Nombre y Apellidos: Laura Marín Ramírez

Desarrollo del estudio de caso:

El término “Orientación Educativa” ha tenido diversas definiciones a lo largo de los años, por
diferentes autores. Después de leer algunas de ellas me he decantado por la definición de Rafael
Bizquerra (1998), ya que me ha parecido muy completa –“la Orientación educativa es un proceso
continuo, que debe ser considerado como parte integrante del proceso educativo, que implica a
todos los educadores y que debe llegar a todas las personas, en todos sus aspectos y durante todo el
ciclo vital, atendiendo a aspectos particulares de tipo personal, social, educativo, vocacional…”

En cuanto al Orientador educativo, según el material de estudio que nos facilita la universidad, se
trata una pieza clave en el sistema educativo actual, imprescindible para detectar a tiempo cualquier
problemática educativa y personal en los alumnos, asesorar al profesorado y a las familias. El
orientador educativo tiene asignadas diferentes y numerosas funciones, aunque es un aspecto
bastante confuso actualmente, ya que en función de cada autor se determinan unas funciones u
otras.

Valdivia y Martínez (1998: 120) “en orientación se viene entendiendo por función de forma amplia la
actividad o ejercicio a llevar a cabo por la persona o personas encargadas de la orientación para
atender a las necesidades reales de la misma”.

Según un estudio realizado por Ángel Boza Carreño, María de la O Toscano Cruz y Manuela Salas
Tenorio, profesores de la universidad de Huelva, las funciones del orientador educativo las podemos
dividir en diferentes niveles, según la relación que tengan a nivel educativo.

 En un primer nivel, situamos las funciones relacionadas con la orientación y la acción tutorial
haciendo referencia a la orientación en general en el centro y el asesoramiento al
Plan de Acción Tutorial del centro.
 En un segundo nivel situamos las funciones referidas a la atención a la diversidad, donde
predomina el asesoramiento sobre problemas de aprendizaje y diversificación
curricular, funciones de intervención directa con alumnos, en cuanto a
diversificación y adaptaciones curriculares o necesidades educativas especiales.
 En un tercer nivel están las funciones relacionadas con la evaluación como la evaluación
psicopedagógica de los alumnos, evaluación de las necesidades del centro
educativo, asesoramiento a profesores sobre evaluación de alumnos y funciones
de intervención en procesos de evaluación y promoción de los alumnos.
 Por último, contenidos propios de las funciones de los orientadores como atender
demandas de profesores, padres y alumnos, recopilar y mantener recursos de
orientación y tutoría, realizar actividades de formación de tutores, informar y
 asesorar sobre legislación educativa, realizar investigaciones, mediar ante
conflictos; y desarrollar programas.

Los objetivos principales de un orientador son:

 Apoyar y asesorar en el proceso hacia la inclusión.

 Prevenir precozmente posibles dificultades de aprendizaje en el alumnado con riesgo de
NEAE.
 Informar y asesorar a los equipos docentes, alumnado y familia.

Anteriormente hemos citado las funciones más relevantes otorgadas a un orientador educativo, y
como podemos observar son muchas y muy importantes en el proceso educativo, aunque
actualmente los orientadores están infravalorados debido a “la multiplicidad de redes de atención
psicopedagógica, la burocracia extrema y la falta de coordinación entre las administraciones
autonómica y local, que ha acabado trasladando la mayor parte del peso a los gabinetes municipales
de psicólogos y psicopedagogos”- afirma Carlos Vendrell. Muchos de los profesionales de la
orientación afirman que son ignorados a pesar de las numerosas e importantes tareas que llevan a
cabo a diario.

Vendrell aboga por “una reforma del pacto local”, donde se definan competencias, se coordinen los
servicios y se doten de financiación a los ayuntamientos. La necesidad más inmediata se da en las
aulas, que es donde más se aprecian los cambios familiares y culturales y donde el profesorado
reclama mayor atención y formación. Es necesario y urgente que demandemos más la figura del
orientador, ya que se trata de una figura esencial y necesaria en la educación, y además podrían ser
uno de los agentes del cambio en esta educación actual.

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 APOYA, ASESORA, PREVIENE E INFORMA AL ALUMNADO, FAMILIA Y
EQUIPO DOCENTE.

OBJETIVOS PRINCIPALES

2º Nivel

Asesoramiento sobre problemas

1er Nivel de aprendizaje y diversificación
ORIENTADOR curricular, funciones de
La orientación en general en el EDUCATIVO intervención directa con
centro y el asesoramiento al Plan alumnos, en cuanto a
de Acción Tutorial del centro. diversificación y adaptaciones
curriculares o necesidades
educativas especiales.

FUNCIONES PRINCIPALES

3er Nivel 4º Nivel

Evaluación psicopedagógica de los alumnos, Atender demandas de profesores, padres y

evaluación de las necesidades del centro
educativo, asesoramiento a profesores sobre
evaluación de alumnos y funciones de
intervención en procesos de evaluación y
promoción de los alumnos.
alumnos, recopilar y mantener recursos de
orientación y tutoría, realizar actividades de
formación de tutores, informar y asesorar sobre
legislación educativa, realizar investigaciones,
mediar ante conflictos; y desarrollar programas.

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Bibliografía

Boza, Á., Toscano, M. O., y Salas, M. (2007). ¿Qué es lo que hace un orientador ?: Roles y
funciones del orientador en educación secundaria. Revista Educativa XXI, 111-131. Recuperado de
http://rabida.uhu.es/dspace/bitstream/handle/10272/11243/Que_es_lo_que_hace_un_orientador.pd
f?sequence=2

Caballer, N. (30 mayo, 2003). El papel del “orientador”. El País. Recuperado de

https://elpais.com/diario/2003/05/30/cvalenciana/1054322301_850215.html

Grañeras, M. et al (2008): Orientación educativa: fundamentos teóricos, modelos institucionales y

nuevas perspectivas. Madrid: Ministerio de Educación.

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