UN LLAMADO A LA GENEROSIDAD

“Sin falta le darás, y no sea tu corazón maligno cuando le dieres: que por
ello te bendecirá Jehová tu Dios en todos tus hechos, y en todo lo que
pusieres mano. Porque no faltarán menesterosos de en medio de la tierra;
por eso yo te mando, diciendo: Abrirás tu mano á tu hermano, á tu pobre,
y á tu menesteroso en tu tierra”. Deuteronomio 15:10-11

Cuántas veces hemos sido cristianos, que se caracterizan por

bendecir a otros de palabra “que DIOS le bendiga”, asistir a las reuniones
de la iglesia, diezmar e incluso ofrendar? , pero… ¿con qué actitud lo
hacemos? , ¿Cómo está nuestro corazón? , ¿Cuál es nuestra reacción
cuando nos tocan la bolsa más profundamente?, ¿Haz sentido que te arde
por dentro cuando te piden que seas generoso con una ofrenda
monetaria para con una obra misionera, para con un indigente, enfermo o
incluso para las necesidades de tu propia familia ya sea hermanos, primos,
madre, padre, etc.?
Papito DIOS nos insta en su palabra a ser generosos de acuerdo a las
posibilidades de cada uno, esto con la intención de bendecirnos, Él
objetivo no es limitarnos, menguarnos, disminuir, por el contrario, es
mostrarnos a través de este gesto su fidelidad, protección y respaldo; Él
siempre quiere bendecirnos en todas las áreas y de todas las formas, y el
área económica no es la excepción, es parte de la formación que brinda
a su pueblo.
Pero es indispensable la obediencia con respecto a la generosidad,
en la cual se impacte nuestro corazón a través del desprendimiento, Dios
ama a los que le dan con un corazón alegre, pues Él quiere que su pueblo
nunca sea atado a la opresión del dinero, porque escrito está que el amor
al dinero es la raíz de todos los males. I Timoteo 6.10
La invitación es con este texto, a ser generosos, a dar como enseña
la palabra de DIOS con un corazón alegre, teniendo compasión por los
necesitados, teniendo presente que si Papito DIOS nos bendice es con el
único propósito de que bendigamos a otros.