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DISCURSO CONSTITUCIONAL:
SOBERANIA EN LAS CONSTITUCIONES ZULIANAS DEL SIGLO XIX (*)
Livio Roberto De Los Ríos Pirela (**) liviodelosrios@gmail.com
Felipe Rafael Araujo Ferrer (***) felipe.araujo1@gmail.com
DISCURSO CONSTITUCIONAL:
SOBERANIA EN LAS CONSTITUCIONES ZULIANAS DEL SIGLO XIX
RESUMEN
Desde el punto de vista normativo constitucional, las Constituciones de una Nación recogen todo
un hecho socio-nacional, que se dirige a la construcción de un ente denominado Estado que van
dar el soporte organizativo de ese espacio geográfico y su relación con quienes lo habitan. Toda
Constitución en su construcción y en su contenido tiene su elemento discursivo, que refleja la
realidad social. En Venezuela, el inicio de la vida Republicana y su dinámica constitucional, bien
provincial y nacional, condujo a la presentación de textos que pugnaban entre sí, en razón de los
intereses locales y republicanos, que llevó a una intensa actividad política y social, tal como
ocurrió en el Estado Zulia durante el siglo XIX. Esta investigación tiene como objetivo analizar
la soberanía como discurso constitucional en las constituciones zulianas del siglo XIX. La
investigación, carácter hermenéutico, permitió la interpretación sobre el hecho en sí que se
abordó como es la soberanía. De la revisión de los diferentes textos, permitió encontrar resultados
que reflejaban la realidad temporal de ese siglo y los hechos acontecidos históricamente,
presentando una intensa discursiva constitucional, que permitió aglutinar intenciones sociales,
conduciendo a la construcción de textos constitucionales provinciales donde el hecho soberanía
fue la constante.
(*) Este artículo tiene como propósito presentar parte de los resultados del proyecto de investigación registrado ante
el CONDES y presentado desde el Instituto de Estudios Políticos y Derecho Público intitulado “ Instituciones
Políticas y Derecho Constitucional Provincial: Soberanía en las Constituciones del Zulia ”.
(**) Docente Facultad de Ciencias Jurídicas y Políticas. Escuela de Ciencia Política. LUZ.
(***) Docente Facultad de Ciencias Jurídicas y Políticas. Escuela de Ciencia Política. LUZ.
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CONSTITUTIONAL DISCOURSE:
SOVEREIGNTY IN ZULIANAS CONSTITUTIONS OF XIX CENTURY
ABSTRACT
From the constitutional normative point of view, the Constitutions of a Nation include a whole
socio-national fact, which is directed to the construction of an entity called the State that will give
the organizational support of that geographic space and its relationship with those who inhabit it.
Every Constitution in its construction and in its content has its discursive element, which reflects
the social reality. In Venezuela, the beginning of Republican life and its constitutional dynamics,
both provincial and national, led to the presentation of texts that fought each other, due to local
and republican interests, which led to intense political and social activity, such As happened in
the Zulia State during the nineteenth century. This research aims to analyze sovereignty as a
constitutional discourse in the nineteenth century Zulian constitutions. The investigation,
hermeneutical character, allowed the interpretation on the fact in itself that was approached as is
the sovereignty. From the revision of the different texts, it was possible to find results that
reflected the temporal reality of that century and the facts that occurred historically, presenting an
intense constitutional discursive, which allowed to agglutinate social intentions, leading to the
construction of provincial constitutional texts where the sovereignty fact was The constant.
INTRODUCCIÓN
apreciación de la realidad manifestada con un discurso, reflejó y permitió resultados que marco
En ese sentido, un discurso es toda una construcción sucesivas de palabras, expresadas de manera
escrita u oral, bien extensas o cortas, que sirven para expresar lo que se piensa o se siente, pero
que debe ser ordenado, acomodado y proporcionado para lo que se quiere lograr, pero de igual
Halliday (1989) sostiene que una diferencia fundamental entre escritura y oralidad consiste en
que, en el medio escrito el texto se presenta como un producto, mientras que en el medio oral, el
diferencia de lo que proponen otros autores, no puede decirse que el discurso oral sea más
sencillo que el escrito, pero sus complejidades son de distinta naturaleza. Mientras que en el
discurso escrito hay una densidad de sustancia, el discurso oral se caracteriza por la intrincación
de movimiento.
