Desarrollo en América Latina y su relación con el capitalismo
Dayana Gisel Mora Córdoba
1740489 Abril 2018
Universidad del Valle
Facultad de salud. Franja social en salud II A nivel mundial existe una palabra muy reconocida, la cual es nombrada para designar el estado en el que se encuentra un país: “desarrollo”. Su concepto puede variar dependiendo de la perspectiva, pero en lo que se está de acuerdo es en que es algo que siempre estará en un constante cambio. Por un lado, se habla de desarrollo económico, el cual hace referencia a un crecimiento exclusivamente del capital, por otro lado también se habla de un desarrollo social, que contrario al anterior su eje central es el ser humano y hace referencia al progreso que tiene el individuo. Pero, lo cierto es que si analizamos las definiciones anteriores podemos darnos cuenta que van de la mano y que juntas construyen un concepto de desarrollo más integral, por lo tanto, podría definirse el desarrollo como un progreso igualitario entre la economía y el bienestar del ser humano. A este concepto va ligado también el capitalismo, que en su conjunto ayudan a definir si un país es del primer mundo o del tercer mundo (subdesarrollado), pues bien, en este ensayo se hablara del desarrollo presente en Latino América y cómo influye el capitalismo en este. Lo que ayuda a un país a desarrollarse o en su defecto a sub-desarrollarse es la parte económica, ya que con un mayor capital se hará una mejoría del estilo de vida de las personas que constituyen el componente social del desarrollo. Dicho capital se obtendrá a partir de la producción, mejor aún si es industrializada, es decir, que se le adicione un valor agregado a la materia prima. Y ese es justamente el problema que presenta los países de América Latina, que como consecuencia de ser sub-desarrollados no poseen los elementos necesarios (tecnología) para poder darle ese valor agregado a la materia prima que se produce, ya que los insumos para esto son de precios elevados por lo que requieren una gran cantidad de capital que no poseen y por eso tienden a permanecer siempre en la misma problemática, se conforman con ser solo exportadores de los países desarrollados para poder obtener ingresos y subsistir, tanto así, que incluso estos mismos países logran explotar los recursos de los demás para poder seguir produciendo y ganar cada vez más. El desarrollo del desarrollo moderno no ha sido propiciado solo por el desarrollo de la ciencia, la técnica y la industria, sino por la explotación inmisericorde tanto del trabajo humano como de la naturaleza de los países del tercer mundo. Por esto decimos que el desarrollo moderno no solo nos ha subdesarrollado, sino que ha producido en general un desarrollo desigual entre los países capitalistas del primer mundo y los del tercer mundo. (Segales, 2014, p.262). Cada vez más son los países que quieren aprovecharse de los países de recursos más bajos para poder alcanzar estándares más altos de los que ya poseen y no les importa el bienestar de los demás con tal de enriquecerse cada día más. “… Necesita producir sus propios dominados, sus pobres a quienes explotar para ganar más, necesita producir sus inferiores, sus atrasados y dependientes para poder desarrollarse.” (Segales, 2014, p.264). Ahora pasando a la influencia que tiene el capitalismo en todo esto, es que solo ayuda a que los países pobres sean cada vez más pobres, pero, ¿De qué manera?, pues, la base del capitalismo radica en que los bienes producidos en el país son de propiedad privada, por lo que contribuye más adelante a una distribución desigual de dichos bienes, recursos y hasta del poder. Además de eso, a largo plazo existirá un interés de solo desarrollar la parte económica y no la parte social de un país por lo que (retomando puntos anteriores) hace que estos países permitan la explotación para poder generar ingresos y contribuir al componente económico que probablemente no serán invertidos en gran parte a la parte social. Con todo esto podemos concluir que los países de América Latina nunca van a poder desarrollarse como es debido si siguen permitiendo que empresas transnacionales de países del primer mundo se sigan aprovechando de sus recursos, porque al fin y al cabo lo que van a recibir son miserias comparado a que si se decide incorporar ese valor agregado tan significativo, está claro que hacerlo no es una tarea fácil, pero tampoco es imposible. También habría que preocuparse un poco más por las distribuciones que se hacen dentro del país, y plantear un modelo más equitativo. BIBLIOGRAFIA
BAUTISTA SEGALES, Juan Jose
2014 “¿Qué significa pesar desde América Latina?” Ed. Ediciones AKAL, Madrid – España