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La Cultura
Introducción
Es un imperativo actual conocer y entender el pasado, el presente, la tradición y la
historia de los pueblos y sus culturas, las urbes modernas, los pueblos rurales e
indígenas, los inmigrantes y sus pluralidades de aportes a nuestra cultura, y la
interacción de costumbres con sus componentes humanos y su adaptabilidad a la nación,
y es a través del omnicomprensivo conjunto de disciplinas que integran la
ANTROPOLOGÍA, que intentamos comprender las distintas dimensiones de sentido de
la vida y la cultura humana de la diversidad la pluralidad y la diferencia, como interés
trascendente de la humanidad en su conjunto.-
Intentaremos esbozar una humilde mirada crítica a los objetivos que inexorablemente
imponen su actualidad y vigencia a la antropología, que a más de analizar y abordar de
otro modo su teoría , método, estrategia, metas y éticas, debe imprimirle un nuevo
sentido a la disciplina en relación a los nuevos escenarios emergentes en el momento
histórico actual de la humanidad, valorizando la cultura y la identidad del componente
humano de cada integrante de ella y viceversa, bajo diversos enfoques, analizando cómo
comprender la variabilidad, diversidad, desarrollo del contexto a nivel mundial de la
cultura humana en los pueblos del mundo , en aras de promover el conocimiento valioso
y eficaz de construcciones socioculturales para que sea factible reconocer, entender,
valorar y respetar las distintas culturas y modos de ser de los hombres, para la
convivencia armoniosa , pacífica y solidaria de las naciones, incluyendo la función
política que éste conocimiento tiene, descartando como premisas carentes de toda
validez, toda aquella visión que sea etnocéntrica, racista, descriminatoria, y como tal,
obstáculo socio-cultural insalvable par un diálogo e intercambio de saberes, para la
realización de la UNIDAD HUMANA EN LA DIVERSIDAD, Y LA
CONSTRUCCIÓN VALEDERA DE SOCIEDADES INTERCULTURALES.-
Desarrollo
Debe ser la antropología la ciencia de las pluralidades, las diversidades y las diferencias
humanas, pero ya no adoptando una posición conteste, con una categoría dominante o
de situación social de más poder, sino como ciencia de todos, de la mismidad del ser
humano en la alteridad, comprendiendo las relaciones de sentido que teje el entramado
social contemporáneo, para entender el futuro, y para conferir a los hombres la
posibilidad de desarrollar en forma igualitaria sus potencialidades históricas como
grupos plurales, diversos y diferentes, que aunadamente construyen la cultura y el
encuentro de los seres humanos.-
También desafía a la antropología los nuevos fenómenos que se dan en las religiones,
sus recreaciones y reinterpretaciones continuas, a veces distorsionadas, extremistas que
se sumergen en verdaderas cruzadas contra vidas inocentes, surgen a la vez, nuevos
movimientos religiosos, sistemas de creencias, cosmovisiones, espiritualidades y
ritualidades, los nuevos "ethos", creándose y recreándose en este campo del espíritu
humano nuevos mitos y ritos.-
Nietzche confronta el concepto de cultivo del espíritu, pues aduce que la cultura no es el
sinónimo de saber muchas cosas, sino que es el resultado de la voluntad creadora de un
pueblo. Para el mismo tiene primacía la noción de unidad, la cultura hace posible que un
pueblo se vuelva vitalmente uno, evita su disociación. Es todo acto creador y
transformador del ser humano y del mundo que él ha creado.-
También señala que para conocer la cultura de los hombres, es necesario establecer su
genealogía, es decir el conocimiento de las circunstancias históricas a partir de las
cuales surgen los saberes que la conforman, la forma en que se desarrollaron y
transformaron, o como fueron reinterpretados gracias a la voluntad creadora del hombre
en lucha continua de saberes y poderes en los que interactúan.-
En las sociedades humanas, las interacciones están marcadas por las construcciones
culturales por ella generadas: No se conoce ninguna sociedad sin cultura, toda sociedad
posee una cultura.-
Es la cultura el acto supremo de alteridad que hace factible el encuentro dialogal de los
seres humanos, que van estructurando un sentido colectivo de su ser y estar en el mundo
y la vida, con el cual los elementos culturales cumplen así la función de ser constantes y
capaces de cohesionar, unir, identificar , interpretar y modificar la acción humana.-
La cultura es la herencia social diferente a la orgánica, que nos permite vivir en una
sociedad organizada, ofreciéndonos la posibilidad de soluciones a nuestros problemas;
conocer y predecir las conductas sociales de los otros, y permite a otros saber que
pueden esperar de nosotros. La cultura hace posible interacciones sociales que dan
sentido a la vida de un grupo, que regulan nuestra existencia, desde el momento mismo
en que nacemos, dándonos nuestros valores, y pautar de sentido de la existencia
presente y de la construcción del futuro.-
Conclusión
Frente a la realidad actual , la antropología tiene la muy difícil pero noble misión, a
través de su cientificidad en cuanto a cultura del hombre en la sociedad, de contribuir
con sus conocimientos, a que la humanidad toda mire más allá de las apariencias de los
seres, de las cosas y los hechos, ayudándonos a liberarnos de la oscuridad que nos
impide valorar a cabalidad las diversas dimensiones de la realidad y las implicancias de
la misma.-
Por sobre todo, la antropología debe imprimir a la cultura del hombre la responsabilidad
de construir nuevos sentidos de la existencia, marcados por la razón y el corazón, para
que la humanidad se recupere a sí misma, y pueda revitalizar sus proyectos y sus
sueños, sus potencialidades, el amor, la dignidad , alegría, que son los hitos
insoslayables para seguir la trama infinita de la vida, con fe, esperanza, solidaridad y
alegría.-
Ante la falta de sentido y de valores que enfrenta la humanidad toda, se debe pensar en
el incontrovertible deber y derecho al respeto, valoración y convivencia armoniosa con
la pluralidad, la diversidad, la alteridad y la diferencia, para construir en forma solidaria
sociedades interculturales basadas en el respeto y tolerancia,
con un elevado grado de compromiso con la vida, que no solo estudie sus postulados
como ciencia del hombre y su cultura, sino como herramienta de construcción y
transformación de la misma, en una nueva civilización, una nueva humanidad,
sustentada en la fuerza insurgente del Amor del Creador.-