Al escribir, se tienen tiempo de integrar las ideas en un todo organizado, mientras que el rápido
flujo de la oralidad impone la expresión de una idea por vez. Al escribir,se pueden tirar los
Por otra parte, el término constitución es uno de los vocablos o palabras más polifacéticas
utilizadas por la ciencia y el derecho.En sentido amplio y genérico, Constitución “es esencia,
cualidad y calidad de una cosa que la constituyen como tal y la diferencian de las demás”( Je-
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Constitución de un Estado.
todos encaran de alguna manera los límites y las relaciones entre Sociedad y Estado, regulando
Así mismo, la Constitución de un Estado determina su sistema político , los poderes y órganos de
gobierno, las instituciones, las atribuciones que tienen y los derechos y garantías de aquellas,
de los grupos intermedios y de los ciudadanos. Es ley suprema que fija límites estructurales e
infranqueables, respecto de aquellos temas, pero que se manifiesta por medio de un discurso que
La conformación de Venezuela como República, pasó por momentos que la forjaron como tal y el
punto intermedio entre el Virreinato de Nueva Granada y la Capitanía General de Venezuela, fue
sustancialmente importante en el comercio, por ser encrucijada entre los dos bloques de poder,
pero a su vez logró consolidar una identidad que llevó a sus pobladores a que una vez logrado el
cualidad que tiene el soberano, es decir, aquel que tiene autoridad sobre el resto, es base de la
Por último, resulta importante señalar que el método de investigación empleado fue el
interpretación del discurso, entendido éste como unidad de sentido, que materializa el
una sociedad, allí donde el concepto de soberanía ha sido permeado por los intereses políticos,
ideológicos y culturales, por cuanto se entiende que “el proceso de objetivación de la cultura y el
mundo social es el lugar de producción del sentido y los valores” (Giménez, 2006:56).
2. FUNDAMENTOS TEÓRICOS
2.1. Un Paradigma Crítico: Lo Constitucional como Discurso Político de Organización y
Dirección Social.
El ser humano en su condición gregaria y, por tanto social, que ha manifestado desde inicios de
En ese sentido, uno de los sistemas, quizás el más complejo, es su organización legislativa y
constitucional creado un poco más de dos siglos como consecuencia del avance de las ideas de-
dispensables que le permitiese dar solución a sus naturales conflictos dentro de un clima de paz y
tranquilidad.
La construcción de este sistema, hasta dar forma y contenido doctrinario ha sido un largo y
complejo proceso histórico permanente para ser alcanzado. La independencia de las colonias
nalismo, cuyos principios fundamentales rigieron con dificultades durante los siglos XVIII y XIX
muchos de ellos superados, pero que siguen siendo referentes lógicos para el desarrollo de la
doctrina contemporánea que busca hacer realidad la más elevada aspiración humana de vivir en
un mundo en el que lejos del miedo y el terror pueda disfrutar de la libertad y la justicia, dentro
Es así como, “el Derecho constituye un sistema normativo regulador de las relaciones sociales,
Cada rama es una subdivisión independiente dentro del sistema jurídico e incluye normas
Zorraquin, 2004). Es decir, dentro del Derecho se diferencian grupos de normas que se refieren a
sectores específicos de la vida social y se basan en principios comunes que le dan unidad y
coherencia interna y los distinguen de otros grupos de normas jurídicas, por lo que se consideran
ramas autónomas.
Por supuesto que esta autonomía de una rama del Derecho y de su correspondiente ciencia es
relativa, pues el objeto del Derecho es uniforme, lo constituyen las relaciones sociales, y si
El Derecho Constitucional responde a estos requisitos para ser una rama autónoma, pues está
integrado por un grupo de normas que regulan, mediante un método concreto, una esfera de la
vida social, aquella vinculada con las bases del régimen económico social, el sistema político y el
De igual manera, el Derecho que se aplica a las instituciones políticas es el o Constitucional, con
un claro objetivo como es la organización jurídica del Estado, por lo tanto su contenido atiende la
relación entre el Estado y Constituciones y entre el Estado y los individuos (Díaz Zegarra, 2010).
