas verdianas, asi como el breve Credo
Nacional. Director Richard Bonynge. Gra- de Vivaldi {en versión adaptada del bajo EPA
bados en 1974 y 1980. Productores: continuo por Gian Francesco Malipiero). La
Andrew Comall y Michael Wooleock. Ken- grabación de las Pezzi es, evidentemente, VERDI: Cuatro piezas sacras. VIVALDI:
neth Wilkinson y James Lock. DECCA 430 mejor y más espaciosa que la antigua de Credo. Coro Emst Senff. Orquesta Filar-
852-2 DM2. Dos compactos. Duración; EMI, con un sonido calido y efusivo que se mónica de Berilo. Director: Cario Mari a
137.47. Precio económico. ve realzado por la toma en vivo (recorde- Giulini. SONY Claísical SK 46491. DDD.
mos que el concierto fue retransmitido en Duración: 61 minutos. Grabaciones
Peter Kemp reconstruyó, entre su día por Radio 2, con una Pastora) beet- hechas en la Iglesia de Jesucristo de Berlín
1976 y 1979, el único ballet hoveniana en la primera parte absolutamen- Dhalem el 16 de febrero de 1990 (Vivaldi)
compuesto, sobre el final de su te excelsa; confiamos en que Sony la edite y en concierta público en la Phil harmonio
vida, por el rey del vals. Es una partitura también). Asi pues, disco importante y muy de Berlín el 7 de septiembre de 1990
amable, eficaz e impersonal, que pudo ser recomendable, referencia obligada para (Verdi). Producción: David Monttley. Inge-
hecha por cualquier maestro del ramo en el niero: Sid McLauchlan.
largo siglo de Adam y Chaikovski. Las otras
obras resurtan más características. Una de
ellas extrae las danzas de la opera £) cabalie-
w Pasman {polca, vals y czardas), estrenada Duración; 61.57. 60.24. 74.22 y 73.10. Pre- Del resto, brilla Studer en un papel episó-
en 1888. El último ballet inscrito es un pasti- cio normal. dico. Schwarz. excelente cantante, no tiene
che divertidísimo y popularisimo hecho por la materia de Waltrauta. Lo mismo le pasa a
Roger Desormiéres sobre temas straussia- Dentro de la integral de Levine Salminen. El tenor hace lo que puede y no
nos para el coreógrafo Leonide Massine, en {falta todavía el S/g/ndo) he aquí puede gran cosa. El resto tampoco emerge
1924. la conclusión. Una obra com- de un nivel apagado, aunque tengamos, aso-
pleja que raramente puede ejecutarse con mándose entre nubes y rocas, a Tatiana Tro-
Bonynge, experto en exhumaciones homogeneidad. En el caso, el balance cae, yanos y a Helga Demesch.
románticas, sigue las partituras con esmero y enfáticamente, del lado orquestal, conside-
buen hacer sinfónico. Está mejor en la pn- rando al ingeniero de sonido como el mejor
mera obra. El Strauss vienes resulta difícil de solista, dada la nitidez, brillo y sensualismo
traducir al inglés. En cualquier caso la recu- sonoros que alcanzan las tomas.- Esto sí que
peración es estimable y muestra la cara ocul- es real y no lo que olmos en la realidad. Un
ta del músico imperial. sonido posmoderno.
Levine se pliega a estas exigencias y traba- WAGNER: La Walkina. Jon Vickers. ten.
ja a favor de lo espectacular y cinemascópi- (Sigmundo), Gré Brouwenstin, sop. (Siglin-
co, dicho sea en elogio de su técnica y seña- da), David Ward, bajo (Hunding), George
lando sus limitaciones de lectura, Esta ópera London, bar. (Wotan), Birgit Nilsson, lop
se corta a cada rato con descripciones y (Brunilda), Rita Gorr, mezzo (Fricka).
WAGNEFt e crepúscuto de (OÍ dioses. Hll- Orquesta Sinfónica de Londres, Director:
degard Behrens, sop. (Brunilda), Renier recapitulaciones. Levine no las trabaja como
poemas sinfónicos (Clemens Krauss) ni dra- Erich Leinsdorf. Grabado en septiembre de
Goldberg. ten. (Sigfrido). Bernd Weikl. bar. 1961. Productor: Erik Smitti. Ingeniero:
(Günter), Matti Salminen, bajo (Hagen), máticamente {Sotti o Karajan), Tampoco se
desvia hacia el éxtasis onlnco de FurtwSn- Kenneth Wilkinson. DECCA 430391-2
Ekkehard Wlaschiha, bar. (Alberico), DM3. Tres compactos. Duración: 216.17.
Cheryl Studer, sop. (Gutruna), Hanna Sch- gler. Es descriptivo y colondo.
Precio económico.
warz, mezzo (Waltrauta), coro y orquesta El elenco cae a niveles de obvia modestia,
del Metropolitan de Nueva York. Directo- dada la penuria del actual mercado wagne-
res: Max Epsteín y James Levine. Grabado riano. Behrens está sena y esforzada. Su voz Un registro de referencia, que
en Nueva York en mayo de 1985. Produc- es bella en el centro y escasa en los extre- no desluce comparado con la
tor: Cord Graben. Ingeniero: Wolfgang mos. Su dicción es nftida y Brunilda aparece integral en estudio de Solti en
Mrtlehner, DEUTSCHE GRAMMOPHON desdichada y entusiasta, pero falta vocaiidad Decca o la integral en vivo de Bohm en
digital 429385-2 GH4. Cuatro compactos. con excesiva frecuencia. Deutsche Grammophon, por no irnos al pri-

86 SCHÍPZO
Keep in Touch!

For the past26yoars the Midem has been the rising stars, new talent and the winners of interna-
premier rendez-vous for classical music and tional competitions, often sponsored by world-class
jazz professionals. artists. Every year, over 300 classical musicians
and jazzmen perform in Midem showcases.
Where can I find worldwide representation and
distribution ? In 1991, more than 826 publishers, Where can I find a vantage point to see where
548 distributors, and 697 record companies from theprofession isgoing ? In the runup to the single
54 countries attended the Midem. European market, Midem's conferences and
seminars constitute a ünique forum with leading
Where can I find media exposure for my
experts reflecting on the likely future of the music
producís ? In 1991,46 radio stations,
industry.
48 televisión channels, and more than
600 journalists were present at the
Midem. Ifyou 've been asking yourselfthese
questions, you should be among the
Where can I find a showcase for 8,000 professionals who attend the
new talent ? Festival and concert Midem every year. If the music industry
organizers, orchestra and opera di- needs you, you need Midem.
rectors flock to the Midem to discover Keep in touch !

MIDEM
The World's Music Market
Palais des Festivals, Carines, France
19-23 January 1992

CONTACT : ANNE-MARIE PARENT. INTERNATIONAL SALES MANAGER


TCi • 11 11 I AK nK 1,1 n-J . CAY 15 M I Al « Q1 O->
DISCOS

mer acto de las clásicas versiones de Watter, de sus creaciones supremas? Heroísmo e
Toscanini o Knappertsbusch. insolencia vocales son de difícil paragón, y su
La Walkjrio es, afortunadamente, quizas,
el texto más operístico de Wagner y así lo
concepción del personaje, una muchacha
súbitamente sometida a la ley de la madurez,
RECITALES
entiende Leinsdorff, quien opta por íempi conmovedora e intensa. A su lado. Brou-
rápidos y expresión ansiosa, se detiene wenstin, una soprano notable pero maftrata-
apenas lo indispensable en la descripción da por el disco, hace una Siglmda estremeci- AA.W.: Vofses, Polkas. Manilas austríacas
de lugares y atmósferas, y mantiene en da y juvenil, enamorada y alucinada, que y prusianas. Orquesta Filarmónica de Berlín.
todo momento la tensión que empuja a especula con un notorio vibrato y aun con Instrumentos de viento de la Filarmónica
esta familia tan complicada, por el amor ciertos agudos embotados. Recuerda a otra de Berlín. Director: Herbert yon Karajan.
incestuoso, hacia la transgresión y la trage- gran wagneriana holandesa, Elisabeth Ohms, DEUTSCHE GRAMMOPHON. PrSsent,
dia. Ayuda a los cantantes y los acolcha y nos es poco decir. Gorr tiene la voz ideal 431641-2. álbum de 2 discos ADD. Dura-
con una orquesta rica y sensual pero de Fricka valiente y metálica, de una agresi- ciones: 70*55" y 65'36". Grabaciones:
nunca protagónica ni impertinente. La vidad plateada propia de esa divina Maruja 1966, 1970 y 1973. Producción e ingeniero:
regrabacion subraya la presencia de los germánica. N.N. Precio económico.
personajes y la elaboración tímbrica, aun-
que siguen sobrando, como a menudo en Los señores no van a la zaga de sus com-
Decca. tos ruidos accesorios (viento, lluvia, pañeras. Sigmurvdo es una notoria invención Curioso álbum que pone de
etrf. de Vickers, que está generoso de medios manifiesto la extraordinaria ver-
centrales y graves, potente de caracteriza- satilidad de la Filarmónica de
El reparto es de pareja brillantez y propie- ción, heroico y sensible. London luce la Berlín, que en manos de uno de sus más
dad, y muestra la alta cota profesional que nobleza de su metal y pasa por los cambian- cualificados artífices suena con el idiomatis-
poseía el wagnenano de hace treinta años, te estados de Wotan con especial autoridad mo de su colega vienesa en los valses y pol-
sobre todo teniendo en cuenta los elencos dramática. Ward cumple con buenos kas, y con la perfección, suntuosidad y refina-
paralelos que se podían reclutar con pareci- medios y apropiada expresión. miento de la mejor banda milrtar en las mar-
da calidad. chas, hasta el extremo de que nunca han
¿Qué decir de la Brunilda de Nilsson, una B.M. sonado como aquí, con tal calidad instru-
mental y tal entusiasmo en su ejecución.
El álbum consta de dos discos: el primero
dedicado a Valses y Poicos de los Strauss
Dirección ejemplar interpretados por la Filarmónica de Berlín, y
el segundo con las más representativas
intervención de Kurt Molí, aceptables para Marchas austríacas y prusianas recreadas
una representación de teatro de provincias por los instrumentos de viento de la misma
(incluso para nuestro Teatro Nacional La orquesta dirigidos con un insólito refina-
Zarzuela que. por cierto, aún no ha puesto miento, más para ver desfilar a Emil Jan-
en escena esta ópera, estrenada el 18 de nings en El último de Mumau con su impe-
junio de 1821), pero de ningún modo para cable uniforme de conserje, que a aguerri-
una grabación de este calibre. Karita Matti- dos granaderos prusianos (otra de las
la, como buena nórdica (valga el tópico) es peculiaridades de Karajan, que pretendien-
fria e inexpresiva hasta la saciedad, y su voz do dar un marcado aire de solemnidad
pequeña y sosa de vida a una Agathe de consigue el efecto contrario, lo cual es de
corte tendero y pequeñoburgués; recorde- agradecer). Buena toma de sonido y discre-
mos a la Agathe ideal, Elisabeth Grümmer. ta presentación, con textos telegráficos en
por belleza tímbrica, convicción dramática, alemán y el índice de las obras contenidas
lirismo, ternura y efusividad (con FurtwSn- en los discos también en alemán. Se ve que
gler. Erich Kieiber y joseph Keilberth, excel- para Deutsche Grammophon sólo vale
sa con cualquiera de los tres). Correctos, aquello de Deutsch/and über alies, ya que en
sin mas, el resto de comprimarios. De las , esta ocasión ni el inglés ha merecido la más
Al leer el título de esta reseña mínima consideración.
los operófilos seguro que hasta ahora, ocho versiones más notables
piensan: "Dirección ejemplar, de Der Freischüiz (Furtwangler, E. Kleiber,
reparto vocal deleznable". Efectivamente, Keilberth, Jochum, Heger, C. Kleiber. Kube-
aunque con matices, por ahí van los tiros lik y esta que ahora comentamos), la que EPA
de este cazador, cuya grabación es la más motiva esta reseña es la de reparto vocal
nítida y teatral de cuantas existen. Sir Colin más heterogéneo y claramente inferior al
Davis ama esta ópera, y eso se nota desde resto. La versión, no obstante, tiene más
la maravillosa traducción de la obertura; su puntos positivos la adaptación y arreglo JOHN BARBIROLLI: dirige El sueño de
fuerza expresiva, su vigor y el peculiar del texto alemán por August Evending, que Geroncro y Variaciones Enigma de Edwar
colorido instrumental de la Staatskapelle hace una verdadera obra de teatro llevada Elgar, y la Sinfonía 34 en do mayor de
son incomparables; la orquesta de Dresde al disco, dinámica y convincente, resaltada Mozart. Con John Vickers. tenor. Constan-
actúa como verdadero narrador sinfónico por los efectos especiales de la espléndida ce Shacklock, meizo y Marian Nowkowski,
y el maestro británico consigue plasmar grabación, paralela a la maestría desplegada bajo. Orquestas de la RAÍ de Roma y
con su habitual clarividencia ese efecto por la batuta. Una interpretación, en defin¡- Turín, Coro de la RAÍ de Roma, dirigido
compuesto de individualidad y pujante sen- tiva, modélica en todos los aspectos, por Niño Antoneltini. Grabaciones en vivo
tido de comunidad sobre el que se cimen- menos en el vocal. Lástima, pero asi son las en noviembre 1967, noviembre 1957 y
ta la base de esta ópera. Su profunda poe- grabaciones de hoy. noviembre 1960. Paso a digital. Productor:
sía y trascendencia emparentan esta ver- Nikos VeliMiotii. ARKADIA HUNT Pro-
sión antes con la romántica, cálida, sensible ductions ADD 2 CDHP 584. D O Í compac-
e ¡diomática de FurtwSngler, que con la EPA tos. Duración: 74 y 70.36. Precio económi-
analítica, impetuosa y vibrante de Carlos co.
Kleiber (Rodolphe Productions y Deutsche WEBER: El cazador jurtivo. Karita Mattila,
Grammophon respectivamente -ver sop. {Agathe); Eva Lind, sop. (Annchen);
comentario de ambas en el n" 33 de Francisco Araiza, ten. (Max); Ekkertiard He aquí un retrato parcial de
SCHERZO-). Hasta aquí todo inmejora- Wlasehiha. bar. (Kaspar); Kurt Molí, bajo Barbirolli (nacido Giovanbattista
ble. El reparto vocal, sin embargo, es de (Un eremita), etc. Coro de la Radio de y transformado en Sir |ohn), de
otra galaxia; el mejor Francisco Araiza, que Leipzig, Staatskapelle D res den. Director; vuelta a la tierra de sus antepasados con un
a pesar de sus problemas habituales consi- Sir Colin Davis. PHILIPS 426319-2, álbum fajo de partituras británicas bajo el brazo.
gue dar credibilidad dramática a su actua- de 2 discos D D D . Grabación: Oresde, Elgar se aviene perfectamente a las cuali-
ción. Los demás, exceptuada la breve Lukaskirche, enero 1990. Producción: dades directoriales de Barbirolli. Es comedi-
Mlke Bremmer. Ingeniero: Erdo GrooL do, de orquestación cuidadosa y expresión
suavemente matizada, melodioso sin arreba-

88 SCHERZO
DISCOS

to y cantable sin sublimidad. La mejor pres- que los nombres de la mayoría de los ros. Grabaciones: entre 1972 y 1979.
tación del conjunto aqui reunido son las intérpretes han pasado cum laude a la his- S8'4S".
Variaciones Enigma, acaso la máxima inven- toria de la ópera.
ción sinfónica del músico inglés. Barbirolli Este compacto ofrece una pano-
saca el juego a estos pequeños retratos iró-
nicos y elegantes, que no dan tiempo para
grandes desarrollos y exigen imaginación
R.deC
m rámica bastante completa del
arte de Plácido Domingo en los
años setenta. Resulta interesantísirno compro-
percutiva y sentido del color. bar la evolución de este tenor desde el
El Mozart es interesante porque aparece CONCIERTOS DE TROMPETA, (a) ensombreamiento a que, en el terreno estric-
traducido al inglés, lo cual significa que se lo VIVIANI: Sonoro en do mayor para trompeta tamente técnico y pese a toda la pasión que le
oye cantar desde las islas con un melodismo y órgano; (b) VIVALDI: Concierto en do echa al asunto, se ve sometido por la Caballé
italiano y una parvedad elocutiva vienesa. Un mayor para dos trómpelos, cuerdas y clave, en una Monon Lescaut grabada en 1972, hasta
poco el Mozart de Beecham. El resultado es RV 537; (c) TELEMANN: Sonata da concer- el absoluto dominio de todos los recursos
de una irresistible eficacia. tó en re mayor para trompeta, cuerdos y clave vocales y expresivos con que a su vez llega él
En cuanto a la escena de oratorio que (d) HAENDEL: Concierto en soí menor, a oscurecer a la Cotrubas en el brindis de Lo
encabeza la entrega, sobre un texto del car- HWV 287 (original): Concierto paro oboe n." tranoto fechada en 1977, Lo mejor del aparta-
denal Newman que describe las alucinacio- 3; (e) M. HAYDN: Concierto en re mayor do operístico lo hallaremos por tanto en el
nes oníricas de un anciano moribundo, con- para trompeta, cuerdas y clave; (f) I. Ario de la fiar y el Dúo final -con Teresa Ber-
venientemente retocadas por la ortodoxia HAYDN: Concierto en mi bemof mayor, Hob, ganza también en un momento esplendido-
católica, conforma lo menos atractivo del Vil; I, para trompeta y orquesta. Maurice de Carmen y en una monumental Oi'elh mi
conjunto. Es una obra pomposa y árida, que André (trompeta), (a) Hedwig Bilgram credo de La farKiutla del West, ambos registros
se alanza a través de un lánguido desarrollo (órgano), (b), Maurice André (trompeta II), de 1979. Aunque menor, a gran altura rayan
donde es difícil advertir ninguna agonía, nin- (B) Marutis Sillem (clave) y (b, c) Orquesta asimismo, en 1976, la Escena y aria de Macduff
guna salvación, demonios malvados ni ánge- de Cámara Inglesa; director: Sir Charles (Macbeth) y la siempre sugestiva aunque no
les buenos, Mackerras. (d) Hedwig Bilgram (órgano) y muy purista incursión en Los maestros cantores
Orquesta Bach de Munich; director Karl (Preislied de Walther).
El joven Vickers exhibe su talento de Richter. (e) Hllde Noe (clave), y (e. f)
actor y dice con cuidado, sirviéndose de una Orquesta de Cámara de Munich; director: En cuanto a las cinco canciones que com-
voz timbrada que luego se haría áspera y Hans Stadlmair. CD A D D DEUTSCHE pletan el disco (Core'ngroto, Granada, MatD-
desgarrada. El coro pronuncia un ingles sor- GRAMMOPHON Galleria 419 874-2. Pro- nota. Ay, ay, ay y Non ti scorodar di me), a
prendentemente correcto y las masas ductores: Rudolf Werner (a, b, c); Harald cualquiera se le ocurrirán al punto no menos
orquestales cumplen con notable dignidad. Baudls (d); Klaus Serie ¡be (e, f}- Grabacio- de tres tenores -entre ellos, por supuesto, el
Barbirolli demuestra conocer y amar la nes: (a) Sala Hercules de Munich, septiem- propio Domingo de dos años después-
pétrea partitura y, una vez servida con bre de 1976; (b, c) Sala Henry Wood de muchos más impuestos en tal territorio.
magistral cariño, devolverla al panteón de las Londres, mayo de 1976; (d) Escuela Supe-
glorias victorianas. rior de Música de Munich, abril de 1966;
(e. f) Sala Hércules de Munich, noviembre A.B.M.
Del paso a compacto conviene señalar el
excelente nivel de los timbres, que favorece de 1966. S9'I3".
la paleta orquestal del director. ENCORES. Obras de Boecherini, Grana-
dos. Valls. Debussy, Albéniz. Glazunov,
B.M. Aparición en la serie Galleria de Turlna, Toldrá y Streicher. Ludwig Strei-
un CD previo (DG, 415 980- cher, contrabajo; Astrid Spitznagel, plano.
2GH), él mismo compuesto por ORFEO C 225 911 A. Grabación: Viena,
tomas pasadas a digital de microsurcos apa- 1990, Distribución: Harmonía Mundi.
CREATOR'S RECORDS. Varioi intér- recidos en 1967 (Haendel), 1968 (los
pretes. 2 CD SRO-8IB-2. STANDING Haydn) y 1977 (el resto), y oportunidad por
tanto muy barata de acceder a uno de los La firma Orfeo nos ofrece un ori-
ROOM ONLY 800 series. Fechas de gra- ginal recital de contrabajo titulado
bación: entre 1900 y 1918. Distribuidor: grandes de la trompeta en nuestro siglo o
de completar algunas en las discograflas. Eficofes por Ludwig Streicher.
Dfverdl. Este disco contiene una bonita selección
Maurice André está absolutamente genial de las páginas más representativas de la
En primer lugar, debemos seña- en todos los casos, con un timbre muy pas- música catalana con Granados, Alóéniz. Valls
lar que debido a las fechas de toso, emisión clarísima, ataques pulquérri- y Toldrá. Música donde nos evoca todo el
las grabaciones, en las que mos, agilidad y facilidad en los agudos calor de Andalucía para llegar al sevillano
abundan las de la primera década del siglo, (Michael Haydn exige un la!, cima de todos Turina, sin olvidar a Bocchenm, Glazunov y
el sonido podríamos calificarlo como apto los conciertos clásicos), y uniformidad diná- al propio Ludwig Streicher.
tan sólo para los aficionados a la arqueología mica en el legato piano (así en Joseph
canora. No queremos decir con esto que el Haydn). La precisa utilización del sistema de Con un contrabajo de una talla normal, un
sonido sea malo, todo lo contrario, la casa sincronización en Vivaldi constituye una metro y nueve centímetros, el maestro
discográfica ha realizado un magnífico traba- curiosidad añadida. Streicher nos ofrece unas versiones de gran
jo en este sentido, pero indudablemente la perfección técnica y, donde su musicalidad
Los acompañamientos varían desde la grá- brilla por doquier en estos pentagramas
costumbre de escuchar registros antiguos cil soltura dé los ingleses a la grave circuns-
ayuda mucho a su disfrute. musicales que llegan a ser excepcionales,
pección de los alemanes. Sonido siempre además, de exhibir un sonido insuperable.
En estos compactos podemos escuchar aceptable y bien equilibrado.
Hay que añadir el magnifico acompaña-
a los que estrenaron, en los roles que ellos miento aportado por Astnd Spitznagel, que
crearon, bastantes de las obras más famo- AB.M. con su asombroso e insuperable apoyo pia-
sas del último romanticismo francés y el nístico, forma con Ludwig Streicher un
verismo. El interés de las distintas grabacio- auténtico dúo camerlstico.
nes es variable, y mientras las de algunas Este novedoso disco de Ludwig Streicher,
de ellos, como son el caso de Caruso o PLACIDO DOMINGO: Arias y dúos de no solamente va dirigido a los contrabajistas,
Tamagno, han sido suficientemente difundi- Bizet, Puccini, Verdi, Wagner. y canciones sino a todos los melómanos en general.
das, nos encontramos también con otros, de Cardillo, Lara, Freiré y De Curtís, con
como Van Dyck, la Bellincioni, Mario Sam- Grabación francamente excepcional,
Teresa Berganza, Montserrat Caballé, llea- merecedora de premios discográficos.
marco o Rosina Storchio, por citar sólo na Cotrubas, Catarina Ligendza, Dietrich
algunos, mucho más infrecuentes y que Fischer-Dieskau. Varias orquestas. Directo-
por sí solos tienen interés más que de res. Claudio Abbado, James Levine. Zubin R.G.L
sobra para hacer atractiva esta grabación. Mehta, Carlos Kleiber, Eligen Jochum, Karl-
Intentar comentar los cincuenta y siete Heinz Loges y Marcel Peeters. DEUTSCHE
fragmentos que contienen, en estas pági- GRAMMOPHON 431 104-2 D D D . Sin CLARA HASKIL Concierto n." 4 en soí
nas, seria inoportuno además de ocioso ya indicación ni de productores ni de ingenie- mayor de Beethoven y Concierto n.° 24 en
do menor de Mozart. Con la Orquesta

SCHERZO 89
DISCOS

Nacional de Francia, dirigida por And re Grabación; Seewen, IX/1989. Productor e plausible lectura de estas piezas de induda-
Clu/tens. Grabado el 8 de diciembre de ingeniero: Pere Casulleras. ble valor histórico.
I9S5. Toma de sonido: Ivan Devries. Con-
cierto n.° 2 en fa menor de Chopin y Con- Dos discos que tienen en común LM.M.
cierto n° 19 en fa mayor de Mozart. Con la la temática centra! navideña y la
misma orquesta dirigida por Constantin presencia en ambos, como can-
Silvestri. Grabado el 19 de febrero de tante o como director de Rene Jacobs. El pn-
1959. Toma: el mismo. En el Teatro de LUCIANO PAVAROTI. Selecciones de
mero se divide en dos partes, las tres obras Donizetti, Rossini y Verdi. Eteír d'omore; I.
Champs Etysées de París. Dos compactos iniciales reúnen gandes medios -solistas, coro,
Digital Audio M O N T A I G N E 587807. Quenco e'bella; 2. Una furtiva lacrima (Bonyn-
orquesta-, en tanto que el resto de la antolo- ge, 1965). Luda: 3. Dúo acto ( con Scotto. 4,
Duración: 61'58" y 58'55". gía cuenta con voz solista (Jacobs) y continuo. Escena final (Molinari-Praddli, 1967). Lo /Me
Las interpretaciones están presididas por el du regimenf 5. Ah, mes omis (Bonynge,
Hasldl constituye, en pleno siglo júbilo de lo conmemorado, destacando el lla- 1967). 6. Stobot Water. Cujus animan (Giullni,
XX, un ejemplo casi novelesco mado Deutscfies Magni/Icot de Schüt2. En las 1967). Luisa Miller. 7 QUOÍK/O fe seré al placido
de la figura románica de) pianis- piezas más Mimas, el cantante fogra también (Guarnierl, 1963). Réquiem. 8. Ingemisco
ta maldito, llena de desdichas y patetismo, comunicar el afecto deseado, sobre todo a la (Karajan. 1967). CD AAD (?) RODOLPHE
con la muerte y el dolor, dándole codazos a que da título al disco, Natus estJesús de Bod- RPV 32660. Grabado en vivo. Duración:
cada momento, como para hacerle ver que decker. Por lo que respecta al disco Integra- 59*43". Distribuido por Harmonía Mundi.
sin ellos no hay arte y que están, terribles y mente consagrado a Schütz, nos reencontra-
fraternales, siempre a su lado. mos aquí con el lado más polémico de Jacobs,
su labor directoría!. Su Historia de la Natividad Este CD no añade nada nuevo
A pesar de su talento evidente desde la posee sentido narrativo, pero también un cier- a la discografia de Pavarotti,
niñez, la excelencia de sus maestros y pro- to decaimiento y es menos rica vocal e instru- pero permite comprobar que
tectores, la frialdad del público y los pro- mentalmente que la rédente versión de Ber- su fulgurante carrera nada debió a los poten-
blemas de salud y políticos postergan su nius (Sony). ciómetros del estudio de grabación. La voz
consagración masiva casi cuarenta años, era, desde sus comienzos, la misma que hoy
hasta el veredicto de París en 1950. La ha alcanzado reconocimiento unánime aun
escoliosis, un tumor peligroso, el extermi- E.M.M. en sectores poco vinculados a la ópera: her-
nio a prueba su carrera de artista y sus mosísima, personal, cálida y lírica, que aquí se
fuerzas morales. mueve en repertorio idóneo, pero cuya
Estos compactos son un sumario retrato riqueza de squillo permitía anticipar una dedi-
de la última parte de su trayectoria. En ellos OBRAS DE CANTO LLANO. GLOSAS cación futura a empleos algo más pesantes,
apreciamos su maestría en el orbe mozar- SOBRE OBRAS DE C A N T O LLANO. como asi fue. El registro agudo estaba ya,
tiano, donde siguen siendo una referencia Grupo «Alfonso X el Sabio». Director Luis intacto, en sus do' (Filie) y sus re bemol'
su elegancia en la lectura, el equilibrio de Lozano Virumbrales. Álbum de la Música (Rossini), esplendorosos. La calidad sonora
los volúmenes, la sutilísima sentimentalidad Española. RTVE AME-004. DDD. 69'46". de las tomas, siempre aceptable, es particu-
y la autoridad persuasiva de su canto. El Grabaciones: Monasterio de El Parral, Sego- larmente buena en Ludo, en la que olmos a
Cuarto de Beethoven es otra de sus obras via, IV-WI988. Toma sonora: Miguel Ángel una superlativa Scotto, musicalmente muy
favoritas, y de ella existe otra grabación en Barcos, Asesor musical: Luis Robledo. superior a Pavarotti, cuyas interpretaciones
estudio (1947). Si bien Haskil no es una MURCIA: Obras para guitarra. Gerardo casi nunca sorprenden o emocionan, como
beethoveniana canónica (tampoco cabe Arriaga, guitarra barroca. Álbum de lo Músi- s! lo hacen las de Kraus o Pertle en Ludo,
situarla entre los chopinianos ortodoxos), co Española. RTVEAME-OOI. DDD. 58'30". Schipa en Elisir, o Pertile y Anselmi en Luisa
sus versiones de alemán y el polaco resul- Grabación; XII/1987. Toma sonora: Luis Miller. Pero siempre canta bien y es técnica-
tan rescatables, con los inconvenientes de Dial. Asesor musical: Pepe Rey. mente ejemplar, según atestiguan los soni-
la toma en vivo y algunos efectos de la dos intervocálicos redondos, bien cubiertos,
edad. No toda agilidad es precisa y alguna CASTRO: frailen/mentí Armonía da que emite en zona de paso (Uno furtiva
nota juega por si misma, pero la sensibilidad Camera L'Academia d"Harmonla. Álbum de lacrima): toda una lección de canto.
musical de la instrumentista y la intérprete la Música Española RTVE AME-003. DDD.
acaban por imponerse y dotar de elevado 58'59". Grabación: Barcelona, 11/1988.
Toma sonora: Jesús Garrido, Luis Esparza.
interés a sus trabajos.
Asesor musical: Pepe Rey. RAM
Podemos juzgar sólo la madurez de Has-
kil. dadas las circunstancias adversas que la Parece precisa una considera-
acompañaron en sus primeras etapas. Pero ción previa; una institución LUCIANO PAVAROTT1: Arias de Rigo-
con ello nos basta para situarla, con todo su pública como RNE puede y aun letto. L'elisir d'arnore.La Traviata, La ñohéme,
personal perfil y su soh/ente pianismo, en la debe grabar discos dedicados a la música his- Idomeneo, Lucia di Lommermoor, Stabat
primera fila de sus colegas. tórica española. La miseria del mercado Mater (Rossini). Varias orquestas. Directo-
espaflol de producción propia así lo pide. res: Giullni. Bonynge, Rossl. C¡Mario. Moli-
ftAt Dentro de la serie Álbum de la Música
nari-Pradelli, ATOLL 290.032. Duración:
42'44*. Grabaciones en vivo, entre 1961 y
Española, micitiva que esperamos ver prose- 1967. Distribuye: Auvidis.
guida, tres volúmenes dedicados a la música
antigua son de enorme interés por lo desa-
NATUS K T JESÚS. Música navideña del costumbrado de los repertorios tratados. Es casi un resumen de los seis
barroco. Obras de Zelenka, Carisiimi, Asi, el Grupo «Alfonso X el Sabio» nos pro- primeros anos de vida artística
Schutz, Boddecker, Bassani, Gagliano, Gra- pone Gregoriano y Glosas sobre canto llano del tenor de Modena este
ziano, Giamberti, Mazzocchi, Vi diana. Rose- de los siglos XVI y XVIII. La aceptable labor disco, porque aparece La Bobéme del debut
marie Hofmann, soprano; Rene Jacobs, vocal y el atractivo músico lógico se unen de Reggio Emilia y el Idamante mozartiano
contratenor. Basler Madrigal i sten. Orques- para lograr un disco muy recomendable. de su primer éxito internacional (Lo donna
ta de la Schola Cantorum Basiliensis. que inicia el registro no es de 1986 como
Director Fritz NSf. DEUTSCHE HARMO- Coordenadas parecidas tiene el registro de
Gerardo Amaga, consagrado a la producción señala la carátula, sino de 20 años atrás.
NÍA MUNDI. GG77I77. A D D . 65'28". Tampoco el Stabot Mater es de Puccini,
Grabación: Vil/1986 y 1/1987. Edición en gurtaMstca de Santiago de Murcia, donde se
rescata incluso alguna muestra conservada en como asimismo se empeña en atribuírselo
CD: 1990: Productor: Melnrad Schweizer. dicha carátula). La voz del tenor aparece,
Distribución: BMG. México en manuscrito. La interpretación se
coloca a gran altura, con un sonido mortfente, por momentos, bastante irreconocible, quizá
claro y lecturas muy estilísticas. por los filtros, ya que las tomas, teniendo en
SCHUTZ: Weihnochts-Hisiorie. 4 Kleine cuenta sus diversos orígenes y medios, son
Las Sonatas de Francisco José de Castro aceptables. Algunos de los fragmentos pro-
G&stíiche Concene. Heute ist Oiristus Gebo- vienen a ser una de las primeras aproxima-
ren. Concertó Vocale. Ensemble Instrumen- vienen de grabaciones de obras completas;
ciones a la música de cámara española del otros, como los del El'sir donizettiano son
tal. Director: Rene Jacobs. HARMONÍA XVII. Pese a la sonoridad un punto acida de
MUNDI HMC 901310. A D D (i). S0'52". de famosa gira australiana que Pavarotti hizo
los violines, las versiones nos dan una muy

90 SCHERZO
DISCOS

con la pareja Sutherland-Bonynge y que. PEARL BVA II, AAD mono 3 CD 7511",
hasta la fecha, han merecido menor difusión. 7S'O3" y 74'40". Distribución: Diverdi.
F.F. Que el compacto ha desatado
en nuestros días el fijror arque-
ológico es cosa asumida y
PIATIGORSKY interpreta el Concierto denunciada: se cumple el diagnóstico del
para violonchelo de Sctiumann y Sonatas filósofo Rubert de Ventos, que calificó como
de Beethoven. Webern y Bratims. Schu- de la sensualidad las utopías de los 60, coinci-
mann: Concierto en lo menor, Op. 129. dentes en el reclamo de los fines mas primi-
Weber (arreglo de Ritigosrky): Sonata en tivos por los medios más sofisticados. Es,
la mayor Op. 10/5. Beethoven: Sonata para pues, el momento de recuperar lo irrecupe-
violonchelo n.° 2. en sol menor, Op. 5/2. rable: de aprehender con la pureza de hoy
Brahms: Sonata para violonchelo. n° I. en mi las impurezas de ayer, de digitnlizar la prehis-
menor, Op. 38. Gregor Piacigorsky, violon- toria de lo analógico.
chelo. Ivor Newton, A r t u r Schnabel y Sin embargo, no todo es recuperable en
Artur Rubinstein, piano. London Philhar- la misma medida y con la misma eficacia y, si
monic Orchestra. Director: John Barbirolli. bien un oído verdaderamente musical filtra
Grabado en 1934 y 1936. Londres y París. con naturalidad un impertinente ruido de
Pasaporte Reprocesado: Mark Obert-Thom. PEARL
GEMM CD 9447 AAD Mono 76'10". Dis-
fondo, la buena disposición naufraga cuando
lo que se percibe es simplemente ruido
para el siglo XX tribuido por Diverdi. -ruido y no música concreto-, con alguna
que otra música oe fondo.
A finales de siglo, en este afio Corresponde a (a sabiduría de la No nos cabe la menor duda sobre la con-
de 1991. nos llega un disco ciencia el conocimiento de sus dición mitológica del largo desfile de virtuo-
para conocer musicalmente lo limites: este compacto circula sos del violin reunidos en estos tres CD. E
mas representativo de la centuria que se alrededor de ellos. Una vez más, se alian imaginar tan sólo la posibilidad de escuchar
acaba. No llega tarde, ponqué toda la músi- arqueología y mito: en este caso, a propósito al propio Sarasate interpretándose a si
ca que contiene no se interpreta nunca o de Gregor ñatigorsky y su violonchelo, a la mismo el afto cuatro es como para poner en
casi nunca en España, y es un viaje pro- mitad de los afios 30. Las limitaciones de un vilo desde luego. Pero, si la fe mueve monta-
puesto por Pierre Boulez y su Ensemble registro en esa década nos son conocidas: ñas, dejemos mejor que las mueva por si
Intercontemporain que reproduce una pero éstas no afectan por igual al aconteci- sola, sin vanas ilusiones, que no otra cosa
parte de las obras, o fragmentos de obras miento sonoro: la música de cámara, sobre puede servimos un registro de pnncipio de
grabadas para la realización de una serie de todo, si discurre a lo largo de la fibra interior siglo, por muy digitalizado que se nos sirva.
video llamada boulez XXe siéde, y que -en todo caso, la fragilidad del registro nos Interés, ¡erudito acaso? No parece que los
consiste en seis emisiones televisadas de obliga a interiorizar lo que olmos-, sobrelleva CD hayan sido promovidos por la causa de
Pierre Boulez y Nat Lilenstein con los mucho mejor esas condiciones precarias. Por la erudición: el erudito verdadero prefiere
siguientes títulos: ritmo, melodía, timbre, eso, la Sonata del joven Beethoven, con la las fuentes y las halla si las busca. El CD no
armonía, material y forma. El disco, que cooperación inefable de Schnabel, puede ser puede abdicar de su condición divulgadora,
ahora distnbuye Diverdi entre nosotros, saboreada lo indispensable -Con Rubinstein noble por otra parte.
viene acompañado por un libreto bilingüe y Brahms ocurre, pero menos, a pesar de la
(francés/inglés, no se hagan ilusiones) con Obsérvese además que la arqueología que
menor edad, dos anos, de la toma-, lo que en este caso se pone en juego no es la de la
textos del propio Boulez en los que expli- no puede decirse del Concierto de Schumann,
ca con claridad y concisión cada concepto Música, legitima, sino la del interprete -a tra-
donde las imaginables calidades del violon- vés de un experimento-, dudosa. Pues, si la
de los que antes hemos citado aplicado a chelo son desanimadas por una Filarmónica
una obra de nuestro siglo. Ejemplos: la misión de éste es acercamos la Música, a
de Londres -una orquesta es un sonido y un años luz, ¡qué se nos reporta? ¿Poder decir
melodía en general y la melodía aplicada a sonido ha de sonar- y un Barbirolh cuya
las Tres poesfas de la lírico japonesa de Stra- «he oído a Sarasate con mis propios oídos»?
rúbrica es ilegible. Si el oyente esencializa la Pues bien: con CD. o sin él -éste es el
vinski: la armonía de la música del siglo XX escucha, obtendrá -supongo- cierto saldo:
y aplicada a Integrales de Várese, o a Córale ponqué nos hallamos en la frontera. segundo volumen de la colección-, la afirma-
de Berio..., y asi sucesivamente. Evidente- ción que antecede se hallará en el dominio
mente, las interpretaciones son discutibles de lo sobrenatural. Las piezas, en su mayor
(serla pedantería, necedad, o ambas cosas parte, son de repertorio habitual. Como se
al tierripo, tratar de poner peros al máximo
JAA. puede comprobar cotejando las listas, los
traductor de estos pentagramas). En fin, autores raros son los propios virtuosos, que
loable iniciativa la de Disques Montaigne al rara vez han resistido el goloso impulso de
publicar algo distinto, algo que proporcio- THE RECORDED VIOLJN. Historia del componer para su propio lucimiento.
ne al oyente un placer intelectual antes violin en grabación. Obras de Corelli,
que digestivo. Kreisler, Slbellus, Wieniaweski, Brahms,
Hubay, Debussy, Spohr, Dvorak, Bach,
JAA.
Chaikovski, Rachmaninov, Reger, Ysaye,
Lully. Grieg, Mattheson, Burleigh, Paganini,
ERA Zoubok, Barcok. Ravel, Falla, Thome, Szy- FRANCESCO TAMAGNO: Arias de
manowski, Bazzini, Scriabin, Tartini, Villalo- Ote/lo, Andrea Chen:er El Profeta. II Trovatore.
PASAPORTE PARA EL SIGLO XX. bos, Gluck, Suk, Sarasate, Chopin, Vieux-
STRAVINSKl: Tres líricas pponesas. Concer- temps, D'Ambrosio, Dodla, Henley, Dlnicu, Herodiode, Sonsom et Dobla. Gug'/elmo Tell.
tino para doce instrumentos. VÁRESE loni- OPAL (Peari). CD 9846. ADD. Duración:
Quiroga, Stravinski. Los violinistas son: 45*07". Distribuido por Harmonía Mundi.
sat/on. Integrales (fragmento). WEBERN: Busch, Telmanyi, Piastro, Hochstein, Melsa,
Cinco piezas para orquesta, Op. 10. BERIO: Vecsey, D'Aranyi, Fachiri, Geyer, Kennedy,
Córale (fragmento). UGETI; Concierta de El primer Otello. el tenor de
Menges, Culbertson, Polyakin, Brown, fuerza Tamagno (con apellido
cdmora (fragmento). STOCKHAUSEN: Merckel, Kulenkampff, Dubois, Hansen.
Kreuzsp/eí (fragmento). BOULEZ: Écíor proclive a hacer chistes con el
Suzuki, Seidel, WoHsthal, Solloway. Priho- volumen de su voz), se nos presenta en este
(comentarios y extractos). Ensemble da, Heifetz, Benedetti. Siekely. Milstein.
Intercontemporain. Director Pierre Bou- disco con todas las grabaciones que realizó
Francescati, Primrose, Morini, Rosta!, en su vida. En dos ocasiones, acudió al estu-
leí. DISQUES MONTAIGNE WM 334 88 Temianka, Campoli, Spiwikovski, Oistrakh,
518. DDD. Duración: 61 '49". Grabacio- dio, entre 1903 y 1904, para legar a la poste-
Candela, Odnoposoff, Buttabo, Neveu. ridad unos once discos de pasta (veintidós
nes efectuadas en el IRCAM entre 1987 y Ricci, Renardy, Haendel, Sarasate, Ysaye,
1988. Producción: Pierre Leballlif. Inge- caras). Ahora Peari presenta también tres
Hubay. d'Ambrosio, Dodla. Henley, Kreis- páginas inéditas. D/ quelto piro (con un agudo
nieros: Didier Arditi y Alain Jacquinot. ler, Dinicu. Quiroga. Szigeti ¥ Dushkin. Las
Distribuidos en España por Diverdi. casi quebrado, de ahí su no anterior publica-
grabaciones abarcan de 1904 a 1943. ción), Oro e per sempre y Mun mi temo (las

SCHERZO 91
DISCOS

dos, se sabe, de Otello). En estas páginas ver- registros ya ha pasado de I05 cincuenta y en errores y gruesas adulteraciones. Serla
dianas, las correspondientes al moro venecia- estaba próximo a morir (seria en 1905). Un necesario tomarse en serio las tareas con-
no, tienen un ínteres añadido: el comprobar disco esencial para conocer la historia de la servacionistas iniciando una verdadera cruza-
c6mo el propio Verdi le marcó el papel al voz de tenor, con bastante razón se dicen da ecológica que evitase la definitiva extin-
cantante. Asombra la lentitud det Ora e per que Tamagno es el máximo representante ción de ese depósito de creatividad, cuya
sempre, dicho con una elegancia especial, que de su cuerda, antes de la aparición de Caru- variedad es el mejor antídoto contra la polu-
no impide la persuasión del mensaje: chocan so. Compruébese con este disco, donde se ción musical ambiente cuyo aspecto más
los mugidos (o gruñidos o jadeos) del Niun han eliminado no pocos ruidos de fondo. negativo e insidioso es precisamente la uni-
mi tema, que rompen un tanto la solemnidad formidad.
de la linea canora de la mayor parte del aria; F.F. Por ello este álbum cuyo titulo ha queda-
impresiona la fuerza con que es atacado el do desfasado, es digno de elogio aunque
£su/tonte; en cualquier caso, emociona el sabe a poco por el ingente número de gru-
escuchar esta voz que el mismo Verdi eligió pos étnicos que abarca. Y eso que se ha
para el rol De estos fragmentos de Ote'to. operado una drástica simplificación, drvidien-
Tamagno realizó doble versión (del Níun mí VIAJE A LA URSS: Antología de la Músi-
ca instrumental y vocal de los pueblos de la do los cinco primeros discos entre las 15
temo, triple) y todas están en el disco. Repúblicas a tres por disco y dedicando el
URSS. LE CHANT DU MONDE -HAR-
Aparecen muestras de los cometidos MONÍA M U N D I - MELODÍA, 6 CD, LDX sexto a ciertas regiones concretas -Cáucaso
escénicos del tenor turinés, todos rafes 274 920/25. 1990. del Norte, Volga. Ural, Siberia- de la más
heroicos; Jean de Leyden, Amoldo, Manrico, extensa, ni que decir tiene que como toda
Sansón. El Jean de Herodiade le queda selección es arbitraria y meramente testimo-
demasiado extravertido, asi como también La música popular urbana, gra- nial y a lo sumo puede contribuir a desper-
su improviso (dos versiones; una muy abre- cias sobre todo a los medios de tar el ínteres por experiencias aftemativas.
viada; la otra con un agudo gratuito y vibran- comunicación, tiende cada vez
más a una homogeinizadon aberrante como Hay un predominio casi absoluto de la
te al final), donde la ausencia del canto ligato música instrumental sobre la vocal y no se
hace poco atractiva la interpretación, dema- por otra parte tes ocurre a tantos aspectos
de la cultura. La de origen campesino está advierte ningún especial intento sistemático,
siado heroica, aunque la voz aparezca alige- cosa seguramente imposible dadas las carac-
rada y bella. En Pour Serthe del Profeta sufriendo actualmente en muchas partes del
mundo un progresivo deterioro en conso- terísticas de la empresa. Los folletos explica-
meyerberiano es, a veces, tan esforzado el tivos tienen ün indudable valor didáctico en
canto (si slancio) que algunos agudos que- nancia con la crisis del mundo rural y sus
estructuras económicas y demográficas. No lo que se refiere a la información sobre ins-
dan desnivelados, inestables en proporción trumentos pero es muy parca y práctica-
con el registro central. La linea de canto HM- es extraño que ese folclore esté gravemente
postrado en muchos países y en otros, en mente inexistente en lo concerniente a las
siniana sufre de alguna inexactitud, pero la formas musicales y a las condiciones históri-
fuerza del intérprete es prodigiosa. vfas de extinción.
cas y culturales. Es de destacar finalmente
Las iniciativas desde instancias públicas, y a que el soporte compacto conserva muchas
Se han señalado algunas, digamos, fragilida- veces privadas, por encomiables que sean,
des. El resto, el contenido global del disco, es de las imperfecciones y algunos de los ruidos
resultan en muchos casos inútiles pues ope- de la grabación original.
deslumbrante. Un tenor di ¡orzo genuino en ran sobre cuerpos ya sin vida, y en otros
todo su esplendor vocal es el que Tamagno contraproducentes, cuando con más voiun-
representa, aunque en el momento de los tansmo que conocimiento de causa se cae D.CC

BOLETÍN DE SUSCRIPCIÓN Reí/ene y envíe este cupón

d Marqués de Mondéjar, I I - 2 ° D - 28028 MADRID


Tel. 356 76 22 - Fax 2S6 18 64

Deseo suscribirme, hasta nuevo aviso, a la revista SCHERZO a partir del número por periodos re-
novables automáticamente de un año natural (diez números), cuyo importe 4,500 pesetas (I) abonare de la siguiente forma:

G Transferencia bancaria a la c/c 15.730-0 del BANCO HISPANO AMERICANO. Sucursal 0319.
Dr. Gómez Ulla. 2 - 28028 MADRID.
D Portalón bancario adjunto.
D Por giro postal.
D Con cargo a la Cuenta n.° - _ de — (2)
de . de 199
1I) Las suscripciones para el extranjero importaran en Europa por correo ondoario fiJXX) pesetas y por avión 8.000 pesetas. Amtrica por vía marítima
7.000 pesetas y por avión 14.000 pesetas, y deberán ser abonadas medíante cheque bancaria
(2) Táchese lo que no proceda

Nombre
Domicilio
Población Teléfono
Números atrasados: 450 ptas.
Nota: No utilizar este boletín para la rrtmadán * lo suscnpoín.
Los envtos por certificado tendrán un recorgo de 1.000 Pías/orto sobre el predo de la susrripdtn.

