Hernández Serafín Abril

Concepto y realidad Investigación en Comunicación

Realizar un proyecto de investigación involucra una constante toma de decisiones,

y hay muchos aspectos a tomar en cuenta para lograr avanzar por el camino
deseado. El investigador debe aprender a elegir cuidadosamente pues muchos
elementos importantes; como el marco teórico, el objeto de estudio y el tipo de
investigación, todos ellos deben ser determinados con precisión.

Sin embargo, hay otro elemento de la investigación que es quizá inherente a esta
debido a las características de la investigación en ciencias sociales. “Las ciencias
sociales dedicadas a la investigación de la realidad social para explicarla y
comprenderla requirieron del desarrollo de un proceder metodológico que
reconocemos en la actualidad como investigación de campo debido en parte a la
naturaleza misma de su objeto: los fenómenos que caracterizan a la realidad social
en todas sus manifestaciones.” (Muñoz, 2002: pág.12).

Las ciencias sociales se encargan de observar, estudiar y explicar o resolver

problemáticas que surgen en su entorno, y como consecuencia de ello la
investigación de campo resulta indispensable. Está atada directamente al objeto de
estudio.

Es por ello importante conocer a que nos referimos cuando hablamos de

Investigación de Campo, ¿en qué consiste este proceso? En la Guía para la
Elaboración de Marco Teórico se menciona que: “El proceso metódico subyacente
en dicha investigación es el de “contrastación”, que no es más que el ejercicio
intelectual de contrastar o comparar el “modelo conceptual” ya construido, que
explica teóricamente el fenómeno estudiado y sus antecedentes, con el fenómeno
en tiempo-espacio real.” (Pérez, 2003: pág. 38).

Al comienzo de la investigación se debe recabar información, para construir

el marco teórico; posteriormente, hay que recabar información sobre el objeto de
estudio pues debemos conocer todas sus características y las variables que
involucra. En estas etapas debemos abastecernos de conceptos.
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 La investigación de campo surge entonces para contrastar con estas etapas,
no todo puede quedarse en el plano conceptual. El objetivo de la investigación es
ofrecer soluciones o una mejor comprensión de una determinada problemática, por
ende, el factor de la realidad no debe dejarse de lado; y aquí es donde entra la
investigación de campo.

En este tipo de estudio existen varios factores a considerar como la

temporalidad y espacialidad. Es importante conocer el contexto de la problemática
pues esto le otorga características específicas a la investigación, el espacio y tiempo
son variables que construyen la realidad.

Otra característica de este tipo de estudio es que es no experimental. “La

investigación de campo es aquella que consiste en la recolección de datos
directamente de los sujetos investigados, o de la realidad donde ocurren los hechos
(datos primarios), sin manipular o controlar variable alguna, es decir, el investigador
obtiene la información, pero no altera las condiciones existentes.” (Arias, 2012: pág.
31).

Es importante recabar la información fuera de un ambiente controlado pues

así obtendremos resultados que reflejen de manera fiel la situación en la que se
ubica nuestro objeto de estudio.

Para realizar esta importante tarea, la investigación de campo utiliza varias

herramientas como: “la exploración y la observación del terreno, la encuesta, la
observación participante…” (Garza, 1988: pág. 10). Otros autores también
mencionan “Encuesta, Panel, Estudio de casos, Ex post facto” (Sabino, 2002)

Estas herramientas le ayudan a entrar en contacto con la población y el

territorio para conocer a detalle lo que sucede en un espacio y tiempo determinados
y así lograr un esbozo que pueda analizarse con base en la investigación
documental que se realizó de manera previa.

Entre estas herramientas la encuesta presenta gran utilidad pues “es una
estrategia (oral o escrita) cuyo propósito es obtener información:
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a) Acerca de un grupo o muestra de individuos.

 b) En relación con la opinión de éstos sobre un tema específico.” (Arias,
2012: pág. 32).

La encuesta es una fuente directa y valiosa de información, pues, aunque

está condicionada por la subjetividad de los individuos, nos permite conocer lo que
sucede en su entorno y como lo perciben aquellos que se encuentran inmersos en
ese contexto.

Otro elemento considerable de la encuesta es la temporalidad, pues: “la

información obtenida es válida sólo para el período en que fue recolectada ya que,
tanto las características como las opiniones, pueden variar con el tiempo. Es por
esto que la encuesta también recibe la denominación de diseño transversal o diseño
transeccional.” (Arias, 2012: pág. 32). Para la investigación de campo es
fundamental obtener la información precisa de una temporalidad adecuada, y por
ello la encuesta resulta útil.

Hemos comprobado que los diferentes tipos de investigaciones cumplen con

propósitos específicos y debido a ello se da su diferenciación. La investigación de
campo contrasta completamente con otros tipos de estudio que se podrían
considerar documentales, es la pizca de realidad que evita que el estudio
permanezca en el plano conceptual.

Debe existir un equilibrio entre lo conceptual y lo real, porque es cierto que

no todo puede ser resuelto a partir del conocimiento que se obtiene de fuentes
bibliográficas, también debe tomarse en cuenta lo real, aquello que involucra el
contexto, porque muchas veces esto podría determinar la validez del estudio. Sin
embargo, tampoco podemos creer que lo resolveremos todo mediante el empirismo,
debemos contar con las bases que nos otorga el conocimiento previo y comprobado.

El plano real y el conceptual deben coexistir en la investigación, ambos tienen

peso en esta y por ello deben considerarse. Ambos le otorgan validez y ayudan a
que esta se realice de forma completa.
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Bibliografía

Muñoz Rosales Victorico (2002) “Técnicas de Investigación de Campo I”, ENBA,

México, pág. 12.

Pérez Espino Efraín (2003) “Guía para la Elaboración de Marco Teórico”, DIF,
México, pág. 38.

Arias G. Fidias (2012) “El Proyecto de Investigación: Introducción a la Metodología

Científica”, Episteme, Caracas, pág. 31.

Garza Mercado Ario (1988) “Manual de Investigación para estudiantes de Ciencias

Sociales”, El Colegio de México, México, pág. 10.

Sabino, C. (2002). “El proceso de investigación”, Panapo, Caracas.

Arias G. Fidias (2012) “El Proyecto de Investigación: Introducción a la Metodología

Científica”, Episteme, Caracas, pág. 32.

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