ANALISIS PARCELAS DEMOSTRATIVAS

El cultivo de aguacate (Persea americana mill.) como todo cultivo se ve afectado por las
condiciones de cada región, la planta dependiendo de precipitación, msnm, temperatura,
horas luz día, tipos de suelo, entre otros, pueden tener un comportamiento diferenciado en
la producción de flores, frutos, tamaño de estos y tiempos en cada etapa. Cuando se habla
de dos regiones en las cuales estas condiciones son diferentes como lo son Florencia
Caquetá e Ibagué se debe tener claro que debido a estas diferencias se presentan algunas
diferencias, que deben ser tenidas en cuenta a la hora de establecer un cultivo de Aguacate.
La inducción floral de las plantas en este caso del aguacate no se restringe al meristemo
debido a que puede involucrar señales provenientes de otras partes de la planta generadas
por estímulos ambientales (Wilkie et al., 2008). Algunos factores inductores de floración
son comunes en las zonas productoras, como las variaciones en la temperatura, la duración
del día, la disponibilidad hídrica las bajas temperaturas, bajo contenido de humedad en el
suelo, deficiencias en nutrición mineral, exceso de calor e incluso ataques de Phytophthora
sp. al sistema radical (Romero, 2012). (Avilan, 2007) reportan que en aguacate Hass el
inicio de floración esta precedido por temperaturas bajas y alta precipitación y que incluso
en condiciones áridas, las bajas temperaturas son un factor clave en la transición de las
yemas a la fase reproductiva, analizando lo anterior y las gráficas de cada región se puede
observar que en la zona de Florencia existe grandes precipitaciones durante todo el año, y
son más marcadas en los meses de Mayo a junio, lo cual es un factor que puede ser bueno
pero puede generar problemas fitosanitarios ya que el exceso de humedad genera focos de
enfermedades. En la zona de Ibagué se encuentra marcada unas precipitaciones que pueden
ser factor para inducir a la floración en los meses de abril y mayo y otra menor en
noviembre, en este caso es más favorable ya que se cuenta con estaciones marcadas de
verano, lo cual a pesar de que se debe contar con un sistema de riego, será una zona donde
cultivar aguacate es favorable.
llenado de fruto, requieren grandes cantidades de nutrientes minerales, agua y
carbohidratos; un árbol con elevada carga frutal en el año "on" agota las reservas
disponibles de debido a la mayor extracción por lo cual no acumula los nutrientes
necesarios para sostener una elevada intensidad de floración y una carga adecuada para el
próximo año, mientras que árboles en un año "off" que presentan una cosecha liviana y
mayor producción de estructuras vegetativas acumulan más reservas de nutrientes para
producir una floración intensa y alto rendimiento en el siguiente ciclo (Romero, 2012). En
este caso se pueden presentar dificultades en la zona de Ibagué ya que se presenta un déficit
hídrico en los meses de junio a septiembre, pero este dato puede ser controlado, siempre y
cuando el cultivo tenga un sistema óptimo de riego, lo cual incrementara los costos de
producción, pero es necesario para que la planta no pierda floración, o frutos por los
escases de agua. “Cuando el desarrollo del fruto ha avanzado los requerimientos de agua
disminuyen, sin embargo, una situación de estrés excesivo durante esta época puede afectar
la calidad de fruto además de aumentar la caída” (Romero, 2012)
Con una tecnificación adecuada la zona para mejores rendimientos en la producción de
Aguacate, considero que es la de Ibagué, ya que por sus condiciones se adapta mejor a los
requerimientos del cultivo de Aguacate, en la zona de Florencia aunque se puede cultivar
aguacate, se pueden presentar problemas de enfermedades, las cuales pueden causar
pérdidas significativas en las producciones de este cultivo, el hecho es que la cantidad de
agua en esta zona no se puede controlar, mientras que en la de Ibagué se pueden realizar
labores e infraestructura para crear ambientes ideales en pro de lograr una excelente
producción
En cuanto a los meses de junio a septiembre encontramos una época de déficit hídrico lo
que podemos traducir como mayor actividad en la fotosíntesis sin olvidar tomar en cuenta
los datos para la temperatura de estos meses, ya que si sobrepasamos los 40°C podíamos
estar frente altos niveles de transpiración en nuestras plantas.
Este periodo seco produce una baja asimilación de los nutrientes ya que por la actividad
de transpiración existe un mayor desgaste, recordemos que los nutrientes tienen mayor tasa
de absorción si se encuentran en soluciones liquidas; esto va de la mano con la tasa de
crecimiento, ya que esta también se ve afectada pues su ganancia de biomasa no cuenta con
lo necesario para desarrollarse. Sin hablar de la translocación función que para llevarse a
cabo también requiere presencia de agua.
 Por otro lado, en la parcela de Florencia podemos observar que sus niveles de
precipitaciones son constantes además de ser abundantes, lo que no permitiría un desarrollo
de la variedad con resultados favorables, además de propiciar la aparición de enfermedades
como la pudrición de raíz, pudrición del fruto, marchitamiento sin hablar del incremento de
poblaciones de insectos plaga como los Trips, chinches y moscas, lo que haría su manejo
más extenso incrementando los gastos de producción.
Es por esta razón que me atrevoa deducir que el lugar en el que se debería llevar a cabo
nuestro cultivo es la parcela de Ibagué, ya que presenta las mejores condiciones para su
desarrollo, esto con la recomendación de ser constantes y precisos con el suministro de
riego, esto para que los elementos entren en suspensión y puedan ser absorbidos por las
raíces de las plantas y de esta manera enfrentar la temporada seca (junio-septiembre) ya que
sin este no existe el llenado de la fruta
BIBLIOGRAFIA

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