92 SCHERZO
DISCOS

ESTUDIO DISCOGRAFICn

A vueltas con el barroco


fónicos y corales, se aplicó

N
os propone este
álbum el conjunto de un tratamiento catártico
obras que, entre las demasiado enérgico, abs-
de su extenso catálogo, tracto e ideal. A un exceso
Vivaldi consideró dignas de siguió otro. Frente a la dul-
la prueba de la publicación. zona autocomplacencia de
Gran protagonista de la las versiones románticos I
empresa es el veterano Musici con otros grupos de
conjunto I Musici que en el los años 50 y 60 han
ya lejano 1952 formaron opuesto un sonido seco y
doce jóvenes estudiantes brillante, de dureza deshu-
de la romana Academia de manizada, firmeza de ata-
Santa Cecilia y al que tanto que impecable, precisión
debe la recuperación de rítmica, fraseo mecánico,
músicos del llamado barro- frialdad virtuosística que no
co italiano, Al bino ni, Corel I i, deja sitio ni oportunidades
Locatelli, A. Scariatti, Torelli al color atmosférico.
y sobre todo Vivaldi, caldos
en un injusto olvido durante Fácil es comprender lo
casi dos siglos. I Musió FOTCt WITS/ERVPH/UPS que ha venido después. El
barroco, incluida su pro-
El estilo del grupo ha permanecido restaurar unos principios permanentes longación musical tardía de la primera
constante e incontaminado, como reve- del arte que supuestamente hablan mitad del siglo XVIII, es todo menos un
lan recientes grabaciones, y parece una encarnado de forma egregia ciertos arte puro. Bach, Vivaldi y Haendel, acu-
secuela en el campo interpretativo de la músicos del pasado. dieron a todos los recursos expresivos
corriente de renovación que se inició en A los excesos de un individualismo de los que era capaz la música de su
Italia tras la Gran Guerra, estimulada degradado muchas veces, se opuso un tiempo en Intima relación con pintura y
por la llamada generación de los 80, la seco objetivismo con pretensiones de literatura. Una obra como la Ofrenda
de Casella, Malipiero y en cierto sentido disciplina y estilo umversalmente válido Musical bach i ana refleja, según Úrsula
Respighi. El nacionalismo sincero de como marco para una libertad no obse- Kirkendale. el esquema retórico fijado
estos músicos se atemperaba con las sionada en ser original a toda costa. en la Institutío oratoria de Quintiliano.
tendencias de la música europea de la Desde una abstracción cada vez mayor Los famosos conciertos de Los Cuatro
época, con especial asunción de los se apuntaba una tentativa en gran escala Estaciones con o sin los sonetos que los
principios del neoclasicismo. Con inde- de depurar la música de significados pic- preceden, son algo más que productos
pendencia del valor que pueda atribuir- tóricos, literarios y éticos, de los sueños de un descriptivismo ingenuo. Se expli-
se a los frutos que produjo tal estética y visiones que se habían adherido a ella can mejor desde ese afán tan barroco
en el terreno de la composición, que no en muchas de las etapas de su historia. de abrir puertas, de permitir que cada
es tema para ser tratado ahora, hay que arte invada otros ámbitos de la activi-
I Musici y en la misma linea los diver- dad creadora, a través de fronteras flui-
contabilizar en su haber el rescate de
sos instrumentistas que participan en das, en la linea del símil horaciano, Ut
los modos instrumentales italianos rena-
esta grabación en calidad de solistas o pictura poesis, o de las sinestesias de
centistas y barrocos, sin nostalgia evoca-
integrados en grupos camerfsttcos, pare- tonos y colores tan frecuentes en un
tiva ni exactitud filológica pero con una
cen comulgar con estos postulados Lope de Vega o en un Marino, por citar
finalidad muy concreta, la lucha contra
estéticos. Desentendiéndose de cual- sólo dos ejemplos. Un arte expansivo
romanticismo y verismo, para la que no
quier aproximación critica, se mueven que rompe limites y que con su carga
se dudó en exaítar la claridad estructu-
en un olimpo ahistórico y angélico, cuyo de ilusionismo propone la euritmia en
ral, la nitidez de trazo y hasta las formas
reduccionismo se queda en la textura sustitución de la aridez de la simple
cerradas en clave antiwagneriana.
mientras se diluye la pasión subyacente. simetría.
Se corre así un evidente riesgo de
Los peligros de esquematismo eran impersonalidad, monolitismo y sobre
prácticamente inesquivables máxime todo uniformidad, que da alas a tradi- I Musici se ha mantenido al margen
cuanto que la tendencia se mezclaba cionales críticas antivivaldianas. de estos planteamientos, que han hecho
con el intento de librarse del asfixiante suyos los modernos intérpretes de la
esteticismo dannunziano. Era un movi- Para salvar a Vivaldi y a otros con- música barroca, y han permanecido fie-
miento que, salvadas todas las distan- temporáneos de las adulteraciones per- les a sus orígenes estéticos. Estas graba-
cias, se parecía al puesto en marcha por petradas por notónos divos de la batuta ciones de los años 60 y 70, de estupen-
el papa Pío X en el Motu propio de al frente de sus temibles artefactos sin- da sonoridad y de irreprochable inge-
1903, empeñado en el mismo celo puri- niería, son un testimonio impagable de
ficador, orientado hacia unas esencias algo que a muchos desde la perspectiva
EDICION VIVALDI: Opte, J-Opus 12. IntérpraMs:
musicales miríficas redimidas de la reali- I Miükt; Sitnton Acardo. Félix Ayo. Pira Car- actual puede parecer limitado a una
dad histórica que las vio nacer. Como mlrelli. Sylvle Gweau, Fnnco Gulli y Roberto etapa histórica, necesaria y tal vez can-
otras muchas recuperaciones, y el retor- Mlcheluccl, vtolín; Bruno Cinino. clave; Sevflrino celada.
Guzetloni. fliula; Heinz Hoiligur, oboe; Roñan de
no a Bach de los mismos años es ilustra- Siram, violonchelo 19 CD, Stereo. ADD. 426
tivo, era interesada y militante; buscaba 935-1 PHUJPS.
Domingo del Campo
SCHERZO 93
DISCOS

ESTUDIO DiSCOGRAFICO
Un instrumento vocal
C
on alrededor de cuarenta años de verismo, las dos espinas de la soprano, niana, grabado tres años antes de la edi-
actividad a sus espaldas Joan Sut- cuyo recital del genio de Bayreuth ción completa, profetiza lo que las dos
heriand dio su adiós a la escena a (Siglinda, Isolda, Senta) es de pavor, aún cantantes (la Home colaborando con
una aparición sorpresa en el Covent más irreligioso que el casi contemporá- arrebato) harían en sus respectivos
Garden el 3 I de diciembre de 1990, neo de Caballé. papeles: el canto estático e inmaculado
invitada de lujo, junto a Home y Pava- La extensión generosísima, la forma- de la soprano como contrapunto ai cáli-
ratti, en la fiesta del Conde Oriofsky, en ción técnica excepcional, el dominio do y exaltado de la mezzo, dando, por
un apoteósico Murciélago. Apropiado imposible del fiato, la disposición perso- primera vez (Callas aparte) a Rossim su
lugar, testigo de sus éxitos, y congruente nal de la Sutheriand ia encaminaban dimensión perdida Una curiosidad del
despedida musical, el Home Sweet fióme, perentoriamente al repertorio barroco y registro es la entrada, terrorífica apari-
a lo Nellie Melba, su referencial antece- bel cantista. De ahí que el disco The Age ción, de Odabella en Attíla. Nada mas
sora. Pero Sutheriand fue devota con su ofBel Canto, que inicia la entrega sea de opuesto al arte y medios de esta sopra-
tierra, Australia, y tres meses atrás canta- una valoración donde de nuevo se nece- no australiana. Sin embargo, resuelto el
ba en el formidable teatro de la bahía de site el adjetivo rimbombante. Aunque andante con dignidad, a pesar de su
Sidney su definitiva Margherita de Valois no todo sea del mismo nivel. En su zona grave peligrosa, llega la calabetta y
de Les Huguenots. Homenaje merecido momento este disco, en lo que respecta se produce un milagro. (Da te questo a
a un escenario que le permitió, en etapa a la soprano, incluía Angiol di pace de m'e conceso): la soprano despliega agu-
avanzada de su carrera, cantar lo que la Beatríce di tenda en prematura aproxi- dos, cadencias, brío, con una brillantez
soprano quisiera mación. Desaparece aquí; enriquecién- que levanta al oyente del asiento. En el
dose el CD con dos fragmentos de Gri- da capo, las frases que anteriormente se
Detrás de la Diva quedan, pues, una selda y Montezuma de sendas seleccio- resolvieron en la zona grave, son ahora
carrera teatral fuera de lo común, con nes que merecerían por sí solas expuestas en la aguda con un efecto
una cristalización discográfica aún más reedición aparte (como el Giulio Cesaré). electrizante. El resto del disco, Shield,
fuera de toda medida. Contratada exclu- El ana de La mujer Israelita de Samson, Bononcini y Graun están a la artura del
sivamente con Decca, desde 1959 reali- con el canto lamentoso, sembrado de comentado Piccinni; la coloratura de la
zaría para la marca británica un Corpus dis- trinos, es una joya de todo el repertorio Reina de la Noche, opulenta pero pesa-
cográfico de un volumen y variedad insó-
litas, donde hay de todo, dada la extensa
propuesta. De lo extraordinario a lo dis-
paratado, capnchoso o pintoresco.
Con la llegada del soporte láser la
Sutheriand comenzó paulatinamente a
ocupar paneles de las tiendas discografi-
cas. Hasta la fecha la mayor parte de sus
registros están ya en CD; curiosamente
fartan dos que son primordiales: su mag-
nifica Alona de 1962, con un reparto
asombroso a su vera, y Beatrice di
Tenda de 1966, cuya reedición parece
no animar a los responsables, a pesar
del reclamo del Orombello de Pavarot-
ti. Más de cuarenta grabaciones comple-
tas, algunos títulos concertísticos, infini-
dad de recitales, legan a la posteridad la
voz de la australiana, sus inquietudes
artísticas y su (a pesar de los pesares)
personalidad única.
En el capítulo recital, Sutheriand tocó
todo el repertorio posible: de los barro-
cos a Wagner, con irregulares resulta-
joon Sutfwrtond FOTOrCAHEN
dos, amparada por una voz de un cali-
bre y extensión extraordinarios que al grabado, desde sus inicios hasta la fecha da, debiendo pararse ostentosamente
ser utilizada como un mero instrumento No en vano con este papel la soprano para respirar en (_o Straniera resulta
canoro (sobre todo en la primera etapa se dio a conocer del público inglés. La ajena al lirismo de la página que mejor
y en la de apogeo) le permitía tales pro- Furia di donna piccinniana es otra baza a descubría Scotta; en el momento de
ezas. Al pasar ahora a disco compacto favor del canto florido, generoso y preci- Freischütz falta misterio y clima, el que la
' parte de este caudal la Decca ofrece un so de esta soprano coloratura; sin página describe; en Don Pasquale, con un
buen pan oran a de valoración. embargo, un inédito recuperado en Conrad que va de lo correcto a lo insufi-
Seis discos nos llegan de una tirada, 1981 nos restituía a la Sutheriand en ciente en sus intervenciones del disco,
que engloban veinte años de actividad esta vibrante página más dadivosa de queda el resultado algo pálido. De cual-
de la cantante, o sea, esplendor,madu- medios que aquí (con Granville Jones y quier manera, de los seis discos editados
rez y curva descendente. Sabia elección: la Philomúsica de Londres). El dúo Se- al unísono éste es el mejor y de un inte-
no aparece Wagner y apenas se roza el bero/ agrior si pdo de la Semiramiae rossi- rés grandísimo.

94 SCHERZO
DISCOS

En 1963 se grabó un volumen en dos haciéndose más ancha en el centro, oda sinfónica de Bizet Vosco de Gama. Se
partes bajo el título Command Performan- menos sueíto arriba, el fraseo más opor- combinan en el disco, en un claroscuro
ce. Al pasar a C D se incluyó el primer tuno, intencional), pero faUa esa livian- medido, las páginas brillantes, de colora-
disco completo, pasando el contenido dad, frescura, deleite, que descubrimos tura con otras más líneas, elegiacas. La
del segundo (canciones, música inglesa en otras colegas suyas, más convencidas. Sutheriand vence, es lógico, en las prime-
en general) al que se titula Homenaje a Por ejemplo, y según sus repertorios, la ras y destaca partes de las segundas. Asi,
jenny lind, sólo parcialmente el trasvase. Güden, la Schwarzkopf, la Crespin o la lo menos interesante es la famosísima y
Aquí, junto a registros de nivel semejante modélica (por tipo vocal y actitud) Fritzy frecuentada aria de Louise, Depuis le jour,
al anteriormente comentado, ya escucha- Massary. Cunosamente, Bonynge, desde junto a una nana muy bella de Dinorah,
mos a Sutherland metida en camisa de su aportación, está lleno de entusiasmo ademas del ana de Leila de los pescado-
once varas. Por ejemplo, el ana de Xime- y aciertos. (Digamos, como apunte final res bizetianos; el buen canto no le impi-
na, de Le Od, que precisa centro y grave, que en la página incluida de Lo Penchoíe, de a la intérprete caer en una afectación
en esa época lo menos atrayente de su incluso Teresa Berganza le da a la Sut- y cursilería apreciables. Sin embargo, el
gama. O la canción de Nedda de Payo- herland una lección de estilo y gracia). esplendor vocal de la Sutherland se
sos, a pesar de brindamos unos trinos explaya en páginas como la Manon aube-
inolvidables antes de iniciar Stridono iag- C o m o estudioso Richard Bonynge, riana, cuyo edert de rire es brillantísimo, o
giü. O el Ocean! de Oberon (que canta en como inquietud musical su esposa la Sut- la segunda parte del aria de I sabe I le en
inglés como la Callas), falto de empuje e herland merecen ambos un reconoci- Robert le D/ofale, a más del precioso bole-
intensidad. Pero la australiana ofrece a miento. Uno de los frutos de esta faceta ro de Lecocq en Le Coeur et la mam. Un
cambio una versión referencial de Ombre es el disco Romantic French Añas, donde disco desigual, pero muy válido p o r
légére de Dinorah, que canta sin los habi- junto a /o de siempre se incluyen páginas repertorio y aciertos de la soprano.
tuales cortes o una profunda lectura de de óperas desconocidas de Gounod (El
Tu punisami de Luisa Miller (sin la cabalet- tributo de Zamora), Lecocq (le coeur el la El sexto y último disco de esta entre-
ta, más dramática), insólitamente cargada mam), o Massé (Les noces de Jeonnette, ga plural de la Sutheriand lleva un con-
de emoción. Asimismo, la página de ' favorita de la proustiana O d e t t e de veniente título: Tribute to jenny Lind.
Masnadieh es considerable, gracias a una Crécy), asi como el Ouvre ton coeur de la Jenny Lind (1820-1887), llamada el ruise-
versión de ia cabaleta de una bravura ñor sueco, inicia la larga cadena de sopra-
ejemplar. Su Kossini también aquí es de nos ligeras, que a través de la Nilsson
antología: Fanny de canto impecable, 7he *ge ofbel Carne. Paginas de Lo buooa (tgtolo. (Christine) y la Patti, culminarían con la
Samson, Anorto, Rosino. Dte Zauberflete. Angite.
menos graciosa que Scotto, es preciso ^numnnde. D& freJschüts Don Posquote, Aítrtó, Le Melba, Kurz y Tetrazzini ya en los albo-
comentarlo. Luego de un fragmento de STfaniera. GnseSda, Montezuma Joan Sutherland res del siglo actual. Cantantes de sólida
Beotnce di Tenría, que borda como es con M. Home y R. Conrid. Orquestas Sinfónica y formación técnica, prodigiosa extensión
Filarmónica de Londres. Director; Richard
esperable, termina este registro con el Bonynge. DECCA 421861-2, ADD. Duración: vocal, consumado y (a menudo) gratuito
aria de la Valois de Les Huguenotes. 7 TU™. Producción: Raeburn y Harvey. Graba- virtuosismo, fundaban su mensaje en la
extraída de la versión completa de la ción: Londres, 1961. destreza del instrumento canoro, a costa
ópera (¡Por qué si ya está editada aparte Commofid Performance Pajinai (te Obercn I* Cid. de la expresividad de la i n t é r p r e t e
Oinorah, Pogíxxa, 1 Masnodien. íuiso Mtlter, Lo cor»
y teniendo la soprano suficiente material brote OJ mQtfimoft'Q. ñeatnce á Tendo. Los Hugono- (Verdi que hubo de escribir para la Lnd
de relleno?). tes Joan Sutherland y otros solitos. Nueva Filar- el papel de Amalia de I Masnadien, la
monía Y Sinfónica de Londres. Director Bonynge. siguió llamando ruiseñor pero cambiando
DECCA 42IBB2-2. A D D . D u n c i ó n 62'49". Pro-
ducción: Bremner y Hanrey. Ingenieros: Wilkin- sueco por mecdnico). La propia Suther-
Existe un video de la ABC australiana l o n y Lock. Grabación: Londres 1961 y 1 » 9 . land, pues, se arroga esa alianza a través
que relata aspectos profesionales y Tribute la jenny Lmd. Paginas de BeoWce d Tenda. / del tiempo con la mítica soprano deci-
domésticos de la vida de Joan Suther- Puntara La Sonnambulo, Rosronda dhghkena, La ffllc
du regiment Le nazze di figón. L'Etoilé du Norct Sem- monónica, cantando el repertorio que le
land. Se inicia con una bellísima panorá- njmfífe 1 Mawadien. Tres canciones (Ardlcl, Bishop. era consubstancia! y que, creyendo a sus
mica nocturna de la bahía de Sidney y Benedlct). Joan Sutherland Orquestas, R. Bonynge contemporáneos, se cimentaba en cua-
enlaza inmediatamente can una escena y j . Pritchard. DECCA 421883-2 A D D . D D D .
Duración: 7416". Grabación: Entre 1961 y 1982. t r o obras: Norma, Robert le Diable, La
de La viudo alegre. Sutherland, inmensa, Rortwnrjc Frendi Anos Paginas de ftofjrnson Gusoe, pile du regiment y La Sonnambula. D e
hombruna, torpe desciende rápidamen- Dmoiak Louise. La Grand Duchesse de Gétofo&n. estas dos canta nuestra soprano páginas
te unas escaleras de un elegante decora- Motín Lesean (A). Fia D-orota Los perdteirí de pe/te.
Cendrtyi. M ™ f e floten fe dable. Le mbut de Zamom en este tributario disco. (Con Meyerbe-
do. La soprano es literalmente empuja- Les Noces de feomene. Faust Vosco de Gomo Sulue er acude a una obra menos conocida:
da, como un mueble, por una cohorte Romada. Rtcnird Bonynje. DECCA « 1 8 7 9 - 2 . L'etoile du Nora). Tomado de recitales y
de bien vestidos muchachos, procuran- ADD. Duración: 72*49" Productor Mordkr. Inge-
niero: Lock: Grabación. Gineibira l%9. óperas completas, en una interesante
do que llegue a tiempo al proscenio Operólo Gotó Páginas de La Ü'ande-Dudwsse lie recopilación, parte de las óperas citadas,
para que empiece a cantar. Esta imagen, Gérotetein. Lo Penchoíe. De' VogelhOndler. Dte destaca Sutherland en Per che non tío dal
divertida, na'if, puede servimos de prepa- Dubrxry. Die gesctircdene f r a u Mudóme Pmpodajr.
Der iKbe Auguson. iva. Eir\ Wotzertraum, Der Open- vento de Rasmonda d'ln^hilterra, un Doni-
ración para los comentarios breves bdl. Gxanota. Die Lusoge WiWí, The rings neps zetti que le debe su exclusiva exhuma-
sobre los dos discos de opereta que oul. The chocolúle scídie/. &alolotkor Pogonini ción, y, de nuevo, la Beotnce di Tendo
integran el bloque que se está criticando. Orquestas Sulsse Romande y Nueva Filarmonía.
Director: Richard Bonynge. DECCA 42IB80-2. belliniana. Los dos Mozart (Susanna y la
Uno es una selección precisamente de ADD. Duración: 66'54". Productoreí: Raebum y Condesa), se avisa a quien proceda,
Lo viuda alegre, cantada en inglés, y con Mordler. Ingenieros: Wilkjnson. Parry, Lock. Gra- puede traumatizar.
un cuidado equipo donde destaca la Z o - bación: Londres 1966: Ginebra 1969.
The Muny W'dow (Selección). Joan Suthertand. sop
Z o de Regina Resnik El segundo, lleva el (Hanna): Wemfr Krenn. ten. (Dani'o); Valerie
título de Opereta Gala y comprende Masterion. top. (Vilencienne); John Brecknock, En conjunto son seis ejemplares los
fragmentos del repertorio más trillado, ten. (Camille): Regina Resnik. mei. (Zo-Zo). que Decca ha lanzado al unisono que,
Orquesta Filarmónica Nacional. Director: como se adelantó, dan un cumplido y
tanto del bloque francés (Offenbach) Richard Bonynge DECCA 42I8B4-2, ADD.
como del centroeuropeo (los Strauss, Duración: 66'07"'. Productor: Andrew Cornall. generoso relato de una de las divas de
Léhar, etc.). El canto operístico de Sut- Ingenieros: Wllkinion y Moorfoot. Grabación: los últimos años. Sus fans, que son
Londres. I977-7B. Todos loi discos se ofrecen a muchos, pueden sentirse satisfechos.
herland es opulento siempre (en La precio económico.
Viuda la voz acusa el paso del tiempo,
Fernando Fraga
SCHERZO 95
DISCOS

ESTUDIO DISCOGRAFICO

Música de Polonia
sino realzar esta desagradable impre-
sión. El entreguismo adquiere otro ros-
tro en el Condeno para violonchelo n" 2,
que renueva viejos tfes (en todo caso,
la versión de Rostropovich con el
autor, Erato, es muy preferible a la que
se comenta) y en el Concierto para
viola, que pese a lo enfebrecido y oníri-
co de la lectura no consigue apartar los
fantasmas del amaneramiento y la fal-
sedad.
Lutoslawski presenta una evolución
mucho más coherente, en constante
enriquecimiento de su lenguaje y su
mundo poético. Las primeras obras
están más cerca de Bartók (Concierto
para orquesta) que de Szymanowski. El
sinfonismo del creador de la música
polaca del siglo XX parte del virtuosis-
mo orquestal de un Richard Strauss
(Segunda) para trascenderlo en la
extática y visionaria Tercera (aquí
Witold Lutostawsto FOTO.JESÚS ZOIDO Rowieki no obtiene la lujuria tlmbrica
de Dorati, Decca) y recalar en la refe-
como en Salmos de David, algo en lo rencia folklórica de la Cuarta, con

E
n unas décadas, de los años vein-
te a los cincuenta de este siglo, la que siempre destacó Penderecki y piano concertante.
música polaca pasó de no contar sigue haciéndolo aunque su registro El cambio operado es radical de la
en absoluto en la escena europea a ser expresivo haya sido limado. Como es Primera a la Segunda Sinfonías de Lutos-
una de las escuelas -la etiqueta es con- el caso del Réquiem polaco, que, aun lawski. Su estreno en el género es una
trovertida- más originales y avanzadas. con su innegable atractivo sonoro, amalgama, manejada con maestría, de la
Semejante transformación se debió, parece la rendición estética de un crea- tradición, de Brahms a Stravinski, pasan-
sobre todo, a la obra extraordinaria de dor en otro tiempo exigente consigo do levemente por el propio Szyma-
Karol Szymanowski (del que SCHER- mismo. La interpretación más lujosa nowski. La Sinfonía n" 2 se halla al otro
Z O se ha ocupado en alguna ocasión: con el compositor a la batuta no hace lado de la frontera. No hubiera existido
ver n" 20), el primer compositor de sin el ensayo que vino a alzarse como la
auténtica talla internacional surgido en pieza clave en el giro de estilo del com-
el país desde Chopin. La dimensión de SZYMANOWSKI: Obertura de condeno, Sinfonías
positor, los juegos venecianos. Escrita
f A 2, 3 y 4, Córvenos para viotln n"s I y 2 Stabat
la influencia de Szymanowski sobre la Moler, Leíanla o lo Virgen Mario, Demeter. Soneto para orquesta de cámara, se da en ella
generación de posguerra, en especial pora vioün y piano en re menor. Canción de Roxonc una respuesta razonable a la influencia
Lutoslawski y Penderecki, está lejos de de «Rey Roger». Coro Fememno de li Radio Pola-
ca de Cracovia. Orquesta Filarmónica Nacional de Cage. En vez de la libertad total,
haber sido analizada a fondo, pero, por de Varíovia. Director WitoJd Rowicki. TadeulZ embriagadora pero que acaba destru-
ejemplo, las exigencias extremas a la Zmudllnikl. piano. Wanda Wllkomlrcka. violto: yendo la obra musical, se introduce el
cuerda de Rey ftoger aparecen multipli- Tadeun Chmlelewikl. piano. 3 CO POLSKIE
NAGRANIA PNCD 0Í3-M. AOO. íonoto poro principio de la aleatoriedad controlada.
cadas en la lección de escritura para wJ/h y piano en rp menor. Nocturno y Tarantefía. Tres Y estos discos nos dan una idea de
esta familia que es Poltmorphia (para 48 Mitos iydtt Mordkovich, vioNn; Marina Gusak- hasta dónde puede fructificar la alterna-
arcos) de Penderecki. Desde luego, Grtn, piano. CD CHANDOS CHAN 87*8. DDD.
PENDERECKI: Ponan según San Lucas. Threnody. tiva, porque tanto la Orquesta Filarmó-
éste recoge la herencia de las no Po/imo/phra, Cuonelo n*f, Salmos de David. Dimen- nica Nacional de Varsovia como el
muchas obras religiosas (Sobat Mater, siones del tiempo y d sikncro. Concierto para vfoton- Coro de la Radio Polaca de Cracovia
Letanía), ni muy representativas de Szy- cheto n ' 2. £1 despenar dejakob, Adogretto tfe «Poru-
(Tres Poemas de Henn Michaux) eviden-
fto perdidos, Condeno para viola Réquiem polaco,
manowski, cuyo lado pagano era Dies liae Coro v Orquesta Filarmónica de Craco- cian su familiaridad de tantos estrenos
demasiado poderoso (Mtos, recreados via. Director Henryk Cryí. Fllirmonica Nacional con la nueva música. Libertad viva
con sonoridad rica y sensual por Mord- de Varsovia. Director: Witold Rowhcki. Cuarteto
LaSalle. Ivan Monighetti. violonchelo. Stefan hecha música.
kovich, Demeter). De hecho, la Pasión Kamaia, viola. Sinfónica de la Radio de Katowice.
según San Lucos puede y debe conside- Director: Antoni Wttt. 5 CD POLSKIE NAGRA-
NIA PNCD 017,010,021. ADD. Réquiem polaco. Como información de la música de
rarse como uno de los pocos oratonos
Coro y Orquesta de la NDR. Director Krzysaot un país en una franja de tiempo no muy
modernos viables dramática y musical- Penderecki 1 CD DEUTSCHE GRAMMOPHON extensa, los discos son plenamente
mente. La versión de Czyz continúa 429720. DDD
recomendables. El sonido es, en general,
insuperada, incluso frente a la del
LUTOSLAWSKI: Sinfonía! n's I y 2. juegos venecia- francamente bueno, muy superior, en su
mismo autor, de reciente edición en
nos. Tres Poemos de Henn Mrcnaux. Lacrimosa. Con- caso, al de los viejos LP, salvo quizá en
Decca. También el Dies /roe, con su deno para orquesta. Funeral Musn: Sinfónica de la la magnifica grabación de la Pasión según
hibridación de obra religiosa y réquiem Radio de Katowice. Directores: Wlrold Lutos-
lawski. Jan Krera. Filarmónica Nacional de Virso- San Lucas, que Philips distribuyó en
secular, comunica un desgarro trágico
vla. Director: Witold Rowieki. Coro de la Radio Occidente.
veraz. La escritura coral es fascinante, de Cracovia. 2 CD POLSKIE NAGRANIA PNCD
04CWMI.AAD.
Enrique Martínez Miura
ÍXÍSCHERZO
DISCOS

ESTUDIO DISCOGRAFICO

Infrecuentes italianos
a firma Bongiovanni seha esforzado Si se compara la dinastía puccinesca
por editar música poco frecuentada con otras famosas en la historia de la
sn otros sellos, en partcular, obras H L*£I»tUS SWM - StLVl I M M - II IDEUSTlIiri RECIOS 1 música, se advierte que sólo los Bach
de compositores italianos.Nos permite, •I coNmEso» un OOMTM 1 (siete generaciones) los aventajan en
asi. no sólo satisfacer, en parte, la insacia- pertinencia biológica dentro del arte
ble curiosidad caníbal de los melómanos sonoro. Los Couperin, Strauss, Gabrieli,
actuales (embestidos por un mercado Scarlatti y Mozart no tuvieron tal cons-
torrentoso donde todo flota: obras com- tancia vocacional. Aquí se nos presentan,
pletas, épocas completas, países comple- aparte del opersita insoslayable, un Gia-
tos), sino adquirir nuevas preferencias. como sénior, Antonio, comenico y
Michele. Insisten, como compositores
Los esplendores del barroco y de la
oficiales, en el género litúrgico, pero
ópera decimonónica han dejado en la
también ¡ncursionan en la música con-
penumbra la otra música italiana, a veces
certante, con obras como ese cuádruple
epgonal, pero, a menudo, compuesta en
concierto de Michele, donde debe con-
consonancia con la mejor producción
ceder a cada solistasu momento prota-
europea, de Cimarosa, por ejemplo,
gonice, como si fueran personajes de
conocemos su faena teatral, pero tener- rrido por Dante, al cual no falta un Para- ópera, resolviendo una curiosa estructu-
mos escasas noticias de su obra sacra. íso de tinglado alegróricoy una apoteosis ra que excede la normalidad del con-
Este Réquiem soporta las comparaciones con ecos de marchas garibaldinas. La cierto habitual.
con la mejor música de Iglesia del roco- afirmación nacionalista y la evocación del
có, con toda su frecura melódica, su gran poeta medieval se conjugan con
ciencia polifónica y su católico sentido rara pericia htstriónica. Póngase atención
festival de la liturgia, impregnada de un al impresionista uso de los timbres
humor barroco tardío, la festividad de orquestales, piano incluido.
los muertos. Algo similar puede decirse
de las piezas de Pergolesi, que sintetizan Luego tenemos las cinco generaciones
las tradiciones del motete y del aria de los Puccini, músicos de Lucca, en parte
sacra, dando lugar tanto al despliegue formados en Bolonia Datan de comien-
vocal de sabor operístico como al trata- zos del XVIII y llegan hasta el embrujador
miento del texto religioso, entendido, metodista de Butterfiy y Turandot
una vez más, dentro de las convencio-
CIMAROSA: Réquiem pro defünctis Ireneo Jaku-
bowsky (tenor), KtQrryia Rymarcyk (soprano).
Barbara Krahel (meno). Andre| Niemierowyei
(ba^o), Orquesn Nacional Wirmia, Coro Acadé-
mico de Oliicjm (dir.. Silvano Frontal™). BON-
GIOVANNI digital GB 2088 1. Duración:
PERGOLESI: (.aeíoüjs sjm Salve flegjno *n coeíesti-
bus tvgnti Oxifríebor f"b' domine Bemadette Lucca-
rini (soprano), Gloria Bancütelll (contralto), córale
Amerina (dir.: Gabriele Cataluccl yWijnand van de En cuanto al joven giacomo, aparece
Pol}. Orquesta de Cámara de la Asociación *ln con un breve Réquiem, de poco más de
canto' (dir.: F»blo Maestri). Grabado en vivo en
Temí «n mano de I9B& BONGIOVANNI digital siete minutos, donde oímos ya al crea-
GB 2077-1 Duración: 5114. dor de atmósferas que fragua en sus
PACINI: Afessa tía Réquiem Conjitetrar. Sinfonía grandes opeas, unido al buen estudioso
Dante. Alessandra Rossi (soprano). Adriana Cicog-
na (contraJto). Marcelk» glordanl (tenor). Antonio de la música germánica. En lo demás,
Juvarra (barítono), Massimo Morelll (piano). Laura sólo cabe escuchar en estas páginas de
Savloni (arpa). Capilla Musical Santa Cecilia de iglesia, según la generación, el paralelo
Lucca y Orquesta del Teatro Gigtto, drr. por pan-
franco Coiml. BONGIOVANNI digital GB 2059- desarrollo del teatro lírico nacional italia-
2. Duración: 59.17. no: de rossini a Vendí, atravesando el
canoro mundo del belcantismo.
DOMENICO PUCCINI: Concierto para clave o
nes de la religiosidad católica meridional. piano MICHELE PUCCINI; Concertar» para cumio En las interpretaciones se adivierte la
instiumeiHOS. Mi re el lo Guerrini. piano. Pierlulji huella del estudioso y del erudito, más
Especial atención merecen las obras M«ncarclli. flauta. Bruno girolamo. clarinete. Giu-
de Giovanni Pacini, con una Misa de seppe bodanza. trompa- En rico Caproni, como. cuidado de la propiedad en la lectura
difuntos en memoria de bellini y una Sin- Orqueiu del Teatro Gigiio de Lucca. dir. por que en bnllo inspirado de la ejecución. A
gianfranco Cúsmi. Grabado «n vtvo el 6 de junio veces, la toma en vivo refuerza la pre-
fonía inspirada por la Commedia dantes- de 1987. BONGIOVANNI digital GB 2048-1
ca, obra tan querida porios románticos Duración: 51.11. sencia del público luccano ante laobra
de toda especie. Pacinl, a quien situamos GIACOMO PUCCINI: Sénior: Alisa o CUOÜB roces de su familia favorita, no es poco privile-
en el escenario, nos lleva a un mundo con vroljrtÉS aptocer gio contar con algo así a la vuelta de la
semiteatral, el de la música descriptiva. GIACOMO PUCCINI: Réquiem o fres «fes ™lo y esquina. Queda señalada la fresca voz
órgano. ANTONIO PUCCINI: Miserere a cuatro
Sus voces religiosas caen del lado de la concertodo por soprano y contralto Donla Pelado de Bemadette Luccarini. a medias niña y
Sacra rappresentúzione más que del está- (soprano), Glagranco Cosmi (órogano). Elisa mujer, dueña del perfecto estilo y los
tico mundo de la plegaria El suyo es un Ardinghi (viola). Marco Tomel (úrgano). Adriana medios idóneos para cantar al litúrgico
Cicogna (mino). Capilla Musical Santa Cecilia y
patetismo apenas disimulado por el latín, Orquesta del Teatro Giglio de Lucca. dir. por Pergolesi.
que proviene de la puesta en escena Glanfraneo cosmi. BONGIOVANNI digiui GB
2037-2. Duración 5110. Distribuye Diverdi.
Particularmente divertido es su reco- Bfas Matamoro
SCHERZO 97
DISCOS

ESTUDIO DISCOGRAFICO
Cuestión de estilo:
La perfección decadente
adaptados a un repertorio posterior.
Zukerman-Neikrug se sitúan, peligrosa-
mente, entre el clasicismo eterno de
Grumiaux-Haskil (Philips) y el clasicismo
renovado de Luca-Bilson (con instru-
mentos originales. Nonesuch); en la Sin-
fonía concertante, Zimmermann, de la
misma manera, se encuentra entre su
modelo, Grumiaux (Philips) y por ejem-
plo Kremer (con Hamoncourt. DG);
Gelmetti con los valientes profesores de
la Radio de Stuttgart, en la sol menor,
han de luchar contra los recuerdos de
Krips (Concertgebouw. Philips) y la pre-
sencia de Brüggen (Orquesta del Siglo
XVIII. Philips). La trompa moderna difícil-
mente puede restituir esta música para
amigos, ese ¡úbilo íntimo que consigue
Brown (The "Age of Enlightenment, Kuij-
ken. Virgin); sin embargo, quienes, como
yo, no pueden prescindir de la perfec-
ción decadente, intentarán conseguir el
disco de Damm (Saatskapeile de Dresde..
Orpbeus Chomber Orchestra FOTO D.G. Deutsche Schallplaten o Elektrola). El
Melos (/a comentado en varios números
discos, se pregunta uno el porqué de

H
ace algunos días, en Perugia, se de SCHERZO, ahora en un estuche a
anunció un concierto sorpresa de unas enésimas grabaciones de Mozart o precio medio) no tiene ni la perfección
Sviatoslav Richter: el pianista, de Haydn que utilizan criterios más de su contemporáneo el Berg (EMI), ni la
según su costumbre, cae como una intensidad de su antepasado, el Budapest
bomba en los lugares mas imprevistos MOZART: (Sony). Perfectas lasrealizacionesde los
(venia de dar algunos conciertos en pue- Chilingirian y Orpheus, si bien se echa de
blecitos del Véneto). Transgresión del Sonatas para piona y vraÜn K8. K377. K.379 Vana-
CJtwies K.360 Mire Neikrug (p). Pinchas Zuker- menos la alquimia de timbres imginada
concierto: Richter huye del público ofi- min (v). CD RCA RD60447.L DDD 1990. Direc- por Mozart. tal como la encontramos
cial; transgresión de la interpretación: tor artístico: ).J. Sulmach. £I'4S. Distribución: por los Octophoros (con instrumentos
Bach, Mozart. Beethoven (Op 110 y Op BMG.
originales. Accent); en todo caso estos
i I ¡) aparecen (o desaparecen) en una S\nfon¡a Concertante KV 364 Sinfonía nB 40 en soí úftimos CD son un poco cortos (52 y 48
niebla producida por el uso constante menor KV 550 Fnnk P«ter Ziinmermann (Vln), minutos), había sitio para la pnmera ver-
del pedal, por el estiramiento infinito del Tabea Zimmermann (Via). Orquesta Sinfónica de
li Radio de Stuttgart. Gianluigi Gelmetti. CD EM< sión de la Serénala K 375, por ejemplo.
tempo, por la nivelación absoluta de las CDC 7 S4I96 I DEDD 1990 por D. WoH. Direc-
dinámicas... Bach. Mozart y Beethoven, ción artística: L Ludemann y G- Berg. 55'28.
sin identidad ni color, como temibles El disco dedicado a Haydn también
Conciertos poro rampo "° 0, I, 2, 3.4 y frogmertos es muy corto (cabía otra sinfonía),
sonidos del espacio. El único crítico ofi- de K Anh 98A B*rry Tuckwdl (iromp» y direc-
cial (creo que era Zurletti) hizo justas tor). The Phílharmonia. CD COLLINS 1IS3I. soberbiamente tocado, presenta una
observaciones sobre la falta de estilo, DDD 1990 por S. Rhodej. Director artístico: E. cunosa mezcla de instrumentos moder-
Rlk.71'20. nos (con vibrato controlado y fraseo
pero Richter, al igual que Gould, parece
pensar que una interpretación sólo es Qumt&os poro coercía Melos Quartett (con Franx clásico), pero con estilo: los violines
válida si es nueva, o diferente. Y a estas Beyer y Pie™ Fjrulli para lol dos últimos Quinte- están justamente divididos a derecha e
novedades o diferencias se enfrentan las tos). Estuche de 3 CO (precio medio) DG izquierda; el fraseo, dásico-vienés, pero
431694-2. DDD I9B6/89 por H. Wildhagen.
versiones de los discos que toca comen- Director artístico; S. Paul. 2h. 49'. con una relativa preponderancia de las
tar. Los intérpretes, todos excelentes, cuerdas sobre los vientos; el clave, en
Serenata pota mentes ÍC 375 en mi b^mnl mayo' (2" medio de instrumentos modernos,
escogen una vía del medio, entre la versión) y K 388 (384a). Orpheus Chamber
reflexión radical de los Hamoncourt, Orchestra. CD DEUTSCHE GRAMMOPHON prueba una irresistible imaginación.
Leonhardt Norrington y la modernidad 431 6a3-2.DDD 1990 por A. Meubronner. Dirw- Pero, al igual que en lo anterior, esta
desafiante de los Heifetz, Krips, Walter, tor artístico: S. Paul. 4714fl. interpretación no añade nada radical-
como aquellos pintores quienes, en paia pauta Susan Millifi Miembros dd mente nuevo a la de Dorati (comenta-
pleno Cubismo (u otra revolución), Chilingirtan Quanet. CD CHAÑÓOS CHAN da en SCHERZO), ni puede competir
intentaban unos retratos que fuesen 9872. DDD 1990 por T. Tryggvason. Director con la de Kuijken (The Age of Enligh-
artístico: T. Oldham. 52'34. Distribución:
pareados al modelo. El amor que estos Harmonía Mundi. tenment. Virgin), en la cual encontra-
intérpretes sienten (y nos hacen sentir) mos la atención musicológica fundida
por Mozart es conmovedor, pero ya HAYDN: Sinfonía n° 85 Lo fteine: n° 8í The Saint con el refinamiento instrumental.
Pjul Oumber Orch*nra. H. Wotfl. DDD 1990
que no se pueden comprar todos los por M. Bramman. Dirección artística: B. Mnich y
M. Fouqué. S?
Pedro Eiías
98 SCHERZO
DISCOS

ESTUDIO DISCOGRAFÍCO

Cuestión de estilo:
La retórica
M
ozart solía c o m p o - recordar la frase de Sviatos-
ner a meada, según lav Richter «¿Los intérpretes
las capacidades de que no tocan todas las
los cantantes (frecuentes los repeticiones?... es que no les
cambios musicales corres- gusta la música». A los intér-
p o n d i e n d o al cambio de pretes excelentes ¡es gusta
reparto en las óperas, por la música. Los intérpretes
ejemplo), según también el excelentes favorecen, den-
gusto y costumbre del públi- tro de una gran simplicidad
co (su sinfonía pansina) así expresiva, la percepción
como las características de muy aguda de las líneas ins-
las orquestas. Junto con la trumentales: el comentario
aplicación práctica, artesanal, del musicólogo (y asesor de
el conocimiento de la retóri- la edición) Neal Zaslaw es
ca (¡mentía Dispositio, Elabo- excepcional y abundante
raüo y Decoravo) fundamen- (unas 150 páginas en cada
taba el discurso musical del uno de los tres idiomas;
siglo XVIII. Algunos intérpre- inglés, alemán y francés); la
tes, hoy en el caso de la ordenación, exhaustiva: el
A A M con Schroeder y Hog- primer volumen dedicado a
wood, exploran las relacio- las primeras sinfonías (y
nes entre la retórica (¡a figura oberturas), escritas en
retórica) y la música con Holanda, Inglaterra e Italia;
consecuencias radicales y los cuatro siguientes, a Salz-
coherentes en cuanto a! fra- burgo; el sexto, a París,
seo general (duración de los Praga y Viena; el último a
sonidos, mas vanada que lo Viena, desde las primeras
indicado en la partitura; hasta las últimas sinfonías;
grado de dureza o de dulzu- una suma exhaustiva, por
ra de cada entonación o fin. en cuanto a las dobles
acorde exigido por el con- versiones (Parisina K 550...)
texto dinámico y rítmico, tal y algunas dudas sobre el
c o m o lo precisa Jos van autor (¡el padre, el hijo?) de
Immerseel) y la materia (y la Alte y Neue Lcsmbacn. N o
espacialización) sonora. Esta Qyistopher Hogwaori FOTO: OVCKMAV/DECCA quiero decir que esta inte-
integral (única en el mercado) de las sin- gral es definitiva ni perfecta, se puede
fonías tiene dos cualidades preponderan- echar de menos la expresividad (sobre
-11,11,5,8,5-, seis intérpretes permutan-
tes: el rechazo de toda escoria (mal) lla- todo en los movimientos lentos) de Krips
do las flautas, oboes y clarinetes, otros
mada romántica y que habría que reem- (Concertgebouw, Philips) o de Brüggen
seis para trompas y trompetas, 4 fagotes,
plazar por polución wagneriana, según la (Orquesta del Siglo XVIII. Philips), el vir-
timbales) precede la reducidísima (y tan
proposición de John Eliot Gardinen la tuosismo de los mismos, la tensión dra-
querida por el compositor) orquesta de
elección de los vanos tipos de orquesta mática, operística, de Hamoncourt (Con-
Praga que estrenó la Sinfonía n° 38, K
para los cuales Mozart escribió: la peque- certgebow, Teldec), la voluptuosidad
504, que podemos escuchar en toda su
ña orquesta italiana de cuerda (6 prime- radical y analítica de Bemstein (Filarmóni-
modernidad. La espacialización (el arco
ros vlnes, 5 segundos, 2 vías, 2 dos. I ca de Viena DG), la emoción sin énfasis
para la pequeña orquesta; la separación
cbajo) con oboes doblando los primeros de Gardiner (The English Baroque, Phi-
entre timbres débiles y fuertes, como
pupitres; o la grande, de Milán, Turín, lips) o la visión demoledora, caja de músi-
flauta y trompeta, para su mejor equili-
Ñapóles: cuerdas (12.12,4,2,6), 5 fagotes ca o tiovivo de Norrington (London Clas-
brio...) es también respetada, así como
doblando los contrabajos, creando por la sical Players, EMI), pero no por ello resul-
todas las repeticiones, incluso en los
importancia de registros extremos una ta menos fascinante el itinerario
Menuettos; algunos eruditos se oponen a
sonoridad de catedral; de Londres, más propuesto por Hogwood y Schroeder
esta práctica, sin embargo, el tiempo vivo
tradicional, cuerdas (6,5,2,2,1), 2 oboes, 2 (mo/tnes de mus/que, más que directores),
permite escuchar todo el Menuetto sin
trompas, fagot y clave para el continuo; la itinerario paralelo a la lectura de las cartas
aburrimiento, y en t o d o caso hay que
orquesta de los días de fiesta en Salzbur- de Mozart.
go: cuerdas (9,8,4,3,2) con vientos impor-
tantes (3 oboes. 3 trompas) y 3 fagotes
para una linea clara del bajo (cuando no MOZART: /megraí de tos Sinftmtos. The Academy
of Ancient Music, dingida por Jaap Schroeder (pri- «La came es Viste -escribió Mallar-
intervienen en el obligato): en el volumen mer vioJin) y Chnstopher Hogw/ood {dave y forte- m é - y, ¡ay!, he leído todos los libros...».
VI, la gigantesca orquesta parisina del piano). Instrumentos onginates. Diapasón 430 (La).
A buen seguro no había escuchado
Concert Spmtuei (formada por cuerdas Un esluche (enorme) de 19 C D en siete volúme-
nes a precio medio. LO(SEAU-LYRE 430 639-3 todos los discos.
Grabación excelente A D D y D D D . 1979/1983. 19
horas.
Pedro Elias
SCHERZO 99
DISCOS

