Curso: Análisis instrumental

Profesor: Santisteban, Oscar

Alumna: Llatas Ortiz, Geraldine Mercedes
Código: 15070062

Semana 2 – Articulo
Concentración de yodo en la leche ultrapasteurizada de vaca. Aplicaciones en la
práctica clínica y en la nutrición comunitaria

Introducción:
La razón principal en el artículo radica en el interés de conocer sí la administración de
yoduro en la alimentación de animales de granja (sistema intensivo) posee
repercusiones en la materia prima (leche). Por otro lado la mención de grandes terrones
de sal yodada otorgada a las vacas lecheras a lo largo de su día a día levanta la
curiosidad puesto que fui testigo de esta práctica en el interior del país; como
consecuencia surge la necesidad de dilucidar sí la practica poseía algún tipo de base
científica o era solo una costumbre arraigada.
Por último la técnica de cromatografía liquida de alta resolución es la técnica por
excelencia para la separación de los sustancias basándonos en interacciones entre esta
sustancia y la columna cromatogràfica.
Resumen:
El artículo nos aborda sobre la preocupación del yodo como nutriente para todas las
especies animales, en el caso de seres humanos la ingesta de yodo ha sido deficiente
por mucho tiempo presentando consecuencias sobre la salud como el bocio y
deficiencias extremas del sistema nervioso central. Para luchar contra la situación, la
OMS recomendó la fortificación de la sal con yodo disminuyendo los niveles de la
deficiencia de yodo en el mundo; la repercusión de esta deficiencia afecta a los animales
de ganadería también siendo necesaria la suplementación de su dieta con yodo para
evitar condiciones por deficiencia de yodo. Las consecuencias de esta dieta enriquecida
con yodo radican en un mayor contenido de yodo en alimentos como los lácteos.
La leche y los lácteos, por la cantidad de consumo y el volumen en que se ingiere, se
convierte en una fuente importante de yodo consumido por los seres humanos. Para el
estudio se analizaron muestras de leche de vaca (provenientes de briks) recogidas
mensualmente desde enero hasta diciembre del 2008 en las cadenas de mercado
españolas. Se analizan leches corrientes como leches ecológicas (menor uso de
aditivos en la alimentación) y tres variedades de las mismas (entera, semidesnatada y
desnatada), con esto se analizaron 14 marcas de leche corriente y otras 3 de leche
ecológica. La determinación de yoduros se realizó mediante cromatografía líquida de
alta resolución, por este método se puede recuperar hasta un 87% del contenido de
yodo total.
Los resultados arrojan que las concentraciones de yoduro varían desde 84 ug/l hasta
los 428 ug/l, las diferencias de concentraciones de yodo en las diferentes marcas
resultan ser significativas sin embargo no es significativo las diferencias entre los tres
tipos de presentaciones de leche. Por otro lado se concluye que la concentración de
yodo no fue constante a lo largo del año siendo mayor para meses desde enero hasta
mayo y mínimos desde julio hasta noviembre. También observamos grandes diferencias
en las concentraciones de yodo en la leche corriente y la leche ecológica demostrando
la influencia de la suplementación de yodo en los niveles de yodo en el producto como
la leche. Por ultimo teniendo en cuenta que la concentración media de yoduro en la
leche es de 197,6 ug/l y el nivel de recuperación es del 87% se concluye que una porción
de leche otorga unos 50 ug/l aproximadamente; siendo entonces una fuente importante
y esencial en el aporte de yodo en la dieta diaria.
La cromatografía es un método físico de separación basado en la distribución de los
componentes de una mezcla entre dos fases inmiscibles, una fija o estacionaria y otra
móvil. En cromatografía líquida la fase móvil es un líquido que fluye a través de una
columna que contiene a la fase fija. Con el objeto de aumentar la eficiencia en las
separaciones, el tamaño de las partículas de fase fija se fue disminuyendo hasta el
tamaño de los micrones, lo cual generó la necesidad de utilizar altas presiones para
lograr que fluya la fase móvil. De esta manera, nació la técnica de cromatografía líquida
de alta resolución (HPLC), que requiere de instrumental especial que permita trabajar
con las altas presiones requeridas. La muestra a analizar es introducida en pequeñas
cantidades y sus componentes se retrasan diferencialmente dependiendo de las
interacciones químicas o físicas con la fase estacionaria a medida que adelantan por la
columna. El grado de retención de los componentes de la muestra depende de la
naturaleza del compuesto, de la composición de la fase estacionaria y de la fase móvil.
El tiempo que tarda un compuesto a ser transportada por la columna se
denomina tiempo de retención y se considera una propiedad identificativa característica
de un compuesto en una determinada fase móvil y estacionaria. La utilización de presión
en este tipo de cromatografías incrementa la velocidad lineal de los compuestos dentro
de la columna y reduce así su difusión dentro de la columna mejorando la resolución de
la cromatografía. Los disolventes más utilizados son el agua, el metanol y el acetonitrilo.