Se puede señalar que, “La palabra Constitución, y con ella la expresión Derecho Constitucional y
cualquier otra en que el término aparezca como adjetivo, está cargada de significado político,
evoca ideas como libertad, democracia, garantía de los derechos de los ciudadanos, limitación del
poder”(De Otto, 1995:11), entre otras muchas dependiendo de cada caso considerado.
La relevancia política que el término implica está íntimamente vinculada al momento histórico
dentro del cual surja. Por ello se requiere que el estudio de un texto constitucional, en su nivel
estatal o estadal, deba verse desde la perspectiva discursiva que marca su origen y su claro
construido después y redactado finalmente demuestra que “se trata de un discurso producido
dentro de la escena política, en aparatos políticos que pueden delimitarse con suficiente
aproximación, y en cuanto tal puede ser aislado y es susceptible de ser integrado a una tipología
Así pues, el texto constitucional es la manifestación concreta del discurso (Giménez, 2006:58), en
tanto que éste se asuma como toda práctica enunciativa considerada en función de sus
El término Constitución y cuanto ella implica es para la cultura americana una herencia cultural y
monarquía como forma de gobierno para luego asumir la forma republicana y con ello las XII
Tablas y cuanto deriva luego en Derecho Romano entre esto las llamadas Constituciones, los
griegos habían ya concebido y plasmado formas de organización política; ejemplo claro que
ilustra lo sostenido se tiene en la Gran Retra de la ciudad-estado griega de Esparta, Gran Retra o
Resulta importante señalar que “rhétra, palabra que procede de la raíz del verbo eíro (decir),
como jurídico. Por extensión,“rhétra expresa algún tipo de acuerdo entre individuos o Estados, o
bien una decisión comunitaria, aceptación esta última, en tanto que acuerdo político en el seno de
contrato, convenio, acuerdo, oráculo o acto de la Asamblea, fuera cual fuese su naturaleza
original, en el texto aparecen ya los pilares del edificio institucional lacedemonio y constituirá un
factor decisivo para el futuro desarrollo de Esparta, siendo el producto del intento de dotar de
estabilidad a un Estado que precisaba de una gran cohesión interna como única forma de afrontar
La Retra se hallaba bajo la invocación de las divinidades de Zeus y Atenea y sus dos
los poderes entre la Gerusia, como órgano de gobierno, y la asamblea de demos que detentaban la
Siglos más tarde de creada la Gran Retra o constitución de Esparta o de Licurgo, Aristóteles se
investigación adelantado por un grupo de trabajo -dirigido por él- que procura recopilar más de
centena y media de constituciones del mundo griego, todo ello con el propósito de presentar
ampliamente a la cultura política y legislativa de su tiempo (Gimenez, 2006), es decir, ofrecer una
visión realista de los diversos motivos y variadas maneras de ver y regular el actuar político, y en
ello simultáneamente sus similitudes; dicho de otra forma, hacer ciencia política.
Desde esta perspectiva, existe una identificación griega con la esencia creativa, fundadora y
reguladora de cuanto implica la palabra Constitución vista por los romanos, donde se dice que:
Se puede afirmar que la Constitución implica una manera de presentar y organizar a un colectivo
humano y su realidad, ello plasmado por medio de un discurso político que “instaura objetivos o
2006,60), comenzando por la organización y ejercicio del poder para conseguir el orden, la paz y
Con la desaparición del antiguo mundo político griego y posteriormente del imperio romano de
occidente, la existencia de las constituciones así entendidas también desaparecen hasta ver de
nuevo luz una vez llegada la Edad Moderna. Durante ese largo tiempo el legado greco-romano no
desaparece, su sistema jurídico y cuanto le fundamente de alguna manera perdura y para aún hoy
de la necesidad social y en mucho burguesa de mayor vivir con justicia y en ello con mayor
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dolorosamente adquiridos, así como de suprimir y/o limitar poderes, para fundar o establecer
A este respecto, cabe advertir que la Constitución toma diversas formas –escritas o no– y
consagra también formas diversas de gobiernos y organización política, todas ellas ajustadas al
proceso histórico y particular manera de ver, vivir y aspirar cambiar la realidad por cada conglo-
merado humano; de allí que,“La constitución política de los pueblos que expresa o tácita, existe
en todos ellos, es variable por consiguiente, como variables son las condiciones de existencia en
1867:6).