ESTUDIO DISCOGRAFICO

Cosmología mozartiana
C
ada año, desde hace muchos, son conjunto, una versión decente, con bri- sistencia real- y Vaness -Don na Elvira
varias las versiones (nuevas o ree- llante pero no especialmente depurada valientemente servida, con medios sufi-
ditadas) de óperas de Mozart, en prestación orquestal y suficiente, con cientes, relativo estilo mozartiano, agu-
especial de las grandes, que salen al algunos altibajos, colaboración de las dos agrios y excesivo vibrato- y más
sobrecargado mercado internacional. voces. A inferior nivel que la grabada para atenuada en los otros: Ramey, siempre
1991, el del bicentenario, no iba a ser PHILIPS por el mismo director inglés en excelente cantante, que aquí, como
menos, sino más. De ahí que en estas 1972 (comentada de pasada, junto con Leporello, está, por su falta de gracia en
páginas nos hayamos hecho eco puntual- otras muchas, en el n° 43 de esta publica- el acento y de eficacia teatral, lejos de
mente de las novedades que las casas ción), de mayor impulso y con un reparto su atinado Don Juan de los últimos
tienen a bien entregarnos para su globalmente superior, en especial por la años, hecho habitual mente en Salzburgo
comentario (a excepción de la distribui- Incomparable Susanna de Freni. precisamente con Muti; Studer, voz fácil,
dora de Erato, que no lo considera ni igual, resuelta, algo monocorde y plana
Continuemos con el Don Giovanni
adecuado ni conveniente: razón por la para dar con todos los vericuetos psico-
presidido por la competente batuta de
que algunas ediciones de interés, como lógicos de Donna Anna, y Mentzer, ya
Muti, una publicación que, como la
la de Cosí de Barenboim, no han tenido asentada, desde su tesitura de mezzo
anterior, no aporta nada nuevo o al
la debida reseña en nuestras columnas). aguda, como una adecuada y en buena
menos nada especial. Aunque haya
La fluencia es, como cabía esperar, medida reveladora Zerlma ajena al den-
cosas de mérito. Entre ellas el pulso
torrencial. En el pasado número de gue y a la ñoñería de otras. Pálidos los
firme, el equilibrio, la claridad de líneas y
SCHERZO Femando Fraga comentaba dos no estadounidenses.
de texturas, la buena construcción e
nada menos que nueve Interpretaciones
incluso variedad que, dentro de un Cerremos este capítulo con la nueva
dtscográficas de Los bocios de Fígaro, en
orden de acontecimientos previsto, flauta mágica de Solti, cuya grabación
trabajo complementario del dosier sobre
otorga el director italiano, que no alcan- para el mismo sello de 1969 se mante-
la obra. Hoy el que suscribe va a intentar
za, sin embargo, el verbo, el sabor tea- nía entre las primeras opciones. La pre-
hacer, de manera breve y sucinta, lo pro-
tral a la napolitana, de un Giulini (por gunta es: ¡Se ve superado este viejo clá-
pio respecto a recientes producciones
hablar de otro sureño). Muy relativo sico por la reciente publicación? La con-
de cinco de las mas notables óperas del
interés proporciona el equipo de can- testación del que firma es: no. Hay
genio saizburgués, incluida la de la citada
tantes, en el que todos, menos De varias razones: a) conceptualmente
en último término.
ambas visiones son muy
parecidas, claras, precisas,
bien equilibradas, impeca-
Dentro de la tradición blemente fraseadas, en el
punto justo entre lo cere-
monial y lo na% dotadas del
Empecemos, pues, por la aliento dramático - d e
grabación que del Fígaro ha narración fluida en la que se
realizado Colín Davis. suceden y alternan diversos
Recordarán que Fraga acontencimientos- habitual
hablaba de ella a! final de su en sir Georg, bien que la
artículo. Hay que suscribir lo más reciente suene mejor,
allí expuesto ahora que el más brillante y posea una
álbum ha llegado a la redac- dinámica más amplia, que,
ción: excelente y vanada de todos modos, no hace
-quizá no tan imaginativa-, olvidar el seductor aire de
teatral, la dirección, con una espontaneidad que poseía
espléndida Sinfónica de la la antigua; b) en el aspecto
Radiodifusión Bávara; idio- vocal la primera (excluya-
matismo musical {no tanto mos una más antigua de
lingüístico) del barbero de Melodram grabada en la
Tltus, elocuente y fácil, Radio de Hesse en 1955 y
puede que de escasa pres- en la que aparecían nada
tancia vocal; idónea, en una menos que Elisabeth Grüm-
línea muy tradicional, la mer y Frick) es claramente superior
Susanna de Donath: sentida, sensible y papel por papel porque Pilar Lorengar,
primorosamente dibujada la Condesa de Carolis y Rootenng, son norteamenca-
nos, lo que, en este caso más que en vibrato incluido, gana de lejos a la sosa y
Varady, que ya se sabe que, con una voz desvaída, aunque musical, Ziesak, Talve-
de relativa calidad, es capaz de establecer otros, contribuye a que los aspectos
vocales aparezcan en cierto modo la en sus buenos tiempos era aún
cotas musicales y expresivas muy artas; mejor, de mayor dimensión y rocosidad,
mal, mate y burdo, el Conde de Furlanet- subordinados a la sonoridad de gola.
desagradablemente acusada en las pres- incluso en dignidad, que el muy bueno
to; mediocre el Cherubino de Schmiege, Molí, Burrows poseía un más conve-
bien visto el Basilio de Zednik, fuera de taciones de Shimell -nada ortodoxo,
tosco en el fraseo, poco elegante, con niente heroísmo vocal que el aseado y
sitio Niemsgem como Bartolo y Kallisch cumplidor Heilmann, de timbre un
como Marcellina y pasables los demás. En agudos mal proyectados-, Lopardo -de
bonita y amanerada linea, sin con-

100 SCHERZO
DISCOS

ore un tanto pecorino y picudo, la Reina cal, valores perdidos, hábitos periclita- impulsados por una elocuencia tal. Junto
de la Deutekom, pese a sus feos juegos dos, se srtúan por derecho propio Eliot a la labor de Gardiner hay que situar la
de glotis, aventaja a la decorosa pero Gardiner y Hamoncourt, éste muy dis- de la excepcional orquesta a sus órde-
ayuna de impacto dramático Sumi Jo, cutido a veces, y en ocasiones quizá con nes, esos The English Baroque Soloists,
Prey es uno de los Papagenos ideales, razón, aunque sus propuestas, tanto en y la del no menos ensalzable The Mon-
cosa que no se puede predicar en abso- Bach como en Mozart y ahora en Beet- teverdi Choir. Quedan los solistas voca-
luto de Kraus, un barítono de timbre hoven, resultan generalmente fascinan- les, dentro de los que con una excep-
gutural y desagradable, aunque 5olti le tes; como las del inglés, que suele ser ción, no puede decirse que haya nada
haga, como a todos, no desentonar en más fácilmente admitido por los intran- especialmente resaltable: Rolfe Johnson,
buen cantante, de timbre grato y nota-
ble gusto, no es el Idomeneo que
hubiéramos soñado teniendo en cuenta
las bondades relatadas hasta aquí, ya
que le falta robustez y segundad tanto
en agudos (mal proyectados) como en
agilidades (resuelve honrosamente, de
todas formas, la peliaguda Fuor del mar);
McNair, llia, musical, exquisita, es una
voz muy linca, demasiado aniñada quizá;
Martmpelto posee un instrumento sin
duda importante para Elektra pero apa-
rece falto de metal y su registro supe-
rior empalidece por mala colocación y
enmascaramiento, aunque justo es decir
que salva con mucha dignidad sus pape-
letas, entre ellas esa exigente aria que
es D'Oreste, d'Aiace. La excepción es
Von Otter, de instrumento rico, exten-
so, coloreado de mezzo lírica y arte
canoro impecable. Su Idamante es
ejemplar, probablemente el mejor -en
el ámbito de la versión con voz de
mujer- junto al de Diana Montague.
Excelentes los demás componentes del
reparto. La grabación une a las notabili-
dades comentadas la de incluir la totali-
dad de la música compuesta por Mozart
para Munich, tanto la que se dio en las
primeras representaciones (el autor rea-
el conjunto, y, para no referimos más sigentes de las fórmulas románticas y lizó continuos cambios) como la que
que a los muy principales, Fischer-Dies- postrománttcas -que, ojo, pueden ser surgió de revisiones hechas sobre la
kau arrasa, a despecho de sus episódicas tan válidas según en qué casos como marcha; excluyendo la creada para
faltas de metal y de redondez, en el cualquier otra-, ciegos y sordos cuando Viena cuatro años más tarde. Es por
Sprecher. mientras que su discípulo Sch- se habla de instrumentos originales o de tanto esta versión -que incorpora asi-
midt está simplemente bien. Equipara- revisión mus ico lógica de textos. mismo la música de ballet- más com-
bles las damas y quizá mejor, más La calidad de los trabajos mozartianos pleta que la de Harnoncourt para
potentes y afinados, los niños de la de Eliot Gardiner está desde luego fuera Telefunken (1981); y mejor, menos
segunda grabación. No puede desacon- de duda y el mejor ejemplo es la inte- agresiva y más equilibrada y rigurosa.
sejarse, en cualquier caso, la adquisición gral de los conciertos junto al pianofor-
de este registro aun cuando se tenga el tista Malcolm Bilson, Opinión que hay
antiguo. La puesta en escena, el sonido, que mantener tras la escucha de este
la unidad de criterio, el buen hacer de la Y de Harnoncourt vamos a hablar
Idameneo, que inicia afortunadamente para concluir este trabajo. A propósito
batuta son bazas a favor. una serie de grabaciones de las siete de una de sus últimas experiencias en el
más grandes óperas del salzburgués. La campo mozartiano: Cosí fon tutte, en
lógica más aplastante y una límpida grabación recién salida de las prensas.
Nuevas vías musicalidad se dan cita en esta versión De entrada hay que decir que tras los
reveladora de una partitura maestra, instantes de inicial sorpresa producida
injustamente postergada durante años. por lo inesperado e inhabitual de cier-
Siempre resulta estimulante que exis- Todo lo que hay en la obra de herencia
tan músicos que intenten buscar cami- tos tempi, lo novedoso de algunos
asumida y recreada de Rameau y Gluck acentos, lo extraño de determinados
nos no trillados y recrear obras consa- queda patente en esta vivida interpreta-
gradas desde presupuestos no usuales; a fraseos y el impacto dinámico y tímbri-
ción, que resulta palpitante, tan clásica co, la impresión es la de que esta nueva
condición de que partan, claro es. de un como prerromántica, perfectamente aventura del director berlinés, con inde-
conocimiento y de un rigor, amén de proporcionada en todas sus voces y pla- pendencia de la polémica que pueda
contar con una preparación técnica y nos sonoros y envuelta en un hálito levantar, es positiva; y estimulante en
estilística, que no están ai alcance de la dramático excitante, presente desde la grado sumo. Hay una cosa que debe
mayoría. Dentro de los directores que misma obertura. Acentos, fraseo, diná- resaltarse antes que ninguna otra: la
en los últimos tiempos más han hecho micas, ataques, texturas y timbres se elección de unas voces adecuadas -es
por descubrir esas nuevas vías, de recu- nos antojan idóneos, sobre todo al estar posible que por vez primera en el
perar, desde la más pura esencia musi-
SCHERZO 101
DISCOS

disco-, a excepción de la del tenor que viene favorecido por una límpida y compás (6/8) que cierra aquél, mientras
(¿dónde los mozartianos actuales de a veces demasiado brillante toma sono- las restantes aparecen ya en la nueva
esta cuerda?); cada parte tiene su tim- ra- todas y cada una de las anotaciones indicación más rápida. Otros aparentes
bre y su carácter de acuerdo con lo mozartianas, por supuesto desde la excesos, como exagerada acentuación
pedido por la música y el texto. Asi, óptica que ofrecen los últimos estudios de la primera nota de cada compás, los
Fiordiligi es una soprano spinto, la de fraseo y tempo, éste siempre muy abusivos portomeotí en algunos recitati-
holandesa Margíono, de extensión con- variable, debe ser señalado, aunque nos vos secco, que otorgan al discurso un
siderable, timbre consistente (sin las iri- parezcan en ocasiones excesivas algunas discutible amaneramiento, se ven supe-
saciones y riqueza de armónicos que un retenciones; las lentitudes de las dos rados por las virtudes apuntadas y las
metal de más calidad habría proporcio- arias de Guglielmo, Andantino y Alle- continuas sorpresas. Admirable, siguien-
nado) y suficiente dominio de agilidades, gretto respectivamente, indicaciones do la recomendación mezzo race, la
que circula en los pasajes di sbalzo con que para el músico alemán incitan a la forma de frasear en la cuerda y el aire
soltura (un tanto académicamente) y morosidad. Nos choca también la de serenata en los vientos dado el
muestra, ya que no un manejo excep- manera de realizar la transición del comienzo del primer finale. Y encomia-
cional del legato, una valentía loable. Andante al Allegretto en el n° 19, ble el respeto a los numerosos sfórzan-
Dorabella no es una mezzo oscura sino segunda aria de Despina; pero la razón di y contrastes forte-piano. Queda por
una linca lindando con la soprano, la es obvia: las tres primeras notas del sal- alabar, en esta incandescente lectura,
norteamericana Ziegler, instrumento y tarín tema (tres corcheas puntuadas) (llevada al disco después de muchas y
cantante discretos. Despina no es, están situadas en la segunda mitad del continuadas representaciones en la
menos mal. la característica soubrette Opera Neerlandesa) la prestación de
espabilada, sino una voz más ancha y una formidable Orquesta del Concert-
compacta, que canta (muy bien previsto MOZART: Le r>07ze ó Frgaro. Alan Titus. Hden
gebouw, que atiende con una exactitud
por la batuta) con un aire un poco des- Donaih, Julia V j n d / , Ferrucio Furljnetto, y belleza sonoras ejemplares las orienta-
garrado y pueblerino y no hace dengues Marilyn Schmiege. Heini Zednik. Siegmund ciones y órdenes de la batuta.
en sus números de travestismo. El Nimlgern, Cornelia Kallisch. Gerhard Auer,
Ingrld Kerasi. Clies-H. AnsjÓ, AtJuko Suzuki,
cometido ha recaído en la casi descono- Monika Schmldt Orquesta Sinfónica y Coro de
cida inglesa Anna Steiger. Guglielmo (o la Radiodlfuilón de Baviera. Director Sir Colín
Guilelmo, que tal parece era el nombre Davis. Grabada en mayo. Junio y julio de 1990 en
la Herkulessaai de Munich. Producción de Wol- Finale
inicial propuesto en el libreto) es un fram Graul. Ingeniero de sonido: Gerhard von
barítono con buenos graves, como Knobelsdorff. BMG CLASSICS. 3 CD DDD RD Unas recomendaciones para cerrar.
corresponde a las exigencias de la escri- 60440. Durabón: 69*I8"-« 1 2r-42-|B".
La versión de Idomeneo de Gardiner se
tura, el suizo Cachemaille, de relativa coloca como primera opción dentro de
Don Gomnm Wllliam ShuntII, Samuel Ramey.
calidad. Y lo más importante, Don CheHy Studer, Carol Vaness. Frank Lopardo. la discografia actual. Supera no ya a la
Alfonso es un verdadero barítono, no Susann Menner. Natale de Carolis, Jan-Hendrik de Hamoncourt, sino a las anteriores de
un bajo o bajo bufo, (al igual que dos ftootering. Coro de l i Opera del Eíiado de
Sehmidt Isserstedt, Bohm o (la muy
Viena, Orquesta Filarmónica de Viena. fortepia-
ejemplares antecedentes discográficos: no continuo: Roben Kettetson. Director: Ric- recomendable) de Kertesz: También,
Brownlee, con Busch, y Bmscantini, con ardo Muti. Grabada en noviembre de 1990 en aunque no debamos olvidamos de ellas
Karajan) aunque un barítono muy lírico la Muiikvereinssaal de Viena. Producción de
por completo, las tres dirigidas por Prit-
David Groves. Ingeniero de sonido: Michael
como es el norteamericano (una de las Sheady. Montaje: David Bell. EMl CLASSICS. J chard. La de Cos/ de Hamoncourt es,
modernas estrellas) Hampson, fácil, ele- CD DDD 7 54255 I'2/4. Duración: M'2B"- por su novedad y características descri-
gante, nítido en la articulación, que tas, una posibilidad a defender frente a
puede acometer sin apuros algunas de la modélica, pero muy abreviada, de
las dificultades que voces más graves no Die Zauberfime Kun Molí, üwe Heilmann. Sumí
Jo. Ruth Zleíak. Lotte Leitner, Michael Krain, Karajan (llena de un encanto que falta
sortean, como la del trio Soove sia il Heinz Zednik. And re» Schmidt, Adrlanne Plee- en la hoy comentada) para EMl de
vento. Lástima que su arte no sea muy zonka, Annette Kueitenbaum. Jard van Nei. 1955, a la de Bohm para la misma com-
depurado y se le escapen multitud de Coro de la Opera del Estado de Vlen). Orques-
ta Filarmónica de Viena. Nlfloi cantores de pañía de 1962 (con el Ferrando de
matices y no acabe de dar por comple- Viena. Director: Sir Georg Solti. Grabada en Kraus) o a la de Muti, también EMl, de
to ese tajante de cínico redomado que mayo y diciembre de 1990 en la gran tala del Salzburgo de 1987. Un recuerdo, natu-
le asigna Hamoncourt (en una intere- Konierthauj de Viena. Producción de Michael
Haas. Ingeniero de lonido: John Peilowe. ralmente, para la histórica de Busch
sante entrevista publicada en el folleto DECCA 2 CD DDD 411 210-2. Duración: (con una Souez inolvidable). La de
que acompaña a la grabación y en la 77-22"-74'22". Oestman, de Drotningholm, con instru-
que dice cosas curiosas y en algún caso mentos de época, tiene interés pero se
discutibles). La laguna es Ferrando; no 'domenec Anthony Rolfe Johnson. Anne Sofie sitúa a menor nivel. Deseable seria que
porque Van der Walt, sudafricano, no van Otter. Sylvla McNair. Hillevi Mirtinpello.
Nigel Robson. Glenn Wlnslade. Cornellus se recogiera la interpretación, asimismo
cante con gusto, buena linea y correc- Hauptmann. TFte Moineverdi Choir The EngHsh con instrumentos originales, de Rattle
ción, sino porque su instrumento es Baroque Soloist*. Director John Eliot Gardiner. para el Festival de Glyndebourne, no
pobre, chato y en exceso liviano alejado Grabada durante un concierto público reaiizado
en junio de 1990 que el Queen EJizabeth Hall. exenta tampoco de gratas sorpresas.
de las prestaciones de medio carácter Producción de Karí-Auguit Naegler. Ingeniero
que le otorgaría un lírico de mayor de sonido: Ulrich Vene. ARCHIV PRODUK-
TION. 3 CD DDD «1674-2. Duración: TffOT- Las versiones de las otras tres óperas,
envergadura. 70*45 "-6 r « " igualmente criticadas -por encima- en
este ya largo trabajo, no suponen nove-
Cosí fon tulte Charlotte Margiono, Deloreí Zie- dad especial en el panorama discográfi-
gler. Gilíes Cachemaille. Deon var der Walt,
Conviene destacar algunas cosas más Auna Steiger. Tliornas Himplo n. Coro de la co. Si acaso, La flauta de Solti podría
de esta versión, que muestra la partitura Opera Neerlandesa. Real Orquesta del Concert- inscribirse en el hit de las importantes
-para Hamoncourt, pese a la anécdota gebouw. Director Nikobu) HarnoncourL Gri- (sin superar, como /a se ha dicho, a su
bada en enero de 1991 en el Concertgebouw de
que la mueve, realista y preñada de Amsterdam. Producción de Heimut MUhle. Inge- primera interpretación para el mismo
efectos propios de un joven romanticis- niero de sonido: Michiei Brammann. TELDEC. 3 sello).
mo- en su integridad, recitativos inclui- CD DDD 903 I-71 IB I-2. Duración: *3'39'-
dos. El exquisito cuidado en atender -lo Arturo Reverter
¿02SCHERZO
DISCOS

ESTUDIO DISCOGRAFICO
Beethoven-Harnoncourt:
La polémica está servida
D
esde el lejano 1963 en que Har- sitor y que agota un aspecto importante do de adoptar aproximaciones más
noncourt realizó para Teldec su relativo a la obra, es esencial para su auténticas que en años anteriores». Así.
primera grabación consagrada a la comprensión. Y si un compositor como pues, unas versiones notables, sobre
Música de la Corte de Mannheim, hasta Beethoven hace, por ejemplo, una sutil todo las de las sinfonías Primera. Segunda,
estas Sinfonías beethovenianas. han pasa- distinción entre sf y fp. es importante Cuarta y Octava (las más conectadas con
do casi treinta anos que han consolidado observarla tanto para la expresión como el clasicismo vienes). Las demás, natural-
el nombre del director berlinés como para el contenido». El director berlinés ha mente, poseen la claridad, precisión, bri-
uno de los músicos más populares entre hecho aquí lo mismo que en sus versio- llantez y elegancia que habitualmente
los públicos de conciertos y, sobre todo, nes de Sinfonías de Haydn y Mozart utili- aparecen en la mayor parte de las inter-
entre los discófagos y discófilos. En efec- zar una orquesta moderna pero con violi- pretaciones del músico berlinés. Pero
to, su monumental proyecto (siempre en nes con vibrato distinto, y arcadas y digi- emoción, esa auténtica y profunda sensa-
Teldec) de las ¡99 Contólos de J.S. Bach, tación diferentes, ademas de baquetas de ción que se experimenta escuchando a
hechas en colaboración con Gustav timbales distintas en algunas sinfonías los grandes traductores de estos penta-
Leonhardt (primera grabación con crite- (por ejemplo, en la Novena), La agrupa- gramas, aquí no se encuentra (no es
rios históricos y filológicos, sin preceden- ción empleada es la Orquesta de Cámara necesario citar nombres para saber a
tes tanto desde el punto de vista musical de Europa que, salvo las trompetas, toca quiénes nos estamos refiriendo, a pesar
como artístico); numerosísimas obras del con sus instrumentos de siempre, es del lastre estilístico que se pueda encon-
Barroco con su Concentus Musicus de decir, una orquesta de tamaño medio sin trar en muchos de ellos). En este senti-
Viena; la trilogía de Monteverdi en la doblar los instrumentos de viento. En do, la Quinto por Hamoncourt es un
Opera de Zurich; las óperas de Mozart cuanto a las trompetas, se han elegido las producto fríamente aséptico; la Pastora/
(en curso de realización); Sinfonías, Sere- naturales antiguas porque «la trompeta un estudio tímbrico sin precedentes que,
natas y Misas de Mozart; Sinfonías de no es solamente un instrumento, sino a pesar de la precisión fanática del direc-
Haydn, asi como alguna que otra curiosi- una especie de símbolo; cada motivo de tor, no logra la absoluta perfección de,
dad en principio poco apta para su talan- fanfarria exige un tipo de entonación bien por ejemplo, un Frrtz Reiner (por seguir
te directorial, como Valses, Polkas y El definido. Si una trompeta moderna toca- en la misma línea de objetividad instru-
murciélago de Johann Strauss, le han cata- se con un volumen sonoro correcto, el mental); en la Heroica no consigue plas-
pultado a los primeros lugares del llamé- carácter de fanfarria estaría ausente. La mar el dramatismo necesario a partir de
mosle Hit-parade clásico, apareciendo elección, en consecuencia era: o bien la expresión musical; la Séptimo y
hoy cada vez más alejado de su antigua demasiado fuerte con el carácter correc- Novena, a pesar de sus innegables acier-
imagen de especialista en música antigua. to, o con la dinámica correcta pero sin tos parciales, suenan demasiado camerís-
Ahora, con motivo de esta grabación de carácter. He elegido el instrumento natu- ticas y demasiado conectadas con el
las 9 Sinfonías de Beethoven, hechas en ral, en donde este problema no se pre- mundo estético del primer Beethoven.
vivo en el marco del Festival Stynarte de senta» (entrevista hecha a Nikolaus Har- dando también cierta sensación de fríos
Graz, volvemos con esta controvertida noncourt por Harmut Krones. que tradu- y perfectos trabajos de laboratorio (sin
figura que trata de obligar a crear nuevos cimos aquí parcialmente del libreto que contar con otras peculiaridades, como
hábitos de escucha y a descubrir otros acompaña a este álbum). las partes corales de la Novena, sobre
aspectos sonoros en una música aparen- todo a partir de Seid umschJungen, Milho-
temente tan familiar. nen. más conectadas con el mundo de
Así, pues, estamos ante un ciclo que Bach que con lo que se está interpretan-
pretende ser absolutamente fiel a la letra, do. Solistas vocales muy flojos). En fin,
Hamoncourt dice que no solamente pero que de ninguna de las maneras como podrá comprobar cualquiera que
pretende una exactitud histórica en esta puede tomarse como definitivo, sobre se compre este álbum y lea la entrevista
música, sino que es realmente un deber t o d o en su aspecto expresivo (como que viene en el libreto, Nikolaus Har-
interpretarla por la importancia que tiene tampoco lo son los de Norrington, Hog- noncourt habla con indudable sabiduría
para el público y los músicos de hoy, wood, Goodman o Brüggen -éste en del m u n d o sinfónico de Beethoven,
Según sus propias palabras, se ha esforza- curso de realización-, ni casi nada de lo sobre su significado estético, histórico,
do en encontrar el clima intelectual de la que se hizo antes o se hace ahora en ideas extra-musicales de orden general,
época en que estas obras vieron la luz. interpretación musical). El propio Niko- transmisión de contenidos y emociones,
sin tratar de aportar a esta búsqueda un laus Hamoncourt, en la entrevista citada, nivel de consciencia o de instrucción,
rigor científico exagerado, Destaquemos comenta que dentro de treinta años se más un prolongado etcétera; pero los
las notables diferencias que se pueden dirá de estas versiones que «fueron típi- resuttados son otra cosa, y como todo el
encontrar entre las partituras habituales y cas de la búsqueda y el cientifismo mundo sabe, hay mucha jurisprudencia
las usadas después del riguroso estudio emprendido en los años 80 y 90, tratan- sobre el tema De todas formas, un ciclo
de las fuentes. Por ejemplo, en la Noveno, notable, muy personal y caracteristico de
se usa el re en lugar del si bemol en el los modos de su director, con excelentes
segundo tema del primer movimiento, así BEETHOVEN: Los 9 Smfonta Chiriotte Mirgiono
(>op.), Birjtt Remmert (con.). Ruoolí Sehaschning tomas de sonido y buenos coméntanos
como la octava baja del contrafagot en la (ten). Roben Holl (tajo). Coro Arnold Schon- en alemán traducidos a inglés y francés
marcha del movimiento final. « N o es berg. Orqueiti de Cinitra de Europa. Director (más una entrevista a Hamoncourt que
solamente el interés histórico -dice Har- Nlkoiius Hamoncourt. TELDEC 2292-4M52-1.
llbum de S discos DDD. Duraciones: 74. 71, 70, ya hemos citado anteriormente).
noncourt- lo que me ha hecho encontrar 74 y 65 minutos. Grabaciones. Grcx, Stefanlensa-
todas estas cosas importantes, sino sim- •!. ¡unió y julio de iWO y 21 de junio de 1991
plemente la convicción de que toda (Noveno}, en conciertos públicos. Producción:
Helmuc Mil Me. Ingeniero: Michael Bfímmjnn.
información que nos llega de un compo- Distribución: WEA
Enrique Pérez Adrián
SCHERZO 103
LlbROS

ESTUDIO BIBLIOGRÁFICO

Esencia de la armonía
A
Ramón Barce, hombre de múlti- fenómeno lógicas que en pugna con el penosa que conduce al absurdo. Dice
ples saberes e inquietudes, hay psicologismo y el pragmatismo aspira- de ellos, como haciendo una gran con-
que agradecerle el haber puesto ban a evidencias ahistóricas. Esa efer- cesión, que dada su innegable existen-
a disposición del lector español, en vescencia no dejó de contaminar una cia histórica como meras experiencias
condiciones muy dignas, vanos textos metodología, arbitraria, anclada en la en la teoría y en la práctica, por esta
fundamentales de teoría musical del tradición idealista, consistente en cons- sola razón han de considerarse «bien
siglo XX, el Tratado de Armonía de truir un modelo apriorístico y ajustar al venidos al desarrollo de nuestro arte
Arnold Schoenberg (Real Musical, mismo, cual lecho de Procusto, los porque sin duda contribuyeron eficaz-
Madrid 1974), el Nuevo Tratado de grandes nombres del período clásico- mente a la clanficación de nuestro sen-
Armonio de Alois Haba (Real Musical, romántico, de Bach a Wagner, «el más timiento hacia los dos sistemas mayor y
Madrid 1984) y ahora el volumen obje- grande de los modernos». A este res- menor.»
to de este comentario. Su autor, Hein- pecto es muy reveladora la selección
rich Schenker (Wisniowczyki, Galitzia que hace de ejemplos musicales. De Con estos antecedentes nada tiene
1868-Viena 1935), cuyo magisterio ha esta comunión de elegidos, predomi- de extraño su disgusto por la vuelta al
tenido una indudable proyección en el nantemente germánica con algunas uso de los modos una vez instaurado
área germánica, y también en USA gra- excepciones - D . Scarlatti, Chopin- que en todo su esplendor el mayor-menor y
cias a sus discípulos Oswald joñas y ha plasmado la verdadera naturaleza que ni mencione las experiencias de
Félix Salzer, es poco conocido en Espa- de la música, queda excluida por ejem- Liszt Musorgski, o Debussy en ese sen-
ña. Estudió con Bruckner en el Conser- plo la escuela francesa, muy activa en tido. Pero no puede soportar que todo
vatorio de la capital austríaca. Fue esos años, a la que se ignora olímpica- un Beethoven se pierda en tales prácti-
pedagogo, editor, crítico, intérprete, y mente, iconoclastas como Max Reger cas y examina un ejemplo muy conoci-
hasta compositor que causó favorable por sus pecados contra las reglas de la do, el He'diger Dankgesong en modo
impresión a Brahms quien llegó a reco- armonía y por supuesto los músicos lidio del Cuarteto Op. 132, desenten-
mendarlo a su editor habitual Simrock. anteriores -Hassler, Sweelinck- desca- diéndose de otros, como el Incarnatus
Dedicado a [a docencia privada, nunca lificados por primitivos y rudimenta- dórico de la Misa Sotemnis o el pasaje
enseñó en la Universidad. Por su escue- rios: «Qué distancia -exclama retórica- «Brüder über'm Sternenzelt» de la
la de música pasaron relevantes perso- mente- desde aquel primer acorde de Novena Sinfonía. El sincero intento de
nalidades como los citados Joñas y Sal- mi bemol mayor en el ejemplo de Beethoven de servirse de un auténtico
zer, Furtwangler y Anthony Van Hobo- Sweelinck hasta el motivo, salido de la modo lidio omitiendo el si bemol para
ken, conocido este último misma tríada, de la Heroica de Beetho- eludir la tonalidad de fa mayor resulta,
especialmente por su catálogo de la ven!». según Schenker, molesto para la mayo-
obra de Joseph Haydn. ría de los oyentes.

Para Schenker tía habido un progreso Y tras alambicados e ingeniosos análi-


El Tratado de Armonía (Harmonielen- histórico hasta culminar en una edad de sis llega a una conclusión sorprendente
re, 1906) es el primer volumen de oro que en los años en que escribe en la que queda a salvo la elevada cate-
Neue musikalische Theonen und Pban- empieza a demoronarse en medio de goría, tanto de la composición como de
tasien. Sus análisis teóricos continua- tristes presagios. Entre paréntesis cabe su autor. Este no sospechaba que a sus
ron en Kontrapunkt (1910-12), una decir que, a casi cien años vista, su pan- espaldas una fuerza superior de la natu-
explicación sistemática del método de teón de nombres ¡lustres coincide con raleza guiaba su pluma de manera que
Fux y en otros estudios que vieron la muy pocos retoques y algunas adiciones mientras creía estar escribiendo en
luz en su publicación Der Tonwille con el que actualmente monopoliza las modo lidio sin desviarse, la pieza por sí
(1921-24) y en su sucesora Dos Meis- actividades musicales en sus más varia- misma continuaba en fa mayor. Algo
terwerk in der Mustk. (1925-30), culmi- das vertientes -grabaciones, conciertos, maravilloso.
nando su labor investigadora con Der estudios académicos, festivales, conme-
La inconsistencia del sistema con-
Fre/e Satz (1935). Ciertos aspectos de moraciones-, y al que los mandarines y
ceptual de Schenker obedece a la
sus ideas sobre la armonía se apoyan pro motes del gusto musical dedican casi
escasa nitidez de sus fundamentos,
en los Tratados de Kimberger, Hemi- todos sus desvelos. Pero ésta es otra
siempre movedizos cuando no contra-
chen, C.P-E, Bach y otros estudiosos historia
dictorios. En ningún caso es más evi-
del siglo XVIII.
A veces ni los más calificados prota- dente esto que en sus continuas apela-
Su tesis de que el contrapunto repre- gonistas de esta leyenda áurea se ajus- ciones a una idea sumamente equívoca
senta una fase más elemental que la tan como es debido a los rígidos de naturaleza. Acabamos de verla
armonía, está confirmada por la evolu- esquemas schenkerianos y hay que acu- guiando a un Beethoven sonámbulo e
ción histórica; en sus análisis aparece dir al ingenio para justificar sus deslices. inconsciente a modo de deus ex
divorciado de los acontecimientos Tomemos un ejemplo. Nuestro autor, machina. Las misteriosas consignas de
armónicos con lo que el estudiante a partir de premisas valorativas total- la naturaleza de que habla en la pág.
puede captar mejor la interacción de mente infundadas, rechaza los modos I2é corrigen las desviaciones del com-
ambos en la obra completa tonal (freie eclesiásticos hasta el extremo de consi- positor encauzándolo por el verdadero
Satz, libre composición). derarlos una experiencia innatural y camino. Otras veces naturaleza y arte
se contraponen siendo éste una abre-
La especulación de Schenker surge en viatura conceptual de aquélla, una
un clima de crisis fin de siglo. Los úrti- HEINRICH SCHENKER; Tratado de Amonto. Tra- réplica en versión reducida frente al
mos coletazos del subjetivismo románti- ducción y Prólogo de Ramón B»rc«. Re»l Mmical;
modelo gigantesco.
Madrid 1990. I vol. de 486 pp. de 21.5 x 15.5 cm.
co coinciden con incipientes comentes
104 SCHERZO
umos

Hay casos en que arte y naturaleza quiere captar su verdadera grandeza puntos concretos como pueden ser la
son equivalentes por ejemplo en el que estriba, como dice Barce, en su diáfana exégesis de la naturaleza y fun-
modo mayor que, al menos en sus modélico y sugerente prólogo, en pro- ciones de la nota pedal hasta la inter-
fundamentos, «ha brotado espontáne- fundizar como ninguno, en la esencia de pretación de la saturación cromática
amente de la naturaleza», mientras la armonía. A continuación enumera como potenciación implícita de la diato-
que el modo menores artificial, «pro- algunos planteamientos fructíferos. Por nía, pasando por los minuciosos comen-
piedad originaria de los artistas», la ejemplo la exigencia de distinguir cuida- tarios sobre el arranque del Cuarteto K
cultura humana frente a la naturaleza dosamente entre armonía, y en su caso 465 de Mozart, rechazando sus supues-
de la que deviene un nuevo compo- grado, y coincidencia contrapuntistas tas disonancias, que obedecen a la
nente. Y si resulta que el folklore pn- sin ningún valor formal armónico. Para voluntad de mantener la escritura imita-
migenio de muchos pueblos está más Schenker el espíritu de lo armónico tiva pero sin que puedan calificarse de
cerca del modo menor que del tiene como misión fundamental el posi- notas disonantes una fundamental y una
mayor, aquí la solución es evolucionis- bilitar «amplios esquemas melódicos y quinta.
ta, a partir del hombre primitivo que coordinarlos», porque los rasgos más
agónicos de la historia de la música se Por todas partes surgen ideas si se
produce naturalmente sólo una confu-
han originado por el irreprimible pero quiere discutibles pero que invitan a la
sa indeterminación hasta el civilizado:
dificultoso crecimiento de la melodía. reflexión: el grado es el símbolo de la
«Sabemos hoy que el modo mayor
De gran calado es la noción de un pro- teoría armónica y la armonía por tanto
está designado y prescrito por la natu-
ceso histórico musical como progresivo una abstracción que conduce a la más
raleza y sin embargo ha costado heca-
«ensanchamiento del contenido», o sea, secreta psicología de la música, la melo-
tombes de artistas, todo un mundo de
aumento de información y disminución día es el factor principal en la música
generaciones y experimentos artísti-
de la entropía obtenible gracias a la aun después de la inclusión del sentido
cos hasta que hemos acertado exacta-
composición libre. Dado que el creci- vertical, en la música el tiempo no tiene
mente con el designio de la naturaleza
miento de la melodía obliga a una conti- poder para invertir el sentido de un
y hemos llegado a un acuerdo con
nua reestructuración del esquema fenómeno... Serla interminable dejar
ella». En la pág. 357 se habla casi
armónico está claro que a todo aumen- constancia aquí de todas las sutilezas
antropomorfamente de «la venganza
to real del contenido -información- analíticas de este libro de lectura esti-
de la naturaleza que favorece al siste-
corresponderá un cambio de estructura mulante, gracias además a que ha sido
ma mayor».
del sistema. vertido en una prosa precisa y directa
en la que la claridad no supone merma
En suma no hay que buscar en este de rigor.
Tratado la gran construcción lógica rigu- Y no sólo son de interés estas gran-
rosa. Por ello es conveniente prescindir des líneas conceptuales sino también los
de todo el montaje ideológico si se agudos análisis que proliferan sobre Domingo del Campo

OTOÑO 1991
DIRECTOR:

JEAN PIERRE DUPUY


R T O D P R E S E N T A C I Ó N
2(1 lif N<»viL-mbiL\ 22.3O horu-,. Musk--MaU Kinllo.

PROGRAMA
Serenata per un satélite (Bruno Madema)
Con opuesta propiedad (Enrique Sanz)
Kreuzspiel (Karlheinz Stockhausen)
Folk Songs (Luciano Berio)
Lola Casariego, mezzosoprano
1
VIIIL-MLÍ;». I ' de OÍLÍL-mhiv . 22.M) hor;i-.. MLISIL--HÍI11 I le I KiilLlo

PROGRAMA
Derive (Pierre Boulez)
Kammersymphonie op. 9 (Amold Schonberg)
(versión A. Webern)
Dibujos (Luis de Pablo)
Poliédrica (J. Antonio Orts)
DORU STEFAN POP, violfn - ALEXANDRU MIHON. violín - TRIAN lONESEU.yiola
RESVEN NASULAI, violoncello - JOSÉ CERVERÓ, clarinele - VICENTE LLIMERÁ, oboe
MIREYA ROYO, flauta - MARGARITA STRYJA. arpa • BERTOMEU JAUME. piano
JOAN CERVERÓ. percusión • JESÚS SALVADOR, percusión - ANTONIO SÁNCHEZ, percusiún.

SCHERZO 105
LA GUIA

PARÍS LAS PALMAS 2 Í . JO: Michael Schon- Groba. Nepomuceno, Alls,


OPERAS wandt. Sibelim Mozart
Opara de l i Butllli Bbrmónki - Orquesta Nacionai de
de Gran Canvia Rusia. Ivo Pogorelich. piano.
L'ANGE DE FEU (Proko- Ciclo de Clmara Chaikovski, Beethoven.
BARCELONA íiev) Foster. Serban. Rouillon, í Adnan Leaper. Mozart, R. y Polifonía
Frara. Jaeggi, González. Busse. Strauss, Shostakovicn.
6,9, I I , 14. 16, 19,22.25. 8; Adran Leaper. Gmarosa. é: Arsis Camera. Seré a, AMSTERDAM
Gran Teatro d*< Uceo
BacWVivaldi, Boieldieu, Stra- Beethoven. Brahms.
IDOMENEO (Moiart)
VIENA vinsl*. 7: Brigitte Fassbaender, Royal
15: Viktor Liberman: mezío, Helmut Deutsch. Concerugcbouw
Mund. Sagi. Wmbergh. Ment-
zer. Vilar. Donati. 1 4, 7, 10, Stutsoper Mozart, Elgar. Chaikovski paño.
12: Itzhak Periman, Bruno 7, 9. 10: Valery Gergiev.
I I . 14. 2 1 ChnüopherAdey. Sibe-
PARSIFAL fWagner). Stein. Canino, piaña Gubaidulina. Shostakovich,
LE NOZZE DI FÍGARO Mus, Busoni.
Pnew. Brendel. R/dl. |erusa- 14: Orquesta y Coro de la Protajfei'.
(Mozart). Smith. Sellare West. J9: Christopher Adey.
Omrnerlé. FeJty, Torgove, lem, 1.1. Comunidad de Madnd. Miguel 13. 14. 16. 22. 23. 14:
Vaughan Williams, R. St^uss.
Kuiman. Sylvan. 2J. Í S , 17. COSÍ FAN TUTTE Groba- Bartók, Stravinski, J.L. Wolígang Sawallisch. Beetho-
Radimaninov.
19. (Moiart). Weil. Bohman. Tunna. ven.
Liarg. Schannger, Kundlak. 4. 27, 2B: Frans Brüggen.
19: Orquesta de Cámara
9. IS. Nedtfriands Kamerfcoor.
BILBAO DON GIOVANNI
MADRID Rema Sofía. David Pany. Fer-
nández Alvez, Cano. Mozart.
(Mozart) Runmcles. )olians-
T H T T O Arriagi Festival de OtoAo 21: Trio Mompou. Pedrell,
sor. Gustafion, Furlanetto.
Sandve. 10, 13. E. HaWfter, Debussy. CasaWan-
2: Coro y Orquesta de la cas. Granados.
LONDRES
UN BALLO IN MASCHE- DER FLIEGENDE
RA (Verdi) Allemand. Jun. La Comunidad de Madnd. Miguel 26." Barbara Hendricks.
HOLLANDER {Wagner). Kto- The South
Scola, Sweet Tumagian, Cos- Graba. Gludt Haydn. Alls. soprano: Bruno Canino, piano.
bucar. Hauboíd. Ryhanen, Sch- Bank Centre
sotto. Pons. 2. mitdHale. 11.21. 3: Maratón de piano. 28: Orquesta de Cámara
KATYA KAVANOVA 4 y 6: Nusrath Fateh Ali Española. Víctor Martín. Vival- I: Orchestre de la Suisse
Qanacek) Schin^ier. Rysanek. Khan dt
AMSTERDAM Romande. Armm Jordán.
Gustafson, Algleri. Pabst. 24, S, B, 9: Gdo Cage. Debussy, Prokofiev, Roussel.
27. 7; Talter de Música Munda- 4. 7: The London Philhar-
Nederlindie Opara na. Opera de papel. Gclode Afgano
monit. Klaus Tennstedt Mah-
FO:Zaj. ler. Se>rto
FIDELIO (Beethoven) Scha- 12: Cades Santos, piano. S: Kei Korto. Bach, C Halff-
af. Poort. Smit Moser. Bars- ter Takahashi. Scela, Gubaidu- S: Royal Philharmonic Vla-
13: Gabin Br/ars Ensemble.
tow- 7. 9. 12. 14. 17. 10,22, dimir Ashkezany. Glinka,
l4:HilliardEn!enible. ParL Gneg, Rachmaninov.
1S. 28. - Ensemble fijr neue Musik:
CONCIERTOS S: London Philharmonic.
United Berlín. Marco, Stahmer,
Barce. Wenzd. Henie. Orqucra de RTVE Br/den Thomson. Haendd,
BERLÍN
Waton, Strauss, Ravel.
\S: Fátima Miranda. Las
voceí de oro. I: Sergiu Comissiona. Coro 10: BBC Symphony. David
Deuoehe Oper RTVE. Sorodm. Lecrec. Ber- Atherton. Elgar. Bntten.
BARCELONA - La Folfa. Pedro Bonet.
VwakJi. laz. I h Vehudí Menuhm. Elgar,
DER RING DES NIBELUN- Ddius, Bmch, Beethoven.
16: Sinfónica de Madnd. 14. IS: Jorge Mester.
GEN (Wagner). Kout. Fne-
José Ramón Encinar. Del Adams, Moíart, Prokofiev. 12: The Philharmonia.
dnch. Armstrong, Evans, Sch-
wari. Wyatt Goldberg, Hau- 13: Itídak Perimar. violln: Campo, Madler, Aracil, Chai- Neeme Jarvi. Shostakovich.
gland, lerusalem, Kollo. Riegel. Bruno Canino, piano Tartrni. Shumann, Rachmaninov,
Salminen. Wlaschiha. 13, 17, BeeThoven, Chausson, RavcE - English Baroqje Soloists. VALENCIA 16: Royal Stockholm Phil-
10.24. 24: Sinfónica de Moscú. |ohn Eliot Gardioer. |ones. Lee harmonic. Gennadi Rozhdest-
Pavd Kogan. Chaikovski. SKo$- Rjgin. Chance, Brown, Miles, Paliu ót h Múiíct vensky. Igor Oístrakh, violln.
takovich. Haendd. *gnpp/no. ündholm, Shostakovich, Sibe-
BRUSÍLAS 2fl: The King's Smgers. - Cuatro minimalismos: I: Orquesta de Valencia. hus.
Populares catalanas, Ward, Polonio, Llopis, Orquesta Michael Stem. Silvia Marcovict, 17: Royal Philharmonic.
UMonedl Wylt»e. Ravenscrcft. Dra)ton, Nubes. Fernández. violln, SibeJius, Shostakovich Mi che! Plasson. Royal Choral
Saint-Saens. 17: Concierto de camparas 4: Orquesta de Cámara Societx- Berlioz. Réquiem.
LA FAVORÍTA (Donaetb) de Uorenc Bartwr Rema Sofía. Víctor Martin. 19: Concentus Musicus
Masmi. Hvorostovsky, Baltsa, Maremúslci 22: Zarabanda. Alvaro Ma- Mozart Wien. Nikolaus Hamoncourt
Kaaích. Pesien. 17, 21, 24. rtas. Vivaldi y el barroco vene- 6: The English Concert. Mozart Ha/dn.
ciano.
U. 7: Orquesta y Coro Philhar- Trevor Pinnock Bach. Vivaldi 26: London Philharmonic,
monia. CaHo Mana Giulmi. Tetemann. Kurt Masur. Viktona Mullova,
Vendí. Reifuiem. B: Orquesta de Valencia. violln. Sibelius, Shoslakovich
DRESDE M: Smfúnica de Euskadi. twrmúiica Antoni Ros Marbá. Beethoven,
Do rom Salomón. Amaga. Strauis.
Slehsiichc Stxaoopcr Smetana, Chaikovski. B. 9: Philharmonia Orches- 9: Orquesta y Coro de la MUNICH
17: Staatskapelle Dresden. tra and Chorus. CaHo Mana Opera Nacional de Sofia. Mik-
LULU (Berg) Laver. Bemdt Colín Davis. Moiart Giulini. Sansudi. Malakova, hail Angelov. Mozart. Rlirmónlai d t Munich
3,4,13,16. 25: City of Lonoon Sinfonía. Colé, Colombara. Verdi. 10: Mischa Maislty. chelo:
Richard HickOí. Orfeo Cátala. Réquiem. Martha Argench. piano. Beet- i: Coro Filarmónico
Mtnart 16: 5taatsltapelle Dnesden. hoven. Munich. Chnstian Mandeal.
LONDRES Cdin Davis. Mozart 17: Orquesta Sinfónica de Mathis, Soffel, Baldm, Schbne.
Orquena Cludid 3Ck City of London Sinfonía. Euskadi Doron Solomon. Mendelssolin, Eiras.
Convent Garden de Barcdona Orfeú Catali. Richard Hidton. Amaga, Smetana, Chaikovski. 13, 14. 15. Ifi, 17: Dmrtn
Olli Mustonen, piano. Mozart. 22, 24: Orquesta de Valen- Krtaenko. MWiail RiKiy. Radv
LES HUGUENOTS (Me- 8, 9, 10: Luis Antonio Gar- cia. Manuel Galduf. White. mannov, Prokofiev.
yerBeer). Atherton. D e * . tía Navarro. Mozart Robmson. Bradley. Gerhswm. 26, 27, 19, 30: Sergiu Celi-
Leech, Deenmg, Thane. Lar- 15, 16, 17: Luis Antonio Orquena Nacional PtwH/ and Bess. bidadie. Brudcner. Sexto.
more. 2, 5, B. I I , 15, IS. García Navarro. Narciso 23: Kata Ricciarelli. sopra-
SIMÓN BOCCANEGRA Yepcs, gurtarra. J. Soler. Rodn- I. Z 3: Aldo Ceccaio. Alva- no; Vicenro Sea lera, piano.
(Verdi) Soto. Moshinsky. Opie, go, Cnaikovski. ro Quintanilla, violonchelo. Stradella. Vivaldi, Verdi. Gou- PARÍS
Reesley. Agache, Kanaiva. 16, Haydn, Brudcner. nod. Mozart. Tosti, Pucctni.
23, 24: Matthias Aeschba-
19. Í 2 . 27.30. Qlea, Catalani.
cher. Silvia Concelli, fagot. S, 9, 10: Aldo Ceccato. Orquesta de París
Moiart. SibeBus. tizar Berman, piano. Bengue- 26: City of London Sinfbnia.
EngRsh National Opera rel. Ljszt Respighi. Ravel. Olli Mustonen. piano. Richard 27, 28: Lawrence Foster.
Euroconcert 15, 16, 17: Víctor Pablo HickoK. Mozart Yefim Bronfman, piano.
THE MIKADO (Sullivan). Penal. Falla-Beno/Martm. Mah- 29: Orquesta de Valencia. Franck. Beethoven, Enesco.
Holtnes, Mrller. Stuart. Collins. 2B: Wiener Akademie. Mar- ler. Manuel Galduí Rodngo. 29: Lawrence Foster. Uto
Joshua. van Aliar, Angas. 6, B, tin Haselbock. Bach, Coooertos 2 1 23. 24: Odón Alonso. 30: Orquesta de la Comu- üghi, violln. Beethoven, Enes-
13, lfi.II. de firnndenbuap. Coro Naoonal. Rodngo. nidad de Madrid. Miguel co,

Í06SCHERZO
DOSIER

Antonio
K)lü ACKE.RMANNS KUN5TVERLAG
Vivaldi

D
os siglos y medio después de su muerte, Antonio Vivaldi es uno
de los compositores barrocos favontos del gran público, luego
de haber sufrido un olvido secular, del que sólo ha salido
ya en nuestra época.
Y. sin embargo, esta fama no se corresponde con un conocimiento
en profundidad de sus obras y su aportación. Se ve a Vivaldi como a un músico
de facilidad enorme, pero que tiende a repetirse un tanto a sí mismo. Esta opinión
errónea nace de apartar toda una zona desconocida de su obra, la operística,
que casi nunca sube a escena, y de echar una capa de uniformidad sobre
sus conciertos, donde, junto a la pnmacía indudable del violín, actúa
una variedad instrumental muy rica. Este Dosier pretende acercarse
a estos aspectos vivaldianos en el marco de la cultura veneciana del tiempo
del compositor.

