que se le pusiera alrededor del cuello una piedra de molino como la que el asno hace girar y realmente fuera arrojado al mar. (Romanos 14:13) Por lo tanto, ya no andemos juzgándonos unos a otros, sino más bien hagan que esto sea su decisión: el no poner delante de un hermano tropiezo ni causa para dar un traspié. (Mateo 18:6) Pero cualquiera que haga tropezar a uno de estos pequeños que ponen fe en mí, más provechoso le es que le cuelguen alrededor del cuello una piedra de molino como la que el asno hace girar y que lo hundan en alta mar. (Lucas 17:2) Más ventajoso le sería que le suspendieran del cuello una piedra de molino y lo arrojaran al mar que el que él hiciera tropezar a uno de estos pequeños.