Tal nivel de variación o cambio se dan en el hombre desde sí mismo y su realidad, esto implica
que al hombre no se le puede considerar como un ser inmutable, sino “que se le ve en todos los
necesariamente a la misma ley de variedad deben estar sometidos el conjunto de seres semejantes
Así, variación en el hombre, sociedad y texto constitucional no sólo es conveniente sino por
concretar estadios de organización y dirección política, entre otras, para la convivencia social, por
lo que cabe resaltar que“Las Constituciones, asegura Sartori, no realizan milagros, pero difícil
será tener un buen gobierno, sin un buen instrumento de gobierno. Para alcanzar este objetivo es
muy probable que las Constituciones deban ser reformadas; entonces, el problema estriba en
Se establece que el concepto de soberanía no fue planteado por griegos ni romanos, sino que se
idealiza durante la Edad Media, en la lucha entre los tres poderes, la Iglesia, el Imperio Romano y
los grandes señores feudales (Jellinek,2012). Sin embargo, “el término soberano deriva de la raíz
súpera, forma arcaica de supra, que significa encima o arriba y que dado este adverbio, el verbo
superare y el adjetivo súperurus súpera súperum, surgiendo la forma superarus, que es aquel que
poder político, alteza o excelencia no superada en cualquier orden inmaterial; la que reside en el
En razón de lo anterior se puede señalar que, hay que establecer una marcada diferencia entre la
sobre sus habitantes y en diversos campos de actuación. Esa condición de poder único y
Vistas las cosas en estos términos, el concepto de soberanía se refiere al uso del poder de
asociación humana y que implica la existencia de algún tipo de gobierno independiente que se
Igual referencia se hace para cuando dicha soberanía es compartida, bien sea desde la forma de
organización federal o bien de la confederada del Estado. Es en este sentido, cuando se puede
hablar de una coexistencia de soberanía en un mismo Estado, a saber una soberanía estatal y una
soberanía estadal, que coexisten cada cual con competencias y posibilidad de acción concreta y
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delimitada (Laski, 2004). Es el caso de Venezuela y sus constituciones provinciales de 1864, una
Se señala al respecto de esta soberanía dual que“el pueblo divide en dos partes el ejercicio de su
soberanía; ejerce una de ellas solidariamente con las demás provincias, por medio de las
autoridades comunes que gobiernan en los objetos esencialmente nacionales y desempeña la otra
aislada y separadamente por medio de autoridades locales que gobiernan en los objetos peculiares
Esta apreciación va en consonancia con el sistema de gobierno federal que en Venezuela surge a
partir de 1811, primero con la creación entre ese año y el siguiente de las llamadas constituciones
provinciales, texto de alta relevancia que precede en su existencia al texto constitucional; más
tarde se mantiene en las constituciones nacionales hasta llegar a su punto cumbre con la
derecho constitucional provincial venezolano. Es así como se aprecia la marca federal en las
propias denominaciones que desde un principio se dieron los que en 1811 han de ser o son ya en
plenamente comprendidas, cuando se afirma que “La soberanía, suprimidas las autoridades
peninsulares, revirtió a los Cabildos; la unión de los Cabildos dio a esa soberanía un carácter
nacionalidades de América tiene su comprobación y fue acatada por los libertadores San Martín
los casos, una soberanía provincial y una soberanía nacional, que más tarde – a partir de 1864- se
diferenciará como estadal y estatal, al otorgárseles el nombre de Estado a las antes provinciales.