SCHERZO 107
DOSIER

Venecia en la época de Vivaldi


^^^k esposomus te, mare, rn signum ven et perpetul pío- más volcados hacia la industria. No era, sin embargo, una
j t M B dominli» (Te desposamos, oh mar, en señal de situación que pudiera compararse a la del siglo XV; ni tampo-
MÍ M M verdadero y perpetuo dominio). Eran las pala- co a la de otros estados europeos, que experimentaron en
11 • m bras que cada año, conmemorando una vieja esta época un crecimiento considerablemente mayor. Pero la
* 1 ^^^F gesta de sus antepasados, pronunciaba el decadencia veneciana distaba mucho de poder asimilarse a la
Dogo veneciano en la ceremonia del Sposahzio del mare mien- pobreza.
tras arro|aba al mar un anillo de oro. Ahora bien, a finales del El papel internacional de Venecia también se había debilita-
siglo XVII y principios del XVIII (los años en que vive Vivaldi), do. Fue precisamente a finales del XVII y principios del XVIII
la época en que, efectivamente, las naves de la República de cuando vivió sus últimos lances internacionales, con resultado
Venecia -una República surgida a partir de la ciudad de la no siempre positivo. A pesar de sus deseos de evitar enfren-
laguna, autodenominada la Dominante y con 140.000 habitan- tamientos con los turcos, se vio envuelta en tres guerras con-
tes aproximadamente en esta época, e integrada, junto con tra ellos. En I 645 la Sublime Puerta iniciaba el ataque a Creta.
ella, por el Véneto o Tierra Firme (con algo más de dos millo- luego extendido a todas las posesiones orientales. La guerra
nes de habitantes) y las posesiones orientales (básicamente, fue larga y, aunque los venecianos demostraron poseer toda-
Istna. Dalmacia y determinados puntos en el Egeo)- fueron vía una marina potente e infligieron algunas severas derrotas
dueñas y señoras del mar. estaba ya muy lejana. Venecia, por a los turcos, finalmente hubieron de claudicar. En 1669, tras
supuesto, seguía vinculada al mar, pero ni sus naves eran ya una langa y heroica resistencia de su guarnición, se producía la
sus dominadoras indiscutidas ni la República tenía el peso de rendición -una rendición honrosa- de la fortaleza de Candía
antaño en el contexto internacional. y dos años más tarde, en el correspondiente tratado de paz,
la Serenísima debió aceptar la dolorosa y económicamente
Suele, pues, hablarse de decadencia al referirse a la Venecia muy nociva pérdida de Creta, aun conservando algunas bases
de esta época, Y decadencia hubo si adoptamos como punto en la isla y otros territorios ganados en Dalmaaa. Pasó poco
de referencia la Baja Edad Media. A partir de entonces, los tiempo antes de que Venecia, en 1683, y con el fin principal
grandes descubrimientos geográficos situaron en el Atlántico de recuperar Candía, se embarcara en una coalición contra
el centro de gravedad económico, quedando el Mediterráneo los turcos, con el emperador como socio principal -¿habrá
en una posición excéntrica; las largas luchas mantenidas por que recordar que en el transcurso de esta guerra, 1687, un
la Serenísima contra los turcos también de|aron sentir sus cañonazo veneciano hizo saltar por los aires el Partenón ate-
efectos negativos; y, sobre todo, ya a finales del XVI y princi- niense, utilizado como polvorín por los turcos?-. Cuando en
pios del XVII, nuevos y más competitivos rivales -ingleses y I 699 se firmaba la paz de Kariowitz, Venecia no conseguía la
holandeses- llegaron por la ruta oceánica, bordeando África, recuperación de Candía, pero sí la península de Morea, con-
a las fuentes orientales de las especias e hicieron su aparición quistada durante la guerra. Aunque no duró mucho en su
en las aguas mediterráneas, asestando un fuerte golpe a la poder. En 1714 los turcos emprendieron su reconquista y
actividad comercial veneciana. Igualmente, la industria textil Venecia hubo de lanzarse nuevamente a la guerra contra la
de la ciudad, que había conocido un notable desarrollo Sublime Puerta, en la que pronto contó con refuerzos inter-
durante el siglo XVI, se hundió a lo largo del siglo siguiente nacionales, el emperador entre ellos. El oratorio juditba
ante la competencia de los nuevos y más baratos paños del Triumpbans de Vivaldi, representado en 1716, no es sino una
Noroeste europeo y su propia incapacidad para introducir alegoría de esta guerra y la deseada victoria veneciana. Pero
modificaciones en su organización productiva. Subsistieron, aunque las armas fueron favorables a la coalición cristiana y la
además de la construcción naval en el Arsenal (que, lógica- paz de Passarowitz (1718) supuso un retroceso territorial
mente, sufrió los vaivenes de la actividad mercantil), determi- turco, Venecia hubo de aceptar la pérdida de Morea. La
nadas industrias de lujo, algunas de fama internacional, como República ya no podía imponer sus pretensiones en el campo
cristalerías (en la isla de Murano). muebles preciosos, trabajos internacional, debiendo someterse a los intereses de las gran-
de arte.,. Pero los capitales -efecto, y pronto también causa des potencias.
del declive de las actividades tradicionales- se fueron orien-
tando a las especulaciones cambiarías y, sobre todo, a inver-
siones en Tierra Firme, donde se constituyeron importantes Ya no volverá a involucrarse en ningún otro conflicto y
explotaciones agrarias y se intensificaron las actividades adoptará una postura de neutralidad, Pero una neutralidad
manufactureras. defensiva -si se quiere, una marginación- impulsada, sobre
todo, por la conciencia de la propia debilidad y el deseo de no
Y precisamente la Tierra Firme, por sus necesidades de importunar a las grandes potencias y, especialmente, a Austria
abastecimiento y de exportación de sus productos agrarios y que, tras el final de la Guerra de Sucesión Española, estaba
manufacturados, estará en el origen del relanzamiento de la demasiado próxima territorial mente. Y las potencias, por su
actividad portuaria. Por otra parte, e¡ reducido comercio que parte, no tendrán inconveniente alguno en vulnerar la neutrali-
se seguía manteniendo con Levante se intensificará a partir de dad veneciana cuando lo crean necesano, conscientes de que
1718, con la firma del tratado de paz con los turcos. Y las no habría respuesta por parte de una República que. incluso,
reformas aduaneras y organizativas de 1736 reactivarán nota- terminará perdiendo el control del Adriático, su señorío más
blemente el tráfico portuano y la construcción naval (en las preciado, al no poder evitar el crecimiento de otros puertos
últimas décadas del XVIII llegó a haber en el Arsenal cerca de -el imperial Trieste y el pontificio Ancona- declarados puer-
2.000 obreros). Aunque ya no será, como lo había sido en el tos francos por sus soberanos precisamente para minar el
pasado, la nobleza la protagonista de este comercio. Los capi- comercio veneciano.
tales nobiliarios siguen vinculados a la tierra y las finanzas, Recluidos a la fuerza en sí mismos, los venecianos -al
salvo en algunos casos concretos- la familia Tron. por ejem- menos, la minoría patricia y rica- todavía gustaban de auto-
JÜSSCHERZO
ANTONIO VIVALDI

había reducido por los efectos de la peste


de 1630 y por la desafortunada política
matrimonial y familiar practicada después.
Y los ingresos en el estamento -por alian-
zas matrimoniales o mediante el pago de
una elevadísima suma- no fueron muy
numerosos. En la época que nos ocupa el
número de patncios de la Dominante, los
únicos con derechos políticos, era inferior
a 1500. Pero sólo los nobles que disponí-
an de una cuantiosa fortuna (muy pocos)
estaban destinados a ocupar los cargos
más destacados. El resto, muchos de los
cuales se hablan empobrecido como con-
secuencia de los cambios económicos
ocurridos durante el siglo XVII (los llama-
dos bamabotti. porque residían en la
parroquia de San Bernabé), no podían
aspirar sino a paitar su pobreza tratando
de conseguir algún cargo menor, ejercien-
do las más variopintas, pintorescas y no
siempre dignas ocupaciones, o, sobre
todo, vendiendo su voto en el Gran Con-
sejo a las grandes familias, cuyo poder, de
esta forma, salía tremendamente reforza-
do. Y mientras en Europa, durante el siglo
XVIII, se ensayaban ciertas reformas, nin-
guna se aplicó en Venecia y se persiguió a
quienes, con más o menos audacia, se
atrevieron a proponerlas: en un sistema
que se habla ido fosilizando cualquier
cambio podría terminar desencadenando
su ruina.

Pero las instituciones todavía conserva-


ban cierta eficacia, se llevaron a cabo
grandes obras públicas, como la construc-
ción en los años cuarenta de los murazzi.
grandes muros para proteger a la ciudad
de las mareas, y, sobre todo, se conseguía
mantener más o menos en calma -aun-
que sin faltar momentos de fuerte ten-
sión, algunos relacionados con la persecu-
ción de los reformistas- a una población
Ef río de ios mendicantes Oleo de Canaleta, 1723 (Deuille)
que, al margen de la nobleza y la burgue-
sía -los attadini: burócratas, abogados,
secretarios, nótanos, mercaderes, patrones artesanos...- estaba
complacerse -aunque su entusiasmo fue decayendo a lo largo
constituida en su inmensa mayoría -del 90 al 95 por ciento-
de! tiempo- en el entramado institucional de la República, al
por los popohni, una abigarrada masa de obreros, tenderos,
que veían como artífice y garante del buen gobierno. Un apara-
multitud de pequeños oficios urbanos, servidumbre, gondole-
to, sin embargo, que se habla mantenido casi inmutable desde
ros... y un elevado número de desocupados y mendigos cuyo
bastante tiempo atrás y que a estas alturas se encontraba un
nivel de vida, además, fue descendiendo a lo largo del siglo.
tanto anquilosado. La base estaba constituida por el Gran
Calma social que habría que explicar por diversos factores,
Consejo, sin funciones ejecutivas, al que pertenecían todos los
destacando entre ellos, cómo no. una eficiente y continua
nobles (patricios) de la ciudad y del que emanaban, directa o
labor de represión; pero también habria que añadir, por ejem-
indirectamente, una sene de organismos, entre los que desta-
plo, las fuertes divisiones y tensiones existentes tradicional-
caban el Consejo de los Diez (de hecho, integrado por 17
mente entre los popolam, la hábil y continua apelación al amor
personas, por pertenecer a él el Dogo y sus consejeros), el
a la patria -teñido con frecuencia de xenofobia y recordando
Pequeño Consejo (los seis consejeros del Dogo), el de los
continuamente al enemigo turco-... y el recurso a la fiesta,
Seis Sabios grandes -eran éstos los tres Consejos que toma-
poderoso factor de integración social durante el Antiguo Régi-
ban las decisiones políticas más importantes- y los tres Inquisi-
men.
dores, elegidos de entre los Diez para velar por las costum-
bres y reprimir la subversión, Al frente de todo el aparato y
como máxima magistratura -aunque con un poder en la prác- Y en la vida de Venena la fiesta tenía un papel esencial. La
tica muy limitado por los citados Consejos se encontraba el más importante era la Feria de la Ascensión -la Sensa-,
Dogo, elegido mediante un complicadísimo procedimiento durante la cual tenía lugar la ceremonia del Sposalizio del
por el Gran Consejo. more, en la que, en una Venecia engalanada como sólo allí
podía hacerse, el Dogo, a bordo del Bucentauro y al frente
Era un sistema fuertemente oligarquizado. La nobleza vene- de una magnifica procesión en la que participaban todos los
ciana, única con derecho a formar parte del Gran Consejo, se altos magistrados, embajadores, cuerpos militares, patricios,

SCHERZO 109
DOSIER

corporaciones artesanas y pueblo en general se dirigía al daba rienda suelta -o mejor, se continuaba dando rienda suel-
Lido para lanzar el anillo al mar y pronunciar la fórmula con ta- a la pasión por el juego.
la que abríamos estas páginas -que, por supuesto, provoca- Porque el juego ocupaba un lugar muy destacado entre las
ba ironías a más de un ilustrado europeo y aun veneciano-, aficiones de los venecianos. En el pasado se había jugado un
tras lo cual tenía lugar en San Nicolás del Lido una brillante poco por todas partes, pero sobre todo en los idotti, locales
ceremonia religiosa. La feria se prolongaba a lo largo de que muchas personas -entre ellas, casi todas las de buen
quince días y durante ellos se comerciaba en los más diver- tono- poseían en tomo a la plaza de San Marcos y que eran
sos productos en la multitud de tenderetes instalados en la utilizados para todo tipo de actividades -saraos, reuniones,
plaza de San Marcos, pero también había diversión perma- públicas y clandestinas, honestas y no tanto-. La Serenísima
nente; bailes, representaciones al aire libre, tómeos, títeres, decidió evitar los múltiples inconvenientes que se denvan de
regatas, torres de Hércules, peleas de toros y perros (en la proliferación incontrolada de lugares de juego y en 1638
1739 llegaron a soltarse al mismo tiempo 130 toros y 200 propició la apertura de un Ridotto oficial, en el palacio de San
perros en las plazas de Venecia), fuegos artificiales.., Eran las Moisés, único lugar donde en lo sucesivo (y hasta 1774 en
diversiones que se reproducían casi a diario durante el car- que se suprimiría, volviendo a florecer ndottí y casini privados y
naval, un carnaval que se fue prolongando paulatinamente clandestinos), podria practicarse el juego, en bancas cuyos titu-
hasta durar prácticamente cinco meses, -desde octubre a lares sólo podrían ser patricios y con una participación del
Navidad; desde Epifanía a Cuaresma- durante los cuales estado en los beneficios de ello derivados. El estado que había
prácticamente todos los venecianos, desde el más alto al sido pionero en el establecimiento del impuesto sobre la
más bajo, ocultos tras sus máscaras, vivían alegre y libremen- renta se convertía también en uno de los primeros en obte-
te y se mezclaban en lo que para muchos era un espejismo ner beneficios fiscales del juego. Y a principios del siglo XVIII
de igualdad, Hay que añadir las sagre, tiestas patronales de pondría en práctica un nuevo juego de azar, llamado a tener
las distintas parroquias -que sobrepasaban las setenta- las gran porvenir en toda Europa: la lotio o lotería nacional.
elecciones o nombramientos de la mayor parte de los
magistrados, las conmemoraciones de acontecimientos his- ¿Es necesario referinos a las costumbres licenciosas de los
tóricos -cuando patriotismo y fiesta se unían íntimamente-, venecianos, a las numerosas cortesanas y sus refinamientos en
las múltiples celebraciones religiosas, transformadas en mag- el amor, a la moralidad de los clérigos, a la vida relajada en los
níficos y esplendorosos conventos de religiosas? Son cuestiones difundidas por los via-
espectáculos... y las fiestas
extraordinarias, como ta
celebración del centenario
de la última epidemia de
peste (la de 1630) que se
abatió sobre la ciudad -no
en vano, en un importante
logro de sus magistrados,
fue la primera ciudad
europea en erradicar la
peste, a base de aplicar
severísimas medidas pre-
ventivas- o la llegada de
algún príncipe extranjero,
cuando se desplegaba
toda la pompa y lujo de
que Venecia era capaz.

Era, sin lugar a dudas, la


ciudad europea con mayor
número de fiestas o, lo que
es lo mismo, con menos
días laborables: un viejo
dicho afirmaba que en
Venecia se trabajaba sólo
cuando lo permitían las
fiestas. Y sus capas sociales
más elevadas, cuya vida
cotidiana transcurría en el del Embajador Imperio! en el Palacio Ducal Oleo de Conaktto,
fasto y la opulencia, aún
prolongaban el ambiente festivo con sus estancias anuales en jeros de la época y que desde entonces han constituido un
el campo entre mediados de junio y principios de noviembre aspecto central de la imagen de la Venecia del pasado. Proba-
(frecuentemente, con un periodo intermedio de regreso a la blemente haya bastante de exageración en ello. Pero, no lo
ciudad). Era ésta una costumbre que había estado en buena olvidemos, todo tópico se apoya en una base real. Y tan cier-
medida vinculada a la necesidad de supervisar las tareas de to es. por ejemplo, que determinadas madres sin recursos
recolección y vendimia cuando a finales del siglo XVI empeza- económicos vendían la virginidad de sus hijas -habría que
ron a formarse las grandes propiedades agrarias en el interior. saber, no obstante hasta qué punto se trataba de casos aisla-
Pero ahora era nada más un hábito social sólidamente esta- dos o bien era una práctica más o menos generalizada- como
blecido -Goldoni lo satirizará en su Trilogía del veraneo- del sería imposible pedir un comportamiento ejemplar a los
que participaba también la burguesía y durante el cual las nor- numerosos clérigos - I por cada 54 habitantes en 1766- que
mas, usos y costumbres eran más libres que de ordmano y se habla en una ciudad que no se distinguía precisamente por su

7/OSCHERZO
ANTONIO VÍVALDÍ

la demanda de institucio-
nes, clero, nobleza y de los
visitantes de calidad que
continuamente afluían a
ella, florecerá una escuela
de pintura que será, sin
lugar a dudas, la más im-
portante de Italia en este
período. Basta con citar,
entre los contemporáneos
casi rigurosos de Vivaldi, a
Sebastiano Ricci (1659-
1734), aunque pasara
buena parte de su vida
fuera de Venecia, al tam-
bién viajero y difusor de la
fama de la pintura venecia-
na Giovanni Antonio Pelle-
grim (1675-1741) o a Gio-
vanni Battista Piazzetta
(1682-1754). cuyas obras
de signo religioso y costum-
brista se reparten p o r
diversos centros venecia-
nos. Y entre los ligeramen-
te posteriores, al gran
Giambattista Tiepolo
(1696-1770), que trabajó
Bucentaum ert el muelle el día de la Ascensión. Oleo de Conatetto. 1729-34 en iglesias y palacios de

religiosidad -el culto magnífico y esplendoroso es algo bien Venecia y otras ciudades del Norte de Italia y Alemania para
distinto- y en la que acceder al estado eclesiástico, -como, terminar sus días en Madrid, tras participar en la decoración
por otra parte, en casi toda Europa- era más bien un medio del Palacio Real; al delicioso costumbrista Pietro Longhi (1702-
de ascenso social. ¿No tenemos un ejemplo en el propio 85) o a los paisajistas -la veáMa. la vista, fue un género muy
Vivaldt, que prácticamente no dijo misa nunca aduciendo a en boga y podríamos decir que turístico: eran los cuadros pre-
una excusa baladi y al que se le acusó de excesiva familiaridad feridos como recuerdo por los visitantes forasteros- Antonio
con alguna cantante? Canal, Canaletto (1697-1768), que optaría finalmente por
La vida intelectual, sin embargo, no era excesivamente bri- establecerse en Inglaterra, o Francesco Guardi (1712-93),
llante. No habla ningún centro de estudios superiores en también cultivador del cuadro de costumbres.
Venecia y la única universidad de su terrítono, la de Padua. El teatro era, sin lugar a dudas, uno de los espectáculos más
sumida en la rutina tradicionalista, no estaba en sus mejores populares entre los venecianos de todas las clases sociales.
momentos, y sólo parecía eficaz en la concesión de títulos a Seis locales propiedad de destacadas familias patncias -San
los abogados que tanta actividad desplegarían en la vida coti- Cassian, San Moisé, San Giovanm Crísostomo, San Salvador,
diana veneciana. Pese a todo habrá en Venecia cierto interés Sant'Angelo, San Samuele; en 1699 se habla cerrado el de San
por la arqueología y los estudios medievales, en los que se Giovanni e San Paolo, y a finales de 1755 se inaugurará el de
detecta un prurito de erudición y de búsqueda en los archi- San Benedetto, precursor del actual de La Fenice- con una
vos; desde principios del Setecientos se reactivará la industria actividad regular en las distintas épocas del año en que se divi-
editorial y la prensa periódica conocerá un desarrollo nada día la temporada (a los que hay que añadir los teatrillos oca-
desdeñable: entre los que destaca, de los aparecidos en vida sionales que podían montarse con los más diversos motivos)
de Vivaldi. el Giomafe de Letterati d'kalia, fundado en 1709 por dan buena fe de ello. Y se iba al teatro con la plena conscien-
Apostólo Zeno y otros eruditos. cia de que todo y todos formaban parte del espectáculo y allí,
mientras en la escena se daba vida a historias fingidas, otras
Pero la nobleza veneciana estaba muy lejos de la que a fina-
mucho más reales, y a veces más complicadas que las repre-
les del siglo XVI y principios del XVII se había apasionado por
sentadas, se iban entretejiendo y desarrollando.
los logros de la revolución científica. Aunque en algunas de
sus bibliotecas aparezcan libros de los autores europeos más Hablar de la comedia veneciana en el siglo XVIII es. necesa-
importantes y avanzados de la época, su vida intelectual se riamente, hablar de Cario Goldoni (1707-83), su gran refor-
moverá más bien en la superficialidad de sus reuniones en clu- mador, capaz de escribir una comedia enraizada con la socie-
bes, ndotti, salones, cafés -que proliferaron como en las más dad y ejerciendo la sátira sobre personajes y situaciones reales
importantes ciudades europeas- y unas academias casi festi- y con el afán moralizador común a la comedia europea de la
vas, que. sin embargo, más adelante y por decisión del poder, época. Ahora bien, la reforma de Goldoni -que, por cierto,
se transformarían en academias agrarias. colaboró con el cura rojo en 1735 reelaborando un libreto que
El panorama cambia cuando de los aspectos artísticos se A. Zeno había escrito a principios de siglo (Lo Gnse/do)- se
trata. En la sensual Venecia estaban llamadas a florecer, sobre llevará a cabo fundamentalmente después de la muerte de
todo, aquellas actividades destinadas a regalar los sentidos y a Vivaldi, Durante la vida de éste persistía todavía, fuertemente
cultivar el gusto de sus habitantes por el espectáculo, Y así, en arraigada, la vieja tradición de la commedia detl'arte, con sus
esa ciudad que continuaba construyéndose y embelleciéndose personajes arquetlpicos y pnmando la improvisación en los
-entre 1679 y 1739 se levantaron o remozaron cerca de actores.
noventa palacios, iglesias y edificios públicos-, estimulada por Pero la vida teatral veneciana estaba dominada, ante todo.

SCHERZO 111
DOSIER

por la ópera. ¿Acaso no fue en XVII y principios del XVIII. No


Venecia donde tuvo lugar por es raro que ejerciera una fuerte
primera vez, en 1637, una atracción sobre los europeos
representación de teatro canta- de entonces. Se dice que,
do en un local público? ¿Acaso durante los carnavales, no
no era Venecia la heredera del menos de 30.000 forasteros
gran Monteverdi? La música acudían a ella. Y los vastagos de
formaba parte de la vida de la élite social europea la incluí-
Venecia. ¡Habrá que recordar an indefectiblemente entre las
la tradición musical de la basíli- ciudades que debían recorrer
ca de San Marcos? ¿O es nece- en el Grand Tour sin el cual no
sario aludir a los orfelinatos, los se consideraba completa la for-
Ospedali, auténticos conserva- mación de ningún ¡oven distin-
torios, en los que se procuraba guido. Era la propia belleza de
a las muchachas allí internadas la dudad y sus formas de vida
una completísima formación sensuales y hedonistas lo que
musical y que se mantenían les atraía hacia ella. Después
con los conciertos dados por hubo historiadores que culpa-
ellas? La música estaba en los ron a Venecia de no haber
salones de la alta sociedad, y sabido mantener el poder que
tuvo entre la nobleza cultivado- alcanzó un día; de haber deja-
res destacados. Pero también do anquilosarse las instituciones
estaba enraizada en el pueblo que habían sido admiración de
más bajo. «Se canta en plazas, Europa; de no haberse consti-
calles y canales», escribirá Gol- tuido en el núcleo forjador de
doni refiriéndose a su ciudad la unidad de Italia, siendo el
natal. Y es testimonio corrobo- único estado importante que
rado por los de muchos viaje- durante mucho tiempo no
ros, que se admiran de cómo soportó dominación extran|era;
los gondoleros -entonces casi y se culpó, a sus hombres de
la hez de la sociedad- entonan haberse entregado al disfrute
magníficamente bellísimas can- irresponsable y decadente.,. No
ciones mientras avanzan por B Gran Canal entre eí Palacio Bembo y el Palooa Vendromín Cateigi Oleo seremos nosotros sus jueces,
de Canaletto, I 730 (detalle) Por el contrano -y envidiando,
los canales con sus góndolas

-y, por cierto, muchas de estas canciones alcanzarían populari- secreta o no tan secretamente, aquel su vivir sensual, alegre y
dad en Europa, al ser recopiladas y editadas a mediados de despreocupado- siempre admiraremos la belleza de la ciudad
siglo en Londres-: y eran éstos los hombres a quienes se per- que nos han dejado y su importante legado cultural. Destacan-
mitía entrar gratis en la ópera y que podían hacer fracasar con do, sobre todo, su música. La de Antonio Vivaldi, naturalmen-
sus gritos una representac<ón. La ópera, repetimos, era suma- te...
mente importante en Venecia, sobre todo durante el Cama-
val, núcleo de la temporada, cuando aparecían por la Domi- Manuel Martín Calón
nante las compañías más importantes y los más afamados
divos, cuyas intervenciones se seguían, por cierto, en un
ambiente ruidoso y con una enfervorizada pasión. Y para
muchos, propios y extraños, era precisamente la ópera la
principal atracción del carnaval veneciano. Brevísima
Tomasso Albinoni (1651-1750), los hermanos Marcello, nota bibliográfica
Alessandro (1684-1750) y Benedetto (1686-1739) -este últi-
mo autor, además, de i' Teatro alia moda (1720), sátira sobre Desgraciadamente, la bibliografía en castellano sobre Vene-
la forma de representar la ópera-, Antonio Lotti (1666-1740), cia suele estar bastante anticuada. Pueden, no obstante, servir
Francesco Gaspanni (1668-1727), Alessandro Scarlatti (1660- como pnmera aproximación las obras de A. Bailly: Historia de
1725), Cario Francesco Pollarolo (1653-1723). Niccolo Anto- Veneaa, Barcelona, 1963; Ch. Diehl; Uno república de patriaos:
nio Porpora (1686-1768), Nicolo Jommelli (1714-1774), Bai- Venecia, Madnd, 1961: F. Thinet: Historia de Veneaa, Barcelona,
dasare Galuppi (1706-1785), Johann Adolf Hasse (1699-1783) 1956.
forman parte -además de Vivaldi, el preie rosso. en cuyo
homenaje se escriben estas páginas-, de la larga lista de músi-
Destacamos entre las publicaciones más recientes:
cos (enumerarla completa sería casi imposible) que nacieron,
se educaron o residieron temporalmente en Venecia, la ciu- F. de Azúa: Veneaa de Casanova. Barcelona. 1990; G. Benzo-
dad a la que todo músico extranjero de viaje por Italia procu- ni: «Venezia al tempo di Vivaldi». en F. Degrada y M.T. Murara
raba acudir. Baste recordar, como únicos ejemplos de esto, la (eds.): Antonio Vivaldi, da Venezia all'Europa. Milán, 1978; J.
estancia de Haendel en 1710, durante la que estrenó, en car- Georgelin: Venise au siécle des lumtéres, París-La Haya, 1978; N
naval y en el teatro S. Giovanni Cnsostomo, su Agnppino, con Jonard: La wto a Venezia nel Settecento, Florencia, 1985; F.C.
libreto del cardenal veneciano Vicenzo Grimaní, obteniendo, Lañe: Ven/ce1 A rnarittme Republic, Baltimore. 1973 (de esta
por cierto, un gran éxito. O, ya fuera del período cronológico obra, unánimemente considerada como el mejor compendio
que nos ocupa, la del joven Mozart en 1771, durante su pn- de historia de Venecia. hay traducciones, al menos, al italiano -
mer viaje a Italia. Stona dr Venezia, Turin, 1978 . y francés Venise. Une Repubti-
qae manume, París, 1985-, pero no ai castellano).
A grandes rasgos, ésta era la Venecia de finales del siglo
112 5CHER7O
ANTONIO VIVALDI

Compositor de ópera
y empresario teatral
Durante una escancia en la Villa O t ó n en Vícenza competencia, la ciudad de Vícenza tiene a su disposición todo
el frenético mundo teatral de la cercana ciudad de los dogos:

A
comienzos de 1713, Vivaldi tiene 35 años. Trabaja los compositores más de moda, como F. Potlarollo, y también
en el Ospedale delta ñetd como maestro de violín y los cantantes y empresarios. Para esta primera ópera com-
de viola inglesa y el público de toda Europa lo puesta por Vivaldi, escribe el libreto el napolitano Domenico
admira como uno de los más brillantes violinistas- Lalli, un personaje e>ctravagante y fuera de lo común. Acusado
compositores de su tiempo. de malversación de fondos en un banco napolitano del que
En esta época, la trepidante vida musical de la laguna sigue era cajero, Sebastiano Biancardi había huido por toda Italia,
manteniendo un nivel excepcional; está dignamente dirigida abandonando a su familia de trece hijos, antes de refugiarse,
por algunos compositores locales: Antonio Biffi, Antonio Lotti hacia 1710, en Venecia, gracias a la protección que le había
y Cario Francesco Pollarolo. que proporcionan partituras pro- brindado el célebre patricio, escritor y libretista veneciano
fanas y sacras, instrumentales y vocales, tanto a la capilla musi- Apostólo Zeno. Se unió a la poderosa familia patricia de los
cal de los dogos, como a las múltiples iglesias y los cuatro ospe- Gnmaní, propietaria de dos de los más importantes teatros de
dali de la ciudad. Son estas mismas personalidades quienes la ciudad, el San Gtovanni Crisostomo y el San Samuele, de los
componen para los escenarios de los prestigiosos teatros de la que será nombrado empresario. Bajo el seudónimo de Dome-
ciudad de los dogos (San Giovanni Cnsostomo, San Cassiano, nico Lalli, Biancardi se convierte, en Venecia, en uno de los
San Angelo, San Moisé), teatros que concentran toda la aten- poetas más solicitados por empresarios teatrales y composito-
ción y el ocio del público veneciano y cuya gloria se entiende res, escribiendo numerosos libretos de ópera (al menos cinco
hasta los más alejados confines de la Europa del siglo XVIII. para Vivaldi) y reformando otros más antiguos, a fin de adap-
tarlos al gusto de la época y los cantantes.
En este mismo año de 1713, Francesco Gasparini, destaca-
do compositor surgido de los círculos musicales romanos, que Ottone m villa es una ópera corta, que utiliza un reducido
había sido contratado unos diez
años antes como maestro del coro
de la Pietá, abandona Venecia por
razones de salud y por un periodo
de t i e m p o indeterminado; esta
partida es un verdadero golpe de
suerte para Vivaldi, ya que le per-
m i t e asumir t e m p o r a l m e n t e la
composición de obras sagradas
destinadas a la Pietá y recuperar en
parte el puesto que ocupaba Gas-
parini en todos los dominios de la
vida musical de la ciudad.

Sin embargo, también en este


año de la partida de Gasparini,
Vivaldi solicita excepcionalmente
permiso a los magistrados deí
Ospedale della Pietá «para poder
salir de esta ciudad durante un_mes.
a fin de dedicarlo a sus actuaciones
de virtuoso». Los archivos venecia-
Represen loción de una ópera en el Palacio Real de Turín, 1722
nos permanecen mudos sobre la
razón de la ausencia del maestro; es lógico pensar que Vivaldi elenco de cinco cantantes. Inspirada (como la mayor parte de
fuera a la vecina ciudad de Vicenza, donde, el 17 de marzo, en los libretos de la época) en la historia antigua, la acción se
el Teatro delle Grazie, se representa su primera ópera: Ottorte desarrolla en la villa romana del emperador O t ó n . Lalli no
rn villa; esta obra volverá a ponerse en escena dos meses más intenta en ella exaltar valores patrióticos, militares, morales o
tarde, en el Teatro della Piazza, de la misma ciudad. Durante heroicos (como sucedía a menudo en la ópera seria venecia-
esta época del año, los teatros venecianos están cerrados (la na); el libreto está tejido sobre una trama de intrigas senti-
principal temporada veneciana de ópera era entonces el Carna- mentales y ligeras, muy apropiadas para distraer al público fer-
val, del 26 de diciembre al Martes de Carnaval, precedida por la viente y sediento de novedades de los teatros de ópera de
temporada llamada de otoño, que comenzaba en octubre, y al entonces. Como todas las óperas senas de esta época, Ottone
principio de la cual se representaban comedias, pasando des- está dividido en tres actos, precedidos de una sinfonía en tres
pués, en noviembre y diciembre, a la ópera sena. Hasta 1722 el movimientos a modo de obertura: la partitura consiste en un
Gobierno de los X no autonzará en Venecia la apertura de los encadenamiento de recitativos secos con bajo continuo (inte-
teatros de ópera en mayo, es decir, para la Feria de la Ascen- rrumpidos p o r algunos recitativos acompañados p o r la
sión). orquesta) y arias y duetos do copo, acompañados principal-
mente por las cuerdas (a las cuales se unen de vez en cuando
Por tanto, en la primavera de 1713, los teatros venecianos los oboes y las flautas); la ópera termina, como requiere la tra-
de ópera están sumidos en el sueño. De este modo, libre de

SCHERZO / 1 3
DOSIER

Asi, pues, Vivaldi emprende tarde, tras haber asentado sóli- pluma: L'Orlando furioso de G. A. Ristori, añadiendo a la parti-
damente su fama como compositor de música instrumental, tura de su colega anas procedentes del Ottone. El otoño
su carrera como compositor de ópera, en la encantadora villa siguiente, el compositor es nombrado empresario del San
palladiana. Durante 25 años, con una energía desbordante, Angelo, puesto que le va a permitir dar a este teatro su sello
Vivaldi proseguirá su carrera de hombre de teatro, paralela- personal, tanto en el plano creativo, como en el de la elección
mente a la de compositor de música sacra y pedagogo en la de libretos, repertorio y cantantes. En este mismo otoño de
Pietó. y a la publicación de numerosos conciertos difundidos 1714, Vivaldi compone, para el San Angelo, su primera ópera
por toda Europa. Si damos crédito a la afirmación que el pro- veneciana, Oriando fimo pazzo. El texto, de C. Dracioli, se ins-
pio Vivaldi expone en una carta del 2 de enero de 1739, diri- pira en la misma fuente que la ópera de Riston estrenada el
gida al Marqués de Bentivoglio, habría compuesto «94 ópe- año anterior; el célebre poema de Ariosto, que se convierte
ras», cifra que puede resultar excesiva. De todos modos, hay desde entonces en una mina inagotable de inspiración para los
que tener en cuenta, y en ello reside su gran originalidad, que poetas de la ópera sena.
Vivaldi intervino en el mundo del teatro musical a niveles muy
diferentes; en 1713, tras un largo período de indiferencia por Vivaldi es por entonces un violinista y un compositor famo-
la ópera, el compositor se lanza de lleno a la vida de los esce- so; es fácil, pues, imaginar que el público se agolpe en los pal-
narios no solamente venecianos, sino también italianos y euro- cos del San Angelo para aplaudir al hombre de teatro en cier-
peos; impone su original y creativa personalidad en el campo nes. Es precisamente en 1715 cuando el barón de Uffenbach.
musical, tanto por su labor de compositor, como por la de procedente de Frankfurt, llega a Venecia, El noble viajera acude
director de orquesta, empresario y cocinero, especializado en al San Angelo para asistir a la ópera y tiene la suerte de oír a
la confección de grandes pastiches. En este sentido, Vivaldi nuestro Prete rosso tocar, entre el segundo y tercer actos, un
nos fascina hoy como uno de los personajes más eclécticos, concierto compuesto por él mismo. Estos recuerdos parecen
modernos y misteriosos de su época, cuyo mito está íntima- arder todavía en su memoria cuando escribe con entusiasmo:
mente ligado al de la Venecia de los dogos.
...hacia el final, Vivaldi tocó un admirable acompañamiento como
solista, al que hizo seguir una
fantasía que me dejó literal-
mente aterrorizado, pues no
creo que jamas se haya inter-
pretado, ni se pueda interpre-
tar así. Tenia de hecho los
dedos tan cerca del ponticello
:¡ue no habla sitio para el arco,
y ello sobre las cuatro cuerdas,
con pasajes fugados y una
increíble rapidez...

Con vistas a la tempora-


da de 1715, Vivaldi se lanza
de nuevo a una operación
culinaria de gran envergadu-
ra; al amparo de una anti-
gua p a r t i t u r a veneciana,
Nerone falto Cesare, ópera
de G. A. Perti, con libreto
de Matteo Noris. que había
sido interpretada en 1693,
realiza un verdadero pasti-
che, mezclando a la partitu-
ra original anas de A. Polla-
rolo, G. M. Orlandini y F.
Gasparini: un ana escrita
por él mismo para el bajo
Antónfrancesco Carli apor-
£1 Foyer Olea del taller de PleCra Longhi ta al conjunto un refinado

Vivaldi, hombre-orquesta del Teatro San Angelo de Venecia envoltorio y Vivaldi dará a este variado menú el toque final: 12
arias de su pluma. Este mismo pastiche será vuelto a servir en
J i n Venecia, Vivaldi estará estrechamente unido al Teatro Brescia, en el Carnaval de 1716, por L A. Pradien. Del mismo
San Angelo, y también, aunque de forma ocasional, ai San modo, en el otoño de 1717, Vivaldi retocará la partitura de la
Moisé (1717-171 8) y al San Samuele (1735). Zenobia Regina de Palmirem, de su compatriota T. Albmoni
Fundado en 1676 por el empresario Francesco Saturini, los (interpretada en I 694 en el San Giovanni e Paolo), presentán-
fondos del San Angelo pertenecen a vanos propietarios, entre dola al público bajo el nuevo titulo de II vinta triunfante del vin-
ios cuales figura la familia del noble compositor veneciano atore.
Benedetto Marcello. A partir de 1717, Vivaldi toma a su cargo Pero Vivaldi también producirá para Venecia un gran núme-
el futuro musical de este teatro; durante muchos años, se ro de óperas que, como L'lncoronazione di Darío (1716),
encarga de la dirección musical del mismo (organizando las representan para el público veneciano absolutas novedades
representaciones, y eligiendo los artistas y el repertorio), a la literarias y musicales. Dichas óperas producidas para la laguna,
par que escribe (o retoca) un gran número de óperas que en conocerán con frecuencia una gran difusión local, italiana y
él se representan. europea: Donlla in tempe (1726), por ejemplo, vuelve a poner-
A su regreso de Vicenza, en noviembre de 1713, Vtvaldi se en escena en Praga en 1732; Farnace (1727) también se
dirige en el San Angelo una ópera no procedente de su estrenara en Praga en 1730 y más tarde en Mantua, en 1732.

/ / 4 5CHERZO
ASTRÉE
UNA COSA RARA
/WVtDIS OSSIA BELLEZA EP ONESTA
PRIMERA G R A B A f l Ó N MUNDIAL^ •

OPERA EN DOS ACTOS "~

/LIBRETO : LORENZO DA PONTE


/MÚSICA VICENT MARTIN I SOLER
M.APriTERS.M.FIGUERAS. G.FABUElJ. E.PALACIO. I,FRESAN
- ^ F.BELAZA-LEOZ. S.PALATCHlL F GARRIGOSA
-. LA CAPELLA REIAL DE QATALUNYA i

LE CONCERTDESIMATIONS

dirección :!
JORDI SAVALL

VICENT MARTIN 1 SOI.KR

UNA COSA RARA


OSSIA IÍK1.C*ZA KDOríKSTÁ

Ir
LE CONCERT DKS \AT1ONS
1/tlJltl ^ W \ 1 1

ÁLBUM 3 CD + LIBRETO E 8760

•LISTO CENTENARIO
DOSIER

La costanza tnonfante, escrita por Vivaldi para San Moisé, en La Giraud era conocida por el apodo de la Mantovaniana.
1716, disfruta en este sentido de una enorme suerte; de Se ignora su lugar de nacimiento, pero parece que Vivaldi la
hecho, vuelve a representarse en el mismo teatro en 1718. conoció, al igual que a su hermana, entre 1718-20 en Muntua;
bajo el título de Arlabano Re' de Part; al año siguiente visitará Anna Giraud (Giro) era hija de un peluquero francés. Parece
Vicenza, después, en 1725, Mantua, y de nuevo Venecia, en ser que aprendió a cantar con Vivaldi y comenzó su carrera
1731. esta vez en el escenario del San Angelo, bajo el título en Treviso, en 1723. Al año siguiente, debutaba en Venecia,
de: L'odio vmto dalla costanza. El público extranjero no se per- en el Teatro San Moisé. En 1726 la Giraud canta por primera
derá ninguna de las dulces armonías vivaldianas: en 1719, Lo vez partituras vivaldianas: es Tamiri en Famace y Eucamia en
Costanza. se representa en Hamburgo con el título de Die Doritla in Tempe. Hasta 1735 Anna Giraud sería la intérprete
über Liebe und Hoss S/egende Bostürjdigkeit oder Tigrane, y en preferida de Vivaldi, aunque tenía una voz débil: Vivaldi escri-
1732 es interpretada en Praga, con el de Dondea. Ninguna de bía para ella principalmente papeles de contralto, aunque su
estas ejecuciones se parece a la anterior, ya que tanto el libre- registro real era más bien el de mezzosoprano.
to como la partitura debían, en cada ocasión, ser reescritos y
adaptados a las condiciones de los nuevos escenarios y can- Goldoni nos habla de la Giraud en estos términos:
tantes, probablemente por el mismo Vivaldi. aunque con fre-
Debia debutar aquel año como Prima Donna la Sig. Annina Giro o
cuencia por compositores y libretistas locales, que conocían Giraud, hija de un peluquero de ongen francés, la cual, siendo alumna
bien ios gustos y costumbres de su público. de Vivaldi, era conocida comúnmente por L'Annma del Prete rosso.
No tenia una hermosa voz, no era gran virtuosa de la música, pero
era bella y graciosa, actuaba bien [cosa rara en aquella época] y tenia
protectores: no se necesitaba nada más para merecer el puesto de
Vivaldi, Goldoni y la Giraud, unidos por la Griselda Primma Donna. Vivaldi necesitaba con urgencia un poeta para adap-
tar el drama a su gusto, y retocar las arias que ya había cantado su
alumna, y yo, que era el destinado a esa labor, me presenté al com-
LiOs enormes retoques de que son objeto los libretos y las positor por orden del patrón.
partituras antiguas se convierten en algo cada vez más fre-
cuente en Venecia a partir de ¡725. Ha/ que ahorrar y, en la
A continuación el dramaturgo relata su encuentro con
medida de lo posible, renovar lo antiguo. Así pues, se pide a
los libretistas que modernicen los textos y los adapten tanto al Vivaldi, relato que nos informa no solamente de la personali-
gusto de la época como al de los cantantes. dad del compositor, sino también sobre los criterios que moti-
vaban por entonces la refundición de los libretos antiguos.
En 1735, el teatro San Samuele es dirigido por su propieta-
rio, Michiele Grimani. Por entonces, el edificio alberga a La Me recibió bastante fríamente [escribe Goldoni], Me tomó por un
Compañía de cómicos de Giuseppe Imer, que hace trabajar novato y no se engañaba, y no hallándome apto en la ciencia de los
intensamente, para sus espectáculos de comedias, al drama- desfigurad o res de dramas, era evidente que tenía gran prisa por
turgo veneciano Cario Goldoni, que, a la edad de 28 años, se echarme.
ha convertido en cierto modo en el poeta titular de la compa- Conocía los aplausos que habla provocado mi BeíJsono y el éxito
ñía Imer. En la primavera de 1735. se encarga al joven Goldo- obtenido por mis Intermezzi, pero consideraba que hacer pastiches
era difícil y necesitaba un particular talento. Me acordé entonces de
ni que retoque el libreto de la Griselda de Apostólo Zeno, al aquellas Reglas, que me hicieron delirar en Milán, cuando abandoné
que Antonio Vivaldi deberá seguidamente poner música. Con mi Amolossunta, y yo también sentí deseos de marcharme, pero mi
este objeto, Goldoni va a consultar al compositor y a pedirle situación, al tener que comparecer ante su Excelencia Gnmani. y la
consejos que le permitan realizar las oportunas modificacio- esperanza de alcanzar la dirección del grandioso Teatro de San Gio-
nes. La narración que Goldoni nos hace de su encuentro con vanni Cnsostomo me hicieron disimular y casi rogar al Prele rosso que
el músico es, en este sentido, muy instructiva e interesante. me hiciese una prueba. Me miró con una sonrisa compasiva, y,
tomando en la mano un libreto dijo: sHe aqui la obra que se debe
Goldoni relatará su entrevista con el Prete rosso en dos oca- adaptar la Gnsefda de Apostólo Zeno. La ópera, añadió, es bellísima;
siones, la primera de ellas en el Prefacio al tomo XIII de sus la parte de la Pnmma donna no puede ser mejor, pero hay que hacer
obras completas (Tutte le opere), publicadas por Pasquali en ciertos cambios... Aquí, por ejemplo, después de esta tierna escena
Venecia, en 1761. viene un ana cantabile. pero como a la Señora Annma no... no... no le
gustan este tipo de anas [es decir, no las sabía cantar], aqui quisiera
Goldoni considera oportuno en pnmer lugar suministrar a un aria de acción... que explicase la pasión, pero que no fuese patéti-
sus lectores cierta información general sobre el compositor, ca, que no fuese cantabile». «Comprendo -respondí- comprendo,
procuraré serviría, permítame el libreto». «Pero -contestó Vivaidí- lo
quizá va olvidado por sus compatriotas en 1761: necesito ya, no he acabado ios recitativos, ¿cuándo me lo devolve-
rá?»:. «Rápido -le dije- déme por favor un trozo de papel y un tinte-
Este famosísimo intérprete de violin. este hombre célebre por sus ro»... «¿quéí». «Su señoría comprenderá que un ana de ópera es
Sonatas [testimonia el dramaturgo), especialmente por la titulada Los como las de los Jníermezzi». le respondí con mala cara, algo encolen-
Cunero Estaciones, componía también música de ópera, y, aun cuando zado. Me dio el tintero y sacó de la bolsa una carta, cortando de ella
los grandes conocedores decían que fallaba en el contrapunto y que un trozo de papel blanco. «No se enfande, me dijo modestamente.
no colocaba los bajos donde debia. hacía cantar bien a las partes y la haga el favor de sentarse a esta mesa; aqui tiene el papel, el tintero y
mayoría de las veces sus óperas tuvieron éxito. el libreto, póngase cómodo»; y tomó a su escritorio y se puso a reci-
tar el breviano. Lei atentamente la escena, capté el sentimiento del
Aquí, sin duda, Goldoni hace alusión al panfleto anónimo aria cantabile, la transformé en una de acción, de pasión, de movi-
miento Se la mostré; la leyó despacio, sosteniendo el breviano en la
del noble compositor veneciano Benedetto Marceílo. titulado mano derecha y la ho|a en la izquierda, y cuando acabó de leer, soltó
// Teatro a la moda, donde éste dirige virulentas criticas contra el breviano cantando, se levantó, me abrazó, y como a ia puerta a lla-
el mundo del teatro de su tiempo. Marceílo ve con malos ojos mar a la Señora Annina- Vino la Señora Annma y su hermana Paolma.
las nuevas vías seguidas por los compositores, como la de leyó su anetta y gntando dijo: «¡la ha compuesto aqui. la ha compues-
someter a la orquesta al cantante y al desarrollo de la línea to aquí!» y de nuevo me abrazó y me dijo ¡bravo! y desde entonces
me convertí en su preferido, su poeta, su confidente y ya nunca me
vocal, descuidando las bases armónicas del edificio sonoro. abandonó. Asesiné, pues, la obra de Zeno cómo y cuánto él quiso. La
Con frecuencia se ha pensado que estas críticas ¡ban dingidas ópera se estrenó, tuvo éxito y yo, acabada la Feria de la Ascensión,
a Vivaldi, que se había convertido en la eminencia gris del tea- regresé a Padua, donde estaban Imer y su compañía, a pasar cómoda-
tro San Angelo, del cual su familia era copropietaria. mente aquel año la pnmavera».
Goldoni continúa su narración haciendo alusión a la cantante
Anna Giraud, protagonista de la Griselda, alumna y más tarde
amiga (con general desaprobación) del célebre Prete rosso. Vivaldi se lanzó al mundo de la ópera en una época en la
ÜÓSCHERZO
ANTONIO VÍVALDI

tarse a la competencia napolitana. Hacia 1733, tras


una misteriosa ausencia (motivada sin duda por un
viaje a Viena y Praga), regresa a una Venecia
donde las nuevas vías que ha tomado la ópera
seria se han asentado profunda e irreversiblemen-
te. Sus obras sufrirán sin duda las influencias e>cte-
nores, su estilo vocal, muy personal y virtuoso,
llega incluso a confundir con frecuencia - c o m o
dirá G. Tartini- la garganta del cantante con el
mástil del violín. Pero Vivaldi también sacará pro-
vecho de su fama de violinista y sus relaciones
internacionales para buscar salidas fuera de Vene-
cia, en ciudades menos saturadas, como Vicenza,
Verana, Bresca o Treviso, pero también en cortes
-como Mantua- que podían asegurarte, aunque de
modo temporal, cierta estabilidad profesional.

En 1730, Vivaldi viaja de la laguna a Praga,


donde la compañía de cantantes italianos, dirigidos
por el tenor Antonio Denzio, produce, en el tea-
tro del conde Sporck, cinco óperas del célebre
Prete rosso. En abril de 1740, el compositor vene-
ciano emprende su último viaje, hacia Viena, que
será fatal. El objetivo del veneciano era componer
óperas para esta ciudad (ya en 1737 se había
puesto en escena en la capital de los Habsburgo
su Fida Ninfa bajo el título de II giomo felice). Esta
cuestión sigue siendo actualmente un misterio; tal
vez sea una simple coincidencia, pero en 1742,
poco después de la muerte de Vivaldi. se repre-
sentan en el Teatro Karntnerthor de Viena dos de
sus óperas, Merope y Comeólo m Messema.
Ninguna de sus óperas ni de sus arias fueron
publicadas en vida de Vivaldi. El compositor, sin
embargo, se cuidó de guardar perfectamente sus
manuscritos autógrafos en su colección personal; el
compositor destinaba sin duda estas partituras para
negociar posibles reestrenos de dichas óperas en los
distintos teatros italianos y europeos. En la actuali-
dad, la mayoría de ellas se conserva en los fondos
Foó e Qordano de la Biblioteca Nacional de Turín.
Originales y copias plantean a los musicólogos
Representación d e ópera e n e l Teacm Regio d e Turín en 1741 idénticos espinosos problemas de identificación,
debido a los numerosos retoques de que fueron
que aún brillaban, como sus últimos fulgores, algunas persona- objeto los originales. N o es fácil relacionar libretos con parti-
lidades de la escuela veneciana; Pollarolo, Lotti y Albmoni. turas, ni discernir en todos estos pastiches, a los que tan afi-
Había logrado imponer en su ciudad su muy personal estilo. cionados eran los teatros del siglo XVIII, la participación y res-
Sin embargo, hacia 1725. comienzan a llegar a la laguna com- ponsabilidad reales del compositor veneciano.
positores de fuera, como G. Gacomelli; del sur de la penínsu- A pesar de la fama internacional de Vivaldi, sigue siendo difí-
la afluyen maestros tales como L Vinci, L Leo. y el sajón J. A. cil poner en escena sus óperas; la frialdad de los productores
Hasse -formado principalmente en Ñapóles-, que otorgan teatrales de hoy procede, sin duda, más de nuestra pérdida de
plenos poderes al desarrollo del virtuosismo vocal y. por contacto con el mundo de la ópera seria que de la calidad
tanto, a los cantantes; compositores como N. Porpora, que intrínseca o del interés que presentan las óperas de este com-
trabajan en osmosis con los cantantes que han formado, entre positor. Tal vez el rostro del Vivaldi teatral sea el que resulta
ellos los grandes castraü: Farinelli (que canta por pnmera vez más desconocido al público de nuestros días: el de un hombre
en Venecia en 1729), Porponno y Gaffanello. colonizan los emprendedor, que afronta con energía la realidad del mundo
escenarios de la laguna, A Vivaldi le resulta cada vez más difícil musical, y que sabe romper las ligaduras de los convencionalis-
conservar el lugar que ocupa en el mundo de la ópera seria mos musicales venecianos. Inmerso en un medio social, eco-
(género, por otra parte, en declive a partir de entonces, en nómico y artístico en el que la ópera seria comenzaba a decli-
beneficio de la ópera buffa, servida por jóvenes compositores nar, y en el que, además, los teatros sufrían graves crisis finan-
como el veneciano B. Gallupi). La ópera se democratiza y los cieras, Vivaldi dio prueba de un verdadero talento de gran
gustos del público se inclinan hacia la novedad y el exotismo. cocinero sabiendo tanto satisfacer a sus invitados con platos de
Por otra parte, los enormes déficits económicos que sufren su composición como someterse a la realidad de los teatros
los teatros hacen la gestión artística casi incontrolable; las de su época adaptando tos restos que le encargaban, con deli-
modas reinan y triunfan a pesar de las acerbas críticas de algu- cadeza, profesionalidad e tnvenzione.
nos hombres de letras y músicos venecianos reaccionarios
que intentan frenar este movimiento.
Así, pues, en su carrera teatral, Vivaldi debe pronto enfren- Sytvie Mamy
Traducción: Angeles de ¡non
DOSIER

Vivaldi y el concierto

T
ranscurrido el siglo XVI,
los músicos - c o m o
Andrea y Giovanni Ga-
brieh- maestros de capi-
lla en la basílica de Son
Marcos de Ve necia, desarrollan en
sus composiciones el principio de
los con batXenti —también llama-
dos cor/' spszzatti-; la diversidad
Coral, tan querida a la escuela
musical veneciana, constituiría la
matriz misma del concertó; juego
de preguntas y respuestas inter-
cambiadas entre dos grupos. Inicial-
mente, el diálogo se establece
entre dos coros; poco después, se
instaura entre un grupo vocal y un
conjunto instrumental: finalmente,
en los últimos años del siglo XVII,
el discurso - o concenactón- se
constituye entre dos orquestas de
diferentes dimensiones: es el con-
certó grosso. Aunque bajo una
forma todavía primitiva, el concertó,
en el sentido moderno de la pala-
bra, había sido inventado.

Antonio Vivaldi nace en Venecia


en 1678. Es hijo de músico: su
padre. Giovanni Battista Vivaldi, es,
en efecto, violinista en la capilla de
música de Son Marcos y miembro
de la orquesta del prestigioso tea-
tro Grimani en Son Juan Crisósto-
mo. Influido a la vez por el extra-
ordinario medio en el que reabe
su educación musical, por la parti-
cular atmósfera de su ciudad natal
y por su ánimo individualista,
Antonio se deja fascinar enseguida Antonio Vívala, grabado de F.M. la Cave, i • ¿i
por el género del concertó grosso
que por aquel entonces es cultivado con pompa y boato
la parte solista (cuando se trata de un concierto para violín) o
tanto en Roma (con Corelh), como en Bolonia (bajo la égida
acompaña a las más bnllantes de las muchachas instrumentis-
de músicos audaces como G. Torelli) y Venecia. A principios
tas que viven en esta institución de beneficencia.
del siglo XVIII, reinan en la laguna, en el terreno de la música
instrumental, diferíanles de alto nivel, como Tommasso Albi- A partir de 1710, los conciertos de Vivaldi son difundidos
noni, Alessandro y Benedetto Marcello. Pero le corresponde por toda Europa en forma de manuscritos -que a menudo el
especialmente a Vivaldi dar a la forma del concierto su mayor propio Vivaldi vende a los personajes ¡lustres y a los aficiona-
impulso, haciéndolo evolucionar hacia el muy moderno con- dos que van a visitarlo en Veneoa-, La mayor parte de los
cierto para instrumento solista, construido en un tríptico: conciertos compuestos por Antonio Vivaldi han permanecido
Al legro-Adagio-Al legro: es la forma que retomarán, desarro- manuscritos y se conservan actualmente en la Biblioteca
llarán y exaltarán, cada uno a su manera, los músicos clásicos Nozjono'e de Turín (en los fondos Foá y Giordano) principal-
y románticos. Trabajador infatigable, Vivaldi compondrá, en el mente, pero también en Dresde (conciertos provenientes de
transcurso de su carrera, más de 450 conciertos, obras que la colección creada por Pisendel) y en otras ciudades europe-
revelan (a pesar de la irónica boutade lanzada por Stravinsky as, como Manchester y París.
de que el Prete rosso habría compuesto 600 veces el mismo Como sus colegas italianos, y en especial venecianos, Vival-
concierto) una infinita variedad de estructuras, de temas, de di se ve afectado por la decadencia que sufre la edición musi-
orquestaciones.., un surtidor perpetuo y centelleante de intui- cal local, desde finales del XVII, Se queja de la forma en que
ciones nuevas y de palpitantes emociones, sus sonatas de los opus I y 2 han sido impresas por los edi-
tores venecianos G. Sala (1705) y A. Bortoh (1709) y de las
Los conciertos de Vivaldi están escntos pnnapalmente para faltas que contienen sus publicaciones. En lo sucesivo, al igual
el Ospedale della Pietá, en el que enseña; él mismo interpreta que sus compatriotas, Vivaldi preferirá confiar tos manuscritos

118SCHEKZO
SONY

MUSIC IS
OUR VISION
I*
CLAtlICIL

OFERTA DE OTOÑO
Oferta vAllda del 1 de Octubre al 30 de Noviembre
DOSIER

de sus preciosas composiciones al buril de los Roger y Le ambiente romano, solemne y suntuoso, tan majestuosamen-
Cene en Holanda. Así, entre 1710 y 1729 son publicados te expresado por la música de Corelli, que con el espíritu
nueve opus en Amsterdam1, con un contenido total de lúdico. teatral e individualista que reina en la laguna venecia-
sesenta conciertos -que fueron inmediatamente vueltos a na. En el conjunto de su obra. Vivaldi se limita más bien a
publicar por los editores ingleses y parisinos y difundidos a hacer alusión al concertó grosso y a rendir homenaje a Corelli,
escala internacional. Otros veinte conciertos figuran en las que a tratar realmente este tipo de concierto; la forma de
dos recopilaciones publicadas, sin números de opus. en Lon- concertó grosso tan sólo se dibuja realmente en 8 de los con-
dres, entre 1720 y 1739. Recordemos también que. entre ciertos del Estro armónico; 5 (los números I. 5, 8. 10 y I I )
1703 y 1717. Johann Sebastian Bach transcribe diez de los de ellos pueden ser clasificados en la categoría de concertos
conciertos para violin de Vivaldi. extraídos de los opus da camera (inspirado en la suite de danzas) y otros 3
3, 4 y 7 a conciertos para órgano o clave -el (los números 2, 4 y 7), en la llamada do chiesa
Concierto para cuatro violines y violonchelo en si (haciendo que se alternasen las esenturas de
menor del veneciano (RV 580, Op. 3 n" 10)' contrapunto y las homofónicas en vigor en
es igualmente transcrito para cuatro cla- la iglesia). Cuando el grupo de solistas
ves (BWV i 065) y transportado a la sobrepasa !os 3 ó 4 músicos, Vivaldi
menor- contribuyendo ampliamente a prefiere designar sus conciertos con la
la fama (más tarde a la posteridad) expresión con molti strumenti. Se
de la obra instrumental del Prete catalogan más de treinta obras que
rosso. pertenecen a este tipo, A Vivaldi le
encanta en ellos hacer" escuchar y
Los más importantes principes de asociar instrumentos de sonorida-
Europa escuchan los conciertos del des extrañas y rebuscadas (sal-
compositor veneciano y mantienen moé, viola inglesa, viola de amor,
correspondencia directa con Vivaldi laúd, tiorba, clarinete, violines m
para encargarle obras. De esta tromba marina, trombón da caccia,
forma. Vivaldi tendrá muchas veces etc.); reflejan, también en cierto
la ocasión de dedicar sus obras a modo, el espíritu de la sinfonía
soberanos, incluso de escribir para concertante. En este grupo figuran,
estos mecenas composiciones con- por ejemplo, los dos conciertos Per
cebidas especialmente para su instru- la Solennitá di S. Lorenzo (RV 556 y RV
mento preferido; el Concierto para oboe 562), La Tempesto di more (RV570), así
(RV 455) está, por ejemplo, compuesto como el Concierto titulado por Vivaldi II
muy probablemente, para el principe elec- Proteo o sia il mondo al rovescio (RV 572).
tor de Sajonia; el Concierto para fagot (RV Más tardíamente, Vivaldi todavía escribe,
496). en honor del conde von Morzm, igual- siempre en un estilo bastante arcaizante, cinco
mente dedicatario del opus 8. Durante la Arcongeto conciertos a doble coro (es decir, dos orquestas);
estancia de Vivaldi en Praga, en 1730, el se piensa que fueron encargados al compositor para
conde Wrtby encarga al veneciano un ocasiones excepcionales, como los dos conciertos
Grabado
concierto para laúd, mientras que, por su parte, sacros escritos Per la SS.ma Assontione di Mario Ver-
el conde Eberwein. desde Wiesentheid, le solicita gine (RV 581 y 582). El concertó npieno o concertó sinfonía es
numerosos conciertos para violonchelo. Y es también, sin también una forma en decadencia de la época de Vivaldi y se
duda, para su protector el marqués Bentivoglio de Aragón, en supone que el maestro escribió este conjunto de obras (más
Ferrara, para quien Vivaldi escobe su único Concierto para mon- de cincuenta) principalmente para la orquesta de las mucha-
doiina (RV 425), así como el compuesto para dos mandolinas chas de la Pietá. Estos conciertos están creados generalmen-
(RV 532). La recopilación de La Cetra, opus 9, está dedicada te en cuatro divisiones instrumentales (con frecuencia las
por Vivaldi al emperador de Austna Carlos VI, en pago de io cuerdas), sin solista; a diferencia de la sinfonía, presentan tres
cual éste habría gratificado al compositor con una fuerte suma movimientos. Citemos, por ejemplo, el Concierto Madrigales-
de dinero, así como con una cadena y una medalla de oro. El co (RV 129) y los dos Conciertos titulados Al Santo Sepolcro
opus 3, está dedicado al príncipe de Toscana, Femando III. en (RV44I yRV 169).
cuya corte Vivaldi hace representar muchas de sus óperas. Por
otra parte, Vivaldi escribirá dos Conciertos (RV 576 y RV 511)
especialmente para la orquesta de Dresde. El concertó da camera (unos veinte en el conjunto de la pro-
ducción vivaldiana) es una forma bastante híbrida, que recuer-
Manuscritos o impresos, el conjunto de los conciertos escri- da, según su disposición, tanto a la sonata a tres (como el RV
tos por Vivaldi en el transcurso de su carrera, demuestran la 107). como al concierto para solista, sobre todo en los movi-
emancipación progresiva del músico de la forma del concertó mientos rápidos (en la alternancia tutti/soli). Está constituido
grosso y de las normas generales fijadas por Corel li para adop- por un grupo de 3 a 6 músicos sostenidos por el tradicional
tar la forma más moderna del concierto para instrumento continuo. Este grupo de conciertos emplea de forma frecuen-
solista. te la flauta, de pico o travesera. En este conjunto pueden ser
catalogados II Gorddlmo (RV 90). una segunda Tempesto di
more (RV 98) y La Notte (RV 104).
Del concertó grosso al concierto para solista El concierto para instrumento solista es. con mucho, la
forma en cuya evolución Vivaldi ejercerá mayor influencia en
í>e distinguen en la obra de Vivaldi seis tipos de conciertos, su época. En una pnmera categoría, podemos clasificar los
partiendo del arcaico concertó grosso para llegar al más van- conciertos para dos instrumentos solistas: se trata de dos ins-
guardista concierto para instrumento solista. En su inicio, el trumentos parecidos asociados (violines. violonchelos, mando-
concertó grosso opone el conjunto de la orquesta, el tuto - o linas, flautas traveseras, flautas de pico, piccolo, oboe, fagot) o
npieno- a un pequeño grupo de solistas, llamado soii o con- de dos instrumentos diferentes asociados (violin y órgano,
certino. A principios del siglo XVIII, éste es más acorde con el viola de amor y laúd, etc.).

120 SCHERZO
ANTONIO VtVALDI

En sus conciertos para un solo Ins- tuosismo de éste -intercambiando a


trumento solista, Vlvatdi concede la veces incluso su clave con la del vio-
palabra a un muy amplio abanico de lonchelo, para descender a las tesitu-
instrumentos, de viento y de cuerda: ras más graves (por ejemplo, en el
Conciertos para flauta trravesera (15), Concierto RV S44, titulado íí Proteo) y
para flauta de pico (2), para piccolo viceversa. En el mundo de la ópera,
(3), para oboe (20), para fagot (39); el violin rivaliza en acrobacias virtuo-
para las cuerdas, el veneciano compo- sas con el cantante (cadencias impro-
ne tanto conciertos para mandolina visadas, hábiles fiorituras, amplios
(I), como para violonchelo (27) y intervalos, mezcolanzas alrededor de
viola de amor (8). Más de 200 de una nota básica, trinos, gruppetti,
entre ellos están consagrados exclusi- quiebros, arpegios...); le sobrepasa en
vamente al violin, instrumento sobera- las dobles y triples cuerdas, en la
no que es verdaderamente, en su famosa scordoíura. Mejor aún; exige a
época y para la posteridad, el emble- sus cantantes que imiten las proezas
ma del Prete rosso. del violinista; ¿no acusó Giuseppe
Tartini al veneciano de confundir a
menudo la garganta de los cantantes
con el mástil de su violin? Es el violin
El violin-rey el que, en los ritomelli. antes de la
entrada del cantante, anuncia el
V ivaldi, lo sabemos, alimenta una tema; asienta sólidamente la melodía
auténtica pasión por los timbres de sobre las notas principales (tónica y
los diferentes instrumentos. Como dominante) de la tonalidad y después
los pintores de la laguna veneciana, la modula sabiamente en los pasajes
enriquece su paleta con los matices que rodean a éstas; responde en eco
más suaves, los más extraños y los a la voz, la escucha, la sostiene y
más inauditos. Sin embargo, es nece- luego la desafia. Es él el que marca el
sario reconocer que el violfn repre- ritmo, amando inspirarse -sobre
senta para él el instrumento sobera- todo en los movimientos vivos- en
no. Es su instrumento por excelen- las danzas y coreografías de la época
cia; aquel con el que expresa su (forlana, jiga, bourrée, rigodón, etc.);
genio inventivo y que extiende su por el contrario, en los movimientos
fama más allá de las fronteras de la lentos, intenta expresar los más
República Serenissima. Es también el pequeños matices de los sentimien-
instrumento del que se hace profe- tos y deja hablar a su imaginación
sor, al enseñarlo a las |óvenes del improvisando una ornamentación
coro de La Pietá. Es significativa que expresivo (ver, por ejemplo, el movi-
las dos últimas recopilaciones de sus miento lento del Concierto RV 314,
conciertos (apus II y 12), impresas cuyo manuscrito autógrafo se con-
en 1729 por Michel-Charles Le serva en Dresde). El violin de Vivaldi
Cene, en Amsterdam, hayan sido no duda en buscar su inspiración en
titulados Concerti a violmo pnnapah. los temas eslavos de la vecina Istria,
viohno primo e secondo, violo e violón- en las canzom da battello venecia-
cello; enteramente consagrados al nas, en [as anas de ópera puestas de
violin, aprovechan los más recientes moda por algún eminente cástralo o
perfeccionamientos del instrumento diva de los escenarios venecianos,
llevados a cabo por los grandes lut- llegando incluso, sin miedo al plagio,
hiers italianos; exigen del ejecutante a basar sus melodías en las obras de
un gran brío técnico. los compositores locales de más
talento (el Concertó Madrigalesco
El violin es también el instrumento (RV 129) y el movimiento lento del
en honor de quien se escriben las Conceno per fagotto (RV 491) están
dos recopilaciones de sonatas o tre sacados - l o exphca el musicólogo
(dos vlolmes y bajo) y de violin solista irlandés P. Everett- de dos oratorios
(y bajo) publicadas en Venecia entre de Marc'Antomo Ziam); todo un uni-
1705 y 1709. Asociado a la viola y al verso sonoro y melódico, familiar a
continuo, forma la parte central de la los venecianos del Settecento y del
orquesta italiana -y en especial de la que los habitantes de la célebre
veneciana- a comienzos del siglo laguna italiana ya han perdido la
XVIII. Es el núcleo básico en tomo al memora.
cual el compositor asocia a su gusto
los instrumentos de viento, maderas
y cobres. Pero en el seno de la
orquesta vivaldiana, el violin es el
maestro y -como en las S/n/ón/e-
siempre domina con su canto el con- Los conciertos con programa
junto de los restantes instrumentos.
Vivaldi juego con el más extremo vir- L o m o espíritu imaginativo, el pro-
Guseppe Torelli. Pintura anónima pio Vivaldi da nombre a 28 de sus
SCHERZO 121
DOSIER

será muy golosa de estos paisajes múlti-


ples -donde el exterior y el interior se
confunden- que constituirán todavía un
postre favorito para ios compositores
románticos como Schubert, Mendels-
sohn y Liszt.

Vivaldi y el espíritu concertante

.Cn el mundo del concierto, Vivaldi se


sitúa en la vanguardia. Pero, cuando se
evoca la música del veneciano, ¿no sería
más justo hablar de espíritu concertante,
es decir, de diálogo, incluso de tensión
entre el individuo voluble y exuberante.
que se queja y vibra, y el grupo social,
homogéneo y convencional? En Vivaldi,
el espíritu concertante está por todas
partes: en "su Dixit Dominus (RV 594)
{que retoma la técnica de los con bat-
tentí, tan querida a la tradición de Son
Marcos): en su Magníficat donde el Exul-
tavit está articulado en tres episodios
solistas (soprano, contralto, tenor), pre-
cedidos -como en el concierto- por un
ritornello, ejecutado aquí por el coro.
Espíritu concertante también en sus
sonatas a tres donde los dos violines
dialogan entre sí (véase, por ejemplo, el
opus 2 impreso en 1709 y dedicado a
Federico IV de Dinamarca y Noruega):
espíritu concertante en las anas de
ópera donde el solista y la orquesta pre-
sentan, retoman y después varían el
tema principal, disfrazándolo bajo mil
máscaras, como la evocación de un
recuerdo que se resiste a morir; anas de
Concierto a dos, por Pietio Longbi. Para cantante y tañedor de laúd
• óperas donde el cantante y la orquesta,
por turno, se unen, se alternan o se rompen el uno contra
conciertos y a 3 de sus recopilaciones impresas en Amster- la otra, en una dialéctica parecida a la que anima las partes
dam; ¿quiere de este modo revelarnos los temas que han instrumentales de sus conciertos para solista. El espíritu con-
guiado su inspiración de compositor genial? El tema rey es certante en la obra de Vivaldi es un poco como el eco de
la observación de la naturaleza. Citemos, en primer lugar, nuestros pasos bajo las bóvedas de San Marcos y en las calh
las archifamosas Estaciones, que constituyen los cuatro pri- de Venecia; es el chapoteo de las olas de la laguna contra
meros conciertos de la recopilación opus 8: La primavera los mármoles de los palacios venecianos, es el rumor de
(RV 269). í. estáte (RV 315), L'autunno (RV 293) y í_'invernó voces en los palcos de los teatros de la laguna. Es también
(RV 297); los textos poéticos que sostienen esta música el eco del pasado golpeando contra el presente; el eco del
son anónimos; gusta creer que fueron escritos por el pro- presente proyectándose hacia un futuro inaccesible; es la
pio Vivaldi. Los conciertos llamados con programa del vene- oscilación de un tiempo que no existe y que. inasequible,
ciano son influidos tanto por la evocación (por no decir [a nos lanza en su persecución, entre el pasado y el futuro,
descripción) de los elementos naturales (Lo Noíte, RV 439 y para, a continuación, escapar todavía más de nosotros.
RV 501, la Tempesto di more, RV 433 y 570), como por la
de los pájaros (II Gardelltno, RV 428), incluso por los esta-
dos de ánimo: L'mquietudine (RV 234), II Sospetto (RV 199);
encontramos también la alusión a situaciones tranquilas y Sytvie Mamy
serenas (II Ritiro (RV 249a), II Riposo (RV 270). a veces pin- Traducción Paz Juan
torescas (La Cacao, RV 362 e // Cornetto da posta, RV 363),
Giuseppe Tartim. compositor-violinista en la basílica del
NOTAS:
Santo, en Padua, también escribe en la parte superior de
sus conciertos manuscritos versos rimados extraídos de I. Op. 3, L'Esiro ormonrea Amstendam, E. ftoger f 171 i} (ded'cado a Femando III
Tasso o de las tragedias de Pietro Metastasio. La influencia de Tastana), op. 4, LO Svavaganza. id. ibid., s.d.; op. fcr Concerti a ofXfue stromentL,
Amsterdam. J Roger (1716-21): op. 7, Concern o onque stfomena.. id. ibd.; op. 0, II
de la poesía y del mundo de la ópera es, por entonces, c/menia ddí'oimonio e deJÍ'rnvenzione. Amsterdam. M C Le Cene (1725), dedicado al
dominante y, quizá, resulta todavía difícil, para los composi- conde von Moran, op. 9. Lo cetro, ibid (1727), dedicados «Alia Sacra. Cesárea. Cat-
tores del Settecento, pensar la música instrumental como toíica. Real Maesta di Cario VI ImperaTore»' op. 10. Concern a flouio troverso. colino
prono e secundo., itiid. (ca I 72B), op I I , Caneen* o molino principóle . bid (1729);
una expresión artística a uto su fie i ente y pudiendo liberarse op 12, Concern o wolino principóle , ibid (1729).
del soporte literario y poético. La edad galante o rococó 2 RV^Peter Ryom. Veneichnis áer Werfce Amonio Vivaldi, Leipzig, Kleine Aus-
gabe, 197-1.

122 SCHÉRZO
ANTONIO VIVALDI

Panorama del arsenal


de instrumentos vivaldianos
«El sueño de la razón produce monstruos» que los nuestros, soñaban un retomo (inteligente) al pasado.
Francisco de Goya y Lucientes La soñolencia, no «El sueño de la razón produce monstruos».

I. Precisiones, hipótesis y refutaciones 2. Instrumentos de cuerda pinzada

L
os Instrumentos musicales han tenido un papel muy Algunos laúdes construidos a principios del siglo XVI se utili-
significativo en la historia artística y civil de Venecia. zaban todavía en época más tardía3 eventualmente modifica-
Su presencia, en estos dos aspectos, puede docu- dos para permitir un posterior añadido de cuerdas en el regis-
mentarse desde el comienzo del siglo XIV conti- tro grave de acuerdo con la nueva sensibilidad que se venía
nuando, con matices distintos, hasta el ocaso de la imponiendo. Sabemos que, alrededor de I 580, se construían
República.' todavía laúdes con nueve, once y trece
En sus composiciones (sonatas, concier- costillas aunque se fuera imponiendo, a
tos, óperas) Vivaldi prevé una amplia gama partir de esta fecha, un nuevo estilo cons-
de instrumentos de cuerda pinzada, de tructivo que gozó de un tiempo de popu-
cuerda frotada por arco, de teclado y de laridad y que alcanzó su apogeo hacia el
viento, cuya identificación no es tan fácil I 600'. Los principales representantes de
como podría parecer. esta nueva corriente artesanal fueron
Michel Hartung, Magno y Wendelino Tief-
Algunos ejemplares tenían el mismo
fenbrucker*.
nombre, pero en realidad eran instrumen-
tos distintos; otros tenían nombres distin- Alrededor de la mitad de siglo XVII, los
tos pero eran el mismo instrumento. instrumentos musicales de cuerda fueron
Los estudiosos vivaldianos han discutido, capaces de producir una sonoridad más
en sus escritos, pnncipalmente los instru- clara y transparente y mejorar su potencia
mentos de viento, clarificando el significado en el registro grave. Esto fue posible gra-
de algunos términos relativos a alguno de cias a las innovaciones tecnológicas que
ellos. Los instrumentos de cuerda pinzada modificaron la fabricación de las cuerdas5.
como el laúd y la tiorba se liquidan nom- Muchos de los laúdes supervivientes
brándolos simplemente y afirmando, como fueron convertidos después en tiorbas (o
mucho, que la tiorba era en sustancia un chitarroni) sufriendo cambios en el clavije-
gran laúd. Pero el asunto no es tan sencillo, ro, el diapasón, la cejilla y el puente. Para
ni el leuto de Vivaldi era propiamente un permitir al instrumento, tras esta transfor-
laúd (Ituto), ni la tiorba era simplemente un mación, soportar una mayor tensión de
gran laúd (ni tan siquiera un archilaúd con las cuerdas, las barras interiores fueron
el cual se confunde frecuentemente). también modificadas. El desarrollo históri-
Los instrumentos de cuerda frotada por co del laúd en Italia presenta característi-
arco de Vivaldi pueden ser reducidos a cas bastante diferentes de las de otros
dos categorías esenciales: a) de tradición países europeos, en cuanto que su evolu-
en la historia de Venecia: b) instrumentos ción puede considerarse como una conti-
de cuerda frotada por arco exóticos (viola nuación del estilo del siglo XVI. Si se
d'amore y viola all'ingkse), Los instrumentos exceptúan los ejemplares que han sufrido
de teclado no presentan problemas espe- transformaciones, todos los laúdes del
ciales. siglo XVII que nos han llegado presentan
un clavijero que se extiende, apreciable-
Es de fundamental importancia que la mente, a lo largo del mástil y un segundo
investigación histórica, organológica y esti- clavijero que contiene las cuerdas de
lística continúe su trabajo de búsqueda en resonancia y se extiende sobre la prolon-
el pasado para sacar a la luz nuevos indi- gación del primero. El mástil de estos ins-
cios que nos permrtan ver mejor, mejorar trumentos tiene diez trastes de tripa.
nuestro conocimiento y corregir las imper- Generalmente hay siete u ocho órdenes
fecciones de nuestras afirmaciones. Afirma- Mandohna Anármm.
Venena, S XVII CasKllO de cuerdas sobre el mástil, con seis o
ciones que no solamente tienen que ver s/órzesco, Milán siete libres. La longitud de la cuerda
con los instrumentos musicales sino que vibrante de estos instrumentos varía alrededor de 57 a 59
atañen también a la estética de un compositor. Que Vivaldi cm, y entre 65 y 86 cm. Algunos organólogos definían, indis-
haya previsto, de hecho, un determinado instrumento frente a tintamente como tiorba los ejemplares de estas dimensiones.
otro no carece de significado. La paleta que tenía a su disposi- Los estudios más recientes, en cambio, permiten clarificar
ción el compositor veneciano era rica y variada. El poder mejor la definición de términos como laúd, laúd tiorbado,
escuchar sus composiciones a través de instrumentos históri- archilaúd, cbttarrone y tiorba6.
cos y copias de ellos en las ejecuciones de los grandes intér-
pretes contemporáneos rinde justicia, no solamente a la esté-
tea vivaldiana sino también al esfuerzo de los primeros pione- Había, de hecho, instrumentos distintos que se llamaban
ros de la música antigua que, en tiempos mucho más difíciles con el mismo nombre, o bien instrumentos de distinto nom-
bre con los que se podían interpretar músicas escritas para un

SCHERZO 123
DOSIER

determinado instrumento. Asi, releyendo los antiguo? tratados portar la música una octava baja con un laúd barroco (con afi-
de la literatura escrita para los instrumentos arriba menciona- nación en re menor La0-Si°-Dol-Rel-Mil-Fa'-Sol'-Lal-Reí-Fa2-
dos, se ha llegado a definir, actualmente, el laúd tiorbado La^-Re^Fa') de II ó 13 órdenes, o bien optar por un archila-
como un tipo de laúd con siete u ocho órdenes sobre el dia- úd (con afinación: Sol'-La'-Sib'-Do'-Re'-Mi'-Fa'/Sol'-Do'-Fa'-
pasón y seis o siete cuerdas simples libres, para tocarse al aire. La'-ReJ-Sol!)ia. Esta es la solución más convincente y que, por
El laúd tiorbado se utilizaba principalmente como instrumento lo tanto, nos invita a considerar el leuto de Vivaldi, no liuto
solista pero también frecuentemente para el acompañamiento (laúd), más bien como un archüaúd o laúd tiorbado.
del bajo continuo, llamándose todavía laúd'. Según Praetonus, la testudo theorbato (laúd tiorbado) tenia
Alessandro Píccinim8, el gran laudista bolones, afirmaba que la siguiente afinación: Fa°-Solil-U!I-S¡(í-Dol-Re7Mil-Fa-Sol -Do*-
él había sido el inventor de este tipo de instrumento, al que Fa1-La1-Re3-SoI' (6 cuerdas simples fuera del diapasón y 7-8
prefería llamar archilaúd pues el término de laúd barbado lleva- dobles en el mástil). Mersenne cita un instrumento afinado asi:
ba al engaño de una derivación de la tiorba. El Do'-Re'/Mi'-Fa'-Sol-La'-Re'-Sol'-SP-Mi'-La1.
término de laúd tiorbado'' se encuentra dentro La afinación de la tiorba dada por Banchieri
de la literatura del siglo XVII, en las obras en 1609 era: SolD-Laa-Sib°-Dol-Mil-Fal-Soll-
impresas (también en Venecia) entre I 614 y Do'-Fa'-La'-Re'-SoP-fo Re1); Mersenne, con
I 623. Praetorius definía como testudo theorba- relación a una tiorba provista de 14 cuerdas
ta al laúd de uso en su tiempo, que tenía siete simples, da esta afinación: Sol°-Laci-Si0-Dol-Rel-
u ocho órdenes en el diapasón y seis cuerdas Mi'-Fa'-Sol' (cuerdas de resonancia)/La'-Re2-
de resonancia fuera del mástil °. Sol'-Mi'-La' (sobre el mástil), o bien los mis-
El archilaúd era un instrumento que aparen- mos intervalos un tono bajo. E.G, Baren
temente podría ser confundido con la tiorba o (1727), finalmente, nos informa de una tiorba
chitarrone, pero cuyo diapasón permitía afinar de 17 cuerdas afinadas como sigue: Re°-Mi°-
las dos primeras cuerdas una octava alta como Fac-Sol°-U0-Sib°-Sib'1-Dol-Re-Mil-Fal (cuerdas
el laúd renacentista y el laúd tiorbado. Joseph de resonancia) Sol'-Do'-Fa'-La'-Re'-Sol3 (cuer-
Sauveur", en 1701, distinguía entre archilaúd y das sobre el mástil).
tiorba11. En la segunda parte de la Harmonie El tercer instrumento de cuerda pmzada
Universelle'1 Mersenne llama tiorba a la segunda que encontramos en las composiciones vrval-
figura a la derecha en el texto, diciendo que dianas es la mandolina, precisando que se trata
los italianos llamaban a este instrumento archi- de la mandolina milanesa o lombarda, de uso
laúd y que se debería llamar mas bien laúd de en el norte de Italia, que apareció hacia la
doble mástil, en cuanto que la tiorba era mitad del siglo XVII como un modelo más
mucho más grande y disponía de cuerdas sim- pequeño que la mandola". Con esta última
ples. El teórico francés afirma que la tiorba fue tiene en común la caja periforme y el mástil
inventada por Bardella en Florencia, treinta o corto (provisto de trastes) que termina en un
cuarenta años antes que él hubiera escrito su clavijero de clavijas laterales. Generalmente
tratado. Bardella fue el apodo de Antonio estaba armada con seis cuerdas dobles de
Naldi, célebre laudista veneciano de la corte tnpa sujetas a la tabla armónica a través de un
de los Medid, citado por Caccmi en el prefacio travesano que funcionaba también de puente.
a su Nuoi'e Musi&ie en 1601. Las cuerdas, desde el siglo XVIII podían ser
simples también, se pinzaban con los dedos.
El chitarrone debe su origen a la atmósfera
típicamente humanística e impregnada de Antes del siglo XVII la afinación podía sen
pasión por la mitología griega de la Italia de Sol!-Do'-La3-Re!-Mi3 (o bien Sol'-Si'-Mi'-U1-
finales del siglo XVI". Habría s¡do más lógico Laúd Tiorbado. Moneo Sellos Vene- Re!-M¡(o Sol'). Actualmente impera la de la
llamar liutona al nuevo instrumento, al ser tra, S. XVII Kart Marx Univ. Leipzig guitarra (Mi'-La'-Re'-Sol'-Si'-Mi5).
una derivación morfológica del laúd; en cam- Dos mandolinas, una milanesa y otra napoli-
bio la etimología hace referencia a la antigua cítara de los tana, de Giuseppe Molinari20, están conservadas actualmente
griegos (cbitarrone: gran Kitbara). A continuación se impuso en el Conservatoire National Supéneur de Musique de París y
el nombre de tiorba. Con respecto a la zona de Venecia, constituyen, ¡unto a otros pocos e|emplos, el testimonio no
diversos testimonios crtan la tiorba (recuerdos de via|eros y irrelevante de una buena tradición artesanal veneciana, tam-
documentos de archivo)'1'. Mientras que podemos afirmar bién en este aspecto.
con certeza que la tiorba de uso en Venecia a finales del James Tyler (cfr, The Italían mandolín crt., pág. 443) mantiene
siglo XVI tenia las mismas características morfológicas y que las mandolinas requeridas por Vivaldi estaban provistas de
organológicas del instrumento requerido por Vivaldi en seis órdenes (pares de cuerdas) de tripa, afinadas Sol'-Re'-La'-
algunas de sus composiciones", a propósito del leuto, cuyo Mi'-Si-Sol y que las partes no acórdicas de los conciertos para
empleo se menciona expresamente como solista en otros dos mandolinas sugieren el uso de la técnica ejecutiva del
trabajos", se necesitan más precisiones, hipótesis y refuta- plectro.
ciones. El análisis atento de los manuscritos originales de
Vivaldi ha permitido un acercamiento cuyos resultados no
pueden ser ignorados.
3. Instrumentos de cuerda frotada por arco
En los manuscritos de la Biblioteca Nacional de Turín
(RV82. RV85, RV93) las partes de la melodía para laúd están A l menos una quincena de instrumentos frotados por arco
escritas en clave de sol en segunda línea, carecen de sostén tuvieron, en el pasado, un papel más o menos relevante en la
armónico y aparecen, de vez en cuando, acordes de tres historia civil y artística veneciana". Vivaldi no dedicó ningún
notas sin bajo, para tocarse arpegiando. El problema que se concierto a la viola normal o moderna, y parece que nunca
han planteado los intérpretes contemporáneos ha sido decidir hizo uso de ella". Su atención se dirigió, en cambio, a la viola
entre tocar a la altura estrictamente escrita con un pequeño d'amore y a la viola oll'inglese".
laúd soprano (con afirmación Sol-Do-Fa-La-Re-Sol) o trans- La viola d'amore hizo su aparición al final del siglo XVII y
124 SCHERZO
ANTONIO VíVALDI

go2Ó de una notable popularidad hasta finales del XVIII. Sus popularidad de la scordatura del violin en Italia, el empleo - p o r
dimensiones se acercan a las de la viola contrarto/tenor de la el contrario- de tal técnica por parte de Vivaldi y el uso de
familia del violín, pero sus características morfológicas son las algunos instrumentos exóticos en el ospedale della Pietd, consti-
de la viola da gamba: fondo plano, amplias costillas al mismo tuyen la prueba de las estrechas relaciones entre Venecia y el
nivel, hombros inclinados, cabeza incrustada en el clavijero. La norte de Europa, El violino in tromba (en los conciertos
viola d'amore, que no tiene trastes en el mástil, se toca como RV22I/P.I79, RV3I I/P.l 17, RV3I3/P.I38) y los dos violini in
el violin; su timbre es especialmente nitido y dulce, distinto tromba marina (en el RV550/P. 16) requendos por el composi-
del violín que es más brillante y potente. Normalmente la t o r veneciano, indican claramente ia intención de obtener una
viola d'amore está provista de sonoridad similar a la de la trompa manna".
14 cuerdas, de las que siete
Un instrumento inusual, el salterio, fue requerido por Vivaldi
se frotan con el arco, vibran-
en la ópera Qustino, representada en Roma en 1724 (RV717:
do por simpatía las restantes.
acto II, escena XIV), Es posible que los acordes de tres notas
No está claro el origen del
relativos a las partes de este instrumento (partes que oscilan
t é r m i n o d'amore- Algunos
entre el si y el do J ) fueran arpegiados".
organólogos han señalado
-como motivo de una posi-
ble derivación- la cabeza de
un amorino esculpida en la 4. Instrumentos de viento
parte alta del clavijero; otros,
haciendo referencia al impro- I l n t r e los instrumentos de viento requeridos por Vivaldi el
pio origen o r i e n t a l de las chalumeau es el que ha sido discutido más ampliamente". El
cuerdas resonantes, han cholumeau -incluido en el Gabinetto armónico de F. Bonanni
sugerido que viola d'amore (1722)- parece haber hecho su primera aparición en Italia en
constituye una corrupción de algunas composiciones de Vivaldi. Pariente estrecho del clari-
viola de'mori. El Concierto en nete, el chalumeau apareció micialmente en Francia y Alemania
re menor de Vivaldi, escrito alrededor del 1700, provisto
alrededor de 1740, prevé de una lengüeta en el extre-
además del laúd, instrumen- m o de la e m b o c a d u r a . La
tos de cuerda frotada por extensión de algunas notas
arco con sordina, un instru- era posible gracias a dos lla-
mento de teclado para el ves colocadas entre la embo-
bajo continuo y una viola cadura y la hilera de los siete
d'amore provista de siete agujeros. C o n s t r u i d o en
cuerdas". varios tamaños como la flauta
de pico, se caracterizaba por
El instrumento inglés una sonoridad más bien áspe-
denominado violet y también ra".
violette, no muy diferente de El compositor veneciano se
la violetta marina y viola adelantó también a su tiempo
d'amore estaba provisto de con la utilización de la trompa
un número inferior de cuer- vJol°r* G ««£>'*'. Veneoo S. XVil natural en tonalidad ajena a
, r , Conservorono Real, Bruselas
su sene armónica. Son raras
das para f r o t a r s e c o n el
las partituras en las que las
arco, mientras que las cuerdas que vibraban por simpatía
trompas en Fa no se toman
eran más numerosas,
en consideración". Una t r o m -
Parece que la denominación atl'inglese dada por los italianos
pa de cristal conservada en el
al conjunto de la familia de los instrumentos destinados a
Museo de Berlín fue construi-
usarse en los casos en que fuera necesaria una sonoridad
da en Venecia alrededor de
oscura y apagada encuentra su fundamento en la imagen de la
1750*\
irremediable melancolía inspirada por los ingleses'"1. Sabemos
que Vivaldi habla enseñado también este instrumento". Incluyendo dos trabajos
Vivaldi compuso unos 36 conciertos en los cuales figura el incompletos, Vivaldi compuso
violonchelo como instrumento solista junto a un número res- para fagot 39 conciertos pre-
tringido de instrumentos musicales". Derivado de la viola da vistos en su mayoría para la
braceo {basso di viola da bracero) y no de la viola da gamba, el Pietó. Esto es más bien extra-
violonchelo apareció en el siglo XVI y tomó su denominación, ño si se considera que no
probablemente, como diminutivo del violone. Entre los mejo- parece haber existido en la
Violonchelo. C Jonani, Veneoo, I 765
res ejemplares que han sobrevivido hasta nuestros días se época una tradición de músi-
Karl Mam Univ. Leipzig
deben recordar los violonchelos construidos en Venecia por ca para fagot solista37.
Domenico Montagnana, Matteo Goffriller y Cario Tononl28. Es difícil distinguir, estilísticamente, la escritura para clarinete
En los siglos XVI y XVII se empleaba el término woíone para en su registro más agudo, de aquélla que el compositor esta-
denominar vanos tipos de viola da gamba, particularmente una bleció para la trompeta en el registro de clarín. Clarinetes en
viola da gamba de afinación grave y, cuando se trata de algu- do aparecen en los conciertos RV556/P.84, RV559/P.74 Y
nas fuentes italianas, podría indicar un violonchelo. Desde el RV560/P.73, unidos a dos oboes; en el RV556 se añaden dos
1600 más o menos el término violone indicaba más bien un flautas de pico, dos violines y un fagot", Vivaldi trata el instru-
gran bajo de viola". mento de dos llaves como si se tratase de dos instrumentos
en uno: el pnmer clannete corresponde al registro de las fun-
Para su instrumento, el violín, Vivaldi compuso el mayor damentales (Fa'-Fa1), el segundo al de las duodécimas (Do*-
número de conciertos, acuñando para él efectos particulares Do') con el Sol' natural común a ambas.
como scordatura, violino in tromba marina, plomb?0. La escasa

SCHERZO 125
DOSIER

Vivaldl compuso Tanto para flauta (en la acepción de flauta


de pico, contralto) como para flauta travesera (Pauto Traversier
o Trovers, en la terminología usada por Vivaldi)1*. Encontramos
también el término flautín™ en el concierto RV445 y flasolet
(para indicar dos instrumentos de viento) y en un aria Di due
raí languire costante anónima encontrada en et interior del
manuscrito de lajuditho triumpbans". Las flautas de pico se
construían según un procedimiento llamado irt blocco único, por
aprovechar un solo trozo de madera; estaban provistas de siete
agujeros delanteros -uno de los cuales se duplicaba para que la
ejecución fuera también posible a los tañedores zurdos (el agu-
jero que no se utilizaba se cubría con cera)- y un agujero trase-
ro. La flauta travesera se construía con un solo trozo de made-
ra, principalmente. Hacia la mitad del siglo XVII se introdujo la
estructura por secciones (la sección superior permaneció siem-
pre ciltndnca) y el tubo se hizo ligeramente cónico'2.