Frente a esta concepción de doble soberanía, hay quienes sostienen una opinión contraria,
cuando se afirma que “Hemos visto también desarrollarse una teoría, la de la soberanía popular
hay más que una: la nacional, que se pone en práctica por los órganos, por los instrumentos, el
nacional; hay una ley fundamental llamada Constitución que se hizo en nombre del pueblo y no
de Maracaibo (Zulia) la idea de un gobierno que sólo está en unión y no en unidad de enajenada
subordinación perpetua a los gobernantes de Venezuela desde 1821. Es desde aquel 28 de enero
de 1821 –en la lógica autonomista-soberana– cuando por acto libérrimo del Cabildo de
Maracaibo este decidió pasar a formar parte de la nueva República. Razonamiento que puede ser
pasa alternativamente de manos patriotas a realistas sin mayor consentimiento del Cabildo y sus
Todo inicia, con el hecho de que “pertenecer a la República de Venezuela y depender de Caracas
no era realmente atractiva para las élites locales (Maracaibo, Mérida y Trujillo)”( Urda-
neta,1998:89). Pero los hechos y los actos sucesivos de soberanía y autonomía de la que fuera
(1864) tienen “base en los actos de José Domingo Rus, diputado zuliano ante las Cortes de Cádiz,
en 1818 quien autorizado y apoyado por la élite de la ciudad, plantea la creación de la Capitanía
2007:53).
Este intento de separación avanzó al punto que mientras se estudiaba el documento acerca de la
Audiencia”(Ocando Yamarte, citado por: Morales, 2007:53) pero se vio frustrada cuando con “el
regreso de Fernando VII al trono español, éste desconoce los acuerdos de Cádiz obviando lo
acordado para la provincia de Maracaibo. En 1814, Rus va a otro cargo en México y la idea de
Se señala, pero sin confirmación de la fuente histórica documental sobre la veracidad de los
hechos que se narran, que años más tarde, bajo condiciones distintas a las planteadas por José
y goce de su libertad soberana hace su proclama haciendo unión por los vínculos del pacto social
a todos los pueblos vecinos y continentales que bajo la denominación de República de Colombia
2007 ).
que “el 28 de enero de 1821, demuestra que en el ánimo de la mayoría de los pobladores de la
provincia de Maracaibo ya anidaba el deseo de romper con la Corona, asumir la soberanía, según
los principios del pensamiento moderno, producto del acto de pedagogía ” (Cabrera y Berbesí
2006: 52 ).
Fuera el propósito o no, algo más de diez años transcurren hasta que el espíritu soberano,
histórica señala que el inicio de la República, presenta en Venezuela una fractura política
motivada en los descontentos por la ruptura del sueño bolivariano de la Gran Colombia, posición
defendida por los reformistas cuyo líder fue Santiago Mariño y los constitucionales que apoyaban
el sostenimiento del nuevo orden político. “Maracaibo se plegó a los reformistas quienes se agru-
paron bajo la figura del Coronel Francisco Faría. Los constitucionales, tomaron el poder en
Maracaibo se libró por la fuerza, del dominio centralista caraqueño, lo cual fue materializado a
Es así como, Faría suplantó el vacío de poder dejado por la violencia política desatada en
pronunciamiento del 28 de enero de 1821. La historiografía oficial considera que este hecho tuvo
hondas raíces en el desapego del gobierno de Caracas de respetar la forma federalista como la
conveniente a los efectos de las provincias (Ocando Yamarte, citado por: Morales, 2007:195).
Pero, a los efectos “Faría finaliza esa lucha sangrienta y termina su aventura autonomista, par-
tiendo al exilio y regresando el año de 1838 con la invasión al Zulia, siendo vencido, apresado y
fusilado, terminando la iniciativa de soberanía que emprendiera años antes”. (Morales, 2007: 62).
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primero por epístola no pública creada por el Gobernador Jorge Sutherland y el Jefe de
Operaciones de la Provincia Venancio Pulgar, en su Cuartel General en Perijá quienes “entre los
Un lustro ha de esperar la provincia -en ese momento por obra del triunfo de los federalistas,
ahora Estado Soberano del Zulia- para un nuevo pronunciamiento, con una vigencia de algo más
de dos meses y protagonizado por Sutherland (23 de julio / 5 de octubre de 1868) declarando, en
su artículo primero del decreto proclamado, que: “El Estado (Maracaibo) reasume la soberanía
delegada en los poderes nacionales, mientras que los pueblos de la unión establecen un gobierno
Ortega, 1991:42).