En la op. Xltl y XIV se prevé el uso de instnimentos pastori-


les como la musette (un tipo de gaita) y la viella (una especie
de íanfoña*3.
Parece cierto que Vivaldi escribió sus primeros conciertos
para instrumentos de viento, para oboe. Originalmente en
francés haut-bots significaba «madera estruendosa» (legno fra-
goroso), con relación a ia antigua definición entre instrumentos
haut et bes".
Los dos tromboni da cacao indicados en el Concierto
RVS74/P.3 19 y en dos números de la ópera Orlando finto
pazzo crean algún problema en lo que se refiere a su identifi-
cación: la notación en clave de Do en primera línea (una octa-
va sobre la altura real), la escritura y el estilo parecen corres-
ponder mas a los comí da cacaa en Fa*s. Oboe, como inglés y dorinete A. Fomarí. Veneaa. Germonisdtes Notionolmu-
seum, Ntiiemberg
Trompetas en do o en re, acompañadas a veces de timba-
les, se requieren en distintas obras en movimientos festivos y
Las indicaciones de órgano presentes en las partes impresas
en marchas",
se deben entender, sin embargo, como que el bajo continuo
se puede ejecutar con todos los instrumentos de teclado, en
general. Instrumentos cuya identificación no resulta problemá-
5. Instrumentos de teclado tica al haber sido corrientemente utilizados en Venecia.

-tí.1 órgano y el clave son los instrumentos de tecla que Vivaldi Stefano Toffoío
utilizó para el bajo continuo en sus composiciones". Traducción: Arta Morfa Albtrdi Alonso

NOTAS: 7 de octubre 1990 (Palazzo Comunale - Sala ibidem Gut strings, «Eariy Music». IV (1976).
die Prowediton), Comune di Saló - Civiltá n. 4. pp. 430-437.
I. Vide 8. Cecchetti, Appunti sug/r strumen- Bresciana (de inminente publicación).
6. Cfr.R. Spencer. Chitoffone. 7heorbe and
[i mrjsicofi usov dai venezrani anvehi, «Archivo 2. Es elocuente con relación a esto la Arcbtute, «Eariy Music», IV(I976). n.4, pp.
véneto», NS, XXXV (I88B), parte I, pp. 73- petición de Constantijn Huygens al gran lau- 407-423. D.A. Smith, On the Origm of the
79 {el autor enumera, sin considerarlos toda- dista francés Jacques Gaultier para que le Chttnrmne. «Journal of the American Musico-
vía desde un punto de vista histórico y orga- consiga un gran laúd de Laux Malher. Vide logical Society», XXXII (1979). n. 3. pp. 439-
nológico. los siguientes instrumentos musica- las cartas de Gaultier a Huygens en Jonck- 462. G Ferrans, Luto. Archikuto, Chitarrone,
les: arpa, arpicordo, citara, clave, manacordo, bloet Land, Correspondonce et Oeuvres Musr- stnjmeníj dell'etd barroco m Italia, «II Froni-
lira, lirone, laúd, piffero, trompeta, tubiana, ca'es de Constantijn Huygens, The mo» XXXIX(I982), pp. 11-18. O. Cristofo-
órgano). G. Vio-S. Toffolo, La difusstone deglt Hague/Leyden, 1882, pp. CCVII-CCX retti, «Prefazione» a A. Piccmmi, Intavalatura
stnimenti musicali nelle cose dei nobili cittadini Sobre Laux Malher, cfr. Ánticlv stwmenti á Luto et di Cbitorrone. Libro Primo, facsímile
e popóla™ ne/ XV! secuto o Venezia. «II flauto veneziam cit, pp. 67-68. SPES, Florencia 1983. A. Damiani. // chitono-
dolce», nn. 17-18. octubre 1987-abnl 1988, ne ne/ Seicento italiano. Appunti sulla técnica
pp. 33-40 (allí se encuentran enumerados: 3. CfrM.G.Lowe, T>ie histórica! development esecutrvo. «II flauto dolce», n. 13/octubre
arpicordo. boson. citara, clave, cometa, trom- ofthe Lute in the I7tn Century, «The Galpin 1985, pp. 3-14. M. Caffagni, «Introduzione» a
pa, dutometo, pifan, flauta, lira, lirone, laúd. Soaety Journal», XXIX (1976). pp. I 1-25, R. A Piconini, Opera, II. Bologna. 1965. pp. VII-
monacordo, órgano, piva. espineta, subtotin, Lundberg, Sixteenth ond Seventeentn Cenlury XXX. H. Radke. Wodurch unterscheiden sich
tambor, trompeta, trombetta, trombón, viola, Lute making «Journal of the Lute Socieiy of Louten und Theorbe? «Acta rnusicologica»,
violin, vióleme, zompogne). S. Toffolo, Aniídti Amenca», Vil (1974), pp. 31-50. F. Hellwíg, XXXVII (1965), pp. 73-74 e ¡dem, íhe-
stnimenti venezioni. 1500-1800: quauro seco/i Lute constnjctjon rn the renaissonce and Baro- ortierte Laute füuto ottiort>atoj und Erzloute
di /ruteno e cembaloria, Venecia, Arsenal, que, «The Galpm Society Journal», XXVII (Archi Jauto,). «Die Musikforschung»,
1987 e ibídem, Gli swmenti musical) ne oípi'n- (1974), pp. 21-30. Para el periodo preceden- XXV(I972) pp. 481-484. F. Hellwig, The
ti vene ti del tempo di Leonardo Grustmran te, del mismo Hellwig, cfr. Lute making in the morfology of Lutes with Extended Boss stnngs,
(1388-1446), «Atti dell'lstiUito Véneto di Lote 15th ond lóth Centun/, «The Lute Society «Eariy Music», IX( 1981). n. 4. pp. 447-454.
Scienze Lettere ed Arti» (1988-89), Classe Journal», XVI (1974), pp, 24-38.
di Scienze morali, lettere ed arti, pp. 307-344
y Sul rapporto tro liutena e iconografía m área 4. Vide od vocem en Antichi sírumenti 7. Matteo Sellas construyó bastantes de
véneto-lombardo tro Crique e Sceicento, «Atti venezronr cit estos instrumentos, cuyas proporciones no
del Convegno «Liuteria e música stnjmenta- 5. Cfr. D. Abbott y E. Segerman, Stnngs m eran mayores que las de un laúd normal. Sobre
le a Brescia tra Cmque e Seicento», Saló 5-6- the / 6th ond 17xh Centuries, «The Galpm Matteo y otros miembros de la familia Sellas,
Society Journal», XXVII (1974), pp.48-73 e cfr. Antkhi stnimenti veneíioni cit, pp. 72-86.

Í2(JSCHERZO
ANTONIO VIVALDI

8. Cfh A. Piccinini, íntovoloíura di Liuto e! 18. La primera posibilidad no se sostiene. violín. indicaba generalmente el violonchelo;
di Cfíitorrone. Libro Primo. Bologna 1623 (ree- puesto que no tenemos pruebas que atesti- la viola moderna era llamada vioíetto o bien
dición, Bologna, Fomi, p. 8). Georg Kinski (en güen la supervivencia del laúd soprano en el (en razón de su papel en el interior del con-
el articulo Aíessondro Picatiini und se/n Arciliu- siglo XVIII. Las claves indicadas para las partes junto) oto viola o tenore viola».
to. «Acta Musicología». X(1938), n. 3. pp. del leuto en el manuscrito de Dresde (RV540) 23. Características peculiares de la viola
IO3sgg) demostró que el archilaúd de Pica- pueden sugenr que la parte del violin puede eran tener cinco o siete cuerdas en el mástil
nini es el mismo instrumento conservado ser transportada una octava baja. Para ello (principalmente seis); trastes de tnpa en el
actualmente en el Kunthistonsches Museum Vivaldi comienza el concierto presentando el mástil separados un semitono entre ellos: los
de Viena(C46). leuto con los bajos en clave de Fa en cuarta trozos de madera que la constituían tenían
linea, indicando de tal modo que puede llegar espesores infenores a los del violin; mango
9. Cfr. R. Spencer, op. cit, pp. 414-41S en hasta el fa del espacio debajo del pentagrama.
particular. combado hacia atrás y aplanado, más bien
Cuando el leuto toca su parte, solista, ésta, en amplio como consecuencia del número de
10. M. Praetorius, Syntogma Musicum (vo. cambio, está escrita en clave de Sol en segun- cuerdas; hombros caídos y aberturas de
II: De Orgonograpfia. Theavum Insüvmento- da linea a una altura excesiva para poder ser resonancia en forma de C; fondo plano;
rum seu Sctagrapfia), Wolfenbuttel, 1619. tocada por un instrumento que pueda produ- arcos laterales ligeramente marcados o bien
Trad. ingl. de H. Blumenfeld. New York Da cir también el fa grave. Si se da por desconta- semicirculares; ansias y picos no prominen-
Capo Press. 1980 (cfr. las pp. 49-51: 50). da la posibilidad de una trasposición a la octa- tes. Desde la violo soprano piccola a la orchi-
Sobre la tiorba, cfr. Ibidem. p. 52. va arta de la clave de Fa en cuarta línea (usada vrolo contrabosso. el arco se usaba del mismo
en el Largo por los violines), esto implicaría modo, cogiéndolo con la mano cuya palma
I I. En Principes d'acoust/qiies, París, 1701, que la parte solista fije transportada una octa-
planche(3}Mr. B, Spencer, op. cit, p. 414. gira hacia amba. La ligera curvatura de las
va de modo que pudiera ser ejecutada por el ennes, típica de los arcos modernos, apare-
12. Vide A. Piccmmi, op. cit. {ed. Fomi mismo instrumento que habfa tocado al ció solamente en tomo a la mitad del siglo
cit.), p. 5. comienzo del concierto. Esta doble notación XVIII. En la Regola Ruberhna (Venezia, 1542)
de claves queda confirmada en los manusen- de Silvestre Ganassi se encuentran indicacio-
13. Cfr. M. Mersenne, Harmonie Universe- tos para archilaúd de la época: clave de Fa
lle, París, 1636-37, tav, XV y Sécemete portie nes precisas sobre la técnica del arco. El arte
para el tute y clave de Sol en segunda línea de los violeros venecianos ha dejado tam-
de í'Harmonie Umverselle: LIVK Septiesme des para el solo. En el movimiento lento, a causa
Instruments, p. 77. bién testimonios muy significativos en la
de las trasposiciones a la octava baja se pre- construcción de estos instrumentos de arco.
14. Según el testimonio histónco referido senta un problema (mas en el papel, como
por Spencer (op. cit, p. 411) y Smith (op. dice Spencer en las notas al CD-290 Stereo,
1985, Gramophon AB BIS, que en la escucha), 24. Cfr. od vocem en Antichi strumenti
cit, pp 458-459) el término tiorba designaba venezianí cit p, 109. La lista de los seis con-
en su origen, en el siglo XVI, una zanfoña, el en cuanto que los acordes del leuto aparecen
en inversión debajo del bajo. Aceptando la ciertos destinados a la viola d'amore, se
instrumento de los ciegos (viola da orbo). La encuentra en W. Kolneder. Vivaldi cit.. pp.
raíz trb, que en tas países esclavos (cfr, Curt solución del problema de la octava no queda
más que decidir si Vrvaldi habría previsto un 192-194. La afinación corriente del instru-
Sachs, Storio degli strumenti muscati. Milano, mento (de seis cuerdas) era en Re menor el
Mondadori, 1980, p. 442) indica «qualcosa di laúd barroco en Re menor (con once o trece
órdenes) o bien un archilaúd en Sol (con trece ámbito melódico se mueve entre el la' y el
ngoníio come un sacco o un ventre, é fre- re¡. Talbot (Vivaldi cit.. p. 145) indica siete
quente. Una relazione con una parola slava é conciertos para viola d'amore solista (com-
la piü probabile dacché esiste in Ucraina un 0 catorce órdenes). Cuando recordamos que prendiendo una variante), frente al parecer
tipo di tiorba sotto ¡I nome di torban». Italia (al menos en el estado actual de nuestro de Kolneder.
(«algo hinchado como un saco o un vientre, conocimiento) no fue receptiva en las con-
es frecuente. Alguna relación con la palabra frontaciones con el laúd barroco francés y que La viola d'amore entró a formar parte del
eslava es muy probable ya que existe en los laudistas italianos mantuvieron la afinación conjunto de los instrumentos de la Basílica
Ucrania un tipo de tiorba llamado torban». renacentista (cuando ésta, fue, en cambio, de San Marcos en 1689; en 1708 fue intro-
abandonada alrededor de 1630 en otros paí- ducida en la Pietd.
15. Cfr. E. Selfridge-Field, La música stru- ses europeos) en sus laúdes tiorbados y archi- 25. Vide K. Speaking, II violoncello. pp. 141-
mentale o Venezia do Gabriel: a Vivaldi, Ton- laúdes (provistos por lo menos de un tnsdéci- 154 ¡n Storio degJi strumenti musical! (supervi-
no, ERJ. 1980. passim y, de la misma autora mo orden afinado en Sol grave, debajo del sada por A. Raines). Milano, Rizzoli, 1983.
Music ot the Pietó be/ore Vivaldi. «Early pentagrama), entonces el problema se resuel- Cfr. también E. Selfridge-Field, Vivaldi esotenc
Music». XIV(I986), n. 3, pp. 373-386 y Pallo- ve por si mismo. La libertad que tenia el ejecu- Instruments cit, p. 134 y M. Talbot, Vivaldi cit,
de véneta, Venezia, 1985, y Vivaldl's esotenc tante de reforzar el bajo cuando y cómo dese- p. 208 nota 2.
instrumente, «Early Music», VI(I978), n. 5, pp. ara, nos permite comprender por qué la octa-
332-338. va se indicaba raramente. 26. Sabemos que Vivaldi enseñó también
la viola inglesa: {¡continuando con fruxto don
Cuatro tiorbas que suenan en dos partes Antonio Vívala maestro di violin delle figliole e
figuran en el vanado conjunto de instrumen- 19. Vivaldi, que había incluido la mandoli-
na en un ana de lajuditho tnumphans pudo con assidua assislenza anco nell'insegnamento
tos de \ajuditha triumphans, junto a dos flau- della viola inglese, (...)». («continuando don
tas de pico, dos oboes, un cho'umeou sopra- haber esento para el marqués Guido Benti-
voglio d'Aragona, su protector, el concierto Antonio Vivaldi maestro de violin de las
no, dos clarinetes, dos trompetas, con timba- huérfanas también en la enseñanza de la
les, mandolina, órgano obligado, cinco violas para mandolina P.I34 y el de dos mandoli-
nas P. 133. Cfr. la carta de Vivaldi a Bentivo- viola inglesa con aprovechamiento y asidua
•/fingiese y viola d'omore, cuerdas frotadas asistencia, (...)» (Cfr. ASV. Ospedati e Luoghi
por arco y bajo continuo. glio cit en Kolneder, Vivaldi, cit p. 208. Uno
de los cuatro conciertos interpretados en la Pii. b.688, Ñoratorio 7/G de los papeles de la
16. M. Talbot Vívala. Tonno. edt, 1978, Pietó en 1740, lleva el siguiente título: Con- Congregación, c. I 28N. Vide también el
catalogo Vivaldi e ¡'ambiente musicole venecia-
pp. 186-87 y W, Kolneder, Vivaldi. Milano, ceno con Due Flauti. Due Teorbí, Due Mando- no, p. 59). El documento, fechado el 17 de
Rusconi. 1978, p. 189. lim, Due Salmo, Due Vlolim in tromba marina
et Violoncello. agosto de 1704, informa de la aprobación
17. Los dos trios para leuto. dos violines y (con 8 votos sobre nueve) del aumento de
bajo continuo y el concierto para leuto, dos 20. Cfr. ad vocem in Antichi strumenti vene- honorarios a Vivaldi por sus méritos.
violmes y bajo continuo de la colección de nan cit. pp. 130-131. Sobre la mandolina y
Turin llevan en la primera página la inscrip- la mandola, cfr. las interesantes contribucio- 27. En estas obras, en las cuales el conjun-
ción: «Per Sua Eccellenza Signor Conté Wrt- nes de |. Tyler, The Italian mandolín and man- to de instrumentos era mayor, éste era indi-
bij» (inscripción dada por el mismo Talbot dola 1589-1800. «Early Music» IX(I98I). n. cado como instrumento obligado: denomi-
Vivaldi, cit. pp. 173-174. A estas composicio- 4. pp. 438-446 e ídem. The mondore m the nación que debe entenderse, según Kolne-
nes (RV82, RV85 y RV93/P. 209) va unido el 1 óth and I 7th centuries, «Early Music». IX der (Vivaldi cit, p. 186), en el sentido de
volumen de Dresde (RV5407P. 226) el Con- (1981) n.l. pp. 22-31. Concertó grosso. utilizándolo como apoyo
certó con viola d'amar, e leuto, e con tutti gl'ins- 21. Cfr. Antichi strumenti veneziam pp. 101- del concertino. Cfr. también M. Talbot, V'wal-
ttumenti sordini, ejecutado en 1740 en la fieto, 115. di, cit, pp. 125-126.
con la presencia del Elector de Sajorna. (La
tabla de las correspondencias numéricas entre 22. Cfr. W. Kolneder, Vívala cit, p. 192. 28. Ver od vocem Anticbi stwmenti vene-
los catálogos de Pincherle y Ryom se encuen- Según Talbot (Vivaldi p.200 nota 24): «la viola, ziani cit Hacia el final del siglo XVII. algunos
tra en Talbot Vívale, cit. pp. 269-272). cuando no se trataba de un término genérico violonchelos fueron provistos de una quinta
para señalar instrumentos de la familia del cuerda; se experimentaron también instru-

SCHERZO 127
DOSIER

mentos más pequeños, con la misma afina- Venecia en 1744 por Michele Barditler (cfr. mentos fue afrontada iniciaímente (antes
ción que el violonchelo, pero que podían ser Antich stmmenti venezioni cit. p. I 17). todavía que por Lasocki, recordado por Tal-
tocados como el violin. Para completar la 33. Una contribución fundamental ha bot, Kolneder y Selfridge-Field) por
evolución del violonchelo se juntó la intro- W.CMetcalfe, Doíce or traverso7 The Flauta
ofrecido M. Talbot con su artículo Vívala e lo problem ¡n Vivaldi's Instrumental musi'c «The
ducción de cuerdas más sutiles y rígidas, que
permiten una sonoridad mas clara e incisiva. chalumeau, «Rivista rtaliana di Musicología» American Recorder», VI (1965). n. 3, pp. 3-
XV(l980),pp. 153-181. 6. D. Lasocki, Vívale and [he Recorder, «The
29. Ei ejemplo más conocido en la icono-
grafía quizás es el del woíone. representado 34. Vivaldi (que llama al instrumento sol- American Recorder», IX (1968). n. 4, pp,
en las Bodas de Cana de Paolo Veronese, moé, salmo), utilizó el chalumeau soprano en 103-107. Vide también W. Kolneder, Wvafdi
que está en el Louvre. Ver también las ilus- el aria de Giuditta Vera", ven! me seguere, para crt., pp. 194-199. Talbot VWdr crt, pp. 147-
traciones 58 y 59 de las pp. 134-135 en evocar el arrullo de las tórtolas (la parte 148 y E. Selfridge-Field, WvaJdr's esoteric rrts-
Antichí strumenü veneziam cit., donde se solista se mueve entre el laJ y el sib*. sugí- rrurnenrs cit, pp. 336-338.
reproducen dos violines, uno atribuido a nendo así. una extensión del fa' al sib'). En el
Giovanni Racaldim. y otro ciertamente cons- Concertó fúnebre aparece el chalumeau tenor 40. Cfr. D. Higbee, Micheí Corrette or> trie
entonado una octava baja (la sordina está Prccoío and Specu/otions Regarding Vivaldi's
truido por este violero veneciano (M 1378)
con una inscnpción original que dice: Zuano indicada en ambas composiciones). Chalume- (íflautinoii, «The Galpin Society Journal»,
au tenores en Do (con una e>ctensión soP- XVII (1964) cit porE. Selfridge-Field in Vival-
Racaldiní, al msegna de( bosso, m Venetia. di's esotenc Instruments cit., p. 336.
Ambos instrumentos, construidos a princi- do') encontramos en la sonata a cuatro de
pios del siglo XVIII. están conservados en el Dresde y en los conciertos RV555/P.87 y 41. Cfr. M. Talbot, Vívala crt. pp. 147-148
Conservatoire Royal de Musique de Bruselas. FSV558/P. 16 (las partes están escritas una y E, Selfndge-Field. Vívaldl's esotenc instru-
octava baja, en clave de fa en cuarta línea). menís cit, pp. 336-337.
El uso de los grandes bajos de viola se 42. En un primer momento las secciones
retrotrae al final del siglo XV, al menos. La 35. Talbot (Vívala, cit.. p. 181) cita tres eran tres, puesto que la inferior se subdivi-
identificación del instrumento morfológica- tipos de notación para trompa en las com- dió, constituyendo otra sección (el pie) en la
mente definible como conrrobosso y ei resu- posiciones de Vivaldi: « I . Las partes que no que se colocó el séptimo agujero. Este,
men de su evolución histórica resulta difícil suben más allá del armónico duodécimo se cubierto por una llave, producía el semitono
por el uso, no siempre claro, con el que el transportan una octava baja. (...) 2. Las partes (re sostenido) sobre el sonido más grave de!
término ha sido utilizado. que suben hasta el armónico decimoctavo instrumento. En el Conservatorio Benedetto
30. W. Kolneder. Vívala, cit, pp. 173-183. (do*) se escriben a la misma altura que sue- Marcello de Venecia se conservan una flauta
M. Talbot Vwaldl crt, pp. 142-143 y nota 29 nan realmente. 3. Para algunas partes que dulce (ex inv. 28. ahora inv. 765) de Pellegrin
de la p. 207. suben hasta el armónico tredécimo se usa la di Azzi, Venecia (siglo XVIII) y una flauta
31. Tanto Talbot (Vívala cit. p. 144) como moderna trasposición de la trompa en fa, dulce anónima de marfil (inv. 28).
E. Selfndge-Field (Vivaldí esotenc Instruments tocando una quinta baja».
crt, p. 135) definen la trompeta marina como 43. No nos ha llegado ningún ejemplar de
36. Se trata del ejemplar n. 417 (del Staa- escuela veneciana. Casi nada sabemos del
una especie de monacordio que sonaba tlisches Instituí für Musikforschung). Vide la
enteramente con los armónicos naturales. Sin uso y la difusión de la gaita y ¡a musette. en la
embargo, Praetorius (cfr. la ed. inglesa cit, pp. ilustración 37 de la p. 178 en Anvch stru- ciudad de Venecia tanto a nivel profesional
57-59) menciona claramente la existencia, en menii venenan! cit. como amatorio.
su tiempo, de un instrumento provisto de 37. Cfr. Talbot. Vívala crt., p. 181-182 y 44. Vide W. Kolneder, Vívala crt., pp. 199-
una cuerda más larga y de otras tres de Kolneder, Vwaldi crt.. pp. 203-204. 202. M. Talbot Vivaldi crt, p. 126 y pp. 145-
menores dimensiones (cfr. Tv XXI) afinada
Do, do, sol. do'. La cuerda más larga, pinzada 38. W, Lebermann, Zur Resetzungsfrage 146. A. Bemardim. The oboe <n the Venetrán
con el pulgar o tocada con el arco, producía der Concertí grossr van A. Vívala, «Die Musik Republic 1692-1797, «Early Music», XVI
forschung», Vil (1954). pp. 337-339. W. Kol- (1988). n. 3.. pp. 372-387.
la melodía, vibrando por simpatía las restan- Óigase el oboe barroco de Michel Piguet
tes. Siguiendo el testimonio de Praetorius, neder, ti concerco per due trombe di Antonio
escuchándolo a distancia con agradable vWalé. «Rivista Musicale Italiana». LV (1953) en el CD Vivaldi, 11 Cimento dell'Armonto e
armonía resonaba, como si hubiesen sonado ídem, Die Klannette ais Concemno-insvvment dell'lnvenzione, 12 Conciertos, op. 8 (Decca,
simultáneamente cuatro trompetas. bel Vívale, «Die Musikforschung», IV (1951). L'Oiseau Lyre, OH-2/417515) y se com-
pp, 185-191, ibídem Nach einmal: Vívala und prenderá mucho mejor que con palabras lo
Hans Memlmg (1435/40-1494) representó die Klarínette, «Die Musikforschung», Vil que se puede conseguir con este instrumen-
(junto a otros ángeles músicos con sarteno, (195S). pp. 209-21 I; T.E. Hoeprich, ñndrrrg o to (se entiende lo mismo, naturalmente, para
laúd, trompeta, bombarda, órgano portativo. dannet for tdree concertos by Vívala. «Early todos los demás instrumentos históricos
arpa y violo d'orco) un ángel con una trompeta Music», (1983), n. l.pp. 61-64. incluidos en la grabación).
manna frotada por arco. La pintura se encuen- Debe notarse que algunos estudiosos han 45. La conclusión, con Talbot (Vivaldi cit,
tra en Amberes en el Kononlijk Museum, mantenido (a causa de la patente identidad p. 154), es que tales instrumentos deben
32. Tanto el salterio pmzado (tocado con estilística entre las partes escritas para el «ser parientes próximos de la trompa, si no
plectro o con los dedos), como el de cuerda registro más agudo del clannete y las escritas son la misma cosa». Cfr., también E. Selfnd-
percutida (tocado con baquetas largas y suti- para trompeta en la extensión de sol1 a do5) ge-Field, Vivaldís esotenc instruments cit.. p.
les o con espátula) tienen un ongen onental que los instrumentos llamados por Vivaldi 337.
y se definen con las c ararte rist i cas propias dannetti (¡n RV559 y RV560) o daren(i) (en
antes de su introducción en Occidente 46. Vivaldi llama tarnburn, timbad o tam-
RV556 y en lajudrtfia tnumphans), o también bién limpam a los instrumentos de percusión.
(según algunos estudiosos en el siglo XII. ctanru (en el movimiento lento del RV556)
según otros en el XIV). Según la forma y Un timbal (n. 208) veneciano del siglo XVII,
debían de ser trompetas. El término clarín de autor desconocido, se encuentra actual-
dimensiones podía ser mantenido en el rega- aplicado tanto al instrumento como a un
zo con el lado más largo apoyado al cuerpo y mente en París, en el Consen/atoire National
registro determinado parece haber sido una Supéneur de Musique.
pinzado con ambas manos, o, también, podía característica alemana, pero no italiana.
tocarse pinzando las cuerdas con una sola 47. El órgano y el clave (en general los instru-
mano, mientras el dorso de la caja se apoya- 39. La distinción entre uno y otro instru- mentos be teclado) tuvieran una tradición anti-
ba en el pecho del tañedor. Un tipo de Salte- mento ha sido largamente debatida (después gua e ilustre. Para el pnmero. vide S. Dalla Libe-
no era el dulce mete de cuerdas golpeadas, de haber sido largamente ignorada). Las edi- ra. Larte degf orgoni a Venezra Florencia 1962,
forma trapezoidal y provisto de una o dos ciones modernas indican, sin distinción, /Jau- reedición 1979. Para el segundo cfr. la Porte
aberturas de resonancia en la tabla armónica. to en los conciertos vivaldianos. El Prete rosso quarta (Instrumentos de teclado/Constructores
Las cuerdas podían ser de tripa, acero o bien probablemente no escribió para flauta trave- de instrumentos de teclado) en S, Toffolo. AntJ-
de metal, dispuestas en órdenes de dobles o sera antes del final de los años veinte. chísmjmeno venezioni crt.pp. 145-167).
triples, corrientemente cuádruples o quíntu- Son reveladores, para la (listona del ins- Véanse, por otra parte las observaciones
ples. Hasta los siglos XVIII y XIX se afinaba trumento, los manuscritos de la Biblioteca más estrictamente organológicas ofrecidas
en una escala parcialmente cromática o dia- Nacional de Turin de cinco de los Concier- por D. Wraight en la voz «Harpsichord»
tónica, con veinte órdenes de coros o vein- tos publicados en la op. X para los que se (sección italiana) en The New Grove Musical
tiuno; actualmente se construye enteramente prevé un conjunto de instrumentos distinto (nstíumeni Dictíonaiy 3 vol., Londres, Mcmi-
cromático. El Royal College of Music de Lon- del indicado en las ediciones impresas. llan, 1985. parágrafo 2. pp 166-172 y pará-
dres conserva un dulce mebs construido en grafo 4, pp. 186-188.
La problemática relativa a los dos instru-

7.2&SCHERZO
DOSIER

Las transcripciones
«Fue en Plma donde por primera vez vi los conciertos de

L
os diecisiete conciertos para clave solo (BWV 972-
987 y 592a) constituyen, junto con los cinco concier- Vivaldi. Me parecieron obras de un género totalmente nuevo
tos para órgano solo (BWV 592-596), los ejemplos que me causaron una profunda impresión. No tardé en colec-
más antiguos del interés de Bach por el género del cionar una buena cantidad de estos conciertos. Debo decir
concierto italiano. que los bellísimos ritornelli de Vivaldi me sirvieron como
En todos estos casos se trata de transcripciones de concier- excelentes ejemplos en años posteriores».
tos ya existentes de diversos compositores, las cuales fueron También han llegado hasta nosotros catorce transenpciones
realizadas por Bach durante su estancia en Weimar (1708- de conciertos de varios compositores (Albmoni, Blamr, Corelli,
1709). La mayor parte de estos arreglos, cerca de diez, provie- Gentili, Gregori, Manzia, Mack, Tagliqjti, Telemann, Torelli y
nen de conciertos de Antonio Vivaldi (BWV 593, 594, 596, Vivaldi) arreglos de la pluma de Jojpnn Gcttfned Walther
972, 973, 976. 977?. 978 y 980): les siguen conciertos de Ales- (1684-1748). Walther era sobrino en segundo gradóle Bach
sandro Marcello (1684-1750) (BWV 974), Giuseppe Torelli y era organista de la iglesia de San Pedro y San Pablo en Wei-
(1658-1709) (BWV 979). Benedetto Marcello (1686-1739) mar durante la época en la cual Bach estaba empleado en la
(flWV 981), Johann Emsfvon Sachsen-Weimar (BWV 982, corte de Wilhelm Emst von Sachsen-Weimar. Es bastante difí-
987, 592a), Georg Philipp Telemann (1681-1764) (BWV 985); cil saber si Walther realizó sus transcripciones antes o después
unidos a este corpus encontramos también tres conciertos de de Bach. Lo más creíble es que ambos compositores hayan
procedencia desconocida (BWV 977, 983, 966). La práctica de tenido contacto en relación a sus respectivas transcripciones.
la transcripción de obras vocales e instrumentales para instru-
Existe otra teoría en la 4íal juega un'papel importante el
mentos de te<J|& se hallaba ya bastante arraigada en la Alema-
príncipe Johann Emst (1696-1715), sobrino del duque regente
nia de tiempos anteriores a Bach; no olvidemos empero que
de Weimar, Wilhelm Emst. Philipp Spitta indicó ya * n su
esta técnica estaba ya bastante difundida en otros países euro-
monumental biografía de Bach (Leipzig 1873, Tomo I, p. 4()9)
peos. Así podemos comprobar que las transcripciones de Bach
el interés que mostraban los compositores pertenecientes al
se encuadran sin dificultad en una tradición cuyos orígenes se
círculo del príncipe por los conciertos italianos. No olvidemos
remontan a la Edad Media.
que tanto Bach como Walther pertenecían a este círculo y que
Aun teniendo en cuenta esta antigua tradición arriba men- seguramente este interés lo manifestaba antes que nadie el
cionada, se nos escapa por el momento la mismo príncipe. Otro autor, Charles San-
razón real que Bach haya podido tener ford Terry, va aún más lejos al afirmar en
para realizar sus transcripciones para clave su biografía (johann Sebastian Bach, eme
solo. Para adarar este enigma se han lanza- Biographie, Leipzig 1929, p. 61) lo siguiente:
do varías teorías desde el siglo pasado. «Las competentes transcripciones de
Una de ellas supone que Bach realizó Bach de obras de otros compositores se
estos trabajos a fin de llegar a un mejor originaron seguramente a instancias del
conocimiento de la técnica del concierto principe».
italiano. Esta teoría se basa fundamental- También Johann Mattheson (1681-
mente en un fragmento tomado de la pri- 1764) indica en su Das Bescriütze Orches-
mera biografía de Bach, escrita por Johann tre (Hamburgo 1717), que la interpreta-
Nikolaus Forkel (1749-1818), Über Johann ción de transcripciones se puede relacio-
Sebastian Botris Leben, Kunst und Kunstwer- nar con la persona del príncipe Johann
fce (Leipzig, 1802, p. 24): Emst; así leemos en las páginas. 129-130 lo
«Bach se sintió movido a realizar estas siguiente:
transcripciones a raíz de la publicación «El hecho de que este género musical
entonces reciente de los conciertos de se puede interpretar en un instrumento
Vivaldi. Bach había escuchado ya numero- de carácter polifónico, como son el órga-
sos comentarios favorables sobre estos no y el clave, lo demostró hace algunos
excelentes conciertos y fue entonces cuan- años el famoso organista ciego de.la Igle-
do decidió transcribirlos todos para clave y Caricatura de Vrvolá pof P.L Ghezzi, en 1723 sia Nueva en la plaza del Dam en Ams-
órgano. Estudió el discurso musical, la rela- terdam, Jan Jacob de Graaf. El se sabía se
ción de las voces, la diversidad en las secuencias de acordes, memoria todos los conciertos italianos, sonatas y demás
las modulaciones y muchos otros aspectos». obras a tres y cuatro voces recientemente publicadas; ade-
más los interpretaba en mi presencia con una transparencia
En la misma obra (p. 60) señala Forkel que estas composi-
y brillantez excepcionales en el sublime órgano de la igle-
ciones también pueden haber funcionado como músico svb
sia».
commoniorie (música durante la comunión):
«En tiempos de Bach se solía tocar durante la comunión un Johann Jacob de Graaf (ca. 1672-1738) tenía el puesto de
concierto o una sonata en cualquier instrumento a la mano». organista de la Iglesia Nueva de Amsterdam desde el año de
También Johann Joachim Quantz (1697-1773) menciona el 1702. Seguramente Mattheson los escuchó poco después de
género concierto como un «objeto de estudio». En su auto- 1710, tal vez cuando viajó a Holanda en una misión diplomáti-
biografía (escrita antes del año 1714) publicada en la obra His- ca relacionada con la firma de la paz de Utrecht (17! 2-13). El
torisch-hitísche Beytrdge zur Aufnahme der Musik, Tomo I, p.príncipe Johann Ernst, quien estudiara en la universidad de
205 de Fnedrich Wtlhelm Marpurg (Berlín, I 755), encontra- Utrecht de 171 I a 1713, visitó la ciudad de Amsterdam en la
mos los siguientes coméntanos: primavera de 1713; movido por su profundo amor a la músi-

7JOSCHERZO
ANTONIO VIVALDI

ca, escuchó tal vez en esa ocasión las transcripciones del orga- sólita, en el cual compiten una parte sólita con el grupo en su
nista ciego de Graaf. totalidad (tutti); a este género se le puede llamar una forma
Amsterdam era en aquella época uno de los centros más especial del concertó grosso.
importantes en el campo de la imprenta musical. En 1712 Es a partir de Arcangelo Corelli que el concierto adquiere su
apareció por ejemplo la edición de L'Estro Armónico opos 3 de forma clásica. Antonio Vivaldi consolidó y enriqueció musical-
Antonio Vivaldi, publicada por la casa Estienne Roger y Michel mente esta forma, sobre todo en lo referente al concierto para
Charles Le Cene. El príncipe no dejó de adquirir grandes can- solista, que adquiere su característica tripartita. Los movimien-
tidades de publicaciones para uso en su corte en Weimar. tos exteriores son en tiempo rápido, mientras que el movi-
Desafortunadamente no existen especificaciones de las adqui- miento intermedio se desarrolla en tiempo lento. Algunos de
siciones en los libros de conta- estos primeros ejemplos de
bilidad de dicha corte. conciertos contienen más de
A su regreso a Weimar en tres movimientos, entre los
I7|3, el príncipe Johann Ernst cuales podemos encontrar res-
tomó clases de composición tos de danzas como es la gigue.
con Johann Gottfried Warther. Aquí se manifiesta la influencia
El primer resultado de estas cla- de géneros como la canzona. la
ses fue la publicación realizada sonata de iglesia y la sonata de
bajo la égida de Warther de los cámara.
seis Conciertos opus /, obras Bach utilizó diversos méto-
estas en estilo italiano. Tal vez se dos y técnicas al transcribir los
pueda comprobar una relación diecisiete conciertos para clave
directa entre el entusiasmo del solista. Los temas se presentan
principe por el nuevo estilo ita- sin cambios radicales. Los cam-
liano por una parte, y las trans- bios más importantes los reali-
cripciones de Bach y Walther za Bach en las partes solistas.
originadas en Weimar. Más facti- Algunas veces reduce ciertas
ble es el hecho de que el princi- secuencias largas, otras cambia
pe haya escuchado al organista tiempos y signos de interpreta-
Jan Jacob de Graaf en Amster- ción. La conducción del bajo la
dam, y que de regreso a su casa vuelve más dúctil empleando
haya ordenado a los músicos de notas de paso, así como la línea
su corte (Bach y Walther, según melódica de las voces internas.
Spitta) realizar transcripciones Acordes con un carácter pesa-
similares a las de Graaf. Se do ios transforma Bach en
puede debatir sobre la vigencia arpegios, así como metamorfo-
de estas dos hipótesis (tal vez se A &>&•rEtraUl * Haussmonn sea los sonidos tenidos del vio-
pueda pensar en una combina- lln en efectos de tecla prácti-
ción de ambas teorías); de cualquier manera es un hecho que cos. También completa las armonías del original basándose en
Bach realizó sus transcripciones de los diecisiete conciertos las cifras del bajo continuo, así como introduce ciertas diso-
durante su empleo en Weimar, esto es, entre julio de 1713 y nancias aquí y allá. Bach compone nuevos contrapuntos y
julio de 1714. voces internas haciendo uso de técnicas como son la imitación
y el canon que producen efectos rítmicos complementarios. El
En 1708 Bach fue nombrado organista de la corte y músico resultado final es un enriquecimiento del contenido musical
de cámara en la residencia del príncipe Wilhelm Ernst von original: un Vivaldi claramente reconocible pero con una
Sachsen-Weimar {1662/1683-1728); fue el sucesor de Johann nueva vestimenta proveniente del taller de Bach.
Effler en este puesto. La simpatía entre Bach y el duque
regente es evidente; así leemos en la Necrología de Bach, Forkel por un lado no tenía en mucha estima las pnmeras
publicada por Lorenz Mizler en su Musikaliscke ñibiiothek. obras para teclado de Bach, ciertamente no los diecisiete con-
Tomo 4, tercera parte, p. 163 (Leipzig 1754), el testimonio ciertos mencionados; para él se trata únicamente de material
siguiente: «las interpretaciones de Bach agradaban de tal de estudio y ejercicios de composición («las transcripciones le
manera al duque, que éste conminó al músico a perfeccionar- enseñaron a pensar en términos musicales»). Cari Friednch
se en el arte de tocar el órgano». En 1714, Bach fue nombra- Zelter (1758-1832) atacó acremente estas palabras de Forkel.
do no sólo organista de la corte sino también maestro con- Zelter estudió con uno de los alumnos más destacados de
certador. Esta feliz estancia en Weimar terminó con una nota Bach. johann Philipp Kimbergen fue Zerter uno de los promo-
disonante cuando se presentó la cuestión de la vacante de tores más notables del renovado interés por las obras de Bach
maestro de capilla, ya que tanto Bach como el príncipe se y Hándel a principios del siglo XIX. Tal vez las apreciaciones
mostraron renuentes a cambiar sus puntos de vista en rela- de Zelter puedan motivar a organistas y clavecinistas para
ción a esta cuestión. Llegó a tal punto la divergencia de opi- integrar a sus respectivos repertorios las transcripciones de
niones que el asunto acabó con el arresto de Bach y su consi- Bach, a fin de llegar a interpretarías en conciertos públicos
guiente despido en 1717; todo esto tuvo un final tragicómico mucho más frecuentemente de lo que actualmente se hace.
después de un mes de prístón. Así se las podría apreciar cabalmente; aun más, se rendiría así
homenaje a dos compositores a la vez.
Los ejemplos más antiguos de conciertos provienen de la
última década del siglo XVII. En estas primeras obras pode- Zelter «Se ve claramente que Forkel no quiere correr nin-
mos verificar la presencia de dos grupos de voces similares o gún nesgo al enaltecer únicamente las obras íntegras y perfec-
diversos, los cuales compiten entre sí (del latín concertare) tas. Pero nosotros no queremos privamos de nada, aun de lo
según las fórmulas modulatorias propias de la sonata de la que se cree de mala calidad».
época barroca, Al género resultante lo hemos llegado a llamar Clemens Romijn
concertó grosso. Más tarde hace su aparición el concierto para
Traducción; Mauricio Fernández Qró&ñez

SCHERZO 131
E LÉ FON O MÓV

MOTOHOl A i KICSSÚN ACSSA, AtCATFL AMPER


t SPANA. S A tl.HMINAL LÍT AUTOMÓVILES. 9On I 0 | VIO COSESA
tOn ion n i MÜVlltS. SA COMUNICACIONES 9OO IDO I E4 90O 100 162
Y SERVICIOS

t ll.ntt.iinli> -»l 900 IOV M O i l i


Con el Teléfono Móvil se habla desde donde
quiera('). Así de fácil. Se habla con teléfonos ca-
da vez más pequeños y asequibles. Con una
extraordinaria calidad en la comu-
nicación, gracias al más avanzado

I L Sistema de Telecomunicación. Se
habla sin esperar. Porque Telefóni-
ca le da la línea inmediatamente.
Así de rápido. Para llevarlo en el
coche o en el bolsillo. Así de cómodo. Así de útil.
Póngase un Teléfono Móvil. Así se habla mejor.
{-) Dentro •**-! arpa de cobertura.

ABL-A oqp
TELEFÓNICA
SOCIO EN
TELECOMU NICAC1ONES
DEL0SJ|0O • «

INDELEC MATflA NEC OLIVETTI PANASONIC

EXFW2'
9OO IOO H A 9OO 3OO I ÍO IBFlICA 5 A OFFICE ESPAHA.S A
900 102 210 900 3 7D Í ' O 400 I CU 9 9 Í

TELEFÓNICA
SOCIO TECNOtOCICO

Telefónica T PKOVÍÍDOS OFICIAL


EN m E C O M U N O C I O N Í Í
ENCUENTROS

Helmuth Rilling:
«La música debe hablar»
Helmut Rillmg ha tardado en hacerse una fama pero es hoy uno de los intérpretes
más respetados de la música barroca. Su nombre se ha convertido en uno
de los puntos de referencia de la interpretación de la obra de Johann Sebastian
Bach, aunque no desdeñe el repertono-especálmente las obras sinfónico corales
del periodo romántico. Nacido en Stuttgart en el año terrible de 1933, ciudad
en la que actualmente dirige la Academia Bachiana, en ella se formó como músico,
viajando más tarde a ampliar estudios en Nueva York y en Roma. Sus primeros
puestos como director de coros y orquesta los ocupó en Frankfurt y Berlín, y fue
en 1981 cuando pasó a regir la citada institución musical. Hombre afable y cortés,
que durante la entrevista pareció animarse de una manera especial al hablar
de España y de sus grabaciones de música española, Rilling habló con nuestro
corresponsal en Alemania, Ricardo Bada, de sus ¡deas sobre la música,
de sus proyectos y de sus trabajos más recientes.

S
CHERZO.-Su formación, en el desarrollando y diferenciando a lo largo reconstruir es el oyente de entonces, el
seno de una familia de músicos, de mí ya larga carrera musical. ser humano para quien fue compuesta
puede decirse que es amplísima y S-¿Podrió valorar su propia significa- aquella música, a quien esa música se
que toca aspeaos muy distintos del arte ción en el terreno de la interpretación dirigía. Y ese ser humano ha cambiado
musical ¿Por qué se decidió finalmente bachiana después de lo aportado por por completo. Nosotros, hoy, somos
por la interpretación, por la coral en par-hombres como los ya citados, de lo apor- seres humanos por completo distintos
ticular? ¿Qué trascendencia tuvo para tado previamente por Atbert Schweitzer o de aquellos que oían la música de Bach
usted en este sentido su contocto con Ramm? en las iglesias de Leipzig. Nuestra com-
Hons Griscnkat? H.R.-Me parece por una parte prensión de la música es otra, y por ello
HELMUTH RILLING.- Ocurre que importante saber a ciencia cierta lo que pienso que esta música tiene que ser
nací en el seno de una familia que, por se hacía musicalmente en tiempos de traducida, éso es lo que quiero decir al
una parte, es una familia de músicos, Bach, cómo, con qué conjuntos y la hablar de traducción. Y creo, repito que
pero por la otra es una familia de teólo- composición de esos conjuntos, los ins- por mi parte, que lo consigo mejor con
gos. Y ambas partes me han acrisolado trumentos de que se valían y con qué los instrumentos y con los coros de que
fuertemente. Ya de niño hice mucha coros y qué solistas trabajaban enton- disponemos hoy, mejor que un intento
música, estudié y toqué el piano y, ces, es decir, en suma, saber a ciencia de reconstrucción.
sobre todo, el órgano, pero siempre me cierta cuál era la praxis de la interpreta- 5.-Si le entiendo bien, al decir recons-
interesó mucho ese especial aspecto de ción en aquella época. Y partiendo de trucción usted está sugiriendo 'o idea de
la música que es el que tiene que ver ese punto quisiera traducirlo a nuestro una copia.
con la palabra. Es decir, para mi fue idioma musical contemporáneo. No H.R-Evidentemente, sí. Reconstruc-
siempre muy importante esa relación reconstruir, no (subraya), no reconstruir ción significa hagámoslo exactamente
entre música y palabra, y en especial en lo que se hacía doscientos, trescientos igual a como (recalca) presumiblemente
el campo de la música religiosa. Cuando años atrás, sino traducirlo. Con traducir se hacía entonces y eso para mí no es
inicié mis estudios, aquí en Stuttgart, quiero expresar el revelar, el exponer el bastante.
uno de mis maestros fue Hans Grisch- sentido de esa música.
kat, profesor de dirección de coros en S.-No creo que para nadie, ni siquiera
el Conservatorio de la ciudad, una per- S.-Entonces ¿cómo juzga usted la labor para los legos, la copia sea bastante en
sona que se había ocupado muchísimo que vienen realizando, con instrumentos materia de arte.
de la obra de Johann Sebastian Bach: él de la época, músicos como Hamoncourt, H.R.-Exacto. Tiene que ser posible
fue el primero que organizó, aquí en Leonhardt, Brüggen, Hogwood, Pinnock, que hoy se identifique uno con una
Stuttgart precisamente, en la Stiftkirche, Parrot, fOng, Gardmer... entre otros? música que fue compuesta hace varios
una interpretación integral de todas las H,R,-Hoy en día hay un amplio siglos, que uno se diga «Esta es mi músi-
cantatas de Bach. Y es bastante seguro espectro de posibilidades de interpreta- ca». Naturalmente es la música de Bach,
que me ha influido bastante. ción, justamente de la música de Bach. pero cuando yo la interpreto también es
En lo fundamental son dos, como le mi música, la del intérprete, la del que
S.-¿Se considera un heredero directo de dije. Una la reconstructiva: «Hagámoslo, pasa el testigo de aquello que quiso decir
músicos como é' o como Kurt Tnomas, pues, exactamente, tal y como se hizo Bach. Tiene que ser algo vivido, vivido,
Fritz Wemer? entonces», Sólo que semejante recons- pleno, no debe ser nada museable.
H.R.-Ah, así no se podría decir, A trucción únicamente puede alcanzarse S.-En sus interpretaciones de Bach da la
esos músicos los conocí y los admiré, hasta cierto punto. Pero gente como la impresión de que intenta establecer, dentro
pero yo he tratado muy claramente de que usted acaba de mencionar, colegas de un gran ngor, un difal equilibrio de fuer-
encontrar mi propio camino. Mucho..., y como Hamoncourt, Leonhardt, lo han zas, de planos, de voces. ¿Hasta qué punto
ese debe ser también el caso de todo intentado. Por mi parte yo pienso que podría considerarse objetiva su visión?
director, mucho de lo que ellos hicieron cuando se intenta una tal reconstruc-
H.R.-Lo mejor para responder esta
me gusta, otras cosas no me gustaron ción sólo puede reconstruirse una mitad
pregunta sería echar una mirada retros-
tanto, y -como le digo- yo he encon- de la situación contemporánea de Bach:
pectiva a la historia de la interpretación
trado mi propio camino, que he ido la mitad activa. Lo que no se puede
bachiana en el siglo XIX y en este
134 SCHERZO
HEIMUTH RÍLLING

mismo siglo también, cuando la música una corriente es buena y que la otra, como L'anima del filósofo de Haydn,
de Bach se interpretaba con grandes por eso mismo, es mala. Para el oyente Mefistófoles de Arrigo Boito o Amadis de
conjuntos, con grandes orquestas sinfó- es magnífico, pienso yo. Puede escuchar Gaula dejohann Christian Bach?
nicas y coros, con mucho crescendo y una obra que ama, una vez de un modo H.R.-Para mí es muy importante no
mucho diminuendo (la voz del maestro y la siguiente vez de otro modo, y a interpretar tan sólo las obras del Barro-
ni siquiera se vuelve irónica en este ins- cada interpretación descubnrá, destaca- co, que tanto estimo y tanto amo. Fíjese
tante), con todos los componentes rá, pondrá en primer término otros donde estamos: en la Academia Bachia-
interpretativos que vienen del romanti- aspectos de esa obra. Lo que eche de na Internacional de Stuttgart, fundada
cismo. Yo por mi parte interpreto a menos en una se lo encontrará en otra, por mí. Esto es: Bach es el centro y la
Bach con formaciones pequeñas, nues- y también puede haber interpretaciones columna vertebral de nuestro trabajo.
tra orquesta no tiene una nómina (deja caer la ¿ironía? sin cambiar de Pero, le repito, para mí es muy impor-
mayor de la que habría tenido en tiem- expresión ni de tono de voz) que verda- tante integrar en este trabajo obras de
pos de Bach, y el coro es también un deramente recalquen diversos aspectos otras épocas de la historia de la música,
coro de cámara. Sobre esta base se importantes de una obra al mismo y de la música contemporánea. Por eso,
produce un balance, un equilibrio entre tiempo. Bienvenida, pues, la variedad de en los años pasados, hemos interpreta-
lo vocal y '° instrumental como creo opciones. Lo que critico, lo que no me do muchas otras obras del repertorio
musical, y también las hemos grabado
en disco. Obras que no son -o que no
eran— muy conocidas. Usted acaba de
mencionar algunas, por ejemplo Amadis
de Gaula de Johann Christian Bach. Muy
importante fue también el redescubri-
miento y la ejecución de la Messo per
Ross/ni que logramos rescatar del olvido
en Italia, con la colaboración de colegas
de aquel país. Y este camino lo seguire-
mos recorriendo. En el concierto de
clausura de nuestro festival de este año
interpretamos la ópera DimiW de Anto-
nín Dvorak, hoy casi desconocida aun
cuando se trata de una de las obras más
bellas, más esenciales y más significativas
de este compositor. Y en el Festival de
Salzburgo, por ejemplo, interpretamos,
por primera vez desde la muerte de su
autor (1787), una Utanla de Leopold
Mozart, una partitura en la que la parte
de oboe se debe a su hijo, Wolfgang
Amadeus. Todo esto es completamente
típico de nuestro trabajo, y tenemos
muchos más planes de cara al futuro
Hefniuth Rilling para volver a interpretar y rescatar del
olvido otras obras hoy sumidas en él, o
que es necesario que debe ser en la gusta, es un estilo impersonal, que pre- simplemente ignoradas, de la literatura
música de Bach. Pero ello no quiere senta las obras de un modo neutro, que musical.
decir que esa música suene objetiva, las interpreta de un modo exacto pero
Tiene que ser clara, estar claramente sin identificación personal con ellas. La S.-¿Cuál fue la razón por la que Ama-
articulada, hay que verdaderamente música tiene que hablar, tiene que dis de Gaula se grabó en disco en ale-
poder escuchar todo lo que el compo- hablarte al oyente para quien se inter- mán y no en francés, el idioma de la ver-
sitor escribió en su partitura. La dificul- preta, tiene que contener una opinión sión estrenada en París?
tad consiste en interpretarla y hacerla personal, la del intérprete, quien a su
oír, a pesar de eso, de un modo emo- vez tiene que tener el valor de opinar y H.R,-La grabación de Amodis de
cional, hacerla oír, a pesar de eso. de un de decir «Esta es mi opinión, y por eso Caula está hecha a partir de la de un
modo personal partidpativo. Y la com- interpreto así», y esto es lo que a concierto, y en aquel momento, al pre-
binación de ambos elementos es muy menudo echo de menos. sentarla aquí en el curso de un festival
importante para mí. musical y para un público alemán, nos
S.-Pero usted, que está en contra de la pareció mejor hacerla en este idioma,
S-£n tos últimos tiempos se ha investi- copia, imagino que también estará en para facilitar su comprensión. Lamento
gado, se ha escrito y se ha hecho mucho contra de h excesiva personalización. que no la presentáramos en francés,
en relación con la interpretación de ia H.R.-Arbitrario no se puede ser. El pero en aquel momento no existía otra
música barroca y de la música clásica, intérprete que se dice que le da igual lo posibilidad tampoco, no existía todavía
parece como si corriesen nuevos vientos. que está en la partitura, que él lo hace el material en francés.
¿Cuál es su opinión al respecto? así y punto..., la arbitrariedad, en fin, no S.-Entre sus proyectos actuales, ¿se
H.R.-En cu entro maravilloso que hoy puede ser. cuenta alguna grabación de las óperas de
en d(a se disponga de tantas opciones S.-Maestro Rilling, usted tiene ya un Mozart?
de interpretación musical, no sólo de la extenso catálogo discográfico y un reper- H.K-No, no tenemos ningún plan en
obra de los compositores banocos sino tono que abarca gran número de autores ese sentido, Naturalmente, interpreta-
también de los de la escuela clásica de y épocas. ¿Piensa continuar en la línea demos mucho Mozart este año, por ejem-
Viena. Bienvenidas. No me parece que recuperación de óperas del siglo XVIII, plo, el desconocido oratorio La Betufio
SCHERZO 135
ENCUENTROS

literato ya lo hicimos en enero, y en el Bachianas en Moscú, Cracovia, Praga, S-Volviendo a España: en nuestro país
otoño daremos varias veces idomeneo. Budapest, y el año que viene en Riga y hay un muy buen recuerdo de sus visitéis.
Muy importante es para nosotros una en Cluj (topónimo rumano de la ciudad Aquella interpretación de La Pasión según
nueva versión del Réquiem en re menor que los alemanes conocen como K/ousen- San Mateo, con la Orquesta y Coro nacio-
KV. 626, completado en esta oportuni- burg). En esos países, donde la atención nales, dejó muy buen sabor de boca. Pero
dad por Robert Levin. Una nueva ver- a la obra de Bach estuvo muy impedida ¿cómo pudo casar y la pregunta es sus-
sión del Réquiem que encuentro muy por causa de imperativos del momento, ceptible de hacerse de un modo más
significativa porque ya no se oirán más queremos ayudar a desarrollar una aten- general y can referencia a ovas latitudes
en él las partes completadas por Süss- ción viva a dicha obra. y a otros conjuntos-, cómo pudo casar
mayr, sino por Robert una visión rigurosa como la
Levin y en el estilo propio suya con unas maneras de
de Mozart acentuar y de tocar que son
deudoras casi por completo
S.-Eso es oigo que me del romanticismo, unas
parece muy elogiable de la maneras de acentuar y de
labor de ustedes aquí en tocar propias de unas forma-
Swttgart, los trabajos de ciones como las españolas?
encargo a compositores con-
temporáneos. H.R.-Me acuerdo tam-
H.R.-S!. ésa siempre fue bién con mucho placer de
una parte importante de •ni trabajo con las excelen-
nuestras actividades, encar- tes formaciones españolas.
gar obras, pero no de una Y lo que más placer me
manera general sino con causó fue escuchar las
una meta muy definida. Por obras de otra manera
ejemplo, y además del caso como las interpreto con
del Réquiem, en este año mi conjunto. Naturalmen-
Mozart les encargamos a te, la calidad distintiva del
diversos compositores que Coro Nacional español es
completaran algunos frag- muy diferente de la de mi
mentos de música sacra Gachingerchor, ¿cómo
mozartiana, en especial decirlo?, tiene más riego
Kiries y donas. Esos com- sanguíneo, es más intensa,
positores toman el frag- más dramática, en ella se
mento de Mozart como esconde un sentimiento
punto de partida para su fOTO ZEYGH-W mayor. Y esto encaja muy
propia composición, pero Helmulh Rjltmg bien con lo que le estaba
no en el estilo de Mozart sino en el diciendo antes. ¿Por qué tiene que ser
suyo original, y una tarea así la conside- S.-De la amplia discografla suya quiero siempre lo mismo? No tiene por qué
ramos un gran homenaje a Wolfgang rescatar ahora el recuerdo de unas graba- haber una versión, una interpretación
Amadeus en este su año, 199 i. ciones en Nueva York, el año 1966, cuan-de la que se deba decir que así tiene
do usted interpretó al órgano obras de que ser. Lo único que importa es que,
S.-Puesto que hablamos de aniversa- Correa de Arauxo, Cabañales y Antonio depor una parte, estilísticamente no haya
nos: éste es el décimo año de la Acade- Cabezón, quienes son por lo que pude nada que oponer, eso es esencial; pero
mia Bachiana Internacional. Una revista averiguar sus únicos compositores españo-por otra parte, que esa versión esté
cu/tura' potoco la definió hace no mucho les hasta el momento. Estos discos se sustentada por la voluntad expresiva
como Republika Bachowska. esto es, encuentran agotados. ¿Cuándo cree usted del conjunto que interpreta. Y este fue
como República bachiana. ¿Qué grado deque vamos a poder tener de nuevo la siempre el caso en España. Me alegro
colaboración y entendimiento ha habido ocasión de oírle interpretar obras del de tener un contacto tan natural y tan
entre ustedes y los especialistas del ex- repertorio español? regular con España, tan regular como
bloque oriental? H.R,-Me acuerdo con mucho placer con muy pocos otros países. El año
HR-Nuestra relación con la ex-RDA de esas grabaciones, que tienen que ver próximo, por ejemplo, estaremos en
siempre fue muy buena. Como es natu- con ciertos contactos que yo tenía España muchas veces . Planeamos una
ral, y en función de las circunstancias entonces en España, donde estuve Academia Bachiana en Santiago de
políticas que imperaban en su d!a, era varias veces dando conciertos de órga- Compostela, adonde llegaremos
muy difícil mantener un contacto normal no. De momento (y tengo que añadir siguiendo la ruta jacobea. en algunas de
en e! trabajo. Pero siempre invitamos a lamentablemente) no tengo planeado cuyas maravillosas iglesias daremos
los musicólogos y a los músicos, sobre interpretar obras de autores españoles, varios conciertos. También estaremos
todo de Leipzig, a nuestros encuentros pero debería pensar en ello. Quizás presentes en Cuenca, en Música Sacra.
estivales en Stuttgart, y también noso- encontremos alguna posibilidad. El contacto con los músicos y con los
tros viajamos mucho allá. Como presi- melómanos españoles se me ha vuelto
(En este momento de la conversación tan natural, está tan enraizado en mi
dente que soy de la Sociedad Bachiana nos adentramos en la pmblemáüca del res-
Internacional, y a través de ella, conseguí corazón, que la relación con España la
cate de obras grabadas en el pasado y considero como algo muy personal y
que hubiera en el pasado muchos con- receladas para discos compactos en la
tactos, algunos muy personales. Además muy especial.
actualidad- El maestro Rillmg no comparte
de eso. y antes de los cambios políticos, en monero alguna la opinión, que sostie-
nos esforzamos por llegar a contactos nen muchos críticos, de que las grabaciones
personales y artísticos en los países del en CD carecen de la dinámica que poseen
bloque oriental realizando Academias Ricardo Bada
tos discos clásicos procesados digitalmente).
¿J6SCHERZO
QRQUEgA AR$|$ CAMERA
ADOlfO GARC

v CORO
NACIONALES I DEUI&

ESPAÑA JEAN-JACQUESKANT
JACOJES ROUV1ER

f J. tUTDK Conááíó póráVfctenchelo/OKJ


enDohtoto
MUCtOA Srtoiia núm. 4

OOQUESTA Y COftO DE
ALDOCfCCATO IUNIDAD DE MADRID
tAZAR H U M A N MIGUEL GROBA
I M t t H B . Otwtura £»ódca I. Yuguas AMOS . :<:",•
UST, CondMlo para Ploro y Ora, núu 1 T. Ccroetic en Re mayoi c a á Ct-
asnQHLfuentactoeoma
ae Cusido
WW. La Voto

SBD
VfCTOR PABLO
MAREAORAM. OOQUESTA DE CÁMARA
ROOCUO KHIALAOA
REINA SOFU
M1LMEW0. Sete Cancera Populan
DAVID PARRV
L W0NO1M. Concertó pora lron«ón y Ora.
ANTONIO ARIAS Rauta
MWLK. Srtanw rnim i
GABRIEL ESTARELLAS Guitarra

BSE3 MARIO MONOFAI • ..-."-•

ODÓN ALONSO
CORO NACIONAL DC ESPAÑA
MABÍA J O S l MONT1B.
CARMEN SEM&AUD t.CtMO
WILMA RUEDA. fftttIMMr Duntatcn COo
MARÍA JOSÍ SÁNCHEZ. {Canaerfo en MI bemol maya pao
JUSTINO D U Z . :>-,-, i Oe Cámara)
NARCISO YÍPES
•CONO, Per lo Roe a-
MúUcaparaui
Fantnn para i r GenMtiombn reto MOMPOU
Amenciai de Dulcinea nillll T
nc "

fBMMBCMNCO.ino
TUOMASOUJIA
CORO NACIONAL DE ESPAÑA GíonoOos;
OUNNEL BOHMAN
WALTON OROENBOOS.
«BlttPWeoíYMetíwnden
(Hondo
KulnmC)
GUNDULA JANOWTTZ.
LocaíkjQdes de 300 a 3 CHAfiLfS SPENCER. nano
Otras de I. i m u » T 4. KWMI
I CICLO DE
ÓRGANO OfiQtffiSTA DC CJÜWAPA
ÍPAAOLA
"• VfCTOR MARTÍN

AUDITORIO VIVALDI
MINISTERIO DE CULTURA NACIONAL Í & Q «touTi» O n , en Be menor
riaiwta torra Oe I E */ Bi EKWKOS y f* D WB DE MÚSICA
DANZA

Ring um den Ring


La acción coreográfica más ambiciosa jamás realizada

A
demás de festivales escénicos y la pared y la atmósfera del espacio escé- sus ojos. Prosigue el narrador: «Del fres-
dramas musicales, Wagner llamaba nico hacen pensar en una destartalada no del mundo arrancó entonces Wotan
a sus obras mayores acciones. Con sala de ensayos de baile. Arriba, una una rama; el asta de una lanza cortó el
ello Wagner quería hacer presente que galería accesible. En el foro, todavía a la fuerte al tronco». El hombre, que ya se
todos los elementos de la obra de arte izquierda, la gran puerta de entrada a la tapa con un parche la órbita del ojo per-
total deben estar al servicio de la acción sala. Un muro de ladrillo cierra la parte dido, coge una de las barras entrelazadas
que se manifiesta a través de la mímica. central del foro. El lateral derecho esta en el haz leñoso. Sabemos así que la
Maurice Béjart, ya un mito viviente ocupado por cortinas negras practica- pérdida de la perfección física es el pre-
sometido en cuanto tal a desmitificacio- bles. Hay allí otro piano, cerrado. En la cio que ha de pagarse para lograr el
nes, ha declarado siempre su amor por mitad del lateral varias barras móviles de poder, el poder del imperium pero tam-
la obra y el pensamiento estético de ejercidos forman un haz leñoso. El foso bién el poder creador de la obra de
Richard Wagner. Este amor comenzó a está cubierto en este lateral, y allí, próxi- arte. El nombre es as! ya el Viandante,
hallar el cauce para la creación de accio- mo al palco proscenio, el narrador pero también el coreógrafo (Béjart) y el
nes propias cuando el bailarín y coreó- (Michael Denard) está sentado junto a autor (Wagner). Otra figura se destaca
grafo marsellés conoció a Wieland una mesa en la que hay un libro —el de la masa Viste malla de tonalidad ace-
Wagner'. De hecho su único trabajo en texto- y un magnetófono de cinta abier- rada y se cubre con un estilizado casco
común con el nieto de Richard fue la ta, en la que teóricamente está grabada alado. El coreógrafo entrega a su doble'
inaudita Bacanal para el Tbnnhouser bay- la música orquestal y vocal3. En el centro la lanza del poder, la barra de la danza.
reuthiano de 1961 y 1962, una acción del foso, otra tarima con escalones des- De sus manos recibe también Wotan
coreográfica sin precedentes ni conse- cendentes a izquierda y derecha. Allí (Patrick de Baña) el símbolo que va a
cuentes en la escenificación de esta sueñan, inmóviles, una blanca criatura distinguir a los dioses, que son presenta-
ópera romántica'. Pero después el core- calva y tres mujeres enlutadas que asen dos ahora con su Leitmotiv* tocado al
ógrafo no ha dejado de girar en órbita una cuerda: Erda (Kyra Kharkevrtch) y las piano: las zapatillas de baile, mientras
elíptica alrededor del sol Wagner mien- tres Nomas. El escenario aparece ocu- que los humanos o la divinidad rebelde
tras iba madurando durante treinta años pado por los miembros de la compañía, y decalda (Brünnhilde) danzaran con los
el acometer la obra de uno vida, esto es, sentados en el suelo en actitud indolen- pies descalzos. Ahora el coreógrafo
una acción coreográfica anular alrededor te, no activa: la imagen del caos informe. parece decir con su gesto: «¡Hágase la
de o sobre el Amito. Es más, parece ser Una figura masculina, vestida con desali- danza!», y se aparta, aunque sin abando-
que Béjart acarició antaño la idea de ñada informalidad actual, deja su lugar en nar la escena, pues ocasionalmente
escenificar alguna vez la Tetralogía, y el proscenio y se dirige hacia el piano intervendrá en la acción hasta el
que, por fortuna, desistió tras conocer del foro, del que parece brotar un surti- momento de quedar prisionero de sí
en Bayreuth la producción de Chéreau dor de agua. El narrador declama: «Un mismo al no poder salir del circulo de
(1976-1980). Y digo por fortuna por- osado dios vino a beber en el manantial; fuego que protege a la walkyria dur-
que asi Béjart. en su retomo al perihelio. de sus ojos, uno pagó él como eterno miente'; después y hasta el final de la
fue reorientándose en el camino hacia tributo». El hombre levanta la tapa de la acción, se convertirá en su espectador al
una «metamorfosis coreográfica» de la caja del piano, mira en su interior y con identificarse definitivamente como Vian-
obra monumental, donde «el Fuego de gesto de dolor se lleva la mano a uno de dante'.
la danza, el Loge del Anillo, nutre, abar-
ca, destruye y renueva un mundo en
movimiento cíclico como las estaciones
o la vida», Danza, pues, la expresión
mímica por excelencia para recrear una
Ballets con música de R. Wagner
acción que, asi dice Béjart, «es la gigan-
- Bacanal Bayreuth 1961 {")
tesca historia de una familia». ;Qué
familia? La de Wotan, por supuesto, - Idilio de Sigfndo C)
pero también la de Béjart: «Desde hace - Wagner (Mathilde) o el amor loco Bruselas 1965 (*)
treinta años tengo una familia: una com- - Baudelaire G renoble 1968 (*•)
pañía de bailarines con todas (as recla- - Los vencedores Bruselas 1969 (••)
maciones de amor, de fuerza, de anta- - Eros-Tánatos Atenas 1980 (**)
gonismo, de fascinación y de unión que - Las sillas Río de Janeiro 1981 (*)
esto lleva consigo». - Fragmentos París 1984 (•*)
- Dionisios Milán 1984 (••)
- Patrice Chéreau (convertido en
bailarín) arregla el encuentro
de Mishima y Eva Perón Bruselas 1988 (••)
Y el coreógrafo dijo: «¡Hágase - Ring um dem Ring Beriín 1990 (•)
la danza!» - La muerte súbita Parfs 1991 (••)

El escenario es frió y neutro. En el (•) Música sólo de Wagner.


lateral izquierdo, primer término, el ( " ) Varios compositores, incluido Wagner.
piano y la pianista-actnz (Elizabeth Coo-
per). Las barras que comen a lo largo de Fuente: Programa de mano del Gran Teatro del Liceo.

138 SCHEFíZO
DANZA

Ser conforme a la naturaleza alados con las zapatillas (divinas) de Brünnhilde: «Cuando en mí expiró la
baile y las barras-lanzas. Su misión es alegría del joven amor, mi valor aspiró
Tres breves secuencias preceden aún formar el ejército del Walhall con los el poder». También: «¡Lo que amo,
a la del robo del ora por Albench: la héroes caídos en combate. Esta es la tengo que abandonarlo, asesinar a quien
separación de los albas de la luz (los acción que presenciamos con el fondo desde siempre quiero, traicionar enga-
dioses) y los albas de la noche (los nibe- de la versión orquestal de la famosa ñosamente al que en mí confia!». Para
lungos), la adoración de Freía por todos escena. Las walk/nas congregan la nutri- concluir con estas palabras fatales:
los seres, por último el contrato con los da tropa -soldados de nuestro tiempo- «Abandono mi obra: sólo quiero aún
gigantes6, por el que Wotan libera la y la presentan a los dioses, vestidos una cosa: ¡el fin..., el fin.,.!». ¿Por qué esta
modificación? Sencillamente
Wotan habla en soliloquio
cuando se dirige a su hija
favorita (aún en el acto de
degradación de ésta), que
es la voluntad de su padre
y, por tanto, su conciencia.
Los adtoses de Wotan
devienen así el acto ritual
de la transmisión a Brünn-
hilde de la voluntad expia-
toria del dios,

Finalmente, un ejemplo
acabado de refundición o
resumen lo da la acción de
la muerte de Siegfried. Ésta
no se produce al final del
relato que el muchacho
hace de su vida, que se
omite, sino en medio de la
apoteosis de la marcha
fúnebre". Todos los perso-
najes conocidos de Sieg-
fned o mtervmientes en su
corta existencia participan
de esta apoteosis de vida y
de muerte, con lo que se
restituye la finalidad del
relato y se recupera para la
acción coreográfica el enor-
Ring um títn Ring por el Bépft ballet de Lausanne en el Teatro del Uceo FOJO. A bOFILL me potencial mímico de
esta música hecha de triunfo y derrota.
ingobernable fuerza que recorre el Ani- ahora como deidades de la mitología
llo, la irreconciliable dicotomía Amor- nórdica10. El narrador recita la última Mas estos procedimientos de interre-
Poder. Sólo ahora comienza la historia intervención de Loge: «A su fin corren lación y articulación -el coreógrafo, el
del Oro del Rm tal como la ordenó los que tan fuertes en el subsistir se narrador, la pianista-actriz", la anticipa-
Richard Wagner en acción reciproca, imaginan (...) ¡Quién sabe lo que haré!» ción, la posposición, el resumen- no seri-
pero contraria, a la de Wotan, Albench Ahora comienza la entrada de los dioses an suficientes para dar cohesión al espec-
(José Vidal) maldice el amor y se apode- en el Wathall: siete bailarines portan táculo sin la recurrencia a dos motivos
ra del oro'. A partir de este momento siete abanicos con los colores del conductores de la acción coreográfica
la acción coreográfica, apoyada en el espectro; los dioses antiguos bailan una fundamentales. Uno es, ya ha sido antici-
relato del narrador y en los comentarios danza pomposa en compañía de su beli- pado, el Fuego de la danza materializado
y reminiscencias del piano, se ciñe en lo coso séquito; y Loge, risueñamente en la inquietante figura de Loge (Ramón
fundamental a la acción dramática que escéptico, hace mutis no por el foro, Flowers), cuya constante presencia física
conocemos, pero con una flexibilidad sino por el foso. enriquece y unifica la acción'3. Otro es el
que permite anticipar secuencias, pos- ser conforme a la naturaleza (Naturwe-
ponerlas o resumirlas. Basten tres ejem- Hasta aquí una anticipación. El ejem-
plo de posposición -también coherente sen). Todas las criaturas del Amito son
plos característicos. Una vez muerto conforme a la (su) naturaleza: Wotan
Fasort o manos de Fafner y después de dentro de este espectáculo- pertenece
al diálogo entre Wotan y Brünnhilde perdió su ojo, amó y anheló el poden
la llamada de Donner. Wotan da mues- Albench maldijo el amor y logró así el
tras de desconcierto y temor, En su (Katarzyna Gdaniec) al final de La
Walkyna De la acción coreográfica ha oro; Siegmund y Sieglmde siguieron el
cabeza bulle ya la idea de seguir a Erda: impulso de la rebeldía; Brünnhilde devino
«¡He de bajar junto a ella!»; así, en el sido suprimido todo el monólogo del
segundo acto, demasiado extenso y a la por compasión la sacerdotisa de la expia-
momento en que «se acerca la noche», ción del mundo; Siegfried fue hasta su fin
se interrumpe la acción del Oro del Rin vez poco dinámico para un relato com-
primido. Pero como el monólogo es el niño que lanzaba estocadas,,. Sólo
para anticipar la cabalgata de las watky- Gnmmhilde no es conforme a la natura-
nos. Wotan sigue efectivamente a Erda capital para el conocimiento de la per-
sonalidad de Wotan. varios de sus pasa- leza, porque se prostituye. Béjart y
y engendra en ella a las vírgenes guerre- Godefroid dan vida a este personaje, alu-
ras, cnaturas de mallas negras y cascos jes son declamados por el narrador
durante el paso a dos de Wotan y dido pero no vivo en la obra de Wagner,

SCHERZO 139
DANZA

para que la acción muestre el nacimiento finalidad de la espada no quedan claros, solistas y de retomar sin cesuras a con-
de Hagen (Lode Devos), el terrible fruto aunque vemos al Viandante clavaria en el tribuir a las del grupo, y especialmente
del odio, más también para trazar una tronco del fresno doméstico de Hunding, la fe en la potencia mímica de la música
frontera con los seres auténticos del Am- porque la inteligente decisión de llevar a de Wagner y la comunicación -la buena
ito: Ghmmhilde se vende, se entrega a Wotan en pos de Erda obliga a sacrificar nueva- de esta creencia. Los pasos a
Albench a cambio de oro, atenta contra la magnífica apelación al motivo de la dos -los diálogos- se alternan armonio-
su propia naturaleza. Como es de origen espada, que Wagner hace sonar por pri- samente con las escenas cora/es (no
noble, calza en un pie una zapatilla de mera vez en £/ oro del Rin como materia- olvidemos que, para Wagner, la función
baile; pero en el otro lleva un zapato de lización acústica del pensamiento agresi- de! coro en la tragedia griega corres-
tacón alto. Tras parir a Hagen se retira vo del dios, quien, al llamar Walhall (Sala ponde a la orquesta en el drama musi-
de la liza) a la fortaleza a tan alto precio cal). No quisiera cerrar este comentario
cojeando. Después será paseada por sus
hijos -Gunther, Gutrune.
Hagen- en una silla de rue-
das. Asi, es el único perso-
naje al que le está negada la
participación en el Fuego de
la danza.

Vi acabarse el mundo

En un trabajo tan atrevi-


do y complejo es casi inevi-
table que haya algunos pun-
tos débiles, aunque el
espectáculo está ya maduro
en general y funciono fluida-
mente con apabullante pre-
cisión. El narrador, que en
ocasiones se incorpora a la
acción, es un punto engola-
do. Reducida al piano, la
música de Wagner pierde
toda su calidad tfmbnca y
gran parte de su fuerza
expresiva; en este sentido,
el contraste con los frag-
mentos pregrabados deja al
piano demasiado en eviden-
cia. La necesidad de com-
primir la histona puede pri-
varla de su tempo, de su B ocaso de los Dioses, w la producción de Béjort
dimensión, y así el primer acto de Lo
Walkyna es el momento más seco, por lograda, recupera su valor y comienza a sin citar, entre los diálogos, el sublime
escueto; la historia de los welsungos tramar la reconquista del anillo... paso a dos de Wotan y Erda cuando la
resulta perjudicada, además, por la única Pero estas pequeñas diferencias de Wala advierte a Wotan sobre el fin de
concesión que la producción hace a los rango no enturbian la luminosa calidad los dioses; y entre los coros, la ten-orifica
tiempos que comen: Hagen y los hom- del espectáculo. La obra de arte total llamada de Hagen a los guibichungos
bres de su clan son unos mafiosos está tratada y servida como tal obra de para recibir a las parejas nupciales: no
machistas, Sieglinde se mueve entre ellos arte, no como panfleto al servicio de creo que en toda la historia de la danza
con bata y delantal, es decir, con el uni- algo tan perecedero como lo es toda se haya alcanzando jamás tal expresión
forme de su condición de sierva domés- ideología, ni tampoco como la suma - o de amenaza. También merece la cita el
tica: después, al reconocer a Siegmünd y la resta- de ingeniosidades contra el ser final de la acción. La inmolación de
recuperar su identidad, se despoja de conforme a ta naturaleza de este o aquel Brünnhilde se alcanza mediante otro
este atavío -como Siegmund de sus regisseur con talento, pero sin genio. maravilloso paso a dos de la Walkyria y
andrajos- para ponerse losjeans (símbo- Desde el estreno, en 1965, de la segun- Loge. en el que son invocadas y resumi-
lo de la rebeldía) que también vestían da producción bayreuthiana de la Tetra- das diferentes técnicas y formas de la
Wáise y su mujer mortal. Algo, pues, ya logía debida a Wieland Wagner, no danza y del baile, incluidas las proceden-
bastante visto e inferior a la ideación había vuelto a presenciar yo una esceni- tes del musical. Cuando Brünnhilde se
general del espectáculo. Hay también ficación del Anillo -o en tomo al Anillo, arroja a la pira y se desborda el Rin, se
alguna evidencia innecesaria por facilona como es éste el caso- tan libre, tan viene abajo con estrépito -un alarde
y obvia; en un momento determinado y imaginativa y a la vez tan respetuosa técnico- la galería superior, desde la
durante unos instantes Albench se colo- con el pensamiento y la estética ongina- que los dioses antiguos presenciaban el
ca en la entrepierna una especie de les. Son admirables la inteligencia puesta acto de expiación; al mismo tiempo se
cetra de oro forjado por los nibelungos; en juego, la sensibilidad para traer a la abre el muro de cierre del foro, agrieta-
en otro momento Siegmund hará lo luz los distintos planos de la acción dra- do desde el instante en que Siegried
mismo con otro objeto faiteo, la espada mática, la inaudita calidad técnica del partió la lanza al Viandante. La música
Nothung". Precisamente el origen y la coreógrafo y de sus bailarines, estos se detiene en este punto. Todo se
capaces de asumir complejas funciones aquieta. Los personajes, la entera com-

7-ÍOSCHERZO
7673352
LA LA
#JUU* "TABZÜHA
LA TABERNERA DEL PUERTO
RDpOlDCtUpI
LA REVOLTOSA
Anadeo Viva Toniái Brttún
LA DEL MANOJO H R «OS " I .A. i/EBBENA DE LA PALOMA
DOÑA FRANQSQUrTA-BOHEMIOS
H&GAX

\v ^íí'
sas° SSSÍ&BAI.

SS&SA&AL

7673222 (2CD) 7673252(2CD) 7673282

LA
Moreno Tonaba AGUA,
AZUCARILLOS Y AGUARDIENTE
LUISA FERNANDA yV..K_,n LA GRAN V I A
TERESA
TOUJKfc
AMA
i UliLIHRAS
RENATO
CESAR!

7673292 7673302 7673312

1
^^H
LA CANCIÓN DEL OLVIDO

GÁSTELO
rl
|osí Sfnano

11 MOLINOS DE VIENTO
TERESA
LA DOLOROSA

^HREKATO ^Jg

1 RENATO H f l

1
CESA™ ^ H
^ H PAULO ^ H PABLO ^ ^ T
SOHOZABAL ^ V

Hé, BE é yJ
7673322 7673332 7673342

A UN PRECIO SUPER ECONÓMICO


DANZA

pañía de baile retorna al caos de la música asimismo mística: el comienzo Claro que estos desmitificadores desco-
inmovilidad. El narrador recita el debati- del preludio de Parsifal, el fulgor del nocen también que la Tetralogía es la
do párrafo de inspiración budista y motivo del ápage del amor. ¡Quiere obra de Arte más ambiciosa de la cultu-
schopenhau enana que Wagner decidió esto decir que el coreógrafo (Béjart) ra occidental. Llamamos hoy cultura a lo
suprimir el día 4 de abril de 1872 en la piensa en una acción coreográfica en que es mera industria de consumo, ele-
arenga expiatoria de Brünnhilde: «Si torno al festivo/ escénico sagrado? Si así vamos lo banal al nivel de la trascenden-
ahora nunca más guiaré (a los héroes)/a fuera, habría que alentarle en el empe- cia, confundimos, como en el dicho cas-
la fortaleza del Walhall,/¿sabéis a dónde ño: también sería allí lanza la barra de tizo, las churras con ¡as merinas... Viene
¡ré?/Voy lejos de la Morada del Deseo,/ baile. En todo caso, el autor (Wagner) Béjart a Barcelona con su summa anís, y
huyo para siempre a la Morada de la llu- concibió Parsifal como última conse- los voceros de cualquier bobada despa-
sión;/cerraré detrás de ml/las abiertas cuencia en su dramaturgia de la reden- chan el asunto con cuatro tópicos y
puertas/del devenir eterno;/al sacratísi- ción, que aquí es la redención por la hasta con cierta condescendencia. Mi
mo País Elegido/donde no hay deseo ni compasión. Maunce Béjart y Philippe recomendación es clara si al lector inte-
loca ilusión,/al punto final del curso del Godefroid rubrican asi su fiel conoci- resado se le presenta la oportunidad de
mundo,/liberada del renacer/se dirige miento del entramado espiritual de la ver aquí o allá Ring ura den Ring, no
ahora la sapiente./El bienaventurado inmensa dramaturgia wagneriana. debe desaprovecharla. Esta obra de una
fin/de todos los eternos,/;sabéis cómo vida tiene cuerda para muchos años y
lo conseguí!/EI sagrado dolor/del afligido recorrerá el mundo. Si de mí dependie-
amor/me abrió los ojos:/vi acabarse el Una recomendación al lector ra, ya estaría contratada para el futuro
mundo». Sí, la acción ha concluido, un Teatral Real y para aquellas localidades
mundo ha llegado a su fin. No hay Aunque el día que presencié el nuestras con teatros -no poíideporti-
redención por eí amor, pero sí existe la espectáculo -el 6 de septiembre- el vos- suficientes. Béjart ha visitado Espa-
posibilidad de otro mundo, de otra éxito fue claro en una velada larga, y ña desde 1960 y ha exhibido aquí algu-
acción. El coreógrafo levanta vertical- agobiante a causa de la humedad nos de sus mejores ballets. Seria una
mente la barra de baile que fuera lanza ambiente que padecía Barcelona, por las verdadera lástima que sólo Barcelona
en la acción ya concluida. Lentamente criticas leídas y los comentarios escu- hubiera tenido el privilegio de conocer
recorre así el espacio escénico, antes chados deduzco que pocos han adverti- de primera mano la acción coreográfico
cerrado, para atravesar el muro y per- do la importancia de esta producción mds ambiciosa jamos realizada.
derse en otro espacio infinito. Sus místi- hoy insólita y sin pangual. Algunos han
cos pasos van acompañados de una hablado de un Béjart decadente, incluso
débil (!?) en la coreografía de grupos. Angei Fernando Mayo

NOTAS 5. Donner y Freía tienen leitmotiv perso- 10. Los cinco dioses parecen arrancados
nal. Fricka se asocia con el de la otraccidn de las viejas fotografías del estreno del Anillo
1. «(Wieland Wagner) era un hombre doméstica y Froh con el del artoiris. (1876). Por el contrano, Loge conserva su
fantástico, del que yo he aprendido mucho aspecto circense: pelo encendido, tez blan-
(...) Su contacto fue muy beneficioso para mi 6. El final de La Wolkyna es soberbio: quecina, frac corto, camiseta y zapatos.
(...) El poseía un arte mucho más desarrolla- Wotan deja a Bríinnhilde tendida sobre el
do, al ser mayor que yo y tener supenor piano del foro, es decir, la fuente ong¡nal de I I. Siegfned es otro ejemplo de desdo-
altura técnica. No obstante, al comienzo los la vida y del arte: vanos bailarines cierran un blamiento: hay un Siegfried adolescente
sentimientos eran los mismos. De hecho, el circulo alrededor del piano y Loge los une (|uichi Kobayashi) que tira constantemente
encuentro se produjo porque participába- con una cinta ro|a; el Viandante no puede estocadas con una espada imaginana, y un
mos de idénticas creencias artísticas». (Entre- romper este circulo, mientras Wotan desa- Siegfried mozo (Aiexandre Stepkm) forja-
vista para Ritmo, núm. 485. octubre de parece por la escalera practicable en el foso dor de Nothung. Ambos visten como gran-
1978). y Loge parece tocar al piano sus propios jeros (camiseta de franela a cuadros, panta-
ondulantes arpegios. lón de pana), bailan juntos un Viaje de Sigfn-
2. La Bacanal pasó a formar parte, como do por el Rin lleno de juventud y mueren
ballet independiente, del repertorio del 7. El Viandante interviene como tal en la también juntos.
Ballet del siglo XX Pudo verse así en el Tea- acción de Sigfndo: el tornea del saber con
tro de la Zarzuela, si bien en una realización Mime, el encuentro con Alberich. los 12. Elizabeth Cooper participa en la
matenal muy inferior a la de Bayreuth (soni- encuentros con Erda y Siegfned y la fractura acción cuando toca y aún más cuando no
do pregrabado, carencia de maquinaria). de la lanza; pero ya no es el coreógrafo, y toca: se sorprende, se asusta, manifiesta
durante la occidn del Ocoso se mantendrá al dolor o alegría... e incluso proporciona pren-
3. Los fragmentos pregrabados proceden margen como doliente espectador. das de vestir a los bailarines.
de las matrices originales de los registros
completos con Solti (Decca) y Karajan (DG). 8. Dos ágiles bailarines sobre altos zancos 13. Otra idea tomada de Wieland Wag-
Para La Waíkyno se emplea también el regis- que muestran a Wotan la maqueta del Wal- ner. que dedicó un ensayo (rara avis) a la
tro vienes con FurtwSngler (EMI), un tanto hall. figura de Loge y lamentaba su desapanción
sorprendentemente el de sonido más nítido. como personaje tangible al final del Ora del
Para las versiones orquestales se acude a 9. Béjart y su colaborador Philippe Gode- Rin. Por otra parte, el fuego está presente en
Furtwangier (Dacapo, EMI) y Tennstedt froid, actual director de la Opera de Narites el miedo de Mime, en la fragua y en la forja,
(ÉMI). e indiscutible experto wagnenano, han pre- alrededor de la roca de la walkyna y en la
sentado los hechos anteriores al robo del catástrofe final,
4. «Nosotros nunca somos uno solo, oro en su secuencia cronológica, para facili-
somos muchos a la vez. Mi ballet más ilustra- tar la comprensión del argumento de una 14. La contraposición no es gratuita, por-
tivo es. probablemente. Baudefatre (...) Había Tetralogía comprimida en un espectáculo que Siegmund decide e>ctraer del fresno la
siete bailarines, vestidos igual, y los siete eran que dura algo más de cuatro horas frente a espada desde la «extrema necesidad del
Baudelaire. Unas veces aparecía uno en las catorce o quince del original. Con ello sagrado amor», y asi Wagner hace sonar
escena; otras, dos, tres. Incluso llegan a estar no hacen sino retomar una idea de Wie- aquí el motivo de la matéaón del amor pre-
los siete a la vez. Este tema es algo que land Wagner, quien lamentaba que su cisamente para subrayar la voluntad amato-
siempre me ha preocupado, porque la ver- abuelo no hubiera escrito una quinta obra ria de Siegmund. Lo que me parece en
dad es que, en ocasiones, me da la sensación con el relato de los orígenes, a su juicio exceso obvio es la representación sexual
de no ser una, sino varias personas...» (De la resumido en exceso en la escena de las de esta contraposición (el cetro de oro-la
entrevista citada en la nota I). No mas. espada).