Casi al año, el 21 de Junio de 1869 un nuevo suceso de intención más que autonomista, soberana,
será escenificado en Maracaibo, esta vez toca el turno a otro firmante de la epístola de1863,
Venancio Pulgar, quien alega sobre su decisión separatista que , tomando en cuenta que el Poder
Ejecutivo Nacional con su decreto 8 de ese año cerró el puerto de Maracaibo y que se había
ofendido al pueblo y magistrado del Estado Zulia, quienes han defendido la revolución
regeneradora y a la Constitución de 1864, acordó “ que el pueblo del Zulia reasume su soberanía
en toda su plenitud, protestando y que se reincorporará a la Unión Venezolana cuando rija los
destinos de ésta, un gobierno que le ofrezca la más plena seguridad de leal respeto a su
independentistas -de otros-, soberana -de todos-, sufrirá mayores afectaciones con el paso del
tiempo. La peor y mayor ofensa recibida será en primer lugar su desaparición como Estado al
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fusionársele con el Estado Falcón en 1881 por disposición de Antonio Guzmán Blanco,con la
Constitución del Estado Falcón Zulia, en Casígua del 14 de noviembre de 1881; Constitución del
Estado Falcón Zulia en Coro, del 13 de enero de 1883 y finalmente hasta perder su existencia
combinada al constituirse el Estado Falcón teniendo a Zulia como una sección más, subsumida,
ignorada hacia fuera, carente de perfil propio con la Constitución del Estado Falcón en Villa de
Capatárida del 7 de mayo de 1883. Han de esperar casi una década para ver recuperado su
nombre y estatus provincial/estadal con la Constitución del Estado Zulia, en Maracaibo de fecha
16 de enero de 1891.
zuliano de 1864 que “Los Diputados á la Cámara Legislativa Constituyente del Estado Zulia, en
ejercicio del imprescriptible derecho de Soberanía establecieron en su Título I , Del Estado Zulia
Pueblo i no se ejercerá sino por los Poderes que establece la siguiente Constitución” (González
Ortega, 1991:77).Estos hechos históricos demuestran que las ideas primigenias de la creación de
un Estado Soberano o República del Zulia datan de la segunda década del siglo XIX y Pulgar y
Sutherland sólo serán los herederos de una tradición soberana, autonomista y con firme matiz
separatista.
Pero es de reseñar que esta condición constitucional del año 1864, se pierde seis meses
después, por reforma impuesta, al hacerse la adaptación del texto provincial, al texto nacional de
Estado Zulia, por intermedio del abordaje de su cuerpo constitucional del siglo XIX, encuentra su
territorio. La sociedad educada de la provincia, durante ese momento trascendente del proceso
El impulso en la estructuración de la sociedad, por medio del dominio de las ideas del momento,
la región plantearse la vía de nuevo destino, destino propio sin ataduras, ni sujeciones a un orden
normativo no deseado.
para unos y proximidad a una independencia plena mucho después, para otros.
La soberanía como figura discursiva en el hecho constitucional del Zulia, encuentra y se sostiene
en el tiempo y salvo los esfuerzos de opresión guzmancista, que haciendo uso de la fuerza,
Ese discurso soberano, autónomo, de libertad, que se manifiesta en los cuerpos constitucionales
del siglo XIX, pero que se inicia durante los albores del movimiento independentistas de las
por una débil unión jurídica colonial, más que social, intenta gestarse como una nueva Capitanía
General, la de Maracaibo.
El discurso liberal del iluminismo, presente en la sociedad maracaibera, con el espíritu de libertad
reaccionó siempre ante cualquier acto que fuera lesivo a su desenvolvimiento pleno político y a
elegir el destino que desease y que se manifiesta de manera explícita en la Constitución del año
1864.
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fuerza.
Pero los esfuerzos durante el siglo XIX, de lograr una situación de autonomía, por
intermedio de actos soberanos y de apropiarse del destino, son disminuidos a medida que la
Venezuela, se impusiese con su discurso, con el discurso de la Constitución Nacional del año
1864. Se conserva la soberanía provincial de manera menguada y se impone otro nuevo discurso
En cuanto a la soberanía referida al pueblo como su titular y a la manera como este la ejerce,
sigue Venezuela y en ello el Zulia a la idea de las fuentes iluministas para su inspiración
independentista primero y luego federal, dentro de ellas su mayor concreción histórica, cual fue
la Revolución Francesa.
Por último, observar los modelos constitucionales que florecen en el territorio nos da una idea
muy precisa de como planteaban las clases dirigentes de cada provincia su modelo político, su
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