7-Í2SCHERZO
MÚSICA CONTEMPORÁNEA

Festival de Alicante,
atentos a lo nuevo
F
iel a su tradición de servir de escapa- sión, riqueza del material, novedad de la dirección de José Ramón Encinar, desta-
rate de las distintas manifestaciones propuesta etc., se podría decir que los caron el Doble Condeno de W i t o l d
que se dan hoy en día en el seno de logros artísticos de Atemwende no supe- Lutoslawski y el Monumetum pro Cesual-
la música contemporánea, el Festival ran en mucho a los de cualquier fiesta de do de Igor Strawmski. Defraudó el estre-
Internacional de Alicante llegó a su sépti- fin de curso. no español de la Tercera Sinfonía de Car-
ma edición sin excesivas sorpresas. Después de su buena acogida en melo Bernaola por su desesperante
Desde una perspectiva general se Madrid se presentaba en Alicante el ausencia de contenido. El compositor
vinieron a confi rmar las tendencias esté- Ensemble Erwartung con dos programas vasco se limita a especular sobre cual-
ticas preponderantes desde hace ya bas- entre los que destacaron el Concierto cíe quier material que cae en sus manos,
tantes años, como son una reconsidera- Cámaro de Guerrero -bien solventado haciéndonos olvidar por momentos que
ción sobre la noción del sonido (insisten- técnicamente, pero mal entendido desde la música, además de sonidos, es expre-
cia sobre sonoridades suspendidas) -algo el punto de vista del clima y de la forma- sión de pensamiento.
que quedó muy patente en el primer y Pour fímage de Philippe Hurel que a la El concierto del Laboratorio de Infor-
concierto del Ensemble Erwartung- y postre resultaría el estreno más significa- mática y Electrónica Musical de C D M C
cierto repetrtivismo que aún sigue inun- tivo de todo el Festival, por su sofistica- bajó muchos enteros respecto al de la
dando a las distintas líneas estéticas. do tratamiento del timbre y del sonido, pasada edición en lo que a la calidad de
En lo que a lo español se refiere, sigue así como por la modernidad de su dis- las obras se refiere. Parece como si el
en boga una tendencia muy nuestra curso. enorme desarrollo alcanzado por los
como es la continua revisión del pasado. El Ensemble Europeo A n t i d o g m a medios tecnológicos de producción y
Al Tiento de primer tono y ñatalla Imperial Música sucedió en la programación a la tratamiento sonoros no fuese a la par
se le sumó la Fantasía sobre una fantasía desafortunada actuación del Grupo de con la evolución de la sensibilidad de los
de Alonso Mudarra de José Luis Turina, Música Contemporánea de Lisboa con compositores que en la mayoría de los
además de la Toccata viejo en tono nuevo un programa de compositores italianos casos responde a moldes demasiado
de Carlos Cruz de Castro. Para comple- en los que sólo destacaron los clásicos convencionales, rehuyendo por comple-
tar esta sucinta visión tan sólo debe Scelsi y Berio con Pranam II y 0 King res- to el carácter experimental que distin-
comentarse la recesión en el lenguaje guió a la música electrónica en los años
que presentan compositores como Villa de su irrupción. De las obras presenta-
Rojo O el propio Aracil, lo que casi lleva das, todas ellas en estreno absoluto por
a emparentarlos con los Cervelló, Prieto, encargo del CDMC. destacaron Tríptico
Ruiz o García Abril también presentes en de Ramón González Arroyo y Présertce
la programación. / de Arthur Thomassin. si bien tuvieron
El Festival tuvo un arranque notable su contrapunto en la interpretación de
merced a los dos espléndidos conciertos los solistas que ambas obras incorpora-
que la Orquesta Sinfónica de Aarhus, ban. De la falta de convicción de la parte
bajo la dirección de Osmo Vánska, ofre- de clarinete de Jesús Villa Rojo en Trípti-
ció en el restaurado Teatro Principal. Los co, pasamos al entendimiento y entrega
programas alternaron obras ya clásicas del violonchelo de Tomás Garrido en la
como el Concierto para violonchelo y difícil partitura de Présence I de Arthur
orquesta de Ligeti o el Concierto para Thomassin.
orquesta de Lutoslawski junto al estreno La siempre solvente Orquesta Sinfóni-
absoluto de Le Chnsc dons k bon/ieo de ca de RTVE, bajo la dirección de Cyril
Josep Soler, vivo ejemplo de un estilo Diederich, ofreció los dos conciertos de
anacrónico y desprovisto de la necesidad José Luis Turma clausura de los que sólo p o d e m o s
que tuvo en sus impulsores de la Escuela comentar el primero en el que se alter-
de Viena pectivamente. Como única representa- naron clásicos como el Agón de Stravins-
Dentro del apartado que el Festival ción española en el programa se produjo k¡ con estrenos absolutos como Q¿JOSÍ un
dedica todos los años a los espectáculos el estreno de Nobilissima wswie Il/Postíu- soto de jesús Villa Rojo. Escrita a modo
alternativos se presentó Aterrwende de dios de Enrique X. Macías, obra de un de concierto para clarinete, la obra del
Javier Maderuelo y el escultor Jorge universo sonoro sumamente atractivo en compositor español -interpretada por él
León. Contemplado como un acto de la que destaca la preciosista parte de mismo con corrección- ejemplifica per-
interacción entre distintos medios artísti- piano. Si el compositor fuese más parco fectamente el giro estético dado por el
cos, el espectáculo se convirtió en un en las proporciones y asumiese que la autor en el que la esentura de carácter
concierto de percusión (las esculturas forma es un proceso direccional, sin experimental da paso a un lenguaje de
eran los instrumentos), electrónica y duda que los resultados serían aún más corte romántico, limado de cualquier
recitado sin ningún tipo de conexión notables. aspereza armónica. El concierto se com-
estructural y absolutamente falto de La mala acústica de la sala del Teatro pletó con una espléndida versión de la
intenciones. Que la propuesta consista Principal no propició el lucimiento de suite de concierto de Sodas de sangre
en delegar en el público la creación de una orquesta de las dimensiones de la del ecléctico compositor francés Charles
redes de entendimiento para extraer sus Filarmónica de Gran Canana que vio Chaynes que se presentaba como estre-
propias consecuencias no exime al artista apagada su sonoridad debido a la seque- no en nuestro país.
de responsabilidad, y atendiendo a crite- dad del recinto. De las obras interpreta-
rios universales como relaciones de ten- das por esta buena agrupación, bajo la Mane! Rodeiro
SCHERZO 143
MÚSICA CONTEMPORÁNEA

Harry Halbreich,
la crítica viva
Profundo conocedor de la música española, el crítico y musicólogo belga Harry cipal es un cierto tipo de austeridad. De
Halbreich es desde hace muchos años una de las voces más influyentes en el campo todas formas se trata de algo muy para-
de la música contemporánea europea. Sus libros y escritos son un claro punto de dójico porque no es una música cere-
referencia para entender la creación musical en el momento de su máxima eferves- bral. Para mí el arte español está muy
cencia. Pero al margen de todo esto, Harry Halbreich es un agudo analista y sobre lejos de la abstracción. El ejemplo mas
todo una de las plumas más respetadas por los compositores, por su forma de ir claro de esto que estoy diciendo es
bastante más allá de la pura anéctoda. Unamuno. También resaltaría que a
veces, cuando determinados composi-
tores españoles se sirven de plantea-

S
CHERZO.-¿Cree usted que hoy en vertido en academicismo. Ahora lo que mientos abstractos, el resultado casi
d!a se puede hacer una dosificación interesa es la búsqueda de nuevo mate- nunca suele serio, Pero vuelvo a repetir
global de todos las corrientes de la nal, de sonidos nuevos, porque el mate- que lo más reseñable es una austeridad
música contemporánea? rial dodecafónico está agotado, y des- esencial en el arte, algo muy particular
HARRY HALBREICH.-Hay corrientes pués de esto se puede pensar en crear que está presente en toda la tradición
que mueren y otras que nacen, las que una nueva combinatoria con este nuevo española desde hace siglos y que por
mueren son las corrientes post-seriales material. Para mí la música goza hoy en supuesto se da también en la pintura y
y estructuralistas que ahora viven su día de enormes posibilidades nuevas, y en la literatura.
agonía. Son poquísimos los composito- respecto al pasado creo que debemos
res en esta dirección pero son también dejar descansar a los muertos.
importantes como Femeyhough o Fran- S.-Entonces, ¿cree usted que la
cisco Guerrero aquí en España. Son vio estructuralista no fracasado
pocos, porque esta vía es más y más porque era demasiado dura para
difícil. Estos compositores seriales están el público?
cada vez más aislados, son una minoría H.H.-Sí, pero tiene posibilida-
Una corriente con salida, desgraciada- des de resurrección, de renova-
mente, es el minimalismo. Para mí son ción de material, porque para mí
músicas tontas, músicas subnormales el material tradicional está agota-
para un público subnormal. Una direc- do. También el que es produci-
ción muy interesante es la de la música do por las combinaciones más
espectral, la búsqueda de lo interno del complejas. No debemos olvidar
sonido. En la corriente post-romántica y tampoco que el estructural ismo
neotonal no creo. Se trata de un movi- responde a un aspecto indispen-
miento tradicional, lo mismo que el cla- sable del pensamiento musical
sicismo de los años veinte. La tendencia en Occidente, pero repito que
que para mí tiene más futuro es la de la sin la renovación del material se
composición por ordenador. Yo espero convierte en una vía sin salida,
que estos ordenadores puedan crear
modelos más fáciles para músicos que $.-¿Cree usted que aún se
para ingenieros. Existe ya un gran pro- puede hablar de estéticas nacio-
greso en esta dirección, por lo que creo nales, de determinadas parücuta-
que dentro de diez años los ordenado- ridades de la música de un país
res serán más manejables. Dada esta respecto a otro?
situación, nos encontramos con que H.H.-Sí, desde luego, pero
existen ingenieros que pueden manejar hay que tener en cuenta que
todo esto, pero no reúnen la exigencia durante los años más críticos del
artística necesaria, lo mismo que existen senalismo esto se perdió en pos
buenos músicos que no tienen esta de un lenguaje internacional de
capacidad técnica necesaria. El ordena- una gran trivialidad y un mismo Olivier Messioen
dor tiene un gran futuro desde el colorido. Creo que con otro
momento en que estas técnicas se lenguaje y otros métodos es posible
enseñen en los conservatorios. S.-¿Cuál cree usted que debe sei el
conservar el carácter nacional sin perder papel de la critica?
novedad en lo que uno hace. Para mi H.H.-Creo que la labor principal del
S.-¿Pero no cree usted que la mayoría esto resulta muy claro cuando escucho crítico es matar el entusiasmo del públi-
de los compositores que utilizan el orde- música de Cristóbal Halffter, Francisco co, él es quien debe mandar el público
nador están volviendo sobre unos moldes Guerrero o Tomás Marco ya que pien- a los conciertos. Yo pienso que nunca
que corresponden a una música antigua? so inmediatamente que esta música no es útil escribir criticas negativas ya que
ha podido ser compuesta en ningún las obras malas se pueden olvidar. En
H.H.-Sí, sólo que esta dirección de la otro país que no sea España.
música no me interesa, no tiene futuro. todas las revistas y penódicos falta siem-
No creo en compromisos, creo siempre S.-Pero, ¿cuáles cree usted que son pre espacio y es bueno aprovecharlo
en la necesidad de un pensamiento esas características defmitorias de la para las obras de gran calidad.
radical. El fracaso del serialismo es tam- música española?
bién debido al hecho de que se ha con- H.H.-Creo que la característica prin- Alone/ Rodeiro
144 SCHERZO
Nuevos lectores de Compact Disc YAMAHA HI-FI
con tecnología S-BIT PLUS
La nueva gama de lectores de Compact Disc YAMAHA
incluye la nueva tecnología exclusiva S-BH PLUS.
La filosofía de YAMAHA HI-R Para ello tuvimos que desarrollar
como fabricante de equipos de audio nuevas tecnologías digitales así como los
siempre ha sido conseguir un sonido chips y microprocesadores necesarios
excepcional. Aunque el concepto es para que los aparatos de nuestra nueva
simple, lograrlo en la práctica no lo es gama consigan el sonido más puro
tanto, pero en YAMAHA somos alcanzado hasta la fecha por un Lector
especialistas en tecnologías de Compact Disc.
contemporáneas cuyos más recientes Nuestros nuevos Lectores de
ejemplos en el mundo de audio se Compact Disc son la máxima
denominan DSP e YST y hemos representación de lo que es YAMAHA
creado para nuestra gama de Lectores HI-H actualmente. Una marca clásica y
de Compact Disc un conjunto de prestigiosa de alta fidelidad en la que la
desarrollos técnicos denominados innovación ocupa un lugar
S-BIT PLUS. preponderante.
YAMAHA HI-FI

CDX-450 CDX-550
ALTA FIDELIDAD

Mercury en CD
D
entro del mundo de la audiofilia,
la palabra Mercury referente a
discos se instala entre las tres o
cuatro cimas de la producción fonográfi-
ca. Se podría decir que la competencia
al respecto está en las grandes realiza-
ciones Decca que van de 1955 a 1965,
la producción de Warter Legge y Chris-
topher Bishop para EMI y la colección
Lyrita en su totalidad. Podríamos añadir,
para no pecar de parcos, algunas graba-
ciones inmensas realizadas por Hunga-
roton y una sección bastante amplia del
fondo Harmonía Mundi.
Tras el paso al disco compacto, los ele-
pés Mercury han sido buscados con afán
por coleccionistas y audiófilos a lo largo y
ancho del mundo. El afán coleccionista ha
determinado un aumento considerable
en los precios; resulta bastante difícil
actualmente adquinr ningún LP Mercuty
por menos de 50 dólares (cincuenta, no
cinco) y hay ya títulos que andan entre Denms Droke con Wilmo Cozart. En el rack que en to fbtogra/ío aparece detrás de Wilma Cozart pue-
los 200 y 250 dólares. La indudable cali- den verse entre otras casos dos previos Cello De acuerdo con el relato de Howard Woo en su sola de
escucha personal utiliza un previo Marantz-7 (vákulas¡, dos elopas /Vlc-iníosn Mc-75 (válvulas) y dos
dad técnica del sonido Mercury ha influi- grandes sistemas de altavoces ñozak: el lector de compactos es un PMips 880
do poderosamente en este fenómeno,
pero seguramente también el hecho de
que la gran colección Mercury sufrió un la historia apasionante de este sello estaban ya sobre el escenario del
gran parón tras la marcha de Wílma desde sus comienzos aún en los años Orchestra Hall. El director musical Rafa-
Cozart, ya dentro de la década de los cuarenta hasta el lanzamiento que el Kubelik dio la señal y el trompeta
sesenta, y el paso de la firma en bloque a comentamos, iniciativa de Philips realiza- Adolph Herseth llenó la sala con el
manos de Philips, que sigue siendo la pro- da con una enorme dosis de entusias- sonido del comienzo de los Cuadros de
pietaria del fondo Mercury. mo por Wilma Cozart y Dennis Drake. una exposición de Mussorgsky».
The Absolute Sound, por ejemplo, dedi- Cuando más tarde el productor
Nada tiene, pues, de particular que la có una interesante Editorial sobre este David Hall y el ingeniero de sonido
resurrección de la firma bajo el nuevo asunto celebrando la edición y sin escati- Robert Fine escucharon la grabación se
formato revista caracteres de aconteci- mar la palabra éxito si bien recomenda- dieron cuenta de que habían consegui-
miento; y más en el mundillo de los ron que nadie se deshaga de los LP Mer- do un avance trascendental con respec-
audiófilos que en el de los melómanos. cury por el mero hecho de que ahora se to a todo lo realizado anteriormente. El
st bien esto no deja de ser un pequeño editen en el nuevo formato. Han elogia- propio director Rafael Kubelik manifestó
contrasentido, pues el contenido musi- do la calidad del sonido de los CD pero que apenas se podía apreciar diferencia
cal de la colección resulta importante sin dejar de afirmar con toda clandad que entre lo que había podido escuchar
en mi opinión. Quizás ha sucedido que no alcanzan el nivel de excelencia de los desde el podium y la cinta master ya
la calidad técnica, excepcional en bas- LP; se elogia sin reservas pero al mismo terminada. Hay que advertir a este res-
tantes casos, ha venido a eclipsar el tiempo se compara. Estoy plenamente de pecto que Kubelik ha sido siempre muy
interés musical de la colección. Analíce- acuerdo con tales apreciaciones. reticente sobre grabaciones por lo que
se a título de ejemplo cualquiera de los su apreciación ha de ser considerada
discos de Janos Starker, el extraordma- La misma publicación en los números como un gran elogio.
no, casi modélico Respighi en manos de 6 0 / 6 1 (julio a octubre de 1989) recogió
Antal Dorati o los formidables Cuodros un interesante relato de Michael Gray En aquella memorable ocasión se uti-
de Rafael Kubelik si es que este disco bajo el título Mercury records and &ie birth lizó un solo micrófono, un Neumann U-
llega a editarse. Se puede sm duda bara- of High Ftdehty. Se trata de un ensayo 47 que el propio Robert Fine situó justo
jar la hipótesis de que la inclusión en la magistral en el que se relata de forma encima del podium del director. El siste-
colección Mercury de ciertos discos de sucinta pero apasionante la historia de ma del micrófono único fue utilizado
contenido algo más ligbt (Balalaikas, Mercury y se mantiene la teoria. refrenda- aún durante algún tiempo por Mercury
Música de bandas, el disco de Paul da más tarde por muchos analistas, de para pasar al cabo de cinco o seis años
Parav con cosas de óperas francesas que los comienzos de Mercury coinciden a usar dos cuando sobrevino la estereo-
etc..) puedan hacer pensar que la colec- en el tiempo con los grandes documentos fonía. No obstante el empleo de los dos
ción revista un cierto tono de banalidad. sonoros y la gran época de la Alta Fideli- micrófonos fue ponderado al máximo
dad. Comienza Michael Gray su relato por el dúo Fme-Cozart para no incurrir
con el siguiente emocionante recuerdo: en la falsa espectacularidad de que ado-
El lanzamiento de la pnmera tanda de
compactos Mercury ha tenido una aco- lecen muchas grabaciones estereofóni-
«Sobre las diez de la mañana del
gida excelente, se han publicado doce- cas. La mayoría de los discos Mercury
lunes 23 de abril de 1951 los músicos
nas de artículos y se ha pasado revista a versan sobre grandes masas orquestales
de la Orquesta Sinfónica de Chicago
146 SCHERZO
ALTA FIDELIDAD

y se puede apreciar una extraordinaria sido supervisada personalmente por W. compacto. Es muy bueno todo; para
coherencia en la información. No en Cozart. Se nota una ausencia total de quien quiera probar recomiendo el
vano, Wilma Cozart fue el gran oído de compresión en el sonido; la música disco de los poemas sinfónicos de Res-
Mercury; su incorporación a la firma se tiene profundidad y una estimable pighi dirigidos por Antal Dorati.
produjo gracias a su habilidad para cali- riqueza tfmbrica. Los resultados no Para quien desee ampliar conoci-
brar la calidad del sonido de la gran alcanzan el nivel de los LP aunque tal mientos sobre Mercury y sus gentes, la
masa orquestal. Con anterioridad había vez esto sea debido a que no disponga- revista Hi-Fi News ha publicado en su
sido secretaria y ayudante de Antal mos aún de transportes y convertidores edición de abril del presente año un tra-
Dorati, primero en Dallas y después en de nivel suficiente. bajo excelente, debido a la pluma de
Minneapolis, donde se forjó su notable Al margen del interés musical que Howard Woo. Recomiendo vivamente
experiencia en el conocimiento del puedan estos discos despertar, puede su lectura y estudio.
mundo musical. afirmarse que su calidad técnica es de lo
La presente edición de compactos ha mejor hasta ahora editado en disco Alfredo Orozco

Una apreciación de David Manley


E
l famoso creador de la firma VTL en Lo consagración en el tiempo. En dicho similar al de la teoría Manley si considera-
una entrevista que publica Stereoptíife papel ya me puse a defender estas teorías mos que los fallos en cualquier clase de
(Edición de junio 1991). afirma entre y venia a recomendar una cierta descon- componentes electrónicos suelen producir-
otras cosas interesantes que la palabra fianza hacia todas aquellas marcas que se más bien al principio de la vida del apa-
new en el campo de la Alta Fidelidad como política habitual ofrecen al público rato. En todo caso la teoría es difícilmente
tiene un contenido retrógrado y unas novedades con una frecuencia que no discutible en un país donde el mercado de
connotaciones verdaderamente negativas. responde en absoluto a reales y sustancia- segunda mano goza de una enorme vitali-
Basa David Manley sus comentarios en les avances en el orden tecnológico. dad y ofrece el audiófib magníficas ocasio-
que lo que es neiv no puede acreditar Pienso que no se debe admitir por las nes.
nada en ninguno de los aspectos que buenas que el modelo X/MK III sea supe- No pude por menos que dar al lector
realmente nos interesan; la calidad real, nor al II o que éste aventaje a sus prede- cuenta de unas lecturas que contienen a
modas aparte, y sobre todo la fiabilidad cesor. A veces no hay otra cosa que pura mi juicio enseñanzas bastante útiles.
que sólo consagra el tiempo. Naturalmen- publicidad o simples razones de morke-
te, esta filosofía es de aplicación a otros ting. La publicidad no
campos del mundo del consumo, aparece sólo en los
En este orden de ideas, quizas debería- folletos; en ocasiones
mos orientar nuestras opciones de com- el panel frontal de un
pra hacia aquellos componentes sobre los
que exista una acreditada experiencia.
amplificador o la tela
de una caja acústica
IV CONCURSO NACIONAL
Que experimenten otros para que noso-
tros podamos gozar plenamente de la
música Hoy sabemos perfectamente, por
pueden no ser otra
cosa que simples
mensajes publicitarios.
EUGENIO MARCO
ejemplo, que la etapa de potencia Rad-
ford STA-15/111 es una maravilla en todos
¿Cambió alguna vez
Peter Walker la rejilla
PARA CANTANTES DE OPERA
los órdenes: 26 años de expenencia nos de su famosa pantalla
contemplan. Asi, se podrían poner varias electrostática? Sabadell, del 9 al 15 de Marzo de 1992
docenas de ejemplos sobre toda una En el mismo núme-
variedad de componentes. Los expertos ro de Stereophile
en Revox buscan con afán algún G-36, de donde se recoge la Cierre inscripción:
segunda mano naturalmente, y para qué entrevista con David
hablar de los legendarios Marantz, Mc- Manley veo el anuncio
31 de Enero de 1992
Intosh, Leak, Dynaco etc.. de un establecimiento
Opino que David Manley tiene razón; dedicado a artículos Dos millones de pesetas en premios
poco podemos saber por ahora del com- de segunda mano. La
ponente X. Y o Z que se presenta en una publicidad al respecto
feria reciente como una fabulosa cosa se apoya en la mayor Organiza:
new y que a lo mejor no tiene de new segundad que puede
más que algún que otro aspecto de su ofrecer un componen-
cosmética. En todo caso el tiempo dirá sí te que ha vivido ya sus
el producto es tan excelente como en primeros tiempos y
principio nos lo pintan y sobre todo si es funciona sin proble-
un ingenio fiable. Pienso que estos razo- mas. El dueño de la ASSOCIACIÓ DAMICS DE L'ÓPERA DE SABADELL
namientos dejan poco margen para la tienda sostiene la teo-
réplica. En el tan manido campo del auto- ría de que un aparato
móvil piense el lector en el extraordinario de segunda mano
caso del ya mítico seiscientos. debidamente compro- Placa Sant Roe, 22, 2.Q, 1.a
Hace seis o siete años en unas colabo- bado ha de ofrecemos 08201 SABADELL
raciones tipo flash que hice para la ya más confianza que
desaparecida revista Tele Radio publiqué uno nuevo. Se trata de Telf.: (93) 725 67 34 - Fax (93) 727 53 21
un pequeño comentario bajo el titulo de un orden de ideas

SCHERZO 147
No se conforme sólo coi

si el Láser Disc le ofrece el e

8HUMLAKE

Vivaldi l'aul Simón Phil Cullins


The Four St-asons Muría
Débuis a Paris Graceiand Seriously live in Bcrlin
Niaci K The Afrkan Conccrt
Pordelante en
Al fin y al cabo ¿ que sería [f hoy de El Lago de los
Cisnes de Tchaikovsky sin el ballet ?
a band a sonora, Usted puede disfrutar ahora de la misma calidad de
sonido de su Compact Disc, acompañada de la asombrosa
calidad de imagen del Láser Disc.

CLD-2600
»ec táculo completo. Los lectores de Láser Disc Pioneer abren otra dimensión
en los equipos domésticos de audio-video: le ofrecen a
usted, sentado en su butaca preferida, la integra realidad
de una interpretación en vivo.

CID-¡600
Los circuitos Pioneer de lectura óptica le garantizan la alta
resolución de imagen y un bajo nivel de ruido de video,
para que disfrute de una claridad de imagen tan trans-
parente como el cristal.

CLD-ÜOU

Los lectores Láser Disc .son compatibles, de manera que


admiten los cinco formatos de discos. Esta flexibilidad le
permitirá a usted la formación de una completa discoteca
con los artistas y obras de su preferencia.

LD r.íOrm)

Si el catálogo de títulos es extenso, también lo son las


prestaciones que Pioneer ofrece en sus CLD.
Como el mecanismo Alpha-Turn en el lector CLD-2600
que le permite reproducir las dos caras sin necesidad de
levantarse para darle la vuelta al disco.
Láser Disc de Pioneer. No se conforme con la mitad, si
puede aplaudir el espectáculo entero. -=.

PIONEER
¡ih.uknv.sky
The Nutcracker
Mozart - Piano
concerté.» - English The Art of Enterteinment
Ri.ide.il f Nurejev ChamlxT Orchesira
ALTA FIDELIDAD

Roomtune
Este buen caballero, que aquí a vuesas Ningún elemento hifi, por
mercedes se presento, no es otro que caro y prestigioso que sea,
Michael Green, creador y diseñador de puede solventar adecuada-
RoomTune, firma dedicada al acondicio- mente los problemas de la
namiento y tratamiento acústico. acústica de una habitación.
No creo necesario recordar que es la Una mejora en las condicio-
habitación de escucho el más importante nes de audición de nuestra
elemento de nuestro equipo hifi y sin sala de escucha, como la
duda, también el más determinante del que nos propone RoomTu-
resultado final. Con buen sentido, a las ne, es incomparablemente
dimensiones y condiciones de nuestra más perceptible y gratifican-
habitación, deberían acomodarse los te que cualquier otro cam-
elementos que van a formar un equipo. bio en el equipo. RoomTune
La importación de los módulos Room- presenta además módulos
Tune, es pues una estupenda noticia de diferentes clases, depen-
que va a permitir a los aficionados, diendo la habitación, del emplazamiento
y efecto que se persiga importador por esta necesario iniciativa.
desde ahora, intervenir favorablemente
y a un precio asequible, en las condicio- RoomTune: Sarte Audio Élite (Tel:
nes acústicas de la habitación en la que Sin perjuicio de informar mas detalla- 96-3510798)
habitualmente escuchan sus discos. damente, vaya por delante mi recomen-
dación a los aficionados y mi felicitación al E.CP.

Buenas lecturas
He aquí un extraordinario sistema de chables (hasta la fecha) favonios: Ote'/o, CD Drive posee dos salidas eléctricas
lectura de CD, o si lo prefieren de trans- en la conocida producción de EMI prota- coaxiales (75Í1). una en formato BNC y
pone, como si dice ahora. Este tema de gonizada por Domingo-Maazel-Scala, la otra con el conectar RCA más usual
los transportes ha sido siempre uno de que sirvió de banda sonora para la discu- de audio. pero incorpora además un
mis cobo'fos de batalla, así que en cual- tido película de Franco Zeffirelli. El punto conector Toslink para fibra óptica. En
quiera de mis trancos de prueba se pue- fuerte de este lector parece ser, ademas cables de interconexión, ha/ que recor-
den encontrar vahados sermones sobre de una ausencia sorprendente de distor- dar que Mod Squad tiene ya en el merca-
esta prioridad básica para la buena lectu- sión subjetiva, revelar todo el sector do el cable coaxial Wonder Link, que es
ra de nuestros queridos discos de plata. grave en infragrave en su plenitud y deta- sin duda el complemento perfecto del
Vuelvo a recordar que la lectura inte- lle, lo que da un mayor peso a instru- CD Drive para la delicada interconexión
gra del CD es quizá más importante que mentos como el piano, así como un digital. En fibras ópticas, incluso en el sis-
el sistema de conversión digital-analógico mayor cuerpo y calor emocional a las tema Toslink, también hay ctoses y, en la
y que sin una bueno fectura y una correc- voces, características que también facili- actualidad, pueden encontrarse algunas
ta transmisión de toda la información tan en las obras orquestales el fácil segui- fibras ópticas con conectores metálicos y
digital al convertidor... no hay nada que miento de la estructura musical incluso terminales perfectamente pulidos, que
hacer El transporte de CD debe instalar- de enormes edificios sinfónicos. En térmi- son perfectamente uatizables y que pue-
se con las mismas precauciones que los nos estrictamente sonoros, este CD den procurar algunas ventajas en térmi-
antiguos giradiscos. en un soporte nos de aislamiento lector-converti-
especial y aislado de vibraciones, dor, así como frente a interferencias.
debiendo mterconectarse en la El CD Drive de Mod Squad se
forma idónea. La interconexión digi- coloca en el mercado en una prime-
tal tiene, por raro que parezca, ra línea por su calidad, con la venta-
tanta o más importancia que la de ja indudable que supone además su
oudio: un mismo sistema de conver- salida digital multiuso, escoltado en
sión, suena de forma sensiblemente precio por el excelente lector fran-
diferente según el transporte y cés Micromega Dúo (claro, preciso
cable de interconexión utilizado, así y transparente1 ideal en el reperto-
que muchas de las críticas que irres- rio barroco-clásico y de música anti-
ponsablemente se hacen sobre con- gua) y quizá, por algún modelo
vertidores, se refieren más a lectura superior de Teac o Meridian. Pero
e interconexión digital... que al pro- en cualquier caso, el CD Drive se
pio sistema de conversión. configura desde ahora, como una
Q) Dnve de Mod Squod de las pocas alternativas absoluta-
El CD Drive de Mod Squad abre, mente recomendables para esa difícil lec-
a mi juicio, nuevas perspectivas para la Drive de Steve MacCormac informa pun- tura del CD.
escucha de las grandes obras orquesta- tualmente sobre las acústicas y atmósfe-
les, así como de las buenas producciones ras de grabación, lo que aumenta el CD Dnve de Mod Squad: Sarte Audio
de Opera. Baste decir que gracias a este morbo de la audición musical considera- Élite (Tel: 96-3510798)
lector he podido escuchar por pnmera blemente.
vez a mi satisfacción uno de mis inescu- En cuanto a interconexión digital, el Eduardo Casanueva Pedraja
150 SCHEHZO
¡AZZ

Episodios
L
o que siempre nos pareció incon- contradicciones.
cebible acaba de suceder Miles Constantemente se
Davis ha muerto. Cuando los más nos escapaba, y
indispensables que llenaron nuestros siempre volvió por el
mejores años con innumerables recuer- lado donde menos
dos desaparecen, cuando los héroes se le esperaba para
que considerábamos inmortales se nos sorprendemos una y
van, quedamos estupefactos e incrédu- otra vez con nuevas
los, casi como huérfanos. Tardamos en y fabulosas creacio-
reaccionar. No sabemos realmente qué nes.
decir, pero tampoco podemos callamos.
Nadie que tuviera
Porque le peor es el silencio que de
la oportunidad de
repente se instala y lentamente se hace
seguir a Miles en sus
insoportable. Todo un pasado nos viene
principios pudo ima-
encima con la inmensa deuda que al
ginar que iba a con-
paso del tiempo hemos establecido con
vertirse en la superes-
los maestros. Por un lado lo vemos
trella del jazz. Sus pri-
todo muy claro, y por otro una extraña
meras grabaciones
ceguera nos impide la lucidez. Con
con Charlie Parker
dolor comprobamos que el mundo una
(noviembre de 1945)
vez más ha quedado empobrecido.
le muestran como un
Últimamente nos habia pasado con la solista competente,
desaparición de Sarah Vaughan, de pero en absoluto vir-
Woody Shaw, de Dexter Gordon, de tuoso. La revista
Art Blakey, de Stan Getz. Y ahora con Down beat no dudó
Miles Davis. Noticias crueles que nos en rechazar con
llegaron a través de los penódicos y que dureza su aportación,
nos obligaron a convertir estas páginas, censurando «su mal
dedicadas a una música tan vigorosa- gusto» y descalificán-
mente vital como el jazz, en una serie dola como «un des-
de lamentables necrologías. ¡Qué sea carado intento de
ésta la última en mucho tiempo! copiar lo peor de
Dizzy Gillespie por
Lo curioso es que nos habíamos des- parte de un músico
pedido muchas veces de Miles ya. En indigno de actuar al
ocasiones nos parecía acabado, hundi- lado de Parker».
do, atacado y alcanzado por la crisis Tales argumentos,
definitiva que le amenazaba con lo que in-
único que ningún músico puede acep- Miles Davis en el New York jazz FesUvot, en I 9 5 '
tar: el silencio. Y siempre volvía con cluso en su día pare-
nuevas fórmulas mágicas, con mensajes cían fuera de lugar, contribuyeron al fuer- dio origen a un nuevo modelo para la
inéditos que nos abneron mundos des- te desprecio que Miles siempre sentía orquestación en el jazz. La formación
conocidos, llenos de misterio y belleza. hacia los críticos. apareció y grabó bajo el nombre de
Ahora ya no habrá más retornos y Los años de aprendizaje con el inven- Davis aunque en realidad fuera un pro-
podremos, por fin, empezar a explorar tor del bebop fueron decisivos para el yecto colectivo de Gil Evans y Gerry
en profundidad la increíble obra que trompetista que poco a poco desarrolló Mulligan, entre otros, Su frágil sonido,
nos ha dejado. un sonido personal, al principio seco y tan diferente del de un líder, llevó un
Toda la vida de este gran trompetista áspero. Una curiosa amistad de mutuo color extraord ¡nanamente suave a una
es increíble. Por ejemplo, parece un ver- respeto y fuertes tensiones unía a los música que inmediatamente fue consi-
dadero milagro que pudiera llegar a la dos músicos durante aquella época derada un nuevo estilo. De allí el nom-
edad de sesenta y anco años. Su primer (1945-48). Cuando empezó a fallarles la bre genérico del álbum -Birtft Of The
gran maestro. Charlie Parker, murió a inspiración común, optaron por separar- Cool- que contiene la docena de temas
los treinta y cuatro, y muchos de sus se y seguir cada uno por su lado. Hubo procedentes de aquel expenmentó.
compañeros de juventud aun más jóve- que esperar varios años antes de que Sin embargo, hubo que esperar hasta
nes. Miles sobrevivió sus múltiples asomara el futuro Miles, generalmente 1955 para ver a Miles en el papel de
momentos críticos. Era un auténtico en baladas que le permitían cambiar len- aclamado Ídolo, Después de un largo
luchador que no admitía derrotas de tamente su fraseo con giros peculiares y periodo de senos problemas personales
ningún tipo. Por algo le apasionaba el lacónicos. Pero a pesar de la timidez que que le condenaron a la inactividad,
boxeo, deporte que practicó en los le caracterizaba en sus pnncipios, todo resurgió de la oscuridad y causó un gran
gimnasios durante bastante tiempo. Es lo que hacía llevaba el sello de la con- impacto con su aparición en el festival
un hecho que contrasta fuertemente fianza en sí mismo. Siempre supo situar- de Newport «Yo siempre suelo tocar
con la enorme carga de lirismo que se en el centro de los acontecimientos y así,» se limitó a declarar, pero consciente
caracteriza gran parte de su obra. Pero tomar el papel de líder. Ya se ve en la de su repentino éxito no tardó en for-
este hombre era así, lleno de enigmas y banda de nueve músicos que, en 1949, mar un quinteto con el saxo tenor john

SCHERZO 1.51
\AZZ

guna otra figura en toda la historia del


jazz cortar y rectificar antes de tiempo,
por asi decirlo, y sin por ello olvidar el
pasado del cual se quedaba con lo más
sano y auténtico, es decir con lo utiliza-
ble para crear nuevas obras insupera-
bles. Volvió a tocar la composición de
su grupo, dando paso a otro cambio
todavía más radical y espectacular en
1969 con el álbum in A Silent Way
seguido de fiitches Brew que, con la
incorporación de la electrónica en su
música netamente acústica le pusieron
en seguida a la cabeza de un nuevo
movimiento llamado el jazz-rock
Esto ocurrió en un momento de
grave crisis para el jazz, que estaba per-
diendo rápidamente interés para la
nueva generación. Siempre previsor, el
incansable trompetista encontró, sin
embargo, el remedio y fue capaz, una y
otra vez de llenar los inmensos locales
del rock, como Fillmore West y The
Rainbow, con masas de gente que, por
edad, podrían ser sus hijos. Esta fase de
su obra, reflejada en otra larga serie de
discos grabados en directo, sigue siendo
tema de fuertes discusiones entre los
críticos y objeto de nuevos estudios,
veinte años después de su aparición.
Cerca ya de lo? sesenta, y tras un pro-
longado descanso (1975-80) debido a
serios problemas físicos. Miles se mantu-
vo en esta linea. Era consciente de las
diferentes enfermedades que minaban su
salud, y sin embargo volvió con fuerza,
de aspecto cada vez más rejuvenecido y
siempre excéntrico en su manera de ves-
tir y de actuar cara al público y, sobre
todo, ante la prensa. Tocaba ahora de
modo sumamente relajado, como si
estuviera contemplando el siguiente paso
Miles Dovis
hacia delante, Retomó a los estudios de
grabación, y nuevos discos vieron la luz
The Man VWth The Hom (1980-1), We
ros grupos clásicos dentro de un estilo repetirse a s( mismo. Supo sorprender-
Want Miles (1981), Star People (1983).
que se llamó el hardbop o el neobop, En nos una y otra vez. Se apartó de Gil
Decoy (1984), Tutu (1986), Under Arrest
el centro de todo se hallaba la trompeta Evans y comenzó una serie de cambios
(1987). Amánala (1989). A veces se
con sordina que tenía un inconfundible, que sembraron la confusión entre sus
dedicó a obras ajenas, por ejemplo la
a veces casi trágico matiz, más tarde imi- partidarios. Primero con Kmd Of Bine
larga e intensa composición Aura que el
tado por infinidad de discípulos. (1959), obra maestra que se srtúa plena-
trompetista danés Palle Mikkelborg le
Este denso y dramático sonido -tanto mente dentro del jazz modal, para luego,
brindó, y que ambos grabaron en
con el quinteto como con las grandes tras la salida de Coltrane del grupo y la
Copenhague en 1985, Últimamente se le
formaciones que el genial arreglista Gil incorporación de otro saxofonista llama-
sorprendió acompañando a otros artistas
Evans juntó en varias ocasiones alrede- do Wayne Shorter, el pianista Herbie
(john Lee Hooker, Shirley Hom), incluso
dor del magistral solista en los estudios Hancock, el contrabajista Ron Cárter y
participó en algunos homenajes organiza-
de grabación de Columbia (Miles Ahead- el batería Ton/ Williams, orientarse
dos en su propio honor como por ejem-
1957, Porgy And fiess-1958, Sketches Of hacia un estilo más duro y directo, tal
plo en Montreux y París el pasado vera-
Spain-1959)- era enormemente atracti- vez incluso más brillante y angular, que
no. Pero mucho nos hace pensar que su
vo y llegó pronto a ser la música de se puede estudiar en un buen número
obra, al fin y al cabo, estaba no sólo per-
fondo en la vida de moda de Nueva de temas origínales grabados entre 1963
fectamente perfilada dentro de su
York, Londres y Parfs. Las fotos de un y 1968, e incluidos en los LP's Seven
inmensa nqueza y vanedad, sino incluso
Miles Davis pensativo y distante, impeca- Steps To Heaven, E.S.P., Líve At The Plug-
definida y redondeada.
blemente vestido aparecía por todas ged Nickle, Miles Smiles, Someter, Nefertiti,
partes. Un artista menos inteligente se Miles In The Sky y Filies de Kilimanjaro.
hubiera agarrado al máximo y durante ¿Cuántas de las grandes leyendas del
mucho más tiempo a esta imagen. Pero A pesar de sus constantes éxitos, jazz llegaron a tanto...?
Miles jamás cayó en la tentación de Miles se mostraba inquieto, mirando
siempre hacia delante. Sabia como nin- Ebbe Traberg
152 SCHERZO
1 2 FESTIVAL DE MADRID
25 OCTUBRE - 15 NOVIEMBRE

FUNDACIÓN

ABBEV UNCOLN QUARTET IRAKEM MARCUS ROBEBIS IRIO


GERSUr M U l l l G A N AND GE BUY MUIUOAN QUABTE? BRANFORD MARSALI5 TRIO M I G U f l A N G I l CHASTANG OUARTET
IAKE 6 HANCOCK SHORTER QUARTEI ¡nvlludo uipLtia GASV BARIZ
SPYHO GVUA JOHN WflAUGHlIN IRIO I f l É MONIOLIU í BOBGT HUICHERSON OUO
CONCIERTO EXTRAORDINARIO B i n T CARIER & HÍR TRIO PERICO SAMBEAT MIKE M O » M A N OUINTET
tPITAPH1' di- C h u . k i M m g u i (30 MÚSICOS EN ESCENAI ARI f N5EMBU: OF CHICAGO "¡i ANIVERSARIO m . i M d o «ipi-tiol DAVID KIKOSKI
\™,,r,An r.loíf.al AMABUIHO (CORO OE SOWETOI
EFEMÉRIDES

NOVIEMBRE

2 / X I / I 9 4 6 : Nace en cisco Alonso. El libreto es de


Venecia el director de Emilio González del Castillo
orquesta Giuseppe Sinopo- y José Muñoz Román.
I3/XI/I926: Estreno en
3 / X I / I 9 I I: Fallece en el Teatro de la Zarzuela de
Valencia ei compositor Sal- Madrid de El Caserío, zar-
vador Giner y Vidal. Fue zuela en tres actos de Jesús
director del Conservatorio Gundi con libreto de Fede-
valenciano y autor de zar- rico Romero y Guillermo
zuelas (El rayo de sol, Los Fernández Shaw.
mendigos), cantatas, una sin- I6/XI/I86I: Estreno en
fonía (Las Cuatro Estacio- Hamburgo del Cuarteto con
nes), un oratorio (judith) y piano n° I, en sol menor, Op,
varias óperas (El fantasma, 25 de Brahms.
Mosel). Es autor de diversas I 7 / X I / I 8 7 I : Nace en
obras religiosas, entre las Collbató, Barcelona, el
que destaca la Gran misa compositor Amadeo Vives.
de Réquiem compuesta en I 8 / X I / I 7 8 6 : Nace en
1878 para lo? funerales de Eutin, Holstein, el composi-
la Reina Mercedes. Había tor y director de orquesta
nacida en Valencia en alemán Cari Maria (Frie-
1832. drich Emst) von Weber.
4 / X I / I 8 7 6 : Johannes I 9 / X I / I 9 2 I : Nace en
Brahms dirige en Karlsruhe Budapest el pianista Géza
el estreno de su Primera Anda.
Sinfonía, en do menor, Op. 20/XI/I9II: Bruno Wal-
68. ter dirige en Munich el
6 / X I / I 8 5 6 : Nace en estreno de Lo Canción de la
Washington el compositor Tierra de Gustav Mahler.
y director de orquesta nor- 22/XI: Festividad de
teamericano John Philip Santa Cecilia, patrona de la
Sousa. Muy joven comenzó Giacomo Meyerbeer, por Carmelo música / de los músicos.
a estudiar violín y a los die- 23/XI/I78I: W A Mozart
ciséis años formaba parte de orquestas Cancionero Popular Vosco. Compuso y su alumna josephme von Auerhammer
como profesional. Entre 1880 y 1892 también obras inspiradas en el folklore interpretan en Viena el estreno del Con-
fue director de la Banda de la Marina de vasco: Canciones, romanzas, zortzicos, cierto para dos pianos y orquesta, en mi
los Estados Unidos, agrupación que dejó dos óperas: Ortzun y Uño y las zarzuelas bemol mayor. K 365,
para fundar su propia orquesta y con la Altaren bildur y Sasieskola. Su estudio de 25/XI/I90I: Gustav Mahler dirige en
que efectuó giras por numerosos países la Música Popular Vasca, monumental Munich el estreno de su Cuarta Sinfonío,
interpretando marchas compuestas obra sobre la música de su tierra natal, en so' mayor
expresamente para su banda. De las está reconocida y considerada como el
innumerables piezas escritas destacan 26/XI/I69I: El compositor y musicólo-
trabajo más exhaustivo en la materia. go madrileño Francisco Asen jo Barbie ri
The Stnrs and Stnpes Forever, consideradaAzkue nació en Lequertio en 1864.
como el segundo himno nacional, Was- es nombrado miembro de la Real Aca-
hington Post El Capitón, The Liberty Bell y 9/XI/I88I: Estreno en Budapest del demia de Bellas Artes de San Fernando.
Manhattan fleocr), Recibió multitud de Segundo Concierto para piano y orquesta, 27/XI/I93I: Estreno en Viena del
premios, homenajes y distinciones. The en si bemoí mayor Op. 83 de Johannes Concierto para piano y orquesta, en re
March King (El Rey de la Marcha) falleció Brahms. La obra está dedicada a Eduard mayor (para la mano izquierda) de Mau-
en Reading, Pennsylvania, en 1932 sien- Marxsen, primer profesor de Brahms, rice Ravel. Fue solista Paul Wrtgenstein
do enterrado con honores militares siendo el propio compositor hambur- (pianista austríaco que perdió su brazo
reservados para los héroes nacionales. gués quien interpretó la parte solista. derecho en la Primera barbarie mun-
II/XI/I9I I: En el Teatro Novedades dial) a quien está dedicado y que duran-
7/XI/I95I: Fallece en San Sebastián de Madrid se estrena Ei Capataz, zar- te muchos años fue el único capaz de
el compositor y filólogo vasco María de zuela de Arturo Saco del Valle. Esta interpretarlo.
Resurrección Azkue y Aberasturi. Es obra está considerada como la segunda 29/XI/I83I: En el Teatro de la Opera
autor de tratados sobre historia y filolo- parte de El Túnel (estrenada en Madnd de París se estrena Roberto el dioblo,
gía vasca. Presidente de la Academia de en 1908) y en conjunto tienen la parti- ópera de Giacomo Meyerbeer. Esta
Lengua Vasca. Doctorado en Teología culandad de ser las primeras obras para representación estuvo rodeada de una
por la Universidad de Salamanca. Tras la escena que cuentan como protago- insólita campaña publictano y contó en
su paso como estudiante por el Con- nista el ferrocarril, ya que la acción se el reparto con las principales voces del
servatorio de Colonia, regresó a su tie- desarrolla durante la construcción de momento (Cinti-Damoreau, Nourrit y
rra natal donde comenzó a recopilar una línea en las montañas de Reinosa. Lafont) y proporcionó al compositor
canciones y melodías vascas de las que I 2 / X I / I 9 3 I : Estreno en el Teatro alemán un clamoroso éxito. Con esta
llegó a reunir dos mil. Una buena parte Pavón de Madrid de ios Leandros, sainete obra se inicia el denominado género de
de este trabajo está publicada en el lírico en dos actos del compositor Fran- la grande-ópera, LFCB.

154 SCHER2O
ti

PETRDF

j
AL SERVICIO (RM) DE LA MÚSICA

REAL MUSICAL CENTRAL:


CARLOS III N.° 1. MADRID. TELS. 541 30 07 / 06 / 09
DELEGACIONES
MADRID JAÉN
RÍOS Rosas, 8 Plaza de San Ildefonso, 10
Teíóf. 442 41 86 Teléf. 25 40 22

MADRID ALICANTE MALAGA


Santa Isabel, 45 LEVANTE MUSICAL POLIFONÍA
Teléf. 527 16 65 Bailen, 15 San Millán, 27
Teléf. 20 01 57 Teléf. 25 31 88
MAJADAHONDA BADAJOZ
Hernán Cortés, 6 OVIEDO
Maléndez Vsldés, 30 Principado, 9
Teléf. 638 01 13 Teléf. 22 31 60 Teléf. 22 48 27
ALCALÁ DE HENARES CACERES SANTIAGO DE COMPOSTELA
Goya, 4 Gómez Becerra, 16 Gómez Ulla, 18
Teléf. 888 92 12 Teléf. 24 0B 87 Tetéf. 57 28 24

Вам также может понравиться